MANEJO OVINO-CAPRINO

AUTOR:
MENDOZA HERNANDEZ JHAN CARLOS

PROFESOR:

IVAN DARIO NEIRA ROMERO

UNIVERSIDAD INDUSTRIAL DE SANTANDER

TECNICO PROFESIONAL EN PRODUCCIÓN AGROPECUARIA
SISTEMA DE PRODUCCIÓN DE ESPECIES MENORES
2022
 MANEJO OVINO-CAPRINO

1. Parásitos externos:

Muchos parásitos externos que afectan a los ovinos difícilmente se ven a simple vista, sin embargo,

sus efectos sobre la salud animal, el bienestar y la producción pueden ser significativos. Estos representan

una amenaza para las majadas durante todo el año y la vigilancia es clave para prevenir infestaciones.

Los principales parásitos externos de los ovinos son:

1.1 Ácaros de la Sarna,

1.2 Melófagos (”falsa garrapata”)

1.3 Piojos.

Los tres viven toda su vida sobre la piel y se trasmiten por contacto directo entre animales. Debido a la

picazón y el malestar que provocan, los ovinos están irritados, se rascan y dedican menos tiempo a su

alimentación, por lo que pueden perder peso y condición corporal, y también disminuir la cantidad y

calidad de lana. Esto determina pérdidas económicas, a lo que se agregan los costos de insumos y mano

de obra de los tratamientos antiparasitarios.

1.1 La Sarna Psoróptica (sarna común ovina) Es una enfermedad causada por un pequeño ácaro,

de color blanco perlado (Psoroptes ovis), apenas identificable a simple vista. Los ácaros viven y se

alimentan en la superficie de la piel, causando una intensa picazón.

 1.1.1 Síntomas: Los ovinos se rascan violentamente y es frecuente que se produzcan daños por

frotación y mordisqueos. En la mayoría de los casos, la enfermedad evoluciona hasta llegar a un cuadro

crónico, donde se ven colgajos de lana y áreas del cuerpo solo con mechones. En casos graves, los

animales pueden llegar a morir si no son tratados.

1.1.2 Tratamientos:

1.1.2.1 Inyectables: Ivermectina 3,15%: Una sola aplicación. Ivermectina 1%: 2 aplicaciones

con intervalo de 7 días.

1.1.2.2 Baños de inmersión: 2 baños con intervalo de 10 días.

 1.2 Melofagosis: Es una enfermedad producida por un insecto, el melófago, (Melophagus ovinus),

conocido como “garrapata”. Mide 5-8 mm de largo, es de color marrón, y puede identificarse fácilmente

al igual que las pupas, de 3-4 mm de largo y color rojizo.

1.2.1 Síntomas: Los melófagos realizan picaduras para alimentarse de sangre, lo que provoca

irritaciones y picazón en los ovinos, con lesiones visibles que desvalorizan el cuero y la lana. Las

infestaciones leves o recientes pueden pasar inadvertidas, mientras que en infestaciones moderadas se

observa el vellón desmejorado y daños por rascado.

1.2.2 Tratamientos:

1.2.2.1 Inyectables: Ivermectina 3,15% Una sola aplicación / Ivermectina 1%: 2 aplicaciones con

intervalo de 14 días.

1.2.2.2 Baños de inmersión o aspersión: 2 baños con intervalo de 14 días.

1.3 Pediculosis Es una enfermedad provocada por dos tipo de piojos: chupadores (Linognathus sp),

que se alimentan de sangre, y masticadores (Bovicola ovis), que se alimentan de descamaciones de la

piel. Ambos son pequeños (1-2 mm), los piojos masticadores son de color amarillento, mientras que los

piojos chupadores son de color gris.

 1.3.1 Síntomas: Las infestaciones leves o recientes generalmente pasan inadvertidas, y otras

se detectan a partir de animales que se rascan ocasionalmente.

1.3.2 Tratamientos:

1.3.2.1 Para piojos masticadores piojos y chupadores:

1.3.2.1.1 Baños de inmersión: 2 baños con intervalos de entre 2 y 3 semanas.

1.3.2.1.2 Productos Pour on: 2 aplicaciones con intervalo de entre 2-3 semanas.

1.3.2.2 Para piojos chupadores también se pueden realizar

1.3.2.2.1 Tratamientos inyectables: Ivermectina 3,15%: Una sola aplicación/ Ivermectina 1%: 2

aplicaciones con intervalo de entre 2-3 semanas.

 2. Parásitos internos

Las parasitosis gastrointestinales (PGI) son identificadas como uno de los problemas sanitarios más

importantes en los sistemas de producción ovina a nivel mundial. Las PGI afectan la salud y bienestar de

ovinos y bovinos y se manifiestan por diarrea, pérdida de apetito, anemia leve a severa y mortandades.

Sin embargo, las infecciones sub-clínicas (infecciones leves pero persistentes) son muy importantes ya

que causan pérdidas económicas ya sea por daños en la producción (disminución en la producción de

carne, lana y leche, entre otros) y/o incremento en los costos asociados con su control.

2.1 Las especies de PGI que predominan en los sistemas pastoriles son:

2.1.2 El Haemonchus contortus (gusano del cuajo): La hemoncosis, causada por el

nematodo del abomaso de rumiantes Haemonchus contortus, constituye una de las enfermedades

parasitarias más notables del ganado ovino en todo el mundo.

2.1.2.1 Las infecciones provocan síndromes anémicos y de mala digestión/absorción que

pueden causar la muerte en los casos agudos y disminución de la producción en las formas crónicas. Las

claves principales para la aparición de esta enfermedad son el comportamiento biológico del helminto, su

patogenia, además de la respuesta del hospedador.

2.1.3 Trichostrongylus colubriformis (gusanos redondos (nematodos) gastrointestinales) y

Trichostrongylus axei (“diarrea PARASITOSIS GASTROINTESTINALES DE OVINOS Y

BOVINOS) T. colubriformis infectan a menudo al ganado bovino, ovino, caprino y otros rumiantes en

todo el mundo, casi siempre en infecciones mixtas con otros nematodos gastrointestinales. Se encuentran
en el intestino delgado. Los adultos son esbeltos, de color pardo rojizo y alcanzan 11 mm de longitud. Las

espículas de T. colubriformis son iguales, las de T. axei.

2.1.3.1 Daños y síntomas: Dañan la mucosa intestinal o estomacal de los hospedadores lo que

puede provocar enteritis o gastritis, diarrea o estreñimiento, debilitación general y pérdida de apetito y

peso que pueden ser agudos si la infección es masiva y se desarrolla en un tiempo breve. Puede haber

fatalidades en animales jóvenes fuertemente infectados. Como las infecciones son casi siempre mixtas, es

difícil atribuir los daños a una u otra especie.

2.2 Tratamientos:

2.2.1 Control químico de infecciones Como el daño a la pared intestinal o estomacal lo causan

tanto los adultos como las larvas, es importante que el producto empleado sea también eficaz contra los

estados inmaduros.

2.2.1.1 Casi todos los benzimidazoles (albendazol, fenbendazol, oxfendazol, etc),

2.2.1.2 el levamisol y las tetrahidropirimidinas (pirantel y morantel) controlan los gusanos

adultos de estos nematodos, pero no necesariamente los estados inmaduros.

2.2.1.3 La mayoría de los endectocidas (abamectina, doramectina, ivermectina, moxidectina,

etc.) son eficaces contra los adultos y contra las larvas.

Hay numerosos reportes de resistencia de gusanos del género Trichostrongylus a los antihelmínticos,

notablemente más frecuentes en ovinos que en bovinos. Esto significa que si un producto no procura la

eficacia esperada contra estos parásitos en rumiantes, el riesgo es considerable que se deba a un

problema de resistencia y no tanto a uso incorrecto o a que el antiparasitario empleado no es adecuado

para dicho control. No obstante, el uso incorrecto es la causa más frecuente del fracaso de productos

antiparasitarios.
 2.3 Métodos alternativos para control de PGI

2.3.1 Forrajes bioactivos: plantas forrajeras con compuestos secundarios con determinadas

propiedades -ej. Taninos condensados, lactonas sesquiterpenas

2.3.1.1 Ejemplos de forrajes bioactivos con taninos condensados:

2.3.2 Nutraceuticos: Son considerados alimentos o parte de ellos con propiedades beneficiosas para la

salud animal.

2.3.3 Forrajes usados para el control de parásitos internos

 3. Conclusiones

 Tratar adecuadamente a todos los ovinos del establecimiento, incluyendo a todas las categorías

(los animales que queden sin tratar volverán a infestar a los animales tratados).

 Utilizar productos antiparasitarios aprobados por los entes de control de la industria

agroalimentaria, que estén indicados para los parásitos presentes y con la dosis que corresponda (seguir

las instrucciones de la etiqueta).

 El momento recomendado para realizar los tratamientos contra melófagos o piojos es dentro de

los 30 días posteriores a la esquila, ya que gran parte de los parásitos se pierden con la esquila.

 Es importante revisar la finca al menos dos veces al año, pudiendo aprovechar los momentos

donde los animales se juntan (señalada, vacunaciones, esquila, etc.).

 Revisar urgentemente a la majada si se observan síntomas de picazón en los animales (si se

rascan, se frotan contra postes o se muerden el vellón en el flanco), o con el vellón “desprolijo”, o con

mechones sueltos

 Exigir la desinfección de maquinaria y accesorios utilizados para la esquila.

4. Referencias Bibliográficas

 Junquera, P, 2021. TRICHOSTRONGYLUS SPP en el GANADO bovino, ovino, porcino y aviar, y

en CABALLOS: biología, prevención y control (modificado). Parasitipedia.net

https://parasitipedia.net/index.php?

option=com_content&view=article&id=166&Itemid=246

 Mederos, A & Banchero, G, Septiembre 2013. PARASITOSIS GASTROINTESTINALES DE

OVINOS Y BOVINOS: situación actual y avances de la investigación. Revista INIA.

https://www.produccion-animal.com.ar/sanidad_intoxicaciones_metabolicos/

parasitarias/parasitarias_ovinos/21-gastrointestinales_avances.pdf