Analizar y ubicar las implicaciones de la llamada “lógica del mandato” en
contexto determinado por la interrelación entre democracia y representación. Las implicaciones de la “lógica del mandato” en relación a la interrelación entre democracia y representación son. - Una comunión entre las diversas democracias, aunque una clara distinción en cuanto a eficiencia y eficacia representativa. Si bien las raíces democráticas modernas convergen en fondo y forma, esto no significa necesariamente, una simbiosis representativa entre los modelos. - Conexión Democracia-Representación, sinónimo de elección. En este caso, se infiere que uno de los dogmas democráticos más sobresalientes es la elección como santo y seña de una democracia participativa-representativa. Todo esto, por supuesto, desde una libertad política de la ciudadanía. - Otras formas representativas de gobierno. Desde luego, la democracia es el paradigma de representación de la ciudadanía libre para “elegir”. No obstante, existieron y aún persisten otras formas de gobierno en donde al menos formalmente, se reflejan los designios colectivos en el aparato representativo. Éstos son: despotismo, monarquía, entre otros. - Los mandatarios como íconos de la representación democrática. Antes de erguirse como gobernantes, los mandatarios deben someterse a la soberanía popular, estando sujetos durante este período, bajo el calificativo de candidatos, cuyo único resurgir se encuentra en las manos de la ciudadanía y su poder de elección. - Un gobierno autónomamente jurisprudencial posterior a las elecciones. Si bien es cierto que el deber ser de la democracia recae entre muchos aspectos, en la libertad de elección política participativa de sus ciudadanos, paradójicamente, el gobierno en marcha, goza de la toma de decisiones independiente, aún cuando esto sesgue lo suficiente, el ideario colectivo. Aunque claro está, existen otros mecanismos participativos que lo limitan en sus funciones ejecutivas y legislativas. - El gobierno subyugado a la magna Ley, la Constitución Política. Como bien se dijo, el gobierno electo goza de jurisprudencia en la toma de decisiones que rige los destinos de una nación. Empero, esto no ha de significar que no deba someterse a limitantes en las iniciativas llevadas a cabo por la autonomía de poderes, ya que, la Constitución Política junto al aparato judicial e inclusive el legislativo en múltiples casos, le regulan. - La periodicidad electiva como ejercicio regulador de los gobernantes. Los modelos fieramente democráticos traen consigo una limitante temporal para los gobernantes electos. En otras palabras, la idea hipotética del conocimiento colectivo antepuesto a la posible ignorancia individual. - Los gobiernos siempre representativos. La representativa gubernamental es como su significante lo indica, un orgulloso reflejo de la sapiencia colectiva de un pueblo, al menos en teoría. - Los gobernantes como eximio producto de los ciudadanos. El poder de la elección pretende y propende el sometimiento del gobernante al elector. En este orden, la virtud atribuida como voto de confianza al gobernante por parte del ciudadano, debiera ser retirada mediante el sufragio si tal principio no se cumple. - El equilibrio de poderes en beneficio del pueblo. La separación de poderes en perspectiva de los valores liberales, ampara el ideal democrático de las mayorías. - Dictadura vs Tiranía. Aunque parezcan sinónimos, distan mucho uno del otro. La dictadura puede llegar a ser representativa siempre y cuando comulgue con las demandas del pueblo. La tiranía en cambio, es una auténtica corrupción de los designios populares mayoritarios. - Democracia, representación y fortuna. Dicha relación carece de formalismo superficiales por lo cual, ahonda más en conexiones sistémicas y, por lo tanto, orgánicas. - La pusilanimidad de la democracia. No existe garantí alguna de armonía entre gobernantes y electores, simplemente pudiera tratarse de un simple acto de fe. - La burocracia como herramienta democrática. Finalmente, el aparato técnico- administrativo puede ser un arma de doble filo. ¿La razón? La ineficiencia e ineficacia en los procesos de toma de decisiones.
2. Indicar la importancia de la “responsabilidad” como factor indispensable para
el afianzamiento de la representación. La “responsabilidad” como factor indispensable para el afianzamiento de la representación, ahonda sus esfuerzos en primera instancia, en el sentido de pertenencia que tare consigo el poder del sufragio como herramienta de modificación sobre actores políticos como los partidos. En consecuencia, la responsabilidad conectiva electoral yace en la conciencia de su poder participativo. De igual forma, pero no menos importante, la responsabilidad de los candidatos para con su público elector, se encuentra arraigada en la innovación de propuestas para satisfacción de las demandas comunes, tan notoria en temporalidades de campaña. En otro orden, una de las responsabilidades más sobresalientes en un statu quo perfecto del modelo democrático representativo se centra en las garantías constitucionales para la oposición. Así pues, tenemos en una esquina la fuerza ejecutiva legitimada por el voto mayoritario de un lado, y la oposición con ansias de poder, por el otro. Sin duda, un principio manifiesto de la democracia. Desde luego, la ordenanza del deber del electorado, se cimienta a partir de una clara conciencia a la hora de elegir, ya que, un mal gobierno puede significar un reflejo inequívoco de una colectividad errante. A continuación, otros actores relevantes en el proceso de corresponsabilidad, se relaciona con los medios masivos de comunicación y su trascendental papel en el juego de la democracia representativa. Por supuesto, no podemos partir desde la ingenua concepción de imparcialidad que surge desde el deber ser de la naturaleza democrática. No obstante, una quimera llevada a cabo, garantizará el equilibrio entre los aspirantes a gobernar y el pueblo llano. Finalmente, la responsabilidad de la representación democrática debiera fijar su veeduría sobre la denominada “espectacularización de la política”, término empleado por la comunicación política y el marketing electoral, para definir los actuales parámetros en los cuales juega el discurso dramático democrático. Un gran festín para lo sentidos de los espectadores y votantes, pero un gran mal desligado de todo propósito benefactor. 3. Ubicar las consideraciones del autor que hablan de la confluencia entre mandato y responsabilidad. - La primera consideración hallada en la lectura, llevada a cabo por el autor, se centra en el mantenimiento de la fe en la legitima representación gubernamental de sus intereses en el ejercicio de su mandato, contribuyendo al aseguramiento en la participación de la clase electora y la definición de su destino. - La siguiente consideración, nos invita a analizar la forma en la cual la transparencia proselitista de las campañas de los candidatos, se orienta hacia sus públicos y probables electores. En esta ocasión, se habla de la prevención del engaño frente a la estratégica demagogia. - Otra consideración a tener en cuenta es la que nos advierte de las maniobras propositivas en los planes de gobierno, previos a su posterior elección. Un condicionante que refleja que no necesariamente las propuestas a priori son un fidedigno reflejo a posteriori. - En concordancia con la anterior consideración, el autor resalta la idea de los políticos, acerca del prevalecimiento del interés privado a las demandas públicas una vez erguidos como mandatarios. - La siguiente, es una forma de concordancia armoniosa entre las propuestas y el ejercicio gubernamental de los candidatos electos, por un lado, y el vehemente aclamo del capital sufragante. - La consideración concerniente a la asamblea representativa, es una forma de participación-representación, una veeduría desde los aparatos del poder legislativo y desde luego, una forma de hacer oposición en el nombre de los sufragantes. - El mandato-representación, es la condicionante de los electores para presionar el buen trasegar de sus gobernantes democráticamente elegidos. Un compromiso que ha de conllevar a una sanción de los primeros, en caso de olvidar sus “sagrados” deberes. - La reelección no debe ser tenida en cuenta si se debe partir de un ideal ortodoxo de democracia. - Una gran enseñanza sin duda, es la de la fidelización de las ideas, del partido o simplemente de los planes de gobierno más convenientes para los electores. - El clientelismo político debe ser seriamente sometido al ojo clínico de la democracia participativa-representativa si se quiere curtir de esta anomalía que aqueja el libre desarrollo democrático. - La elección de un candidato, estrictamente yace en el cumplimiento y empatía política por sus propuestas. Así pues, la credibilidad política puede llegar a ser considerada como una inversión a largo plazo para el establecimiento y perpetuidad de su posición representativa. 4. Esquematizar y describir cada uno de los componentes que permiten ubicar la correspondencia entre estructura de gobierno y representación.
- Esquematizar y describir cada uno de los componentes que permiten ubicar la
correspondencia entre estructura de gobierno y representación. La institucionalidad como participación democrática horizontal, entendiendo al aparato electoral como un ejercicio vertical entre gobernantes y gobernados. Aparatos de poder y burocracia convergen entre sí, guardando su jurisprudencia y su tinte representativo.
- Separación de poderes. Elección retrospectiva, coerción coactiva de los aparatos
de poder en pro de develar las intenciones de los representantes del ejecutivo antes las hordas electoras.
- Supervisión de la burocracia. La estrecha relación entre burócratas y políticos, es
una afectación inequívoca sobre los intereses representativos democráticos. Los primeros, gozando de un amplio y libre albedrío en relación a la veeduría participativa de la democracia. La burocracia como institución comportamental colectiva estatal, ajena a los castigos de la participación democrática.
- Agencias independientes. Persuasión participativa sobre los entes burocráticos
representativos. Disuasión y coerción sobre los políticos representativos que no se acojan a las promesas conocidas en campaña.
- Descentralización. A favor: proximidad en la responsabilidad del gobierno local,
en lo concerniente a resolución de demandas y conflictos a corto y mediano plazo, al igual que un alto nivel de eficiencia y eficacia en tal proceder. En contra: disparidades regionales en cuanto a presupuestos destinados por parte del gobierno central de determinado Estado. Ineptitud burocrática a la cabeza de las administraciones locales, cuyo accionar retarda las respuestas políticas y económicas a la población demandante afectada.
(Corrección I) Anteproyecto Sobre Experiencias de Mujeres Indígenas y Campesinas en Edad Fértil en El Acceso A Servicios de Salud Sexual y Reproductiva en El Municipio de Caldono 2019-2021