Estamos en contra de la afirmación: El estado colombiano garantiza los derechos

de los niños, niñas y adolescentes y es que, si bien es cierto al ser uno de los
principales actores llamados a garantizar el cumplimiento de los derechos de
nuestros niños, hace que cuente con una amplia normatividad para tal fin como lo
es entre otros, la Constitución Política de Colombia de 1991, donde en su artículo
44 define “Son derechos fundamentales de los niños, niñas y adolescentes la vida,
la integridad física, la salud, la seguridad social, la alimentación equilibrada (…)” y
en la Ley 1098 de 2006, en su artículo 2 (…) “establecer normas sustantivas y
procesales para la protección integral de los niños, niñas y adolescentes, garantizar
el ejercicio de sus derechos y libertades consagrados en los instrumentos
internacionales de Derechos Humanos, así como su restablecimiento (…)”; la
realidad es que se continúan evidenciando en nuestro territorio casos preocupantes
de muertes de menores de edad por mal nutrición y violencia en todas sus formas,
por un conflicto armado que sigue latente y que nos involucra a todos como
sociedad, del cual surgen violencias sexuales, físicas, psicológicas, debido en gran
medida a desigualdades, brechas sociales, falta de oportunidades, inadecuada
distribución de los recursos, situaciones que afectan en nuestros niños en su
desarrollo físico, emocional y social, aunado a que muchas veces la misma familia
que debería ser el primer factor de protección de los menores son quienes los
instrumentalizan con la finalidad de obtener beneficios propios

Por otra parte se identifica en el ejercicio laboral que al momento de llevar a cabo el
restablecimiento de derechos vulnerados en los NNA, en algunas zonas rurales y
apartadas las Comisarias de Familia no cuentan con el equipo técnico
interdisciplinario imprescindible que permita aplicar de manera integral la ley
1098 de 2006, es por ello que no solamente se hace necesaria la expedición y
actualización de las normas, si no que se hace indispensable su ejecución y
sanciones a que haya lugar buscando la integralidad en la garantía de sus derechos,
que la norma no se quede escrita y no sean nuestros niños un número más de
informes donde se habla de aumento y disminución de las vulneraciones a las
cuales son expuestos