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Plan de acción para tu trabajo de reflexión

Encuentra un lugar donde no haya distracciones y donde te sientas creativo. Puede


ser en tu sala de estar, en el jardín, en la playa o en cualquier otro lugar donde estés
seguro de no ser interrumpido o molestado..

Paso uno: preparación con la respiración energética

Practica tres rondas de la respiración energética y conéctate con tu fuerza interior, tu


alegría de vivir, tu voluntad de aventura, tu anhelo de libertad, tu centro del corazón y
todas las personas que amas y por las que te sientes amado.

Paso dos: Definir el tema personal

Asumo que has encontrado un lugar ideal para ti, has sido capaz de disfrutar
de 3 rondas de respiración energética y estás esperando con un lápiz afilado
para empezar con tu reflexión.

El éxito y el impacto dependen, entre otras cosas, de cuán concreta, comprensible y


coherente sea la información que vas a poner en tu disco duro.

Paso tres: Evaluación de tu estado actual

Sobre la base de la hoja de trabajo, puedes ahora identificar tu situación actual en


relación con el tema que has definido, para transformar en el siguiente paso.

Paso cuatro: Transformar el estado actual en tu estado deseado:

En este paso, convertimos los pensamientos, sentimientos y hábitos previamente


identificados, en declaraciones positivas. Convertimos así el tema principal en una
“declaración de misión personal”.
Hoja de trabajo de reflexión

Tema principal:

Preguntas sobre la situación actual:

Cuáles de mis pensamientos, sentimientos y hábitos me limitan actualmente en

el logro de mis objetivos internos y externos..

Pensamientos limitantes:
Sentimientos limitantes:

Hábitos limitantes:
¿Qué consecuencias puede tener esta forma de pensar, sentir y

actuar para ti, tu entorno y el medio ambiente?

En el próximo paso, convertimos los pensamientos, sentimientos y hábitos


previamente identificados, en declaraciones positivas. Convertimos así el tema
principal en una “declaración de misión personal”.

Una declaración de misión se refiere originalmente a las empresas y a menudo se


llama declaración de misión corporativa. En el Coaching, sin embargo, lo usamos para
nuestros objetivos personales y resumimos nuestra motivación y visión de la meta en
pocas palabras, tan compactas y energéticas como sea posible.

Entonces puedes recordar la declaración de la misión una y otra vez varias veces al
día. Y, claro, utilizarla especialmente para la programación durante tu meditación.
Declaración de misión para tu transformación

Situación deseada

¿Cuál de mis pensamientos, sentimientos y hábitos me ayudan a lograr mis

objetivos internos y externos?

Me gustaría pensar así para llegar a mi estado deseado:


Así es como quiero sentirme para alcanzar mi estado deseado:

Así es como quiero actuar para alcanzar mi estado deseado:


¿Qué consecuencias positivas pueden tener mis nuevos

pensamientos, sentimientos y hábitos para mí, mi entorno y el

medio ambiente?
Aspectos importantes para la programación de tu
subconsciente

Es más probable que tu subconsciente sea receptivo a la información cuando estás en


un estado relajado, pero también energético. Por lo tanto, siempre inicia con ejercicios
de respiración y meditación, antes de empezar a programar tu nueva identidad.

Puedes añadir esta programación en el paso 5 de la versión completa, después


de que hayas practicado la meditación del momento presente durante unos
minutos, y sientas que tu mente ha llegado a descansar y está receptiva.

“Las imágenes dicen más de mil palabras”, por lo tanto, tus imágenes interiores, las
que produces a través de la visualización, actúan como un amplificador natural junto a
tus pensamientos. La instancia decisiva de la programación efectiva de la mente, se
basa siempre en sentir el contenido de tus pensamientos y sugerencias con todo tu
corazón y cuerpo.

Por lo tanto, lee el texto de tu reflexión una y otra vez y familiarícate con el contenido y
las formulaciones tanto como sea posible. En el momento de la verdad, durante la
meditación, se trata de programar tu conciencia tan intensa y auténticamente como
sea posible. Puedes hacerlo en voz baja o alta, o puedes recitar las frases de tu mente
para fusionarte gradualmente con tu nuevo yo.

Proyecta y vive tu futuro en el ahora. Por ejemplo, si te has fijado el objetivo de tener
una relación más amorosa con tu pareja; visualiza y siente, durante la meditación,
situaciones en las que te relacionas con ella cariñosa y afectivamente

Vive tu futuro, con todos tus sentidos, en el aquí y ahora. ¡Esa es la clave!

La correcta elección de las palabras es crucial, debe ser auténtica y corresponder a


tus propias formulaciones, no ser artificial. El lenguaje complicado y dramático debe
ser evitado. Háblate a ti mismo desde el corazón, de forma natural, simple, directa,
variada y repetitiva. En lo personal, suelo programar mi mente con palabras sueltas y
con frases de 2 o 3 palabras.
Usa el contenido de tu reflexión como inspiración. Puedes grabar el contenido, pero es
importante que tengas una charla libre contigo mismo, natural y animada a lo largo del
tiempo. Sé que suena extraño, pero lo haces todo el tiempo de todos modos. La única
diferencia es que no eres consciente de ello en la vida cotidiana.

Concéntrate en las formulaciones positivas, evita las negativas.

¡Ahora es el momento de convertir la teoría en práctica!

¡Disfrútalo y ten grandes experiencias!

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