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Inteligencia artificial en el futuro de las bibliotecas

Para nadie es un secreto que las bibliotecas se ha modificado con el paso del
tiempo y se ha quedado atrás la idea de que una biblioteca tiene que ser solo
un espacio de silencio donde solo se puede llegar a leer o investigar hoy en día
los usuarios buscan un espacio donde se les permite realizar sus tareas
aprovechando al máximo las herramientas que la tecnología nos ofrece hoy en
día, en un ambiente cálido y seguro.

Las tecnologías de información y comunicación han transformado la gestión de


las bibliotecas y las necesidades de los usuarios, por lo cual es necesario dar
importancia e incorporar herramientas digitales qué permita dar todas las
posibilidades y requerimientos de cada unidad de información. El Avance en la
tecnología no provocará que el bibliotecario desaparezca las bibliotecas, sino
que las herramientas digitales facilitarán el trabajo de estos.

Y la gran invasión de la biblioteca artificial en la vida de las personas puede


estar tan cerca como lejos la verdad es que es un poco difícil presidir cuándo
llegará por completo a la sociedad, pero bien, es cierto que cada vez está más
presente a través de asistentes de voz, chatbots, recomendaciones según
gustos. Y las bibliotecas llevan un tiempo estudiando y analizando cuáles
podrían ser los usos de estas tecnologías, que hacer que las máquinas piensen
y las ponen por su cuenta y estás pueden tener una capacidad de
transformación profunda y su poder de ponerse al servicio del bienestar público
y promoviendo innovación con los preparativos necesarios y teniendo en
cuenta por supuesto las preocupaciones éticas y las limitaciones actuales.

Por ello las bibliotecas pueden utilizar responsablemente las tecnologías de la


Inteligencia artificial para promover su misión social y por ello también las
bibliotecas y sus profesionales deberán ayudar a sus personas usuarias a
desarrollar conocimientos digitales que incluyan la comprensión del
funcionamiento de la Inteligencia artificial en la biblioteca.

Y bueno, cada vez más fácil tener acceso a millones de datos de información
claros pero la enorme cantidad de fuentes disponibles también un reto para
cualquier estudiante o investigador Cómo organizar toda esa documentación
tradicionalmente las bibliotecas lo hacían en el mundo analógico Cómo se han
adaptado estos centros del conocimiento a la era digital.

Y Además ya hace más de un año en muchos lugares del mundo la educación


se volvió virtual y a distancia por la pandemia.

Accesos remotos a salas de lectura de salas virtuales, catálogos, inmensos de


libros y revistas a un solo clic de distancia, de la tablet o de un libro electrónico,
muchos hemos han utilizado alguna vez el servicio digital de una biblioteca o
institución cultural y es que todos ellos se esfuerzan por digitalizar sus recursos
y actualizar sus infraestructuras para la difusión y la preservación de formatos
digitales.

Hablando sobre donde estamos como decimos “parados” en lo que es la


Inteligencia artificial, a qué nos referimos cuando hablamos de I.A. y a dónde
es probable que vayamos con ello.

Estamos en el aprendizaje de máquinas, redes neurales o cualquier jerga de


ámbito y de lo que realmente estoy hablando, es una forma de I.A. llamada
Inteligencia artificial débil, pero obviamente no estoy hablando de Terminator ni
máquinas pensantes, que ya se sabe que actúan como humanos y es eso lo
que normalmente se considera como Inteligencia artificial fuerte y que muchas
personas piensan que es imposible o al menos tan lejos del camino tecnológico
que no vale la pena preocuparse.

Lo que pasa es que lo tenemos ahora y la gente lo puede usar todos los días
sin darse cuenta de la Inteligencia artificial débil, dónde se tiene un sistema que
está entrenado para ser muy bueno mucho mejor que los humanos en algo
particular.

Por ejemplo, jugando ajedrez o jugando un videojuego o alguna otra área de


control, donde el computador puede aprender a qué hacer, aunque hay un
número de reglas y están nos aleja mucho de los límites del juego, sí entrena la
Inteligencia artificial y hoy en día a jugar al ajedrez es muy capaz de ganarle a
todo ser humano.
Pero si le pides que juegue damas o chapas como le llamamos en Costa Rica
sería algo fácil de ganarle, ya que no es flexible, Y cuando hablo IA estoy
hablando un tipo débil pero aún hay muchas cosas y muchas cosas buenas
que estos sistemas están haciendo y que pueden hacer en el mundo, por más
que nos demos cuenta o no todos, todos están probablemente estemos usando
de alguna forma la I.A. y el aprendizaje automático todos los días, en la forma y
por ejemplo son los celulares, y estos todos son modernos usan sistema de
Inteligencia artificial dentro de sí mismos para hacer cosas.
Por otro lado, las bibliotecas están tratando de encontrar un lugar en un nuevo
mercado donde hay información ilimitada disponible con un clic del mouse,
donde las técnicas de aprendizaje y enseñanza están cambiando
drásticamente, cómo anterior mencione, hoy en día por la pandemia
adelantado mucho el proceso que se venía especulando desde años atrás,
sobre la tecnología, sus herramientas o avances, los libros y las bibliotecas, es
por ello que en mi opinión personal la pandemia llego a ser un gran empujón
para estimar un poco de lo que se puede apreciar que va a suceder en un
futuro.

Las bibliotecas se encuentran en busca de una nueva ventaja competitiva y


una forma de proporcionar un mejor servicio a sus usuarios. La mejor forma de
lograrlo es implementando tecnologías avanzadas en las operaciones diarias
de biblioteconomía que permita proporcionar experiencias valiosas a sus
nuevos usuarios en el mundo digital. Y de estas tecnologías que estamos
hablando es la Inteligencia Artificial (AI).

La demanda y flujos de trabajo de la biblioteca comprenden muchas tareas


manuales y rutinarias, como gestión de recursos, cumplimiento, adquisiciones,
actividades de búsqueda, así como recomendación y referencias para los
usuarios y el personal académico.

Es donde la Inteligencia Artificial puede facilitar estos flujos de trabajo y ayudar


a su biblioteca a mejorar su eficiencia y la experiencia para sus usuarios, al
tiempo que le permite cuantificar los resultados y demostrar el valor de la
biblioteca como nunca antes.
Y bueno para comprender porque la Inteligencia artificial tiene la capacidad de
transformar y cambiar tanto nuestras rutinas y tareas prácticas, primero se
debe entender de cómo funciona y bueno esto no necesariamente significa
examinar el mecanismo como se dice “técnico” que lo impulsa sino, en sí el
concepto que lo hace tan poderoso y a la vez tan efectivo en la realización de
tareas humanas y es que el poder de la inteligencia artificial surge en el hecho,
que las máquinas pueden reconocer patrones de manera muy eficiente y a la
ves rutinaria a una escala y velocidad que los humanos no pueden alcanzar.

Es que las tecnologías y aplicaciones de la Inteligencia artificial se basan en


algoritmos de aprendizaje automático y aun así cuando alguna vez fue
solamente una suposición futurista, es evidente que hoy en día la IA se usa
como una simple habilitadora con aplicaciones muy específicos para resolver
problemas reales.

Parece haber una separación de las respuestas frente a la adaptación de la


Inteligencia artificial en las bibliotecas de hoy por un lado la investigación y las
encuestas muestran que los bibliotecarios y los administradores de las
bibliotecas están interesados en adoptar tecnologías avanzadas en sus
bibliotecas pero sin embargo por otro lado parece que muy pocos de ellos ven
que la Inteligencia artificial se convierta una parte importante de sus temas de
bibliotecas ahora o en un futuro cercano.

¿Y por qué se dice que la IA todavía no está totalmente integran las


bibliotecas? Pues en otras palabras parece que a pesar de la conciencia entre
los bibliotecarios y los administradores de dichas bibliotecas sobre esta
necesidad de integrar las tecnologías y sus herramientas hay algunas reservas
internos que impiden que la tecnología de la Inteligencia artificial penetre en el
sector de gestión de la información descubrir la fuente de esta resistencia
podría Conducir a una mejor comprensión de los desafíos en la implementación
de la IA en las bibliotecas así como la formas de superar.

Y es que hay muchas formas de que la Inteligencia artificial nos ayude bastante
en las bibliotecas; mejorando la eficiencia operativa, ayudando a los
bibliotecólogos alcanzar nuevas metas es decir, al reducir las operaciones
rutinarias de búsqueda y referencia manual, atrayendo audiencias mucho más
grandes a través de una mejor experiencia al usuario con nuevos servicios
innovadores y así estableciendo un punto de apoyo solido para las bibliotecas
en el nuevo panorama de información académica.

Finalmente en mi opinión personal la IA, junto con otras tecnologías


innovadoras, es posible que las bibliotecas no puedan reinventarse y mantener
su posición en el nuevo panorama de la información. Sin embargo, cuando la
administración de la biblioteca desempeña un papel activo en la
implementación de aplicaciones prácticas de IA en sus sistemas, no solo
responderán al cambio, sino que también tomarán un papel de liderazgo en la
configuración de su futuro.

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