Materia:

Psicodiagnóstico

Tema:

Realizar dos ejemplos de

los mecanismos de defensa

Nombre:

Amy Carolina Domínguez

Vera

Curso:

3ro
Mecanismos de defensa
Los mecanismos de defensa son muy usuales en las personas y no
necesariamente indican alguna patología si no simplemente es una forma en la
que la mente nos hace procesar mejor la información

Modos incorrectos de resolver el conflicto psicológico y pueden dar lugar a

trastornos en la mente, la conducta y, en los casos más extremos, a la
somatización del conflicto psicológico que lo causa.

La proyección:

Es donde podemos lidiar con todo lo malo que tenemos dentro de acuerdo a
nosotros mismos, a la moral, creencias, la agresión, envidia, celos, la mente lidia
con todo eso para no sentirnos tan mal, tan culpable de tenerlo, lo separa de
nosotros y lo proyecta en otro sujeto

Poner algún defecto que nosotros llegamos a tener, en alguien más, como son
las personas celosas que desconfían demasiado de su pareja y esto llega a ser
una proyección de nosotros

Regresión:

Esto trata de que la mente nos regresa a un estado anterior en el desarrollo

Nos puede regresar memorias cuando teníamos cinco años o a los quince y esto
llega a pasar por ejemplo a las mujeres cuando se enfrentan a una situación
traumática y todo esto de manera inconsciente

Cuando una persona no enfrente a un problema

Represión:

Aprisionamiento en el inconsciente de recuerdos, ideas, emociones, etc.

Esto normalmente llega a pasar cuando estás trabajando, el jefe llega a ser un
completo dictador y no puedes dar tus ideas por el miedo de ser despedido

Sublimación:

Medio de alcanzar satisfacción en forma sustitutiva o imaginaria a las dos

tendencias básicas de nuestros instintos.
Introyección:

Mecanismo de defensa que consiste en introyectar, mediante la absorción,

identificación o imitación, ciertas cualidades que tienen los "objetos externos"

Racionalización
Una mujer se enamora perdidamente de un hombre, e inician una relación. Al
cabo de un mes de empezar el noviazgo, el hombre rompe la relación porque
considera que la mujer tiene una autoconfianza muy baja y no le deja respirar.
Pese a que la mujer lleva tres fracasos amorosos consecutivos por la misma
razón, concluye: “ya sabía que este hombre era un perdedor”, o bien "desde el
primer momento supe que este hombre no me convenía".