El ser humano tiene la necesidad de relacionarse con otros, estas necesidades de
desarrollar relaciones íntimas, estables y comprometidas son importantes dentro de la conducta humana. Sin dudarlo, a lo largo de la vida los amigos nos defienden del estrés y nos prevén de alegría (Bukowski y cols, 196: Krause, 2006). Los patrones de amistad varían de persona a persona y estereotipos sexuales, en la adultez emergente las amistades son inestables (Berger, 2009), pues, en esta etapa las personas pasan por constante cambio, y suelen mudarse y experimentar otros ambientes. También, en esta etapa de desarrollo las obligaciones son mínimas ya que pocos adultos jóvenes tienen esposa, niños dependientes o parientes ancianos, en cambio tienen amigos. ¿Cómo es que los conocidos se vuelven amigos? Hay cuatro factores que son portales a la atracción (Fehr, 1996). 1. Atracción física (incluso en las relaciones platónicas similares a las sexuales). 2. Disponibilidad aparente (deseo de conversar, de hacer cosas juntos). 3. Exposición frecuente. 4. Ausencia de un criterio de exclusión (no hay características inaceptables). Las personas solteras tienden a crear mayor dependencia a los amigos que los casados o los que son padres. De igual manera, las mujeres crean vínculos de amistad más íntimos que los hombres debido a que generan relaciones de mayor confidencialidad. Cohabitación: La cohabitación es un estilo de vida en el que la pareja no está casada, pero mantiene una relación sexual y viven bajo el mismo techo. Este tipo de relación es cada vez más común debido a la falta de compromiso. La cohabitación varía dependiendo del país y la cultura; encontrándose variación en la probabilidad de cohabitación de una mujer antes de los 45 años de edad desde el 5% en Polonia hasta un 83% en Francia. La cohabitación ha sido una alternativa en muchos países para la mayoría de mujeres que no desean casarse. En países latinoamericanos y Canadá las parejas que tienen uniones consensuales presentan casi los mismos derechos que los casados. Mientras que en países occidentales las parejas pasan por un proceso breve de cohabitación para luego casarse. En EEUU e Inglaterra la cohabitación es una tendencia a retrasar el matrimonio y ha aumentado en las últimas décadas. Los patrones y la estabilidad de la cohabitación varían entre diferentes grupos raciales y étnicos, probablemente debido a problemas económicos, variando también la perspectiva y significado que se le da a la relación. La edad también resulta ser un factor importante, los adultos tardíos tienden a verla como una alternativa al matrimonio al igual que las parejas no hispanas y de color, mientras que los adultos tempranos suelen verla como un preludio de este. Según algunos autores la cohabitación es menos satisfactoria y estable que el matrimonio debido a la diferencia de expectativas y a las circunstancias económicas. Sexualidad: Como lo plantea la Organización Mundial de la Salud “la sexualidad es un aspecto central del ser humano, presente a lo largo de la vida. Abarca al sexo, las identidades y los papeles de género, el erotismo, el placer, la intimidad, la reproducción y la orientación sexual” (OMS, 2006). Por otro lado, el adulto joven desarrolla una vida sexual más activa, con más oportunidades, sin los limites paternos para desarrollar y explorar la sexualidad en su máxima expresión. Es una realidad madura y está determinada por el mundo actual que vivimos, además es una etapa donde se toman decisiones importantes relacionadas al trabajo, estilos de vida y hasta el matrimonio. En la actualidad, la mayoría de los estadounidenses ha tenido sexo premarital, generalmente comenzando a edades por debajo de los 20 años de edad. Los adultos emergentes suelen tener más parejas sexuales que los adultos de mayor edad, peor con menos frecuencia. Lo que conlleva a que el sexo casual sea bastante común sobre todo en edad estudiantil, lo cual también puede aumentar el número de agresiones y ataques sexuales hacia mujeres comúnmente asociado al abuso de alcohol. La libertad de géneros también se ve desarrollada y acentuada durante la adultez emergente, con la prevalencia de mayor libertad sexual por parte de los hombres que de las mujeres. Referencia: Psicología del Desarrollo (De la infancia a la adolescencia). Undécima EDICION. (Diane E. Papalia, Sally Wendkos Olds, Ruth Duskin Feldman). Psicología del Desarrollo (Adultez y vejez) Séptima EDICION (Kathleen Stassen Berger). Escalante Romero, Lorena; Cerron- Vela, Carmen Rosa; Salazar-Granara, Alberto; Mezones-Holguin, Edward (2008). Descripción de la conducta Sexual en Adultos Jovenes limeños http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=37137117005