Milagrosa. Los misterios del capitalismo dependiente argentino.
Productos altamente modificados, cultivados a través de múltiples medios transgénicos que
día a día son puestos en la mesa de los Argentinos, el capitalismo que poco se interesa en el bienestar individual y por los cuerpos que lo consumen y a la vez lo alimentan, se presenta como plato principal. De forma satírica el artista rinde culto a una economía agraria tan característica de la Argentina, a su vez, nos prepara una festín revolucionario, donde hace una crítica a la maquinaria del consumismo y revela que somos un país de materias primas pero que solo unos pocos disfrutan de su plusvalía. El artista trabaja con la instalación, presenta un altar a la soja y sus productos derivados que tan frecuentes son en la dieta alimenticia de nuestro país, sobre un mantel blanco y entre velas encendidas que enfatiza esta idea de altar, tan característico de la iglesia católica, genera vínculos entre el arte, el rito y la sátira.