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Dios es uno y al mismo tiempo tres personas, por eso se llama santísima
trinidad.
Hacemos la comparación con la jarra de agua.
Con la jarra vamos a representar a Dios.
Separamos el agua en tres copas o vasos iguales y les podremos los nombres
santos
Aquí tendríamos por separado a Dios.
Los tres son personas por que pueden trabajar por separado, pero siempre
unidos en equipo.
Los volvemos a unir en la jarra.
Unidos o separados los tres se aman tanto que el mismo amor los une y los
hace iguales entre sí.
Dialogamos:
¿Dónde vemos un límite en la jarra?
¿Dónde empieza el uno y termina el otro?
¿Quién es quién?
Así es la SANTÍSIMA TRINIDAD: Unión de puro amor y los tres trabajan juntos,
para que nosotros hagamos lo mismo con amor.
“El que me ha visto a mi ha visto al padre yo estoy en el padre y el padre
esta en mi… yo rogaré al padre y les dará otro intercesor… En adelante el
espíritu santo que el padre les enviará en mi nombre, les va a enseñar
todas las cosas y les recordara todas mis palabras.” Juan 14
Para recordar:
Aquí, en la tierra,
Los hombres no podemos ver a Dios Padre,
Pero Jesús, su Hijo,
Que Él envió al mundo y que vivió entre nosotros
Nos ha enseñado que:
El Padre, Creador de todas las cosas,
Nos ama y nos ha hecho hijos suyos.
Jesús, su Hijo,
Nos ha reconciliado con el Padre y nos ha salvado.
El Espíritu Santo
Nos ayuda a caminar por la vida
Como discípulos de Jesús
Hasta llegar a Dios Padre.
Ahora sabemos que Dios es amor:
El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo se aman tanto
Y están tan unidos entre sí
Que son un solo Dios.