Alimentación baja en sodio (hiposódica)

El elevado consumo de sodio (mayor a 2 gramos/día, equivalente a 5 gramos de sal

por día) contribuyen a la hipertensión arterial y aumentan el riesgo de cardiopatías
y accidentes cerebrovasculares.
La mayoría de las personas consumen demasiada sal, de 9 a 12 gramos por día en
promedio, es decir, dos veces la ingesta máxima recomendada.
El sodio se encuentra en estado natural en diversos alimentos, como la leche, la
carne y los crustáceos. Suele estar presente en grandes cantidades en los alimentos
elaborados, como el pan, los productos cárnicos elaborados, así como en ciertos
condimentos (salsa de soja o de pescado, por ejemplo).

¿Cómo disminuir el consumo de sodio?

Para disminuir el consumo de sodio, es necesario realizar cambios en la elección de
alimentos en nuestra alimentación, se recomienda evitar consumir los siguientes
alimentos:

Sal de mesa

Carnes y pescados ahumados

Embutidos (mortadelas, salame, paté, vienesas, etc.)
Alimentos en conserva (aceitunas, alcaparras, pepinillos, atún, frutas)
Pasteles, galletas
Snacks salados en general (Papas fritas, ramitas, suflés)
Mantequilla y margarina
Bebidas, néctar, variedades de jugos
Sopas en sobre
Condimentos (caluga maggi, mostaza, ají)

Recomendaciones nutricionales:
Quite el salero de la mesa
Prefiera cocinar al vapor o en papel aluminio para preservar el sabor de sus
alimentos.
Utilice potenciadores de sabor tales como ajo, cebolla o limón.
Utilice hierbas aromáticas, tales como laurel, tomillo, albahaca, comino o romero.
Prefiera aceites con sabor, como aceite de oliva, pepita de uva, aceite con ajo, etc.
Evite o disminuya el consumo excesivo de alcohol.

Constanza Carvajal
Interna de nutrición y dietética