Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Legislacion
Legislacion
Legislac
ión
Fiscal y
mercant
il
Estudiante:
Pérez Andrea
Cédula: 27586365
Carrea: Lic. Administración y Gestión Municipal
Sección: 05S-0913-D1
Materia: Legislación Fiscal y mercantil
El control administrativo es la etapa de la gestión administrativa que se refiere a la
evaluación de procesos y del rendimiento administrativo, así como de la identificación de
desviaciones y posibles anomalías.
Dentro de la teoría y los estudios económicos y empresariales, el control administrativo se
considera una de las fases que componen el proceso administrativo.
Mediante las funciones de control, las distintas organizaciones persiguen vigilar su
funcionamiento. Es decir, establece patrones de seguimiento que permitan observar el
rendimiento de la compañía.
El motivo principal de su existencia es la valoración de parámetros que informen de un
correcto funcionamiento a la hora de perseguir su misión o su actividad económica.
Para ello, se crean funciones o tareas que faciliten ininterrumpidamente la evaluación de los
procesos que se ponen en marcha.
En ese sentido, se compara la previsión inicial de la empresa con los valores realmente
experimentados o conseguidos.
Rasgos principales del control administrativo
Dentro de las funciones administrativas pertenecientes al control administrativo se
encuentran en común una serie de características:
Evaluación y seguimiento de procesos: Mediante la observación de la actividad de la
organización, se pretende medir su funcionamiento y los niveles de eficiencia que arroja.
Elaboración de patrones y métricas: Tras la observación, el correcto control administrativo
debe servir para establecer ratios o niveles óptimos de producción, funcionamiento, etc.
Búsqueda de eficiencia: El control administrativo busca la desaparición de diferencias entre
lo planificado y lo ejecutado. Para ello, precisa de procesos administrativos y de producción
lo más cercanos posible a los planteados en origen.
Identificación de anomalías: Teniendo en cuenta los puntos anteriores, el control debe
identificar errores o incumplimientos procesales que aparezcan en el día a día de una
organización.
La infracción es un acto que comete una persona infringiendo la ley vigente y que tiene
como consecuencia una amonestación.
Los ciudadanos que cometan una infracción, será por haber infringido la ley administrativa.
Esto, ya que si lo que se infringe es la ley penal, no se trataría de una infracción sino de un
delito.
Estas infracciones recibirán una amonestación, que no se tratará de penas privativas de
libertad como si ocurre con la consecuencia del delito. Por ejemplo, una consecuencia del
delito puede ser la cárcel. Las amonestaciones en este ámbito suelen ser económicas.
Las infracciones más comunes son las infracciones de tráfico, donde se infringen normas
referentes al tráfico vial y que pretenden proteger la seguridad de terceros.
La consecuencia más habitual de las infracciones es la multa dineraria.
Tipos de infracción
Los tipos de infracción se pueden dividir en las siguientes:
Graves: La acción se considera de mayor gravedad y también tendrá una sanción más dura.
Menos graves.
Leves: Estas infracciones no causan un gran daño y tienen una sanción más reducida.
Requisitos de las infracciones
Las infracciones deben cumplir tres requisitos:
Acción: Se necesita un ciudadano que cometa una acción que vaya encaminada a la
producción de un resultado, el cual infringe la normativa administrativa.
Tipificada por la ley: Esa acción debe estar recogida como infracción en un cuerpo
normativo.
Cualquier persona física o jurídica puede ser responsable de una infracción.