Tal como lo señala Goleman (ob. cit.), principal exponente mundial
de la inteligencia emocional, se trata de identificar “la capacidad de reconocer los propios sentimientos y los de los demás, para utilizarlos como guía de pensamiento y de acción al auto-motivarse y manejar adecuadamente las relaciones que se mantienen con los otros” (p. 27). De allí entiendo que la inteligencia emocional, determina el modo como cada persona se relaciona con los demás y demanda del mundo social, el hecho de tomar en cuenta las actitudes y los sentimientos, ante cualquier situación que entre en conflicto.
LARGAS (más de 40 palabras)
Es importante señalar a Armstrong (2002), quien apuntala que la gestión
del conocimiento:
Tiene que ver con elevar la conductividad de la organización y así
mejorar nuestra capacidad para enlazar con el mundo exterior… requiere crear el lugar, el tiempo y el ambiente apropiado para promover un trabajo reflexivo y la efectividad de nuestras interacciones (p. 1).
De este modo, la gestión del conocimiento puede asimilarse como
aquel proceso que, consecutivamente, asegura el desarrollo y la ejecución de los activos de conocimiento en un momento y espacio determinado. En consecuencia, crea una estructura organizacional que permite la sincronía entre la persona e información, lo que genera un entorno de conocimiento.
PARAFRASEADAS
Por lo tanto, los numerosos conflictos de orden económico, social,
educativo, político, ambiental, ideológico y cultural, interactuando unos sobre otros, han originado una crisis global propia de la civilización occidental moderna. Así surge la llamada ..sociedad postindustrial, en este sentido postmoderna,... compuesta por una pluralidad de mundos (...) desaparece también aquella fe ingenua en el desarrollo y el progreso que habrían llevado a la felicidad a la humanidad... (Zeraoui, 2005, p. 213). PARA CITAR LOS ACTORES SOCIALES EN EL MOMENTO I (EN CASO DE SEA CUALITATIVA)
Es así que la versionante A, expresó: “Considero que no existe esa
cohesión en la forma como se gerencia la cultura desde el ente rector encargado de emanar las directrices, pues creo enormemente que los criterios gerenciales llevados a cabo en una organización cultural deben permitir el trabajo en equipo para lograr un ambiente de prosperidad que estimule el compromiso y la calidad productiva del entorno cultural en concordancia con las exigencias de la sociedad, a fin de lograr que el gerente de las organizaciones educativas sea el responsable del desempeño”. (VA: Lin: 24- 33, Anexo A).
Lo expresado por esta actora social supone que en las organizaciones, la
gerencia enfrenta actualmente cambios acelerados en el entorno, los cuales inciden sobre el proceso administrativo. Dado que estos cambios referidos conducen a una creciente diversidad y complejidad, el trabajo gerencial no es de ninguna manera fácil. Por lo general, el gerente debe mostrar tolerancia a la ambigüedad y, por ende, estar continuamente comprometido con el diagnóstico de situaciones y evaluaciones de contingencia, a medida que se realiza la actividad organizacional, en concordancia con las exigencias actuales de la sociedad.
En este orden de ideas, Blejmar (ob. cit.) afirma:
La gestión se despliega mucho más en la creación de condiciones,
en la construcción de escenarios adecuados, en la provisión de capacidades e instrumentos a los equipos de trabajo (allí donde existieran), que en el hacer solitario de quien dirige (p. 37).
De lo mencionado puedo intuir que cuando se habla de gestión, se deben
tomar en cuenta todos aquellos factores implícitos y explícitos que involucran tanto al talento humano como a los factores materiales, internos y externos, los cuales son determinantes en el adecuado funcionamiento de una organización. Por lo tanto, implica una intervención efectiva en cada proceso, tener clara cada una de las responsabilidades de los actores que participan dentro de la institución, así como también, poseer las competencias básicas requeridas.
Por su parte el versionante B, señaló: “No considero que exista