Está en la página 1de 5

Explotación de la caza.

La explotación animal es uno de los mayores problemas a los que


nos enfrentamos. Hoy en día, más de 3.000 animales mueren
asesinados cada segundo por culpa de prácticas muy crueles.
Hacer disminuir esta cifra está en manos de todos y más que nunca
de los gobiernos. Por desgracia, pocas medidas se llevan a cabo
para que los animales no sufran como lo están haciendo en pleno
siglo XXI.
A continuación, os describimos algunas de esas prácticas que
hacen que haya animales que sólo han conocido el miedo y el dolor.

Caza y pesca
Tanto la caza como la pesca son prácticas totalmente
reprochables. Si bien es cierto que podemos alimentarnos de
carne y pescado como omnívoros que somos, no menos
cierto es que podemos hacerlo sin tener que asesinar a los
animales como hacen los cazadores y también optar por
incrementar mucho más el consumo de vegetales que de
productos animales, o incluso podemos vivir sin carne y
pescado.
Por ejemplo, en España hay casi un millón de cazadores. Los
animales cazados serán destinados a la gastronomía o
al tráfico ilegal de mercancías, como bien son los colmillos
de marfil de los elefantes.
La caza furtiva, el lucro de la
extinción
Más de 300 especies de mamíferos están al borde de
la extinción a causa de un mercado negro que mueve
entre 8.000 y 20.000 millones de euros al año.

Entre la vegetación del vasto territorio botsuano, una de


las matanzas más salvajes en África acaba de llevarse por
delante a 87 elefantes africanos, el pasado 4 de septiembre,
debido a la codicia por el marfil. Encontrados con los colmillos
arrancados, las cifras aún descansan sobre la incertidumbre
de un recuento que todavía no ha finalizado. 
El descorazonador rastro de la caza furtiva alcanza niveles
insostenibles que esquilman el planeta a una velocidad cada
vez mayor. La creciente avaricia arrastra al límite de la
extinción a miles de especies, con más de 30.000 elefantes,
100 tigres y 1.000 rinocerontes asesinados cada año, según
afirma el World Wildlife Crime Report elaborado por la Oficina
de las Naciones Unidas contra la Droga y el Dellito
(UNODC).  

En las últimas décadas, la extinción de especies se ha


acelerado hasta tal punto, que la tasa promedio de pérdida de
vertebrados es hoy hasta mil veces más alta que las tasas de
referencia. Algunos expertos consideran que nos
encontramos ante la sexta extinción más grande de la historia
de la Tierra. Entre las filas de la larga ristra animales en
peligro de extinción, muchos se hallan gravemente
amenazados por la caza furtiva que alimenta el tráfico ilegal
de animales. Según afirma un estudio publicado en The Royal
Society, más de 300 especies de mamíferos están al borde
de la extinción debido a la caza furtiva.
El problema de la tala 
La deforestación es un grave problema para la salud del planeta
que nos afecta a todos y, aunque los intentos por frenarla logran
discretos resultados, no consiguen revertir la tendencia. El desastre
ambiental ocasionado por la progresiva desaparición de la masa
forestal provoca pérdidas ambientales incalculables y de difícil o
imposible recuperación.
En efecto, más que hablar de árboles hemos de hablar de bosques,
de ecosistemas y de todo lo que afecta o depende de ellos, y es
precisamente con este enfoque como se entiende que la tala
indiscriminada o la tala inmoderada de árboles sea mucho más
que un atentado ecológico puntual en un área concreta, ya que
termina afectando a todo el planeta. Sobre todo, además, porque se
trata de una práctica muy extendida que se lleva a cabo a escala
global, con pérdidas de más de diez millones de hectáreas de
bosques. En este artículo de Ecología Verde, vamos a abordar el
problema de la tala indiscriminada de árboles en los bosques.
Qué es la tala de árboles indiscriminada -
definición sencilla
Primero, responderemos a qué es la tala de árboles normal.
La tala de árboles es el proceso que se lleva a cabo para
cortar los árboles necesarios para las actividades humanas
como, por ejemplo, la construcción. No obstante, en
cantidades bajas en comparación a la cantidad de árboles y a
la capacidad de regeneración de los bosques esta no tiene
por qué dañar al planeta. El problema está en la tala
indiscriminada o tala inmoderada de árboles, que es el tipo de
tala que nos ocupa en este artículo.
La tala indiscriminada de árboles es el proceso mediante el
cual va disminuyendo el número de vegetación y
árboles a un ritmo superior al que los bosques son capaces
de regenerarse, provocando la deforestación. Esta práctica,
que se suele llevar a cabo en suelos por algún fin específico,
se da por diversos motivos. Así, las principales causas de la
deforestación o tala inmoderada de árboles son:
 Plantar otro tipo de árboles o cultivo.

 Extracción de recursos naturales; por ejemplo, para usar


la madera.
 Criar ganado.

 Construir en ese terreno.


Con el paso del tiempo, lo que sucede es que se acaba
perdiendo la calidad del suelo de forma definitiva, acabando
con cualquier tipo de flora o fauna que hubiera. La tala de
árboles es algo llevado a cabo por el hombre desde tiempos
prehistóricos, aunque los fines y la capacidad han ido
variando.
Consecuencias de la tala indiscriminada de
árboles
Ahora que ya hemos aclarado las qué este tipo de tala de
árboles agresiva y cuáles son las causas de esta, pasamos a
aclarar las graves consecuencias de la tala de árboles
inmoderada:
 La tala de árboles indiscriminada, además de suponer la
muerte del árbol, supone una gran pérdida que resulta
especialmente dramática cuando se trata de árboles
centenarios, la tala indiscriminada acelera la
desaparición de la masa forestal, que son
grandes sumideros naturales de carbono, es decir
que absorben el CO2 o dióxido de carbono de la
atmósfera y renuevan el aire aportando oxígeno. No es
por casualidad que los bosques sean llamados los
pulmones del planeta.
 Los distintos tipos de bosques del mundo acogen una
biodiversidad autóctona, por lo que la desaparición de
buena parte de los árboles de un bosque puede
provocar la extinción de especies y la
correspondiente pérdida de biodiversidad; además en
muchas ocasiones estas ya se encontraban en peligro
de extinción, pues no es un proceso que se da de un
día para otro. Por poner un ejemplo, las Naciones
Unidas llevan años advirtiendo del peligro que corren
los gorilas en la gran cuenca de la República
Democrática del Congo, cuyo hábitat está tomado por
las milicias, que logran financiarse a través del
contrabando de madera y de los ricos yacimientos
mineros de la zona. Lejos de controlarse, el problema
sigue de plena actualidad.
 A su vez, las poblaciones locales, que son zonas rurales,
ven mermados sus recursos naturales de supervivencia.
 El vaciado de áreas boscosas para su explotación
agrícola, ganadera o maderera en áreas de gran
riqueza ecológica, como la Amazonia, es otro
importante problema que acaba provocando
una erosión del suelo y propiciando los incendios
forestales.
Por tanto, los beneficios iniciales de una tala de árboles
moderada, al convertirse en una tala indiscriminada, pronto
se convierten en grandes problemas de contaminación,
pérdida de suelo, pérdida de biodiversidad y de recursos
naturales que no son subsanables ni económicas, a fin de
cuentas.

También podría gustarte