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ECONOMIA PARA INGENIEROS

ACTIVIDAD DE APRENDISAJE #3

Presentado por:

Presentado a:

FUNDACION UNIVERSITARIA COMPENSAR

INGENIERIA DE TELECOMUNICACIONES

VILLAVICENCIO, META

2020

ACTIVIDAD No.3
ESCULA DE PENSAMIENTO ECONOMICO

LA ESCUELA MERCANTILISTA

Es una de las principales escuelas de pensamiento económico. Aunque se


desarrolla hasta el siglo XVII, sus ideas también influyeron en la primera mitad
del siglo XVIII. Los mercantilistas, por tanto, se caracterizaron por ser una
escuela que defendía la fuerte intervención del Estado en la economía, a la vez
que consideraban el capital como la principal fuente de riqueza y prosperidad
de las naciones. Todo ello, en adición a la promoción del comercio internacional.
Se ha dado el nombre de mercantilismo al conjunto de ideas económicas
vigentes en Europa Occidental de la mitad del siglo XVI a la mitad del siglo
XVIII. Paradójicamente, quienes vivieron en este periodo de más de doscientos
años, jamás se enteraron de que vivían bajo un sistema económico conocido
por tal nombre. El nombre mismo no fue acuñado sino hasta 1763 por Mirabeau,
para describir el conjunto de ideas económicas que había existido en algunos
países de Europa Occidental, con diferentes características, en los dos siglos
precedentes.

El mercantilismo afirmará la tesis de que el Estado aumenta su fuerza al


propiciar el enriquecimiento de sus ciudadanos. Quienes defienden este punto
de vista serán frecuentemente comerciantes, banqueros o industriales. En
apariencia se preocupan por el poder del Estado, pero en realidad afirman que
la prosperidad del comercio, particularmente el internacional, de una nación va
de la mano de la expansión del poder político y militar del Estado.

ORIGEN DE LA ESCUELA MERCANTILISTA

La máxima expresión del mercantilismo, como corriente de pensamiento, se da


en Francia, en el siglo XVI. En el país galo, bajo el mandato de Jean Baptiste
Colbert, ministro de finanzas, el mercantilismo logra imponerse con la
protección, e impulso, de empresas industriales y agrícolas en el país por parte
del Estado.

Esta protección se materializó a través de créditos y subsidios que permitían a


las empresas prosperar. Todo ello, junto a fuertes restricciones a las
importaciones y otras prácticas proteccionistas que mantenían la balanza
comercial en positivo.

La postura proteccionista comienza a perder impulso a mitad del siglo XVIII. La


aparición de nuevas teorías, más liberales y enfocadas al libre comercio,
prosperaron de la mano de economistas destacados como Adam Smith. Esto
produjo que las ideas mercantilistas fueran perdiendo fuerza, a medida que
surgían nuevos postulados que cuestionaban y rebatían determinadas ideas
mercantilistas.

Así se pasa de la concepción del Estado como fin supremo a la idea de la


riqueza como valor supremo de la vida humana (Denis Henry, 1966). Pese a
que los fines perseguidos por los comerciantes y por el Estado no son los
mismos, se trata de fines que están unidos dentro del proceso social. Según
menciona Denis, aunque ninguna obra mercantilista presenta claramente esta
ideología, sí, en el conjunto de las diversas obras "aparece una teoría de las
«armonías económicas», que podría resumirse diciendo que el desarrollo de la
industria y de las exportaciones, que es para los comerciantes el objetivo a
alcanzar (puesto que esto es lo que produce beneficios), constituye el medio
para el Estado de alcanzar sus propios fines: la abundancia de hombres y
dinero; mientras que, recíprocamente, la abundancia de hombres y dinero,
objetivo del Estado, es el medio que permite desarrollar la industria y el
comercio, es decir el medio que permite a los comerciantes alcanzar sus
objetivos"

PRINCIPIOS DE LA ESCUELA MERCANTILISTA


La acumulación de riqueza (principalmente metales preciosos) es esencial para
el desarrollo económico de un país. A mayor acumulación de riqueza, mayor
prosperidad y poder político.

El Estado tiene el rol de utilizar e imponer todos los mecanismos que sean
necesarios para lograr el objetivo de acumulación de riqueza (controles,
restricciones, subsidios, etc.) Su intervención tendrá un carácter proteccionista,
incentivando la producción local al mismo tiempo que la protege de la
competencia de productores extranjeros.

El comercio a nivel global es inalterable. Para que el comercio ayude a la


acumulación de riqueza se deben controlar los flujos de entrada y salida para
mantener una balanza de pagos positiva (exportaciones superan a las
importaciones).

IDEAS DE LA ESCUELA MERCANTILISTA

La riqueza de una acumulación depende de su capacidad para acumular


minerales preciosos como el oro y la plata.
Para obtener dichos metales, la mejor forma es la utilización del comercio
exterior.

El comercio exterior, para generar riqueza, siempre debía dejar un saldo


positivo en el país. Es decir, se vende más al exterior de lo que se compra.

A ello, se le suman herramientas proteccionistas que garantizan el difícil acceso


a los productos extranjeros.

Asimismo, se planifica la producción para no depender de producción extranjera


y abastecer a la población con recursos propios.

Por esta razón, se favorecía a las empresas en el país. Para ello, con créditos
y subsidios, así como elementos proteccionistas que les protegiese de la
competencia.

La producción debía enfocarse al exterior, para poder vender en el extranjero


los excedentes y, con ello, atraer riqueza.

Autores más destacados de la escuela mercantilista

El autor más destacado de la escuela mercantilista fue Thomas Mun. Este fue
el director de la Compañía de las Indias Orientales, así como uno de los
pensadores mercantilistas más reconocidos. Para Mun, al igual que para los
mercantilistas, el país solo podía enriquecerse a través del comercio exterior y
la acumulación de capital.

No obstante, junto a Mun, otros muchos economistas siguieron enriqueciendo


la teoría mercantilista.

Entre los autores más reconocidos que han aportado a la escuela mercantilista,
destacan los siguientes:

• Martín de Azpilcueta.

• Antonio Serra.
• Jean Bodin.

• William Petty.

• Tomás de Mercado.

• Antoine de Montchrestien.

CRÍTICAS A LA ESCUELA MERCANTILISTA

Las ideas mercantilistas, al igual que provocaron el impulso y el crecimiento del


comercio y la industria, generaron tensiones y reacciones que estaban en su
contra. En este sentido, el aprovechamiento que hicieron los imperios
mercantilistas de las colonias provocó un desarrollo poco inclusivo, que solo
favorecía a estas potencias que controlaban y dominaban el comercio global.

Por esta razón, surgieron muchos movimientos separatistas que buscaban


lograr su independencia, así como su inclusión en los distintos mercados a nivel
global. De esta forma, pudiendo enriquecerse y acabando con esa dominación
de las potencias mercantilistas.

Entre las escuelas más críticas con el mercantilismo se encuentra la escuela


fisiócrata o la fisiocracia.

APORTES DE LOS PRINCIPALES REPRESENTANTES DEL


MERCANTILISMO

Los distintos ideólogos que forman parte del debate mercantilista toman,
frecuentemente, posiciones distintas. Este hecho probablemente derive de la
gran diversidad de ocupaciones de dichos pensadores: los hay médicos,
funcionarios públicos, filósofos, pero, sobre todo, comerciantes. Esta diversidad
contrasta con la unidad de pensamiento que hemos encontrado en la literatura
patrística y en la filosofía escolástica y explica esta carencia de orden y unidad
en el llamado pensamiento mercantilista.
Los mercantilistas introdujeron la primera noción real de la importancia
económica y política que tiene el comercio exterior y pro- pusieron, para su
mejor ordenamiento, la doctrina de la balanza comercial. Francis Bacon
señala: "Pongamos los cimientos de un comercio ventajoso, haciendo que la
exportación de artículos domésticos exceda en valor a la importación de
artículos extranjeros; con ello incrementaremos las reservas del Reino, pues la
balanza comercial deberá ser saldada en metálico."

Gerard de Malynes, comerciante holandés, aunque no habla de la balanza


comercial utilizando esta expresión, insiste en que en un país debe haber cierta
igualdad entre exportaciones e importaciones. No debe haber preponderancia
de artículos extranjeros sobre artículos domésticos, pues ello se traduciría en
una pérdida de riqueza. Puede incurrirse en esta pérdida en tres formas:
exportando oro, plata o monedas, vendiendo los artículos fabricados en el
propio país demasiado baratos o comprando demasiado caros los artículos
extranjeros.

Malynes se preocupa por tanto de algo más que la simple balanza comercial o
relación entre exportaciones e importaciones. "Esta descompensación se debe
en realidad al pre- cio de los artículos y no a su cantidad o su calidad", es decir,
la descompensación está relacionada con lo que se conoce como "términos
comerciales", o sea la relación entre los precios de las exportaciones y las
importaciones.

Edward Misselden, mercader inglés, está obsesionado con la idea de que


Inglaterra necesita más efectivo. Para obtenerlo, debe forzar las exportaciones
y restringir las importaciones. Cuando Mis- selden emplea los términos de
"libertad de comercio" no implica lo que se entiende por ello hoy en día, esto es
la ausencia de restricciones a las importaciones. Su idea era en realidad libertad
de competencia y libertad de exportación, es decir, deseaba la existencia de un
comercio que ni estuviera desorganizado como el de los competidores intrusos,
ni monopolizado por una compañía de accionistas como la Compañía de las
Indias Orientales
Thomas Mun, quizá el más influyente de los ideólogos del mercantilismo inglés
escribió dos importantes tratados: El Discurso sobre el comercio de Inglaterra
con las Indias Orientales, en el que asume sólo una posición de defensa ante
los ataques de que es objeto la Compañía Inglesa de las Indias Orientales; y La
riqueza de Inglaterra por el comercio exterior, en el que destaca de manera
positiva la importancia que el comercio exterior tiene para la economía de la
nación, en franca alusión a la teoría de la balanza comercial: "La forma normal
de aumentar nuestros bienes y riquezas es por medio del comercio exterior, en
el que debemos siempre observar la siguiente regla: el valor de lo que
vendemos a los extranjeros anualmente debe ser siempre mayor a nuestro
consumo de sus pro- ductos." Y continúa haciendo una serie de
recomendaciones, todas ellas relacionadas con el comercio exterior y la
balanza comercial: El mismo propósito se consigue reduciendo el consumo de
artículos extranjeros. Menologio la legislación suntuaria de los demás países y
las leyes que ordenan el uso de manufacturas nacionales.

Una vida frugal no sólo reducirá las importaciones, sino que dejará más
artículos disponibles para la exportación. Las exportaciones pueden provenir
igualmente de las riquezas "naturales" o de las "artificiales".

Las primeras son principalmente productos minerales o del suelo, mientras que
las últimas son los productos manufacturados, o el comercio de importación
exportación.

Inglaterra debe sacar el máximo partido de ambas, pero debe cultivar


especialmente las últimas.

El cultivo de la riqueza artificial tiene también otras ventajas. La riqueza natural,


aunque es la más noble y provechosa por estar siempre a punto y ser segura,
hace a la gente descuidada, orgullosa y entregada al despilfarro; la riqueza
artificial, por el contrario, pro- mueve la vigilancia, la literatura, las artes y la
política. La riqueza artificial proporciona oportunidades para una mayor
diversidad de empleos.
La promoción de las exportaciones requiere que se preste atención adecuada
a los precios de los artículos. Una política de precios atinada reflejará el tipo de
mercado en el que tiene lugar la venta así como la elasticidad de la demanda
por los productos de exportación. Los artículos que sean necesarios al
comprador extranjero, por serle a este imposible conseguirlos por otro medio,
deberán venderse caros, en tanto que su alto precio no sea causa de una
disminución cuantitativa de la venta, debemos procurar venderlos tan barato
como sea posible para no perder su exportación. Una reducción en precios
puede reducir las ganancias particulares pero puede ser de beneficio para el
público si con ello se consigue un aumento en los ingresos totales.

Las mercancías, a pesar de su importancia, no son los únicos bienes que


pueden intercambiarse en el comercio exterior. Los exportadores europeos
deben buscar la exportación de servicios como complemento o sustituto de la
exportación de mercancías.

Las partidas invisibles

La política comercial debe estar concebida en tales términos que las


manufacturas realizadas a partir de materiales extranjeros estu- vieran exentas
de los impuestos sobre la exportación. Esta medida conduciría a un incremento
en las exportaciones y crearía empleos para los pobres. En general, los
impuestos a la exportación no deben ser demasiado elevados, ni ser
responsables de un incremento impor- tante en los precios que desanime la
venta de artículos exporta- dos. Los derechos de importación de los artículos
destinados a su reexportación deben ser bajos, mientras que se debe poner
una carga mayor sobre las importaciones para uso doméstico. Todas estas
medidas

Balanzas generales y particulares


El comercio con las Indias Orientales, con su balanza pasiva, constituye una
aparente contradicción de la teoría de la balanza comercial, que exige que la
exportación de mercancías exceda a su importación. Para demostrar que esa
contradicción es más aparente que real Mun hace una distinción entre las
balanzas comerciales particular y general; la primera representa las relaciones
comerciales con un país determinado y la segunda el comercio con el resto del
mundo. La que importa es la balanza general.

En cambio, en los escritos de William Petty, no se encuentra el entusiasmo por


la balanza comercial favorable, tan característica de sus contemporáneos. En
su opinión el examen de la doctrina de la balanza comercial no podía dar sino
resultados negativos. En su Tratado sobre las tasas y las contribuciones señala:
"Irlanda, aunque exporta más de lo que importa, se empobrece cada día más
como paradoja, porque los terratenientes ausentes le quitan el superávit
comercial, sin darle nada a cambio." (Sir Josiah Child, da por sentada la teoría
de la balanza comercial, pero admite la enorme dificultad operacional para el
cálculo exacto de las importaciones y las exportaciones.

Cambio exterior y tasa de cambio

Milles crítica a las compañías reguladas tanto como a los banqueros. El objeto
de su denuncia más violenta fueron las transacciones de cambio exterior. "El
intercambio de mercancías -afirmó-, es tal laberinto de errores y prácticas
privadas, que aunque los reyes llevan la corona y parecen reinar en forma
absoluta, cuando los banqueros particulares, las sociedades particulares de
mercaderes, y las personas ambiciosas, que sólo buscan su propia ganancia,
hacen que ellos suspendan sus consejos, controlando sus sistemas de
gobierno y convierten a los reyes en súbditos y a los vasallos en reyes."

Los prejuicios de Milles contra las transacciones de cambio exterior fueron


compartidos por Malynes, quien tenía la tendencia a generalizar a partir de su
propio infortunio y echaba la culpa de sus desgracias a las maquinaciones de
los banqueros. Se mostraba profundamente sospechoso respecto de la usura.
Concentró su ira contra las transacciones de cambio exterior, las que le
parecían servir de tapadera para una especie de usura viciosa. Su queja de que
el dinero, por naturaleza una unidad de medida, se ha vuelto un artículo de
comercio y su insistencia de que los cambios debían ser negociados a la par
recordaban las nociones medievales sobre el dinero y el justo precio. Su ideal
era un universo económico ordenado, estático, y bien regulado, en que el deseo
de lucro estuviera siempre limitado por normas gubernamentales. Cuando las
exportaciones inglesas queden por debajo de las importaciones, Inglaterra
deberá al exterior más de lo que en el exterior deban a su vez a Inglaterra.

La demanda de moneda extranjera excederá a la oferta, la moneda inglesa


bajará y la moneda extranjera se elevará hasta provocar la salida de numerario.
Éste estaría considerablemente por encima de la paridad en mayor medida de
lo que ocurre en los tiempos actuales, ya que entonces había que tener en
cuenta el recargo por la amonedación o acuñación de moneda. Una vez que la
tasa de cambio exterior haya provocado la salida de numerario, un comerciante
que tuviera que hacer un pago en el extranjero encontraría ventajoso enviar
monedas o metal en vez de comprar moneda extranjera. Malynes se dio
perfecta cuenta de todo esto, pero cegado por sus creencias en las
manipulaciones de los banqueros, cerró los ojos al hecho de que las
fluctuaciones de la tasa de cambio que daban lugar a exportaciones de dinero
en metálico, reflejaban operaciones comerciales. En su lugar atribuyó a los
banqueros el poder de manipular las tasas de cambio con la única finalidad de
aumentar sus propias ganancias y los denunció como responsables de la salida
de dinero en metálico hacia el exterior. Así, de acuerdo con Malynes, ni una
tasa de cambio baja ni una alta de la moneda inglesa traerán numerario al país.
Repetida- mente las fluctuaciones en la tasa de cambio son atribuidas a las
tretas de los banqueros más que al movimiento de exportaciones e
importaciones. El remedio que propone Malynes es la eliminación de las
fluctuaciones en las tasas de cambio, estabilizando las tasas en la paridad que
marca el valor intrínseco de cada moneda y uniendo esto a un amplio sistema
de control de cambios.

Los puntos de vista de Malynes acerca del cambio fueron enfrentados por
teóricos de la balanza comercial, tales como Misselden y Mun, los que
descartaron la influencia de los banqueros y creían que el flujo de efectivo hacia
el exterior no era consecuencia de un bajo cambio inglés sino de una balanza
comercial desfavorable.

En la primera de sus obras citadas, Mun afirma que las verdaderas causas de
la presente zozobra económica son la devaluación de la moneda en el exterior
y la circulación allá de la moneda inglesa sobrevalorada. Contra esto no
encuentra Mun un remedio sencillo; la devaluación de la moneda inglesa
empobrecería las condiciones de vida de los particulares, y sería un asunto que
no tendría fin, pues estimularía nuevas devaluaciones en el exterior. Otros
factores incluyen el bajo tipo de cambio inglés que es causa de exportaciones
de metal. Porque en tarto los precios del cambio deban subir o bajar según haya
escasez o abundancia de dinero y este haya de ser traído y llevado, el cambio
será más bien un negocio para algunos hombres adinerados más que
adecuarse a las necesidades de cambio de los mercaderes.

A diferencia de Malynes, Mun describe los cambios como algo esencialmente


pasivo e indica que sus variaciones reflejan los movimientos del comercio y no
las manipulaciones de los banqueros.

Dinero circulante y tasa de interés

El principio de que el desarrollo del comercio exige el desarrollo de la masa


monetaria en circulación fue ampliamente reconocido por los autores
mercantilistas. Sin embargo, no basta que la moneda sea abundante, es
preciso, además, que sea buena, es decir, que tenga un poder adquisitivo
constante. En el siglo XVI, el inglés Thomas Gresham formuló la ley que hoy
lleva su nombre "el dinero malo hace desaparecer al bueno", misma que había
sido ya reconocida por Oresme en el siglo XIV. Será un criterio general entre
los mercantilistas, que la riqueza de una nación va unida a la posesión de una
gran cantidad de moneda; creen, igualmente, que si hay mucho dinero en
circulación, es más fácil y barato obtener créditos y, por tanto, realizar negocios
fructuosos. Aunque lo arriba expuesto parece ser un criterio general del
pensamiento mercantilista en materia de dinero, algunos de sus ideólogos
tienen conceptos particulares. Así, por ejemplo para Mun el dinero no debe
dejarse ocioso, sino que debe utilizarse como reserva de capital; debe ser
convertido en mercancías y nuevamente en dinero, lográndose así su
multiplicación. Si el dinero se conserva en casa, la exportación de mercancías
acabará por decaer, ya que los precios se elevarán y los extranjeros comprarán
menos.

Mun se aproxima a la teoría de la fluctuación de los precios internacionales. A


diferencia de otros mercantilistas, Mun no considera que la expansión
monetaria sea algo indispensable para el crecimiento de la economía del país,
ni está a favor de la elevación de precios. Se dice que el dinero es el alma del
comercio, sin darse cuenta de que aquél no podría subsistir sin este último.
Antes que el dinero existía el trueque; y en Italia las operaciones bancarias y
las transferencias de letras de cambio se encargaron de las necesidades
monetarias del país. El activo de cada persona no tiene por qué incluir sino una
pequeña cantidad de dinero en efectivo. El resto debe pasar continuamente de
mano en mano en los negocios, para beneficio de todos.

La teoría monetaria, cuyo germen encontramos en estas citas, especialmente


en lo que respecta a la adecuada oferta de dinero, los motivos para tener saldos
en efectivo, y la velocidad de circulación, no fue explicada por Mun, sino que
fue desarrollada por John Locke décadas más tarde. La devaluación de la
moneda, la alteración en la ley o el peso del metal obligarán a la moneda a
permanecer en el interior porque los extranjeros no la aceptarán a su valor
nominal. Además la devaluación no seria efectiva porque otros países
responderían tomando medidas idénticas. A diferencia de Malynes, Mun
describe los cambios como algo esencialmente pasivo e indica que sus
variaciones reflejan los movimientos del comercio y no las manipulaciones de
los banqueros.

Charles Davenant argumenta en contra de aquellos mercantilistas que


consideran que el oro y la plata son el único y más útil tesoro de una nación.
Ellos son en verdad, la medida del comercio, pero el manantial y la raíz de toda
riqueza se encuentra en los productos naturales y artificiales del país, es decir,
en lo que la tierra da o en lo que el trabajo y la industria producen. En el fondo,
el dinero no es más que una forma de contar a la que los hombres se han
acostumbrado en sus tratos.

Davenant calculaba las necesidades monetarias de la nación, o sea la renta


nacional. La renta nacional comprende todo lo que se produce en un país,
desde la tierra y sus productos, hasta el comercio exterior y los trabajos
interiores, tales como los oficios, industria, etcétera. El gasto nacional incluye lo
que se consume por necesidad en ropas y alimentos para el pueblo o lo que se
requiere para su defensa en tiempo de guerra o para su ornato en tiempo de
paz. El exceso de ingresos sobre gastos es una plusvalía que puede llamarse
riqueza nacional, es decir, la reserva de capital en el sentido moderno de la
palabra.

Población y salario

Los mercantilistas, en su mayoría, son poblacioncitas, es decir, favorables al


aumento de la población del país. Consideran que este aumento permite
obtener mano de obra barata fácilmente, favoreciendo, por consiguiente a la
industria y el comercio de exportación, con el consiguiente aumento de las
utilidades. A su vez, el crecimiento recíproco del comercio y de la industria
permite ofrecer un mayor número de empleos, lo cual favorece tanto a la
sociedad como al Estado. De lo que se trata, en última instancia es de obtener,
a como dé lugar, trabajo abundante y a bajo precio. Es necesario que la
población sea numerosa para que los salarios no suban. Bajos salarios y
pobreza de los trabajadores no sólo disminuyen los costos de producción y
aumentan los beneficios; son también el medio, según los mercantilistas, de
obligar al pueblo a trabajar más.

La mayor parte de los ideólogos del mercantilismo participaron en los diferentes


debates que se escenificaron en estos doscientos años, bien sea para atacar,
bien para defender, las instituciones de la época, de las cuales, a no dudarlo, la
más importante fue la Compañía Inglesa de las Indias Orientales.

SISTEMAS ECONOMICOS DE PRODUCCION


COMUNIDAD PRIMITIVA

Fase inicial del desarrollo de la sociedad que surgió con la aparición del hombre
hace alrededor de un millón de años y que dominó la tierra hasta el quinto o
cuarto milenio antes de nuestra era.

La comunidad primitiva Primera formación económico-social. La misma existió


durante muchas decenas de milenios en todos los pueblos en la etapa inicial de
su desarrollo. Constituyó la fase del desarrollo más larga de la sociedad
humana. Data de más de un millón de años.

Primeras formas de relaciones económicas entre los hombres

La época del régimen de la comunidad primitiva se divide en dos períodos


históricos: el período de la horda primitiva que comprende el mayor intervalo de
tiempo y se caracteriza por la separación del hombre del reino animal y donde
aparecen los primeros instrumentos de trabajo y las primeras formas de
relaciones de producción y el período del régimen gentilicio, cuando culmina el
proceso de separación del hombre del reino animal y comienza el desarrollo de
la sociedad humana.

Las fuerzas productivas

Las relaciones de producción del régimen de comunidad primitiva surgieron


teniendo como fundamento un bajo nivel de desarrollo de las fuerzas
productivas, unos instrumentos de producción primitivos, una división natural
del trabajo por el sexo y la edad. La base de las relaciones de producción
radicaba en la propiedad común de los medios de producción (instrumentos de
producción, tierra, así como también vivienda, herramientas,etc.).

En el marco de la propiedad común, existía también la propiedad personal de


las armas, los objetos de uso doméstico, de la vestimenta. En el régimen de
comunidad primitiva, la producción se llevaba a cabo colectivamente, por la
gens en su conjunto. Los alimentos se consumían asimismo en común, se
dividían en partes iguales. Sólo trabajando unidos, los hombres primitivos
podían obtener medios de vida y defenderse contra los ataques de las fieras o
de las comunidades vecinas.

Sobre la base de la primera gran división social del trabajo (división del trabajo),
es decir, de la separación de ganadería y agricultura, las fuerzas productivas
de la sociedad primitiva empiezan a desarrollarse con una rapidez
sensiblemente mayor. Al aumentar estas fuerzas, surge y se acrecienta el
intercambio, aparece la propiedad privada, la desigualdad económica entre los
distintos miembros de la comunidad. El surgimiento de la esclavitud intensificó
aún en mayor medida la desigualdad económica y contribuyó a descomponer
la comunidad primitiva. La producción colectiva y la distribución igualitaria de
los productos se convierten en trabas de las fuerzas productivas.

En el estadio superior del régimen de comunidad primitiva, ocurre la segunda


gran división social del trabajo: la artesanía se separa de la agricultura, lo cual
contribuye a que siga desmoronándose la sociedad primitiva. Como resultado
aparecen ricos y pobres, la explotación, las clases, surge el Estado. En
sustitución del régimen de comunidad primitiva, llega la sociedad de clases: el
régimen esclavista y el feudalismo.

Desarrollo de los instrumentos de trabajo

Fue un gran paso de avance en el desarrollo de la sociedad primitiva el


descubrimiento y la conquista del fuego y su obtención por procedimientos
artificiales. El dominio de la fuerza del fuego permitió al hombre primitivo
disponer de un medio de defensa más seguro contra los ataques de las fieras
y el frío, descender de los árboles y construir sus primeras viviendas, lo que
posibilitó poblar zonas con clima moderado. Aprovechando el fuego, el hombre
podo preparar comidas menos primitivas y más variadas, lo que contribuyó al
desarrollo del cerebro y la dieta. Es de tal importancia el descubrimiento yt la
conquista del fuego pues ofreció la posibilidad de elaborar instrumentos de
trabajo más perfectos.

En una agotadora lucha por la existencia, el hombre primitivo fue


perfeccionando lenta, pero constantemente sus instrumentos de trabajo. Se
mejoró la elaboración de las herramientas de piedra lo que contribuyó a crear
herramientas destinadas a determinadas operaciones laborales. Se desarrolló
la diferenciación de los instrumentos de trabajo lo que a su vez originó la
diferenciación de los tipos de actividad laboral.

Al ir perfeccionando más y más los instrumentos de trabajo se pudo pasar de la


recogida de alimentos, al cultivo de algunas plantas, al surgimiento y desarrollo
de la agricultura.

El invento del arco y la flecha constituyó un enorme paso de avance el


desarrollo de las fuerzas productivas. “El arco, la cuerda y la flecha –señaló
Engels- forman ya un instrumento muy complejo, cuya invención supone larga
experiencia acumulada y facultades mentales desarrolladas, así como el
conocimiento simultáneo de otro muchos inventos.”

Sobre la base del empleo del arco y la flecha, la caza se convirtió en una forma
de actividad laboral más productiva. Poco a poco el hombre comenzó a cazar y
domesticar animales. Con la domesticación de los animales empezó a
desarrollarse la ganadería. La domesticación de animales posibilitó pasar del
primitivo cultivo de la tierra a base de la azada a la aradura mediante el empleo
de la fuerza animal.

El desarrollo de las fuerzas productivas condujo a la construcción de chozas,


cabañas, viviendas.

Surgió la producción de prendas de vestir, de artículos con fines domésticos y


artículos de alfarería. Aparecieron los primeros medios de locomoción: castra,
trineos y botes. También aparece la rueda. Lentamente pero definitivamente, la
economía del hombre primitivo se fue haciendo más variada; los tipos de
actividad laboral más diversos, y los instrumentos de trabajo más
especializados y perfectos.
La horda primitiva

La primera forma de las relaciones sociales fue la horda humana primitiva. Esta
forma fue la transición del estado zoológico al social y correspondió al nivel más
bajo de desarrollo de las fuerzas productivas.
Los antepasados del hombre vivían en manadas, y los primeros hombres en
hordas. Pero la horda primitiva se distinguía cualitativamente de las manadas
por el hecho de que la base de los vínculos entre los hombres primitivos es la
actividad laboral conjunta. El trabajo cohesionaba a los miembros de la
comunidad en colectividad, lo que los diferenciaba definitivamente del mundo
animal. En esta fase, las relaciones sociales se formaban bajo la influencia de
las relaciones entre los sexos y los lazos parentescos.

La influencia de los lazos parentescos en el carácter de los vínculos y relaciones


entre los hombres mantiene cierta importancia a lo largo de todo el período de
la comunidad primitiva. La horda primitiva era una colectividad homogénea en
lo que no había división en grupos sociales; las relaciones entre los sexos no
estaban ordenadas; el trabajo se efectuaba en forma de cooperación primitiva.
Los instrumentos de trabajo se elaboraban de cuando en cuando a medida que
eran necesarios. Al desarrollarse el proceso de diferenciación y especialización
de los instrumentos de trabajo, en la horda primitiva fue surgiendo gradualmente
la división del trabajo.
Entre los diversos grupos humanos no existía enlace permanente y estaban
aislados entre sí, vivían a grandes distancias, sin entrar en contacto. Esta forma
de vínculos sociales comenzó a desaparecer en la medida que se fueron
desarrollando las fuerzas productivas y aumentando la producción. Se inició así
el paso de la horda primitiva a una nueva forma de relaciones sociales: el
régimen gentilicio.

El régimen gentilicio

En el régimen gentilicio, la célula fundamental de la sociedad era la gens, que


unía a un grupo de personas ligadas por lazos parentescos. El régimen
gentilicio introdujo notables limitaciones en las relaciones sociales. Los
miembros de una gens dada no podía contraer matrimonio entre sí,
considerándose hermanos y hermanas. Las relaciones nupciales sólo podían
establecerse entre personas de distintas gens. Sin embargo, el varón de una
misma gens podía enlazarse con cualquier mujer de otra gens, y la mujer de
una gens dada, con el hombre que fuera de otra gens. En estas condiciones
era difícil establecer la paternidad, y la cuenta de la descendencia se llevaba
sólo por la línea materna.

El matriarcado y el patriarcado

Matriarcado (gens materna)

Etapa histórica en el desarrollo del régimen de la comuna primitiva,


caracterizada por el papel preponderante de la mujer en la economía.

El matriarcado tiene por base el modo de producción de la comuna primitiva


que ha adquirido desarrollo en esa época. Las principales causas del
matriarcado son las siguientes: en el matrimonio por grupos que existió en todos
los pueblos durante los estadios inferiores de su evolución, se conocía la madre
de los niños, pero no el padre. Como el origen no podía ser establecido sino del
lado materno, sólo se admitía el parentesco materno. Cuando la mujer se
casaba, permanecía en la gens, mientras que el hombre pasaba a formar parte
de la gens de su mujer.

La causa esencial del matriarcado residía en que la mujer tenía en sus manos
toda la economía de la gens. La caza no procuraba medios de existencia
seguros. El trabajo era más productivo en la agricultura, y al principio eran sobre
todo las mujeres quienes se ocupaban de ella. El papel de la mujer aumenta
con la vida sedentaria, cuando aparece la economía doméstica propiamente
dicha. Los cuidados requeridos por el alojamiento, el mantenimiento del hogar
doméstico, el trabajo en el huerto, el aprovisionamiento, la preparación de los
alimentos,etc., tales eran las funciones de la mujer. Bajo el régimen de la
comuna primitiva, la economía doméstica desempeñaba un papel importante.
Ésta tenía un carácter social, y la mujer era la superintendente de la casa.

Con la aparición y el desarrollo de la cría del ganado, el papel de la mujer


disminuye, el hombre se convierte en la fuerza principal de producción en la
sociedad. Todas las riquezas, los instrumentos de producción, el ganado y,
desde luego, los esclavos, se transforman poco a poco en propiedad del
hombre. La mujer es relegada a un segundo plano pues la economía doméstica
no es más que un anexo de la producción esencial. La mujer, libre hasta
entonces, se convierte en la servidora de su marido.

Patriarcado

Anteriormente, cuando la economía doméstica tenía un carácter colectivo, la


mujer desempeñaba el papel principal en la sociedad; luego, con el desarrollo
de la ganadería y la aparición de los oficios, con la transformación de la
economía doméstica en un anexo de la producción fundamental, la mujer es
relegada a segundo plano. Bajo el matriarcado, el parentesco era determinado
por línea femenina: el hombre carecía de poder sobre su mujer y sobre sus
hijos. Luego, después de la desaparición del matriarcado, el marido es
reconocido como padre de sus hijos; su mujer y sus hijos le pertenecen en virtud
del derecho de propiedad. La abolición del derecho materno, trastornó el orden
de sucesión. Los hijos se convierten en herederos de su padre. De ahí la
concentración de riquezas en ciertas familias, lo que acentúa aún más la
desigualdad económica y descompone la comunidad gentilicia, a la cual se
opondrá en adelante, la gran familia patriarcal.

La familia patriarcal es, ante todo, una unidad económica. Es una comunidad
familiar doméstica, propietaria colectiva de todos los medios de producción. Se
compone de varias generaciones de parientes en línea directa, sometidos al
poder del padre, o de un anciano de la comunidad. La familia patriarcal es
propia de todos los pueblos en la época de la decadencia de la comuna
primitiva, y lleva diversas denominaciones: “Hausgenossenschaft”, entre los
alemanes; “zadruga”, entre los servios y los búlgaros; “vervj”, “pechishché”,
entre los rusos. A consecuencia de nuevos progresos de las fuerzas
productivas, de la propiedad privada y del intercambio, la familia patriarcal se
disloca en pequeñas familias monogámicas separadas. Se debe al sabio ruso
Maksim Kovalevsky, el mérito de haber descubierto la familia patriarcal como
forma de transición general que engendró la comuna agrícola.

Ley económica fundamental de la comunidad primitiva

El hombre primitivo libraba una lucha rigurosa por la existencia. El bajo nivel de
las fuerzas productivas determinaba el modo de vida y una elevada mortalidad.
La tarea esencial del hombre primitivo consistía en lograr las condiciones
materiales de su existencia. Pero la existencia de un miembro estaba ligada a
la existencia de todos los demás. Por ello, la condición principal de la existencia
del individuo era la existencia de la comunidad como colectividad única, capaz
de luchar con éxito contra la naturaleza. Y el fin de la producción no era
simplemente satisfacer las pequeñas necesidades de los miembros de la
comunidad, sino asegurar las condiciones de existencia de la comunidad en su
conjunto, y solo a base de eso conseguir la reproducción del individuo como ser
viviente.

Los medios para conseguir esos fines eran el trabajo colectivo, la propiedad
comunal y la distribución nivelada. La necesidad de lograr conjuntamente los
medios de existencia que aseguraran la conservación de la actividad vital de la
comunidad y de cada uno de sus miembros constituía la ley económica
fundamental de la comunidad primitiva.

El modo de producción primitiva o comunismo primitivo es una de las formas en


las que puede presentarse la forma de organizar la producción de bienes y
servicios en una economía. Esta teoría fue desarrollada por Karl Marx, el cual
clasificó la historia en distintos modos de producción en orden cronológico.

El comunismo primitivo

Es una de las distintas formas en las que se organiza la producción de bienes


y servicios en una economía. Pero, ¿en qué consiste el comunismo primitivo?

De acuerdo con Marx, la historia cuenta con una cronología por la que han
pasado una serie de distintos modos de producción. Todos ellos, basados en
las fuerzas productivas y las relaciones de producción. El comunismo primitivo
hace referencia al modo de producción de la primera de las distintas etapas de
organización política y social de la humanidad.

El comunismo primitivo, definido por Karl Marx y Friedrich Engels, aparece con
las primeras sociedades primitivas alrededor del año 7.000 A.C.

Entre las características que definen al comunismo primitivo podemos destacar


las siguientes:

• Se basa en las primeras civilizaciones de la historia. Es decir, las


sociedades primitivas humanas.
• Su forma de organizarse es en tribus.
• Lo conforman distintos grupos, los cuales dividen el trabajo dedicado
a la obtención de sustento.
• Se basaba en economías de subsistencia.
• Los integrantes intercambiaban bienes en base al cooperativismo.
• No existía la propiedad como tal.

Estas características, aquí recogidas, resumen los principios que Marx utilizó
para definir el modo de producción del comunismo primitivo.

Entre las ventajas y desventajas del comunismo primitivo cabría destacar las
siguientes:

• Ventajas
• No existían jerarquías políticas.
• No se producían situaciones de explotación laboral.
• Se producía una continua cooperación entre los humanos.
• Una sociedad limpia y responsable con el medio ambiente.

Desventajas

• Economía de subsistencia.
• Sistema centrado en la supervivencia.
• Muy escaso nivel de desarrollo.
• Niveles de vida muy bajos y simples.
• No existía desarrollo social.

Así, podríamos concluir con que es un sistema que, como su nombre indica,
hace referencia a una etapa muy poco desarrollada de la historia.
BIBLIOGRAFIA

Hernández Arizti, R. (2007). Historia del pensamiento económico.. Editorial


Miguel Ángel Porrúa. https://elibro.net/es/ereader/cide/74926?page=88

Principio de economía, comunidad primitiva (Presentación PowerPoint).


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