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Ensayo – Indicadores de Gestión

Leidy Lorena Suarez Peña

Grupo 51123

Administración de Empresas

Corporación Unificada Nacional de Educación Superior (CUN)

2021
Medir los procesos es una de las mejores soluciones y prácticas para tener un control de

lo que pasa en las empresas a todo nivel y de mejorar lo que no está alineado con los objetivos,

los datos que arrojan una medición es información valiosa para poder tomar decisiones

adecuadas y encaminar las organizaciones hacia los objetivos y metas. Los indicadores de

gestión son de gran importancia en las organizaciones, y se han hecho imprescindibles en todos

los niveles de la actividad de una empresa. Además, los resultados suelen ir de la mano con el

éxito del negocio y en los resultados de la misión institucional.

Los indicadores cumplen un rol clave en la gestión de las empresas y ayuda a precisar

propósitos y objetivos, facilitando la evaluación del desempeño. Esto permite que se tomen

decisiones con base de datos y análisis utilizando el alineamiento de las personas. Los

indicadores permiten medir y analizar el cumplimiento de todos los propósitos de la

organización.

Un indicador no tendría sentido si no representa algo que sea importante para la empresa,

sólo se mide lo que es importante. Por este motivo, se pueden desarrollar indicadores a partir de

todos y cada uno de los componentes y procesos de las compañías, ya que cada uno de uno de

ellos facilita los propósitos y los objetivos de la organización. Es importante destacar que para

identificar los indicadores se deben detallas de forma muy específica, se trata de objetivos debe

ser representativos. Esto quiere decir que es necesario conocer de forma muy precisa qué es lo

que la empresa tiene que conseguir en cada caso cuando aborda determinado objetivo. Es este

sentido, podemos decir que la calidad de los indicadores depende de la calidad de los objetivos o

los propósitos de la organización que se encuentra detrás de ellos. Por este motivo es necesario

que el objetivo se encuentre acompañado por un indicador. Un buen objetivo viene precedido por
un buen indicador, por lo que un buen objetivo siempre facilita la identificación de un buen

indicador.

Por estas consideraciones, lo usual es que la definición de indicador no se explica como

algo principal, sino que frecuentemente se cree que existe una gran dificultad para imaginar

indicadores, sino más bien, en la escala de claridad de los propósitos en la que se representan. La

dificultad en la identificación de los indicadores se produce por una escasa compresión de todos

los resultados y los procesos organizaciones que deseamos medir. En este caso, los indicadores a

lo que hacemos referencia sólo se reflejan en la incompleta compresión.

En resumen, podemos decir que los indicadores de baja calidad tienen que ver con la

poca claridad que existe en lo que se desea alcanzar, siendo a lo que se encuentra asociado.

Un pobre entendimiento de cómo se generan resultados organizaciones en el negocio,

ofrece debilidades en la compresión de los temas de gestión y conocimiento de las mejores

prácticas y la falta del dominio metodológico sobre cómo formular un indicador.

En el siguiente artículo hablaremos con mayor nivel de detalle, sin embargo, se puede

adelantar algo con la siguiente definición: “la definición de indicador debe comenzar siempre por

precisar el objetivo o propósito que está detrás del indicador, una vez que éste claro, el indicador

aparece de forma relativamente fácil».

Para realizar una medición de los procesos es importante es tener un objetivo, saber para

qué estamos midiendo y qué queremos lograr con la medición. Muchas organizaciones gastan

dinero en realizar procesos de medición de sus procesos pero al final no se realiza ningún

variación porque hay una resistencia al cambio tanto en la gerencia, mandos medios y

trabajadores. Para medir es importante tener una cultura institucional encaminada al cambio.
En una empresa se puede realizar la medición de todo o casi todo. Normalmente, la

medición está centrada en la productividad, la atención al cliente o las finanzas. Sin embargo,

hay especialistas que señalan que la medición de los procesos de una empresa se pueden dividir

en dos:

Procesos relacionados al cliente: En este ítem están incluidos la fabricación de productos

y todas sus etapas, los servicios que se brindan al cliente, ventas, atención, distribución,

marketing y publicidad, entre otros.

Procesos de administración: son todos los procesos que hacen posible el funcionamiento

de la empresa. Aquí se puede medir todas las áreas administrativas de la empresa como pueden

ser recursos humanos, almacenes, la contabilidad, entre otros.

Es importante crear una oficina de gestión de desempeño dentro de la empresa. Si no hay

presupuesto para ello, en todo caso se puede contratar un consultor financiero o experto en la

gestión de negocios que tenga la capacidad de poder hacer la medición de todas las áreas y

aspectos del negocio.

Es muy importante que el experto o la oficina encargada de realizar las mediciones pueda

no solamente entregarnos números y datos. Ellos tienen la obligación de asesorar a la empresa y

traducir los datos que están entregando. Con la información que se obtenga de la medición se

debe construir una serie de indicadores que servirán como base para poder tener información

histórica de cómo ha ido evolucionando o involucionando la productividad en las distintas áreas

de la empresa.
Con esta información se deben tomar las decisiones necesarias para realizar un cambio

dentro de la empresa y desarrollar planes o estrategias para lograr los objetivos de la

organización

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