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dictos del siglo XXI

En pasadas entradas hemos hablado de adicción a la cocaína. Podemos ampliar a la evolución histórica
de las adicciones.

Los adictos del siglo XXI no son como los del siglo pasado, ahora pasan desapercibidos entre nosotros,
sin embargo los estereotipos siguen funcionando y a veces vemos drogadictos donde no los hay. Los
adictos han cambiado, sus patrones de consumo y los tratamientos también. este interesante vídeo nos
muestra con gran creatividad lo que estamos comentando.

1.        NUEVAS ADICCIONES DEL SIGLO XXI


Internet: redes sociales. Twitter, Facebook… permiten con gran facilidad entrar en contacto con otras
personas.

En las redes sociales solo proyectamos lo positivo.

Producen una sensación de gratificación muy rápida.

El teléfono, el ordenador… son todos ellos dispositivos que nos obedecen.

Conllevan un reconocimiento personal. Si uno ha tenido un mal día y está de bajón, se conecta a las
redes y compensa esa frustración con la sensación de popularidad en las redes.

Al usuario le hace sentirse activo aunque, en realidad, no esté haciendo nada útil de verdad.

Nuevas Tecnologías. Los jóvenes y adolescentes de hoy son niños nacidos en la era de las nuevas
tecnologías y sus padres no, y se ven sorprendidos de que ahora se reúnan por Facebook o por cualquier
otra red social. El móvil no solo es un teléfono, ahora es un pequeño ordenador que ofrece múltiples
opciones de contacto con personas, juegos, agendas, información, prensa, accesos a

Ludopatía. Es un viejo problema que ahora se presenta con nuevas formas que le dan mayor gravedad.
El juego on-line y la proliferación de casas de apuestas y juego, además del mantenimiento de las ya
tradicionales máquinas tragaperras, bingos, casinos, etc. Afecta al menos a un 1% de la población adulta
más los adolescentes y jóvenes que ahora se suman con las apuestas deportivas y al juego por internet.

Adicción a las Compras. Compulsión por comprar de forma irrefrenable gastando más de lo que tienen.
Poca adhesión a los tratamientos. Personas que han tenido  madres que los han cuidado como si fuera un
muñeco pero sin atender su emocionalidad.

Adicción al Sexo. En la mayoría de los casos se confunde esta adicción con una compulsión por la
conquista que va casi siempre acompañada por una dificultad para las relaciones íntimas.

Lo adictos al sexo pueden tener problemas laborales, familiares, económicos y sociales. Su deseo sexual
les obliga a acudir frecuentemente a prostíbulos comprar artículos pornográficos, buscar páginas
sexuales en Internet, realizar con frecuencia llamadas a líneas eróticas, buscar el contacto sexual
mediante citas a ciegas, entregarse al sexo con desconocidos, etc., y hacen que su vida gire en torno al
sexo.
Adicción al Trabajo.

Personas cuyas vidas giran en torno al mundo profesional.

Han sido niños que solo obtenían amor si ofrecían logros o expresión de sus capacidades, educación
desde la excelencia y la competitividad, los afectos quedan relegados por estas demostraciones de amor.
O niños de ambientes humildes que vieron como sus padres eran humillados por esto.

Las adicciones psicológicas más


frecuentes
 Artículo actualizado el 17 febrero, 2020
 por Amparo Calandín
Índice de contenidos [Mostrar]
¿Qué son las adicciones psicológicas o adicciones sin drogas?

En los últimos tiempos nos hemos encontrado con formas de adicción diferentes a las

habituales y de las que carecemos de la suficiente investigación científica y bibliográfica.

Estas formas de adicción son las que conocemos con el nombre de adicciones no tóxicas y

que llevan consigo un importante número de adeptos en nuestra sociedad actual.

Las adicciones psicológicas o no químicas son aquellas en las que se produce un uso

inadecuado de una conducta «normal» o incluso saludable y son cada vez más frecuentes.

En algunos casos funcionan como conductas sobreaprendidas que llevan a consecuencias

negativas y cuya adquisición se debe a la repetición de comportamientos que en un

principio suponían placer como ocurre con el juego, el sexo y las compras.
En otros casos las adicciones no químicas o sin drogas surgen como estrategias de

afrontamiento hacia condiciones personales de malestar, como por ejemplo jugar a las

máquinas tragaperras con el objetivo de hacerle frente a la sensación de soledad y tristeza.

En el contexto de las adicciones psicológicas se habla de tolerancia, cuando la persona

necesita aumentar su conducta en intensidad y frecuencia, con el fin de conseguir

el grado de excitación que alcanzaba al principio. Este es el caso del adicto a las

compras, que debe comprar cada vez más productos con el fin de sentirse en un estado de

equilibrio, aunque estos no se necesiten o no tengan una utilidad. En estas adicciones

también pueden aparecer indicadores clínicos característicos del síndrome de abstinencia,

entendidos, como un conjunto de síntomas que aparecen cuando la persona deja de realizar

esa conducta.

Realmente, cualquier actividad que provoca satisfacción en nuestra vida diaria, podría

convertirse en conducta adictiva, y son un reflejo de una sociedad sostenida por principios

en los que el triunfo se identifica con la obtención de bienes materiales, con el tener, y no

con la realización profunda de la persona.

Tipos de adicciones psicológicas

 Adicción a internet, móvil, videojuegos…

 Adicción a las compras físicas u on line.

 Adicción a la comida o a ciertos alimentos.

 Adicción al sexo.

 Adicción al trabajo.
 Adicción al juego o ludopatía.

 Adicción al deporte.

A continuación vamos a comentar más detalladamente las más habituales:

Adicción a las compras

La adicción a las compras tanto físicas como online, sigue un claro patrón adictivo, dado

que la satisfacción que produce es momentánea, generando sentimientos negativos por el

dinero gastado, (culpa, vergüenza…), que desaparecen volviendo a comprar.

Los compradores compulsivos se caracterizan por:

 Sufren impulsos incontrolables, y recurrentes, por comprar, la mayoría de las veces objetos

inútiles e innecesarios.

 Repiten la conducta de compra, sin tener en cuenta las consecuencias negativas que esta

conlleva.

 Necesidad urgente e irreprimible de comprar.


 Fracasan en muchos intentos de controlar el gasto.

 Graves pérdidas económicas.

 Graves problemas familiares, sociales y laborales.

La adicción a las compras esta sufriendo un aumento significativo con las compras

online, ya que, esto facilita las compras rápidas e impulsivas, ya que, ahora las compras

pueden realizarse en cualquier momento del día, tenemos 24 horas para comprar y en

cualquier  día de la semana. Todas estas comodidades y facilidades favorecen la adicción a

las compras, puesto que, ahora el comprador compulsivo podrá satisfacer su necesidad en

cualquier momento en el que aparezca la necesidad.

Otro factor que empeora la adicción a las compras online son las facilidades de pago,

ahora la mayoría de páginas te permiten guardar tu tarjeta y, en un sólo click, tienes ya

pedido eso que tanto parece que necesitas y, al día siguiente o un par de días después, lo

tendrás en tu casa comodamente con sólo haber apretado un botón y, además, con la

sensación de no haber gastado dinero, porque al pagar con tarjetas y no haber manipulado

dinero da más sensación de no haber gastado y aumenta la posibilidad de descontrol

económico.

Y, como último punto, hablar de otro factor que aumenta las adicciones a las compras, tanto

físicas cómo online, que es la publicidad. Estamos inmersos en un mar de ofertas,

promociones y publicidad por todas partes pero, a nivel online, en todo momento, con

nuestras búsquedas, nos ponen bombardeos de publicaciones o anuncios de aquello que

deseamos, lo que hace que frenar el impulso de comprar sea mucho más complejo y que

haya más probabilidades de que aparezca una adicción y de que si ya la presenta la

persona sea más difícil escapar de ella.


Adicción al sexo

El sexo es un elemento esencial para el bienestar de cada uno de nosotros y de la pareja

pero, como todo, en exceso puede convertirse en un problema generando la adicción al

sexo.

Como en cualquier otra adicción, en la adicción al sexo, para la persona que la padece, su

vida empieza a girar en torno al sexo, aumentando su frecuencia,  tanto a nivel de fantasías,

como de la utilización compulsiva de diversos medios (Por ejemplo: Internet, prostitutas…)


o el comportamiento sexual abierto, no discriminado y compulsivo con conductas

sexuales anónimas o no, pero múltiples y breves.

En resumen, para la persona adicta al sexo, tener sexo se convierte en una necesidad

imperiosa que si no se consigue cuando y donde aparece el impulso, se desencadena una

ansiedad, enfado y síndrome de abstinencia intolerante en la persona y que le llevará a

hacer cualquier cosa para conseguirlo.

¿Qué síntomas aparecen en la adicción al sexo?

 Pensamientos frecuentes y ruumiantes sobre el sexo a lo largo del día que pueden ocupar

más del 64% de los pensamientos diarios.

 “Necesidad urgente» en realizar la conducta.

 Conductas sexuales explícitas. La mayoría de los adictos al sexo necesitan al menos una

conducta sexual diaria con pareja o con ellos mismos como mínimo.

 Tolerancia progresiva: Necesidad de incrementar la intensidad o frecuencia de la conducta

sexual, disminuyendo progresivamente el tiempo entre un  encuentro sexual y el siguiente.

 Negación del problema y autoengaño.

Adicción a la comida

La adicción a la comida sería la necesidad imperiosa de buscar y consumir

compulsivamente determinados alimentos, sin tener en cuenta las consecuencias nocivas

que presenta, como las implicaciones en la salud que conllevan los alimentos con alto

contenido de azúcares y/o de grasas.


Estos comportamientos adictivos suelen aparecer en diferentes trastornos alimenticios

como el trastorno por atracón, la bulimia nerviosa o la obesidad, y aunque se relaciona

con la obesidad, las personas con peso normal también pueden padecer adicción a la

comida o a determinados alimentos.

La adicción a la comida aún no ha sido considerada un trastorno independiente, si que está

estudiándose puesto que la comida como el resto de adicciones estimula el sistema de

refuerzo cerebral y genera dopamina pero no en cantidades tan grandes como para crear

una adicción. Lo que está más extendido y lleva a esta conducta impulsiva es la ansiedad

por comer. Muchas personas utilizan la comida para gestionar algunos estados de

ánimo como la ansiedad, la tristeza o la desazón. Al no sentirse bien utilizan la comida

hipercalórica para sentir alivio y sienten una necesidad imperiosa por comer.

Adicción al juego

La ludopatía crea tolerancia, dependencia y, finalmente adicción, lo que provoca

una alteración progresiva de la conducta que desemboca en una significativa falta de

control del impulso de jugar, ignorando cualquier consecuencia negativa, obsesionándose

con el juego y dándole prioridad frente a su trabajo, familia, salud, dinero… A veces, el

jugador patológico se ve obligado a cometer hechos delictivos, que incluso van en contra

de su naturaleza, para conseguir dinero u otros medios que le permitan mantener su

conducta adictiva de juego.

El juego patológico se clasifica en el DSM-IV-R (Manual de los criterios diagnósticos)

como un trastorno del control de los impulsos, que también incluyen la

cleptomanía, piromanía y tricotilomanía.
La ludopatía se caracteriza fundamentalmente porque existe una dificultad para controlar

los impulsos de jugar, y que en cierto sentido tiende a manifestarse en practicar, de manera

compulsiva, uno o más juegos de azar. Afecta a la vida diaria de la persona que padece esta

enfermedad adictiva, de tal forma que la familia, la alimentación o incluso el sexo pasa a

ser algo totalmente secundario. Por todo ello, no se debe de confundir la ludopatía con un

vicio, ya que en estos casos nos encontramos ante una grave enfermedad crónica, una

adicción.

Consecuencias que padecen las personas con esta


adicción:

 Sufren impulsos incontrolables.

 Repiten la conducta de juego, sin tener en cuenta las consecuencias negativas que esta

conlleva.

 Graves pérdidas económicas.

 Graves problemas familiares, sociales y laborales.

La adicción a las apuestas online

La adicción a las apuestas online, entraría dentro de la ludopatía que como sabemos es un

trastorno en el que la persona se ve obligada, por una urgencia psicológicamente

incontrolable, a jugar, de forma persistente y progresiva, afectando de forma negativa a su

vida personal, familiar, laboral, etc.

El juego online se ha duplicado en un año y, de su mano, los casos que encontramos de

dependencia. El aumento progresivo y constante de máquinas de apuestas y de juegos

online se empieza a percibir de forma notable en los centros de tratamiento de


adicciones. El número de personas que pide ayuda es cada vez mayor y ha crecido en

los últimos meses, a la par de como han aumentado las opciones que existen de jugar tanto

en los bares como por Internet desde el móvil, casa, etc.

Los últimos datos recogidos dejan ver que aunque el sector preferido sigue siendo el de las

apuestas deportivas, la comodidad de acceder desde casa a los juegos de casino online

como las máquinas tragaperras, el póker, la ruleta y el blackjack ha hecho que empiecen a

ocupar un lugar importante entre los usuarios.

Cual es el perfil del adicto a las apuestas o juegos online


El perfil de los adictos que buscan ayuda es varon y menor de 35 años. En la mayoría de

los casos cuentan con un sueldo estable, aunque se vuelven económicamente dependientes

debido a las deudas que ocasionan. Casi siempre el problema lo descubren las familias

porque se han gastado en diversas ocasiones todo el dinero del hogar.

Pero, al igual que no todos los que beben son alcohólicos, no todos los que juegan van a ser

ludópatas. En ese sentido, la ludopatía llega cuando existe dependencia y abuso, es decir,

cuándo se produce una pérdida del control de los impulsos y mientras esto no se produce,

el juego puede ser adecuado.

Como influye la adrenalina en las apuestas deportivas online


En las apuestas, la ludopatía aumenta porque, el problema es doble. Por un lado, por la

accesibilidad que se tiene, es muy sencillo porque en cualquier bar puedes encontrar una

máquina. Por otro lado, la sociedad se ha transformado, han aparecido las nuevas

tecnologías y podemos jugar en cualquier sitio y a cualquier hora.

A todo ello esto hay que añadir que cuando se ha apostado los partidos se ven con un nivel

de adrenalina superior, que luego te pide el cuerpo. Además, actualmente existen muchas
más combinaciones posibles a la hora de poder ganar dinero. Antes con las quinielas,

ponías 1, X o 2 y esperabas. Ahora, se puede elegir quien gana, qué equipo marcará

primero, quién marcará los goles o cuál será el resultado en la primera parte de un partido.

Al haber más fracciones a las que apostar, la gente se pica mucho más.

¿Cómo detectar si una persona sufre adicción al juego y a las apuestas


online?
Tener a un amigo o un ser querido con un problema de adicción puede ser extremadamente

difícil. Aquí tienes algunas pautas que pueden ayudarte. Determina si tu amigo o ser

querido tiene un problema. Hay varias señales que pueden mostrarte si alguien puede

tener adicción a las apuestas.

Responde estas preguntas:

1. ¿Alguna vez ha pasado muchos días o semanas seguidos apostando o pensando en apostar?

2. ¿Aumenta sus apuestas o apuesta aún más para tratar de recuperar sus pérdidas?

3. ¿Está deprimido cuando no apuesta o intenta alejarse de su hábito de apostar?

4. ¿Apuesta como escape de su vida diaria o para estar triste, enfadado, etc?

5. ¿Alguna vez ha mentido sobre la frecuencia de sus apuesta o cuánto ha perdido?

6. ¿Ha vendido, empeñado o robado cosas para pagar apuestas?

Cómo puedo ayudar a alguien adicto al juego?

 Lee libros e investiga en Internet sobre esta adicción. Aprende todo lo que puedas para

ganar el máximo conocimiento, así podrás confrontar a la persona con su problema.


Investiga psicólogos, psiquiatras y centros de tratamiento que se especialicen en la adicción

a las apuestas. Obtén información sobre sus tratamientos y condiciones de acceso.

 Habla con tu amigo o pariente sobre su problema. No le juzgues o confrontes. Elabora la

lista de preguntas del paso 1 y escuchar sus respuestas para determinar si piensa que tiene

un problema.

 No abandones. Si tu amigo o pariente no admite que tiene un problema, no te rindas. Sigue

trabajando con él para que admita su adicción.Una vez que reconozca que tiene un

problema, dale los nombres de los centros y tratamientos para que puede asistir y buscar

información.¿Conoces a alguien con este problema? ¿No sabes como ayudarle?

La adicción a las nuevas tecnologías e internet

Se caracterizan por el uso compulsivo y descontrolado de la tecnología (Internet,

móviles, consola…). Generan todo tipo de problemas personales, familiares, financieros,

sociales y laborales.

Las consecuencias más frecuentes para las personas con este tipo de adicciones son:
 Nerviosismo y ansiedad.

 Aislamiento social.

 Irritabilidad.

 Agresividad.

 Insomnio.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) apunta que 1 de cada 4 personas sufre

trastornos de conducta vinculados con las nuevas tecnologías. En España, se calcula que

entre un 6 y un 9 por ciento de las personas que usan habitualmente Internet podría haber

desarrollado algún comportamiento adictivo.

En general, definimos una adicción como una actitud o conducta generada como

consecuencia de una dependencia. La adicción es el abuso habitual, independiente de la

voluntad, de una sustancia o actividad, con resultado de dependencia. 

Si quieres saber cómo identificar si tu hijo, amigo o tú mismo está enganchado a la red, el

móvil o a las nuevas tecnologías, te cuento como hacerlo y cómo prevenir esta adicción a

internet.

¿Qué problemas presenta? 


Una persona que presenta síntomas de adicción, antes de estar enganchado a internet, ha

podido sufrir alguno o varios de estos problemas o situaciones.

 Tiempos de conexión muy prolongados con fines recreativos a lo largo de cada

día. Permanecer alrededor de 3 o 4 horas al día conectado supone un aislamiento de la


realidad y un desinterés por otros temas, pudiendo llevar a trastornos de conducta, además

de al sedentarismo o a la obesidad.

 Descuidar otras áreas importantes de su vida como el trabajo, las relaciones personales,

el descanso, la alimentación…

 Problemas de personalidad: timidez excesiva, baja autoestima, rechazo de la imagen

corporal…

 Personas insatisfechas con su vida o con carencias afectivas, que intentan suplir

relacionándose en un mundo virtual.

 Tener problemas psiquiátricos previos como depresión, ansiedad social, hostilidad…

¿Cuáles son los síntomas de la adicción a internet?

1. Privarse de sueño para estar conectado.

2. Descuidar otras actividades importantes, como las relaciones familiares y sociales, el

estudio o la salud.

3. Recibir quejas de personas allegadas por el uso excesivo de internet.

4. Tener como pensamiento dominante a lo largo del día el conectarse y sentirse irritado

excesivamente cuando la conexión falla o es muy lenta.

5. Mentir sobre el tiempo real que se está conectado.

6. Intentar limitar el tiempo de uso de Internet sin conseguirlo.


7. Que conectarse a internet sea lo primero que uno hace por la mañana y lo último que

hace al acostarse por la noche.

8. Reducir el tiempo dedicado a tareas cotidianas como comer, dormir, estudiar o

relacionarse con la familia, para dedicarlo a estar más tiempo conectado.

9. Siente gran satisfacción y euforia cuando está frente al ordenador o la consola.

10. Piensa en internet o los videojuegos cuando está haciendo otras cosas.

11. En casos extremos, alteraciones físicas causadas por las horas que está delante de la

pantalla: ojos secos o lagrimeo, dolores de cabeza, de espalda, de muñeca…

Si tu hijo presenta algunos de estos síntomas, puedes hacerle este TEST para comprobar si

posiblemente es adicto a internet.

¿Cómo puedes prevenirlo?

 Limita los sitios o las actividades en las que utiliza el ordenador o el teléfono móvil:

mientras estudia, en clase, viendo una película, en un concierto, en una reunión de amigos o

familiares.

 Uso de los dispositivos en un horario adecuado y establece un tiempo máximo. Necesita

descansar por las noches así que, apaga el móvil, la tablet, la videoconsola o el ordenador

cuando se vaya a dormir.

 Cuida la seguridad en los dispositivos que utiliza. Hay numerosas amenazas a nuestra

privacidad: intrusiones, accesos a información confidencial, ciberbullying, vulneración del

secreto del correo electrónico, programas maliciosos (malware) que espían y recogen datos
privados, empresas que espían sobre nuestros gustos para realizar ofertas o propuestas que

conecten mejor con nuestras fragilidades, etc.

 Diversifica su ocio: que no ocupe todo tu tiempo libre con las nuevas tecnologías. Busca

otras actividades de ocio que puedan satisfacerle más.

 Limita el tiempo de conexión a la red en casa, así como la ubicación de los ordenadores

en lugares comunes (el salón, por ejemplo) y el control de los contenidos, constituyen

estrategias de interés (Mayorgas, 2009).

 Busca ayuda profesional si la situación se ha vuelto incontrolable y le provoca

ansiedad. 

¿Tiene tratamiento?
Ante este tipo de adicciones exite tratamientos que consisten en el trabajo de aspectos

psicológicos y de aprendizaje encaminados a:

 Aprender a organizar el tiempo de ocio y a gestionar la ansiedad y otras

emociones displacenteras sin emplear internet como refugio, evasión o alternativa al

afrontamiento del problema.

 Apreciar el estar solo o sola y hacerlo sin tener “aparatos” a tu alrededor.

 Atribuir confianza y autocontrol a la persona para que ella misma salga del automatismo

y el uso perjudicial del móvil, internet o las redes sociales.

 Atribuir responsabilidad para resolver “problemas”, entender lo que significa y qué

función tiene el uso de las tecnologías para la persona.


Cómo prevenir la adicción a las nuevas tecnologías
La adicción a las nuevas tecnologías consiste en el consumo abusivo de algún dispositivo

o servicio como el ordenador, el móvil, Internet, las redes sociales o

los videojuegos (siendo los más peligrosos los juegos MMORPG (“juego de rol

multijugador masivo en línea”), donde uno juega con un grupo de amigos, o en ocasiones

incluso no sabes ni quiénes son.

A pesar de ser considerada una adicción específica, comparte una serie de características

comunes con otras adicciones como pérdida de control, síndrome de

abstinencia, dependencia psicológica, interferencia en distintos ámbitos y pérdida de

interés por otras actividades.

¿Te gustaría saber si tu hijo/a tiene una adicción a las


nuevas tecnologías?
A continuación te mostramos algunos de los signos de alerta para saber si estás delante de

una adicción:

 Síntomas de ansiedad y estrés, siendo la realización de la conducta adictiva lo único que

le tranquiliza.

 Alteraciones en el sueño.

 Restricción de los intereses.

 Disminución del rendimiento escolar.

 Aislamiento social.

 Se vuelve irascible e irritable con los demás.


 Utiliza la mentira para tapar o justificar algunas de sus conductas.

 Descuidan sus problemas personales.

 No son conscientes de su problema.

¿Qué pueden hacer los padres para prevenir estas


conductas adictivas?

 Establecer un horario de uso.

 Colocar los ordenadores en lugares comunes de la casa.

 Buscar actividades alternativas para ocupar el tiempo libre deporte, lectura,  actividades al

aire libre, …)

 Evitar dormir con el móvil cerca.

 Supervisar el uso de las nuevas tecnologías (dependiendo de la edad del menor, esta

supervisión será más o menos intensa).

 Las actividades que implican a las nuevas tecnologías se deben realizar cuando hayan

cumplido previamente con sus responsabilidades.

 Enseñe al menor a proteger su privacidad

 Explique a su hijo/a el riesgo de ponerse en contacto con desconocidos.

 Como padres, es importante estar al día de las nuevas tecnologías para que esto no

suponga una barrera entre usted y su hijo.


 Potenciar su autoestima y unas buenas habilidades sociales que les permitan el

desarrollo de buenas relaciones interpersonales.

Los padres son un gran ejemplo para los niños, de hecho, en muchas ocasiones tienden a

repetir nuestras conductas, por eso es importante que prestemos especial atención al uso

que nosotros hacemos de las mismas.

¿Mi hijo/a es adicto al móvil, tablet o videojuegos?


Son vacaciones y aumenta el tiempo libre de los pequeños de la casa, además, nuestra

sociedad ha cambiado y el acceso a Internet 24 horas al día y el tener a mano multitud de

aparatos tecnológicos de última generación está desencadenando una de las amenazas

tecnológicas que más preocupa a los especialistas y a los padres de los adolescentes y, no

tan adolescentes, por que cada vez los niños empiezan antes a ser usuarios de las

tecnologías. Aproximadamente el 3% de los jóvenes mayores de 18 años son adictos a las

nuevas tecnología, y el 8.1% está en riesgo de serlo. Estos valores nos demuestran que

estamos ante un problema que va aumentando cada día, y que puede acabar afectando a la

evolución y a la salud mental de nuestros hijos, generando una gran demanda sanitaria.

Síntomas de la adicción a las TIC


Estos son algunos de los síntomas que nos pueden llevar a mantenernos alerta y hacernos

sospechar que nuestro hijo presenta un problema de adicción a las nuevas tecnologías,

aunque como adicción propiamente dicha sólo un psiquiatra o psicólogo puede

determinarlo.

 Dificultades para dormir y conciliar el sueño

 Reacciona con enfado y rabietas cuando apagamos la consola, ipad, móvil, etc
 Cuando no le permitimos tener su cantidad diaria de tecnología presenta estados de

ansiedad incluso se pone agresivo.

 Nuestro hijo prefiere estar todo el día pegado a la “maquina” que realizar otro tipo de

actividades que antes le gustaban.

 Observamos que tiene menos comunicación con nosotros

 Ha disminuido su rendimiento académico

 Pasa más de 3-4 horas usando aparatos tecnológicos

¿Qué podemos hacer como padres?


Si detectamos que nuestro hijo presenta un problema de uso excesivo de las nuevas

tecnologías podemos empezar a paliarlo realizando algunas actividades alternativas:

 Proponle actividades que le interesen que le alejen de las pantallas, actividades sociales con

otros niños o jóvenes de su edad, practicar algún deporte u otras actividades al aire libre.

 Establece límites y normas respecto a las nuevas tecnologías, marca un tiempo máximo de

uso.

 Infórmale sobre el tema y los riesgos, puede ser interesante que consultemos con un

especialista si tenemos dudas de cómo hacerlo.

 Marca prioridades y responsabilidades respecto a sus actividades diarias.

 Como primera medida, prohibirle el uso total no es aconsejable, no obstante, déjate guiar

por un experto, ya que cada caso es único.¿Crees que tu hijo/a puede tener este problema?

No dudes en consultar con un especialista, no tardes más en poner solución!


Hasta el próximo día.

LAS ADICCIONES Y SUS


CONSECUENCIAS EN LA FAMILIA»»
Por

 Admin de Notas, Claudia Cortez

 -

 12/12/2017 

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CONSECUENCIAS EN LA SALUD DE LOS FAMILIARES

-Cambios de humor: irritablidad y culpa


-Preocupación, miedo y confusión
-Sintomatología ansioso-depresiva
-Trastornos de ansiedad y depresión
-Enfermedades relacionadas con el estrés
-Hipertensión, úlceras, cefaleas

CONSECUENCIAS ECONÓMICAS EN LOS FAMILIARES

-Incremento del gasto económico:tratamientos, desplazamientos, deudas


contraídas por el paciente

CONSECUENCIAS LABORALES

-Disminución del rendimiento laboral


-Dificultades de concentración
-Permisos para realizar acompañamientos/asistir a terapias

CONSECUENCIAS SOCIALES

-Tendencia al aislamiento de la familia y amigos


-Reducción en las actividades de ocio
-Miedo al rechazo, ocultación de la adicción

CONSECUENCIAS INTRAFAMILIARES

-Reorganización de los roles


-Incremento de las tensiones familiares
-Alteraciones en la comunicación
-Discusiones frecuentes
-Pérdidas de cohesión y rupturas del núcleo familiar en casos externos.

¿ES NECESARIA LA FAMILIA EN EL TRATAMIENTO? ¿CUÁLES SON SUS


NECESIDADES?

Las necesidades que presentan las familias que tienen a un miembro con
consumos problemáticos de sustancias son:

Manejar apropiadamente los sentimientos de estigma y discriminación.

Acceso adecuado a los recursos de tratamiento e implicación en el mismo.

Apoyo en el modo de manejar al adicto, con la finalidad de detectar cuáles son las
estrategias de la familia, si ayudan u obstaculizan la rehabilitación del paciente.

Acceso a información adecuada sobre las drogas, sus consecuencias, el


funcionamiento del proceso de rehabilitación y los distintos tratamientos
existentes.
Acceso a un rango amplio de alternativas de apoyo, según las necesidades que
manifiesten los distintos miembros de la familia, valorando capacidades y recursos
de afrontamiento presentes.

Apoyo emocional, suelen aparecer en los familiares niveles de ansiedad y estrés,


por lo tanto hay que sondear si presentan síntomas y con qué apoyo informal
(amigos, familia extensa) o formal (terapia o consuelling) cuentan o necesitan.

Apoyo práctico, debido al desgaste de la adicción en la vida diaria de la familia.

Apoyo económico, o acceso a diferentes ayudas financieras y de servicios sociales.

Autoayuda. Los grupos de autoayuda facilitan la toma de conciencia de manera


menos traumática, como también proporcionan alternativas en la resolución de
problemas.

Además, facilitan procesos de identificación con otros miembros del grupo y


propicia el sentido de pertenencia a un grupo, aspecto que reforzará la toma de
decisiones en situaciones problemáticas.

Adicciones sociales
enero 15, 20141962 views0

Francisco Pascual | Médico en conductas adictivas y colaborador de


InDependientes

Familia adicta a dispositivos electrónicos / Fuente: mitla.mx


Existen otro tipo de adicciones no vinculadas a sustancias que pueden
provocar serios problemas a las personas además del juego. Todas ellas
con las mismas características que comentamos para las otras adicciones,
como la tolerancia, el síndrome de abstinencia, la ocupación excesiva de
tiempo o dinero y la pérdida de las relaciones y actividades cotidianas.
Podemos destacar la adicción a Internet, en la que incluiríamos la ciber
adicción al sexo, las ciber relaciones, la adicción a los chats, a la
navegación y a los juegos en red. Y por último, y algo a destacar en la
actualidad, la posible adicción a las redes sociales, facebook y twiter,
fundamentalmente, por medio del ordenador, las tablets o los smartphones.
Otro tipo de adicción social es la que se puede dar en las relaciones
sociales, destacando dos tipos. Las dependencias grupales: secta, grupo
religioso, filosófico o cultural, político, terapéutico, comercial; y las
dependencias interpersonales: codependencia, adicción al líder, adicción a
videntes, sanadores, terapeutas, adicción a la pareja, etc… Tampoco es
infrecuente en la sociedad consumista actual encontrarnos a personas que
presentan adicción al uso de servicios u objetos y entre ellas la más
destacable es la adicción al móvil o a la televisión. En los adictos al móvil
se presentan cuadros de agresividad, mal humor, aislamiento, abandono de
los estudios y del entorno social. Una dependencia que incluso lleva a
algunos de los pacientes a robar para poderse costear las llamadas. La
edad de inicio es muy baja, desde los doce años, debido a que los menores
tienen fácil acceso a este sistema de comunicación, al no existir efecto
rechazo, sino todo lo contrario. Otro tipo de adicción es la Oniomanía o
Adicción a las compras, en la que ir de compras se convierte en una
necesidad y es imposible controlar el impulso. Esta acción causa
sentimientos de culpa, vergüenza, irritabilidad e inclusive problemas
económicos graves. Se da entre un 1% y un 5% de la población europea y
sobre todo en mujeres de entre 30 y 50 años, pero los jóvenes están cada
vez más expuestos por las presiones constantes de la sociedad de
consumo. También el sexo se puede convertir en una actividad
adictiva y para estos casos se han estimado las siguientes consecuencias,
un 40% pierde a su pareja, se pueden producir hasta un 40% embarazos no
deseados, un 72% presentan ideas obsesivas sobre el suicidio e incluso un
17% ha intentado quitarse la vida, otros pueden presentar problemas
legales o situaciones de aborto. Por último, entre estas personas el riesgo
de padecer una enfermedad de transmisión sexual incluyendo el SIDA, se
eleva hasta a un 68%. Otra adicción es la vigorexia, por la obsesión del
culto al cuerpo, que a veces se puede presentar en forma de anorexia,
aparece como consecuencia de la preocupación constante por la
autoimagen corporal. Y terminaremos este repaso con la adicción al
trabajo, estos adictos reciben últimamente el nombre de workalcoholics.
Este término norteamericano surge en los 70 de la unión de las palabras
trabajo (work) y alcoholismo (alcoholism) para vincular los rasgos
característicos del comportamiento alcohólico al ámbito del trabajo y del
mundo laboral.

Ellos juegan toda la vida a una sola carta: la del trabajo. No se toman
vacaciones, mantienen una excesiva dedicación profesional y su vida
personal muchas veces, queda reducida a un sinfín de archivos y papeles.

En estas adicciones podemos observar una serie de estadios o fases:

 Estadio precoz.
 Episodios de uso descontrolado, pensamiento adictivo, preocupación
por el uso, cambios en el estilo de vida, inhibición y desvinculación
progresiva de las actividades habituales y consecuencias menores de
tipo físico y psíquico (nerviosismo, irritabilidad, cambios de humor).
 Estadio medio.
 Pérdida de control, negación, aislamiento, crecientes consecuencias
físicas y psicológicas, deterioro de las relaciones familiares y sociales,
problemas de adaptación al trabajo o a la escuela e incapacidad para
parar la actividad a pesar de las consecuencias negativas.
 Estadio avanzado.
 Dedicación intensiva y excluyente a la actividad adictiva, incapacidad
de razonar o cuestionar el objeto de la dependencia. Fracaso en los
intentos de frenar la actividad, problemas económicos y de relación
graves, y el descenso intenso de la autoestima.

Así como una serie de consecuencias o cambios:

Fisiológicos: Alteración del descanso, insomnio, deterioro del estado general


y/o evolutivo, alteraciones en la alimentación y alteraciones inmunitarias.

Psíquicos : Inestabilidad emocional. Empobrecimiento afectivo, pérdida del


libre albedrío, disminución de la capacidad intelectual, reducción del
vocabulario y pérdida del sentido del humor, razonamiento restringido,
pobre o nulo, descompensaciones neuróticas, paranoides, psicóticas o
suicidas y estados de pánico, confusión mental, estados disociados,
culpabilidad, pérdida de la identidad, alteraciones en la percepción de la
realidad.
Sociales: reducción o anulación de la capacidad o el interés en comunicarse
con quien no comparte la adicción, deterioro de las relaciones familiares y
las amistades, afectación negativa del puesto de trabajo o de los estudios y
aislamiento de todo aquello que no gira en torno a la dependencia.

Jurídico-legales: rupturas de parejas, separaciones, divorcios, pérdidas


patrimoniales (herencias, donaciones, deudas, pagos abusivos, etc.),
actuaciones delictivas (lesiones físicas o psicológicas) y falsificaciones,
vulneración de los derechos de los trabajadores, estafas, robos, engaños,
intrusismo, etc. Como conclusión, cabe decir que las socioadicciones son
trastornos tratables:

  A partir de una interrupción, disminución o control de la actividad


objeto de la adicción, sus síntomas pueden regularse y la
vulnerabilidad de la persona puede disminuir mediante cambios
permanentes en la conducta.
  La experiencia demuestra que la mayoría de los casos tratados
tienen una evolución favorable.
  Se trata de procesos habitualmente largos, en los cuales, a menudo,
el compromiso familiar constituye una herramienta esencial en el éxito
del tratamiento.
  Salvo algunas socioadicciones, actualmente, el tratamiento de la
mayoría de estos trastornos no implica el uso de fármacos.
  En algunas socioadicciones el componente pedagógico del
tratamiento es un elemento esencial del proceso.

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