FflOSOFfA

EL PROBLEMA DEL SER y EL DEVENIR

Uno de los primeros problemas de Occidente fue el que se dio entre dos de los más gran-
des filósofos presocráticos, Parménides y Heráclito. Veamos los postulados de estos dos
grandes pensadores.

PARMÉNIDES
Plasmó sus ideas filosóficas en un poema cuyos protagonistas son la Verdad, la Justicia,
la Opinión, el Camino, el No-Ser, el Nacimiento y la Necedad, y el cual se divide en tres No nos bafiamQs dos
partes: "Introducción", "La vía de la verdad y "La interpretación de las opiniones". En veces en el mismorio".
este poema el ser es un objeto fundamental de su pensamiento y en él se asumen todas ,-.HERACLlTO
las manifestaciones de lo real.

En la introducción, Parménides cuenta que se encuentra en un viaje en donde unas yeguas lo

conducen por un camino que sólo le es permitido transitar a aquellos que tienen sed de sabi-
duría, ahí se encuentra con la diosa de la verdad, la cual le mostrará el camino (a la verdad).

En la segunda parte, en una especie de visión le es revelado al filósofo por la diosa el

camino a la verdad, la cual sólo puede ser transitada por la vía del ser y es apartado del
no-ser, que es imposible ser pensado. Es contradictorio pensar algo que no es, porque con
sólo el hecho de pensarlo ya es.
• El ser es único, ya que sólo puede distinguirse de él, el no-ser (el cual no puede ser).
• El ser es inmutable o inmóvil, ya que si cambia se vuelve no-ser (el cual no puede ser).
• El ser es eterno porque de otra manera el no-ser existiría antes o después del ser.
• El ser es indivisible, ya que, de serlo, cada parte contendría una porción del no-ser.

Por todos los atributos antes mencionados, Parménides considera que el ser es una espe-
cie de esfera compacta y homogénea en la cual todo es ser.

En la tercera parte del poema se refiere al camino de las opiniones y de las

apariencias, el cual es seguido por las personas ignorantes, ya que viven en la
ilusión y de las conjeturas que llegan a través de los sentidos. A través de su
naturaleza sensible, las personas pueden percatarse ilusoriamente de que
las cosas nacen y mueren, que son y no son; sin embargo, sólo por la vía de
la verdad que recorre el filósofo se puede percibir al ser en su verdadera
naturaleza, inmóvil, eterno, único e indivisible.

HERÁCLITO
Al que llamaban el Oscuro, perteneció a una familia aristocrática y
no tuvo maestro. Conocía la filosofía de la escuela jónica, asimismo,
criticaba y menospreciaba a Pitágoras, así como a las opiniones de
los hombres. Sus planteamientos están orientados a conocer sobre la
estructura del kosmos. también se preguntó sobre el hombre. La idea central

49
 FILOSOFíA

de su filosofía era el lagos, el cual era representado por el fuego. Este logos es una ley
universal total y absoluta, la verdad de la razón y que sólo puede ser percibida a través del
alma (razón o mente). Cuando este logos es captado por el alma (psyque), éste se traduce
en el pensamiento humano.

La visión del mundo de este filósofo se basaba en los siguientes supuestos:

a) La razón (lagos) gobierna todos los acontecimientos del universo (kósmos).
b) El hombre puede captar la ley cósmica (el lagos) con la psique (la razón, la mente, el alma).
c) El hombre responsable, que reflexiona sobre la realidad para descubrir su fondo último y
oculto (lagos),debe adoptar una actitud práctico-teórica (ética) conforme a la ley kósmica.

"Es entonces que el fuego es el arjé o el principio de todas las cosas, el origen del mundo y
seguirá un proceso que culminará en una conflagración universal. Este proceso tiene dos fa-
ses, en la descendente el fuego se transforma en agua y el agua en tierra y en fuego; en la fase
ascendente, la tierra se transforma en agua y ésta una parte en tierra y otra parte en fuego, co-
menzando de nuevo en este punto de la fase descendente. Así se consuma un ciclo en el que
el fuego no sólo es origen y término, sino también en principio materia siempre constante en
tanto todo lo que tiene lugar en la naturaleza es producto de su transformación" (Varó, 2019).

El fuego es la expresión de la unidad de todas las cosas y sólo en segundo lugar, la expli-
cación del origen y el mecanismo de transformación del universo. Es el fuego el soporte
material del lagos.

Este filósofo considera que la armonía es producto de la lucha de contrarios o tensión continua
que está regida por la ley universal del lagos y no de la reconciliación. Si esta lucha terminara,
el mundo también. Es por ello que todo fluye, nada esta estático, en un perpetuo devenir.

En esta confrontación de ideas, tanto Parménides como Heráclito acertaron en algo, pero co-
metieron al mismo tiempo un gran error que enmendaría Aristóteles con la teoría del ser y el
devenir. El acierto de Parménides fue hablar del ser y que todos tenemos esencia, quizá su error
fue pensar que nunca cambiamos en ningún aspecto y que los sentidos nos engañan siempre.
El acierto de Heráclito es el cambio, quizá el error fue pensar que cambiamos por completo, que
cambiamos de esencia. El que concilió este problema fue Aristóteles, con su teoría del acto y la
potencia, el acto sería el ser, el presente, la realidad del instante, lo que es actualmente.

Hoy todavía se utiliza la palabra acto en las obras de teatro para referirse a que ya están
actuando los personajes en el momento presente. De ahí viene también el concepto de lo
actual o actualidad, que se refiere a lo que "es, lo que está". Por otra parte, la palabra poten-
cia se refiere al futuro, a lo que viene (por eso el nombre de devenir), a la capacidad de ser.
Hoy en día la utilizamos con algún deportista cuando decimos: "Este joven tiene muchas
potencialidades", es decir, muchas habilidades, tiene futuro.