AMOR Y MISERIAS

ESCRITA POR GRACE ALMANZAR ACOSTA

 Capítulo I

Mía pensaba que era un día normal en su vida, en la vida de una joven hermosa de ojos
verdes y cabellos castaños. Ella estaba en casa, feliz viviendo con su padre aunque no
tenían dinero.

Mientras ella estaba en la laptop viendo una película y chateando con sus amigas… de
pronto…

Sonó la puerta y ella atendió. Eran dos hombres extraños, con mirada fría y cruel.

Mía atendió la puerta y dijo:

-Hola, a quién buscan. (Mientras sus ojos observaban detenidamente aquellos dos hombres,
estaban vestidos de negro, uno de ellos tenía un bulto y su cabello rizado, el otro un maletín
y cabello lacio).

El hombre de pelo lacio, dijo:

-Hola está tu padre, lo puedes llamar por favor.

A pesar de lo extraño que parezca, entré a la oficina de mi padre y le dije:

-Papá alguien te busca en la puerta.

Mi padre preguntó:

-Quién me busca

Mía describió a los hombres y su padre fue atenderles a la puerta.

El padre de Mía con mirada sospechosa, dijo:

-Saludos, que desean.

Los hombres le dijeron:

-Queramos contratarlo para un trabajo, es cerca, sólo tiene que acompañarnos.

Mía que ya estaba algo nerviosa, continúa sospechando y observa detenidamente a los dos
hombres.
Piensa decirle a su padre que no salga, pero antes de abrir la boca, ya su padre bajaba las
escaleras.

Oh! Padre. (Mía está muy triste y sus lágrimas tocaban sus mejillas)

Se acercó a la ventana, y los sochozos se podían escuchar por toda la casa.

Mía dijo en voz baja:

-Papá no vayas con ellos, siento que algo va a pasar.

Mía lloraba. (Tenía miedo de que algo malo le suceda a su padre) Papá no vayas, por
favor.

Mía mientras observaba por la ventana, pensaba en que podía hacer.

Tomó la matrícula de los vehículos donde iban los hombres y corrió hacia la puerta, luego
se montó en un taxi y los siguió.

Mía apuraba al chofer, corra, no los pierda por favor, corra.

Los hombres llegaron a un lugar solitario, hicieron creer al padre de mía que estaban
trabajando.

Mía se bajó del taxi y observo escondida a la distancia, y cuando trata de acercarse, un
chico cubre su boca y en voz baja le dice:

-No grites, no hables.

Mía asustada, pregunta:

-¿Quién eres?

El chico responde:

-Soy Lucas y ese hombre que está detrás de tu padre, es muy peligroso y sé bien por qué te
lo digo. Él es mi padre, un hombre cruel y despiadado, si te acercas te hará mucho daño.

Mía responde:

-Sabía que eran extraños, no dejaré que le hagan nada a mi padre.

Lucas:

Por favor, déjame ayudarte, quédate aquí, no te muevas.

Mía se queda llorando; mientras ve alejarse a Lucas.

Se escuchaban disparos, un hombre cae herido al suelo. Y dos de ellos huyeron, mientras el
otro carga al herido y trata de ayudarlo.

Mía se acerca desesperada y gritando:

-Papá, papá, Papaaaá!

Las últimas palabras del padre de Mía fueron:

-vete hija mía, corre!

El padre de Mía había muerto.

Mia no pudo superar nunca el hecho de que su padre había muerto frente a sus ojos.
 Capítulo II

Hoy después de tres años, inicia una nueva etapa de mi vida. Y no dejo de recordar las
últimas palabras de mi padre, sus cuidados y el gran amor que siempre me demostró. A
pesar de que es triste, estoy lista y emocionada de empezar la universidad.
Mi primer día de clases.
Mi mejor amiga Lili y yo fuimos juntas a la universidad, conocimos al profesor Mateo y
muchos compañeros.
Inicio la clase, entro un chico con la cabeza abajo y en silencio al salón.
El profesor Mateo le detuvo y dice:
Joven, deténgase, debe presentarse.
El chico se detuvo y levantó su cabeza y luego de observar todo el salón, su mirada y la mía
se cruzaron.
Mi corazón casi se detuvo, no lo podía creer.
Mientras las chicas del salón, comenzaron a hablar sobre lo lindo que era, yo sólo pensaba,
que era el mismo que…

-Hola, soy Lucas.

Fueron sus únicas palabras, suficientes para quebrar mi corazón.
Salí corriendo del aula, no podía entender cómo es que Lucas, el mismo de aquella noche
estuvo frente a mí.
Mía vuelve al salón y al finalizar la clase, le cuenta todo a su amiga Lili.
Lili:
-No puedo creer que ese chico sea el mismo del que me estás hablando.
-Te voy a ayudar amiga, no estás sola.
Ambas se acercan a comer con un grupo de chicas. Todas estaban hablando sobre Lucas.
-Qué lindo es Lucas.
-Yo lo ví primero
-Es tan tierno.
Mía se enoja, da la vuelta y le dice a Lili:
-Ya no soporto, no se cansan de hablar de ese tipo. ¿Acaso no se cansan?
Lucas era un chico solitario, distante y estaba siempre con su mejor amigo marcos.

Al salir de la universidad dos tipos quisieron atacar a Lili y mía, se acercaron para hacerles
daño, pero de pronto apareció Lucas y junto a marcos las defendió.
Lili estaba impresionada. Ambas fueron a casa y solo pasaban dos escenas por la mente de
mía . La muerte de mi padre y aquel chico, que no sabía si era tan malo como pude pensar.
 Capítulo III

Mia pensando en la muerte de su padre y como murió frente a sus ojos, ella quería
venganza.
-¡Lucas!
Lucas -que Mía
Mia furiosa dijo que quería venganza por lo que el padre de Lucas le había hecho al suyo.
Sus lágrimas brotaban por su rostro lentamente.
Dijo que sabía que estaba mal pero...

Lucas -está bien te ayudare sé cómo te sientes mi padre es un hombre malo y le ha hecho
daño a muchas personas te ayudaré Mía no te preocupes deja de llorar.

Lucas le limpio las lágrimas del rostro a Mía, después de eso solo hubo un minuto de
silencio hasta que Mía habló y dijo:
-Sé que crees que estoy loca ¿verdad?
-En realidad no, bueno como sea te aviso mañana si quieres venganza la tendrás te lo
prometo.
-Gracias...

Al día siguiente Mía no encontró a Lucas y no sabía dónde estaba después fue a buscar a
Marcos para ver si él sabía algo de lo que le había pasado a Lucas cuando encontró a
Marcos le preguntó si él sabía algo y marcos le dijo:
-Que no sabes Mía por tu culpa él fue a confrontar a su padre sin pensarlo él me contó
cómo le dijiste esas locuras de vengarte por la muerte de tu padre ¿no sabes que causaste?
Ahora por tu culpa mi amigo está en el hospital con un yeso y eso solo por tu culpa como
puedes ser tan tonta. Solo te diré eso, ahora ya me voy.

Mía no sabía que pasaría eso ella no quería lastimar a nadie al escuchar esto mía comenzó a
llorar y en ese momento rápidamente corrió al hospital.
Su amiga Lili que estaba al lado de ella le dijo a Marcos: ¿Cómo te atreves a decirle eso?
¿No sabes que a ella le causó tristeza la muerte de su padre? ¿No sabes que cuando alguien
está herido algunas veces hace locuras? tú… tú no tienes corazón.
Hubo un momento de silencio hasta que Lili dijo que se iría a buscar a su amiga.
Y Marcos la siguió.
Marcos se había enamorado por completo de esa chica valiente que vio en Lili.
*En el hospital*
Mia corría cada vez más rápido ignorando las voces que le decían que se detuviera. Fue
rápidamente a ver a Lucas.

Entró a la sala del hospital donde estaba Lucas. Marcos y Lili también entraron.

Mía dijo:
-¿Por qué lo hisiste? Porque tuviste que hacerlo pudo causarte la muerte Lucas sé que estoy
un poco loca pero tú no tuviste que hacer eso estaba muy preocupada corriendo hasta aquí y
hasta me cuesta respirar dime Lucas ¿Por qué lo hisiste?

-¡porque me gustas!

-Lucas…

Marcos y Lili se quedaron completamente sorprendidos cuando después Mía también dijo:
-A mí también me gustas…
Ese fue el día en que todo se volvió mejor…
Ese fue el día en que Mía cambio su vida por completo.