DOMINGO 2 DE CUARESMA - 13 DE MARZO DE 2022 - Nº 2626 - CICLO C
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“ÉSTE ES MI HIJO, EL ELEGIDO, ESCÚCHENLO”
Lema: “Conviértete y cree en el Evangelio” (Mc 1,15)
Dios hace Alianza con Abram: Gn 15, 5-12.17-18.
Abram duda, la promesa de Dios es humanamente
irrealizable, ¿cómo tener descendencia si
no tiene hijos? Dios confirma su promesa
recurriendo a una hermosa imagen: las
estrellas del cielo, es decir, la descendencia
de Abram será inconmensurable. Abram
cree, su fe determina su conducta y es
principio de sus acciones.
Dios promete que le dará tierra y para
cerrar el pacto, Abram prepara un antiguo
rito de Alianza que consiste en ofrecer víctimas
sangrantes sobre las que ambos contratantes deben
pasar por encima para cerrar el pacto, teniendo en cuenta
que si no cumplen lo pactado su futuro será el de las víctimas.
El pacto se concreta: una antorcha y un horno con fuego
expresan la presencia de Dios, que atraviesa los animales
partidos y confirma su pacto.
“Amados míos, perseveren firmemente en el Señor”:
Flp 3,17–4,1. El Apóstol termina una larga sección
polémica de su carta con esta exhortación: seguir su
ejemplo y el de otros que proceden de igual manera. Lo
importante no es seguir la Ley, como los judaizantes,
cuya preocupación son las leyes sobre los alimentos y
su interés por lo material: “su dios es el vientre”; quieren
obligar a los neófitos a circuncidarse: “su gloria está en
aquello que los cubre de vergüenza; no aprecian sino las
cosas de la tierra”.
El Apóstol enseña que los verdaderos cristianos son
“ciudadanos del cielo”, es decir, no se guían por las leyes y
PREGUNTAS ¿Por qué sigo a Jesús? // ¿Estoy dispuesto a seguirle a pesar de las dificultades de la vida? // ¿La
DE REFLEXIÓN oración ocupa un lugar importante en mi vida cristiana?
RITOS INICIALES
M. En este tiempo de Cuaresma caminamos hacia la
Pascua del Señor. Con el deseo de que el Pan de la
Palabra de Dios y el Cuerpo de Jesucristo, sean luz y
alimento en nuestro camino hacia la Pascua, iniciamos
nuestra celebración.
1. CANTO DE ENTRADA “Si vienes conmigo” (VSJ 53; ER 17)
Si vienes conmigo y alientas mi fe,
si estás a mi lado, ¿a quién temeré?
A nadie tengo miedo, a nadie he de temer.
Señor, si me protegen tu amor y tu poder.
Me llevas de la mano, me ofreces todo bien;
Señor, Tú me levantas si vuelvo a caer.
Qué largo mi camino, qué hondo mi dolor,
ni un árbol me da sombra, ni escucho una canción.
¿Será que a nadie puedo mirar ni sonreír?
Señor, Tú solo quedas, Tú solo junto a mí.
las aspiraciones terrenales sino por la nueva Alianza
sellada en la Cruz de Cristo. Los cristianos
son caminantes en espera de la Parusía,
la segunda venida de Cristo, cuando “Él
transformará nuestro cuerpo mortal” y lo
hará semejante al suyo.
¡Escúchenlo!: Lc 9,28b-36. Jesús toma
a Pedro, Santiago y Juan y sube a la
montaña a orar. En la tradición de Israel
la montaña es lugar de encuentro con
Dios. Jesús se relaciona con su Padre en
la oración. En esta intimidad con su Padre,
mientras oraba, sucede su transfiguración: “su
rostro cambió de aspecto y sus vestiduras se volvieron
de una blancura deslumbrante”. A su lado están Elías y
Moisés conversando con Él acerca del nuevo éxodo que
debe recorrer para salvar a su pueblo en su camino hacia
la Cruz.
Los discípulos son testigos de la gloria de Jesús, anticipo de
su Pascua. Como en varios pasajes del Evangelio, Pedro,
el primero de sus elegidos, parece no comprender lo que
sucede y sugiere construir tres carpas para permanecer en
esa presencia tranquilizadora luego de escuchar el primer
anuncio de la Pasión del Maestro.
Una nube, manifestación de la Presencia divina, los
envuelve y los discípulos se llenan de temor; una voz, como
en el bautismo en el río Jordán, resuena proclamando que
Jesús es el Hijo de Dios, el Elegido. Su Pasión y Muerte
no son el fin, Él será glorificado, vencerá a la muerte y
triunfará.
2. SALUDO
C. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Amén.
C. Que el Dios de la paz los santifique plenamente para
que se conserven irreprochables, y que su misericordia
esté siempre con ustedes. Y con tu espíritu.
3. ACTO PENITENCIAL
C. Acerquémonos a Dios Padre y le decimos con el
salmista: “El Señor es mi luz y mi salvación ¿A quién
temeré?”. Ahora, reunidos ante Jesús que camina hacia
la Cruz y la Resurrección, reconocemos la debilidad de
nuestro seguimiento. (Silencio)
C. Tú que nos has hecho renacer por el agua y el Espíritu:
Señor, ten piedad.
C. Tú que nos has revelado en tu Transfiguración el amor
de Dios Padre: Cristo, ten piedad.
C. Tú que eres el Autor de nuestra salvación: Señor, ten piedad.
C. Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros, 6. SALMO RESPONSORIAL 26,1.7-9.13-14
perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. R. El Señor es mi luz y mi salvación.
Amén.
El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré?
4. ORACIÓN COLECTA El Señor es el baluarte de mi vida,
C. Oremos (silencio). Padre Santo, que nos mandaste ¿ante quién temblaré? R.
escuchar a tu Hijo amado, alimenta nuestro espíritu con ¡Escucha, Señor, yo te invoco en alta voz,
tu Palabra, para que, después de haber purificado nuestra apiádate de mí y respóndeme!
mirada interior, podamos contemplar gozosos la gloria de Mi corazón sabe que dijiste: “Busquen mi rostro”. R.
su rostro. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y
reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por Yo busco tu rostro, Señor, no lo apartes de mí.
los siglos de los siglos. Amén. No alejes con ira a tu servidor,
Tú, que eres mi ayuda; no me dejes ni me abandones,
mi Dios y mi salvador. R.
LITURGIA DE LA PALABRA Yo creo que contemplaré la bondad del Señor
5. PRIMERA LECTURA en la tierra de los vivientes.
Espera en el Señor y sé fuerte; ten valor y espera en el Señor. R.
M. El autor sagrado presenta la Alianza que Dios hace
con Abram: “A tu descendencia daré esta tierra desde el 7. SEGUNDA LECTURA
torrente de Egipto hasta el gran río Éufrates”. Abram le M. El Apóstol nos exhorta a seguir su ejemplo,
escucha y confía totalmente en Él. manteniéndonos firmes en el Señor, pues somos
Lectura del libro del Génesis 15,5-12.17-18 ciudadanos del cielo, seguidores de Jesucristo. “Él
Dios dijo a Abram: “Mira hacia el cielo y, si puedes, cuenta transformará nuestro pobre cuerpo mortal, haciéndolo
las estrellas”. Y añadió: “Así será tu descendencia”. semejante a su cuerpo glorioso”.
Abram creyó en el Señor, y el Señor se lo tuvo en cuenta Lectura de la carta del Apóstol san Pablo a los
para su justificación. Entonces el Señor le dijo: “Yo soy el cristianos de Filipos 3,17–4,1
Señor que te hice salir de Ur de los caldeos para darte en Hermanos:
posesión esta tierra”. “Señor, respondió Abram, ¿cómo Sigan mi ejemplo y observen atentamente a los que siguen
sabré que la voy a poseer?” El Señor le respondió: el ejemplo que yo les he dado. Porque ya les advertí
“Tráeme una ternera, una cabra y un carnero, todos frecuentemente y ahora les repito llorando: hay muchos que
ellos de tres años, y también una tórtola y un pichón se portan como enemigos de la cruz de Cristo. Su fin es la
de paloma”. Él trajo todos estos animales, los cortó por perdición, su dios es el vientre, su gloria está en aquello que
la mitad y puso cada mitad una frente a otra, pero no los cubre de vergüenza, y no aprecian sino las cosas de la
dividió los pájaros. Las aves de rapiña se abalanzaron tierra. En cambio, nosotros somos ciudadanos del cielo, y
sobre los animales muertos, pero Abram las espantó. esperamos ardientemente que venga de allí como Salvador
Al ponerse el sol, Abram cayó en un profundo sueño, y el Señor Jesucristo. Él transformará nuestro pobre cuerpo
lo invadió un gran temor, una densa oscuridad. Cuando mortal, haciéndolo semejante a su cuerpo glorioso, con el
se puso el sol y estuvo completamente oscuro, un horno poder que tiene para poner todas las cosas bajo su dominio.
humeante y una antorcha encendida pasaron en medio
de los animales descuartizados. Aquel día, el Señor hizo Por eso, hermanos míos muy queridos, a quienes tanto
una alianza con Abram diciendo: “Yo he dado esta tierra deseo ver, ustedes que son mi alegría y mi corona, amados
a tu descendencia”. míos, perseveren firmemente en el Señor.
Palabra de Dios. / Te alabamos, Señor. Palabra de Dios. / Te alabamos, Señor.

8. EVANGELIO

M. El Evangelio nos invita a contemplar el Rostro de aparecían revestidos de gloria y hablaban de la

Cristo en el Acontecimiento de su Transfiguración,
anticipo de su gloria. Dios Padre da testimonio y
nos dice: “Este es mi Hijo, el Elegido, escúchenlo”.
Tu Palabra es luz que ilumina nuestra oscuridad.
Habla, Señor, habla a tu pueblo,
queremos escuchar tu voz.
Desde la nube resplandeciente se oyó la voz del Padre:
“Éste es mi Hijo amado; escúchenlo”.
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según
san Lucas 9,28b-36
Jesús tomó a Pedro, Juan y Santiago, y subió a
la montaña para orar. Mientras oraba, su rostro
cambió de aspecto y sus vestiduras se volvieron
de una blancura deslumbrante. Y dos hombres
conversaban con Él: eran Moisés y Elías, que
partida de Jesús, que iba a cumplirse en Jerusalén.
Pedro y sus compañeros tenían mucho sueño,
pero permanecieron despiertos, y vieron la gloria
de Jesús y a los dos hombres que estaban con Él.
Mientras éstos se alejaban, Pedro dijo a Jesús:
“Maestro, ¡qué bien estamos aquí! Hagamos tres
carpas, una para ti, otra para Moisés y otra para
Elías”. Él no sabía lo que decía. Mientras hablaba,
una nube los cubrió con su sombra y al entrar en ella,
los discípulos se llenaron de temor. Desde la nube se
oyó entonces una voz que decía: “Éste es mi Hijo, el
Elegido, escúchenlo”. Y cuando se oyó la voz, Jesús
estaba solo. Los discípulos callaron y durante todo
ese tiempo no dijeron a nadie lo que habían visto.
Palabra del Señor. / Gloria a Ti, Señor, Jesús.
9. HOMILIA/SILENCIO (Momento para meditar e interiorizar
el mensaje de la Palabra) PLEGARIA EUCARÍSTICA
10. CREDO 14. CANTO DE COMUNIÓN: “Me sorprende Señor” (VSJ ER 2345)
Creo en Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo Me sorprende Señor,
y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro hallarte tan pequeño en un humilde pan,
Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu
Santo, nació de santa María Virgen, padeció bajo el poder que mi boca pueda triturar
de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, y poder tener dentro de mí a un amigo de verdad.
descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los Me sorprende Señor,
muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de que siendo Tú el más grande puedas ahí estar,
Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar
a vivos y muertos. demostrando toda tu humildad
Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la demostrando cuánto eres capaz, de amar.
comunión de los santos, el perdón de los pecados, la Hoy me alegra Señor,
resurrección de la carne y la vida eterna. Amén. saberme convidado, a tu celebración
11. ORACIÓN UNIVERSAL sentarme aquí en tu mesa y de corazón
C. Hermanos: Cristo transfigurado, que es nuestra luz y sellar contigo el pacto de esperanza,
salvación, nos regala cada día una señal de esperanza. de llevar a los demás, tu pan de vida
Con esa confianza, acudimos a Dios Padre diciendo: y llenar el corazón que triste está. (Bis)
Ilumínanos Señor con tu Palabra.
15. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Por la Iglesia, para que en la oscuridad y la angustia
de nuestro mundo, sea siempre la luz que viene de C. Después de haber recibido estos gloriosos misterios,
Dios e ilumina a toda la humanidad. Oremos. Padre, te damos gracias porque, aun viviendo en la
tierra, ya nos haces partícipes de los bienes del cielo. Por
Por el Papa Francisco, para que en su ministerio, Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
encuentre la luz y la fuerza en la Cruz salvadora
de Jesús y en nuestras constantes oraciones.
Oremos. RITO DE CONCLUSIÓN
Por los gobernantes de nuestra patria, para que M. En espíritu de oración, escuchando al Señor, sigámosle
contemplando el rostro de Jesús transfigurado,
orienten su trabajo en favor del bien común. Oremos. en nuestro día a día, siendo testigos del amor y misericordia
que Él tiene por toda la humanidad. Seguir a Cristo significa
Por los pobres, los enfermos, en particular por las participar ya en la tierra de los bienes del cielo.
víctimas de la pandemia, los privados de libertad y
los huérfanos, para que a través de la ayuda eficaz 16. BENDICIÓN DE CUARESMA
de las autoridades y de nuestra solidaridad, se C. El Señor esté con ustedes. Y con tu espíritu
encuentren con el Rostro Paternal de Dios. Oremos.
C. Dios, Padre misericordioso, les conceda, como al hijo
Por todos nosotros, para que en este tiempo pródigo, el gozo de volver a la casa paterna. Amén.
de Cuaresma, Dios nos conceda la gracia de la
conversión. Oremos. C. Cristo, modelo de oración y de vida, los guíe a la
auténtica conversión del corazón, a través del camino de
(Otras intenciones de la comunidad) la Cuaresma. Amén.
C. Muestra Padre bueno, tu Rostro misericordioso a todo el C. El Espíritu de sabiduría y de fortaleza los sostenga en
pueblo que te suplica y confía que escucharás su oración. la lucha contra el maligno, para que puedan celebrar con
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén. Cristo la victoria pascual. Amén.
LITURGIA DE LA EUCARISTÍA C. Y la bendición de Dios todopoderoso, del Padre, del
Hijo (✝) y del Espíritu Santo, descienda sobre ustedes y
12. CANTO DE LAS OFRENDAS: “En tus manos divinas de Padre” permanezca para siempre. Amén.
(VSJ 136; ER 1502)
17. CANTO FINAL “Dichoso quien en su vida” (VSJ 272; ER 2743)
En tus manos divinas de Padre
hemos puesto, Señor, nuestro mundo. (2) Dichoso quien en su vida
Estos brazos que elevan alegres vive como vivió María, (2-2)
las ofrendas de vino y de pan. siempre amando a los demás,
Esta tierra labrada con pena, siempre sirviendo a los demás. (2-2)
donde brilla velada tu luz. Con tu entrega permitiste
El trabajo que une a los hombres que nos acompañe Dios,
con abrazo de esfuerzo común. y creciendo Él a tu lado,
13. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS compartía nuestra vida.
C. Te pedimos, Señor, que este sacrificio borre nuestros Que sigamos la Palabra
pecados y santifique el cuerpo y el alma de tus fieles, para de Dios Padre que nos ama,
que podamos celebrar dignamente las fiestas pascuales. por María todos sepan
Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén. que se amor a todos llega.
 CUARESMA:
¡TIEMPO PARA TRANSFORMAR NUESTRA VIDA!
Hoy, segundo domingo de Cuaresma, Jesús los tres apóstoles, de reconocer el significado de
nos invita a contemplar la Pascua de su la Transfiguración por las apariciones de Jesús
Resurrección. Jesús, el Amigo de camino es resucitado. La Gloria (Lc 9,32) es un anticipo,
Él elegido por el Padre, es el Señor glorioso, una indicación previa de la resurrección de
el Hijo de Dios. El testimonio de los apóstoles Jesús.
es este: En Jesucristo han experimentado la
gloria de Dios.
Jesús nos invita a caminar junto a Él
✓ A dejarnos Transfigurar por su Palabra y
Presencia.
✓ A participar de su Transfiguración, mediante
la conversión personal y comunitaria.
✓ A tener momentos de coloquio con Él en la
oración.
✓ A poner nuestra vida al servicio de las
familias, del barrio y de la sociedad.
Como el Apóstol Pedro digamos al Señor:
“Maestro, ¡Qué bien estamos aquí!” Y
dejemos cubrirnos por la nube donde resuena
la Palabra de Dios Padre: “Este es mi Hijo, el
Elegido, escúchenlo”.
Todo el acontecimiento de la Transfiguración
se apoya en el resplandor de la Pascua. Sólo
después de la resurrección fueron capaces,

LA IGLESIA NOS EXHORTA:

Yo estoy invitado a escuchar a Jesús y Jesús se manifiesta; y con su Transfiguración nos invita
a contemplarlo. Mirar a Jesús purifica nuestros ojos y los prepara para la vida eterna, para la
visión del Cielo. Tal vez nuestros ojos están un poco enfermos porque vemos muchas cosas
que no son de Jesús, incluso que están contra Jesús: cosas mundanas, cosas que no hacen
bien a la luz del alma. Y así esta luz se apaga lentamente y sin saberlo terminamos en la
oscuridad interior, en la oscuridad espiritual, en la oscuridad de la fe: oscuridad porque no
estamos acostumbrados a mirar, a imaginar las cosas de Jesús.
(Papa Francisco, Homilía 2014)
Visítanos en:

Dios nos habla cada día: Del 14 al 20 de marzo de 2022

Liturgia de las Horas: II Semana.
Lunes: Dn 9,4b-10; Sal 78,8-9.11.13; Lc 6,36-38
Martes: Is 1,10.16-20; Sal 49,8-9.16bc-17.21.23; Mt 23,1-12
Miércoles: Jr 18,18-20; Sal 30,5-6.14.15-16; Mt 20,17-28
Jueves: Jr 17,5-10; Sal 1,1-4.6; Lc 16,19-31
Viernes, Abstinencia: Gn 37,3-4.12-13a.17b-28; Sal 104,16-21; Mt 21,33-46
Sábado, Solemnidad, San José: 2Sm 7,4-5a.12-14a.16; Sal 88,2-5.27.29;
Rm 4,13.16-18.22; Mt 1,16.18-21.24a; o Lc 2,41-51a
Domingo 3 de Cuaresma: Ex 3,1-8a.10.13-15; Sal 102,1-4.6-8.11; 1Co 10,1-6.10-12; Lc 13,1-9
(Primer Escrutinio de los Catecúmenos)
ÁREA DE EVANGELIZACIÓN, SECCIÓN: LITURGIA • Casilla 7857 • Teléfono: 2406790- 2406908 • Fax: 2406817