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Llevo tú

sonrisa
conmigo

PAULA ALEJANDRA
Es domingo y el cielo retumba fuerte,
se aproxima una
tormenta…

Me encuentro en el fin del mundo, buscando encontrar


quien era antes de perderte…

Mi cuerpo tiembla y se eriza al recordarte, mis ojos


se cierran y me encuentro
con tu mirada tierna y brillante,
mi mente divaga en aquel ultimo día donde
no sabría que sería la última vez que escucharía tu voz…
tus palabras resuenan una y
otra vez en mi mente

- “Gracias por quedarte conmigo en la oscuridad, por serlo todo en mi


vida,
te amo… recuérdalo siempre”
Nunca imagine lo que aquellas palabras marcarían hoy en
mi,
¿Por qué no te quedaste esa noche en casa junto a mí?...

Te hubiese abrazado más si hubiese sabido que sería la


última vez que te tendría en mis brazos…

Me duele tu perdida amor,


llévame contigo y no me dejes ahogar en este valle de
lágrimas, en esta frialdad que mi cuerpo siente…

La nieve se tiñe de rojo, mi cuerpo flaquea, todo a mi


alrededor da vueltas,
solo quiero llegar donde estás, a tus brazos…

Perdón, no podre ser feliz si tu no estas,


te veo arriba amor…
Mi mente maquina cada rastro de ti…

No logro conciliar el sueño, pienso en tus ojos


oscuros…

En tu sonrisa pícara, siento la vibración


de tus
carcajadas sonoras…

En tus brazos rodeándome fuerte…

En tu alegría constante…

En cómo me mirabas cada noche antes


de dormir…
 
Te recuerdo a ti en cada momento…
Bajo la tenue luz de la luna estoy sentada
escribiendo una vez más, para ti...

Sabes tengo problemas para decir lo que siento


por ti,
Problemas porque borraste las lágrimas de mi
rostro con tus yemas y allí conocí tu tacto por
primera vez...

Problemas porque me miras con dulzura y no


quisiera olvidar nunca esa cálida mirada que me
regalas al anochecer...

Problemas porque ahora que me abrazas y me


alejó de ti, mi cuerpo lleva tu aroma como
perfume
a mi piel...

.
Problemas porque la luna que
veíamos juntos,
ahora se lleva nuestro secreto de intentar querernos
un poco más, siendo ella única testigo...

Problemas porque conocerte hizo sentir que la vida


me debe más tiempo de euforia en las angostas calles
de esta ciudad...

Mi única solución a este problema es decirte que


cuando mires la luna, pienses que te querré hasta
allí,
cuando cruces por una calle en tu auto,
frenes en la mitad y sonrías por ese recuerdo...

Y si algún día vuelves,


fusiona mi cuerpo junto
con el tuyo llenándolo de
tu aroma una vez más...
Estamos en tu auto, duermes sobre mis piernas,
tu respirar es tenue y entre veces se confunde con pequeños ronquidos de
cansancio...
Mis manos juegan con tu cuerpo "debil",
voy recorriendo tu piel por primera vez...
tu abdomen sube y baja al ritmo de tu respiración,
las yemas de mis manos siguen paso por tus brazos delgados, te remueves bajo mi
tacto
y continuo por tu rostro...

Delineo tus ojos pequeños adornados de pequeñas líneas de expresión, tu quijada


que no viene acompañada de tu barba, tus labios finos que esbozan una pequeña
sonrisa
que desaparece en segundos, sueñas,
tu cuerpo descansa,
pero tu mente siempre
está activa...

Aquella madrugada termina


con mi mano
sobre tu espalda,
tu cuerpo cálido,
tu mirada perdida
y un roce de labios que recreamos
en forma de despedida...
Los días y las horas pasan,
pero nada en mi cambia…

Las noches aun me saben a ti,


mis sueños te buscan en la madrugada,
recordando tus caras graciosas y tu sonrisa…
 
Te busco en el frio de la madrugada,
cuando tus brazos rodeaban mi cuerpo
buscando refugio...

Mi cuerpo te extraña, mis pensamientos


te buscan en cada momento del día…
 
Que complejo es sentirte cerca
y que no estés,
pues mi corazón te sigue queriendo
y cada noche busca refugio
en un tabaco
donde el humo se mezcla
con el viento
intentando llevarse
tu recuerdo…
Recuerdo cuando todo
comenzó…
Cuando mis días estaban
en guerra con el mundo,
Apareciste de la nada,
para serlo todo…
 
Llegaste con tu paz y
tranquilidad a guiarme…
Me miraste y en tus
ojos encontré un nuevo camino…
 
En mi andar decadente,
Tus pasos firmes
fueron mi bastón para continuar
Y tu sonrisa fue el
nuevo rumbo que mi vida tomo…
 
Vivo en sus curvas,
Como ella en mi piel…
 
Y para ti amor, esta
frase que quizá alguna vez escuchaste

“En tiempos de guerra, tu amor es paz”


 
No te vayas,
te pido que te quedes para siempre aquí

No te vayas,
necesito que me toques y me hagas erizar
la piel para sentir que aún sigo viva...

No te vayas,
es mejor que nuestros corazones decidan
cuando deberá acabar todo este amor...

No te vayas,
pues no te has dado cuenta que son
mis manos quien tienen necesidad de ti,
dijiste que nunca te irías de aquí,
pues aún en las noches más frías
mi cuerpo solo te anhela a ti,
que lo rodees con fuerza y
susurres al oído que todo estará bien,
porque tú, estas aquí,
sigues aquí...
No te vayas,
porque las promesas con los años tienen
más poder, que una que recién empieza,
tus palabras siguen
palpables en mis oídos,
que te escuchan en todas partes...

¿Y si ya te fuiste?...

Porque queman mis labios sintiendo que tu los besas,


porque mi piel se eriza al sentir el frío del viento
que entra por la puerta donde cada noche tu llegabas,

¿Porque mi aire está lleno de tu dulce aroma,


si tu ya no sigues aquí?...

No te vayas,
te pido te quedes una eternidad,
se que es poco pero quiero
que tus ojos sean la luz de mis días
y tus labios
la calma de mis tormentas...
La tarde caía frente a nuestros ojos y nadie aún nos había visto tomado de
las manos...

Mientras la noche llegaba y el cielo azul oscurecía, a través de nuestra


ventana se perdían entre luces los oscuros cerros lejanos...

Entre mañanas nos alumbraba la radiante luz del sol resplandeciente,


llenando de calor el vacío de tu almohada en nuestra cama...

Entonces ahí estaba yo, recordándote, sintiendo todo el amor que tu me


dabas, ¿porque he de sentir todo el amor tan de golpe cada vez que tu
ausencia me falta?...

¿Donde estas? ¿Entre que personas?


¿Que dirás? ¿Sonreiras por alguien más?
¿El verde de tus ojos seguirá brillando por
nuestro amor?...

Cae el atardecer frente a mis ojos y aquí estás, abrazando mi cuerpo,


encunandome entre tus brazos, solo la luna es testigo de este amor tan
legítimo que existe aquí...
Los ojos bonitos que me miran tiernamente,
esos ojos que transmiten paz
y dulzura de tan solo verlos...

Tienen el increíble poder de cautivar el alma de quienes nos dejamos atrapar,


puesto que sin necesidad de dar una sola palabra, dictan un poema de amor
puro y real...

Quisiera poder estar siempre a su lado para captar cada detalle, puesto que
parece un sueño verlos en cada momento del dia...

Me encantan esos ojos, aunque no me pertenezcan,


en mis sueños imagino que soy yo, su única dueña...

Solo te pido que me mires con tus ojos bonitos


y me abraces con el alma, para asi poder naufragar en su dulce color
pues se que como ellos, no existen otros...

Unos ojos así son los que yo quiero,


que siempre estén dichosos con el amor que yo les ofrezco, que sean lo último
que mis ojos vean al anochecer y lo primero en cada amanecer...

Unos ojos bonitos...


Mi corazón no conoce de colores ni de razas…
A mí me encanta el blanco/rosado de tu piel…

Te busco todos los días en cada rincón de esta ciudad,


Pero tu ausencia es palpable…

Día a día voy siguiendo tus pasos hasta


Llegar a tu mano extendida esperando por la mía…

Yo sé que tú me amas con tus cachetes, con tus labios,


Con tus ojos, con tus manos,
Con todo de ti…

Le escribo a mi persona favorita que tiene la sonrisa más bonita,


El que tiene unos ojos cafés y profundos como el mar…

Le escribo a mi persona favorita en la historia de mi vida


Para que sepa cuanto mi alma la extraña esta noche,
Para que sepa que tiene en sus manos un corazón loco de amor…

Tuya, P.
Te elegí porque en ti encontré paz en mis días de guerra,
Curándome el corazón que a pedazos volaba por las calles de la ciudad…

Te elegí porque haces poesía con tus manos,


Pasándose sobre cada parte de mi cuerpo,
Haciéndome suspirar de placer…

Te elegí porque tu mundo es una carrera de adrenalina,


Que no mide limites en la carretera,
Pisas el acelerador sin importar el destino…

Te elegí porque me enamoré de tu imperfección,


En este mundo tan perfecto de igualdad humana…

Te elegí a ti porque aun en los vaivenes de la vida,


Cuando yo tropecé tu sostenías mi mano,
Para no caer…

Te elegiría a ti cada día de mi vida,


Porque aun cuando estas lejos de mis ojos,
En mis pensamientos siempre estas presente…

Tuya,
P.
Una madrugada más los recuerdos me juegan una mala
pasada…

Quien diría que te abrazaría por última vez aquella noche,


Cuando todo parecía ser perfecto…

Tú eras el significado exacto de ese término…


Y hoy que no estás aquí, todo cambio…

La madrugada se ha convertido en mi día


Y el día en mi noche…

Extrañarte es inevitable cuando es difícil creer que solo


queda de ti,
Tu aroma en mi piel…

Tuya, P.
Déjame tocar tu piel con mis labios…

Dejar mi rastro en cada rincón de tu cuerpo,


recorrer con mis dedos cada uno de tus tatuajes y
hacerte erizar la piel…

Déjame tenerte cerca de mí, respirar el dulce aroma de


tu cuerpo,
acunarte entre mis brazos, desnudar tu mente
y hacerte mia para siempre…

Paula Alejandra Peña Fagua

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