NOMBRE DE PELICULA: “DAVID ATTENBOROUGH: UNA VIDA EN NUESTRO

PLANETA”
Resumen:

David Attenboroug es un científico que, a sus 93 años, tras sus viajes a todos los
continentes del planeta, y su experiencia como naturalista en la exploración del mundo
viviente, ha despertado interés del impacto de la humanidad sobre la naturaleza,
plasmándolos en un documental basado a los cambios devastadores de los que ha
sido testigo.

Attenborough señala, que cuando inicio su vida como documentalista hace unos 70
años, más de la mitad del mundo no estaba alterado por el ser humano, sin embrago
en los últimos años se ha evaluado que queda un 20% por lo que se supone que para
los años esta alteración será masiva y de gran magnitud.

David Attenborough nos acerca al tema partiendo de los ciclos de la vida conocidos
como extinciones masivas, en las que suceden potenciales transformaciones a partir
de fenómenos naturales como pueden ser el choque de meteoritos, fragmentaciones
de las placas tectónicas, explosiones volcánicas o periodos de glaciación. Hasta la
fecha, han ocurrido en la Tierra cinco extinciones masivas; La más reciente fue la que
acabó con la era de los dinosaurios y con el 75% de las especies. Tardando 65 millones
de años en reconstruirse.

Desde entonces el mundo viviente ha sido un factor clave para estabilidad del planeta,
así el fitoplancton en la superficie del océano y los bosques aportan con el bloqueo del
carbono, ayudando a equilibrar la atmosfera; además las grandes manadas aportan
con la fertilidad de los suelos y la extinción del hielo polar permite reflejar la luz solar
en la superficie.

Con el pasar de los años las personas aprendimos como aprovechar las estaciones
para producir alimentos, con el paso del progreso y la evolución fue muy notoria, sin
percibir los problemas que traería los grandes progresos.

Attenborough indica, que desde los inicios de su carrera a la fecha, han pasado casi
70 años, tiempo en el cual han ocurrido un sin fin de cambios a una velocidad sin
precedentes en la historia. Los datos son contundentes, un ejemplo claro fue la
desaparición de ¾ de los hielos polares, que ocurrió desde la primera vez que visitó el
Ártico a la fecha.

Así también, demuestra cómo aquellos lugares en que alguna vez filmó y nos cautivó
con sus documentales han desaparecido o están propensos a hacerlo. El crecimiento
de las poblaciones humanas, van a la par con la reducción acelerada de las áreas
silvestres en todo el mundo y las emisiones incontroladas de dióxido de carbono las
cuales vienen siendo responsables del calentamiento global, destruyendo ecosistemas
imprescindibles para sostener la vida.

Con el paso del tiempo Attenborough asegura que hasta la fecha la reducción de la
fauna silvestre ha superado el 50%, los bosques están siendo reemplazados por áreas
de sembríos quedando solo pocas áreas de bosque. Siendo esta la historia de declive
global en el transcurso de su vida.

Si continuamos con el mismo curso de vida el daño será más al que Attenborough
presenció; llegando a la conclusión que para los años 2030 el bosque amazónico será
devastado por no poder producir humedad, trayendo consigo las pérdidas de
diferentes especies que habitan en el; además alterar el ciclo global del agua. Así como
el Ártico quedara sin hielo, como consecuencia a ello aumentaría el calentamiento
global.

Si esto ocurriera para el año 2040 el cambio climático aceleraría dado a las grandes
cantidades de liberación de metano que podrían surgir; el océano sufriría un
calentamiento produciendo la muerte de las especies que alberga. Con la desaparición
de las grandes manadas los suelos dejarían de ser fértiles y productivos, generándose
la escasez de alimentos. Todo esto provocado por el hombre.

“Sino tomamos acciones el colapso de las civilizaciones y la extinción de los del mundo
viviente es lo que se espera …” (David Attenborough).

Según nuestro científico y naturalista la restitución del mundo es lo más simple, ya que
es capaz de regenerarse por si sola. Por lo que, este no dejará de existir, se mueve
bajo un ciclo de vida – muerte – transformación, en otras palabras, el planeta seguirá
existiendo a lo largo de los años, por lo que el real problema y riesgo es la existencia
de la humanidad.

Chernobyl, representa un emblema en lo que respecta la destrucción humana, luego

del desastre nuclear en 1986, hoy luce lleno de fauna y frondosa vegetación sobre los
restos de una ciudad que quedó totalmente inhabitable. La naturaleza hizo lo suyo y
hoy puede haber vida en ese lugar donde se pensó jamás volvería. Attenborough nos
transmite desde ahí la urgencia de ocupar la capacidad regenerativa de la naturaleza
para salvarnos.

“No se trata de salvar nuestro planeta, sino de salvarnos a nosotros

mismos”. (David Attenborough)

Conclusiones
Lo que pretende Attenborough es muy simple: nos necesitamos los unos a los otros,
no podemos existir sobre este planeta si no existen los miles de millones de especies
que conforman los diversos ecosistemas del planeta tierra, cada una tiene una función
crítica en cada lugar. Recuperar la biodiversidad y restituir las áreas silvestres es el
primer paso para sostener la vida nuevamente y para ello, necesitamos de acciones
grandes como la transición de energías de combustibles fósiles a energías verdes que
ocupen las inagotables fuentes de la naturaleza, a pequeñas y cotidianas como
cambiar radicalmente nuestra dieta a una alimentación basada en plantas, entre varias
otras opciones que tenemos en nuestras manos y con ejemplos de lugares donde han
funcionado.

Es así, que países como Marruecos han tomado la iniciativa en la implementación de

la energía renovable, la cual con el tiempo será inagotable. Esto significa volver y
replantearnos cómo llevamos haciendo las cosas, es esta la oportunidad que tenemos
en frente de que los miles de humanos que habitamos este mundo podamos hacerlo
de forma sustentable, fura de los márgenes que las grandes ciudades, la extracción
de recursos naturales y el consumo desmedido nos han enseñado para revertir el
devastador futuro que viene por delante si no actuamos.

La vida de este naturalista sin duda está llena de experiencias inolvidables, y el

privilegio de conocer los lugares más salvajes e inhóspitos del planeta es el sueño
hecho realidad de muchas personas. Esta misma trayectoria de casi 70 años es lo que
hoy lo ha llevado a continuar en este camino concientizando sobre la importancia del
cuidado de la naturaleza. Para él bajar los brazos no será una opción mientras no
existan transformaciones radicales en nuestro estilo de vida y producción que
detengan esta crisis.