Simón Bolívar: “hacer de todo el Nuevo Mundo una sola nación”
Sus estudios durante su juventud fueron
guiados por sus maestros Simón Rodríguez y Andrés Bello, que formaron en él a un político con ideas progresistas, respecto a la formación y organización de un gobierno propio de Sudamérica. Naciendo así la idea de conformar la Gran Colombia (“Estados Unidos de Sudamérica”), como poder geopolítico que hiciera el equilibrio con los Estados Unidos de Norte América. La Gran Colombia fue un proyecto político que integró los actuales países de Venezuela, Colombia, Ecuador y Panamá, y a los cuales se tenía proyectado adherir el territorio del Perú y de la Real Audiencia de Charcas (la actual Bolivia). Dicho proyecto no fue consolidado por los intereses económicos y políticos que guardaban los grupos sociales oligarcas de cada región.
José de San Martín: la
lucha en nuestra América La revolución política que se generaba en Europa durante el siglo XVIII, tuvo su influencia en el líder político José de San Martín (1778-1850), quien cultivó sus ideales bajo los estudios de la Ilustración y el liberalismo político. Con la concepción de que los pueblos son los que deben tomar las decisiones para su organización gubernamental, toma parte en las luchas por la independencia de Argentina, para posteriormente dirigirse a Chile con el ejército de los Andes hasta llegar al Perú. Sentido liberador de la integración latinoamericana- Panamericanismo - Patria Grande El Panamericanismo es una corriente política, social, económica y diplomática americana que tiene como objeto originar, promover, alimentar, acondicionar u organizar las relaciones de, cooperación y asociación que se puedan generar entre los países que forman América. Se considera como creador de esta corriente política a Simón Bolívar, quien vio que la unión de todos los Estados Americanos sería la fuerza ante los poderes europeos. El pensamiento del Panamericanismo sufrió un cambio de sentido cuando Norte América, construyó una concepción sobre la base de la doctrina Monroe, cuyo lema era “América para los americanos”, volviéndose fuertemente agresiva con políticas de Estado ante las naciones de Sudamérica; así, la doctrina cobraría un sentido distinto, que se entiende mejor como “América para los norte-americanos. A esta posición que se desarrolla en el siglo XIX, nace la postura contraria desde el trabajo de José Martin (1853-1895), de origen cubano, quien interpolaba que los americanos deberían crear una consciencia continental para establecer su propio desarrollo político, económico y social. Estos pensamientos fueron publicados en su ensayo titulado “Nuestra América”. Del texto se extrae la idea de que no basta con la libertad e independencia de las naciones, sino que se debería liberar e independizar la consciencia de la sociedad de todo mal colonizador.
La insubordinación fundante de Marcelo Gullo
El análisis político relacionado con el poder geopolítico y económico, desarrolla la problemática de la globalización. Esta relación se establece a raíz del estudio de los procesos históricos de las naciones con las diversas realidades que viven actualmente. Así, el politólogo Marcelo Gullo, estructura el concepto de poder, con base en las relaciones políticas entre países. Este poder se vincula con el orden entre países centrales y periféricos, que, según Gullo, demuestra la asimetría en las relaciones internacionales. Los países del centro (subordinantes) establecen sistemas económicos en beneficio para ellos mismos, mientras que los países periféricos (subordinados) brindan los recursos naturales, bienes y servicios, con réditos menores porque se encuentran bajo el sistema económico diseñado por los países del centro.
Las riquezas de Potosí como factor determinante de la
futura República Los estudios económicos de la Real Audiencia de Charcas (actual Bolivia) señalan a Potosí como el centro económico neurálgico para la organización territorial y social en aquellos tiempos. Así, bajo su ubicación geográfica, integraba regiones del sur del Perú, como, por ejemplo, Cusco, Puno y Arequipa; de la actual Bolivia, integraba a su dinámica económica las regiones altiplánicas de La Paz, Oruro y Potosí, así también fueron parte las regiones de Los Yungas paceños, donde la producción de coca era de suma importancia para los trabajadores mineros en Potosí. Los valles de Potosí, La Paz, Cochabamba, Chuquisaca, Santa Cruz y Tarija, de igual manera, eran parte del sistema económico con el aporte de su producción agrícola. Las regiones orientales de la Real Audiencia de Charcas, Santa Cruz, Chiquitos y Moxos se integraron con la producción ganadera, agrícola y textil. Regiones del norte de Argentina, también fueron parte de la dinámica económica que generaba Potosí, como, por ejemplo, las regiones de Jujuy, Salta y Tucumán, con sus producciones ganaderas y sus derivados. Potosí. Con lo estudiado, podemos reconocer la importancia de la explotación de las minas de plata de Potosí para la economía del mundo, riqueza que mantuvo a muchos países europeos en una estabilidad económica, aspecto que no ocurrió en nuestra propia región; por el contrario, se estableció un sistema de explotación que llegaba a niveles inhumanos. En lo político, marcaría la diferencia en el futuro de lo que sería Bolivia, a razón de que el poder español cuidaría hasta el último momento su bastión económico, Potosí. Por eso se explica que Bolivia fuera uno de los últimos países en consolidar su independencia, pese a que en sus tierras se dieron las primeras revoluciones en contra el sistema colonial europeo.