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PROPAGANDO EL EVANGELIO

1 Tesalonicenses 1:1-10
I. LOS TESALONICENSES RECIBIERON EL EVANGELIO. v. 4,5
A. Ellos ESCUCHARON la Palabra. v.5
Ningún hombre puede ser salvo hasta que alguien le comparta el mensaje del
evangelio. Romanos 10:14,15,17 Esto exige la participación de instrumentos
humanos.
B. El Espíritu Santo APLICO la Palabra. v.5

El evangelismo personal es inútil aparte del ministerio poderoso del Espíritu


Santo. Juan 16:8-11
C. Ellos fueron TOCADOS por la Palabra. v.9
Los Tesalonicenses se convirtieron de los ídolos a Dios; sus vidas fueron
transformadas. Nunca más serían las mismas personas.

II. LOS TESALONICENSES FUERON INSTRUIDOS EN EL EVANGELIO. :6,7


A. Llegaron a ser seguidores de sus padres espirituales.
1. Vidas santas. v. 5b,6

Pablo y sus consiervos habían sido ejemplos de la vida de santidad para


estos creyentes. La enseñanza más significante que podemos dar a nuestros
hermanos es la enseñanza de nuestro ejemplo.
2. Gozo en la Aflicción. v. 6b

Vidas santas y fidelidad en la propagación del evangelio siempre resultan en


la persecución. (2 Timoteo 3:12; 2 Timoteo 1:6-8)
3. Fidelidad en la Propagación del Evangelio. v.7,8
Pablo y sus colegas habían predicado fielmente el evangelio de Cristo. Sus
seguidores aprendieron a hacer lo mismo. ¿Estamos siendo buenos ejemplos
en este aspecto del ministerio?

B. Llegaron a ser seguidores del Señor. v.6


Ellos siguieron a Cristo, andando en sus pasos, buscando la salvación de los
perdidos. Marcos 10:45; Lucas 19:10
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III. LOS TESALONICENSES PROPAGARON EL EVANGELIO. v.8-10.
A. Ellos empezaron en los alrededores de Tesalónica.

Tenemos que empezar dónde estamos AHORA, o nunca llegaremos a lo último de


la tierra. (Romanos 9:1-3; 10:1)
B. Ellos llegaron más allá de su sector. "en todo lugar"

Ellos habían hecho su trabajo tan bien que nadie necesitaba hacer nada más. Todos
dentro del alcance de su influencia habían escuchado el evangelio, y habían
recibido la oportunidad de recibir a Cristo.
C. Ellos sirvieron al Señor a la luz de su pronta venida.

"y esperar de los cielos a su Hijo..."


Los Tesalonicenses fueron incentivados a evangelizar por su fe en la pronta venida
de Cristo.
Conclusión:
Si los Tesalonicenses podían hacerlo, nosotros lo podemos hacer también.
¿Aceptará el desafío?

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