Universidad Nacional Experimental Marítima del Caribe
Ministerio del Poder Popular para la Educación Superior Universitaria Cátedra: Seguridad Marítima Sección B-(OP)
EVALUACION CORTA NUMERO 3
Oficial: Cadete: Mena Ilayali Vargas Jorgelis CI: 24.334.008
Catia La Mar, Febrero de 2021
Evaluación Escrita N° 3 CONVENIO INTERNACIONAL PARA PREVENIR LA CONTAMINACIÓN POR LOS BUQUES (MARPOL) • Historia. A pesar de que el primer borrador del convenio MARPOL es del año 1973, los acontecimientos precursores que motivaron su nacimiento comenzaron a gestarse a principios del siglo XX, cuando la industrialización y la aparición del automóvil aumentaron de forma considerable la demanda de hidrocarburos y el tráfico marítimo mundial. Otros acontecimientos importantes que impulsaron el índice de construcción de buques fueron las guerras mundiales que incrementaron la construcción de buques de guerra y buques tanque además de su tamaño que alcanzaban las 16.400 toneladas de peso muerto (Buque de guerra T2). En los años 50 toma fuerza la necesidad de satisfacer la demanda energética por lo que se dispara la explotación masiva de los campos de petróleo de Oriente medio y los países del Golfo Pérsico. Estos acontecimientos influyen directamente en el tamaño y cantidad de los buques tanque, llegándose a buques de 100.000 toneladas de peso muerto a finales de esa década. Es importante señalar que en el año 1956 en consecuencia por la denominada «Guerra de los 7 días» entre Egipto e Israel el paso del «Canal de Suez» permaneció cerrado por lo que la ruta de unión entre Europa y Asia debía realizarse bordeando el cabo de Buena Esperanza, esto prolongaba de 15 días por la ruta del Canal de Suez a 30 días por el «Cuerno de África» por lo que los armadores se vieron obligados a construir buques mayores para rentabilizar los viajes. Estos pasaron de 200.000 Toneladas en 1960 a 500.000 pocos años después. Todos estos acontecimientos constituían un serio peligro de contaminación marina por lo que la comunidad internacional decidió constituir un convenio para prevenir este riesgo. En 1954 se convocó en Reino Unido una Conferencia Diplomática que aprobó un Convenio denominado «Convenio OILPOL 1954» que entró en vigor en 1958. A pesar de las medidas adoptadas en el Convenio OILPOL, estas se vieron insuficientes cuando en 1967 tuvo lugar un importante accidente marítimo, la varada del petrolero «Torrey Canyon» cuando navegaba por el «Canal de la Mancha» supuso un hito transcendental en la mentalidad de la protección del medio marino contra la contaminación. El derrame de 120.000 toneladas de petróleo crudo al mar constituyó la mayor catástrofe ecológica conocida hasta el momento. La primera consecuencia derivada de este accidente fue la convocatoria por la OMI de un periodo extraordinario de sesiones del Consejo para desarrollar un plan de acción sobre los aspectos jurídicos y técnicos del suceso que posteriormente se reflejarían en diversas enmiendas al Convenio OILPOL. Las siguientes consecuencias fueron la sensibilización de la Comunidad Internacional sobre la gran cantidad de buques potencialmente contaminantes (buques petroleros y buques de transporte de cargas tóxicas o peligrosas), esto impulsó la idea de revisar en profundidad el Convenio OILPOL que se mostraba insuficiente aun después de haber sido modificado con el añadido de numerosas enmiendas. • Creación. En 1969 la Asamblea de la OMI adopta la decisión de convocar una conferencia internacional para comenzar la elaboración de un nuevo convenio, que incorporando las reglas del OILPOL 1954 tuviera un ámbito de aplicación mayor. Los trabajos preparatorios se iniciaron en 1970 y la Conferencia Diplomática adopta el «Convenio MARPOL 73» celebrado entre los meses de Octubre y Noviembre de 1973. Este Convenio ya presentaba una estructura similar al actual con 1 Protocolo y 5 Anexos técnicos referentes a hidrocarburos, productos químicos, mercancías contaminantes transportadas en contenedores, aguas sucias y basuras. Los estados que ratificaran este Convenio estaban obligados a adoptar y cumplir el Protocolo y los 2 Primeros Anexos; es decir el de hidrocarburos y el de productos químicos. Los demás Anexos se podían adoptar de forma separada y voluntaria. El procedimiento de entrada en vigor a escala internacional requería la ratificación de al menos 15 estados cuyas flotas mercantes combinadas supongan al menos el 50% del tonelaje mundial. Esta condición dificultó una rápida entrada en vigor ya que hasta 1976 solo se habían recibido 3 ratificaciones (Jordania Kenya y Túnez) que representaban menos del 1% del tonelaje mundial. En los años 1976 y 1977 se produjeron numerosos accidentes en petroleros, esto dio origen a una nueva conferencia internacional sobre seguridad de buques tanque y prevención de la contaminación, que dió origen al Protocolo de 1978 del Convenio. Como el Convenio MARPOL 73 aún no había entrado en vigor, el Protocolo 78 se incorporó al del 73, pasando entonces a denominarse «MARPOL 73/78». • ¿Cómo está dividido? Anexo I: Reglas para prevenir la contaminación por hidrocarburos (entrada en vigor 2 de octubre de 1983) En el Anexo I se aborda la cuestión de la prevención de la contaminación por hidrocarburos como consecuencia de medidas operacionales, así como de derrames accidentales; las enmiendas de 1992 al Anexo I hicieron obligatorio el doble casco para los petroleros nuevos e incorporaron un calendario de introducción gradual para que los buques tanque existentes se adaptasen al doble casco, lo que fue revisado posteriormente en 2001 y 2003. Anexo II: Reglas para prevenir la contaminación por sustancias nocivas líquidas transportadas a granel (entrada en vigor: 2 de octubre de 1983) En el Anexo II se determinan con precisión los criterios relativos a las descargas y las medidas destinadas a prevenir la contaminación por sustancias nocivas líquidas transportadas a granel; se han evaluado e incluido unas 250 sustancias en la lista que figura como apéndice del Convenio; la descarga de sus residuos se permite tan sólo en instalaciones de recepción, a menos que se cumplan ciertas concentraciones y condiciones (que varían según la categoría de las sustancias). En cualquier caso, no se permiten las descargas de residuos que contengan sustancias perjudiciales a menos de 12 millas de la tierra más próxima. Anexo III: Reglas para prevenir la contaminación por sustancias perjudiciales transportadas por mar en bultos (entrada en vigor 1 de julio de 1992) En el Anexo III se establecen prescripciones generales para la promulgación de normas detalladas sobre empaquetado, marcado, etiquetado, documentación, estiba, limitaciones cuantitativas, excepciones y notificaciones. A los efectos del presente anexo, "sustancias perjudiciales" son las consideradas como contaminantes del mar en el Código marítimo internacional de mercancías peligrosas (Código IMDG)* o las que cumplen los criterios que figuran en el apéndice del Anexo III. Anexo IV: Reglas para prevenir la contaminación por las aguas sucias de los buques (entrada en vigor: 27 de septiembre de 2003) En el Anexo IV se establecen prescripciones para controlar la contaminación del mar por aguas sucias: la descarga de aguas sucias al mar está prohibida a menos que el buque utilice una instalación de tratamiento de aguas sucias aprobada o descargue aguas sucias previamente desmenuzadas y desinfectadas mediante un sistema aprobado, a una distancia superior a 3 millas marinas de la tierra más próxima, o a una distancia superior a 12 millas marinas de la tierra más próxima si no han sido previamente desmenuzadas ni desinfectadas. Anexo V: Reglas para prevenir la contaminación ocasionada por las basuras de los buques (entrada en vigor: 31 de diciembre de 1988) El Anexo V trata de los distintos tipos de basuras y especifica las distancias desde tierra y la manera en que se pueden evacuar; la característica más importante del anexo es la total prohibición impuesta al vertimiento en el mar de toda clase de plásticos. Anexo VI: Reglas para prevenir la contaminación atmosférica ocasionada por los buques (entrada en vigor: 19 de mayo de 2005) En el Anexo VI se establecen los límites de las emisiones de óxidos de azufre y de óxidos de nitrógeno de los escapes de los buques y se prohíben las emisiones deliberadas de sustancias que agotan el ozono; para las zonas de control de emisiones designadas se establecen normas más estrictas en relación con la emisión de SOx, NOx y de materias particuladas. En un capítulo adoptado en 2011 se establecen medidas técnicas y operacionales obligatorias de eficiencia energética encaminadas a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de los buques. • ¿Cómo el estudio y el conocimiento del Convenio MARPOL 73 ayuda a la formación de un Cadete de Náutica de la UMC como el 3er Of de Marina Mercante Venezolana del mañana? Al contrario de la creencia popular, el mayor pulmón del planeta no es el Amazonas, son los océanos, según afirma National Geographic España. Gracias a la presencia del fitoplancton los océanos producen entre el 50 y el 85 % del oxígeno que se libera cada año. Además, los mares actúan como un importante sumidero de dióxido de carbono, lo que reduce considerablemente los niveles de gases de efecto invernadero en la atmósfera. Lamentablemente, los altos niveles de contaminación ya han afectado a más de 800 especies marinas y, según ha advertido el Secretario General de Naciones Unidas, Antonio Gutiérrez, en su último informe sobre los océanos y el derecho al mar, “la situación de los océanos nunca ha sido tan peligrosa como ahora”. Una de las fuentes de contaminación en el mar es generada por los buques a través de la descarga o derrame de diferentes sustancias nocivas para los océanos, entre esos se encuentran los hidrocarburos, las aguas sucias, las basuras, entre otros. Ya hechos que se han efectuados en el mar que provocan grandes consecuencias al ecosistema marino han conllevado a la creación del convenio MARPOl, contribuyendo enormemente a la significativa disminución de la contaminación procedente del transporte marítimo internacional y rige el 99% del tonelaje de la flota mercante del mundo. Es de gran importancia adentrar y adiestrar al personal que en un futuro se desempeñara en el ámbito marítimo, ya que esto da paso a la concientización y regula a través de directrices el correcto uso, manejo, y carga o descarga de cualquier sustancia nociva para el mar, aplicando graves consecuencias por el incumplimiento de cualquier personal de a bordo de estas reglas.