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PROYECTO FINAL
INTRODUCCIÓN 3
GRAN IDEA. 4
OBJETIVO GENERAL 4
OBJETIVOS ESPECÍFICOS 4
JUSTIFICACIÓN 5
Relación que guarda la programación didáctica con elementos
curriculares del grado escolar elegido. 6
MARCO TEÓRICO 7
CONCEPTOS BÁSICOS 7
Principios del álgebra 7
Lenguaje algebraico 7
Otros conceptos básicos importantes: 8
GLOSARIO 9
DESARROLLO 11
SECUENCIA DIDÁCTICA 12
BIBLIOGRAFÍA 16
ANEXOS 17
Anexo 1. Actividades del cuento. 17
Anexo 2. Lista de cotejo sesión 1. 23
Anexo 3. Presentación en Canva para clase. 24
Anexo 4 . Lista de cotejo sesión 2. 25
Solucionario. 27
INTRODUCCIÓN
Aprender a hablar es un proceso madurativo en el cerebro de toda persona.
Este proceso se desarrolla cuando el músculo que rige todas las acciones de
nuestro cuerpo es suficientemente capaz de entender que existe la posibilidad de
hacerle saber al entorno nuestros deseos y necesidades.
GRAN IDEA.
Cuento algebraico: Aprendizaje del lenguaje algebraico a través de un cuento.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
JUSTIFICACIÓN
El grado escolar para el cual está diseñada esta Gran Idea es el primer año
de preparatoria, para el cual la Secretaría de Educación Pública, a través de la
Dirección General de Bachilleratos, da a conocer que en el primer semestre la
materia de Matemáticas I versa en el lenguaje algebraico, como lo muestra la
siguiente tabla.
CONCEPTOS BÁSICOS
La palabra álgebra proviene de ilm al-jabr w’al muqabala, que se traduce como la
ciencia de la restauración y de la reducción.
Lenguaje algebraico
Algunas de las operaciones que se utilizan comúnmente también tienen otra forma
de expresarse en el lenguaje algebraico.
Variable: letra o símbolo que cambia su valor, estas pueden ser independientes o
dependientes.
Coeficiente: número que multiplica una literal (esta multiplicación está indicada
cuando una literal y una constante están juntas sin un signo intermedio, además si
una literal está sola, su coeficiente será siempre de +1 o -1, según sea el caso)
Número par 2n
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NOTA: Esta opción aplica para profesores que van a impartir clases en el
aula remota, ejemplo: Jamboard, Notes (Apple), Webex, etcétera.
7. Aula virtual: La planeación didáctica contará con un aula virtual, que le
permitirá repasar la clase cuantas veces quiera al alumno presencial y
servirá como guía principal para el alumno que se encuentra aprendiendo
de manera remota. Esta aula contará con ejercicios para resolver y
conceptos que puede ver y practicar al momento.
SECUENCIA DIDÁCTICA
Gran idea:
Cuento algebraico: Aprendizaje del lenguaje algebraico a través de un cuento.
Justificación:
El aprendizaje del lenguaje algebraico por lo regular es a través de la memoria,
por lo que consideramos más atractivo y fácil introducir a los alumnos a este
lenguaje por medio de un cuento.
Profesor: Sesión: 1
Asignatura: Matemáticas 1
Estrategia didáctica:
Sesión 1: Actividades
Asignatura: Matemáticas 1
Aprendizaje esperado:
Estrategia didáctica:
Sesión 2: Actividades
● Actividad 6: Cierre.
ANEXOS
Anexo 1. Actividades del cuento.
UN SUEÑO INCÓGNITO
María tenía 15 años cuando hizo el viaje más importante de su vida, el día
que le ocurrió se levantó de la cama como si no presintiera lo que le iba a suceder,
porque cuando alguna cosa importante nos va a pasar algo dentro de nosotros
nos pica, nos manda una alerta con cosas sutiles, como si el café oliera diferente o
llegáramos a la parada de autobús segundos más tarde de lo que habitualmente lo
hacemos. Pero María no percibió nada, quizás porque la noche anterior se había
desvelado en su celular, quizás porque por primera vez había terminado sus
tareas no en la escuela sino en su casa.
Ese lunes, María se despertó con la voz de su mamá, otra vez había
apagado la alarma de su celular sin darse cuenta. Cuando se despabiló, notó que,
si no salía de su cama en ese momento, sólo tendría 5 minutos para bañarse, 5
para cambiarse y 5 para comer su taco mientras corría a la parada del bus. Se
recriminó por no ser más disciplinada en el inicio del día, le encantaba tomar
duchas calientes de 10 minutos, tomar su desayuno mientras veía el resumen de
20 minutos de su serie favorita, definitivamente dedicarle al menos 20 minutos a
su arreglo personal, tenía en mente que ya estaba en primero de preparatoria en
una escuela nueva y compañeros nuevos, el amor de su vida podría estar sentado
junto a ella o en el salón de al lado así que debía verse bien siempre, por lo que,
para no arruinar su “outfit”, debía tomarse 10 minutos para llegar tranquilamente a
la parada.
Como ella pensó, tuvo que hacerlo todo rápidamente, y cuando uno hace
todo aprisa el buen humor no se manifiesta. Parece como si el tiempo faltante se
multiplicara en estrés, dado que sólo ocupó una cuarta parte del tiempo en
alistarse para la escuela, su mamá parecía cuatro veces más estresada de lo
normal.
Con prisa se medio bañó, se vistió sin fijarse en lo que se había puesto,
tomó el taco que su mamá le había servido, su mochila y el dinero del día y salió
corriendo. No se despidió bien de su mamá porque si se tardaba más se le iba el
autobús, pero también porque la iba a regañar por salir tan tarde. En el camino,
casi se ahoga con un pedacito de tortilla quemada.
Corrió a la esquina, dobló hacia la derecha, vio el autobús acercándose, su
cerebro le dio la orden a las piernas de acelerar, si no debería esperar 10 minutos
hasta que pasara el siguiente pero no podía darse ese lujo. Sus pies empezaron a
moverse más rápido y más rápido, chifló con todas sus fuerzas al chofer para que
la notara y la dejara subir. El chofer la esperó, subió jadeante, pagó sus 5 pesos y
se sentó casi sin aliento en los asientos de atrás.
Ya en la escuela, más tranquila y menos sudada, entró a su salón, saludó a
sus amigas y se sentó junto a Karla. Como llegó “barriéndose”, no pudieron
platicar, la maestra, quien desafortunadamente era muy puntual, ya había
empezado a dar su clase. Qué desgracia, era álgebra, la materia más odiada. Ni
modo, a veces no se puede evitar lo que detestamos.
La maestra saludó a todos, pidió que guardaran su celular para no
distraerse (como si no se pudieran entretener pasándose papelitos), empezó a
hablar de algo, María no se acuerda, eran algunas palabras que la maestra dijo
serían importantes aprender, pero después de tanta adrenalina y ahora tanta
calma, sus ojos se empezaron a cerrar. Antes de quedarse bien dormida, pensó
que si la maestra no fuera tan gruñona y los dejara revisar de vez en cuando las
notificaciones, ella podría mantenerse despierta, pero no, esto no pasaba, sólo
sintió cómo se transportaba a otro lugar, a pesar de que la banca era de metal, ya
estaba tibia, un sitio cómodo para descansar.
María no sabía cuánto tiempo había pasado, al abrir los ojos el salón
estaba vacío, -qué injusticia-, pensó, -Karla y las demás se fueron al receso
dejándome aquí-. Buscó el dinero que había tomado cuando salió corriendo pero
sólo encontró 15 pesos, de los cuales 5 tenía que apartar para tomar el camión de
vuelta a su casa, enojada y triste porque le faltaría la mitad del dinero para
poderse comprar su torta de milanesa salió del salón evitando tropezar con las
mochilas que los demás habían dejado en los pasillos.
Afuera del salón no había nadie, le pareció extraño que a esa hora el mar
de alumnos no se estuviera moviendo entre los salones y jardines. De pronto notó
cómo sus pasos se sobreponían al silencio, únicamente las gomas de sus suelas
emitían un pálido sonido al pisar las piedritas regadas. Fue a la cafetería pero en
el camino no vio a nadie, en la tienda sólo las hornillas estaban prendidas, alguna
comida seguía cociéndose. Parecía que todos habían salido corriendo de
improvisto, pero nadie se había acordado de ella.
Asustada, decidió recorrer el camino más largo hacia la salida, por el
edificio que era tres veces más largo que su ancho, quizá por ahí sí podría ver a
alguien más, ni un alma se cruzó con ella, intentó forzar la puerta para salir pero
estaba bien cerrada. Entró en pánico, no sabía a dónde ir, el estómago se le hizo
nudo y empezó a correr por todas partes buscando ayuda. Gritó, pataleó, lloró sin
embargo nadie se le acercó. Decidió irse a “berrear” (como le decía su mamá
cuando lloraba sin control) a la biblioteca. Al abrir el salón el olor de la tinta invadió
su nariz, se acurrucó entre dos libreros y le dio rienda suelta a las lágrimas. De
pronto, una voz masculina la hizo parar.
-¿Qué te pasa?- Le preguntó el hombre junto a ella. María se sobresaltó,
asustada se levantó de inmediato y se echó para atrás. El hombre, vestido con
túnica, barba y gesto adusto, comprendió que su presencia era extraña para
María. Suavizó su voz y le dijo con paciencia -No te asustes, mi nombre es
Diofanto, vengo de Alejandría, pero sólo me presento cuando hay problemas que
resolver, supongo que estoy aquí porque tú necesitas ayuda.
María, aún asustada, al no tener otra opción, decidió confiarle su
predicamento. -Soy María, me dormí en clase de álgebra y al despertar no había
nadie, no puedo salir de la escuela, no funciona mi celular, no sé qué hacer-. Y las
lágrimas brotaron a borbotones otra vez.
-Calma, pequeña, yo te ayudaré a salir de aquí pero antes debemos
analizar todo lo que te ocurrió hasta nuestro encuentro-, Diofanto ofreció su mano
a María, ella sin más opciones accedió, una vez que estuvieron fuera de la
biblioteca, Diofanto le pidió que recordara cómo había sido su día antes de que se
quedara dormida.*
-En la mañana- empezó María, -me pasó lo de siempre, parece que no
puedo levantarme a tiempo para llegar a clases sin problema-. -Vamos a hacer la
cuenta-, dijo Diofanto, -anota en esta hoja, de forma ordenada, tus actividades, el
tiempo que te toma hacerlas y el tiempo en que las hiciste hoy.
María le preguntó,- ¿pero eso de qué me va a servir?- Diofanto soltó una
pequeña risa y le dijo, -te aseguro que si logras calmarte, le dedicas tiempo a
organizar y analizar los datos verás que tú solita le encontrarás sentido, además te
ayudará a salir de aquí-.
Una vez que escuchó esto, María rápidamente tomó la hoja y comenzó a escribir,
aunque no le entusiasmaba la idea de pensar en números, definitivamente sí
quería salir de allí.
Pensó, -Mmm... siempre me gusta darme duchas de 10 min, pero hoy
solamente tuve 5, en 20 min me habría quedado mejor esta cara, sólo me dio
tiempo de hacerme una cola de caballo, ni siquiera desayuné, sólo me atraganté
un poco y corrí al autobús-.
Actividad 1. Identifica las actividades que realizó María, enlístalas, coloca el
tiempo que le tomaría hacer cada una de ellas normalmente, y el tiempo en que
las realizó.
Bañarse
Arreglarse
Desayunar
Caminar al autobús
TOTAL
“Así que hoy en ______ minutos traté de ajustar lo que normalmente me gusta
hacer en ______ minutos”, concluyó.
Diofanto tomó la hoja y dijo -Ya veo, hoy sí que te has pasado, con razón tu
mamá se enojó-. María se ruborizó un poco pero sabía que tenía razón.
-Esa debe ser una de las razones por las cuales me encuentro contigo, veo
que te tengo que ayudar a organizarte, vamos a pensar cuántas veces es más
pequeño el tiempo que le dedicas a tus actividades con prisa en comparación con
el tiempo que le dedicas cuando no tienes prisa-, dijo Diofanto.
Bañarse
Arreglarse
Desayunar
Caminar al
autobús
TOTAL
Actividad 2.1 Con tus palabras, escribe la relación de los tiempos utilizados.
María lo pensó un poco, -bueno... tal vez si para bañarme hubiera tenido el
doble de tiempo, y para arreglarme unos 15 min más, no habría tenido que correr
al autobús- dijo algo molesta, dándose cuenta que efectivamente tenía que
organizarse mejor, siguió pensativa y murmuró: -en realidad si hubiera tenido
cuatro veces más el tiempo que tuve hoy para mis actividades, nada de esto
hubiera pasado.
-Muy bien, María, es importante que nosotros podamos representar de
diferentes maneras una idea. Te tengo un reto, si tú logras expresar esta relación
usando lenguaje matemático, te devolveré el uso de tu celular-, le dijo Diofanto.
María lo dudó, ella detestaba las matemáticas, estaba segura de que sabía sumar
y restar, pero multiplicar y dividir aún le costaba, es más, esa misma mañana se
había quedado dormida en la clase de álgebra. Lo pensó un poco, sin embargo
llegó al mismo punto, si no se esforzaba se quedaría para siempre ahí. -Lo
intentaré, te prometo que lo intentaré, pero no estoy segura de que lo pueda
hacer-, contestó María. -Lo único que puede pasar si lo intentas, es que un día, lo
vas a lograr-, reviró Diofanto.
Actividad 3.- Ayuda a María a resolver el reto, escribe en forma matemática la
relación de los tiempos.
-Tienes razón, nunca he sido buena en esto pero creo que podría dividir los
60 minutos que debía tener, entre los 15 que realmente utilicé, y bueno obtendría
algo pero no sé bien qué-, dijo María.
Diofanto con una gran sonrisa dijo, -¡eso es, María! Ya nos estamos
entendiendo, te ayudaré un poco, a veces cuando tenemos un dato desconocido
podemos ponerle un nombre, en matemáticas es común que utilicemos una letra,
cuando te encontré no te conocía, para mí eras tan sólo una niña, tú eras mi dato
desconocido-.
María exclamó más entusiasmada, -¡entonces a mi dato le puedo poner un
nombre algo así como “las veces más” de tiempo que debí tener!-.
-Así es María, pero sabes, ese nombre es muy largo ¿cierto? Podríamos
llamarle x a este dato y bueno, ahora sí lo estamos diciendo en un lenguaje
matemático, a x también lo conocemos como incógnita, por lo que x sería igual a
60 entre 15-, explicó Diofanto.
-¡Wow!-, exclamó María, -creo que he escuchado algo así en clase, pero
como te he dicho antes, el álgebra no me gusta tanto, aunque ahora contigo lo veo
bastante fácil-.
-Claro, María, sólo es cuestión de intentarlo, y bueno, como te dije lo
prometido es deuda, desde ahora ya puedes usar tu celular-, dijo Diofanto.
María muy emocionada, tomó su teléfono, pensó en llamar a su mamá para
por fin salir de ahí, cuando volteó para darle las gracias a Diofanto, él ya no
estaba, su celular comenzó a vibrar y sonar muy fuertemente y en un pestañeo,
despertó.
Se levantó abruptamente de su cama, no lo podía creer, este sueño le
había parecido tan real, miró su teléfono que seguía sonando, seis en punto
marcaba, apagó su alarma y decidió levantarse de inmediato, esta vez no le
volvería a pasar, pensó.
Entró a darse una buena ducha de 10 minutos, se peinó y hasta se maquilló
ligeramente en 20 minutos, disfrutó de ver el capítulo de 20 min de su serie,
mientras desayunaba, incluso su mamá la miró asombrada, tomó su dinero del
día, se aseguró que fuera lo suficiente para sus pasajes y su torta favorita, se
despidió de su mamá y salió tranquilamente hacia la parada de autobús, al llegar
miró su reloj y dijo -10 minutos, qué exactitud-.
Al llegar a la escuela saludó a Karla, tomaron sus lugares, la maestra llegó
y dijo, -qué puntual María, felicidades, muy bien todos, el día de hoy veremos el
tema de lenguaje algebraico, hablaremos de Diofanto de Alejandría, considerado
el padre del álgebra-, María agachó la cabeza, vio su libro, en la portada estaba su
amigo Diofanto sorprendida lo miró y él solamente le guiñó el ojo.
3. La redacción es coherente y
clara.
4. La ortografía es correcta.
5. El alumno respondió
correctamente al menos 6 de
7 preguntas del juego de
Kahoot.
CALIFICACIÓN TOTAL:
Presentación en Canva:
https://www.canva.com/design/DAEOonBUULY/cjlEYKUkP3EnpMYCi-7jjw/view?
utm_content=DAEOonBUULY&utm_campaign=designshare&utm_medium=link&ut
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1. La elaboración de las
actividades se realizó dentro de
los tiempos establecidos por el
docente.
3. La redacción es coherente y
clara.
4. La ortografía es correcta.
CALIFICACIÓN TOTAL:
CONCLUSIÓN
En la enseñanza del álgebra se le debe dar una gran importancia al correcto uso
del lenguaje técnico, pues es esta la base para aprender temas de mayor
complejidad. Los contenidos que un estudiante debe aprender por nivel académico
ya están establecidos por el órgano gubernamental encargado de ello, es el
docente quien decide cómo abordarlo, si desde una posición tradicional, es decir,
brindándole a sus alumnos los conceptos teóricos para que ellos lo repliquen o
generando nuevas estrategias didácticas que tengan por objetivo la reflexión de
las ideas. Temas que se consideran complejos, como escribir oraciones de
lenguaje común a lenguaje algebraico se pueden abordar desde una perspectiva
afable para el estudiante si se le engancha con una situación ya conocida, como
es el hecho de organizar sus actividades en la mañana. Así, hay muchas maneras
en cómo llevar al estudiante a construir el conocimiento.
SOLUCIONARIO
SESIÓN 1
Actividad 1/ Sesión 1.
Actividad 2 / Sesión 1.
Actividad Letra que va a Tiempo que toma Tiempo que tomó
representar la normalmente
actividad
Caminar al C 10 minutos.
autobús
María usa menos tiempo cuando tiene prisa y más tiempo cuando no tiene prisa.
María usualmente necesita 60 minutos para sus actividades, pero solo utilizo 15.
Actividad 3 / Sesión 1.
60 = 15
Tiempo = t
60 = 15 t
SESIÓN 2
Actividad 2 / Sesión 2.
“...el tiempo faltante se multiplicará en estrés”
“...15 pesos, de los cuales 5 tenía que apartar para tomar el camión de vuelta a su
casa”
“... el edificio que era tres veces más largo que su ancho”
“...creo que podría dividir los 60 minutos que debía tener, entre los 15 que
realmente utilicé”
Actividad 3 / Sesión 2.
xy Producto
x/4 = ¼ t Cociente
4x Producto
x-y = 15 - 5 Diferencia
x/2 ó ½ D Cociente
3x Producto
x - y = 10 - 5 Diferencia
Actividad 4 / Sesión 2.
xy
x/4
4x
x-y = 15 - 5
x/2 ó ½ D
3x
x - y = 10 - 5
x/y = 60/15