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NANO
NORMAS
DE DIAGNÓSTICO
Y TERAPÉUTICA DE
ENFERMEDADES
OCULARES
EDICIONES DEL
CONSEJO ARGENTINO
DE OFTALMOLOGÍA
Nano, Hugo Dionisio, 1928-2020.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares /
editado por Hugo Dionisio Nano, María Eugenia Nano. — 3a ed.
ampliada. —Buenos Aires : Ediciones del Consejo Argentino de
Oftalmología, 2021.
Libro digital (PDF)
Coordinación editorial
Lic. Raúl Escandar
Diagramación y diseño
Sebastián Centurión
Producción editorial
Ediciones Científicas Argentinas
Impreso en Argentina
ISBN 978-987-1572-21-2
Tabla de contenidos
Prólogo
Introducción
1. PÁRPADOS
Actualización: Dr. Eduardo Soraide
2. LAGRIMAL
Actualización: Dr. Alfredo Roude
Colaboradores: Dres. Eduardo Soraide y Gonzalo Anzalaz
3. CONJUNTIVA
Actualización: Dr. Alfredo Roude
Colaborador: Dr. Martín Lukasiewicz
4. CÓRNEA
Actualización: Dres. Alfredo Roude y Daniel del Campo
Colaborador: Dr. Mauro Cimmino
5. ESCLERA
Actualización: Dras. María Belén Puccio y María Laura Puertas
6. CRISTALINO
Actualización: Dres. Germán Bianchi y José María Múgica
7. INFLAMACIONES OCULARES
Actualización: Dres. Gustavo Budmann y Alfredo Roude
Colaboradores: Dras. María Laura Puertas y
María Belén Puccio
8. ÓRBITA
Actualización: Dr. Eduardo Soraide
Colaboradores: Dres. Inés Balogh-Kovacs y Hernán Ghersi
9. RETINA Y VÍTREO
Actualización: Dres. Santiago Castro Feijóo y Clelia Crespo Nano
Colaboradora: Dra. Mariana Pozzi Azzaro
10. GLAUCOMA
Actualización: Dr. Fernando Cataldi
Colaborador: Dr. Enrique Paz
11. TRAUMATISMOS
Actualización: Dr. Alfredo Roude
Colaborador: Dr. Mauro Cimmino
12. CONSULTA PEDIÁTRICA
Actualización: Dr. José María Múgica
Colaboradora: Dra. Mariana Pozzi Azzaro
13. ESTRABISMO
Actualización: Dres. Leonardo Fernández Irigaray
Colaboradores: Ortoptista Teresa Irusta de Nano;
Opticas María Laura Martinelli y Silvia Cadoppi,
Dr. José María Múgica
14. CIRUGÍA REFRACTIVA
Actualización: Dr. Germán Bianchi
Colaboradores: Dres. Daniel del Campo,
Eduardo Soraide y Ariel Cloës
15. NEUROOFTALMOLOGÍA
Actualización: Dra. María Macarena Clementi
16. AYUDAS PARA LA PRÁCTICA
EN CONSULTORIO
Gotas dilatadoras para midriasis
Dr. José María Múgica
Prueba de Seidel: detección de herida filtrante
Dr. José María Múgica
Técnica de inyección subconjuntival
Dra. Clelia María Crespo Nano
Técnica para inyección subtenoniana
Dra. Clelia María Crespo Nano
Dosis y diluciones
Dr. Fernando Pellegrino
Toxicidad medicamentosa ocular
Dr. Federico Gerson
Conceptos de limpieza, antisepsia y esterilización
Lic. María Laura Sciurano
Controles en oftalmopediatría
Dra. Mariana Pozzi Azzaro
Ayudas en baja visión
Dra. Andrea Parra
Lentes de contacto: complicaciones, recetas y control
Ing. Matías Acerbi y Dr. Mauro Cimmino
Rehabilitación de la ceguera
Lic. María Eugenia Nano y María Bayá Casal
Prólogo
AP Apertura palpebral
AV Agudeza visual
BUT Break up time
CVC Campo visual computarizado
ECB Examen clínico básico
EOB Examen ocular básico
HTA Hipertensión arterial
LGB Laboratorio general básico
NAD Nada
OCT Tomografía de coherencia óptica
PIO Presión intraocular
RFG Retinofluoresceinografía
TAC Tomografía axial computarizada
VO Vía oral
1
Párpados
Orzuelo-chalazión
1. Definición-etiología
Orzuelo es la inflamación aguda, localizada y piógena, de una o
más glándulas del párpado:
de Meibomio (ojo interno)
de Zeiz (ojo externo)
de Moll (ojo externo)
o de un folículo piloso.
causada más frecuentemente por el Staphylococcus aureus y en
algunos casos por el Streptococcus pyogenes y otros.
Chalazión es un granuloma que se desarrolla alrededor de una
glándula sebácea con secreción de grasa a su alrededor. Puede
aparecer después de un orzuelo.
2. Datos epidemiológicos
Es más común en pacientes con blefaritis.
3. Motivo de consulta
Sensación de molestia, eritema y tumefacción local, edema pal-
pebral, cuerpo extraño o dolor en el párpado afectado más o
menos intenso acompañado de dolor exquisito, en general bien
localizado, que se exacerba a la palpación.
Tumoración palpebral sin signos inflamatorios (chalazión).
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Diabetes.
Estados de inmunosupresión.
Piel seborreica.
Alteración de la refracción.
Rosácea.
Acné juvenil.
Heredofamiliares
No tiene.
Párpados
13. Controles
Semestrales (posquirúrgicos).
14. Secuelas
Ambliopía.
En caso de la ptosis congénita, falta de simetría bilateral perfec-
ta (posquirúrgico).
15. Prevención
No tiene.
16. Información a dar al paciente
El tratamiento quirúrgico es la regla en la forma congénita y
aponeurótica senil, cuando afecta el eje pupilar. En la traumá-
tica el tratamiento es quirúrgico si no se resuelve en 6 meses.
La corrección estética no siempre es perfecta; puede haber dife-
rencia en la abertura palpebral.
17. Bibliografía
Albert DM, Jakobiec FA. Principles and practice of ophthalmology.
Philadelphia: Saunders, 2008.
American Academy of Ophthalmology. Fundamentals and prin-
ciples of ophthalmology. San Francisco: American Academy of
Ophthalmology, 2014-2015.
American Academy of ophtalmology. Orbita, párpados y aparato
lagrimal. Barcelona: Elsevier, 2012 (Curso de ciencias básicas y
clínicas; 2011-2012, sección 7).
Hospital for Sick Children (Toronto). The eye in childhood. Chica-
go, Year Book Medical Publishers, 1967.
Nerad JA. Cirugía oculoplástica: los requisitos en oftalmología. Ma-
drid: Elsevier Science, 2001.
Roy FH, Fraunfelder FW, Fraunfelder FT. Current ocular therapy.
6th ed. Philadelphia: Saunders Elsevier, 2008.
Scheick F, Leydhecker W, Sampaolesi R. Bases de la oftalmología.
18a. ed. Buenos Aires: Panamericana, 1987.
Scheie HG, Albert DM. Oftalmología de Adler. Buenos Aires: Inte-
ramericana, 1972.
Tosi B. Manual de oftalmología. Buenos Aires: Inter-Médica, 1980.
Weil D, Plotkin C, Aguilar A. Órbita, párpados y aparato lagrimal.
Salta: Universidad Católica de Salta; Buenos Aires: Consejo Ar-
gentino de Oftalmología, 2007 (Maestría a distancia en oftal-
mología; 12).
Ectropión
1. Definición
Alteración de la posición del borde palpebral caracterizada por
eversión del borde, con lo que la conjuntiva tarsal queda dirigi-
da hacia afuera.
2. Datos epidemiológicos y etiología
Es más frecuente en el párpado inferior.
El ectropión congénito es poco frecuente.
La forma senil se observa con más frecuencia en el nivel del pár-
pado inferior y es la más frecuente.
De acuerdo con su etiología se lo clasifica en:
• Congénito.
• Paralítico (lesiones del VII par) afecta párpado inferior.
• Senil/involutivo.
• Cicatricial.
• Mecánico.
3. Motivo de consulta
Irritación ocular.
Lagrimeo.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Edad.
Traumatismo.
Cirugías.
Heredofamiliares
Sin relación con la patología.
5. Examen ocular general
Puede ser unilateral o bilateral.
Se observa la eversión del margen palpebral, con exposición de
conjuntiva tarsal, epífora si afecta el párpado inferior, ya que
el punto lagrimal inferior no se aposiciona al lago lagrimal,
queratinización de la conjuntiva palpebral expuesta, inyección
conjuntival, queratitis punctata superficial (también por exposi-
ción), irritación de la piel palpebral provocada por el constante
lagrimeo (que se produce por irritación del trigémino y por la
separación del punto lagrimal de la superficie ocular).
• Triquiasis.
Párpados
• Queratitis.
• Ulceras corneales.
Exámenes complementarios oculares
Examen con lámpara de hendidura: para observar el estado cor-
neal y conjuntival, previa tinción con fluoresceína.
CS Estudio de la vía lagrimal.
6. Exámenes físicos
General
No aporta datos de importancia.
Complementarios
LGB
Prueba de tracción palpebral. Separación de margen de párpado
mediante pellisco. Normal hasta 6 mm. Mide elasticidad.
Prueba de resorte. Se estira el párpado hacia abajo, al sortar-
lo volverá como un resorte a su posición en forma espontánea.
Mide laxitud.
7. Criterios diagnósticos
Alteración en la posición del margen palpebral.
Lagrimeo.
Irritación ocular.
8. Diagnóstico diferencial
Forma congénita
Con coloboma parcial.
Con buftalmía.
Síndrome de Down.
Síndrome de Löwe.
Forma paralítica
Parálisis de Bell.
Síndrome de Guillain-Barre.
Ectropión senil.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Tratar la queratitis por exposición con agentes lubricantes e ins-
tilación de ungüentos; fijación de los párpados durante el sueño.
La inflamación del margen palpebral se trata con fomentos va-
rias veces por día y antibióticos tópicos (eritromicina).
Colocar los párpados en posición con tela adhesiva puede ser
una medida temporaria.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
15. Prevención
No tiene.
16. Información a dar al paciente
Es una enfermedad que, debido a la molestia que causa y a las
complicaciones corneales que puede producir, siempre debe
tratarse con cirugía, con lo que en la mayoría de los casos se
logra la resolución del problema.
17. Bibliografía
Albert DM, Jakobiec FA. Principles and practice of ophthalmology.
Philadelphia: Saunders, 2008.
American Academy of ophtalmology. Orbita, párpados y aparato
lagrimal. Barcelona: Elsevier, 2012 (Curso de ciencias básicas y
clínicas; 2011-2012, sección 7).
Boyd BF. Atlas de cirugía ocular. Panamá: Highlights of Ophthal-
mology, 1995.
Cullom RD, Chang B. The Wills eye manual. 7th ed. Philadelphia:
Lippincott, 2016.
Nerad JA. Cirugía oculoplástica: los requisitos en oftalmología. Ma-
drid: Elsevier Science, 2001.
Newell FW. Oftalmología: fundamentos y conceptos. Madrid:
Mosby, 1993.
Pavan-Langston D. Manual de diagnóstico y terapéutica ocula-
res. 3a. ed. Barcelona: Ediciones Científicas y Técnicas, 1993.
Roy FH. Ocular differential diagnosis. 4th ed. Philadelphia: Lea &
Febiger, 2009.
Tosi B. Manual de oftalmología. Buenos Aires: Inter-Médica, 1980.
Entropión
1. Definición
Es la inversión del borde palpebral que pone en contacto las pes-
tañas con el globo ocular.
2. Datos epidemiológicos
Es más frecuente en el párpado inferior.
La forma más frecuente es la senil/involutiva.
Según su etiología, se clasifica en:
Involutivo (senil).
Cicatricial.
Espasmódico.
Marginal.
3. Motivo de consulta
Irritación ocular, ojo rojo.
Sensación de cuerpo extraño.
Lagrimeo.
Ardor, picazón, escozor.
4. Antecedentes personales
Traumatismos.
Quemaduras.
Infecciones (tracoma: párpado superior).
Cirugías previas.
Edad.
Radiaciones.
5. Examen ocular general
Se observa la inversión del borde palpebral (unilateral o bilate-
ral), las pestañas están en contacto con el globo ocular.
Inyección conjuntival.
Erosiones y úlceras corneales o conjuntivales.
En el entropión espasmódico, procesos inflamatorios o lesiones
traumáticas.
Exámenes complementarios oculares
S Tinción con fluoresceína o rosa de bengala para ver lesiones
corneales o conjuntivales.
6. Examen físico general
No aporta datos de importancia.
Párpados
11. Complicaciones
Úlceras corneales causadas por el roce de las pestañas.
Queratitis punctata superficial.
Erosiones conjuntivales y conjuntivitis.
12. Criterios de alta
Desaparición de lesiones corneales o conjuntivales.
Párpado en posición normal permanente.
No hay alta definitiva.
13. Controles
En caso de infecciones secundarias o queratitis control en una
semana (para evaluación del tratamiento).
14. Secuelas
Alteración de la transparencia corneal.
Ectropión residual a cirugía de entropión.
15. Prevención
No existen medidas para prevenir esta entidad.
16. Información a dar al paciente
Es una enfermedad que, debido a la molestia que causa y a las
complicaciones corneales que puede producir, siempre debe
tratarse con cirugía; por lo que se logra la resolución del proble-
ma en la mayoría de los casos.
17. Bibliografía
Albert DM, Jakobiec FA. Principles and practice of ophthalmology.
Philadelphia: Saunders, 2008.
Cullom RD, Chang B. The Wills eye manual. 7th ed. Philadelphia:
Lippincott, 2016.
Fraunfelder FW, Roy FH. Current ocular therapy. Philadelphia: W.
B. Saunders, 1980.
Nerad JA. Cirugía oculoplástica: los requisitos en oftalmología. Ma-
drid: Elsevier Science, 2001.
Newell FW. Oftalmología: fundamentos y conceptos. Madrid:
Mosby, 1993.
Pavan-Langston D. Manual de diagnóstico y terapéutica oculares.
3a. ed. Barcelona: Ediciones Científicas y Técnicas, 1993.
Roy FH. Ocular differential diagnosis. 8th ed. Philadelphia: Lea &
Febiger, 2009.
Roy FH, Fraunfelder FW, Fraunfelder FT. Current ocular therapy.
6th ed. Philadelphia: Saunders Elsevier, 2008.
Párpados
Raza.
Exposición actínica (recreativa o laboral).
Quemaduras.
Heredofamiliares
Asociados con carcinoma de células basales hay tres síndromes
que se heredan en forma autosómica dominante; son poco fre-
cuentes y tienen la característica de afectar a niños y adolescen-
tes. Además de los párpados y el rostro, pueden afectar el tronco
y el sistema nervioso central.
Estos síndromes son:
♦ Síndrome de Gorlin-Goltz.
♦ Síndrome de nevo de células basales unilateral.
♦ Síndrome de Basex.
5. Examen ocular general
Puede presentarse de cuatro formas:
• Forma nódulo-ulcerativa: nódulo o papila pequeña (forma
más frecuente) de apariencia perlada, con vaso telangiec-
tásico en su superficie (cabeza de medusa). Al crecer puede
tener apariencia umbilicada y ulcerarse, con el consiguiente
sangrado (principal motivo de consulta). En ocasiones puede
presentarse como un nódulo pigmentado, lo que hace difícil
diferenciarlo de un melanoma.
• Forma esclerosante o tipo morfea: se presenta como una placa
indurada, plana o levemente deprimida, de coloración blan-
co-rosada a blanco-amarillenta y bordes muy poco definidos,
de comportamiento más agresivo.
• Forma superficial multifocal: es poco frecuente; se presenta
como lesiones eritematosas del tronco y la cara, multifocales
y de desarrollo lento que pueden confundirse con psoriasis.
• Forma fibroepiteliomatosa: es poco frecuente; se presenta en
el tronco y la cara como lesiones polipoides sobre una base
eritematosa, simulando fibromas.
Exámenes complementarios oculares
S EOB
Biopsia y anatomía patológica (da el diagnóstico de certeza
S y el tipo se carcinoma). Puede realizarse por medio de tres
técnicas:
• Micrográfica de Mohs: esta técnica permite ver si la resección
tumoral tiene márgenes suficientes (libre de células tumora-
les).
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
• Congelación intraoperatoria.
• Diferida: esta técnica indica si los bordes de la resección son
suficientes; si no lo son, se necesita una segunda intervención.
6. Examen físico general
Inspección de la piel de la cara y el tronco en busca de lesiones
eritematosas y polipoides.
Ante una lesión sospechosa, interconsulta con dermatología.
Exámenes complementarios generales
S LGB
7. Criterios diagnósticos
Clínico.
Biopsia.
Anatomía patológica.
8. Diagnóstico diferencial
Chalazión: no es ulcerativo.
Queratoacantoma: crece rápido hasta alcanzar 1 o 2 cm.
Nevos: sobre todo con los epiteliomas basocelulares que presentan
pigmentación. Los nevos por lo general no aumentan de tamaño.
Hemangiomas.
Tumores metastásicos.
Carcinoma de células sebáceas del párpado.
Carcinoma espinocelular.
Melanoma.
Queratosis seborreica.
Cuernos cutáneos.
Papiloma de células escamosas.
Tumores de los anexos
Hidrocistoma
Apocrinos
Cilindroma
Siringoma
Ecrinos Espiradenoma
Hidocristoma
Tricolemoma
Pilares (de los folículos pilosos) Tricofoliculoma
Pilomatricoma
Párpados
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Radioterapia
35 Gy fraccionados en dos semanas.
Tiene una tasa de curación en el 96% de los casos en la forma
nódulo-ulcerativa.
El tipo morfea es más resistente a la radioterapia.
La tasa de recidiva es del 8%.
Tiene como secuelas: ectropión, pérdida de pestañas, obstruc-
ción del conducto lagrimal, queratinización de la conjuntiva y
atrofia de piel.
Si el ojo no está bien protegido pueden desarrollarse cataratas.
Quimioterapia
Local y sistémica con cisplatino y doxorrubicina.
Puede ser la alternativa en cáncer de células basales extensos.
Crioterapia
Consiste en enfriar el tejido a temperaturas de -160°C, lo que
produce edema y luego pérdida del tejido carcinomatoso en los
siguientes dos días, con la formación de tejido de granulación y
luego cicatrización.
La taza de recidiva es de 10% con esta técnica.
Terapia fotodinámica
Consiste en la inyección de derivados de la hematoporfirina en
forma IV y 48 horas después se aplica láser dye, lo que produce
pérdida del tejido tumoral con formación de tejido de granula-
ción.
Se realiza sólo en cánceres superficiales.
Láser de dióxido de carbono
Se usa sólo en cánceres superficiales.
Previene la diseminación durante el tratamiento porque coagu-
la los vasos sanguíneos.
Tratamiento médico sistémico
No hay.
Tratamiento quirúrgico
Es el tratamiento de elección.
Se debe extirpar el tumor con un margen de seguridad y realizar
cirugía plástica.
La crioterapia está indicada como método paliativo debido al
gran porcentaje de recidivas que se presentan.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
10. Evolución
La recurrencia tumoral posquirúrgica es de alrededor del 5%;
de este porcentaje —tras la reintervención— el tumor recidiva
otra vez en el 14,8% de los casos.
11. Complicaciones
Por invasión tumoral (local con más frecuencia).
12. Criterios de alta
No hay alta definitiva.
13. Controles
Una vez por semana durante el primer mes, para controlar la
evolución de la herida quirúrgica; luego se efectúan nuevos exá-
menes cada seis y doce meses.
14. Secuelas
Posquirúrgicas: ectropión, que necesita corrección con cirugía
plástica.
15. Prevención
Sólo en pacientes predispuestos: control de cualquier situación
que produzca irritación en la zona, como la exposición al sol.
16. Información a dar al paciente
Es un tumor que tiene alto porcentaje de curación tras la cirugía
y requiere de controles periódicos durante toda la vida.
17. Bibliografía
Cullom RD, Chang B. The Wills eye manual. Philadelphia: Lippin-
cott, 2016.
Nerad JA. Cirugía oculoplástica: los requisitos en oftalmología. Ma-
drid: Elsevier Science, 2001.
Reese AB. Tumors of the eye. Hagerstown, Md: Harper & Row,
1976.
Roy FH. Ocular differential diagnosis. Philadelphia: Lea & Febiger,
2009.
Steinkogler FJ, Scholda CD. Results of basal cells carcinoma sur-
gery of the eyelids. Fortschr Ophthalmol 1991; 88: 416-418.
Weil D, Plotkin C, Aguilar A. Órbita, párpados y aparato lagrimal.
Salta: Universidad Católica de Salta; Buenos Aires: Consejo Ar-
gentino de Oftalmología, 2007 (Maestría a distancia en oftal-
mología; 12).
Blefaritis crónica
1. Definición
Es una inflamación e infección crónica del margen palpebral,
por lo general bilateral, caracterizada por eritema, engrosa-
miento y formación de costras y escamas.
2. Datos epidemiológicos
Prevalencia
• 54% seborreicas.
• 15% estafilocócicas (80% son del sexo femenino), en especial
S. aureus y S. epidermidis.
• 14% meibomitis primaria.
• 7% otras.
La enfermedad puede comenzar en forma precoz en la infancia
o presentarse en cualquier época de la vida. Por lo general se
vuelve más sintomática hacia las décadas sexta y séptima.
El humo, el esmog y ciertas sustancias pueden intensificar los
diferentes cuadros de blefaritis.
Mayor frecuencia en pacientes con síndrome de Down.
3. Motivos de consulta
Congestión palpebral o conjuntival.
Ardor o quemazón.
Sensación de arenilla, fotofobia.
Prurito.
Lagrimeo.
Costras o escamas en las pestañas.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Dermatitis seborreica.
Vicios de refracción no corregidos.
Acné, osácea.
Mal estado general o disminución de la inmunidad.
Heredofamiliares
Puede estar asociada con: síndrome de Vogt-Koyanagi-Harada,
síndrome de Behçet, síndrome de Down, Parkinson.
5. Examen ocular general
Blefaritis estafilocócica: eritema en la región palpebral con va-
sos sanguíneos dilatados (rosetas) y escamas duras, quebradizas
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Fomentos tibios durante 15 minutos para ablandar las costras
en la base de las pestañas cuatro veces por día.
Champú no irritante (para párpados o bebés, dilución 1:10).
Con un hisopo de algodón embebido limpiar las escamas y de-
tritos del borde palpebral, dos veces por día, diez días durante
un minuto aproximadamente, hasta que los signos agudos des-
aparezcan.
Antibióticos tópicos: eritromicina al 5%.
Corticoides: fluorometolona 0,1% cuatro veces por día por 7 días.
Si el cuadro se asocia con ojo seco, usar lágrimas artificiales.
Tratamiento médico sistémico
Azitromicina 500 mg /día por tres días.
Doxiciclina 100 mg/2 veces por día durante la primera semana y
luego una vez por día, con un mínimo de 3 meses.
Minociclina 100 mg/día por 3 meses.
Eritromicina 250 mg/día para tratamiento en niños.
Tratamiento quirúrgico
En caso de meibomitis, exprimir la glándula.
Para la formación de chalazión.
Para algunas complicaciones y secuelas (ectropión-entropión).
10. Evolución
Con tratamiento adecuado se logra eliminar los signos y los
síntomas, pero la erradicación de la enfermedad no suele ser
posible.
11. Complicaciones
Queratitis epitelial.
Conjuntivitis papilar crónica.
Orzuelos, chalazión.
Flictenulosis.
12. Criterios de alta
Desaparición de signos y síntomas.
No hay alta definitiva.
13. Controles
Recordar cronicidad de la enfermedad.
Frecuencia de visitas: a los diez días de la primera consulta; una
vez por mes durante tres meses y luego según evolución.
Datos a recoger en cada visita: examen de párpados y pestañas,
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
14. Secuelas
No presenta secuelas de importancia.
15. Prevención
Evitar el uso de cosméticos u otros alérgenos.
16. Información a dar al paciente
Se trata de una enfermedad alérgica que mejora con la supre-
sión de la causa. Puede recidivar.
17. Bibliografía
Albert DM, Jakobiec FA. Principles and practice of ophthalmology.
Philadelphia: Saunders, 2008.
Cullom RD, Chang B. The Wills eye manual. 7nd ed. Philadelphia:
Lippincott, 2016.
Fraunfelder FW, Roy FH. Current ocular therapy. Philadelphia: W.
B. Saunders, 1980.
Kanski JJ. Oftalmología clínica. Madrid: Elsevier, 2016.
Pavan-Langston D. Manual de diagnóstico y terapéutica oculares.
3a. ed. Barcelona: Ediciones Científicas y Técnicas, 1993.
Roveda JM, Roveda CE. Manual de oftalmología. 6a. ed. Buenos
Aires: López, 1985.
Scheie HG, Albert DM. Oftalmología de Adler. Buenos Aires: Inte-
ramericana, 1972.
2
Lagrimal
Obstrucción lagrimal congénita
(dacrioestenosis)
1. Definición
La dacrioestenosis se debe a un déficit en la canalización de la
porción distal del conducto nasolagrimal, con la presentación
habitual de un defecto membranoso a nivel de la válvula de Has-
ner, aunque puede ocurrir a cualquier nivel.
2. Datos epidemiológicos. Etiología
Estudios europeos reportan hasta el 20% de los recién nacidos,
y esta incidencia es aceptada en el mundo occidental de un 6%.
El 90% se cura si se espera a los 13 meses.
3. Motivo de consulta
Lagrimeo desde las primeras semanas de vida. Aparece en es-
pecial en el canto externo: puede ser unilateral (más frecuente)
o bilateral.
Secreción amarillenta en uno o los dos ojos.
Conjuntivitis recidivante.
Derivado por el pediatra.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
No presenta.
Heredofamiliares
Puede haber antecedentes de obstrucción lagrimal congénita.
5. Examen ocular general
Observación de posición y características de los puntos lagrima-
les superiores e inferiores.
Características anatómicas y funcionales de los párpados.
Compresión en el nivel del saco lagrimal: observar la salida de
secreción amarillenta a través de los puntos lagrimales.
Posición de las pestañas.
Lagrimal
7. Criterios diagnósticos
Lagrimeo desde los primeros días de vida.
Conjuntivitis crónica o recurrente.
Ausencia de otros trastornos anatómicos y funcionales.
Enrojecimiento, dolor y tumefacción en la zona (dacriocistitis).
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
8. Diagnóstico diferencial
Glaucoma congénito.
Conjuntivitis.
Cuerpo extraño.
Triquiasis.
Posición anómala de los puntos lagrimales.
Ausencia o atresia de puntos lagrimales o de canalículos, o de
ambos.
Síndrome de Wandenburg (hay alargamiento de los canalículos).
Inervación anómala de las glándulas lagrimales.
Traumatismo de la zona.
Malposición palpebral.
Dacriocistocele congénito.
Dacriocistitis.
Papiloma recurrente del saco lagrimal.
Quiste nasal.
Meningocele.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Debe intentarse evitar la infección y reducir al mínimo el estan-
camiento.
Durante los primeros seis-nueve meses de vida se prescriben
colirios antibióticos (eritromicina o tobramicina) cuatro veces
al día.
Masaje compresivo del saco lagrimal (cuatro veces al día, en
cada cambio de pañal).
Lavados constantes con jabones no irritantes.
Tratamiento médico sistémico
Si hay dacriocistitis, agregar antibioticoterapia por vía oral.
Tratamiento quirúrgico
Sondaje bajo anestesia general; el 90% de los casos se cura con
un primer sondaje. Se lleva a cabo antes de los 13 meses de vida
o ante la presencia de dacriocistitis -aguda o crónica- o con-
juntivitis purulenta recidivante.
Si el sondaje falla, efectuar intubación con tubos de silicona que
se dejan tres meses.
Dacriocistoplastia con balón.
Dacriocistorrinostomía sólo en circunstancias excepcionales
(en caso de no mejorar en el primer sondaje u obstrucción ex-
tensa de los conductos nasolacrimales).
Lagrimal
10. Evolución
Por lo general es favorable y se observa:
Disminución y desaparición de las secreciones.
Desaparición del lagrimeo en forma permanente.
11. Complicaciones
Dacriocistitis.
Canaliculitis.
12. Criterios de alta
Desaparición de la epífora durante uno a seis meses
13. Controles
Cada 15 días mientras exista epífora y hasta que se realice el
sondaje.
Cada 2-3 meses luego de desaparecidos los síntomas.
Puede controlarse la curación instilando una gota de fluoresceí-
na y comprobando la desaparición pasados los 5 minutos (test
de desaparición de fluoresceína). Su pasaje con un hisopo de
algodón colocado en la fosa nasal (test de Jones I).
14. Secuelas
Por no tratamiento o falla del sondaje:
Obstrucción lagrimal permanente con epífora, que puede re-
querir dacriocistorrinostomía.
Por tratamiento quirúrgico:
Fibrosis pericanalicular.
Falsa vía.
Estenosis punctal.
Desgarro del punto lagrimal.
15. Prevención
No tiene.
16. Información a dar al paciente
Existen muchas posibilidades de que pueda desobstruirse es-
pontáneamente sólo en los primeros meses; en caso de que se
haya decidido operar al paciente, la desobstrucción quirúrgica
a veces requiere más de una intervención. Se debe cuidar la hi-
giene de los párpados con champú y un colirio antibiótico para
evitar la sobreinfección.
Diagnóstico diferencial con meningocele no hay sintomatología
general y la tumoración se encuentra en posición alta respecto
del canto interno parpebral.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
17. Bibliografía
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mología; 12).
Ojo seco y estudio de la superficie ocular
1. Definición
Complejo de síntomas secundarios a una película lagrimal pre-
corneal deficiente o anómala. Hay hiposecreción o incremento
de la evaporación lagrimal que se acompaña con frecuencia de
hiposecreción de las glándulas salivales. “Enfermedad multifac-
torial de las lágrimas y la superficie ocular que cursa con mo-
lestias, trastorno visual e inestabilidad de la película lagrimal,
con un posible daño de la superficie ocular. Se acompaña de un
aumento de la osmolaridad de la película lagrimal e inflamación
de la superfice ocular”.
La queratoconjuntivitis sicca por síndrome de Sjögren se carac-
teriza por ser la enfermedad de la superficie ocular que resulta
de alguna condición o circunstancia que disminuye la secreción
lagrimal.
2. Datos epidemiológicos. Etiología
Incidencia en mujeres 25% y en hombres 17.2%.
Es más frecuente luego de la cuarta década de la vida.
Más frecuente en el sexo femenino.
Las causas se pueden subdividir en forma didáctica por defi-
ciencia acuosa o evaporación.
I. Alteración de la composición de la película lagrimal
Afectación congénita
Síndrome de Riley-Day (disautonomía familiar).
Alacrimia congénita (ausencia de glándula lagrimal).
Síndrome del maullido de gato.
Neoplasia endócrina múltiple.
Hipoplasia de la glándula lagrimal.
Displasia ectodérmica anhidrótica.
Síndrome de Holmes-Adie.
Hiposecreción paralítica.
Neuropatía sensorial familiar congénita con anhidrosis.
Afectaciones locales
Dacrioadenitis (viral o bacterial).
Irradiación (>30 Gy).
Traumatismo.
Lesión linfoepitelial benigna (enfermedad de Mikulicz).
Parálisis del séptimo par craneal.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Enfermedades autoinmunes
Artritis reumatoidea.
Lupus eritematoso.
Síndrome de Sjögren.
Poliarteritis nodosa.
Esclerodermia.
Tiroiditis de Hashimoto.
Polimiositis y dermatomiositis.
Granulomatosis de Wegener.
Enfermedades hematopoyéticas
Linfoma.
Púrpura trombocitopénica.
Hipergammaglobulinemia.
Macroglobulinemia de Waldenström.
Otras afecciones sistémicas
Enfermedad celíaca.
Cirrosis biliar primaria.
Sarcoidosis.
Enfermedad injerto-huésped.
Fibrosis pulmonar.
Enfermedad hepatobiliar crónica.
Amiloidosis.
Infección por HIV.
Medicamentos
Anticolinérgicos.
Antihipertensivos (clonidina, prazosina, propranolol, reserpi-
na, alfametildopa).
Antihistamínicos.
Antidepresivos y psicótropos (amitritilina, nortriptilina, imi-
pramina, desipramina, doxepina, fenotiacinas, nitracepam).
Inhibidores de la monoaminooxidasa (entra en la clasificación
anterior).
Betabloqueantes (entra en antihipertensivos).
Hidroclorotiazidas (antihipertensivos).
¿Anticonceptivos orales? Sí (hormonas: sustitución estrogénica,
antagonistas androgénicos).
Antidiarreicos.
Descongestivos.
Antiarrítmicos (disopiramida, mexiletina, amiodarona).
Tiabendazol.
Antiparkinsonianos.
Lagrimal
Agentes antineoplásicos.
Retinoides (etretinato, isotretinoína).
Esteroides orales.
II. Alteración del revestimiento lagrimal
El término revestimiento de la lágrima fue introducido por
Lemp para referirse al esparcimiento de las lágrimas a través de
las superficies corneal y conjuntival.
Posición del párpado
Entropión.
Ectropión.
Tumores.
Colobomas y otros defectos del párpado.
Cirugía de la ptosis.
Síndrome del párpado colgante.
Floppy eyelid síndrome (síndrome del párpado flácido).
Movimientos palpebrales (parpadeo)
Parálisis del séptimo par.
Simbléfaron.
Proptosis intensa.
Parkinsonismo.
Parálisis bilateral del quinto par.
Coma.
Enfermedad de Graves.
Elevaciones localizadas de la superficie
Pterigión.
Tumor límbico.
Edema posquirúrgico.
Hemorragia subconjuntival.
Ampolla filtrante.
Penfigoide ocular.
Tracoma.
Síndrome de Stevens-Johnson.
3. Motivo de consulta
Sensación de arenilla.
Ardor.
Quemazón.
Picazón.
Fotofobia.
Irritación ocular.
Dificultad para ejecutar los movimientos oculares.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Retracción palpebral.
Síndrome de Helvrson-Rosenthal.
Atrofia senil.
Congénitos:
♦ Agenesia lagrimal.
♦ Asociado a alteración general: tipo anhidrótico de la displasia
ectodérmica.
Disautonomía familiar de Riley-Day.
Neurogénicas: central -periférica.
Sistémicas:
♦ Artritis reumatoidea.
♦ Síndrome de Sjögren.
♦ Síndrome de Mikulicz.
Otras enfermedades autoinmunes:
♦ Leucemia.
♦ Sarcoidosis.
♦ Linfoma.
♦ Tuberculosis.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
No curativo.
Para conservación lagrimal:
♦ Reducción de la temperatura ambiente.
♦ Evitar habitaciones con humo, polvillo y con calefacción en
exceso.
♦ Gafas protectoras.
♦ Tarsorrafia (tratamiento quirúrgico).
Fomentos para ayudar a la producción de capa lipídica produci-
da por las glándulas de Meibomio y masaje glandular.
Lavajes con solución fisiológica.
Lágrimas artificiales (gotas).
Soluciones para sustituir lágrimas: en general contienen metil-
celulosa (en concentraciones inferiores al 1%), alcohol polivi-
nílico (en concentración entre el 1,5% y el 3%), 1-2 gotas cada
una o dos horas durante el día. La frecuencia irá disminuyendo
si hay mejora subjetiva y objetiva hasta 1-2 gotas cuatro o seis
veces por día.
Injertos de liberación lenta: se presentan como bastoncitos con 5
mg de hidroxipropilcelulosa (1 x 3 mm) que se colocan en el fondo
de saco inferior y mantienen humidificado el ojo por varias horas.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Perforaciones.
♦
Panoftalmía.
♦
Tardías:
Leucoma.
♦
Vascularización corneal.
♦
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Salta: Universidad Católica de Salta; Buenos Aires: Consejo Ar-
gentino de Oftalmología, 2007 (Maestría a distancia en oftal-
mología; 12).
Dacriocistitis
1. Definición
La dacriocistitis es la inflamación del saco y del conducto lacri-
monasal. Generalmente es unilateral y casi siempre secundaria
a la obstrucción del conducto lacrimonasal, que genera estasis
crónica de las lágrimas con la consiguiente retención e infec-
ción. Según el tiempo de evolución, se puede clasificar en aguda
o crónica.
2. Datos epidemiológicos. Etiología
Ocurren con mayor frecuencia en lactantes o mujeres mayores
de 40-50 años.
Más frecuente en adultos a partir de la quinta década de la vida.
Más frecuente en la raza blanca que en la negra, como conse-
cuencia de un conducto más estrecho y largo.
3. Motivo de consulta
Eritema y edema cutáneo por debajo del tendón cantal medial
(sobre la zona del saco lagrimal).
Epífora.
Conjuntivitis crónica o recidivante.
Blefaritis.
Dolor localizado en área inferointerna del párpado inferior.
Inflamación localizada en la misma zona.
Ojo rojo.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Alergias.
Episodios anteriores.
Traumas faciales (desviacion del tabique).
Dacriolitiasis.
Obstrucción congénita de vías lagrimales.
Tratamiento/s intranasal/es previo/s.
Tumores nasales
Tumores del saco lagrimal destacando el linfoma.
Heredofamiliares
Relacionado con antecedentes familiares de malformaciones
óseas faciales.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
5. Etiología
Los organismos aeróbicos más frecuentemente aislados en la
dacriocistitis del adulto son: Estafilococo epidermidis, Estafilo-
coco aureus, Estreptococos, Pseudomonas y especies de Neumo-
cocos. El más frecuente es el epidermidis, seguido del aureus en
la mayoría de los estudios.
Dentro de los anaeróbicos se describen Peptoestreptococos, Pro-
pionibacterium, como más frecuentes.
Los hongos son infrecuentes y se han relacionado con la pre-
sencia de dacriolitos y la existencia de prótesis nasolagrimales.
6. Examen ocular general
Aguda
Epífora.
Edema.
Quemosis.
Rubor.
Supuración.
Inflamación.
Eritema.
Linfadenopatía (preauricular) del mismo lado.
Crónica
Los signos que pueden estar presentes son:
Distensión del saco lagrimal
Epífora.
Inflamación.
Exámenes complementarios oculares
Aguda
CS Extendido coloreado con gram.
Cultivo (toma de muestra de secreción, previa higiene de
CS la zona con solución fisiológica estéril o expresión del saco
lagrimal o ambas).
Crónica
R Reacción para tuberculosis.
R Reacción para LUES.
R Extendido o PCR para tracoma.
R Extendido y cultivo para micosis.
7. Examen físico general
Aguda: puede haber compromiso general, fiebre.
Crónica: síntomas locales.
Lagrimal
8. Criterios diagnósticos
Epífora.
Eritema cutáneo.
Tumoración en ángulo inferior por debajo del tendón cantal
medial.
Dolor.
Inflamación.
Edema palpebral importante.
Conjuntivitis.
Linfadenopatía preauricular del mismo lado.
Supuración.
9. Diagnóstico diferencial
Mucocele.
Conjuntivitis por adenovirus.
Sinusitis frontal o etmoidal.
Celulitis facial.
Periostitis aguda.
Tumor del saco lagrimal.
Tumor de senos paranasales.
Estesioneuroblastoma: un tumor maligno infrecuente que afec-
ta a la cavidad nasal.
Estenosis de punto lagrimal.
Laxidex senil del párpado.
Ectropión.
Deficiencia de la bomba lagrimal.
Canaliculitis con secreción purulenta debe descartarse infec-
ción por hongos especialmente el Aspergillus y Actinomyces spp:
gránulos color azufre a la exposición canalicular.
10. Tratamiento
Tratamiento médico local
Compresas para aliviar la inflamación.
Compresión del saco lagrimal.
Fomentos si la evolución indica el drenaje quirúrgico.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Proteger el ojo del sol —con anteojos que posean filtro UV—,
del viento y del polvo.
Si la irritación es leve, se pueden usar lágrimas artificiales cada
4-8 horas o un vasoconstrictor tópico suave (nafazolina) 3 o 4
veces por día.
Si la irritación es moderada o severa, se indican corticoides tó-
picos 3 o 4 veces por día; también se puede aplicar un parche
ocular por 24 horas.
El tratamiento médico se restringe a disminuir los síntomas que
producen las crisis de inflamación intermitente que sufren los
pacientes. Taylor recomendó la protección de las radiaciones
UV-A y UV-B basado en su estudio epidemiológico.
Tratamiento médico sistémico
No hay.
Tratamiento quirúrgico
El tratamiento quirúrgico debe plantearse como solución estéti-
ca o si el pterigión tiende a crecer y ello dificulta la visión, tiene
astigmatismo inducido o restricción en la motilidad.
Si la lesión interfiere con la colocación de lentes de contacto.
Si el paciente experimenta una irritación severa.
En general se realiza con anestesia local. Consiste en la disec-
ción, escisión y sutura posterior de la conjuntiva a la esclera; los
mejores resultados se consiguen con autoinjertos conjuntivales.
A veces, cuando el pterigión está muy avanzado, es necesario el
trasplante de córnea lamelar.
En los últimos años se ha introducido la aplicación tópica de mito-
micina C como tratamiento asociado a la resección del pterigión
con un bajo índice de recidivas (2,3%), aunque con esta técnica se
han descrito complicaciones derivadas del uso de la mitomicina
C. De este modo, se describieron casos de necrosis escleral, glau-
coma secundario, edema corneal, perforación corneal.
Finalmente las técnicas de cubrimiento de la zona resecada con
conjuntiva propia del mismo individuo —ya sea mediante téc-
nicas de rotación conjuntival o de transplante libre de conjun-
tiva, aun a costa de un mayor tiempo quirúrgico— se asocian a
un bajo grado de recidivas (3,2% a un 7%).
Utilización de injerto de membrana amniótica en pterigión re-
cidivantes.
Conjuntiva
Queratoconjuntivitis atópica.
Conjuntivitis papilar gigante asociada a lentes de contacto.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Eliminar el agente irritante.
Compresas frías varias veces al día.
Lavados con solución fisiológica fría.
Agentes tópicos (dependiendo de la severidad del caso):
Leves y moderadas
Vasoconstrictores-antihistamínicos (nafazolina); deben usarse
sólo en períodos sintomáticos y con cuidado debido al efecto
rebote vasodilatador que aparece tras su uso prolongado.
Estabilizantes de actividad mastocitaria:
♦ Cromoglicato sódico (2% y 4%), una gota 4 veces por día.
♦ Lodoxamida, una gota 4 veces por día.
♦ Olopatadina, una gota 2 o 3 veces por día.
♦ Ketotifeno fumarato (solución oftálmica 0,025%).
♦ Epinastina 0.05%.
Severas
Corticoides de acción moderada (fluorometolona), una gota 3 o
4 veces por día por una a dos semanas.
Antihistamínicos: levocabastina (0,5 mg/ml), una gota 2 o 4 ve-
ces por día.
Ketorolac: en caso de prurito, una gota 3 o 4 veces por día.
Prednisolona 1% o loteprednol 2%.
Tratamiento médico sistémico
Excepcionalmente, tratamiento con desensibilizantes o antihis-
tamínicos.
Tratamiento quirúrgico
No tiene.
10. Evolución
Es una afección caracterizada por exacerbaciones y remisiones.
En la infancia puede existir remisión completa y definitiva.
11. Complicaciones
Uveítis anterior.
Epiescleritis.
Queratitis punteada superficial.
12. Criterios de alta
No hay.
Conjuntiva
13. Controles
Se vuelve a ver al paciente una a dos semanas después (según la
severidad del cuadro).
Si está recibiendo corticoides tópicos, el seguimiento será sema-
nal (control de PIO).
14. Secuelas
Disminución de la sensibilidad corneal (debido a las lesiones
repetidas).
15. Prevención
Evitar contactos con alérgenos, si se conocen.
Evitar el uso crónico de corticoides.
16. Información a dar al paciente
El tratamiento puede aliviar los síntomas de la enfermedad,
pero no curarla.
Puede haber períodos de remisión y exacerbación de los síntomas.
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Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Clasificación etiológica
Staphylococcus aureus.
Haemophilus influenzae (más frecuente en los niños).
Streptococcus pneumoniae (más frecuente en los niños).
Streptococcus viridans.
Streptococcus pyogenes.
Escherichia coli.
Corynebacterium diphteriae.
Branhamella catarrhalis.
Moraxella lacunata (conjuntivitis angular de Morax-Axenfeld).
Neisseria meningitidis.
Neisseria gonorrhoeae (causante de conjuntivitis hiperaguda,
pudiendo afectar tanto a recién nacidos [bilateral] como a adul-
tos [unilateral]).
Klebsiella.
Proteus.
Acinetobacter.
Pseudomonas.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
3. Motivo de consulta
Secreción (“ojos pegados”).
Sensación de cuerpo extraño.
Sensación de arenilla.
Dolor, ardor, picazón.
Epífora.
Blefarospasmo.
Fotofobia.
Edema palpebral.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Historia de uretritis u otros compromisos urogenitales.
Múltiples parejas sexuales (promiscuidad).
Infección reciente de las vías respiratorias altas o contacto con
portador de infección de vías respiratorias.
Contacto con personas con ojo rojo.
Dracriocistitis.
Otitis.
Antecedentes de orzuelos, conjuntivitis previas, uso de lentes de
contacto, cosméticos, traumatismo, blefaritis.
Recién nacido: conjuntivitis hiperaguda purulenta, ya que el
neonato la adquiere en el canal del parto por infección materna.
Heredofamiliares
NAD
5. Examen ocular general
EOB
Párpados: enrojecimiento, edema, blefarospasmo, presencia de
secreciones y costras.
Conjuntiva
S
Estudio de la pareja cuando hay alta sospecha de enferme-
dad venérea o urogenital.
S Interconsulta ginecológica o urológica.
7. Criterios diagnósticos
Afección unilateral o bilateral, aunque de comienzo no simul-
táneo.
Secreción.
Inyección conjuntival.
Folículos o papilas en caso de Clamidia en conjuntiva.
Diagnóstico etiológico por laboratorio: directo, cultivo, antibio-
grama, PCR en conjuntivitis neonatal.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
8. Diagnóstico diferencial
Uveítis bilateral, escleritis.
Glaucoma agudo.
Conjuntivitis folicular irritativa (por medicamentos mióticos,
ciclopléjicos).
Alcoholismo.
Quemaduras por álcalis o ácidos.
Enfermedad de Graves.
Fístula arteriovenosas.
Inflamación intraocular.
9. Tratamiento
Tratamiento no específico
Medidas generales: aislamiento hasta que desaparezcan las
secreciones, uso de toallas descartables (de papel) y utensilios
personales, lentes oscuros en caso de fotofobia intensa.
Lavado de manos con jabón antiséptico.
Lavados con solución fisiológica.
No ocluir el ojo.
Tratamiento con antibióticos tópicos
Antibióticos tópicos (eritromicina, sulfacetamida o tobramici-
na, polimixina B, gatifloxacina, cuatro veces por día durante 5-7
días); se continúa por 2 días una vez desaparecida la secreción.
Tratamiento con corticoides tópicos
Es controvertido, se pueden asociar al antibiótico si hay gran in-
flamación e hiperemia, con muy poca secreción mucopurulenta.
Tratamiento con antibióticos sistémicos
En infecciones por Neisseria gonorrhoeae, Neisseria meningitidis
y Chlamydia trachomatis.
Neisseria gonorrhoeae: niños de más de 20 kg de peso. Para ins-
taurar el tratamiento derivar al pediatra. Adultos, ceftriaxona
IM 125 mg; cefixima, VO, 400 mg; ciprofloxacina, VO, 500 mg;
ofloxacina, VO, 400 mg más azitromicina 1 gramo; o doxiciclina
VO, 100 mg dos veces por día durante 7 días.
Si se asocia queratitis o enfermedad diseminada: ceftriaxona IV,
1 gramo (25-40 mg/kg) cada 12 horas durante 3 días (en pacien-
tes alérgicos a la penicilina se sustituye por espectinomicina IM,
2 gramos cada 12 horas durante 2 días).
Haemophilus influenzae: amoxicilina + ácido clavulánico, 20-40
mg/kg en tres tomas diarias durante 14 días.
Conjuntiva
13. Controles
Cada uno o dos días al comienzo, luego cada dos a cinco días
hasta la resolución del problema.
14. Secuelas
Alteración de la agudeza visual por leucomas corneales.
Dacriocistitis crónica.
15. Prevención
Aislamiento por 48 horas luego de comenzar el tratamiento.
Profilaxis
En contactos íntimos de paciente con conjuntivitis por Neisseria
gonorrhoeae: una dosis única intramuscular de ceftriaxona. Si
se aísla N. meningitidis: rifampicina 600 mg VO, cada 12 horas
durante cuatro días.
16. Información a dar al paciente
Si se trata en forma adecuada, esta enfermedad se cura sin dejar
secuelas y no recidiva.
Debe prestarse especial atención a la higiene de los ojos y la
cara, así como al lavado frecuente de manos.
En verano se debe evitar concurrir a piletas de natación mien-
tras se padezca la enfermedad.
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Conjuntiva
Conjuntivitis de inclusión
Conjuntiva:
Conjuntivitis folicular (grandes folículos opalescentes).
Secreción mucopurulenta.
Eritema.
Córnea:
Queratitis.
Abscesos marginales (poco frecuentes).
Iritis (muy infrecuente).
Tracoma
Folículos en conjuntiva. Reacción folicular grave en conjuntiva
tarsal superior.
Nódulo preauricular palpable.
Cicatrización lineal o estrellada (líneas de Arlt).
La involución y necrosis de los folículos provoca depresiones en
el limbo (fosetas de Hebert).
Pequeños infiltrados subepiteliales gris claro.
Se observan cambios estructurales a medida que evoluciona la
enfermedad, lo que determina estadios con compromiso de es-
tructuras oculares.
Según la clasificación de Mc Callan, se consideran cuatro esta-
dios:
I. Tracoma incipiente: diminutos folículos conjuntivales e in-
filtrados que afectan el tarso superior, el fórnix y el limbo, pero
sin cicatrización.
II.a. Hipertrofia folicular: se da en el tarso superior y puede
aparecer también en la región superior del limbo, al igual que
el pannus.
II.b. Hipertrofia papilar: cubre los folículos y no deja cicatriz.
III. Cicatrización: pannus; involución de los folículos necróti-
cos (fosetas de Hebert) y escaras en la conjuntiva tarsal superior.
La inflamación es menor y pueden aparecer deformaciones (tri-
quiasis, entropión).
IV. Inactivación del tracoma: la inflamación se resuelve en su
totalidad y aparecen las complicaciones. Ya no se observan folí-
culos, grado variable de cicatrización.
Córnea: queratitis epitelial, infiltrados periféricos y centrales,
pannus fibrovascular superficial con predominio en el limbo
superior e hinchazón de los folículos límbicos, que cicatrizan y
forman las fosetas de Herbert.
Conjuntiva
S
Estudio de la pareja, cuando hay alta sospecha de enferme-
dad venérea o urogenital.
S Interconsulta ginecológica o urológica.
7. Criterios diagnósticos
Afección unilateral o bilateral, aunque de comienzo no simul-
tánea.
Secreción.
Inyección conjuntival.
Folículos en la región tarsal superior.
Folículos en el limbo (Herbert).
Estadios del tracoma (cicatrices línea de Arlt).
Típicas cicatrices conjuntivales (tracoma).
Antecedentes personales.
Diagnóstico etiológico por laboratorio.
Pannus vascular en limbo superior
8. Diagnóstico diferencial
Uveítis anterior.
Conjuntivitis papilar gigante: en ésta las papilas son más largas,
de aspecto uniforme y homogéneo.
Queratoconjuntivitis viral.
Conjuntivitis viral: papilas homogéneas.
Conjuntivitis folicular irritativa (por medicamentos: mióticos,
ciclopléjicos, tóxica por cosméticos).
Conjuntivitis folicular crónica.
Conjuntivitis por molusco contagioso.
Herpes zoster.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Tracoma
Doxiciclina, 100 mg dos veces por día por 3 semanas.
Tetraciclina, 500 mg cuatro veces por día por 3 semanas (en pa-
cientes mayores de 10 años).
Eritromicina, 500 mg cuatro veces por día por 3 semanas.
Tratamiento quirúrgico
Para corrección de las deformaciones cicatriciales e irregulari-
dades corneales.
Queratoplastia penetrante.
10. Evolución
Con tratamiento oportuno se logra la curación; pero si las con-
diciones higiénicas no mejoran, pueden recidivar.
11. Complicaciones
Úlcera de córnea.
Sobreinfección de la lesión.
12. Criterios de alta
Desaparición de los síntomas en estadio I, II y III.
Estadio IV: alta con secuelas (de tratamiento quirúrgico).
13. Controles
Cada dos o tres semanas.
14. Secuelas
Ojo seco severo.
Triquiasis.
Queratitis.
Cicatrices corneales.
Cicatrices del limbo esclerocorneal.
Pannus fibrovascular superficial.
Opacidad corneal.
15. Prevención
Programa de acción pública para educación sobre medidas hi-
giénicas.
Aplicación masiva de antibióticos tópicos, como tetraciclina o
eritromicina.
Tomar medidas profilácticas en todo recién nacido (Crede).
16. Información a dar al paciente
Esta es una enfermedad cuyo tratamiento adecuado puede pre-
venir importantes pérdidas de la visión. Por lo tanto es indis-
pensable controlarse hasta el diagnóstico de curación.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
17. Bibliografía
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Herpes zoster oftálmico
1. Definición
Proceso infeccioso caracterizado por erupción vesicular y dolor
neurálgico unilateral, que toma por lo general la primera o se-
gunda rama del V par, producido por el virus varicela zoster que
se presenta luego de la infección primaria del VVZ, que estable-
ce su latencia en los ganglios nerviosos sensoriales.
2. Datos epidemiológicos. Etiología
Virus varicela zoster (DNA).
Normalmente el virus queda acantonado en los ganglios senso-
riales del dermatoma correspondiente.
La enfermedad es altamente contagiosa; afecta entre el 80% al
90% de los expuestos.
Afecta en mayor medida a grupos de edad avanzada e inmuno-
suprimidos.
Normalmente la primoinfección se presenta antes de los 9 años
de vida.
Incidencia: 0,2% de la población general.
En el 10% de todos los casos está comprometida la rama oftál-
mica del trigémino.
De éstos, sólo el 50% desarrollará complicaciones oculares
(40%-70% afecta la córnea, 50%-60% produce uveítis, 1,8%
produce papilitis).
Alrededor del 100% de los mayores de 60 años presenta sero-
conversión positiva.
3. Motivo de consulta
La hiperestesia y el enrojecimiento del dermatoma puede prece-
der en varios días la aparición de vesículas.
Prurito.
Dolor con hiperestesia cutánea (dermatitis vesicular dolorosa).
Erupción vesicular.
Fiebre.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Antecedente de contacto con personas con herpes zoster o vari-
cela dentro de las tres semanas precedentes.
Disminución de la inmunidad (por medicamentos, tumores,
sida), sobre todo en pacientes mayores de 40 años.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Heredofamiliares
No relacionados con la enfermedad actual.
5. Examen ocular general
Examen cutáneo
Erupción unilateral en el territorio de la primera o segunda ra-
mas del V par, inicialmente maculopapular, luego pustular. Las
pústulas estallan y dejan úlceras con costras que al caer dejan
cicatrices. El ciclo completo dura tres a seis semanas.
Puede haber ptosis palpebral por edema o afección neurológica.
Examen ocular
Conjuntiva: edema, hiperemia, hemorragias petequiales, con-
juntivitis folicular, conjuntivitis mucopurulenta.
Esclera: escleritis y epiescleritis.
Córnea: las lesiones, en orden cronológico de aparición, pueden ser:
♦ queratitis punctata superficial (a los 2 días, la desarrolla el
50% de los pacientes).
♦ microdendritas (entre los días 40 a 60).
♦ queratitis numular (a los 10 días, la desarrolla el 30%).
♦ queratitis disciforme (a las tres semanas; la desarrolla el 5%
de los enfermos).
♦ pérdida de la sensibilidad.
Iris y cámara anterior: iritis, iridociclitis con pliegues en la
membrana de Descemet y precipitados queráticos.
Cristalino: cataratas.
Retina: retinopatía hemorrágica, papilitis (sólo el 1,8% de los
herpes zoster).
Exámenes complementarios oculares
S Tinción con fluoresceína y rosa de bengala.
S Toma de tensión ocular.
CS Evaluar la motilidad ocular.
6. Examen físico general
Interrogatorio del comienzo del rash cutáneo y el dolor.
Exámenes complementarios generales
CS
Serología para HIV (en grupos de riesgo y siempre con el
consentimiento informado del paciente).
MR
Determinación de ac. neutralizantes IgM-IgG (la primera
aumenta en fases agudas; la segunda, en fases crónicas).
Conjuntiva
Heredofamiliares
Antecedentes familiares de atopía.
5. Examen ocular general
Se presentan formas bulbares, tarsales y mixtas; la conjuntiva
tarsal superior (más frecuente) y la inferior presentan un as-
pecto característico de empedrado por la gran proliferación de
papilas de diferentes tamaños.
En la forma bulbar (menos frecuente) la conjuntiva adyacente
al limbo presenta una hipertrofia gelatinosa; luego se presenta
la queratitis de tipo difusa con úlceras corneales superiores; la
gran proliferación papilar llega a producir ptosis palpebral; en
los ápices de las papilas se pueden observar unos puntos blan-
cos superficiales y aislados (puntos de Trantas, puntos de Hor-
ner-trentas) compuestos predominantemente por eosinófilos y
células epiteloides.
La conjuntiva bulbar puede presentar una congestión, lo que le
da una coloración rosada que a veces puede ser muy intensa;
hay que hacer diagnóstico diferencial con melanoma de con-
juntiva y pueden desarrollarse ectasias corneales (queratocono,
queratoglobo).
En la córnea se puede observar una epiteliopatía puntiforme
en el 50% de los casos como manifestación más precoz, que se
agrupa en la córnea superior. Macroerosiones y ulceraciones
por pérdida epitelial continua. Se pueden ver úlceras en escudo
(macroerosiones sin reepitelización) y cicatrización subepite-
lial en forma de anillo. En un segmento previamente inflamado
del limbo se puede producir un seudogerontóxon o en arco de
cupido. La afección corneal está en relación con el número de
citocinas que los eosinófilos producen y con las moléculas de
adhesión que expresan en su superficie. En ocasiones la afec-
ción corneal puede progresar con la formación de micropannus
limbar.
A veces puede desarrollarse vascularización corneal en los 360
grados.
Exámenes complementarios oculares
S
Examen de raspado conjuntival para evaluar eosinófilos e
IgE (20-80%) (giemsa).
CS Cuantificación de IgE y eosinófilos en lágrimas.
6. Examen físico general
NAD
Conjuntiva
Edema palpebral.
Blefarospasmo.
Hemorragia conjuntival.
Comienzo agudo.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
El paciente puede relatar una infección del tracto respiratorio
superior o el contacto una semana antes aproximadamente con
algún ojo rojo.
Referencia de algún caso que se haya presentado en su casa, lu-
gar de trabajo o institución a la cual asiste con regularidad.
Heredofamiliares
No hay.
5. Examen ocular general
Folículos y papilas en la conjuntiva tarsal (signo crítico).
Quemosis.
Ojo rojo y edematoso, con secreción acuosa.
Queratitis epitelial punteada difusa (el 80% la desarrolla en tor-
no del octavo día de la enfermedad).
Infiltrados corneales subepiteliales.
Membrana o seudomembrana.
Adenopatía preauricular dolorosa a la palpación.
Exámenes complementarios oculares
MR Inmunofluorescencia indirecta.
MR
Extendidos de raspado corneal: infiltración polimorfonu-
clear, células epiteliales sin cuerpos de inclusión.
MR PCR: sólo en la primera semana de comenzados los síntomas.
MR Cultivos virales: 80% positivos en la primera semana.
6. Examen físico general
El paciente refiere mialgias, malestar general, fiebre prolongada
y con frecuencia trastornos gastrointestinales 24-48 horas antes.
Recordar que el período de incubación del adenovirus varía de
cinco a doce días, promedio ocho días.
Ganglio preauricular palpable o visible.
Exámenes complementarios generales
MR
Sangre: aumento de anticuerpos específicos (infección re-
ciente) IgM14.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
7. Criterios diagnósticos
Generalmente el diagnóstico se hace con las características clí-
nicas solamente.
Inyección conjuntival, bilateral.
Secreción acuosa.
Folículos en la conjuntiva tarsal.
Queratitis punctata superficial.
Ganglio preauricular palpable o visible.
8. Diagnóstico diferencial
Blefaritis.
Orzuelo.
Herpes simple y varicela zoster
Conjuntivitis bacteriana.
Conjuntivitis de inclusión (luego da uretritis en hombres o cer-
vicitis en mujeres).
9. Tratamiento
Tratamiento no específico
La queratoconjuntivitis por adenovirus es muy contagiosa.
Aislamiento: una semana.
Cuidado de manos.
Empleo de toalla personal y pañuelos de papel.
Anteojos oscuros si la fotofobia es marcada.
Higiene con jabón de pervinox.
Tratamiento médico local
Lágrimas artificiales cada 4 a 8 horas de a tres semanas.
Compresas 3-4 veces por día por una-dos semanas.
Esteroides tópicos (acetato de prednisolona al 1%, loteprednol o
fluorometolona para seudomembranas o cuando los infiltrados
subepiteliales reducen la visión.
Si hubiera sobreinfección bacteriana, agregar antibiótico (eri-
tromicina, tobramicina, gatifloxacina).
La FFC normalmente se resuelve en 21 días sin dejar secuelas
oculares.
Tratamiento médico sistémico
Si hay quemosis importante y el ganglio preauricular está presen-
te: dexametasona de depósito (duodecadrón) IM en única dosis.
Ibuprofeno 400 mg c/8 horas.
Conjuntiva
Tratamiento quirúrgico
Cuando existen infiltrados subepiteliales crónicos que reduzcan
la visión de manera importante se puede realizar tratamiento
con LASIK.
10. Evolución
Es autolimitada, puede durar de 7 a 40 días.
Desaparición de quemosis y síntomas en 72 horas.
Mejoría de síntomas al séptimo día.
En ciertas ocasiones el cuadro empeora los primeros cuatro a
siete días, para luego mejorar y resolverse recién hacia la segun-
da o tercera semanas.
11. Complicaciones
Queratitis
Úlcera corneal.
Membranas.
Conjuntivitis purulentas (tratar con colirios con antibióticos).
Alteración de la transparencia corneal (nébulas, máculas, leu-
comas).
12. Criterios de alta
Desaparición de signos y síntomas, con restitución a la norma-
lidad de la película precorneal. Esto tarda en promedio un mes,
aunque en ocasiones puede tardar varios años.
13. Controles
Controlar cada uno a tres días hasta la curación clínica, luego
una vez por mes.
14. Secuelas
Alteración de la transparencia corneal por infiltrados corneales
subepiteliales centrales confluentes.
Disminución de agudeza visual por opacificación corneal.
Se tratan con esteroides tópicos como loteprendnol cada 8 horas
por 30 días, ciclosporina 0,1% cada 12 horas por 60 días y lágri-
mas artificiales.
15. Prevención
En consultorio
Lavado estricto de manos del médico tratante.
Limpieza y desinfección de instrumentos utilizados.
No emplear goteros que se utilizarán con otros pacientes.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Paciente
Debe guardar estrictas medidas higiénicas personales.
16. Información a dar al paciente
La enfermedad evoluciona por lo menos durante tres semanas;
en la primera comienza, en la segunda semana se estabiliza y en
la tercera desaparecen o disminuyen los síntomas.
Puede haber complicaciones en el nivel corneal; el contagio se
puede producir simplemente estando en contacto o cerca de
personas que tengan queratoconjuntivitis viral, también por la
saliva a través de las gotitas de Pflügge.
17. Bibliografía
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4
Córnea
Cuerpo extraño corneal
1. Definición
Cuerpo extraño enclavado en el epitelio corneal o en su estroma.
2. Datos epidemiológicos
Es la lesión más frecuente que sufre el ojo.
3. Motivo de consulta
Sensación de cuerpo extraño.
Visión borrosa.
Epífora.
Fotofobia.
Dolor.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Trabajos en tornería o en piedra esmeril sin protección ocular.
El antecedente de trabajos que requieran golpear metal con me-
tal debe hacer pensar en un posible cuerpo extraño intraocular
debido a la alta velocidad con que se lanzan.
Explosión (cuerpos extraños múltiples).
Heredofamiliares
No tiene.
5. Examen ocular general
EOB
Medir la agudeza visual con corrección y sin ella.
Córnea: observar la presencia de abrasiones, cuerpo extraño o
úlcera, descartar perforación.
Tyndall.
Eversión del párpado superior.
Puede encontrarse inyección conjuntival y edema palpebral.
Anillo corneal: puede indicar una agresión contusa y debe des-
cartarse perforación de córnea.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
14. Secuelas
Leucoma.
15. Prevención
Del accidente: uso de anteojos protectores.
De las complicaciones: cuidadosa antibioticoterapia.
16. Información a dar al paciente
Indicación preventiva: usar anteojos protectores siempre que
realice trabajos con piedra esmeril o con hierro (sobre todo si
lo golpea).
Nunca tratar de extraerlo por métodos caseros dado que puede
producir infecciones.
17. Bibliografía
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Edema de córnea
1. Definición
Es el aumento del contenido acuoso de la córnea producido
por distrofia endotelial, inflamación, presión o traumatismo.
Hay dos fenómenos distintos que acompañan el término edema
corneal: edema epitelial y edema estromal. Ambos pueden pre-
sentarse juntos o en forma independiente, producir síntomas
diferentes y tener etiología distinta.
2. Datos epidemiológicos
No existen datos de la entidad como patología primaria.
Existen numerosos mecanismos que se encargan de la regulación
de la hidratación corneal, entre los más estudiados se encuentran
las barreras epiteliales y endoteliales, la evaporación del film la-
grimal, la presión intraocular entre los más destacados.
3. Motivo de consulta
Visión borrosa.
Disminución de la visión.
Dolor.
Fotofobia.
Visión de halos alrededor de las luces.
Epífora, control por antecedentes heredofamiliares, muchas ve-
ces se ignora el problema y su hallazgo forma parte de un con-
trol general.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Debe recabarse información acerca de cirugías realizadas sobre
catarata, córnea, defectos de refracción y uso de lentes de con-
tacto.
Los síntomas pueden presentarse en forma brusca o crónica, a
veces son más manifiestos por la mañana que por la tarde, lo
que depende de la etiología.
Antecedente traumático.
Lesión química.
Heredofamiliares
Es importante recabar información en este punto debido a las
distrofias endoteliales, el glaucoma u otras enfermedades ocu-
lares.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
S
Investigar sífilis y tuberculosis en caso de queratitis inters-
ticial.
7. Criterios diagnósticos
Edema de estroma, alteración de la transparencia corneal.
Disminución de la agudeza visual.
Dolor.
8. Diagnóstico diferencial
Distrofias
Distrofia endotelial de Fuchs.
Distrofia polimorfa posterior.
Distrofia endotelial congénita hereditaria.
Síndrome de Chandler.
Síndrome de Peters.
Cirugía de catarata
Enfermedad endotelial preexistente.
Trauma quirúrgico.
Toque vítreo.
♦ Toque de lente intraocular.
♦ Síndrome de Brown-McLean.
♦ Endocrecimiento epitelial.
Desprendimiento de Descemet.
Rechazo de injerto de córnea.
Uveítis.
Hidrops corneal (queratocono).
Traumatismos
Contuso.
Laceración corneal.
Lesión química.
Cuerpo extraño intraocular.
Glaucoma por cierre angular.
Infecciones
Herpes simple.
Herpes zoster.
Causas raras de queratitis disciforme (parotiditis, Acanthamoe-
ba, hongos).
Isquemia ocular.
Hipotonía.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Es más efectivo cuando la etiología del edema es inflamatoria;
fundamentalmente posinfecciosa, donde puede recurrirse a la
corticoterapia.
Disminuir la PIO si está aumentada.
Agentes hipertónicos: cloruro de sodio al 5% o dimetilpolisi-
loxano (gotas o pomada, cada tres o cuatro horas). Actúan ex-
clusivamente en los edemas epiteliales y son más efectivos por
la mañana, cuando el edema es más importante.
El uso de secador de pelo en ráfagas y a 30 cm de distancia sigue
siendo un método muy útil por la gran deshidratación que pro-
duce sobre la córnea.
Glicerina anhidra.
El uso de lente de contacto terapéutico puede mediar ante el
disconfort generado por el cuadro de queratopatía bullosa; se
utiliza conjuntamente con la administración de colirios antibió-
ticos y lubricantes.
Tratamiento médico sistémico
Tratar la enfermedad de base.
Tratamiento quirúrgico
En los casos en que no responde al tratamiento médico, la alter-
nativa es la queratoplastia penetrante (DSEK) o lamelar (DMEK).
Otras medidas que son paliativas en caso de no contar con la
posibilidad de la queratoplastia:
• Cauterización del estroma anterior.
• Recubrimiento conjuntival.
• Membrana amniótica.
• Excímer láser.
10. Evolución
Depende de la etiología y de la precocidad del tratamiento. Pue-
de ser larga y tórpida, pero también de resolución rápida y sin
complicaciones.
11. Complicaciones
Infección.
Disminución de la agudeza visual.
Úlcera de córnea.
Descompensación del endotelio (queratopatía bullosa).
Córnea
MR
En caso de no ser positivos los exámenes oculares, se puede
realizar un raspado y estudio de las vesículas cutáneas.
7. Criterios diagnóstico
Lesiones dérmicas unilaterales.
Adenopatía preauricular dolorosa.
Lesiones oculares típicas y test de rosa de bengala/fluoresceína positivo.
Recidivante.
Córnea
8. Diagnóstico diferencial
Úlcera dendrítica con:
Herpes zoster.
Queratitis por Acanthamoeba.
Abrasión corneal en cicatrización.
Úlcera por lentes de contacto.
Queratitis puntiforme superficial de Thygeson.
Queratitis disciforme con: otras causas de edema corneal (hi-
drops del queratocono, traumático, distrofia de Fuchs).
Úlcera geográfica con queratitis tróficas.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Epiteliales
Reposo relativo. Lavar la cara con jabón con povidona yodada.
Aciclovir (pomada al 5%) una aplicación, cinco veces por día
hasta que desaparezca la lesión.
Una alternativa al aciclovir hoy en día es el ganciclovir con me-
jor biodisponibilidad 3 veces por día.
Siempre acompañar con antibiótico tópico ocular.
No usar corticoides en enfermedad epitelial activa.
Ulcera trófica: lubricación con lágrimas y pomadas, oclusión,
lente de contacto terapéutico con alto contenido de agua, un-
güentos antivirales cinco veces por día.
Estromal
Acetato de prednisolona 1% o dexametasona 0,1% colirios, cin-
co veces por día, ciclopléjicos, aciclovir y antibióticos tópicos.
Luego de una semana bajar la dosis de corticoide a la mitad por
dos semanas más y luego día por medio por tres meses. NO in-
terrumpir los corticoides en forma abrupta.
Tratamiento médico sistémico
El uso de antivirales administrados en forma sistémica pueden
dividirse en aquellos procesos en los cuales se utilizan para epi-
sodios en enfermedad viral activa y en procesos en donde se los
utiliza como profilaxis como prevención ante posibles episodios
de recurrencia del virus.
La medicación más utilizada hasta el momento es el aciclovir
vía oral. Hoy día existen a disposición además de este fármaco,
prodrogas del aciclovir como el valacyclovir, con mejor biodis-
ponibilidad que el primero.
También existe el famcyclovir con su prodroga penciclovir.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Retinitis pigmentaria.
Dermatitis atópica y queratosis palmar y plantar.
Otras afecciones atópicas.
Queratoconjuntivitis primaveral.
Ectasia lentis.
Catarata congénita.
Amaurosis congénita de Leber.
Microcórnea.
Esclerótica azul.
Prolapso de la válvula mitral.
Falsa chordae tendineae.
Osteogénesis imperfecta.
Xeroderma pigmentoso.
Síndrome de laxitud palpebral.
Síndrome de Apert.
Síndrome de Ehlers-Danlos.
Síndrome de Noonan.
Síndrome de Crouzon.
Síndrome de Little.
Síndrome de Duane.
Enfermedad de Addison.
Síndrome de Lawrence-Moon-Bardet-Biedel.
5. Examen ocular general
En los comienzos puede encontrarse un astigmatismo progresi-
vo secundario a la excentricidad del cono y miopía —también
progresiva— debido al aumento del eje anteroposterior.
En el examen de fondo de ojo, en vez del reflejo rojo de la pupila,
puede observarse una sombra redonda, reflejo en gota de aceite.
Más adelante, con lámpara de hendidura se ven líneas verticales
en la capa profunda del estroma (estrías de Vogt). En un 50% de
los casos se puede observar el anillo de Fleischer (depósitos de
ferritina en el epitelio). La membrana de Bowman puede pre-
sentar una cicatrización reticular. Los nervios del estroma tien-
den a hacerse visibles como líneas finas que surgen del borde
interno del anillo de Fleischer.
En estadios más avanzados se observa la córnea cónica (que de-
termina el signo de Munson cuando el paciente mira hacia abajo),
de vértice excéntrico con un adelgazamiento central y la ruptura y
plegamiento de la membrana de Descemet, que produce hidrops
agudo con la consiguiente disminución de la agudeza visual.
Sensibilidad corneal disminuida.
Córnea
Queratocono posterior.
Alta miopía con estrabismo elevado.
Seudoqueratocono tracomatoso.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Lentes de contacto flexibles (mejoran la agudeza visual y tienen
un efecto ortoqueratológico); pueden ser útiles para la correc-
ción de los errores de refracción en períodos tempranos de la
enfermedad.
Lentes de contacto de doble curvatura posterior (Soper), una
combinación de lentes duras y blandas (lentes piggy-back: “a
cuestas”) o una lente dura con un borde periférico blando.
Los avances tecnológicos en las lentes blandas y gas permeables
son constantes ofreciendo más y mejores posibilidades para los
pacientes con queratocono.
Hidrops: oclusión opresiva más antibióticos tópicos. Si el edema
persiste, suero salino hipertónico tópico. Una alternativa terapéu-
tica para este cuadro agudo podría ser descementopexia con C3F8.
Tratamiento médico sistémico
No tiene.
Tratamiento quirúrgico
El crosslinking es un método nuevo para tratar el queratocono y
consiste en producir nuevos enlaces moleculares para reforzar el
colágeno corneal que está debilitado en esta enfermedad. Es una
excelente alternativa terapéutica con muy buenos resultados y
mínimos efectos secundarios. La técnica consiste en instilar un
colirio de riboflavina hasta que la córnea se impregne totalmen-
te y luego aplicar una radiación UVA. La radiación UVA junto
con la riboflavina originará una reacción que producirá el for-
talecimiento del colágeno corneal. Es un procedimiento simple,
no invasivo y se realiza en quirófano de manera ambulatoria.
Hoy en día los únicos tratamientos para detener la progresión
de esta condición son los anillos intraestromales y los transplan-
tes de córnea.
Queratoplastia penetrante: cuando falló el tratamiento médico o
quedan cicatrices permanentes que ocupan el eje visual. Deben
ser de un diámetro de 7,5 a 8 mm y tienen un buen pronóstico.
Se extrae el botón corneal completo y se lo reemplaza por cór-
nea sana.
Queratoplastia lamelar: disección parcial de la córnea enferma
Córnea
11. Complicaciones
Grandes trastornos de la visión.
Queratitis aguda.
Úlceras a repetición, perforación corneal.
Glaucoma.
Hidrops agudo.
Complicaciones del tratamiento quirúrgico: rechazo del injerto
de córnea.
12. Criterios de alta
Buena agudeza visual y estabilidad corneal, lograda temporal-
mente con lentes de contacto o a través de injerto de córnea.
No hay alta definitiva.
13. Controles
Anuales a los usuarios de lentes de contacto.
Semestrales a los operados.
14. Secuelas
Disminución importante de la visión.
Cicatrices del estroma secundarias a hidrops agudo.
15. Prevención
Topografía corneal por elevación en todo paciente con miopía
de difícil corrección o astigmatismo sospechoso.
Controlar a los hijos de los portadores.
16. Información a dar al paciente
Es una enfermedad que mientras se pueda controlar con lentes
de contacto se hará, pero el día en que ésta no contenga más
al cono (o que no se tolere) se deberá recurrir a técnicas qui-
rúrgicas que pueden ser la colocación de segmentos corneales
intraestromales, injerto de córnea lamelares o penetrantes.
17. Bibliografía
Albert DM, Jakobiec FA. Principles and practice of ophthalmolo-
gy. Philadelphia: Saunders, 2008.
Albertazzi RG. Queratocono: pautas para su diagnóstico y trata-
miento. Buenos Aires: Ediciones Científicas Argentinas, 2010.
Arffa RC. Enfermedades de la córnea. 4a. ed. Barcelona: Har-
court Brace de España, 1999.
Cullom RD, Chang B. The Wills eye manual. Philadelphia: Lip-
pincott, 2016.
Harley RD. Pediatric ophthalmology. Philadelphia: Saunders, 2013.
Córnea
11. Complicaciones
Ulceración.
Perforación.
Infecciones.
12. Criterios de alta
Desaparición total de síntomas y signos.
13. Controles
Una vez por semana hasta desaparición de los síntomas.
14. Secuelas
Leve opacidad y adelgazamiento corneal.
15. Prevención
Evitar las lesiones predisponentes y, de no ser posible, aplicar
lágrimas artificiales 4 o 5 veces por día.
16. Información a dar al paciente
Es una lesión inocua que evoluciona y se resuelve en forma es-
pontánea en la gran mayoría de los casos; el control debe conti-
nuar hasta el alta definitiva.
17. Bibliografía
Arffa RC. Enfermedades de la córnea. 4a. ed. Barcelona: Har-
court Brace de España, 1999.
Kanski JJ. Oftalmología clínica. Barcelona: Elsevier, 2016.
Krachmer JH, Mannis MJ, Holland EJ. Cornea. Philadelphia: El-
sevier Mosby, 2010.
Queratitis marginal
1. Definición
Es una lesión de córnea periférica caracterizada por ulceración
e infiltrado subepitelial.
2. Datos epidemiológicos. Etiología
Es una de las causas de queratitis microulcerativa periférica. Se
la suele asociar con afección estafilocócica productora de blefa-
ritis. También asociada con dermatitis seborreica.
3. Motivo de consulta
Irritación ocular.
Dolor ocular.
Hiperemia conjuntival.
Exudados acuosos.
Fotofobia.
Lagrimeo.
La intensidad de los síntomas son usualmente más importantes
que los signos que se pueden constatar.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Blefaritis crónica.
5. Examen ocular general
Por biomicroscopía se observa ulceración periférica que se tiñe
con fluoresceína. Se ve que la lesión queda separada del limbo
por córnea transparente. Las úlceras, generalmente menores a
una hora de reloj y con predilección por horas 2, 4, 8 y 10 en
córnea periférica.
Meibomitis.
Blefaritis.
Márgenes palpebrales rojos y ligeramente engrosados; puede
haber telangiectasias.
Espesamiento de secreciones.
Exámenes complementarios oculares
S Tinción con fluoresceína.
S Tinción con rosa de bengala.
S Test de Shirmer.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
7. Criterios diagnósticos
Biomicroscopía.
Asociación con blefaritis.
8. Diagnóstico diferencial
Úlcera de córnea periférica de cualquier etiología.
Úlcera herpética periférica.
Queratitis rosácea precoz.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Corticoides tópicos.
10. Evolución
Comienza con infiltrados subepiteliales, progresa hacia la diso-
lución del epitelio y por ende, a la ulceración.
Luego desde el limbo se dirigen vasos al área afectada y se re-
suelve.
Librado a evolución natural, resuelve en 2 a 4 semanas con ten-
dencia a la vascularización periférica y ulceración profunda.
11. Complicaciones
Ulceración.
Perforación.
Infección.
12. Criterios de alta
Desaparición total de síntomas y signos.
13. Controles
Una vez por semana hasta el alta definitiva.
14. Secuelas
Leve opacidad y adelgazamiento corneal.
15. Prevención
Tratar cualquier blefaritis asociada.
16. Información a dar al paciente
Se trata de una lesión causada por hipersensibilidad o toxinas
estafilocócicas, que mientras existan lesiones deben ser contro-
ladas.
Debe explicarse que en ocasiones son cuadros asociados con
enfermedades sistémicas como dermatitis seborreicas y, por lo
tanto, se debe realizar control clínico general e interconsulta con
dermatología.
Córnea
17. Bibliografía
American Academy of Ophthalmology. Enfermedades de super-
ficie ocular y córnea. Barcelona: Elsevier, 2012 (Curso de cien-
cias básicas y clínicas; 2011-2012, sección 8).
Arffa RC. Enfermedades de la córnea. 4a. ed. Barcelona: Har-
court Brace de España, 1999.
Kanski JJ. Oftalmología clínica. Barcelona: Elsevier, 2016.
Krachmer JH, Mannis MJ, Holland EJ. Cornea. 2nd ed. Philadel-
phia: Elsevier Mosby, 2005.
Queratitis rosácea
1. Definición
Es una complicación ocular de la acné rosácea —una dermopa-
tía común—, de etiología desconocida y con manifestaciones
cutáneas y oculares.
Las remisiones y exacerbaciones oftálmicas pueden producirse
independientemente del curso de la enfermedad cutánea.
Se la relaciona con manifestaciones de hipersensibilidad de tipo
IV.
2. Epidemiología. Etiología
Afecta típicamente a mujeres de 30 a 50 años.
En el 20% de los casos los signos oculares anteceden a los cutá-
neos o estos pueden ser mínimamente observables.
La blefaritis y la meibomitis asociadas no parecen ser las únicas
responsables de las complicaciones oculares.
Las biopsias conjuntivales muestran infiltración del epitelio por
células inflamatorias, sobre todo células T colaboradoras/in-
ductoras, fagocitos y células presentadoras de antígenos. Estos
hallazgos son más concordantes con una reacción de hipersen-
sibilidad de tipo IV.
3. Motivo de consulta
Ardor.
Sensación de cuerpo extraño.
Picazón.
Fotofobia.
Lagrimeo.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Rosácea cutánea.
Blefaritis y meibomitis recurrentes.
Heredofamiliares
NAD
5. Examen ocular general
Los hallazgos que se asocian con más frecuencia son la meibo-
mitis y la blefaritis.
Es frecuente la presencia de chalazión, así como de infecciones
estafilocócicas de los párpados.
Córnea
S
Interconsulta con reumatología para descartar enfermedad
sistémica vascular del colágeno.
7. Criterios diagnósticos
Presencia de signos cutáneos de rosácea.
Queratitis de comienzo periférico seguida por vascularización
que avanza hacia el centro.
Asociación con blefaritis o meibomitis.
8. Diagnóstico diferencial
Queratitis marginal.
Lesión periférica de córnea por enfermedad vascular sistémica
del colágeno.
Degeneración marginal de Terrier.
Úlcera de Hooren.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Corticoides tópicos (útiles para tratar la queratitis y la blefaro-
conjuntivitis).
Tetraciclinas tópicas.
Metronidazol gel, para ser aplicado sobre la cara.
Lavados de párpados con champú suave y diluido.
Tratamiento médico sistémico
Tetraciclinas 250 mg dos veces por día, por un mes y luego 200
mg un vez por día, por 6 meses.
Recordar que las tetraciclinas están contraindicadas en la em-
barazada y en niños.
En casos de rosácea grave el tratamiento debe estar bajo control
conjunto de un dermatólogo y un oftalmólogo.
10. Evolución
Con tratamiento se logra remisión de los signos y síntomas en
forma temporaria.
Sin tratamiento se produce disolución de la córnea, con vascu-
larización y cicatrización del estroma.
11. Complicaciones
Infección bacteriana de las lesiones.
Disminución de la visión por compromiso del eje visual.
12. Criterios de alta
No tiene. Se deben realizar controles periódicos.
Córnea
13. Controles
Con el florecimiento de los síntomas y signos se realizará un
control semanal.
En etapas de quiescencia se realizarán controles trimestrales.
14. Secuelas
Opacidades corneales con disminución de la visión.
15. Prevención
Interiorizar al paciente de su afección y mantener una fluida co-
municación con el dermatólogo.
16. Información a dar al paciente
Es una enfermedad crónica que remite con el tratamiento pero
no se cura y son posibles las recidivas repetidas.
17. Bibliografía
American Academy of Ophthalmology. Enfermedades de super-
ficie ocular y córnea. Barcelona: Elsevier, 2012 (Curso de cien-
cias básicas y clínicas; 2011-2012, sección 8).
Arffa RC. Enfermedades de la córnea. 4a. ed. Barcelona: Har-
court Brace de España, 1999.
Kanski JJ. Oftalmología clínica. Barcelona: Elsevier, 2016.
Krachmer JH, Mannis MJ, Holland EJ. Cornea. Philadelphia:
Elsevier Mosby, 2010.
Pavan-Langston D. Manual de diagnóstico y terapéutica ocula-
res. 3a. ed. Barcelona: Ediciones Científicas y Técnicas, 1993.
Spalton D et al. Atlas de oftalmología clínica. Madrid: Elsevier
España, 2006.
Flictenulosis
1. Definición
Trastorno no inflamatorio que afecta la córnea o la conjuntiva y
parece que se debe a una hipersensibilidad mediada por células
(tipo IV). Se caracteriza por la aparición de nódulos sobreeleva-
dos, tanto en la córnea como en la conjuntiva, cercanos al limbo
y en general rodeados por vasos.
2. Datos epidemiológicos. Etiología
Poco frecuente.
Afecta en general a niños.
Aunque en el pasado se pensaba que la tuberculosis era el factor
etiológico común, ahora se piensa que la causa es una reacción
de hipersensibilidad retardada inespecífica a Staphylococcus.
3. Motivo de consulta
Fotofobia.
Lagrimeo.
Blefarospasmo.
Sensación de cuerpo extraño.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Historia personal y familiar de procesos de hipersensibilidad.
Heredofamiliares
NAD
5. Examen ocular general
EOB
El primer episodio se produce por lo general en el limbo, los si-
guientes pueden aparecer en la córnea o en la conjuntiva bulbar
o tarsal.
La lesión puede ser en punta de alfiler, con un tamaño de varios mi-
límetros; en general, cuanto mayor es el niño, mayor es la flicténula.
Cada lesión sigue un curso de elevación, infiltración, ulceración
y resolución durante un período de 6-12 días.
La flicténula empieza como una pequeña lesión redonda u oval,
dura, roja y elevada. En el espacio de 2 a 3 días desarrolla un
centro blanco amarillento y se ulcera.
Los ataques posteriores también tienden a aparecer en el lim-
bo; se desarrollan adyacentes al limbo o en el borde central del
Córnea
13. Controles
Cada 3 días hasta la desaparición de los síntomas.
14. Secuelas
Opacidad periférica de forma triangular, con base en el limbo y
vascularización.
15. Prevención
Tratar cualquier blefaritis estafilocócica asociada.
16. Información a dar al paciente
Son lesiones que generalmente se resuelven con tratamiento; si
recidiva es necesario un control clínico general.
17. Bibliografía
Arffa RC. Enfermedades de la córnea. 4a. ed. Barcelona: Har-
court Brace de España, 1999.
Kanski JJ. Oftalmología clínica. Barcelona: Elsevier, 2016.
Krachmer JH, Mannis MJ, Holland EJ. Cornea. Philadelphia:
Elsevier Mosby, 2010.
Pavan-Langston D. Manual de diagnóstico y terapéutica ocula-
res. 2a. ed. Barcelona: Salvat, 1984.
5
Esclera
Epiescleritis
1. Definición
Inflamación recidivante, benigna, autolimitada, no infecciosa,
transitoria e idiopática del tejido epiesclerótico (cápsula de Te-
non) localizado entre la inserción de los músculos rectos y el
limbo esclerocorneal.
2. Datos epidemiológicos
Más frecuente en mujeres.
Un tercio bilateral.
Entre los 20-50 años.
Niños: infrecuente en menores de 5 años. Mayores de 5 años
está asociado con enfermedad reumatólogica.
Dos formas de presentación:
Simple: 70% localizada en un sector del globo ocular. Remisión
espontánea en 7 a 10 días. Presenta recurrencias.
Nodular: 30%, desarrollo de un nódulo móvil localizado.
Etilogía: idiopática (más frecuente), infecciosa (Herpes zoster),
otras (rosácea, atopía, enfermedad tiroidea).
3. Motivo de consulta
Enrojecimiento ocular.
Dolor ocular leve en uno o ambos ojos.
Lagrimeo.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Artritis reumatoidea.
Herpes zoster o simple.
Gota.
Colagenopatías.
Sífilis.
Heredofamiliares
Sin relación con la enfermedad actual.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
9. Tratamiento
El tratamiento definitivo estará orientado a la etiología de la es-
cleritis.
Escleritis no infecciosa
Tratamiento médico local
Corticoides tópicos: prednisolona acetato 1% (beneficiosos en
casos leves o como tratamiento coadyuvante).
Corticoides subconjuntivales: serían eficaces en ausencia de
riesgos significativos (contraindicados en esleritis necrosante).
AINES
Alivian el dolor y reducen la inflamación. Se consideran el fár-
maco de tratamiento de primera línea en casos de escleritis no
necrosante.
Indometacina 75 mg dos veces por día.
Ibuprofeno 200 mg dos a tres veces por día.
Naproxeno 375-500 mg cada 12 horas.
Tratamiento sistémico
Corticoides sistémicos
Deben ser considerados como tratamiento de primera línea en
casos de escleritis necrotizante o en cuadros refractarios al tra-
tamiento con AINES.
Administración: vía oral o pulsos IV en dosis altas, 1 mg/kg
peso/día.
Inmunosupresores
Pacientes con escleritis que no responden a tratamiento con cor-
ticoides o requieren dosis excesivamente altas durante tiempo
prolongado de estos fármacos pueden sustituirse por tratamiento
inmunomodulador.
Metrotexate, aziatioprina y micofenolato de mofetilo se han em-
pleado con resultados satisfactorios.
Ciclofosfamida: fármaco de elección en la poliangeítis granulo-
matosa y panarteritis nodosa.
Tratamiento quirúrgico
Cirugía de refuerzo esclerótico para corregir el adelgazamiento es-
cleral (con esclerótica de donante cadavérico o periostio autólogo).
Escleritis infecciosa
Combinación de tratamiento farmacológico y quirúrgico.
Debridamiento de tejido infectado.
Antibioticoterapia dirigida a causa.
Evitar corticoides en etapa inicial.
Analgésicos para controlar el dolor.
Esclera
10. Evolución
Es desfavorable en casos de escleritis necrotizante.
La escleromalacia suele permanecer sin signos evolutivos o bien
evoluciona hacia la perforación y pérdida del órgano visual.
11. Complicaciones
Infecciones.
Úlceras de difícil tratamiento.
Disminución severa de la visión.
Endoftalmitis.
Queratitis periférica: 37%.
Uveítis: 30%.
Cataratas: 18%.
Glaucoma: 18%.
Adelgazamiento escleral: 33%.
Perforación.
12. Criterios de alta
No hay. Los pacientes deben permanecer bajo control estricto.
13. Controles
La disminución del dolor indica que el tratamiento es exitoso.
Cada tres días la primera semana; luego semanalmente hasta
que desaparezcan los síntomas.
14. Secuelas
Pérdida visual parcial o completa.
15. Prevención
Tratamiento de reumatismo y otras colagenopatías (demostra-
das por laboratorio).
Prevención de las infecciones oculares con colirios antibióticos.
16. Información a dar al paciente
La escleritis es una enfermedad grave que puede llevar a una
pérdida de visión. Por lo tanto debe ser tratada tan pronto como
los síntomas sean evidentes.
17. Bibliografía
Baráková D, Bujalková D, Redinová M. Echograficky nalez u
scleritis posterior. Cesk Slov Oftalmol 2003; 59: 86-90.
Beardsley RM, Suhler EB, Rosenbaum TJ, Lin P. Pharmacothe-
rapy of scleritis: current paradigms and future directions. Ex-
pert Opin Pharmacother 2013; 14: 411-24.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Hipemas.
Alteraciones de la presión ocular.
Lesiones del iris.
Complicaciones capsulares por pseudoexfoliación.
Complicaciones de la capsulorrexis.
Complicaciones por la lente intraocular (destellos en los multi-
focales, ametropías, astigmatismo).
En el segmento posterior
Luxación del núcleo o de fragmentos.
Luxación posterior de la lente.
Fototraumatismo.
Endoftalmitis postoperatoria.
Desprendimiento de retina pseudofáquico (más en miopes).
Edema macular cistoideo.
12. Criterios de alta
Cirugía ambulatoria unilateral con intervalo entre un ojo y otro
de al menos una semana.
El alta quirúrgica se otorga tras comprobar la buena evolución
posquirúrgica.
13. Controles
A las 24 y 48 horas y luego hasta los 30 días con la frecuencia
necesaria según el caso.
14. Secuelas
Ametropías.
Halos.
Miodesopsias.
15. Prevención
En la catarata senil no hay medidas de profilaxis.
16. Información a dar al paciente
La catarata es una lente natural del ojo que se opacifica y se debe
reemplazar por una lente intraocular. Ésta puede corregir sus
defectos ópticos para la disminución de la necesidad de ante-
ojos. Se puede colocar lentes monofocales, monofocales tóricas
para corrección de astigmatismo y multifocales para corregir la
presbicia.
Las multifocales pueden generar halos.
La cápsula donde se aloja la lente intraocular se puede opacifi-
car y necesitar Yag láser.
Cristalino
17. Bibliografía
Age-Related Eye Disease Study Research Group. Risk factors as-
sociated with age-related nuclear and cortical cataract: a ca-
se-control study in the Age-Related Eye Disease Study, AREDS
Report No. 5. Ophthalmology 2001; 108: 1400-8.
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Smeeth L et al. A population based case-control study of cataract
and inhaled corticosteroids. Br J Ophthalmol 2003; 87: 1247-51.
Catarata congénita
1. Definición
Es la opacidad total o parcial del cristalino, generalmente bila-
teral, simétrica y no progresiva, producida por la existencia de
una lesión hereditaria o una agresión sobre el embrión durante
su desarrollo (por ejemplo, rubéola) que se detecta en el niño
durante el primer año de vida.
2. Datos epidemiológicos
En Latinoamérica se ha estimado una prevalencia de 4/10.000
niños, con una incidencia de 10 casos por millón de habitantes
al año o un caso cada 200 nacimientos al año.
La etiología en los casos bilaterales es un 50% desconocida, un
20% hereditaria y un 30% infecciosa metabólica.
3. Motivo de consulta
Leucocoria.
Nistagmo (tipo pendular).
Fotofobia.
Estrabismo.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
En los casos de cataratas congénitas asociadas con otros datos
clínicos —constituyendo un síndrome— puede haber antece-
dentes de: rubéola durante el embarazo (en 50% de los casos
se presentan cataratas), varicela, herpes, sífilis, toxoplasmosis,
prematurez, alteraciones metabólicas (hipoglucemia neonatal,
galactosemia, hipoparatiroidismo), otras enfermedades ocula-
res (glaucoma congénito, desprendimiento congénito de retina,
persistencia de vítreo primario hiperplásico, aniridia congéni-
ta), síndrome oculocerebrorrenal de Löwe, síndrome de Alport,
síndrome de Down (15%), síndrome de Patau, neurofibromato-
sis tipo 2, síndrome de Turner, síndrome cri-du-chat.
Heredofamiliares
El 7,76% de las cataratas congénitas es de origen genético.
Un tercio de las cataratas congénitas es hereditario y no está
asociado con alteración alguna, sea metabólica o sistémica.
La catarata congénita sola suele transmitirse en forma domi-
nante.
Cristalino
S
Derivación al pediatra para exámenes complementarios en
busca de anormalidades asociadas.
S
Serología: TORCH (toxoplasmosis, rubéola, citomegalovi-
rus, herpesvirus).
Si se sospecha galactosemia, para la confirmación solicitar
S análisis de orina por la presencia de sustancias reductoras
y actividad GPUT y GK de los hematíes.
S
Si se sospecha hipoglucemia, solicitar determinación de
glucosa en sangre.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
S
Si se sospecha síndrome de Löwe, solicitar cromatografía de
orina para aminoácidos.
Si se sospecha síndrome hipocalcémico, solicitar determi-
nación de calcio y fósforo sérico, como también radiografía
S simple de cráneo, para determinar la presencia de calcifi-
caciones de los ganglios basales en el hipoparatiroidismo
idiopático.
7. Criterios diagnósticos
No progresiva.
Bilateral.
Simétrica.
Diagnóstico antes del año de vida.
Asociada a microftalmia.
8. Diagnóstico diferencial
Retinoblastoma.
Enfermedad de Coats.
Persistencia de vítreo primario hiperplásico.
Retinopatía del prematuro.
Coriorretinitis.
Coloboma de iris, coroides, retina.
Toxocara.
Hemorragia de vitreo.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Catarata axial pequeña: midriáticos (fenilefrina 2,5%) 1 g dos
veces por día, lo que permite que el cristal paraaxial transparen-
te participe en la transmisión de la luz.
Tratamiento médico sistémico
Depende de la presencia o asociación con algún cuadro sistémico.
Tratamiento quirúrgico
Indicaciones:
Cataratas bilaterales avanzadas en las que no se visualizan los
detalles del fondo de ojo con oftalmoscopía indirecta.
Cataratas unilaterales (solamente en los primeros días de vida).
Las operaciones deben realizarse en el momento del diagnósti-
co, en especial en recién nacidos, para evitar la falta de estimu-
lación sensorial retinal.
La operación consiste en extraer la cápsula anterior, aspirar las
masas cristalinas y finalmente efectuar capsulotomía posterior.
Cristalino
Posterior
Focal
Toxoplasmosis.
Toxocariasis.
Tuberculosis.
Sarcoidosis.
Absceso subretinal.
Síndrome de enmascaramiento.
Multifocal
Enfermedad de Vogt Koyanagi Harada.
Retinocoroideopatía de Birdshot.
Sarcoidosis.
Citomegalovirus.
Necrosis retinal aguda.
Endoftalmitis endógenas.
Sífilis.
Oftalmía simpática.
Síndrome de enmascaramiento.
Coroiditis multifocales.
Síndrome de múltiples puntos blancos evanescentes.
Epiteliopatía placoidea posterior multifocal aguda.
Coroideopatía serpiginosa.
Panuveítis
Sarcoidosis.
Enfermedad de Vogt Koyanagi Harada.
Endoftalmitis infecciosas.
Enfermedad de Behcet.
Coroiditis multifocal y panuveítis.
Sífilis.
La mayoría de los cuadros de uveítis posteriores pueden exten-
derse al segmento anterior y presentar un cuadro de panuveítis,
excepto: coroideopatía serpiginosa, PIC, APMPPE, MEWDS y
la retinocoroideopatía de Birdshot; esta última lo haría en un
grado muy leve. En cambio, las uveítis anteriores, si hacen un
compromiso del segmento posterior, generalmente es por la
aparición del edema macular cistoideo; no es de esperar que ge-
neren una panuveítis.
Spillover o fenómeno de rebasamiento es la presencia de activi-
dad en el vítreo anterior secundario a una uveítis anterior.
Inflamaciones oculares
Inyección ciliar.
Precipitados endoteliales: generalmente localizados en el trián-
gulo inferior. Localizados y con distribución disciforme es ca-
racterístico del herpes. Si son hialinos, estrellados y distribui-
dos en todo el endotelio son característicos de los síndromes
de Fuchs y de Possner Schlossmann, y también de las uveítis
intermedias. Determinar además si son granulomatosos o no
granulomatosos.
Células en cámara anterior.
Hipopión: uveítis anterior asociada al HLA B27, enfermedad de
Behcet, síndromes de enmascaramiento, endoftalmitis.
Tonometría: la hipotonía es una característica de la UAA aso-
ciada al HLA B27. La uveítis hipertensiva está asociada a causas
infecciosas (toxoplasmosis, herpes, entre otras).
Pupila: determinar la presencia de sinequias posteriores.
Nódulos en iris: determinan cronicidad del cuadro inflamatorio.
Atrofia del iris: si es sectorial es característico del herpes, tam-
bién a sífilis puede generarlo. Si es difusa el ejemplo es la irido-
ciclitis de Fuchs.
Gonioscopía: determinar sinequias anteriores periféricas, neo-
vascularización y dispersión pigmentaria.
6. Examen físico general
No presenta.
7. Exámenes complementarios generales
En caso de que con el examen clínico no se tenga aproximación
diagnóstica:
Laboratorio completo general con perfil infeccioso (FAN,
S eritrosedimentación, PCR, proteinograma, C3, C4, látex
AR, HLA B27) ante la sospecha de colagenopatía.
PPD y radiografía de tórax: ante la sospecha de tuberculosis.
S Radiografía lumbosacra: ante sospecha de espondiloartro-
patías por HLA B27+
8. Criterios diagnósticos
Inyección ciliar.
Células cámara anterior o flare.
Precipitados retroqueráticos.
9. Diagnósticos diferenciales
Uveítis posterior con afectación del segmento anterior.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Iritis traumática.
Uveítis inducida por fármacos.
Esclerouveítis.
Endoftalmitis infecciosa.
Síndromes de enmascaramiento.
Síndrome tóxico del segmento anterior (TASS).
Síndrome de Schwarts: uveítis anterior severa secundaria a des-
prendimiento de retina quirúrgico.
Frente a un cuadro de uveítis anterior dilatar siempre la pupila y
asegurar la falta de compromiso del segmento posterior.
10. Tratamiento
Ver en cada caso.
11. Evolución
Ver en cada caso.
12. Complicaciones
Disminución de agudeza visual, causas: catarata, glaucoma, que-
ratopatía en banda, turbidez vítrea, edema macular, papilitis.
Glaucoma: las causas del glaucoma son las sinequias posterio-
res con seclusión pupilar, las gonisinequias, neovascularización,
corticoides.
Edema macular quístico: complicación presente: los cuadros
muy agresivos o persistentes.
Membranas pupilares.
13. Criterios de alta
Está sujeto a la evolución del cuadro.
14. Controles
A las 24 horas; luego de 48-72 horas y una vez por semana du-
rante un mes.
Después del alta, control cada 6 meses.
15. Secuelas
Descompensación de la córnea.
Hipotonía: uveítis activa, membrana ciclítica, atrofia de cuerpos
ciliares.
16. Prevención
No presenta.
17. Información a dar al paciente
Ver en cada caso.
Inflamaciones oculares
18. Bibliografía
Chang JH, McCluskey PJ, Wakefield D. Acute anterior uveitis and
HLA-B27. Surv Ophthalmol 2005; 50: 364-88.
Fearnley IR, Rosenthal AR. Fuchs’ heterochromic iridocyclitis re-
visited. Acta Ophthalmol Scand 1995; 73: 166-70.
Rodriguez A et al. Referral patterns of uveitis in a tertiary eye care
center. Arch Ophthalmol 1996; 114: 593-9.
Iridociclitis de Fuchs
1. Definición
Uveítis anterior crónica unilateral no granulomatosa y encua-
drada en el grupo de las subclínicas por su baja sintomatología.
2. Datos epidemiológicos
Afecta a adultos jóvenes entre 20 a 40 años.
Prevalencia del 2% al 8%.
Bilateralidad del 0% al 16%.
3. Motivo de consulta
Flotadores.
Visión borrosa.
Disminución de agudeza visual.
Ninguno (como hallazgo de la evaluación oftalmológica).
Cuadro clínico
Precipitados queráticos no granulomatosos estrellados, hiali-
nos, filiformes y distribuidos en todo el endotelio de la córnea.
Nódulos de Köeppe.
Escasas células en cámara anterior.
Atrofia estromal y difusa del iris.
Cuerpos refringentes de Russell.
Heterocromía del 14% al 87%.
Neovascularización (raro).
Turbidez vítrea a predominio del vítreo anterior.
Cicatrices por atrofia retinocoroidea en el segmento posterior
simil toxoplasmosis.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
No presenta.
5. Examen ocular general
Precipitados queráticos no granulomatosos estrellados, hiali-
nos, filiformes y distribuidos en todo el endotelio de la córnea.
Nódulos de Köeppe.
Escasas células en cámara anterior.
Atrofia estromal y difusa del iris.
Cuerpos refringentes de Russell.
Heterocromía del 14% al 87%.
Neovascularización (raro).
Turbidez vítrea a predominio del vítreo anterior.
Inflamaciones oculares
♦ Turbidez vítrea.
♦ Opacidad capsular posterior.
No se deben tratar las células en los pacientes con iridociclitis
de Fuchs.
11. Evolución
Crónica.
12. Complicaciones
Catarata del 80% al 90%.
Glaucoma del 7% al 59%.
13. Criterios de alta
No tiene alta definitiva.
14. Controles
No presenta.
15. Secuelas
Turbidez vítrea.
16. Prevención
No presenta.
17. Información a dar al paciente
Es una uveítis que sólo se trata cuando aparecen las complica-
ciones.
18. Bibliografía
Chang JH, McCluskey PJ, Wakefield D. Acute anterior uveitis and
HLA-B27. Surv Ophthalmol 2005; 50: 364-88.
Fearnley IR, Rosenthal AR. Fuchs’ heterochromic iridocyclitis re-
visited. Acta Ophthalmol Scand 1995; 73: 166-70.
Rodriguez A et al. Referral patterns of uveitis in a tertiary eye care
center. Arch Ophthalmol 1996; 114: 593-9.
Uveítis anterior por virus Herpes spp
1. Definición
Afección uveal producida por partículas virales directamente en
cámara anterior o bien por un fenómeno de hipersensibilidad.
El virus se acantona en el ganglio del trigémino, hace su período
de latencia y confiere inmunidad para una infección exógena,
pero ante situaciones de estrés o defensas inmunológicas puede
resultar en la recurrencia del virus.
Etiología: Herpes simple, Herpes Varicela Zoster, Citomegalovirus.
2. Epidemiología
Incidencia de 10 a 20 casos en 100 mil pacientes por año.
Prevalencia 149 casos cada cien mil personas.
Afecta hombres y mujeres por igual.
3. Motivo de consulta
Dolor, ojo rojo, disminución de la agudeza visual, fotofobia.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Varicela / Zoster.
Herpes cutáneo.
Ulcera dendrítica o geográfica.
Queratitis disciforme.
5. Examen ocular general
Unilateral.
Precipitados queráticos localizados con distribución disciforme
generalmente granulomatosos.
Edema corneal localizado a nivel de los precipitados endoteliales.
Células en cámara anterior.
Hipertensión ocular.
Atrofia sectorial de iris.
Sinequias posteriores.
6. Exámenes complementarios oculares
R
Pruebas confirmatorias: PCR y cultivo de humor acuoso
por punción.
7. Examen físico general
No presenta.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
8. Criterios diagnósticos
Uveítis anterior unilateral hipertensiva granulomatosa.
9. Diagnósticos diferenciales
Clínico.
PCR de humor acuoso.
10. Tratamiento
Tópico.
Prednisolona acetato 1% o difluprednato.
Aciclovir o ganciclovir (discutible). Nosotros recomendamos
pomada de aciclovir por la noche.
Sistémico.
Aciclovir 400 mg cada 4 horas o valaciclovir 500 mg cada 12
horas (discutible).
11. Evolución
Aguda recurrente.
12.Complicaciones
Catarata.
Glaucoma.
Uveítis anterior crónica.
Escleritis.
13. Criterios de alta
Está sujeta a la evolución del cuadro.
14. Controles
A las 24 horas, luego de 48 a 72 horas y una vez por semana
durante un mes.
Después del alta, control cada 6 meses.
15. Secuelas
Retinopatía herpética necrotizante.
Necrosis retinal aguda.
16. Prevención
No presenta.
17. Información a dar al paciente
Es una uveítis que puede curar sin dejar secuelas, pero debe
controlarse de inmediato si aparecen nuevos síntomas.
Inflamaciones oculares
18. Bibliografía
Chang JH, McCluskey PJ, Wakefield D. Acute anterior uveitis and
HLA-B27. Surv Ophthalmol 2005; 50: 364-88.
Fearnley IR, Rosenthal AR. Fuchs’ heterochromic iridocyclitis re-
visited. Acta Ophthalmol Scand 1995; 73: 166-70.
Rodriguez A et al. Referral patterns of uveitis in a tertiary eye care
center. Arch Ophthalmol 1996; 114: 593-9.
Uveítis intermedia
1. Definición
Inflamación ocular crónica que involucra la pars plana, la base
del vítreo y la retina periférica.
2. Datos epidemiológicos
Representa el 10% de los casos de uveítis que se presentan en la
consulta en los centros de derivación.
Tiene distribución bimodal con dos picos: una entre los 5 y 15 años
y otro entre los 25 y 35 años, rara su aparición después de los 40.
Bilateral y asimétrica.
Prevalencia 3 casos cada 100 mil individuos.
No parece tener relación con el sexo o la edad.
Asociación con HLA en investigación.
Asociaciones más frecuentes con enfermedades sistémicas:
♦ Esclerosis múltiple.
♦ Sarcoidosis.
♦ Linfoma.
♦ Enfermedad inflamatoria intestinal.
♦ Toxocariasis.
♦ Enfermedad de Lima, en países endémicos.
3. Motivo de consulta
Moscas volantes.
Disminución de agudeza visual progresiva (edema macular cis-
toideo).
Poco frecuente:
Disminución brusca de AV por hemovítreo.
Dolor y fotofobia.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
No presenta.
5. Examen ocular general
Segmento anterior
Hiperemia conjuntival, poco frecuente.
Depósitos endoteliales en “grasa de carnero” cuando se asocia a
esclerosis múltiple.
La inflamación del segmento anterior es más frecuente en niños
con un grado moderado de células en cámara anterior, sinequias
posteriores y queratopatía en banda.
Inflamaciones oculares
Segmento posterior
Tyndall vítreo.
Bolas de nieve (snowballs) en vítreo inferior.
Bancos de nieve (snowbanks).
Vasculitis a predominio venular en periferia retinal.
Edema macular cistoideo (EMC).
Edema de papila.
Neovascularización.
6. Exámenes complementarios oculares
CS AGD: para evaluar vasculitis periférica y EMC.
CS OCT macular: para evaluar EMC.
CS Vitrectomía diagnóstica sospecha de linfoma.
CS
RMN de cerebro con y sin contraste y examen neurológico:
ante la sospecha de esclerosis múltiple.
Radiografías y TAC de tórax. Solicitud de enzima converti-
CS
dora de aniotensina (ECA). También se puede solicitar: cen-
tellograma con galio y evaluación de la función pulmonar
ante la sospecha de sarcoidosis.
CS Elisa para toxocara.
CS
RMN de cerebro. Punción lumbar y evaluación citológica
de líquido cefalorraquídeo: ante la sospecha de linfoma.
8. Criterios diagnósticos
Se basa en la identificación de signos clínicos.
9. Diagnóstico diferencial
Es clínico.
El primer paso en el manejo de la uveítis intermedia es descar-
tar enfermedades asociadas:
Esclerosis múltiple
Sospecha clínica: parestesia de manos u otros síntomas asociados.
Enfermedad inflamatoria intestinal
Sospecha clínica: diarrea crónica.
Estudio complementario: derivación a gastroenterólogo.
Toxocara
Sospecha clínica: si es unilateral y en niños.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Linfoma
Sospecha clínica: pacientes ancianos.
10. Tratamiento
Es discutido el momento de comenzar el tratamiento. Algunas
corrientes comienzan a partir de que se observa una disminu-
ción de la AV. Como el EMC es la causa más frecuente de dismi-
nución de la AV la mayoría de los tratamientos tienen como ob-
jetivo su eliminación. La decisión de tratamiento es individual
para cada paciente.
Tratamiento médico sistémico
Corticoides perioculares
Objetivo: tratamiento del EMC.
Ventaja: pocos efectos adversos sistémicos.
Forma de colocación:
Se dispone de ampolla de triamcinolona 40 mg/ml
Localización retroseptal: se realiza inyección periocular del to-
tal de la ampolla buscando ángulo inferoexterno del reborde
orbitario.
Localización subtenoniana: temporal superior, sería más efecti-
vo ya que posiciona al esteroide más cerca de la mácula.
Puede repetirse la inyección cada 2 o 3 semanas por un período
de 8 semanas.
Si luego de 2 o 3 inyecciones no se observa mejoría de AV se
considera que la intervención no es efectiva.
Es importante realizar controles de presión intraocular poste-
riores a la intervención.
Corticoides tópicos
Podrían considerarse en los afáquicos.
Corticoides sistémicos
Indicación: resistencia al tratamiento con corticoides periocu-
lares.
Dosis: 0,5 a 1 mg/kg/día vía oral.
Tiempo de tratamiento: dos semanas y comenzar a disminuir
corticoides 20% de dosis previa.
Medidas previas a tratamiento con corticoides sistémicos:
Descartar tuberculosis con PPD 2UT y Rx tórax.
Control con médico clínico en especial de TA y glucemia.
Inmunosupresores
Indicaciones: resistencia a tratamiento sistémico con corticoides.
Necesidad de corticoides sistémicos crónicos.
Drogas: ciclosporina.
Inflamaciones oculares
Metrotexate.
Azatioprina.
Es conveniente para este tratamiento la consulta con inmunólogo.
Tratamiento quirúrgico
Crioterapia
Indicaciones: neovascularización de la base del vítreo.
Hemovítreo.
Duración: 3 a 6 meses.
Repetir sólo si la primera intervención tuvo efecto.
Puede asociarse a corticoides perioculares.
Vitrectomía por pars plana
Indicaciones:
Hemorragia vítrea persistente.
Tracciones vitreorretinales.
11. Evolución
Puede tener un curso benigno o insidioso y crónico con severa
pérdida de agudeza visual.
La pérdida de AV se debe a las complicaciones, secundarias
tanto a la inflamación crónica como a los efectos adversos del
tratamiento.
12. Complicaciones
Edema macular crónico.
Cataratas.
13. Criterios de alta
Hay que tener presente el aspecto clínico de la inflamación y las
lesiones intraoculares.
14. Controles
Durante la fase aguda los pacientes se revalúan a intervalos de 1
a 4 semanas según la gravedad.
Durante la fase crónica se realizan cada 3 a 6 meses.
15. Secuelas
Queratopatía en banda.
16. Prevención
No presenta.
17. Información a dar al paciente
Es una enfermedad de curso crónico que a veces no provoca
pérdida severa de AV pero hay casos resistentes al tratamiento y
a largo plazo puede tener sus complicaciones.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Neurorretinitis
Foco exudativo.
Edema de papila.
Hiperemia.
Ingurgitación venosa.
Hemorragias superficiales.
Vitreítis.
Edema macular y depósitos lipídicos distribuidos en forma de
estrella en área macular.
Toxoplasmosis punctata
Lesiones multifocales blanco grisáceas, 50-1000 micras. Una sa-
télite de la anterior.
Ubicación: retina externa o interna, área macular.
Vitreítis: mínima o nula.
Pacientes jóvenes.
3. Motivo de consulta
Miodesopsias.
Visión borrosa.
Fotofobia.
Dolor ocular.
Ojo rojo.
Disminución de la agudeza visual.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Antecedentes de contacto con animales infectados.
Ingesta de carne o verdura mal cocida.
Heredofamiliares
Madre serológicamente positiva.
5. Examen ocular general
Cuando el foco de retinitits o retinocoroiditis está activo, se observa
una zona blanco-amarillenta o blanco-grisácea. A veces se lo ve algo
sobreelevado, de bordes borrosos y con edema retinal adyacente.
El foco puede estar asociado con vasculitis venular no oclusiva.
Raramente genera oclusión vascular.
Vitreítis: puede estar localizada únicamente en la zona del foco
o en todo el cuerpo vítreo. Cuando la intensidad es de cuatro
cruces se la denomina “faro en la niebla”, que no permite visuali-
zar estructuras del fondo de ojo, ni siquiera el disco óptico, pero
sí permite localizar el foco activo.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Retinocoroiditis serpiginosa.
Cicatrices congénitas por rubéola o virus herpes.
Citomegalovirus.
Tuberculosis.
Sífilis.
Otras causas de neurorretinitis: bartonelosis, sífilis, borreliosis,
leptospirosis.
10. Tratamiento
Tratamiento local
Corticoides tópicos (prednisolona acetato 1% o difluprednato
0.05%) en casos de reacción en cámara anterior. Si la hipertensión
ocular es severa pueden utilizarse drogas antiglaucomatosas ex-
cepto los derivados de las prostaglandinas. Generalmente la pre-
sión ocular disminuye con el uso del corticoide. Los midriáticos y
ciclopléjicos no suelen ser necesarios. Evitar colirios con atropina.
Tratamiento sistémico
Hasta el momento no se ha podido demostrar que un esquema
de tratamiento antitoxoplasmosis ocular sea superior a otro.
Opciones terapéuticas:
Opción 1: pirimetamina-sulfadiazina
Pirimetamina (Daraprim NR)
Primer día: 75 mg (3 comprimidos)
Segundo día: 50 mg (2 comprimidos)
Luego del tercer día 25 mg/día (1 comprimido por día) hasta la
suspensión del tratamiento.
Debe realizarse un recuento de glóbulos blancos y plaquetas
cada 7 a 10 días por la mielotoxicidad. Se administra combinado
con ácido folínico (leucovorina cálcica 15 mg por día en días al-
ternos). Suspender el tratamiento con un recuento de plaquetas
inferior a los 100000/mm3.
Sulfadiazina: 2 a 4 gramos/día divididos en cuatro tomas.
Opción 2: pirimetamina-azitromicina
Pirimetamina: igual que en opción 1.
Azitromicina (Zytromax NR).
1500 mg/semana divido en tres días consecutivos de cada sema-
na o 250 mg/día.
Algunos estudios han demostrado igual efectividad de opción 1
que opción 2, por lo cual generalmente se comienza con la op-
ción 2 debido a la mayor adherencia, menores costos y menores
efectos indeseables.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Membrana epirretinal.
Edema macular cistoideo.
Pucker macular.
Desprendimiento de retina.
13. Criterios de alta
Disminución de la vitreítis sobre el foco.
Delimitación de los bordes del foco.
Aparición de pigmento en el borde o el interior de la lesión.
Aumento de la agudeza visual.
Desaparición de los signos de vasculitis y papilitis.
14. Controles
Leucocitos y plaquetas cada 7 a 10 días durante el tratamiento
con pirimetamina.
Glucemia y control de la presión arterial mientras dure trata-
miento con corticoides.
Intervalo QT cuando se utiliza la azitromicina.
15. Secuelas
Disminución de la agudeza visual.
Atrofia óptica.
Membrana neovascular.
Oclusión vascular.
16. Prevención
Evitar el consumo de carnes mal cocidas, en especial, porcina.
Lavarse las manos después de manipular carne cruda.
Proteger las áreas de juegos infantiles de excrementos de perros
y gatos.
Las mujeres embarazadas y las personas con sistemas inmunita-
rios debilitados deben tomar las siguientes precauciones:
No limpiar las cajas de desechos de gatos y evitar áreas donde
habiten estos felinos.
Extremar la atención en el lavado de la verdura que será ingeri-
da sin cocción y cocinar en forma completa las carnes.
17. Información para el paciente
Formas de contagio y características de la infección:
El tratamiento inactiva al parásito pero no previene las recu-
rrencias, ya que no se puede precisar qué las ocasiona.
Es importante instruir al paciente a cerca del tratamiento que
recibirá:
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
S
Radiografía de tórax (para descartar tuberculosis por trata-
miento corticoide).
S Control de presión anterial (por tratamiento corticoide).
S Interconsulta con reumatología.
S Interconsulta de médico clínico.
R Punción lumbar cuando hay compromiso.
9. Criterios diagnósticos
El diagnóstico es clínico, basado en los criterios establecidos en
el año 2001 por la American Uveitis Society.
Criterios
No tener historia de trauma ocular penetrante o cirugía.
No haber evidencias clínicas o de laboratorio sugestivas de otras
enfermedades.
Compromiso ocular bilateral. Estadio agudo. Estadio crónico.
Hallazgos neurológicos/auditivos.
Hallazgos tegumentarios.
Criterios adicionales
Engrosamiento coroideo difuso por ecografía.
Anormalidad en la AGD, zona focal de retraso en la perfu-
sión coroidea, puntos de difusión hiperfluorescente multifocal
(pinpoint) sector de hiperfluorescencia placoidea, fluido subre-
tinal.
Punción lumbar pleocitosis es indicativo de inflamación de las
meninges.
Tomografía de coherencia óptica (OCT). Desprendimientos
multifocales de la neurorretina.
10. Diagnóstico diferencial
Oftalmía simpática. El cuadro clínico es igual al de la enferme-
dad de Vogt-Koyanagi-Harada en el estadio crónico o de con-
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
• Utilizar citostáticos.
• Utilizar agentes biológicos.
La inmunomodulación temprana debe plantearse siempre como
primera línea de tratamiento en los pacientes con enfermedad
de Vogt-Koyanagi-Harada en estadío crónico o recurrente o en
la etapa aguda cuando no reúne los criterios mencionados de
buen pronóstico.
En la etapa crónica no plantear el uso de los corticoides como
monoterapia.
Las drogas para ahorrar o reemplazar el uso de los corticoides
que tienen respaldo en la literatura para ser utilizadas en la en-
fermedad de Vogt-Koyanagi-Harada son las siguientes: meto-
trexato, azatioprina, micofenolato mofetil, micofenolato sódico,
ciclosporina, infliximab, adalimumab, clorambucilo, ciclofosfa-
mida.
Elementos que indican falta de control de la enfermedad
Desprendimiento seroso de la retina.
Células en cámara anterior.
Hiperemia de disco óptico.
Cefaleas y alteraciones auditivas.
Hiperfluorescencia del disco en el tiempo tardío del angiogra-
ma.
12. Evolución
El pronóstico es más favorable si se trata al paciente en forma
rápida y agresiva en el estadío agudo y no se demora la inmuno-
modulación si se encuentra en etapa crónica.
13. Complicaciones
Glaucoma: 33%.
Catarata: 50%.
14. Criterios de alta
Factores de mejor pronóstico:
Agudeza visual inicial superior a 20/200.
Pacientes jóvenes.
Ausencia de sinequias posteriores.
Menos de 2+ de células en cámara anterior.
Corticoides tempranos y a altas dosis.
Descenso de la dosis muy lenta y durante más de 9 meses.
15. Controles
En cada visita debe controlarse:
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Agudeza visual.
Presión ocular.
Presencia de células en la cámara anterior.
Control clínico y de laboratorio mensual para minimizar los
riesgos de los efectos indeseables del tratamiento sistémico in-
munomodulador.
16. Secuelas
Membrana neovascular: 15%.
Fibrosis subretinal.
Atrofia retinocoroidea extensiva.
17. Prevención
No presenta.
18. Información para el paciente
Enfermedad crónica y recidivante en un 43% dentro de los pri-
meros tres meses y 52% dentro de los primeros 6 meses.
A menudo asociado a una brusca suspensión o disminución de
corticoides.
El paciente debe tener conocimiento de padecer una enferme-
dad que es potencialmente crónica cuando ingresa en estadío
agudo.
Si lo recibimos en estadío crónico debe informarse de la necesi-
dad de tratamiento crónico por tiempo indeterminado, los ries-
gos de su incumplimiento y la necesidad del monitoreo clínico
sistémico y de laboratorio en forma periódica.
19. Bibliografia
Al-Kharashi AS et al. Prognostic factors in Vogt-Koyanagi-Ha-
rada disease. Int Ophthalmol 2007; 27: 201-10.
American Academy of Ophthalmology. Inflamación intraocular
y uveítis. Barcelona: Elsevier, 2013 (Curso de ciencias básicas
y clínicas; 2011-2012, sección 9).
Chee SP, Jap A, Bacsal K. Prognostic factors of Vogt-Koyana-
gi-Harada disease in Singapore. Am J Ophthalmol 2009; 147:
154-61.
Damico FM et al. New insights into Vogt-Koyanagi-Harada di-
sease. Arq Bras Oftalmol 2009, 72: 413-20.
Fang W, Yang P. Vogt-Koyanagi-Harada syndrome. Curr Eye Res
2008; 33: 517-23.
Moorthy RS, Inomata H, Rao NA. Vogt-Koyanagi-Harada syn-
drome. Surv Ophthalmol 1995; 39: 265-92.
Inflamaciones oculares
Vasculitis.
Vitreítis.
Micóticas
Exudados algodonosos, hemorragias intrarretinales, roth spots,
fluffy balls.
6. Exámenes complementarios oculares
S Cultivo y antibiograma:
Muestra de conjuntiva y borde palpebral.
S Punción de cámara anterior para estudio de humor acuoso.
S Muestra de material vítreo.
CS Ecografía.
R Radiografía de órbita.
R Vitrectomía diagnóstica.
Traumatismo penetrante.
Erosión ocular previa.
Inmunodeprimido (diabético, alcohólico, drogadicto).
5. Examen ocular general
Segmento anterior
Reacción en cámara anterior con células y proteínas.
Hipopión/fibrina.
Edema de córnea.
Hiperemia e inyección ciliar.
Edema de párpado.
Segmento posterior
Vitreítis o focos vítreos.
Periflebitis retinal.
Hemorragia retinal.
6. Exámenes complementarios oculares
Biopsia de humor acuoso y vítreo para su estudio micro-
biológico (se trata de realizar antes de la instauración del
S
tratamiento antibiótico, especialmente si éste se administra
mediante inyección intravítrea). La biopsia vítrea ha de-
mostrado ser el mejor método para obtener una muestra de
tejido infectado.
S
La ecografía es necesaria debido a la frecuente opacidad de
los medios.
R Vitrectomía diagnóstica.
CS
Ecografía, muy útil para detectar formación de absceso or-
bitario.
6. Examen físico general
EOB.
Adenopatías (la cadena involucrada dependerá del foco séptico).
Compromiso neurológico (evaluar estado de conciencia y des-
cartar rigidez de nuca).
Exploración de la sensibilidad del trigémino.
Exámenes complementarios generales
S LGB (leucocitosis).
S
Análisis de líquido cefalorraquídeo (ante sospecha de me-
ningitis).
S
Interconsulta con otorrinolaringología y neurología (de-
pende del estado general del paciente).
S Interconsulta con infectología.
CS
Hemocultivo (depende del compromiso general del pacien-
te).
CS
Coloración de gram y cultivo de material de herida o abs-
ceso.
MR
Punción lumbar (S cuando hay sospecha de síndrome me-
níngeo).
7. Criterios diagnósticos
Disminución de la agudeza visual.
Disminución del CVC.
Alteración de la visión cromática.
Restricción y dolor durante los movimientos oculares.
Hipoestesia de la primera división en la región del trigémino.
Edema orbitario (proptosis).
Quemosis unilateral de inicio relativamente repentino.
Infecciones asociadas (senos etmoidales, frontales, maxilares).
Lesión de la vía pupilar aferente. DPAR
Edema de papila.
Fiebre.
Mal estado general.
8. Diagnóstico diferencial
Celulitis preseptal (motilidad ocular normal).
Trombosis del seno cavernoso (iguales signos con hipoestesia
del V par, pupila dilatada e hiporreactiva y lenta, paresia del III,
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Adultos
Ceftriaxona combinada con vancomicina.
Ceftriaxona 1-2 g IV cada doce horas.
Vancomicina 1g IV cada doce horas.
Considerar la aplicación de metronidazol, 15 mg/kg/día en do-
sis de ataque y 7,5 mg/kg/día IV cada seis horas (en adultos,
ante la sospecha de anaerobios). Si el paciente es alérgico a la
penicilina o cefalosporina, se administra vancomicina o clinda-
micina combinada con gentamicina.
Vancomicina, 1 g IV cada doce horas.
Clindamicina, 300 mg IV cada seis horas.
Gentamicina, 2 mg/kg en dosis de ataque, 1 mg/kg IV cada 8
horas, como dosis de mantenimiento.
Uso de descongestivos nasales.
Interconsulta con otorrinolaringólogo para evaluar la posibili-
dad de drenaje quirúrgico.
Luego de la estabilización del cuadro se realiza tratamiento mé-
dico ambulatorio por 14 días más con:
Amoxicilina + ácido clavulánico,
Cefaclor.
Tratamiento quirúrgico
Debridar y explorar la herida en caso de cuerpo extraño.
Drenaje quirúrgico de órbita y senos afectados.
10. Evolución
Con tratamiento precoz: buena.
11. Complicaciones
Meningitis: 2%.
Trombosis del seno cavernoso (pone en riesgo la vida): 1%.
Pérdida de visión: 1%.
Absceso cerebral.
Osteomielitis de huesos orbitarios: 1%.
Atrofia del nervio óptico.
Mediatinitis.
Fascitis necrotizante.
12. Criterios de alta
Desaparición total de síntomas y signos.
13. Controles
Internado: evaluación diaria:
Temperatura.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Edema.
Hipersensibilidad, irritabilidad.
Quemosis.
Linfedema fluctuante.
No hay proptosis, ni restricción de la motilidad extraocular ni
dolor a los movimientos oculares (como en celulitis orbitaria).
Exámenes complementarios oculares
S
TC de órbita y senos, cortes axiales y coronales y sagitales
(siempre se solicita en caso de traumatismo).
CS
Ecografía, muy útil para detectar formación de absceso or-
bitario.
6. Examen físico general
ECB.
Adenopatías (la cadena involucrada dependerá del foco séptico).
Compromiso nervioso (evaluar estado de conciencia y descartar
rigidez de nuca).
Exploración de la sensibilidad del nervio facial región inervada
por el trigémino.
Exámenes complementarios generales
S LGB (leucocitosis).
S
Radiografía de los senos nasales y paranasales: velamiento
de los senos en sinusitis.
CS
Hemocultivo (depende del compromiso general del pacien-
te).
CS TC, cortes axiales, coronales y sagitales.
CS
Punción, aspiración de los abscesos y cultivo del material
extraído.
MR
Punción lumbar (S siempre cuando hay sospecha de sín-
drome meníngeo).
MR Interconsulta con infectología.
7. Criterios diagnósticos
Comienzo brusco con inflamación.
Enrojecimiento y aumento de temperatura de los párpados.
Edema local y conjuntival.
Secreción conjuntival y de puntos lagrimales.
Dolor periorbitario.
Abscesos.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
8. Diagnóstico diferencial
Celulitis orbitaria (proptosis, dolor con el movimiento ocular,
motilidad restringida, hipoestesia, disminución de la AV, com-
promiso del estado general).
Chalazión, orzuelos.
Procesos alérgicos (edema palpebral de inicio súbito y colora-
ción rojiza, ardor importante y sin dolor).
Conjuntivitis viral (se observan folículos, secreción, adenopatía
preauricular, etc.).
Trombosis del seno cavernoso (iguales signos con hipoestesia
del V par, pupila dilatada e hiporreactiva y lenta, paresia del III,
IV y VI par nervio, pérdida de conciencia, vómitos).
Erisipela (celulitis estreptocócica de evolución aguda, con fiebre
y clara línea de demarcación).
Picaduras de insectos.
Traumatismos.
Osteomielitis maxilar.
Tumores.
Pseudotumores inflamatorios.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Ungüento: polimixina B/bacitracina, aplicar cada 6 horas.
Fomentos (en la zona de la inflamación, 3 veces por día).
Tratamiento médico sistémico
En celulitis preseptal leve:
• Amoxicilina/clavulanato
niños: 20-40 mg/kg/día en 3 dosis.
adultos: 250-500 mg cada 8 horas.
• Cefaclor:
niños: 20-40 mg/kg/día en 3 dosis (máx. 1 g/día).
adultos: 250-500 mg cada 8 horas.
• En los alérgicos a las penicilinas:
Trimetoprima/sulfametoxazol:
niños: trimetoprima 8 mg/kg/día; sulfametoxazol, 40 mg/kg/día
en 2 dosis.
adultos: trimetoprima 160 mg/día; sulfametoxazol 800 mg/día
en 2 dosis.
• En alérgicos a penicilinas y sulfamidas: eritromicina:
niños: 30-50 mg/kg/día en 3-4 dosis.
adultos: 250-500 mg cada 6 horas.
Órbita
♦ Ruptura coroidea.
♦ Desprendimiento de retina.
♦ Avulsión del nervio óptico.
Fractura de hueso malar asociado o no con lesiones orbitarias.
Exámenes complementarios oculares
S
Radiografía de órbita (posición de Water, ideal para el estu-
dio de las paredes orbitarias).
S TAC de órbita y senos, cortes axiales y coronales y sagitales.
S
Gonioscopía por posible recesión angular. Controlar al mes
del traumatismo para identificar formación de sinequias.
Ecografía modo B, ante la imposibilidad de realizar el fondo
CS de ojo, para detectar ruptura del globo ocular, hemorragia
vítrea, luxaciones de cristalino, desprendimiento de retina.
R RFG para la detección de rupturas coroideas.
MR Arteriografía orbitaria (fístula carotideo cavernosa).
6. Examen físico general
ECB.
Evaluar estado de conciencia (compromiso neurológico).
Exploración de la sensibilidad de nervio facial pares craneales:
olfatorio, trigémino y sus ramas y nervio facial.
Epistaxis.
Rinorraquia (por fractura de techo orbitario).
Alteración del olfato.
Exámenes complementarios
S LGB.
S Radiografía de tórax, frente y perfil.
S Radiografía de columna cervical.
S
TAC de encéfalo, cortes axiales y coronales, en caso de com-
promiso neurológico.
CS RM para visualizar mejor el globo ocular y la órbita.
MR Interconsulta con neurocirugía.
10. Evolución
Si no tiene desprendimiento de retina, hemorragia de vítreo ni
desgarro asociado la evolución es benigna.
11. Complicaciones
Hemovítreo.
Desgarro de retina.
Desprendimiento de retina.
12. Criterios de alta
Examen de fondo de ojos sin visualizar solución de continuidad
en la retina luego de los controles indicados.
13. Controles
Si no se encuentra rotura ni hemorragia retinal se debe citar al
paciente para repetir la exploración con depresión escleral en 2
a 4 semanas, 2 a 3 meses y 6 meses después si los síntomas se
repiten.
También se lo debe citar ante pautas de alarma (aumento de los
objetos que aparecen en el campo visual o de luces centellantes,
aparición de una cortina o sombra persistente en cualquier par-
te del campo visual).
14. Secuelas
Miodesopsias.
15. Prevención
No hay.
16. Información a dar al paciente
Pautas de alarma y cumplimiento de controles.
17. Bibliografía
Chuo JY et al. Risk factors for posterior vitreous detachment: a
case-control study. Am J Ophthalmol 2006; 142: 931-7.
Ehlers JP, Shah CP. The Wills eye manual. 5th ed. Philaldelphia:
Lippincott Williams & Wilkins, 2008.
Kanski JJ. Oftalmología clínica. Madrid: Elsevier, 2016.
Rotura de retina
1. Definición
Es un defecto de grosor completo en la retina neurosensorial.
Se clasifica según:
Patogenia: los desgarros se producen por tracción vitreorreti-
nal dinámica (generalmente temporal superior). Los agujeros
se ocasionan por atrofia crónica de la retina neurosensorial y
pueden ser redondos u ovalados.
Morfología: en U completos o incompletos, en forma de opércu-
lo (el colgajo está separado de la retina por el gel vítreo despren-
dido), la diálisis son desgarros circunferenciales a lo largo de la
ora serrata (de forma que el gel vítreo está unido a sus bordes
posteriores), los desgarros gigantes (90 grados o más de la cir-
cunferencia del globo ocular).
Localización: orales (en la base del vítreo), postorales (entre el
borde posterior de la base del vítreo y el ecuador), ecuatoriales,
postecuatoriales (detrás del ecuador), maculares (invariable-
mente agujeros maculares).
2. Datos epidemiológicos. Etiología
El 5% de la población general tiene roturas retinales, en su ma-
yoría agujeros.
El 7% de la población mayor de 40 años presenta roturas de re-
tina asintomática.
La miopía, la cirugía de cataratas, los traumatismos y el antece-
dente personal o familiar son los principales factores de riesgo.
3. Motivo de consulta
Destellos de luz, objetos que aparecen en el campo visual (tela-
rañas, moscas o manchas) y algunas veces visión borrosa.
Las roturas retinales crónicas o los agujeros retinales atróficos
son generalmente asintomáticos.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Las situaciones predisponentes para la rotura de retina son:
degeneración en empalizada, miopía magna, afaquia, pseudo-
faquia, retinosquisis relacionada con la edad, penachos vitreo-
rretinales, pliegues meridionales, antecedentes de rotura o des-
prendimiento previo en el ojo contralateral, traumatismo.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
CS
Dibujo con oftalmoscopía indirecta, siempre examinar ambos
ojos por la posibilidad de bilateralidad.
Buscar el desgarro utilizando las leyes de Lincoff:
• Desprendimientos nasales o temporales: en el 98% de los casos
el desgarro está 1 hora superior al desprendimiento.
• Desprendimientos totales: en el 93% de los casos el desgarro
está hora 12 o en un triángulo cuyo vértice está en la hora se-
rrata y se extiende 1 hora a ambos lados de la hora 12.
• Desprendimientos inferiores: 95% de los desgarros están en el
lado más alto del desprendimento en relación con la papila.
La presencia de sangre indica desgarro reciente.
Si no se encuentra desgarro verificar si tiene las características
de regmatógeno (descartar exudativo o traccional).
Ecografía si no se ve el fondo de ojo: la retina siempre se observa
adherida al nervio óptico.
Puede haber defecto pupilar aferente relativo.
6. Examen físico general
NAD
7. Criterios diagnósticos
Cuadro progresivo.
Sintomáticos, con excepción de las diálisis inferotemporales y
los desprendimientos con agujeros atróficos, que pueden ser un
hallazgo casual.
Se extienden desde la periferia hacia el polo posterior.
8. Diagnóstico diferencial
Retinosquisis adquirida (sin fotopsias ni cuerpos flotantes).
Desgarros sin desprendimiento.
Desprendimiento coroideo (sin fotopsias ni cuerpos flotantes.
De color naranja amarronado).
Desprendimiento de retina exudativo por tumores coroideos o
masas esclerales.
Hemorragias vítreas.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
3. Motivo de consulta
Pérdida brusca, indolora y total de la visión; puede referir an-
tecedentes de amaurosis fugaz u obnubilaciones visuales pasa-
jeras.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Edad.
Hipertensión arterial (2/3 de los pacientes).
Diabetes.
Fumadores.
Enfermedad cardiovascular.
Embarazo.
Glaucoma.
Heredofamiliares
Sin relación con la enfermedad actual.
5. Examen ocular general
Disminución importante de la visión (visión luz o cuenta de-
dos), unilateral, de instalación brusca e indolora. (Uno de cada
cinco pacientes conserva visión central debido a la irrigación
del haz papilomacular por parte de arteria ciliorretinal de la cir-
culación ciliar.)
Fondo de ojo:
♦ Retina blanca edematosa, opaca, borrosa, sobre todo en el
polo posterior.
♦ Fóvea: mancha rojo cereza.
♦ Papila levemente edematosa.
♦ Constricción arteriolar difusa, no pulsa al comprimir el ojo;
puede observarse segmentación de la columna sanguínea (en
vagón de tren).
Exámenes complementarios oculares
CS OCT.
CS RFG para confirmar el diagnóstico.
R Doppler oftálmico.
R Electrorretinograma para confirmar el diagnóstico.
6. Examen físico general
Hallazgos relacionados con la etiología.
Retina y vítreo
Glucosa.
♦
FTA-abs.
♦
7. Criterios diagnósticos
Pérdida importante de la visión, de instalación brusca, indolora,
unilateral.
Antecedentes de amaurosis fugaz.
Alteraciones en el fondo de ojo descriptas.
8. Diagnóstico diferencial
Oclusión de rama de la arteria oftálmica (retina pálida, sin man-
cha rojo cereza).
Neuropatía isquémica anterior.
Otras causas de mancha rojo cereza (enfermedad de Tay-Sachs,
Niemann-Pick, Sandoff, mucopolisacaridosis: edad temprana,
manifestaciones sistémicas, bilateral).
Inyección intraocular accidental de gentamicina.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Si el cuadro tiene menos de 24 horas de evolución, intentar:
♦ Masaje ocular para disminuir la PIO con lente de contacto o
digital.
♦ Betabloqueantes (timolol 0,5%, dos veces por día).
♦ Carbogén (inhalación de una mezcla de 95% de oxígeno y 5%
de dióxido de carbono). Se consigue en las casas distribuido-
ras de tubos de oxígeno. Debe ser humectado.
Respirar en una bolsa plástica cerrada cada 5 minutos.
Paracentesis de cámara anterior.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
15. Prevención
Control y tratamiento de enfermedades predisponentes, en es-
pecial enfermedades cardiovasculares.
16. Información a dar al paciente
A pesar de los tratamientos, los trastornos son irreversibles en la
mayoría de los casos. Es el equivalente al infarto de miocardio.
17. Bibliografía
Albert DM, Jakobiec FA. Principles and practice of ophthalmolo-
gy. Philadelphia: Saunders, 2008.
Alezzandrini AA et al. Fundamentos de oftalmología. Buenos
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Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
9. Tratamiento
El beneficio del tratamiento es cuestionable.
Sin embargo, en los casos en que se afecta la circulación foveal,
el tratamiento es similar al realizado en la OACR.
Tratamiento médico sistémico
Ácido acetilsalicílico (325 mg/día).
10. Evolución
En cerca del 90% de los pacientes la agudeza visual mejora hasta
20/40 o más; sin embargo, en la mayoría de los casos persiste
alguna alteración de la agudeza visual del campo visual.
11. Complicaciones
Raramente desarrollan complicaciones retinales secundarias
como neovascularización y rubeosis iris.
12. Criterios de alta
Luego de la reabsorción de los exudados, hemorragias, edema
macular (sí éste está presente).
No hay alta definitiva.
13. Controles
Ver OACR.
14. Secuelas
Alteraciones campimétricas.
Diminución de la agudeza visual.
15. Prevención
Ver OACR.
16. Información a dar al paciente
Es una enfermedad de la circulación general con repercusión a
nivel ocular; por lo tanto es muy importante el control clínico
general, en especial cardiovascular.
La posibilidad de que este episodio se presente en el otro ojo existe.
17. Bibliografía
Albert DM, Jakobiec FA. Principles and practice of ophthalmolo-
gy. Philadelphia: Saunders, 2008.
Alezzandrini AA et al. Fundamentos de oftalmología. Buenos
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Augenheilkd 1990; 196: 360-3.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Factores de riesgo
Glaucoma de ángulo abierto.
HTA: factor de riesgo más importante sobre todo en los pacien-
tes mayores de 60 años (asociación hasta en el 64% de los casos).
La HTA no controlada se asocia a recurrencia del cuadro oclusi-
vo o a la afección del otro ojo.
Diabetes: probablemente no se deba a la diabetes en sí sino por
el incremento asociado de otros factores de riesgo cardiovascu-
lares.
Hiperlipidemia: principal factor de riesgo en menores de 50
años. También se encuentra presente en la mitad de los pacien-
tes de más edad.
Hiperviscosidad sanguínea: policitemia, niveles elevados de fi-
brinógeno, macroglobulinemia de Waldenstrom. Mayores posi-
bilidades de presentación bilateral.
Trombofilia: anticuerpos antifosfolípido (anticardiolipina y
anticoagulante lúpico), hiperhomocisteinemia (riesgo de en-
fermedad vascular, concentración dependiente, independiente
del resto de los factores de riesgo) y sistema de anticoagulantes
naturales (factor V de Leiden, proteína C, proteína S y antitrom-
bina).
Terapia hormonal sustitutiva y anticoagulantes orales: mayor
riesgo de oclusión venosa. No debe ser instaurado en mujeres
con antecedentes de eventos tromboembólicos retinales.
Otros procesos infrecuentes: vasculitis retinales, enfermedad de
Behcet, poliarteritis nodosa, granulomatosis de Wegener.
Factores que parecen disminuir el riesgo de oclusión venosa son
el aumento de la actividad física y un consumo moderado de
alcohol.
3. Motivo de consulta
Pérdida brusca de la agudeza visual, usualmente unilateral, vi-
sión borrosa o punto ciego en el campo visual.
El paciente puede relatar como síntomas prodrómicos:
♦ Fotopsias.
♦ Miodesopsias.
♦ Metamorfopsias.
♦ Defectos campimétricos relativos.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Edad (mayor de 65 años), sexo.
Retina y vítreo
No isquémica
Controles periódicos durante 3 años para detectar una conver-
sión a isquémica.
Pronóstico razonablemente bueno si no evoluciona a la forma
isquémica, con una restauración de la AV cerca del 50%.
El pronóstico y seguimiento depende de la AV inicial. AV de
20/40 o superior: control cada 1 a 2 meses por 6 meses y luego
anual.
AV inferior a 20/200: control mensual durante los primeros 6
meses y después bimensualmente los siguientes 6 meses.
AV entre 20/50 y 20/200: control mensual durante los primeros
6 meses. Si en algún momento la AV disminuye por debajo de
20/200, será necesaria una evaluación del estado de perfusión
con seguimiento mensual durante otros 6 meses.
Ver tratamiento del edema macular.
Tratamiento del glaucoma neovascular
La PFC puede ser beneficiosa en el tratamiento del glaucoma
neovascular.
Si el ojo es amaurótico el objetivo es mantenerlo sin dolor, habi-
tualmente con esteroides tópicos (prednisolona más fenilefrina
cada 6 horas) y atropina (cada 8 horas).
Si el ojo tiene visión, se controla la presión intraocular con fár-
macos antiglaucomatosos o mediante procedimientos crioabla-
tivos.
La utilización de drogas antiangiogénicas intravítreas o intra-
camerular produce una regresión de los NVI y NVA. También
pueden usarse en combinación con PFC y como adyuvantes en
la cirugía filtrante.
Tratamiento del edema macular
El tratamiento con drogas antiangiogénicas y/o corticosteroi-
des intravítreos puede conseguir una mejoría tanto anatómica
como funcional, necesitándose inyecciones periódicas y pro-
longadas en el tiempo para mantener el efecto. También están
siendo utilizados los implantes de dexametasona intravítreos.
Tratamiento médico
Es responsabilidad del oftalmólogo cuando se hace el diagnós-
tico estudiar los factores de riesgo, solicitar los análisis corres-
pondientes y remitir al paciente al especialista para que se inicie
el tratamiento si fuera necesario. Los anticoagulantes, la hepa-
rina, no han demostrado ser eficaces. Lo mismo ocurre con los
agentes fibrinolíticos como la estreptoquinasa o TPA. Los fár-
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
cuadrantes.
Rosario venoso en al menos 2 cuadrantes.
♦
los medios.
Desprendimiento vítreo.
♦
CS Gonioscopía.
CS Campo visual:
Estado retinal.
♦
7. Criterios diagnósticos
Paciente diabético.
Alteraciones del fondo de ojo.
RFG patológica.
Pérdida de la agudeza visual.
OCT patológico.
8. Diagnóstico diferencial
Oclusión de la vena central de la retina.
Oclusión de rama de vena retinal.
Retinopatía hipertensiva evolutiva.
Retinopatía arteriosclerótica.
Retinopatía renal.
Retinopatía luego de radiación.
Enfermedad de Eales.
Leucemias.
Retina y vítreo
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
No tiene.
Tratamiento médico sistémico
Control de la diabetes por especialista (especialmente control de
lípidos y triglicéridos).
Control de la tensión arterial (presente en el 20% de los DM II y
en el 58% de los DM I).
Eliminación de exotóxicos (tabaco, alcohol).
Tratamiento
Panfotocoagulación láser
Previene la disminución de la agudeza visual, pero no mejora
la pérdida.
Indicaciones
Retinopatía diabética proliferativa:
Retinopatía diabética preproliferativa que cumpla alguno de los
siguientes requisitos:
♦ Diabetes mellitus tipo II con mal control metabólico.
♦ Incumplimiento de revisiones.
♦ Retinopatía diabética proliferativa en el otro ojo.
♦ Pacientes con cataratas que pueden limitar la PFC en un fu-
turo próximo.
♦ Áreas de isquemia angiográficas generalizadas.
♦ Previo a la cirugía de cataratas.
♦ Presencia de neovascularización en segmento anterior.
Retratamientos
Considerar la posibilidad de realizar nuevas aplicaciones de lá-
ser en caso de que la clínica (signos y síntomas) indiquen pro-
gresión.
Cirugía vitrectomía
Indicaciones
Presencia de desprendimiento de retina regmatógeno o mixto:
cirugía en caso de comprometer el polo posterior.
Hemovítreo sin desprendimiento: esperar 2 meses con controles
de AV/ecográficos cada 2-4 semanas. De no haber mejoría se
hará cirugía diferida (2-3 meses).
Tracción macular evidenciable al OCT.
Antiangiogénicos
Indicaciones
Presencia de edema macular sin tracción.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
15. Prevención
Régimen higiénico-dietético.
Utilización de protección ante la exposición prolongada a los
rayos ultravioleta.
Control clínico y cardiológico de rutina.
16. Información a dar al paciente
Es una enfermedad que en general se estabiliza.
Por esta enfermedad es imposible que se pierda la visión peri-
férica.
Las ayudas ópticas y el uso de los contrastes, junto con un apoyo
psicológico, actúan para mantener una buena calidad de vida.
Se debe realizar autocontrol con cartilla de Amsler en forma
semanal en todos los casos. Si se notaran cambios, concurrir a
consulta oftalmológica.
17. Bibliografía
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Gass JDM. Stereoscopic atlas of macular diseases: diagnosis and
treatment. 3rd ed. St. Louis: Mosby, 1987.
Retina y vítreo
Grupo B
♦ Tumores confinados a la retina, cualquier localización.
♦ Sin siembras vítreas.
♦ Sin DR mayor a 5 mm de la base del tumor.
Grupo C
♦ Siembras vítreas finas, difusas o localizadas y /o
♦ DR mayor al grupo B a completo DR, con masas tumorales
por debajo de la retina desprendida.
Grupo D
♦ Siembras vítreas masivas con bolas de nieve o masas avascu-
lares en el vítreo y/o
♦ DR mayor a grupo B a completo DR, con masas tumorales
por debajo de la retina desprendida.
Grupo E
Sin potencial visual, o presencia de una o más de las siguientes
características:
♦ Tumor en el segmento anterior.
♦ Tumor anterior a la cara anterior del vítreo.
♦ Glaucoma neovascular.
♦ Hemorragia vítrea que obscurece el tumor o hipema signi-
ficativo.
♦ Ojo ptísico o preptísico.
♦ Presentación semejante a celulitis orbitaria.
Clasificación pronóstica de Reese-Ellsworth
Grupo I. Pronóstico muy favorable
♦ Tumor solitario, menos de 4 diámetros papilares de tamaño,
en el ecuador o por detrás de éste.
♦ Tumores múltiples, no mayores a 4 diámetros papilares, to-
dos en el ecuador o por detrás de éste.
Grupo II. Pronóstico favorable
♦ Tumor solitario, tamaño de 4 a 10 diámetros papilares, en el
ecuador o por detrás de éste.
♦ Tumores múltiples, tamaño de 4 a 10 diámetros papilares,
todos por detrás del ecuador.
Grupo III. Pronóstico dudoso
♦ Cualquier lesión anterior al ecuador.
♦ Tumor solitario con un tamaño mayor a 10 diámetros papila-
res por detrás del ecuador.
Grupo IV. Pronóstico desfavorable
♦ Tumores múltiples, algunos de tamaño mayor a 10 diámetros
papilares.
Retina y vítreo
S
TAC helicoidal (más fácil de realizar en chicos): determina
calcificaciones y los límites del tumor.
7. Criterios diagnósticos
Hallazgos clínicos.
Estudios complementarios.
Historia familiar.
Punción aspiración de médula ósea (PAMO) en crestas ilíacas y
en LCR, para buscar metástasis.
8. Diagnóstico diferencial
Tumores
Leucemia
Glioneuroma
Nevoxantoma juvenil.
Hemangioma coroideo.
Hamartoma retinal combinado.
Meduloepitelioma.
Facomatosis
Enfermedad de Von Hippel-Lindau.
Esclerosis tuberosa Bourneville.
Síndrome de Sturge-Weber.
Neurofibromatosis.
Malformaciones congénitas
Displasia de retina.
Retinosquisis ligada al X.
Síndrome de morning glory.
Persistencia de vítreo primario.
Enfermedad de Norrie.
Incontinencia pigmentaria
Fibras de mielina
Coloboma de coroides o papila
Pliegues retinales
Enfermedades vasculares
Retina y vítreo
Enfermedad de Coats.
Retinopatía del prematuro.
Vitreorretinopatía exudativa familiar.
Enfermedades inflamatorias
Uveítis.
Toxocariasis.
Endoftalmitis.
Toxoplasmosis congénita.
Retinitis congénita por CMV.
Retinitis por HSV.
Otras iridocoroiditis.
Traumatismos
Síndrome del niño sacudido.
Contusión del globo ocular.
CEIO.
Varios
Hemorragia vítrea.
Desprendimiento de retina.
Catarata congénita.
Opacidades corneales.
Estribamos.
Miopía alto grado, anisometropía.
Síndrome de Stickler.
Artefacto fotográfico.
9. Tratamiento
Tratamiento quirúrgico
Ante un retinoblastoma unilateral, unifocal, la enucleación es el
tratamiento más seguro.
En casos bilaterales y simétricos que correspondan a los grupos
C y D es recomendable observar cuál ojo responde mejor a dos
ciclos de quimioterapia e intentar salvamento en el ojo con me-
jor repuesta.
No es recomendable enuclear ambos ojos al mismo tiempo, no
sólo por la carga psicológica que esto implica, sino también por-
que es necesaria la confirmación diagnóstica por un anatomo-
patólogo antes de enuclear el segundo ojo.
Se recomienda enucleación en pacientes con retinoblastoma y
las siguientes características:
♦ grupos D y E.
♦ pacientes de más de 12 meses.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Desventajas:
Mielotoxicidad.
Costo.
Respuesta impredecible.
Postenucleación
Quimioterapia
Si el anatomopatólogo informa infiltración del nervio óptico o
presencia de extensión epiescleral se realizará quimioterapia y
radioterapia de órbita.
Radioterapia externa
Sólo como terapia de salvamento para el ojo después de que la
quimioterapia y terapia focal hayan fallado en el control del tu-
mor y que además presenten:
♦ etapa IV o V del RE
♦ tumor con siembras vítreas
♦ grosor del tumor de mas de 5 mm
♦ tumor refractario
♦ tumor grande
♦ múltiples tumores
Retinoblastoma unilateral
Grupos A a C
Criterios de salvamento ocular
• Tumor grupo A, B o C que no afecte área macular
• Sin evidencia de invasión a NO
• Sin DR total
• Visión conservada (a excepción grupos A o B)
• Sin siembras vítreas (excepción ojo único)
Responde al No responde al
tratamiento tratamiento
Seguimiento RDT externa
No responde
Enucleación
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Seguimiento Enucleación
Grupos E
Enucleación
No mejora Mejora
Enucleación Seguimiento
10. Evolución
Existen algunos casos de regresión espontánea que se han dado
en llamar retinomas.
Depende del estadio en que se encuentre.
Más del 95% no da metástasis.
Óbito.
50% por extensión intracraneal.
40% por diseminación metastásica.
10% por obstrucción faringotraqueal.
Factores asociados a la recurrencia del tumor
Invasión retrolaminar del nervio óptico.
Tumor RE grupo Vb manejado con RTE durante el intento de
salvamento.
Raza no caucásica.
Retina y vítreo
Fisiopatología
Fase I: Hiperoxia vaso obliteración (EG 22 a 31)
Cese del desarrollo normal de los vasos de la retina más dege-
neración microvascular de la retina periférica inmadura. Sólo
quedan los vasos del polo posterior (zona I).
Causado por:
Fact. O2 dependientes: estrés oxidativo, FCEV, EPO, estímulo de
antiangiogénicos y proapoptóticos, aumento del PAF.
Fact. O2 independientes: factores nutricionales, IGF1, IGFBP3.
Fase II: Hipoxia vasoproliferativa (EG 31 a 44)
Comienza en retina periférica.
Aumento del FCEV y de la EPO.
Aumento de IGF1.
Aumento de IGFBP3.
3. Motivo de consulta
Screening de rutina en todo prematuro.
Leucocoria.
Estrabismo.
La madre refiere que el niño no la sigue con la mirada.
Miopía.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Peso al nacer igual o menor a 1500 g.
Edad gestacional al nacer igual o menor a 32 semanas.
Sexo masculino.
Raza caucásica.
Edad gestacional al nacer menor a 37 semanas con evolución
clínica inestable que presentan factores de alto riego: ARM, ad-
ministración no monitoreada de O2 de cualquier tipo y dura-
ción, transfusión con hemoglobina adulta, hemorragias intra-
ventriculares grados III-IV, ductus arterioso permeable, displa-
sia broncopulmonar u otra enfermedad pulmonar crónica que
requiera O2, episodios de hiperoxia-hipoxia, shock, hipoperfu-
sión, apneas, maniobras de reanimación, acidosis neonatal, sep-
sis, meningitis, procedimientos quirúrgicos.
Heredofamiliares
No posee.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Localización
Zona I: área central de 30º de radio. El centro es la papila y abarca
el doble de la distancia de dicha papila a la mácula (abarca fóvea).
Zona II: desde el anterior hasta medio entre el ecuador y la ora
serrata del lado temporal y ora serrata nasal.
Zona III: resto de la zona retinal, temporal a la zona II.
Extensión
Se utiliza el huso horario según el observador.
Estadíos (grados)
1. Retina inmadura sin signos de ROP.
2. Línea demarcatoria: fina, blanca y ubicada en el mismo pla-
no retinal, separa la retina vascularizada de la zona avascular
(shunts AV).
Cordón: aumento en tamaño (ancho y alto) de la anterior; ocu-
pa un volumen y sobresale del plano retinal (color rosado). Va-
sos abandonan el plano retinal.
3. Proliferación fibrovascular retinal: neovasos y fibrosis crecen
desde el cordón hacia el vítreo.
Leve: limitado monto, por detrás del cordón.
Moderado: monto significativo, cubre el cordón.
Grave: infiltración masiva, del cordón a cavidad vítrea.
4. Desprendimiento de retina parcial.
4a. Parcial y periférico, exudativo o traccional -es habitual esta últi-
ma hacia el lado temporal-, con dragged disc y mácula traccionada.
4b. Incluye la fóvea, de papila hasta lado temporal.
5. Desprendimiento de retina total.
Enfermedad plus
A los dos anteriores se pueden sumar:
Dilatación y tortuosidad de vasos posteriores.
Congestión de vasos del iris.
Rigidez pupilar.
Alteración vítrea (haze).
Enfermedad preplus
Presencia de anormal dilatación y tortuosidad vascular en polo
posterior pero de menor magnitud que en la enfermedad plus.
ROP agresiva posterior
Forma severa, de localización posterior, rápidamente progresiva
de no ser tratada. Suele llegar a un estadio 5. Marcada dilatación
y tortuosidad de los vasos del polo posterior en los cuatro cua-
drantes, desproporcionada a la afección de la retina periférica. Se
extiene en forma circular y la acompaña un vaso circunferencial.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
R Ecografía.
R Electrorretinograma y potencial evocado (optativo).
6. Examen físico general
Depende del estado de prematurez => inmadurez.
Exámenes complementarios generales
EOB (a cargo del neonatólogo y pediatra).
7. Criterios diagnósticos
Historia clínica: prematurez, oxigenoterapia, edad gestacional,
síndrome de distrés respiratorio.
Examen completo.
8. Diagnóstico diferencial
Enfermedad de Norrie.
Persistencia de vítreo primario.
Displasias vitreorretinales.
Angiomatosis de retina (hemangioblastoma retinocerebeloso).
Astrocitoma.
Catarata congénita.
Hemangioma coroideo.
Enfermedad de Coats (telangiectasia retinal).
Coloboma de coroides y nervio óptico.
Retinitis por citomegalovirus congénita.
Desprendimiento de retina congénito.
Retinitis, coriorretinitis exudativa o ambas.
Pliegue falciforme de la retina.
Retinitis por herpes simple.
Miopía elevada con degeneración coriorretinal avanzada.
Fibras de mielina.
Endoftalmitis metastásica.
Síndrome de morning glory.
Retina y vítreo
Dictioma.
♦
Glioneuroma.
♦
Leucemia.
♦
Meduloepitelioma.
♦
Uveítis (periférica).
Organización vítrea por herida penetrante no detectada.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Se realizará según el estadío.
Tratamiento médico sistémico
No tiene.
Tratamiento quirúrgico
Fotocoagulación
Tratamiento con láser a niños con ROP tipo 1:
Zona 1, cualquier estadío con enfermedad plus.
Zona 1, estadío 3 sin plus.
Zona 2, estadíos 2 o 3 con enfermedad plus.
Incrementar la frecuencia de seguimiento de los niños con ROP
tipo 2:
Zona 1, estadíos 1 o 2 sin plus.
Zona 2, estadío 3 sin plus.
Cirugía del DR-vitrectomía
Estadio IV o V.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
14. Secuelas
Disminución de la agudeza.
Nistagmus.
Miopía.
Microftalmo.
Catarata.
Estrabismo.
Desgarros retinales periféricos.
Ambliopía.
Microcórnea.
Glaucoma.
Ceguera.
15. Prevención
Evitar la gran prematurez.
Evitar factores agravantes de hiperoxia posnatal (monitoreo
pO2):
Menores de 1200 g o menos de 32 semanas: saturación de-
♦
seada de 86 a 92%.
Mayores de 1200 g o más de 32 semanas: saturación deseada
♦
de 86 a 94%.
Examen precoz de infantes (control oftalmológico).
♦
S
En la mácula hay un desprendimiento redondo u oval de la
retina sensitiva.
El líquido subretinal puede ser transparente (lesiones tempra-
nas), turbio o fibrinoso y puede haber precipitados en la super-
ficie retinal posterior.
Pueden resultar visibles uno o más focos anormales de retina
despigmentada (en ocasiones pequeños desprendimientos del
epitelio pigmentario) de tamaño variable en el interior del des-
prendimiento neurosensittivo.
Pequeños parches de atrofia del EPR e hiperplasia en otras par-
tes del polo posterior pueden indicar lesiones previas.
Exámenes complementarios oculares
S Test de Amsler
Confirma una metamorfopsia que corresponde a un desprendi-
miento neurosensitivo.
CS AGD
Pone en evidencia el punto de filtración a nivel del epitelio pig-
mentario. Esta fluoresceína que filtra puede dispersarse en to-
das direcciones o sólo dirigirse hacia arriba, dando la imagen
en “humo de chimenea”. También puede presentarse en “gota
de tinta” (mancha temprana hiperfluorescente cuyo tamaño au-
menta gradualmente).
En la cronicidad pueden presentarse zonas hiperfluorescentes
focales por efecto ventana, dada la atrofia en el EP que han ge-
nerado los cuadros previos, así como también múltiples puntos
de fuga o fuga difusa.
S OCT
Permite evidenciar la acumulación de líquido subretinal (eleva-
ción neurosensitiva ópticamente vacía) así como las alteracio-
nes en el epitelio pigmentatio. Es un estudio que sirve tanto para
diagnóstico como para seguimiento.
R Verde de indocianina
Se puede utilizar para evidenciar las anormalidades coroideas.
Es muy útil para hacer diagnóstico diferencial entre CCS atípica
y una MNV en la DMAE.
Retina y vítreo
11. Tratamiento
Ataque agudo de glaucoma de ángulo cerrado
Sus objetivos son: disminuir la PIO, eliminar los bloqueos, rea-
brir el ángulo, prevenir la obstrucción vascular de la retina y el
disco óptico cuando la PIO sea lo suficientemente elevada.
Tratamiento médico local
Mióticos
Pilocarpina al 1-2% (1 gota cada 6 horas). Recién actúa cuando
la PIO se halla por debajo de los 45-50 mmHg. Hasta ese mo-
mento queda retenido en la cámara anterior debido al colapso
de los vasos del esfínter.
Esteroides
Colirio que disminuye la inflamación.
Inhibir la producción del humor acuoso
• Betabloqueantes (maleato de timolol 0,25% a 0,50%, levobuno-
lol 0,25% a 0,50%, carteolol 1% al 2%).
• Alfa-agonistas (apraclonidina 0,50%, brimonidina 2%).
• Inhibidores de la anhidrasa carbónica: local, dorzolamida 2%.
En todos los casos se realizará la instilación de 1-2 gotas cada 10
minutos en la primera hora; cada 15 minutos en la segunda hora
y cada 20 minutos en la tercera hora.
Tratamiento médico sistémico
Diuréticos
• Acetazolamida (comprimidos de 250 mg, cada 6 horas durante
los primeros días). Máxima acción a las dos horas. Inhibe la
anhidrasa carbónica reduciendo en un 50-60% la producción
de humor acuoso. En ocasiones puede causar serios efectos ad-
versos, como acidosis metabólica, síndrome de Stevens-John-
son y discrasias sanguíneas. Contraindicado en pacientes con
hipocalemia, hiponatremia, falla hepática y renal.
Hiperosmóticos
Estimulan el pasaje de líquido de los espacios intra a los extra-
vasculares, provocando una rápida deshidratación del vítreo
con retroceso del plano iridocristalino.
• Manitol al 15% (500 cc3) por vena. Goteo rápido de los pri-
meros 100 cc y luego lentamente el resto. El contenido total
debe agotarse a los 45 minutos. Contraindicado en insuficien-
cia cardíaca tipo congestiva, dado que genera aumento brusco
de la volemia.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Iridotomía permeable.
13. Controles
Cada 6 meses si el problema se ha resuelto con iridotomía (en
algunos casos hay que repermeabilizar porque se ocluye).
14. Secuelas
Pérdida de agudeza visual.
Atrofia de iris.
Pérdida de los reflejos pupilares.
Disminución de campo visual.
Cataratas.
Excavación de papila.
15. Prevención
Controles oftalmológicos anuales.
Los pacientes con ángulo cerrado en general cursan en forma
asintomática.
Pacientes con síntomas de visión borrosa, halos de luces, dolor
y enrojecimiento ocular pueden ayudar en identificar ángulos
cerrados. Sin embargo, la especificidad y la sensibilidad de estos
síntomas son muy escasas.
Evaluar la realización de iridotomías láser profilácticas en caso
de ángulos estrechos ocluibles.
Evaluar por gonioscopía si existe contacto iridotrabecular y su
extensión.
Se considera por consenso que el contacto iridotrabecular en
dos o más cuadrantes es indicación de iridotomía profiláctica.
Realizar siempre iridotomía profiláctica en el ojo contralateral
en pacientes que hayan sufrido un ataque agudo de glaucoma.
16. Información a dar al paciente
Se trata de una enfermedad en la cual el tratamiento médico se
utiliza para manejar el ataque agudo, pero el tratamiento defini-
tivo es siempre quirúrgico en ambos ojos.
17. Bibliografía
Aung T, Chew PT. Review of recent advancements in the un-
derstanding of primary angle-closure glaucoma. Curr Opin
Ophthalmol 2002; 13: p. 89-93.
Castañeda Diez R, Mayorquín Ruiz M, Jiménez Román J. Glau-
coma de ángulo cerrado: pespectiva actual. Rev Mex Oftalmol
2007; 81: p. 272-282.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Hipertensión sistémica.
Miopía.
Hay una predisposición hereditaria para el desarrollo de glauco-
ma simple (multifactorial). Se piensa que los genes responsables
tienen una penetración incompleta y una expresividad variable.
Se ha sugerido un riesgo aproximado del 10% entre hermanos y
del 4% de la descendencia.
5. Examen ocular general
Se debe realizar un examen oftalmológico completo que incluya:
agudeza visual, prueba de la sensibilidad al contraste y visión de
los colores (alteración primero de la gama azul amarillo), re-
flejos pupilares, prueba de Amsler, tonometría de aplanación,
gonioscopía y examen del nervio óptico.
Se debe constatar en este examen:
Aumento sostenido de la PIO a más de 21 mmHg.
Angulo camerular abierto.
Alteraciones en el campo visual.
Cambios de la papila óptica:
♦ Palidez.
♦ Excavación que suele aumentar verticalmente.
♦ Asimetrías de las excavaciones papilares derechas e izquier-
das (signo precoz).
♦ Relación excavación-papila mayor a 0,3 (normal 0,3).
♦ Desplazamiento nasal de los vasos centrales.
Exámenes complementarios
S CVC: campo visual computarizado.
Paquimetría: medición del grosor corneal central (GCC), la
S
media está entre 530-545 μm, las córneas más finas llevan
a una infraestimación de la PIO. Se toma a esta como un
factor independiente de la aparición de GPAA.
ORA (ocular response analyzer): en el cual se evalúa la bio-
R
mecánica corneal, obteniéndose los resultados de la presión
intraocular compensada-corneal, histéresis corneal (CH),
factor de resistencia corneal (CRF).
OCT (tomografía óptica de luz coherente): se considera que
CS la pérdida de capas de fibras nerviosas peripapilares prece-
de a las lesiones del nervio óptico.
CS
HRT (Heiderberg retinal tomography): tomografía del ner-
vio óptico.
Glaucoma
CS
TAC de órbita en contusión, S si es un traumatismo pene-
trante (cuerpo extraño).
MR RFG, para evaluación de ruptura coroidea.
MR Iconografía para documentar estado previo y evolución.
6. Examen físico general
Somnolencia, especialmente en niños.
Descartar proceso neurológico por trauma craneoencefálico.
Evaluar otros traumatismos (ejemplo: fractura orbitaria, cuerpo
extraño intraocular).
Exámenes complementarios generales
S LGB
S Estudio de coagulación:
Tiempo de protrombina.
Tiempo de sangrado y coagulación.
Recuento de plaquetas.
Hemograma.
Glucemia.
7. Criterios diagnósticos
Antecedentes de traumatismos.
Tyndall hemático.
Depósitos sanguíneos en cámara anterior.
Nubosidad roja en cámara anterior.
Cámara anterior totalmente roja.
8. Diagnóstico diferencial
Hiperdistensión de vasos.
Trastornos sanguíneos.
Rubeosis del iris.
Obstrucción de la vena central de la retina.
Iridociclitis herpética aguda.
Iridociclitis reumatoidea aguda.
Leucemia.
Púrpuras.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Internación con reposo absoluto, con la cabeza a 30 grados; le-
vantarse sólo para ir al baño, en caso de pacientes que no cola-
boren, persistentes resangrados o hipemas mayores de grado I,
Traumatismos
14. Secuelas
Impregnación hemática corneal (a los 13 días).
Sinequias.
Glaucoma.
Atrofia del iris.
Secundarias al trauma: luxación del cristalino, catarata, rece-
sión angular, iridodiálisis, ruptura del esfínter, leucomas, des-
prendimiento de retina o coroides, ruptura coroidea, atrofia del
nervio óptico.
15. Prevención
Uso de lentes de protección en deportes de riesgo.
Buena cauterización de vasos en cirugía de catarata.
Control de los pacientes con trastornos de la coagulación.
16. Información a dar al paciente
Es importante tratar de curarla sin cirugía, pues el pronóstico
de ésta no es bueno. Si hay aumento de la PIO el tratamiento
quirúrgico es necesario.
17. Bibliografía
Albert DM, Jakobiec FA. Principles and practice of ophthalmolo-
gy. Philadelphia: Saunders, 2008.
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ficie ocular y córnea. Barcelona: Elsevier, 2012 (Curso de cien-
cias básicas y clínicas; 2011-2012, sección 8).
Berríos RR, Dreyer EB. Traumatic hyphema. Int Ophthalmol
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Cullom RD, Chang B. The Wills eye manual. Philadelphia: Lippin-
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Harley RD. Pediatric ophthalmology. 2nd ed. Philadelphia:
Saunders, 1983.
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Onofrey BE, Skorin L Jr., Holdeman NR. Ocular therapeutics
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1998.
Rhee DJ, Pyfer MF. The Wills eye manual. 3rd ed. Philadelphia:
Lippincott Williams & Wilkins, 1999.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
3. Motivo de consulta
Antecedente de traumatismo (si estaba martillando sospechar
cuerpo extraño intraocular).
Quemosis.
Dolor.
Disminución de la agudeza visual.
Diplopía.
Derivado por otro colega.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Obreros de la industria de la construcción.
Obreros de la industria siderúrgica.
Obreros de la industria química.
Normalmente debido a la falta de uso de la protección indicada.
En el hogar son más comunes en los niños y especialmente en
los varones las heridas por plantas como el cactus.
Heredofamiliares
No tiene.
5. Examen ocular general
Bajo anestesia tópica o general si se trata de un niño.
Examen con lámpara de hendidura.
Orbita y región periorbitaria.
Hematoma periocular.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Tomografía computada.
Potenciales visuales evocados, electrorretinograma.
Contraindicada la resonancia magnética en casos de sospecha
de cuerpo extraño intraocular metálico.
OCT en caso de sospechas, ruptura coroideo macular.
6. Examen físico general
Cuando se sospecha ruptura de piso de la órbita evaluar la sen-
sibilidad infraorbitaria.
7. Criterios diagnóstico
El diagnóstico surge del examen.
8. Diagnóstico diferencial
Evaluar siempre el antecedente de traumatismo.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Hemorragia subconjuntival
Colirio antibiótico profiláctico.
Laceración y herida conjuntival
Según el grado, antibiótico tópico y/o sutura cuando sea mayor
a 1 cm.
En caso de que hubiera transcurrido más de 48 horas dejar cica-
trizar por segunda (oclusión con eritromicina).
Ulcera, abrasión, y heridas perforantes de córnea
Antibiótico tópico más oclusión.
Si hay Tyndall, agregar atropina más analgésicos sistémicos.
Ciclopentolato y fenilefrina al 10%.
Cuerpo extraño
Extracción-oclusión con oftalmolets hasta que deje de teñir con
controles cada 24 horas.
Cuerpo extraño intraocular
Hospitalización.
Colocar escudo protector sobre ojo afectado.
Profilaxis de tétanos siempre en heridas perforantes.
Antibióticos: vancomicina 1g IV cada 12 horas y ceftazidima 1g
IV cada 12 horas, o ciprofloxacina 750 mg VO cada 12 horas.
La ciprofloxacina está contraindicada en niños y en mujeres
embarazadas.
Fotoqueratitis
Antibióticos tópicos u oclusión con oftalmolets más analgésicos
sistémicos.
Traumatismos
Control en 24 horas.
Quemaduras por ácidos o álcalis
Lavados abundantes con solución fisiológica durante 30 minu-
tos por lo menos.
Si hay erosión: antibióticos tópicos más oclusión.
Si la quemadura es por cal: lavados abundantes más EDTA.
En algunos casos es necesario realizar peritomía o peritectomía.
Control en 24 horas.
Clasificación de quemadura
1. Córnea tiñe solamente y hay quemosis
Oclusión con antibiótico en ungüento más ciclopentolato. Con-
trol en 24 horas.
En caso de edema corneal que no permite el examen se puede
instilar glicerina.
2. Córnea tiñe, opaca, pero permite ver detalles del iris y hay quemosis
e isquemia en un tercio del limbo
Antibiótico más midriático más oclusión.
Acetazolamida.
Realizar control a las 24 horas.
3. Córnea opaca, dificultad para ver el iris e isquemia en un 50% del
limbo
Peritomía 360 grados.
Antibióticos colirio más midriático más oclusión.
Control en 24 horas.
4. Córnea opaca, no se ve iris, isquemia más del 50%
Peritomía 360 grados.
Lente de Illig (24-48 horas) mal pronóstico.
Antibióticos más midriático.
Diamox.
Control en 24 horas.
Laceración corneal
Parche compresivo con ciclopléjico y antibiótico (eritromicina
ungüento o colirio de gentamicina u ofloxacina).
Se puede utilizar lente de contacto blanda asociada a colirio an-
tibiótico (ofloxacina o gentamicina, cuatro veces al día) poste-
rior a la cicloplejía.
Cuando la laceración corneal leve o profunda se acompaña de
abertura de la herida es preferible suturar la herida en el quiró-
fano para evitar cicatrización excesiva e irregularidad corneal,
en especial a nivel del eje visual.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
10. Evolución
Depende del tipo de lesión.
11. Complicaciones
Infecciones.
Pérdida del ojo.
Tétanos.
Disminución de la agudeza visual.
Desprendimiento de retina.
Oftalmía simpática en especial cuando la herida del ojo se en-
cuentra en la zona del cuerpo ciliar; pero controlar siempre el
otro ojo cuando ha habido herida perforante.
12. Criterios de alta
Alta quirúrgica según evolución médica.
Hipopión:
Cuando no hay inyección periquerática.
Cuando desaparezca el tyndall.
Hipema:
Cuando desapareció por completo.
Cuando se pueda dilatar y hacer fondo de ojo.
Cuando la presión ocular sea normal.
13. Controles
Puede estar de alta curado, pero no se puede hacer una eva-
luación de la incapacidad laboral pues a veces puede necesitar
reoperación.
Controlar las infecciones primero a las 24 horas, luego a las 48
horas, finalmente una vez por semana hasta el alta.
14. Secuelas
El 6% de los cuerpos extraños intraoculares terminan con enu-
cleación.
Peligro de oftalmía simpática.
Disminución de la agudeza visual.
Glaucoma.
Catarata.
Desprendimiento de retina.
15. Prevención
Uso de protectores oculares en caso de los cuerpos extraños cor-
neales e intraoculares.
Uso de máscara protectora en caso de las fotoqueratitis.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
14. Secuelas
Leucoma.
Glaucoma.
Lagoftalmos.
Simbléfaron.
Ulceras a repetición.
Catarata.
Pérdida visual.
15. Prevención
Uso de protectores oculares.
Manipulación cuidadosa de productos cáusticos.
16. Información a dar al paciente
Las quemaduras con álcalis son más perjudiciales que con ácidos.
Informar la posibilidad que tiene de evolucionar favorable o
desfavorablemente según el tipo de lesión actual.
Recalcar que se trata de una afección grave la gran mayoría de
las veces. Dar instrucciones detalladas para el tratamiento.
La cal sigue quemando aunque se haya limpiado completamen-
te, por lo que la evaluación de la lesión no es sólo la del primer
momento, sino las posteriores también.
Si se produce vascularización corneal y su opacificación, el in-
jerto de córnea no es de buen pronóstico. Pueden producirse
adherencias entre la conjuntiva palpebral y el globo ocular.
17. Bibliografía
Albert DM, Jakobiec FA. Principles and practice of ophthalmolo-
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Cullom RD, Chang B. The Wills eye manual. 2nd ed. Philadel-
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Rahway: Merck, Sharp & Dohme Research Laboratories, 1961.
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Mosby, 1993.
Pavan-Langston D. Manual de diagnóstico y terapéutica ocula-
res. 3a. ed. Barcelona: Ediciones Científicas y Técnicas, 1993.
Traumatismos
Esto hay que hacerlo con el uso del anteojo con el vidrio rojo en
ojo izquierdo y verde en el derecho, y que el niño se acerque a la
pared donde se proyecta para que pierda el miedo.
Al dilatar la pupila se determina si se examinará con la esquias-
copía su estado refractivo.
Si se detecta mala visión en un ojo es el momento que se diag-
nostica la ambliopía.
Profilaxis de la conjuntivitis neonatorum
Diagnóstico: Cuando aparece, después del segundo o cuarto día
del parto, a pesar de haberse realizado normalmente la profi-
laxis, es necesario realizar la consulta con el médico oftalmó-
logo. El tratamiento adecuado en general llega a buenos resul-
tados. La complicación más importante que puede ocurrir es la
dacriocistitis del recién nacido, que se presenta con inflamación
del saco lagrimal o simplemente con lagrimeo por el lado tem-
poral de la cara.
Requiere de tratamiento con colirios antibióticos y a veces son-
daje.
La obstrucción tardía de la vía lagrimal produce epífora que
debe ser tratada con sondaje.
El médico debe observar con una linterna y lupa la cámara an-
terior del ojo, posición de los párpados. Si la pupila conserva
el color negro y de forma redonda puede considerarse que el
cristalino es normal.
La causa más frecuente es la clamidia (conjuntivitis por inclu-
sión) y se desarrolla 5 a 14 días después del nacimiento.
La Neisseria gonorrhoeae es la más grave y aparece entre el se-
gundo y el quinto día de nacimiento.
Al recién nacido se le aplica gotas o pomada antibiótica en los
ojos (tetraciclina, polimixina o bacitracina). Aunque nunca es
posible prevenir estas conjuntivitis, pueden aparecer entre el
segundo y el quinto día.
Es necesario recomendarle a la madre el lavado de los párpados
con champú para niños diluido.
Bibliografía
American Academy of Ophthalmology. Oftalmología pediátrica
y estrabismo. Madrid: Elsevier, 2012 (Curso de ciencias bási-
cas y clínicas; 2011-2012, sección 6).
Kansky JJ. Oftalmología clínica. 7a. ed. Madrid: Elsevier, 2012.
13
Estrabismo
Esodesviaciones
1. Definición
Es la desviación de los ejes visuales hacia el lado nasal.
La desviación convergente se muestra de manera latente, inter-
mitente o permanente.
Las latentes se observan si se interrumpe la fusión y se las deno-
mina esoforias. Se abrevia E (lejos) y E’ (cerca).
Las formas intermitentes se muestran en algunas ocasiones pero
existen en otras ortotropía con visión binocular (VB) normal.
Se abrevia E(t) lejos y E(t)’ cerca.
La desviación permanente se denomina esotropía y se distingue
Et (lejos) y Et’ (cerca).
Clasificación
a. Esoforia.
b. Esotropía infantil o esotropía congénita o esotropía con limi-
tación bilateral de la abducción (LBA) o síndrome de Ciancia.
c. Esotropía acomodativa.
d. Esotropía parcialmente acomodativa.
e. Esotropías adquiridas no acomodativas.
♦ Básica.
♦ Aguda.
♦ Consecutiva (quirúrgica).
♦ Residual (quirúrgica).
f. Microtropía.
2. Datos epidemiológicos
Se presenta en el 5% de la población general.
Es el estrabismo más frecuente.
Es más frecuente en la población occidental.
Es más frecuente en hipermétropes.
3. Motivo de consulta
Desviación de uno o ambos ojos hacia la nariz.
Astenopía.
Estrabismo
Visión borrosa.
Diplopía.
Tortícolis.
Ambliopía.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Edad de comienzo.
Hipermetropía.
Anisometropía.
Enfermedades neurológicas.
Prematurez.
Traumatismos.
Oclusión ocular transitoria.
Diabetes, enfermedades vasculares.
Endocrinopatías.
Miastenia gravis.
Miopía elevada.
Ingesta de drogas y/o alcohol.
Tratamientos previos.
Heredofamiliares
Herencia plurifactorial.
5. Examen ocular general
Inspección
Hendiduras palpebrales.
Conformación orbitaria y distancia interpupilar.
Angulo kappa (negativo).
Tortícolis.
Posición anómala de la cabeza.
Examen oftalmológico general
Evaluación de la agudeza visual: monocular y binocular.
En pacientes preverbales:
Nistagmo optocinético (NOK).
Fijación.
Test de mirada preferencial (TMP).
En pacientes verbales:
Optotipos figuras para niños.
Letra E.
Escala de Snellen.
Estudio de los movimientos oculares
Test de Brükner: examen de la simetría del reflejo rojo pupilar.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
S
Siempre se deben realizar estudios bioeléctricos cuando el
examen no explique la disminución de la visión.
Potenciales visuales evocados (PVE).
Electrorretinograma (ERG).
Electrooculoquinetograma (EOQG).
Retinografía del fondo de ojos.
Biomicroscopía ultrasónica (UBM).
6. Examen físico general
No tiene.
Exámenes complementarios generales
S Interconsulta con neurología.
MR
Electromiografía de fibra única en la musculatura extrao-
cular.
Tomografía computada.
RNM (Et aguda).
7. Criterios diagnósticos
Falta de alineación de los ejes oculares con desviación de un ojo
o de ambos hacia el lado nasal.
Estrabismo
8. Diagnóstico diferencial
Pseudoestrabismo: epicantus.
Pseudoesotropía: ángulo kappa negativo.
Entre las diferentes esodesviaciones:
• Esoforia: es una esodesviación que se mantiene latente por los
mecanismos de fusión bifoveal.
• Esotropía infantil con nistagmo en abducción (EINA): co-
mienzo precoz entre el segundo y cuarto mes, ángulo grande
frecuentemente mayor de 35DP, nistagmo en resorte que au-
menta en abducción, tortícolis, fijación cruzada en aducción,
micronistagmo en el fondo de ojos, nistagmo latente, desvia-
ción vertical disociada (DVD), asimetría del NOK, frecuente
hiperfunción de músculos oblicuos, retardo de maduración de
la AV, hipermetropía leve o moderada, correspondencia senso-
rial anómala (CSA).
• Esotropía acomodativa: se produce cuando se requiere la aco-
modación. Si el sujeto no acomoda hay ortotropía con CRN
(normal) entre fines del primer año y los 5 años. Aparece al fi-
jar objetos próximos y pequeños. Comienza como E(t). Hiper-
metropía entre 2,5 y 5D. Angulo variable 20 a 40DP. Relación
CA/A moderadamente alta 5,5/1DP.
• Esotropía parcialmente acomodativa: nunca llegan a tener or-
totropía con visión binocular normal.
• Esotropías adquiridas no acomodativas.
♦ Básica o esencial: después de los 6 meses de vida, luego de ha-
berse desarrollado los reflejos de visión binocular pero antes
de que se complete la maduración visual. Comienzo brusco o
intermitente, monocular con ambliopía de grado variable en
el ojo no fijador y CSA. Hipermetropía baja y factor acomo-
dativo ausente. Angulo moderado 20 a 40D. Frecuente con
hiperfunción de los músculos oblicuos superiores o inferio-
res, presentando anisotropías en A o en V respectivamente.
♦ Aguda: se debe descartar mediante fondo de ojos papiledema
o atrofia óptica y por RNM tumor de fosa posterior.
♦ Consecutiva a una cirugía de exotropía: hipercorrección.
♦ Residual a una cirugía de esotropía: hipocorrección.
• Microtropías: es una esotropía monocular de pequeño ángulo,
asociada con CRA y ambliopía de grado variable. Puede ser
primaria (cuyo ángulo oscila entre 2 y 5DP) o secundaria a un
tratamiento óptico/quirúrgico (ángulo menor a 10DP).
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
11. Complicaciones
Ambliopía. Es la complicación más importante cuando no se
realiza el tratamiento.
Falta de visión binocular.
Hipo e hipercorrecciones.
12. Criterios de alta
Ojos alineados con desarrollo completo de la agudeza visual.
13. Controles
Cuidar el desarrollo de la AV.
Depende de la edad del paciente y de la evolución de la Et.
Tratado quirúrgicamente según el caso, se lo controla:
A las 24 horas.
A las 72 horas.
A la semana.
A los 15 días, al mes, a los tres meses, a los seis meses y luego
controles anuales.
Con este seguimiento se puede controlar el desarrollo de la agu-
deza visual, las hipercorrecciones o las hipocorrecciones.
14. Secuelas
Ambliopía.
Pérdida de la visión binocular.
Xt consecutiva (hipercorrección quirúrgica).
Et residual (hipocorrección quirúrgica)
15. Prevención
Primer control en el recién nacido.
Segundo control al sexto mes de vida.
Realizar control oftalmológico infantil si se observa que desvía
sus ojos luego del tercer mes.
Seguimiento del desarrollo de la agudeza visual: al año, 3 años,
5 años, luego una vez por año.
Uso de la corrección óptica permanente.
Et aguda se debe solicitar RNM para descartar tumor de fosa
posterior.
Evitar la ambliopía postoperatoria siguiendo el desarrollo de su
agudeza visual hasta su maduración.
16. Información a dar al paciente
Es fundamental explicar a los padres que la oclusión se indica
para que el estrabismo se haga alternante y de esa manera desa-
rrolle visión en sus dos ojos.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
S
Estudios bioeléctricos cuando el examen no explique la dis-
minución de la visión.
Potenciales visuales evocados (PVE).
Electrorretinograma (ERG).
Electrooculoquinetograma (EOQG).
Retinografía del fondo de ojos.
Biomicroscopía ultrasónica (UBM).
6. Examen físico
No tiene.
Exámenes complementarios generales
S Interconsulta con neurología.
MR
Electromiografía de fibra única en la musculatura extrao-
cular.
TC de órbita (cortes finos axiales y coronales).
RNM.
7. Criterios diagnósticos
Falta de alineación de los ejes oculares con desviación de un ojo
hacia el lado temporal.
8. Diagnóstico diferencial
Pseudoexotropía: ángulo kappa positivo.
Estrabismo
Et consecutiva.
Diplopía.
15. Prevención
Primer control en el recién nacido.
Segundo control al sexto mes de vida.
Realizar control oftalmológico infantil si se observa que desvía
sus ojos luego del tercer mes.
Seguimiento del desarrollo de la agudeza visual: al año, 3 años,
5 años, luego una vez por año.
Uso de corrección óptica permanente.
Cuidar el desarrollo de la visión binocular.
16. Información a dar al paciente
Informar la importancia del control del desarrollo de la agudeza
visual y el cuidado de la visión binocular.
El tratamiento de oclusión de un ojo o alternada es de gran im-
portancia.
Es frecuente que puedan necesitar más de un tiempo quirúrgico.
17. Bibliografía
Brugnoli de Pagano O, Berman M, Prieto Díaz F. Estrabismo. 6a.
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jo Argentino de Oftalmología, 2010 (Maestría a distancia en
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Brasil, mayo 2000, p. 29-32.
Prieto-Díaz J, Souza-Dias C. Estrabismo. 5a. ed. Buenos Aires:
Ediciones Científicas Argentinas, 2005.
Rosenbaum AL, Santiago AP. Clinical strabismus management:
principles and surgical techniques. Philadelphia: W. B. Saun-
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Von Noorden GK, Campos EC. Binocular vision and ocular mo-
tility: theory and management of strabismus. 6th ed. St. Louis:
C. V. Mosby, 2002.
Wright KW. Pediatric ophthalmology and strabismus: the requisi-
tes in ophthalmology. St. Louis: C. V. Mosby, 1999.
Parálisis oculomotoras
1. Definición
La parálisis muscular significa que un músculo ha perdido toda
la inervación y por lo tanto la funcionalidad. En la mayoría de
los casos la inervación se pierde o se recupera parcialmente de-
jando al músculo más débil y a estos casos se los refiere como
paresias musculares.
El ojo se desvía hacia el lado opuesto a la paresia.
Se llama ángulo primario a la desviación que se produce cuando
el paciente fija con el ojo sano.
El ángulo secundario se presenta cuando el paciente fija con su
ojo afectado, la desviación será mayor.
La parálisis o paresia de un músculo da por resultado una des-
viación ocular incomitante (varía de magnitud en las diferentes
posiciones de la mirada y según el ojo fijador). En las parálisis
antiguas todas las fuerzas musculares se equilibran y la desvia-
ción tiende a la comitancia.
A) Parálisis del III nervio
(motor ocular común)
Inerva al elevador del párpado superior, al recto superior, medio
e inferior, al oblicuo inferior, constrictor de la pupila y al músculo
ciliar.
1. Clasificación
• Congénita.
• Adquirida.
♦ Traumática
♦ Vascular
♦ Virósica
♦ Tumoral
• Completa (compromete 4 de los 6 músculos extraoculares).
• Parcial.
2. Datos epidemiológicos
Ocupa el tercer lugar en frecuencia dentro de las parálisis de la
musculatura ocular extrínseca.
Las roturas de aneurismas son las más frecuentes en el adulto
joven.
Son poco frecuentes en los niños.
En los niños un alto porcentaje son congénitas.
3. Motivo de consulta
Exotropía e hipotropía.
Ptosis.
Pseudoptosis (sólo se manifiesta cuando el ojo esta en hipotro-
pía).
Midriasis.
Falta de acomodación.
Diplopía (adquiridas).
Confusión.
Visión borrosa.
Mareos.
Tortícolis.
Ambliopía.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Enfermedades vasculares.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
2. Epidemiología
La gran mayoría son paresias. Son las de mejor pronóstico.
Es la más frecuente.
70% son congénitas.
3. Motivo de consulta
Hipertropía.
Tortícolis.
Diplopía vertical.
Confusión.
Ver objetos inclinados con un ojo.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Traumatismos.
Enfermedades vasculares.
Tumores.
Malformaciones.
Enfermedad desmielinizante.
Meningitis.
Encefalitis.
Heredofamiliares
Antecedentes de familiares con estrabismo.
5. Examen ocular general
Inspección
Tortícolis - Posición anómala de la cabeza (desaparece frecuen-
temente al ocluir el ojo parético).
Examen oftalmológico general
Estudio de los movimientos oculares
Versiones en las 9 posiciones de la mirada.
Ducciones: hipofunción e hiperfunción.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Maniobra de Bielschowsky.
Medidas de la desviación con cover test simultáneo con pris-
mas. En las 11 posiciones.
Exciclotorsión del ojo afectado FO.
Exámenes complementarios oculares
S Prueba subjetiva del vidrio rojo.
Doble varilla de Maddox.
Amplitud de divergencia vertical.
S Test de los tres pasos de Parks.
S Test de Hess-Lancaster.
S
Refracción bajo cicloplejía, biomicroscopía, retinografías
del fondo de ojo.
S Examen de fotografías antiguas del paciente.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Prismas base superior o inferior (en casos antiguos).
Tratamiento quirúrgico
Debilitamiento del oblicuo inferior.
Refuerzo (pliegue o tucking) del tendón del oblicuo superior.
Desplazamiento temporal de las fibras anteriores del OS.
Retroceso del RI.
Retroceso del RS.
10. Evolución
Son las de mejor evolución.
La corrección o mejoría quirúrgica es la regla.
11. Complicaciones
Diplopía.
Falta de visión binocular.
Paresia bilateral enmascarada.
Hipo o hipercorrecciones.
Síndrome de Brown iatrogénico.
12. Criterios de alta
Desaparición de síntomas y signos.
13. Controles
En el momento de la aparición, controles al mes con estudios
complementarios y se puede resolver cirugía cuando está con-
firmado el diagnóstico (congénitas).
Esperar 6 meses en las adquiridas con controles cada 15 a 30
días.
14. Secuelas
Ser cuidadoso con el diagnóstico y el tratamiento elegido para
cada caso. Evitará secuelas.
15. Prevención
No tiene.
16. Información a dar al paciente
La posición anómala de la cabeza o tortícolis es una consecuen-
cia compensatoria (evita el desarrollo de ambliopía).
La cirugía mejorará los síntomas casi por completo. Puede re-
querir más de una cirugía.
C) Paresia o parálisis del VI nervio
(motor ocular externo o abducens)
Inerva al recto lateral.
1. Clasificación
• Congénita.
• Adquirida.
♦ Tumor (glioma del tronco).
♦ Trauma.
♦ Inflamatoria.
♦ Infecciosa (varicela, otras virales).
♦ Vascular.
♦ Aneurisma.
♦ Esclerosis múltiple.
♦ Migraña.
♦ Hipertensión endocraneal.
• Unilateral (nervio) o bilateral (par).
2. Datos epidemiológicos
Ocupa el segundo lugar de incidencia.
Las formas congénitas son excepcionales.
3. Motivo de consulta
Esotropía del ojo afectado y limitación de la abducción.
Diplopía horizontal sobre todo en visión lejana.
Tortícolis.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Traumatismos.
Tumores.
Enfermedades vasculares (diabetes, aneurismas, aterosclerosis,
hipertensión arterial).
Infecciones.
Heredofamiliares
Antecedentes de familiares con estrabismo.
5. Examen ocular general
Inspección
Tortícolis - Posición anómala de la cabeza.
Estrabismo
Oftalmopatía tiroidea.
MAPE.
Miositis.
Oftalmoplejía extrínseca progresiva crónica.
9. Tratamiento
Tratamiento médico local
Oclusión del ojo sano.
Prismas de base externa.
Prismas de Fresnel.
Inyección de toxina botulínica en el recto medio.
Tratamiento de la enfermedad de base.
Tratamiento quirúrgico
Para realizar la cirugía se deben esperar mínimo tres controles:
uno cada mes sin variación.
Retroceso de RM + resección de RL.
Retroceso de ambos RM.
Doble retroceso de RM + resección de RL.
Transposición muscular (Carlson-Jampolsky) + punto de Fos-
ter.
10. Evolución
Depende de la causa.
11. Complicaciones
Pérdida de la visión binocular.
Contractura del antagonista.
12. Criterios de alta
Desaparición de síntomas y signos.
13. Controles
Periódicos, a los 15 días, al mes y hasta los seis meses para in-
dicar cirugía.
14. Secuelas
Falta de visión binocular permanente.
15. Prevención
No hay.
16. Información a dar al paciente
La parálisis ocular en los primeros momentos puede ser tratada
con oclusión, luego con prismas, toxina botulínica y por último
con cirugía.
Estrabismo
5. Examen físico
General
Patologías que conlleven a padecer ojo seco grave (grado III o
IV) contraindican la cirugía refractiva.
Patologías generales que puedan coexistir con aumento de la pre-
sión intraocular (glaucoma) contraindican la cirugía refractiva.
Ocular
Mediciones refractométricas: sin cicloplejía (manifiesta) y con
ella, con interrupción del uso de lente de contacto.
Biomicroscopía.
Presión intraocular.
Fondo de ojo con especial atención a la periferia retinal.
6. Exámenes complementarios
S Queratometría (radios de curvatura).
S Topografía corneal computarizada, Pentacam, Orbscam.
CS Sensibilidad al contraste.
S Paquimetría corneal.
S Estudio de la secreción lagrimal.
CS ORA.
CS OCT macular.
CS Campo visual computarizado.
7. Criterios diagnósticos
No tiene.
8. Diagnóstico diferencial
Queratocono incipiente o manifiesto.
Queratoglobo.
Degeneración pelúcida.
Seudomiopías.
Miopías no operables o que no se mejorarán con la operación.
9. Tratamiento quirúrgico
Queratotomía radial (QR): técnica utilizada tempranamente ha-
cia fines de la década del 80.
Láser excimer superficial (PRK): técnica que reemplazó a la QR
con la utilización del láser excímero o excímer (muy utilizada
durante la década de los 90).
LASIK o LASEK (corrección de miopías desde 1 dioptría hasta
10 dioptrías): queratomileusis con láser excímero. Es la técnica
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Neuropatías tóxico-metabólicas.
Hipotonía intraocular.
SIDA (otras inmunodeficiencias).
3. Motivo de consulta
Cefaleas (que pueden estar asociadas a náuseas y vómitos).
Vértigo.
Fotofobia.
Visión doble (parálisis de los músculos oculares: paresia de VI
nervio).
Pérdida transitoria de la visión u oscurecimientos visuales tran-
sitorios (OVT).
Disminución de la visión (en estadíos avanzados).
Defectos campimétricos (inicialmente aumentos de la mancha
ciega).
Puede ser también un hallazgo casual en la consulta oftalmo-
lógica.
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Muy variable. Se debe investigar de acuerdo con la sospecha
etiológica.
Heredofamiliares
Muy variable. Se debe investigar de acuerdo con la sospecha
etiológica.
5. Examen ocular general
EOB.
Discos hiperémicos edematosos bilaterales con borrado de los
bordes.
Se observa la falta de pulsación venosa (en el 20% de la pobla-
ción general no se ve).
Venas retinales dilatadas y tortuosas.
Reflejos pupilares normales.
Visión cromática conservada.
Hemorragia papilar y peripapilar.
Exámenes complementarios oculares
S CVC.
CS Test de los colores para descartar neuritis óptica.
Neurooftalmología
13. Controles
Cada semana inicialmente, EOB y campo visual.
Luego cada cuatro-seis semanas el primer año.
Luego cada seis meses.
14. Secuelas
Pérdida permanente del campo visual y de la agudeza visual.
15. Prevención
No tiene.
16. Información a dar al paciente
Es una entidad que requiere de atención multidisciplinaria —
especialmente neurológica— urgente pues puede tener compli-
caciones generales muy importantes.
17. Bibliografía
Albert DM, Jakobiec FA. Principles and practice of ophthalmolo-
gy. Philadelphia: Saunders, 1994, v. 4, p. 2534-1537.
Alezzandrini AA et al. Fundamentos de oftalmología. Buenos
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Kanski JJ. Signos en oftalmología: causas y diagnóstico diferen-
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Salta; Buenos Aires: Consejo Argentino de Oftalmología, 2010
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Menke MN, Feke GT, Trempe CL. OCT measurements in pa-
tients with optic disc edema. Invest Ophthalmol Vis Sci 2005;
46: 3807-11.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
R
Potenciales occipitales evocados (aumento del tiempo de
latencia del lado afectado).
S
OCT de papila con medición del espesor de capa de fibras
nerviosas y células ganglionares para el seguimiento.
6. Examen físico general
ECB.
Hallazgos propios de las diferentes etiologías.
Exámenes complementarios generales
Resonancia nuclear magnética (para ver lesiones intra-
S
craneales y descartar etiología desmielinizante) sin y con
gadolinio, y con técnicas para evaluación del nervio óptico
(supresión grasa).
S Interconsulta con neurología.
CS
En las papilitis: interconsulta con infectología y servicio de
uveítis, además del laboratorio infectológico específico.
MR Radiografía de senos paranasales.
7. Criterios diagnósticos
Dolor en la motilidad ocular.
Pérdida de la visión aguda o subaguda.
Escotoma central o centrocecal.
Alteración en la visión de los colores (tests de Ishihara y de Far-
nsworth-Munsell).
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Estrella macular.
♦
Compresión venosa.
♦
2. Datos epidemiológicos
De las formas clínicas, la más común es la NAAION.
3. Motivo de consulta
Brusca disminución de la agudeza visual (unilateral 80% de los
pacientes).
Alteración de la visión de los colores variable.
No doloroso en el NAAION y con dolor periorbitario y cefaleas
en el AAION.
Escotomas paracentrales y más frecuentemente: hemianopsia
altitudinal.
A veces acompañado de diplopía (AAION).
Fiebre, anorexia, astenia, cefaleas y claudicación mandibular
(AAION).
4. Antecedentes personales y heredofamiliares
Personales
Diabetes, hipertensión, dislipemia, trastornos hematológicos
(alteraciones de la coagulación), hemorragias bruscas o hipovo-
lemia moderada, tabaquismo, vasoespasmos.
Arteritis temporal de células gigantes.
Heredofamiliares
No tiene.
Oculares
Papila pequeña: disk at risk: crowded disk: papilas pequeñas con
relación excavación-papila disminuida.
Drussen de papila.
Hipertensión ocular.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Neuritis óptica/papilitis.
Papiledema.
Drussen de papila.
Coriorretinitis yuxtapapilar.
Tabla 1.
AAION NAION NO
(neuropatía óptica (neuropatía (neuritis óptica)
isquémica anterior óptica
arterítica) isquémica no
arterítica)
Edad 65 o > 50 a 75 20 a 49 y niños
Compromiso Unilateral. Unilateral. Puede ser bilateral.
Datos clínicos Pérdida visual no Pérdida visual no Dolor retroocular
dolorosa, pero puede dolorosa. DPAR, con los
haber cefalea, mialgias, visión cromática movimientos.
fiebre, artralgias, variable. Defecto pupilar
diplopía y amaurosis aferente y
fugaz que precede al alteración en
cuadro. la visión de los
Eritrosedimentación colores.
elevada.
Ciclopléjico/midriático
Tropicamida al 0,5%-1% 20-30 minutos 3-6 horas
Ciclopentolato al 0,5%-1%-2% 20-45 minutos 24 horas
Atropina al 0,5%-1%-2% 30-40 minutos 1-2 semanas
Amikacina
La droga se presenta en ampolla de 500 mg/2 ml (ejemplo: Bi-
clin® 500 mg).
Colirio fortificado (dilución 50 mg/ml)
Aspire los 2 ml de la ampolla de amikacina (fig. 1). Inyecte el
contenido de la jeringa en un frasco con 8 ml de solución fisio-
lógica (fig. 2). Resultado: 50 mg/ml.
La dosis recomendada varía desde 10 hasta 100 mg/ml. En nues-
tra práctica habitualmente utilizamos 50 mg/ml. Caducidad: 10
días. Conservar refrigerado y protegido de la luz.
Subconjuntival (25 mg/0.1 ml)
Las concentraciones reportadas para la aplicación subconjunti-
val varían desde 20 hasta 100 mg.
Aspire directamente 0.1 ml de la ampolla. Hasta aquí tenemos
25 mg/0.1 ml (fig. 3).
Aspire ahora 2 ml de solución fisiológica que se suma a los 0.1
ml que teníamos en la jeringa con 25 mg de amikacina (fig. 4).
Resultado: en 0.3 ml hay 25 mg de amikacina listos para inyec-
tar.
Las inyecciones subconjuntivales se reservan para casos selec-
cionados. Ejemplo: perforación corneal inminente o extensión
escleral del proceso. Eventualmente se pueden repetir cada 12-
24 horas en sitios separados.
Intravítrea (0.4 mg/0.1 ml)
La dosis recomendada es estricta: 0.4 mg/0.1 ml (400 µg/0.1
ml).
Aspire los 2 ml de la ampolla de amikacina (fig. 3).
Mezcle los 2 ml (500 mg) de amikacina con 123 ml de solución
fisiológica (fig. 5).
Ultimo paso: aspire 0.1 ml del pote (fig. 4) y ya está lista la in-
yección (fig. 6).
En este último paso se aspiran 0.1 ml del pote que contiene los
500 mg de amikacina en 123 ml de solución fisiológica. La ma-
niobra resulta más sencilla si la aspiración se realiza con jeringa
de insulina, ya que hace más fácil visualizar una cantidad tan
pequeña de líquido (0.1 ml).
La familia de los aminoglucósidos (ejemplo: amikacina, tobra-
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Figura 1. Figura 2.
Figura 3. Figura 4.
Figura 5. Figura 6.
Colistina
Se presenta en ampolla que contiene polvo estéril con 100 mg de
sulfato de colistina, preferible a otra forma comercial que con-
tiene metanosulfonato de sodio colistina.
Colirio fortificado (5 mg/ml)
Inyecte dentro del frasco de colistina 20 ml de agua destilada.
Bata el frasco hasta obtener una dilución homogénea.
Aspire los 20 ml del frasco de colistina.
Inyecte los 20 ml en un frasco gotero grande.
Resultado: 20 ml de colistina a 5 mg/ml.
No se encontraron artículos recientes sobre la utilización de
colistina en grandes muestras de pacientes. La mayoría de los
trabajos se publicaron en las décadas del 50 y 60 cuando la co-
listina era el antibacteriano de elección; sin embargo, esporá-
dicamente surgen queratitis donde el laboratorio nos informa
Pseudomona resistente a ceftazidima, amikacina y ciprofloxaci-
na. Es precisamente en esa situación cuando los colirios fortifi-
cados de imipenem y colistina pueden aportar una alternativa
terapéutica válida.
Dexametasona (2 ml/8 mg)
Se presenta en ampollas.
Subconjuntival
Directamente de la ampolla se extrae 1 ml. Volumen que con-
tendrá 4 mg/1 ml.
Intravítrea
Directamente de la ampolla de 2 ml se extrae 0.1 ml. Este volu-
men contendrá 0.4 mg, es decir la dosis recomendada para la
administración intravítrea.
La utilización de dexametasona intravítrea en casos de endof-
talmitis bacterianas es controvertida y se funda en la teoría de
que el daño de las bacterias es comparable al de una reacción
inflamatoria descontrolada. Pflugfelder considera seguras dosis
de 400 µg. Peyman también sugiere el empleo de corticoides en
cavidad vítrea.
En una revisión de 27 pacientes realizada por Mao con endof-
talmitis secundaria a estafilococo aureus, las peores agudezas
visuales residuales correspondieron al grupo que no recibió cor-
ticoides. Otras publicaciones, sin embargo, aportan resultados
contrarios. Shah y colaboradores encuentran que el empleo de
esteroides intravítreos reduce la probabilidad de alcanzar una
mejoría en la agudeza visual. No existen datos disponibles como
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Vigabatrina.
Glitazonas.
Lámpara de hendidura
Medicamentos que pueden afectar la conjuntiva, la córnea y el
cristalino durante el curso del tratamiento:
Alopurinol (cataratas).
Amiodarona (córnea verticilata).
Cloroquina (córnea verticilata).
Corticoides (cataratas).
Fenotiacinas (cataratas).
Hidroxicloroquina.
Indometacina.
Vitamina A.
5-fluorouracilo.
Tamoxifeno.
Metotrexato.
Anfotericina B.
Mióticos (cataratas).
Clorpromazina.
Amantadina.
Está indicado el examen con lámpara de hendidura.
Tensión intraocular
Los fármacos que pueden alterarla son:
Anfetaminas.
Anticolinérgicos.
Antidepresivos tricíclicos.
Corticoides.
Reserpina.
Cannabis.
Controlar la tensión ocular en forma periódica.
Reflejos pupilares
Pueden alterarlos los siguientes fármacos:
Anfetaminas.
Anticolinérgicos.
Antihistamínicos.
Clorpromacina.
Cocaína.
Haloperidol.
Indometacina.
Levodopa.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Morfina.
Reserpina.
Salicilatos.
Se deberá explorar la reactividad pupilar, así como el reflejo
fotomotor y consensual a la luz y a la convergencia.
Bibliografía
American Academy of ophtalmology. Cristalino y cataratas.
Barcelona: Elsevier, 2013 (Curso de ciencias básicas y clínicas;
2011-2012, sección 11).
Gold DH, Lewis RA. Oftalmología de bolsillo. Madrid: Marbán,
2006.
Kanski-Bowling B. Kanski, ftalmología Clínica. 7a. ed. Madrid:
Elsevier España, 2012.
Sociedad Española de Retina y Vítreo (SERV). Manual de retina
SERV. Barcelona: Elsevier, 2013.
Toxicidad medicamentosa ocular
FÁRMACOS EFECTOS Y ÓRBITA, PÁRPADOS, CÓRNEA, CRISTALINO, RETINA, NERVIO EXPLORACIONES EXAMEN
SÍNTOMAS MOTILIDAD. CONJUNTIVA, ÚVEA VÍTREO ÓPTICO OCULARES PRETRATAMIENTO,
SECUNDARIOS MÚSCULOS ESCLERÓTICA CONTROL
OCULARES EXTRÍNSECOS
Hidroxicloroquina Retinitis Depósitos Dispersión Agudeza visual. Exploración ocular
pigmentaría. subepiteliles pigmentaria Biomicroscopía. completa.
Depósitos corneales. retinal. Fondo de ojo. Agudeza visual y
corneales. Maculopatía en fondo de ojo cada 6
ojo de buey. meses.
Isoniazida Neuritis óptica. Agudeza visual. Exploración ocular
Queratitis Biomicroscopía. completa y visión
Campo visual. de los colores cada
3-6 meses.
Apéndice
Fondo de ojo.
Campo visual.
Corticoides Miopía Exoftalmos. Ptosis. Midriasis. Catarata Retinopatía. Agudeza visual. Examen completo
transitoria. subcapsular Papiledema. Biomicroscopía. cada 2-3 meses.
posterior. Fondo de ojo
Alopurinol Catarata (rara) Catarata (raro). Lesión macular Agudeza visual. Examen completo
(raro). Biomicroscopía. cada 8-12 meses.
Fondo de ojo
Anticoagulantes Hemorragias Hemorragias Fondo de ojo. Si hay síntomas.
intraoculares. retinales.
Vitamina a Parálisis oculares. Exoftalmos. Pérdida de cejas Hemorragias Motilidad ocular. Examen cada 6
Hemorragias Parálisis. y pestañas. retinales. Fondo de ojo. meses.
retinales. Diplopía. Blefaroconjuntivitis. Papiledema.
Nistagmos.
Vitamina d Queratopatía en Depósito Agudeza visual. Examen cada 6-12
banda. conjuntival de Biomicroscopía. meses.
calcio. Queratopatía
en banda.
Ácido nicotínico Maculopatía. Maculopatía. Neuritis óptica. Agudeza visual. Examen cada 6-12
Neuritis óptica. Posible neuritis Edema macular. Fondo de ojo. meses.
Edema retinal. óptica. Edema
retinal.
Barbitúricos Ptosis. Hipotonía Diplopía. Ptosis. Midriasis. Atrofia óptica. Agudeza Examen cada 6-12
ocular. Alteración Nistagmo. Dermatosis de Miosis. Papilitis. visual. Visión meses.
de la visión de los piel de párpados. de los colores.
colores. Conjuntivitis. Motilidad ocular.
Biomicroscopía.
Fondo de ojo.
Clorpromacina Crisis oculógiras. Hiperpigmentación Depósitos de Depósito de Hiperpigmentación Agudeza Exploración
Miosis. de la piel, párpados, pigmento en pigmento en retinal. Atrofia visual. Visión completa cada 3-6
Hipertensión conjuntiva y córnea. cristalino. óptica. de los colores. meses.
ocular. córnea. Motilidad ocular.
Tensión ocular.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Biomicroscopía.
Fondo de ojo.
Fenitoína Visión borrosa. Diplopía. Ptosis, Agudeza visual. Examen cada 12
Conjuntivitis. Nistagmo. Conjuntivitis Motilidad ocular. meses.
Oculoplejía. alérgica. Biomicroscopía.
Fondo de ojo.
Haloperidol Visión borrosa Crisis oculógiras. Opacidad Agudeza visual. Solamente si
por midriasis. cristalina. Motilidad ocular. aparecen síntomas.
Cicloplejía. Tensión ocular.
Hipotensión Biomicroscopía.
ocular. Fondo de ojo.
Levo-dopa Midriasis. Retracción Exploración pupilar. No necesario en
palpebral. forma rutinaria.
Imao Trastornos Midriasis. Alteración de Agudeza visual. Examen ocular
visuales. la visión de los Visión de los colores. cada 3-6 meses.
colores. Neuritis Motilidad ocular.
óptica. Tensión ocular.
Biomicroscopía.
Fondo de ojo.
Campo visual.
Morfina Miosis. Visión Agudeza visual. No necesario en
Apéndice
1. Introducción
El mantenimiento de normas de aseo general y la correcta limpie-
za, esterilización y desinfección, sumado a un control de la prácti-
ca de los trabajadores de la salud, son pilares fundamentales para
llevar al mínimo las posibilidades de una patología infecciosa.
Es importante un control constante de los procedimientos de
manejo y de conductas como también una educación continua
que encauce y retroalimente la prevención de las infecciones.
Los funcionarios de las instituciones de la salud en su quehacer
diario se enfrentan permanentemente a una gran flora micro-
biana presente en el ambiente de trabajo y corren el riesgo de
infectar o ser infectados si no se cumplen las normas especiales
de prevención.
A través de las normas universales de bioseguridad se pueden
establecer pautas de comportamiento y manejo preventivo fren-
te a organismos potencialmente patógenos.
La bioseguridad tiene como objetivo interiorizarnos, concien-
ciarnos, en una cultura de comportamiento dentro del ambiente
clínico-hospitalario que evite riesgos de infección intranosoco-
mial, protegiendo al paciente, al médico, al personal hospitala-
rio y a la comunidad en general.
La forma eficiente de prevenir, limitar y controlar las infeccio-
nes es la utilización de barreras físicas, químicas, biológicas y
educativas que en conjunto llevan a un cambio de actitud por
parte del personal asistencial de diferentes niveles.
La prevención se considera la principal estrategia para reducir
el riesgo de la infección.
No puede aislarse el concepto de esterilización de los de antisep-
sia y desinfección.
La prevención es un proceso que conlleva no solamente a las
acciones físicas sino también a actividades educativas, inves-
tigativas y de evaluación. Como la falla de cualquiera de estos
procedimientos puede llegar a ensombrecer el pronóstico de la
intervención, no hay que restarles importancia.
Apéndice
Métodos de desinfección
La desinfección es uno de los procedimientos más antiguos en
el medio hospitalario. Se utilizó en un primer momento para
eliminar microorganismos del ambiente e higienizar las manos.
Existen dos métodos de desinfección: los físicos y los químicos.
Métodos físicos
Pasteurización
Utilizado originalmente por el francés Louis Pasteur. Con este
proceso se realiza la DAN y por el cual el agua se lleva a 77ºC
de temperatura durante aproximadamente 30 minutos. Así,
destruye todos los microorganismos excepto las esporas bacte-
rianas.
Hervido
Este método utiliza el agua hirviendo a temperaturas muy altas
para lograr la desinfección. Por ejemplo, para una DAN, se hier-
ven los instrumentos en un recipiente con tapa de 15 a 20 minu-
tos contabilizando el tiempo desde que el agua rompe el hervor.
Los objetos serán cubiertos por completo con el agua durante
el hervido y no se añadirá ningún otro elemento mientras esté
hirviendo. El fuego será suave, ya que el fuego alto hace rebotar
los objetos, disminuye el nivel de agua y consume más gas. Se
recomienda usar tiempos más prolongados para lugares de gran
altura sobre el nivel del mar. Se seca al aire o con una toalla este-
rilizada antes de volver a utilizar los materiales o almacenarlos.
Este método no se utiliza en el medio hospitalario.
Desinfectadores de agua o a chorro de agua: este equipo se utiliza
para limpiar y desinfectar los objetos que se utilizan para asistir
al paciente en la sala de internación. Los desinfectadores a cho-
rro de agua se utilizan para vaciar, limpiar y desinfectar objetos
tales como chatas, papagayos y orinales, usando un proceso que
elimina el lavado manual y en algunos casos utilizando una can-
tidad mínima de germicidas químicos. Funcionan a temperatu-
ras mayores de 90º C.
Radiación ultravioleta (UV)
Este método inactiva a los microorganismos en los rangos 240-
280 nm. Su acción se ejerce por desnaturalización de los ácidos
nucleicos, pero su efectividad se ve influenciada por factores
como la potencia de los tubos UV, presencia de materia orgáni-
ca, longitud de la onda, temperatura, tipo de microorganismos
y la intensidad de UV que se ve afectada por la distancia y la su-
ciedad de los tubos. La radiación UV no desinfecta ni esteriliza
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Químicos líquidos
La esterilización por agentes químicos por inmersión hecha de
forma manual será siempre el último método de elección. Estos
procesos son difíciles de controlar, con una gran probabilidad
de recontaminación durante el enjuague o el secado, y no per-
miten el almacenado posterior.
Glutaraldehído: alquilación de proteínas. Este desinfectante —
que puede ser ácido o alcalino— se utiliza como uno de alto nivel
y puede usarse en una concentración del 2% para fines de esterili-
zación. La duración del tiempo de contacto necesaria para esteri-
lizar es de aproximadamente 10 horas. Tiene un amplio espectro
de actividad antimicrobiana; es activo ante la presencia de mate-
ria orgánica e inactiva rápidamente los microorganismos, excepto
las esporas. Fácil de usar, es relativamente no corrosivo.
Peróxido de hidrógeno: es un desinfectante muy poco utilizado
por no existir comercialmente en el mercado. En general, el pe-
róxido de hidrógeno a una concentración del 6% es esporicida
pero muy corrosivo cuando se utiliza en instrumentos delicados
y endoscopios de fibra óptica.
Químicos gaseosos
Esterilización química por óxido de etileno: en general se puede
esterilizar por ETO cualquier artículo termolábil con la única
recomendación de controlar la aireación si el artículo es poroso.
Actúa como agente alquilante de grupos funcionales de proteí-
nas estructurales y enzimas y de bases nitrogenadas de ácidos
nucleicos.
Plasma de peróxido de hidrógeno: este método usa peróxido de
hidrógeno como precursor de plasma. El plasma, que está consi-
derado como un cuarto estado de la materia, diferente al líquido,
sólido y gaseoso, está compuesto por iones reactivos, electrones
y partículas atómicas neutras. El peróxido de hidrógeno en su
fase plasma tiene propiedades esterilizantes a bajas temperatu-
ras. Es útil para la esterilización de equipos y materiales que no
resisten las altas. Es agente esterilizante vaporizado en solución
acuosa al 58% al estado plasma. Su mecanismo de acción es el
sinergismo entre la acción oxidante del peróxido de hidrógeno
en estado vapor y la actividad alquilante de los radicales libres.
El equipo esterilizador opera mediante la inyección de peróxido
de hidrógeno al 58% y por medio de emisión de energía de ra-
diofrecuencia crea un campo electromagnético en la cámara, lo
que genera plasma. En este estado se produce la esterilización.
Apéndice
Ayudas ópticas
Existen ayudas ópticas para distancia lejana y cercana. Podemos
dividirlas en tres grupos:
a. Lentes convexos.
b. Sistemas telescópicos.
c. Filtros de absorción selectiva.
Cada una de ellas posee ventajas y desventajas que se tendrán en
cuenta en el momento de su recomendación, según la patología
del paciente, sus metas y logros (funcionalidad) y los costos.
Tanto en las lentes convexas como en los sistemas telescópicos
se utiliza el concepto de magnificación, ya sea al aumentar el
tamaño del objeto observado o bien acercándolo y aumentando
el tamaño.
a. Lentes convexos
Consisten en lentes o sistemas de lentes convergentes montados
en armazones enteros (anteojos) o en soportes especiales. Exis-
ten sistemas monoculares y binoculares.
Pueden ser cristales esféricos, con prismas incorporados, asféri-
cos, dobletes o lenticulares.
Lentes esféricas de alta graduación
Se utilizan generalmente de forma monocular, la cual puede
llegar hasta +60D aproximadamente. Si se recetan en forma
binocular, se indica en graduaciones a partir de las +4D hasta
+12D, con prismas base interna en ambos ojos para ayudar a la
convergencia en la distancia de lectura.
Se recomienda especificar en la receta lentes de tipo asféricas
para disminuir aberraciones.
Es necesario especificar en la prescripción la distancia naso-pu-
pilar para la posterior adaptación por parte del óptico.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Poder prismático
Se puede obtener un efecto prismático en los anteojos de cerca
al descentrar el centro óptico del cristal con respecto del centro
geométrico. El valor del descentrado necesario para lograr un
efecto prismático deseado se obtiene a partir de la ley de Prentice:
∆ = D x Dc ∆ = valor prismático
D = poder de la lente
DC = distancia de descentrado expresado en cm
Así, por ejemplo, en una lente +10D, para lograr un efecto pris-
mático de base interna de 12 d.p., será necesario descentrar 1,2
cm hacia el lado nasal.
Lenticulares
Son lentes convergentes con un campo útil más pequeño que
las lentes convencionales, pero con menores aberraciones peri-
féricas comparadas con las lentes esféricas. Pueden llegar hasta
las 48D (12X) y, a medida que aumenta el poder, menor será el
tamaño del campo visual útil de lectura.
Dobletes
Los dobletes consisten en una combinación de dos lentes con-
vexas separadas por una cámara de aire. Ofrecen un campo de
visión más amplio, menos aberraciones e imágenes más claras.
Se consiguen graduaciones que van desde las +32D hasta +80D
(8X-20X).
Las ventajas de los sistemas nombrados anteriormente son:
Mayor aceptación estética.
Apéndice
b. Sistemas telescópicos
Telescopios
A la hora de implementar un dispositivo de baja visión para ver
de lejos, las opciones se limitan a los sistemas telescópicos. Es-
tos son funcionales al momento de mirar la televisión o para ver
lejos en posiciones estáticas, por ejemplo, la dirección de una
calle o casa, el número del colectivo, etc.
Si el paciente manifiesta mejorar su visión de lejos para su des-
plazamiento, la mejor recomendación será un anteojo de lejos
Apéndice
Bibliografía
Arrollo G. Soluciones para la baja visión. 2a. ed. Buenos Aires:
Paratexto, 2012.
Coco Martín B, Herrera Medina J (dir.). Manual de la baja visión
y rehabilitación visual. Madrid: Médica Panamericana, 2015.
Lentes de contacto:
complicaciones, receta y control
Complicaciones
Son efectos secundarios debido al uso o mal uso de lentes de
contacto.
Según su patogenia pueden ser:
Infecciones corneales.
Inflamaciones corneales.
Trastornos tóxicos y por hipersensibilidad.
Reacciones metabólicas.
Complicaciones de naturaleza mecánica.
Complicaciones relacionadas con molestias y sequedad.
Datos epidemiológicos
Tanto en el caso de complicaciones frecuentes o infrecuentes
relacionadas con lentes de contacto se ha comprobado que hay
diferencias en cuanto al riesgo que entrañan sus diversos tipos
y el régimen de uso.
Dada la población actual de portadores de lentillas a nivel mun-
dial, incluso las complicaciones poco frecuentes pueden afectar a
un número elevado de ellos. Se estima que actualmente más de 100
millones de personas en todo el mundo usan lentes de contacto.
Las complicaciones más frecuentes son las asociadas con la into-
lerancia o molestias crónicas dentro de las cuales se encuentran
reacciones papilares, alteraciones de la superficie ocular, facto-
res ambientales y ocupacionales o una compliance del paciente.
Otra complicación frecuente es la vascularización corneal aso-
ciada al uso crónico de las lentes de contacto o la incorrecta
adaptación de la lente.
Luego le siguen las infecciones por lentes de contacto dentro de
las cuales la queratitis bacteriana es la más frecuente, sobretodo
Pseudomona aeruginosa y Staphylococcus aureus.
Otra patología infecciosa no tan frecuente pero grave y asociada
con el uso de lente de contacto es la queratitis por Acantamoeba.
Motivo de consulta
Enrojecimiento del ojo.
Visión borrosa.
Apéndice
Dolor.
Incomodidad o sensación de cuerpo extraño en el ojo.
Mayor sensibilidad a la luz.
Escozor, picazón.
Lagrimeo excesivo.
Aparición de lagañas por la mañana.
Visión de halos alrededor de las luces.
Antecedentes personales
Antecedentes de algún padecimiento anterior asociado al uso
de lentes de contacto, recidivas.
Usuario de lentillas, horarios de uso, uso nocturno, uso prolon-
gado, limpieza.
Alergias. Síndromes, por ejemplo, ojo seco en Sjögren.
Examen ocular general
Córnea: edema corneal, queratitis, infiltrados, microquistes
corneales, úlcera, neovascularización limbar.
Conjuntiva: hiperemia, conjuntivitis papilar.
Cámara anterior: Tyndall, hipopión.
Exámenes complementarios
Toma de muestra corneal para cultivo y por sospecha de quera-
titis bacteriana, Acanthamoeba o en infecciones corneales que
no responden a tratamiento habitual.
Cultivo del líquido y estuche de las lentes de contacto.
Controles
Se deben realizar controles periódicos.
Verificar la correcta adaptación de la lente de contacto.
Blandas
Cubre plenamente la córnea.
Buen centrado (concéntrico con el iris visible).
Movimiento satisfactorio (al fijar la vista hacia arriba, un movi-
miento de 0.25-0.75 mm con el pestañeo es ideal).
La lente se mueve libremente cuando se la maneja con el pár-
pado inferior.
Respuesta satisfactoria en cuanto a confort por parte del paciente.
Respuesta visual satisfactoria por parte del paciente (como refe-
rencia comparar con AV alcanzada con lentes aéreas).
RGP
Observar imagen fluoroscópica. Fundamental ausencia de bur-
bujas atrapadas, ausencia de toque o rozamiento excesivo.
Normas de diagnóstico y terapéutica de enfermedades oculares
Tratamiento
Depende del tipo de complicación. Desde el tratamiento anti-
biótico para las infecciones bacterianas, lágrimas artificiales
para queratitis u ojo seco, hasta antihistamínicos para reaccio-
nes alérgicas, corticoides para infiltrados estériles. Se analiza
según el caso en particular.
No se aconseja la oclusión en este tipo de complicaciones.
Información a dar al paciente
El incumplimiento de las instrucciones de uso y de limpieza
diaria de las lentes puede determinar desde leves a serias com-
plicaciones.
Ante el primer síntoma en los ojos durante el uso de la lente de
contacto deben retirarse de inmediato.
Bibliografia
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