PROYECTO DE BIOLOGIA

¿ES EL COVID-19 UN FENOMENO DE INCREDULIDAD DENTRO DE LA

SOCIEDAD HUMANA?

EMILY ÁLVAREZ

CATALINA ARIAS

JOHANI MOSCOSO

SHARID NUÑEZ

INSTITUTO DISTRITAL PARA EL DESARROLLO INTEGRAL NUEVA GRANADA

BIOLOGIA

BARRANQUILLA D.E.

2021
 INTRODUCCIÓN

Sabemos que durante ya 1 año, casi 2, hemos estado pasando por una pandemia a nivel
mundial, la cual nos ha afectado la vida cotidiana, con mayor preponderancia en la parte
social, económica, hasta llegar a una repercusión psicológica, pero para el enfoque que le
daremos a esta investigación hablaremos sobre las vacunas contra este gran fenómeno. No
está de más decir que desde su invención las vacunas salvan millones de vidas cada año,
son un arma que la humanidad tiene frente contra los virus. De manera tal que el desarrollo
de vacunas seguras y eficaces contra la COVID-19 supone un enorme paso adelante en
nuestro esfuerzo mundial para acabar con la pandemia y volver a hacer las cosas que antes
de pandemia podíamos disfrutar junto a las personas que queremos.

Para empezar hay que dejar muy en claro que las vacunas son preparadas por farmacéuticas
mediante la simulación de los agentes infecciosos –virus, bacterias u otros
microorganismos– que pueden causar una enfermedad. Esto “enseña” a nuestro sistema
inmunitario a dar una respuesta rápida y eficaz frente al patógeno. Es decir que al
administrarlas a las personas generan inmunidad activa y duradera, nuestro sistema
producen anticuerpos al detectar ese antígeno que es administrado, por consiguiente pueden
generar una respuesta a la aplicación de la misma como dolor, inflamación en el lugar de
aplicación, enrojecimiento, entre otros síntomas que desaparece con el tiempo como es
sabido con las vacunas del covid-19. En primer lugar es pertinente describir como los
distintos países han hecho frente al virus, que medidas han implementado y si en realidad
son útiles para detener el virus. Hay que resaltar el nivel de aceptación que las vacunan han
tenido en la población, de manera tal que partiendo del análisis global sea posible
identificarlo. En segundo lugar analizaremos el papel que tiene las vacunas sobre el covid-
19, los tipos de vacuna que son aplicados y las alternativas que la población tiene para
acceder a ellas. Con esta investigación se busca generar una reflexión en el lector respecto a
la importancia de vacunarse.
Planteamiento del problema:

Hoy en día, frente a la crisis sanitaria que hemos tenido que enfrentar, la normalidad del
mundo ha cambiado y nuestra forma de actuar debe cambiar con ella. Hace ya varios meses
nos encontrábamos encerrados en nuestros hogares para resguardarnos de un villano que
había surgido, el covid-19. No obstante, como todo ser debíamos adaptarnos a esta
situación y continuar con nuestras vidas como si nada de esto hubiera sucedido. Sin
embargo, muchas personas se tomaron de forma literal lo de avanzar como si este virus no
existiera. Una gran parte de la ciudadanía camina por las calles sin respetar las medidas
necesarias para protegerse a ellos mismo y a los demás de dicha afección. En el presente,
los países de todo el mundo han tomado nuevas medidas para contrarrestar la propagación
de esta enfermedad a través de las vacunas, haciendo todo lo posible para regresar al mundo
a lo que era antes del covid-19, sin embargo ¿cree usted que el todo volverá a ser como
antes? Las autoridades brindan a cada uno de sus habitantes por igual y de forma gratuita
dichas vacunas, pero el colocárselas se ha convertido en una responsabilidad ética y moral
más que en una de carácter obligatorio. Esto se debe a que muchos de los habitantes, en el
contexto colombiano, demuestran poseer muchas supersticiones o creencias entorno a las
vacunas, estos individuos no consideran relevante aplicarse estas defensas contra la
enfermedad y en consecuencia a su descuido, el covid se sigue propagando. Es tan alto el
nivel de resistencia a vacunarse que existen movimientos anti-vacunas, los cuales se
organizan para entablar su oposición abierta a las vacunas en general. Más concretamente,
estos movimientos radican en organizaciones más estructuradas que tienden a creer teorías
de conspiración, difundir información falsa y mezclar sus argumentos con posturas
políticas, promoviendo la desinformación.

Pregunta problema:

¿Se esconde algún tipo de superstición con relación a las vacunas contra el covid-19?

Hipótesis:

Si la población a nivel mundial fuera vacunada totalmente, el virus del covid-19 no sería
una preocupación para la sociedad, debido a que a la efectividad sería del 91%, en general
las personas estarían blindadas contra el virus y la tasa de mortalidad sería menor.
Justificación:

Este proyecto de investigación está enfocado en poder analizar y conocer cuál es el papel
fundamental que tienen las vacunas sobre el COVID-19. Se sabe que hace dos años se
inició un proceso de aislamiento, el cual cambió completamente a la humanidad. Una
enfermedad que arrasó con miles de vidas humanas y que al día de hoy, sigue cobrando
vidas. Actualmente, seguimos en pandemia, sin embargo, algunos países ya no optan por
usar tapabocas pues gran parte de la población se ha vacunado. Aun así, no es la realidad de
todos, ya que existen individuos que consideran que vacunarse no es necesario, por ende,
vemos que ante el descuido de esto se sigue esparciendo la enfermedad. Mediante esta
exhaustiva investigación, buscaremos analizar todas las alternativas existen para vacunarse.
A su vez, concientizar la necesidad que hay sobre que todos estemos vacunados. Además,
sabemos que los índices de infectados han bajado, pero no quiere decir que debamos bajar
la guardia, porque el COVID-19 sigue existiendo. Por ello, se desea difundir sobre este
tema, para dar a conocer a la sociedad la importancia que todos estemos involucrados en el
proceso de vacunación.

Objetivos:

 Objetivo general:

Conocer la relevancia de las vacunas contra el COVID-19 para nuestra humanidad

 Objetivos específicos:
 Analizar las diferentes tipos de vacunas
 Comprobar de qué forma afecta los movimientos anti-vacunas a la comunidad
 Concientizar a las personas acerca de vacunarse
Marco teórico:

Covid-19 y sus orígenes

Para nadie es un secreto que la pandemia ha pasado a formar parte de nuestro léxico
cotidiano. Hasta hace pocos meses, esta palabra era utilizada casi exclusivamente por los
círculos sanitarios y, quizá más específicamente, en los ámbitos de la microbiología, la
virología y la epidemiología. Sin embargo, la aparición en el mes de diciembre del 2019 de
un nuevo virus en la población de Wuhan, en la provincia china de Hubei, encendió las
alarmas y lo que empezó afectando una zona muy localizada pasó a convertirse, primero en
epidemia y poco tiempo después en pandemia. El agente causal era un coronavirus que,
según los primeros indicios, había “saltado” de un mamífero, probablemente un
murciélago, a la especie humana. Reconociendo, además, que este virus tiene un grupo de
características particulares en su filogenia y en su “viaje” por el mundo, que explican, en
buena parte, su comportamiento en poblaciones y en individuos susceptibles ante este
novedoso suceso.

La palabra “virus” fue acuñada en el año 1898 por el investigador Martinus Beijerinck, de
la escuela de Agricultura de Wageningen, al estudiar una enfermedad conocida como
enfermedad del mosaico del tabaco. Dicha enfermedad había sido identificada por Adolf
Meyer en el año 1876. Beijerinck demostró que el agente causal de la mencionada
enfermedad crecía dividiendo células y que recuperaba toda su fuerza cada vez que
infectaba una planta. Dorothy H. Crawford, catedrática de microbiología en la Universidad
de Edimburgo, señala en su libro Virus (Crawford, 2020), que los virus se definieron a
principios del siglo XX como un grupo de microbios infecciosos filtrables y que necesitan
células vivas para su propagación. Sin la presencia de este nuevo coronavirus ARN, cuyas
características se van conociendo cada vez mejor, no hay pandemia. Dado su “parentesco
cercano” con los coronavirus causantes del síndrome respiratorio agudo severo (SARS) y
del síndrome respiratorio del Medio Oriente (MERS) a inicios del siglo, varios
especialistas han planteado que no sería ocioso revisar lo aprendido entonces. Todos los
virus comparten un conjunto de características que los diferencian de la células procariotas
o eucariotas. Son entidades subcelulares o acelulares, parásitos obligados, constituidos por
un ácido nucleico (ADN o ARN) que está protegido por una estructura de naturaleza
proteica denominada cápside, que además a veces puede presentar una envoltura
constituida por una capa lipídica procedente de la célula hospedadora (Benítez, 2018). Casi
todos los virus son demasiado pequeños para ser vistos con un microscopio óptico. En
general, son entre 100 y 500 veces más pequeños que una bacteria, y sus tamaños varían
desde los 20 a los 300 nanómetros de diámetro. Los virus no tienen vida propia, son
parásitos intracelulares obligados y permanecen inertes hasta que infectan una célula viva.
Cuando se produce la infección, el virus se apodera de los orgánulos de la célula y los usa
de acuerdo con sus necesidades. Ello acaba provocando la muerte de la célula invadida, lo
cual nos deja una breve idea de lo que dicho virus produce en el organismo del ser humano,
proliferándose desde un individuo hasta llegar a una mundo entero.

Tipos de vacunas

En la actualidad, tras la carrera por conseguir una cura universal muchos países han
luchado por ser los primeros en obtener y desarrollar una defensa contra el virus que ha
sido mortal para unos e imperceptible para otros, gracias a esto, ha sido posible obtener
varios tipos de vacunas creadas por diferentes países:

 Pfizer-BioNTech: El 31 de diciembre de 2020, la OMS autorizó la inclusión de la

vacuna de Pfizer BioNTech contra el COVID-19 en la lista para uso de emergencia.
La OMS ha evaluado a fondo la calidad, la seguridad y la eficacia de esta vacuna y
ha recomendado su administración a personas mayores de 16 años 95% contra la
infección sintomática por SARS-CoV-2.
 Vacuna moderna: es producida por la farmacéutica estadounidense del mismo
nombre, bajo el método denominado ARN mensajero, el cual se caracteriza por
transportar las instrucciones genéticas del virus al organismo para que las células
produzcan el antígeno o anticuerpo adecuado y así entrenar al sistema inmune para
combatir el virus. Según la Organización Mundial de la Salud, OMS, con base en la
evidencia de los ensayos clínicos, se ha demostrado que la vacuna Moderna tiene
una eficacia aproximada del 94.1 % en la protección contra COVID-19, que
empieza a regir desde los 14 días de la aplicación de la primera dosis.
 Vacuna Johnson & Johnson: SAGE ha evaluado minuciosamente los datos sobre la
calidad, seguridad y eficacia de la vacuna y ha recomendado su uso para personas
 mayores de 18 años. Esta vacuna también ha sido revisada por la Agencia Europea
de Medicamentos (EMA) y la Administración de Drogas y Alimentos de los EE.
UU. (FDA) y se ha encontrado que es segura para su uso. Su eficiencia fue
demostrada 28 días después de la inoculación, donde se encontró que Janssen
Ad26.CoV2.S tenía una eficacia del 85,4% contra la enfermedad grave y del 93,1%
contra la hospitalización. En ensayos clínicos se encontró que una dosis única de
Janssen Ad26.COV2.S tiene una eficacia del 66,9% contra la infección sintomática
moderada y grave por SARS-CoV-2.
 Vacuna Oxford, AstraZeneca: La OMS ha incluido dos versiones de la vacuna,
producidas por AstraZeneca-SKBio, en la República de Corea, y el Serum Institute
of India, para uso de emergencia. Cuando la vacuna se sometió a la consideración
del SAGE, había sido revisada por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).

La EMA ha evaluado exhaustivamente los datos sobre la calidad, seguridad y eficacia de la

vacuna y ha recomendado que se conceda una autorización de comercialización condicional
para las personas de 18 años y más.

Enfoque Bioético:

Para nadie es un secreto que la humanidad no estaba preparada para luchar contra un virus
de esta magnitud, hospitales que sobrepasaban su capacidad hasta un 200%, muertos en las
calles, fosas comunes para enterrar a los infectados, entre otras situaciones generaron la
urgencia de crear una vacunada para poder dar tratamiento a los pacientes y así poder
luchar contra esta pandemia. Por consiguiente muchas farmacéuticas desarrollaron vacunas
en un tiempo record, dándole una respuesta a esto, creando vacunas efectivas en el menor
tiempo posible para salvar la mayor cantidad de vidas, pero esto sin olvidar que el riesgo
que trae consigo los ensayos clínicos experimental en humanos, los cuales ponen en riesgo
la vida de aquellos que participan. Tanto así que es necesario hacer una ponderación entre
el riesgo creado y el beneficio que puede traer, generando un dilema ético. Es necesario que
en todo tipo de investigación en creación de una vacuna con pruebas en humanos sea
segura para aquellas personas que participan. Por otro lado en el contexto de la distribución
de las vacunas muchos países compraron la mayoría de estas aunque sobrepasaran la
cantidad de vacunas a la población, dejando así a muchos países de escasos recursos a
merced del virus. Lo que supone cierto grado de indiferencia. Por ultimo en el tema de las
industrias farmacéuticas las cuales no están obligadas a distribuirlas gratuitamente o liberar
sus patentes para que los países puedan desarrollarla, el examen va en torno a si el dinero es
más importante que la vida de las personas, conviene reflexionar que hubiese pasado si
todos los estados y farmacéuticas se hubieran unido para un fin común.

Para concluir es importante entender y hacer énfasis en que los virus han existido y
seguirán existiendo en sus reservorios naturales. El coronavirus como un claro ejemplo que
ha marcado y trasformado la vida humana, es el séptimo coronavirus que ha infectado a la
humanidad, las variaciones en el comportamiento, actividades humanas diversas, el
consumo de animales salvajes, la venta de animales salvajes vivos y muertos en el mismo
mercado, la urbanización de zonas rurales y el contacto directo con animales (huéspedes
naturales de estos virus), es en parte la causa de estos brotes. Es necesario disminuir e
incluso evitar radicalmente este tipo de actividades realizadas diariamente por las
sociedades (el hombre), creer en un virus que sigue viviendo entre nosotros, es tener
conciencia de la veracidad de una pandemia que cambio la mentalidad y cotidianidad de las
personas sobre todo de aquellas futuras generaciones que aún esperan un mundo asentado
en la verdad y empatía.