Está en la página 1de 52
Profesores y profesién docente Entre el «ser» y el «estar» Miguel A. Zabalza Beraza M? Ainoha Zabalza Cerdeirifia NARCEA, S. A. DE EDICIONES MADRID ao st 6 unpipe op 4 ee 9 seuosied 48s e veyesua anb seuosiad :se1osasaid £ S2108@j0ld 29 jeuosad ey61oue ap syusny owas owsisiveU 13 19 a1ua20p jap jouoisayoud exaie> &7 65 jeuotsay 01d £ jevosied upprejsnesu) 8 ugrsoesspes 9p 503/20N 25 epIA ap Sopp S07 By euasua anb euosied 7 Seuosiad ow seiosayoid A sasosajoud soy Z Old0DsOaIgTV2 13 N3 OAVYOSI4ONd 73 “It O enwapere ef epia ey anue eWrapp [3 2 aiains ‘owa2 ouwinye 2 :Je:205 of f jesmeu of anua ewer [3 ‘@que20p uo|20e e] ap soDiseq seWeNIP SoUNIY 1 ugpanponuy OlgWv> Na OGNNW NN N3 VIDNED0G W111 NoID2NGOMLNE eianfay zeujveyy anbuug “epIA Ju Ua s0.9s9eW :OD019Ud So1puy so se 9 ids. pe ara) sd (Pupeyy) ssueumy Q6sz APT susduy eds ut pasag "wyedeg uo sesso, oc eco sy 14 ee oneodaa SOORLce-Fe 808 NEST se'seuoprpoesorer mma, -evedeg-PHPEWoe0se 6 HO 4 orgmy ooHDpEE a PAY 7102 ‘SANODIGE Jd “W's ‘VEDEVN @ “oqunuuoy “enueyy 950F “que ‘Sim ‘sepunoy ‘mypueW 6 indice: 3. Los profesores y profesoras como profesionales o7 a ensefianza como profesién ambivalente 70 La ensefianza como espacio de intervencién profesio- nal, éarte 0 ciencia? 74 La enseflanza como profesién especializada 80 La ensefianza como tarea compleja 85 El conocimiento profesional 93 La formacién de profesores 97 Los estudiantes como referente dela accién docente 109, La deontologia profesional 115 4 Los profesores y profesoras como trabajadores 125 El magisterio: de la mistica al contrato 126 Relaciones interpersonales y clima labora! 129 Satisfaccion y motivacién en el trabajo. 136 r 5 2Existen los buenos profesores? {Como son? LDénde estan? 143 Compromiso consigo mismo y con el propio desarrollo personal 144 Compromiso con los conocimientos 147 Compromiso con [a cultura profesional 148 Compromiso con los estudiantes: tacto pedagégico 149, Compromiso con los colegas: trabajo en equipo 150 ‘Compromiso con la comunidad: compromiso social 154 ll. LOS BUENOS PROFESORES Y PROFESORAS Bibliografia 159 (© rareaa $2 de eiones Prélogo Maestros en mi vida La tarea de un maestro es mucho mas que una profesi6n, es una nas, maestras y maestros que ble, rayano en la perfeccién. Vayan estas lineas como homenaje a algunos de entre ellos. Empezaré icémo no! mencionando a mi madre, quien no solo sinc también con sus alumnos empleaba tal mezcla dulzura y persuasion, pero también de en ¢ por el solo hecho de relacionarte con ella t rdura y le c sociales y encaminé mis primeros pasos. tuto Social Leén Xill de Madrid, en donde trabajé muy momento, afos 50, adn en llagas la guerra tal asunto provocaba suspicacias no exen i n todo lo que hacia interior Y es que ser ida propia y ajena, sus- niversidad encontré en Santiago de Composte- jo 0 arquetipo. Maestro en el cavilar. Estaba ‘Pepije2 sovew 0 Jofew ap ayinseu ofegest ns anb 8 evopipuad £ uppuny ns ap ojfoxiesap [2 UB etep exsueU ‘un ap vednyuy soadse sain $07 sopeleqen ‘waa sa anb oy £ Jeuorsajaid owsoo sa anb 0} ‘euosiad owo> se ‘anb of :s0sajoid opo2 ap so2iseg salad $223 50] 4e2e159 equuiad sou anb oad eypuas ugmewrxoude eun 4Jod operdo soway saxiosou ‘sa}ua20p oj ap enby e7 eproge ap Seuuos seyanui set ap oxquag sIsejup & sepep eves sequnsip vod ‘Sequniyp sauosia sowa:puat api/3n 3s anb e] up6as ‘o;doasopjayea Un ua owad « seavadsiad saydiynus ‘3psep opezyjeue Jas apand sesosasoud A sar0sajold SO} ‘9p /2 ‘ieuorsayaud o”/139}09 a0 4ajnbyend OWO> OldODSOIaTV) 13 NA oavuosasoud 14 ul Capitulo 2 Los profesores y profesoras como personas Quizas sea éste el aspecto por el que debemos comenzar nuestras blar del profesorado. Sin una exagerada hipocon- ‘somes ni ms ni menos que cualquier otro grupo: ppero sin dejar de resaltar la importancia de esta ddimensién por los: especiales efectos que tiene sobre nuestro trabajo. “Los profesores ensefian tanto por lo que saben como por lo que jimensisn pers io profesional. Lo que uno mismo fen los estudiantes se deriva precisamente de lo que somos como personas, de nuestra forma de presentarnos, de nues- tras modalidades de relacién con ellos, Esta preponderancia del personaje sobre la persona se hace més nos vamos elevando en el sistema educativo. personal del profesorado. O tienen que ver con la persor preocuparse en exceso por idiantes. Sonarfa a pa Pero en el pecada tenemos la penitencia, Hace unes afios, siendo director del ICE de la Universidad de Santiago, sella preguntar a los estudiantes que accedian al CAP (© marca 5.2 deedcones sauce op 2 se ‘sopsercas Ssns ap se/seJos@joud souang sosa ap serpsyaneles seunbje Je] dud €| 23905 JaKJOA ase nS 501006 UorOny “Sa1e12EI8> OF L vergieuss enb ang ‘anb ered 4 ‘soie peisn6 uerqey 53) -asajord sop $0} 9p aiquiou jo ueze soupad s27 “owDs9 Jod sowei9D) ‘0po1 anb exed ‘anb e soweyAut 29 EDADED BUN ese UODeIAU! BI<9 e eINbas anb uByUue S209A 9p epuaLiada soWwe}US} ek OWICD “sejanosa se] ua sopesed soue soysnus ek soj 2p (0612 0| e sesosayoid sns opis uesgey sauainb ap ueluay sopuances ‘ap ode, anb sages ‘5 Ua so1osajoud Ueya: -iiais eyanbe ap. owes ‘eu2e2 Uoper sainbjend sopesqui sezs2uo souygap and ofeqen j9 sod uot Jon joyip e13 “ossn> ap exp seusud janbe ‘vai “odusan ap eprpigd eun uesedaud ay exeinbis tu anb ‘se 58509 © Oue ‘osin un eye} apey ou anb Uesuatd 50) -epade sns 0 exae> ns uo 1an anb uauan 020d ‘sojj@ untes @ ueboy A esauewiaigos ‘soya 48 Uafens OWOD ‘ep Set jossyosd & sasosayaid e sauoprsodo se} e asuewues ‘anb ossn9 un s29ey anb 1943} ap eDua6Do 2 eqeaiege anb odnué un e ase sep Ope>0} JOpeIMA senanu Se] Bp ugDewe|dust je> seaysonu anb US euuoy Inbpe emueyoduul seu ‘Sou! -2leqen anb se] uo seuosied sese uos sajqeisuynia spu O:UEND A -seiosayoud 0 sasosajoid owoo senssanu se} { sequerpmise owon seAns sej ‘soquie ap sajeuosiad se2nysyaizeNe2 sej 10d opeipau: osavoid un ap erent ag “saqUeIpMyss SOAASENY UCD odiono e odieno, ap opspuale un se ezueyesua ¢7 “seuosiad $2.90 boo ofeqen onsenu saziafe ap sowsy sauainb e jerpedss exuew ing ap ein e e| © e10120p ef apsop sejeuojsajoid S0} Sopo) anb sejeyas espod exeinbjent “exiode o20d anb pepoingo tun sasoued apand seuosiad sowios sequa2op soj anb ua JRsisuy ne un 2anpuoD uainb o eat Ie epijod [p apsop ‘seuosiad ‘viVaSNa and VNOSUad V1 uaI9 K jeuosied oyuaiwinants JNA saDe4 Kan SoWeD ‘sepia sns exed ‘pepisionun GF sbuacied cues sesoaeyoud A savossjoid Soy ‘wunbop uoirejaud A seoseold BF 50 _Profesores y profesion docente Cuando acabamos con los buenos, comenzamos con los malos recuerdes. También los hay, ciertamente, y también han dejado su hhuella en nosotros. Les pedimos otros dos nombres, igualmente, bese algunos ceton que no een capaces dracon dos nombres pero s.uno: oes, en cambio, dian ue eran legién. Nuestra generose y trata de diluirlos malos recuerdos para que dajen de perturbar. Uno 0 varios, pero también fueron anotando fen sus hojas de memorias aquelics profesores que menos les gus- ‘aron y, como habian hecho con los mejores, les fueron atribuyen- do aquellos rasgos o formas de actuar que les caracterizaban. Uegados a ese punto comenzé nuestro trabajo de anélisis: {qué es importante en un profesor?, 2qué es lo que le hace mere- cedor de un recuerdo positive o de un recuerdo negativo en la mente de quienes han sido sus estudiantes? No se trataba de ‘acudir a un elenco teérico de lades docentes, sino de cons- ismos. respuesta (y llevarios a nues- les pedimos que diferenciaran sus ano- taciones en tres categorias: + Las que se referian a aspectos personales de los profesores/as recordados. « Las que afectaban a aspectos relacionados con su dominio de fa materia que ensefiaban, + Las que hacian alusion a las condiciones didcticas de su tra- bajo (que explicaba bien, que evaluaba bien, que organiza- ba buenas actividades, etc.) 5 resultado fue (siempre wy esclarecedor. Los aspectos sefialados se recogen en la siguiente tabla: ‘Asrecos | Conoomamos | Hasupanes PERSONAE sora | polcncas | TOM ‘Buenos, 4a 1 Fy aa profesores | (52.38%) | (12.09%) | (24.52%) | (100%) ‘alos 40 3 28 proferores | 57.97%) | (7.28%) 247%) | (100%) ‘abla 1: Aspectos recordados en mejores y peores profesores Como puede constatarse, los cen algiin comentario, ¥ Destacan menciones que tienen que ver con las caracteristi- les de los profesores recordados, Se menciona- fidades humans que definian tanto los recuer- dos son jugosos y mere- © nares 5.2 do acionet Los profesores y profesoras come personas $1 dos positives como los negatives de sus profesore: ‘ocupaba, nos tratabi ba disponible para resolver contrarios.. ¥ En segunda posicién aparecen, las cualidades didécticas de eran muy interesantes, era exigent Icho..". La posesién de esas habilidades o ia carencia de era habian ido gestando la idea de que para ‘basta con saber mucho de lo que tienes que ense- hemos contado aqui Parece claro que los componentes t ‘que los docentes hemos de prestar especial aten- én no sélo a lo que sabemos sino a somos y a la forma en que vivimos nuestra profesién (es caracteristicas personales afectan profesional). Nos parece importante empezar por este necesario redi namiento de qué significa ser profesor o istido a increfbles movimiento: publicado reflexiones y ens icacién. Todo para plantear © narcea 2 do eons ae ssuoppaap see avey anb 0] s2 and? {sai0sajoid oulo> soue so] opuesed UeA ‘an epipaus © SeUDeysnes soUaLH O SPU UIs seuOsiad SET? © joBanf ua uenue eriG9Sepad 12 -uajedoa ns ap soxadse anb? “ontewuye ose? U3 (50U oo saquareduio> sews uanjona as seuosied eyayeus ef 2 27102610 2] rns ap saquaiajip sopuoWOW Ua A e| -2Jo1d owio> sewsiu! is ap seuosiad se] UUaA UabeUL! 9NO? + ‘ope20} eXey saj anb 02 -ugisty opouiad ja uo> opsanae ap sayUa!apIp SOpIsJODe UsIsPe ‘oueRUOD [8 10d ‘o UesZeUayIed anb e} © uODeJeUaB e| e—s [pr ‘oda-sowwaru ‘sedeys seuisius se] 10d Ipu_un anb pepian $37 sowresed anb pepio s3? © :epla e] 2p 0612] o| & upoNIOAS wyS9 B1GOs so} un avey as (S€:Z664) ueWueqnH Je era11e9 e ua sopes6 so “paquore sOUISiL so| ‘siSuD seu ed saiosajoud ap aquenodus cezueyasua ej Ua soipeyse 0 sasey -sayqysod nb arpeu anb sesep se] ap asre6eov9 ‘opuaigap "234 | © "D2 'SeD0q Se] Bp eDUEbNR sod o1BfuemN fe Op “UeySuEW ‘22YA wnrojuN ns 1es01Bue anb j@ uoD faded un JoUEsgo 10> ‘@ayYo 95 OsIND CEN e un :Seaze3 9p PepIUyU! UD 2} A soleseq ‘souuazul ap soupes0U96 SeAanL se] © J8A [> ELEPIIOS eR -snBue eve eun aonpoud ‘eueysianlun eDUSDOP e| ap OSED [9 UF -asep ensenu ap sequarsajope soj ap soyesep so A pryainbut e| seuodes exed IN “Sour Z il e| & Jepuodsa1 ap ugrasadsip Ua se1S9 e4ed IN “OS "ey opuend anb gg auay oun opuend sove y ap SOUL }B9je K pranuod UoD sepuare OWS o| 59 ON “of “egeny onsonu sowrejossesap K sowieseaus anb ud exo} e| @ ajUeA aja) esauew ap sey 9,2 Ours uapand ou anb sejjea son1d ap exsond SOnN “OpUEDYIPOW! UeA 3s soYanbed soUlL 5922 Ue} ‘eyEuaUe A pepifedn ap seiusny $1 Ua "uequa anb s3jepos A sarenwey ‘sajeu0s SUODUN, SUIO-ap /P-YOD asIeUIqUIOD aqep (ssUoIsajoud Seo 7 soussiad owes seosyoud Kemosajaad soy ‘puopppe op e's aE ‘ap j2 ow3) eDuarp @| ap o1piauafe [a “@sopugseye Lea sapepoede> ‘52] wi02 seuops|sodsip se] cxLei sajend sej ua sedeja sod opuesed A jeuosiod 2nsenu ‘OpUBUODNIONS soUWleA seuosiad SET -ueaquejd seuorimnsu se] anb seunns sei e asopupadepe ‘soto a “2[q1s0d sofew oj ope2ey 20d sopednsoaid sose> sounbje ug “soue ‘queinp UpsInBes jse 4 “ofode ose2se 3210 saj quad O4INU BGK 59] anb ewsysis Un Ud UegUe seyeiadns ueséo] anb sopeunyose ‘20d S07 'sauo/tsodo se} ap ughesedaid ap soye souer auodns an | Yofeus Zan epeD so sojqiuodsip sezerd A sonepipuea anus jepues -2yp [3 “ausious eynsa: oes uapuaraid sauainb axqos & opeiosajoud P aigos uoisaid 7 ‘sejeuesied owo> sexuigpere cue sauo|soid Seypnu uedjo6e 2s soja ua sand sajDunp Seu! so} Uos soue soxeusd 50} :SOp0} © outs savainul sei 2 oj9s Ou epee anb peyinayip euN 53 ‘vag “Jeuosiad e} f exjwiapere epia e| zey!DU09 eved ‘ofeqen ap soue sosatutud so] ud opr va6 as anb peymoylp P| Jod & jeu -o1sayord osaiBoud |= ‘opeyeses uey soue S01 L ‘ueuLegr ~ouRsop jp ua ayuensyai o1sadse un uakrAsuo> epiaap sof ValA 30 SO1DD S01 aquanep oun n| tuosojoud < Ruoued vopoesnen 2 wammses sep sowed [epedse ns sod sues aied sou anb sajeuosied seansysizele> se] ap onuag sepepyeu -ossed seyiadsap ongalgo ues6 [9 52 253 -, s9pepyeuosiad seviedsep (Ogu JeiDuassa 0, “(P@61) SepUIeGEW eqe|euas CLIC “2p J=2eY, ‘269 enb [euosiad osituosdwod un 53 “3A 3359 & ora ep anb 4e}59 j9 £325 | yjunisip e7 “onneonpa ofegen je sewuowe ap sevuavey Anu SeWo} UBis%@ anb sapusidusod jD9} exynseu ‘ose seMbjend Uy “awuarp uoisayoud e| s021019 Japod exed sozi696eped soy -ualuipous> ap pepisarau e] uapuaijep seuainb ap edino sod so of A pepije> ejnu 2p:s> pepyenize:e}.uo aovy as-anb ezueyasua:eyenb: cacep ped mone TE 54 Profesores y profesién docente que podamos decir de algunos de ellos que han sino nuestros “mejores afios" como docentes? éSi tuviésemos la posibilidad de elegir de nuevo una profesion, seguiriamos optando por la docencia? «era ciérto que hay, como pretende el folklore, momentos de tedio, de crisis, de desgaste que afectan a una parte importan- te del colectivo docente? Y de ser asi, Zqué es lo que provoca ‘que aparezcan esos momentos y cmo suele hacérseles frente? «Es verdad, como sugiete la sociologta, que las personas aca- ban acomodandose cada vez més a la institucién en que traba- jan y eso hace que se vuelvan més prudentes, mas conservado- ras, mas “fatalistas”? « éCuales son los acontecimientos de la vida privada que més repercuten en el trabajo escolar y con qué efectos? * UEn qué se distingue el proceso seguido en su carrera por aquellos profesores que liegan, al final de la misma, cargados de sufrimiento del de aquellos que lo hacen con serenidad? LA partir de qué momento comienzan los profesores y profesoras a percibir que se acerca el final de su carrera docente? ‘Como puede comprobarse son preguntas con mucha enjundia Probablemente, no difieren mucho de las que podrian hacerse otros profesionales en relacién a su evolucién en carreras diferentes. En ‘todo caso, permiten constatar cémo las dimensiones humanas de nuestro desarrollo y evolucién constituyen componentes constantes. y marcos de referencia inevitables de nuestro desempeno profesio- ral. Somos y estamos (también como profesionales) de forma con- tingente a como y lo que vivimos. Es decir, la ensefianza como profesién camina, indefectiblemen- te, al unisono de cémo lo hace la vida. Vide y profesién no funcio- fades que avanzan en paralelo sino como dos inversién (fisica y emocional) que se van com- plementando e interfidendo. Ser docente, tratar de hacerlo bien (sobre todo en los primeros afios) exigiria una dedicacién absoluta. Pero todo ello, que ya pare- ‘esté la vida ‘compaginar ambas. Elos y ellas estén , de consolidar sus relaciones, de tener hi lo desean, de disfrutar de esos primeros afios de la vida prot que ya nunca se repetirén. Pero en lugar de eso se encuentran con tuna presién institucional y una competencia para consolidarse tan (@raran, 5.2 de dienes Los profesores y profesoras como personas _55 fuertes que todo se pone demasiado cuesta arriba. Los primeros afios son duros. Ltiego, a medida que se va avanzando en los ciclos de vida, las presicnes se mantienen pero con menor intensidad y capacidad de impacto, y condicionando menos el propio desarrollo, personal. Ciclos basicos en la carrera docente Los estudiosos de la carrera profesional de los docentes han iden- tificado varias feses por las que pasamos a lo largo de nuestra carre- ra. Partiendo de las preguntas que antes recogiamos, el propio Huberman (1992) establece 5 ciclos basicos en la carrera docente. 1y 2. Fases de exploracién y estabilizacién ad); una segunda fase de estat jo de la carrera profesional. En la primera de jor movilidad y resulta una especie de tanteo por funciones dentro de la profesién. En la fase de exploracion reses y las condiciones de trabajo se van ajustando y centréndose ‘en aspectos mas concretos y/o especializados. El espacio que cada depende mucho del nivel educativo y de las pro- y sindicales en que se desarrollen. Algunas personas se estabilizan pronto, otras tardan mucho més en conse uirlo, Tampoco es un proceso lineal y, en algunos casos, los vaive- res son constantes y sutridos, En cualquier caso, la estabilizacion en la carrera es un progres eto en la configuracién de la identidad profesional momento al ‘que contribuyen tanto aspectos psicologicos (el compromiso perso- rial con un trabajo y una forma de ejercerlo) como administrativos (el contrato ofic estabili- zacién comporta la incorporacién a un cuerpo de funcionarios y a 3, Fase de especializacién Ala fase de es cién y mejora de las profesores funcionarios, suele aludir, también, a una etapa de libe- rraci6n y afirmacién en el trabajo. Bastantes profesores sefialan esta cin suele suceder la fase de especializa- ipetencias profesionales. En el caso de los © ravcen 2.2 de edones | | eeee smuoape gp e's renee g -e8 9p so|9So us asiouayueW e2ENg as feND B] UB CIUaIIWEDLERS® Bp 2} e| (ugDeZIURTA ep ‘OUNes,UO> j@ 4od 0) o1queD ep sosaDoid 1e1> fapand 3s ‘pepuunBas esa apsap ‘ so2iseq sauoiied so} opueu p UA as eK anb ej UB OW'S/eUO!sajoud JOP ase} e| ‘BUSUUOUD “504 "2UISIUI 8 ap SeoIseq seUa|WeLJaY Se| ap [e1aUe6 OWUIWOP UN Auorsejoud e| ap serdoid seunns se] ue upDezyeuuou eye eun au sods anb ezause> ej ua uppezyiqeise ap asey e| “e6n| opunGias us ‘aszequa1jus ap ey oun anb sej Uso sopepunéasul a seunbe} seyeny se] Jesadns K omyo jap seaiseq se|6ai se| sapuaide ‘ugpenys e| & asieydepe sod seaiseq ssuopednaoaid uod esause> exisonu ap soue Soseuid so atzopa1 anb & jeuoisajoud epia e} Ua Up!ZONpUT ap ase} "Zan ns e ‘aquosep (g661) 2s ZepupUsEY JOINe [3 -{ugpessjezesap ap ases “feuossayoud asey epunbas ‘ugIoe oH 001 ap ase} ‘[euoysajoid asey exaullid ‘oqWaIWPaND ap ase} ‘jesquin 2se} ‘uo'ssjoud | ud epeaud ej e einaid 3503) Umop BujuUns Jo aseyd pue aseud jeuossajaid puones ‘uoneruayoad $0 aseyd “aseyd jeuoisajoid isiy ‘aseyd Buimaib ‘aseyd pjoysauia ‘aseyd euoissajoidaid :awuanop ojouesep [9 us sedevs sopuess { eawueld anb (6961) AUOA so ohIquie 31s9 Ua opDoUdD UaIg ayUB:9}21 UN (esa1189 e| ap epires ‘owanusefejas £ uop@uc> -sep ep asey ‘pepiiqeise ap opouiad ‘ev01189 e| ua UOIDENSMY ap OP ~oulad ‘oquatuidasd & owsseismus ap 2: jayaduioo ap ugpan UO) 1x9 19/eD ‘uonensny 49212) ‘Bum “016 pue sasesnyiue ssedeve g ueqeaiue}d (€96 |) Uasua;siyD { Jojssaq ‘yng ojduIalS Jod “Sopezneui sew sopadse ua Jenus uapuareid souoirer4}se/2 se1S9 ap seunBjy “Senseons sasey ap sgneit @ ugysai60ud 2359 OpeU -ofpuaui uey anb seysi}epedsa soj sousnuw opis Uey “PepyieD! U3 ‘sejjoutesap e203 sa} anb syu320p of -eqen ap seuomipuos se] @ ueysnie as sarosajoud sonanu So} ‘Soye § 50] ap smued & ue yut ap oqund jo LDe1qUISO sosoIpMase saIUES seq anb UB O}NaWOU! fe 53 259 ‘SOVE 9G [ep anued e ‘zasnpew ap edeyo e| “ea sean & (oue of [2 A o@ [9 |UD) U|DEdepe A aisnfe ap souaysod edera eun ‘seus obe sezinb A oye sewiid \@ sedno0 apand ‘anb epuagaladns ap exawiud eun sede sapues6 ¢ araigeisa "sawua20p 50] 2p upDNJONS e} 2gos SoIPNIse SOSIENP @p UOISIAGL 2] sen (2861) Uaping eajueld epoared ajueseq UOPIsod eun Jesnyino oyouesap jap souqwuie $0.30 ‘Jepos epin sokeu! un e ‘ugIsajoud e} ap ein} SASSISIUT SOO e ‘oustus js & epuaysuea exed ezueuasue 22 (aseinbas a}uaDop pepin | | | i seucoip ap 5 wea -ppe ej anb o2ianyso jap A) ajqquods opuelsp en as “,uoisranusep,, -npoid en as ajuaurenisaiGoxd sewpnu se| e ‘opesed je ua oGajdsap nb ej6saua uel6 e} e) op -esed Je o1>adsa! U0> ei6eysou ap anbor owaID un UOD ofeqes [AP onnaaje owuaiwenuersip ap A (sosajord un epep ‘euvey ap ope}se tun) pepluaras ap opeyse Un ua Opuenus ea as ‘@USWIeIU) ‘A aus e| ap syed se21pap ap pepluies ap ases 's “opeiadsa 0] ap soan|sod souaur sopevinsai opuatuasgo uea seper -219 seaneyrecho sns e:susnoa1j uo) ‘se}|9 ap SIUSIDSUOD 59 A SoUO!D ~>Ipesiuoo seus opuanus en opesosajaud ja anb epipaus e zasnpew 2puop 4 sense apuop 2 01d souang 50] K ont 95109 opo3 anb ej us e20d eun s3“3} -uarop epeo ap ofegen ap ojnse Jejnonied j@ & sesopeziauaGowoy Aseanie:2oing sepuewiap sej 21142 so}2143u09 50] SaquaNI94y Uos ose Jog “ewarsis Jap ug!pewu0jsueR e| & 22eY aIUB20P epeD anb UO!D ~eviode sejnanied e| ‘sped eno 40d ‘aAnyysuo9 UODEDWISIaNP e53 “na ‘seanpadsied seasnu e asilige ‘sen6que se} opueUya! UDI $0} uo9 Ja anb oupnus auen anb uoDeaysianp ap ‘3s@) eun eppey ess1Gaud esaise> e| “uewaqnH ap ewanbsa fs Ug UpPeDyISIAIp ep eased “y “sous so} ‘epnp UIs ‘uos oved evofaus ap onnatgo Jain ~jeno uewopuege ‘ofegen ja ua pepiugersa ns ep sej anb pepunbas 2] ua sopeyuo> ‘anb Aey soy uaiquie souo|sua) UIs Oued seDe4anb 1s setofoui ap sauoipuco ua Urisa 'SoLe|niuisip 0 sopapuODsS anb aap 219 ‘sewaiqoid spur ueaueyd sei anb soizedse luo anbune sayuayeduioa usyuais as seuosiad se “a7ey as anb o} Uva ezueyuo> f peyaqy| s0few eun obisue> aen ofeqen ap orsend va soinBasck unig esiques ja :esaue9 ns ap 1olew! ef ouio> edeie Tg. Soistad ouies seiommjond A smsosajoud 7 Tauenop upissyaud KemomIe 9S 58_Profesores y profesién docente bajo mas conocidos y de eficacia constatada buscando espacios diferentes a la docencia para completar otros intereses y, al final, la fase de la jubilaci6n en la que la sensacién de estar cerrando eta- pas acaba predominando. Desde una perspectiva mas psicolégica, Kugel (1993) explica la evolucién de los docentes en torno a cémo vive éV/ella la fun docente que desempefia, Durante la primera fase, el foco de refe- rencia central es “uno mismo” y el objetivo es sobrevivir. En la fase segunda, los profesores tendemos a centrarnos en los contenidos de las disciplinas que enseftamos y el objetivo es ser capaces de ‘cubrirlos todos y llegar hasta el final. En la tercera etapa es cuando cl estudiante se convierte en el eje central de nuestra actuacién, pri- mero como una figura receptiva de nuestra ensefianza (nos preo- ‘cupamas por ser buenos explicadores para éllla), después como sujeto activo del aprendizaje (nos esforzamos en crear situaciones atractivas de aprendizs 3}, cuando estamos alcanzan- do nuestra plenitud como docentes, aceptindolo como aprendiz auténomo y competente que sabe lo que quiere aprender. Todas esas fases resultan momentos genéricos que, como ya hemos sefialado se-ven muy condicionados por la otra cara de la imensién personal-familiar. Por eso, el paso por las it fa a cabo de diferente manera ‘establecer patrones 0 indo como eje de ani it bestima las variables de tipo ‘ada circunstancia social y/o institucio- personal de encarar la vida y la pro- fesién por parte de fos individues acaba introduciendo variaciones en la forma en cémo los docentes van progresando en sus carreras. Fessler (1995) insiste mucho en la importancia del ambiente. de apoyo altera completamente el ritmo del progre- mientras un ambiente muy presionante puede afectarlo negativamente. Los ciclos son, por tanto, flexibles y ding- micos. De lo que no cabe duda es de que las similitudes son mayo- res cuando se analiza el progreso en la carrera en sus grandes tra- 20s y van siendo mas diversificados cuando se entra a considerar sus matices y rasgos particulares. En definitiva, el desarrollo profesional se inscribe en un doble marco que lo condiciona. Por un lado, queda enmarcado en el pro- 50 profesi (© rarene 5.2 de edie Los profesores y profesoras como personas _59 ‘yecto dé vida’ personal que cada uno de nosotros vamos teliendo ten base a las expectativas y oportunidades que nos permiten gene- rar nuestras particulares circunstancias; por otro, en las fases de progreso que la carrera profesional tenga establecidas y reguladas. ‘Ambos marcos de referencia pueden complementarse © contrapo- nerse. Los discursos feministas insisten en que los ciclos de vida profe- sional (como conjuncién de ambos tipos de factores, el personal y la carrera) estan claramente afectados por cuestiones de género. De hecho, se ha comprobado que la maternidad y el culdado de los hijos es un factor con clara incidencia en el desarrollo profesional: la discontinuidad es mayor en mujeres casadas con hijos. Por otra parte, queda claro que los avances reales en la profesionalidad poseen tres caracteristicas comunes: > Suponen un crecimiento en racionalidad y en un mejor control de las acciones que configuran el quehacer profesional. > Se trata de un progreso integrado en el que confluyen ganan- cias en conocimientos, en sentimientos y en competencias profesionales. > Incluyen asurnir tanto la funcién técnica de las tareas a des- empefiar como la dimensién ética que configura la profesion docente. Si esos tres componentes del desarrollo profesional no avanzan juntos puede que vayamos adquiriendo mas "tablas", que apren- jor las situaciones 0 a manejar mejor los entre- sijos de stitucional a la que pertenecemnos, pero nuestro desarrollo profesicnal auténtico se habra estancado. NUCLEOS DE SATISFACCION E INSATISFACCION PERSONAL Y PROFESIONAL Un segundo aspecto de esta dimensién personal de la figura de! docente reside en su satisfacci6n personal y profesional. Aunque fernacional menciona la existencia de una alta tasa rofesion, no se suele oir decir a nadie que tra- bajar como profesor/a constituya un mal trabajo, ni que esté mal pagado (salvo esos contratos que han aparecido estos lafios de pocas horas y sueldos miserables si alguien ha de vi ‘ellos). Y sin embargo, tampoco, es mucha la gente que confiese que se encuentra satisfecha. Mcinnis (2000) sefiala que en poco més de cinco afios (de finales det 1993 al 1999) el nivel de satis- (© arcea 2.3 de adicones suonipe op es aU @ ‘sojeuy sosep sns uo ej6je}s0u e] © eDuepue? e| 0 ‘osa20/d jap peNU @ OWUOWED s2}2 O/k uopepowore P| euo|sajo1d inoUING ap sOGSels So} "epIA ef ap obey 0} @ uDewio} uu B| 0WOD sosar0sd JeUOs vnpe 2p osepoud un ap asievedas apand ou 230820 e12i1e9 -uopaeyspes & ewpsaoine edoid e} ua osaiBo1d owoD + “epin ap sauopppuaD se ua 0: Luo@Uny e) ap Ovaduasap ja Us 0: yuaweoypadse epe|nouin ese1e> 1p sOWe|qeYy opueNd sawUaHsEn ‘3p Bye as souaw opuend ‘o) feuossajoid €1118 ap eap! 2] opeiquzeo ey eiouew eunsje aq “euossed OUWN09 314320 [ap LOD -Piapisuod ej Ua soperign uaiq ugise ordaaucd ayso aAsNu as an’ oj Ua sonaupsed so] anb sowepuayue clad sopeyede sono UB ugusano e1se e sowasanyon ‘ouDey aq YOpeleqen OUIO? B1UE20p Je ‘ai3ig94 98 ano ej ud ‘osnpput “oO Jeuo|sejo1d ulo> a]Ua290p Jap OPEL “rede [e Ua opens soweypod jeuorsasoud exause e| ap EWES [3 AUN3D0d 13d TYNOIS3IOUd VUIUYVD V1 jesapisuonsap apend uoiseyoid eunbuu anb oradse bend ua ‘olaq “epesad aDey sou 2s K opezio} obje joyx9 eDuoB0 seinbjeno jse K eueb e| ep sou anb myso2e fous Anus sowesa anbiod 'soun6je Ue2Ip -e1osdjoid [p a1qos opuacuale suaIA as ayusWEURIN ‘epoi ap sgzinb oxnuy ‘oppovowe ap uonejal foun e19U6 oj ‘opol ssuo;2esnes sousW UeNJep 25 UO!DezITeal eAND ap o SaLaNy ‘SOUaU! SOLURUAS SoU sajenD se] UB Seno sejjanbe ueZIWIUILN as K UD -2ejsqes jeppadse usonpoud sou anb seso> seyjanbe uereisep A uez =raryai ag “ugpenqze exisenu aigos sepepuotd ap azpadse eun sow ab3|qeis9 Sesopeonps soy “esauew €353 9p Laiqiuer ‘engIUap UZ seu0ojpe ap seo > “aquavop 2121129 Bj apa1jo anb ugowod ap sepepncsod sesease et ‘uppensnis op esne> So uaauseL (of rns uspasauisep anb seo) id 2p so} fue ap sgnen e epessidxa) ope Se] 8 219421 25 Uo!DesOGeIOD ap Erle} es> OPUEND aWU “an9sa b| epeaiqn gis® apuop pepluniIod e| ap azied sod ofode A ot anb 1 ‘SBqURIPNISD SO} 2 -sfesu] ap esne> oWwo> ayvewepessyos JaDasede Uajens 'soutu so} uo> Jeys0 <2 anb jequawepuny spiaiul ns ap uefofe sol an sepepia -aoe ap een as anb ‘sewope ‘usquats “eIp fe 4e1s9 UanbisueD e>uNU Uuanbipop saj anb oueip ozierysa oysnu sod anb uugisoud ausany eun ussiala uonse6 'SeuoIseWwe: jdw0> :uaBpe so} as ar 3X8 Sel BP ‘OPO 21qOS “Ua \dpap aquabe owio> K soy>n2Sut WO? 109 OwioD senize ‘onesedo 0 Ue 'e “Dia ‘yers9;eqUt 2 feuosiad oyjouesep ns ‘sepuewap sns e sepuodsal ap Je182 ‘sojpo UO? SsuD ‘woo 22353 euotsejosd pepausp! agep £9] anb 0} 219 053 *, sour [B Us souopessnes se] Uegequed sopeynsuo2 sososajold 507 “ol Feqest ns ap sjul eqeisnsip { eqersn6 sa gnb ‘ezueyasue e| UEWIA ‘uiga 2p upssenoe} sesosojoud sounbie © gawd (6g6t) noy>ueIA “Oud pp leuosyoud oyaduacop fp Uenseu anb UppDesseSU! 9 UOD DeJSTIES ap Sauany se| opepede oye Ua JeJepISUOD Sd SUCSSIOIUY -ajqesapisuos 59289 un ap onjow 19 ofeqen ns anb eypeve ses un anb apeue 36bS:18 HL9 P 9AED OUEHEASNE OpesOsayoid jap {esoUsE.UP!IIeS 7p fouotind owes seiossjaad K eaiorajoad Soy ‘aRDOp UpHRjaNd ASSOC OF 62_Profesores y profesion docente, or eso €s importante la presericia de oportunidades de réafize- cién personal, la posibilidad de disfrutar de motivos de éxito y satis- faccidn, la parti sién en redes de apoyo que permitan superar la soledad y los momentos de crisis. La vida profesional, en te deberia permitir pensar en un proyecto de vida a cor largo plazo. Cémo cada uno de nosotros resuelve esa posi a depender de las expectativas que sea capaz de auto-atribuirse y de {a linea central de desarrollo personal que sea capaz de estable- cer. No todos aciertan en el disefio de su propio crecimiento profe- sional y tampoco depende de uno mismo el conseguir 0 no las pro- pias metas. Muchas variables estén implicadas en ese proceso: los apoyos, las oportunidades, el propio esfuerzo personal, la estrate- gla seguida, la suerte En cualquier caso, no estamos demasiado acostumbrados, cuan- do hablamos de profesorado, a tomar en consideraci6n esta parte importante de nuestra existencia. Quizés quienes desarrollamos nuestro trabajo en et Ambito ur io estamos més acostumbra- dos a pensar en el medio/largo plazo (obtener la acreditacién, hacer la oposicion, convertirse en profesor 0 profesora de plantila, incre- ‘mentar los sexenios, etc.) Pero en las otras etapas del sistema edu- cativo, las fases del progreso en la carrera suelen estar menos claras, EL NARCISISMO COMO FUENTE DE ENERGIA PERSONAL Aunque pueda resultar extrafio, era es ésta una cuestion nueva. Neill, aquel fanoso pedagogo de Summerhill, escuela fiber- taria inglesa que nos enamoré a todos en los afios 70 y que ya hemos mencionado en un apartado anterior, hacia referencia en importancia del Ego en los educadores. En su opinion, los actuamos ante un piblico y tendemos a pr cosa satisface mas nuestro ego, Por otra parte, esa capi ‘en los nifios y jévenes es lo que nos da seguri colma nuestras fantasias de omnipotencia. Nos convierte en indis pensables 0, cuando menos, en sujetos importantes (otros sigr Cativos) en la vida de nuestros estudiantes a quienes con frecuen- cia vemos (tanto en la escuela como en las far mente, el primer dilema que antes analizamos) como sujetos incompletos que iran mejorando como fruto de la interacci6n con sus profesores. Debemos, por tanto, considerar el narcisismo como una de las cualidades y, también, una de las fuentes de energia personal y © marcas #2 deseo” Los profesores y profesoras como personas _ 63, motivaciOn Con ld ae actuamos los docente en los niveles altos de la ensefianza que en los ini suele decirse que el profesorado de Educe maria ama a los nifios, ef de Secundaria ama las discipl Universidad nos amamos a nosotros mismos. Con todo, considerar el narcisismo como una fuente de energia, no es condicion exclusiva de los docentes. También les sucede a los, politicos, los artistas, a los comunicadores, a los profesionales de prestigio, a la gente con relevancia Probablemente tiene que ver con la importancia que tt: mismo (0 las personas que te rodean © te conocen o te consultan) atribuyes a tu profesién y al trabajo jentar, ensefiar, dirigir, formar a los estudi especie de | en el que la visiblidad y el reconocimiento por parte de los otros son algunos de sus soportes fundamentales. AI profesorado le gusta que le men a congresos, que le inviten a pparticipar en publicaciones, que le citen, que le mencionen como refe- tente de algo. No es que nuestra vida 0 nuestra salud o nuestra eco- rnomia dependan de eso (como puede suceder a los artistas 0 a los politicos) pero forma una parte importante de nuestra necesidad de estar en el espacio pablico, en el candelero, en el discurso académico. Por otra parte el sistema y la carrera docente refuerzan este tipo sencia social, tu capacidad de impacto aca~ PROFESORES Y PROFESORAS: PERSONAS QUE ENSENAN A SER PERSONAS, En defintiva, la dimension personal de los dacentes constituye un aspecto relevante de nuestra identidad profesional. La cuestién estriba en que no somos profesores 0 profesoras a secas, trabajado- res y trabajadoras 2 secas. Somos personas que desarrollan su acti- vidad profesional en la docencia. Olvidarlo (en el terreno profesional de la docencia como en cualquier otro) sélo produce desajustes y tensiones que en nada favorecen ef buen ejercicio profesional. ‘més en el terreno de una profesién como la nuestra, en la cual parte (© area, 3, deine te ae I | i | ! | | +4 mse soy ab ap seeoppesp es Teg Zag} ‘uosqorer & jexnusoy) [ew eed 0 UaIg e1ed “asopl 9 seAjeedee sey 'U9IDeD id s0ad ugiss) soueng uos ou sajenpe saluelp 23U2 epiplas be} uo! $9 teuotied oucs seomyond A saiomjod 7 sauoapp ap 2s eam -nogaud ue} 59 059 104 “seo X Soi Jod sa0e4y soulopod anb sofaus suo) esed opuenbas oziense (3 4394 nyse SoNSanU Ue 4829 ap ZedeD 495 3p Pepw|end 53 (S66) “3090 '266} ‘a2ueNn9 f spjouse) 06 A 08 1p saDea1J9 sejends9 aiqos so|pmsa SososaWNU So] UOLeE 3EISUOD BUN Y “SOUISIU! Js 9p J0f—uI oj Uap anb ze -swusoop oppuela jp ue oysnus Bi0U 2s 1yBIUN case\jueW ap sued anb soUeqU! U9mIEISAES ez queen Pp A uppowold SAS UOD SeyDa|SHES uBIsa ‘anb ajqipunsaidus 53, (€z:5002) yD Jaiad ejeyas ow ‘ose 10g “pepije? ap eDUsOP eUN ap seseq ‘se} uakrnsuoD anb ssuo!suawiip sej s0d f ofeqent o1doud j2 sod o}oeysnes ese A jeuosied zeunpeui eso soulassod ou Souls $0.30 -50U Js "1a ‘SSIEULIO} @ SOWEpNAe sa} anb ej exed ugIsayoud e| 40d Uaagoul as anb ‘opuacey upise enb o} ap uaynysip anb ‘ssque|nWs -9S8_A soyesues epia ap sovafoid uesnaisuo> enb sepidod 0 ‘sey ueipnyso soxjsanus uod enedwa opony euN JelOWeSEp [DyID Sz ‘sefaj02 sogsanu uo f sojja uo jeuorsajoud epuayedxe ensanu sowiNin ‘anb U2 euLlos e 'S021YUOD so] soWaAlosai A soWEER saj anb ua ‘Puo} e|‘Souesuad anb ua eu} ej ‘saDey UBA sou and o} $9 epenb 59] anb 0} ‘ugj2 Uo> sowerydx9 sa} anb sazeuydiosip so] anb spy “saiuerpnise sonsanu Jod sey! © soj@po -suo2 ‘sasopeonpe A saquasop owo> ‘anb ap epnp aqz2 ou oseg “opuo} owo> ‘sapan @ ‘A (eisin e| @ g3s3 anb 2 eunfiy oud ‘saoen © ‘souerdis @ sowepuaide uaiqWwes saosajoid so] “aiduioss ou ‘siuewaiqeq “cig {2A as owaD eyasu 2s anb ap ojjenbe pepian e185? ‘seidoud {4 ‘gajeuesiad sopepreno e Sepenoun urase Sequamuiesioy se.3sonU 3p ‘uaiop uommyad KemormIOd F9 Capitulo 3 eeaees ‘Los profesores y profesoras como profesionales Este es ef punto clave para entender la funcién docente del pro- fesorado, ZQué es ensefiar, una profesién 0 un trabajo? Ni se nos ‘ocurre pensar como respuesta en aquello de lo que tanto se habla- 'ba en otro tiempo, la vocacién docente. Y ello pese a que, proba- bblemente, mucho de fo que querian decir Ridruejo y Marafién en las citas con que abriamos este libro, tenia que ver con esa voca- cién, ese valor 1pre orlaba la figura de los gran- des maestros. Y que sigue haciéndolo hoy en dia. La cuestién de la profesionalidad de los docentes parece una ‘cuestién clara, pero no se trata de algo que haya madurado sin controversias. En el afio 1966, la Unesco recomendaba: “La ensefianza debe ser considerada una profesién cuyos miem= bros aseguran un servicio piblico; tal profesién requiere no solo ‘conacimientos profundos y competencias especificas, adquiridas y mantenidas a través de estudios rigurosos y continuados, sino tam- bign un sentido de la responsabilidad individual y colectiva en rela- ci6n a la educacin y al bienestar de los aluranos” (art. 6). Esa misma Reccmendacién, en su punto 4 sefiala que: "Deberia reconocerse que el progreso de la educacién depen- de, en gran parte, de la formacién y competencia del profesora- do, asi como de las cualidades humanas, pedagagicas y profesio- rales de cada educador". jeve a gusto de todos, tar 1s nuevas politicas neoliberales) y prefieren defender una vision estrictamente laboral (de “trabajadores por cuenta ajena”) para el profesorado. En su opinién, la idea del profesionalismo solo, © narcen = 2 de alone | Fe a seven sp 2's set peptrgswe zen esaqepauidu us sopeypsa! so sim vopong 9) sop sean seuong se sod sopeucaoees epee SALTS ap joyet SPEPADA “aun 8 ap ssossjeud gc © opeprse oweH “B08L0-7007I2s eDUERIeY MOURDOP OP PEP “eo aap sxcaw a ened eppursaven [op Gumunbuy¢satsoop SexDpC sang, 9858 “GeGeeed saueysinun srosfard 9p 21UeuDOUN> [op UgDeNeasEa! A UPBEIO | 259 eqejaichaqut soy ap e/oun epe “sajuerpmasa sns o> enliewoy osu eun opuayiduino veges ‘oleqen un anb sp ousnw ei s2i -osajoad owo3 ofeqesy ns anb Uenuss :e59 ‘aquawsersn| ‘opis ey sop erpnaso se10s0j010 K s210s2j01d £0) @ Saunwio> seansHat>eIe2 Se] 2p un Keueyisianiun epuaaop e| ue ,,seaa0¢id seuang, 2190s UPDESN, | @un seuIUNl93 9p soureqesy Soue swe} sjuesNp A ‘owue; opeypny sowey ayueG ewer anb e| Jod ‘eniGojowiside pique} ofed yesoqe] Uppe2ipulniay eun uB seize Jexjon Jazanb op -puasennu0) Un eyeynses ‘uoruido exsonu ud ‘SesBUeW SepO} 2q ‘na ‘uppoWoId f osanse ap sewarsis so} ap uppeznesoing e| ‘sousdwiasep so] ap K soaneuuos so5e2010 s0| ap Pep|ausbo.arey e| ‘Uo!DeZIUIWAS e} ‘SOUe|es ap UODINPAL PeIMDUIA SOUBUIQUES SO;nO Ope!eUeB ey eAREIRUEND UO fe e59 "ZAR NS Y ‘S9IeDOS SOVENSA So] SOPO ap OPEINPA! 195 pigep ey anb opevossjoud jap ejayezed uoDelidwe eun opine ey sues enysauboud -uangasuod @un eynsad /]290s UODeJapIsUOD ej Ua OsUEDSEP 2153 .21n3jn9 e| ap opunut jap syed ayuowensed ojos UEILAIS 2s saqueyasua soj anb ap 0128 J9 aanposd sejanosa se} A eDUaI2 Pp uopanpoud ap saseBny so} a21Ua jepOs eDUERSIP uisued e| ap oljodouow je ueueR. esoInbis pa sofey ‘seseu ap uopexunwos ap soipeu) ein eAENpUL &| 9p SeDURGR $e] 2p ePuaIadwiO> e| “ouo> ‘ages a2npoud as apuop se1e6} 50} 9p ‘ep! ‘yeusGsews aquais as seyueyesue op ese ued e| uaiq ase ap epeiGayyiud exoperiod ‘equa20p asepp | ",01U3/Wu]20U0> RP} 324p 9s anb pepspos eun Ue, ‘opoUrenqDaya ‘aN $3 OLED OF H+ seuoppe spss wee ua “22hp.D0INg eiMInN|SS BUN UD CASU! OP fo ajduus un opuais enusroua as oved ould} jap opquas -3j01d ei6nsesd jp A peprjeuossjoid exdosd e| 9p epipagd eun os “Gaiu| opour ap sqpied "sopios sns aseid anb jo us Oaneanps [PAU Pp Up6as epipeus essenip us snbune ip oor Ue 005 ou &‘sojueyasua soy exGos 5 ‘sepol ua apasede anb cxep ep snied A auieg ap jevoys 2 ‘6661 ‘eRoyUaBET -3qut as anb se] @ sauo;smNsut sel ua sa]uar0p so] ap UO!DezZI]eDOS ‘9p osanoid e obquie ais9 Us opueyseud eys9 as UoDUate jeIDedsy svezieau e seuoiaze Se] sp OfUIWOD je UB anb seu! o|mN, [2 us opeseg feuorsajoid opy>iafs un us ‘sew ugedn2o eun ua ez ueyasua e| opuaguinuod ‘aaues0p uDDeDdA e| ap epipied z] U2 ‘o% “ualwenueyse us ‘engeiodsco esuajep US ‘So 0359 ‘01 lu> Sose> soyonu us ‘openuap efey pepifeuoiss}oid “BED UeY SOUNBIy “SoBseU ap soqwexe UFIse OU Ut | 9p sojqepnpul sojryauag So} ‘oper uoD “222 ‘tet 2] Jawwauewad ugDeUuO} e| ‘ofeqea ns vB ejwwouOAne e| ap cILSILL -ouoDe: jo {UoBIa|as ap SEUIAYSIS SOUN ‘aALU OWE ap K eayDadsa ‘ugysajoud ns uowaiaiafs oun s3ueInp anb e| apsep jeuoDe20n OWsUNa}eWe jap ‘esnyip euoz 2] ap SaU820p So] @ gaes feuojsaycud entzed snb 9p epnp aqe> oN 2De4 aqap A so aquEr9p uN and o}, ap epsuass ej akmasuoa ‘ugiuido ensenu ua ‘anb o3send uppuaie sofew seysaid sowepuareid anb e © ejnbe so (seanisod souaw! seanewaye e aqua1y) e2ua20p e| ap jeuo/sajoud uoIsuaWuIp e353 uopevaunwes vq ~pai epodwiey anb sej od A songz9jo sovanuo A ofeqen ap soe o> sns ue ueun6y, ou anb sauio|un; sejopuepuauio2ua saiUsD0p so}'e sspepyiqesuodsor sezofeiu‘uesveGies-ered epeyie0> eun so % souasafesd cues seemed Keasossoxd Oy ‘auabep upeajed Asaomjod 69 70_Profesoresyprofesiondocerte funcén de manera cferente pero todos ellos van su tara de une mejores profesores universitarios. Pero vayamos LA ENSESIANZA COMO PROFESION AMBIVALENTE José Manuel Esteve (2003) que la lente” en la que te puedes ab vila con una enorme ansiedad es lo que la convierte en un territorio en el que lo personal y io pro- fesional se entrecruzan como hemos visto en el capitulo anterior. fesiones no son muy diferentes 1. Entre lo que consideramos “ideal” (porque nos han dicho que asi deberian ser las cosas 0 porque nosotros mismos nos lo hemos construido como meta personal) y nuestra forma real . Componentes que configuran nuestra pre se complementa y, a 145.0 menos cémplices con nu todo, més o menos comprometidos tros colegas pero, sol con nuestros estudian’ La primera de dichas ambivalencias es clara en el ejercicio profe- sional de los profesores. Sobre todo en aquellos y aquellas que han pasado por una formacién inicial. Durante la formacion vas constru- yendo una imagen idealizada de lo que debes hacer como profesio- fal: qué son y qué hacen los buenos prof necesidad de ser coherente entre nuestras ideas y nuestro desempefio real con los estudiantes; los riesgos que suelen acechar el trabajo de los buenos docentes y'las tentaciones en las que més frecuentemente caen. Luego la préctica te hace ver hasta qué punto tanto “deber ser” meti- do en tu mochila resulta demasiado pesado para tus fuerzas y para ‘tu situacion, © rarean ta de edcones ” Lot proeoes prof ce poral 7 A veces, esta contradiccibn se hace ya patente en periods de pricticas durante le carea Los en lugar de actuar de esreli paso excesivo del que los peregrinos van despojandose 2 medida les hace mente arduo. pas educativas. La segunda am! con fuertes reperci su importancia y, , se analiza como las personas estructuramos nuestra ersonaldedAlgutos Se defen corre “ros “profesional go” ocomo alguna de eltas sue ddo especifico de la construccién de la identidad. No es dificil averi- ‘guar cul es el eje predominante de nuestra identi sionales. Bastaria en consideracién algunas constantes de nuestra vida profes materia que ensenien?). © narces r.2 dediiones aah mona ap 2 jezuene sjqisodus! eynsei a1ed (sopeiquinsso>e sow: -eqgise anb sei e ses09 sesjo seypnuu @ 1u) pepije> sp epuszop Eun ‘ap sapepiserau sej e sopsidoud uos ou anb soiuaIA 10d asopupiAcU Busia sewlapou sapepaizos se A opunus je anb s2 owe! 59} ‘,24809p e}, ‘ope>iou jo ‘Ouse ‘opuewoy opi uey seisnfesep so} ap sezua asieoyypour K assepuaqua ueypod uaig an if “uopmpsut e| ap souene ja UB Jeasnq & eUEpUR} es ‘soROsOU anue coodwe ‘opos jp opnaredesap ey ou ‘oBequia UIs -epeunoyy “2iny sauojeq expe eed eGaysia Bun op “eqeaujuis onb ooiojed ep obont un v9 jerpunyy o2ue8 -opewesGoud se] :epipuasde enajo9 eun vat uopngune e| ‘seij0 seyanu us O24 238 ‘opeiosayoud fap ofeqesa 2p s2ucbIpUOD A soueles ap ‘se[aNDs9 Se] 9p UOHEZIURLLO ap "UNDE? “npa e} exed sossn2eu ap eqeiqey as anbiod uoxsu0> 2] SslapuaIUa expod ‘sose> soundye ug “(ind) eUCDEUEILA oF ‘edin> s9 0352 opor | Osi o| eqep ‘EDURDOP a] © Sop soypruu aqueing 4 2un 3p UoDINASUOD e| io exed pried ap oxuind un ey pian ap o6je e6uay ose anbune A “,Je}01u09 ‘0k anb sosinsar K sauomipuo> ap uapuadep sopeynser sand ‘resuad e sowasepudt ‘eGey OX anb o| owssIW Oj ed, ua apeons owo> ‘nb s8_uonseno ‘oBan| apsep ‘eusyuo apand sauoione uodses So} 'oweiqog j."sowanour anb sowleuay anb se] Ue. seAREONpA os = swore sp som @ seaqyod se} aigos ‘seanensumuipe A sojen0s sevo!>puod $2) a1qos souopnqune se) 181240: spur sowsnuo2ue ‘sowuerpnise 50] up “Syed ua sous | uo31 anb ajgeqaid 52 "eu fy ‘oad 0 ofa ue6jes ses09 se anb ap ua6u0 je UB UxIse sousin sajja K soy uos ‘vefode sej anb seywie} uo> UelUeND OU enb ‘UeIp -ms9 OU anb ‘sopeajous suaweIvaDyns o| ueyeY 3s Ou anb ‘sopes edaid jeus uauay anb sei A soy uos “sozsenyse sosenu ap ose2ey, (© 0999 ja sojuerpnse sonsanu e snque exed fo2nU0D ap sac onsenU ‘opuerquse> souay,'se62j0> so] ap o1Beiu0> ja X uoezyenos e| ap 50328)8 Soj 10d ayuauia|qeqosd ‘siUeepe seyy ‘o}s20UNDe! Ejsan2 SOU ‘ou A opnunse soweusy 07 ‘enuauache ap eyes exisanu ap opo} auqos “uapuadap jeu 0 UsIg UEKEN sesoD se] and “SepLaja:-cine S8uOPNq ine ap sopeames upise jeuoisojoud eouauedre ensenu ap sequawous solauud so} anb [De} 53 ‘soweajdws sayuaop so} anb _,ugang “Wie 2p seuianss soy, Uo> soWEqe>yUDp! e| BDUDFERIQUIE €19032} &7 “seyuenajas nu sosod uo 't ‘A soyuasaid 12388 Usqep uo! ‘anb epuscop e ap odwies je eun uoD sauoramiasut ue) Pej sepor opuopauszied :se21un sowepod anb sersand: “oulepinjo sowajaid ‘sapen e ‘anbune ‘Oaqes |DyIp ‘sand ‘se ON, (gsaiu220p ‘owo> sowensse anb ja Ue oaneonps janu j2 ua sopIURUC Sos2 9p ezueyasua | UOD Jan anb -adsa e} od Jen anb uauen anb sesc: Sanu} eso ap od gnb asgos ‘sez ‘aigos ‘soweupod & (ezueyasua ej ap odwe> Jp ua squopenouur @ sewjqad aiqos esnnosip 2 apuop e1ouaD0p ap soss16u0> e sowipnoe o oduie> oxjsanu us sepezi| -epadse seuogsana ap seyen eed seysye/zadsa so.20 uo: -nai sou?) sownsise anb se} e seuojunas { sosas6u0> ap ode, [3 « -(qjes2u96 ue ezueyasus 2] ap 0 seus sosa ap ezueyasu e| a1q0s so}x=1 © pepljepedse: Iu 2igos sojnaqpe uss?) Sousa] anbSojnaque o soaqy ap-odsy y's: 3 Bypuoiijand oes seoRoad K sei0ssjo3d SST ‘uanop upmajend Keno TL 7A Profesores y profesién docente Giones causales adquieren si balones. El desamparo aprendido es una fi la solucion puesto que iad de generar aleja 2 los Fecursos para mejorar la situaci6n que les aflige. EI desamparo aprendido es la postura contraria a la resiliencia, ‘término atribuido al psiquiatre Boris Cyrulnik, nacido en Burdeos en , tras perder a toda su familia en un campo de concen- afios y pese a las infi- fancia y juventud, sac6 1a y ejercer como psi- ‘guiatra. Ten‘e muchas razones para poder hacer atribuciones causa- destruido su familia y su entorno, pero su teo- ircunstancias trauméticas o complejas que a personas pueden sacar fuerzas y recuperarse uno le toque como personas sanas y creativas. Lo lamé resiliencia y es algo a lo ‘que el profesorado deberiamos adherimos, tanto en lo que respec- ta a nosotros mismos y el cumplimiento de nuestra funcién profe- sional (para poder sobrevivir con entusiasmo personal y practicas profesionales de alto nivel pese a las circunstancias adversas en las ‘que debamos actuar) como en lo que se refiere a nuestros estudi tes (transmitiéndoles el mensaje de que “ellos pueden margen de cuales sean sus propias condiciones de partida) LA ENSENIANZA COMO ESPACIO DE INTERVENCION PROFESIONAL, CARTE O CIENCIA? Los profesores tienen una parte de geémetras y otra de saltimbanquis Haweune (1877) Como pueden suponer, la pregunta antetior es mucho mas que tuna pregunta retérica o de pura complacencia intelectual. De conce- bir la ensefianza como una actividad artistica (que depende de las cualidades del artista y est sujeta a su criterio), a hacerlo como acti- vidad cientfica (lo que significa entenderla como sujeta a las normas que imponen las evidencias acumuladas) hay un salto de paradigma. Gage iteratura pedagégt- ca que casi consiguié la cuadratura de ese circulo: The scientific basis of the art of teaching. Suena bien eso de que sea un arte con base cientifica. Pero no nos resuelve el problema de la profesiona- lidad docente y, a dia de hoy, la cuestiGn sigue estando abierta. © marcas ¢ 4.66 aonee ot poorest cove fb 78 ‘aparecerén como actividades dependien- del estilo personal o de las particulars circuns- tancias que concutran en aquel momento (arte). Del mismo modo, si, como en el arte, todo depende de la voluntad y la pericia de cada uno, queda poco espacio para un saber sistemsético sobre la que eso es, ustamente, fo que configura una ste un saber sistemético sobre un determinado ‘campo de actuacién especializada Participé on una oportunidad en una mesa redonda sobre el uso del encerado en la enseftanza, Cada uno de los 5 6 6 inte NDPpIP OLA ~pouo> ap oduie> j@ ‘OpnUss as@ U3 “seinaid souODeOAsenul Ua sep “efode seysendoud saney 0 sopease suo solypay Jequasaud anb eu, op anuedu 0 seuido ‘ieiqnanj@ ousius 0} s2 ON “oBan! ud sou0!> “enyoe A se0p! se] 3p o2169j0u235 ‘oxdapuo3 [a ‘ose> osysonu Ug sou2quD $0] ap Jed 2] e asuadey anb auan esolsui f olpnise ns cued ‘aye 9p olpnlu suey ezueesuD e| enb ‘uowinsal UB ‘soWIebIq “sazeuydpsip soparuon sosvanip soj @ s9pusys ap A aeznewaysis ap sowees anb sepusyadxe Uo> (sepepijerradse se] ap A yerou26) eandepia e| Koy anu as o>aspe owsiuse uaide so] ap e>1ue2eu Upanadai ej UB K oonspowew alezipuaude |> Ua ‘ope 3p soiayaigos ofeqen ja Ua ‘jensiGew uo!29| ej uB sepeseq ‘aquawjesoue6) sajeuonipen seugns sei £ opiaiqeiss onb nes |@ JeuIgep wOsaINBisuaD anb soyLeD0p S0se20:0 So] Sp UNDeZIUEEIO ep ‘seUu0}.{ sewGojopoyaw opueuowiodx= uo.eny ‘odrUb Ue 0 sojos ‘and sesosajoid f savosayoud So} soupnus uos “e1G9Geped uOpeROUA! Ep SOqUBIUUINOW ap (PeprssOAlUn Ud anb SOURLISIONIUN CU SajaAW SO} US 9) UpoIpeN auiary gun aisn Ise A “eIUEDOP UoIsajoud e| UB OPEL obUny ey UaIqUIE au A epUaD ap olwOUIG as@ aILBWEPEUTLONY -uo}penype ap sareoya £ soansente spt Soule? sos10 ‘ugpenpe ap seeuo}suanuod seuio4 se] opuaidwios 'snb sO} ow A UgDeAOUU! ap seAReDIU! eFpidoid anb e] eDnste PEP ua e} $3 “sauoisojoid se] ap | U2 059 apaans “s0IK “suue sjuauodwos seany sns 1eBau e>y1ubis ou 314aD0p JeDeyanb [ep c2ynueD alepioge un ap pepisazau 2] reuye ‘Ose? OPO} U3 fezjpuaide so} a1gos 5012959 sns ap ejsin ap cqund |e apsep euayusiens us soLiauod sousuL Je 0 seoqopud ap sod souatp seeasep ‘aquswyen6i ‘usyued ene ap sauoned A sayueysud Je>1shU2p! (601 se0ajqeyss une uayusad OU seuOD "sa10128} S0s8 ap Oun ojos 52 soi0sajo1d 2 | A saquelpmyse sonsenu ap afezipuasde je 50] 9p uoper Luewsaje anb sox0rsey So] soupnus os “s2/qe3S9 sopepUEINEDS A sauuaysisuo9 soyep s2>axj0 ap sofa) une upisa saUo! “senu} se] anb ous 53 “eazared 9] sofow owoD ezueyesu aeyouiesap apand uainb epe> anb ap eapi e] soustuew open awvowe2yquaD tu eoR9 1u a2ared ou ‘se Opuats K ‘sopunjoid splezipuside sepidoid eed sepypn ayuewijenG ueqea|nsed 52, -uadop s22q38i0 $2) Sepoy on “UeqeDa}e Se} afb 5210326} so mucnips op sai : A sosjuippese sopeynsal so] ua pepliqeuen e| a1qos Sorep op -ueyode any upiquie; exDepIp uoEbIBSeAU e| ‘opel O10 404 (G -sepua6ixe ap jaa jap U9 yap &] 0 seuesBosd So} ep uopeinGyuo> e} euosiad oven penyers e} ‘ojduafa sod “own sayUeIpnyss So} ap souD “auap @ ua1aa}e anb soseo sojjenbe ua aqueweudy) ue} semDe ‘apand ou ef opeiosajoud (7 “sojs ap oun anj ‘osciapod ‘aquawreuopransut odru6 o jepes ase2 owoo oxnaeise ns ap saBieu [2 A sarueipmse so] ap soupaiap So| ap uoisuede e] (2 sopeysenuo> { sopeqiynbs seus somes ‘9p epenbsng et ue semwiside e1ed uosebie0> as sBi01De) SOLER “jeuonenus A epaige syusuensesxe ensue ugiadaru07 esa ap Ynsul seUnBje emouapina Ua opelsp UeY saueinb ‘ezueUasue 2] 2p Opunus ep uoPnjona eff sousey soidoud so, OPIS wey o1Ee qemu opuesinsas eqeoe eoaspe OWOD epIpUsyuE pepianze eun ,seujdpsip, ap oquanuy sainbjend ‘oprayuo> asa ug zinboued ns eed e1eD1p 21d oqunsip ayssudioue un ‘ejst epe> ue “apuop obejpidiyaze Un Je “751A owo> eve esrmepouaoy eun Jevedadd “SISOIUIS 1H UX ou ‘euayeu! ewisius eun 3p ezuEyasLe | anlUa Osny ‘seuajew sesienip se} aus ‘seuydisip saquarayp se] 02U3,, ossyoud 495 o1qy| ns ua (52002) FuEWOY K sop 4od epynj>U! ‘sousqur engeyse 27 us Gore, sDUEI ap EYP e| ayUesOVOBL! 53 “soqueipnyss so} e oe. ap eusio} Bj e UOpENIeAD e| ap ‘eI60} -oporauy 2] @ UpDery!uerd & apsap :ses0sajoud 50] ap eanDepIO Pep innoe e| epor Jugno ied uo!seayide ap oipedse ns opueyoniediy oqese ‘opeiosejoid yep oxuemwesued ap pevsay e| ap eipiend enjes A uoisaidxe ary ua6uo ns ua anb ‘expaie> ap pevegy &1 seyasua agap as owig2 ono e apap eed pepuini6ay e| oven aipeu f seyuyul uos uoDeNIDe ‘ap sajqisod seuisoy se] sand “e>zaied a} s0feui owo> J23ey BP 210} 50 oun eped :saqua0p seiauajaduuo> se ap uo!INLSUOD ap O2Iseq Oued OwOD ,PePIEUoDEDSIP, e| € OpeLIOI0 JOIen j@ (SOLEUSIEN ~1un 50] Ua poy aigos) s9}u320p so} aque Onn eidWa!s aNb O4IPR12 tues6 9 ‘equawijenby ‘enuap ose aq “se/Gai sei uaisK@ ou ‘asiesued @ apuon ‘sue |p ug “eDuauades Javay UOD eIseq 158IU0IUS ‘BsIeU! -105 gnb e1eg? “zopzeid e| ap ua2eu saquaD0p souang So} anb ous ‘ezueyasue 2] a1qos ajqisod , 211033, 0 ,2uIADOp, s1sn ou anb ap epipuenxe vel 22p1 e| eAuep 2s ysivaiduat 2 sepeien os SaqUaDOp sBUOHSe Sef sand seDUSpINa UF sepeseq ‘seuLdK Ih’ sap TE seoasa|eid cuss seiorajoxd K sesossjexd S07 ‘saop uaa KemoTeIOag GL

También podría gustarte