Dios no discrimina a nadie.

El Texto 3.28 del libro de Gálatas, establece que “…no hay varón, ni mujer” se hace
evidente que dentro de la estructura de eclesiástica creada según la voluntad de Dios, no
se discrimina a nadie por motivo de sexo (Sexismo), y a eso no se limita pues antes se
refiere a “no hay esclavo ni libre” es decir que tampoco se hace se hace diferenciación por
motivo de clases sociales por lo que queda excluida de la misma (Clasismo). Así mismo
establece “no hay judío ni griego” regla en la que se evidencia la exclusión de la
discriminación racial, (Racismo) por lo que dentro de la estructura de la iglesia de
Jesucristo fundada sobre la piedra angular que es el mismo y edificada sobre la doctrina
de los apóstoles, no se acepta ni debe darse la discriminación alguna, y está demás hacer
mención pues el solo llamado al “amor al prójimo”1 que nos dejara nuestro Señor
Jesucristo, hace necesario la exclusión de ese tipo de actitudes en cada persona que se
declara Cristiano, si no lo hace por la convicción de una vida espiritual, por lo menos debe
hacerlo por respeto a su declaración.

“Porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús” Esta es la regla de oro, por lo que no
debe haber diferencia entre los miembros de una iglesia, aun que de alguna manera la
Santa Biblia, reconoce el honor especial o el doble honor para algunos de sus miembros
(Como el anciano) esto debe darse dentro del contexto del amor, en una actitud de
respeto y fraternidad mutua. También hay que salvar que si bien es cierto, todos los
humanos somos iguales en derechos y obligaciones ante la Divinidad, también es cierto
que a tenor de las Santas Escrituras tenemos también diferentes funciones, la motivación
es que haga bien el suyo agradando o procurando agradar a Dios, como el único Señor y
Jerarca dentro de la Iglesia, que la ha justificado con su sangre, un precio demasiado alto
como para que pueda ser cualquier club social menos una iglesia.

Los Jóvenes de las iglesias locales, debemos saber y entender que somos parte de ese
todo llamado Iglesia, y que cada uno aprovechando la situación de soltería, debe procurar
con empeño canalizar sus energías al servicio de Dios, pues El no discrimina a nadie,
incluso por la edad o el tiempo en la vida cristiana pues establece “nadie tenga en poco tu
juventud”2 dicho esto el requisito indispensable es tener una vida agradable ante Dios y
ante los hombres, procurando siempre obedecer al Grande, y Todopoderoso Señor del
universo, único Ser adorable a quien servimos. Tengamos en cuenta pues que al que
servimos es al Creador, por lo que debemos hacerlo con mucho esmero, procurando la
excelencia en su servicio…

Dios bendiga a cada uno de ustedes con sus sueños, visiones e ilusiones espirituales,
porque si nos atrevemos a hacer grandes cosas para Dios, el hará grandes cosas por
nosotros… los animo pues a que sueñen, intenten y hagan grandes cosas para nuestro
Señor Jesús, no importando la condición de género, la clase social, la cuestión racial y la
edad. Solo me resta recomendarles que detrás de cada bien espiritual que deseemos
haya una vida de Oración, y cualquier criterio en contra de ella solo serán vanas ideas de

1
Marcos 12:31 El segundo es éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos. (Versión
moderna)
2
1º Timoteo 4.12 Nadie tenga en poco tu juventud; al contrario, sé tú el dechado de los creyentes en palabra, en manera de vivir, en
amor, en fe, en pureza. (Versión moderna)
hombres3… que Dios los bendiga y prospere cualquier obra que anhelen para El, si
andamos según sus Santos propósitos y según su voluntad para con cada uno, el éxito en
la empresa espiritual ¡Esta Asegurado! Dios te ama… y mucho… si fue capaz de morir por
ti, que no haría de más… ¡Animo…!
¡Adelante en la obra de Dios!

VIPtm.10 Chimaltenango, Guatemala, Abril 20 de 2010.

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israelpolicu_81@yahoo.es

3
Colosenses 2.8 Cuidado, no sea que haya quien os lleve cautivos, por medio de su filosofía y vana argucia, según la tradición de los
hombres, según los rudimentos mundanos de la ley, y no según Cristo(Versión Moderna)