EL BUSCÓN. (Capt.

3) FRANCISCO DE QUEVEDO
El fragmento está lleno de ironías que giran en torno al Lincenciado Cabra, nombre de animal como
apellido de un posible judío converso. Se centra en la miseria y pobreza del licenciado. Algunas de
las frases irónicas:
- Los dientes, le faltaban no sé cuántos, y pienso que por holgazanes y vagamundos se los habían
desterrado
-Una nuez tan salida que parecía se iba a buscar de comer forzada de la necesidad
-Con unas caras que parecía se afeitaban con diaquilón
- Vi el negocio malparado y que mis tripas pedían justicia,
- Trujeron exploradores que nos buscasen los ojos por toda la cara, y a mí, como había sido mi
trabajo mayor y la hambre imperial, que al fin me trataban como a criado, en buen rato no me los
hallaron.
-Como estaban huecos los estómagos sonaba en ellos el eco de cualquiera palabra
-Sentáronse los rufianes con medio cabrito asado y dos lonjas de tocino
-Cabra, por no gastar, detuvo el llamar médico hasta que ya él pedía confesión más que otra cosa.
-Tratando muy mal de palabra al licenciado Vigilia, nos mandó llevar en dos sillas a casa
-Llamó entonces un platicante, el cual le tomó el pulso y dijo que la hambre le había ganado por la
mano en matar aquel hombre

María Iglesias Rodríguez 1ºBACH B