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La novela colombiana después de Garcia Marquez Precedido de algunas consideraciones malthusianas Ricardo Cano Gaviria + La actividad novelist de los aos stents y ‘chenta Plinio Aptleyo Mendoza + Oscar Col {Yos* Carlos Perozz * Rafael Humberto Moreno- ‘Durda * Albalucia Angel © Lais Fayed + Dario Raz Gdmex » Andsés Caicedo» Manuel Giraldo (Magi) Pedro. OSmer Valderrama * Héctor ‘inchs, Introduccion Si se djera que el hecho en el que mis grave o més erucal- mente puede apreciarse la incidencia del boom literati suda- ‘mericano en un pals como Colombia —con el protagonismo ‘special queen ese fendmeno tuvo lagparicién de Cien aor de soledad en 1967, es en lz consolidacién o incluso en la paricién de-un piblico lector, nose esteriaarviesgando una hip6tess frida o apenas plausible, o una apreciacién falta de recursos demostrativos, Puede considerarse que el hecho del ppdblico —ya elo sama como hipStesis promisoria, ya como ‘era constataci6n —debe aparece ena base de cualquier enfo- ‘que que pretenda ocuperse, con un minimo de rigor, de cual- uiera de estos tres fenémenos caratetsticos os6lo signifies tivos de Ia produccién literariaen el pals, desde finales dela ‘cada de os aos sesenta: a) el surgimiento de una pequetia industria editorial iteresada en la literatura de ficein; b) la superproduceién iterara, a nivel no sélo de grupo sino tam- bien individual, y«) la formacion de un letor prototipico (eatidad abstracia, que no debe confundirse con la persona, real que compra un libro y lo lee, sino con Is persona cultural, histériea, que lee en funcion de lo que yahaleido, esto es, de scuerda con determinadascostumbres de eetura), Puesto que 1, Enlncaratriacin de aiguadeteto’ nosinpiramosentes tise de Jaa. Vane sobre todo "Ls histori dea erate como Provost de Ia enca Here et La letra como provcactin (Garsslons: Econ: de Boil, 1976) Biohees td Hasce dein Roi, weaeus, AIpmmrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrerereececorcereeaeasseegeeeeeeaseeneeee 384 Manual de erature at pines fo, oma inde, amine edo, se ce et mentee ae si er nde dn sa es el pnd cprerel ae aioe = aovelahipancameran de ot afl seis y eee eat romper saa Py ey por alo mo gee neers depo ives Co en ce poe Sn oo hon et Fa on pas nee Co estate ene tei pronnm sensi te eal bom cho reer ei mayora de ls veces, la mitacin Mera so s€ cosen moi cea pune se a ce arcs pede | Biei'delun rot aoe el nh en Ho ob a il oe mae a a aan Se usnpsa deg | abies trate a elect, ora | Seems ce ata ee, Se | aie adnunersey lta gu pera ate emo ne ope incre ma \ ech ctor proteipco, mero consumidor de pone ite- | ‘ario, como clue se ha mencionado antes, es al que a finales wo, cona calvin | SGRESt'Sive cuando, 2 hurtedllas casi, esrb: «Aun ee 7 Stn an, arta ange a esha mis pot eee Noe ce aroun TO, | el a ri onempniolneno Seana iy noe La novela colomibiona despuis de GO.M, 385 ‘come libro cerrados?. La cita noses aqul provechosa no sélo por la vsign que deja entrever de una sincronia litrara jerar- ‘quizada enfuncién delos gustos de! piblico, sino también por {guzel ejemplo que propone tiene parecido con uaa situacion due, derivada del boom, sigue estando.vigente, aunque ‘muchos confundan la muerte histrica del Boom con la des- aparieidn de us seeuelas, lo que fecuentemente los pone enla situacién paradéjica de considerar al boom como un cadaver altiempo que practican 0 dfienden formas lterarias que slo han llegado aexistir gracias al, Reemplicese el exotismo alo Loti porel exotizmo alo Asturias, yla novela psicolégica alo ‘Bourget —del que preisamente Silva no seria seguidorincon- dicional, por mas que lo prefiera a Loti— por algin tipo de novela que haya prefer ira buscar su inspiracion no en los jinmediatos modelos del boom, sino en los de la literatura decimonénica francesa o en la novela curopea dela primera, ritad del siglo, y tendsiamos una rudimentaria earactriza- cidn muy cereana a a realidad de la década del setenta. Porlo ddemiés, bastaria pensar en el modesto éxito de autores como Felisberto Hernandez o Bioy Casares, frente al éxito rtilante 4e los autores del oom, para intuir que ello tiene que ver con ‘algo dea existencia —no slo dentro de Latinoamérica, sino también fuera, deun lector quedesde tiempo atrishapreferido la via “exotismo" —exotismo artificfosamente potenciado ahora por las exttias iealistas del realismo mégica y de lo ‘real-maravilloso, que han funcionado de hecho como eultos reclamos de consumo de la sobriedad de los segundos. Yafirmo ademds que una parte relevant de fa la: ‘mada literatura de izquierdas no ha tenido otra funcién ‘que lade conseguir dela stuacin politica efectos sem ‘Pre raros para divertr al pibico. Walter Benjamin, Tentativas sobre Brecht 2. 1A Siva, Poesia y prose (Bogt: Coler,bioees Bik Coloian, 179), 9.397 356 Manual de teranaa ‘sitay un lector independiente de este lector fraguado en ta literatura latinoamericana de finales de Ia década de los wectnta 9 comienzos de la de los setenta, independiente 0 see 2 terior, queenelcontexto colombiano debaconside- inrae por teparado, exe lector sin dua elector politizado. vraseduosinaginatlo simplemente como un lector para quien re easbe altima del texto no puede darse sino a un nivel de te retosimiento y denuncia de ralidades tangibes de orden, Tistoric y social, Pero sex dable pensar que ese lector polit ae onete despuds del 68 es decir, después de la muerte de Camslo'Torresy del Che, asi como del mayo francés ye golpe (Ge Pinochet en cualquier capital sulamericana con whos ras sos ent comunes a to el continente,acaso se debe preisar Gucen Colombia tiene atin mas posiilidades de polarzar le yacion, neutralizando al lector del boom, o fundiéndose en {ido que como hipéteisexpliativa resultaria al menos suat= fete enel caso dena narrativasurgida alasombradel boom. foro onentada polticamente)’Al no existr‘en Colombia Petty inellgentia hasta no hace mucho vivid abeorta coum ‘Fuad precolatine de grandczaatenienso— ning debate col tural propio que haya rebasado los limits del provinianismo, ing hecho hist6rico mas o menos recente que haya feeun~ “tad los modes eulturales a través de una transformacin teal {Ge las entructuras sociales y poltices, y ninguna tradicion Srecolombina con la que se hubiera podido neutralizar le Pecloa retoricaycasizadela cultura colombiana, de hecho reser encl pais lo que, salvadas ls istancias, suponia Desire Rurard. que ocutia entre los roménticos franceses de 1630: posto que la poesia no es més quee eco de un pensamiento inverse ll donde no ay pensamiento universal més queen Jas coves de Ia politica, cuya lengua es la prose, a poesia © 3. Padsaseeleaso de Alvaer Gardensbal ve abandons eae sor aee ie macondana apr de Bier (197), ne TRSeESSren umn demtncon poten de a aia. : a enmvna pnt de main. Reemplise evs po = Clone por metfor,yentignasegecrosntaonts por ect: ee een perenne ie ‘tendremos un esquema bastante vélido para intentar com- Ferg eet ner ond oben los Uncos drs deunveald ove puedctacirhoy desde o jude alcertorguese see Mad pra povincanomstutel son sob toleies eee eee acre oe peeearienane mimrertiny 2 pecer ere i ie ae Ta pepe qo bs anv dé ia wn octet extern incor del lps eae tra miltiples ventajas, En primer lugar, permite comy prender porque, sisoatijsgeerotonaceel boom, que tuve tal er oe snitoes mis dingy ent uo orale de. Sen hare iets del moran epee opr a termayor ets netpaince bomen aie Dlintea ui nuevo principio de colernciduardcer ence lnm tpt ncaa ih duet plone Sete pes Ines un modso dindmic dl hecho tera, enendide tomo pina teresa) 30 poctces es agora Ble fabo canon do fatty a naar Ge) tat rcaisadut cpm coment ame goneay pis porunmeno win reno) gna ee Iuka gr eu Steels spec cce oot nos pre compendinry aioe tds erin ‘cncomprobuson oan dea ste pomenenece i iaiwoalto ke of bse 4 DaiteNin, Eudes dmocrt ders pote lindo te dendeee 195,11, 9. : 388 Manual de fieraura ‘que los novelists de Jos ochenta todavia no han diego ennaenapora de ond buto alletor que fueron alos a, co ayer ta asmulaién erties de sus letras ba side os desis gua y como novelstassiguen produciend Pare ast xaos olimitados que no han djado de sr 8 vee gman que viene apoyado por mulstud J intone un dag tipo generaional,sicabe,ediico, puede cons Sintoré que onuchos de elosintentasen superar asus Padres eerSonales precisamente inltndolos —los Pusnos & mere csala dela déada dos setenta~ sno 0) 0004 eae de queyenlabistorin del arte, como di0SiONe' 5) eseto ae rane no del pare al ijo,sino del tinal sri, reeecino palmario lo Genen bien ceca, en cl mismo Cares i empl jue-enel momento deco de legit un rumbo m9 sears camo al versio hizo ene! fondo Mesa Valle, ee esc atospredecesreslatinoamercanos los ATH ay aa esos Gallegos — vot afin al sino eld Janatralv® to ay europea (Faulkner, Woolf, Kafka), Sintomes de prt aio: se mira cn sconjuntota producsén deep A er venes desde a aparsion de Cen afios de soledad, noveatmero se apesins la despreporsin Ue canon! J logue priesomputo de las novelases enorme y 1a calidad eaietalmmvy,baer; Io cual no, puede considera 28 seretroiead demogafien- pressamente como Salome aerietgs 9 coloca los crtios fente a una alternate deat! gla cempliciad ceri del compar, 0 maith, ret del detractor. Siatomas de tipo neurstica; cuando et sian Genta todavia podta criticarse que la nica general T Teves ea cv comorbar ego ced de ni er hau core io soe Pes i een nasa pens ies BE Pap A ec experen gu probae mene PDE CG! aoe rope nove eombana mis cuecngnea tint ‘Bones de Cin alos lee ee | 7 sn oe rebasa la docena de libros en su haber, sin a Ermnrmctan cl ot ecpc planteamiento critica incluso me ola (cincluso moral, dicho seaen honor ala sete aoe a cnaradr edge erates iat rove wan pre sara rena ttted senpre com os pes nitro te monarhen tinpint dlonbraylser lls van loner mnpeny amarillas desde el cielo. eee Come spl aa gagsinl creas dela gic HR Js be em sao sonst despa dl ts, apt Snes J nse eu pablo ds a sua J etura eseapisas,mitolgiadors, Sole Cena eed nove Insc atuey ea Sera nignes earliness ‘el: ro cone nein dr or pre ea sta que ha publicado ya es cbs de fxioacuSadas ‘ambiénsegin ee mmo molde, denota una inconescoencia 340 Mara de ieratura desupare,.Enetet, piensa que puede abjuradetoriinal serra arporelo mismo las imitacone! Y en elmomento eden ona tormula ava, apr quéesa neceided de ate aon quien nies le ba ahorrado ol esfuerzo de sr origina? i jelejemplo como muesta de ambivalenciaeipic, expe ter sol ora fuse, eaumtiaimpresin gue erp athante éxito de Clen aos desoedad —cuy pulea- cides pp entrada del Boom en Colombia, conc conse ign efcltamiento dun public stor—prodajen varios si cums noveltsencTect, entre 1970 y 97S aparece oe os ets oveln exerts arombra de Cen ols de soled aoe nos de diablo, de German Espino; 1972, La (il Pape 1973, Dabebor 974, bazar dels ots at terete Alvar Gaseaziba; 1975, Breve histor de oda lat see cere Gerramulo, novela encuyaconteapotads es ae que aguilera Gesram n un pseudo acts Bo arc Marguse para esrbr una novela mis Sevan que Cem aos de soledad), Ext dels cuales dere sida deun pblcoconsumidor eos gastos han sound porimponers tanto ents conciensia dzlosjovenee serds domo cnladeunacrite incapaz de acer otacost Que over ls nuevas revelaiones “Lavocacién critica de uns generacion de novelstas( &t8 esotrade las ventajas del enfoque que intents promovera un ‘primer plano la preocupacién por elector) se debe medir no Pole enel terreno moral, es decir en el desu acti frente la roe cad sino tambien nel terreno formal, estoes,enelde x4 wottud frente alliteratura entendida com realidad ténica ‘eis: hay una dimensiOn moral dela téenica, de In que el Foveista slo puede legar a adquiirconcienca si, ademés de alaren el esprit del lector,escapaz de saber hasta qué punto fas inquietudes que eirealan por dicho espiritu pueden fomen~ Le novela colomblanadespuis de G.G.M. 361 tarse legitimamente 0 no. Pero, para ell Sct el gaat encode pod fato ports pedesores ino etd conpromelge 4 smo Sena ern do panins oe problemi con ol dt Tavealdad cinco con na guna peti de obsesones 9 de temas ya envejecidos? Considerar la literatura sudameri- Siguiente tr cea ds hers concn ean aoa ca Stusurade deo latnoumercane eon una epitome y ta sampo arvana poplar iajogue sca pacts po fins tector icone 9 a meldaen gu esnbran ‘erent preteen enc encletico evel nova nu ald elven ‘linda hecho tea tno es bslto hy endlen io onan de preseupaconc sie qe poet ip irre tees ne fice asimplicaciones das nica —y tambien los temas, pues el poder de sugesion de cualquir horn conchrusitrario tabi cn su capcied de soca uot y crs eats Shape stron sents queer haar loberencn deus prcrdtores Eau cna lot Temas secon a la, ‘Sine unio oped enn heute mie spyan sobre tory un pubic onformados; Geant que,cnlainterropaion formal (tenia) te ete luminrel momento desu newrornibs spre. dhectn crane ur novlsa dee gre no nt por Sucapecieddescanar un nite pli po la Steet, como por neal Jereresnutas uncon sloncumestonformle hinds dee come Tye fovangure= qua colucdn nae depends deura on {elon de suture produc en focaa repeating Por lo aca al erica —al menos eso define paca ‘mente aqui nuestra labor—, c 84 papel, ants que el de aplair ‘Toto sfictosseldsesubloellegitmaddetstscmoun 362 Manual de teretwa efecto nuevo y cuca es dei, no repetiivoo meramente cee 1859, intrangilo por iainfuenciapersiciosnaque tasbeeeata estaba cerciendo en algunos pintores demasiado sare gan po au ext rent a plo —un pablco coyo ae eetube por otro lado Faubert ena [dé recu de x2 aor enue coreapondiente «lm palabra aver ofPara qué Deconar tape con la mecinic, qu io hae mejor y més sense paudelie recordaba que To ball simpre oe eraser abgurdo soponerquelo ques asobros0 e# aaa repliow. Asombroso, 0 efeativo en elsntido de fer sre eden haber sido para elector rutinario de Ios afios ae aetcton temas 9 recursos que, erivados del BOOM, ¥ seen ycrcnados con una etigueta nusva, no tenn It una Pie de oripnaidad, Lo cual no quiere deci obvia ‘lama etenel period que salizamos, slo shay podido ern agta redamandose aecesaria directamente del Brome mutscrun hecho que rande econ ave a nivel aoe gc cometere mediante las igrimas, aun nivel més sare Tmidbrow det que habla MacDonald ive enc] qv ane tog impresion sobre wn lector ques preia de.n0 et para ctae yulgar, pero que no puede demostrar sulucied 18s aa eee puenr ea sufentemente de vanguard, como aaecde Bl viejo ye! mar, o Nuestro pueblo de Thornton atte eta consuar en a cultura como ta.clom~ Manger ato fetstnos relics, mediante Fecusoe viane oe Gudea Cfotogrfico” dia Baudelaire) como una te non decorativa del dato cultural ala fein, et incorporae verbal, incluso, para redondea la ntuciOn de eee cr humor fi, que ntenta hacer reir en ltesto.con creer prootimientos queen una cari de cle [ates Basis, Stn do 1859, One comptes Pac Pip ME a pou MasltyMie nda) seca aac: Mon a Eire, 1979, tina ani. One iad °° Lanovelacolombiana desputs de G.G.M, 363 priordadsenel ques inspira breve yequretn pants saree eo cae Silat pumped ener spe Sisbnieahs tong a PRES cinta Mp tt ener Se sips enters oaracs rnin inc Cosa rectamente, en sensibilizar al lector y al critico hacia i ios. Finalmente , la insistenciaen traer a‘ jonde Is tad a siades etna del ator sn ambien conn ba pain ay crenata lit ercente ceed, balsa teri de os aombres—ean dentro de ls limites menos si de los criticos que se ocupan de ellos. = ‘Wayne Booth: Retire de ae pl clin (arshont: Bator Baxh, 17), 64 Manual de lieraura aquoceoeniaepirpstnin rt re aaa gn sic ret stars i tne ee septate a capenict ke eee Ses Be rei ee ea ti ee or ep na Ct tata hem te crt rin Ase ‘arom atta aascamn gt aan merromene nt nln pn aut por otro Lado, lainvitaciGn ano ceder a pres jonenane spa i cacao {La actividad noveistin de los aos stenta y ochenta om goth cro | ‘Felisberto Hernindez, oar ie comendonal ig de Gs Mire ae quatro acne rind aa eosin Be aga 96, Fany Bulag y Mee ie uta comes Vato no sem. 4 | | | Le novel colomblana despuls de GEM. 365 A finales dea década de os sesenta, la muerte de Camilo ‘Torres, conlacualse cerraba casa fulgurantc experiencia del Frente Unido, yluego adel Che, marcaronen forma crucial toda una generacién que asstié desde dversos dmbitos, yen «special el unversitario, al timo intento ala ve idedignoy exultante de renovacion politica y socal. Era apenas lbgiea ‘ue, pasados algunos afios —losimprescindibles para adgutit tn cierta perspectiva histérica—, dichos acontecimientos ter. tminasen por proyectar su infuencia sobre la narratives ese ‘caso de Afos de fuga (1979), de Pliio Apuleyo Mendoza, ‘novela en la que se pueden encontrar pasajes como este ‘Le pares que aquellas verdades clementalesy fervoro- sas que iba predicando Camilo en plazas y teatro, ves. tio no ya con sotana sino con un traje negro ysebrio y luna caisa negra, iban a producir en torno suyo un fendmeno de masas comparable al de Gaitén, Pero ‘Camilo llevaba prisa; Camilo habia credo en el mito del ‘amor, lacaridadcristianas, y antes de que gran nmero de sus amigos legaran a conocer sus propdsitos se habia hecho guerrilero con la misma decision misteriosa € ‘nquebrantable con que dieciocho afios atris se haba ‘etido de cura. Prontosesabré quiénesson los verdade. ‘os revolucionarios le habla dicho una noche ene hotel Majestic de Barranquilla, durante una gra, sacdndose la Pipa de ls labios v mitindolo con aquellos ojos suyos ‘verdes ya veces tristes. Fase cuyo significado no enten- 6 sino dos o tes semanas despues, cuando le legs el ‘nuncio de que estaba ya en el Opn con la guerila de Vasquez Castafo™ 10. Atos de figa (Pca y Janée Colombia, 197), 9p. 001 365 Manual de teretura 7 sn en nt et snare te presen de lott aqualtstordor Hesko goa sea ec ar estat detec etal Tomes, Gus Salifpincpaimentenncion el proyeiogUe omen ye tg gue eo won Sogn 3 ote non emit sin nds a status el pesonale narade Towa ene conden de medidot 3 PoC sbi eh ps 8 stro narrative dé donde s¢ ha extraido Ia alimenosen tere parson, como nub sd 16D maesit Jesu laci6n"autobingica”can lo nso, arent ormenar mds caaceitico del ealismo decimonénica, tee aaa carom SxS de preston Par, narra en pres ide Ci cee crietatotenes 3 le ate nestivo, Tod cx eponde 3 Shoport ioen bloques temporales, claro nopiestos piaiamente, Geaden sn cODATEO ¢ —w. Lanovelacolombiana despus de .G.M. 367 individual, enmareado por a leyenda familia, con sus figuras tutelares, y connotados por la amistad de los tres muchachos, Camilo, Ernesto y Rodrigo, que més tardeencarnarinilustra- tivamente la triple opeién propuestaen la novela (esto es Ia ‘otal identifcacidn con un idea, la desiusin tras el fracaso revolucionario, yel oportunismo del triunfador) Enel bloque intermedia, el tiempo dela plenitud yeldeclve dels dusiones politica ysentimentales, yfinalment, ena ctspide,eltiempo ‘delasupervivencia, presidido porelfeneside laalocada fiesta, Parisna, con intertitentes momentos de lucidez, meros fog0- razos que simplemente hacen mas vvides los eontornos del derrumbamiento moral del protagonist, el cual, eon motivo del golpede Pinochet, egresa a Paris (abandonado alos antes, trasla subidade Allende) en busca delosfantasmasdel pasado (€ldifunto amor de Mari narrado antes en imperfecto) ‘Traténdose de una novela la que seesbora la desisio~ nada crénica de una generacin, parces obigada, 0 al menos oportuna, lareferencia a La educaciin sentimental de Flaubert, ‘aunque es un hecho que narrando a poco mis de una déeada, 4el blogue histrico mas denso comprendido en la novela Flaubert estaba a tres lustros—, Mendoza se aparta del modelo Naubertiano, ineorporandocn su novela un plano més inmediatoet dela esta parsina de clara inspiracion heming- ‘weiana. Pero si esto puede considerarse un aporte vido, no ‘curre lo mismo cone tratamiento dado al material documen- tal y autobiogrifico, que prescinde por completo de ese pro- =so, tan corrienteen la narativa francesa, que transforma uno "0 varios personajes reales —pilotes los. llamaba Sthendal—en un personaje imaginario, lo que permite a la fiesin elevarte sobre el document, distanciando los referei- tes histéricos. En La educacin eniimental, los hechos de la revolucin del configuran es lasegunda partede a novelael escenario inmediato de Frederic y Deslauriens, los cuales ‘gozan en de una preeminencia casi absolute, puesto que nolo comparten con ninguna figura histrica de primer orden; los 368 Manual de literatura personajes del drama histbrico permanecen como wel6n de Fondo o en el caso de algunas figures secundarias— pare ‘en debidamente disfrazados, y muy dstinto hubiera sido el ffeultado. si Flaubert —procediendo como Mendoza ‘aviese decidido pasear la mirada del novelist por entre las trandes figuras histrias,entrando en casa de Raspail 0 de tayo, o earrando lainfanciade Louis Blane durante la Restauracion. En suma, es el excesivo peso de Ia, carga histrico= documental Io que en 1a novela limita Ia operatividad del ‘ispostvo verbal deexploracién del pasado; or otrolado, la arscién de dinamismo que, en su tiocibn sereta, producen want leetor sus dos primeros niveles temporal (iipresion ‘aye sentido se comprende se meditacn esa frase de Proust: SConfeso que certo empleo del imperfecto de indicative, de (Stempo cruel que nos presenta la vida como algoefimeroy@ {Ever sive, que, en el momento mismo en que reproduce ‘Avesios actos lesinfunde sion, losaniquilaenel pasadosin ‘earn, como el pretérito perfecto, el consuelo de la actvi+ tet sigue siendo para mi una fuente inagotable de msterio~ ‘Sastrstezass)"esaimpresin de dinamismo se ve amortiguada ‘SS pusna medida por la presencia de un tereer nivel l de Tos {ntercapftulos —o 10s capitulos de la frustrada novela de TEenesto-- caya serie discontinua y fragmentaria, aunque no nonos densa shistoricamenteo (en ella aparecen Camilo y el Bogoteze) afiade tal ver un laste indi la narracion. ‘predominio del recuerdo obsesivo yrecurrentesobre la memoria —cortelativo sin duda al predominio de una vision {el pesado como infierno culpable, poblado de buenas inten- ‘Gones politica, sobre una vision dei pasado como paraiso per~ ido, propicio a una evocacién involuntaria 6 sinestésica!*— Tis Mars rout, Parodi ymiselnas (Madi: Alianza ito, 1979, p35 "ne eidetemeate inspiadoen as reesones Bex Lanovelacolombiana despuss de 6.6.M, 369 ee op oe ue nl foal ape seiteaprantenprde Mendon Enclose oe jincide en términos generales con el plant ode ‘otra novela colombiana de la déce 7 na aescre mermwad sa oo ‘omar (979) de Oct Colas ena oer ania denseva con maton propio para cons, SinndiSencabtnauety elena Retort "ni spat rt ra los dos personajes dela novela pasar revista ios ‘lush de lhitora pal, quesntorpropiosepaodion) lash de srelaicon ps enacted holy Como un ddlogo deetarus qu, sh detad tenes sultan salvo bles de or us hea no dcr ebiaenlavlonesedaon i eae eee stros nv de aiid entre Claas y Mentor or em plo, ambos fueron cuentistas antes que novelistas, Jatatuno, cvesone so eae ede nes, con ceria uniformidad ydigniad, une iavesigacés inece, tude nel desuago oi al capone neta sino eo ect oe ry ‘einai dao auc yoo ease dn em insta Coo a fe 1a, Por atro lado, pertenecientes ambos —a 7 iferenia de edad~ auna generacon que vio fritadas sos cxrranvas deo oi pre cr que como nove dk fuga cabeimpurscl sun esquematom docsncata oe ‘morrison Shc un poenaa nie Coe ea tempo mero GWT), cab impute sas ton ee ‘bre Baadchiney Prom » row "Sobe lanes de Bade espaol aay, nana Pere We 37 Manual de iterarura testimonial queincorporaalaficsién un nivel valoraivo dela realidad més propio del reportaje politico que de la narracin. ‘Véase un ejemplo: : Bajamos hasta la carrera tree y so enflamos hacia Cchapinero, un bartio amorfo, vj ciudad anexada la Stova urbe, (Que micrda de chudadt, dj, y Marta > roche mi comentario, Fstdpdmos legandoalazonsco- tly tos aves uminosesrexplandecian con mayor Iensdad.Tenlamosal fentela Catedral de Chapneto iannuaciones gies, remedosbarrocos, ints roméni- earn tain de coment amado be I close Pekansdad que aqutealaen un rebuscado ygroseroana- Stone plz, gor eens monty sre: hippies cris, tcagantaos de yerba y past- Fas tembloross, paodiando algunaexpresionen inglés [los cebellossutiosyerasientosylahuela del hambre {aensfedndose en sus rostrosaindiados, clebrando la ttn feta del esrrago,Vendian marihvanaosofaban Conn viaje tascendentalen meio de Tues scodicas (CT Agu tambien estaban, hasta agut tambien habian Hegod lo alarides de Norteamtrica, sus retorcimientos deste, la decrepit de sus hijos preilectosodesos ‘Sinem: drogados, unafofima parte desusmailonesde {Grados desdoblandove en exon cerpos gsticulantes que nunca seaprendcronel papel trataban de acero ibe: ocnmano:hacian todo o posible porse dignosdel per Sonaj que eles asignaba: ao se desanimaban:sabianque tmenuerzo mis aoeracnvano, que podianempesnarse llegar ser Tesora, sguira la sombra de una gran Tnentira. Queran ser heroes: por el momento, eran 10s “vientea de eos heroes de nombres impronunciables TE. Crna de tempo muerto (Bela: Edt Panes 1975, a Lanovelacolombiana depuis de G.G.M. 371 neste flash urbano resalta esa especie de indignacién de Ja que apenas es un timido comentario la exclamacion del comienzo ({Qué mierda de ciudad), que electriza emotiva- mente el texto, salvindolo apenas de lacarge grandilocuente que constituyé su peor laste, Aunque dicha carga nos Fecuerdaen forma indirectalacondicién intelectual del narra- dor, que es también el personaje central, Mario —intelectual probiemitico en su triple vertiente de profesor universitario, novelistay simpaticante de izquierdas— ello no es suiclente jusfcacZOn narrativa, y los comentarios sre Norteamética {el comienzo y de final, cualquier lector avisado puede darse juenta de ello, podrian figurar en un reportaje testimonial, ims o menos petiodstco, sobre la generacion drogadicta de ‘cualquier capital sudamericana. Esto debe llevar @ que nos ‘Breguntemos sobre la condicion del narrador: lo vemos pre~ Sentar una stuacién, pero no tal como la aprecian sus ojos, sino como su cerebro la piensa, o mjor, como la ‘deologia. El mundo referenci comentarios del narrador y, lo que-es mis, tamizado, sleccios ‘ado por suenfoque. Asi, punto de vista narrativoe ideologia Se interfieren, se confunden préeticamente y constituyen en forma inevitable al narrador como alguien superior a su “ambiente. Ello veda cualquier solueia irénica al hacer impo. sible To que, en In buena tradicién de ls tcnicasdiscursivas derivadas-del estilo indireeto libre, que el punto de vista impuesto pore narradorse eacontrapuntead, intensifieado © incluso desmentido indirectamente por lo que él misiuo fefleja;mirando lo que aquel ve, ! lector queda prisionero de su punto de vista, no comprende més que 4, ests, por asi eciro, anulado en cualquier funcién reereadora y obligado or tanto a no ser mas que un cémplie Pero Collazos también ha esérito novelas en las que le preocupacin politica palpita en un segundo plano. Asi, un ‘narrador absolutamente diferenciado del autor aparece en forma ma sugerenteen su primera novela, euyotitlo, Los dias 372 Manual de tteretwra reocupcin pore le pace (196), eg un proven pr eae tectaneno, ead, sin epi ge san meas aioe enn Memoria compari) ta oa, dteinad por apna (ase) aee 1 prisioneros de unas circunstancias sociales, tee ae yee puo de wuien, desde una visién “culta”, lo vive mare ae o tanado sno de quent lo padeen ‘San emend pea aarti sccm le maa po logs als queiio-burguesas. La relacién de Juan Bermt ar Pau at) cons amt, Amal profes ful ‘maine ne adobe cordena a de adncin Siac ety ea ia permie dnaprsiie Basser deren cncerr see 2 bre barre proba de But Plot natedor como enti organzadra 2 Per Sbccutayarcnla novella tenia ateania ‘Seta de oc pone raat lso punto de Se cents cn lie panera dene “SEbun) te dagen lone oo ees de Slats de pst aps peat trator aid on rere bre ean gua an lo por a vaunted de racer ns com, am we eo ao, tic date eno eee ns hc a aponden personae bul eissimayor pete comes rae sft Sinai Gea curd daca ei Sees yor narralva se singular sem ete iron formals Th Sain ne rine eo ut colons Tee Se el gel clone ders tek ‘Tap corrals deo ame ‘sein eta rome que rnc ch aed a rane Evi Aa 982, p16 g {Le novela colomblanadesputs de G.6.M. a todas hablan con un mismo atildamiento que las desreaiza Perosobretodode lacxeesiva heteradoxiade un narrador que, en.uno de sus recitativos, “Apuntes para un ensayo", antcipa yal discurso retérico del Mario de Crénica... cuando —pre- fisamente después de un bonito capitulo cs eapaz de com luir su reflexin de la siguiente guise: Se hizo, en miniatura, ese acto de coloniaje interno mediante el cual una supuesta raza superior (mezcla de indios vergonzantes,judios resentidas, gallegos amarga. ‘dos por Ia nostalgia de una guerra perdida dela que se hhabienfugado ene mismo momento delragor),sometea su inferior, indolente y esquia, disipa y secretamente altanera. EI negro aumenté dentro de si el mito de si ‘equivocada infeioridad; el blanco aquel de su omnipo- tente grandeza, As fue creéndose estatensién que, luego, Acabariaestallando en el reentimiento de unos conta otros, en lacinicay abiertasegregacién delos opresoresy los oprimides', La solucin retrica cs, en un novelista como Collazos, tuna forma de escamotear el problema del publice, en la ‘medida en que seha adquirido del una canciencia no proble- ‘mética que simplemente ve al eneuentro de lo que se supone ‘std en el primer plano del lector. Por eso, el grucso de los interrogantes quedan en el ate... {Cul eel rostro preciso de este lector? Si este lector es un leetor poitzado, es lentimo levario al reconocimiento de lo que yasabe?,No seria mas Util ¥ portuno entablar un debate sobre lo que él se cree en el derecho a esperar dela literatura? 20 ampliar su visibn del ‘mundo, sin entrar directamente en contradccién con sus inte- reses de clase? 1S. or las del pcenia (Mex: J. Motz, 196), pp. 1023. |. 314 Manual de leretura ver la nica novela que, a1 largo de los quines ‘Elser tal ver la Gnica novela que, ation rancuridos dex a definv consapacin de Gare subi de Haste eo Geary Peron, La novel, renee cit despopeeh Sa cede suplantenmiestoy lo azarono Poo aang abe con un exodi al etor ale sunG8¢ st emo eco wvoquermiento del toa inteado quiz ‘Marquez, se haya pr interrogantes,constituye el merit i lde todos fos venados (1970), ‘Que revel al vez muy prostar iene citar in extenso: snietan eens pgs lope noe 8 ine sto, (Comoe! argo} mano 20 a ‘tiempo est para los personajes, ae fueran lnmisma cose.) El inolvidables de dos péginas, pa ‘midos(si Tas paredes 0 de la alfom {ip de une tla, es sbloconsatativaen el dito eolombiano,e detest valor tocomo espejime deintncion afemintasnocoma pos. Disa ‘apecdarve rea, a istora del poise lode Ia 20, grado caro de a exert Si XX, 197), pp. 70.1 382 Manual de teratera simpicidd avdeca de logue no suena cronpie: are ituciadgumos,prsenteners ques ago 99" Sat to aviainal de ns geoealiat aa Hasbro qu a oer con cl erimen, de aaa ri client, de ins tes geerocons de segue mueten defo wn segunda foe ho poe Tnatenen dela roblemcaensnin al mins soe seta su dado on Clos iebra de ua mura tonsa fomistayer eo pro sin inst en ee et iecn x plantxbintn= ne mosado mayo “sree anondr ens ceuntncas tn mas pret- rae ida reconoeioymiequeaerigrladenunsa de ce Sgn al como crittwaorav, etal smo se aa agar lorigtos de unacxploacign qe o pete aoe ge una idapacin somsecsnt cq su part pis oe Bats enor 192) de Able Ang cee tae Sanmanis 9 ston gue sian el eeenaid de Fit nema atte earner ee etn ae a Sa Sivrmaarnicemeen me cruainie Serpe amu Sens ‘Gaius dl boone el mejor demo cass Dov veces le, donde a Seoiaittantioa cant Srasiacrie mrcape serra etetts en cnnetmentamneaeinnt ce teanan eae glace cae retary {La novelacolombiana después de G.G.M. 383 fibula novelescaen determinado tempo histérico, yen deter- ‘minado marco geogrfco, sin que enningn momento quepa Percbirfisuras a nivel de las genealidades posibles concebi- bles dentro de esos limites y que ello redunde en dltima instancia en cierto valor testimonial, antes que indicio de lo ingenuo oanticuado del método, debe considerarse prucba del rigor de una exploracién euyo mérito, por otra parte, estriba fen buena medida en haber sido levada a eabo simultéinea- ‘mentecn dos frentes. E] uno, elingistic: la novela incorpora com una sistematicidad casi programética a su entramado verbal refranes, modismos, locuciones propios dela region colombiana, sacando partido de ellos no como materia bruta de un corpus documenta, con pretensiones folkibricas, sino como materia de una recreacién melddica llevada hasta los limites, casi insospechados dentro dela prosa de esa Melo- ‘peia que en sus reflexiones sobre a lengua («Céma lets) pro= ponia pera ia poesia Ezra Pound; lugar donde las palabras se “cargan”, mas alld de su sigaificaci6n ordinaria, con cierta propiedad musical, y donde en esa misma medida pueden set apreciadas por cualquiera que tenge oido sensible, aunque ignore lalenguaa que pertenecen, ELotro frente esl hist6rio, en el sentido no de Jos grandes hechos que han jalonado la historia del pais —y hacia los que, como hemos vito, se han inclinado mayoritariamente las preocupaciones de os jovenes ‘novelists, sino dea historia secreta casa emicrohistorian, a Ia cual se refiere la frase de Cline: «Todo lo que es intere- sante ocurre en la sombra. No se sabe nada de la verdadera historia de los hombres» (e eondicién, por simple causa de cexaetitud, de reemplazar la itima palabra por “mujeres") ero la autora ha podido avancar a la ver en ambos frentes gracias sin duda a que ellos eran seeretamentesolida- rigs. Veamos de qué modo, Respecto al del leguaj, casi inevitablemente tenemos que evocar al temor expresado por ‘don Rufino José Cuervo en el siglo pasado de que, al obser- varse nel castellano unaevolucién semejantealadelltin,en 384 Manual de iteratura Sreapindslrncatore hase neomrenble Mase Steud oruidn Sn emer, spd Utne instanciaen una visi "etnocentist”, por purists, de an nen gone bro eutora Colombia drat te aps eat en mejor capaciad qe Mil Sefer para a yng emo lala el mc mpabencnuneve ead aed [Ettesies Por aoa, artaconsidrreleasisone come 1nd gucnenn ncn parse doe tltstdgeenivo ance nner nado sce ldo sorceress nv ene Eel desaljaban es rabes de lax ides portndo el anf oles de ar stnbl la ana SESREGS Semcon ominous scent ar 8 ean, por fo tant, sb ot ae eaciavegiad 9 deca, prion ee informan la infraestructura ideoldgica de todos los mitos ‘asculinos, ‘machistas, donjuanistas, etc., que han impreg- do orate cltores reer data con claro Prom eagle, como Tellme Maen spn fo ae oar or ‘Screen perenne ata ome aaron a Rl de a lat) dene foe imi eae iden los criticos que Seto qed novela, somo pete . sins sea eum tng, m= jo: ‘eleccin de un nombre adecuado para su perso- ee ae come un compenio oneal del mam, com Tre dela protagonist de Mild Sor non autora nos Aor is in medinion "mariana caxlina se balla tan existe gut Maviana de One y Alc del Tina Dic parce tia por elcontrate qa marcha ica y castellana del nombre y los apeliidos del personaje | Lanovelacolombiana despuls de G.G.M. 385 ‘—expresién de un acendrado pedigree familiar—ofrececonla inreductiblesingularidad americanade todo cuantoto definey lorodea. Pero el exquema o la nocién de persona que pot via crailana seria posible derivar del nombre (no un exquema de destino ode tragedia, también en intima vinculaciéa con una ctredad masculina adversa y con una desusada hereneia de nobleza, como l de Tess d’Ubervilles sino ese puto saquemna e vide» que, enlos limites tebricos dei género novela, Thibau det vislumbrars a propésito de Madame Bovary)*en la medi- dda en que, en concordancia con su paradoja ameticano. castellana, no llega a provocar la iusién de un eardcter de ‘mujer, rechaza el molde de una identidad convencional y por ahi mismo la posibilidad de entender su vida como despliegue éeneltiempodelabanico de un destino. En efecto, lasegmenta. én del personajeenfasessucesivas —Mariana iia, Mariana Joven y adulta, Mariana esposa, Mariana enferma mestal, ‘Mariana anciana— lo que parece proponer son otras tanta ldontidades de Mariana, como sel tiempo slo pudiera mani, festarseensuvida através de las fragmentacin,ocomasis6lo 4 partir de los distntos papeles ofunciones asumidos pudise aleanzar la necesaria consstencia hstrea. Por eso, nds que

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