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Menguar los 

índices de inseguridad en Venezuela es una deuda del


chavismo desde que está en el poder. Durante los últimos 18 años se creó
la Policía Nacional Bolivariana (PNB), se reestructuró los cuerpos seguridad y
se desarrolló una veintena de planes de seguridad, pero, los hechos delictivos
persisten. En 2016, 21.752 personas fueron asesinadas. Ahora, el Gobierno
nacional apuesta por darle competencias investigativas a las policías
municipales y regionales.

Luego de homologar a 435 funcionarios de las 23 policías estatales y cinco


policías municipales, (entre ellas PoliChacao), el ministro de Interior, Justicia
y Paz, Néstor Reverol, anunció, el pasado viernes, 3 de noviembre, que los
cuerpos uniformados podían dirigir investigaciones de delitos, cuyas penas no
superen los 8 años de cárcel.

Los defensores de la decisión consideran que ahora el Cuerpo de Investigaciones


Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) podrá enfocarse en resolver casos
de mayor complejidad, lo que agilizará la lucha contra el crimen en el país.

Se conoció que la cantidad de funcionarios del Cicpc activos está entre 7.500 a
8.000 detectives, la misma cantidad de detectives que había en 1999, que es
insuficiente para investigar todos los delitos que se cometen en Venezuela. Según
una fuente, se necesitan al menos 25.000 detectives para investigar todos los
delitos que ocurren en Venezuela.

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fiscal Luisa Ortega Díaz
Déficit de policías, fiscales y jueces

Para algunos criminólogos la decisión es contraproducente. Señalan que las


policías estatales y municipales no deberían distraerse de su función principal
(prevenir el delito) para asumir una nueva competencia.

El criminólogo y
experto en seguridad, Fermín Mármol García, explicó que la decisión del
Ministerio de Relaciones Interiores y Justicia en sí misma no es desacertada, solo
que bajo las condiciones actuales del país en el que no hay suficientes
uniformados custodiando las calles, no es viable.

En Venezuela existe un déficit de funcionarios policiales de alrededor de 87%,


lo que es “una cifra conservadora” indicó el especialista a Efecto Cocuyo. Desde
su perspectiva, la decisión del Ministerio agudizará el problema. “¿Qué se hace
solventando el déficit de investigadores si aumenta el déficit de policías
uniformados?”, se preguntó.
El experto considera que la decisión evidencia el “bochinche” institucional en
Venezuela, que no le permite a los organismos enfocarse en sus funciones
naturales, “como ocurrió con el Ministerio Público (MP), que
realiza investigaciones penales más allá de su función de origen”.

El MP actualmente posee laboratorios para hacer experticias penales, que le


permite recaudar evidencias que sirvan para armar acusaciones, lo que para el
criminólogo no debería ocurrir, ya que la institución no tiene la suficiente
cantidad de fiscales penales para cumplir con la función para la cual fue
originalmente creada. “Para eso existe el Cicpc”.

La cantidad de jueces penales también es insuficiente. Según el experto, se


necesitan 900 nuevos jueces en esa materia. “Se considera que en Latinoamérica
se necesitan al menos 9 jueces por cada 100.000 habitantes. En Venezuela hay
6.5 por cada 100.000 personas”.

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#InstintoDeVida

Zapatero a su zapato

Mármol García recordó que en el artículo 332 de la Constitución se establece la


creación de una policía nacional que cumpla funciones de seguridad, no de
investigación. “El sueño durante los debates Constituyentes de 1999, era que
existiera una policía robusta. Con la entrega de competencias investigativas a
las policías preventivas se irrespeta el génesis de la Constitución”.
Esa perspectiva es
compartida por el abogado y criminólogo y profesor de Criminología de la UCV,
Keymer Ávila, quien explicó a Efecto Cocuyo, que el Estado venezolano no está
configurado para que las policías municipales y regionales tengan competencias
investigativas, porque es un país federal, con leyes en materia penal que se
aplican en todas las entidades de igual manera.

“A diferencia de Estados Unidos, donde los estados tienen sus propias leyes
punitivas y a su vez, se rigen de leyes federales, en Venezuela la legislación en
materia penal es nacional”, explicó el criminólogo, quien reafirmó las facultades
del Cicpc como cuerpo diseñado para las investigaciones a nivel nacional.

“En Venezuela las policías no están jerarquizadas, esto quiere decir que el Cicpc
no es más que las policías regionales, ni éstas son más que las municipales. Cada
cual tiene su función, por lo menos así lo establece la legislación
correspondiente”, indicó Ávila.

El experto indicó que cada policía tiene su función específica. “Las policías
municipales son las más cercanas a las personas, están patrullando en la calle.
Éstas no tienen competencia de orden público, como sí las tienen las regionales,
que actúan cuando los policías de un municipio no pueden controlar la situación.
Así mismo, la PNB tiene sus grupos tácticos especializados, que ejercen fuerza
en situaciones en las que los delincuentes portan armamento de alto calibre,
que superan la capacidad de fuego de las policías regionales y municipales”.

“El Cicpc, en cambio, es una institución investigativa, que tiene que enfocarse en
sus competencias científicas, así como los investigadores de la serie
norteamericana CSI. Tú no ves a los de CSI persiguiendo infractores de
tránsito o patrullando las calles, ellos están en sus labores de investigaciones
científicas”, ejemplificó, al subrayar que para mejorar las investigaciones
criminales se requiere de más laboratorios y más detectives enfocados en esa
área.

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mundo

Las sanciones no corresponden a la complejidad del delito

El criminólogo Javier Gorriño explicó a Efecto Cocuyo, que determinar las


competencias investigativas por las sanciones establecidas por el delito,
complicará a los funcionarios, porque las sanciones no están relacionadas a la
complejidad de la investigación.
“Investigar un caso
de lesiones, es sencillo. Un policía puede actuar sin mayores complicaciones. El
funcionario levanta los testimonios y lleva a la presunta víctima a que la revise
un médico forense para que realice el informe. En cambio, en un caso de hurto
o robo, es más complejo, son varios los elementos a analizar para determinar un
presunto culpable”, señaló.

Para el especialista, las policías regionales y municipales no están preparadas


para asumir competencias investigativas, al no contar con el personal capacitado
y los laboratorios necesarios, pese a que el Ministerio de Interior, Justicia y Paz
asegura que ya hay funcionarios policiales capacitados.

Además, Gorriño señaló que los ciudadanos que, “ya de por sí no denuncian”,
seguirán realizando reportando delitos en el Cicpc. “Las personas prefieren ir al
Cicpc, porque consideran que hay más probabilidad que la denuncia trascienda.
La mayoría no denuncia en las policías regionales ni en las municipales”.

Perspectiva de Polichacao

El comisario retirado del Cicpc, Luis Godoy, quien actualmente funge


como Director de Seguridad Ciudadana de la Alcaldía de Chacao, explicó
que al ser el Ministerio Público la institución que dirige las investigaciones,
podrá determinar cuándo una policía no tenga la capacidad para indagar en algún
caso. “En la escena podemos darnos cuenta si podemos asumirlo o no, si es muy
complejo, lo pasamos a Cicpc”.

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