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Resumen conferencia sobre la cadena perpetua

Para empezar, se pone en duda qué tal efectivo (la cadena perpetua) termina
siendo la vía o alternativa en la medida en que no tiene y no cuenta con un
sistema que se compadece con los involucrados. La materia punible cuando es
de carácter político puede encontrarse en 2 situaciones las de mayor severidad
por la gravedad de atención y la priorización digamos de quien tiene la
titularidad de la acción penal como lo es para la fiscalía general del Estado.
Para los jueces de cada instancia una cosa es que tengan márgenes razonables
desde puntos de vistas distintos y ante situaciones complejas o finalmente por
lo que atañe a las garantías del debido proceso, pero esto no puede ser una
suerte de radicalidad en la que son tan distantes o tan distintos los criterios
jurídicos que aquellos casos de conmoción social que carecen de la confianza
de la población. La mayor cantidad de penas acumulativas son precisamente
las que se cometen en el ejercicio del poder estatal y además hay jugadas,
delitos imprescriptibles que no se persiguen hace rato. Se evidencia que se
impulsa después del cumplimiento de la pena para de esa manera editar una
inminente libertad.
Por ejemplo lo atinente a la prisión preventiva nadie puede estar más de un
año con prisión preventiva pero de una época en el que el 80% de los
procesados recibían pena, privación anticipada y privación preventiva de la
libertad, más bien el estado lo que ha hecho es una gran inversión en custodia
policial sobre todo cuando estamos hablando de estos sistemas electrónicos de
quien tiene prisión preventiva domiciliaria por quienes tienen restricción para
salir fuera del país, entonces toda esta suerte de herramientas también
empiezan a darnos una idea de que la privación de la libertad ambulatoria está
superando a la privación de libertad. En la perspectiva de los centros de
privación de la libertad hay actualmente un movimiento que considera que las
penas deben endurecerse aún más, es decir reducirse las garantías de
favorabilidad, reducirse los mecanismos alternativos a la prisión preventiva
que deben eliminarse las posibilidades de conmutación y que hoy más que
nunca la lucha contra la delincuencia debe ser en tiempos modernos, son unas
figuras draconianas es decir el estado puede exhibir fortaleza superior al
propio mal que impone la pena en otras palabras si la escuela clásica hablaba
de qué mal con mal se paga, en el sentido de que quien le hizo mal a la
sociedad paga ese mal con mal.
Lamentablemente en nuestro sistema latinoamericano que aún está madurando
tenemos que esta concepción retributiva según la cual vale la pena botar de
toda vitalidad la generación de un mal que ha hecho un delincuente, es decir
con esta pena de cadena perpetua o prisión perpetua vamos a eliminar el mal
de la sociedad. Por lo cual se entiende que si encerramos al delincuente en
cuatro paredes entre rejas y nunca más lo vemos ya se eliminó el mal de la
sociedad. Así pues, esto no es cierto, es una utopía encerrar al delincuente de
por vida solamente va a establecer que la sociedad vaya a mejorar en estas
problemáticas de la delincuencia, pero no en todo lo demás. Entonces
hablamos de la negación absoluta del principio derecho a la libertad; porque al
final el imputado o quien es sancionado con la cadena perpetua se convierte en
este objeto de la política criminal del Estado cuando debería ser al revés el
delincuente, el imputado que es sancionado no debería ser el objeto de la
política criminal, sino que la política criminal tendría que ser la dignidad de la
persona, principalmente de la víctima en este caso y también del delincuente.
En conclusión, muchos autores afirman que al establecer la prisión perpetua o
la prisión vitalicia estarían incurriendo en algo que no soluciona la
problemática por completo.

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