Manual de Electromiografía Clínica

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Manual de

Electromiografía Clínica
2ª edición

Editores
E. Gutiérrez-Rivas
M.D. Jiménez Hernández
J. Pardo Fernández
M. Romero-Acebal

Manual EMG.indb III 9/7/07 12:05:02


Reservados todos los derechos. Ni la totalidad ni parte de este libro pueden repro-
ducirse o transmitirse por ningún procedimiento electrónico o mecánico, incluy-
endo fotocopias, grabación magnética o cualquier almacenamiento de información
y sistema de recuperación, sin el previo permiso escrito del editor.

© 2007 Ergon
C/ Arboleda, 1. 28221 Majadahonda (Madrid)

ISBN: 978-84-8473-600-4
Depósito Legal: M-XXXXX-2007

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A nuestras familias.
A nuestros pacientes.

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AUTORES

Alonso-Ortiz, A. Coll Cantí, J.


Unidad Neuromuscular, Servicio de Neurología, Gabinete de Patología Neuromuscular, Servicio de
Hospital Universitario 12 de Octubre, Madrid Neurología, Hospital Universitari Germans Trias i Pujol,
Barcelona
Álvarez Ramo, R.
Gabinete de Patología Neuromuscular, Servicio de Cruz Martínez, A.
Neurología, Hospital Universitari Germans Trias i Pujol, Unidad de Electromiografía, Hospital La Luz,
Barcelona Madrid

Arpa Gutiérrez, J. Díaz Manera, J.


Servicio de Neurología, Hospital La Paz, Madrid Servicio de Neurología, Unidad de Enfermedades
Neuromusculares, Hospital de la Santa Creu i Sant Pau,
Baliñas Tojo, M. Universidad Autónoma Barcelona
Servicio de Neurofisiología, Hospital Clínico, Complejo
Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela Esteban Pérez, J.
Servicio de Neurología, Hospital Universitario
Bautista Lorite, J. 12 de Octubre, Hospital Ruber Internacional, Madrid
Servicio de Neurología, Unidad Neuromuscular,
Hospital Universitario Virgen del Rocío, Sevilla Fernández Rodríguez, J.M.
Servicio de Neurofisiología, Hospital Xeral-Cíes de Vigo,
Carballo Ortega, N. Pontevedra
Unidad de Electromiografía, Hospital Sant Pere Claver,
Barcelona García Marín, V.M.
Servicio de Neurocirugía, Hospital Universitario de
Castillo Sánchez, J. Canarias, Tenerife
Servicio de Neurología, Hospital Clínico, Complejo
Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela, Garrido Babío, J.M.
Departamento de Medicina, Universidad de Santiago de Servicio de Neurofisiología Clínica, Hospital
Compostela Universitario Nuestra Señora de Candelaria, Tenerife

Chamorro Muñoz, M.I. Goizueta San Martín, G.


Servicio de Neurología. Hospital Clínico Universitario Servicio de Neurofisiología, Hospital Universitario
Virgen de la Victoria. Málaga. Puerta de Hierro, Madrid

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Guerrero Sola, A. Mederer Hengstl, S.
Servicio de Neurología, Hospital Clínico San Carlos, Servicio de Neurología, Complejo Hospitalario de
Madrid Pontevedra

Gutiérrez-Gutiérrez, G. Montero Homs, J.


Servicio de Neurología, Hospital Universitario Servicio de Neurología, Hospital Universitario
12 de Octubre, Madrid de Bellvitge, L’Hospitalet del Llobregat, Barcelona

Gutiérrez-Rivas, E. Montes Latorre, E.


Unidad Neuromuscular, Servicio de Neurología, Servicio de Neurología y Neurofisiología,
Hospital Universitario 12 de Octubre. Hospital Universitario Virgen del Rocío, Sevilla
Facultad de Medicina, Universidad Complutense
de Madrid Montserrat Obiols, L.
Sección de Neurofisiología, Hospital Vall d’Hebron,
Illa Sendra, I. Barcelona
Servicio de Neurología, Unidad de Enfermedades
Neuromusculares, Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, Noya García, M.
Universidad Autónoma Barcelona Servicio de Neurología, Hospital Clínico, Complejo
Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela,
Jiménez Hernández, M.D. Departamento de Medicina, Universidad de Santiago
Servicio de Neurología y Neurofisiología. de Compostela
Hospital Universitario Virgen del Rocío, Sevilla
Pardo Fernández, J.
López Alburquerque, T. Servicio de Neurología, Hospital Clínico, Complejo
Servicio de Neurología, Hospital Universitario Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela,
de Salamanca Departamento de Medicina, Universidad de Santiago
de Compostela
Márquez Infante, C.
Servicio de Neurología y Neurofisiología, Pérez Errazquin, F.
Hospital Universitario Virgen del Rocío, Sevilla Servicio de Neurología, Hospital Clínico Universitario
Virgen de la Victoria, Málaga
Martín Vigo, A.I.
Servicio de Neurofisiología, Hospital Clínico, Pérez Lorensu, P.J.
Complejo Hospitalario Universitario de Santiago Servicio de Neurofisiología Clínica, Hospital
de Compostela Universitario Nuestra Señora de Candelaria, Tenerife

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Poza Aldea, J.J. Torres Colomer, M.
Servicio de Neurología, Hospital Donostia, Servicio de Neurofisiología, Hospital Clínico,
San Sebastián Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de
Compostela, Departamento de Psiquiatría, Radiología y
Pradas Orozco, J. Salud Pública, Universidad de Santiago de Compostela
Consultor de Neuromuscular, Profesor Asociado de
Neurología, Unidad de Neuromuscular, Servicio Turón i Sans, J.
de Neurología, Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, Unidad de Electromiografía, Hospital Sant Pere Claver,
Universidad Autónoma de Barcelona Barcelona

Raguer Sanz, N. Valls Solé, J.


Sección de Electromiografía, Servicio de Neurofisiología Unidad de Electromiografía, Servicio de Neurología,
Clínica, Hospital Universitari Vall d’Hebron, Barcelona Hospital Clínic, Barcelona

Rojas-García, R. Valls-Canals, J.
Servicio de Neurología, Unidad de Enfermedades Unidad de Electromiografía, Hospital Sant Pere Claver,
Neuromusculares, Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, Barcelona
Universidad Autónoma Barcelona
Veciana de las Heras, M.
Romero Acebal, M. Unidad de Electromiografía, Servicio de Neurología,
Servicio de Neurología, Hospital Clínico Universitario Hospital Clínic, Barcelona
Virgen de la Victoria, Málaga

Schestatsky, P.
Unidad de Electromiografía, Servicio de Neurología,
Hospital Clínic, Barcelona

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PREFACIO

El estudio de las enfermedades neuromuscu- cos (conoce bien la historia clínica del paciente en
lares requiere –además de la historia clínica, la cuestión, su exploración neurológica y las pruebas
exploración neurológica y diversas pruebas com- complementarias), el rendimiento en la interpre-
plementarias– de los estudios electrofisiológicos. tación de los hallazgos eléctricos es muy elevado.
Estas técnicas diagnósticas no son una prueba En este Manual se subraya, casi continuamente,
complementaria más, sino que deben considerarse la relevancia de la correlación clínico-electrofi-
como una prolongación instrumental de la explo- siológica, de capital importancia para llegar a un
ración clínica. Los resultados del estudio eléctrico diagnóstico correcto.
constituyen algunos de los hallazgos semiológicos
fundamentales en el diagnóstico de los trastornos La primera edición del Manual de Electro-
neuromusculares. Por esta razón los neurólogos –y miografía Clínica, del año 2000, se gestó como
cuantos especialistas tratan este grupo de enfer- consecuencia de los cursos de electromiografía
medades– deben estar familiarizados con la inter- básica para neurólogos que los editores organizan
pretación de los hallazgos electrodiagnósticos. La desde 1998. Los avances producidos desde la pri-
finalidad de este libro es proporcionar a quienes mera edición, con la generalización de técnicas
desean adentrarse en este apasionante mundo de como la estimulación magnética transcraneal o la
la electromiografía unos conceptos claros de las monitorización intraoperatoria, han motivado esta
bases electrofisiológicas, anatómicas y patológicas nueva edición del Manual de Electromiografía
de los estudios electrofisiológicos. Clínica.

La exploración electromiográfica no es una Al igual que en la primera edición, hemos con-


actividad estándar como un electrocardiograma o tado con la colaboración de neurólogos y neurofi-
una radiografía de tórax: cada caso plantea unas siólogos clínicos, todos ellos de reconocidos presti-
dudas concretas que hay que resolver con una de- gio y experiencia. A todos ellos queremos expresar
terminada estrategia, escogiendo qué nervios y qué nuestro agradecimiento por la calidad científica
músculos deben explorarse; a menudo los hallazgos de sus trabajos y su comprensión ante las necesa-
que se van obteniendo exigen un replanteamiento rias modificaciones que hemos realizado en sus
del estudio. aportaciones, con el sólo fin de obtener un texto
homogéneo en forma y contenido.
Cuando un estudio electromiográfico está reali-
zado por quien tiene experiencia en estas técnicas Agradecemos también la profesionalidad de
y, además, está familiarizado con los aspectos clíni- los componentes de la Editorial Ergon, que han

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hecho posible que este libro llegue a las manos de cen enfermedades neuromusculares, cuanto de los
los lectores. Nos complace igualmente reconocer que presentan síntomas en los que una evaluación
el apoyo y la colaboración que hemos recibido en electromiográfica es necesaria para avanzar en el
todo momento de Novartis Farmacéutica, sin cuyo camino del diagnóstico.
patrocinio no habría sido posible la edición de este
Manual.
Los editores,
Nos sentiríamos satisfechos si el esfuerzo de E. Gutiérrez-Rivas, M.D. Jiménez,
todos cuantos hemos participado en este libro re- J. Pardo, M. Romero Acebal
sultara de utilidad para los lectores y redundara en
beneficio de los pacientes, tanto de quienes pade- Madrid, enero 2007

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ABREVIATURAS

A: amperio mg: miligramo


Ach: acetilcolina ml: mililitro (centrímetro cúbico)
AchE: acetilcolinesterasa mm: milímetro
AchR: receptor de Ach m/s: metro/segundo
c/s o Hz: ciclos/segundo o herzios ms: milisegundo
cm: centrímetro ms/div: milisegundo/división
DF: densidad de fibras mV: milivoltio
div: división mV/div: milivoltio/división
dl: decilitro PEM: potencial evocado motor (potencial
ELA: esclerosis lateral amiotrófica de acción muscular compuesto)
EMFA: electromiografía de fibra aislada PES: potencial evocado sensitivo
EMG: electromiografía PESS: potencial evocado somatosensorial o
ENG: electroneurografía somestésico
g: gramo PUM: potencial de unidad motora
kg: kilogramo s: segundo
L: litro V: voltio
μ: micra VCM: velocidad de conducción motora
μV: microvoltio VCN: velocidad de conducción nerviosa
m: metro VCS: velocidad de conducción sensitiva
mA: miliamperio w: watio
MIO: monitorización intraoperatoria

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ÍNDICE

CONCEPTOS GENERALES

1. Introducción a la electromiografía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
J. Pradas Orozco

2. Electromiografía. Bases anatómicas y electrofisiológicas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13


L. Montserrat Obiols

3. Instrumentación en electromiografía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 29
N. Carballo Ortega, J. Turón i Sans, J. Valls-Canals

NEUROGRAFÍA

4. Estudios de conducción nerviosa motora y sensitiva:


hallazgos normales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 49
F. Pérez Errazquin, M.I. Chamorro Muñoz, M. Romero Acebal

5. Estudios de conducción nerviosa motora y sensitiva:


hallazgos anormales. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 61
M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin, M. Romero Acebal

6. Respuestas tardías: onda F, onda A y reflejo H . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 67


M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin, M. Romero Acebal

7. El reflejo de parpadeo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 73
J.J. Poza Aldea

8. Estimulación repetitiva . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 79
E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

9. Nervios comúnmente examinados . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 89


J. Pardo Fernández, M. Torres Colomer, M. Baliñas Tojo

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ELECTROMIOGRAFÍA

10. Análisis de la actividad muscular espontánea. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 105


R. Rojas-García, J. Díaz Manera, I. Illa Sendra

11. Análisis de la actividad muscular voluntaria . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 119


J.M. Fernández Rodríguez, S. Mederer Hengstl

12. Electromiografía de fibra aislada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 133


A. Cruz Martínez, J. Montero Homs, J. Arpa Gutiérrez

13. Músculos comúnmente examinados. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 149


G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

OTROS ESTUDIOS NEUROFISIOLÓGICOS

14. Potenciales evocados somatosensoriales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 177


T. López Alburquerque

15. Estimulación magnética central y periférica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 191


N. Raguer Sanz

16. Monitorización neurofisiológica intraoperatoria . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 205


P.J. Pérez Lorensu, J.M. Garrido Babío, V.M. García Marín

APLICACIONES CLÍNICAS DE LA ELECTROMIOGRAFÍA

17. Enfermedades de motoneurona . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 229


J.J. Poza Aldea

18. Radiculopatías . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 241


T. López Alburquerque

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19. Plexopatía braquial y lumbosacra . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 253
J. Esteban Pérez

20. Enfermedades de los nervios craneales. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 271


J. Coll Cantí, R. Álvarez Ramo

21. Mononeuropatías agudas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 285


E. Gutiérrez-Rivas, G. Gutiérrez-Gutiérrez

22. Mononeuropatías crónicas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 295


E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

23. Polineuropatías . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 319


M. Romero Acebal, M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin

24. Mononeuropatía múltiple. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 331


J. Pardo Fernández, M. Noya García, J. Castillo Sánchez

25. Enfermedades de la unión neuromuscular. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 339


E. Montes Latorre, C. Márquez Infante, M.D. Jiménez Hernández

26. Miopatías. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 355


J. Bautista Lorite

27. Enfermedades miotónicas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 373


A. Guerrero Sola

28. Síndromes de hiperactividad muscular . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 383


J. Montero Homs

29. Trastornos del movimiento . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 393


E. Gutiérrez-Rivas, G. Goizueta San Martín

30. Dolor neuropático . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 403


J. Valls Solé, P. Schestatsky, M. Veciana de las Heras

Manual EMG.indb Sec1:XVII 9/7/07 12:05:05


INTERPRETACIÓN DE LOS ESTUDIOS ELECTROFISIOLÓGICOS

31. Posibles errores en la realización e interpretación de los


estudios electrofisiológicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 413
E. Gutiérrez-Rivas, A. Alonso-Ortiz, G. Gutiérrez-Gutiérrez

32. Elaboración del informe electromiográfico . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 425


J. Pardo Fernández, A.I. Martín Vigo, M. Torres Colomer

Apéndice . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 433

Índice alfabético . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 457

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CONCEPTOS GENERALES

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Manual EMG.indb 2 9/7/07 12:05:06
Capítulo 1

INTRODUCCIÓN A LA ELECTROMIOGRAFÍA
J. Pradas Orozco

CONCEPTO DE ELECTROMIOGRAFÍA entre la estimulación de un nervio y la contracción


muscular a través de sus experimentos con ranas.
La electromiografía (EMG) debe contemplarse Interpretó que la electricidad se generaba y cana-
como una prolongación de la exploración neuroló- lizaba en el tejido nervioso y propuso el término
gica y considerarse como una consulta médica, que “electricidad animal”. Duchenne demostró en
consiste en la evaluación clínica y electrofisiológica 1833 que el músculo puede estimularse de forma
del sistema neuromuscular (sistema nervioso peri- percutánea y reconoció las posibilidades terapéu-
férico, unión neuromuscular y músculos esquelé- ticas del procedimiento. Posteriormente, en 1858,
ticos). Aunque el término “electromiografía” suele Remak descubrió que esos puntos del músculo más
usarse para designar todas las técnicas neurofisioló- fácilmente estimulables correspondían a las zonas
gicas utilizadas en el estudio funcional del sistema de entrada del nervio en el músculo: los puntos
neuromuscular, debería restringirse para denomi- motores. Erb introdujo en 1868 el método del elec-
nar el registro de la actividad eléctrica muscular trodiagnóstico de estimulación mediante corrientes
mediante un electrodo de aguja. galvánicas y farádicas, y describió los puntos de
estimulación eléctrica conocidos como “puntos
de Erb”. Continuó, así mismo, el trabajo de Du-
ANTECEDENTES HISTÓRICOS chenne en cuanto al desarrollo de la electroterapia,
ampliamente utilizada a finales del siglo XIX. En
Cuando se realiza un resumen histórico siem- esta línea, Barraquer Roviralta introdujo en España
pre es difícil escoger los nombres o sucesos más las técnicas iniciadas por Duchenne y desarrolladas
representativos. Es probable, por lo tanto, que la por Erb. En 1882 fundó el Dispensario de Electro-
selección realizada sea excesivamente subjetiva, y terapia en el antiguo Hospital de la Santa Creu,
que entre las personas y los acontecimientos escogi- lo que supuso el inicio de la Neurología en Espa-
dos “ni estén todos los que fueron, ni fueron todos ña(3). Es probable que haya que atribuir a DuBois
los que estén”. No se han incluido los nombres y -Reymond el comienzo de la EMG, puesto que
aportaciones más recientes, puesto que irán men- en 1851 fue el primero en registrar potenciales de
cionándose en los diferentes capítulos del libro. acción generados en el músculo. Lo mismo podría
Los interesados en el tema pueden encontrar más decirse de Von Helmhotz respecto a las técnicas de
detalles en revisiones más extensas(1,2). conducción nerviosa, puesto que fue el primero en
Galvani, profesor de anatomía en la Universidad medir la velocidad de conducción de los nervios,
de Bolonia, está considerado el fundador de la elec- primero en la rana en 1850, y posteriormente, en
trofisiología clínica. En 1791 estableció la relación el nervio mediano del ser humano en 1870.

Manual EMG.indb 3 9/7/07 12:05:06


4 J. Pradas Orozco

En 1925, Liddell y Sherrington idearon el actividad eléctrica del músculo en el hombre en


concepto de unidad motora, que constituyó una condiciones normales y patológicas”. Posteriormen-
importante contribución en el campo de la fisio- te, en 1948, Hodes, Larrabee y German fueron los
logía. Uno de los avances más decisivos en el de- primeros en realizar estudios de conducción mo-
sarrollo de la EMG fue el realizado por Adrian y tora en pacientes con enfermedades neurológicas.
Bronk, al introducir y desarrollar en 1929 el uso Dawson y Scout, en 1949, realizaron los primeros
de la aguja coaxial, lo que permitió por vez pri- estudios de conducción sensitiva. Puede conside-
mera el registro de potenciales de unidad motora. rarse que a partir de esas fechas quedó establecida
También fueron los primeros en utilizar un altavoz la utilización de la electromiografía en la práctica
para escuchar los sonidos generados por la activi- clínica habitual.
dad muscular, un aspecto crucial para el trabajo Deben resaltarse, finalmente, dos acontecimien-
del electromiografista. Las aportaciones de estos tos importantes para la expansión de la electromio-
autores, junto con el desarrollo del osciloscopio grafía. En primer lugar, la fundación de la Asociación
de rayos catódicos en 1930 y la invención de los Americana de Electromiografía y Electrodiagnóstico
amplificadores diferenciales en 1934, supusieron el (AAEE), actualmente denominada Asociación Ame-
establecimiento de la denominada electromiografía ricana de Neuromuscular y Medicina del Electro-
de detección (o EMG coaxial, o de aguja). A partir diagnóstico (AANEM), que se llevó a cabo en 1953.
de ese momento, se produjo un rápido avance en En segundo lugar, la celebración, en 1961, del Pri-
los conocimientos de la fisiopatología de la unidad mer Congreso Internacional de Electromiografía en
motora y aparecieron importantes publicaciones, la ciudad italiana de Pavia, lo que puso de manifiesto
como la de Denny-Brown y Pennybacker en 1938, el creciente interés, en aquel entonces, de una rela-
que mostraba la diferencia entre fasciculaciones tivamente nueva rama de la medicina.
y fibrilaciones, y la de Buchtal y Clemmesen en
1941, que establecía las características diferencia-
les entre atrofia miopática y por desnervación. En REALIZACIÓN DEL ESTUDIO ELECTROMIOGRÁFICO
el mismo año, Harvey y Masland demostraron la
existencia del decremento miasténico, mediante La electromiografía como extensión de la exploración
la estimulación repetitiva de un nervio motor y el neurológica
registro del potencial de acción muscular.
Otra de las circunstancias que supuso un avan- Tal y como se ha mencionado al inicio del
ce en la utilización y desarrollo de la EMG, tuvo capítulo, el estudio electromiográfico debe con-
como escenario la Segunda Guerra Mundial. El templarse como una extensión de la exploración
gran número de lesiones nerviosas periféricas que neurológica. No se trata, por lo tanto, de una ex-
se producían durante la contienda, llevó a la crea- ploración complementaria o de una prueba, sino
ción, en Gran Bretaña, de un grupo de trabajo de la continuación de la exploración neurológica
presidido por Riddoch. Una de sus contribuciones realizada mediante un equipo instrumental, el
fue la publicación de un manual de exploración de electromiógrafo, que se utiliza con la misma men-
lesiones nerviosas periféricas(4), que ha sido utiliza- talidad que el martillo de reflejos o el diapasón,
do por varias generaciones de neurólogos y que si- por ejemplo.
gue siendo recomendable para los residentes como
uno de los libros imprescindibles en su formación. El proceso del estudio electromiográfico
Del mismo grupo surgieron numerosos trabajos,
entre los que puede destacarse el que Weddell, La electromiografía no se realiza de forma es-
profesor de anatomía en Oxford, en colaboración tandarizada, sino que se diseña en cada caso en
con Feinstein y Pattle, publicó en 1944 sobre “la función de la historia clínica y la exploración neu-

Manual EMG.indb 4 9/7/07 12:05:07


Introducción a la electromiografía 5

TABLA I. Topografía lesional de los trastornos neuromusculares nuevas técnicas a las previamente planificadas. El
Asta anterior hecho de comenzar el examen por la historia y la
• Neuronopatía motora o enfermedad de neurona motora exploración, es también útil para crear un clima
de confianza entre examinador y paciente.
Nervio
• Neuronopatía sensitiva
Riesgos relacionados con el estudio electromiográfico
• Radiculopatía
• Plexopatía
Es importante conocer la existencia de ciertos
• Mononeuropatía
riesgos que conlleva el estudio electromiográfico(6).
• Multineuritis o mononeuropatía múltiple
Uno de los puntos más importantes es el control
• Polineuropatía
de la infección: el contagio puede producirse al
Unión neuromuscular paciente por parte del personal (electromiografis-
• Trastorno presináptico ta, técnico de EMG, etc.) o del material que este
• Trastorno postsináptico utiliza, o bien al personal por parte del paciente. Se
Músculo recomienda, por una parte, la adopción de medidas
• Miopatía preventivas para el personal (por ejemplo la vacu-
nación de la hepatitis B y la utilización de guantes
durante el examen). Por otra parte, para trabajar
rológica. El primer paso, por lo tanto, es la realiza- en condiciones de asepsia, es recomendable uti-
ción de la historia clínica –¡la parte más importante lizar agujas desechables siempre que sea posible.
de la consulta!–. La historia ha de estar centrada En caso de usar agujas reutilizables, éstas deben
en el motivo de consulta (o en la queja principal limpiarse con productos adecuados, incluirse poste-
del paciente), indagando todos los detalles sobre riormente en solución de alcohol isopropilo al 70%
cada uno de los síntomas y sobre los antecedentes durante 90 minutos, y a continuación esterilizarse
familiares, personales o patológicos que puedan en autoclave. También es aconsejable limpiar los
tener relevancia. La exploración neurológica cons- electrodos de superficie con solución de alcohol
tituye el siguiente paso. No es necesario que sea isopropilo al 70% entre paciente y paciente. Antes
completa, sino dirigida al problema del paciente, de realizar la inserción de la aguja, la piel se ha de
aunque debe incluir, como mínimo, el balance limpiar con alcohol. Si la zona está sucia o con-
muscular, los reflejos musculares y la sensibilidad. taminada debe lavarse con agua y jabón, aunque
Los síntomas y signos, que pueden ser similares en lo más adecuado es evitar la inserción en zonas
enfermedades de diferente etiología y pronóstico, infectadas o ulceradas.
deben ser analizados cuidadosamente en aspectos Otro de los puntos a tener en cuenta se refiere a
tales como su forma de inicio, progresión y patrón los pacientes con trastornos de la hemostasia, inclu-
de distribución(5). yendo a los que reciben tratamiento antiagregante
Una vez realizadas la historia clínica y la ex- o anticoagulante, y a los aquejados de trombocito-
ploración neurológica, el electromiografista ha penia o de déficit de un factor de la coagulación.
de establecer una hipótesis diagnóstica orientada Cada caso debe ser valorado individualmente, pon-
esencialmente a la topografía lesional del proce- derando los beneficios del estudio con los riesgos
so (Tabla I). En función de dicha hipótesis ha de de una hemorragia intramuscular. Si se decide
planificar el estudio electrofisiológico, decidiendo realizar la electromiografía con electrodo de agu-
cuáles son las técnicas neurofisiológicas necesarias ja coaxial en un paciente con estas características,
para confirmarla. Por otra parte, dependiendo de es aconsejable examinar músculos superficiales y
los hallazgos electrofisiológicos que vayan obtenién- pequeños, y comprimir el lugar de la inserción el
dose, puede modificar su estrategia inicial y añadir tiempo suficiente.

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6 J. Pradas Orozco

Los pacientes eléctricamente sensibles consti- que se elige depende, naturalmente, del problema
tuyen un grupo de riesgo en relación al estudio que se va a estudiar, una vez establecida la hipótesis
electromiográfico. Hay que referirse, en primer diagnóstica. En el caso de la electroneurografía
lugar, a los pacientes ingresados en la unidad de y de la electromiografía con electrodo de aguja
cuidados intensivos, especialmente sensibles por coaxial, cuáles y cuántos nervios y músculos se van
tener incorporados catéteres intravenosos, intraarte- a estudiar es algo que se decide tras la realización
riales e intracardiacos. Estos catéteres pueden con- de la historia clínica y la exploración neurológica, y
vertirse en conductores eléctricos dirigidos hacia que puede modificarse en función de los resultados
el corazón. En caso de que sea necesario llevar a que se vayan obteniendo. También hay que tener
cabo estudios de conducciones nerviosas en estos en cuenta la tolerancia y colaboración del pacien-
pacientes, los estímulos no deben aplicarse en la te, que son muy variables; si por algún motivo el
vecindad del catéter. En segundo lugar, hay que examen debe ser limitado (por la personalidad del
mencionar los pacientes portadores de marcapa- paciente, por el hecho de que se trate de un niño,
sos. El riesgo es bajo en los que llevan marcapasos etc.), hay que comenzar el estudio por los nervios
implantados, sobre todo si los estímulos se aplican y músculos que se consideren más informativos.
en zonas alejadas de aquellos. Si el marcapasos es Finalmente, hay que señalar la importancia de dis-
externo, no deben realizarse los estudios de con- poner de unos valores de referencia. Lo ideal sería
ducción nerviosa. que cada laboratorio de EMG tuviese sus valores
Finalmente, hay que señalar los pacientes en propios(7). Si no es así, las técnicas que se utilicen
los que pueda estar indicada la exploración con han de ser comparables a aquellas que se han em-
electrodo de aguja coaxial en músculos intercosta- pleado para obtener los valores de referencia.
les o paraespinales (cervicales o torácicos), debido En la electroneurografía se utilizan electrodos
a la proximidad de la pleura y el pulmón, existe de superficie, tanto para la estimulación del nervio
el riesgo de producir un neumotórax si la aguja como para la recepción del potencial de acción.
penetra hasta dichas estructuras. El electromiogra- Antes de iniciar el estudio es importante comprobar
fista debe sopesar los beneficios de la información la temperatura de la piel. Si es inferior a la correcta
que pueda obtener con los riesgos del neumotó- debe calentarse la zona en estudio, lo que puede
rax. Lo mismo sucede en relación con el riesgo de hacerse mediante una lámpara de infrarrojos.
peritonitis al examinar los músculos intercostales La conducción de las fibras motoras se lleva a
o abdominales. cabo mediante la estimulación de un nervio motor
o mixto a lo largo de su trayecto y la recepción del
Tipos de técnicas neurofisiológicas potencial de acción muscular compuesto (PAMC)
en un músculo, generalmente distal, inervado por
Las técnicas neurofisiológicas con que cuenta dicho nervio. La amplitud del PAMC depende del
el electromiografista son variadas y todas ellas son número de fibras nerviosas funcionales en el ner-
tratadas con detalle en los diferentes capítulos de vio, de la integridad de la unión neuromuscular,
este Manual. Las dos más habituales son los estu- del número de fibras funcionales en el músculo
dios de conducción nerviosa y la electromiografía y de la sincronía de activación. La velocidad de
con electrodo de aguja coaxial. De hecho, en la conducción se determina comparando las latencias
mayoría de pacientes remitidos a la consulta de de las respuestas producidas por la estimulación
EMG son las únicas que se aplican. En general, el de dos puntos a lo largo del trayecto del nervio
estudio suele iniciarse por la conducción nerviosa y midiendo la distancia entre dichos puntos. La
(motora o sensitiva), aunque el orden puede mo- utilización de dos puntos es necesaria para elimi-
dificarse en función del problema del paciente y nar el tiempo de conducción distal del nervio, el
del estilo del electromiografista. El tipo de técnica retraso sináptico que se produce a nivel de la unión

Manual EMG.indb 6 9/7/07 12:05:07


Introducción a la electromiografía 7

neuromuscular y el tiempo de despolarización de de fibras nerviosas funcionales y de su sincronía de


las fibras musculares. Es importante señalar que activación. La latencia se mide, generalmente, en
la velocidad de conducción motora refleja la de el comienzo de la fase negativa. A diferencia de la
los axones de conducción más rápida. La latencia conducción motora, la velocidad de conducción
distal es el tiempo transcurrido hasta el inicio de la sensitiva o mixta puede determinarse mediante un
respuesta (de la fase negativa) al estimular el nervio solo punto de estimulación, aunque también puede
en un punto distal, generalmente la muñeca o el hacerse entre dos puntos. En cuanto a la amplitud
tobillo. Dicho tiempo incluye la conducción en del PES y del PASC, generalmente se mide entre el
el segmento distal del nervio, la unión neuromus- pico de la fase negativa y el de la fase positiva.
cular y el tiempo de despolarización del músculo. La electromiografía con electrodo de aguja
Tanto la velocidad de conducción como la latencia coaxial se lleva a cabo mediante un electrodo de
distal dependen, básicamente, de la integridad de aguja que se inserta a través de la piel que recubre
la vaina de mielina del nervio entre el punto de el músculo. Generalmente, se utiliza una agu-
estimulación y el músculo. En cuanto al PAMC, ja concéntrica, en la que la cánula actúa como
debe registrarse su amplitud (fase negativa), dura- electrodo de referencia, y el hilo de acero alojado
ción, área y número de fases. en su interior y expuesto en la punta actúa como
La conducción de las fibras sensitivas se lleva electrodo activo. Una vez que el músculo ha sido
a cabo estimulando un nervio sensitivo o mixto, seleccionado para el estudio, debe procederse a
de forma ortodrómica o antidrómica. El potencial la localización del punto de inserción en base a
de acción sensitivo o potencial evocado sensitivo determinados puntos de referencia anatómicos.
(PES) puede obtenerse mediante la estimulación En este sentido, es recomendable la utilización
y recepción en un nervio sensitivo (conducción de textos que muestren con claridad el punto de in-
ortodrómica o antidrómica), estimulación de un serción para cada músculo y los posibles errores de
nervio sensitivo y recepción en un nervio mixto localización del mismo(9). Estos aspectos también
(conducción ortodrómica), y estimulación de un son considerados en otro capítulo de este Manual.
nervio mixto y recepción en un nervio sensitivo Antes de proceder a la inserción puede ser útil, en
(conducción antidrómica). El potencial de acción algunos músculos, solicitar del paciente la con-
sensitivo compuesto (PASC) es el que se obtiene tracción y relajación de los mismos para poderlos
mediante la estimulación y recepción en un ner- palpar. Con objeto de que la inserción sea lo menos
vio mixto. A efectos clínicos prácticos, el PES y dolorosa posible, es fundamental, por una parte,
el PASC pueden ser intercambiables, aunque el comprobar que el músculo esté completamente
PASC es el producto de potenciales de acción ge- relajado, y por otra, tensar la piel de la zona de
nerados, tanto en fibras sensitivas como en fibras inserción mediante el pulgar y el índice, o el índice
motoras. En ambos casos, al igual que lo mencio- y el medio de la mano libre. Una vez insertado
nado respecto a las fibras motoras, la velocidad de el electrodo se comprueba que la localización es
conducción sensitiva y mixta refleja la de los axones la adecuada solicitando al paciente que contraiga
de conducción más rápida. En el caso de la con- ligeramente el músculo.
ducción mixta se obtiene la velocidad de un grupo El estudio de cada músculo se inicia con el
de fibras, el de conducción más rápida, que no análisis de la actividad de inserción y la actividad
puede obtenerse con la conducción motora o sen- espontánea en reposo. La actividad de inserción,
sitiva. Se trata de las fibras Ia, que inervan los husos producida por la “irritación” de las fibras muscu-
musculares. Estas fibras son las de mayor calibre lares, se produce con cada movimiento de la aguja
(las más mielinizadas) y a menudo son las prime- dentro del músculo, y finaliza en el momento que
ras en afectarse en lesiones desmielinizantes(8). La se detiene el desplazamiento de la misma. La ac-
amplitud del PES y del PASC depende del número tividad espontánea, tanto la normal como la pato-

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8 J. Pradas Orozco

lógica, aparece con la inserción, pero persiste con AAEM ha especificado dichas tareas(10), que pue-
la aguja inmóvil. Respecto a cuántas inserciones den resumirse en los siguientes puntos:
deben realizarse en cada músculo, hay que decir – Preparar al paciente (explicar en qué consiste el
que depende del problema que se está analizando. examen, controlar la temperatura de la región
Puede ser conveniente estudiar pocos músculos en a explorar).
profundidad, como por ejemplo en el diagnóstico – Realizar los estudios de conducción nerviosa
de una posible miopatía; o estudiar una muestra bajo la supervisión del electromiografista.
más amplia de músculos, pero de forma más super- – Ayudar a obtener la relajación y cooperación
ficial, como sucede en el estudio de una radiculo- del paciente durante la EMG con electrodo
patía; o puede ser necesario analizar una muestra de aguja.
extensa de músculos y cada uno de ellos con dete- – Tener a punto el equipamiento utilizado en el
nimiento, como ocurre ante la sospecha clínica de estudio EMG.
una esclerosis lateral amiotrófica. No existe, por lo – Realizar tareas administrativas cuando sean
tanto, una regla exacta. Algunos autores han señala- necesarias.
do como técnica práctica de estudio de la actividad
espontánea, el examen de los cuatro cuadrantes Reglas cardinales de la electromiografía
del músculo, con 5-10 inserciones siguiendo una
línea de fuera a dentro en cada uno de los cuatro Preston y Shapiro(8) han publicado lo que ellos
cuadrantes(8). Una vez finalizado el estudio de la ac- denominan “Reglas cardinales de la electromiogra-
tividad de inserción y de la actividad espontánea, se fía”. Dos de ellas ya han sido mencionadas en este
lleva a cabo el análisis de los potenciales de unidad capítulo en más de una ocasión: por una parte, el
motora (PUMs), que consta de dos fases. En una hecho de que el estudio electromiográfico sea una
primera fase, se solicita del paciente que realice extensión del examen clínico y por otra, la idea
una contracción ligera del músculo con objeto de central de buscar siempre la correlación clínico-
observar de forma aislada los PUMs y analizar sus electrofisiológica. Las tres restantes también son
diferentes parámetros: duración, amplitud, número de gran interés. En primer lugar, si se observan
de fases y “estabilidad”. En una segunda fase, se alteraciones electrofisiológicas inesperadas que
solicita al paciente que realice una contracción no concuerdan con nuestra hipótesis clínica, hay
progresivamente creciente con objeto de analizar que pensar siempre en la posibilidad de un error
el patrón de reclutamiento de los PUMs. técnico y verificar todas sus posibles causas; en el
Otras técnicas incluyen las respuestas tardías caso de los estudios de conducción nerviosa, por
(onda F y reflejo H), el blink reflex (reflejo de par- ejemplo, la temperatura de la piel, la colocación
padeo), la estimulación repetitiva y la EMG de fi- correcta de los electrodos, la estimulación en el
bra aislada, entre otras. Todas ellas son tratadas con lugar adecuado y con intensidad supramaximal,
detalle en diferentes capítulos de este Manual. etc. En segundo lugar, y también ante la ausencia
de concordancia clínico-electrofisiológica, hay que
El papel del técnico de electromiografía volver sobre la historia clínica y repetir las partes
que creamos adecuadas de la exploración neuro-
El estudio electromiográfico debe ser planifica- lógica. Si es preciso, incluso puede ser de gran
do y realizado por un médico electromiografista. utilidad hacer volver al paciente y partir de cero.
Sin embargo, la incorporación al equipo de un Si se le explica con claridad la necesidad de una
técnico cualificado en electromiografía puede ser nueva evaluación realizada con más calma lo en-
de gran ayuda. El técnico de EMG puede llevar a tiende perfectamente y agradece el interés que se
cabo cualquier tipo de tarea necesaria para mejorar demuestra. Finalmente, si se observan alteraciones
la rapidez, eficacia y calidad del estudio EMG. La electrofisiológicas mínimas, que no concuerdan

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Introducción a la electromiografía 9

con el resto del estudio electromiográfico ni con hora por paciente, incluyendo la elaboración del
los datos clínicos, es importante no sobrevalorarlas. informe.
Este es uno de los puntos que demuestra la compe-
tencia y experiencia del electromiografista.
INDICACIONES DE LA ELECTROMIOGRAFÍA
El informe electromiográfico
La electromiografía tiene su papel esencial en
Una vez finalizado el estudio, debe llevarse la evaluación de los pacientes con trastornos del
a cabo el informe lo antes posible. Su desarrollo sistema neuromuscular (sistema nervioso periféri-
constituye un capítulo de este Manual. El informe co, unión neuromuscular y músculos esqueléticos),
debe incluir los siguientes apartados: aunque también puede ser útil en el estudio de los
– El motivo de la consulta. pacientes con trastornos del sistema nervioso cen-
– Un resumen de la historia clínica y exploración tral(11,12). Este Manual está dedicado básicamente a
neurológica, refiriendo todos aquellos datos que la electromiografía como elemento indispensable
puedan tener relevancia para el diagnóstico. en la evaluación neuromuscular.
– Una descripción de los hallazgos electrofisioló- El objetivo principal del estudio electromiográ-
gicos, incluyendo de forma detallada todos los fico es la localización de la lesión. Otros objetivos
datos relativos a las técnicas utilizadas y a los “secundarios” del estudio son informar acerca del
resultados obtenidos, de tal manera que otro proceso fisiopatológico subyacente en el caso de
electromiografista sea capaz de comprender las neuropatías y evaluar el grado de afectación
e interpretar los hallazgos. Para algunos no es y el curso evolutivo del proceso(8). Es importante
necesario describir en cada informe cuáles son señalar que el estudio electromiográfico no permite
los hallazgos normales y cuáles los patológicos, establecer diagnósticos específicos (una excepción
aunque en determinadas ocasiones puede tener podría ser la demostración de miotonía, e incluso
interés hacerlo. en este caso sería un diagnóstico genérico); es la
– Finalmente, la conclusión debe basarse en la correlación con los datos clínicos y otros aporta-
correlación de los datos clínicos y electrofisio- dos por diversos procedimientos y estudios (biopsia
lógicos, incluir enunciados de diagnóstico y muscular, biopsia de nervio, estudio inmunológico,
pronóstico, y si se cree conveniente, recomen- estudio genético molecular), la que establece el
daciones terapéuticas. No debe olvidarse que en diagnóstico definitivo. El estudio electromiográfi-
muchos casos el electromiografista es el consul- co puede ser especialmente útil en aquellos pa-
tor de patología neuromuscular. El médico que cientes en que es difícil la evaluación clínica, por
solicita el estudio electromiográfico agradecerá la presencia, por ejemplo, de dolor o trastornos
que el informe no se limite a un enunciado psicosomáticos.
diagnóstico basado en los hallazgos electrofi- En cuanto a las indicaciones propiamente di-
siológicos (que es posible que no comprenda), chas, lo más práctico es basarse en lo que algunos
sino que contenga información práctica, como electromiografistas conocemos como “decálogo”,
por ejemplo, sugerencias para realizar otro tipo publicado por Asbury en 1980, y que plantea las
de consultas o de estudios, o para aplicar un preguntas que la electromiografía puede respon-
determinado tipo de tratamiento. der en relación a los trastornos neuromusculares(13)
(Tabla II). A lo largo de los diferentes capítulos del
Duración del estudio electromiográfico Manual, se estudian con detalle cada uno de los
puntos que se enumeran a continuación:
El tiempo necesario para un examen es varia- 1. Diferenciación entre debilidad de origen cen-
ble, aunque debe calcularse una media de una tral y periférico.

Manual EMG.indb 9 9/7/07 12:05:08


10 J. Pradas Orozco

TABLA II. Indicaciones de la electromiografía* La obtención de dicha información (localiza-


• Diferenciación entre debilidad de origen central y periférico ción y grado) es esencial, para la toma de deci-
• Diferenciación entre debilidad de origen neurógeno y miógeno siones terapéuticas.
• Diferenciación entre radiculopatía y plexopatía 5. Diferenciación entre neuropatía multifocal
• Localización de la lesión y determinación del grado de afectación en (mononeuropatía múltiple) y polineuropatía,
las mononeuropatías y determinación del grado de afectación de las
• Diferenciación entre mononeuropatías múltiples y polineuropatías, fibras motoras y sensitivas.
y determinación del grado de afectación de los diferentes tipos de El estudio electromiográfico permite confirmar,
fibras por una parte, el patrón de distribución de la neu-
• Diferenciación entre neuropatías desmielinizantes y axonales ropatía (mononeuropatía múltiple frente a poli-
• Evaluación pronóstica en las neuropatías neuropatía), que en ocasiones puede ser equívoco
• Caracterización de los trastornos de la unión neuromuscular si se basa únicamente en los datos clínicos, y, por
• Identificación de signos de desnervación, fasciculaciones y miotonía otra, determinar el grado de afectación de los di-
en músculos “normales” ferentes tipos de fibras (predominantemente mo-
• Diferenciación entre calambre y contractura toras, predominantemente sensitivas, mixtas).
6. Diferenciación entre neuropatías desmielini-
*Modificada de Asbury, 1980.
zantes y axonales.
Uno de los objetivos del estudio electromiográ-
fico, como se ha mencionado anteriormente, es
En la mayoría de los casos, la clínica es suficien- la obtención de información acerca del proceso
te para establecer la diferencia. Sin embargo, fisiopatológico subyacente en las neuropatías.
en casos dudosos el estudio electromiográfico La diferenciación entre neuropatía primaria-
puede ser crucial para confirmar la impresión mente desmielinizante y primariamente axonal,
clínica. en ocasiones difícil, es crucial para planificar el
2. Diferenciación entre debilidad de origen neu- estudio encaminado a determinar la causa de
rógeno y miógeno. la neuropatía. Se ha podido observar que existe
Es importante remarcar que, en ocasiones, di- una correlación adecuada entre los hallazgos
cha diferenciación puede ser difícil por la co- electrofisiológicos y anatomopatológicos a nivel
existencia de alteraciones de ambos tipos en un del nervio sural(14). Por otra parte, en la mayo-
mismo músculo, o por las propias dificultades ría de los casos, la biopsia de nervio no añade
técnicas de interpretación, que muchas veces más datos que los suministrados por el estudio
son subjetivas. También es importante señalar electromiográfico(15). Por lo tanto, la realización
que a diferencia de la biopsia de músculo, en la del análisis anatomopatológico tiene unas indi-
cual solo se obtiene una muestra de un músculo caciones limitadas.
concreto, la electromiografía permite estudiar Por todo lo expresado en los puntos 5 y 6, es
diferentes puntos de distintos músculos, lo que importante afirmar que ante la sospecha clí-
proporciona una visión más general del proceso nica de neuropatía, el estudio electromiográfi-
en estudio. co es lo primero a realizar. Permite confirmar
3. Diferenciación entre radiculopatía (lesión pre- su existencia, definir de forma más exacta su
ganglionar) y plexopatía o mononeuropatía (le- patrón de distribución, determinar el grado
sión postganglionar). de afectación de los diferentes tipos de fibras
4. Localización de la lesión en las mononeuro- y obtener información acerca del proceso fi-
patías compresivas y determinación del grado siopatológico subyacente(15). A partir de estos
de afectación (desmielinización focal frente a datos puede iniciarse la investigación adecuada
degeneración axonal). a cada caso(16).

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Introducción a la electromiografía 11

7. Determinación del pronóstico en las neuropa- nico experimentado en el área de las enfermedades
tías (tipo de lesión, gravedad, actividad, reiner- neuromusculares, y conocer en profundidad todo
vación). lo relacionado con las técnicas neurofisiológicas
El estudio electromiográfico permite obtener in- que utiliza. Esto incluye desde las posibilidades del
formación sobre la gravedad de la lesión (cuan- instrumental que maneja, hasta la interpretación
tificación del grado de degeneración axonal), de errores que puedan derivarse, por ejemplo, de
actividad (denervación activa reciente, frente a variaciones anatómicas (inervaciones anómalas) o
denervación crónica) y evolución de la reinerva- de la propia técnica (artefactos).
ción. Todos estos aspectos son de gran interés, La preparación del electromiografista ha de
por ejemplo, en la evaluación de las neuropatías basarse en una formación neurológica, especial-
traumáticas. mente orientada a las enfermedades neuromus-
8. Caracterización de los trastornos de la unión culares, y una formación neurofisiológica, cen-
neuromuscular. trada en la electromiografía. En cuanto al lugar
Mediante la aplicación de técnicas neurofi- donde debe realizarse la formación, ha de ser
siológicas, como la estimulación repetitiva y aquel que esté en condiciones de ofrecer ambas
la electromiografía de fibra aislada, es posible vertientes. Es probable que el más idóneo sea
confirmar la existencia de un trastorno de la una unidad de patología neuromuscular inte-
unión neuromuscular, y diferenciar si dicho grada en un servicio de neurología. En función
trastorno es presináptico, como el síndrome de las áreas de interés de cada unidad, es posi-
de Eaton-Lambert, o postsináptico, como la ble que sea necesaria la colaboración de más de
miastenia gravis. un centro para conseguir una formación lo más
9. Identificación de signos de denervación, fascicu- completa posible. Algunos proponen que la for-
laciones y miotonía en músculos “normales”. mación del electromiografista debería iniciarse
La detección de signos de denervación y fas- por una residencia en neurología. Es evidente
ciculaciones es crucial, por ejemplo, en el que todos conocemos excelentes electromiogra-
diagnóstico de la esclerosis lateral amiotrófica, fistas que proceden de la rehabilitación o de la
especialmente en sus fases iniciales. Las des- neurofisiología clínica, pero estamos hablando
cargas miotónicas pueden incluso observarse ahora de cuál podría ser la filosofía educativa y
en músculos que no presentan el fenómeno un modelo teórico de formación.
miotónico clínico. Durante su período de formación, el residente
10. Diferenciación entre calambre y contractura. de neurología suele realizar una rotación por la
El calambre es eléctricamente activo, a diferen- unidad de neuromuscular de 3 a 4 meses. Este
cia de la contractura, que es eléctricamente si- período de tiempo es insuficiente para acreditar-
lente. En ésta, que puede observarse, por ejem- lo como electromiografista. Hay que decir, por lo
plo, en ciertos tipos de miopatía metabólica, tanto, con toda claridad, que un neurólogo no está
como la enfermedad de McArdle, la “contrac- capacitado para ejercer como electromiografista
ción” muscular tiene lugar sin que se produzca al acabar su residencia. Una vez finalizada esta,
excitación de la membrana muscular. necesita, como mínimo, un año con dedicación
exclusiva a la electromiografía para poder alcanzar
un nivel suficiente. Desgraciadamente, en nuestro
FORMACIÓN DEL ELECTROMIOGRAFISTA país no existen las vías oficiales adecuadas para
realizar dicha formación. Una posibilidad sería el
El electromiografista debe poseer un conoci- reconocimiento de una “competencia especial”
miento extenso de la anatomía, fisiolología y pato- en patología neuromuscular y electromiografía al
logía del sistema neuromuscular. Debe ser un clí- finalizar la residencia de neurología, reflejado en

Manual EMG.indb 11 9/7/07 12:05:09


12 J. Pradas Orozco

un quinto año de residencia. Otra posibilidad, más 2. Kimura J. Electrodiagnosis in diseases of nerve and muscle.
Principles and Practice. 3ra Ed. New York: Oxford Univer-
complicada que la primera opción, podría ser el
sity Press; 2001.
planteamiento de “itinerarios selectivos” para dife- 3. Martí-Vilalta JL. El naixement de la neurología catalana.
rentes especialidades de la neurología a partir del L’Avenç 1982; 55: 821-5.
tercer año de residencia. 4. Medical Research Council. Aids to the examination of
Como complemento, sería recomendable la the peripheral nervous system. Memorandum nº 45, 2ª
existencia de una certificación reconocida, como ed. Eastbourne: Ballière Tindall; 1986.
la que hay en EE.UU. Tal vez este objetivo consti- 5. Ringel SP. Clinical presentations in neuromuscular disea-
se. En: Vinken PJ, Bruyn GB, eds. Handbook of Clinical
tuya en un futuro próximo la clave fundamental. Neurology, Vol. 40. Amsterdam: North Holland; 1979. p.
La Asociación Americana de Medicina Electro- 295-348.
diagnóstica tiene estipulados los requisitos para la 6. Guidelines in electrodiagnostic medicine. American As-
obtención de dicha certificación de la siguiente sociation of Electrodiagnostic Medicine. Risks in electro-
diagnostic medicine. Muscle Nerve 1999; 22 (Suppl 8):
forma(10): S53-S58.
– Una residencia en neurología o rehabilita- 7. Valls J, Valls J, Valls A. Valors de referència. Associació
ción. Catalana d’Electromiografia, Barcelona, 1996.
– Un período de 6 meses con dedicación comple- 8. Preston DC, Shapiro BE. Electromyography and neuro-
ta a la electromiografía, que puede ser realizado muscular disorders: clinical-electrophysiologic correla-
durante o después de la residencia, en el que tions. 2nd ed. Boston: Elsevier Butterworth-Heinemann;
2005.
deben realizarse, de forma supervisada, un mí-
9. Delagi EF, Perotto A. Anatomic guide for the electromyo-
nimo de 200 pacientes. grapher, 2nd ed. Springfield: Charles C. Thomas; 1980.
– Un período de un año, después de completar la 10. Guidelines in electrodiagnostic medicine. American
residencia, con dedicación completa y asunción Association of Electrodiagnostic Medicine. The scope of
progresiva de responsabilidades, en el que de- electrodiagnostic medicine. Muscle Nerve 1999; 22 (Suppl
8): S5-S12.
ben estudiarse un mínimo de 200 pacientes.
11. Brown WF, Bolton CF. Clinical electromyography, 2nd
– Un examen teórico y práctico. ed. Boston: Butterworth-Heinemann; 1993.
Pese a las dificultades actuales para la formación 12. Guidelines in electrodiagnostic medicine. American Asso-
del clínico en técnicas diagnósticas, la electromio- ciation of Electrodiagnostic Medicine. The electrodiagnos-
grafía ha de ser un instrumento de trabajo para el tic medicine consultation. Muscle Nerve 1999; 22 (Suppl
8): S73-S90.
neurólogo dedicado al estudio de las enfermedades
13. Asbury AK. The clinical view of neuromuscular electrophy-
neuromusculares. De esta forma, se integran los siology. En: Sumner AJ, ed. The physiology of peripheral
conocimientos clínicos y neurofisiológicos, ade- nerve disease. Philadelphia: W.B. Saunders; 1980. p. 485-
más de otras disciplinas indispensables, como la 91.
histopatología, la genética o la inmunología, lo que 14. McLeod JG, Prineas JW, Walsh JC. The relationship of
permite una interpretación global de la patología conduction velocity to pathology in peripheral nerves.
A study of the sural nerve in 90 patients. En: Desmedt
que presenta el paciente. JE, ed. New developments in electromyography and
clinical neurophysiology, Vol. 2. Basel: S.Karper; 1973;
248-58.
BIBLIOGRAFÍA 15. Pradas J. La biopsia de nervio en el diagnóstico de las
neuropatías periféricas. Neurología 1986; 1: 94-5.
1. Bonner FJ, Devleschoward AB. The early development 16. Asbury AK, Gilliat RW. Peripheral nerve disorders. A prac-
of electromyography. Muscle Nerve 1995; 18: 825-33. tical approach. London: Butterworths; 1984.

Manual EMG.indb 12 9/7/07 12:05:10


Capítulo 2

ELECTROMIOGRAFÍA.
BASES ANATÓMICAS Y ELECTROFISIOLÓGICAS
L. Montserrat Obiols

La electromiografía (EMG) consiste básicamen-


te en el registro de los potenciales generados en el
sistema nervioso periférico, es decir, en la fibra ner-
viosa y/o muscular. Tener, por tanto, unos esquemas
muy claros de cómo se generan dichos potenciales
y de la estructura anatómica donde se registran es
fundamental para una buena interpretación de los
hallazgos electrofisiológicos de la EMG.

BASES ANATÓMICAS

Incluyendo el sistema nervioso vegetativo, cua-


tro tipos de neuronas forman el substrato funcional
del sistema nervioso periférico (Fig. 1):
1. La neurona motora o motoneurona (Nm), ubi-
cada en el asta anterior medular o el núcleo
craneal correspondiente del tronco cerebral;
su efector es el músculo y de su unión con un
número determinado de fibras musculares nace
el concepto de unidad motora (UM).
2. La neurona vegetativa preganglionar (Nv1), Figura 1. Diagrama del sistema nervioso periférico en el que se muestran
ubicada a nivel de la médula (nivel torácico los cuatro tipos de neuronas implicadas. *: efector vegetativo.
para el simpático, lumbar para el vago) y del
tronco cerebral (núcleo vagal).
3. La neurona vegetativa postganglionar (Nv2) es tores somáticos y vegetativos, siendo sus efecto-
el efector de la anterior, y la encargada de la res la propia neurona motora o determinadas
inervación visceral y cutánea vegetativa. interneuronas del sistema nervioso central.
4. La neurona sensitiva (Ns), que, instalada en el Estas cuatro neuronas, con sus prolongaciones
ganglio raquídeo espinal o en su equivalente axonales, delimitan la vertiente motora y sensitiva
craneal, extiende sus largas dendritas (funcio- del sistema nervioso periférico. Ambas vertientes,
nalmente axones) hasta conectar con los recep- íntimamente unidas por sinapsis a nivel medular

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14 L. Montserrat

y periférico a través del músculo (efector de la mo-


toneurona y receptor propioceptivo de la neurona
sensitiva), delimitan una unidad sensitivo-motriz en
la que recae toda exploración electromiográfica.
Considerando las estructuras periféricas por
las que transcurren las fibras nerviosas de las neu-
ronas que constituyen la unidad sensitivomotriz,
cabe esquematizar el sistema nervioso periféri-
co en unos niveles anatómicos muy útiles para
delimitar grupos de enfermedades. Así, cabe dis-
tinguir un nivel neuronal (cuerpo celular de la
motoneurona, neurona sensitiva o vegetativa), un
nivel radicular (raíces anatómicas intrarraquídeas,
motoras y sensitivas), un nivel plexular (donde
las fibras motoras y sensitivas aisladas en el nivel
radicular inician su compleja mezcolanza en tron-
cos primarios y secundarios), un nivel troncular Figura 2. Diagrama de un nervio somático.
(nervios mixtos, sensitivos y motores), un nivel
de transmisión neuromuscular (sinapsis de la ver-
tiente somática motora con la placa motriz) y, de mielina. Así pues, entre dos células de Schwann
finalmente, un nivel muscular (la fibra muscular restan mínimas porciones de axón denominadas
como célula efectora final). nodo, en contacto directo con la membrana basal.
Aunque no nos cansaremos de recomendar Una célula de Schwann, y por tanto la mielina,
que toda exploración EMG la inicie el especia- abarcaría lo que separa dos nodos, intervalo que se
lista teniendo in mente el esquema celular y de le denomina con toda lógica internodo. Es carac-
nivel lesional expuesto, el campo anatómico real terístico de una fibra mielínica no sólo la presencia
en el que se registrarán los potenciales van a ser el del aislante lipídico, sino el hecho de que cada célu-
nervio o el músculo. A continuación se expone lo la de Schwann envuelve un solo axón. En las fibras
que interesa conocer sobre ambos. amielínicas, en cambio, cada célula de Schwann
envuelve, sin formar mielina, varios axones, no uno
Fibra nerviosa y nervio solo, como ocurría en la fibra mielínica. En este
tipo de fibras, sin depósito mielínico, la membrana
La fibra nerviosa (Fig. 2), destinada exclusiva- basal encerrará varios axones anidados en una sola
mente a propagar los impulsos nerviosos, la forman célula de Schwann. Axón y fibra nerviosa no son,
el axón (prolongación protoplasmática del cuerpo obviamente, términos intercambiables(1).
neuronal) con su membrana o axolema, rodeado a Un nervio no es más que la agrupación de las
trechos por la célula de Schwann. Una membrana fibras nerviosas (mielínicas y amielínicas) en forma
basal encierra y aísla axón y células de Schwann, de- de fascículos (Fig. 2). El perineuro es la membra-
limitando la fibra nerviosa. Se distinguen dos tipos na delimitante del fascículo que, además de dar
de fibras, en función de su relación con la célula de protección y elasticidad a las fibras nerviosas, hace
Schwann; según esta célula forme o no mielina en también de barrera hemática. El epineuro es pro-
su proceso envolvente del axón, la fibra se denomi- piamente la pared limitante del nervio. Esta con-
na mielínica o amielínica, respectivamente. Las pri- formación fascicular, se repite en todos los nervios
meras fibras quedan, en los trechos que determina espinales, salvo a nivel radicular, donde no existe
cada célula de Schwann, envueltas por el depósito perineuro ni, por tanto, estructura fascicular. Esto

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Electromiografía. Bases anatómicas y electrofisiológicas 15

TABLA I. Clasificación de las fibras nerviosas


Sistemas Somático Vegetativo

Axonal
Morfología Mielínicas Amielínicas Mielínicas Amielínicas
Axonal-morf.
Simbología A C B C
Función Motoras Sensitivas Motor preganglionar Motor posganglionar
Función Aminérgico
subtipos α β γ1,2 Ia Ib II III dr C Colinérgico sC
Colinérgico
Efectores IyE Termoalgesia Neurona Fibra lisa
Receptores EF fus Ifus Propioceptor Exteroceptor polimodal Posganglionar corazón/glándulas
Diámetro de 20 15 8 4 22 15 7 1,5 3 1,5
la fibra (μ) 9 9 5 2 9 5 1 0,2 1 0,2
Velocidad 120 85 40/25 130 90 30 2 15 2
(m/s) 50 50 20/10 50 25 6 0,4 3 0,4
Origen Tubo neural Cresta neural Tubo neural Cresta neural
embriológico SNC SNP SNC SNP
Nerv. cutáneo
in vitro α δ C
I y E fus: intra- y extra-fusales; Ifus: intrafusales.

conllevará una especial susceptibilidad de las raíces teniendo en cuenta los criterios clásicos(4,5). Los datos
espinales a toda agresión(2). se han extraído de la experimentación animal (axones
de mamíferos) y son, hasta cierto punto, extensibles
Clasificación de las fibras nerviosas al ser humano. La columna de la izquierda muestra
diez posibles entradas que clasifican las fibras nervio-
Se pueden adoptar varios criterios para clasificar sas con criterios desde morfológicos a embriológicos,
las fibras nerviosas. Previamente se indicaba una divi- pasando por múltiples subdivisiones, que encarnan la
sión morfológica en función de que la fibra adquirie- variabilidad funcional de los distintos grupos.
ra o no mielina. Teniendo en cuenta la pertenencia
a uno u otro de los dos grandes sistemas periféricos, Fibra muscular y músculo
las neuronas implicadas en el sistema nerviosos pe-
riférico pueden también clasificarse en somáticas y El músculo es el efector somático universal
vegetativas. No menos instructiva es la clasificación del sistema nervioso periférico. Cabe afirmar, sin
por funciones o subfunciones motoras y sensitivas, miedo a exagerar, que toda actividad procedente
por el diámetro de las fibras o por su velocidad de del sistema nervioso central, voluntaria o refleja,
conducción. Todos los criterios clasificatorios son in- vía el sistema nervioso periférico, termina siempre
teresantes en un aspecto determinado, y todos ellos en una contracción muscular. El órgano muscular
se relacionan entre sí de alguna manera. La Tabla muestra una estructura fascicular y fibrilar adecua-
I es un intento de clasificación global, teniendo en da a la función contráctil para la que está destinado
cuenta todos los posibles criterios y su correlación. (Fig. 3). La fibra muscular constituye la unidad
Esta clasificación es modificada de la de Berthold(3), anatómica del músculo. Es una célula multinu-

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16 L. Montserrat

llamado sistema T, que penetra en el sarcoplasma


de la fibra y envuelve las estructuras fibrilares. Este
sistema tubular canaliza, por decirlo así, el poten-
cial de acción que se desplaza por el sarcolema
hacia las unidades fibrilares contráctiles.
Cada fibra muscular (Fig. 3) está constituida
por cientos o miles de fibras llamadas miofibrillas
y cada una de éstas por unos 1.500 filamentos o
miofilamentos estructurados en dos tipos de pro-
teínas: la actina y la miosina. Se ha descrito otro
componente proteico acompañando la actina, la
tropomiosina, menos conocido que los dos anterio-
res, pero considerado imprescindible para el buen
funcionamiento de los filamentos(6).
La interdigitación de los filamentos de actina y
miosina explica el carácter estriado de la fibra mus-
cular somática vista al microscopio. Dichas estrías
constituyen las bandas denominadas A, I, H, clara-
mente delimitadas en el microscopio electrónico
(Fig. 3). Los filamentos de actina están anclados
en la estructura Z que se repite periódicamente
a lo largo del filamento. Cada banda Z delimita
la unidad contráctil menor de la fibra muscular,
Figura 3. Diagrama que representa la estructura interna fibrilar de una
el sarcómero. La membrana Z es continua trans-
fibra muscular somática componente de la unidad motora. versalmente entre los distintos miofilamentos. De
ello resulta la alineación transversal de los distintos
sarcómeros y sus respectivas bandas y el aspecto
cleada formada por la unión de varios mioblastos estriado de la fibra muscular.
que conservan su núcleo embriológico. Ambos La contracción muscular (Fig. 4) es consecuen-
extremos de la fibra, salvo variaciones especiales, cia de la despolarización de la fibra muscular. El
quedan anclados en tendones sobre los que ejerce- potencial de placa motriz, generado por la libera-
rán tracción al acortarse. Histológicamente la fibra ción de acetilcolina (Ach) desde el terminal axonal,
muscular está constituida por un protoplasma, aquí genera, a su vez, el potencial de acción de la fibra
denominado sarcoplasma, de estructura también muscular, el cual se desplaza a lo largo de toda la
fibrilar, que contiene a lo largo varios núcleos. La membrana y penetra en el sarcoplasma a través del
membrana celular que aísla el sarcoplasma del ex- sistema tubular T. La presencia de dicho potencial
terior, como lo hacía el axolema con el axoplasma, de acción libera el calcio almacenado en las cis-
se denomina aquí sarcolema, y, al igual que aquel ternas sarcoplásmicas. El calcio liberado invade
para la fibra nerviosa, constituye la base bioeléctri- los filamentos de actina y miosina, combinándose
ca donde se generan y conducen los potenciales de con las cargas negativas de estos, lo que permite
la fibra muscular. El sarcolema muestra una zona el deslizamiento de los finos filamentos de actina
especializada, la placa motriz, donde se produce la alrededor de los de miosina. Así se acercan las ban-
sinapsis con el terminal axonal y se realiza la trans- das Z donde se insertan los primeros, el sarcómero
misión neuromuscular. En la membrana de la fibra se acorta y la fibra muscular se contrae. El calcio
muscular o sarcolema destaca un sistema tubular, liberado es bombeado de nuevo de forma activa

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Electromiografía. Bases anatómicas y electrofisiológicas 17

permite una mayor gradación de la contracción.


Consecuencia de todo ello es que los músculos
destinados a movimientos de precisión (oculares,
intrínsecos de la mano, laríngeos) poseen una tasa
de inervación (número de UM) muy alta y cada
UM está constituida en un escaso número de fibras
musculares. Todo lo contrario (menos UM y mayor
número de fibras por UM) se encuentra en los mús-
culos cuya función va destinada a movimientos ma-
sivos faltos de precisión. Estudios electrofisiológicos
en colaboración con la técnica de la depleción de
mioglobina, han podido objetivar tres tipos de UM
en función de su tiempo de contracción, resistencia
a la fatiga y tensión desarrollada (véase “Clasifica-
ción de las fibras musculares”). Una conclusión
axiomática de estos estudios es que todas las fibras
Figura 4. Esquematización del mecanismo contráctil de la fibra muscular. de una determinada UM son idénticas desde el
punto de vista histoquímico, de ahí la correlación
entre histoquimia y características electrofisiológi-
(ATP) a los depósitos del sarcoplasma. Esto causa cas de la UM(8,9).
de inmediato el deslizamiento de los filamentos de
actina hacia su posición de reposo, las bandas Z se Clasificación de las fibras musculares
alejan nuevamente y la fibra muscular se relaja(7).
Es importante tener presente que la activación Aunque la función final de todas las fibras
de un músculo estriado, siempre a partir de un musculares sea su contracción, no todas tienen la
nervio, comporta dos procesos claramente dife- misma carga enzimática en el sarcoplasma o en las
renciados: uno bioeléctrico, con la génesis de un mitocondrias, ni el comportamiento funcional es
potencial de acción en el sarcolema, que constituye idéntico para todas ellas. Clásicamente los múscu-
la base del registro electromiográfico, y otro pura- los estriados ya se clasificaban en rojos y blancos
mente mecánico, la contracción muscular, efecto en función de la coloración debida a su mayor
del primero, sin génesis alguna de potencial y por o menor contenido de mioglobina. Los primeros
tanto “inexistente” para el registro electromiográfi- eran músculos de contracción lenta y resistentes
co. Una deducción inmediata de este hecho es que a la fatiga, y los segundos de contracción rápida,
una contractura o contracción de la fibra muscular pero sensibles a la fatiga. Los músculos rojos abun-
sin previa despolarización del sarcolema puede ser daban donde su función era postural (contracción
silente en el EMG. sostenida) y los músculos blancos eran aquellos
Desde el punto de vista funcional el músculo músculos destinados a movimientos rápidos y finos,
está constituido por UM (Fig. 3), es decir, un grupo como los extraoculares y los intrínsecos de la mano.
más o menos numeroso de fibras musculares iner- Posteriormente se ha visto que, especialmente en
vadas todas ellas por el axón de una motoneurona. el ser humano, aquella división no es tan tajante,
Esta inervación del músculo en UM permite su y los estudios histoquímicos y electrofisiológicos
activación voluntaria de forma gradual, facilitando han evidenciado que existen gradaciones entre
con ello en ciertos músculos la finura de movi- ambos extremos, cayendo algunos autores en un
mientos para los que están destinados. Un mayor excesivo número de subdivisiones al guiarse por la
número de UM para una misma masa muscular distinta afinidad histoquímica de la fibra muscular.

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TABLA II. Clasificación de las fibras musculares


Tipo I IIa IIb

• Reacción enzimática
- ATPasa pH 9,4 ❍ ● ●
- ATPasa pH 4,6 ● ❍ ❏
- ATPasa pH 4,3 ● ❍ ❍
- NADH2-TR ● ❏ ❍
- Fosforilasa ❍ ● ●
• Enzimas oxidativas SO FOG FG
• Tiempo de contracción Largo Corto Corto
• Resistencia fatiga Alta Alta Baja
• Tipo de unidad motora S FR FF
Tinción: ●: alta; ❏: media; ❍: baja; SO: show oxidative; FOG: fast oxida-
tive glycolytic; FG: fast glycolytic; S: slow; FR: fast resistent; FF: fast fatigue.

Atendiendo a una correlación entre los hallazgos


enzimáticos y la función distinta de la fibra, cabe
clasificar en tres grupos las fibras musculares: tipo
I, tipo IIa y tipo IIb (Tabla II). Cada grupo tiene
una carga enzimática que la distingue y unas carac-
terísticas de la UM bien diferenciadas: UM lenta, Figura 5. Representación esquemática del origen del potencial de mem-
resistente a la fatiga, tiempo de contracción largo y brana de una fibra nerviosa de mamífero, válido también para la fibra
muscular.
tensión baja (S); UM rápida, resistente a la fatiga,
tiempo corto de contracción y tensión media (FR) y
UM rápida, poco resistente a la fatiga, tiempo corto Las características de membranas semipermeables
de contracción y tensión alta (FF)(9,10). del axolema y sarcolema son definitivas para entender
el comportamiento de las células excitables, como las
fibras nerviosa y muscular(11,12). Dichas membranas
BASES ELECTROFISIOLÓGICAS muestran una estructura formada por una doble capa
lipídica, impermeable al agua y al flujo de iones, con
La fibra nerviosa y la muscular son células po- moléculas proteicas insertadas en ella en forma de ca-
larizadas y excitables. Esto quiere decir que man- nales iónicos, con permeabilidad selectiva para iones
tienen en reposo una diferencia de potencial entre y aniones. Esta estructura “porosa”, pero selectiva de
su interior (negativo) y el exterior (positivo), que las membranas de las células excitables, es lo que les
son capaces de cambiar aquella polaridad despola- da la característica de semipermeables. Se distinguen
rizándose ante un estímulo adecuado y, finalmente, tres tipos de canales iónicos:
que son aptas para propagar dicha despolarización • Canales pasivos abiertos, selectivos para los dis-
a lo largo de toda la fibra. tintos iones.
• Canales cerrados en reposo, provistos de com-
Célula polarizada. Potencial de membrana puertas sensibles al voltaje, destinados unos al
ion Na+ y otros al ion K+.
La distinta concentración iónica entre el inte- • Canales cerrados en reposo, con compuertas
rior y el exterior de una célula es la causa directa sensibles a transmisores químicos. Son los ca-
de que ésta se mantenga polarizada (Fig. 5). nales de las estructuras sinápticas.

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Electromiografía. Bases anatómicas y electrofisiológicas 19

Puede interponer una barrera completa a su di-


fusión (caso de la mayoría de aniones proteicos),
facilitarla grandemente (caso del K+ y el Cl–) o
dificultarla sin impedirla (caso del Na+). Teóri-
camente para cada ion existiría un potencial de
membrana ideal en el cual éste se encuentra en
total equilibrio difusor, es decir, la difusión en
un sentido y otro es constante. El potencial de
equilibrio para cada ion, calculado a través de la
ecuación de Nerst, es muy distinto (Fig. 6). Es
llamativa la diferencia entre el teórico para el ion
Na+ (+ 58 mV) el del K+ (- 90 mV) y el del Cl– (-
85 mV): el primero muy alejado del potencial real
de membrana (- 85 mV); el segundo muy cerca-
no, aunque no idéntico y el tercero coincidente
plenamente. Queda claro que los potenciales de
equilibrio del K+ y especialmente el del Cl–, casi
están en equilibrio con el potencial de reposo de
la célula, mientras el sodio se encuentra en total
desequilibrio.
La ecuación de Goldman:

EMF (potencial de membrana mV) =


- 61 log C1P1 + C2P2 + A3P3 + A4P4 (intracelular)
C1P1 + C2P2 + A3P3 + A4P4 (extracelular)

relaciona matemáticamente los parámetros


Figura 6. Representación del registro intracelular del potencial de acción
de una fibra nerviosa en relación con los cambios de la conductancia para determinantes de la difusión de los principales
Na+ y K+. iones que contribuyen al potencial de membrana
de la célula nerviosa o muscular (concentración y
polaridad del catión [C] y anión [A] intracelular
La difusión de iones a través de la membrana y extracelular y su permeabilidad específica [P]),
semipermeable y el transporte activo de alguno permitiéndonos calcular a través de estos datos el
de ellos son los determinantes de la distribución potencial de membrana resultante(7).
o concentración iónica intracelular y extracelular
(Fig. 5). Transporte iónico activo en membranas semipermeables

Difusión iónica en membranas semipermeables Las membranas semipermeables tienen capa-


cidad para transportar activamente determinados
Un determinado ion (partícula cargada eléc- iones hacia dentro o hacia fuera de la célula, contri-
tricamente) tenderá a difundir hacia donde su buyendo, en gran manera, a la génesis del potencial
concentración es menor y la carga eléctrica de de reposo o de membrana. En la fibra nerviosa
signo contrario: hacia la negativa los cationes y y muscular este transporte activo actúa sobre los
hacia la positiva los aniones. La permeabilidad iones Na+ y K+ fundamentalmente, compensando
de la membrana para cada ion es determinante. el desequilibrio que, respecto al potencial de mem-

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brana real, mantienen los respectivos potenciales • Dada la alta permeabilidad de la membrana
de equilibrio para cada catión. Esto es especial- para el K+, éste difunde a su través hacia el ex-
mente llamativo en el caso del Na+, cuyo potencial terior, a favor del gradiente de concentración.
de equilibrio para sus características difusorias es Ello disminuye las cargas positivas del interior
de +58 mV, mientras que el potencial de reposo de la célula.
se sitúa en -85 mV. Para compensar la inevitable • El Na+, en cambio, dada su escasa permeabili-
tendencia de este ion a penetrar en la célula, la dad pasiva y la presencia de la bomba específica
membrana dispone de una bomba de sodio que que le impele hacia fuera, difunde escasamente
impulsará a este ion hacia el exterior, aligerando hacia el interior de la célula, pese a su claro
su concentración intracelular, hasta situarlo en gradiente de concentración.
equilibrio con el potencial de membrana. También • El resultado final es una clara negatividad del
existe para el catión K+ una bomba de potasio que interior de la célula respecto al exterior.
compensa el solo ligero desequilibrio de este ion • Son, por tanto, responsables finales del poten-
con el potencial de membrana (- 90 mV respecto cial de membrana los aniones no difusibles y la
- 85 mV), y en este caso lo hace impulsando K+ ha- fácil difusión del potasio hacia el exterior. Con
cía dentro de la célula. Mientras la difusión iónica ello se retienen cargas negativas y se extraen
pasiva no representa gasto de energía, la difusión positivas. El ion K+, dada su permeabilidad, es
activa comporta un trabajo energético que se extrae determinante de la magnitud del potencial de
del ATP de la membrana(13). membrana. El anión Cl– sin impedimentos para
su difusión desempeña solo un papel pasivo,
Potencial de membrana siendo determinante para él el factor carga que
lo impele fuera de la célula.
Si consideramos ahora todos los factores arriba
descritos, podemos tener una visión casi fílmica Despolarización y repolarización: el potencial de acción
de cómo se genera el potencial de membrana. Sa-
bemos que: El factor desencadenante de la despolariza-
• La membrana de la fibra nerviosa o muscular ción puede ser bien distinto (eléctrico, químico,
en reposo es 50 a 100 veces más permeable al mecánico, térmico), pero todos son causa del mis-
K+ que al Na+, y el Cl– difunde todavía con mas mo efecto: el aumento de la permeabilidad de la
facilidad que el K+. membrana al ion Na+, determinante de su entrada
• Dentro de la fibra hay aniones proteicos que masiva en el interior de la célula (Fig. 5).
prácticamente no pueden difundir a través de Todo estímulo que aumente la permeabilidad
la membrana. Ésta les es impermeable. de la membrana al Na+ favorece el proceso de des-
• La membrana de la fibra contiene una bomba polarización de la célula. La entrada de Na+ dismi-
que impele Na+ al interior y K+ al exterior de nuye el potencial de reposo, con lo cual se abren
la célula. las compuertas de los canales del Na+ sensibles al
Con todo ello, sucede lo siguiente (Fig. 5): voltaje, lo cual disminuye aún más el potencial de
• Gracias al trabajo activo de la bomba de sodio membrana, que a su vez abre más canales de Na+,
y potasio, resulta una alta concentración de K+ creando un circulo vicioso explosivo hasta cambiar
y una baja concentración de Na+ en el interior la polaridad del interior de la célula, que se hace
de la célula y una situación inversa en el exte- positiva respecto el exterior. La célula se ha despo-
rior. larizado y se ha generado un potencial de acción,
• La impermeabilidad de la membrana a los que ha partido de un valor negativo de -85 mV
aniones proteicos representa una carga nega- para alcanzar uno positivo de unos +45 mV, justo
tiva “prisionera” de la célula. el valor del potencial de equilibrio para el ion Na+.

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Electromiografía. Bases anatómicas y electrofisiológicas 21

La configuración de este potencial de acción sigue


con suma exactitud el perfil de la conductancia del
ion Na+ durante todo el proceso, contrastando con
la conductancia del ion K+ de perfil mucho más
lento, tanto en su aumento como en su disminu-
ción (Fig. 6)(14-16). La abertura explosiva de los ca-
nales de Na+ sensibles al voltaje puede explicar la
disminución e inversión de polaridad del potencial
de reposo hasta alcanzar el potencial de equilibrio
para aquel ion pero no aclara por sí solo el retorno
del potencial de membrana a su valor de reposo,
es decir, no explica la repolarización.
Es importante conocer el mecanismo por el
cual la célula retorna a su potencial de reposo.
Se ha descrito con anterioridad la presencia en
toda membrana excitable de canales del Na+ y K+
sensibles al voltaje. Su distinto comportamiento
se interpretaba por el hecho de ser portadores de
compuertas específicas, activadas en presencia de
un cambio en el potencial de reposo. Los canales
del Na+ tendrían dos compuertas, la m de respuesta
rápida y la h de respuesta lenta; los canales del K+ Figura 7. Comportamiento de los canales iónicos sensibles al voltaje du-
tendrían una sola compuerta, la n de respuesta rante la génesis del potencial de acción.
lenta. La despolarización del potencial de reposo
actúa en las tres compuertas: abre la m y cierra la h
de los canales del Na+ y abre la n de los del K+, pero despolarización generada por el estímulo debe
a distinta velocidad. La compuerta m es de abertura alcanzar un umbral (Fig. 8). Toda disminución
rápida y tanto la h como la n son de apertura lenta. del potencial de reposo que no alcance el nivel
Hasta alcanzar el máximo de la despolarización, umbral (alrededor de -45 mV) fracasa en la géne-
solo es eficaz la abertura rápida de la compuerta sis de un potencial de acción. Una vez alcanzado
m (entrada masiva de Na+), pero al llegar a este aquel umbral, el potencial de acción se dispara
punto, la compuerta h del canal del Na+, que se inexorablemente, sin precisar para ello mayor grado
ha ido cerrando lentamente, bloquea la entrada de de despolarización. El nivel umbral se interpreta
Na+, y la n del K+, que ha iniciado lentamente su como el punto en el que la entrada de Na+ en la
abertura, deja pasar libremente el K+ al exterior de célula, provocada por la despolarización, no se ve
la célula; ambas situaciones facilitan la repolariza- compensada por la salida de K+, precipitándose
ción, es decir, el retorno a un potencial negativo entonces aquélla masivamente hasta generar el
de reposo. El lento retorno de la compuerta n del potencial de acción.
K+ a la situación de cierre permite que siga esca- Es interesante remarcar que la génesis del
pando el K+ del interior, ocasionado con ello la potencial de acción no requiere gasto energético
hiperpolarizacion (el potencial de reposo es más alguno, es un fenómeno que se autoalimenta;
negativo que el habitual) transitoria tras la génesis la despolarización generada por el estímulo au-
de un potencial de acción (Figs. 6 y 7). menta la permeabilidad del Na+; ésta aumenta
No toda despolarización inicial desencadena la despolarización, la cual a su vez aumenta
un potencial de acción. Para que esto ocurra la la permeabilidad del Na +, etc. La génesis del

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Figura 8. Representación gráfica del efecto de un estímulo eléctrico en


función de su polaridad e intensidad.

Figura 9. A: flujo de corrientes que desencadena la despolarización origen


potencial de acción no precisa de las bombas
del potencial de acción; B: caída progresiva de la despolarización con la
de Na + y K +, que requieren gasto energético y distancia.
que son imprescindibles para mantener el po-
tencial de reposo. No deja de ser paradójico
que el mantenimiento del equilibrio iónico de El potencial de acción generado en cualquier
reposo de las fi bras nerviosa y muscular sea el punto de la fibra nerviosa o muscular se comporta
que precise de gasto energético. Desde luego, como un estímulo aplicado en aquel punto. La
los cambios iónicos que generan los potenciales zona de membrana despolarizada (negativa fuera,
de acción, entrada de Na+ y salida de K+, tienen positiva dentro) genera en el interior de la fibra
que ser “reparados”, ya que su pérdida definitiva unos flujos de corriente hacia la membrana todavía
dejaría la célula inexcitable. Sin embargo, es polarizada y desde ésta, por vía extracelular, hacia
tan minúsculo el trasiego iónico para la génesis la membrana recién despolarizada (Figs. 8 y 9).
de un potencial de acción, que se ha calculado Este flujo de corriente despolariza la membrana
que una fibra nerviosa sería capaz de generar y vecina, generando un nuevo potencial de acción,
transmitir mas de millón y medio de impulsos, que, a su vez, despolarizará a la membrana vecina
sin necesidad de recargar los iones con ayuda de de la misma manera que lo ha sido ella. Por tan-
las bombas energéticas. to, la conducción no consiste en el “transporte”
de un potencial, sino en la génesis continuada de
Propagación del potencial de acción potenciales. Esta visión de la propagación del po-
tencial de acción matiza la interpretación de la
El destino del potencial de acción autogenerado alteración de la conducción nerviosa. Por ejemplo,
en la fibra nerviosa o muscular es ser conducido a un bloqueo de conducción se producirá siempre
lo largo de ellas, convirtiéndose, así, en el mensa- que las corrientes generadas por un potencial de
jero universal del sistema nervioso. acción sean insuficientes para alcanzar el umbral

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Electromiografía. Bases anatómicas y electrofisiológicas 23

de despolarización de la membrana contigua, y


todo proceso que lentifique la génesis de un nuevo
potencial lentificará la velocidad de conducción
sin bloquearla.
La corriente generada por el potencial de ac-
ción decae con la distancia, de tal manera que,
mientras en el punto donde se genera sobrepasa
con mucho el umbral de despolarización de la
membrana, a cierta distancia cae ya por debajo
de aquel, incapaz por tanto, de despolarizar (Fig.
9). A aquel exceso de corriente generada por un
potencial de acción, muy por encima de la nece-
saria para despolarizar la membrana vecina, se le
denomina factor de seguridad para la conducción
nerviosa. La naturaleza asegura la conducción de
la fibra nerviosa con el exceso de corriente des-
polarizante del potencial de acción. Resulta evi-
dente que toda anomalía que disminuya el factor
de seguridad de aquella puede repercutir en la
fisiología de la conducción(17).
La propagación del potencial de acción fi-
siológico, es decir no originado por alteración
o estímulo artificial (p. ej., eléctrico) en la fibra
nerviosa periférica, siempre se desplaza en sentido
ortodrómico, eferente la motora (hacia el mús-
culo) y aferente la sensitiva (hacia una sinapsis Figura 10. Esquematización de los factores determinantes de la velocidad
medular). Los potenciales generados de esta ma- de conducción en una fibra nerviosa.
nera sólo pueden desplazarse en el sentido de
la membrana contigua aún polarizada, ya que la
otra donde se generó el potencial previo y que Factores determinantes de la velocidad de propagación
ha servido de estímulo para generar el actual, es
refractaria para una inmediata despolarización. La velocidad de conducción de una fibra ner-
Cuando la despolarización en un punto de la fi- viosa o muscular depende de la resistencia que
bra excitable tiene su origen en la estimulación ofrezca el axón a la propagación interna de las
artificial del laboratorio (p. ej., eléctrica) o en un corrientes de acción generadas por el potencial
proceso patológico (como la fasciculación), el po- de acción y a la resistencia de la membrana a ser
tencial de acción así generado encuentra a ambos atravesada por ellas. La primera resistencia guar-
lados del foco de despolarización de la fibra una da una estrecha relación inversa con el diámetro
membrana igualmente polarizada dispuesta a ser axonal y la segunda con la conductancia (facili-
despolarizada por las corrientes generadas por el dad para el paso iónico a través de la membrana)
potencial de acción. De este modo, la propagación y la capacitancia (capacidad de acumular carga
del potencial tiene lugar en los dos sentidos, el de signo opuesto a ambos lados de la membrana)
fisiológico ortodrómico y el anómalo antidrómi- (Fig. 10). Todo aumento del diámetro axonal y
co, hacia el cuerpo celular el motor y hacia los disminución de la conductancia y capacitancia
receptores el sensitivo. de la membrana, favorecerán la propagación del

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24 L. Montserrat

impulso, ya que evitan la disipación de éste en su Dentro de la fibra mielínica una relación tam-
trayecto intraaxonal y a través de la membrana. bién interesante es la de la longitud internodal (L)
En la fibra nerviosa amielínica el factor diámetro con el diámetro de la fibra (D). Ambas mantienen
axonal es el determinante fundamental de la ve- una conexión lineal directa con un factor de co-
locidad de propagación del potencial. En la fibra rrelación, quizá excesivamente variable para ser
mielínica la naturaleza añade en el internodo el fiable, pero indicativo, al menos, de que a mayor
aislante mielínico, que disminuye enormemente el diámetro mayor distancia internodal(3,18).
factor capacitancia al aumentar la separación del
medio intracelular del extracelular. Por otra parte Excitabilidad
la permeabilidad del Na+ se ve disminuida en el
internodo, debido a la escasez de canales del Na+ Estamos en condiciones de definir la excitabi-
sensibles al voltaje que están presentes en dicho lidad como el umbral de respuesta de una fibra
segmento, contrastando con su gran densidad a ni- nerviosa o muscular a un estímulo despolarizante.
vel del nodo. Esta resistencia del internodo al flujo Decimos que una fibra es muy excitable ante deter-
de corriente hacia fuera desplaza a ésta hacia el minado estímulo cuando su umbral para generar
nodo vecino, donde las condiciones son idénticas un potencial de acción es muy bajo. Ya indicába-
a las del axón amielínico para el desarrollo de un mos que pueden ser varios los estímulos capaces de
potencial de acción. De ello resulta que en la fibra alcanzar con mayor o menor facilidad el umbral de
mielínica, los potenciales de acción se generan de la fibra excitable. Se hablará fundamentalmente
nodo a nodo, es decir, la conducción es saltatoria, del estímulo eléctrico, por ser el universalmente
lo que significa que el milímetro aproximado que empleado en la exploración del sistema nervioso
separa cada nodo sólo consume tiempo para la periférico.
génesis de un nuevo potencial. Por el contrario, la Todo estimulador eléctrico consta de dos polos:
fibra amielínica en el mismo trecho tiene que ge- el cátodo o polo negativo y el ánodo o polo positivo;
nerar varios potenciales debido a las características teóricamente los electrones “fluirían” del primero
de su membrana, con el consiguiente consumo de al segundo. El cátodo es el auténtico estimulador.
tiempo. Es evidente la aceleración de la conduc- A su nivel la fibra excitable se despolariza, mientras
ción que supone la mielinización de la fibra, sin a nivel del ánodo se polariza, es decir, aumenta su
tener para ello que aumentar desmesuradamente umbral de excitabilidad, hasta el punto que puede
el diámetro axonal(14,15) (Fig. 10). llegar a bloquear la conducción de la fibra (bloqueo
En la fibra mielínica, diámetro axonal (d) y diá- anódico). Esta circunstancia debe tenerse en cuen-
metro de la fibra (axonal + mielina: D), guardan ta cuando se emplea la técnica de estimulación
una relación constante (d/D = g = 0,6) indicativa bipolar (ambos polos sobre la fibra nerviosa). Teóri-
del grosor de mielina idóneo para cada diámetro camente, si el ánodo queda alejado de la fibra esti-
axonal. De todas maneras, en las fibras mielínicas, mulada (estimulación monopolar) se evita el riesgo
diámetro de la fibra (D) y velocidad de conducción, del bloqueo anódico, pero se pierde precisión en el
muestran una relación directa: a mayor diámetro punto de estimulación y aumenta el artefacto que
más velocidad de conducción. El factor constante inevitablemente genera el estímulo.
de dicha relación se denomina factor de conversión El estímulo generado por el estimulador puede
(k), significando esto que operando con él cabe ser cuadrado o exponencial. El primero, alcanza
convertir el diámetro en velocidad de conducción la intensidad deseada instantáneamente, dura un
(D = VC / k), y viceversa (VC = k × D). Dicho tiempo concreto (< 1 ms farádico; > 1 ms galvá-
factor de conversión varía ligeramente (5,7 y 4,5 nico) y termina también instantáneamente. Por
según la fibra explorada tenga un diámetro mayor el contrario, el segundo se instaura de forma pro-
o menor de 8 mμ). gresiva (exponencial) hasta alcanzar la intensidad

Manual EMG.indb 24 9/7/07 12:05:14


Electromiografía. Bases anatómicas y electrofisiológicas 25

buscada para terminar abruptamente. Los impulsos


cuadrados son los adecuados para la estimulación
de la fibra nerviosa, mientras que los exponenciales
lo son para la fibra muscular. A la baja excitabilidad
de la fibra nerviosa ante los estímulos exponenciales
se denomina acomodación. La distinta capacitancia
de la membrana nerviosa respecto a la muscular es
la principal causa de estas diferencias.

Medida de la excitabilidad

Dos técnicas electrofisiológicas tienen cabi-


da dentro de la electromiografía clínica, como
medida de la excitabilidad de la fibra nerviosa o Figura 11. Curva de excitabilidad de nervio y músculo en función de la
muscular: intensidad (ordenadas) y duración (abscisas) del impulso eléctrico. Cual-
quier punto de la curva es el umbral para una determinada intensidad y
duración.
Curvas de intensidad-tiempo
Expresan el umbral de repuesta de la fibra en
función de la intensidad y duración del estímulo
eléctrico(19). Una disminución de la duración del cunstancia se ha utilizado en el electrodiagnóstico
impulso eléctrico precisa un aumento de la inten- clásico (curvas I/T practicadas en músculo) para
sidad de éste para alcanzar el umbral, o viceversa, objetivar si existía o no denervación del músculo
una disminución de la intensidad del impulso re- explorado. El advenimiento de la electromiografía
quiere un aumento de su duración para que sea ha desplazado por completo esta exploración. Es
eficaz. Esta relación inversa intensidad/duración se lógico, si su exclusiva finalidad era dictaminar la
expresa en una curva (curva I/T o I/D), cada punto presencia de denervación; en cambio no debería
de la cual nos indica el umbral de excitabilidad ser así si lo que se persigue es testar la excitabilidad
para cada una de las dos variables de estimulación de la fibra.
(Fig. 11). Existen dos puntos en la curva: en uno el
aumento de duración del impulso es ineficaz para Estudio del período refractario
compensar la baja intensidad de estimulación, y El estudio del cambio de excitabilidad que deja
en el otro el aumento de intensidad del impulso un potencial de acción en la fibra estimulada es el
no compensa la breve duración de este. Al primer otro método empleado en clínica electrofisiológica
punto se le denomina reobase y al segundo tiempo para testar la excitabilidad. Ya veíamos al estudiar el
útil. Son, por tanto, dos umbrales de excitabilidad potencial de acción que éste dejaba tras de sí una
específicos dentro de la curva, o, si se quiere, los momentánea refractariedad en la fibra, es decir,
dos puntos extremos de la curva I/T. La cronaxia otro estímulo, por intenso que fuera, dado en este
es el tiempo umbral para la intensidad doble de la corto período de tiempo era incapaz de despolari-
reobase. Estos tres puntos específicos de la curva zar de nuevo la fibra y generar un nuevo potencial
pueden ser por sí mismos indicadores cuantifica- de acción. Dando, por tanto, dos impulsos a inter-
bles de excitabilidad de la fibra investigada. Fibra valos conocidos, podemos investigar en qué estado
nerviosa y fibra muscular, por sus distintas carac- de excitabilidad, ha dejado la fibra el potencial de
terísticas de membrana, tienen curvas I/T muy acción generado por el primer estímulo (impulso
distintas y, consecuentemente, reobase, tiempo condicionante), a través de la respuesta obtenida
útil y cronaxia de valores muy dispares. Esta cir- con el segundo (estímulo test). Se sabe que todo

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26 L. Montserrat

potencial de acción deja tras de sí un cambio de ex- lentifica la conducción de los impulsos sucesivos,
citabilidad, en el que cabe distinguir tres períodos que en su desplazamiento a lo largo de la fibra, van
fundamentales(19): uno de refractariedad, otro de cayendo en él, facilitando con ello que algunos que
hiperexcitabilidad y un tercero de hipoexcitabili- le siguen se encuentren con el refractario absoluto
dad. Habría que añadir una fase transitoria entre del que les precede, quedando por tanto bloqueada
el primero y el segundo de refractariedad relativa. su conducción.
En una fibra mielínica, con ligeras variaciones en La refractariedad de la fibra a la despolarización
función del grosor de ésta, en el primer período, durante el período refractario absoluto es previsible,
de duración inferior a 1 ms, la fibra es totalmente según la teoría iónica, ya que los canales del Na+
refractaria a la génesis de un potencial de acción sensibles al voltaje, permanecen todavía cerrados
capaz de propagarse, no importa la intensidad del (compuerta h lenta) durante el tiempo que abarca
estímulo empleado. Esta fase se sigue de unos 2 el período refractario, no permitiendo la entrada de
ms de refractariedad relativa, en la cual un estí- Na+ que ocasione una nueva despolarización nece-
mulo de intensidad superior al condicionante es saria para la génesis de otro potencial de acción(7).
capaz de generar un potencial de acción propa-
gable, aunque con velocidad reducida. A estas Registro de potenciales
fases de refractariedad absoluta y relativa le sigue
la de hiperexcitabilidad o de umbral más bajo, de Un potencial de acción es siempre el registro
unos 6-7 ms de duración, en la cual un segundo de una diferencia de potencial entre dos electrodos
estímulo de intensidad inferior al condicionante que se ven influidos de forma asimétrica o sucesiva
desencadena un potencial de conducción igual al por la despolarización de la fibra excitable. Si uno
primero. Finalmente, a este período de hiperexci- de los electrodos, por su situación respecto la onda
tabilidad le sigue uno de hipoexcitabilidad o de de despolarización, no se ve teóricamente influi-
umbral más alto, de larga duración, alrededor de do por ella, se admite que su potencial es cero y,
30 ms, en el que se precisa mayor intensidad de por tanto, el otro electrodo activado registrará un
estimulación para obtener un potencial similar al potencial de acción respecto a cero. En esta situa-
condicionante. ción se dice que el registro es monopolar. Si, por
Como era lógico esperar, la excitabilidad de el contrario, ambos electrodos se ven influidos por
una fibra guarda una relación directa con su velo- el potencial que se desplaza, el potencial registrado
cidad de conducción, e indirectamente con todos es una diferencia del potencial captado por cada
los parámetros de aquella que se relacionan con la uno y se le denomina registro bipolar (Fig. 12). Si
velocidad de propagación del impulso. Las fibras de el potencial influye en parte de ambos electrodos
mayor diámetro y, por tanto, de conducción rápida, simultáneamente, el registro de dicha parte queda-
mostrarán un período refractario más corto que las rá cancelada en el registro, hasta el punto de que si
de conducción lenta. teóricamente ambos electrodos captaran simultá-
Teóricamente, la capacidad para transmitir im- neamente idéntico potencial el registro sería nulo,
pulsos de una fibra nerviosa depende de la duración es decir, la cancelación sería total.
de su período refractario. Así, una fibra mielínica En los laboratorios experimentales donde es
cuyo período refractario fuera de 0,5 ms sería teó- habitual la investigación electrofisiológica de una
ricamente capaz de transmitir 2.000 impulsos por sola fibra, los registros de potenciales suelen ser
segundo sin bloquearse la conducción. Sin embar- intracelulares, con el electrodo de referencia, en el
go, esto no ocurre así. La capacidad de conducir que se mide la diferencia de potencial, en situación
impulsos sucesivos es más baja de lo esperado con- extracelular (Fig. 13).
siderando el período refractario(18). Esto se debe a Cuando el registro es extracelular y especialmente
la influencia del período refractario relativo, que en clínica, los electrodos de registro quedan alejados

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Electromiografía. Bases anatómicas y electrofisiológicas 27

Figura 12. Registros extracelulares, monopolar y bipolar del potencial de


acción, mostrando, en cada caso, la influencia en el electrodo (registro
monopolar) o electrodos (registro bipolar) de la onda de despolarización
(recuadro enmarcado dentro de la fibra) que se desplaza desde el punto
de estimulación.

Figura 13. Representación del registro intracelular y extracelular (izquierda


del foco de despolarización y captan las diferencias
y derecha respectivamente) de una fibra nerviosa o muscular en reposo y
de potencial a través de un volumen conductor. El durante la génesis del potencial de acción.
registro se hace en conducción en volumen, lo que
significa la captación de unos potenciales positivos
previos, influencia del foco de despolarización que yor sea la distancia entre estimulador y registro.
se desplaza hacia o desde el electrodo (registro mo- En un nervio cutáneo muy utilizado in vitro (p.
nopolar) o electrodos (registro bipolar) (Fig. 12). ej., el nervio sural), aprovechando la biopsia diag-
Hasta aquí hemos hablado del registro de los nóstica, quedan delimitados tres potenciales(20): el
potenciales de acción efectuados en una sola fibra, denominado α, determinado por las fibras mielíni-
nerviosa o muscular. El registro se complica para cas cutáneas de mayor calibre (II) y, por tanto, de
su interpretación cuando éste se hace en un nervio conducción más rápida; el δ, perteneciente a fibras
(centenares de fibras activadas simultáneamente) mielínicas de menor calibre (III), y finalmente el
o en un músculo (activación multifibrilar, sea una potencial denominado C, que se acepta que ha
UM o el músculo globalmente). En ambos casos el sido generado por las fibras amielínicas.
potencial registrado, potencial compuesto de nervio En clínica electromiográfica el potencial com-
o músculo, es la suma electrónica de los poten- puesto de nervio (sensitivo o mixto) corresponde al α
ciales generados por cada fibra, no siendo nada de los estudios in vitro. Es llamativa la progresiva caída
sorprendente que, en función de la heterogeneidad de amplitud y aumento de duración del potencial a
de conducción de las distintas fibras, se presenten medida que el registro se aleja del punto de estimula-
fenómenos de cancelación y disgregación del po- ción. Esto demuestra la conducción fisiológicamente
tencial captado. De hecho, si el registro se hace en heterogénea del grupo de fibras determinantes del
el mismo nervio in vivo o in vitro la estimulación potencial a causa de fenómenos de cancelación y
simultánea de todas las fibras nerviosas genera una “disgregación”, responsables de la caída de amplitud
serie de potenciales, mejor delimitados cuanto ma- y aumento de duración con la distancia.

Manual EMG.indb 27 9/7/07 12:05:15


28 L. Montserrat

En el registro muscular la interpretación se Disorders of voluntary muscle. 6ª ed. Edinburgh: Chur-


chill-Livingstone London; 1994. p. 3-33.
complica, porque son tres los factores que pueden
10. Sewry CA, Dubowitz V. Histochemical and immunocyto-
influir en las características del potencial compues- chemical studies in neuromuscular diseases. En: Walton
to de músculo: la conducción heterogénea del ner- J, Karpati G, Hilton-Jones D, eds. Disorders of voluntary
vio, la transmisión neuromuscular y la conducción muscle. 6ª ed. Edinburgh: Churchil-Livingstone London;
de las fibras musculares, también heterogénea. Sin 1994. p. 261-369.
embargo, la lentificación de la conducción de la 11. Ruch TC. Patton HD. Physiology and byophysics. 20ª ed.
fibra muscular respecto a la nerviosa, hace que St. Louis: C.V. Mosby; 1974.
aquella enmascare la heterogeneidad de ésta y que 12. Katz B. Nerve, muscle and synapse. New York: Mc Graw-
Hill; 1966.
no se refleje en el potencial motor final.
13. Koester J. Resting membrane potential and action poten-
tial. En: Kandell ER, Schwarth JM, eds. Principles of neu-
ral science. 2ª ed. New York: Elsevier; 1985. p. 49-57.
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3. Berthold CH. Morphology of normal peripheral axons. En: 16. Koester J. Cell and molecular biology of the neuron. En:
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New York: Raven Press; 1978. p. 3-63. 2ª ed. New York: Elsevier; 1985. p. 49-57.
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5. Boyd IA, Davey MR. Composition of peripheral nerves.
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Manual EMG.indb 28 9/7/07 12:05:16


Capítulo 3

INSTRUMENTACIÓN EN ELECTROMIOGRAFÍA
N. Carballo Ortega, J. Turón i Sans, J. Valls-Canals

INSTRUMENTACIÓN, SEGURIDAD Y ORDENADORES EN EL un laboratorio donde el ruido ambiente sea bajo,


LABORATORIO DE ELECTROMIOGRAFÍA utilizando buenas técnicas de registro y ajustando
los parámetros del equipo de electromiografía para
Intrumentación básica en electromiografía atenuarlo, sin que se afecte perceptiblemente la
obtención de la señal.
Los equipos para la realización de electromio- En este capítulo consideraremos básicamente
grafía y potenciales evocados son aparatos de alto los componentes que configuran un equipo de
rendimiento que registran, procesan, y exhiben electromiografía y valoraremos las estrategias para
potenciales bioeléctricos de amplitud extremada- obtener un buen registro.
mente baja. Este es un procedimiento en donde
intervienen secuencialmente diversas partes de un Electrodos
sistema: las señales bioeléctricas son registradas Los electrodos son los elementos que captan la
inicialmente por electrodos y transmitidas por los señal bioeléctrica para transmitirla al equipo. En
cables del mismo a amplificadores; durante o des- un laboratorio de neurofisiología se dispone de dos
pués de la amplificación se realiza un proceso de clases de electrodos: de superficie y de inserción o
depuración o filtrado de la señal y su conversión de aguja. Existen varios tipos en tamaños y formas de
analógica en digital para su representación visual cada uno de ellos, que se emplearán según la téc-
y estudio, registrándose también el sonido de las nica a realizar. Entre los electrodos de superficie,
mismas; finalmente, se puede realizar representa- los hay discoidales, en placa, en anilla, en barra,
ción gráfica y almacenamiento en memoria de los autoadhesivos, etc.; entre los de aguja: monopola-
estudios para posteriores valoraciones. res, bipolares concéntricos o coaxiales, para fibra
La calidad de cualquier registro electrofisioló- aislada, flexibles, etc. En toda exploración se dispo-
gico se puede medir por el cociente señal/ruido. nen tres electrodos: uno activo que recibe la señal,
El ruido se refiere generalmente a los potenciales otro referencial que actúa como punto comparativo
termales generados por cualquier dispositivo elec- diferencial y otro llamado electrodo de tierra, que
trónico. Por otra parte, el término interferencia sirve como punto de referencia de voltaje cero para
representa los potenciales eléctricos indeseados. los amplificadores. Sin importar el tipo y el uso,
De una manera práctica, nos referiremos a los todos los electrodos registran el potencial deseado y
dos como ruido. En electromiografía es deseable el ruido de ambiente. Un modelo eléctrico simple
que el cociente señal/ruido sea máximo lo cual de un electrodo consiste en una fuente del voltaje
se consigue de diversas maneras: reduciendo al conectada con la impedancia. El voltaje representa
mínimo el nivel de ruido mediante el diseño de la señal, y el ruido y la impedancia representan el

Manual EMG.indb 29 9/7/07 12:05:16


30 N. Carballo Ortega, J. Turón i Sans, J. Valls-Canals

“contacto” entre el electrodo y el generador de reducido principalmente acortando la longitud de


la actividad eléctrica, y se mide en ohmios. Una los mismos. Si se necesita utilizar cables largos, mu-
impedancia baja implica un buen contacto con chos fabricantes los ofrecen aislados, reduciendo
ruido bajo, y viceversa. En registros clínicos, se así el ruido. Los electrodos de plomo individuales
procura reducir la impedancia del electrodo. Los deben ser de longitud similar, y deben estar cerca.
electrodos intramusculares de aguja están en con- Ya veremos más adelante que este acercamiento
tacto directo con los fluidos corporales y, por lo facilita la supresión del ruido. En registros monopo-
tanto, tienen impedancia baja. La impedancia de lares de electromiografía de aguja, se debe poner el
los electrodos de superficie es mucho más alta. Esto electrodo de referencia cerca de la aguja. El cable
se reduce utilizando buenas técnicas de uso del eléctrico y el del estimulador se deben mantener
electrodo. Primero, la superficie de la piel se limpia lejos del electrodo de registro para reducir la in-
para quitar los aceites, las lociones, y los perfumes; terferencia.
los cosméticos son a menudo conductores pobres
de la electricidad. Después, se utiliza un gel de Amplificador
limpieza para quitar la capa de células muertas en El amplificador es probablemente el componen-
la superficie de la piel. Finalmente, un gel electro- te más crítico de un instrumento electrofisiológico.
lítico se aplica a la piel antes de que se coloque el Un potencial sensorial del nervio de algunos micro-
electrodo para procurar una baja resistencia entre voltios de amplitud es magnificado a varios cientos
los fluidos corporales y el electrodo de registro. Tal de milivoltios antes de ser procesado y mostrado.
preparación es cuidadosa y obligatoria cuando se Al mismo tiempo, el amplificador debe suprimir el
espera que la amplitud de la señal sea baja, como ruido ambiente de alta amplitud. La amplificación
por ejemplo en electroencefalografía, estudios de selectiva de los potenciales electrofisiológicos es
potenciales evocados y exámenes de conducción lograda usando un amplificador diferencial. El am-
nerviosa sensitiva. Cuando se utilizan electrodos plificador diferencial requiere tres entradas: activo,
reutilizables, los residuos de los fluidos corporales, referencia, y tierra. En muchos instrumentos, estas
del gel, o de la suciedad aumentarán la impedancia conexiones son de un color determinado para la
del electrodo, por lo que la limpieza de la superfi- facilitar el reconocimiento. La entrada-salida carac-
cie de los mismos reducirá la impedancia. terística del amplificador se puede definir como V0
= G x (Va - Vr), donde V0 es el voltaje a la salida,
Cables Va es el voltaje registrado por el electrodo activo,
Son los elementos conductores que sirven de Vr es el potencial registrado por el electrodo de
unión entre el electrodo y el amplificador del referencia, y G es el aumento del amplificador. En
equipo. Además de establecer el acoplamiento, el estudio electrofisiológico, los electrodos activo y
los cables también se comportan como antenas de referencia registran diferentes potenciales (Va es
registrando el ruido ambiente presente en forma diferente de Vr). Su diferencia es magnificada por
de radiación electromagnética emitida por una el amplificador. En contraste, la alta amplitud del
variedad de otros dispositivos. Los cables de es- ruido es igual en ambas entradas del amplificador
tos dispositivos eléctricos ajenos también emiten (Va = Vr). La diferencia de las señales de ruido en
radiación, incluso cuando están apagados; por lo las entradas activa y de referencia es cero. Sin im-
tanto, todo instrumento eléctrico cercano debe portar el aumento del amplificador, no será visto en
desenchufarse. Los monitores del ordenador, las la salida. Esto permite que el amplificador diferen-
luces fluorescentes, e interruptores más débiles son cial amplifique los potenciales electrofisiológicos
también fuentes de radiación. Los estimuladores pequeños selectivamente, mientras que suprime el
usados con el instrumento generarán ruido cuando ruido de fondo. Los amplificadores reales no son
están activos. El ruido registrado por los cables es tan perfectos, y también amplifican la señal que es

Manual EMG.indb 30 9/7/07 12:05:16


Instrumentación en electromiografía 31

común en la entrada activa y en la de referencia,


es decir, el ruido.
El ruido es igual en ambos electrodos. Sin em-
bargo, la impedancia de cada electrodo podría ser
diferente y, por lo tanto, el ruido en las entradas
del amplificador no se cancelaría. Aparecería como
señal diferenciada, y se vería con alta amplitud en
la salida del amplificador. Por lo tanto, se debe
intentar conseguir una impedancia similar en todos
los electrodos. En los registros de electromiografía
con aguja concéntrica, el electrodo activo y el de
referencia deben estar en contacto directo con los
fluidos corporales. Ambos electrodos tienen impe-
dancia baja. En contraste, la superficie de registro
activa en electromiografía con aguja monopolar es Figura 1. Cambios en la señal con el ajuste de los filtros.
intramuscular y tiene impedancia baja y el electro-
do de referencia se coloca en la superficie de la piel
y tiene impedancia más alta. Esta diferencia en la obtener un filtro de banda. Se caracteriza por dos
impedancia puede hacer los registros monopolares frecuencias: la frecuencia baja y la alta. Una señal
más susceptibles al ruido. sinusoidal de frecuencia que esté dentro de la ban-
La clave para mejorar el cociente señal/ruido da pasará a través del circuito sin atenuación.
es emparejar y reducir al mínimo las señales, tales Cualquier señal se puede construir como suma
como el ruido en la entrada del amplificador. Por de ondas de diversas amplitudes. Cuando la señal
lo tanto, como fue precisado anteriormente, los pasa a través del circuito del filtro, algunas de las
electrodos deben ser de longitud similar y deben frecuencias serán atenuadas, siendo la señal en
estar cerca uno de otro. Este acercamiento dará el la salida del filtro deficiente en esos componen-
mismo ruido en todas las entradas del amplificador. tes. Los filtros condicionan las señales y pueden
La impedancia reducida y emparejada del electrodo cambiar la forma de onda de los potenciales. Esto
y el uso de cables blindados atenuarán el ruido. afectará a las medidas de la señal. Por lo tanto, es
importante entender la relación entre los ajustes
Filtros del filtro y las señales de electromiografía. Esto se
Los filtros son circuitos usados para condicionar describe probablemente mejor en la figura 1, en la
señales. Hay diseñados diversos tipos de filtros, por que observamos cómo dando un paso de entrada
ejemplo, de altas frecuencias, de bajas frecuencias, de voltaje, inicialmente la amplitud de la señal es
muesca, banda. cero (línea de base), y entonces cambia repenti-
Una señal sinusoidal es aplicada a la entrada namente a un valor más alto (Fig. 1C). El borde
del filtro, y se mide a la salida. El cociente entre la de levantamiento de este paso representa el com-
amplitud en la salida y en la entrada es la ganancia ponente de alta frecuencia de la señal. El valor de
del filtro. alto voltaje constante representa el componente de
Los filtros de altas frecuencias bloquearán aque- baja frecuencia. Cuando se reduce el ajuste de alta
llas más altas que el corte de filtro, mientras que frecuencia (Fig. 1D), la señal cambia lentamente.
permitirían pasar frecuencias más bajas. En un El tiempo requerido para alcanzar del 90 al 95%
filtro de bajas frecuencias, aquellas menores que de la amplitud máxima se llama el tiempo de su-
el valor de corte se atenuarán. Combinando un bida. Cuando se reduce el valor en el filtro de alta
filtro de altas frecuencias y uno de bajas, se puede frecuencia (Fig. 1E) (mayor filtro de frecuencias

Manual EMG.indb 31 9/7/07 12:05:17


32 N. Carballo Ortega, J. Turón i Sans, J. Valls-Canals

altas), el tiempo de subida se incrementa. Cuando


se aumenta el ajuste de la frecuencia baja (mayor
filtro de frecuencias bajas), se fuerza la señal a vol-
ver a la línea de base (Fig. 1B). Cuanto más alto
sea el valor de baja frecuencia, será más rápida la
vuelta (Fig. 1A).
Cuando el rango de banda es reducido, pasará
menos señal a través del filtro. Entonces, la ampli-
tud de la señal de electromiografía será menor. La
amplitud del potencial de acción muscular será
reducida cuando el filtro de bajas frecuencias se
aumenta de 3 a 100 Hz. Así también se forzará a
la señal a volver a la línea de base. La duración del
potencial también será menor (Fig. 2).
Cuando se registra un potencial de acción
sensitivo a dos diferentes ajustes de filtro de altas
frecuencias se puede ver también un cambio en
la amplitud y la latencia. Cuando se dejan pasar Figura 2. Cambios en el PEM según los filtros que se usen. 30 ms 10
frecuencias altas, la amplitud de la señal será ma- mV. 1. latencia 3.1; Amplitud: 12,2 mV; filtros 3-10.000 Hz; 2. latencia 3,15
ms; Amplitud: 5,8 mV; filtros 100-10.000 Hz.
yor y la latencia del pico menor. El ruido de alta
frecuencia que se podrá ver en la línea de base será
atenuado filtrando frecuencias altas. Estimulador
Los ajustes típicos usados en registros electrofi- La estimulación nerviosa periférica se realiza co-
siológicos están plasmados en la Tabla I. múnmente con estimuladores eléctricos, menos con
No nos deberíamos desviar de estos valores para estimuladores magnéticos. Un estimulador eléctrico
prevenir la distorsión de la señal y los efectos en las consta de dos electrodos: ánodo y cátodo, fluyendo la
medidas de latencia y amplitud. Sin embargo, en corriente eléctrica desde el cátodo, por lo que, para
algunas ocasiones, se pueden utilizar cambios en realizar una estimulación nerviosa se debe colocar el
los ajustes para apreciar mejor las características estimulador sobre el nervio con el cátodo orientado
de la señal. en la dirección donde se dirija el impulso.

TABLA I. Ajustes de filtro recomendados para diferentes test electrofisiológicos


Test Frecuencia baja (Hz) Frecuencia alta (Hz)

Conducciones nerviosas de rutina 3-20 2.000-10.000


Electromiografía convencional 10-20 10.000
Análisis cuantitativo de potenciales de unidad motora 2-5 10.000-20.000
Electromiografía de fibra única 500-2.000 10.000-20.000
Respuesta simpática cutánea ≤ 0,1 100+
Potenciales evocados somatosensoriales 3-30 3.000+
Potenciales evocados de tronco cerebral 50-150 10.000
Potenciales evocados visuales 1-3 100-300+
Electroencefalografía convencional 0,3-1 70-100+
Barkhaus and Nandedkar, 1999; Chiappa, 1983; Daube, 1996; Dumitru, 1995; Kimura, 1983; Brown, 2002.

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Instrumentación en electromiografía 33

5. Una aguja monopolar se puede utilizar para el


estímulo. Se inserta apenas debajo de la piel
y puentea así la gran impedancia de la piel.
Esta técnica es a menudo útil para estimular los
nervios profundos o cuando estos nervios no se
estimulan fácilmente debido a obesidad.
6. Un artefacto del estímulo es una señal de banda
ancha. El aumento de la banda de filtros (p.
ej., de 20 a 2.000 Hz a 3 a 10.000 Hz) dará una
amplitud más alta, pero un artefacto más corto.
Esto permite un mejor manejo de los potencia-
les de latencia corta. El potencial tendrá una
amplitud levemente más alta y una latencia más
Figura 3. Artefacto de estímulo. corta, debido a cambios en ajustes del filtro.
7. El artefacto se puede modelar como una simple
función en el software.
El estímulo eléctrico en estudios de la conduc-
ción del nervio induce un artefacto al registro. Conversión de señal analógica a digital
El potencial generado por la corriente del estí- El cociente señal/ruido se puede mejorar tam-
mulo disminuye en amplitud con la distancia. Cuan- bién usando técnicas de proceso de la señal nu-
do los electrodos activo y de referencia están lejos del mérica.
estimulador, el artefacto es pequeño; sin embargo, La clave de estos sistemas es el llamado con-
cuando el estimulador está cercano, los electrodos vertidor de analógico a digital. El convertidor de
registran un potencial significativamente diferente. analógico a digital mide la amplitud de la señal a
Esto puede dar lugar a un artefacto de estímulo que intervalos regulares. La señal es reconstruida co-
puede distorsionar la respuesta (Fig. 3). nectando estas medidas de cada intervalo usando
Se pueden desarrollar varias estrategias para re- líneas rectas. Esta señal numérica se exhibe en una
ducir al mínimo el artefacto y son las siguientes: pantalla conveniente, generalmente un monitor.
1. Una impedancia alta en el electrodo de registro Es obvio que el intervalo entre medidas afectará
puede dar lugar a un gran artefacto de estímulo. la calidad de las grabaciones digitales de la elec-
Una buena técnica del uso del electrodo es la tromiografía, por lo que ajustes incorrectos de esta
estrategia principal para reducir el artefacto. unidad podrían dar lugar a la distorsión de la señal
2. El ánodo del estimulador se mueve a diferente y a erróneas interpretaciones de la misma.
lugar, mientras el cátodo se mantiene sobre el
punto del estímulo. Alterando el campo de las Display
corrientes del estímulo, se intenta reducir al Hasta mediados de los años ochenta del siglo
mínimo el artefacto. XX, la mayoría de los instrumentos utilizaron las
3. Poner la tierra entre el estimulador y los elec- exhibiciones analógicas para el registro de las for-
trodos de registro reduce el flujo de corriente mas de onda de la señal, por ejemplo, una pantalla
hacia el electrodo de registro y, por lo tanto, el de osciloscopio, y las señales eran vistas en tiempo
artefacto. real mientras se adquirían.
4. El artefacto de estímulo depende de la intensidad Actualmente, los instrumentos modernos utili-
del mismo. Reduciendo la impedancia en el sitio zan microprocesadores y ordenadores personales
del estímulo (limpiando la piel y usando el gel como plataforma para el equipo electrodiagnóstico.
electrolítico) se requerirá menos intensidad. Los terminales pueden exhibir señales en tiempo

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real y también congelarlas en la pantalla para ser apropiados en el software o cambiando los ajustes
medidas, existiendo a menudo una variedad de del ordenador personal.
datos, tales como ajustes del filtro, parámetros del Los problemas del hardware resultan del mal-
estímulo, cambios de sensibilidad, escalas, medidas funcionamiento de los dispositivos. Consisten a
y comparaciones de parámetros, etc. El operador menudo en problemas, tales como falta completa
debe familiarizarse con las posibilidades del equipo o intermitente de la operación del dispositivo, cali-
para obtener un buen rendimiento. La evaluación dad pobre de la señal y alto ruido e interferencia. El
de las señales de electromiografía se afecta por el problema del hardware más común es el alto ruido
tamaño de la pantalla de visualización y su resolu- en registros electrofisiológicos, pudiendo deberse
ción. El monitor de la computadora es una rejilla a muchas condiciones descritas anteriormente,
de píxeles que se “encienden” o se “apagan” para por ejemplo, alta impedancia del electrodo y alto
mostrar la información en imagen. El terminal pue- ruido de ambiente de otros dispositivos. Cuando
de exhibir un cambio en la amplitud o el tiempo, solamente se considera el ruido, el problema pue-
dependiendo de ajustes en la pantalla, tales como de estar en el cable o el amplificador. Cuando se
la ganancia o sensibilidad (más o menos voltaje trata de electrodos o cables defectuosos, la mejor
por división en pantalla) o la velocidad de barrido, estrategia es desecharlos. El funcionamiento del
pudiendo variar aparentemente las medidas de una amplificador se puede probar usando un truco sim-
misma señal, por lo que es necesario estandarizar ple. Las entradas activas y de referencia del ampli-
estos parámetros y tenerlos en cuenta cuando se ficador están conectadas juntas. Este cortocircuito
evalúen los potenciales. También se ha de tener en dará un voltaje diferencial cero en la entrada del
cuenta que diferentes tamaños en las pantallas de amplificador. Bajo estas condiciones, el ruido visto
los ordenadores pueden dar la falsa sensación de en el display debe ser extremadamente bajo. Si la
cambio en las características de una misma imagen; amplitud del ruido es de decenas de microvoltios,
por ejemplo, una división puede representar una el amplificador puede necesitar ser revisado.
desviación de más de 1 centímetro en una exhibi-
ción de un portátil y de más de 2 centímetros en Entrenamiento
un monitor de 21’’. Un número significativo de problemas con el
Los sistemas de electromiografía utilizan mi- instrumento no tienen relación con el hardware,
crovoltios por división para estandarizar vertical- el software o el ambiente. Desafortunadamente,
mente el valor de la amplitud y de milisegundos resultan de la carencia del usuario en la compren-
por división para estandarizar horizontalmente el sión del instrumento. Uno debe dedicar algunas
valor del tiempo en barrido longitudinal, debien- horas para familiarizarse con el instrumento antes
do atenerse a los parámetros con ellos constatados de usarlo en pacientes. Así, se tendrá una com-
para considerar realmente la evaluación de las prensión mejor de cómo la señal y sus medidas son
señales. manipuladas por el instrumento y podrá identificar
claves para corregir errores comunes.
Localización de averías
Los problemas encontrados en un laboratorio La seguridad en el laboratorio de electromiografía
de la neurofisiología se pueden dividir en dos ca-
tegorías: hardware y software. Son excepcionales los accidentes atribuibles a
Los problemas de software pueden deberse al una exploración electromiográfica; sin embargo, el
sistema operativo, al programa de electromiografía, equipo se acciona eléctricamente y se usan técnicas
o a otros dispositivos en el sistema. La mejor estra- invasivas, como son la estimulación eléctrica y los
tegia es consultar al fabricante del instrumento. electrodos de aguja, todo ello fuente de potencial
El problema puede ser corregido usando ajustes peligro. Las bases de una buena seguridad radican

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Instrumentación en electromiografía 35

Figura 4. Corriente de la red eléctrica fluyendo a través del paciente.

en un correcto diseño y fabricación del aparato de ambientes, condición de la instalación eléctrica y


EMG, así como un buen uso y mantenimiento del un ambiente relativamente libre de parásitos o in-
mismo. El fabricante presta atención en el diseño terferencias eléctricas, para reducir al mínimo la
del aparato e instrumental para asegurarse de que distorsión de las señales adquiridas.
están libre de riesgos. Solamente después de ser
probado y con la certificación apropiada, puede Seguridad eléctrica
vender el producto diseñado. Después de su com- El corazón humano es un órgano vital, con un
pra, el usuario ha de instalar y hacer funcionar el marcapasos interno que coordina la contracción
sistema de acuerdo con las instrucciones propor- de su musculatura. Como cualquier otro músculo,
cionadas por el fabricante. puede ser estimulado eléctricamente. Un estímulo
suficientemente intenso, si ocurre en el período
Responsabilidad del usuario crítico de un ciclo cardiaco completo, puede ini-
El uso incorrecto o inadecuado de un aparato de ciar una fibrilación ventricular. Intensidades de
EMG puede generar riesgos inaceptables para el pa- corriente de 100 microamperios que pasen direc-
ciente, el explorador o, incluso, el medio ambiente. tamente a través del corazón podrían producirlo.
El equipo adquirido debe cumplir con los requisitos Esto es mucho más probable si un electrodo está
marcados por la ley y está diseñado, generalmente, en el corazón y tiene contacto simultáneo con un
para el uso por usuarios expertos. Esto es de vital dispositivo eléctrico externo, como puede ocurrir
importancia en el caso de demandas por accidente o en el caso de que el paciente tenga catéteres intra-
negligencia. En muchos casos, el equipo adquirido cardiacos o marcapasos. Corrientes de hasta 5 mA
es examinado por un departamento encargado de la se consideran seguras, aunque pasen por el cora-
supervisión de la seguridad del mismo y se realizan zón (desde extremidades superiores a extremidades
chequeos de la preinstalación para asegurarse de inferiores) (Fig. 4). Corrientes mucho más altas
que el equipo es del tipo correcto, está indemne y pueden ser toleradas si la trayectoria no implica
completo con todos los accesorios necesitados para el corazón. Los estimuladores eléctricos para los
su uso. Debe prestarse especial atención a los aspec- estudios electromiográficos pueden descargar co-
tos ambientales, tales como rango de temperaturas rrientes de hasta 100 mA porque se extienden en

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Figura 5. La corriente de la red eléctrica fluye a través del electrodo tierra (masa).

una pequeña región y son de corta duración. Las trayectoria de baja resistencia entre el equipo de
corrientes alternas de alta frecuencia son de las más EMG y la tierra. La mayoría de la corriente que
peligrosas, no así los simples pulsos de baja frecuen- se escapa por la capacitancia al chasis fluye por
cia y duración que se dan al estimular los nervios la conexión de tierra, y así se evita que afecte al
periféricos. Sin embargo, el diseño del equipo, la paciente. Averías en la conexión de tierra o tomas
manera en la cual se aplica la estimulación al pa- de tierra inadecuadas pueden comprometer los
ciente y la posibilidad de dispositivos intracardiacos registros de EMG y la seguridad del paciente e in-
debe tenerse en cuenta, para reducir al mínimo las cluso del examinador. La integridad de la conexión
ocasiones de peligro. de tierra puede estar comprometida por el uso de
extensiones del enchufe o zócalos con múltiples
Toma de corriente enchufes (Fig. 6). Cuando la conexión de tierra
Cualquier dispositivo eléctrico recibe energía está intacta, no hay peligro, pero si no es así y sin
de la red eléctrica general. El voltaje puede ser importar la localización de la avería, la corriente de
115 ó 230 V y la frecuencia de 50 ó 60 Hz. Estos salida de todos los instrumentos conectados con el
voltajes están separados eléctricamente de la parte zócalo multienchufe pasará a través del paciente,
funcionante del equipo por un transformador que con el peligro que ello conlleva.
los aísla dentro del mismo. Esta separación no es
perfecta, sin embargo, porque persiste cierta ca- Sistema eléctrico médico
pacitancia entre la corriente eléctrica entrante y Cuando un equipo eléctrico médico se conec-
el resto del equipo como resultado de un espacio ta con otro equipo eléctrico, como un ordenador
entre las dos partes. Esto significa que cierta co- personal, un escáner, una impresora, etc., se crea
rriente puede fluir a través de dicha capacitancia un sistema eléctrico médico. Cada componente
y puede llegar al paciente que esté conectado a los de dicho sistema puede influenciar en el com-
circuitos secundarios del equipo (Fig. 4). Para evi- portamiento de los otros componentes, y en caso
tar que dicha corriente pase del equipo al paciente, de avería de alguno de ellos, se genera un riesgo
se usa una conexión en la fuente de alimentación directo o peligro potencial, ya que si la conexión
llamada toma de tierra (Fig. 5). Esta establece una de tierra del dispositivo médico está intacta, esa co-

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Instrumentación en electromiografía 37

Figura 6. Si hay un fallo en la tierra, la intensidad de corriente de los tres equipos puede pasar al paciente.

Figura 7. Aislamiento del paciente. El electrodo neutro (tierra) del paciente no va conectado a la tierra del chasis.

rriente excesiva atravesaría dicha conexión, pero en eléctricos del sistema, como el ordenador personal,
caso que se interrumpa esa conexión, la corriente la impresora, etc.
podría pasar a través del operador o del paciente.
Tales averías en las conexiones de tierra son quizás Aislamiento del paciente
las más comunes con los dispositivos eléctricos. En los equipos médicos eléctricos modernos
Aunque en el equipo de EMG las averías de tierra los circuitos conectados al paciente están aislados,
se detectan fácilmente, porque dan lugar a un alto esto significa que hay separación adicional entre
nivel de interferencia en los registros; sin embargo, los circuitos conectados al paciente y los circuitos
pueden pasar desapercibidas en otros componentes principales del equipo (Fig. 7). Este aislamiento es

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38 N. Carballo Ortega, J. Turón i Sans, J. Valls-Canals

Figura 8. Si existe un fallo en la tierra, un exceso de voltaje de la red eléctrica pude pasar al paciente si este contacta con otra tierra.

proporcionado por los transformadores que sepa- y la conexión neutra del circuito con el paciente
ran, tanto a los estimuladores como a los amplifi- no está conectada con la conexión de tierra de la
cadores de los circuitos principales del aparato de fuente de alimentación (Fig. 7).
EMG. Con dichos equipos no hay conexión de
tierra al paciente. Esta es sustituida por un elec- Colocación de los electrodos
trodo neutro, que está conectado al amplificador Durante los estudios de EMG, las corrientes que
(circuito aislado). Para preservar la seguridad del estimulan atraviesan los electrodos conectados con
paciente, en caso de que cualquier otra fuente de el paciente. El explorador debe asegurarse de que la
electricidad entre en contacto con el paciente, este colocación de estos electrodos reduce al mínimo la
no debe estar en contacto con la tierra de ninguna probabilidad de que corrientes significativas pasen
otra manera; por ejemplo, por contacto acciden- a través del corazón. Esto se logra colocando todos
tal con la pared del despacho o con una cama de los electrodos (activos, referencia, neutro) lo más
metal. Cuando un aparato de EMG está conecta- cercano el uno del otro y lejos del corazón. Esta re-
do a una red del hospital, existe la posibilidad de comendación no plantea problemas en la mayoría
que altos voltajes podrían aparecer como resulta- de los estudios de EMG. Cuando el paciente está
do de una avería o de un accidente en otra parte conectado con el equipo electrico-médico, el cuer-
del edificio (Fig. 8). Tales voltajes no alcanzarán po del paciente forma parte del circuito eléctrico a
las conexiones del paciente si, al igual que con través del cual la corriente puede fluir. En aparatos
los modernos equipos de EMG, los circuitos se de EMG antiguos, para reducir al mínimo la inter-
aíslan eléctricamente. Sin embargo, estos voltajes ferencia, se aumenta el número de conexiones de
podrían alcanzar las piezas conductoras accesibles tierra, por lo que las corrientes pueden atravesar los
del equipo, tales como el chasis, si la conexión electrodos activos y de tierra. Bajo condiciones de
de tierra fuera defectuosa. Las corrientes excesivas funcionamiento normales, esta corriente es baja.
podrían entonces pasar al paciente vía el cuerpo del Sin embargo, cambios de intensidad transitorios en
examinador, y esta situación podría ser grave si el la red eléctrica podrían, en algunos equipos, dar
paciente está conectado accidentalmente a tierra lugar a corrientes mucho más altas. Por lo tanto,

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Instrumentación en electromiografía 39

Figura 9. A la izquierda los electrodos de estimulación están poco separados y la corriente fluye en un reducido espacio. A la derecha, al estar separados
los electrodos, la corriente puede atravesar varios órganos.

uno debe desconectar al paciente del sistema de y el cátodo tan cerca como sea posible. Esto, por
EMG durante la puesta en marcha y apagado del supuesto, también da lugar a un menor artefacto
equipo. Si el sistema se cierra debido a la falta de de estímulo en la respuesta.
energía eléctrica, el paciente debe ser desconec- Los estimuladores eléctricos también están
tado inmediatamente. aislados eléctricamente (Fig. 7). Esto significa
En el examen EMG con electrodos de aguja mo- que la corriente no puede fluir del electrodo de
nopolar, se debe colocar siempre el electrodo de re- estimulación a la tierra, pero solamente entre
ferencia en el miembro o sitio examinado. Este acer- los electrodos. Es vital que este aislamiento esté
camiento mejora la calidad de la señal reduciendo conservado, dado que si uno de los electrodos de
la interferencia de los músculos activos alejados del estimulación contacta con la tierra, la corriente
electrodo de la aguja. Cuando se utilizan electrodos que fluye del otro electrodo puede pasar a través
concéntricos de la aguja, no se utiliza electrodo de del cuerpo del paciente a cualquier parte a la que
referencia; sin embargo, en ambos casos es preferible esté conectado, quizás accidentalmente con la
ubicar el electrodo neutro cerca del sitio del examen, tierra. Se obtiene la máxima seguridad usando
particularmente durante el estímulo eléctrico. ambos electrodos, activo e inactivo, montados en
el mismo puente. El documento 60601-2-40 de la
Estimulación Internacional Electrotechnical Comission requiere
Puede crearse un peligro potencial por la colo- que las instrucciones para el uso de estimuladores
cación inadecuada del electrodo de estimulación eléctricos contengan la siguiente declaración: “un
si la corriente atraviesa partes sensibles del cuer- paciente con un dispositivo electrónico implantado
po, tales como el corazón, o afecta a dispositivos (p. ej., marcapasos cardiacos) no debe estar sujeto a
electrónicos implantados, tales como marcapasos estímulos eléctricos a menos que se haya obtenido
cardiacos. Ello puede ocurrir porque el ánodo se la opinión médica del especialista”. Es un buen
deja en un lado del cuerpo cuando se estimula consejo preguntar al paciente acerca de cualquier
el miembro opuesto (p. ej., en caso de electrodos dispositivo eléctrico implantado antes de que se de
de aguja) (Fig. 9). La regla es mantener el ánodo comienzo al estudio.

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40 N. Carballo Ortega, J. Turón i Sans, J. Valls-Canals

Peligro biológico Todos los electrodos invasivos, como las agujas


El examen EMG implica técnicas invasivas monopolares y concéntricas, se certifican para el
que requieren de accesorios limpios y estériles que uso “transitorio”, es decir, pueden permanecer en
impidan el contagio de enfermedades transmitidas el cuerpo un tiempo inferior a 60 minutos. Si se
por contacto. La mejor manera para alcanzar este piensa que las pruebas van a exceder de este tiem-
objetivo es utilizar solamente dispositivos estériles po, debe buscarse consejo sobre la posible sensibi-
de un solo uso. La alternativa es limpiar y volver lización a sus materiales constitutivos.
a esterilizar los accesorios después de ser usados. Los electrodos desechables de aguja, al fabri-
La esterilización es relativamente sencilla, aun- carlos, se embalan individualmente y se esterilizan.
que limpiar para reducir la materia biológica y Los dos métodos más comunes son la gamma-ra-
empaquetar de nuevo puede consumir mucho diación y la exposición al gas del óxido de etileno.
tiempo. Los métodos típicos de esterilización son Se controla la eficacia de la técnica esterilizadora
el autoclave y, en ciertos países, el gas o el vapor, determinando la carga biológica antes del proceso
debiendo especificar el fabricante el método y los de la esterilización, validación de un nivel acep-
parámetros idóneos. Las dos tareas más difíciles table de esterilización (en la mayoría de los países
para el material reutilizable son que la limpie- de 10 a 6), e integridad del empaquetado y del
za sea efectiva para asegurar la eliminación de etiquetado.
toda la materia orgánica, incluyendo las proteínas Independientemente del tipo de aguja para el
priónicas, y reafilar los electrodos de aguja. Si se examen, el peligro más grande es que el médico se
emplean electrodos reutilizables, el número de pinche accidentalmente con la aguja usada para
ciclos de la reutilización es limitado al prescrito explorar al paciente. Es una buena idea saber por
por el fabricante. adelantado si el paciente tiene una enfermedad
Los estudios de la conducción nerviosa se llevan transmisible. Los hospitales tienen a menudo una
a cabo utilizando electrodos de superficie. Cuando política bien definida para manejar este tipo de
se utilizan electrodos reutilizables, una infección incidentes.
puede transmitirse de un paciente a otro. El fa-
bricante debe proporcionar las instrucciones con Conexiones a los pacientes
respecto a los agentes de limpieza. La limpieza con En el pasado, los adaptadores de los electrodos
jabón y agua no quita bacterias; sin embargo, lim- de superficie para la estimulación y el registro eran
pia la superficie del electrodo de los residuos que del tipo clavija macho y hembra. Dado que dichos
pueden causar un aumento de la impedancia. electrodos podían tocar accidentalmente el extremo
En el examen EMG con electrodo de aguja, de un cable eléctrico, y que ello condujo a algunas
ésta entra en contacto con los fluidos corporales. electrocuciones, las administraciones de EE.UU. y
Si se pincha un vaso sanguíneo, cierta cantidad de Europa cambiaron el diseño de los adaptadores
de sangre puede extravasarse a la superficie de la del cable de los electrodos y de sus receptáculos en
piel. Entonces debe quitarse la sangre con una el amplificador. El nuevo diseño, llamado conec-
gasa estéril y aplicar cierta presión para reducir el tador “a prueba de toque”, previene la conexión
hematoma. En los pacientes que están recibiendo accidental con el extremo de un cable eléctrico.
medicación anticoagulante, la hemorragia puede Desde el 8 de mayo del 2000, los fabricantes de
ser ciertamente difícil de parar. Es obligatorio pre- los accesorios del EMG deben proporcionar los
guntar al paciente sobre el uso de tal medicación, nuevos electrodos.
pudiendo ser necesario en algunos casos revertir
temporalmente la hipocoagulación para el momen- Peligros informáticos
to del examen. Además, está recomendado el uso Los modernos aparatos de EMG se basan en
de guantes para la exploración. ordenadores personales que ofrecen la capacidad

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Instrumentación en electromiografía 41

de conectar el sistema con Internet y con la red cenada en diferentes medios, como discos duros,
informática del hospital para comunicarse con disquetes o CD. Los datos se pueden analizar en el
otros médicos y para transferir informes electróni- momento de adquirirse (on line) o en el futuro (off
camente. Esta conexión conlleva el riesgo de in- line) y los resultados se pueden mostrar en forma
fectar de virus el ordenador. Aunque algunos virus de texto o de gráficos que se pueden grabar en la
son inofensivos, otros pueden destruir archivos del base de datos para un análisis futuro.
sistema, expedientes, informes, y la base de datos Los ordenadores tienen dos ventajas: en primer
de los pacientes. Por lo tanto, debe instalarse un lugar, simplifican el uso de los instrumentos; y en
programa antivirus para detectar y limpiar los archi- segundo lugar, permiten recuperar y cuantificar
vos infectados. Muchos de dichos programas están señales neurofisiológicas almacenadas. Esto es ex-
disponibles en el mercado. Sin embargo, puede tremadamente útil para el trabajo asistencial, para
que no detecten los nuevos virus que aparecen obtener segundas opiniones y para la investigación.
casi cada día. Afortunadamente, los vendedores Además, el almacenaje de señales permite inclu-
del software proporcionan archivos de renovación so la comunicación con otros usuarios de todo el
para mantener el programa del antivirus actuali- mundo (telemedicina).
zado. Descargar las mejoras suele ser gratuito. Se
debe consultar al fabricante del aparato de EMG Adquisición de la señal
sobre el programa de antivirus a utilizar. El software es esencialmente una cadena de
Los ordenadores personales son fiables cuan- comandos que se ejecutan con una secuencia
do se utilizan y se mantienen correctamente; sin predefinida.
embargo, como todos los dispositivos electrónicos, Los comandos se pueden adaptar para fijar la
eventualmente fallan. Para prevenir la pérdida de ganancia, los filtros, la duración del barrido y el
datos de los pacientes, se deben hacer copias de estímulo, y se pueden llevar a cabo muchos otros
seguridad de los archivos importantes en el sistema. ajustes para realizar los diferentes estudios.
Un método simple es copiar los archivos del disco Una vez que se hacen los ajustes, el instrumen-
duro a un dispositivo de almacenaje externo tal to quedará configurado de la misma manera para
como un disco compacto. sucesivos estudios.
En los sistemas analógicos los ajustes del equipo
Sistemas computarizados en el laboratorio de se deben adecuar manualmente, mientras que en
neurofisiología los digitales están programados según lo deseado
por el usuario, con lo que se ahorra tiempo y se
Sistemas electrodiagnósticos basados en ordenadores evitan artefactos técnicos.
personales Los controles del hardware se realizan a través
La mayoría de los sistemas electrodiagnósticos de los botones e interruptores del amplificador.
modernos se basan en ordenadores personales, y los Algunas de las funciones pueden controlarse
datos e información son procesados por el software mediante el software, lo que hace fácil el control
del sistema. remoto; por ejemplo, en el estudio de potenciales
Los transductores son dispositivos que detectan somatosensoriales en la monitorización quirúr-
un parámetro físico (como presión arterial, tem- gica.
peratura o señal electromiográfica) y lo transfor- En las técnicas de contaje de unidades motoras,
man en una señal eléctrica, que posteriormente es los ordenadores automatizan y analizan la adqui-
magnificada con los amplificadores, condicionada y sición de datos.
mejorada a través de los circuitos del hardware del Finalmente, los ordenadores se pueden pro-
sistema (p. ej., los filtros), y transformada, al fin, de gramar para registrar la calidad de las señales ob-
señal analógica en digital, pudiéndo esta ser alma- tenidas.

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42 N. Carballo Ortega, J. Turón i Sans, J. Valls-Canals

Amplificación de la señal pantalla. Por otra parte, al ser la fuente de disparo,


Es frecuente en neurofisiología que el potencial el potencial aparecería oculto o inmediatamente al
que obtenemos sea de baja amplitud y esté enmas- inicio de la pantalla con mala visualización; para
carado por una señal de ruido (ruido de fondo) de evitar esto se utiliza una línea de retraso o delay,
gran amplitud. Por lo tanto, es importante dismi- también ajustable, que memoriza un tiempo pre-
nuir la señal de fondo, objetivo que se consigue vio a él y así, permite la recepción de la señal del
mediante la promediación. potencial de manera completa desde su inicio.
La premisa más común sobre el ruido es que La actividad de otras unidades motoras más
es al azar y tiene una distribución gaussiana con pequeñas distantes, aparecen en la pantalla alea-
media igual a cero. toriamente (similar al ruido de fondo), por lo que
En los estudios de conducción nerviosa el ba- con la promediación del barrido se atenuarán como
rrido de la pantalla es accionado por el estímulo y la actividad de fondo.
el potencial de acción aparece después del mismo Cuando la señal puede reconocerse visual-
en un intervalo fijo de tiempo, consecuentemente mente, como en el caso de los potenciales de
el potencial de acción ocurre en el mismo punto unidad motora, pueden hacerse promedios de las
del barrido. respuestas hasta que el ruido se reduce hasta el
La señal o ruido de fondo no está en función nivel deseado. Por el contrario, si los potenciales
del estímulo y aparece al azar en los sucesivos estí- evocados son pequeños y no se pueden reconocer
mulos siendo de diferente amplitud, en unos casos sin promediación no se puede estar seguro si la
positivos y en otros negativos. Cuando se suman, imagen obtenida finalmente es la de un potencial
el ruido positivo se cancela con el negativo, por fisiológico o un artefacto, siendo obligatorio en es-
lo tanto, la promediación del ruido tiende a cero, tos casos repetir la promediaciones y demostrar la
mientras que en sucesivos estímulos el potencial reproducibilidad de la señal.
de acción siempre aparece en el mismo punto e Incluso después de la promediación, la señal
igual y no se afecta por la promediación. Conse- puede no aparecer lisa. El aspecto dentado repre-
cuentemente, se obtiene una mejoría del cociente senta ruido de alta frecuencia, pudiendo quitarse
señal/interferencia. Esto es especialmente útil en la mediante la técnica del alisado (smooth), que sería
obtención de potenciales de pequeños voltaje como equivalente a aplicar filtros de altas frecuencias.
son los sensitivos o los potenciales evocados. Estos medios son otros beneficios de los sistemas
En los análisis electromiográficos con aguja los computarizados.
potenciales de unidad motora aparecen aleatoria- Cuando se registran respuestas polisinápticas
mente en el trazado de la pantalla. Para su análisis (p. ej., estudio del reflejo del parpadeo), la forma
es posible usar un disparador que seleccionará un de la onda puede variar de un estímulo a otro, por
potencial de unidad motora. El usuario fija el nivel lo que se hace difícil identificar y cuantificar la
del disparador o trigger a una amplitud determina- señal. En estos casos, hacer un promedio puede no
da. Cuando la amplitud de la señal EMG es menor ayudar, porque los picos positivos se cancelan con
que el nivel del trigger, ninguna señal se recoge en los negativos. Los ordenadores pueden rectificar las
la pantalla. Si se reduce la amplitud del disparador señales antes de realizar la promediación.
de forma que el nivel sea menor que la amplitud La monitorización quirúrgica de potenciales
máxima del potencial de unidad motora que está evocados ofrece un potente método para prevenir
batiendo, este aparecerá en la pantalla y activará un lesiones de médula espinal, y es importante iden-
barrido con cada descarga de potencial. Si el nivel tificar cambios en estas respuestas lo más rápida-
del trigger se ajusta de forma que un único poten- mente posible, de ahí el gran interés en desarrollar
cial de unidad motora sea el que supere el nivel otros métodos de reducción del nivel de ruido en
del disparador, solo este será el seleccionado en la el registro de potenciales evocados.

Manual EMG.indb 42 9/7/07 12:05:21


Instrumentación en electromiografía 43

Análisis de la señal La fuerza de contracción de los músculos explo-


Cuando se adquiere la señal después de reducir rados ha de ser suave, obteniéndose una señal que
al mínimo el ruido, el siguiente paso es hacer las contiene 3 ó 4 diferentes unidades motoras.
mediciones. En algunas ocasiones es necesario rea- En ocasiones grupos de descargas de diferentes
lizar transformaciones adicionales previas. Esto está unidades motoras pueden asignarse a una misma
muy facilitado con el uso de ordenadores mediante clase o descargas de una unidad motora pueden
el análisis automatizado de unidades motoras y el asignarse a dos clases diferentes. El software pro-
análisis del espectro energético. porciona las herramientas para solucionar estos
problemas.
Análisis automatizado de unidades motoras Con la práctica, uno puede adquirir, validar
En los años 50 los potenciales de unidad motora y cuantificar 20 diferentes potenciales de unidad
se identificaban manualmente de las grabaciones motora en unos pocos minutos.
impresas, y ya en los años 70 se inició el uso del tri- El análisis de multipotenciales de unidades
gger y la promediación. Ambos métodos consumen motoras permite el estudio de músculos que, ge-
mucho tiempo y además requieren la cooperación neralmente, se consideran difíciles; por ejemplo,
del paciente para la obtención de una señal que los paraespinales.
contenga descargas de un solo potencial de unidad En la descomposición automatizada de EMG
motora. el análisis es similar al multi MUP; sin embargo,
Con el uso de ordenadores es posible frag- el programa tolera una fuerza de contracción su-
mentar la señal de EMG constituyendo descargas perior. Se pueden obtener hasta 15 diferentes uni-
de unidades motoras. Este proceso se denomina dades motoras en una sola adquisición.
descomposición, análisis de multipotenciales de La descomposición automatizada de EMG y
unidades motoras o multi MUP. el análisis multi MUP se diseñan para el estudio
Primero, se procesa la señal EMG utilizando de la forma de las ondas de los PUM usando los
un filtro de altas frecuencias, lo que quita la fluc- electrodos rutinarios de aguja en EMG (concén-
tuación de la línea de base. trico y monopolar).
Segundo, se aplica un trigger para identificar En la descomposición de precisión, una
secciones de la señal EMG que contiene actividad aguja especial con cuatro superficies de registro
de unidades motoras. se puede usar para registrar la actividad de tres
La parte de la señal alrededor del punto del canales de EMG. Cada canal da una forma de
trigger se denomina plantilla (template). onda de los potenciales de unidad motora que
Finalmente, se usa un algoritmo para clasi- descargan.
fi car las plantillas. A la primera plantilla se le Se trataría de un “EEG del EMG”, el cual mide
asigna la clase 1. La segunda se compara con la la actividad desde diferentes localizaciones.
de primera clase y si son iguales se le asigna a la
clase 1 y si son diferentes se le asigna la clase 2. Análisis de espectro de energía
La tercera unidad motora o plantilla se compara Muchas señales fisiológicas tienen un patrón
a las anteriores encontradas y se asigna a una de rítmico, por ejemplo, la respiración, el latido car-
esas o se le asigna una nueva clase. Este proceso díaco y la frecuencia de disparo de las unidades
se repite para asignar todas las plantillas. Una motoras.
clase que contiene varias plantillas representan La descripción de una señal continua en térmi-
descargas de un potencial de una misma unidad nos de la actividad cíclica puede ser una manera
motora y este se obtiene mediante promediación. eficaz de caracterizar señales. Esto ha sido descrito
Las clases que contienen pocas plantillas se re- en matemáticas como series de Fourier o transfor-
chazan. mación de Fourier.

Manual EMG.indb 43 9/7/07 12:05:21


44 N. Carballo Ortega, J. Turón i Sans, J. Valls-Canals

Con una fuerza mínima de contracción, la A los sujetos que participan en los estudios
señal de EMG puede contener descargas de una como voluntarios se les realiza un estudio neuro-
sola unidad motora por lo que es fácil determinar fisiológico para asegurarse de que no tienen nin-
las características de la forma de la onda. Cuando guna patología.
se aumenta la fuerza de contracción, se reclutan En la práctica se define que el rango que con-
más unidades motoras y la frecuencia de disparo tiene el 95% de las medidas como límite es normal
aumenta. La señal de EMG que se llama patrón (p. ej., 4,2 ms es el límite superior de la latencia
interferencial contiene descargas de varias unidades motora distal del nervio mediano estimulado a 8
motoras, por lo que es difícil determinar las for- cm de distancia del electrodo de registro sobre mús-
mas de onda individuales del potencial de unidad culo abductor corto del pulgar).
motora. Muchos investigadores han encontrado que los
El espectro de energía de la señal del patrón valores de referencia dependen de factores demo-
interferencial se afecta por la forma y la frecuencia gráficos (p. ej., la edad y la altura) y de factores
de disparo de las unidades motoras. físicos (por ejemplo la temperatura).
Los potenciales polifásicos de corta duración En el análisis de patrones interferenciales en
contribuyen al espectro de energía de alta fre- EMG, muchas técnicas identifican el número de
cuencia. vueltas o giros de la señal. Un giro ocurre en el
pico del potencial. Para excluir los giros generados
Medidas de la señal por el ruido o señal de fondo es necesario que la
Algunas mediciones, como la amplitud del amplitud cambie sobre los 100 μV entre los suce-
potencial motor compuesto son fáciles de hacer, sivos giros.
incluso visualmente; otras, como el área, son com- El número de giros y la amplitud media aumen-
plejas y consumirían mucho tiempo para realizarlo tan con la fuerza de contracción. Por lo tanto, los
manualmente. valores de referencia deben ser definidos estanda-
Todos los instrumentos tienen algoritmos incor- rizando la fuerza de contracción.
porados para las medidas automáticas de diversas Muchos músculos son difícilmente accesibles
respuestas. para monitorizar la fuerza de contracción y además
Con los ordenadores, el usuario puede diseñar necesitan la colaboración del paciente. De ahí el
nuevas mediciones para cuantificar la señal; por gran interés en el análisis de patrones interferencia-
ejemplo, la irregularidad, el índice del tamaño y les sin la monitorización de la contracción.
el jiggle. Stälberg y cols. registraron el patrón interferen-
Es de esperar que las mediciones automatizadas cial en diferentes puntos del músculo y con diver-
coincidan con las visuales, pero el usuario debe sos grados de fuerza de contracción. Crearon un
repasarlas y ubicarlas correctamente de manera diagrama de la amplitud media versus el número de
manual si no fuera así. giros, en el que se superimpone un área denomina-
Idealmente se debe estandarizar la pantalla en da nube normal que contiene más del 90% de las
microvoltios por centímetro y milisegundos por mediciones en los sujetos normales. La definición
centímetro. de nube implica una ecuación de regresión usando
logaritmos de medidas y otras constantes.
Valores de referencia Los ordenadores facilitan estos análisis. En el
Una parte importante de los estudios electro- momento de hacer una adquisición, el ordena-
diagnósticos es comparar los hallazgos con valores dor hace las mediciones de los giros y amplitud
de referencia apropiados. y traza un punto de referencia en la pantalla,
El término referencia y no normal se usa por siendo inmediatamente obvio si la medida es
varias razones. normal o no.

Manual EMG.indb 44 9/7/07 12:05:21


Instrumentación en electromiografía 45

Por ejemplo, en neuropatías los puntos Análisis de bases de datos


quedan en el lado superior de la nube normal, Como se ha expresado, las computadoras sirven
mientras que en miopatías quedan en el margen para almacenar y recuperar datos, y esto se realiza
inferior. en bases de datos que pueden contener diferentes
tipos de información, tales como demográficos,
Presentación de resultados resultados numéricos de las pruebas o formas de
Hasta los años 80 del siglo XX todas las medi- las ondas.
ciones se realizaban manualmente y la pantalla del Mediante las bases de datos se pueden analizar
electromiógrafo se usaba para seguir la traza. también los diversos tipos de información para es-
Con los instrumentos modernos la pantalla tudios clínicos, técnicos o de investigación.
además de mostrar la traza también muestra
mediciones, ajustes y otra información, e indica Formación
al usuario cuando la calidad de la señal no es Los sistemas modernos pueden guardar ondas,
correcta. videos y otros datos médicos en medios fácilmente
accesibles, como discos compactos.
Generación del informe Se pueden desarrollar programas que simulan
Quizás la parte más importante de cualquier enfermedades como reinervación, atrofia, hipertro-
estudio electrodiagnóstico es el informe final. fia, pérdida de fibras musculares, etc.
La mayoría de los sistemas modernos generan el Estos programas son útiles además de para for-
informe como documento que se puede reconocer mación, para la interpretación de patrones de onda
por programas de procesamiento de textos. infrecuentes.
La generación automática del informe tiene
varias ventajas: los datos numéricos se transfieren Telemedicina
automáticamente ahorrando tiempo y evitando En los sistemas computarizados es posible
posibles errores en la trascripción, los informes se capturar la pantalla de visualización y guardarla
pueden archivar en diferentes medios de almace- como un archivo que contenga, por ejemplo, una
namiento y recuperar en cualquier ordenador, o imagen de resonancia magnética, una radiografía o
bien transmitir el informe directamente al fax del las ondas de los potenciales evocados durante una
médico que lo solicita o vía correo electrónico. monitorización quirúrgica.
Esta imagen se puede transmitir a otro orde-
Almacenamiento de registros nador a través de una red local o a través de Inter-
Los estudios electrofisiológicos generan unos net. El receptor puede ser un experto que repasa
registros que contienen ondas, texto, videos, imá- los datos y emite una opinión por teléfono, fax o
genes, tablas o cualquier otro dato relevante que correo electrónico. Todo ello permite el envío de
se puede guardar en el instrumento de registro o documentos de una forma rápida, eficiente y con
en un ordenador central conectado con el sistema. bajo coste. El desarrollo de la telemedicina pro-
Esto permite recuperar con facilidad los resultados porcionará un acceso mejor al cuidado médico en
para su revisión. muchas áreas remotas del mundo.
Uno puede así comparar no solo datos, sino
también formas de ondas, como por ejemplo, el Problemática con los ordenadores
potencial de acción compuesto del músculo antes Los ordenadores personales usados en los instru-
y después de un procedimiento quirúrgico, o, en el mentos de diagnóstico pueden estar conectados en
caso de la monitorización intraoperatoria, visualizar red local o a través de Internet, con lo que quedan
los potenciales evocados realizados previamente a expuestos a virus que pueden dañar o suprimir ar-
la intervención. chivos importantes; también podrían tener acce-

Manual EMG.indb 45 9/7/07 12:05:22


46 N. Carballo Ortega, J. Turón i Sans, J. Valls-Canals

so a la información de una manera fraudulenta 12. Christensen H, Fuglsang-Frederiksen A. Power spectrum


and turns analysis of EMG at different voluntary effort in
otras personas ajenas. De ahí la importancia de
normal subjects. Electroencephalogr Clin Neurophysiol
usar programas antivirus y de protección de datos 1984; 64: 528- 35.
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Los instrumentos de electromiografía disponen 14. Cobbold R. Transducers for biomedical measurements:
de sistemas para realizar medidas automáticas, pero principies and applications. New York: John Wiley & Sons;
1974.
estas son a veces incorrectas, sobre todo cuando
15. Czekajewski OJ, Ekstedt J, Stålberg E. Oscilloscopic recor-
existe mucho ruido o señal de fondo; por ello ding of muscle fiber action potentials: the window trigger
siempre es necesario comprobar la fiabilidad de and the delay unit. Electroencephalogr Clin Neurophysiol
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NEUROGRAFÍA

Manual EMG.indb 49 9/7/07 12:05:23


Manual EMG.indb 50 9/7/07 12:05:23
Capítulo 4

ESTUDIOS DE CONDUCCIÓN NERVIOSA MOTORA Y SENSITIVA:


HALLAZGOS NORMALES
F. Pérez Errazquin, M.I. Chamorro Muñoz, M. Romero Acebal

INTRODUCCIÓN les, descargas eléctricas excesivas, interferencia con


estimuladores eléctricos tipo marcapasos, etc.)(3);
El estudio de conducción nerviosa es un méto- 5) la realización práctica del estudio depende de
do eficaz en la valoración de la función e integridad múltiples factores (técnicos o del paciente), que
anatómica del sistema nervioso periférico(1). Junto pueden hacer variar el resultado final, e inducir a
con la electromiografía de aguja, constituyen el error en la interpretación del mismo.
procedimiento básico de la evaluación electrodiag- Existen tres tipos básicos de estudios de con-
nóstica(2). El estudio de conducción nerviosa nos ducción nerviosa: conducción motora, conducción
ayuda a resolver algunas cuestiones diagnósticas sensitiva y conducción mixta. El principio técnico
esenciales en el estudio del sistema nervioso perifé- para todos ellos es la estimulación eléctrica en uno
rico: 1) si existe o no lesión del mismo; 2) si ésta es o varios puntos de un nervio, ya sea este motor,
del nervio, del músculo o de la unión neuromuscu- sensitivo, o mixto, respectivamente, y el registro
lar; 3) localiza el nivel de la lesión, y si ésta es focal, de la respuesta evocada, a nivel del músculo (en el
segmentaria o generalizada; 4) define el carácter estudio de conducción motora), o del propio nervio
fisiopatológico fundamental de la lesión (axonal (en los estudios de conducción sensitiva y mixta).
o desmielinizante); 5) determina la intensidad de La estimulación que se realiza es bipolar (2
la lesión; 6) pone en evidencia trastornos subclíni- electrodos). El electrodo activo (cátodo) acumula
cos, tanto focales (como ocurre en el síndrome del cargas negativas y el referencial (ánodo) acumula
túnel del carpo) como generalizados (p. ej., una cargas positivas. Se crea de esta forma una corriente
neuropatía sensitivomotora hereditaria tipo I); y 7) que despolariza el nervio a través del cátodo y lo hi-
en ocasiones, proporciona datos de valor pronóstico perpolariza con el ánodo. El estimulo eléctrico apli-
y de la respuesta al tratamiento. cado abre los canales de sodio voltaje dependientes
Sin embargo, el estudio de conducción nerviosa de la membrana de la fibra nerviosa, creando una
adolece de limitaciones, tales como: 1) no valora entrada de sodio intracelular y una despolarización
adecuadamente las fibras mielínicas de conducción local de la membrana, que si supera un umbral
lenta ni las amielínicas; 2) a veces resulta complejo determinado, genera el potencial de acción que se
diferenciar una axonopatía de una neuronopatía; propagará a través del nervio. El electrodo activo
3) sólo valora los nervios accesibles a la estimula- del estimulador siempre se coloca dirigido hacia el
ción; 4) no deja de ser una técnica molesta, y que electrodo activo de recepción. Gracias a este tipo de
puede originar, bajo determinadas circunstancias, estimulación se evita el bloqueo anodal en la con-
complicaciones iatrógenas (sangrado, infección, ducción del impulso(4). Para estimular un nervio
lesión del nervio, neumotórax, traumatismos loca- sano es suficiente con impulsos de 0,1 ms, con un

Manual EMG.indb 51 9/7/07 12:05:24


52 F. Pérez Errazquin, M.I. Chamorro Muñoz, M. Romero Acebal

voltaje de 100-300 V ó 5-40 mA de intensidad; se vio estimulado da lugar a la activación de todas


utilizan siempre estímulos que son ondas cuadra- las fibras musculares que constituyen su unidad
das, es decir, el comienzo y el final del estímulo son motora, obteniéndose una respuesta que se mide
bruscos. La respuesta es recogida con electrodos en mV. Esta peculiaridad condiciona, a su vez,
de superficie o de aguja y, posteriormente, filtrada una desventaja importante, cual es que respuestas
y amplificada por el electromiógrafo(2). anómalas del PEM pueden ser causadas no sólo
Los parámetros fundamentales que se evalúan por alteración del nervio, sino también de la placa
al realizar el estudio de conducción motora son: neuromuscular o del músculo.
1) el tiempo que trascurre desde que se estimu-
la hasta la aparición de la respuesta (latencia de Aspectos técnicos del estudio de conducción nerviosa
inicio), expresada en ms; 2) la velocidad a la que motora
se propaga el impulso por el nervio desde el lu-
gar de estimulación hasta el lugar de recepción, Para obtener unos resultados fiables y reprodu-
o velocidad de conducción nerviosa (VCN); y 3) cibles es esencial la estandarización del método
las características del potencial evocado: amplitud, (Fig. 1). En el capítulo 31 se recoge un número
área, duración y forma. importante de factores que son una fuente habi-
Pese a todo lo expuesto arriba, no hay que olvi- tual de error en la interpretación adecuada de los
dar que los hallazgos neurofisiológicos deben ser resultados. Sería deseable contar con una tabla de
interpretados siempre a la luz de una adecuada valores normales del propio laboratorio neurofisio-
valoración clínica y que son sólo una herramien- lógico. Antes de comenzar el estudio es aconsejable
ta más, disponible en el proceso diagnóstico del medir la temperatura del miembro a explorar, y si
neurólogo. Como norma general, es inexcusable se confirma que es baja, calentarlo. Una tempera-
interrogar y explorar al paciente y a partir de ahí tura baja altera todos los parámetros de la repuesta
diseñar el estudio a realizar. (la latencia distal se prolonga, la VCN disminuye
y la amplitud y la duración del PEM aumentan).
Por debajo de los 32 ºC la VCN disminuye a razón
ESTUDIO DE CONDUCCIÓN NERVIOSA MOTORA de 2-3 m/s por grado de temperatura(7).
La estimulación se realiza sobre la piel con elec-
El estudio de conducción nerviosa motora va trodos de superficie, siguiendo el trayecto nervioso,
a analizar la segunda motoneurona(5). Se realiza y preferentemente en los lugares donde el nervio es
estimulando un nervio motor o un nervio mixto más accesible y superficial. Ocasionalmente pue-
en distintos puntos, registrando las respuestas eléc- den usarse electrodos de aguja para estimulación de
tricas evocadas en un músculo de su inervación, nervios más profundos. La estimulación es catódica,
que se denominan potenciales evocados motores es decir, el cátodo funciona como electrodo activo,
(PEM) o potencial de acción muscular compuesto y siempre se coloca dirigido al electrodo activo de
(PAMC). A diferencia de la técnica de conducción recepción (catódico o negativo). El estimulador
nerviosa sensitiva y mixta, se evaluará de una forma debe situarse paralelo al nervio, con el ánodo rota-
indirecta el nervio motor, ya que no se obtiene un do ligeramente para evitar la hiperpolarización del
potencial de acción motor directo, sino más bien nervio y con una distancia de 2-3 cm entre cátodo
un potencial de acción muscular compuesto, es y ánodo. Habitualmente se emplean estímulos de
decir, la respuesta evocada a nivel de un músculo 20-45 mA y 0,05 ms de duración(4). En personas
de su inervación. Una ventaja importante de esta obesas o en neuropatías desmielinizantes puede
técnica con respecto al estudio de conducción ser necesario aumentar la intensidad y duración,
nerviosa sensitiva es que se obtiene un efecto de hasta llegar a 100 mA y 0,5-1 ms de duración(2). Al
magnificación(1) de la respuesta. Todo axón del ner- estimular el nervio es útil apreciar la contracción

Manual EMG.indb 52 9/7/07 12:05:24


Estudios de conducción nerviosa motora y sensitiva: hallazgos normales 53

Ld
+

Act. Ref.
Lp

VCM = D/Lp-Ld

Figura 1. Realización del estudio de conducción nerviosa motora. Estimulación de nervio mediano motor a nivel de la muñeca y en la flexura de codo.
Estimulador bipolar. Electrodos de recepción de superficie en eminencia tenar; (-): electrodo de recepción activo; (+): electrodo de recepción referencial;
Act.: electrodo estimulador activo; Ref.: electrodo de estimulación referencial; VCM: velocidad de conducción motora; D: distancia; Lp: latencia proximal;
Ld: latencia distal.

tre muscular y el de referencia (ánodo) sobre el


tendón del mismo. Si los electrodos de recepción
(activo y de referencia) se colocan muy próximos
la respuesta puede ser submáxima, mientras que si
se alejan demasiado el artefacto eléctrico puede ser
excesivo(6). Entre los electrodos de estimulación y
recepción debe siempre colocarse un electrodo que
haga de masa, minimizando el artefacto eléctrico
y el riesgo teórico de electrocución(3).
Para disminuir la impedancia se aplica un gel
conductor o agua saturada de sal, tanto en los elec-
trodos de estimulación como en los de recepción.
La intensidad del estímulo se irá aumentando
progresivamente, hasta conseguir una respuesta de
Figura 2. Respuestas obtenidas tras estimulaciones seriadas del nervio, amplitud máxima; entonces se aplicará un 20%
incrementando paulatinamente la intensidad del estímulo hasta llegar al más de intensidad, para obtener una respuesta de-
estímulo supramáximo. nominada supramáxima (Fig. 2). Debe aplicarse
el estímulo de menor intensidad y duración que
del músculo de registro, para verificar que se está produzca una respuesta supramáxima. El potencial
estimulando el nervio correcto. evocado motor obtenido debe tener una fase inicial
Los electrodos de recepción se colocan sobre negativa. Si tiene una deflexión inicial positiva,
la superficie cutánea de un músculo dependiente puede ser por alguna de estas causas: 1) estimula-
del nervio, según la técnica músculo-tendón, es ción de un nervio próximo con activación simul-
decir, el electrodo activo (cátodo) sobre el vien- tánea de un músculo distinto al de recepción; 2)

Manual EMG.indb 53 9/7/07 12:05:24


54 F. Pérez Errazquin, M.I. Chamorro Muñoz, M. Romero Acebal

que los electrodos de recepción estén colocados


lejos de la placa motora; 3) una trasposición de los
electrodos de recepción (activo y de referencia); 4)
una conducción a través de una inervación anó-
mala (por ejemplo, una anastomosis de Martin-
Gruber).

Valoración del estudio de conducción nerviosa motora


(Fig. 3)

1. Latencia (LAT) o tiempo que transcurre desde


el inicio de la estimulación hasta el inicio de
la respuesta del potencial evocado motor, me-
dida en ms. La latencia motora es la suma de Figura 3. Parámetros del potencial evocado motor (PEM) o potencial de
los tiempos transcurridos en la conducción del acción muscular compuesto (PAMC).
estímulo a través de las fibras más rápidas del
nervio, la unión neuromuscular y, finalmente,
la fibra muscular hasta su despolarización. Se po de conducción del estimulo a través de la
denomina latencia distal al intervalo de tiempo placa motriz y la propia despolarización de la
que existe entre el momento de la estimulación fibra muscular). La distancia se mide desde el
nerviosa en el punto de estimulación más dis- cátodo del estimulador al cátodo del receptor,
tal y el inicio del potencial evocado motor. La siguiendo el trayecto del nervio. Para la medi-
latencia proximal es la que se obtiene desde el ción de puntos proximales, como Erb o axila, es
punto de estimulación más alejado y que sirve conveniente usar un medidor obstétrico(4). Si se
para calcular la velocidad del nervio a través de estimula en varios puntos puede obtenerse una
los 2 puntos de estimulación. Las latencias no valoración por segmentos del nervio, de especial
aportan información con respecto al número de interés en las neuropatías por atrapamiento o por
fibras nerviosas que conducen el impulso, aun- bloqueos de la conducción. Para obtener una
que es preciso que conduzca, al menos, un cier- información fiable es aconsejable que exista una
to número de ellas para obtener una respuesta. distancia no menor de 10 cm entre los 2 pun-
La comparación de la latencia con respecto al tos de estimulación(1). No hay que olvidar que
mismo nervio contralateral, con distancias fijas la VCM medida es la de las fibras más rápidas
estandarizadas para ambos, es útil a la hora de (mielínicas de grueso calibre). Se puede medir
interpretar valores patológicos. la VCM de las fibras más lentas, con técnicas
2. Velocidad de conducción motora (VCM). Vie- de estimulación pareadas, de forma que el PEM
ne definida por la fórmula: de las fibras más rápidas es bloqueado por coli-
sión(4). Sin embargo, no se ha mostrado como
VCM (m/s)= D (mm) una técnica de utilidad en los procedimientos
Lp - Ld (ms) de electrodiagnóstico rutinarios(2).
3. Amplitud o altura de la respuesta evocada, me-
donde VCM = velocidad de conducción mo- dida en mV, y que puede ser pico-pico (desde el
tora, D = distancia, Lp = latencia proximal, valor negativo máximo al valor positivo máximo)
Ld = latencia distal. Es, por tanto, necesario o bien base-pico (desde la línea basal isoeléctri-
estimular 2 puntos del nervio para poder medir ca hasta el valor negativo máximo). Cuando se
estrictamente la VCM, (anulamos así el tiem- utilizan electrodos de superficie, las amplitudes

Manual EMG.indb 54 9/7/07 12:05:26


Estudios de conducción nerviosa motora y sensitiva: hallazgos normales 55

son mediciones semicuantitativas del número poral fisiológica y no es más que la expresión del
de unidades motoras activadas. Son un buen retraso cada vez mayor en despolarizar la fibra
indicador, si la respuesta es supramáxima, del muscular por parte de las unidades motoras más
grado de pérdida de unidades motoras en las lentas del nervio, a medida que la distancia en-
neuropatías axonales. Para algunos autores(2) re- tre estimulación y recepción aumenta.
presenta el parámetro más útil en la valoración
del potencial evocado motor, ya que es el único
componente que tiene una relación directa con ESTUDIOS DE CONDUCCIÓN NERVIOSA SENSITIVA
los síntomas clínicos de debilidad, y si no se
obtiene potencial, es decir, la amplitud es cero, El estudio de conducción nerviosa sensitiva
no es posible efectuar el resto de mediciones. evalúa de forma fiable la integridad anatómica
4. Área. Es una determinación matemática más y funcional del sistema nervioso periférico en su
estricta del número de fibras musculares acti- componente sensitivo, desde el soma neuronal del
vadas y está en función de la amplitud y de la ganglio raquídeo posterior hasta sus terminaciones
duración de la respuesta evocada, y se expresa periféricas (nervio sensitivo)(8).
en mV x ms. Requiere un equipo más sofisti- El estudio de conducción nerviosa sensitiva tie-
cado, y su valor puede estar interferido por fe- ne varias utilidades básicas en el diagnóstico de las
nómenos, como la cancelación de fase, al igual enfermedades neuromusculares: 1) permite detec-
que ocurre con la amplitud, y que se analizará tar neuropatías con afectación exclusiva sensitiva;
más adelante. 2) sirve para la detección precoz de la neuropatía,
5. Duración. La duración es el tiempo trascurrido ya que los nervios sensitivos suelen ser más sensi-
desde el comienzo hasta el final del potencial. bles que los motores a las alteraciones fisiopato-
Es un indicador de la variabilidad de fibras lógicas, y en procesos patológicos incipientes las
(rápidas frente a lentas) que componen el ner- alteraciones, tanto desmielinizantes como axonales
vio. La duración aumenta si existe una gran son más precoces e intensas al analizar el compo-
diferencia entre la velocidad de conducción de nente sensitivo del nervio; 3) es útil para localizar
los axones más rápidos y los más lentos, ya sea una lesión, de especial interés si son proximales,
en condiciones fisiológicas o patológicas, por pues el estudio de conducción nerviosa sensitiva
ejemplo, en procesos desmielinizantes. En otras diferencia entre lesiones preganglionares y post-
palabras, si encontramos un potencial evocado ganglionares. En las lesiones que afectan a la raíz,
motor de duración corta, podemos afirmar que no aparecerán afectados los potenciales evocados
la diferencia de velocidades entre las fibras más sensitivos (PES) registrados distalmente en nervios
rápidas y las más lentas es escasa. periféricos, mientras que en los procesos neuropá-
6. Forma del potencial evocado motor. En condi- ticos distales al ganglio raquídeo posterior, ya sean
ciones normales, la morfología del PEM para plexopatías o neuropatías, el PES estará alterado,
un nervio dado y en una localización precisa, con una disminución de su amplitud o, incluso,
con un estímulo supramáximo, es siempre la puede llegar a desaparecer el PES.
misma, habitualmente bifásica, con un com- Sin embargo, al igual que ocurre en el estudio
ponente inicial negativo. Sin embargo, si un de conducción nerviosa motora, no carece de li-
mismo nervio es estimulado en puntos cada mitaciones: 1) la neurografía sensitiva básica sólo
vez más proximales a lo largo de su recorrido, estudia las fibras mielínicas y de conducción rápida;
probablemente la respuesta obtenida cambie 2) sus resultados son muy influenciables por pará-
de forma, su duración aumente y su amplitud metros físicos, técnicos y fisiológicos (temperatura
decrezca, aunque se estimule correctamente. corporal, edemas, obesidad, mala relajación del pa-
Este fenómeno se conoce como dispersión tem- ciente) que hacen dificultosa su interpretación(2); el

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+ –
D
Act. Ref.

Ld

VCS = D/Ld

Figura 5. Realización del estudio de conducción nerviosa sensitiva.


Estudio sensitivo antidrómico del nervio mediano. Estimulador de barra
en muñeca. Electrodos de recepción de anillas a 2º dedo. VCS: velocidad
Figura 4. Efecto de la temperatura sobre el potencial evocado sensitivo de conducción sensitiva. (-): electrodo de recepción activo; (+): electrodo
(PES). Con el descenso de la temperatura el PES aumenta en duración, de recepción referencial; Act.: electrodo estimulador activo; Ref.: electrodo
amplitud y latencia. de estimulación referencial; D: distancia; Ld: latencia distal.

PES normal es de muy baja amplitud (se mide en estimular, tanto nervios mixtos como sensitivos
μV), por lo que resulta más difícil distinguirlo que puros. En líneas generales las fibras mielinizadas
el potencial evocado motor; se usa, para identificar- sensitivas conducen un 10% más rápido que las
lo adecuadamente, una promediación matemática fibras motoras, y tienen un umbral más bajo de
de la respuesta tras varios estímulos, lo que permite excitación, por lo que se usan estímulos de menor
obtener un potencial bien caracterizado; 3) la tem- intensidad(8).
peratura tiene los mismo efectos sobre el PES que Cada técnica tiene sus ventajas e inconvenien-
los descritos para el PEM (Fig. 4); 4) no mide la tes. Así, los estudios ortodrómicos son más molestos
excitabilidad eléctrica de los receptores cutáneos para el paciente y el PES obtenido tiene menor
sensitivos, salvo en técnicas más especiales, como amplitud que con el procedimiento antidrómico(8).
en el estudio de los terminales simpáticos de las En la técnica antidrómica, al estimular un nervio
glándulas sudoríparas(9). mixto, la respuesta motora puede enmascarar el
PES. Algunos autores estiman que los estudios or-
Normas generales de realización del estudio de todrómicos son más sensibles para detectar neu-
conducción nerviosa sensitiva ropatías incipientes(1). La mayoría de laboratorios
realizan de forma rutinaria estudios antidrómicos,
Existen dos métodos fundamentales para obte- con la posible excepción de estudio en palma de
ner un potencial evocado sensitivo (PES), bien es- mano y planta de pie para nervios puramente sen-
timulando en un punto distal (por ejemplo, ramas sitivos(2).
interdigitales del nervio mediano) y registrando en La estimulación se realiza siguiendo los mismos
otro más proximal (por ejemplo, el nervio mediano principios básicos que en la motora, con algunas
en muñeca), lo que se denomina técnica ortodró- peculiaridades. El estímulo a aplicar es de inten-
mica, por seguir el mismo sentido de la conducción sidad menor que en los estudios motores, en torno
fisiológica sensitiva; o bien a la inversa, estimulan- a 15 mA, por una mayor excitabilidad de la fibra
do proximalmente y recogiendo la respuesta a nivel nerviosa; en contrapartida, y como se ha indicado
distal, o método antidrómico (Fig. 5). Se pueden más arriba, suele ser necesario realizar un prome-

Manual EMG.indb 56 9/7/07 12:05:26


Estudios de conducción nerviosa motora y sensitiva: hallazgos normales 57

diado de respuestas para obtener un PES libre de


artefacto.
Hay guías anatómicas al uso para la colocación
de los electrodos de recepción y estimulación (véase
capítulo 9). La distancia entre ánodo-cátodo debe
ser de unos 3 cm; una distancia menor, disminuye
la amplitud del PES. El electrodo activo (cátodo)
del estimulador se dirige hacia el electrodo activo
del receptor. Si por error se produce la despolari-
zación con el ánodo puede causarse un fenómeno
de bloqueo de conducción o bloqueo anódico, y se
obtendría una respuesta submáxima. Se aplica el
estímulo aumentando progresivamente la intensi-
dad, hasta conseguir una respuesta supramáxima,
y se promedia posteriormente la respuesta. Si hay
excesivo artefacto o no se obtiene respuesta, se ve-
rificará que el miembro en estudio esté relajado,
que haya suficiente gel conductor en los electrodos,
que la tierra esté situada entre el estimulador y el
receptor y que tenga un buen contacto con la piel, Figura 6. Parámetros del potencial evocado sensitivo (PES).
que no se haya producido una conexión entre los
electrodos activo y referencial por el gel conductor
o sudor excesivo. Si aun así no se obtiene respuesta = distancia/latencia. Algunos autores(1) prefieren
puede ser necesario estimular con electrodos de determinar sólo la VCS en segmentos proxima-
aguja(9). les y definir la VCS en segmentos distales por la
latencia, lo que requiere estandarizar la distancia
Valoración del estudio de conducción nerviosa sensitiva de dicho segmento, por ejemplo, 14 cm para el
(Fig. 6) estudio comparativo desde el 4º dedo del me-
diano y cubital antidrómico sensitivo.
1. Latencia. A diferencia de la latencia motora, que 3. Amplitud. Al igual que en el caso del PEM, el
incluye el tiempo de conducción a través de la PES mide el número de axones que se despola-
unión neuromuscular y la despolarización de la rizan con el estímulo aplicado. Se mide desde
fibra muscular, la latencia del potencial evocado el pico negativo a la línea de base (pico-base), o
sensitivo mide únicamente el tiempo de conduc- bien desde el pico negativo al pico positivo (pico-
ción a través del propio nervio. La latencia refleja pico). Su valor es de 5-200 μV, dependiendo del
el tiempo de conducción de las fibras más rápi- tronco nervioso estudiado(8). Es importante re-
das. Se puede medir de dos formas: 1) al inicio señar que los valores de amplitud entre sujetos
de la respuesta (latencia de inicio); 2) más fre- sanos varían en un amplio rango, incluso entre
cuentemente, por ser más fiable, al pico negativo un miembro y la extremidad contralateral en la
(latencia a pico). Existe una diferencia de 0,4 ms misma persona. Con velocidades de conducción
entre ambas medidas. Esta última tiene la ventaja por debajo de 20 m/s, el PES no se registra(1).
de ser más constante y mejor identificada. 4. Duración. Ésta puede medirse desde el inicio
2. Velocidad de conducción sensitiva (VCS). Sólo de la respuesta hasta la intersección de la línea
es preciso estimular un punto del nervio para de base con la fase descendente del potencial,
conseguir el denominador de la ecuación VCS o bien hasta el retorno de la línea isoeléctrica.

Manual EMG.indb 57 9/7/07 12:05:27


58 F. Pérez Errazquin, M.I. Chamorro Muñoz, M. Romero Acebal

Otros autores miden desde el pico negativo al


retorno a la línea base.
5. La forma del PES varía en función de la colo-
cación de los electrodos de recepción, el tipo
de estudio (ortodrómico o antidrómico) y el tipo Ref.
de receptor (de superficie o aguja). En estudios Act.
– +
ortodrómicos el PES es trifásico, con una fase
inicial positiva, mientras que en los estudios an-
tidrómicos suele ser bifásico, con una primera
fase negativa. El fenómeno de dispersión tem-
poral fisiológica es más llamativo en los estudios
sensitivos que en los de motores.
Figura 7. Estudio de conducción nerviosa mixta. Estudio de conducción
nerviosa mixta del nervio cubital en el codo. Estimulador desde infracodo.
Recepción supracodo. (-): electrodo de recepción activo; (+): electrodo de
ESTUDIO DE CONDUCCIÓN NERVIOSA MIXTA recepción referencial; Act.: electrodo estimulador activo; Ref.: electrodo de
estimulación referencial.
El estudio de conducción nerviosa mixta (Fig.
7) valora la conducción a través de un nervio mixto,
es decir, compuesto por fibras motoras y sensitivas, estimulación proximal del nervio evocaría un PEM
aunque debe tenerse en cuenta que el componente que enmascararía la propia respuesta mixta, de mu-
mayoritario de potencial evocado mixto es sensitivo, cha menor amplitud. Actualmente sólo tiene alguna
como lo demuestra el hecho de que no se altere en utilidad en neuropatías por atrapamiento, ya sea en
enfermedades de motoneurona muy evolucionadas la muñeca (nervio mediano), codo (nervio cubital),
o que desaparezca casi por completo en gangliono- o cabeza de peroné (nervio peroneo común).
patías sensitivas puras. La técnica y la valoración
del registro son similares a las realizadas en estudios
ortodrómicos de conducción nerviosa sensitiva. Se FENÓMENO DE DISPERSIÓN TEMPORAL FISIOLÓGICA Y
estimula a nivel distal del nervio y se registra en un CANCELACIÓN DE FASE EN ESTIMULACIONES PROXIMALES
nivel más proximal del mismo. Se obtiene, así, una
respuesta evocada sumatoria del componente motor Ya hemos señalado, que en los estudios de con-
y sensitivo del nervio, cuya amplitud es del orden ducción nerviosa, la latencia y la velocidad de con-
de μV. Esta técnica es útil para estudiar las fibras ducción que se miden son las de las fibras más rápi-
sensitivas gruesas (fibras propioceptivas Ia y Ib), que das de dicho nervio, y que el estudio de la amplitud
no llegan a la superficie de la piel y no pueden estu- y de la duración de la respuesta nos da un índice
diarse mediante las técnicas de conducción sensitiva indirecto del número de axones excitados y de la
explicadas más arriba. Los nervios explorados más sincronía de la respuesta, respectivamente. Cuando
habitualmente con esta técnica son el mediano y se realiza una estimulación cada vez más proximal,
el cubital, en sus segmentos muñeca-codo, y el pe- la diferencia de tiempo de conducción entre las fi-
roneo en el segmento garganta de pie-cabeza de bras más rápidas y las más lentas se acentúa, dismi-
peroné. Sin embargo, esta técnica tiene una serie de nuyendo la sincronía de la respuesta (aumentando
desventajas evidentes(2): en primer lugar, al tener que la duración), y disminuyendo la amplitud y área
recoger la respuesta a nivel de codo o rodilla, en per- bajo la curva del potencial. Este fenómeno fisio-
sonas obesas, la respuesta es de muy baja amplitud o lógico se denomina dispersión temporal (Fig. 8). A
indetectable; por otra parte, la secuencia de estimu- mayor distancia entre el estimulador y el receptor,
lación y registro no puede ser invertida, porque la disminuye la amplitud y aumenta la duración del

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Estudios de conducción nerviosa motora y sensitiva: hallazgos normales 59

das y las más lentas en el PES es de unos 25 m/s,


mientras que en el PEM es de unos 11 m/s(1).
De esta manera, en la estimulación proximal la
caída en la amplitud de la respuesta sensitiva tiene
que ser interpretada como resultado de la cancela-
ción de fase y dispersión temporal que se produce de
forma fisiológica, y es, por tanto, de escasa utilidad
en la valoración de lesiones desmielinizantes proxi-
males con bloqueo de conducción. En el estudio
de conducción nerviosa motora, sin embargo, se ha
visto que la caída máxima en amplitud, en sujetos
sanos, se produce para el nervio tibial en torno al
36%, y del 21% para el cubital, con una prolonga-
ción media de la duración para el primero del 32 y
del 17% para el segundo(10). Podemos determinar,
por tanto, en estudios de conducción motora proxi-
Figura 8. Fenómeno de dispersión temporal fisiológica. Esquema de mal con suficiente fiabilidad, valores patológicos
la respuesta sensitiva a la estimulación del nervio mediano en distintos
de conducción por fenómenos de bloqueo parcial
puntos. Se aprecia una caída en la amplitud y un aumento de la duración
con las estimulaciones más proximales. o completo o de dispersión temporal.

potencial evocado. La dispersión temporal fisio- BIBLIOGRAFÍA


lógica es más manifiesta en los estudios sensitivos
que en los motores. Por ejemplo, en el estudio de 1. Oh, SJ. Clinical electromyography. Nerve conduction
studies. 2ª ed. Baltimore: Williams and Wilkins; 1996.
conducción nerviosa sensitiva antidrómica, en que
2. Wilbourn AJ. Estudios de conducción nerviosa: tipos,
la respuesta es una onda bifásica de muy breve componentes, alteraciones y valor de localización. En:
duración, una pequeña diferencia de las latencias Katirji B, ed. Clínicas neurológicas de Norteamérica.
proximales de las fibras más rápidas con respecto a Electromiografía clínica, 2002. p. 295-330.
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plications and risks of nerve conduction studies and needle
potencial de las fibras rápidas se superponga a la electromyography. Muscle Nerve 2003; 27: 517-26.
fase negativa de la respuesta de las fibras más lentas, 4. Kimura, J. Electrodiagnosis in diseases of nerve and mus-
produciéndose una cancelación parcial de ambas cle. Principles and Practice. 2ª ed. Philadelphia: FA Davis
fases. Al sumarse ambas se obtiene una amplitud Co; 1989.
reducida en la respuesta final de hasta el 50%. Se 5. Gutmann L, Litchy WJ, Shields RW. Motor nerve con-
duction studies. AAN Sillabi-on-CD-ROM, 1999.
considera que este efecto de cancelación será máxi-
6. Rubin DI. Pitfalls in interpretation of nerve conduction
mo si la respuesta evocada tiene una fase negativa studies: technical and physiologic. AAN. Sillabi-on-CD-
y otra positiva de similar amplitud. ROM, 2005.
En el estudio de conducción nerviosa motora, 7. Rutkove SB. Effects of temperature on neuromuscular
como la duración del PEM es mucho mayor, la di- electrophysiology. Muscle Nerve 2001; 24: 867-82.
ferencia de latencia entre fibras rápidas y lentas en 8. Ferrante MA, Fisher M, Wilbourn AJ. Sensory nerve con-
la estimulación proximal conlleva, en condiciones duction studies. AAN. Sillabi-on-CD-ROM, 1999.
normales, una superposición de fases opuestas muy 9. Daube JR. Clinical neurophisiology. 2ª ed. Oxford: Oxford
University Press; 2002.
parcial y, por tanto, el fenómeno de cancelación de
10. Kerry HL. Nerve conduction studies: practical physiology
fase es mínimo. Se ha demostrado que la diferencia and patterns of abnormalities. AAN. Sillabi-on-CD-ROM,
de velocidad entre las fibras mielinizadas más rápi- 2005.

Manual EMG.indb 59 9/7/07 12:05:28


Manual EMG.indb 60 9/7/07 12:05:28
Capítulo 5

ESTUDIOS DE CONDUCCIÓN NERVIOSA MOTORA Y SENSITIVA:


HALLAZGOS ANORMALES
M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin, M. Romero Acebal

Para interpretar los hallazgos de los estudios elec- axonopatía distal (neuropatía axonal), mielinopa-
trofisiológicos, es fundamental reconocer los patro- tía (neuropatía desmielinizante) o neuronopatía.
nes combinados de anomalías en los estudios de Las lesiones que acontecen en la neurona motora
conducción nerviosa (motora, sensitiva, respuestas o sensitiva (neuronopatía) se comportan clínica y
tardías y estimulación repetitiva) y en la electromio- neurofisiológicamente como neuropatías axonales.
grafía de aguja (actividad muscular espontánea, estu- Por tanto, una de las informaciones más importan-
dios de potenciales de unidad motora, reclutamien- tes que pueden aportar los estudios de conducción
to, activación). No debe olvidarse que el diagnóstico nerviosa es la diferenciación entre lesiones prima-
final sólo se puede alcanzar cuando se interpreten riamente axonales o desmielinizantes (Tabla I).
los patrones electrofisiológicos hallados a la luz de
la historia clínica y la exploración neurológica.
Las alteraciones que pueden encontrarse en los LESIONES AXONALES
estudios de conducción nerviosa manifiestan una
disfunción de las fibras nerviosas en algún punto La pérdida de axones implica que hay menos
de su recorrido o de la neurona motora (asta ante- potenciales de acción individuales disponibles para
rior de la médula) o sensitiva (ganglio raquídeo). contribuir al potencial de acción muscular compues-
La lesión de estas estructuras tiene una expresión to (PAMC) o al potencial evocado sensitivo (PES).
morfopatológica muy estereotipada, en forma de La lesión axonal se traduce, pues, en una disminu-

TABLA I. Características electrofisiológicas en la degeneración axonal y la desmielinización segmentaria


Degeneracion axonal Desmielinizacion segmentaria

Neurografía motora Amplitud ↓↓ o ausente N o ↓; bloqueos de conducción


Duración N ↑ (si dispersión temporal)
Morfología N N o polifásico
Latencia distal N o ligeramente ↑ ↑↑
Velocidad de conducción N o ligeramente ↓ ↓↓
Neurografía sensitiva Amplitud ↓↓ o ausente ↓ o ausente
Duración N ↑
Morfología N N (raramente polifásico)
Velocidad de conducción Nó↓ ↓↓

Manual EMG.indb 61 9/7/07 12:05:29


62 M.I. Chamorro, F. Pérez Errazquin, M. Romero Acebal

ción en la amplitud del potencial, de modo que la


amplitud del PAMC y del PES refleja el número
de axones supervivientes. El modo más fiable de
valorar la pérdida axonal es comparar la amplitud del
potencial con un valor basal previo, con un control
sano o con el valor contralateral, si está indemne.
En las lesiones axonales es habitual que la la-
tencia distal y la velocidad de conducción nerviosa
permanezcan normales o levemente enlentecidas.
Esto se comprende fácilmente si se tiene en cuenta
que un nervio está constituido por fibras mieliniza-
das de diversos diámetros con diferentes velocidades Figura 1. Conducción nerviosa motora en nervio peroneo común, con regis-
de conducción, de modo que todas contribuyen a tro en músculo extensor común corto de los dedos. Patrón de lesión axonal:
la amplitud del potencial, pero sólo las más rápidas latencia distal normal (5 ms), velocidad de conducción normal (45,8 m/s) y
determinan la latencia y la velocidad de conducción. amplitud disminuida (1,2 mV), tanto a nivel distal como proximal.
Si se destruyesen la mayoría de las fibras, permane-
ciendo únicamente las de conducción más lenta, se
produciría una disminución en la amplitud del po- función del tiempo de evolución de la lesión, que
tencial de acción muscular compuesto, mientras que se relacionan con los hallazgos en el estudio elec-
la velocidad de conducción no estaría por debajo del tromiográfico(2). Inmediatamente después de una
80% del límite inferior de la normalidad, ya que las lesión con daño axonal se producen alteraciones
fibras mielinizadas no conducen por debajo de estos clínicas, como debilidad y alteraciones sensitivas.
límites, salvo que tengan un fenómeno de desmieli- Desde el punto de vista electrofisiológico, la esti-
nización sobreañadido. De igual manera, la latencia mulación y el registro distales al punto de lesión
distal no se prolonga nunca más allá del 125% del se traducen en un potencial de amplitud normal,
límite superior de la normalidad. Lo mismo sucede ya que todavía no se ha producido el fenómeno
con las ondas F y el reflejo H (ver capítulo 6). de degeneración walleriana. Al cabo de una o dos
Por tanto, en las lesiones axonales(1): semanas, se produce la degeneración walleriana,
– Disminuye la amplitud del potencial motor y y a partir de este momento se objetivan las típicas
sensitivo (en casos graves hay una abolición de alteraciones de la lesión axonal (neuropatía axonal).
la respuesta). Si en las sucesivas semanas se produce una reinerva-
– La velocidad de conducción es normal o está ción eficaz, las amplitudes de los potenciales motor
ligeramente disminuida, pero nunca por debajo y sensitivo aumentarán, con tendencia a volver a sus
del 80% del límite inferior de la normalidad. valores normales(3,4). En este caso, los nuevos axones
En el nervio mediano, por ejemplo, nunca será pueden estar peor mielinizados, por lo que condu-
inferior a 35 m/s. cirían más lentamente, dando lugar a un potencial
– La latencia distal es normal o está ligeramente desincronizado y de mayor duración.
prolongada, pero nunca por encima del 125%
del límite superior de la normalidad (Fig. 1).
LESIONES DESMIELINIZANTES
Cambios evolutivos en las lesiones axonales
La mielina que rodea a las fibras nerviosas es
Otro de los conceptos clave para la interpreta- esencial para la conducción saltatoria, por lo que
ción de los estudios de conducción nerviosa cuan- su alteración conduce a un enlentecimiento en la
do existe pérdida axonal es el de los cambios en velocidad de conducción y una prolongación en las

Manual EMG.indb 62 9/7/07 12:05:29


Estudios de conducción nerviosa motora y sensitiva: hallazgos anormales 63

latencias distales. Se considera que los valores de


corte para calificar una lesión como primariamente
desmielinizante son: velocidades de conducción por
debajo del 80% del límite inferior de la normalidad y
latencias por encima del 125% del límite superior de
la normalidad(5). Como se ha comentado previamen-
te, el punto de corte se establece por la velocidad
de conducción nerviosa mínima de los axones mie-
linizados. Una disminución mayor en la velocidad
de conducción nerviosa será debida a fenómenos de
desmielinización. Se puede decir que velocidades de
conducción motora o sensitiva por debajo de 35 m/s
en miembros superiores o de 30 m/s en miembros Figura 2. Conducción nerviosa motora en nervio peroneo común, con de-
tección mediante electrodos de superficie en músculo pedio. Fenómeno
inferiores indican desmielinización.
de dispersión temporal de la conducción nerviosa, en un paciente afecto
El análisis de los cambios de amplitud del po- de una polineuropatía desmielinizante crónica.
tencial que aparecen en las lesiones desmielini-
zantes es algo más complejo(6). Hay que considerar
que las lesiones axonales siempre se traducen en un axón intacto(1,7); puede ocurrir en axones moto-
una reducción en la amplitud del potencial, pero res o sensitivos, aunque en la práctica clínica sólo se
lo contrario no es cierto, ya que el hallazgo de una puede demostrar con fiabilidad en los axones moto-
amplitud reducida puede deberse tanto a una le- res con las técnicas convencionales con electrodos
sión axonal como desmielinizante. La amplitud en de registro de superficie. Su causa más frecuente
las lesiones desmielinizantes puede ser normal o es la desmielinización segmentaria. La traducción
estar disminuida. Cuando la amplitud está redu- electrofisiológica del bloqueo es una reducción de
cida puede deberse a dos fenómenos: la dispersión la amplitud del potencial de acción muscular com-
temporal y el bloqueo de la conducción. puesto o del potencial sensitivo en la estimulación
La dispersión temporal ocurre en mayor o proximal a la lesión. En sujetos normales, la am-
menor medida a lo largo de toda la longitud del plitud es algo más baja en la estimulación proximal
nervio en sujetos normales, debido a las distintas que en la distal, debido al fenómeno de dispersión
velocidades de conducción de los axones mielini- temporal fisiológica y de cancelación de fases (véase
zados (véase capítulo 4). La dispersión temporal capítulo 4), aunque ésta no suele superar el 20%. El
anormal es el resultado de la disminución patoló- fenómeno del bloqueo de la conducción produce
gica de las velocidades de conducción nerviosa en una reducción en la amplitud del potencial de ac-
las diferentes fibras de un nervio. Puede apreciarse ción muscular compuesto, de forma distinta según
en un segmento de un nervio en los casos de des- el lugar del punto de bloqueo a lo largo del trayecto
mielinización focal, pero también puede aparecer del nervio. Si el nervio es estimulado proximalmen-
en lesiones desmielinizantes más difusas(7). Cuando te a la zona del bloqueo, la amplitud del potencial
existe una dispersión temporal aumentada patoló- está reducida, pero si se estimula distalmente al
gicamente, la respuesta evocada motora o sensitiva mismo, la amplitud es normal (Figs. 3 y 4).
tiene una morfología desincronizada, con dismi- El criterio utilizado inicialmente para definir
nución en la amplitud y aumento de la duración un bloqueo de la conducción era una disminución
(incremento mayor al 15% en la duración del po- en la amplitud o el área de la fase negativa del
tencial proximal respecto al distal) (Fig. 2). potencial de acción muscular compuesto superior
El bloqueo de la conducción es la imposibili- a un 20% con respecto a la distal, siempre que la
dad para transmitir el impulso nervioso a través de duración no fuese superior a un 15% (para des-

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64 M.I. Chamorro, F. Pérez Errazquin, M. Romero Acebal

Figura 3. Estudio de conducción nerviosa motora en nervio cubital, Figura 4. Estudio de conducción nerviosa motora en nervio radial.
con detección mediante electrodos de superficie en músculo abductor Bloqueo de la conducción en el brazo: amplitud intensamente reducida
del 5º dedo. Bloqueo de la conducción en el canal epitrócleo-olecraniano: en la estimulación proximal al punto de bloqueo en el brazo y normal en
amplitud notablemente reducida en la estimulación por encima del codo. la estimulación en el antebrazo.
Amplitudes y velocidades de conducción normales en la estimulación por
debajo del codo y en muñeca.

cartar fenómenos de dispersión temporal patoló- motivo, la mayoría de los autores usan el criterio
gicos). Más recientemente, se ha demostrado que más restrictivo de una caída superior al 50% en el
la dispersión temporal y la cancelación de fases área y/o amplitud de la fase negativa de la respuesta
que acontecen sobre nervios afectados por lesiones proximal para definir el bloqueo de conducción
desmielinizantes, son capaces por sí mismas de pro- electrofisiológico, siempre que no existan cambios
ducir disminuciones de la amplitud del potencial importantes en la duración del potencial.
de acción muscular compuesto de hasta un 50%, En cualquier caso, desde el punto de vista clí-
sin que existan bloqueos de la conducción. Por este nico se ha de tener en cuenta que tanto el bloqueo

TABLA II. Criterios electrofisiológicos de desmielinización


Cornblath(5) Oh(2)

Velocidad de conducción < 80% del LIN, si A > 80% del LIN < 60% del VM
< 70% del LIN, si A < 80% del LIN
Latencia distal > 125% del LSN, si A > 80% del LIN > 150% del VM
> 150% del LSN, si A < 80% del LIN
Dispersión temporal > 15% en la duración > 15-33% de cambio en duración
Bloqueo de conducción
• Definido Caída > 20% en áreas del pico negativo o amplitud Caída > 50% en A y área
pico-pico y cambio < 15% en duración del pico negativo
• Probable Caída > 20% en áreas del pico negativo o amplitud Caída entre 24 y 41% en A y área con cambio de
pico-pico y cambio > 15% en duración del pico negativo duración < 15-33%
Onda F > 120% del LSN, si A > 80% del LIN > 150% del VM
> 150% del LSN, si A < 80% del LIN
Reflejo H Ausente > 150% del VM
LIN: límite inferior de la normalidad; LSN: límite superior de la normalidad; A: amplitud; VM: valor medio.

Manual EMG.indb 64 9/7/07 12:05:30


Estudios de conducción nerviosa motora y sensitiva: hallazgos anormales 65

TABLA III. Criterios de bloqueo parcial de la conducción (Asociación Americana de Medicina Electrodiagnóstica, 1999)(7)
Dispersión temporal moderada
Dispersión temporal mínima (incremento de la duración
(incremento de la duración de un 30% o menos) entre 31 y 60%)
Bloqueo parcial de Bloqueo parcial de Bloqueo parcial de
conducción definido conducción probable conducción probable
Nervio Reducción Reducción Reducción Reducción Reducción Reducción
Segmento (proximal-distal) de amplitud de área de amplitud de área de amplitud de área
Mediano
Antebrazo (codo-muñeca) > 50% > 40% 40-49% 30-39% > 50% > 40%
Brazo (axila-codo) > 50% > 40% 40-49% 30-39% > 50% > 40%
Proximal (punto de Erb-axila) * * > 40% > 30% > 50% > 40%
Cubital
Antebrazo (infracodo-muñeca) > 50% > 40% 40-49% 30-39% > 50% > 40%
Codo (supra-infracodo) > 50% > 40% 40-49% 30-39% > 50% > 40%
Brazo (axila-supracodo) > 50% > 40% 40-49% 30-39% > 50% > 40%
Proximal (punto de Erb-axila) * * > 40% > 30% > 50% > 40%
Radial
Antebrazo (codo-antebrazo distal) * * > 50% > 40% > 50% > 40%
Brazo (axila-supracodo) * * > 50% > 40% > 50% > 40%
Proximal (punto de Erb-axila) * * > 50% > 40% > 50% > 40%
Peroneo
Pierna (infracabeza-tobillo) > 60% > 50% 50-59% 40-49% > 60% > 50%
Cabeza peroné (supra-infracabeza) > 50% > 40% 40-49% 30-39% > 50% > 40%
Muslo (escotadura ciática-supracabeza) * * > 50% > 40% > 60% > 50%
Tibial
Pierna (rodilla-tobillo) > 60% > 50% 50-59% 40-49% > 60% > 50%
Muslo (escotadura ciática-rodilla) * * > 50% > 40% > 60% > 50%
*No aceptado como bloqueo parcial de la conducción.

de la conducción como la dispersión temporal hincapié en la distinción entre los fenómenos de


traducen un fenómeno de desmielinización seg- dispersión temporal y los auténticos bloqueos par-
mentaria. ciales de la conducción(7).
En la tabla II se recogen los criterios estable-
cidos por Cornblath(5) para definir las afecciones Hallazgos típicos de desmielinización segmentaria en
desmielinizantes de los nervios. Estos criterios se estudios de conducción motora
establecieron sólo para las fibras motoras, si bien
las fibras sensitivas siguen un patrón de afectación – La amplitud del potencial de acción muscular
superponible. Los criterios que en ella aparecen compuesto es normal o reducida.
para identificar los bloqueos de la conducción se – La morfología del potencial de acción muscular
consideran actualmente obsoletos. compuesto puede ser anormal, con múltiples
La tabla III recoge los criterios de consenso fases y duración prolongada (si existe fenómeno
para definir el bloqueo de conducción, haciendo de dispersión temporal anormal).

Manual EMG.indb 65 9/7/07 12:05:30


66 M.I. Chamorro, F. Pérez Errazquin, M. Romero Acebal

– La latencia distal está marcadamente prolon-


gada. Dicha prolongación debe ser mayor del
125% del límite superior de la normalidad, si
la amplitud del potencial de acción muscular
compuesto es normal, o mayor del 150% del
límite superior de la normalidad, si la amplitud
de la respuesta motora está muy disminuida.
– La velocidad de conducción nerviosa motora
está marcadamente enlentecida. El enlenteci-
miento es proporcional al grado de desmieli-
nización. Para que pueda atribuirse a desmie- Figura 5. Estudio de conducción nerviosa motora en nervio mediano, con
linización debe ser menor del 80% del límite detección mediante electrodos de superficie en músculo abductor corto
del pulgar, en un paciente afecto de una neuropatía hereditaria sensitivo-
inferior de la normalidad, cuando la amplitud motora tipo I. Latencia distal muy prolongada (16 ms), velocidad de conducción
del potencial de acción muscular compuesto enlentecida (26 m/s) y duración normal (13 ms). Obsérvese que, pese a tratarse
sea normal, o menor del 70% del límite inferior de una neuropatía hereditaria, se objetiva un bloqueo de la conducción.
de la normalidad, si la amplitud de la respuesta
motora está marcadamente disminuida. de dispersión temporal o bloqueos de conducción,
– El bloqueo de la conducción se caracteriza por por lo que hay que ser cautos a la hora de estable-
una reducción notable de la amplitud en la es- cer el diagnóstico diferencial entre una neuropatía
timulación proximal al bloqueo. Actualmente se desmielinizante adquirida y hereditaria basándose
acepta el criterio de una reducción del 50% en únicamente en estos hallazgos (Fig. 5).
el área negativa o en la amplitud del potencial
de acción muscular compuesto. Aunque pueden
existir bloqueos con velocidad de conducción BIBLIOGRAFÍA
normal, en la mayoría de los casos existe una 1. Preston DC, Logigian E, Gorson K. Nerve conductions
dispersión temporal, que da lugar a un enlente- and EMG: basic patterns. American Academy of Neuro-
cimiento de la velocidad de conducción. Si el logy, Sillabi-on-CD-ROM, 1999.
bloqueo es completo, no se obtiene potencial en 2. Oh SJ. Clinical electromyography: nerve conduction stu-
la estimulación proximal al mismo(2). dies. 2nd edition. Baltimore: Williams and Wilkins; 1996.
3. Kimura J. Electrodiagnosis in diseases of nerve and mus-
cle. Principles and Practice. 3rd edition. New York: Oxford
Hallazgos típicos de procesos desmielinizantes difusos University Press; 2001.
4. Mumenthaler M, Schliack N. Patología de los nervios
Son los encontrados en las neuropatías sensiti- periféricos. Diagnóstico y tratamiento. Barcelona: Toray,
vomotoras hereditarias (enfermedad de Charcot- S.A.; 1984.
Marie-Tooth), en las que la desmielinización afecta 5. Cornblath DR, Asbury AK, Albers JW, Feasby TE, Hahn
uniformemente a todas las fibras nerviosas (motoras AF, Mc Leod JG, et al. Report from an Ad Hoc Subcom-
mittee of the American Academy of Neurology AIDS Task
y sensitivas). Los hallazgos neurofisiológicos son Force. Research criteria for diagnosis of chronic inflam-
los propios de los procesos desmielinizantes: pro- matory demyelinating polyneuropathy (CIDP). Neurology
longación de las latencias y enlentecimiento de las 1991; 41: 617-8.
velocidades de conducción, pero sin fenómenos 6. Fernández Rodríguez JM. Electroneurografía. Estudios de
conducción nerviosa. En: Codina Puiggros A, ed. Tratado
de desmielinización segmentaria (dispersión tem- de Neurología. Madrid: ELA; 1994. p. 126-30.
poral o bloqueos de conducción). Sin embargo, 7. American Association of Electrodiagnostic Medicine.
en una minoría de pacientes con enfermedad de Consensus criteria for the diagnosis of partial conduction
Charcot-Marie-Tooth se han descrito fenómenos block. Muscle Nerve 1999; 22: S225-S229.

Manual EMG.indb 66 9/7/07 12:05:31


Capítulo 6

RESPUESTAS TARDÍAS: ONDA F, ONDA A Y REFLEJO H


M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin, M. Romero Acebal

El término respuesta tardía se utiliza para re-


ferirse a un potencial de latencia más larga que
el potencial de acción muscular compuesto (onda
M). Dentro de las respuestas tardías, o potenciales
de larga latencia, se incluyen la onda F, la onda A,
el reflejo H, el blink reflex (reflejo de parpadeo) y
el reflejo maseterino. En este capítulo se estudian
los tres primeros.

ONDA F

La onda F es un potencial de acción muscu-


lar compuesto, que se evoca intermitentemente Estímulo
al aplicar un estímulo supramáximo a un nervio
motor. Aparece tardíamente y representa la acti-
vación antidrómica de una proporción variable
de motoneuronas del asta anterior medular que
inervan ese músculo(1). Cuando se aplica un estí- Onda M Onda F
mulo supramáximo en la zona distal de un nervio
Figura 1. Esquema de evocación de las ondas F.
motor, el estímulo se propaga a través de los axones
motores no sólo en sentido distal u ortodrómico,
sino también proximal o antidrómico, consiguien- que llegan a activarse por vía antidrómica(2). La
do la activación de una porción pequeña y variable latencia, amplitud y configuración son variables,
de motoneuronas del asta anterior. La activación debido a que tras cada estímulo se activan grupos
de las motoneuronas del asta anterior se propaga diferentes de motoneuronas. Esto ocurre porque
ortodrómicamente y da lugar a un potencial de los estímulos repetidos no consiguen alcanzar el
acción muscular compuesto denominado onda F, cuerpo de la neurona al bloquearse en la zona de
de latencia mucho mayor que la latencia motora salida del axón, donde cambian las características
distal (Figs. 1 y 2). La amplitud es muy inferior de la membrana, o incluso más distalmente, en
a la de la onda M del músculo (5% o menos), lo áreas ya mielinizadas. El impulso también pue-
que traduce el pequeño número de motoneuronas de bloquearse en su propagación ortodrómica, al

Manual EMG.indb 67 9/7/07 12:05:31


68 M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin, M. Romero Acebal

Tabla I. Valores de referencia de latencia mínima de la onda F (en


ms) en relación con la altura del paciente
150 cm 160 cm 170 cm 180 cm 190 cm

N. mediano 25,0 26,5 28,0-28,5 29,6-30,0 31,1-32,0


N. cubital 25,0 26,8-27,0 28,5-29,0 30,2-31,0 32,0-33,0
N. peroneo 43,0-43,5 46,0-47,8 49,0-52,0 51,0-56,2 54,0-60,5
N. tibial 41,2-44,0 45,4-48,0 49,6-53,0 53,8-57,0 58,0-62,0

respectivamente, ya que la latencia puede estar


patológicamente alargada. Respecto a la técnica
de estimulación, también es similar a la utilizada
en los estudios de conducción motora, si bien el
cátodo debe orientarse en sentido proximal, más
cercano a la médula. El estímulo debe ser supra-
Figura 2. Ondas F obtenidas por estimulación del nervio tibial: en el lado
máximo y su frecuencia de 0,5 Hz o menor (un
izquierdo de la imagen se registra el potencial de acción muscular com-
puesto (onda M); en el lado derecho se registran las ondas F. Obsérvese la estímulo cada 2 o más segundos), para evitar el
diferencia de latencia y morfología de las mismas. bloqueo de la respuesta. Se deben aplicar estímulos
repetidos en número de 10 ó 20(4).

encontrar en periodo refractario la zona de salida Valores normales


del axón después de la estimulación antidrómica(3).
Esta variabilidad inherente a la onda F hace su La medida más útil de la onda F es la latencia
uso mucho menos preciso que el de la onda M. mínima, que es la latencia más pequeña de todas
Se emplea para valorar los segmentos proximales las ondas F recogidas, medida desde el comien-
de las fibras motoras. zo del estímulo hasta el inicio de la primera de-
flexión (positiva o negativa). El límite superior de
Técnica de registro y estimulación la normalidad se define en función de la estatura
(Tabla I), ya que la onda F se obtiene en virtud de
La onda F debe su nombre a que inicialmente un estímulo que sigue unas vías aferente y eferen-
se registró en los pequeños músculos del pie (del te. En términos generales se acepta que el rango
inglés foot). Se obtiene estimulando distalmente de la normalidad para la onda F es de 23-33 ms
los nervios mediano, cubital, peroneo y tibial y en los nervios mediano y cubital y de 41-62 ms en
registrando las respuestas en los músculos de la los nervios peroneo y tibial. Algunos laboratorios
eminencia tenar, hipotenar, extensor común corto ajustan, además, los límites de la normalidad a la
de los dedos y separador del dedo gordo, respecti- edad, de modo que los datos que habitualmente
vamente, de modo similar a como se realizan los se manejan son para adultos hasta los 40 años y
estudios rutinarios de conducción nerviosa moto- a una edad superior se incrementa la latencia
ra. Sin embargo, la sensibilidad del amplificador mínima en 0,5 ms por década.
debe aumentarse a 200 μV/div, al ser menor su Otra posibilidad para evaluar la normalidad de
amplitud, y el barrido debe mantenerse en 5 ms/div la latencia de la onda F es la comparación derecha-
en miembros superiores y 10 ms/div en miembros izquierda, cuando los síntomas son unilaterales. De
inferiores. Si no se consigue evocar ninguna onda forma general se dice que una asimetría superior a
F es preciso duplicar el barrido a 10 y 20 ms/div, 2 ms es anormal. Algunos laboratorios establecen

Manual EMG.indb 68 9/7/07 12:05:31


Respuestas tardías: onda F, onda A y reflejo H 69

diferencias según los nervios considerados: 2,3 ms • Radiculopatías y plexopatías. Un retraso en la


en nervio mediano; 2,7 ms en nervio cubital y 3,5 latencia de la onda F, unido a una velocidad
ms en los nervios peroneo y tibial(4). de conducción nerviosa motora normal es un
Otro aspecto de la onda F es la persistencia, signo de afectación de segmentos proximales
esto es, el porcentaje de estímulos que produ- (bloqueos de conducción), sobre todo si se de-
cen ondas F. Se dice que la persistencia normal muestra una asimetría entre el lado sintomático
en los nervios mediano, cubital y tibial es del y el sano. En casos leves, las ondas F pueden ser
40% o más, mientras que en el nervio peroneo normales, sobre todo si se afectan más las fibras
puede ser muy inferior en sujetos normales. Las sensitivas –que no intervienen en la génesis de
persistencias próximas al 100% pueden aparecer la onda F–, por lo que un estudio normal no
en individuos normales cuando el músculo no excluye la enfermedad.
está bien relajado, si bien también aparecen en • Neuropatía hereditaria sensitivomotora. Las on-
enfermedades de la primera motoneurona. De das F están ausentes o con latencias muy pro-
ahí que haya que ser cauto en la valoración de longadas en los miembros inferiores, donde la
la persistencia y no se considere de una forma afectación clínica es más grave, y relativamente
habitual(2). preservadas en los miembros superiores(5-7).
Por último, también se puede valorar la cro-
nodispersión, esto es, la diferencia entre la menor
y la mayor latencia, lo que da idea del grado de ONDA A
dispersión temporal(2).
La onda A o respuesta A, mal denominada
Aplicaciones en la práctica clínica como reflejo axónico, es una respuesta de latencia
intermedia que aparece entre la respuesta M y la
Como se ha apuntado, los estudios de ondas F onda F. Se interpreta como una demostración de
son especialmente útiles para analizar los segmen- la existencia de ramas colaterales en el segmento
tos más proximales de las fibras motoras. proximal de las fibras motoras. Aparece cuando un
Se realizan habitualmente para investigar po- estímulo submáximo estimula una de las ramas del
sibles lesiones en los segmentos proximales de los axón, pero no la otra, de modo que el impulso an-
nervios mediano, cubital, peroneo y tibial, así como tidrómico se propaga hasta la zona de ramificación
sobre los plexos braquial y lumbosacro. y después continúa en sentido distal ortodrómico,
Los estudios de ondas F aportan información siguiendo la segunda rama. Con estímulos de gran
de gran interés en: intensidad suele desaparecer, ya que se activan am-
• Polineuropatías desmielinizantes adquiridas. bas ramas, y los dos impulsos antidrómicos colisio-
En la polineuropatía desmielinizante inflama- nan en la zona de ramificación(3).
toria aguda se afectan comúnmente los seg- La respuesta A tiene una morfología y latencia
mentos más proximales en estadios iniciales, constantes, ya que se origina siempre por la acti-
con preservación relativa de segmentos más vación de una misma rama colateral de la misma
distales del nervio, por lo que la velocidad de unidad motora (Figs. 3 y 4). Si bien suele preceder
conducción puede ser normal los primeros a la onda F, como se ha comentado, ocasional-
días. Sin embargo, las ondas F estarán ausentes mente puede seguirla. Es el caso de los procesos
o con latencias muy prolongadas. Su reapari- en los que ocurre una regeneración axonal con
ción indica la recuperación de la conducción aparición de brotes colaterales poco mielinizados,
en segmentos proximales. Algo similar ocurre que conducen el impulso que asciende o desciende
en la polineuropatía desmielinizante inflama- mucho más lentamente que los axones normales
toria crónica. que dan lugar a la onda F(3).

Manual EMG.indb 69 9/7/07 12:05:32


70 M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin, M. Romero Acebal

Colisión

Figura 4. Onda A tras estimulación del nervio peroneo en un paciente


con neuropatía axonal crónica. La parte izquierda de la imagen corres-
ponde a la respuesta M y la derecha a la onda A. Obsérvese que todas las
respuestas A tienen la misma latencia y morfología, lo que las diferencia
M A F M F
de las ondas F (no presentes en este caso).
Figura 3. Esquema de evocación de las ondas A. En los procesos de
reinervación crónica, se producen ramas axonales colaterales desde las
zonas proximales del axón que reinervan las fibras musculares dener-
vadas. En estimulaciones submáximas (parte izquierda del esquema), rentes motoras de la raíz correspondiente. De ahí
el impulso nervioso viaja por la colateral nerviosa y llega a producir que sea constante (Figs. 5 y 6).
una respuesta motora tardía (onda A) que aparece entre la onda M y El reflejo H se puede evocar de forma fisioló-
la onda F. Se identifica por su idéntica latencia y configuración en las
gica en los músculos intrínsecos de la mano y del
sucesivas estimulaciones. A la derecha, se objetiva la desaparición de
la onda A, tras la estimulación supramáxima, debido a un fenómeno pie en recién nacidos. En adultos sólo se evoca en
de colisión. los músculos de la pantorrilla (sóleo y gemelos) y
en el palmar mayor. De ahí que su utilidad estribe
en determinarlo en el nervio tibial o mediano y
Aparece con más frecuencia al estimular los obtener una prueba de la conducción a lo largo
nervios mediano o cubital en la muñeca y el pero- de toda la vía aferente y eferente(1).
neo o el tibial en el hueco poplíteo. Suele aparecer
en pacientes con procesos neurógenos crónicos con Técnica de registro y estimulación
regeneración axonal, como ocurre en neuropatías
crónicas, radiculopatías y lesiones de segunda mo- El reflejo H en el nervio tibial se obtiene con
toneurona(7). el paciente en decúbito prono y el pie caído al
borde de la mesa de exploración. Los electro-
dos de registro se sitúan sobre el músculo sóleo
REFLEJO H o los gemelos. Se estimula el nervio tibial en
la fosa poplítea. El electrodo activo estimula-
El reflejo H es una respuesta tardía, que repre- dor (cátodo) se coloca dirigido hacia la médula
senta un reflejo espinal monosináptico inducido espinal. Debe realizarse una estimulación cada
eléctricamente y con un significado similar al de dos o más segundos, para evitar bloqueos de las
reflejo de estiramiento muscular obtenido mecá- respuestas.
nicamente al golpear el tendón de un músculo(1). La sensibilidad debe situarse en torno a 500 μV
Debe su nombre a Hoffmann quien lo describió y el barrido a 10 ms/div. El reflejo H se obtiene
por primera vez en 1919. aplicando estímulos submáximos, que no son ca-
Su estudio mide la latencia del arco reflejo a paces de evocar la onda M. A medida que se incre-
través de las fibras aferentes Ia y de las fibras efe- menta la intensidad disminuye el reflejo H hasta

Manual EMG.indb 70 9/7/07 12:05:32


Respuestas tardías: onda F, onda A y reflejo H 71

Colisión Colisión
Fibras Fibras Fibras
Fibras Fibras Fibras
sensitivas IA sensitivas IA sensitivas IA
motoras motoras motoras

H M H M H

Figura 5. Esquema de evocación del reflejo H. Tras estimulaciones a baja intensidad (izquierda), se activan de forma selectiva las fibras sensitivas
aferentes IA, dando lugar a la onda H sin aparición de la onda M. Con intensidades crecientes (medio), se activan más fibras IA, y también algunas fibras
motoras eferentes, que producen una respuesta M de baja amplitud. Ante intensidades de estimulación más elevadas (derecha) se estimulan, tanto las
fibras sensitivas como las motoras. La amplitud de la onda M aumenta considerablemente, mientras que la de la onda H decrece debido a un fenómeno
de colisión.

desaparecer y aparece la onda M hasta alcanzar la con el valor contralateral, cuando los síntomas son
máxima intensidad. La latencia del reflejo H es rela- unilaterales; una diferencia superior a 1,5 ms debe
tivamente constante (entre 25 y 35 ms), al igual que considerarse como patológica.
la persistencia. La estatura condiciona la distancia La amplitud del reflejo H no suele considerarse,
que debe recorrer el estímulo y la respuesta, por lo pero asimetrías superiores al 50% pueden indicar
que debe ser tenida en consideración(3,4). alteraciones en la conducción(4).

Valores de referencia Aplicaciones clínicas

Al igual que ocurre con la onda F, la latencia El reflejo H es un test para la valoración de
del reflejo H y su ausencia son los parámetros más radiculopatías C6, C7 y S1. Un retraso unilateral
valorables. Se compara la latencia obtenida con los o su ausencia implican una lesión de la raíz. Su la-
valores de referencia normales. El límite superior tencia también está incrementada en una variedad
normal de la latencia para el músculo sóleo es de de polineuropatías axonales y desmielinizantes, por
35 ms y para el palmar mayor es de 20 ms(4). Al lo que se afecta precozmente en el síndrome de
igual que ocurre al valorar la latencia del reflejo Guillain-Barré y la neuropatía alcohólica, urémica
H, los valores normales están relacionados con la y diabética, prolongándose su latencia.
talla del sujeto, con la longitud del brazo o de la El reflejo H puede estar anormalmente exacer-
pierna y con la edad. Otra posibilidad es comparar bado en sujetos con afectación de primera moto-

Manual EMG.indb 71 9/7/07 12:05:33


72 M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin, M. Romero Acebal

Conviene recordar que el estudio del reflejo H


tiene unas limitaciones(5,7):
• Sólo se pueden estudiar las raíces S1, C6 y
C7.
• Puede ser normal, aunque exista lesión de la
raíz.
• Una alteración del reflejo no es sinónimo de
lesión de la raíz, ya que la vía refleja incluye
la conducción a través de los nervios tibial y
ciático, el plexo sacro, la médula espinal y la
raíz sensitivo-motora.
• Si se ha producido una lesión radicular y el
reflejo H estaba abolido, suele permanecer
inexcitable.
• Puede estar abolido bilateralmente en polineu-
ropatías y en individuos sanos mayores de 60
años.

BIBLIOGRAFÍA

1. Fernández Rodríguez JM Electroneurografía. Estudios de


conducción nerviosa. En: Codina Puiggros A, ed. Tratado
Figura 6. Reflejo H obtenido tras estimulación del nervio tibial. Con de Neurología. Madrid: ELA; 1994. p. 126-30.
intensidades bajas de estimulación (parte alta del registro), se obtiene un 2. Daube JR. Clinical Neurophisiology. Philadelphia: FA
reflejo H sin respuesta motora directa (onda M). Ante intensidades cre- Davis Co., 1996.
cientes de estimulación, la onda H aumenta sucesivamente de amplitud 3. Kimura J. Electrodiagnosis in diseases of nerve and mus-
y aparece la onda M. Con intensidades elevadas, sigue aumentando la cle. Principles and Practice. 3rd edition. New York: Oxford
amplitud de la onda M, mientras que va decreciendo la amplitud de la University Press; 2001.
onda H, debido a fenómenos de colisión entre el reflejo H y los potenciales 4. Eisen A, Leis A, Ross M. Studies of reflexes and late res-
motores antidrómicos. ponses. American Academy of Neurology. Sillabi-on-CD,
1999.
5. Cocero E, Recuero E. Introducción a la electromiografía
y a la conducción eléctrica del nervio periférico. Madrid:
neurona o lesiones crónicas del sistema nervioso Graphia; 1971.
central, lo que indica un aumento de la excitabili- 6. Mumenthaler M, Schliack N. Patología de los nervios pe-
dad de motoneuronas espinales. Por el contrario, riféricos. Diagnóstico y tratamiento. Barcelona: Ediciones
Toray, S.A.; 1984.
está disminuido durante el sueño y las fases inicia-
7. Oh SJ. Clinical electromyography: nerve conduction
les de una lesión cerebral aguda o de la médula studies. 2nd edition. Baltimore: Williams and Wilkins;
espinal. 1996.

Manual EMG.indb 72 9/7/07 12:05:33


Capítulo 7

EL REFLEJO DE PARPADEO
J.J. Poza Aldea

INTRODUCCIÓN sensitiva trigeminal del ganglio de Gasser, una neu-


rona sensitiva del núcleo principal del trigémino,
El reflejo de parpadeo es un reflejo protector y la neurona motora del nervio facial, por el que
del globo ocular, que consiste en el cierre palpe- viaja la respuesta para producir la contracción del
bral como respuesta a diversos estímulos, sensitivos, ángulo orbicular de los párpados.
visuales o acústicos. En la práctica clínica, este La respuesta R2 es bilateral y simétrica. Es una
reflejo se provoca mediante un leve roce sobre la respuesta polisináptica más compleja en su génesis
córnea o las pestañas, o con la percusión glabelar. que la R1. La neurona trigeminal aferente del gan-
En este caso, la vía aferente es el nervio trigémino, glio de Gasser contacta con neuronas del núcleo
hay una integración en núcleos del tronco encefá- espinal del trigémino, descendiendo el estímulo
lico, y una eferencia a través del nervio facial. Este hasta la porción inferior del bulbo, para ascender
reflejo puede estudiarse también mediante técnicas de forma bilateral por la formación reticular lateral
neurofisiológicas, lo que nos permite separar los bulbar, para contactar finalmente con el nervio
componentes que lo constituyen, y determinar su facial, el cual vehiculará la respuesta eferente.
latencia, lo que nos da una idea del estado de las Morfológicamente el origen polisináptico queda
vías que lo conducen y de los núcleos en los que de manifiesto por la presencia de una respuesta
se produce su integración. polifásica. Su latencia en individuos normales no
debe superar 40 ms. La diferencia entre la respuesta
R2 ipsilateral (R2i) y contralateral (R2c) debe ser
COMPONENTES DEL REFLEJO DE PARPADEO inferior a 6 ms.
Existe una tercera respuesta R3, también bila-
El reflejo de parpadeo consta básicamente de 2 teral y más tardía, cuya conducción aferente está
respuestas, R1 y R2, cuya génesis está representada probablemente vehiculada por fibras nociceptivas
en la Figura 1. trigeminales Aδ, y cuya integración central com-
La respuesta R1 es la más precoz, unilateral parte las estructuras implicadas en la generación
e ipsilateral al estímulo trigeminal. En personas de la respuesta R2, lo mismo que la vía eferente
normales su latencia no debe superar 13 ms, y la facial. Por el momento esta respuesta tiene escasa
diferencia de latencia entre ambos lados no debe utilidad clínica(1).
ser mayor de 1,2 ms. El estímulo viaja por fibras La magnitud de las respuestas tardías y la pro-
Aβ del nervio trigémino y se integra en un circuito babilidad de obtenerse pueden modificarse por
formado por, al menos, 3 neuronas: la neurona diversos factores:

Manual EMG.indb 73 9/7/07 12:05:33


74 J.J. Poza Aldea

Nervio supraorbitario-1ª rama trigeminal


Núcleo facial

Nervio facial Formación reticular


bulbar
Núcleo trigemino-espinal
R1 R2i R3i R2c R3c

Figura 1. Circuitos neuronales im-


plicados en la génesis de las res-
puestas del reflejo de parpadeo.

1. Intensidad del estímulo: un estímulo de inten- La intensidad del estímulo se va aumentando


sidad superior al umbral doloroso o una esti- paulatinamente hasta obtener unas respuestas esta-
mulación con trenes de alta frecuencia y corta bles y reproducibles. Hay que tener en cuenta que
duración aumenta la respuesta. intensidades de estímulo demasiado altas pueden
2. Cierre voluntario de los ojos: aumenta la res- originar la aparición de una respuesta R1 contra-
puesta y disminuye la habituación. Puede in- lateral por difusión, así como una respuesta R3,
cluso favorecer la aparición de una pequeña R1 que puede ser confundida con un alargamiento
contralateral al estímulo. de la respuesta R2. Para evitar la habituación de la
3. Estado emocional: el grado de atención, el mie- respuesta, la estimulación se hace manualmente,
do, la tensión, la realización de tareas mentales, de forma aleatorizada, con una separación entre
etc, modifican la respuesta. estímulos de más de 10 s. Se utilizan varias respues-
4. Fármacos y tóxicos: diversos fármacos neuro- tas consecutivas, de 4 a 6, valorándose la latencia
trópicos, así como el tabaco, pueden inhibir la mínima de la respuesta R1 y la latencia media de
respuesta. la respuesta R2.
Se puede completar el estudio midiendo la res-
puesta directa (M) obtenida tras estimular el nervio
EXPLORACIÓN NEUROFISIOLÓGICA DEL REFLEJO facial a su salida del cráneo a través del orificio
DE PARPADEO estilomastoideo.

Se coloca al paciente tumbado en decúbito su-


pino, con los ojos abiertos o suavemente cerrados. UTILIDAD CLÍNICA DEL REFLEJO DE PARPADEO
Se estimula el nervio supraorbitario colocando el
cátodo sobre la escotadura supraorbitaria y el ánodo El reflejo de parpadeo nos permite estudiar
en la frente, unos 2 ó 3 cm superior y lateral a dicha electrofisiológicamente todos los elementos que
escotadura. El registro se hace mediante dos electro- participan en su aferencia, integración y eferencia;
dos, bien de superficie, bien subcutáneos. El electro- esto es, la vía trigeminal, el núcleo espinal del tri-
do activo se coloca en el tercio medio del párpado gémino, la formación reticular bulbar y el nervio
inferior, sobre el borde orbitario. La referencia se facial. Su organización anatómica hace posible dis-
coloca en el ala de la nariz ipsilateral. Debe hacerse tinguir diferentes patrones según donde se localice
siempre un registro simultáneo de ambos lados. la lesión (Fig. 2)(2).

Manual EMG.indb 74 9/7/07 12:05:34


El reflejo del parpadeo 75

B C

D E

Figura 2. Patrones de respuesta del reflejo de parpadeo; A: patrón de lesión aferente; B: lesión en puente con afectación de la conexión directa trigémino-
facial; C: lesión en el núcleo trigeminal; D: lesión que afecta al núcleo trigeminal y formación reticular lateral del bulbo; E: lesión eferente.

Manual EMG.indb 75 9/7/07 12:05:34


76 J.J. Poza Aldea

1. Una lesión trigeminal ocasionará una respuesta normal. Sólo en los casos en que haya lesión del
retrasada o ausente, tanto R1 como R2i y R2c, nervio encontraremos una alteración, como la que
al estimular el lado afectado, mientras que to- se ha descrito en el patrón aferente.
dos los componentes de la respuesta obtenida En la parálisis facial el estudio del reflejo de
al estimular el otro lado serán completamente parpadeo puede resultar especialmente útil, pues
normales. permite estudiar el nervio en todo su recorrido,
2. Una lesión pontina, que afecte a la conexión incluyendo la porción intrapetrosa, no asequible
directa trigémino-facial, originará una respuesta a otras técnicas electrofisiológicas(3). La amplitud
R1 retrasada o ausente con R2i y R2c normales, de la respuesta R1 en la primera semana tras la
al estimular el lado afecto, mientras que todos instauración de la parálisis, constituye un marcador
los componentes de la respuesta serán normales pronóstico de la recuperación de la lesión(4).
al estimular el lado sano. En el espasmo hemifacial y en la sincinesia
3. Si la lesión afecta al núcleo espinal del trigémi- facial postparalítica encontraremos una difusión
no, al estimular el lado afecto obtendremos una del reflejo de parpadeo hacia áreas en las que nor-
respuesta R1 normal, con R2i y R2c patológicas, malmente no se recoge(5). Así, podremos encontrar,
mientras que al estimular el lado sano todos los tras estímulo en nervio supraorbitario respuestas en
componentes de la respuesta serán normales. la musculatura perilabial del lado afectado, que no
4. Si la lesión afecta a la formación reticular bul- encontraremos en el lado sano(6).
bar, al estimular el lado afecto obtendremos una De la misma manera, el estudio del reflejo de
respuesta R1 normal, con R2i y R2c patológicas, parpadeo puede tener utilidad en polineuropatías,
mientras que al estimular el lado sano, las res- como el síndrome de Guillain-Barré, que pueden
puestas R1 y R2i serán normales, mientras que cursar con afectación facial. Al permitir estudiar
la R2c estará alterada. el nervio en toda su longitud es uno de los pará-
5. Finalmente, si la lesión afecta al núcleo o al metros que puede verse precozmente afectado, al
nervio facial, el estímulo en el lado afecto dará igual que las ondas F y H, antes de que se altere la
lugar a respuestas R1 y R2i alteradas, con R2c conducción en los segmentos más distales de las
normal, mientras que el estímulo en el lado extremidades(7).
sano dará lugar a respuestas R1 y R2i normales, Por otro lado, tanto la corteza cerebral como los
con R2c alteradas. ganglios basales modifican la excitabilidad de los cir-
Con frecuencia las lesiones afectan simultá- cuitos implicados en la génesis del reflejo de parpa-
neamente a varias de las estructuras citadas, o hay deo. Esto hace que pueda verse alterado en lesiones
múltiples lesiones en tronco, que hacen que los centrales suprasegmentarias, que aparentemente no
patrones descritos no sean tan claros. afectan a la región anatómica en la que se origina
De esta forma, el estudio del reflejo de par- este reflejo. Así, son bien conocidas las modificacio-
padeo puede ser útil en neuropatías trigeminales nes del reflejo de parpadeo en lesiones vasculares
o faciales, polineuropatías o multineuritis con corticales, o en enfermedades degenerativas que
afectación trigeminal o facial, lesiones del án- afectan a los ganglios basales, como la enfermedad
gulo ponto-cerebeloso que comprometan uno de Parkinson o la enfermedad de Huntington.
o los dos nervios citados, o lesiones de tronco
cerebral de cualquier etiología (vascular, des-
mielinizante, etc.). BIBLIOGRAFÍA
En las neuralgias trigeminales hay que tener
1. Aramideh M, Ongerboer de Visser BW. Brainstem re-
en cuenta que los síntomas irritativos no tendrán flexes: electrodiagnostic techniques, physiology, norma-
repercusión electrofisiológica, y que, por tanto, si tive data, and clinical applications. Muscle Nerve 2002;
sólo hay dolor, el reflejo de parpadeo puede ser 26: 14-30.

Manual EMG.indb 76 9/7/07 12:05:36


El reflejo del parpadeo 77

2. Kimura J, Daule J, Burke D, Hallet M, Cruccu G, On- 5. Edermir-Kiziltan M, Uzun N, Kiziltan G, Karaali-Savrun
gerboer de Visser BW, et al. Human reflexes and late res- F. Somatosensory evoked blink response in hemifacial
ponses. Report of an IFCN comitte. Electroencephalogr spasm and peripheral facial palsy. Electromyogr Clin
Clin Neurophysiol 1994; 90: 393-403. Neurophysiol 2005; 45: 203-7.
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Clin Neurophysiol 2005; 116: 1542-54.

Manual EMG.indb 77 9/7/07 12:05:36


Manual EMG.indb 78 9/7/07 12:05:37
Capítulo 8

ESTIMULACIÓN REPETITIVA
E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

INTRODUCCIÓN terminal nervioso, y en la que existe abundante


acetilcolinesterasa procedente de la membrana
La estimulación repetitiva es el estudio neu- muscular. Esta enzima hidroliza la acetilcolina
rofisiológico más frecuentemente utilizado para en ácido acético y colina.
establecer el diagnóstico de los trastornos de la Se puede considerar que el proceso de trans-
unión neuromuscular. En esta técnica, un nervio misión neuromuscular se inicia con la síntesis de
motor recibe un estímulo supramáximo (necesa- acetilcolina en el terminal nervioso por la acción
rio para activar todas las fibras nerviosas) con un de la colina acetilasa a partir de colina y acetil-
tren de descargas, recogiéndose los potenciales coenzima A(3). La acetilcolina se almacena en el
de acción motores en el músculo correspondien- terminal presináptico en forma de vesículas. La
te. Ya fue descrita en 1895 por Jolly en pacientes cantidad de acetilcolina que contiene cada vesí-
miasténicos, y a partir de los trabajos de Harvey y cula se denomina quantum, y corresponde a unas
Masland en 1941, se han establecido los diversos 10.000 moléculas de acetilcolina.
parámetros que permitieron la estandarización de La acetilcolina se puede encontrar en tres re-
la técnica(1,2). servorios:
Para comprender los hallazgos obtenidos en 1. Acetilcolina activa: es la acetilcolina de libe-
la estimulación repetitiva es conveniente conocer ración inmediata y se encuentra en vesículas
antes la fisiología de la placa motora. próximas a zonas especializadas de la membra-
na del axón terminal, conocidas como “zonas
activas”. Constituye una reserva de unos 1.000
FISIOLOGÍA DE LA UNIÓN NEUROMUSCULAR quanta, aproximadamente.
2. Acetilcolina inactiva: las vesículas con este tipo
La placa motora o unión neuromuscular es una de acetilcolina se encuentran en otras zonas del
“pseudosinapsis” (interfase eléctrica-química-eléc- terminal axónico. Cuando llega el impulso se
trica) compuesta, por un lado, por el terminal del desplazan hacia las zonas activas. El número
axón de una motoneurona y, por el otro, por la total de estas vesículas (reservorio de moviliza-
membrana muscular (Fig. 1). Esta última presenta ción) supone unos 10.000 quanta.
numerosos pliegues e irregularidades en su superfi- 3. Existe un tercer depósito de este neurotransmi-
cie para poder establecer un mayor contacto con el sor procedente de la síntesis de acetilcolina a
terminal axónico. Entre ambas membranas queda partir de acetil-coenzima A y colina obtenida
un espacio de 40 a 50 nm, la hendidura sinápti- por recaptación. Esta vía es la fuente principal
ca, donde se libera la acetilcolina procedente del de acetilcolina para mantener la transmisión

Manual EMG.indb 79 9/7/07 12:05:37


80 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

Figura 1. Esquema de la unión neuromuscular y del receptor de acetilcolina.

neuromuscular y constituye una reserva de y los receptores de acetilcolina son normales,


100.000 quanta. por lo que la amplitud de los potenciales mi-
La liberación de acetilcolina a la hendidura niatura de la placa motora es normal.
sináptica se produce por tres mecanismos: 2. Liberación espontánea no cuántica: no ligada a
1. Exocitosis espontánea: se produce por la fusión la exocitosis de vesículas, que se relaciona con
de la vesícula a la membrana del axón terminal, factores tróficos del nervio sobre el músculo.
ocasionando la liberación de un pequeño nú- 3. Exocitosis en respuesta a un impulso eléctri-
mero de vesículas de acetilcolina en ausencia co: ocurre una despolarización transitoria de la
de estímulo nervioso. Esta acetilcolina liberada membrana del axón, que da lugar a la apertura
en pequeña cantidad da lugar a despolariza- de los canales de calcio voltaje-dependientes
ciones de la membrana muscular de una am- con entrada masiva de calcio en el terminal
plitud aproximada de un 1 mV (potenciales nervioso. Este calcio se une a la calmodulina y
miniatura de la placa motora). La amplitud de activa el sistema microtubular del axoplasma,
estas potenciales es una medida de la cantidad produciendo la liberación sincrónica de nume-
de acetilcolina de cada vesícula y del estado rosas vesículas al espacio sináptico. Es necesaria
funcional de la placa motora. Así, en las al- la unión reversible de dos moléculas de ace-
teraciones postsinápticas, como la miastenia tilcolina al receptor colinérgico nicotínico de
gravis, donde existe destrucción de receptores membrana, una glucoproteína compuesta por
de acetilcolina por autoanticuerpos, se produ- cuatro subunidades, para producir un cambio
cen fallos en la despolarización que conducen de conformación que conduce a la apertura de
a potenciales miniatura de la placa motora de un canal transmembrana para el sodio/potasio.
baja amplitud. Por el contrario, en el síndrome Como consecuencia se produce un aumento del
de Eaton-Lambert está reducida la cantidad de sodio en el músculo que da lugar al potencial de
vesículas liberadas de forma espontánea, pero la placa motora. Como ocurre en la generación
cantidad de acetilcolina por vesícula es normal del potencial de acción nervioso, si el potencial

Manual EMG.indb 80 9/7/07 12:05:37


Estimulación repetitiva 81

Figura 2. A) estimulación repetitiva distal normal con un tren de nueve descargas a una frecuencia de 3 Hz; B) estimulación repetitiva distal con decremento
significativo del potencial de acción motor.

de placa motora despolariza la membrana por consumir la acetilcolina de liberación inmediata).


encima del umbral se produce un potencial de Esto da lugar a una disminución de la amplitud del
acción muscular. En condiciones normales, el potencial de placa motora que, en sujetos sanos,
potencial de placa motora tiene una amplitud es menor del 5% y, debido al factor de seguridad,
de 70 a 80 mV, muy superior al necesario para permanece por encima del umbral lo suficiente
desencadenar un potencial de acción que pue- como para asegurar la generación de un potencial
da ser transmitido a lo largo de la membrana de acción muscular con cada estímulo (Fig. 2).
muscular. Este exceso de amplitud sobre el Con la activación de la acetilcolina almacena-
valor umbral del potencial de placa motora, da, que ocurre entre el cuarto y quinto potencial,
capaz de poner en marcha el potencial de ac- se produce una estabilización en la cantidad de
ción de la fibra muscular (7-20 mV), es lo que acetilcolina liberada y en el potencial de placa mo-
se conoce como margen o factor de seguridad. tora. En estimulaciones prolongadas tiene lugar la
Como consecuencia de esta despolarización síntesis de acetilcolina de novo, por recaptación de
se produce la apertura de los canales voltaje- colina, para mantener el potencial de placa motora.
dependientes del retículo sarcoplásmico con En estimulaciones a frecuencias más elevadas (por
paso de calcio al sarcoplasma y activación del encima de 10 Hz) se produce un incremento de la
proceso de contracción muscular(4-6). amplitud de los potenciales de placa motora con
En condiciones normales, cuando un potencial disminución de la duración. Dado que el área no
de acción llega al terminal nervioso se libera aproxi- cambia de modo significativo, este fenómeno se
madamente el 20% de la acetilcolina almacenada, conoce como pseudofacilitación y es el resulta-
aunque la cantidad real de vesículas liberadas varía do de una mejor sincronización de la respuesta
en función del flujo de calcio que penetra en el muscular.
terminal nervioso. Cuando se administran estímu- En definitiva, en los sujetos normales, tanto la
los repetidos a baja frecuencia (2; 3 y 5 Hz), ini- estimulación a baja frecuencia como a frecuencia
cialmente ocurre una disminución de las vesículas alta modifica el potencial de placa motora. En am-
liberadas en los primeros estímulos nerviosos (tras bos casos, sin embargo, éste se mantiene siempre

Manual EMG.indb 81 9/7/07 12:05:37


82 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

por encima del umbral y los potenciales de acción TABLA I. Estimulación repetitiva
muscular se producen de forma estable. Por ello, • Identificación de la intensidad de estímulo supramaximal antes de
los potenciales de respuesta muscular no se alteran iniciar la estimulación repetitiva
significativamente en amplitud o área. • Realización de estudio basal con un tren de nueve estímulos a una
Cuando existe un trastorno de la transmisión frecuencia de 3 Hz
neuromuscular la aplicación de un tren de impul- • Tras unos minutos de descanso, repetir el estudio de estimulación
sos (ocho o diez impulsos) a baja frecuencia pue- repetitiva en reposo para confirmar resultados
de producir una disminución de la amplitud del • Técnicas de activación
potencial de placa motora mayor del 10%. Esto se – Sospecha de defecto presináptico: realizar una contracción mante-
debe a la disminución del factor de seguridad, bien nida durante 10 s y observar si se produce facilitación postactivación
por disminución en los receptores de acetilcolina (tras un único estímulo supramaximal)
o por un déficit de la acetilcolina liberada. En los – Sospecha de un defecto postsináptico:
trastornos postsinápticos puede no alcanzarse un - Estudio con decremento significativo en reposo: realizar una
potencial de placa motora de amplitud suficiente contracción mantenida durante 60 s buscando aumento del
para poner en marcha el potencial de acción de la decremento o agotamiento postactivación
fibra muscular, debido a la disminución de la ace- - Estudio normal en reposo: realizar ejercicio máximo o contracción
tilcolina liberada, junto con la carencia de recep- mantenida durante 60 s buscando decremento. Si todo ello es
tores de acetilcolina. En cambio, en los trastornos normal, realizar un test en condiciones de isquemia para aumentar
presinápticos no se alcanza un potencial de placa la sensibilidad de la prueba
motora eficaz para la despolarización, porque existe • Si los resultados no son concluyentes es conveniente repetir el
una reducción del número de quanta de acetilcoli- estudio
na, bien por una alteración de la síntesis o por una
disminución de la liberación.

bras musculares activadas por el estímulo nervioso y


TÉCNICA DE ESTIMULACIÓN REPETITIVA NERVIOSA nos permite conocer el funcionamiento de la placa
neuromuscular. En la Tabla I se resumen los pasos
Consideraciones generales a seguir en la estimulación repetitiva.
El primer requisito técnico que se debe asegu-
Técnicamente la estimulación repetitiva es rar es una estimulación supramáxima. Para ello se
similar al estudio de la conducción nerviosa mo- debe incrementar gradualmente la intensidad del
tora. En un nervio motor periférico se aplica un estímulo hasta que sea, al menos, un 15-20% ma-
estímulo supramáximo y se recoge el potencial de yor que aquel que consiguió la máxima respuesta
acción motor mediante un electrodo de superficie motora, lo que garantiza la estimulación de todos
activo (Gl) en el músculo correspondiente, y otro los axones. Los estímulos submáximos pueden
electrodo de referencia (G2) colocado sobre el ten- originar un pseudodecremento con un resultado
dón del mismo músculo. Se recomienda el uso de de falso positivo. Es importante recordar que se
electrodos de superficie, tanto para la estimulación debe inmovilizar la articulación próxima, para
como para el registro por ser menos susceptibles a minimizar los posibles artefactos producidos por
artefactos de movimiento. El resultado cuantifica- el movimiento(7-9).
ble es el potencial de acción muscular compuesto,
la suma de los potenciales de acción individuales Frecuencia de estimulación
de las fibras musculares estimuladas. La amplitud La estimulación repetitiva se puede realizar con
al pico negativo del potencial de acción muscular diferentes frecuencias de estímulo: 1; 2; 3; 10; 20; 50
compuesto se corresponde con el número de fi- Hz, etc. Las frecuencias mayores de 30 Hz pueden

Manual EMG.indb 82 9/7/07 12:05:38


Estimulación repetitiva 83

ficiente de ondas para observar un decremento.


Este decremento mejora a medida que se utiliza la
reserva de movilización, resultando la “imagen en
U”, característica de algunos trastornos de la unión
neuromuscular. Para la estimulación repetitiva a
frecuencias altas se emplean trenes de estímulos
de 5 a 10 segundos de duración.

Tipos de respuesta
En la estimulación repetitiva a bajas frecuen-
cias se estudia el decremento de la amplitud de la
fase negativa o pico a pico, comparándose con el
primer potencial motor. Habitualmente se expresa
Figura 3. Estimulación repetitiva a alta frecuencia distal en nervio cubital.
Estudio normal. Se observa facilitación no significativa. en porcentaje, según la fórmula:

Decremento (%)= [1 - (Potencialn-Potencial1)] x 100


resultar muy dolorosas. En los trastornos postsináp-
ticos, como la miastenia gravis, está demostrado que La facilitación también se expresa porcentual-
frecuencias de descarga entre 3 y 5 Hz son las que mente, según la fórmula:
con mayor probabilidad producen decremento en
los potenciales de acción muscular compuestos. Ha- Facilitación (%) = [(Potencialn - Potencial1) -1] x 100
bitualmente, la estimulación a baja frecuencia en
los trastornos presinápticos, como el síndrome de La amplitud del pico negativo o el área negativa
Eaton-Lambert, no produce modificaciones signifi- son realmente las medidas más relevantes. Con-
cativas, aunque se puede observar un decremento. cretamente, el área es la medida más exacta del
Sin embargo, frecuencias de estimulación mayores número de fibras que contribuyen al potencial de
de 10 Hz pueden dar lugar a una facilitación, con un acción muscular compuesto, y no se afecta por la
incremento significativo de la amplitud del potencial pseudofacilitación. Sin embargo, el parámetro más
de acción muscular compuesto superior al 100%. utilizado suele ser la amplitud.
Cuando se realiza un estudio de estimulación En la actualidad, las medidas de amplitud, área
repetitiva en pacientes con sospecha de alteración y duración se realizan de forma automática en los
de la transmisión neuromuscular, se debe conside- nuevos equipos de electromiografía. Los criterios
rar que la estimulación con frecuencias superiores de anormalidad varían entre los distintos labora-
a 10 Hz en pacientes con trastornos postsinápticos torios, aunque, generalmente, se acepta que un
puede dar lugar a un fenómeno de pseudofacilita- decremento en la amplitud del cuarto o quinto
ción (Fig. 3). Por todo ello, siempre se debe valorar, potencial mayor del 10% en frecuencias bajas y una
además del incremento de la amplitud, si existen facilitación superior al 100% en frecuencias ele-
modificaciones en la duración de los potenciales vadas son resultados patológicos. Algunos autores
de acción musculares compuestos recogidos. requieren un decremento igual o mayor del 20%
en músculos proximales, debido a la variabilidad
Número de estímulos de la línea de base.
En la estimulación repetitiva a frecuencias bajas
se utiliza un tren de 10 estímulos, lo que estable- Selección de nervio y músculo
ce un buen compromiso entre la comodidad del La estimulación nerviosa repetitiva se puede
paciente y la necesidad de obtener un número su- realizar sobre cualquier nervio motor. En teoría,

Manual EMG.indb 83 9/7/07 12:05:38


84 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

TABLA II. Nervios más comúnmente utilizados para las técnicas de


estimulación repetitiva
• Nervio cubital, recogiendo respuesta en músculo abductor del
meñique
• Nervio mediano, recogiendo respuesta en músculo abductor corto del
pulgar
• Nervio accesorio espinal, recogiendo respuesta en músculo trapecio
superior
• Nervio facial, recogiendo respuesta en músculo nasal
• Nervio musculocutáneo, recogiendo respuesta en músculo bíceps
braquial

Figura 4. Estimulación repetitiva distal. Inmovilización del músculo


abductor del meñique.

artefactos de movimiento. Los músculos pequeños,


como los de la mano, son fáciles de inmovilizar,
pero con frecuencia no están afectos y pueden no
mostrar anomalías. Por otra parte, el estudio de
nervios profundos requiere estímulos de gran in-
tensidad, lo que resulta doloroso para el paciente
y, en consecuencia, disminuye el grado de colabo-
ración. La estimulación repetitiva de los músculos
faciales también resulta dolorosa. Por tanto, parece
lógica la siguiente estrategia:
Figura 5. Estimulación repetitiva a baja frecuencia (3 Hz) sobre nervio • Iniciar el estudio por un nervio distal de la mano.
accesorio espinal. A: estimulación repetitiva normal; B: estimulación re- Se recomienda el nervio cubital, recogiendo la
petitiva con decremento significativo en un paciente con miastenia gravis respuesta en el músculo abductor del meñique,
generalizada.
que se inmoviliza fácilmente (Fig. 4).
• Si resulta normal, debe estimularse un nervio
se debe elegir el músculo clínicamente afecto por proximal, como el nervio accesorio espinal,
debilidad. Lo que ocurre, con frecuencia, es que el que resulta accesible a nivel del borde pos-
estudio de estos músculos resulta dificultoso(10). En terior del músculo esternocleidomastoideo,
la Tabla II se resumen los puntos de estimulación colocando el electrodo receptor en el mús-
habitualmente utilizados. culo trapecio (Fig. 5). Por lo general, basta
Como norma general a la hora de seleccio- con intensidades de 20-25 mA para obtener
nar un músculo para la estimulación repetitiva, estímulos supramáximos, y la sujeción del
se puede afirmar que los músculos grandes son hombro o brazo permite evitar artefactos de
difíciles de inmovilizar, por lo que están sujetos a movimiento.

Manual EMG.indb 84 9/7/07 12:05:39


Estimulación repetitiva 85

tolera mal la prueba. En estos casos para mejorar la


calidad puede ser recomendable inmovilizar tem-
poralmente las articulaciones, mediante férulas u
otros medios.

Temperatura
El control de la temperatura es muy importante
en los estudios de estimulación repetitiva. El au-
mento de temperatura empeora el trastorno de la
transmisión neuromuscular y su disminución ac-
túa en sentido contrario. Clínicamente, algunos
pacientes con miastenia gravis refieren empeora-
miento de sus síntomas en ambientes cálidos y,
por el contrario, la aplicación de hielo sobre un
párpado en un paciente con miastenia ocular pue-
de mejorar la ptosis(12). Las condiciones del labora-
torio de electromiografía deben permitir mantener
una temperatura en la superficie de las zonas a
estudio de entre 34 y 37 °C. En caso necesario, el
Figura 6. Estimulación repetitiva del nervio facial. Se recoge la respuesta examinador debe calentar el miembro en estudio
en músculo nasal. con una lámpara de calor o agua caliente. Una
temperatura baja puede producir falsos negativos,
y la normalización de un estudio que se iniciaba
• Por último, la estimulación del nervio facial resul- con un decremento significativo puede deberse a
ta una técnica muy rentable, especialmente en enfriamiento de la zona durante el estudio.
pacientes con miastenia ocular que, con frecuen- El mecanismo por el cual ocurre este fenómeno
cia, muestran respuestas normales a otros niveles. no se conoce con exactitud. Se ha comprobado que
En la actualidad, el músculo más utilizado para una disminución de la temperatura aumenta la am-
la colocación del electrodo receptor es el nasal, plitud y la duración del potencial de placa motora,
ya que minimiza la aparición de artefactos, con al mejorar el empaquetamiento de las vesículas de
estimulación sobre el nervio facial en la región acetilcolina y la conductancia de los canales ióni-
preauricular(11) (Fig. 6). cos de membrana. Por otra parte, la disminución de
la temperatura reduce la actividad enzimática de la
Inmovilización acetilcolinesterasa, por lo que aumenta la acetilco-
Como se ha comentado previamente, la inmo- lina disponible en el espacio sináptico. Este hecho
vilización, tanto del músculo en estudio como de puede, incluso, llegar a normalizar el potencial de
las articulaciones cercanas, es un factor fundamen- acción muscular compuesto en pacientes con un
tal para interpretar correctamente los resultados defecto de la transmisión neuromuscular.
de la estimulación repetitiva. La inmovilización
incorrecta puede dar lugar a una disminución de Fármacos inhibidores de la acetilcolinesterasa
los potenciales de acción muscular compuestos, Se debe aconsejar a los pacientes que suspen-
que sería interpretada como un decremento (pseu- dan el uso de inhibidores de la acetilcolinesterasa
dodecremento). Este artefacto debe considerarse, (como la piridostigmina), al menos, doce horas
sobre todo, cuando se realizan estudios con fre- antes de la realización del estudio, salvo contra-
cuencias elevadas o si el paciente no colabora o indicación médica. Estos fármacos aumentan la

Manual EMG.indb 85 9/7/07 12:05:39


86 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

disponibilidad de acetilcolina en la hendidura Después de una contracción muscular intensa


sináptica y pueden producir un resultado normal y mantenida o una estimulación tetánica, los po-
en pacientes con trastorno de la unión neuro- tenciales de placa motora aumentan inicialmente,
muscular. como se ha descrito, pero después disminuyen a
lo largo de los siguientes minutos. En los sujetos
Técnicas de activación de la estimulación repetitiva normales, con un factor de seguridad normal, los
potenciales de placa motora nunca disminuyen por
Una revisión de los estudios neurofisiológicos debajo del umbral. Sin embargo, en los pacientes
realizados a pacientes con miastenia gravis y sín- con trastorno postsináptico de la placa motora, pasa-
drome de Eaton-Lambert mostró una variabilidad dos dos o cuatro minutos de la contracción se produ-
en la sensibilidad, que oscilaba entre el 53 y el ce el agotamiento de las reservas de acetilcolina, lo
100% en la miastenia generalizada, y entre el 10 que anula los efectos de la acumulación de calcio en
y el 17% en la forma ocular(13). Por tanto, incluso el terminal nervioso y la pérdida de la excitabilidad
extendiendo el estudio a varios músculos, puede de placa motora (agotamiento postactivación). En
haber pacientes con alteración de la unión neuro- ese momento, en los pacientes con miastenia gravis,
muscular y un estudio de estimulación repetitiva un tren de descargas a frecuencias bajas puede po-
normal. En la práctica clínica existe una serie de ner de manifiesto más claramente un decremento
maniobras para incrementar la sensibilidad de este significativo de los potenciales de acción muscular
test. Con ellas se logra poner de manifiesto altera- compuestos, en comparación con los valores obte-
ciones en la unión neuromuscular hasta en el 90% nidos antes del ejercicio. De este modo, la técnica
de los pacientes(14), de manera que es frecuente de activación empleada dependerá de si se sospecha
que en los casos en que el trastorno de la trans- un trastorno presináptico o postsináptico.
misión neuromuscular es leve, sólo se observen
alteraciones en la estimulación repetitiva con estas Test de isquemia
maniobras de activación. Otra maniobra que consigue incrementar la
sensibilidad de la estimulación repetitiva en las
Contracción mantenida (facilitación postactivación del enfermedades de la placa motora es la estimulación
músculo) con el miembro sometido a isquemia. La isquemia
Esta maniobra es la más utilizada, ya que re- refuerza el bloqueo neuromuscular, ya que bloquea
sulta sencilla de realizar y es especialmente infor- la síntesis de acetilcolina, probablemente por ago-
mativa en las enfermedades de la placa motora. tamiento de la acetil-coenzima A.
Consiste en contraer el músculo intensamente Desde el punto de vista práctico, se coloca un
durante 10 a 60 segundos o bien estimularlo (20- esfigmomanómetro en el miembro estudiado (por
50 Hz) hasta conseguir la tetanización del mis- ejemplo, en el brazo), manteniendo durante tres
mo. Con esto se logra una acumulación de calcio a cinco minutos la presión por encima de la cifra
dentro del terminal nervioso de la placa motora sistólica. Al mismo tiempo puede realizarse un
que moviliza las reservas de acetilcolina. En los ejercicio repetido (por ejemplo, apertura y cierre
trastornos presinápticos la contracción mantenida de manos). En pacientes con miastenia gravis este
durante un tiempo corto (10 s) seguida por la examen muestra un decremento en la amplitud
aplicación inmediata de un único estímulo supra- de los potenciales de acción muscular compues-
máximo, produce un aumento significativo de la tos, que en sujetos normales o con alteraciones
amplitud del potencial de acción muscular com- presinápticas no aparece. Esta técnica mejora la
puesto, a veces más evidente que el obtenido en sensibilidad de la estimulación repetitiva distal,
la estimulación repetitiva con frecuencias rápidas consiguiendo porcentajes similares a los obteni-
(facilitación post-ejercicio). dos en la estimulación proximal(15). Sin embargo,

Manual EMG.indb 86 9/7/07 12:05:40


Estimulación repetitiva 87

TABLA III. Consideraciones técnicas los resultados obtenidos. En cualquier estudio de


• Reproducibilidad: el mismo decremento se debería obtener si se estimulación repetitiva se deben tener muy en
repitiese el test después de un período de reposo cuenta las consideraciones técnicas que se recogen
• Inmovilización: se debe conseguir una inmovilización adecuada para en la Tabla III. El movimiento de los electrodos, la
evitar movimientos de los electrodos que modifiquen la forma y el estimulación deficiente, la contracción muscular,
tamaño de los potenciales de acción muscular compuestos etc., pueden provocar falsos decrementos o incre-
• Temperatura: se debe mantener una temperatura entre 34 y 37 °C en mentos en la respuesta, por lo que se deben revisar
el miembro estudiado cuidadosamente los resultados obtenidos desde un
• Fármacos bloqueantes de la placa motora: debe evitarse la adminis- punto de vista práctico y crítico. Los potenciales de
tración de anticolinesterásicos, al menos, 12 horas antes del estudio acción muscular compuestos deben mostrar cam-
bios similares en el área y la amplitud sin apenas
modificación morfológica del área negativa.
Hay que tener en cuenta que los potenciales de
acción muscular compuestos obtenidos con el tren
se emplea poco hoy en día ante la disponibilidad de estímulos, suelen conformar un patrón de cada
de otras técnicas diagnósticas. enfermedad (en la miastenia gravis en forma de
“U”, en el síndrome de Eaton-Lambert potenciales
Test regional de curare u otros bloqueantes de la placa motora de baja amplitud a baja frecuencia y rápidamente
En esta maniobra se utilizan sustancias que crecientes a alta frecuencia, etc.). En cualquier
compiten con la acetilcolina en la unión al re- caso, hay que añadir que los resultados deben ser
ceptor(16), produciendo un bloqueo neuromuscular reproducibles cuando se repita el test después de
no-despolarizante. Se basa en la extremada sensi- un tiempo adecuado.
bilidad a estos agentes bloqueantes que se observa En ocasiones, el estudio puede ser de inter-
en los pacientes con miastenia gravis. Esta prueba pretación dudosa por la obtención de resultados
consiste en realizar la estimulación repetitiva tras equívocos o discordantes. Debe recordarse, además,
administrar pequeñas cantidades de curare (0,2 que los resultados de la estimulación repetitiva no
mg) por vía intravenosa, lo que no provoca efecto son específicos y pueden observarse alteraciones de
alguno en personas normales. Se coloca un esfig- este estudio en enfermedades de la motoneurona
momanómetro insuflado por encima de la presión inferior y en miopatías. Finalmente, en los casos
sistólica para aislar al miembro estudiado del resto dudosos es preferible repetir el examen o hacerlo
del torrente sanguíneo. Así, se provoca un decre- más dirigido antes de emitir un diagnóstico defi-
mento significativo de la amplitud del potencial nitivo.
en la estimulación repetitiva o incluso debilidad
clínicamente manifiesta.
Sin embargo, este test puede llegar a resultar BIBLIOGRAFÍA
peligroso, por lo que se deben tener preparadas
medidas de soporte vital. Además, pueden obser- 1. Meriggioli MN, Sanders DB. Advances in the diagnosis of
neuromuscular junction disorders. Am J Phys Med Rehab
varse resultados anormales en la enfermedad de 2005; 84: 627-38.
motoneurona y en el bloqueo neuromuscular indu- 2. Preston DC, Shapiro BE. Repetitive nerve stimulation. En:
cido por antibióticos. En la actualidad se considera Electromyography and neuromuscular disorders. Clinical-
un test innecesario por la disponibilidad de otros Electrophysiologic Correlations. 2nd Ed. Philadelphia:
Elsevier; 2005. p. 65-75.
estudios que conducen al diagnóstico de miastenia
3. Howard JF. The electrodiagnosis of myasthenia gravis and
gravis sin riesgo para el paciente. myasthenic syndrome. En: Education Program, AAN 50th
Por último, es preciso señalar que el electro- annual meeting. Autoimmune myasthenia gravis and myas-
miografista debe realizar controles de calidad de thenic syndrome. Minneapolis: MV; 1999.

Manual EMG.indb 87 9/7/07 12:05:41


88 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

4. Cruz Martínez A, Montero J. EMG: Fisiopatología de 10. Howard JF Jr, Sanders DB, Massey JM. The electrodiagno-
la transmisión neuromuscular. En: Díez-Tejedor E, ed. sis of myasthenia gravis and the Lambert-Eaton myasthenic
Miastenia gravis y síndromes miasténicos. Barcelona: JR syndrome. Neurol Clin 1994; 12: 305-30.
Prous, S.A.; 1995. p. 199-215. 11. Ruys-Van Oeyen AE, Van Dijk JG. Repetitive nerve stimu-
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7. Kimura J. Techniques of repetitive stimulation. En: Kimura tion of Electrodiagnostic Medicine: Literature review of
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Principles and practice. 2ª ed. Philadelphia: F.A. Davis ber EMG in the electrodiagnosis of patients with suspected
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Manual EMG.indb 88 9/7/07 12:05:41


Capítulo 9

NERVIOS COMÚNMENTE EXAMINADOS


J. Pardo Fernández, M. Torres Colomer, M. Baliñas Tojo

INTRODUCCIÓN res y de 28 ºC en las inferiores si queremos


que las fórmulas de corrección de las cifras de
En general, los estudios de conducción nervio- temperatura a los valores estándar sean váli-
sa motora y sensitiva son bastante reproducibles y das. Si la temperatura no alcanza estas cifras,
fáciles de realizar. De hecho, pueden ser llevados debemos calentar la zona a explorar mediante
a cabo por personal técnico suficientemente en- un baño de agua caliente o con una lámpara
trenado y supervisado. En cambio, le corresponde de infrarrojos hasta alcanzar un mínimo de
al electromiografista la elección de los nervios a 30 ºC (la temperatura recomendada es ≥ 31
explorar y el tipo de técnica que sea más adecuada ºC en extremidades inferiores y ≥ 32 ºC en las
para confirmar o descartar la hipótesis diagnóstica superiores).
inicial, resultante de una cuidadosa historia clínica – Es esencial una cuidadosa preparación de la su-
previa, así como la interpretación de los resultados y perficie cutánea antes de la colocación de los
la realización del estudio con electrodo de aguja. electrodos (de registro y de estimulación). Para
La técnica de exploración de los nervios más ello podemos limpiar la zona con alcohol o uti-
comúnmente examinados que describimos en este lizar una lija suave. En la actualidad muchos
capítulo tiene numerosas variaciones, sobre todo electrodos incluyen gel y son autoadherentes.
en lo referente a la colocación de los electrodos de En caso contrario, se aplica un poco de gel a
registro y distancias utilizadas. Por ello, es esencial los electrodos, y los que tienen forma de disco
tener en cuenta que si no disponemos de valores o barra se fijan con esparadrapo. Hay también
normales propios debemos seguir fielmente la electrodos de barra con distancia fija entre ánodo
técnica empleada por el grupo de referencia, uti- y cátodo, que, en algunos casos, son de utilidad.
lizando, además, las mismas condiciones de filtros Generalmente, se utilizan filtros entre 2 y 20 Khz
y temperatura. para los estudios de conducción nerviosa motora,
Con el fin de que los valores neurográficos sean con un barrido de 2 a 5 ms/div y una amplitud
lo más fiables y reproducibles posible, se deben de 2 a 5 mV/div, siendo recomendable que la
tener presentes las siguientes consideraciones: fase negativa de la respuesta abarque, al menos,
– Antes de iniciar el estudio se medirá la tem- 2 divisiones. Para los estudios de conducción
peratura cutánea (en el músculo primer in- nerviosa sensitiva, se suelen utilizar filtros entre
teróseo dorsal en extremidades superiores y a 30 y 3 Khz o entre 20 y 2 Khz, un barrido de 1
2 cm proximal al primer espacio interdigital a 2 ms/div y una amplitud de 5 a 10 μV/div.
del pie en extremidades inferiores). No debe – En cuanto a la colocación de los electrodos de
ser menor de 29 ºC en extremidades superio- registro, en los estudios de conducción nerviosa

Manual EMG.indb 89 9/7/07 12:05:41


90 J. Pardo Fernández, M. Torres Colomer, M. Baliñas Tojo

Figura 1. Nervio accesorio espinal. Estudio de la conducción nerviosa


motora.

motora el activo (G1, de color negro en las fi-


guras) se sitúa en el vientre muscular, mientras
que el de referencia (G2, de color rojo en las
figuras) se coloca sobre una superficie articular
o prominencia ósea. La posición del electrodo
de tierra es variable, aunque, a ser posible, se
recomienda situarlo entre el electrodo activo y Figura 2. Nervio axilar. Estudio de la conducción nerviosa motora.
el de estimulación. La estimulación siempre se
realizará con el cátodo (en las figuras indicado
con un signo – en negro) apuntando hacia el G1: sobre el vientre muscular, en el
electrodo de registro activo. En las figuras de punto medio de una línea trazada
conducciones sensitivas se conserva la leyenda entre la apófisis espinosa de C7 y
de colores mencionada anteriormente. la prominencia de la articulación
– Antes de proceder a la estimulación debemos acromioclavicular.
informar al paciente acerca del procedimiento G2: sobre el acromio.
que vamos a realizar, intentando estimular de Estimulación: En el cuello, detrás del borde posterior
forma creciente y utilizar la mínima intensidad del músculo esternocleidomastoideo,
posible, aunque asegurándonos de que sea su- a unos 10 cm del electrodo activo.
pramáxima (un 20% por encima del estímulo Nota: La misma técnica de montaje se
a partir del cual no se incrementa la amplitud utiliza para la realización de la es-
del potencial obtenido). timulación repetitiva.

NERVIO ACCESORIO ESPINAL (Fig. 1) NERVIO AXILAR (Fig. 2)

Posición: Paciente sentado. Posición: Paciente sentado.


Detección: Músculo trapecio superior. Detección: Músculo deltoides.

Manual EMG.indb 90 9/7/07 12:05:42


Nervios comúnmente examinados 91

A A

B B

Figura 3. Nervio musculocutáneo. Estudio de la conducción nerviosa Figura 4. Nervio mediano. Estudio de conducción nerviosa motora.
motora. A: estimulación en axila; B: estimulación en punto de Erb. A: estimulación distal en muñeca; B: estimulación proximal en fosa an-
tecubital.

G1: en el centro del vientre mus- Detección: Músculo bíceps braquial.


cular. G1: en el centro del vientre muscu-
G2: distal a la inserción del deltoides lar.
en el húmero. G2: sobre el tendón del bíceps, distal
Estimulación: En punto de Erb (detrás de la clavícu- al electrodo activo, justo proximal a
la, a 1/3 de la distancia entre el ester- la fosa antecubital.
nón y el acromio, justo en el ángulo Estimulación: 1. Axila: justo debajo de la inserción
entre el borde posterior del esterno- del tendón de la cabeza corta del
cleidomastoideo y la clavícula). bíceps.
Notas: para la medición de la distancia se 2. En punto de Erb (región supra-
aconseja la utilización de los com- clavicular).
pases obstétricos. Nota: Para la medición de la distancia se
Es útil la comparación de la latencia distal mo- aconseja la utilización de compases
tora con el lado sano. obstétricos.

NERVIO MUSCULOCUTÁNEO (Fig. 3) NERVIO MEDIANO MOTOR (Fig. 4)

Posición: Paciente sentado o en decúbito su- Posición: Brazo extendido, con la palma hacia
pino con el brazo extendido. arriba.

Manual EMG.indb 91 9/7/07 12:05:43


92 J. Pardo Fernández, M. Torres Colomer, M. Baliñas Tojo

Detección: Músculo abductor corto del pul-


gar.
G1: sobre el vientre muscular.
G2: sobre la articulación interfalán-
gica distal.
Estimulación: 1. Muñeca: entre los tendones
del flexor radial del carpo (palmar
mayor) y del palmar largo (palmar
menor), a 7 cm del electrodo activo
(medir oblicuamente siguiendo la
trayectoria del nervio).
2. Fosa antecubital (codo): sobre el Figura 5. Nervio mediano. Estudio de la conducción sensitiva antidrómica
en 2º dedo.
latido de la arteria braquial.
3. Axila (parte superior interna del
brazo). nor), a 13 cm (o 14 cm según tablas
4. Punto de Erb (región supraclavi- de referencia) del electrodo activo
cular). (medir en línea recta, con los dedos
Notas: En estudios rutinarios sólo se uti- extendidos y separados).
lizan los dos primeros puntos de Notas: Igual técnica para la detección en
estimulación. 3er y 4º dedos.
Una intensidad de estimulación El 2º dedo depende del ganglio dor-
excesiva puede dar lugar a la es- sal de la raíz sensitiva C7 en el 80%
timulación simultánea del nervio de los casos y de la raíz sensitiva C6
cubital. en el resto. El 3er dedo depende en-
Si la amplitud del potencial evoca- teramente de C7.
do motor es claramente mayor en Al realizar la detección en el 4º
el codo que en la muñeca, se debe dedo, podemos llevar a cabo es-
sospechar una anastomosis de Mar- tudios comparativos de latencias y
tin-Gruber. velocidad de conducción nerviosa
sensitiva entre el nervio mediano
y el cubital, utilizando una mis-
NERVIO MEDIANO (SENSITIVA 2º DEDO) (Fig. 5) ma distancia (generalmente 12 ó
14 cm según tablas de referencia).
Posición: Brazo extendido, con la palma hacia En sujetos normales, la diferencia
arriba. de latencias entre uno y otro po-
Detección: 2º dedo. tencial es menor de 0,5 ms.
G1: electrodo de anillo en falange
proximal, evitando el pliegue inter-
falángico. NERVIO MEDIANO (SENSITIVA 1er DEDO) (Fig. 6)
G2: electrodo de anillo a 3 cm dis-
tal al electrodo activo, evitando el Posición: Brazo extendido, con la palma hacia
pliegue interfalángico. arriba.
Estimulación: Muñeca: entre los tendones del Detección: Pulgar
flexor radial del carpo (palmar ma- G1: electrodo de anillo en la base
yor) y del palmar largo (palmar me- de la falange proximal.

Manual EMG.indb 92 9/7/07 12:05:44


Nervios comúnmente examinados 93

Figura 6. Nervio mediano. Estudio de la conducción sensitiva antidrómica B


en 1er dedo.

G2: electrodo de anillo en falange dis-


tal, 3 cm distal al electrodo activo.
Estimulación: Muñeca: entre los tendones del
flexor radial del carpo (palmar
mayor) y del palmar largo (palmar
menor), a 13 cm del electrodo ac-
tivo (medir 10 cm desde el electro-
do activo hasta la muñeca y luego
Figura 7. Nervio mediano. Estudio de la conducción sensitiva antidrómica
en línea recta otros 3 cm desde la en la palma. A: estimulación en muñeca; B: estimulación en palma.
muñeca hasta el lugar de estimula-
ción).
Notas: El pulgar depende del ganglio dorsal G2: electrodo de anillo a 3 cm distal
de la raíz sensitiva C6. al electrodo activo.
Al igual que en la técnica del 4º Estimulación: Muñeca: entre los tendones del
dedo, que permitía comparar la- flexor radial del carpo (palmar ma-
tencias con el nervio cubital utili- yor) y del palmar largo (palmar me-
zando la misma distancia, también nor), a 13 cm del electrodo activo
a nivel del pulgar se puede realizar (medir en línea recta, con los dedos
comparación de latencias de los extendidos y separados).
potenciales correspondientes a los Palma: estimular 6,5 cm distal a
nervios mediano y radial. la muñeca, siguiendo la línea des-
de el punto de estimulación en la
muñeca al electrodo activo. Estas
NERVIO MEDIANO (SENSITIVA EN PALMA) (Fig. 7) distancias deben ser siempre homo-
géneas y utilizadas según las tablas
Posición: Brazo extendido, con la palma hacia de referencia.
arriba. Notas: La latencia de muñeca a palma se
Detección: 2º ó 3er dedos. calcula restando la latencia del po-
G1: electrodo de anillo en falange tencial palma-dedo de la latencia
proximal, evitando el pliegue inter- del correspondiente a muñeca-dedo.
falángico. En caso de atrapamiento del nervio

Manual EMG.indb 93 9/7/07 12:05:45


94 J. Pardo Fernández, M. Torres Colomer, M. Baliñas Tojo

mediano en el canal carpiano, obje- A


tivaremos un enlentecimiento de la
conducción nerviosa sensitiva en el
tramo de la muñeca.

NERVIO CUBITAL MOTOR (Fig. 8)

Posición: Paciente en decúbito supino, con


el brazo en abducción de 90º, pal-
ma y antebrazo hacia arriba y codo
flexionado a 45º. B
Detección: Músculo abductor del meñique.
G1: sobre el vientre muscular, en
el punto medio de la línea que va
desde el pliegue de la muñeca has-
ta el pliegue de la 5ª articulación
metacarpofalángica.
G2: en la base del 5º dedo.
Estimulación: 1. Muñeca: a 7 cm del electrodo
activo, justo en posición radial al
tendón del flexor cubital del carpo
C
(cubital anterior).
2. Por debajo del codo: 3 cm distal
al epicóndilo interno.
3. Por encima del codo: a 10 cm del
punto de estimulación utilizado por
debajo del codo, entre el bíceps y el
tríceps.
4. Axila: parte superior del brazo,
sobre el pulso axilar, en posición
interna al bíceps.
Notas: Se requiere mayor intensidad de esti- Figura 8. Nervio cubital. Estudio de la conducción nerviosa motora.
mulación al realizar la estimulación A: estimulación distal en muñeca; B: estimulación por debajo del codo;
por debajo del codo, ya que el nervio C: estimulación por encima del codo.
se sitúa profundamente por debajo
del músculo flexor cubital del carpo
(cubital anterior). De ahí que no se NERVIO CUBITAL (SENSITIVA 5º DEDO) (Fig. 9)
recomiende estimular a más de 3 cm
por debajo del epicóndilo interno. Posición: Brazo extendido, con la palma hacia
La distancia a nivel del codo debe arriba.
medirse siguiendo la trayectoria Detección: 5º dedo.
del nervio, en la misma posición G1: electrodo de anillo en falange
de flexión en que se ha realizado la proximal, evitando el pliegue inter-
estimulación. falángico.

Manual EMG.indb 94 9/7/07 12:05:46


Nervios comúnmente examinados 95

Figura 9. Nervio cubital. Estudio de la conducción sensitiva antidrómica Figura 10. Nervio cubital. Estudio de la conducción sensitiva antidrómica
en 5º dedo. de la rama sensitiva dorsal cutánea.

G2: electrodo de anillo 3 cm distal ve óseo del 4º y 5º metacarpianos.


al electrodo activo. G2: en la base del 5º dedo.
Estimulación: Muñeca: a 11 cm del electrodo Estimulación: Muñeca: a 10 cm del electrodo
activo, justo en posición radial al activo, justo en posición radial al
tendón del flexor cubital del carpo tendón del flexor cubital del carpo
(cubital anterior). (cubital anterior).
Notas: También se pueden realizar estimu- Notas: Siempre se respeta en las lesiones
laciones más proximales, por debajo del nervio cubital a nivel del canal
y por encima del codo, al igual que de Guyon.
para los estudios motores. Sin em- Puede afectarse, aunque no siem-
bargo, la respuesta evocada sensitiva pre, en lesiones del nervio cubital
es de menor amplitud y más difícil a nivel del codo.
de obtener en las estimulaciones
proximales, debido al fenómeno de
la dispersión temporal y cancelación NERVIO CUBITAL (RAMA MOTORA PROFUNDA) (Fig. 11)
de fases que ocurre en condiciones
normales. Posición: Antebrazo en posición neutra.
Ya se ha comentado la posibilidad de Detección: Músculo 1er interóseo dorsal.
realizar la detección en el 4º dedo y G1: en el vientre muscular.
estudio de conducción nerviosa de G2: en la articulación metacarpo-
nervios mediano y cubital. falángica del pulgar.
Estimulación: Muñeca: 2 cm proximal del plie-
gue anatómico distal de la muñeca,
NERVIO CUBITAL (RAMA SENSITIVA DORSAL CUTÁNEA) justo en posición radial al tendón
(Fig. 10) del flexor cubital del carpo (cubital
anterior).
Posición: Brazo extendido, con la palma hacia Nota: Estudio imprescindible para el
abajo. diagnóstico de lesiones distales del
Detección: Dorso de la mano. nervio cubital a nivel de la palma
G1: en el vértice (proximal a la mu- de la mano, donde la latencia distal
ñeca) de la V formada entre el relie- motora está prolongada al realizar

Manual EMG.indb 95 9/7/07 12:05:47


96 J. Pardo Fernández, M. Torres Colomer, M. Baliñas Tojo

B
Figura 11. Nervio cubital. Estudio de la conducción de la rama motora
profunda.

la detección en músculo 1er interó-


seo dorsal; en cambio, la latencia
es normal si los electrodos de de-
tección se colocan en el abductor
del meñique.

C
NERVIO RADIAL MOTOR (Fig. 12)

Posición: Paciente en decúbito supino, con


el brazo extendido y la palma de la
mano hacia abajo; codo en ligera
flexión.
Detección: Músculo extensor de los dedos o
músculo extensor del índice.
G1: en el vientre muscular.
G2: base del 5º metacarpiano. Figura 12. Nervio radial. Estudio de la conducción nerviosa motora con
Estimulación: 1. Antebrazo: en la unión del tercio detección en músculo extensor del índice. A: estimulación en antebrazo;
proximal y medio del antebrazo, en B: estimulación en codo; C: estimulación en el surco radial.
el surco entre el extensor de los de-
dos y el extensor cubital del carpo
(cubital posterior). 5. Punto de Erb (región supraclavi-
2. Codo: entre el tendón del bíceps cular).
y el músculo braquiorradial (supina- Notas: En ocasiones podemos observar una
dor largo). deflexión inicial positiva debido a
3. Brazo: a nivel del surco radial la proximidad de otros músculos
(zona lateral del brazo, entre el inervados por el nervio radial. Se
deltoides y el tríceps). ha de tener especial cuidado en la
4. Axila: parte superointerna del medición de las distancias. Para la
brazo. medición proximal supraclavicular,

Manual EMG.indb 96 9/7/07 12:05:48


Nervios comúnmente examinados 97

Figura 13. Nervio radial. Estudio de la conducción nerviosa sensitiva Figura 14. Nervio cutáneo antebraquial lateral (braquial cutáneo ex-
antidrómica. terno). Estudio de la conducción sensitiva antidrómica.

se aconsejan los compases obstétri- NERVIO CUTÁNEO ANTEBRAQUIAL LATERAL


cos. (NERVIO BRAQUIAL CUTÁNEO EXTERNO) (Fig. 14)
A menudo resulta difícil la estimu-
lación en antebrazo y codo debido Posición: Antebrazo en supinación (palma de
a que el nervio se encuentra en si- la mano hacia arriba), con el codo
tuación profunda. extendido.
En ocasiones hay dificultad para Detección: G1: cara externa del antebrazo, a
realizar el registro con electrodos 12 cm del pliegue del codo, sobre
de superficie en músculo extensor la línea recta trazada desde la parte
del índice, y hay que recurrir a la lateral del tendón del bíceps hasta
detección con electrodos de aguja. la arteria radial en la muñeca.
G2: 3 cm distal a G1.
Estimulación: En el pliegue del codo, por fuera
NERVIO RADIAL SENSITIVO (Fig. 13) del tendón del bíceps.
Nota: También se puede realizar la detec-
Posición: Antebrazo en posición neutra (posi- ción con un electrodo de barra, que
ción intermedia entre la supinación tenga, al menos, una distancia de 3
y la pronación). cm entre el electrodo activo (situado
Detección: G1: en la tabaquera anatómica (base proximalmente) y el de referencia.
del pulgar, donde el nervio cruza el
tendón del extensor largo del pul-
gar). NERVIO CUTÁNEO ANTEBRAQUIAL MEDIAL
G2: dorso de la falange proximal del (NERVIO BRAQUIAL CUTÁNEO INTERNO) (Fig. 15)
pulgar.
Estimulación: Antebrazo: en la parte dorsolateral, Posición: Antebrazo en supinación (palma de
a 10 cm del electrodo activo. la mano hacia arriba), con el codo
Nota: También se puede realizar la de- extendido.
tección con electrodo de barra, que Detección: G1: cara interna de antebrazo, a 8
tenga, al menos, una distancia de 3 cm del pliegue del codo, sobre la lí-
cm entre el electrodo activo (situado nea recta trazada desde la estiloides
proximalmente) y el de referencia. cubital hasta el punto medio entre

Manual EMG.indb 97 9/7/07 12:05:50


98 J. Pardo Fernández, M. Torres Colomer, M. Baliñas Tojo

Figura 15. Nervio cutáneo antebraquial medial (braquial cutáneo in- B


terno). Estudio de la conducción sensitiva antidrómica.

el tendón del bíceps y el epicóndilo


interno.
G2: 3 cm distal a G1.
Estimulación: A 12 cm del electrodo activo (4 cm
proximal al pliegue del codo), justo
medial a la arteria braquial.
Nota: También se puede realizar la detec- Figura 16. Nervio tibial. Estudio de la conducción nerviosa motora.
ción con un electrodo de barra, que A: estimulación distal en maléolo interno; B: estimulación proximal en
tenga, al menos, una distancia de 3 hueco poplíteo.
cm entre el electrodo activo (situado
proximalmente) y el de referencia.
te la posición del mismo hasta lograr
una deflexión inicial negativa.
NERVIO TIBIAL MOTOR (Fig. 16) La amplitud de la respuesta evo-
cada motora a nivel proximal (fosa
Posición: Paciente en decúbito prono, con las poplítea), puede ser sensiblemente
piernas extendidas. inferior a la de la estimulación distal
Detección: Músculo abductor del dedo gordo. (se han comunicado caídas de hasta
G1: en el centro del vientre muscu- un 50% en sujetos normales), por lo
lar, a 1 cm por debajo y 1 cm por que se debe tener especial cuidado
detrás de la prominencia navicular. en establecer el diagnóstico de un
G2: en la parte interna de la primera bloqueo de conducción a ese nivel.
articulación metatarsofalángica. La detección se puede realizar tam-
Estimulación: 1. Tobillo: zona interna, a 8 cm del bién en el músculo flexor corto del
electrodo de detección. dedo gordo.
2. Fosa poplítea: en el centro.
Notas: Frecuentemente observaremos una
deflexión inicial positiva, que indi- NERVIO PERONEO MOTOR (Fig. 17)
ca que el electrodo activo no está si-
tuado sobre el punto motor. En este Posición: Paciente en decúbito supino, con
caso, debemos modificar ligeramen- las piernas extendidas.

Manual EMG.indb 98 9/7/07 12:05:50


Nervios comúnmente examinados 99

Figura 18. Nervio peroneo superficial. Estudio de la conducción sensitiva


antidrómica.

2. Debajo de la cabeza peroneal.


3. Fosa poplítea: a 10 cm de la ca-
beza peroneal, en la fosa poplítea
lateral.
Notas: Si se obtiene una mayor amplitud
en las estimulaciones proximales,
pensar en la posible existencia de
un nervio peroneo accesorio.
Se puede realizar la detección en
C
músculo tibial anterior, estimulan-
do por debajo de la cabeza pero-
neal y en la parte lateral de fosa
poplítea.

NERVIO PERONEO SUPERFICIAL SENSITIVO (Fig. 18)

Figura 17. Nervio peroneo. Estudio de la conducción nerviosa motora. Posición: Paciente en decúbito supino, con
A: estimulación distal en tobillo; B: estimulación por debajo de la cabeza las piernas extendidas.
peroneal; C: estimulación en la fosa poplítea lateral.
Detección: Tobillo.
G1: entre el maléolo lateral y el ten-
dón del tibial anterior.
Detección: Músculo extensor corto de los dedos G2: 3 cm distal.
(pedio). Estimulación: Parte lateral de la pierna, a 14 cm
G1: en el centro del vientre muscu- del electrodo activo.
lar. Nota: La detección puede realizarse con
G2: en la base del 5º dedo (articu- un electrodo de barras.
lación metatarsofalángica).
Estimulación: 1. Tobillo: zona superior, a 8,5
cm del electrodo de detección NERVIO SURAL (Fig. 19)
(2-5 cm lateral al tendón del ti-
bial anterior, a 5 cm del maléolo Posición: Paciente en decúbito prono, con las
externo). piernas extendidas.

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100 J. Pardo Fernández, M. Torres Colomer, M. Baliñas Tojo

Figura 19. Nervio sural. Estudio de la conducción sensitiva antidrómica. Figura 20. Nervio plantar interno. Estudio de la conducción sensitiva
ortodrómica.

Detección: Maléolo externo.


G1: inmediatamente posterior o
posteroinferior al maléolo externo.
G2: 3 cm distal.
Estimulación: Cara posterior de la pierna, a 14 cm
del electrodo activo, 1-3 cm lateral
a la línea media.
Nota: La detección se puede realizar con
un electrodo de barras.

NERVIO PLANTAR INTERNO SENSITIVO (Fig. 20)


Figura 21. Nervio frénico. Estudio de la conducción nerviosa motora.
Posición: Paciente en decúbito supino, con
las piernas extendidas.
Detección: Maléolo interno.
G1: por encima del flexor retinacu- Al ser una técnica ortodrómica, la
lum, inmediatamente por dentro amplitud de la respuesta evocada
del maléolo interno. sensitiva es menor.
G2: 3 cm distal. Para estudiar el nervio plantar exter-
Estimulación: En 1er dedo, mediante un electrodo no, la estimulación se realiza con un
de anillo que actúa de estimulador electrodo de anillo en el 5º dedo.
(cátodo cercano a la articulación
metatarsofalángica, ánodo a 3 cm
distal). NERVIO FRÉNICO (Fig. 21)
Notas: Útil para el diagnóstico de un sín-
drome del túnel tarsiano cuando Posición: Paciente en decúbito supino, sin
la latencia distal motora del nervio almohada.
tibial es normal. Detección: Músculo diafragma.
Siempre es aconsejable realizar estu- G1: en el octavo espacio intercostal,
dios comparativos con el lado sano. en la línea axilar anterior.

Manual EMG.indb 100 9/7/07 12:05:53


Nervios comúnmente examinados 101

TABLA I. Valores normales de conducción nerviosa motora(2)


Latencia distal Amplitud, mV VCN Distancia distal
Nervio Detección (ms) (fase negativa) (m/s) (cm)

Mediano Abductor corto pulgar ≤ 4,4 ≥4 ≥ 49 7


Cubital Abductor meñique ≤ 3,3 ≥6 ≥ 49 7
Radial Extensor índice ≤ 2,9 ≥2 ≥ 49 4-6
Peroneo Extensor corto dedos ≤ 6,5 ≥2 ≥ 44 9
Tibial Abductor dedo gordo ≤ 5,8 ≥4 ≥ 41 9

G2: en el noveno espacio intercostal, TABLA II. Valores normales de conducción nerviosa sensitiva or-
en la línea axilar anterior. todrómica(6)
Estimulación: En punto de Erb (por encima de la
Amplitud, μV
clavícula, lateral a la porción ester-
Nervio Detección (fase negativa) VCN (m/s)
nal del músculo esternocleidomas-
toideo y medial a la inserción clavi- Plantar medial Maléolo interno ≥2 ≥ 31,6
cular, con el cátodo hacia abajo). Plantar lateral Maléolo interno ≥1 ≥ 27,3
Notas: El punto de estimulación es co-
rrecto cuando aparece la respues-
ta motora, no hay contracción de cada unidad de electromiografía disponga de sus
musculatura del hombro, pectoral o propios valores de referencia. En caso de no contar
escapular y no aparecen parestesias con valores de normalidad propios, se han de tener
en la extremidad superior. Es útil la en cuenta las siguientes consideraciones:
comparación de la latencia distal – Realizar la misma técnica de estudio descrita
motora y de la amplitud con el lado por el grupo de referencia (incluyendo filtros,
sano. temperatura, colocación de electrodos, condi-
ciones de estimulación y distancias).
– Reproducir los métodos utilizados para la obten-
VALORES NORMALES ción de los valores de latencias sensitivas (distal
o al pico de la respuesta negativa) y amplitud
Los valores normales de la conducción nerviosa (de la fase negativa o pico a pico).
son imprescindibles para poder valorar los datos – Características del grupo control utilizado
obtenidos en un paciente concreto. Sin embargo, (edad, sexo, etc.).
ya se ha comentado que éstos dependen de varios En algunos estudios de conducción nerviosa,
factores, ya sean fisiológicos (edad, altura, sexo) sobre todo si la alteración es unilateral, puede ser
o técnicos (filtros, condiciones de estimulación y de mayor utilidad la comparación de los valores
detección, medición de distancias, temperatura). obtenidos con los del lado sano que la utilización
Además, los valores de conducción nerviosa pue- de tablas de referencia de valores normales. Existen
den variar de un estudio a otro. Para minimizar esta múltiples referencias de valores normales(1-5). En
variabilidad es esencial que las técnicas de estudio las tablas I a III se reflejan, a modo de ejemplo,
para cada nervio estén perfectamente estandari- algunos de ellos, por ser los más aproximados a
zadas y siempre se realicen de la misma forma. las técnicas de conducción descritas en este ca-
Todos estos factores influyen en la elaboración de pítulo(2,6). Otra forma de exponer los valores de
los valores normales, por lo que se recomienda que normalidad es utilizar ecuaciones de regresión y

Manual EMG.indb 101 9/7/07 12:05:55


102 J. Pardo Fernández, M. Torres Colomer, M. Baliñas Tojo

TABLA III. Valores normales de conducción nerviosa sensitiva antidrómica(2)


Latencia al pico de Amplitud, μV VCN Distancia distal
Nervio Detección la fase negativa (ms) (fase negativa) (m/s) (cm)
Mediano 2º dedo ≤ 3,5 ≥ 20 ≥ 50 13
Cubital 5º dedo ≤ 3,1 ≥ 17 ≥ 50 11
Radial Tabaquera anatómica ≤ 2,9 ≥ 15 ≥ 50 10
Rama dorsal cutánea cubital 4º-5º espacio interdigital ≤ 2,5 ≥8 ≥ 50 8
Rama cutánea lateral antebraquial Antebrazo (lateral) ≤3 ≥ 10 ≥ 55 12
Rama cutánea medial antebraquial Antebrazo (medial) ≤ 3,2 ≥5 ≥ 50 12
Sural Maléolo externo ≤ 4,4 ≥6 ≥ 40 14
Peroneo superficial Tobillo ≤ 4,4 ≥6 ≥ 40 14

TABLA IV. Valores de referencia para conducciones sensitivas según el modelo de regresión lineal múltiple(8)
Nervio Constante Factor edad (X1) Factor altura (X2) DE
Mediano (AD)
VCN (m/s) 62,9 -0,12 3,48
Amplitud (μV) 4,24 -0,026 0,32
Cubital (AD)
VCN (m/s) 62,92 -0,13 3,77
Amplitud (μV) 3,88 -0,023 0,42
Cutáneo antebraquial lateral (AD)
VCN (m/s) 64,6 4,9
Amplitud (μV) 2,8 0,4
Cutáneo antebraquial medial (AD)
VCN (m/s) 65,6 5,1
Amplitud (μV) 2,0 0,6
Radial (AD)
VCN (m/s) 89,64 -0,09 -0,15 4,9
Amplitud (μV) 139,68 -0,412 -0,57 8,44
Plantar medial (O)
VCN (m/s) 1,9 1
Amplitud (μV)
Plantar lateral (O)
VCN (m/s) 1,9 1
Amplitud (μV)
Sural (AD)
VCN (m/s) 97,95 -0,028 -0,26 5,49
Amplitud (μV) 8,101 -0,0062 -0,029 0,58
Peroneo superficial (AD)
VCN (m/s) 97,8 -0,144 -0,28 4,1
Amplitud (μV) 8,02 -0,0322 -0,0304 0,39
AD: antidrómica; O: ortodrómica; DE: desviación estándar; VCN: velocidad de conducción nerviosa. El valor esperado (Y) es igual a: constante + [X1 × edad
(en años)] + [X2 × altura (en cm)].

Manual EMG.indb 102 9/7/07 12:05:55


Nervios comúnmente examinados 103

TABLA V. Valores de referencia para conducciones nerviosas motoras según el modelo de regresión lineal múltiple(7)
Nervio Constante Factor edad (X1) Factor altura (X2) DE

Mediano (muñeca-codo)
Velocidad de conducción nerviosa 66,22 -0,09 -0,03 3,39
Latencia distal 0,61 0,007 0,016 0,33
Latencia ondas F -5,46 0,04 0,16 1,06

Cubital (muñeca-debajo del codo)


Velocidad de conducción nerviosa 75,93 -0,08 -0,08 4,67
Latencia distal 0,36 0,005 0,015 0,32
Latencia ondas F -9,67 0,04 0,184 1,21

Tibial (tobillo-hueco poplíteo)


Velocidad de conducción nerviosa 90,15 -0,11 -0,22 3,99
Latencia distal -0,91 0,001 0,03 0,73
Latencia ondas F -14,45 0,09 0,32 2,41

Peroneo (tobillo-cabeza peroneal)


Velocidad de conducción nerviosa 102,59 -0,13 -0,29 3,40
Latencia distal 2,51 -0,001 0,01 0,69
Latencia ondas F -17,71 0,07 0,34 2,41
El valor esperado (Y) es igual a: constante + [X1 × edad (en años)] + [X2 × altura (en cm)].

desviaciones estándar(7,8). La ecuación de regresión mediano es normal, en un varón de 40 años que


se expresa como: mide 180 cm, el cálculo de la Z-score se realiza de
la siguiente forma:
Y (valor esperado) =
Constante + (X1 × edad) + (X2 × altura) Valor esperado =
66,22 – (0,09 x 40) – (0,03 x 180) = 57,22
Los resultados de un paciente concreto se Z = (57,22 – 48) / 3,39 = 2,72
comparan con los normales esperados, según
los modelos de regresión y la diferencia entre el Al estar fuera del intervalo –2 +2, el valor de
valor medido y el esperado se describe mediante Z es anormal.
el Z-score según la siguiente fórmula: Los internautas pueden encontrar en la página
web del Dr J. F. Jabre (www.teleemg.com) el Tele
Z-score = EMG Calculator, que permite comparar los valores
valor medido – valor esperado/desviación estándar obtenidos en las conducciones motoras y sensitivas
Un Z-score entre –2 y +2 es normal, mientras de nuestros pacientes con una base de datos de
que los valores que se sitúen fuera de este rango valores normales. Para ello, además de los valores
serían considerados anormales. Las Tablas IV y V neurográficos, se deben introducir los de edad, sexo
reflejan los datos esenciales para poder aplicar este y altura, siendo la temperatura opcional. La dife-
método en las conducciones sensitivas (Tabla IV) rencia entre los valores obtenidos en un paciente
y motoras (Tabla V). concreto y los de referencia se expresa como el
Por ejemplo, para saber si un valor de conduc- número de desviaciones estándar (+ o –), siendo
ción nerviosa motora de 48 m/s obtenido en nervio considerados como límites los valores de –2,0 (2

Manual EMG.indb 103 9/7/07 12:05:55


104 J. Pardo Fernández, M. Torres Colomer, M. Baliñas Tojo

desviaciones estándar por debajo de la media del 3. Oh SJ. Clinical electromyography: nerve conduction stu-
dies. Baltimore: Williams & Wilkins; 1996. p. 84-104.
grupo control) y como anormal una desviación
estándar de –2,5. Todos los valores normales ex- 4. Dumitru D, Amato AA, Zwarts MJ. Nerve conduction
studies. En: Dumitru D, Amato AA, Zwarts MJ, eds.
puestos anteriormente son aplicables a pacientes Electrodiagnostic medicine, 2º ed. Philadelphia: Hanley
adultos, aunque también existen varias referencias & Belfus; 2002. p. 159-256.
sobre valores de normalidad en población pediá- 5. DeLisa JA, Lee HJ, Baran EM, et al. Manual of nerve
trica(9-11). conduction velocity and clinical neurophysiology. New
York: Raven Press, 1994.
6. Oh SJ, Sarala P, Kuba T, Elmore RS. Tarsal tunnel syndrome:
electrophysiological study. Ann Neurol 1979; 5: 327-30.
AGRADECIMIENTOS
7. Stålberg E, Falck B. Clinical motor nerve conduction studies.
Methods in Clinical Neurophysiology 1993; 4: 61-80.
A Ignacio Ecenarro, por reconciliarse con la 8. Falck B, Stålberg E, Bischoff C. Sensory nerve conduc-
cámara y a Luis Relova, por la digitalización de tion studies with surface electrodes. Methods in Clinical
las imágenes. Neurophysiology 1994; 5: 1-20.
9. Miller RG, Kuntz NL. Nerve conduction studies in infants
and children. J Child Neurol 1986; 1: 19-26.
BIBLIOGRAFÍA 10. Cruz Martínez A, Ferrer MT, Martín MJ. Motor conduc-
tion velocity and H-reflex in prematures with very short
1. Kimura J. Electrodiagnosis in diseases of nerve and muscle: gestational age. Electromyogr Clin Neurophysiol 1983;
principles and practice. New York: Oxford University Press; 23: 13-9.
2001. p. 130-77. 11. Cruz Martínez A, Pérez Conde MC, del Campo F,
2. Preston DC, Shapiro BE. Electromyography and neu- Barrio M, Gutiérrez AM, Ferrer MT. Sensory and
romuscular disorders: clinical-electrophysiologic co- mixed conduction velocity in infancy and childhood.
rrelations. Boston: Butterworth-Heinemann; 1998. p. 1. Normal parameters in median, ulnar and sural nerves.
103-42. Electromyogr Clin Neurophysiol 1978; 18: 487-504.

Manual EMG.indb 104 9/7/07 12:05:56


ELECTROMIOGRAFÍA

Manual EMG.indb 105 9/7/07 12:05:56


Manual EMG.indb 106 9/7/07 12:05:56
Capítulo 10

ANÁLISIS DE LA ACTIVIDAD MUSCULAR ESPONTÁNEA


R. Rojas-García, J. Díaz Manera, I. Illa Sendra

INTRODUCCIÓN en la misma localización con un ángulo diferente.


Debe valorarse el músculo en diferentes puntos
La electromiografía consiste en el registro de durante el reposo y la contracción voluntaria(1).
la actividad eléctrica del músculo, y se realiza La actividad espontánea se valora en el músculo
mediante la inserción de un electrodo de aguja, en reposo.
generalmente concéntrica. Se evalúan dos grandes
parámetros: la actividad en reposo y la actividad
durante la contracción muscular voluntaria. Excep- ACTIVIDAD DE INSERCIÓN
tuando la actividad de inserción y los potenciales
de placa motora, la presencia de cualquier tipo de El rápido movimiento de la aguja insertada en
actividad espontánea en reposo es anormal. En este el músculo produce una breve despolarización de
capítulo se analiza la actividad eléctrica que puede algunos cientos de ms, conocida como actividad
registrarse durante el reposo y su relación con una de inserción(2). Se trata de un fenómeno normal
patología subyacente. caracterizado por la presencia de espículas posi-
Antes de iniciar el estudio electromiográfico tivas o negativas agrupadas, irregulares, de breve
se debe efectuar una correcta valoración clínica y duración (300-500 ms) y alta frecuencia (Fig. 1).
semiológica, esencial para planificar la exploración Se origina en las fibras musculares lesionadas o
adecuada a cada paciente y responder con mayor por la estimulación mecánica del electrodo de
eficacia a las preguntas planteadas, así como para registro al penetrar en el tejido muscular. Puede
acortar el tiempo de exploración y minimizar las clasificarse como normal, disminuida o aumen-
molestias ocasionadas al paciente. Informar previa- tada (Tabla I). Un aumento puede observarse en
mente al paciente con detalle favorece su colabo- los procesos miopáticos y neuropáticos. En raras
ración durante la exploración. ocasiones en las que el músculo ha sido sustituido
Tras la inserción del electrodo en el músculo se por tejido graso y fibroso o en presencia de atrofia
realizan, suavemente, movimientos en línea recta grave, como ocurre en fases avanzadas de las dis-
hacia el interior del músculo, de corto recorrido trofias musculares, la actividad de inserción puede
(0,5-1 mm) y con unas breves pausas, de aproxima- encontrarse reducida, y en ocasiones, tras isquemia
damente un segundo de duración, para poder ob- muscular, puede ser nula, lo que indica sustitución
servar y escuchar la actividad anormal. Se deberían fibrosa. Una actividad de inserción anormalmente
realizar de unos 5 a 30 movimientos de inserción prolongada traduce irritabilidad de las fibras mus-
dependiendo del diámetro del músculo. Tras ello se culares, o más específicamente, inestabilidad de
retira la aguja sin extraerla totalmente y se reinserta la membrana muscular, y puede observarse en los

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108 R. Rojas-García, J. Díaz Manera, I. Illa Sendra

FOOT SWITCH STATUS: HOLD / RUN TRIG: -100 V 10 ms

5 ms

Fibs :
Pos Waves :
Fascics :
Polyphasics :

Figura 1. Actividad de inserción. A: durante el reposo el músculo, en condiciones normales, es eléctricamente silente; B: la inserción del electrodo de
registro provoca breves descargas de actividad eléctrica, constituidas por espículas positivas o negativas agrupadas.

TABLA I. Actividad de inserción


Patrón Duración Morfología Etiología

Normal 300-500 ms Espículas mono o bifásicas


Ondas positivas
Aumentada > 500 ms Espículas Variante de la normalidad
Ondas positivas Irritabilidad/denervación
Miopatías inflamatorias
Reducida < 100 ms Oscilaciones de la línea de base Sustitución grasa o tejido fibroso por isquemia muscular

casos que cursan con denervación y en los procesos de las pequeñas terminales nerviosas intramus-
que cursan con inflamación muscular. culares por la punta del electrodo de registro.
Debe considerarse como normal o fi siológica,
pero puede estar aumentada en los músculos
ACTIVIDAD ESPONTÁNEA NORMAL denervados, y debe diferenciarse de las descargas
anormales. Puede ser de dos tipos, que es posible
Se trata de una actividad originada en la observar de manera conjunta o independiente-
unión neuromuscular provocada por la irritación mente (Tabla II).

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Análisis de la actividad muscular espontánea 109

TABLA II. Actividad espontánea normal Espículas de placa motora (potenciales nerviosos)
Frecuencia de descarga Amplitud Duración
Se trata de potenciales de corta duración (3-4 ms)
Ruido de placa Continua 10-50 mV 1-2 ms y de baja amplitud (100-200 μV), originados en las
Espículas de placa Irregular 100-200 mV 3-4 ms fibras musculares, que descargan de manera irregu-
lar con una frecuencia de 20-50 Hz (Fig. 3). Son
inducidos por la irritación de un axón terminal por
la aguja de registro, con la consecuente activación
Ruido de placa motora de un potencial nervioso que conlleva un potencial
de acción de la fibra muscular. Tienen un sonido
Se trata de potenciales monofásicos negativos similar a un crujido. Son bifásicos y presentan una
de baja amplitud (10-50 μV) y duración menor deflexión negativa inicial que refleja que la aguja de
de 2 ms, con una alta y continua frecuencia de inserción se encuentra en el lugar de generación del
descarga (Fig. 2). Fisiológicamente, representan potencial de acción. No tienen significación clínica,
potenciales miniatura de placa sub-umbrales, y pueden asociarse a la presencia de ruido de placa
registrados extracelularmente y desencadenados o dolor. Deben diferenciarse cuidadosamente de las
por la liberación espontánea de acetilcolina en la fibrilaciones, reconociéndose por su frecuente asocia-
terminal presináptica. Se reconocen por su soni- ción con dolor, la proximidad del electrodo a la placa
do característico (que recuerda al que se oye en motora, su velocidad de descarga alta e irregular, su
una caracola) y su frecuente asociación con las deflexión inicial negativa y su corta duración.
espículas de placa motora. Cuando aparecen, el
paciente se queja de dolor, por la proximidad del
electrodo al terminal nervioso, que cede al des- ACTIVIDAD ESPONTÁNEA ANORMAL
plazar la aguja en una dirección diferente. Si esto
no ocurre es conveniente retirar parcialmente la Exceptuando la actividad de placa motora y
aguja y reinsertarla en un lugar distinto. la actividad de inserción, el registro del músculo

Figura 2. A: ruido de placa. Registro de potenciales miniatura, negativos e irregulares de 10 a 50 μV de amplitud y 1-2 ms de duración, correspondiente
a ruido de placa (electrodo de registro cercano a la placa motora); B: espículas de placa.

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110 R. Rojas-García, J. Díaz Manera, I. Illa Sendra

Figura 3. Espículas de placa. Potenciales de una frecuencia irregular, con amplitud de 100-200 μV y duración de 3-4 ms, registrados en reposo.

normal mediante aguja es eléctricamente mudo. El hallazgo de actividad espontánea anormal


Así pues, la presencia de cualquier tipo de acti- puede aportar información valiosa por diferentes
vidad espontánea persistente puede considerarse motivos. La distribución de la actividad espontá-
anómala; esta puede ser continua o desencadena- nea anormal puede sugerir una topografía lesional
da por los movimientos de la aguja de registro, la concreta, como en el caso de la presencia de ondas
contracción voluntaria, la percusión muscular o la positivas y fibrilaciones, restringidos a un deter-
estimulación eléctrica. Se puede objetivar cuando minado miotoma en las radiculopatías; el tipo de
se inserta el electrodo de registro en tejido muscu- actividad espontánea supone también una ayuda
lar patológico. para el diagnóstico: ciertos procesos se asocian de

TABLA III. Actividad espontánea anormal


Origen/morfología Amplitud Duración Frecuencia Patrón de descarga

Fibrilaciones Fibra muscular 20-200 μV 1-5 ms 0,5-10 HzRegular/decreciente


(difásico o trifásico, inicio positivo) (a veces irregular)
Ondas positivas Fibra muscular 20-200 μV 10 ms 0,5-10 Hz Regular/decreciente
(inicio positivo, fase lenta negativa) (a veces irregular)
Descargas repetitivas Despolarización sincrónica de múltiples 50 μV-1 mV > 50-100 ms 20-150 Hz Regular/estable
complejas fibras Inicio y fin súbitos
Fasciculaciones Unidad motora Similar a los potenciales de unidad motora Variable Aisladas
Descargas mioquímicas Axón motor Similar a los potenciales de unidad motora 5-150 Hz Regular
Descargas Axón motor Similar a los potenciales de unidad motora 150-300 Hz Regular
neuromiotónicas Amplitud decreciente
Descargas miotónicas Fibra muscular Variable 20-200 Hz Creciente/decreciente
(fibrilaciones/ondas positivas) (20-300 μV)
Variable

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Análisis de la actividad muscular espontánea 111

manera prácticamente exclusiva con determinados nóstico topográfico de la lesión (asta anterior de la
tipos de actividad espontánea, como las descargas médula espinal, radiculopatías, plexopatías, mono-
miotónicas, observadas en un grupo restringido de neuropatías o polineuropatías axonales). Pueden
miopatías; el tipo de actividad espontánea también también detectarse en enfermedades musculares
puede informar en cuanto a la cronicidad de las primarias, como distrofias musculares, miopatías
lesiones; la cuantía de la actividad espontánea con- inflamatorias, miopatías metabólicas y, más rara-
tribuye a evaluar la intensidad de la lesión. mente, en trastornos de la unión neuromuscular
El informe del registro de la actividad espontá- (especialmente botulismo).
nea debe incluir una gradación de su cuantía. Para Se reconocen por su patrón regular de descar-
ello se puede utilizar una escala de grados relativos ga (0,5-10 Hz), que puede presentar un enlenteci-
de intensidad: miento gradual durante segundos hasta detenerse,
0: ausencia de actividad espontánea. con un sonido característico que se ha comparado
+/-: presencia de actividad eléctrica de equí- al de la lluvia al caer sobre un tejado. Su morfología
vocas características, como una única des- es la de un potencial de acción de fibra muscular
carga de potenciales de fibrilación u ondas con una deflexión positiva inicial, aunque si el elec-
positivas durante la exploración completa trodo de registro se encuentra cercano a la placa
del músculo. motora pueden registrarse con un inicio negativo.
+: presencia inequívoca de actividad eléctrica La duración varía entre 1 y 5 ms, y la amplitud de
con la significación de fibrilación u ondas 20 a 200 μV, aunque ocasionalmente pueden lle-
positivas, que es persistente y está presente gar a 1 mV (Fig. 4). La amplitud del potencial no
en, al menos, dos áreas del músculo. tiene significación clínica. Tienden a aumentar su
++: presencia de un número moderado de des- amplitud en el curso temprano de la enfermedad,
cargas en tres o más áreas del músculo. y gradualmente disminuyen en amplitud conforme
+++: gran número de descargas persistentes en progresa el proceso de reinervación.
todas las áreas del músculo. El tiempo de aparición de las fibrilaciones u ondas
++++: intensas y difusas descargas persistentes en positivas depende de la longitud de los axones. En
todas las áreas del músculo. una lesión radicular las fibrilaciones aparecen al cabo
de 7-10 días en los músculos paraespinales; general-
Fibrilaciones mente tardan de 2 a 3 semanas, pero pueden aparecer
hasta 6 semanas después en los músculos distales de
Los potenciales de fibrilación son el registro las extremidades. Tras su presentación suelen persistir
extracelular de la despolarización espontánea de durante largo tiempo (más de 20 años en la poliomie-
una fibra muscular aislada. Aunque ocasionalmente litis). Pueden registrarse varios años después de una
pueden registrarse en la región de la placa motora intervención quirúrgica, lo que es de importancia en
del músculo normal, estas despolarizaciones espon- la evaluación de los síntomas de recurrencia, de forma
táneas de fibras musculares son marcadores elec- que tan sólo su ausencia puede aportar seguridad para
trofisiológicos de denervación. Sin embargo, como concluir que no hay una nueva lesión.
se señala posteriormente, las fibrilaciones pueden Los intentos de graduar la gravedad de las fi-
encontrarse en cualquier situación en la que las brilaciones han tenido poco éxito. Una fibrilación
fibras musculares se encuentren denervadas, lo cual ocasional debe interpretarse con prudencia si la
no es patognomónico de procesos neurógenos. Las aguja de registro se encuentra en la proximidad
descargas reproducibles en, al menos, dos áreas de la placa motora, dado que puede tratarse de un
diferentes sugieren afección en cualquier punto hallazgo normal. Por otra parte, la presencia de
del trayecto de la neurona motora inferior. Cuando fibrilaciones abundantes y sostenidas indica una
están presentes, su distribución contribuye al diag- interrupción grave entre el nervio y el músculo.

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112 R. Rojas-García, J. Díaz Manera, I. Illa Sendra

Figura 4. Potenciales de fibrilación. A: ondas difásicas o trifásicas con una deflexión positiva inicial, una duración de 1-5 ms y una amplitud de 20-200 μV; B:
ocasionalmente pueden llegar a tener amplitudes de 1 mV. La gradación de la cantidad de fibrilación es escasa (+) en A y muy abundante (++++) en B.

Las fibrilaciones pueden disminuir con el frío y duración de más de 10 ms (Fig. 5). Presentan una
la isquemia y aumentar con el calor y la administra- característica morfología, con una deflexión breve
ción de inhibidores de la acetilcolinesterasa, lo que inicial, seguida de una larga fase negativa y un ca-
debe tenerse en cuenta al efectuar el registro. racterístico sonido sordo. Aunque suelen acompañar
a las fibrilaciones, en ocasiones se pueden registrar
Ondas positivas de manera aislada y temprana durante el proceso
de denervación. Al igual que la fibrilación, pueden
Se trata de despolarizaciones espontáneas de encontrarse no sólo en músculos denervados, sino
fibras musculares que se registran en el tejido mus- también en diversos procesos miopáticos (miopatías
cular denervado. Se llaman así por su característica inflamatorias, distrofias musculares, etc.).
afilada deflexión positiva inicial, seguida por una fase
negativa de larga duración. Electrofisiológicamente Fasciculaciones
tienen el mismo significado que las fibrilaciones,
aunque se desconoce la causa de su diferente morfo- Son descargas espontáneas, individuales, de una
logía. Su patrón de descarga puede ser regular o irre- parte o la totalidad de las fibras musculares de una
gular, con potenciales de amplitudes de 20 a 200 μV unidad motora. El potencial ectópico generado se
que en ocasiones pueden llegar a 3 mV y con una transmite a todas las terminaciones axonales, por lo

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Análisis de la actividad muscular espontánea 113

Figura 5. Ondas positivas. Morfología con una deflexión positiva inicial que le da nombre, seguida de una fase negativa de larga duración. La duración
total acostumbra a ser mayor de 10 ms y presentan amplitudes entre 20-200 μV, pudiendo llegar en ocasiones hasta los 3 mV.

Figura 6. Fasciculaciones. Morfología de idénticas características a una unidad motora en lo que respecta a la amplitud y duración, pero son registradas
en reposo.

que el registro del potencial de la fasciculación es en las células de las astas anteriores, y en cualquier
la suma eléctrica de los voltajes de todas las fibras punto a lo largo del axón de la neurona motora
musculares despolarizadas. Presentan, por lo tanto, inferior(3).
una morfología de idénticas características a la del Los potenciales de unidad motora generados
potencial de unidad motora en lo que respecta a por una descarga espontánea, que se producen en
amplitud, duración y fases, pero pueden presentar el interior del músculo no inducen necesariamente
ligeros cambios en la amplitud y la forma durante una contracción visible. Por ello, el registro electro-
el registro (Fig. 6). Descargan de manera irregular miográfico es útil para detectar fasciculaciones que
con una frecuencia variable de uno a varios Hz. Su de otra manera podrían pasar desapercibidas. Antes
origen no es bien conocido y probablemente no es de concluir su ausencia sería preciso un registro
único, sino que pueden ser generadas en diferentes continuo, por lo menos durante 2 minutos en un
lugares, como la médula espinal, presumiblemente lugar determinado si fuese preciso.

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114 R. Rojas-García, J. Díaz Manera, I. Illa Sendra

Figura 7. Mioquimias. Descargas espontáneas repetitivas de una unidad motora agrupadas en forma de multipletes.

Clínicamente se reconocen como sacudidas La presencia aislada de fasciculaciones no es


individuales breves, que raramente comportan sinónimo de una enfermedad de neurona motora,
desplazamiento articular, aunque pueden verse a menos que se acompañe de otras manifestacio-
o notarse. Se asocian a numerosos procesos que nes de actividad espontánea (fibrilaciones, ondas
afectan a las neuronas motoras inferiores, pero positivas) o signos en la exploración neurológica
raramente ocurren con semejante distribución di- (debilidad, atrofia, hiperreflexia, reflejo cutáneo
fusa, multisegmentaria y frecuencia, como en la plantar extensor) sugestivos de implicación, tanto
esclerosis lateral amiotrófica, donde existe afección de primera como de segunda neurona motora.
progresiva de neuronas motoras superiores e infe-
riores. De cualquier manera, las fasciculaciones, Descargas mioquímicas
típicamente asociadas con procesos que afectan
a las neuronas del asta anterior, son comunes en Mioquimia es un término clínico que se refiere
radiculopatías, polineuropatías y neuropatías por a la contracción o movimiento involuntario, ondu-
compresión(4). Además, muchos individuos sanos lante y continuo de fibras musculares semejante
pueden presentar fasciculaciones, también llama- a fasciculaciones, aunque de mayor duración. La
das fasciculaciones benignas, cuya frecuencia de alteración electrofisiológica subyacente se conoce
descarga suele ser más elevada. como descarga mioquímica. Desde un punto de
Es imposible distinguir clínicamente las fasci- vista electrofisiológico se definen como descargas
culaciones asociadas a procesos patológicos de las espontáneas (autodescargas), breves, rítmicas, re-
llamadas benignas. Sin embargo, éstas no se aso- petitivas, de entre dos y diez potenciales. Están for-
cian con debilidad muscular, atrofia o alteración madas por un potencial de unidad motora o parte
de los reflejos musculares. En general, tienden a de él, que se repite con morfologías muy similares
afectar la misma topografía de manera repetida y entre sí, con frecuencias internas de descarga de
prolongada en el tiempo, en contraposición a las 5-150 Hz, que pueden presentarse como dobletes,
asociadas a enfermedad de las neuronas motoras, tripletes o multipletes, con una cierta variabilidad
ya sea exclusivamente de neurona motora inferior que indica la inestabilidad del generador de la
o concomitantemente con implicación de neu- descarga (Fig. 7). Tras cada una de estas descargas
rona motora superior, que son más difusas(5). Las se sigue un breve periodo de silencio eléctrico, y
fasciculaciones benignas pueden ser provocadas la repetición de la descarga en intervalos de tiem-
por tensión nerviosa o ansiedad, fatiga muscular, po más o menos regulares de 0,1 a 10 segundos.
ejercicio, café o tabaco. Se cree que se generan como consecuencia de

Manual EMG.indb 114 9/7/07 12:05:59


Análisis de la actividad muscular espontánea 115

la hiperexcitabilidad de la membrana del axón tualmente al inicio, y con frecuencia remiten con
motor que facilitaría la despolarización ectópica la mejoría clínica.
espontánea o transmisión efáptica en un segmento
de nervio desmielinizado. Pueden ser provocadas o Descargas repetitivas complejas (descargas aberrantes de
intensificadas por la disminución del calcio iónico alta frecuencia, descargas pseudomiotónicas)
en suero o por hiperventilación. La administración
de calcio puede disminuir transitoriamente la pre- Se originan por la despolarización de una fibra
sencia de las descargas mioquímicas. muscular seguida de la despolarización sincrónica
Desde un punto de vista clínico se encuentran de fibras adyacentes por transmisión efáptica. Se
emparentadas con la neuromiotonía. No existe inician de manera abrupta, mantienen una alta
acuerdo sobre si se trata de entidades diferentes frecuencia de descarga (20-150 Hz) constante por
bien definidas o simplemente reflejan una dife- un periodo de tiempo, generalmente mayor de 50-
rencia en la intensidad de la alteración electro- 100 ms, y ceden de manera también abrupta(6).
fisiológica subyacente. Desde un punto de visa La amplitud (50 μV-1 mV) y morfología de los
electrofisiológico las descargas neuromiotónicas potenciales registrados se mantienen igualmente
tienen características similares, pero presentan constantes (Fig. 8). Pueden iniciarse de manera
altas frecuencias de descarga (150-300 Hz) de po- espontánea, pero con mayor frecuencia son indu-
tenciales repetitivos correspondientes a la actividad cidas por los movimientos del electrodo de registro
ectópica del axón motor. Las descargas son más y la percusión o contracción muscular. Producen
prolongadas, persisten durante unos segundos y un sonido comparable al de una máquina.
con frecuencia se inician y finalizan de manera Reflejan la actividad espontánea de las fibras
repentina. La amplitud de las descargas es típi- musculares denervadas y pueden verse en cualquier
camente decreciente. Pueden ocurrir de manera situación en la que se encuentren fibrilaciones y
espontánea, ser precipitadas por el esfuerzo, el mo- ondas positivas, con mayor frecuencia en procesos
vimiento de la aguja de registro o la percusión(6). crónicos. Pueden hallarse en una gran variedad
No existen pruebas de que difieran de las descargas de procesos neuropáticos y miopáticos crónicos y
mioquímicas, más que por su mayor frecuencia de pueden ocurrir en cualquier proceso en el que se
descarga y su decremento de amplitud(7). Ambas existan fibras denervadas adyacentes a otras tam-
pueden presentarse de manera generalizada o focal bién denervadas. Esto ocurre con relación al pro-
y reflejan una alteración en el microambiente o ceso de denervación y subsecuente reinervación o
membrana del nervio periférico. en los trastornos miopáticos asociados con escisión
Las mioquimias de extremidades ocurren en (splitting) de fibras musculares.
una variedad de procesos que incluyen radiculopa-
tías, neuropatías focales o secundarias a radiación. Descargas miotónicas
En el caso de pacientes con historia de cáncer e
irradiación, la presencia de mioquimias, aunque Son la representación electrofisiológica de la
inconstante, sugiere el diagnóstico de lesión por dificultad para la relajación que sigue a la con-
radiación, y son de utilidad en el diagnostico dife- tracción muscular voluntaria o inducida, general-
rencial con la infiltración tumoral, donde no sue- mente por percusión, conocida como miotonía.
len encontrarse. Las mioquimias faciales pueden Son debidas a la hiperexcitabilidad transitoria de
presentarse en las lesiones tumorales de tronco la membrana de la fibra muscular. La miotonía se
encefálico o ángulo pontocerebeloso, secundarias identifica clínicamente con facilidad, por la ca-
a esclerosis múltiple, gliomas o enfermedad vas- racterística dificultad y lentitud para la relajación
cular cerebral. En el síndrome de Guillain-Barré muscular tras una contracción mantenida durante
se presentan hasta en el 15% de pacientes, habi- unos segundos. El fenómeno miotónico disminuye

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116 R. Rojas-García, J. Díaz Manera, I. Illa Sendra

Figura 8. A, B y C: descargas repetitivas complejas. Se originan por la despolarización de una fibra muscular, que provoca la despolarización sincró-
nica de un grupo de fibras adyacentes que mantienen una alta frecuencia de descarga, constante y de morfología uniforme. La amplitud del potencial
(50 μV-1 mV) se mantiene invariable durante la descarga, como puede observarse, a diferencia de lo que ocurre en las descargas miotónicas, comienzan
y terminan de forma brusca.

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Análisis de la actividad muscular espontánea 117

Figura 9. Descargas miotónicas. Muestran un característico incremento y decremento de amplitud (0,2 a 3 mV) y de frecuencia (20 a 200 Hz). Tienen
un inicio y un final gradual.

en intensidad tras varias contracciones repetidas. descargas miotónicas pueden registrarse, incluso en
Desde un punto de vista electrofisiológico refle- ausencia de miotonía clínica. La miotonía clínica
jan la actividad de fibras musculares individuales se incrementa con el frío y la actividad muscular
que descargan de manera espontánea y repetitiva, vigorosa, seguida de un periodo de relajación, y
con un característico incremento y decremento de mejora con la contracción muscular continua.
amplitud (20-300 μV) y de frecuencia (20-200 Hz)
durante la descarga. Ocurren como consecuen-
cia de una reducción de la conductancia al cloro BIBLIOGRAFÍA
en la membrana sarcolémica. Pueden presentar
1. Brown WF. The physiological and technical basis of elec-
morfología de ondas positivas o fibrilaciones (Fig. tromyography. Boston: Butterworth-Heinemann Publis-
9). Tienen un sonido característico semejante a la hers; 1984.
aceleración y deceleración de un motor, y una vez 2. AAEM Glossary of terms in clinical electromyography.
identificado es fácilmente reconocido. Muscle Nerve 1987; 10 (Suppl.): 8.
Son características de la distrofia miotónica, 3. Kimura J. Electrodiagnosis in diseases of nerve and muscle:
Principles and Practice, 2nd ed. Philadelphia: F. A. Davis
miotonía congénita –autosómica dominante o re- Company; 1989.
cesiva– y paramiotonía congénita. Además, pueden 4. Desai J, Swash M. Fasciculations: What do we know of
hallarse en algunas miopatías (polimiositis, paráli- their significance? J Neurol Sci 1997; 152 (Suppl): 43-8.
sis periódica hipercaliémica, miopatía miotubular, 5. De Carvalho M, Swash M. Fasciculation potentials: A
hipotiroidismo), pero especialmente en el déficit study of amyotrophic lateral sclerosis and other neurogenic
de maltasa ácida u otras glucogenosis y de manera disorders. Muscle Nerve 1998; 21: 336-44.
ocasional en la denervación de cualquier causa. 6. Aminoff MJ. Clinical electromyography. En: Electrodiag-
nosis in clinical neurology, 4rd ed. New York: Churchill
Una única, breve descarga miotónica es común en Livingstone; 1999.
muchos procesos que cursan con denervación, pero 7. Jamieson PW, Katirji MB. Idiopathic generalized myoky-
no suele ser la manifestación predominante. Las mia. Muscle Nerve 1994; 17: 42-51.

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Manual EMG.indb 118 9/7/07 12:06:01
Capítulo 11

ANÁLISIS DE LA ACTIVIDAD MUSCULAR VOLUNTARIA


J.M. Fernández Rodríguez, S. Mederer Hengstl

INTRODUCCIÓN el conjunto formado por una motoneurona alfa,


su axón y las fibras musculares inervadas por él. El
Una vez analizada la actividad de inserción y término “unidad muscular” designa el subconjunto
la actividad muscular espontánea (expuestas en el de las fibras musculares de una unidad motora.
capítulo anterior), la exploración electromiográ- El diámetro de una fibra muscular oscila entre
fica se centra en la valoración de los potenciales 20 y 90 μ, y el número de fibras musculares de una
de unidad motora (PUM) durante la activación unidad motora varía de unos músculos a otros. En
voluntaria. sus clásicos estudios anatómicos, Feinstein y cols.(3)
El estudio con electrodo de aguja (actividad encontraban una media de 23 fibras en el recto
espontánea y voluntaria) es, sin duda, la parte más superior, de 163 en el bíceps braquial, 340 en el
compleja de la exploración electromiográfica, pues primer interóseo dorsal, 610 en el tibial anterior y
supone el reconocimiento auditivo y visual de di- unas 2.000 en el gemelo externo. Los músculos que
versas señales y su cuantificación, lo cual requie- realizan funciones de precisión tienen un número
re habilidad, aprendizaje y dedicación. De ahí la menor de fibras musculares por unidad motora que
afirmación de Daube de que la electromiografía de los que hacen una labor de fuerza.
aguja debe ser considerada como un arte(1). Las fibras de una unidad motora se yuxtaponen
Además, es fundamental que el electromiogra- a las de otras unidades motoras, distribuyéndose en
fista sepa qué información puede obtener con esta un área más o menos circular (territorio de la UM)
técnica. Puesto que se trata de una extensión del de 2 a 10 mm. En condiciones normales no hay
examen clínico, debe partirse de una hipótesis diag- agrupamiento, aunque en estudios experimentales
nóstica clara. En este contexto, la electromiografía se observa una tendencia estadística a la disposición
es de valiosa ayuda para establecer si el trastorno central. Todas las fibras musculares de una unidad
es primariamente neurogénico o miopático, valo- motora pertenecen al mismo tipo histoquímico.
rar el perfil temporal de la lesión y cuantificar su Cuando una fibra muscular denervada es reiner-
gravedad. vada por un axón de otra unidad motora, adapta
sus características histoquímicas y fisiológicas a las
de la nueva unidad motora.
FUNDAMENTOS FISIOLÓGICOS Burke(4) clasifica las fibras musculares en 3 tipos
histoquímicos básicos: I, IIA y IIB. Esta clasifica-
En fisiología y patología neuromuscular se par- ción se basa, tanto en estudios experimentales en
te siempre del concepto de unidad motora (UM), animales como en observaciones en el hombre,
definido por Lidell y Sherrington en 1925(2) como y aunque tiene algunas limitaciones muestra una

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120 J.M. Fernández Rodríguez, S. Mederer Hengstl

TABLA I. Características de los diferentes tipos de fibras musculares


Tipos de fibras I II A IIB

ATPasa 9,4 Baja Alta Alta


ATPasa 4,6 Alta Baja Ligera
ATPasa 4,3 Alta Baja Baja
Enzimas oxidativos Alta Moderada Alta
Metabolismo Oxidativo Oxidativo y glucolítico anaeróbico Glucólisis anaerobia
Resistencia a la fatiga Alta Moderada Baja
Tensión/tiempo de contracción Baja/lenta Rápida/alta Rápida/alta
Tamaño de la neurona Pequeño Medio Grande
Frecuencia de la descarga < 25 Hz, tónicas Hasta 100, fásicas 100 Hz, fásicas

excelente correlación con las propiedades fisioló- número de fibras; son en general, de tipo II y tienen
gicas (Tabla I). un ritmo de descarga irregular a bajas frecuencias
Las fibras de tipo I son inervadas por motoneu- y regular en las contracciones intensas. Desde el
ronas pequeñas, de bajo umbral de activación, que punto de vista fisiológico, existe un continuum
descargan de forma regular y sostenida, incluso entre UMs tónicas y fásicas. Es decir, el aumento
durante contracciones ligeras (UM tónicas). Las progresivo de la fuerza de contracción se consigue
fibras de tipo II pertenecen a motoneuronas de aumentando la frecuencia de activación de las uni-
mayor tamaño, y se activan preferentemente en las dades motoras ya en activo (reclutamiento tempo-
contracciones rápidas e intensas (UM fásicas). ral) y reclutando otras nuevas de umbral más alto
Las fibras de los músculos extraoculares tienen (reclutamiento espacial). Durante contracciones
características especiales. Desde el punto de vista prolongadas la máxima frecuencia de activación de
histoquímico se designan con una terminología una unidad motora no pasa de 30 Hz, pero duran-
distinta: granulares, finas y gruesas. Las dos pri- te movimientos breves intensos (balísticos), puede
meras son equivalentes a las fibras de tipos I y II llegar a 75 Hz o más.
de los miembros; las gruesas son específicas de la
musculatura extraocular, tienen múltiples placas
motrices y recuerdan a las fibras tónicas de las aves POTENCIAL DE UNIDAD MOTORA
y los anfibios(5).
Durante una contracción muscular de intensi- Un potencial de unidad motora (PUM) es la
dad creciente se sigue el principio del tamaño de suma témporo-espacial de la actividad eléctrica
Henneman(6), es decir, se activan en primer lugar de las fibras musculares de una unidad motora
las unidades motoras de menor tamaño celular, activada voluntariamente cuando se registra con
de bajo umbral de reclutamiento, con axones que un electrodo cercano (Fig. 1). En la práctica clí-
conducen más lentamente e inervan un menor nica el más utilizado en Europa es el electrodo de
número de fibras. Histoquímicamente suelen ser aguja concéntrico o coaxial diseñado por Adrian
del tipo I y tienen un ritmo de descarga regular y Bronk(7), que tiene una superficie de registro de
incluso a bajas frecuencias (UMs tónicas). forma helicoidal de 150 x 580 μm equivalente a
Al aumentar la fuerza de contracción se reclu- 0,07 mm2. En América se utiliza más el electrodo
tan las motoneuronas de mayor tamaño celular, monopolar, de forma cónica y una superficie de
conducción axonal más rápida y también mayor 0,25 mm2.

Manual EMG.indb 120 9/7/07 12:06:01


Análisis de la actividad muscular voluntaria 121

Figura 2. Diferentes tipos de electrodos de aguja y sus áreas de regis-


tro en relación con el territorio de la unidad motora. A: electrodo de
fibra aislada; B: electrodo concéntrico o coaxial; C: electrodo monopolar;
Figura 1. Representación virtual del área de registro de un electrodo con- D: electrodo de macroelectromiografía.
céntrico y de la formación de un potencial de unidad motora.

TABLA II. Parámetros de los potenciales de unidad motora


Parámetro Relacionado con Medición Automático/manual

Amplitud Nº de fibras en 0,5 mm Pico a pico (μV) M/A


Área Nº de fibras en 2 mm Área del PUM (μV x ms) A
Duración Nº de fibras en 2,5 mm Cambio de dirección de la señal EMG A/M
Nº de fases Dispersión temporal Nº cambios de dirección A/M
Nº de giros Dispersión temporal Nº cambios de dirección A
Nº de satélites Dispersión temporal Nº de espigas M
Jiggle Transmisión placa motriz Estabilidad morfología M
Patrón de reclutamiento SNC/tamaño de la UM Frecuencia A/M

Con ligeras diferencias, ambos electrodos sólo y sus fibras musculares siguiendo una secuencia
captan la actividad de un cierto número de fibras témporo-espacial que se repite en cada impulso.
musculares de una unidad motora (Fig. 2). Ello
se debe a que las fibras de una unidad motora se Configuración
distribuyen en un área de unos 10 mm, y la su-
perficie de registro del electrodo sólo capta bien El estudio de los diferentes parámetros de los
la actividad eléctrica de las fibras de un área de PUMs (Tabla II) es fundamental, tanto en los mé-
2,5 mm a su alrededor. Durante una contracción todos manuales como en los automáticos (Fig. 3).
voluntaria ligera, utilizando la técnica del “gatillo”, A menos que el programa utilizado recomiende
en la cual el potencial de unidad motora dispara el otras características, los filtros se sitúan en 2 Hz
barrido del osciloscopio, se pueden individualizar (bajas) y 10 kHz (altas), el barrido a 2 ms/div y la
potenciales de unidad motora que descargan con ganancia a 0,2-0,5 mV/div.
una frecuencia irregular de 6 a 15 Hz.
Normalmente, los PUMs tienen una forma Amplitud
constante, pues cada impulso de la motoneurona La espiga principal determina la amplitud máxi-
activa casi simultáneamente sus axones terminales ma del PUM y refleja la actividad de las fibras mus-

Manual EMG.indb 121 9/7/07 12:06:02


122 J.M. Fernández Rodríguez, S. Mederer Hengstl

la densidad anatómica de sus fibras, mayor será


la duración del potencial de unidad motora. Ésta
varía de un músculo a otro, suele ser menor en las
mujeres y aumenta progresivamente con la edad.
La disminución de la temperatura intramuscular
aumenta la duración y la amplitud de los poten-
ciales de unidad motora(8-11). Aparte de factores
fisiológicos, es muy importante la influencia de las
características técnicas. La ganancia, la velocidad
Figura 3. Parámetros de los potenciales de unidad motora. Los cír- del barrido de pantalla y el ancho de banda de
culos abiertos representan giros y las asteriscos fases. La duración es el los filtros son cruciales. Dado que la mayoría de
tiempo entre ambas flechas verticales y la amplitud entre las flechas la energía espectral de los PUMs se sitúa entre los
horizontales. 2 y los 700 Hz, pequeños cambios en los filtros
de baja frecuencia (pasa alta) pueden tener una
importante influencia sobre la duración. En con-
culares más próximas a la superficie del electrodo secuencia, los filtros deben tener el mismo ancho
de registro. Esta espiga es generada por unas pocas de banda que el utilizado para la obtención de los
fibras musculares, en general menos de 10. Se cal- valores de referencia.
cula midiendo manual o automáticamente el voltaje La duración del potencial de unidad motora,
entre el pico positivo y el negativo. Suele expresarse expresada en milisegundos, se mide desde el co-
en microvoltios. El área de la espiga principal refleja mienzo del PUM hasta que vuelve a la línea de
la actividad de las fibras situadas en un radio de 2 base. Este es uno de los parámetros más valiosos,
mm. La amplitud media de los PUMs aislados está pues aunque la duración del PUM es una muestra
disminuida en las miopatías debido a la reducción de las fibras situadas en un círculo de 3 mm, está
global del número de fibras que contribuyen a la relacionado con el número total de fibras muscu-
formación del potencial de unidad motora; por el lares de la unidad motora. La duración media de
contrario, está elevada en los trastornos neuropáticos, los PUMs está disminuida en las miopatías y au-
pues el número de fibras musculares que conforman mentada en los procesos neuropáticos.
la espiga del PUM es mayor debido al aumento de En miopatías crónicas bien compensadas, o con
la densidad de fibras secundaria a la reinervación buena respuesta al tratamiento (p. ej., polimiositis),
colateral compensatoria. Por la misma razón, la pueden encontrarse PUMs de gran voltaje y dura-
amplitud global del trazado se comporta de la mis- ción normal o aumentada (PUMs “neuropáticos”)
ma manera: en las miopatías está reducida y en los en algunos músculos. El origen de estos potenciales
procesos neuropáticos aumentada. se ha atribuido a varios mecanismos compensato-
rios: reinervación colateral de las fibras musculares
Duración que han sufrido necrosis focal; splitting (división
La duración de los potenciales de unidad mo- de fibras musculares), e hipertrofia compensatoria
tora oscila normalmente entre 3 y 15 ms, y se re- de algunas fibras musculares.
laciona con la dispersión anatómica de las placas
motrices y los diferentes tiempos de conducción Morfología
del impulso en las fibras musculares desde la A los PUMs con 2 a 4 fases se les denomina ha-
placa motriz hasta el electrodo de registro. Las bitualmente simples. Cuando tienen más de 4 fases
deflexiones iniciales y terminales se deben a las se consideran polifásicos (Figs. 3 y 4). Relacionado
fibras distantes. Estadísticamente, cuanto mayor con este parámetro está el número de turns (giros)
es el número de fibras de una unidad motora y o cambios de dirección de la señal de una deter-

Manual EMG.indb 122 9/7/07 12:06:02


Análisis de la actividad muscular voluntaria 123

Estabilidad (jiggle, inestabilidad)


Cuando se aísla un potencial de unidad motora
mediante la técnica del gatillo y la línea de retraso,
en la cual el PUM dispara el barrido, se pueden
observar sus características, entre ellas la estabilidad
de los diferentes componentes que contienen el
PUM. Mediante la técnica de la manta de Payan(12)
se puede mejorar el análisis de la estabilidad, al
individualizarse mejor los componentes del poten-
Figura 4. Potencial de unidad motora polifásico en un paciente con po- cial de unidad motora. Consiste en la eliminación
limiositis. de las bajas frecuencias, colocando el filtro de las
mismas entre 1.000 y 3.000 Hz. Las alteraciones de
minada amplitud. Ambos dependen del número la placa motriz (miastenia gravis, botulismo, etc.)
y dispersión temporal de las fibras musculares que dan lugar a una marcada inestabilidad entre los
contribuyen a la configuración del potencial de componentes de los potenciales de unidad motora
unidad motora. En condiciones normales se en- (Fig. 5). Pero también los procesos neurogénicos
cuentran potenciales polifásicos en una proporción agresivos, como la esclerosis lateral amiotrófica,
del 10% en los músculos distales, y de hasta un causan una gran inestabilidad de los PUMs, es-
25% en el músculo deltoides. La polifasia se ele- pecialmente en los periodos de deterioro rápido,
va cuando existen alteraciones neuromusculares, pues la transmisión neuromuscular tras un proceso
pero no es en absoluto específica, es decir, aparece de reinervación colateral tarda en consolidarse y
tanto en anomalías primariamente miógenas como durante cierto tiempo las placas motrices son ines-
neurógenas. tables con bloqueos frecuentes (jiggle aumentado).

Figura 5. Potencial de unidad motora con varios componentes inestables (jitter) y fenómenos de bloqueo. El último registro es la superposición de los
anteriores.

Manual EMG.indb 123 9/7/07 12:06:02


124 J.M. Fernández Rodríguez, S. Mederer Hengstl

Por el contrario, las miopatías suelen tener unos MÉTODOS DE ANÁLISIS DE LA ACTIVIDAD VOLUNTARIA
potenciales de unidad motora más estables.
El análisis de la actividad voluntaria se inicia con
Reclutamiento un esfuerzo ligero para valorar las características de
reclutamiento de los potenciales de unidad motora
En condiciones normales, cuando se realiza una y su configuración (amplitud, duración, forma, esta-
contracción con esfuerzo creciente, aumenta la fre- bilidad) y, finalmente, se estudia el patrón voluntario
cuencia de descarga de las unidades motoras y se re- de máximo esfuerzo. A menudo, a fin de obtener
clutan otras nuevas en una secuencia gradual, hasta una impresión rápida, se invierte el orden, y tras
que con esfuerzo submáximo o máximo unos PUMs el estudio de la actividad espontánea se observa el
se mezclan con los demás (patrón interferencial). Si patrón de máximo esfuerzo. De esta forma, puede
durante una contracción con máximo esfuerzo se hacerse una valoración subjetiva, pero en realidad
observan espacios isoeléctricos claros es que se ha semicuantitativa, y a menudo certera, del estado fi-
perdido, al menos, un 50% de las unidades motoras, siológico del músculo. En todo caso, esto permite
y las unidades motoras restantes suelen descargar a emitir una hipótesis de trabajo que luego se confir-
frecuencias más altas. Se trata entonces de un trazado ma o rechaza con los estudios cuantitativos. Cier-
deficitario (o reducido) y con potenciales “acelera- tamente, para que los estudios sean reproducibles y
dos”, porque baten a frecuencias elevadas. Se distin- para hacer estudios de seguimiento, se recomienda
guen varios grados de patrón voluntario deficitario: cuantificar los parámetros estudiados, incluso en
intermedio rico, intermedio pobre y trazado simple. casos donde los hallazgos no dejan lugar a dudas.
En la práctica clínica se utilizan cada vez más dos En cuanto a la estrategia del estudio, los múscu-
parámetros cuantitativos obtenidos durante el recluta- los a examinar se seleccionan según la sintomatolo-
miento con esfuerzo leve: la frecuencia de comienzo gía que presente el paciente. Si ésta es focal, como
y la frecuencia de reclutamiento. Con una contrac- en las radiculopatías, deben explorarse, además
ción de intensidad mínima (umbral de activación) de los músculos clínicamente afectados, algunos
se suele reclutar una sola unidad motora con una músculos suprayacentes e infrayacentes, para poder
frecuencia de descarga de 5 a 10 Hz y con un ritmo hacer una valoración topográfica. En los procesos
relativamente irregular (frecuencia de comienzo). generalizados, se recomienda explorar músculos
La frecuencia de reclutamiento es la frecuencia proximales y distales pertenecientes a extremidades
de descarga de esta unidad motora cuando, al seguir superiores e inferiores y, en determinados casos,
aumentando la fuerza de contracción, se recluta músculos cefálicos y paravertebrales.
la unidad siguiente. Estos dos parámetros se sue-
len registrar en unas 10 unidades motoras. En el Análisis del patrón voluntario con esfuerzo leve (análisis
músculo normal, la frecuencia de comienzo media de potenciales de unidad motora)
oscila entre 5 y 12 Hz, mientras que la frecuencia
de reclutamiento oscila entre 7 y 20 Hz. Estos valo- El método clásico de Buchthal(8,13) se basa en
res se elevan en las enfermedades neurógenas y en el registro con electrodo concéntrico de 20 ó más
las miopatías, especialmente en estas últimas. Otra potenciales de unidad motora, en los que se miden
forma de obtener el reclutamiento es calculando la manualmente la amplitud, duración y número de
ratio entre la frecuencia de la unidad motora más fases. Los valores obtenidos se comparan con los
rápida en ese momento y el número de unidades valores de referencia coleccionados por esta escuela
motoras que están descargando en un momento a lo largo de varios años (Tabla III). En ellos se
dado. En el músculo normal este valor es menor de especifican las características de los filtros (2-2.000
5. En los procesos neurógenos aumenta (ratio > 6) y Hz), la ganancia de los amplificadores (50-200 μV),
en las miopatías suele disminuir (ratio de 1-2,5). la velocidad de barrido del registro (1 ms/mm) y

Manual EMG.indb 124 9/7/07 12:06:03


Análisis de la actividad muscular voluntaria 125

TABLA III. Duración media de los potenciales de unidad motora en diferentes músculos según la edad (modificada de Buchthal y Rosenfalck)(10)
Edad (años) Deltoides Bíceps braquial Tríceps braquial Tibial anterior Peroneo Gastrocnemio

0-4 7,9 - 10-1 6,4 - 8,2 7,2 - 9,3 8,0 - 10,2 6,8 - 7,4 6,4 - 8,2
5-9 8,0 - 10,8 6,5 - 8,8 7,3 - 9,9 8,1 - 11,0 5,9 - 7,9 6,5 - 8,8
10 - 14 8,1 - 11,2 6,6 - 9,1 7,5 - 10,3 8,2 - 11,3 5,9 - 8,2 6,6 - 9,1
15 - 19 8,6 - 12,2 7,0 - 9,9 7,9 - 11,2 8,7 - 12,3 6,3 - 8,9 7,0 - 9,9
20 - 29 9,5 - 13,2 7,7 - 10,7 8,7 - 12,1 9,6 - 13,3 6,9 - 9,6 7,7 - 10,7
30 - 39 11,1 - 14,9 9,0 - 12,1 10,2 - 13,7 11,2 - 15,1 8,1 - 10,9 9,0 - 12,1
40 - 49 11,8 - 15,7 9,6 - 12,8 10,9 - 14,5 11,9 - 15,9 8,6 - 11,5 9,6 - 12,8
50 - 59 12,8 - 16,7 10,4 - 13,6 11,8 - 15,4 12,9 - 16,9 9,4 - 12,2 10,4 - 13,6
60 - 69 13,3 - 17,3 10,8 - 14,1 12,2 - 15,9 13,4 - 17,5 9,7 - 12,7 10,8 - 14,1
70 - 79 13,7 - 17,7 11,1 - 14,4 12,5 - 16,3 13,8 - 17,9 10,0 - 13,0 11,1 - 14,4

otras condiciones del registro. Tan sólo los criterios Se registra la actividad electromiográfica a
de comienzo y final de los potenciales no están un 5-10% y a un 30-40% aproximadamente del
cuantitativamente definidos. máximo esfuerzo, en una zona donde los PUMs
Es uno de los métodos más útiles en la distin- suenen cercanos. Se recomienda coleccionar unos
ción entre procesos neuropáticos y miopáticos y 30 PUMs, pues probablemente algunos serán
en su monitorización y seguimiento en el tiempo. rechazados en el proceso de edición. Para ello
Requiere cierto tiempo y experiencia, pero es una suelen ser suficientes 2-3 inserciones en la piel,
técnica utilizada con frecuencia en muchos labora- registrando en diferentes niveles del músculo en
torios. La aplicación del trigger y la línea de retraso cada una de ellas.
facilitó la adquisición, análisis y procesamiento de Los parámetros valorados con mayor frecuencia
los PUMs, ahorrando tiempo y mejorando la re- son: duración, medida como comienzo y final de
producibilidad de los resultados. los puntos en los que la señal cambia, al menos,
El desarrollo de programas informáticos es- 20 μV respecto a la línea de base; la amplitud se
pecíficos ha aportado nuevos métodos de análisis expresa como la distancia pico-pico en μV; el área
de los potenciales de unidad motora que en algu- se calcula por el programa mediante integración
nos casos son refinamientos computarizados del de la señal rectificada; el grosor es la razón área
método original. Uno de los más frecuentemente /amplitud; las fases se definen como dos cruces
utilizados es el análisis de múltiples PUMs (mul- sobre la línea de base de 20 ó más μV de amplitud;
ti Motor Unit Potential Analysis, multi-MUPA). los giros son los puntos de cambio de dirección de
Es una técnica muy reciente desarrollada casi si- la señal separados del anterior y del siguiente por
multáneamente por Stålberg(14) y Nandedkar(15). una amplitud igual o mayor de 100 μV; la frecuen-
Mediante la técnica de la plantilla, el programa cia de descarga se expresa habitualmente como el
informático identifica PUMs aislados, hasta 4 ó 5 valor medio de la frecuencia instantánea.
simultáneamente (Fig. 6). Para ello realiza una Este método tiene la ventaja de ser rápido,
descomposición parcial del trazado focalizada en reproducible e independiente de la ganancia del
la identificación de PUMs discretos, por lo que es amplificador, si bien la promediación puede al-
más rápido que los métodos de descomposición terar la morfología de los potenciales inestables
completa. La denominación del método obedece y hacer un cierto sesgo de selección hacia los
al hecho de poder registrar varios potenciales de potenciales de unidad motora con frecuencias
unidad motora simultáneamente. de activación más altas. Por otra parte, las con-

Manual EMG.indb 125 9/7/07 12:06:03


126 J.M. Fernández Rodríguez, S. Mederer Hengstl

Figura 6. Análisis de multipotenciales de unidad motora. A: normal; B: miopático; C: neuropático.

TABLA IV. Duraciones medias y desviaciones estándar en la técnica del análisis de múltiples potenciales de unidad motora (multi-PUM)
(modificado de Bischoff y cols.)(16)
Grosor ± DE
Músculo Amplitud ± DE Duración ± DE Fases ± DE Área/amplitud

Deltoides 550 ± 110 10,4 ± 1,3 2,98 ± 1,28 1,56 ± 0,22


Bíceps braquial 436 ± 115 9,9 ± 1,4 2,62 ± 0,31 1,46 ± 0,20
Interóseo dorsal 752 ± 247 9,4 ± 1,3 3,13 ± 0,38 1,38 ± 0,22
Vasto lateral 687 ± 239 11,7 ± 1,9 3,04 ± 0,28 1,72 ± 0,23
Tibial anterior 666± 254 11,4 ± 1,2 3,15 ± 0,27 1,67 ± 0,23

diciones del registro, con poca fuerza, propicia cols., aunque la variación con la edad es mucho
la obtención de potenciales de unidad motora menor(16). Se valoran los valores medios de la du-
de unidades de tipo I. Los valores normales no ración de los potenciales de unidad motora (Tabla
difieren significativamente de los de Buchthal y IV) o la presencia de 3 ó más outliers, es decir,

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Análisis de la actividad muscular voluntaria 127

Figura 7. A: patrón interferencial normal. Compárese con el miopático (B) y el neuropático (C).

valores que excedan el 95% de los intervalos de Análisis automatizado del patrón interferencial
confianza(17). Las características de un trazado con esfuerzo
Desde su implantación, hace 10 años, este intenso dependen del número de PUMs que lo
método se ha extendido rápidamente y en la ac- compongan, de su morfología y de su frecuencia de
tualidad se utiliza en muchos laboratorios de elec- descarga. En esencia, hay dos tipos de estudio: en
tromiografía. el dominio de las frecuencias o en el dominio del
tiempo (Tabla V). En el dominio de la frecuencia
Análisis del patrón voluntario con esfuerzo máximo se utilizan técnicas básicas: transformada de Fourier
(patrón interferencial) (Fast Fourier Transform –FFT–) y el espectro de fre-
En condiciones normales, ante un esfuerzo inten- cuencias. En el plano del tiempo la más empleada
so o máximo se reclutan gran cantidad de unidades es el análisis de giros y amplitud (turns/amplitud)
motoras, no se observan espacios isoeléctricos en la lí- que describimos a continuación.
nea de base y los PUMs se interfieren entre sí, lo que El primer método fue ideado y aplicado por
se conoce como patrón interferencial (Fig. 7A). Willison y cols. en la década de 1960(18) para ex-

Manual EMG.indb 127 9/7/07 12:06:04


128 J.M. Fernández Rodríguez, S. Mederer Hengstl

TABLA V. Métodos de análisis automatizado del patrón electromiográfico con esfuerzo voluntario creciente o máximo
Parámetro Significado Medición Automático/manual

Dominio del tiempo


Giros (turns) Forma de los PUMs Nº de giros A
Amplitud Amplitud de los PUMs Amp/giros o envolvente A
Riqueza (fullness) Nº de UM % señal en el trazado A

Dominio de frecuencia
Espectro de banda Forma de los PUMs dB de la señal filtrada A
Espectro de frecuencia Forma de los PUMs FFT A
Cambio de frecuencia Fatiga FFT continua A

tenderse después a otros laboratorios. En esencia, de la amplitud media de los giros. Puesto que un
el método mide el número de giros de la señal peso fijo no supone la misma proporción de fuer-
electromiográfica obtenida durante una unidad de za para todas las personas Fuglsang-Frederiksen y
tiempo y la amplitud media de los giros obtenidos cols.(19,20) propusieron realizar el análisis con una
durante ese tiempo. Un giro se define como un fuerza del 30% de la máxima posible midiéndola
punto de cambio de dirección de la señal electro- con un dinamómetro. Observaron que el rendi-
miográfica separado del anterior y del siguiente por miento diagnóstico del método era muy alto en las
una amplitud de 100 μV o más. miopatías, similar al del análisis de potenciales de
El número de giros aumenta en paralelo con unidad motora y que ambos métodos se comple-
la fuerza ejercida hasta que esta alcanza el 50% mentaban; en algunos casos sólo una de las técni-
del máximo, es decir, depende del número de cas era patológica. Asimismo, comprobaron que el
unidades motoras y de su frecuencia de activa- cociente número de giros/amplitud media era muy
ción. A mayores intensidades de contracción útil para diferenciar entre miopatía y neuropatía: la
muscular se produce interferencia entre los ratio estaba aumentada en el 80% de las miopatías
PUMs y el número de giros crece muy poco o y en cambio muy disminuida en las neuropatías,
permanece constante. La amplitud media tien- esto último debido, sobre todo, a la disminución
de a crecer a medida que aumenta la fuerza de del número de giros.
contracción hasta el 100% de la fuerza máxima
en relación con la mayor amplitud de la señal Giros/amplitud sin estandarización de la fuerza
electromiográfica. Esta técnica se ha desarrollado Basándose en los trabajos anteriores, Stål-
en dos sentidos diferentes, con estandarización berg y cols.(21) han desarrollado una técnica de
de la fuerza de contracción y sin medición de giros/amplitud en la que no se precisa control
la fuerza. de la fuerza realizada. Para ello se registra la
actividad electromiográfi ca de varios sitios del
Giros/amplitud con estandarización de la fuerza músculo (entre 6 y 10), preferiblemente en la
Los trabajos originales de Willison y cols.(18) uti- zona equidistante del punto motor y el tendón. Se
lizando 2 kg para el bíceps y 5 para el cuádriceps hace variar la fuerza de contracción desde poca
demostraron que el número de giros estaba aumen- hasta el máximo, para obtener de 3 a 5 puntos
tado en las miopatías. Posteriormente, observaron en cada sitio. Cada punto representa el análisis
que en la denervación crónica el número de giros automático de una época. Se obtienen entre 20
variaba poco o nada, pero se producía un aumento (como mínimo) y 30 puntos.

Manual EMG.indb 128 9/7/07 12:06:04


Análisis de la actividad muscular voluntaria 129

Figura 8. A: cociente giros/amplitud miopático (polimiositis); B: patrón automático neuropático (esclerosis lateral amiotrófica).

La gráfica resultante muestra la amplitud me- dos giros) que tienen bajo voltaje y corta duración y
dia en la abscisa y el número de giros o turns en por tanto un mayor contenido de altas frecuencias.
la ordenada. En condiciones normales los puntos El rendimiento diagnóstico es excelente(27).
aparecen dispersos dentro de un área determina- Aparte del diagnóstico de las enfermedades neu-
da, que se denomina nube, donde deben caer, al romusculares y su seguimiento, el análisis automá-
menos, el 95% de los obtenidos. Si el 10% (2 de tico se emplea como método de estudio en diversas
20) ó más de los puntos caen fuera de la nube, el situaciones, como fatiga muscular, cefalea tensional,
estudio se considera anormal. Para cada uno de los desuso muscular y valoración del estado muscular
músculos de los que se dispone de valores normales tras la administración de toxina botulínica(28).
se han generado 8 nubes que representan la combi-
nación de 3 variables: sexo, edad y tipo de registro
(electrodo concéntrico o monopolar). ELECTROMIOGRAFÍA ANORMAL
En pacientes con miopatía los puntos caen fue-
ra de la nube en la parte inferior de la gráfica, y Como se ha señalado, en el estudio electromio-
cuando los cambios son debidos a una enfermedad gráfico de un músculo se busca en primer lugar
denervativa los puntos se sitúan por encima de la la actividad espontánea en reposo, si la hubiere, y
nube normal (Fig. 8). luego el patrón voluntario con esfuerzo de contrac-
A fin de conocer de forma más precisa la interfe- ción ligero y máximo. Dado que cada músculo es
rencia entre los PUMs, así como la amplitud y dura- distinto, es muy aconsejable familiarizarse con al-
ción de los segmentos entre los sucesivos giros en el gunos músculos y concentrar en ellos el estudio.
trazado, Nandedkar y cols.(22-26) realizaron estudios de
simulación en la computadora, que les llevó a descri- Electromiografía en los procesos neurógenos
bir la técnica denominada EQUIP (expert quantitati-
ve IP analysis), en la que, además de los parámetros Durante el reposo se detecta casi siempre un
descritos, giros y amplitud media, se incorporan otros grado variable de fibrilación, ondas positivas y des-
nuevos: la actividad, que mide la riqueza del trazado; cargas de alta frecuencia. En las lesiones traumáti-
el centil de mayor amplitud (upper centile amplitude, cas del nervio, esta actividad espontánea aparece
UCA) equivalente a la envolvente tal como la defi- en las tres primeras semanas. En la esclerosis lateral
nen Buchthal y Kamieniecka(13), que representa el amiotrófica y en las radiculopatías, a menudo se
valor de los PUMs más altos; el número de segmen- detectan también potenciales de fasciculación.
tos pequeños (number of small segments, NSS), que En una denervación parcial aguda, los PUMs
mide aquellos segmentos (porción de trazado entre supervivientes tienen una configuración normal

Manual EMG.indb 129 9/7/07 12:06:05


130 J.M. Fernández Rodríguez, S. Mederer Hengstl

pero el patrón voluntario al esfuerzo máximo es otros estables y de gran voltaje. En esta enfermedad
deficitario, en particular cuando la pérdida de uni- es muy característica la aparición de descargas de
dades motoras es mayor del 50% (Fig. 7C). Pero PUMs durante el sueño.
muy pronto se pone en marcha el fenómeno de la En la práctica, no hay un patrón electromiográfi-
reinervación colateral de las fibras desnervadas por co absolutamente característico de ninguna enferme-
parte de brotes axonales procedentes de los axo- dad concreta: es el conjunto de los hallazgos electro-
nes vecinos indemnes. Este proceso, que comienza fisiológicos, incluyendo los estudios de conducción
muy pocos días después de la denervación, da lugar nerviosa, en un contexto clínico preciso, lo que per-
a unidades motoras de gran densidad anatómica mite establecer un determinado diagnóstico.
de fibras cuyo correlato electrofisiológico son los
PUMs de gran voltaje y duración aumentada y, Electromiografía en los procesos miopáticos
lógicamente, el gran aumento de la densidad de
fibras cuando se hace electromiografía de fibra sim- En reposo, en las miopatías graves que causan
ple(29). Cuando los PUMs registrados con electrodo necrosis focal o alteraciones de la membrana sarco-
concéntrico exceden los 6 mV de amplitud se de- lémica (polimiositis, distrofia muscular de Duchen-
nominan PUMs gigantes. Uno de los parámetros ne, etc.) se detectan frecuentemente potenciales
más utilizados es la duración media de los PUMs. de fibrilación, ondas positivas y descargas de alta
Cuando en un proceso neuromuscular de dudosa frecuencia. La presencia de actividad espontánea
filiación se obtienen potenciales de unidad motora abundante es un signo de gravedad de la miopatía.
de duración media mayor de un 20% respecto a Descargas miotónicas abundantes y fácilmente evo-
los valores medios de referencia, en varios mús- cables son indicativas de que se trata de un proceso
culos, con toda seguridad se trata de un proceso miotónico. Sin embargo, las características de las
neurogénico. descargas son similares en todos los procesos mio-
En los procesos crónicos no evolutivos (polio- tónicos. En las glucogenosis (en particular en la
mielitis no descompensadas) o que evolucionan II y III) puede haber descargas miotónicas típicas,
lentamente (siringomielia, enfermedad de Charcot- pero suelen ser poco abundantes y de breve dura-
Marie-Tooth) suele haber poca o ninguna actividad ción. En las miopatías poco agresivas o en remisión,
espontánea y los potenciales de unidad motora per- suele haber poca actividad espontánea o incluso
manecen estables durante largo tiempo. La densidad silencio eléctrico en reposo.
de fibra es muy elevada en estas situaciones. El patrón voluntario en la electromiografía con-
Por el contrario, en los procesos recientes (le- vencional se caracteriza por un trazado de baja
sión del nervio) o agresivos (enfermedad de Werd- amplitud y una gran facilidad de reclutamiento
nig-Hoffmann) suele detectarse una gran cantidad de PUMs que llega a ser fácilmente completo (in-
de fibrilaciones y ondas positivas. En las que evo- terferencial), incluso con esfuerzos moderados en
lucionan lentamente suele registrarse poca fibri- músculos paréticos (Fig. 7B). La baja amplitud del
lación y los PUMs son de gran voltaje y duración trazado se considera secundaria a la pérdida de
aumentada y con buena estabilidad. En las fases de fibras en la unidad motora y a la alteración de la
deterioro agudo aumenta la fibrilación y los PUMs conducción en volumen producida por la fibrosis
se tornan inestables (jiggle). La densidad de fibra y la sustitución grasa.
permanece elevada durante todo el proceso. La duración media de los PUMs está disminui-
En los procesos muy agresivos (enfermedad de da, la amplitud media es baja y hay un aumento
Werdnig-Hoffmann), se entremezclan activamente de la polifasia. Cuando la duración media de los
los fenómenos de denervación/reinervación, dan- PUMs es menor de un 20% respecto a los valores
do lugar a un cuadro mixto con PUMs polifásicos de referencia, en varios músculos, el diagnóstico de
breves e inestables (bloqueos) y, más raramente, miopatía es prácticamente seguro. La disminución

Manual EMG.indb 130 9/7/07 12:06:05


Análisis de la actividad muscular voluntaria 131

de la duración de los PUMs se relaciona con la 8. Buchthal F. An introduction to electromyography. Glyden-


dal: Scandinavian University Books; 1957.
pérdida de fibras musculares, mientras que la re-
9. Buchthal F, Guld C, Rosenfalck P. Action potential para-
ducción de la amplitud es debida a la disminución meters in normal human muscle and their dependence on
del diámetro de las fibras, que generan potenciales physical variables. Acta Physiol Scand 1954; 32: 200-18.
más pequeños. La polifasia es debida a dispersión 10. Buchthal F, Rosenfalck P. Action potential parameters in
de las velocidades de conducción de las fibras mus- different human muscles. Acta Psychiatr Neurol Scand
culares y de los axones reinervantes. 1955; 30: 121-5.
El análisis de giros/amplitud muestra una ten- 11. De Blas G, Fernández-Lorente J, Ortega B. Métodos de
cuantificación de potenciales de unidad motora. Rev Neu-
dencia hacia el lado miopático de la gráfica y a rol 1999; 28: 616-9.
menudo varios puntos fuera de la nube normal 12. Payan J. The blanket principle. A technical note. Muscle
en el cuadrante inferior derecho. Para establecer Nerve 1978; 1: 423-6.
el diagnóstico de miopatía, al menos, dos puntos 13. Buchthal F, Kamieniecka Z. The diagnostic yield of quan-
han de caer en el lado miopático (Fig. 8A). Tan tified electromyographic muscle biopsy in neuromuscular
disorders. Muscle Nerve 1982; 5: 265-80.
sensible o más que el análisis de los PUMs, esta
14. Stålberg E, Falck B, Sonoo M, Stålberg S, Astrom M.
técnica es muy útil por la facilidad de obtención y Multi–MUP EMG analysis – a two year experience with a
por su carácter cuantitativo y reproducible que la quantitative method in daily routine. Electroencephalogr
hace idónea para estudios de seguimiento y moni- Clin Neurophysiol 1995; 97: 145-54.
torización(30). La densidad de fibras está aumentada 15. Nandedkar S, Barkhaus P, Charles A. Multi-motor unit
en las miopatías, debido a la reinervación colateral action potential analysis (MMA). Muscle Nerve 1995; 17:
1155-66.
de las fibras necrosadas, al splitting y a la activación
16. Bischoff C, Stålberg E, Falck B, Edebol Eeg-Olofson K.
de las células satélite; sin embargo, al contrario de Reference values of motor unit action potentials obtained
lo que ocurre en las neuropatías, el MISI (Mean with Multi-MUAP analysis. Muscle Nerve 1994; 17: 842-
Inter Spike Interval) está aumentado(29,31). 51.
17. Stålberg E, Bischoff C, Falck B. Outliers, a way to detect
abnormality in quantitative EMG. Muscle Nerve 1984;
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Manual EMG.indb 131 9/7/07 12:06:05


132 J.M. Fernández Rodríguez, S. Mederer Hengstl

24. Nandedkar S, Sanders DB, Stålberg E. Simulation and and neuropathies Med Biol Eng Comp 1996; 34: 369-
analysis of the electromyographic interference pattern. Part 74.
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Manual EMG.indb 132 9/7/07 12:06:06


Capítulo 12

ELECTROMIOGRAFÍA DE FIBRA AISLADA


A. Cruz Martínez, J. Montero Homs, J. Arpa Gutiérrez

INTRODUCCIÓN 150 x 580 μ, mayor que el diámetro de las fibras


musculares (25-100 μ), lo cual los hace inadecuados
A diferencia de la electromiografía convencional, para el estudio del potencial de una sola fibra. Para
que registra un potencial de acción procedente de las un registro selectivo es imprescindible disponer de
fibras musculares de una unidad motora en un radio electrodos especialmente diseñados. La superficie
aproximado de 0,5 a 2,5 mm, la electromiografía de de registro de este electrodo especial es muy redu-
fibra aislada (EMFA) permite un registro selectivo cida, sólo 25 μ, menor que el diámetro medio de las
del potencial de acción de una fibra muscular aisla- fibras musculares (Fig. 1). Permite que la amplitud
da en un radio de aproximadamente 300 μ(1). del potencial detectado junto a una fibra sea mayor
La electromiografía de fibra aislada aporta una que con un electrodo convencional, y que los po-
información más detallada de la microfisiología tenciales procedentes de fibras musculares distantes
de la unidad motora, y representa un importante sean de pequeña amplitud y escasa definición. El
complemento de las técnicas clásicas de electro- área de registro del electrodo de EMFA es de sólo
miografía con electrodo concéntrico. 270 μ. Su situación lateral, a sólo 3 mm de la punta
La técnica de electromiografía de fibra aislada de la aguja, confiere al registro mayor estabilidad en
fue desarrollada en los años sesenta(2), generalizán- relación a las fibras cuyo potencial se estudia (Fig.
dose su aplicación clínica hace aproximadamente 1). La amplitud de las señales recogidas decrece
dos décadas(1,3). Desde entonces su estudio ha su- rápidamente en función de la distancia que separa
puesto un importante avance en el estudio electrofi- al electrodo de la fibra que genera el potencial,
siológico de las enfermedades neuromusculares, y se de manera que los potenciales de acción son pro-
encuentra al alcance de la mayoría de laboratorios gresivamente menores y peor definidos, con mayor
de electromiografía, debido a las escasas exigencias pendiente (rise-time). La amplitud del potencial de
técnicas necesarias para su realización. Como en una fibra muscular decrece hasta 200 μV cuando
cualquier otra técnica electromiográfica, es impres- la distancia entre ésta y el electrodo es de aproxi-
cindible tener presente que los hallazgos han de madamente 300 μ. La actividad de fibras distantes
analizarse e interpretarse en estrecha correlación contiene más bajas frecuencias que los potenciales
con los resultados del examen neurológico. de fibras próximas al electrodo, lo cual distorsiona
el registro de éstas. En consecuencia, la utilización
de filtros para bajas frecuencias (500 a 1.000 Hz)
REGISTRO DE LOS POTENCIALES DE FIBRA MUSCULAR AISLADA estabiliza la línea de base, hace más selectiva la
detección de los potenciales y evita errores en la
Los electrodos utilizados en la electromiografía determinación de los parámetros de la EMFA. Una
convencional tienen una superficie de registro de línea de retraso (delay) completa las condiciones

Manual EMG.indb 133 9/7/07 12:06:06


134 A. Cruz Martínez, J. Montero Homs, J. Arpa Gutiérrez

NORMAL

Figura 1. Electrodo de electromiografía de fibra aislada de pequeño diá- REINERVACIÓN


metro (25 μ) y situación lateral del área de registro (aproximadamente
270 μ), superpuesto sobre una sección muscular que muestra en blanco
la distribución normal de las fibras pertenecientes a una unidad motora.
Las fibras de esta se encuentran dispersas, aisladas y separadas por fibras
pertenecientes a otras unidades motoras, confluyendo ocasionalmente dos
fibras y excepcionalmente tres (Reproducido de Stålberg y Trontelj, 1994).

técnicas imprescindibles para el estudio, ya que per-


mite disparar el osciloscopio mediante la pendiente
positivo-negativa del potencial de una fibra mus-
Figura 2. Esquema que simula el estudio de electromiografía de fibra ais-
cular, el cual puede mantenerse en una posición lada en un músculo normal (arriba) donde se registra el potencial de una o
constante en las sucesivas descargas, permitiendo dos fibras pertenecientes a la misma unidad motora, y en un músculo con
el análisis del comportamiento y relación entre sí fenómenos de reinervación colateral y agrupamientos de fibras, donde se
de una, dos o más fibras pertenecientes a la misma obtienen potenciales de grupos de fibras (en este caso 4). Los registros de
10 descargas consecutivas superpuestas permiten observar el jitter normal
unidad motora (Fig. 2).
(arriba) o aumentado en dos de los potenciales del músculo reinervado. En
El potencial de fibra muscular, registrado otro tipo de registro de la reinervación (cascada de 5 descargas) se pueden
mediante los dispositivos técnicos brevemente ver con más precisión bloqueos del impulso. Los círculos llenos (en negro)
expuestos, y con el electrodo en posición óptima expresan teóricamente aquellas fibras cuyo potencial se registra.
junto a una fibra, dura aproximadamente 1 ms;
es bifásico, de comienzo positivo y la duración
de la pendiente positivo-negativa, que guarda Cualquiera de los músculos accesibles a la
relación con la distancia entre el electrodo y la electromiografía convencional puede explorarse
fibra muscular, oscila entre 75 y 200 μs. La mor- mediante las técnicas de EMFA, aunque debido a
fología del potencial es constante en las sucesi- motivos como la facilidad de activación y el ren-
vas descargas y su amplitud, que habitualmente dimiento diagnóstico, músculos como el extensor
varía entre 1 y 7 mV, depende del diámetro de de los dedos, el tibial anterior y el frontal son los
las fibras y de la distancia al electrodo (Fig. 2). que con más frecuencia se utilizan(1). La EMFA se
Los potenciales menores de 200 μv y con pen- realiza durante una activación voluntaria leve, aun-
diente mayor de 300 ms deben ser desechados que más recientemente la técnica por estimulación
para su análisis, de acuerdo con los conceptos eléctrica ha adquirido relevancia en el diagnóstico
expuestos(1,3,4). Considerando los parámetros del de determinados procesos(1,4). El extensor de los
potencial de fibra aislada, los tiempos de barrido dedos es históricamente el primer músculo y el más
del osciloscopio usualmente utilizados oscilan frecuentemente utilizado por su facilidad de activa-
entre 0,2 a 1 ms/división (Figs. 2 y 3). ción y sencillo control de una contracción mínima

Manual EMG.indb 134 9/7/07 12:06:06


Electromiografía de fibra aislada 135

A B C

0,2 ms

0,5 ms

Figura 3. A: paciente de 27 años con miastenia gravis ocular, antes y después de la administración de edrofonio; B: resultado normal de la estimulación
repetitiva, pero con aumento del jitter en frontal; C: electromiografía de fibra aislada por activación voluntaria del extensor de los dedos de un caso
de miastenia gravis. Mujer de 26 años, con forma generalizada de la enfermedad. Aumento del jitter (MCD = 171,6 μs) que puede observarse en dos
tipos diferentes de registro. La amplia variación del intervalo interpotencial se acompaña en ocasiones de la ausencia del segundo potencial (bloqueos
intermitentes del impulso), como expresión de un trastorno más intenso de la transmisión neuromuscular.

que se logra simplemente mediante la extensión del tiempo de transmisión del impulso entre los
parcial del tercer dedo. Sólo la práctica es capaz puntos de estimulación de la fibra nerviosa y el de
de permitir un registro correcto, que comienza por registro del potencial de fibra muscular. La causa
el sonido del potencial de fibra muscular, y con- fundamental reside en la placa motora, y puede
tinúa con la cuidadosa corrección de la posición ser consecuencia de las pequeñas variaciones de
del electrodo, incluidos los movimientos de rota- amplitud y pendiente del potencial de placa y, en
ción, hasta conseguir un potencial de la máxima menor medida, de las diferencias de transmisión
amplitud posible. del impulso a lo largo de la fibra nerviosa y de las
fluctuaciones del umbral de despolarización de la
membrana de la fibra muscular.
PRINCIPALES PARÁMETROS ANALIZADOS Durante el examen clínico, manteniendo una
activación voluntaria leve del músculo que se ex-
Jitter plora, el electrodo de EMFA registra en la ma-
yoría de las inserciones la actividad de una sola
En condiciones experimentales se ha observado fibra muscular (Figs. 1 y 2). Cuando la posición
que cuando se estimula repetidamente una fibra del electrodo permite recoger la actividad de dos o
nerviosa y se registra la respuesta de una sola fi- más fibras musculares de la misma unidad motora
bra muscular, el potencial muestra una latencia (Fig. 2) y uno de estos potenciales se utiliza para
variable(1). Este fenómeno fisiológico se conoce disparar el osciloscopio, se observa una variabilidad
como jitter (variación) y se debe a la variabilidad del intervalo interpotencial en las sucesivas descar-

Manual EMG.indb 135 9/7/07 12:06:07


136 A. Cruz Martínez, J. Montero Homs, J. Arpa Gutiérrez

es garantizar la estabilidad del primer potencial,


que sirve como trigger del osciloscopio (Figs. 2 y 3),
para evitar introducir errores en la determinación
del jitter. Otros cuidados para impedir falsos posi-
tivos se refieren a la exclusión del estudio de falsos
dobles potenciales y de pares de fibras con jitter
bimodal(1) (Fig. 4). En cierto número de registros se
detecta un potencial monofásico positivo junto al
primer potencial de acción, con jitter prolongado,
bloqueos intermitentes del impulso y, finalmente,
bloqueo total cuando aumenta la frecuencia de
inervación. Se asume que este fenómeno se debe
1 mV a un potencial de lesión de la fibra muscular, y
500 μs 0,2 ms por su morfología recuerda a las ondas positivas.
Figura 4. Posibles errores en la cuantificación del jitter, obtenidos en dos
En otros registros (aproximadamente uno de cada
voluntarios clínicamente normales; Izquierda: falso doble potencial con 20) puede observarse una doble distribución del
segundo potencial monofásico positivo, originado posiblemente por lesión intervalo interpotencial, especialmente cuando
de la fibra muscular, que presenta aumento del jitter y bloqueos; puede dicho intervalo es menor de 1 ms.
observarse que el bloqueo es total en las descargas de la parte superior
El jitter también puede estudiarse por estimu-
del registro; Derecha: Jitter bimodal.
lación eléctrica intramuscular de axones motores
mediante un electrodo monopolar(1,4-7). La técni-
gas, de modo que uno de los potenciales aparece ca se ha descrito en el extensor de los dedos y en
en el osciloscopio con un retraso variable respecto músculos faciales; está especialmente indicada en
del otro (Figs. 2 y 3). Esta variabilidad al azar del niños –que difícilmente prestan colaboración–, en
intervalo interpotencial es el jitter, fenómeno fisio- pacientes con dificultad para mantener una activa-
lógico que, en última instancia, expresa el factor ción voluntaria constante y regular (temblor, debi-
de seguridad de la placa motora(1,3), de manera que lidad y/o fatigabilidad graves, trastornos de concien-
aumenta en aquellos procesos, como la miastenia cia), y cuando se desea estudiar la relación entre
gravis en que dicho factor de seguridad es menor de frecuencia de inervación y jitter y los efectos de la
lo normal(1,4,5) (Figs. 2 y 3). Cuando el trastorno de administración de fármacos (Fig. 5). La frecuencia
transmisión neuromuscular es más grave, el impul- de estimulación se sitúa, habitualmente, en 10 Hz,
so nervioso es insuficiente para alcanzar el umbral que equivale aproximadamente a una activación
de la membrana postsináptica, y no se desencadena voluntaria leve. Los valores del jitter por estimula-
el potencial de acción de la fibra muscular. La ex- ción son ligeramente menores que los obtenidos
presión en el estudio de EMFA es la presencia de por activación voluntaria(6,7).
bloqueos intermitentes del impulso (Fig. 3). El jitter puede expresarse matemáticamente.
Usualmente el jitter se determina durante una Para su cálculo se han propuesto diversos métodos,
activación voluntaria leve del músculo que se ex- como la desviación estándar del valor medio del
plora, lo cual requiere la cooperación del paciente. intervalo interpotencial o la media aritmética de
Este método (activación voluntaria) presenta menos las diferencias consecutivas del intervalo interpo-
problemas técnicos que el jitter por estimulación. tencial (MCD, en sus siglas inglesas). Este último
La activación del músculo debe ser lo más regular es el método más utilizado y el valor del jitter se
posible. Se considera que una contracción leve- expresa en microsegundos(1,3,4).
moderada equivale a una frecuencia de activación Para la medida del jitter se han desarrollado
aproximada de 10 Hz(1). Un cuidado indispensable diversas técnicas: análisis por ordenador, por mi-

Manual EMG.indb 136 9/7/07 12:06:07


Electromiografía de fibra aislada 137

que con el sistema de cuantificación. No debe ol-


A
vidarse que el estudio del jitter no puede ser total-
mente automático, puesto que el electromiografista
es quien selecciona la señal y su calidad antes de
aceptarla para su análisis(4). Se han descrito más va-
riaciones en los resultados obtenidos por diferentes
electromiografistas empleando la misma técnica,
que entre los cálculos del mismo electromiografista
usando diferentes equipos y técnicas(4).
El estudio de un músculo debe incluir, al me-
B
nos, los resultados de 20 placas y expresar los si-
guientes parámetros: valor medio de los MCD de
todas las placas medidas (jitter medio); y el porcen-
taje de placas con bloqueos del impulso y porcen-
taje de placas con jitter anormal para los valores de
los músculos que se examinan (jitter individual).
Debido a la distribución no gaussiana del jitter,
los límites de normalidad se calculan con el valor
medio ±3 DE(1). El jitter obtenido por estimulación
axonal es menor que el calculado por activación
voluntaria, con una relación aproximada entre uno
y otro que responde a la fórmula(4,6):
MCD medio (estimulación axonal) =
Figura 5. Miastenia gravis ocular. Jitter por microestimulación axonal MCD medio (activación voluntaria)
del facial registrando en el músculo frontal; A: ejemplo de una muestra √2
de dos fibras, una de ellas con jitter aumentado y bloqueos; B: análisis
automático e histograma del jitter de más de 20 fibras, previo y posterior a
Bromberg y cols. (1994)(8) han publicado una
la administración intramuscular de prostigmina. Obsérvese que la mejoría recopilación de los límites de normalidad del jitter
del jitter se manifiesta, fundamentalmente, en fibras con escaso aumento para diferentes músculos. La Tabla I resume los
previo a la administración del fármaco(5). límites de normalidad en los músculos más fre-
cuentemente explorados. Puede observarse que el
croprocesador (jitter-meter) y por superposición jitter, como tantos otros parámetros electrofisioló-
fotográfica (Figs. 2 y 3), que mide un número li- gicos, presenta cambios en relación con la edad, y
mitado de descargas (habitualmente 50), y aporta aumenta ligeramente con el envejecimiento.
una aproximación precisa y rápida a los valores El estudio se considera anormal cuando el jit-
obtenidos por métodos computarizados(1,4). Pres- ter medio excede los valores límites normales, o
cindimos de hacer una descripción detallada de cuando más de un 10% de placas presentan jitter
cada método, puesto que los modernos equipos de aumentado.
electromiografía permiten el análisis automático,
trazan los histogramas de los valores de MCD y Densidad de fibras
señalan la incidencia de bloqueos del impulso (Fig.
5). En principio, cualquier método de medida es Contando el número de fibras musculares de
aceptable, incluyendo la determinación manual, una unidad motora dentro del área de registro de
rápida y sencilla, por superposición fotográfica. La 270 μ, para cada una de 20 posiciones diferentes
fiabilidad de los resultados se relaciona más con la del electrodo se puede calcular el valor medio de
experiencia y habilidad de quien realiza el examen, la densidad de fibras (DF)(1) (Figs. 1 y 2). El elec-

Manual EMG.indb 137 9/7/07 12:06:08


138 A. Cruz Martínez, J. Montero Homs, J. Arpa Gutiérrez

TABLA I. Límites de la normalidad del jitter individual y medio (en μs) y de la densidad de fibras de la unidad motora en los músculos más
frecuentemente explorados (faciales, extensor de los dedos y tibial anterior), según diferentes autores y grupos de edad
Límite normal Límite normal
Referencia Músculo Edad (jitter individual) (jitter medio)

JITTER (Activación voluntaria) (μs)


Stålberg y Trontelj, 1994 ED 10-70 55,0
Tibial anterior 10-70 75,0
Frontal 10-70 45,0
Bromberg y cols., 1994 ED 20-60 51,7 35,5
70-90 61,6 39,2
Tibial anterior 20-60 77,7 48,7
70-90 67,2 45,7
Frontal 20-60 55,2 36,2
Datos propios ED 10-61 59,0 39,5
Frontal 20-67 49,7 30,8

JITTER (Estimulación) (μs)


Trontelj y cols., 1986, 1988 ED 17-39 40,0 25,0
Orbicular del párpado 17-39 30,0 20,0

Edades y límites de la normalidad


Referencia Músculo 20-40 40-60 60-80 80-90

Densidad de fibras (por área de registro)


Stålberg y Trontelj, 1994 ED 1,72 1,79 2,01 2,84
Bromberg y cols., 1994 ED 1,79 1,86 2,05 2,40
Tibial anterior 1,95 2,00 2,11 2,26
Datos propios ED 1,65 1,68 1,80 2,30
Tibial anterior 1,70 2,11
ED: extensor de los dedos.

trodo es insertado perpendicularmente al azar, y en el 60 a 70% de los puntos explorados, los po-
mediante pequeñas correcciones de su posición, tenciales correspondientes a dos fibras en el 30
que incluyen la rotación, se puede conseguir la a 35% y, raramente, la actividad perteneciente a
máxima amplitud del potencial de acción de tres fibras. Para 20 diferentes posiciones del elec-
una fibra muscular. Se cuentan entonces, para trodo, que habitualmente se consiguen a distintas
una misma posición, el número de potenciales profundidades del músculo mediante tres a cinco
de fibra muscular que baten sincronizados con inserciones, la media es de aproximadamente 1,45
el potencial que sirve de trigger del osciloscopio. fibras por área de registro del electrodo (Figs. 1 y
Sólo se valoran los potenciales de, al menos, 200 2), aunque existen pequeñas variaciones de unos
μV de amplitud, una pendiente menor de 300 μs músculos a otros.
y morfología constante. En el músculo normal se La técnica de la densidad de fibras permite
obtiene el potencial de sólo una fibra muscular averiguar la disposición de las fibras musculares

Manual EMG.indb 138 9/7/07 12:06:08


Electromiografía de fibra aislada 139

1 mV
2 ms

Figura 7. Registro de electromiografía de fibra aislada en el extensor de


los dedos de un paciente de 10 años con enfermedad de Duchenne. Po-
Figura 6. Esquema de reinervación colateral, donde una fibra neoformada tenciales complejos (densidad de fibras: 3,15) estables, de larga duración,
en el punto A de un axón subterminal, reinerva tres fibras musculares con incremento del MISI.
próximas previamente desnervadas. El axón inmaduro neoformado puede
sufrir bloqueos del impulso en algún punto entre A y B, dando lugar a “blo-
queos neurógenos” de un grupo de fibras. En el recuadro superior derecho
se ilustra esta posibilidad, mostrando un potencial complejo (aumento de que los cambios en los parámetros del potencial
la densidad de fibras) registrado mediante electrodo de electromiografía de unidad motora(1).
de fibra aislada en el extensor de los dedos de un enfermo de 52 años con La unidad motora se va remodelando con la
ELA de 1 año de evolución. Obsérvese en 2 de los 4 barridos el bloqueo edad, según expresa el progresivo aumento de la
simultáneo de un grupo de 3 fibras (bloqueo neurógeno).
densidad de fibras(1,4), particularmente a partir de
la octava década. La Tabla I resume los límites de
de la unidad motora, delimitando su arquitectura normalidad en diferentes músculos para grupos
en condiciones normales y patológicas. El mapa de distintas edades. Valores que exceden la media
histoquímico de la unidad motora en trabajos ± 2 DE se consideran anormales.
experimentales(9) y el estudio de la densidad de
fibras, mediante técnicas de electromiografía de Estimación de la duración de potenciales complejos
fibra aislada, han determinado que las fibras de
la unidad motora se encuentran dispersas y en- La duración de los potenciales complejos (más
trelazadas con fibras pertenecientes a otra unidad de una fibra) (Fig. 7) se determina desde la intersec-
motora, aunque en algunos puntos confluyen dos ción con la línea de base del primer potencial hasta
y, raramente, tres fibras (Fig. 1). En el músculo el mismo punto del último potencial del complejo.
normal no existe, pues, evidencia de agrupamien- Habitualmente, en el músculo normal no excede
tos(1,2,9), en contradicción con la teoría inicial de de 4 ms en la mayoría de los registros(1).
la subunidad motora de la electromiografía clási- Más expresiva resulta la media del cociente en-
ca, que sugería la existencia de áreas con agrupa- tre la duración del potencial complejo y el número
mientos de fibras de la misma unidad motora(10). de intervalos entre ellos (número de componentes
La arquitectura de la unidad motora se modifica, menos uno). Este parámetro, conocido como MISI
entre otros, en los procesos neurógenos, donde (Mean Inter Spike Interval), es de especial interés
se observan agrupamientos de fibras como con- en el estudio de las miopatías y en los estadios tem-
secuencia de fenómenos de reinervación colate- pranos de la reinervación. Los valores normales de-
ral(1,4,5) (Figs. 2 y 6). El aumento de la densidad de terminados en el extensor de los dedos oscilan entre
fibras es más precoz en los procesos neurógenos 0,64 ± 0,30 ms(1) y 0,66 ± 0,40 ms (datos propios).

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generalmente, a una distancia standard de 5 cm del


electrodo estimulador, y se manipula hasta obtener
un potencial bien definido. Si es necesario se dismi-
nuye la intensidad del estímulo hasta lograr que no
interfieran entre sí los potenciales de las diferentes
fibras musculares que constituyen el complejo que
se registra, y sobre todo, para conseguir que el co-
mienzo de cada potencial sea claro. El procedimien-
to se repite a diferentes profundidades en distintas
áreas del músculo, midiendo el tiempo de latencia
de un número variable de fibras (frecuentemente
entre 25 y 50). La velocidad de conducción de la
fibra muscular se expresa como media ± DE del
total de fibras musculares estudiadas en cada caso.
La VCFM calculada en 1.137 fibras musculares del
bíceps braquial en 30 adultos normales es de 3,51
± 0,53 m/s. La VCFM media de 723 fibras en 20
Figura 8. Histograma de la velocidad de conducción de la fibra muscular niños (edad media 9,8 ± 2,28, rango = 5-14 años) es
(VCFM) de 508 fibras de 14 pacientes con enfermedad de Duchenne y de algo menor: 3,24 ± 0,53 m/s (datos propios).
723 fibras en 20 niños normales. La VCFM muestra una distribución bimo- Los resultados, tal como hemos comentado en
dal en la enfermedad de Duchenne –perdiendo la distribución gaussiana
normal–, un aumento de la variabilidad de conducción y un incremento
el estudio del jitter, pueden expresarse en forma de
del porcentaje de fibras de lenta conducción, posiblemente debido a la histogramas (Fig. 8) para apreciar mejor la distri-
lenta transmisión del impulso a lo largo de fibras atróficas(12). bución de los valores de la VCFM. Esta distribu-
ción, gaussiana en la población normal, se pierde
en diferentes enfermedades, entre ellas la distrofia
Conducción de la fibra muscular in situ muscular (Fig. 8). La técnica de VCFM puede ser
utilizada como test funcional y como índice del
Uno de los diferentes métodos para el cálculo diámetro de las fibras musculares(11,12).
de la velocidad de conducción de la fibra muscu- El estudio de la VCFM mediante técnicas de
lar (VCFM) registrando los potenciales de acción electromiografía de fibra aislada es todavía poco
de las fibras musculares mediante electrodos de habitual en los laboratorios de electrofisiología. Sin
electromiografía de fibra aislada fue publicado por embargo, es un método sencillo, reproducible, oca-
Troni y cols. en 1983(11). El método es sencillo y siona escasas molestias al enfermo y puede aportar
reproducible, incluso en niños normales o con pa- información de interés que explique parte de los
tología neuromuscular(12). Las fibras musculares son hallazgos de la electromiografía en determinadas
estimuladas directamente, mediante un electrodo enfermedades.
monopolar insertado en posición perpendicular
en la porción distal del músculo, habitualmente
la porción corta del bíceps braquial. La inserción APLICACIONES CLÍNICAS DE LA ELECTROMIOGRAFÍA
se realiza lo más alejada posible de la región de DE FIBRA AISLADA
la placa motora. Los estímulos, de breve duración
(0,1-0,2 ms a 1 Hz), se aumentan progresivamen- Procesos que cursan con denervación-reinervación
te de intensidad hasta que provocan una pequeña
contracción muscular visible. El electrodo de elec- La fatigabilidad en las neuropatías es un fenó-
tromiografía de fibra aislada se inserta en esta zona, meno bien conocido y se ha descrito electrofisio-

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Electromiografía de fibra aislada 141

lógicamente mediante técnicas convencionales Los potenciales complejos registrados durante


de electromiografía y estimulación repetitiva en un proceso de reinervación suelen mostrar una
procesos como la esclerosis lateral amiotrófica y la marcada inestabilidad, con aumento del jitter y
poliomielitis(1,5). Incluso se han descrito respuestas bloqueos del impulso (Fig. 2). Los potenciales
a la estimulación repetitiva a bajas frecuencias si- inestables son la expresión de fases iniciales de la
milares a las de la miastenia gravis(5). El estudio de regeneración de fibras nerviosas (traumatismo de
la electromiografía de fibra aislada ilustra éstos y nervios, neuropatías axonales), o de fenómenos
otros aspectos de la unidad motora en los procesos de denervación-reinervación en los procesos de
que cursan con denervación y reinervación. neurona motora (por ejemplo, la esclerosis lateral
Debido a lesiones axonales del nervio o como amiotrófica) (Fig. 6). Los bloqueos que afectan
consecuencia de procesos como la enfermedad de simultáneamente a un grupo de dos o más fibras
la neurona motora inferior, se instauran fenóme- pueden tener su origen en una ramilla nerviosa
nos de reinervación colateral de fibras musculares colateral (bloqueos neurógenos)(1) (Fig. 6). Cuando
denervadas (Fig. 6). Es entonces cuando, mediante los bloqueos afectan a potenciales aislados (Fig. 2)
el estudio de electromiografía de fibra aislada, se es difícil determinar si el fallo de transmisión neu-
pueden registrar potenciales complejos de varias romuscular reside en la rama nerviosa o en la placa
fibras (3 a 10 o incluso más), por área de registro motora, ambas inmaduras anatómica y fisiológica-
(Figs. 2 y 6). En consecuencia, la densidad de fi- mente. En los procesos neurógenos no progresivos
bras aumenta, lo que indica que existe un mayor (traumatismos del nervio o axonopatías regenera-
número de fibras musculares de la unidad motora das) los potenciales complejos de la electromiogra-
por área de registro del electrodo. fía de fibra aislada devienen progresivamente más
Habitualmente, el aumento de la densidad de estables, como consecuencia de la maduración del
fibras es un signo de reinervación y se expresa en la nervio y la placa, pero permanece para siempre un
electromiografía convencional como potenciales de aumento de la densidad de fibras(1,4,5).
unidad motora polifásicos y, cuando su sincroniza- El estudio de EMFA permite diseñar la ar-
ción mejora, como potenciales de unidad motora de quitectura de la unidad motora en función de la
amplitud aumentada. El aumento de la densidad de evolución de las enfermedades de la neurona mo-
fibras se corresponde con los agrupamientos de tipos tora. Un aumento leve del jitter, y en ocasiones,
de fibras (Fig. 2) observados en la biopsia de múscu- de la densidad de fibras, se pueden observar en las
lo y con el aumento de la relación de la inervación fases iniciales de la esclerosis lateral amiotrófica,
terminal(5). Normalmente, un axón subterminal iner- en músculos clínicamente normales, de manera
va una fibra muscular, raramente dos, mientras que que la electromiografía de fibra aislada puede ser
en los casos de reinervación colateral, un solo axón la técnica idónea para el diagnóstico precoz de la
puede llegar a inervar hasta 19 fibras musculares. generalización del proceso. La precocidad de los
El aumento de la densidad de fibras también puede trastornos de transmisión neuromuscular (aumen-
ser un signo precoz de neuropatía, incluso antes de to del jitter) detectados mediante la EMFA en la
registrar actividad de denervación y cambios en el ELA, sugiere que no siempre son consecuencia de
reclutamiento y en los parámetros de los potenciales la reinervación. En este sentido, estudios ultraes-
de unidad motora(1). También la densidad de fibras tructurales han confirmado la importancia de los
patológica antecede en los estudios experimentales factores tróficos de la motoneurona sobre la placa
a los agrupamientos de tipos de fibras de la biopsia motora en los estadios iniciales del proceso(5). Los
de músculo, ya que el cambio de tipo histoquímico potenciales son más complejos e inestables con-
de las fibras reinervadas es un fenómeno más lento. forme avanza la enfermedad, y pueden encontrar-
Así pues, la densidad de fibras es un índice fiel de la se potenciales complejos de 5-15 fibras (Fig. 6),
remodelación de la unidad motora. con marcado aumento de la densidad de fibras

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por reinervación colateral, que corresponden a los El interés de la EMFA en las neuropatías peri-
potenciales gigantes de la electromiografía conven- féricas reside en la cuantificación del posible daño
cional(1). En los músculos que se encuentran ya axonal secundario en las neuropatías desmielini-
en un estadio muy avanzado de atrofia, las escasas zantes, y en determinar el carácter primario axonal
unidades motoras supervivientes van perdiendo en otros procesos. Los resultados publicados con
progresivamente fibras musculares, de modo que aumento de la densidad de fibras y del jitter, sugie-
la densidad de fibras disminuye, pero persiste la ren el carácter axonal de las neuropatías etílica y
marcada inestabilidad de la transmisión del im- diabética(1,4,5), con particular afectación de extremi-
pulso. Esta situación se correlaciona bien con los dades inferiores y anomalías de la electromiografía
pequeños potenciales polifásicos, inestables, que de fibra aislada, en ausencia de signos clínicos de
muestra la electromiografía en las fases terminales, neuropatía. La densidad de fibras es mayor en la
previas a la denervación total del músculo(5). Otras neuropatía motora y sensitiva hereditaria tipo II que
atrofias espinales progresivas cursan también con en la tipo I, aunque en ésta también se establece
aumento de la densidad de fibras, pero los comple- una remodelación de la unidad motora. Asimis-
jos son más estables que en la ELA. En las formas mo, algunos casos de síndrome de Guillain-Barré
de evolución más lenta, como la enfermedad de muestran un importante incremento de la densi-
Kugelberg-Welander, la densidad de fibras es ma- dad de fibras y complejos inestables en la fase de
yor que en la ELA, y los complejos registrados más recuperación, compatibles con lesiones axonales
estables, debido a que las unidades motoras sobre- en reinervación(1,4,5).
viven más tiempo y pueden ser de larga duración,
quizá debido a la lenta transmisión del impulso a Enfermedades de la unión neuromuscular
lo largo de fibras musculares atróficas(1,5).
La EMFA en los pacientes con secuelas de La EMFA, que permite estudiar in situ la fun-
poliomielitis muestra un aumento de la densidad ción de las placas motoras, mejora el rendimiento
de fibras en músculos aparentemente normales, lo diagnóstico en las enfermedades de la unión neu-
cual confirma que la denervación fue más difusa romuscular. Esto es cierto, fundamentalmente, en
de lo que hace sospechar el examen clínico. Una la miastenia gravis.
serie de enfermos con secuelas de la enfermedad Sólo apuntamos brevemente en algunos as-
refiere una lenta y tardía progresión de la debilidad pectos de la electromiografía de fibra aislada en
muscular. El problema del deterioro tardío en la los bloqueos presinápticos y postsinápticos de la
poliomielitis dista de estar resuelto. La electromio- transmisión neuromuscular, ya que estos procesos
grafía de fibra aislada ha puesto de manifiesto que se estudian con mayor detalle en otro capítulo del
los fenómenos de denervación-reinervación con Manual.
aumento del jitter y bloqueos del impulso parecen
constantes a lo largo de la evolución de estos enfer- Miastenia gravis
mos. En algunos casos con síndrome de debilidad Nuestra revisión y seguimiento en 100 casos
tardía se ha observado una mayor incidencia de pla- de miastenia gravis(5) nos han permitido establecer
cas con aumento del jitter y bloqueos del impulso, algunas conclusiones sobre la electrofisiología de
con aumento de la inestabilidad de los complejos, la enfermedad.
lo cual puede expresar el fracaso progresivo de las – El aumento del jitter (Fig. 3) posee un rendi-
unidades motoras supervivientes. El estudio del miento diagnóstico superior al de las técnicas
jitter por estimulación ha sugerido que el bloqueo de estimulación repetitiva. Esto es así, porque
de colaterales inmaduras y el agotamiento de los sólo cuando un 15% o más de placas presentan
depósitos de acetilcolina son más intensos en los bloqueos del impulso se observa un decremento
casos de evolución más prolongada(5). del potencial de acción muscular por estimula-

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Electromiografía de fibra aislada 143

ción repetitiva del nervio. Las formas más leves, ción. Los resultados del estudio de la densidad
con sólo un moderado incremento del jitter, de fibras guardan una buena correlación con los
carecen de expresividad con otras técnicas elec- signos de denervación en la biopsia de músculo,
trofisológicas. los agrupamientos de tipos de fibras, y con el in-
– El jitter puede detectar trastornos subclínicos cremento de la relación de inervación terminal
de la transmisión neuromuscular; es, por con- que se observa en los casos de miastenia gravis
siguiente, el método idóneo para determinar de larga evolución.
la generalización subclínica del proceso en las – La electromiografía de fibra aislada es un mé-
formas oculares de la enfermedad. todo objetivo para valorar la eficacia del trata-
– La activación prolongada y la mayor frecuencia miento (Fig. 5). Los resultados guardan buena
de inervación (jitter por activación voluntaria), correlación con la evolución clínica post-me-
así como la estimulación a frecuencias más altas dicación o post-timectomía.
(jitter por estimulación), conllevan un mayor – El aumento del jitter es el parámetro más sensi-
trastorno de la transmisión neuromuscular (au- ble para diagnosticar el trastorno de transmisión
mento del jitter y mayor incidencia de bloqueos neuromuscular, mientras que los bloqueos del
del impulso). impulso serían los causantes de la debilidad
– Los trastornos de la transmisión neuromuscular muscular. En este sentido, resulta demostrati-
afectan de modo desigual a placas pertenecien- va la existencia de un aumento subclínico del
tes a la misma unidad motora. jitter, con escasa o nula incidencia de bloqueos,
– Los bloqueos del impulso son más frecuentes en pacientes con miastenia gravis en remisión
cuando el jitter es igual o mayor a 100 μs, y clínica (Fig. 9). En nuestra revisión de 100 ca-
prácticamente constantes cuando los valores sos de miastenia gravis(5) se obtuvo una buena
de MCD superan los 140 μs. Los bloqueos del correlación en las diferentes formas de la enfer-
impulso son excepcionales con cifras de MCD medad (ocular, generalizada leve, generalizada
menores de 80 μs. grave) entre los resultados en músculo extensor
– La exploración de los músculos extensores co- de los dedos y frontal. La afectación facial es
munes de los dedos y un músculo facial (frontal algo más evidente que la del extensor de los
u orbicular del párpado) por activación volun- dedos en las formas ocular y generalizada leve,
taria o por estimulación, suelen ser suficientes al contrario que en la generalizada grave. La
para el diagnóstico de miastenia gravis, inclui- electromiografía de fibra aislada muestra que
das las formas oculares. El rendimiento diag- en algunos casos el proceso es más difuso de lo
nóstico en la musculatura facial es mayor en la que sugiere el examen clínico (Fig. 9).
miastenia gravis ocular. – La electromiografía de fibra aislada muestra
– Existe una correlación significativa entre la de- un trastorno subclínico de transmisión neuro-
bilidad, la fatigabilidad muscular y el aumento muscular en algunos enfermos con timoma, sin
del jitter, y entre la incidencia de placas con evidencia clínica de miastenia gravis(13).
bloqueos del impulso y el aumento del jitter.
La correlación más estrecha se observa entre la Trastornos de la transmisión neuromuscular de origen
debilidad muscular y la incidencia de bloqueos presináptico
del impulso. El síndrome de Eaton-Lambert posee una pa-
– La densidad de fibras puede ser normal en la togenia definida por el hallazgo de anticuerpos
miastenia gravis, pero en conjunto se encuentra dirigidos frente a la parte activa de la membra-
significativamente aumentada, en particular en na presináptica, dificultando la liberación de los
los pacientes que han recibido tratamiento; es quanta de acetilcolina por un impulso nervioso.
mayor cuanto más tiempo han recibido medica- A menudo el proceso se asocia con carcinoma

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144 A. Cruz Martínez, J. Montero Homs, J. Arpa Gutiérrez

Figura 9. Histogramas que representan los resultados del jitter individual sobre el total de placas estudiadas, y de potenciales con (en negro) y sin (en
blanco) bloqueos (Bl) del impulso en extensor de los dedos y en frontal en 100 casos de miastenia gravis. Distribuciones normales (N), 15 casos en remisión
clínica (R), y en las formas ocular (O), generalizada leve (GL) y generalizada grave (GS) de la miastenia gravis (véase texto). Las líneas verticales de puntos
expresan los límites de la normalidad (Reproducido de Cruz Martínez y Montero, 1995).

pulmonar y otras neoplasias, y puede preceder al la frecuencia de inervación (activación voluntaria)


diagnóstico del tumor. La EMFA muestra aumento o con la estimulación de alta frecuencia, tal como
del jitter y bloqueos del impulso, que mejoran con ocurre en otros bloqueos de origen presináptico.

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Electromiografía de fibra aislada 145

1s

0,5 mV

A B C D

Figura 10. Mujer de 55 años con intoxicación botulínica y síntomas de tres semanas de evolución, consistentes en vómitos, disfagia, fotofobia, ptosis
bilateral, oftalmoplejía, midriasis, paresia facial, sequedad de boca, hipotensión ortostática e íleo. Electromiografía de fibra aislada en extensor de los
dedos por activación voluntaria. El aumento del jitter y la incidencia de bloqueos del impulso son mayores a bajas frecuencias (A y B), que a frecuencias
altas de activación (C y D), comportamiento habitual de los bloqueos presinápticos de la unión neuromuscular (Reproducido de Cruz Martínez y Montero,
1995).

La densidad de fibras puede estar aumentada(5), en activación o de estimulación, de manera que


concordancia con la atrofia y el agrupamiento de ambos son menores cuando la frecuencia de ac-
fibras que se observan en la biopsia de músculo, tivación o de estimulación aumentan (Fig. 9), lo
consecuencia de una denervación funcional por cual permite sugerir el origen presináptico del
bloqueo prolongado de las placas motoras o de una trastorno de la transmisión neuromuscular.
neuropatía paraneoplásica(5). Como en otros pro- – Pueden observarse bloqueos del impulso, con
cesos presinápticos, la EMFA no muestra ventajas valores de MCD sólo ligeramente elevados,
tan evidentes respecto a otras técnicas electrofisio- como ocurre en otros bloqueos presinápticos.
lógicas (estimulación única del nervio preejercicio – El seguimiento de los pacientes permite demos-
y postejercicio, estimulación repetitiva). trar que la densidad de fibras experimenta un
La toxina botulínica actúa sobre la terminal progresivo aumento, sugestivo de reinervación
presináptica bloqueando la liberación de acetil- colateral de fibras denervadas, quizá como con-
colina. La EMFA presenta aspectos de interés en secuencia del persistente e importante bloqueo
el botulismo(5,14) que pueden resumirse en: de transmisión. Sin embargo, en las primeras
– Aumento del jitter y bloqueos del impulso en fases de la enfermedad, si los fenómenos de
los músculos clínicamente débiles. bloqueo son muy graves, la densidad de fibras
– El jitter puede ser anormal en casos en los que puede estar disminuida.
sólo se manifiestan con mínimos signos ocula-
res y con resultados normales de otras técnicas Otros procesos
electrofisiológicas. El valor diagnóstico de la EMFA ocupa un lugar
– El jitter y la incidencia de bloqueos del impulso secundario en otros procesos que afectan la unión
muestran una dependencia de la frecuencia de neuromuscular. Un aumento del jitter y bloqueos

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146 A. Cruz Martínez, J. Montero Homs, J. Arpa Gutiérrez

5 ms

2 ms

Figura 11. Síndrome miasténico del canal lento. Niño de 12 años con debilidad de cintura escapular y de los extensores de muñeca y dedos. La doble
respuesta por estimulación única del nervio es un hallazgo descrito en la deficiencia de acetilcolinesterasa y en el síndrome del canal lento (Reproducido
de Cruz Martínez y Montero, 1995).

del impulso se observan en diferentes síndromes los músculos más débiles. El registro de poten-
miasténicos congénitos(5) y en otros no autoinmunes ciales complejos de larga duración con evidente
(picaduras de insectos, agentes tóxicos, como los aumento del MISI (Fig. 7) es un hallazgo habi-
organofosforados), que pueden producir bloqueos tual en la distrofia muscular de Duchenne, y, en
presinápticos y/o postsinápticos de la placa moto- menor cuantía, en las distrofias musculares en
ra. En algunos síndromes miasténicos congénitos, general(1,4,5). El jitter puede ser normal o encon-
como la deficiencia de acetilcolinesterasa y el sín- trarse moderadamente aumentado, en particular
drome del canal lento, la estimulación aislada del en los últimos componentes de potenciales com-
nervio puede aportar resultados más específicos plejos de larga duración. El aumento del jitter,
que el aumento del jitter(5) (Fig. 11). más común en las miotonías, puede deberse a
trastornos de la transmisión del impulso a lo largo
Distrofias musculares de la fibra muscular (enfermedad de Steinert) o
ser consecuencia de trastornos de la función de la
El aumento de la densidad de fibras es un membrana de la placa motora (paramiotonía con-
hallazgo común a los diferentes tipos de distro- génita)(1,4). Jitter disminuido, con valores de MCD
fia muscular. También está presente en la en- menores de 5 ms, puede verse en todos los tipos
fermedad de Steinert. La densidad de fibras se de distrofia muscular. Su origen quizá resida en
encuentra particularmente elevada en la enfer- el registro de los potenciales de dos ramas de una
medad de Duchenne (Fig. 7), especialmente en fibra muscular que se ha bifurcado por partición

Manual EMG.indb 146 9/7/07 12:06:11


Electromiografía de fibra aislada 147

longitudinal (splitting), y que conservan, ambas, ciales satélites, así como el aumento del MISI.
ramas la misma placa motora. Es evidente que la arquitectura de la unidad mo-
El llamativo incremento de la densidad de fi- tora cambia en las miopatías, debido a múltiples
bras, de la duración de los potenciales complejos y factores, como la pérdida de fibras, junto a una
del MISI (Fig. 7) y los trastornos del jitter pueden mezcla de hipertrofia y atrofia de las fibras super-
plantear interrogantes sobre el origen –neurógeno vivientes. La coexistencia de fibras muy atróficas,
o miógeno– de la remodelación de la unidad mo- junto a otras hipertróficas, condiciona una marca-
tora en la distrofia muscular. En el aumento del da variabilidad de la velocidad de propagación del
jitter pueden intervenir varias causas: irregularidad impulso. La pérdida de fibras musculares puede
de la transmisión del impulso a lo largo de fibras ser la causa de los potenciales de unidad motora
musculares en fase de degeneración, trastornos de de duración disminuida, pero cuando la variabi-
transmisión en pequeñas fibras en regeneración, lidad en el diámetro de las fibras es la anomalía
procedentes de células satélites, y fallos de la trans- más relevante, se pueden observar potenciales de
misión en ramas nerviosas neoformadas y en las unidad motora polifásicos y seguidos de satélites,
nuevas placas motoras, como consecuencia de la de muy larga duración, que no reflejan cambios
reinervación de grupos de fibras regeneradas(1). Po- en el número de fibras de la unidad motora. Por
tenciales complejos procedentes de grupos de fibras otra parte, los potenciales de unidad motora de
musculares en regeneración, potenciales complejos amplitud aumentada que pueden registrarse en
pertenecientes a fibras partidas longitudinalmente las distrofias musculares, podrían corresponder a
y activación efáptica de fibras con trastornos locales fibras hipertróficas o a grupos de fibras en rege-
de la excitabilidad pueden explicar el aumento de neración(1,12). De acuerdo con estos resultados, la
la densidad de fibras sin recurrir a la teoría de una remodelación de la unidad motora en las distrofias
compensación neurógena. El origen neurógeno de musculares sería, fundamentalmente, miógena, y
la remodelación de la unidad motora tampoco es el aumento de la densidad de fibras y la variabili-
apoyado por los estudios de la relación de la inerva- dad de hallazgos de la electromiografía convencio-
ción terminal que es normal en la distrofia muscu- nal no suponen necesariamente la existencia de
lar(1,12). La electromiografía convencional también compensación por reinervación colateral. Puede
puede mostrar hallazgos ambiguos, como poten- concluirse que el número total de fibras de la
ciales de unidad motora de amplitud aumentada, unidad motora está aumentado en las neuropatías,
polifásicos de larga duración y, particularmente en agrupándose de forma compacta, mientras que en
la distrofia muscular de Duchenne, potenciales de la distrofia muscular coexisten grupos de fibras en
unidad motora seguidos de componentes tardíos regeneración con zonas donde las fibras muscula-
(satélites) que pueden tener una duración llama- res se han perdido, sin aumento del número total
tivamente larga(12). de fibras de la unidad motora.
La lenta propagación del impulso a lo largo Las miositis, en cambio, cuentan con eviden-
de las fibras musculares atróficas y la marcada cia electrofisiológica e histológica de remodelación
variabilidad de la conducción de unas fibras a neurógena de la unidad motora(1,4,5). La densidad
otras, puestas de manifiesto en los estudios de la de fibras está levemente aumentada en los esta-
velocidad de conducción de fi bras musculares dios iniciales, junto a un incremento del jitter y,
mediante técnicas de EMFA(12) (Fig. 8), son ha- en ocasiones, bloqueos intermitentes, neurógenos.
llazgos relevantes de la enfermedad de Duchen- Conforme evoluciona el proceso, el aumento de
ne, que ayudan a comprender parte de los datos la densidad de fibras es mayor, para estabilizarse
electrofisiológicos en la distrofia muscular. Estos más tarde, cuando la incidencia de jitter patológi-
incluyen la presencia de potenciales de unidad co y de los bloqueos disminuye. La evolución de
motora polifásicos de larga duración y de poten- los parámetros de la EMFA es superponible a los

Manual EMG.indb 147 9/7/07 12:06:12


148 A. Cruz Martínez, J. Montero Homs, J. Arpa Gutiérrez

fenómenos de denervación-reinervación que ante- 3. Stålberg E, Ekstedt J, Broman S. The electromyographic


jitter in normal human muscles. Electroenceph Clin Neu-
riormente hemos expuesto. La denervación puede
rophysiol 1971; 31: 429-38.
ser consecuencia de la lesión de ramillas nerviosas 4. Sanders DB, Stålberg E. AAEM minimonograph # 25:
terminales, o bien corresponder a segmentos de Single-fiber electromyography. Muscle Nerve 1996; 19:
fibras musculares desconectados de las placas mo- 1069-83.
toras por necrosis focal de las fibras. 5. Cruz Martínez A, Montero J. EMG. Fisiopatología de
la transmisión neuromuscular. En: Díez Tejedor E, ed.
Miastenia gravis y síndromes miasténicos. Prous SA, 1995.
Miscelánea p. 17-63.
6. Trontelj JV, Mihelin M, Fernández JM, Stalberg E. Axonal
Las posibles aplicaciones de la EMFA son muy stimulation for end-plate jitter studies. J Neurol Neurosurg
amplias, y abarcan desde el estudio de respuestas Psychiatry 1986; 49: 677-85.
tardías (F, H) al scanning de la unidad motora(1). 7. Trontelj JV, Khuraibet A, Mihelin M. The jitter in
stimulated orbicularis oculi muscle: Technique and
Otras aplicaciones más singulares incluyen el normal values. J Neurol Neurosurg Psychiatry 1988;
estudio de las psicosis, con fenómenos de dener- 51: 814-9.
vación-reinervación de origen no claramente esta- 8. Bromberg MB, Scott DM and Committee of the AAEM
blecido, o de la escoliosis idiopática juvenil, donde single fiber special interest group. “Single fiber EMG refe-
se han descrito leves alteraciones neuromusculares rence values: reformatted in tubular form”. Muscle Nerve
1994; 17: 820-1.
subclínicas generalizadas(1). La electromiografía de
9. Edstrom L, Kugelberg E. Histochemical composition, dis-
fibra aislada también ha mostrado signos de remo- tribution of fibres and fatigability of single motor units. J
delación neurógena de la unidad motora en las Neurol Neurosurg Psychiatry 1968; 31: 424-33.
extremidades afectas de pacientes hemipléjicos, 10. Buchthal F, Guld Ch, Rosenfalck P. Multielectrode study
como posible consecuencia de una disfunción of the territory of a motor unit. Acta Physiol Scand 1957;
39: 83-103.
transináptica de la neurona motora inferior(1,15).
11. Troni W, Cantello R, Rainero I. Conduction velocity
El jitter puede ser anormal en algunos casos along human muscle fibers in situ. Neurology 1983; 33:
englobados en el heterogéneo grupo de procesos 1453-9.
debidos a defectos de la cadena respiratoria mi- 12. Cruz Martínez A, López-Terradas JM. Conduction velo-
tocondrial, quizá como expresión de un defecto city along muscle fibers in situ in Duchenne muscular
primario de transmisión neuromuscular. El au- dystrophy. Arch Phys Med Rehab 1990; 71: 558-61.
mento del jitter podría llevar a confusión con una 13. Cruz Martínez A, Jiménez MD. Thymoma without mias-
thenia gravis. Electrophysiological study after thymectomy.
miastenia gravis en enfermos cuya expresión clínica J Neurol Neurosurg Psychiatry 1987; 50: 501-2.
más relevante sea debilidad, fatigabilidad y/o ptosis 14. Cruz Martínez A, Anciones B, Ferrer MT, Díez Tejedor E,
palpebral(16). Pérez Conde MC, Bescansa E. Electrophysiologic study
in benign human botulism type B. Muscle Nerve 1985;
8: 580-5.
15. Cruz Martínez A, Del Campo F, Mingo P, Pérez-Con-
BIBLIOGRAFÍA de MC. Altered motor unit architecture in hemiparetic
patients. A single fibre EMG study. J. Neurol Neurosurg
1. Stålberg E, Trontelj JV. Single fibre electromyography Psychiatry. 1982; 45: 756-7.
studies in healthy and diseased muscle. New York: Raven
16. Cruz-Martínez A, Arpa J, Santiago S, Pérez-Conde C,
Press; 1994.
Gutiérrez-Molina M, Campos Y. Single fiber electrom-
2. Ekstedt J. Human single muscle fiber action potentials. yography (SFEMG) in mitochondrial diseases (MD).
Acta Neurol Scand 1964; 61: 1-96. Electromyogr Clin Neurophysiol 2004; 44: 35-8.

Manual EMG.indb 148 9/7/07 12:06:12


Capítulo 13

MÚSCULOS COMÚNMENTE EXAMINADOS


G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

INTRODUCCIÓN Posición: Paciente sentado con la cabeza repo-


sando en una almohada o en supino
La electromiografía consiste en el registro de con la cabeza en posición neutra.
la actividad eléctrica del músculo mediante un Inserción del Uno de los dedos se coloca posterior
electrodo concéntrico de aguja. A continuación electrodo: al lado anterior del músculo (se reco-
se analizan los diferentes músculos habitualmente noce cuando el paciente aprieta los
explorados con esta técnica, siguiendo los términos dientes o al palpar la arteria facial
castellanos de la Nómina Anatómica(1). que se curva alrededor del borde
Se describen la inervación (nervio, plexo y anterior del músculo), y otro dedo
nivel radicular, anotando la principal aportación se coloca en el borde inferior de la
radicular en negrilla), la posición idónea del pa- mandíbula. El electrodo se inserta
ciente, la localización precisa de la inserción del entre las referencias señaladas.
electrodo, la forma de activación del músculo
analizado, los posibles errores en la inserción
del electrodo y las características peculiares de
cada músculo.
Los diseños anatómicos han sido modificados
de Kendall(2), Goodgold(3), Perotto(4) y Spalteholz(5).
Para un análisis más detallado de la localización A
anatómica de otros músculos explorados con menor
frecuencia, aunque de especial utilidad en situa-
ciones concretas, remitimos al lector a los textos
monográficos sobre el tema(4-7). D B

MÚSCULOS DE LA CARA Y EL CUELLO

Masetero (Fig. 1C)

Inervación: Tronco anterior del nervio mandi-


bular, rama motora del nervio trigé- Figura 1. Músculos orbicular de los ojos (A), orbicular de la boca (B), ma-
setero (C) y esternocleidomastoideo (D).
mino (V par craneal).
150 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

Activación: Se pide al paciente que apriete los Posición: Paciente en supino, con la cabeza
dientes. en posición neutra.
Errores: Si el electrodo se inserta demasia- Inserción del A un dedo lateral al ángulo de la
do cerca del arco cigomático, puede electrodo: boca. El electrodo se inserta a tra-
dañarse el conducto de la glándula vés de la piel con un ángulo de 20º,
parótida; si se inserta demasiado avanzando hacia el labio superior o
cerca del borde posterior del mús- inferior. La punta del electrodo no
culo, puede atravesarse la glándula debe acercarse a más de dos cm de
parótida, y si se inserta demasiado la línea media.
cerca del borde anterior del mús- Activación: Se indica al paciente que frunza los
culo la punta del electrodo podría labios.
penetrar en la boca. Errores: Si el electrodo se inserta vertical-
Notas: Puede afectarse en lesiones del ner- mente a la piel, la punta puede
vio trigémino, en caso de compro- entrar en la cavidad oral; si se co-
miso de la glándula y/o conducto loca muy cercano a la línea media,
parotídeo y durante la disección de puede recoger actividad de la mitad
tumores de la glándula parótida. opuesta del músculo, debido a la
inervación cruzada.
Orbicular de los ojos (Fig. 1A) Notas: Útil en la valoración de la parálisis
de Bell y otras parálisis faciales. La
Inervación: Rama temporal del nervio facial (VII duración de los potenciales de uni-
par craneal). dad motora es más breve, y la ampli-
Posición: Paciente en supino, con la cabeza tud más baja que la de los músculos
en posición neutra. de extremidades.
Inserción del Se palpa la porción lateral de la órbi-
electrodo: ta y se dirige la punta del electrodo Esternocleidomastoideo (Fig. 1D)
en un ángulo de 20 a 30º con la piel,
evitando siempre el globo ocular. Inervación: Nervio espinal accesorio, XI par
Activación: Se pide al paciente que cierre los craneal, raíces C2 y C3.
ojos. Posición: Paciente en supino con la cabeza
Errores: Ninguno. en posición neutra.
Notas: Útil en la valoración de la paráli- Inserción del Punto medio entre la mastoides y la
sis de Bell y otras parálisis faciales. electrodo: clavícula. Debido a la movilidad del
La duración de los potenciales de músculo y la holgura de la piel, es
unidad motora es más breve, y la útil sujetar firmemente el músculo
amplitud más baja que la de los entre el dedo índice y el pulgar del
músculos de extremidades. Es un examinador, e insertar el electrodo
músculo muy delgado, por lo que es entre ellos.
esencial que el electrodo se inserte Activación: Se pide al paciente que rote la cabeza
tangencialmente a la piel. lateralmente hacia el lado opuesto,
contra la mano del examinador.
Orbicular de la boca (Fig. 1B) Errores: Si el electrodo se inserta demasia-
do profundo, puede pincharse la
Inervación: Nervio bucal superficial, nervio fa- arteria carótida o la vena yugular;
cial (VII par craneal). si se inserta demasiado posterior y
Músculos comúnmente examinados 151

B
C

Figura 3. Músculos linguales.

Figura 2. Músculo trapecio superior (A), medio (B) e inferior (C). Inserción del En el centro de una línea trazada
electrodo: entre el punto medio de la escápula
y la apófisis espinosa de la vértebra
demasiado profundo, puede lesio- situada al mismo nivel.
nar parte del plexo braquial, y si se Activación: Aducción de la escápula mediante
inserta demasiado bajo y demasiado elevación del brazo.
profundo, puede alcanzar la bóveda Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
del pulmón. profundo, puede situarse en el rom-
boides.
Trapecio (Fig. 2)
Trapecio inferior (Fig. 2C)
Inervación: Nervio espinal accesorio (XI par Posición: Paciente en prono, con los brazos
craneal), raíces C3 y C4. extendidos sobre la cabeza.
Inserción del En una línea perpendicular a la co-
Trapecio superior (Fig. 2A) electrodo: lumna vertebral a nivel del ángulo
Posición: Paciente en prono. inferior de la escápula, a dos dedos
Inserción del En el ángulo entre el cuello y la es- de la apófisis espinosa de la vértebra
electrodo: palda. correspondiente.
Activación: Encogerse de hombros. Activación: Elevar el brazo desde la camilla.
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
profundo, puede situarse en el ele- profundo, puede entrar en el dorsal
vador de la escápula. ancho.

Trapecio medio (Fig. 2B) Músculos linguales (Fig. 3)


Posición: Paciente en prono, con el brazo ab-
ducido a 90º y el codo flexionado Inervación: Nervio hipogloso (XII par craneal).
sobre el borde de la camilla. Posición: Paciente sentado.
152 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

Inserción del Se pide al paciente que saque la


electrodo: lengua. El examinador la mantiene
sujeta con una gasa y con la otra
mano inserta el electrodo (coaxial
de 25 mm) en un lado de la len-
gua. Después se le pide de nuevo
que lleve la lengua hacia atrás y se
relaje, pudiendo observar entonces
la actividad eléctrica espontánea.
Para valorar la actividad volunta-
ria al máximo esfuerzo, se pide al
paciente que protruya la lengua.
Otra posible forma de abordaje es
realizar la inserción en el punto
medio entre el mentón y el ángulo
de la mandíbula, atravesando los
músculos milohioideo y genihioi-
deo.
Activación: Protruir la lengua (sacarla fuera de la
boca) y moverla de un lado a otro. Figura 4. Músculo romboides mayor.
Notas: Habitualmente, el estudio electro-
miográfico de la lengua se hace en
pacientes con sospecha de escle- Errores: Si el electrodo se inserta demasia-
rosis lateral amiotrófica. Requiere do superficial, puede entrar en el
una gran colaboración por parte del trapecio, y si se inserta demasiado
paciente, por lo que se recomienda profundo, puede alcanzar el erector
explicarle previamente el procedi- de la columna.
miento con todo detalle. Notas: Útil para valorar la integridad de la
raíz C5. En la plexopatía braquial
superior, el romboides no se afec-
MÚSCULOS DE LA CINTURA ESCAPULAR ta, ya que el nervio escapular dorsal
sale del plexo braquial muy proxi-
Romboides mayor (Fig. 4) malmente.

Inervación: Nervio escapular dorsal, raíces C4 Supraespinoso (Fig. 5A)


y C5.
Posición: Paciente en prono, con el brazo en Inervación: Nervio supraescapular, tronco su-
rotación interna hasta que el dorso de perior, raíces C5 y C6.
la mano quede cerca de la espalda. Posición: Paciente en prono, con el brazo en
Inserción del En el punto medio entre el ángulo abducción a 90º y el codo flexiona-
electrodo: inferior y la espina de la escápula, do sobre el lado de la camilla.
medial al borde vertebral. El elec- Inserción del Se inserta en la fosa supraespinosa,
trodo debe dirigirse a través del tra- electrodo: por encima de la espina de la es-
pecio medio. cápula. El electrodo debe dirigirse
Activación: Separar la mano de la espalda. a través del trapecio medio.
Músculos comúnmente examinados 153

Figura 5. Músculos supraespinoso (A) e infraespinoso (B).

Activación: Abducción del brazo (30 primeros


grados).
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
superficial, puede entrar en el tra-
pecio.
Notas: Se afecta en atrapamientos del nervio
supraescapular (en el surco escapu- B
lar), parálisis de plexo braquial tipo
Erb y radiculopatías C5 y C6.

Infraespinoso (Fig. 5B)


Figura 6. Músculos pectoral mayor (A) y serrato anterior (B).
Inervación: Nervio supraescapular, tronco su-
perior, raíces C5 y C6.
Posición: Paciente en prono, con el brazo en atrapamientos del nervio supraesca-
abducción a 90º y codo flexionado pular en la muesca supraescapular o
sobre el borde de la camilla. en el borde lateral de la espina de la
Inserción del Se inserta en la fosa infraespinosa, a escápula, en la parálisis braquial de
electrodo: dos dedos bajo la porción medial de Erb y en radiculopatías C5, C6.
la espina de la escápula.
Activación: Rotación externa del húmero. Pectoral mayor (Fig. 6A)
Errores: Si se inserta demasiado superficial,
puede entrar en el trapecio; y si se Inervación Nervio pectoral lateral, cordón late-
inserta demasiado profundo, en el porción ral, división anterior, tronco superior,
deltoides posterior. clavicular: raíces C5 y C6.
Notas: Se utiliza como músculo de registro Inervación Nervio pectoral medial, cordón me-
en el estudio de la conducción del porción dial, división anterior, tronco medio
nervio supraescapular. Se afecta en esternal: e inferior, raíces C6, C7, C8, D1.
154 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

Posición: Paciente en supino.


Inserción del Se inserta en el pliegue axilar ante-
electrodo: rior.
Activación: Aducción horizontal del brazo.
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
profundo, puede entrar en el coraco-
braquial; y si se inserta demasiado late-
ral, puede alcanzar el bíceps braquial.
Notas: Este músculo está inervado por todos
los segmentos del plexo braquial. La
porción clavicular se afecta en lesio-
nes del cordón lateral, y la porción
esternocostal en lesiones del cordón
medial.

Serrato anterior (Fig. 6B)

Inervación: Nervio torácico largo, raíces C5, C6


y C7.
Posición: Paciente en prono con el brazo col-
gando sobre el lado de la camilla.
Inserción del Lateral al ángulo inferior de la es-
electrodo: cápula.
Activación: El paciente presiona la mano hacia Figura 7. Músculo deltoides (porción media).
delante contra resistencia.
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
superficial, puede entrar en el dor- Posición: Paciente en supino con el brazo al
sal ancho; y si se inserta demasiado lado.
craneal, puede alcanzar el redondo Inserción del En la mitad entre la punta del acro-
mayor. electrodo: mion y el tubérculo deltoideo.
Notas: Está inervado directamente por las Activación: Abducción del brazo.
raíces C5, C6, C7 a través del ner- Errores: Ninguno.
vio torácico largo. Por esta razón Notas: También se pueden explorar las
es un músculo útil para distinguir porciones anterior y posterior. Suele
radiculopatías de lesiones nerviosas utilizarse como músculo de registro
más distales. en el estudio de la conducción del
nervio axilar.

MÚSCULOS DEL BRAZO Bíceps braquial (Fig. 8A)

Deltoides (porción media) (Fig. 7) Inervación: Nervio musculocutáneo, cordón


lateral, división anterior, tronco su-
Inervación: Nervio axilar, cordón posterior, perior, raíces C5 y C6.
división posterior, tronco superior, Posición: Paciente en supino, con el brazo
raíces C5 y C6. extendido.
Músculos comúnmente examinados 155

A B

Figura 8. Músculos bíceps braquial (A) y tríceps braquial (B). Figura 9. Músculos braquiorradial (A), extensor radial largo del carpo (B)
y supinador (C).

Inserción del En el vientre del músculo, en la mi- Errores: Si el electrodo se inserta demasia-
electrodo: tad del brazo. do anterior o demasiado proximal,
Activación: Flexión o supinación del antebrazo. puede entrar en el deltoides.
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado Notas: Debido a su inervación muy proxi-
profundo, puede situarse en el bra- mal a través del nervio radial, casi
quial. nunca se afecta cuando existe un
Notas: Se utiliza como músculo de regis- atrapamiento en el canal de torsión
tro en el estudio de conducción del del húmero. Está frecuentemente
nervio musculocutáneo. afectado en la radiculopatía C7.
También se pueden explorar la ca-
Tríceps braquial (cabeza lateral) (Fig. 8B) beza larga y la medial.

Inervación: Nervio radial, cordón posterior,


división posterior, troncos medio e MÚSCULOS DEL ANTEBRAZO
inferior, raíces C6, C7 y C8.
Posición: Paciente en prono con el brazo en Braquiorradial o supinador largo (Fig. 9A)
abducción.
Inserción del Inmediatamente posterior a la inser- Inervación: Nervio radial, cordón posterior,
electrodo: ción del deltoides o tubérculo del- división posterior, tronco superior,
toideo, o justo por debajo del punto raíces C5 y C6.
medio entre el epicóndilo lateral y Posición: Antebrazo totalmente pronado.
el hombro. Inserción del Punto medio entre el tendón del bíceps
Activación: Extensión del codo. electrodo: y epicóndilo lateral a lo largo del
156 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

pliegue flexor. Se inserta a una pro-


fundidad de unos 12 mm.
Activación: Flexión del antebrazo en posición
neutra.
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
lateral, puede alcanzar el extensor
radial largo del carpo.
Notas: Es el único músculo de los inerva- A
dos por el nervio radial que produce
una flexión del codo. Se afecta en
lesiones del nervio radial por enci- B
ma del canal de torsión.

Extensor radial largo del carpo o primer radial externo


(Fig. 9b)
Figura 10. Músculos extensor cubital del carpo (A) y extensor de los dedos (B).
Inervación: Nervio radial, cordón posterior, di-
visión posterior, troncos superior y
medio, raíces C6 y C7. Extensor cubital del carpo o cubital posterior (Fig. 10A)
Posición: Antebrazo totalmente pronado.
Inserción del Se inserta a dos dedos distal al epi- Inervación: Nervio interóseo posterior, nervio
electrodo: cóndilo lateral. radial, cordón posterior, división
Activación: Dorsiflexión de la muñeca en des- posterior, troncos medio e inferior,
viación radial. raíces C6, C7 y C8.
Posición: Antebrazo totalmente pronado.
Supinador (Fig. 9c) Inserción del Se palpa el cúbito en la mitad del
electrodo: antebrazo y se inserta el electrodo
Inervación: Nervio interóseo posterior, nervio encima de la vaina del cúbito.
radial, cordón posterior, división Activación: Extensión de la muñeca con desvia-
posterior, tronco superior, raíces ción cubital.
C5 y C6. Errores: Si se inserta el electrodo demasiado
Posición: Antebrazo totalmente pronado. radial, puede situarse en el exten-
Inserción del Exactamente radial a la parte más sor largo del pulgar; y si se inserta
electrodo: distal de la inserción del tendón del demasiado proximal, alcanzaría el
bíceps. ancóneo.
Activación: Supinación del antebrazo.
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado Extensor de los dedos (Fig. 10B)
lateral, puede situarse en el braquio-
rradial. Existe riesgo de pinchar la Inervación: Nervio interóseo posterior, nervio
arteria radial. radial, cordón posterior, división
Notas: El nervio interóseo posterior pasa posterior, troncos medio e inferior,
a través de un arco aponeurótico raíces C7 y C8.
(arcada de Fröhse) entre las dos Posición: Antebrazo totalmente pronado.
porciones de este músculo, donde Inserción del Tratar de asir la unión del tercio su-
puede verse atrapado. electrodo: perior y medio del antebrazo con el
Músculos comúnmente examinados 157

Figura 11. Músculo extensor del índice.

pulgar y dedo medio en radio y cú- B


bito. Cuando el dedo índice corta la
línea entre esos dos puntos, se inser-
ta el electrodo inmediato a la punta
del dedo índice, a una profundidad
de unos 12 mm. También se puede Figura 12. Músculos pronador redondo (A) y flexor radial del carpo (B).
localizar el músculo por palpación
ordenando al paciente que extienda
el dedo medio. Activación: Extensión del dedo índice, con
Activación: Extender las articulaciones meta- flexión de los demás.
carpofalángicas. Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
Errores: Si el electrodo se inserta demasia- radial, puede entrar en el abductor
do profundo, puede entrar en el ex- largo del pulgar; y si se inserta de-
tensor largo del pulgar; si se inserta masiado proximal, puede alcanzar
demasiado medial, en el extensor al extensor de los dedos.
radial corto del carpo; y si se inserta Notas: Es el músculo más distal inervado
demasiado lateral, puede alcanzar por el nervio radial, simultáneamen-
el extensor cubital del carpo. te con el extensor largo del pulgar.
Habitualmente es utilizado como
Extensor del índice (Fig. 11) músculo de registro en el estudio de
conducción del nervio radial, y se
Inervación: Nervio interóseo posterior, nervio afecta en el síndrome del interóseo
radial, cordón posterior, división posterior y lesiones más proximales
posterior, troncos medio e inferior, del nervio radial.
raíces C7 y C8.
Posición: Antebrazo totalmente pronado. Pronador redondo (Fig. 12A)
Inserción del A dos dedos proximal a la apófisis
electrodo: estiloides del cúbito, justo radial Inervación: Nervio mediano, cordón lateral,
al cúbito, con una profundidad de división anterior, troncos superior
unos 12 mm. y medio, raíces C6 y C7.
158 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

Posición: Antebrazo totalmente supinado.


Inserción del A dos dedos distal en el punto medio
electrodo: de una línea que une el epicóndilo
medial y el tendón del bíceps.
Activación: Pronación del antebrazo con el codo
totalmente extendido.
Errores: Si el electrodo se inserta demasia-
do profundo, puede entrar en el
flexor superficial de los dedos; y si A
se inserta demasiado cubital, puede
alcanzar el flexor radial del carpo.
Notas: Es el músculo más proximal iner-
vado por el nervio mediano. Es un
lugar común de atrapamiento del
nervio, aunque el músculo puede
o no afectarse, dependiendo de si
el atrapamiento ocurre proximal a
las ramas que inervan el pronador
redondo o en el propio músculo.
B
También se afecta en el atrapamien-
to por el ligamento de Struthers.
Está respetado en el síndrome del Figura 13. Músculos flexor profundo de los dedos (A) y flexor largo del
pulgar (B).
nervio interóseo anterior.

Flexor radial del carpo o palmar mayor (Fig. 12B)


Notas: Habitualmente está afectado en
Inervación: Nervio mediano, cordón lateral y atrapamientos proximales del ner-
medial, división anterior, troncos vio mediano, incluyendo el síndro-
superior, medio e inferior, raíces me del pronador. Está respetado
C6, C7 y C8. en el síndrome del nervio interóseo
Posición: Antebrazo totalmente supinado. anterior. Se usa para obtener el re-
Inserción del De tres a cuatro dedos distal al pun- flejo H.
electrodo: to medio de una línea que conecta
el epicóndilo medial y tendón del Flexor profundo de los dedos (Fig. 13A)
bíceps.
Activación: Flexión de la muñeca con desvia- Inervación Nervio interóseo anterior, nervio
ción radial. dedos 2º y 3º: mediano, cordón medial, división
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado anterior, troncos medio e inferior,
profundo, puede entrar en el flexor raíces C7 y C8.
superficial de los dedos; y si se conti- Inervación Nervio cubital, cordón medial, di-
núa en profundidad, en el flexor del dedos 4º y 5º: visión anterior, tronco inferior, raí-
pulgar; si se inserta demasiado lateral ces C8 y D1.
puede alcanzar al pronador redondo; Posición: Antebrazo totalmente supinado.
y si se inserta demasiado medial al Inserción del Se sitúa la punta del dedo meñique
palmar largo (palmar menor). electrodo: en el olécranon y los dedos medio
Músculos comúnmente examinados 159

e índice a lo largo del cuerpo del


cúbito; el electrodo se inserta justo
delante del dedo índice cubitalmen-
te al cuerpo del cúbito. La porción
inervada por el nervio cubital es la
más superficial (1-2 cm), mientras
que la inervada por el nervio media-
no es la más profunda (3-5 cm).
Activación: Flexión de las falanges distales de
los dedos.
Errores: Si el electrodo se inserta demasia-
do volar, puede entrar en el flexor
cubital del carpo.
Notas: Las dos porciones inervadas por el
nervio cubital se afectan en atra-
pamientos en el túnel cubital y en
lesiones más proximales, cordón me- Figura 14. Músculo pronador cuadrado.
dial y raíces C8 y D1, manifestándo-
se como debilidad para flexionar las
falanges distales del 4º y 5º dedos.
Las dos porciones inervadas por el Notas: Se afecta en los atrapamientos del
mediano se afectan en atrapamien- interóseo anterior, pronador re-
tos de la rama interósea anterior, dondo, y ligamento de Struther.
pronador y ligamento de Struthers, En pacientes con lesión del nervio
manifestándose como debilidad o in- cubital y parálisis del aductor del
capacidad para flexionar las falanges pulgar, el flexor largo del pulgar es
distales de segundo y tercer dedos. suplente, produciendo flexión de la
falange distal del pulgar (signo de
Flexor largo del pulgar (Fig. 13B) Froment).

Inervación: Nervio interóseo anterior, nervio Pronador cuadrado (Fig. 14)


mediano, cordones lateral y medial,
división anterior, troncos medio e Inervación: Nervio interóseo anterior, nervio
inferior, raíces C7, C8 y D1. mediano, cordones lateral y me-
Posición: Antebrazo totalmente supinado. dial, división anterior, troncos
Inserción del En mitad del antebrazo, desde la medio e inferior, raíces C7, C8 y
electrodo: cara radial y exactamente palmar al D1.
radio. El electrodo se dirige a través Posición: Antebrazo totalmente pronado.
del flexor radial del carpo y el flexor Inserción del A tres dedos proximal al punto me-
superficial de los dedos. electrodo: dio de una línea que une el radio y
Activación: Flexión de la falange distal del pul- la apófisis estiloides del cúbito. Se
gar. inserta el electrodo a través de la
Errores: Si el electrodo se inserta demasia- membrana interósea a una profun-
do superficial, puede situarse en el didad aproximada de 18 mm.
flexor superficial de los dedos. Activación: Pronación del antebrazo.
160 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

Figura 15. Músculo flexor cubital del carpo.


B

Errores: Si el electrodo se inserta demasiado


profundo, puede entrar en el flexor
superficial de los dedos.
Figura 16. Músculos abductor corto del pulgar (A) y oponente del
Notas: Es el músculo más distal inervado pulgar (B).
por el nervio interóseo anterior. Se
afecta en síndromes de atrapamien-
tos proximales del nervio mediano MÚSCULOS DE LA MANO
(interóseo anterior, pronador redon-
do, ligamento de Struthers) y está Abductor corto del pulgar (Fig. 16A)
respetado en el síndrome del túnel
carpiano. Inervación: Nervio mediano, cordón medial,
división anterior, tronco inferior,
Flexor cubital del carpo o cubital anterior (Fig. 15) raíces C7, C8 y D1.
Posición: Mano en total supinación.
Inervación: Nervio cubital, cordón medial, divi- Inserción del Punto medio de una línea trazada en-
sión anterior, tronco inferior, raíces electrodo: tre el lado palmar de la articulación
C8 y D1. metacarpofalángica y la articulación
Posición: Antebrazo totalmente supinado. carpometacarpiana. El electrodo se
Inserción del A dos dedos del cúbito, en la unión inserta tangencialmente a una pro-
electrodo: del tercio medio y superior del an- fundidad de 6 a 12 mm.
tebrazo. Activación: Abducción palmar del pulgar.
Activación: Flexión de la muñeca con desvia- Errores: Si el electrodo se inserta demasia-
ción cubital. También se activa al do profundo, puede entrar en el
separar el 5º dedo. oponente del pulgar. Si se inserta
Errores: Si el electrodo se inserta demasia- más medialmente, puede alcanzar
do profundo, puede situarse en el al músculo flexor corto del pulgar,
flexor profundo de los dedos. que tiene inervación doble (media-
Notas: Suele estar respetado en casos leves no y cubital).
de atrapamiento del nervio cubital Notas: Se utiliza con frecuencia como
en el codo. músculo de registro en el estudio
Músculos comúnmente examinados 161

de conducción del nervio mediano.


Puede afectarse en todos los sín-
dromes de atrapamiento del nervio
mediano (túnel carpiano, pronador
redondo, ligamento de Struther),
excepto en el síndrome del inte-
róseo anterior. Se afecta también
en la parálisis braquial inferior de A
Klumpke (afectación de raíces C8
y D1).

Oponente del pulgar (Fig. 16B)

Inervación: Nervio mediano, cordón medial, B


división anterior, tronco inferior,
raíces C8, D1.
Posición: Mano en completa supinación.
Inserción del Punto medio de una línea trazada
electrodo: entre el lado radial de las arti-
Figura 17. Músculo abductor del meñique (A) y aductor del pulgar (B).
culaciones metacarpofalángicas
y de las carpometacarpianas. El
electrodo se sitúa entre el abduc- Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
tor corto del pulgar y el primer profundo, puede entrar en el opo-
metacarpiano a una profundidad nente del meñique.
de 18 mm. Notas: Habitualmente, se utiliza como mús-
Activación: Oposición del pulgar al meñique. culo de registro en el estudio de la
Errores: Si el electrodo se inserta demasia- conducción del nervio cubital; se
do profundo, puede entrar en el afecta en la mayoría de las lesiones
aductor del pulgar; y si se coloca del nervio cubital, salvo en algunas
demasiado medial, puede alcanzar formas de atrapamiento en el canal
el abductor corto del pulgar. de Guyón. También se afecta en las
lesiones de raíces C8 y D1.
Abductor del meñique (Fig. 17A)
Aductor del pulgar (Fig. 17B)
Inervación: Nervio cubital, cordón medial, divi-
sión anterior, tronco inferior, raíces Inervación: Nervio cubital, cordón medial, divi-
C8, D1. sión anterior, tronco inferior, raíces
Posición: Mano totalmente supinada. C8, D1.
Activación: Abducción del meñique. Posición: Mano en pronación total y pulgar
Inserción del El electrodo se inserta en el punto en abducción.
electrodo: medio de una línea trazada entre el Inserción del En el lado libre del primer espacio
lado cubital de la quinta articula- electrodo: interóseo, dirigiendo el electrodo
ción metacarpofalángica, y el lado hacia el borde proximal del primer
cubital del pisiforme, a una profun- metacarpiano.
didad de 6 a 12 mm. Activación: Aducción del pulgar.
162 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

Figura 19. Músculos glúteo mayor (A), medio (B) y menor (C).

segunda articulaciones metacarpo-


falángicas.
Activación: Abducción del índice (separar los
dedos).
Figura 18. Músculo primer interóseo dorsal.
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
profundo, puede entrar en el aduc-
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado tor del pulgar.
dorsal, puede entrar en el primer Notas: El primer interóseo dorsal se puede
interóseo dorsal; y si se inserta de- utilizar como músculo de registro,
masiado volar, puede alcanzar el en estudios de conducción de la
oponente del pulgar. rama motora profunda palmar del
Notas: Es el músculo más distal inervado nervio cubital, y se afecta en atrapa-
por el nervio cubital. Puede afectar- mientos a nivel del canal de Guyón,
se en los síndromes de atrapamiento parálisis cubital tardía y lesiones ra-
del nervio cubital y lesión radicular diculares C8 y D1.
C8 y D1. Cuando se paraliza produ-
ce el signo de Froment (al intentar
la aducción del pulgar, la acción MÚSCULOS DE LA CINTURA PÉLVICA
es sustituida por el flexor largo del
pulgar). Glúteo mayor (Fig. 19A)

Primer interóseo dorsal (Fig. 18) Inervación: Nervio glúteo inferior, plexo sacro,
raíces L5, S1 y S2.
Inervación: Nervio cubital, cordón medial, divi- Posición: Paciente en prono.
sión anterior, tronco inferior, raíces Inserción del Se inserta profundamente en el pun-
C8 y D1. electrodo: to medio entre el trocánter mayor
Posición: Mano en pronación completa. del fémur y el sacro.
Inserción del En la parte dorsal de la mano, en Activación: Extensión del muslo con la rodilla
electrodo: el punto medio entre la primera y flexionada.
Músculos comúnmente examinados 163

Errores: Ninguno.
Notas: Se afecta en lesiones del nervio
glúteo inferior, división posterior del
plexo sacro y raíces L5, S1 y S2. A
menudo se utiliza para diferenciar
entre una radiculopatía L5 o S1 y
A
lesiones de nervio ciático.

Glúteo medio (Fig. 19B)

Inervación: Nervio glúteo superior, raíces L4,


L5 y S1.
Posición: Paciente en prono.
Inserción del A 24 mm distal al punto medio de
electrodo: la cresta ilíaca.
Activación: Abducción del muslo.
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado B
posterior, puede entrar en el glúteo
mayor; si se inserta demasiado ante-
rior, en la fascia lata; y si se inserta
demasiado distal, puede alcanzar el
glúteo menor o mayor.

Glúteo menor (Fig. 19C)


Figura 20. Músculos aductor mayor (A) y aductor largo (B).
Inervación: Nervio glúteo superior, plexo sacro,
raíces L4, L5 y S1.
Posición: Paciente en prono. L4 y L5. También recibe fibras del
Inserción del El electrodo se inserta en el punto nervio ciático procedentes de L4 y
electrodo: medio entre la cresta ilíaca y el L5.
trocánter mayor, profundizando Posición: Paciente en supino, con ambas ex-
hacia el hueso y retirándolo des- tremidades inferiores en abducción
pués. a 15º y en rotación externa.
Activación: Abducción del muslo. Inserción del En el punto medio entre el epicón-
Errores: Si el electrodo se inserta demasia- electrodo: dilo medial femoral y el tubérculo
do superficial, puede entrar en el púbico.
glúteo medio. Activación: Aducción del muslo.
Errores: Si el electrodo se inserta demasia-
do superficial, puede entrar en el
MÚSCULOS DEL MUSLO músculo grácil (recto interno); si
se inserta demasiado lateral, en el
Aductor mayor (Fig. 20A) sartorio; y si se inserta demasiado
proximal, en el aductor largo.
Inervación: Nervio obturador, división anterior Notas: Se afecta parcialmente en lesiones
del plexo lumbar, raíces L2, L3, de la rama posterior del nervio ob-
164 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

turador, división anterior del plexo


lumbar y lesiones de raíces L2, L3,
y L4. Se afecta, además, en lesiones
proximales del nervio ciático, divi-
sión anterior de la porción superior
del plexo sacro y lesiones de raíces
L4 y L5.

Aductor largo (Fig. 20B)

Inervación: Nervio obturador, división anterior


del plexo lumbar, raíces L2, L3 y
L4.
Posición: Paciente en supino, con ambas ex-
tremidades inferiores en abducción
a 15º.
Inserción del A cuatro dedos distal al tubérculo
electrodo: púbico, en el vientre del músculo.
Activación: Aducción de extremidades inferio-
res. Figura 21. Músculo iliopsoas.
Errores: Si el electrodo se inserta demasia-
do medial, puede entrar en el grácil
(recto interno); y si se inserta dema- Notas: Se afecta en lesiones proximales del
siado lateral, en el sartorio. nervio femoral, división posterior
Notas: Se afecta en lesiones de la rama an- del plexo lumbar y raíces L2, L3 y
terior del nervio obturador, división L4.
anterior del plexo lumbar, y lesiones
de raíces L2, L3, y L4. Recto femoral o recto anterior del cuádriceps (Fig. 22A)

Iliopsoas (Fig. 21) Inervación: Nervio femoral, división posterior


del plexo lumbar, raíces L2, L3 y
Inervación: Nervio femoral, división posterior L4.
del plexo lumbar, raíces L1, L2, L3, Posición: Paciente en supino.
y L4. Inserción del En la cara anterior del muslo, en el
Posición: Paciente en supino. electrodo: punto medio entre el borde superior
Inserción del A dos dedos lateral a la arteria femo- de la rótula y la espina ilíaca ante-
electrodo: ral y a un dedo bajo el ligamento rosuperior.
inguinal. Activación: Se pide al paciente que flexione el
Activación: Flexión del muslo, con la rodilla muslo con la rodilla extendida.
flexionada a más de 90º. Errores: Si el electrodo se inserta demasia-
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado do medial, puede entrar en el vasto
medial, puede lesionar el paquete intermedio; si se inserta demasiado
vasculonervioso; y si se inserta de- lateral, en el vasto lateral; y si se in-
masiado lateral, puede entrar en el serta demasiado medial, en el vasto
sartorio. medial.
Músculos comúnmente examinados 165

A A
B
B

D
C

Figura 22. Músculos recto femoral (A), vasto lateral (B) y vasto medial (C). Figura 23. Músculos semimembranoso (A), semitendinoso (B), cabeza larga
del bíceps femoral (C) y cabeza corta del bíceps femoral (D).

Notas: Se afecta en lesiones proximales Vasto medial del cuádriceps (Fig. 22C)
del nervio femoral (ligamento in-
guinal), lesiones de la división del Inervación: Nervio femoral, división posterior del
plexo lumbar y raíces L2, L3 y L4. plexo lumbar, raíces L2, L3 y L4.
Posición: Paciente en supino.
Vasto lateral del cuádriceps (Fig. 22B) Inserción del A cuatro dedos proximal al ángulo
electrodo: superomedial de la rótula.
Inervación: Nervio femoral, división posterior del Activación: Elevación del talón, con la rodilla
plexo lumbar, raíces L2, L3 y L4. extendida.
Posición: Paciente en supino. Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
Inserción del En la cara lateral del muslo, a una posterior, puede entrar en el sartorio
electrodo: mano por encima de la rótula. o en el grácil; y si se inserta dema-
Activación: Se pide al paciente que eleve el ta- siado anterior, en el recto femoral.
lón, con la rodilla extendida. Notas: Las indicadas para el recto femoral
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado y el vasto lateral.
posterior, puede entrar en el bíceps
femoral; y si se inserta demasiado Semimembranoso (Fig. 23A)
medial, en el recto femoral. Inervación: Nervio ciático (porción tibial), divi-
Notas: Las mencionadas para el recto fe- sión anterior del plexo sacro, raíces
moral. L4, L5 y S1.
166 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

Posición: Paciente en prono. Errores: Ninguno.


Inserción del Lateralmente al tendón del semiten- Notas: Se afecta en lesiones del nervio ciáti-
electrodo: dinoso en el vértice de la “V” entre co, división anterior del plexo sacro,
el tendón semitendinoso y el bíceps y de las raíces L5 y S1.
femoral.
Activación: Flexión de rodilla y rotación interna Bíceps femoral (cabeza corta) (Fig. 23D)
de la tibia.
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado Inervación: Nervio ciático (división peroneal),
medial, puede entrar en el semiten- división posterior del plexo sacro,
dinoso; si se inserta demasiado la- raíces L5 y S1.
teral, en la cabeza corta del bíceps Posición: Paciente en posición prona, con la
femoral o en el nervio ciático; y si rodilla flexionada a 90º.
se inserta demasiado profundo, en Inserción del Medial al tendón de la cabeza larga
el aductor mayor. electrodo: del bíceps femoral, a cuatro dedos
Notas: Se afecta en lesiones del nervio ciáti- proximal del peroné.
co, división anterior del plexo sacro Activación: Flexión de la rodilla.
y raíces L5 y S1. Errores: Si el electrodo se inserta demasia-
do medial, puede entrar en el semi-
Semitendinoso (Fig. 23B) membranoso; y si se inserta dema-
siado lateral, en la cabeza larga del
Inervación: Nervio ciático (porción tibial), divi- bíceps femoral.
sión anterior del plexo sacro, raíces Notas: Es el único músculo inervado por
L4, L5 y S1. la división peroneal del nervio ciá-
Posición: Paciente en prono. tico por encima de la rodilla, y su
Inserción del Punto medio entre el epicóndilo examen sirve para diferenciar las
electrodo: medial del fémur y la tuberosidad lesiones de tronco ciático común
isquiática. de la afectación de nervio pero-
Activación: Flexión de rodilla y rotación interna neo.
de la tibia.
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
lateral puede entrar en el bíceps fe- MÚSCULOS DE LA PIERNA
moral (cabeza larga); y si se inserta
demasiado medial o demasiado pro- Tibial anterior (Fig. 24A)
fundo, en el semimembranoso.
Inervación: Nervio peroneo profundo, nervio
Bíceps femoral (cabeza larga) (Fig. 23C) peroneo común, nervio ciático,
división posterior del plexo sacro,
Inervación: Nervio ciático (porción tibial), di- raíces L4 y L5.
visión anterior del plexo sacro, y Posición: Paciente en supino.
raíces L5 y S1. Inserción del A cuatro dedos por debajo de la tube-
Posición: Paciente en prono. electrodo: rosidad de la tibia y a un dedo lateral
Inserción del En el punto medio entre la cabeza de la cresta de la tibia.
electrodo: del peroné y la tuberosidad isquiá- Activación: Dorsiflexión del pie.
tica. Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
Activación: Flexionar la rodilla. lateral y demasiado profundo, pue-
Músculos comúnmente examinados 167

Figura 25. Músculo peroneo largo.

Activación: Extensión del dedo gordo.


Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
superficial y proximal, puede entrar
en el tibial anterior; y si se inserta
Figura 24. Músculo tibial anterior (A) y extensor largo del dedo gordo demasiado lateral, en el tercer pe-
(B). roneo.
Notas: Es un músculo de elección para
valorar la afectación de la raíz L5.
de alcanzar el extensor largo de los Se afecta, además, en el síndrome
dedos. compartimental anterior, lesiones
del nervio peroneo profundo, ner-
Extensor largo del dedo gordo (Fig. 24B) vio peroneo común, nervio ciático
y plexo sacro.
Inervación: Nervio peroneo profundo, nervio
peroneo común, nervio ciático, Peroneo largo (Fig. 25)
división posterior del plexo sacro,
raíces L5 y S1. Inervación: Nervio peroneo superficial, nervio
Posición: Paciente en supino. peroneo común, nervio ciático, divi-
Inserción del A tres dedos por encima de la cresta sión posterior del plexo sacro, raíces
electrodo: bimaleolar del tobillo, lateral a la L5 y S1.
cresta de la tibia. Posición: Paciente en supino.
168 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

A B

Figura 26. Músculo gastrocnemio. Cabeza medial (A) y lateral (B). Figura 27. Músculo tibial posterior.

Inserción del A tres dedos por debajo de la cabe- Activación: Flexión plantar del pie, con la rodi-
electrodo: za del peroné, dirigiéndolo hacia la lla extendida.
cara lateral del peroné. Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
Activación: Flexión plantar y eversión del pie. profundo, puede entrar en el flexor
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado largo de los dedos.
posterior, puede entrar en el sóleo;
y si se inserta demasiado anterior, Tibial posterior (Fig. 27)
en el extensor largo de los dedos.
Notas: Se afecta en lesiones del nervio pe- Inervación: Nervio tibial, nervio ciático, división
roneo superficial, nervio peroneo anterior del plexo sacro, raíces L5 y
común, nervio ciático, plexo sacro S1.
y raíces L5 y S1. Posición: Paciente en prono, con el pie en el
borde de la camilla y el muslo en
Gastrocnemio o gemelo (cabeza medial) (Fig. 26A) rotación interna.
Inserción del A cinco dedos distal de la tuberosidad
Inervación: Nervio tibial, nervio ciático, división electrodo: de la tibia y a un dedo del borde
anterior del plexo sacro, raíces S1 y medial de la tibia. El electrodo se
S2. inserta en dirección oblicua, a tra-
Posición: Paciente en prono, con el pie en el vés del sóleo y el flexor largo de los
borde de la camilla. dedos, por la parte posterior de la
Inserción del A cinco dedos del hueco poplíteo, tibia.
electrodo: en la masa medial de la pantorri- Activación: Flexión plantar e inversión del
lla. pie.
Músculos comúnmente examinados 169

Errores: Si el electrodo se inserta demasiado


superficial, puede entrar en el sóleo
A
o flexor largo de los dedos; y si se
inserta demasiado profundo, puede
alcanzar el tibial anterior.
Notas: Es un músculo inervado por el
nervio tibial y con nivel radicular
predominantemente L5, lo que lo
hace útil para la diferenciación en-
tre una neuropatía peroneal y una
radiculopatía L5.

MÚSCULOS DEL PIE


B

Extensor corto de los dedos o pedio (Fig. 28A)

Inervación: Nervio peroneo profundo, nervio


peroneo común, nervio ciático,
división posterior del plexo sacro y
raíces L5 y S1.
Posición: Paciente en supino. C
Inserción del A tres dedos distal al borde inferior
electrodo: del maléolo lateral, paralelo al borde
lateral del pie.
Activación: Extensión de los dedos del pie.
Errores: Ninguno. Figura 28. Músculos extensor corto de los dedos (A), abductor del dedo
Notas: Se utiliza habitualmente como gordo (B) y flexor corto del dedo gordo (C).
músculo de registro en estudios de
conducción del nervio peroneo. demasiado profundo, en el flexor
corto de los dedos.
Notas: Puede utilizarse como músculo de
Abductor del dedo gordo (Fig. 28B) registro en estudios de conducción
de los nervios tibial y plantar me-
Inervación: Nervio plantar medial, nervio tibial, dial. Es el de elección para valorar
nervio ciático, división anterior del el síndrome del túnel tarsiano. Se
plexo sacro, raíces S1 y S2. afecta en lesiones del nervio plantar
Posición: Paciente en supino. medial, nervio tibial, nervio ciático,
Inserción del Porción media del lado medial del plexo sacro y raíces S1 y S2.
electrodo: pie, a un dedo por debajo de la tu-
berosidad del navicular. Flexor corto del dedo gordo (Fig. 28C)
Activación: Separación de los dedos.
Errores: Si el electrodo se inserta demasia- Inervación: Nervio plantar medial, nervio tibial,
do distal, puede entrar en el flexor nervio ciático, división anterior del
corto del dedo gordo; y si se inserta plexo sacro, raíces S1 y S2.
170 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

Posición: Paciente en supino.


Inserción del Proximal y medial al tendón del
electrodo: flexor largo del dedo gordo (para el
fascículo medial).
Activación: Flexión de la articulación metatar-
sofalángica del dedo gordo.
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
lateral, puede entrar en el aductor
del dedo gordo; y si se inserta de-
masiado medial, en el abductor del C D
dedo gordo.

MÚSCULOS PARAESPINALES

Espinosos (Fig. 29)

Inervación: Todos los músculos son inervados L


por ramas de la división posterior
del nervio espinal a su respectivo Figura 29. Músculos espinosos.
nivel. Habitualmente se extiende
a uno o dos segmentos por enci-
ma y por debajo, lo que crea una men, para producir un leve arco de
gran cantidad de inervación super- la columna vertebral.
puesta en los grupos paraespinales Inserción del Antes de insertar el electrodo debe
completos, y hace difícil precisar electrodo: identificarse el nivel. Como puntos
la localización, en caso de afecta- de referencia se utilizan: 1) para la
ción radicular e individualizarlos región cervical y dorsal, la apófisis
en el estudio neurofisiológico. Es- espinosa de la 7ª vértebra cervical,
tos músculos se localizan a cada contando por encima y por debajo
lado de la apófisis espinosa de la de ella; y 2) para la región lumbo-
columna vertebral, colocados en sacra, se traza una línea imaginaria
varias capas, y se dividen en tres entre la parte más superior de las
regiones: cervical (C), dorsal (D) dos crestas ilíacas que se correspon-
y lumbosacra (LS). de con el nivel intervertebral L3 a
Posición: Paciente en prono: 1) para el estu- L4. Se cuenta por encima y por de-
dio del área cervical se coloca una bajo, y el electrodo se inserta a uno
almohada por debajo del pecho del o dos dedos de la apófisis transversa
paciente, con el fin de que la cabe- identificada.
za esté flexionada y apoyada sobre Activación: 1) Para la región cervical, se pide
la frente; 2) para el estudio de la al paciente que eleve o extienda la
región dorsal el paciente debe estar cabeza para registrar actividad vo-
en horizontal; y 3) para el estudio luntaria; si no se puede obtener una
de la región lumbosacra, se coloca relajación, se le pide que presione
una almohada por debajo del abdo- la cabeza contra la camilla; 2) para
Músculos comúnmente examinados 171

la región lumbosacra, se pide al pa- D


ciente que eleve el miembro infe-
rior (desde el muslo) en el lado de
estudio; para obtener una relajación 7
completa, se le pide que presione la 8
rodilla contra la camilla en el lado
que se estudia o que eleve ligera-
9
mente la pelvis.
Errores: Si el electrodo se inserta demasiado 10
superficial, puede entrar en la capa 11
muscular superficial de la espalda
(trapecio, dorsal ancho, romboides 12
o esplenio).
Notas: Pueden afectarse segmentariamen-
te en procesos que afectan a las raí-
ces, cauda equina o cono medular,
en alteraciones vasculares que afec- Figura 30. Músculo recto del abdomen. Niveles radiculares dorsales
según el segmento analizado.
tan a la arteria espinal anterior, o
en procesos degenerativos o infla-
matorios que afectan a las células D10, y la infraumbilical por D11 y
del asta anterior medular (polio, D12.
esclerosis lateral amiotrófica). Su Activación: Se pide al paciente que se tumbe
estudio sirve como diagnóstico dife- en la camilla, que tosa o que realice
rencial entre una neuropatía y una una maniobra de Valsalva (prensa
radiculopatía. En el segmento C7 abdominal).
a D1, debe tenerse cuidado de no Notas: Se afecta en la neuritis intercostal
profundizar y lesionar el simpático. (herpética), raramente en radiculo-
Normalmente sólo se valora la exis- patías dorsales y en enfermedades
tencia o no de actividad muscular de células del asta anterior de la
espontánea, sin realizar la activa- médula (poliomielitis, esclerosis
ción voluntaria. lateral amiotrófica). La parálisis de
este músculo produce una hernia
de la pared abdominal anterior.
MÚSCULOS DE LA PARED ABDOMINAL

Recto del abdomen (Fig. 30) MÚSCULOS MENOS FRECUENTEMENTE EXAMINADOS

Inervación: Nervios intercostales de D7 a D12. A continuación se describen una serie de


Posición: Paciente en supino. músculos que se exploran ocasionalmente en el
Inserción del Se inserta a dos dedos de la línea laboratorio de electromiografía, ya que requie-
electrodo: media abdominal, y el punto exacto ren de un adecuado entrenamiento por parte del
depende del nervio intercostal que electromiografista. Sin embargo, su exploración
quiera examinarse: la porción su- es requerida cada vez con mayor frecuencia, por
perior está inervada por los nervios sus implicaciones diagnósticas o terapéuticas en
D7, D8, y D9; la umbilical por el diversas enfermedades neurológicas.
172 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

A
Tirohioideo
H. hioides
M. tiroaritenoideo M. ari-
aritenoideo
L. tirohioideo M. cricoaritenoideo
Cricotiroideo posterior

C. tiroides
B

L. cricotiroideo medio M tirohioideo

C. cricoides

C.V.S. C. tiroideo

C.V.I. M. tiroaritenoideo

Figura 31. Cartílagos tiroideos.

MÚSCULOS LARÍNGEOS
Figura 32. A y B: músculos laríngeos.
Cricotiroideo (Fig. 32A)

Inervación: Rama externa del nervio laríngeo


superior, que se ramifica desde el Activación: Se pide al paciente que vocalice la
punto medio del ganglio inferior del letra “i”.
nervio vago. Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
Posición: Paciente en supino con la cabeza superficial, podría entrar en el mús-
en posición neutra. Se coloca una culo esternotiroideo; y si se inserta
almohada por detrás de la espalda demasiado profundo, podría estar
para mantener la cabeza en una li- en el músculo cricoaritenoideo la-
gera hiperextensión, facilitando, así, teral (Fig. 32A).
el reconocimiento de los cartílagos Notas: En lesiones aisladas del nervio, el
tiroides y cricoides (Fig. 31). La la- paciente puede tener dificultad
ringe debe estar relajada. para alcanzar tonos altos de voz.
Inserción del La aguja (coaxial de 25 mm) se in- Si existe afectación simultánea
electrodo: serta a través de la piel, tangencial del nervio laríngeo recurrente, la
al borde superior del arco cricoi- lesión es del nervio vago o núcleo
deo en una dirección superior y vagal, y podría haber alteración de
lateral. Mientras se va avanzando, la posición y función de la cuerda
se pide al paciente que vocalice vocal.
la letra “i” para captar la activi-
dad eléctrica que es más intensa Tiroaritenoideo o vocal (Fig. 32B)
cuando el tono aumenta de inten-
sidad. Inervación: Nervio laríngeo recurrente.
Músculos comúnmente examinados 173

Posición: Paciente en supino con la cabeza


en posición neutra. Se coloca una
almohada por detrás de la espalda
para mantener la cabeza en una li-
gera hiperextensión, lo que facilita
el reconocimiento de los cartílagos
cricoides y tiroides (Fig. 31). El pa-
ciente debe estar relajado.
Inserción del El electrodo (aguja coaxial de 50
electrodo: mm) se inserta a través de la piel y la
membrana cricotiroidea. En cuanto
se atraviesa la membrana, se orienta
la dirección del electrodo alrededor
de 20º lateral y 45º proximalmente
(submucosa) para evitar entrar en la
Figura 33. Músculos intercostales.
cavidad subglótica. Existe otra téc-
nica en la que el electrodo penetra
en la cavidad subglótica y luego se
ladea. En cualquiera de las dos téc- lesionarse en tumores que invaden
nicas, el electrodo se avanza mien- el mediastino, lesiones traumáticas
tras el paciente está hablando con por intervenciones quirúrgicas y
el fin de captar la actividad eléctrica en lesiones del núcleo del nervio
del músculo. vago.
Activación: La actividad eléctrica del músculo
aumenta durante el cierre de la glo-
tis, con la vocalización de la letra MÚSCULOS RESPIRATORIOS
“i” y se modifica con la respiración
(inspiración = aumenta, espiración Intercostales (Fig. 33)
= disminuye).
Errores: Si el electrodo entra en la cavidad Inervación: Interno y externo por la división an-
subglótica, se produce un gran rui- terior de los nervios espinales de D1
do de interferencia en el electro- a D11.
miógrafo; y si se inserta demasiado Posición: Paciente en supino.
profundo, puede alcanzar el mús- Inserción del El área más accesible es la línea axilar
culo cricoaritenoideo lateral. electrodo: anterior. Se identifica el espacio in-
Notas: Los cartílagos cricoides y tiroides tercostal deseado, se coloca el dedo
(Fig. 31) están mucho más desa- índice del examinador en la costi-
rrollados en los hombres que en lla inferior, y el electrodo se inserta
las mujeres, por lo que es más fácil proximal al dedo, avanzando hasta
identificarlos y el procedimiento se atravesar la aponeurosis; momento
realiza más fácilmente en los hom- en el cual puede recogerse la activi-
bres. El nervio laríngeo recurrente dad eléctrica en cada inspiración.
en el lado derecho puede afectarse Activación: Se pide al paciente que inspire.
en pacientes con aneurismas del Errores: Si el electrodo se inserta demasiado
arco aórtico; ambos nervios pueden profundo, puede entrar en la cavi-
174 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

dad pleural con posible perforación


del pulmón; si durante la explora-
ción existe alguna duda, debe reali-
zarse una Rx de tórax, aunque esto
no es necesario en todos los casos.
Si el electrodo se inserta demasiado
superficial, puede entrar en cual-
quiera de los músculos que sujetan
la caja torácica (dorsal ancho, serra-
to anterior, pectoral mayor, pecto-
ral menor); si se inserta demasiado
cerca del borde inferior de la cos-
tilla proximal, puede lesionarse el
paquete neurovascular.
Notas: Este músculo se afecta en neuritis
intercostal (herpética), en enferme- Figura 34. Músculo diafragmático.
dades de segunda motoneurona y
raramente en radiculopatías toráci-
cas. Los intercostales se contraen pared abdominal, y posteriormen-
únicamente en inspiración forzada, te, entrará en la inserción costal del
y su parálisis produce una signifi- diafragma.
cativa disminución en la amplitud Activación: La respiración regular del paciente
de de los movimientos de la parrilla produce brotes de actividad eléctri-
costal. ca durante la inspiración y silencio
eléctrico durante la espiración. Una
Diafragma (Fig. 34) actividad eléctrica continua se ob-
tiene manteniendo una inspiración
Inervación: Nervio frénico, raíces C3, C4, C5, sostenida.
y periféricamente por nervios inter- Errores: Si el electrodo se introduce perpen-
costales D6 a D11. dicular a la piel, sin identificar el
Posición: Paciente en supino. reborde costal, puede penetrar en
Inserción del Se localiza el punto del cartílago de la cavidad abdominal; si se inserta
electrodo: la novena costilla, donde la línea cla- demasiado superficial, podría entrar
vicular paramedial corta la parrilla en los músculos de la pared abdomi-
costal. La intersección de esta línea nal; y si se inserta a más de 4-5 cm
corresponde, aproximadamente, al de profundidad, podría alcanzar la
ángulo formado por la caja torácica cavidad pleural.
y el músculo recto del abdomen. El Notas: La lesión del nervio frénico se
examinador, con la mano libre, pre- puede producir en el cuello y en
siona la pared abdominal, distal a la el mediastino (tumores o adenopa-
caja torácica y después se inserta el tías), en cirugía torácica (trasplantes
electrodo en dirección paralela al pulmonares o cardíacos), en poli-
lado posterior de la pared torácica. neuropatías o en lesiones altas de
Este electrodo atravesará la piel, la médula espinal. En este último
tejido subcutáneo y músculos de la caso la respiración se afecta grave-
Músculos comúnmente examinados 175

mente y el paciente puede morir


si no se utiliza respiración asistida.
En las lesiones unilaterales, puede
no repercutir sobre la respiración.
El nervio frénico es fundamental-
mente motor, aunque un tercio de
sus fibras son sensitivas e inervan la
pleura y pericardio; cuando se irrita
puede producir ataques de hipo. En
pacientes obesos, en los que no es
fácil identificar el reborde costal,
puede ser peligrosa la exploración
Figura 35. Esfinter rectal.

MÚSCULOS DEL DIAFRAGMA PÉLVICO


espacio intestinal; y si se inserta de-
Esfínter rectal (Fig. 35) masiado superficial, podría alcanzar
el músculo glúteo mayor.
Inervación: Nervio pudendo, división anterior Notas: Se utiliza para la evaluación del
del plexo sacro, raíces S2, S3, S4. reflejo pudendo. Se afecta en le-
Posición: Paciente en supino, con ambas siones uni o bilaterales del nervio
piernas en posición ginecológica, pudendo, a nivel pélvico o en el
exponiendo la región perineal, o plexo sacro, cauda equina o a nivel
en decúbito lateral, o de rodillas del cono medular.
apoyando los codos.
Inserción del Se recomienda una maniobra bima- Esfínter uretral (Fig. 36)
electrodo: nual. El examinador con la mano
libre cerrada, introduce el dedo Inervación: Nervio pudendo, división anterior
índice dentro del ano del pacien- del plexo sacro, raíces S2, S3, S4.
te, con el pulpejo dirigido hacia el Posición: Paciente en supino, con ambas pier-
hemiesfínter que se desea estudiar. nas en posición ginecológica para
El electrodo se inserta a dos dedos exponer la región perineal.
por fuera del recto, guiándose con Inserción del Maniobra bimanual: el examinador,
el dedo índice previamente intro- electrodo: con la mano libre cerrada, introdu-
ducido, para evitar que la punta ce el dedo índice en el recto, con
del electrodo perfore la mucosa el pulpejo en dirección anterior. El
rectal. El examinador debe tener, electrodo se inserta a dos dedos por
además, cuidado para no pincharse. delante del ano, a través de la región
(Se utiliza un electrodo de aguja de perineal; se dirige en dirección cra-
50 mm). neal con un ángulo de 45º hacia el
Activación: Se pide al paciente que contraiga el hueso púbico. El dedo del examina-
esfínter, como si tratara de impedir dor, situado previamente en el rec-
un movimiento intestinal. to, debe identificar el polo inferior
Errores: Si el electrodo se inserta demasia- de la próstata y guiar el electrodo
do profundo, podría penetrar en el para entrar en el esfínter muscular,
176 G. Goizueta San Martín, J. Pardo Fernández, E. Gutiérrez-Rivas

demasiado dorsal, puede entrar en


el esfínter rectal o en el recto; y si se
inserta demasiado profundo, puede
penetrar en la próstata.
Notas: En las mujeres está poco desarro-
llado y es difícil identificarlo. Por
otro lado, existe riesgo de infec-
ción al examinarlo por su situación
intravaginal. Su parálisis puede
producir incontinencia urinaria.
Se afecta en lesiones uni o bila-
terales del nervio pudendo, plexo
sacro, cauda equina, cono medular
y raíces S2, S3, S4. Es necesario
para el registro del reflejo bulbo-
cavernoso.

Esfínter uretral BIBLIOGRAFÍA

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Barcelona: Masson; 1994.
Figura 36. Esfínter uretral. 2. Kendall FP, Kendall E. Músculos, pruebas y funciones.
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que está situado distal a la próstata 1985.
(electrodo de aguja de 50 mm). 4. Perotto A. Anatomical guide for the electromyographer.
Illinois: Charles C Thomas Publisher; 1994.
Activación: Se pide al paciente que contraiga el
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anterior, puede entrar en el cuerpo 7. Leis AA, Trapani UC. Atlas of electromyography. New
esponjoso del músculo; si se inserta York: Oxford University Press; 2000.
OTROS ESTUDIOS NEUROFISIOLÓGICOS

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Manual EMG.indb 178 9/7/07 12:06:22
Capítulo 14

POTENCIALES EVOCADOS SOMATOSENSORIALES


T. López Alburquerque

INTRODUCCIÓN La identificación de algunos componentes de los


PESs, que son de obligada obtención, y los tiempos
Un potencial evocado somatotosensorial (PES) de conducción obtenidos mediante las latencias in-
es la manifestación eléctrica de la respuesta cere- terpicos son los parámetros de aplicación clínica más
bral o de la vía somestésica tras la aplicación de importantes. En general, un aumento de los tiempos
estímulos eléctricos, mecánicos o de otra natura- de conducción traduce la presencia de una lesión
leza en las fibras aferentes sensitivas de los nervios de tipo desmielinizante. Por el contrario, es más in-
periféricos. cierta la relación entre el descenso de la amplitud
El primer registro de un PES fue realizado y la pérdida axonal. Asimismo, existe incertidumbre
por Dawson(1), en 1947, mediante superposición sobre la exacta ubicación de los generadores anató-
fotográfica. La introducción por este mismo inves- micos de algunos componentes de los PESs y cierta
tigador de las técnicas de promediación permitió subjetividad en la evaluación de las morfologías. Fi-
separar con facilidad un PES, que posee una la- nalmente, la profusión de metodologías utilizadas
tencia y polaridad fijas, de la actividad electroen- dificulta la extrapolación de resultados, por lo que
cefalográfica de fondo, cuya amplitud puede ser es recomendable que cada laboratorio elabore sus
hasta cien veces superior, pero que al aparecer al propias tablas de normalidad.
azar queda cancelada.
El estudio de los PESs se realiza mediante téc-
nicas incruentas, de fácil aplicación clínica, que BASES ANATÓMICAS
con una metodología apropiada aportan datos ob-
jetivos sobre el funcionamiento de la vía somestési- En la conducción del estímulo eléctrico que
ca periférica y central, y potencian la sensibilidad origina el PES, participan prioritariamente las fi-
diagnóstica de la exploración neurológica, ya que bras nerviosas de mayor calibre y de conducción
pueden detectar lesiones subclínicas. Los PESs más rápida: las fibras tipo IA (aferentes musculares)
permiten el estudio de los segmentos proximales y las tipo II (aferentes cutáneas), cuya velocidad
del sistema nervioso periférico, que son inacce- de conducción es de aproximadamente 60-75 m/s
sibles a las técnicas neurofisiológicas estándar. en el antebrazo(2). En el sistema nervioso central,
Asimismo, se ha comprobado que son muy útiles el impulso es conducido ipsilateralmente por los
para monitorizar la función medular durante la cordones posteriores hasta el núcleo de Goll (nu-
cirugía de la columna vertebral y para evaluar el cleus gracilis), cuando el estímulo se aplica en los
dolor neuropático y el pronóstico del coma (ver miembros inferiores, y hasta el núcleo de Burdach
capítulos 30 y 31). (nucleus cuneatus), cuando se estimula un nervio

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180 T. López Alburquerque

de los miembros superiores. En estos núcleos se Para el estudio de ambos nervios se coloca
establece la primera sinapsis. El impulso continúa al paciente en decúbito supino, con los ojos
su trayecto por el lemnisco medio hacia el núcleo cerrados, en un medio en penumbra y aislado
ventral posterolateral contralateral del tálamo en de ruidos u otros artefactos, a una temperatura
donde tiene lugar la segunda sinapsis. Finalmente, ambiente de aproximadamente unos 23-25 ºC.
el impulso llega al área somestésica primaria del Para el registro se utilizan electrodos estándar
córtex parietal postcentral (tercera sinapsis). de EEG, que se colocan con pasta conductora y
La sección experimental de los cordones pos- cinta adhesiva. Previamente, conviene escarificar
teriores en animales(3) o la ablación criogénica del ligeramente la piel o el cuero cabelludo con una
núcleo ventral posterolateral del tálamo reducen sustancia abrasiva y limpiar bien con alcohol. La
sensiblemente, e incluso anulan el PES cerebral. impedancia debe ser inferior a 5.000 ohmios y
Por el contrario, éste no se modifica cuando la sec- uniforme en todos de los electrodos. Un tiempo
ción se limita a los fascículos espinotalámicos. Sin de análisis entre 40 y 60 ms es adecuado para el
embargo, si se aplica un estímulo suficientemente nervio mediano y entre 50 y 70 ms para el nervio
intenso (doloroso) para estimular las fibras tipos III tibial posterior. La ganancia del amplificador se
y IV, puede haber conducción extralemniscal. fija entre 5 y 10 μV/cm y la banda de frecuencias
entre 10 y 3.000 Hz. Es recomendable disponer
de un equipo con, al menos, 4 canales.
TÉCNICAS DE REGISTRO Al inicio de cada estudio se anotarán algunas
variables morfométricas del paciente, particular-
La técnica estándar consiste en la estimulación mente la longitud del brazo (muñeca-punto de
eléctrica transcutánea de nervios mixtos, particular- Erb) y la altura, para corregir las latencias absolu-
mente del nervio mediano en la muñeca y del ner- tas de los PESs.
vio tibial posterior en el tobillo, detrás del maléolo
interno. Pueden estimularse otros nervios mixtos, Nervio mediano
como el cubital en la muñeca y el peroneo común
en la fosa poplítea, o bien nervios sensitivos puros, Estimulación
como el sural detrás del maléolo externo, el femo- El nervio mediano se estimula en la muñeca,
rocutáneo a su salida del ligamento inguinal, el entre los tendones de ambos músculos palmares,
radial en el dorso de la mano y los nervios digitales colocando el ánodo sobre el pliegue de la muñeca
de los dedos de la mano. Esta técnica es útil para y el cátodo 2-3 cm proximal. Se aplican pulsos cua-
calcular la conducción nerviosa sensitiva perifé- drados de 0,1-0,2 ms de duración, preferentemente
rica cuando no se consigue obtener el potencial de corriente constante para que la intensidad de
directamente sobre el nervio. También pueden la corriente no se vea interferida por los cambios
obtenerse PESs mediante estimulación cutánea de la impedancia. La intensidad se gradúa ligera-
(PESs dermatómicos) aplicando un estímulo con mente por encima del umbral motor (15-30 mA
una intensidad de aproximadamente 2,5-3 veces el suelen ser suficientes), que se manifiesta por una
umbral sensitivo sobre el dermatoma de una deter- leve movimiento del pulgar.
minada raíz nerviosa. En estos casos la amplitud Entre 500 y 1.000 estímulos, a una frecuencia
de los PESs es menor y la morfología más variable de 3-5 Hz, suelen ser suficientes para obtener unos
que cuando se estimula un nervio mixto. PESs bien definidos. Es recomendable no utilizar
En este capítulo sólo se expondrá el procedi- una frecuencia que sea un subarmónico de 50 para
miento estándar para la obtención de los PESs de que no entre en la promediación el artefacto de la
corta latencia tras la estimulación eléctrica de los corriente alterna. Para comprobar la consistencia
nervios mediano y tibial posterior. de los distintos componentes de los PESs es preciso

Manual EMG.indb 180 9/7/07 12:06:23


Potenciales evocados somatosensoriales 181

TABLA I. Montajes para el registro de los potenciales evocados soma-


tosensoriales estimulando los nervios mediano y tibial posterior
Montajes alternativos

• Nervio mediano
- Canal 4 CPc - CPi CPc - CPi
- Canal 3 CPi - EPc CPi - EPc
- Canal 2 C5S - EPc C5S - FPZ
- Canal 1 EPi - EPc EPi - EPc

• Nervio tibial posterior


- Canal 4 CPZ - FPZ CPi - FPZ CPi - FPZ
- Canal 3 FPZ - C5S CPZ - FPZ CPZ - FPZ
- Canal 2 T12S - IC FPZ - C5S T12S - IC
- Canal 1 HP - CIR T12S - IC HP - CIR
CP: electrodos en cuero cabelludo equidistantes de C3 y P3 y de C4 y P4 Figura 1. Potenciales evocados somatosensoriales tras la estimulación del
(Sistema Internacional “10-20” para EEG); i y c: ipsi y contralateral al nervio mediano derecho. Canal 1: EPi - EPc; Canal 2: C5S - EPc; Canal 3: CPi
nervio de la extremidad estimulada; EP: electrodo en hueco supraclavi- - EPc; Canal 4: CPc - CPi (ver Tabla I). Se han excluido del análisis los 3 ms
cular (potencial de Erb); C5S: electrodo sobre la apófisis espinosa de la 5ª iniciales para evitar el artefacto del estímulo. Obsérvense los potenciales
vértebra cervical; CPz: electrodo equidistante de Cz y Pz; T12S: electrodo en de obtención obligada potencial de Erb (EP), potencial cervical (N13), los
apófisis espinosa de la 12ª vértebra dorsal; IC: electrodo en cresta ilíaca; potenciales subcorticales de campo lejano (N13/14 y N18) y el potencial
HP: electrodo en hueco poplíteo; CIR: electrodo en cara interna de la rodilla. cortical en región parietal contralateral (N20).

realizar, al menos, dos registros de cada nervio. Asi- para un estudio estándar con un equipo de 4 cana-
mismo, es muy útil llevar a cabo estudios bilaterales les, la American Electroencephalographic Society(4)
para detectar posibles asimetrías. recomienda el siguiente: canal 1 (EPi - EPc), canal
2 (C5S - EPc), canal 3 (CPi - EPc) y canal 4 (CPc
Registro - CPi) (Tabla I). Este montaje permite recoger el
El electrodo de tierra se coloca en el ante- potencial de Erb en el canal 1, el potencial cervi-
brazo, entre los electrodos estimuladores y los cal (N13) en el canal 2, los potenciales de campo
receptores. Dos electrodos se colocan en ambos lejano subcorticales (P14 y N18) en el canal 3,
huecos supraclaviculares, 2-3 cm por encima de con un electrodo parietal ipsilateral y referencial
la clavícula, lateral a la inserción del músculo extracefálico y, finalmente, en el canal 4, con un
esternocleidomastoideo en la clavícula, que se electrodo parietal contralateral, la onda N20 cor-
denominan EPi y EPc (i por ipsi y c por contra- tical (Fig. 1). Si en el electrodo cervical del canal
lateral al nervio estimulado). Otro electrodo se 2 no se identifica el potencial por excesivo ruido
coloca en columna cervical, sobre la vértebra de origen miógeno, se puede utilizar un electrodo
C5 (C5S). Finalmente, dos electrodos se sitúan referencial cefálico frontal (FPZ).
sobre cuero cabelludo, CP3 y CP4, también de- La principal ventaja de los montajes en los que
nominados CPi y CPc (ipsi y contralateral). El se utiliza un electrodo referencial cefálico es que
electrodo CP se coloca equidistante de los elec- genera menos ruido, pero cancelan o aparecen
trodos C3-P3 y C4-P4 del Sistema Internacional con baja amplitud los potenciales subcorticales de
“10-20” para EEG. campo lejano, que, por el contrario, se identifican
Aunque la elección de un determinado montaje fácilmente con electrodos referenciales extracefá-
depende de la información que se desee obtener, licos.

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182 T. López Alburquerque

Nervio tibial posterior

Estimulación
El nervio tibial posterior se estimula en el tobi- C4
llo, detrás del maléolo interno, con una intensidad
suficiente para producir un leve movimiento del
P38
primer dedo del pie. Este estímulo suele ser más N35
molesto que el aplicado en la muñeca para el ner- C3 N22
vio mediano. Si no se observara movimiento del P31
dedo, se aumentaría la intensidad hasta 3-4 veces C2
el umbral sensitivo. Para la identificación de los HP
potenciales subcorticales cerebrales y sobre todo
para la obtención de un potencial lumbar consis- 5 ms
C1
tente, se precisan, al menos, 1.000 estímulos, ya
que el cociente señal/ruido es muy bajo debido a la
excesiva distancia entre el electrodo y la médula y a
Figura 2. Potenciales evocados somatosensoriales tras la estimulación
la interferencia de potenciales miógenos originados del nervio tibial posterior derecho. Canal 1 (C1): HP - CIR; C2: T12S - IC;
en los músculos paravertebrales. A veces, es preciso C3: FPZ - C5S; C4: CPZ - FPZ (ver Tabla I). Se han excluido del análisis los 5
sedar al paciente con 5 ó 10 mg de diacepam para ms iniciales para evitar el artefacto del estímulo. Pueden identificarse los
reducir los artefactos musculares y de movimiento. componentes de obtención obligada: potencial del hueco poplíteo (HP),
potencial lumbar (N22) y el potencial cortical (P38). Asimismo, en el ca-
En los niños, se utiliza el hidrato de cloral a dosis
nal 3, con referencial extracefálico, se pueden identificar los potenciales
de 50 mg/kg de peso (dosis máxima de 1.000 mg). subcorticales de campo lejano P31 y N35.
Se recomienda una frecuencia de estímulo entre
3 y 5 Hz, ya que con frecuencias mayores de 8
Hz se observa una reducción de la amplitud del
potencial. gistrar el potencial en hueco poplíteo. La obtención
de este potencial es importante para confirmar que
Registro la intensidad del estímulo es la adecuada cuando
Para un equipo con 4 canales existen varios no es posible observar un movimiento del primer
montajes posibles, cada uno con sus ventajas e dedo. Por el contrario, tiene la ventaja de que re-
inconvenientes (Tabla I)(5). El primer montaje coge el PES cerebral colocando un electrodo en
propuesto incluye un electrodo en el hueco po- el cuero cabelludo ipsilateral (CPi) al miembro
plíteo con electrodo referencial en la cara interna estimulado, que con frecuencia es el punto donde
de la rodilla (canal 1), otro sobre la duodécima se registra una mayor amplitud (“lateralización
vértebra dorsal (T12S) con electrodo referencial paradójica”)(6). Otra posibilidad sería, en el mon-
en cresta iliaca (IC) contralateral (canal 2), un ter- taje previo, sustituir el canal con referencial ex-
cero en región frontal media (FPZ) con electrodo tracefálico (Fpz-C5S) por el registro del potencial
referencial en la 5ª vértebra cervical (C5S) (canal del hueco poplíteo (segundo montaje alternativo
3) y, finalmente, otro electrodo en región media de la Tabla I). Pueden utilizarse otras variantes,
postcentral CPZ (entre CZ y PZ) con referencial en como la utilización de electrodos referenciales a
región frontal (FPZ) (canal 4) (Fig. 2). la oreja para el PES cerebral con electrodos activos
El primer montaje alternativo de la Tabla I, ipsi y contralateral: CPc-oreja y CPi-oreja para los
propuesto por la American Electroencephalographic canales 3 y 4, asignando los canales 1 y 2 para los
Society(4), tiene el inconveniente de que no permite potenciales del hueco poplíteo y lumbar, respec-
el estudio de la vía somestésica periférica al no re- tivamente(5).

Manual EMG.indb 182 9/7/07 12:06:23


Potenciales evocados somatosensoriales 183

MORFOLOGÍA Y ORIGEN TABLA II. Generadores anatómicos de los diferentes componentes


de los potenciales evocados somatosensoriales
Las diferentes ondas o componentes de los PESs Componentes Origen
se denominan por su latencia y polaridad (P: posi-
tivo, deflexión hacia abajo; N: negativo, deflexión • Nervio mediano
hacia arriba). La morfología depende del montaje - Potencial de Erb Plexo braquial
utilizado. Algunas latencias de los diferentes picos - Potencial cervical
varían según los autores. En la Tabla II, se resu- N9 Plexo braquial
me el origen de los distintos componentes de los N11 Raíces posteriores (presináptico)
PESs. N13 Astas posteriores médula (postsináptico)
- Potencial cerebral
Miembros superiores P9 Llegada del frente al plexo braquial en axila
Potencial de Erb. Se trata de un potencial mix- P11 Raíces posteriores
to, de fibras sensitivas y motoras, con morfología P13/14 Lemnisco medio (postsináptico)
bifásica (positivo-negativa) y latencia aproximada N18 Troncoencéfalo (bulbo)
de 9 ms, que se recoge en el hueco supraclavicular N20 Córtex parietal contralateral (área 3b)
ipsilateral con electrodo referencial en punto de • Nervio tibial posterior
Erb contralateral (Fig. 1). Este potencial tiene las - Potencial lumbar (N22) Astas posteriores del cono medular
características de un dipolo con orientación dia- - Potencial cerebral
gonal propagándose en dirección proximal, cuyo P17 Porción distal del plexo lumbosacro
origen se sitúa en las grandes fibras mielínicas del P24 ¿Astas posteriores del cono medular?
plexo braquial(7). Su registro es importante porque P31 Lemnisco medio (postsináptico)
permite delimitar los segmentos periférico y central N35 Troncoencéfalo
de la vía somestésica. P38 Córtex parietal mesial contralateral
Potencial cervical. Este potencial, que se recoge
sobre la 5ª vértebra cervical (C5S), se denomina
N13, pues tiene una polaridad negativa con una los PESs. Se ha postulado que la onda N13 obtenida
latencia de aproximadamente 13 ms. En sus ramas sobre la vértebra C5 tiene un generador diferente de
ascendente y descendente puede identificarse a ve- la obtenida sobre la vértebra C2(10). Probablemente,
ces las ondas N11 y N14, respectivamente, así como esta última sea el resultado de un frente ascendente
un potencial previo (la onda N9) cuyo origen es el conducido por los cordones posteriores a su llegada
mismo que el potencial de Erb en hueco supraclavi- al nucleus cuneatus.
cular (Fig. 1). El componente N11 es un potencial Potencial cerebral. Los diferentes componentes
presináptico que se origina a la llegada del impulso del PES cerebral se dividen en potenciales de corta,
a las raíces dorsales(8). La onda N13 es un potencial media y larga latencia. Los de corta latencia se in-
estacionario postsináptico que se origina en las astas cluyen en los primeros 25 ms cuando se estimula el
dorsales de la médula, resultado de un dipolo ho- nervio mediano en la muñeca y 50 ms para el tibial
rizontal con positividad anterior(9). La orientación posterior detrás del maléolo interno. Los potenciales
del dipolo justifica la utilización un electrodo refe- de larga latencia se sitúan por encima de los 100 ms
rencial cervical anterior para aumentar su ampli- y los de media latencia en el segmento intermedio.
tud. El hecho de que este potencial esté generado Mientras que los potenciales de corta latencia de-
por las interneuronas de las astas posteriores de los penden de las propiedades físicas y temporales del
segmentos caudales de la médula cervical significa estímulo (variables exógenas), los componentes de
que no está mediado por el sistema de cordones larga latencia, con mayor amplitud y distribución
poteriores/lemnisco medio, que conduce el resto de bilateral, tienen un substrato anatómico incierto, y

Manual EMG.indb 183 9/7/07 12:06:24


184 T. López Alburquerque

se afectan por el estado psicológico del paciente tencia de aproximadamente 22 ms (N22). Es un


(sueño, nivel de conciencia, habituación y funciones potencial estacionario postsináptico, generado por
cognitivas). Al tener un tiempo de recuperación de las neuronas de las astas posteriores del cono medu-
varios segundos, sólo se pueden registrar con bajas lar, que forman un dipolo de orientación horizontal
frecuencias de estímulo (inferior a 0,2 Hz). con positividad anterior en abdomen(16). Si se colo-
Se denominan potenciales de campo cercano ca otro electrodo en la columna cervical (C2S), se
aquellos que se recogen bajo el electrodo y pe- puede recoger un potencial negativo postsináptico,
queños cambios de éste modifican su amplitud y con una latencia aproximada de 29 ms (N29), que
morfología. Los potenciales de campo lejano se se origina en el nucleus gracilis(17), aunque para su
recogen en una extensa área sobre el cuero cabellu- obtención es preciso promediar un gran número
do, ipsi y contralateralmente, tiene una polaridad de estímulos(5).
positiva y son monofásicos y de baja amplitud, e Potencial cerebral. El PES cerebral por esti-
indican un frente que se aproxima hacia el elec- mulación del nervio tibial posterior muestra una
trodo activo. Estos potenciales se obtienen con un morfología diferente al N20 del nervio mediano por
electrodo referencial extracefálico (en CPi - EPc encontrarse el área somestésica primaria del pie en
del montaje propuesto), ya que con un electrodo la parte mesial del lóbulo parietal, orientado hacia
referencial cefálico (FPZ) sufren cancelación. la cisura interhemisférica. Con un electrodo medio
Los potenciales de campo lejano al estimular el frontal y referencial extracefálico (FPz-C5S), se
nervio mediano se denominan P9, P11, P13/14 y pueden identificar, aunque de forma inconstante,
N18 (Fig. 1). El P9 se origina en las fibras gruesas unos potenciales subcorticales de campo lejano
nerviosas a su llegada al plexo braquial en axila; el denominados P17, P24 y P31. Para su obtención
P11, en raíces dorsales a su entrada en la médula. El es preciso promediar un elevado número de estí-
complejo P13/14 es un potencial postsináptico que mulos, y con frecuencia aumentar la intensidad
se origina en el lemnisco medio, aunque probable- del estímulo(18). El potencial P17, como el P9 del
mente tenga dos generadores diferentes(11). El poten- nervio mediano, se origina en la porción distal del
cial N18 tiene su origen en el troncoencéfalo, proba- plexo lumbosacro. El potencial P24 probablemen-
blemente en el bulbo (nucleus cuneatus)(12,13). te corresponde al N22 lumbar, y el P31, al igual
El primer potencial de campo cercano se de- que el P14 del nervio mediano, es un potencial
nomina N20 y se recoge en la región postcentral postsináptico originado en el lemnisco medio. Este
contralateral (CPc - CPi). El electrodo referencial potencial es seguido, aunque de forma inconstante,
ipsilateral (CPi) cancela todos los potenciales de por el potencial N35, que se considera el equivalen-
campo lejano, particularmente la onda N18 (Fig. te del N18 del nervio mediano, ya que presenta una
1). La onda N20 traduce la llegada del estímulo al distribución encefálica bilateral, pudiendo recoger-
córtex parietal contralateral (área 3b, detrás de la se en amplias regiones del cuero cabelludo.
cisura de Rolando), ya que tiene una distribución El potencial de campo cercano denominado
muy restringida en esta área(14). Probablemente, es P38 es análogo al N20 del nervio mediano y repre-
la manifestación de un dipolo tangencial que forma senta la llegada del estímulo al córtex somestésico
con la onda P20, que se recoge en región frontal, primario. Este potencial se recoge mejor en la línea
por delante de la cisura de Rolando(15). media (CPZ-FPZ) y en el hemisferio ipsilateral (CPi-
FPZ), unos dos centímetros lateral a línea media,
Miembros inferiores debido a que la representación cortical del pie,
que se encuentra en la región mesial del lóbulo
Potencial lumbar parietal, proyecta un campo eléctrico de orienta-
En la región lumbar (T12S-IC), se recoge un ción dominante sobre la región ipsilateral del cuero
potencial de polaridad negativa, que tiene una la- cabelludo (“lateralización paradójica”)(6,18).

Manual EMG.indb 184 9/7/07 12:06:24


Potenciales evocados somatosensoriales 185

INTERPRETACIÓN TABLA III. Parámetros de interés clínico en el estudio de los po-


tenciales evocados somatosensoriales: componentes de obtención
Las variables de mayor interés clínico son la obligada, latencias interpicos y absolutas
identificación de los componentes de obtención Nervio mediano
obligada y las latencias interpicos(4). También se • Latencias absolutas Obtención obligada
pueden valorar las latencias absolutas, las ampli- - Potencial de Erb Sí
tudes y la morfología (Tabla III). - N13 cervical Sí
Los componentes de aparición obligada para - P14 cerebral Sí
el nervio mediano son los potenciales de Erb, el - N18 cerebral Sí
cervical N13 y los cerebrales P14, N18 y N20; y - N20 cerebral Sí
para el nervio tibial posterior, los potenciales del • Intervalo interpicos Tiempo de conducción
hueco poplíteo, el lumbar N22 y el cerebral P38. - Potencial de Erb - N13 cervical Periférico proximal
Ante la ausencia de los potenciales espinales, par- - Potencial de Erb - N20 cerebral Periférico proximal y central
ticularmente el lumbar N22, hay que mostrar cier- - N13 cervical - P14 cerebral Medular cervical
ta cautela, pues su obtención suele ser difícil en - P14 cerebral - N20 cerebral Segmento intracraneal
personas obesas o cuando el cociente señal/ruido - N13 cervical - N20 cerebral Central
es muy bajo. En estos casos, es preciso promediar
un elevado número de estímulos y sedar al pacien- Nervio tibial posterior
te antes de confirmar su abolición, sobre todo en • Latencias absolutas Obtención obligada
aquellos casos en los que se evoca un potencial - Hueco poplíteo Sí
cerebral normal. - N22 lumbar Sí
Para el cálculo de los intervalos interpicos, se - P31 cerebral No
asume que los distintos componentes de los PESs - N35 cerebral No
se generan secuencialmente y la diferencia entre - P38 cerebral Sí
sus latencias traduce el tiempo de conducción • Intervalo interpicos Tiempo de conducción
del impulso nervioso entre las diversas estructu- - N22 lumbar - P38 cerebral Central
ras anatómicas generadoras. Tienen la ventaja de - N22 lumbar - P31 cerebral Medular
que son relativamente independientes de las va- - P31 cerebral - P38 cerebral Segmento intracraneal
riables morfométricas y de las alteraciones de la
conducción periférica. En la Tabla III, se resumen realizarse mediante la diferencia de latencia del
los intervalos interpicos de mayor utilidad clínica. potencial N22 lumbar y el componente P31 del
En miembros superiores, mediante la diferencia PES cerebral, cuando se obtiene. También puede
de latencias entre el potencial de Erb y la onda calcularse el tiempo de conducción del segmento
N13 del PES cervical, puede calcularse el tiempo intracraneal (P31-P38).
de conducción periférica proximal (plexo y raíces Las latencias absolutas de los potenciales espi-
dorsales). La diferencia de latencias entre las ondas nales y cerebrales se correlacionan con la longitud
N13 del PES cervical y N20 del PES cerebral se de la extremidad y la altura del sujeto. Por lo tanto,
considera el tiempo de conducción central. Otras deben tenerse en cuenta estas variables en la inter-
medidas que pueden realizarse son el tiempo de pretación de los resultados. También influyen la
conducción periférico proximal y central (poten- temperatura y la edad. Los valores de conducción
cial de Erb-N20) y medular cervical (N13-P14). del adulto en la vía somestésica periférica y central
Para el nervio tibial posterior, el tiempo de con- se alcanzan hacia los 2 y 5 años, respectivamente(19).
ducción central corresponde al intervalo entre los En ancianos se observa un aumento de las latencias
picos N22 del potencial lumbar y el P38 cerebral. absolutas. La latencia N20 varía ligeramente con
Una estimación de la conducción medular puede el grado de alertamiento del sujeto.

Manual EMG.indb 185 9/7/07 12:06:25


186 T. López Alburquerque

El límite superior de la normalidad, tanto para aumento de la latencia o con la pérdida de algunos
las latencias interpicos como absolutas debe esta- de los componentes de los PESs(20). El especta-
blecerse por encima de las 2,5 ó 3 desviaciones cular desarrollo de las técnicas de neuroimagen,
estándar de las tablas normativas, aunque esto su- particularmente de la resonancia magnética, ha
ponga un aumento de falsos negativos. En lesiones restringido sensiblemente la indicación del estudio
unilaterales, es muy útil la comparación con el de los PESs en el diagnóstico clínico.
lado sano.
La medida de la amplitud pueden realizarse Sistema nervioso periférico
indistintamente utilizando los criterios base-pico
o más fácilmente pico-pico. Debido a que las am- Estimulando en dos puntos de un nervio sen-
plitudes de los PESs son muy variables y no siguen sitivo periférico (p. ej., el nervio sural) es posible
una distribución normal, no se utilizan los valores calcular la velocidad de conducción periférica
absolutos en clínica. Su interpretación debe reali- cuando, como ocurre en las neuropatías severas,
zarse con cautela. En general, suele considerarse debido a la dispersión del impulso, no se evoca el
anormal una diferencia superior al 50% entre am- potencial sensitivo directamente sobre el nervio(21).
bos lados. La alteración de la amplitud o la ausen- Por el contrario, la estimulación de las escasas fi-
cia de un componente es un hallazgo inespecífico, bras residuales es suficiente para obtener un PES
ya que puede significar indistintamente, bien una debido a una reorganización y amplificación de los
alteración o bloqueo de la conducción, bien una impulsos en estructuras centrales, posiblemente
pérdida axonal o neuronal de la estructura gene- talámicas(22). Este fenómeno ha sido demostrado
radora del potencial. mediante la isquemia inducida en sujetos normales
La alteración de la morfología (distorsión o y pacientes diabéticos(23). Asimismo, resultan útiles
desincronización del potencial) entraña un im- en el estudio de algunas mononeuropatías, como
portante componente subjetivo y sólo debe con- la meralgia parestésica por afectación del nervio
siderarse anormal si asocia a un alargamiento de femorocutáneo, donde las técnicas convencionales
la latencia(4). son difíciles de aplicar(24).
Particular interés tiene la aplicación de los PESs
en la detección de las lesiones de los segmentos
APLICACIÓN CLÍNICA proximales del SNP de las polineuropatías(25). En
el síndrome de Guillain-Barré, pueden observarse
El estudio de los PESs permite detectar alte- alteraciones en los plexos o las raíces, cuando el
raciones subclínicas y confirmar o identificar una estudio de conducción de los troncos nerviosos es
alteración de la vía somestésica periférica o central normal(26). En las lesiones del plexo braquial, puede
en pacientes que refieren síntomas sensitivos con desaparecer el potencial de Erb y alterarse el PES
sospecha de funcionalidad. Son particularmente cervical (ausencia de la onda N9 y descenso de la
útiles en pacientes con lesiones de los cordones amplitud del componente N13). Asimismo, puede
posteriores de la médula o del lemnisco medio en estar abolida la onda P9 del PES cerebral.
el troncoencéfalo. Por el contrario, los PESs suelen En el síndrome del desfiladero torácico, los
ser normales en las alteraciones de la sensibilidad PESs tienen escaso valor diagnóstico, pues no
termoalgésica. aportan una información adicional a la obtenida
En general, las alteraciones que se observan mediante la electromiografía de aguja convencio-
pueden ser debidas a una pérdida neuronal o axo- nal y el estudio de conducción nerviosa(20). En este
nal, que se traduce eléctricamente por una reduc- caso, se estimula el nervio cubital en la muñeca
ción de la amplitud o una ausencia de respuesta. para evaluar la conducción en el tronco primario
Las lesiones de tipo desmielinizante cursan con un inferior y cuerda medial (raíces C8-T1). Suelen

Manual EMG.indb 186 9/7/07 12:06:25


Potenciales evocados somatosensoriales 187

ser normales cuando no existen manifestaciones partes de los pacientes con espondiloartrosis cer-
clínicas. vical, particularmente asociada a mielopatía, aun-
En las radiculopatías, no aportan más informa- que no es buena la correlación con los hallazgos
ción que la puede obtenerse con la electromiografía radiológicos(32).
convencional (ver capítulo 18). Suelen ser norma- En la siringomielia se ha observado una altera-
les en las radiculopatías aisladas cuando se estimula ción del potencial N13 cervical recogido a nivel C5
un nervio mixto. Se alteran mayormente cuando (C5S), frente a una normalidad de los potenciales
hay una lesión multirradicular, como en la esteno- P14 y N19 cerebrales. Este hallazgo apoya el origen
sis del canal lumbar. En extremidades superiores, postsináptico de la onda N13 en las astas posterio-
se altera el potencial N13 cervical, mientras que el res de la médula y probablemente su transmisión
potencial de Erb es normal. Pueden aportar alguna por fibras de conducción más lenta (Aδ y C), a
información adicional los PESs segmentarios, es diferencia de la conducción cordonal posterior del
decir, los que se obtienen al estimular un nervio resto de los potenciales(33).
sensitivo puro(27), y los PES dermatómicos(28,29), Desde hace más de 20 años, se han introducido
aunque esta opinión no es compartida por otros los PESs en la monitorización la vía somestésica
autores(30). Más útil es la utilización de los PESs en medular durante las intervenciones quirúrgicas de
la evaluación de las multirradiculopatías de origen columna, particularmente para la corrección de la
espondiloartrósico, particularmente en la estenosis escoliosis. Su aplicación mediante protocolos espe-
del canal lumbar(31). cíficos reduce en un 50% los déficits neurológicos
posquirúrgicos(34) (ver capítulo 31).
Sistema nervioso central Una alteración de los PESs (normalmente,
prolongación de la latencia) se observa en casi el
Prácticamente los PESs se han investigado en 90% de los pacientes con esclerosis múltiple defi-
todas las enfermedades del SNC, pero en la ma- nida(35). La sensibilidad aumenta cuando se esti-
yoría de los casos su realización supone un estu- mula el nervio tibial posterior(36). Aunque pueden
dio redundante que no aporta datos adicionales detectarse lesiones desmielinizantes subclínicas, el
de interés clínico a los hallazgos de las pruebas de valor diagnóstico de los PESs ha sido ampliamente
neuroimagen. En general, se encontrarán alterados superado por las pruebas de neuroimagen, como
en todos aquellos procesos que de forma directa o la resonancia magnética(37). Los PESs también se
indirecta afecten a la vía somestésica central. Las encuentran alterados en las leucodistrofias.
mielopatías cervicales altas y las lesiones del tron- El mioclono de origen cortical, a diferencia
coencéfalo cursan con un potencial cervical N13 de las alteraciones normalmente observadas que
normal y una alteración del potencial P14 cerebral. cursan con reducción de la amplitud de los PES,
En las lesiones rostrales al troncoencéfalo, se re- se asocia a un PES cerebral de gran amplitud, que
gistra un P14 normal, frente a una alteración del traduce la existencia de una hiperexcitabilidad cor-
componente N20(5). En las lesiones cerebrales, la tical(38). Son útiles para diferenciar las mioclonías
correlación clínica-PES es menos precisa. corticales de las de otro origen(39).
Se han descrito alteraciones de los PESs en la Los PESs son una importante prueba comple-
ataxia de Friedreich, la degeneración combinada mentaria no invasiva en el diagnóstico y pronóstico
subaguda, el corea de Huntington, las degenera- del coma. Tiene una sensibilidad superior a los
ciones espinocerebelosas y en las mielopatías de potenciales evocados auditivos de troncoencéfalo,
diversa etiología (espondiloartrosis, traumatismos, que no exploran el bulbo, donde se localizan los
tumores, malformaciones arteriovenosas, paraple- centros vitales de la respiración y circulación. La
jía espástica hereditaria, radioterapia en cáncer de ausencia bilateral del PES cerebral conlleva mal
pulmón, etc.)(20). Están alterados en las dos terceras pronóstico, particularmente en el coma hipóxico,

Manual EMG.indb 187 9/7/07 12:06:25


188 T. López Alburquerque

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Manual EMG.indb 190 9/7/07 12:06:26
Capítulo 15

ESTIMULACIÓN MAGNÉTICA CENTRAL Y PERIFÉRICA


N. Raguer Sanz

INTRODUCCIÓN transcraneal produce potenciales evocados motores


(PEM) contralaterales, debido a la activación de
Aunque ya se había descrito previamente la es- las neuronas de la vía corticoespinal, y se utiliza,
timulación eléctrica del córtex cerebral expuesto, fundamentalmente, para la exploración de las áreas
no fue hasta 1980 cuando Merton y Morton(1) lo- motoras corticales y la conducción de la vía corti-
graron activar la corteza motora a través del cuero coespinal, aunque puede utilizarse en el estudio de
cabelludo intacto mediante estimulación eléctri- diversas funciones cerebrales más sofisticadas. En
ca de alto voltaje. Esta técnica, la estimulación este capítulo se exponen los principios técnicos y
eléctrica transcraneal (EET), se mostró útil en el fisiológicos de la estimulación magnética transcra-
estudio de las vías centrales motoras, aunque las neal, se describen las principales técnicas de aplica-
molestias asociadas a los estímulos de alto volta- ción clínica, y se citan algunas, más sofisticadas, de
je ha limitado su aplicación clínica. Debido a la aplicación en el campo de la investigación.
alta resistencia que ofrecen el cuero cabelludo y
el cráneo al paso de corriente eléctrica, la mayor
parte de ésta fluye a través de la piel y tejido sub- PRINCIPIOS TÉCNICOS
cutáneo, provocando contracción de la muscula-
tura del cuero cabelludo y activación de las fibras La estimulación magnética transcraneal está ba-
nociceptivas cutáneas, lo que resulta doloroso para sada en el principio de inducción electromagnética
la mayoría de los sujetos. de Faraday, por el cual el flujo de una corriente
Introducida en 1985 por Barker y cols.(2) la eléctrica en un primer circuito inducirá un campo
estimulación magnética transcraneal (EMT) ha magnético variable en tiempo, que a su vez provo-
demostrado ser una técnica mucho más adecuada cará una corriente eléctrica en un segundo circui-
para la aplicación clínica. Basada en la aplicación to. En la estimulación magnética transcraneal la
de un campo magnético breve y potente sobre el descarga brusca de condensadores de alto voltaje a
cuero cabelludo, se produce la activación del cór- través de una bobina de cable de cobre, genera un
tex cerebral de forma indolora. El cuero cabelludo campo magnético transitorio en torno a la bobina
y el cráneo presentan escasa impedancia al paso de de 1-2 Teslas en unos 50 μs. La rápida variación
un campo magnético, penetrando éste fácilmen- temporal del campo magnético es capaz de inducir
te hasta el tejido cerebral. La corriente eléctrica una corriente en otro conductor, como es el cerebro
inducida en el cuero cabelludo es de magnitud humano. Debido a la baja impedancia que presen-
muy similar a la inducida en el cerebro, causando tan el cuero cabelludo y el cráneo al paso de un
poca molestia local. La estimulación magnética campo magnético, éste penetra fácilmente hasta el

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192 N. Raguer Sanz

inducen una máxima corriente de estimulación


en una zona anular en el borde de la bobina y se
B puede activar un volumen considerable de tejido
cerebral, lo que permite una estimulación bihe-
A misférica. Son las que se utilizan para los estudios
de conducción central motora(3). Para aumentar
la focalidad de la estimulación se han diseñado
bobinas en forma de 8, en las que el campo mag-
nético en el centro es el doble al de la zona lateral.
C A intensidades de estimulación bajas o moderadas
se puede considerar que la activación es focal y
Figura 1. Tipos de bobinas más utilizadas. A: bobina circular; B: bobina ocurre sólo en el punto de intersección de la figura
focal en ocho; C: bobina parabólica. de 8, lo que permite un mapeo de la representación
cortical(4). Existen también bobinas parabólicas o
cónicas, útiles para estimular estructuras corticales
tejido cerebral sin apenas atenuación, produciendo profundas, como el área motora de extremidades
mucha menos molestia que la estimulación eléc- inferiores.
trica transcraneal. La profundidad de penetración La orientación de la bobina influye también
del campo magnético inducido por la estimulación en la activación del sistema nervioso. Así, se ha
magnética transcraneal se limita a pocos centíme- demostrado mediante bobinas focales que el menor
tros, ya que la intensidad del campo magnético de- umbral de excitabilidad del área motora cortical
cae rápidamente con la distancia desde la bobina. de representación de la mano se obtiene cuando
Las bobinas de estimulación magnética pueden la corriente fluye en la bobina en dirección poste-
tener distinta morfología (Fig. 1). Las más utiliza- roanterior perpendicularmente a la cisura central(5)
das son circulares, con un diámetro de 8-12 cm; (Fig. 2). La frecuencia de los estímulos aplicados

Figura 2. Localización de las bobinas. Con una bobina circular centrada en el vértex se logra estimular el área motora cortical representativa de la
mano (A). Con una bobina focal en 8 se consigue la máxima estimulación del área motora cortical representativa de la mano cuando la corriente fluye en
dirección póstero-anterior, perpendicularmente a la cisura central (B).

Manual EMG.indb 192 9/7/07 12:06:27


Estimulación magnética central y periférica 193

ha demostrado ser una variable importante en el neurona del asta anterior. Así pues, la duración y
efecto que provocan sobre el tejido nervioso ce- complejidad del potencial evocado motor (PEM)
rebral y es la base de la estimulación magnética puede ser mayor al potencial de acción muscular
transcraneal repetitiva. La morfología del impulso compuesto (CMAP) obtenido por estimulación
aplicado (monofásico o bifásico) parece influir tam- nerviosa periférica supramáxima. Estos hallazgos
bién en las poblaciones de células estimuladas. La sugieren que la facilitación de los potenciales evo-
estimulación bifásica resulta ser más eficaz que la cados motores por contracción muscular mínima
monofásica en la estimulación del área motora de dependen no sólo del reclutamiento adicional de
la mano(6). motoneuronas de mayor umbral, sino también
de la descarga múltiple de las mismas unidades
motoras(8).
FISIOLOGÍA DE LA ACTIVACIÓN En el adulto, la estimulación magnética trans-
craneal evoca, fundamentalmente, respuestas
A diferencia de la estimulación eléctrica trans- motoras en la musculatura contralateral al córtex
craneal, la estimulación magnética transcraneal motor estimulado, a excepción de musculatura
a bajas intensidades provoca una activación pre- facial y axial, que recibe proyecciones de ambos
ferentemente transináptica de las neuronas de la hemisferios(9).
vía corticoespinal, evocando ondas I o indirectas. En la práctica clínica, esta técnica se utiliza
Cuando el estímulo aplicado es de alta intensidad para evaluar la integridad del sistema motor desde
produce múltiples descargas corticoespinales des- el córtex y a través de las fibras rápidas del tracto
cendentes, la onda D o directa, de latencia más corticoespinal cruzado.
corta, seguida de múltiples ondas I. El punto de
activación de la onda D ocurre probablemente
en la porción proximal del axón corticoespinal, PARÁMETROS DE LA ESTIMULACIÓN MAGNÉTICA
mientras que la activación de la onda I tiene lugar TRANSCRANEAL
a través de la excitación de los axones corticocor-
ticales o talamocorticales, que a su vez conectan Umbral motor
con las células corticoespinales(7). La activación
voluntaria de las neuronas motoras corticoespina- El umbral motor (UM) es la mínima intensi-
les sigue un patrón de reclutamiento de las más dad de estimulación que es capaz de provocar un
pequeñas (y de conducción más lenta) con esfuer- potencial evocado motor de mínima amplitud, y
zos mínimos, a la activación de las motoneuronas se calcula valorando la intensidad de estimula-
más grandes (y de conducción más rápida) a la ción que evoca un potencial de acción motor de
máxima contracción. La estimulación magnética ≥ 100 μV en la mitad de las estimulaciones apli-
transcraneal sigue un patrón similar, con activa- cadas (5 de 10). Puede valorarse en reposo (UM
ción a bajas intensidades de unidades motoras en reposo) o durante mínima contracción (UM
más lentas, con latencias más largas, mientras que activo), que es siempre menor que el UM en re-
mayores intensidades activan unidades motoras poso(10). El umbral motor refleja la excitabilidad
más rápidas. de las motoneuronas corticales y espinales. Existe
La descarga corticoespinal descendente es una gran variabilidad interindividual, aunque en
transmitida de forma predominante o exclusiva- un individuo el umbral motor presenta buena
mente monosináptica a las motoneuronas espina- reproducibilidad y escasa diferencia interhemis-
les. Un estímulo magnético único puede provocar férica. No se afecta por fármacos moduladores de
varias descargas corticoespinales descendentes neurotransmisores (GABA, glutamato, dopami-
(D e I) y a su vez múltiples disparos en la moto- na, serotonina), mientras que los que bloquean

Manual EMG.indb 193 9/7/07 12:06:27


194 N. Raguer Sanz

los canales de membrana voltaje-dependientes ción debido a una interrupción o degeneración


lo aumentan. Esto sugiere que el umbral motor del tracto corticoespinal; b) una importante
refleja la excitabilidad de membrana dependien- disminución de la excitabilidad de las neuronas
te de canales iónicos de los axones corticocor- corticoespinales y/o espinales; y c) el bloqueo de
ticales excitados por la estimulación magnética la conducción intracortical a lo largo de los ele-
transcraneal. mentos neurales responsables de la generación
de ondas I.
Potenciales evocados motores
Tiempo de conducción motora central
Los potenciales evocados motores (PEM) pue-
den registrarse con el individuo en reposo o durante La latencia de los potenciales evocados motores
una mínima contracción voluntaria del músculo tras la aplicación de la estimulación transcraneal
(facilitación). Los obtenidos tras facilitación son de refleja el tiempo necesario de despolarización de
mayor amplitud y menor latencia que los obtenidos las neuronas corticoespinales, la conducción de
en reposo, y son los que se utilizan en la aplicación las mismas, el tiempo de activación de las moto-
clínica. La amplitud del potencial evocado motor neuronas espinales y la conducción de las mismas
es de una gran variabilidad, lo que refleja no sólo hasta la activación de los músculos eferentes. Por
el número de neuronas, sino su excitabilidad. Debe tanto, la latencia absoluta del PEM es una medida
valorarse la amplitud de los potenciales evocados del tiempo de conducción de las neuronas de la
motores en relación con el potencial motor perifé- vía corticoespinal y de las motoneuronas espinales.
rico (CMAP), según la siguiente fórmula(10): El tiempo de conducción motor central (TCMC)
se calculará extrayendo de la latencia total del po-
PEM tencial evocado motor el tiempo correspondiente a
PEM % = × 100
CMAP la activación periférica. Existen dos fórmulas para
este cálculo.
Este porcentaje estima la proporción de la po- a) A partir de la estimulación radicular: se realiza
blación de motoneuronas espinales que son acti- una estimulación radicular mediante la bobina
vadas por la estimulación magnética transcraneal. magnética a nivel cervical o lumbar según se
La amplitud del potencial evocado motor aumenta evalúe la estimulación magnética transcraneal
con la intensidad de estimulación y con la activa- en extremidades superiores o inferiores. Se
ción voluntaria del músculo diana o, en menor realiza la sustracción de la latencia de la esti-
grado, con la activación de otros músculos. Pro- mulación radicular a la latencia absoluta para
bablemente contribuyen a esta facilitación tanto calcular el trayecto central (Figs. 3 y 4).
mecanismos corticales como espinales. A pesar de
utilizar máximas intensidades de estimulación y TCMC =
facilitación, el porcentaje del potencial evocado latencia PEM cortical – latencia estimulación radicular
motor es habitualmente inferior al 100%. La me-
dida del PEM tiene dos limitaciones fundamen- b) A partir del cálculo de respuestas F: la latencia
tales: la considerable variabilidad entre ensayos, de las respuestas F nos permite valorar el tiempo
y el fenómeno de cancelación de fases, debido a de conducción de las motoneuronas espinales.
la desincronización en la activación de las moto- Si se resta a la latencia cortical este resultado,
neuronas espinales, que comporta una reducción puede valorarse el trayecto central:
de su amplitud.
La ausencia de los potenciales evocados mo- F + LMD – 1
TCMC = latencia PEM cortical –
tores puede indicar: a) fallo completo de conduc- 2

Manual EMG.indb 194 9/7/07 12:06:28


Estimulación magnética central y periférica 195

Figura 3. Estimulación magnética transcraneal en extremidades superiores. Registro en músculo abductor corto del pulgar. A: estimulación nerviosa
eléctrica en muñeca; B: estimulación magnética cervical; C: estimulación magnética cortical en reposo; D: estimulación magnética cortical con activación
voluntaria. Tiempo de conducción central (TCMC) calculado por la diferencia de latencias de la respuesta, tras la estimulación cortical y cervical.

donde F corresponde a la latencia mínima de TÉCNICAS NO RUTINARIAS DE LA ESTIMULACIÓN


ondas F y LMD a la latencia motora distal. MAGNÉTICA TRANSCRANEAL
Los tiempos de conducción motora central
calculados mediante la sustracción de la estimula- Período silente
ción radicular, son algo superiores a los calculados
mediante las latencias F, ya que la estimulación Consiste en la interrupción de la actividad elec-
radicular no produce la activación del cuerpo neu- tromiográfica tónica voluntaria de un músculo por
ronal, sino del axón a nivel radicular. la estimulación del córtex motor contralateral a
De forma convencional se recomienda el cálculo intensidad supraumbral. La duración del período
del TCMC durante la contracción muscular (del silente (PS) se calcula desde el final del potencial
10-20% máxima) usando intensidades del 120-150% evocado motor al momento en que la actividad
superiores al umbral motor. electromiográfica vuelve al 50% del nivel previo
Un tiempo de conducción motor central au- al estímulo. La duración del PS varía con la in-
mentado sugiere: a) desmielinización; b) degenera- tensidad del estímulo. La primera parte refleja la
ción axonal de las fibras corticoespinales de mayor inhibición espinal, mientras que la última parte
diámetro; o c) desincronización en la descarga de se debe a inhibición cortical(11). La duración se
las fibras corticoespinales, con una sumación tem- modifica por fármacos que actúan sobre los siste-
poral menos efectiva a nivel de las motoneuronas mas dopaminérgico y gabaérgico. También existe
espinales. un período de silencio por estimulación del córtex

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196 N. Raguer Sanz

Figura 4. Estimulación magnética transcraneal en extremidades inferiores. Registro en músculo tibial anterior. A: estimulación nerviosa eléctrica en
cabeza de peroné; B: estimulación magnética lumbar; C: estimulación magnética cortical en reposo; D: estimulación magnética cortical con facilitación.
Tiempo de conducción central (TCMC) calculado por la diferencia de latencias de la respuesta, tras la estimulación cortical y lumbar.

motor ipsilateral, que probablemente refleje la in- Triple estimulación


hibición transcallosa(12).
Es un protocolo de estimulación desarrollado
Estimulación dual: inhibición intracortical y facilitación recientemente(14), que combina la estimulación
intracortical magnética transcraneal con estímulos eléctricos
periféricos a nivel de plexo y nervio, que me-
Consiste en la modulación de la amplitud del diante fenómenos de colisión, permite suprimir
potencial evocado motor a un estímulo test cuan- la desincronización del potencial evocado mo-
do se aplica un estímulo condicionante previo de tor, con lo que se puede cuantifi car mejor su
intensidad subumbral a distintos intervalos. A inter- amplitud.
valos interestímulos cortos (1-5 ms), se produce una
disminución del potencial evocado motor, mientras Mapping cerebral
que a intervalos largos (7-20 ms), se produce una
potenciación (Fig. 5). Estos fenómenos, que se La estimulación mediante una bobina focal
denominan inhibición intracortical (IIC) y facili- en múltiples puntos de la calota craneal permite
tación intracortical (FIC), tienen un origen cortical realizar una representación somatotópica del área
y están influenciados por el sistema GABA-A y glu- motora de distintos músculos(15). Se ha utilizado
tamatérgico, mientras que los fármacos que actúan para valorar fenómenos de plasticidad neuronal y
sobre los canales iónicos no los modifican(13). reorganización representacional.

Manual EMG.indb 196 9/7/07 12:06:28


Estimulación magnética central y periférica 197

Estimulación magnética transcraneal repetitiva

La estimulación magnética transcraneal repe-


tida en un punto de la calota craneal a distintas
frecuencias puede producir cambios transitorios
de la excitabilidad cortical, con interrupciones o
depresiones de la actividad cerebral (a bajas fre-
cuencias de estimulación), o bien facilitando la
actividad cerebral (generalmente a altas frecuen-
cias de estimulación)(17). Los mecanismos implica-
dos en la modulación de la excitabilidad cortical
mediante la estimulación magnética transcraneal
repetitiva (EMTr) no son del todo conocidos. La
durabilidad de los cambios de excitabilidad produ-
cidos ha abierto nuevas aplicaciones terapéuticas
y científicas. Así, se ha utilizado la EMTr para la
localización del área del lenguaje, en la terapia
de la depresión u otros trastornos psiquiátricos, en
trastornos de movimiento, epilepsia, tratamiento
del dolor, etc. No obstante, los resultados no son
totalmente concluyentes, y la posibilidad de com-
plicaciones hace que esta técnica deba utilizarse
con prudencia.

ASPECTOS PRÁCTICOS DE LA ESTIMULACIÓN MAGNÉTICA


Figura 5. Estimulación dual: inhibición intracortical y facilitación
TRANSCRANEAL
intracortical. Registro en músculo abductor corto del pulgar. Estímulo
test de intensidad del 120% del umbral motor en reposo. Estímulo con- Recomendaciones prácticas
dicionante de intensidad subumbral (80% del umbral motor en reposo)
precediendo al estímulo test a intervalos inter-estímulos (IIE) de 1, 3, 5,
Es recomendable realizar los estudios de esti-
7, 10, 15 y 20 ms.
mulación magnética transcraneal con el paciente
cómodamente sentado o en decúbito supino, en un
Fatiga central ambiente relajado y vigilando su estado de alerta,
impidiendo la somnolencia.
El ejercicio prolongado puede alterar la am- Para el registro del potencial evocado motor se
plitud del potencial evocado motor(16) a través de utilizan electrodos de superficie, situando el elec-
mecanismos centrales. El efecto de la fatiga central trodo activo sobre el punto motor y el referencial a
puede cuantificarse mediante la medida de la am- 2-5 cm, para asegurar valores bajos de impedancia.
plitud del potencial evocado motor en respuesta a El electrodo de tierra debe situarse próximo al elec-
la estimulación magnética transcraneal, aplicada trodo activo. Debe obtenerse el potencial motor pe-
previa e inmediatamente después de un ejercicio riférico o CMAP, cuya amplitud se utilizará para la
o contracción tónica. La fatiga disminuye signi- valoración del potencial evocado motor central.
ficativamente la amplitud del potencial evocado Para la estimulación craneal se colocará la bo-
motor. bina en contacto con el cuero cabelludo, con la

Manual EMG.indb 197 9/7/07 12:06:29


198 N. Raguer Sanz

dirección de la corriente en el sentido de las agujas TABLA I. Valores de normalidad(23)


del reloj, lo que facilita la estimulación del hemis- Grupo control
ferio derecho, o la dirección inversa, que facilita la
estimulación del hemisferio izquierdo. Si se utili- Extremidades superiores ABCP UMr (%) 51 ± 8
zan bobinas focales o en forma de 8, la dirección Amplitud PEM (%) 51 ± 13
de la corriente posteroanterior y perpendicular a la TCMC (ms) 6,4 ± 0,7
cisura central es la que favorecerá la activación del Extremidades inferiores TA UMr (%) 55 ± 10
área cortical motora representativa de la mano. A Amplitud PEM (%) 69 ± 16
continuación se buscará la localización óptima de TCMC (ms) 14,6 ± 1,0
la bobina, donde se obtenga una respuesta motora
ABCP: músculo abductor corto pulgar; TA: músculo tibial anterior; UMr:
de mayor amplitud y menor latencia, siendo éste el umbral motor en reposo; PEM %: proporción amplitud del potencial
punto donde se realizará el resto de protocolo o test evocado motor respecto al potencial de acción muscular compuesto
(vértex para la estimulación de área cortical repre- –CMAP– periférico; TCMC: tiempo de conducción motor central, calculado
sentativa de extremidades inferiores y discretamen- mediante estimulación cervical y lumbar.
te lateralizada contralateralmente para superiores).
Se obtendrán varios potenciales evocados motores
en reposo y tras mínima contracción voluntaria, y 1. Presencia de algún implante metálico en la
se evalúan los parámetros de las mejores respuestas cabeza (exceptuando implantes dentarios).
reproducibles tras 5-10 estímulos. 2. Portadores de marcapasos cardíacos o bombas
Para el cálculo del tiempo de conducción motor de medicación.
central, se obtendrán las respuestas F mínimas, tras 3. Pacientes con patología cardiaca grave o con en-
estimulación nerviosa periférica (15-20 intentos) o fermedad que produzca un aumento de la presión
bien se practicará la estimulación magnética radi- intracraneal, debido al mayor riesgo que presentan
cular por estimulación a nivel cervical o lumbar. en caso de desencadenarse crisis epilépticas.
Se recomienda la realización de la estimulación 4. Niños o mujeres durante el embarazo.
magnética transcraneal en ambos lados, ya que la 5. Uso de antidepresivos tricíclicos, neurolépticos
valoración de las diferencias entre lados aumenta u otros fármacos que disminuyan el umbral epi-
la sensibilidad de la prueba. léptico.
Algunas de estas contraindicaciones son relati-
Seguridad vas y, en su caso, deberá evaluarse el balance be-
neficio-riesgo en la aplicación de la EMTr.
En series de sujetos sanos (18) no se han de-
mostrado alteraciones cognitivas, motoras, ni en Valores de normalidad
el EEG, tras la aplicación de la estimulación
magnética transcraneal. En la EMTr a trenes de La mayoría de manuales y libros de texto de
estimulación de alta frecuencia (≥ 3 Hz), puede neurofisiología clínica o de electromiografía dis-
incrementarse la irritabilidad del córtex motor e ponen de valores de normalidad(22). Los valores de
inducir focos epilépticos. Se han descrito algunos nuestro laboratorio se exponen en la tabla I(23).
casos de crisis epilépticas focales, con o sin gene-
ralización secundaria, tras EMTr(19), aunque la
probabilidad es extremadamente remota cuando UTILIDAD CLÍNICA DE LA ESTIMULACIÓN MAGNÉTICA
se aplican las guías de estimulación y seguridad TRANSCRANEAL
recomendadas(20). La mayoría de autores considera
las siguientes situaciones como contraindicaciones En la siguiente sección se enumeran algunas
para la aplicación de EMTr(21): de las enfermedades donde es de utilidad la prác-

Manual EMG.indb 198 9/7/07 12:06:29


Estimulación magnética central y periférica 199

tica de la estimulación magnética transcraneal y se evocados motores, y alteraciones en el tiempo de


resumen sus principales hallazgos. conducción motor central, secundarias funda-
mentalmente, a la pérdida axonal de las neuronas
Esclerosis múltiple piramidales(27). Los pacientes con enfermedades
de motoneurona pueden presentar también alte-
Entre las numerosas alteraciones descritas en los raciones de los potenciales evocados motores, tras
pacientes con esclerosis múltiple están la ausencia estimulación de las raíces nerviosas. El umbral
de los potenciales evocados motores y la prolonga- motor puede también estar disminuido.
ción del tiempo de conducción motor central. Un La estimulación magnética transcraneal tiene
estudio inicial demostró aumento del TCMC en el una alta sensibilidad diagnóstica en pacientes afec-
80% de pacientes con esclerosis múltiple definida, tos de enfermedades de motoneurona, y se han
en el 54% con esclerosis múltiple probable y en el descrito alteraciones en pacientes con afectación
50% con esclerosis múltiple posible(24). Aumentos subclínica, así como anomalías de la vía cortico-
del tiempo de conducción motor central se aso- bulbar con anormalidad de la estimulación mag-
cian frecuentemente a caídas de la amplitud del nética transcraneal en músculo masetero, lengua,
potencial evocado motor. Las alteraciones de la músculos orofaciales y músculo trapecio(28).
estimulación magnética transcraneal se correlacio- El período de silencio es más corto en pacien-
nan bien con los signos motores clínicos (funda- tes con enfermedad de motoneurona que en su-
mentalmente espasticidad e hiperreflexia) y con el jetos normales(29). La presencia de un período de
grado de discapacidad motora(25); la estimulación silencio sin potencial evocado motor precedente
magnética transcraneal también puede revelar le- es altamente sugestivo de esclerosis lateral amio-
siones subclínicas. Otro hallazgo frecuente es un trófica(30). Estudios longitudinales en pacientes con
aumento del umbral motor de reposo. enfermedad de motoneurona han demostrado una
Los estudios de excitabilidad cortical con dobles disminución progresiva del período de silencio con
estímulos a intervalos interestímulos cortos y lar- el avance de la enfermedad.
gos muestran datos contradictorios en la literatura, Estudios con estimulación dual muestran dis-
mientras que la doble estimulación para valorar la minución de la inhibición intracortical a intervalos
inhibición transcallosa ha demostrado alteraciones interestímulos breves, aunque este hallazgo no ha
en muchas ocasiones subclínicas, sugiriendo una sido confirmado.
alta especificidad diagnóstica. Asimismo, se han
demostrado alteraciones en la fatiga central en pa- Ictus
cientes con esclerosis múltiple(26).
Los estudios realizados en esta enfermedad su- Los potenciales evocados motores están alte-
gieren que la afectación motora es debida a múl- rados en el lado afecto de pacientes con ictus. A
tiples mecanismos, incluyendo la lentificación menudo están ausentes en los pacientes que su-
de la conducción de las fibras corticoespinales, fren una parálisis motora completa, y son de baja
la dispersión en los impulsos descendentes hasta amplitud o raramente normales en los que tienen
las motoneuronas espinales y los bloqueos de con- una parálisis menos grave. Las lesiones subcor-
ducción. ticales pueden tan sólo aumentar el tiempo de
conducción motor central u ocasionar ausencia
Enfermedad de motoneurona del potencial evocado motor, dependiendo de la
gravedad. En el hemisferio afecto se suele elevar
Se han descrito numerosas alteraciones en la el umbral motor.
estimulación magnética transcraneal, con ausencia Se ha demostrado que la realización de estimu-
o disminución de la amplitud de los potenciales lación magnética transcraneal seriada ayuda a co-

Manual EMG.indb 199 9/7/07 12:06:30


200 N. Raguer Sanz

nocer el pronóstico de los pacientes con ictus(31,32). Mielopatía cervical


Así, los pacientes con potenciales evocados motores
normales consiguen una mejor recuperación fun- La mielopatía cervical espondilótica es una
cional a los 12 meses que los que presentan ausen- causa frecuente de afectación de motoneurona
cia de potenciales evocados motores y aumento del superior y existen numerosos estudios que muestran
umbral motor. alteraciones en la estimulación magnética transcra-
Investigaciones sobre las proyecciones corti- neal(36). En todos ellos el tiempo de conducción
coespinales ipsilaterales, tras lesiones cerebrales motor central está significativamente aumentado, y
unilaterales señalan su posible importancia en la el potencial evocado motor suele mostrar aumento
recuperación motora después de un ictus(33). de duración y alteración en su morfología. Estas
alteraciones persisten en aproximadamente el 70%
Trastornos del movimiento de los pacientes un año después de la cirugía.

Enfermedad de Parkinson: la conducción Monitorización intraoperatoria


central motora es normal en la enfermedad de
Parkinson, mientras que puede estar alargada en El registro de las descargas descendentes evoca-
pacientes con atrofia multisistémica(34). La mayo- das por estimulación magnética transcraneal o por
ría de estudios no ha encontrado alteraciones en estimulación eléctrica transcraneal es uno de los mé-
el umbral motor. todos usados para valorar la indemnidad de la vía
El período de silencio está disminuido en los corticoespinal durante las intervenciones neuroqui-
pacientes con enfermedad de Parkinson, y puede rúrgicas. Se realizan registros epidurales a dos niveles
aumentar con el tratamiento con L-DOPA, anti- espinales, por encima y debajo de la lesión. También
colinérgicos y lesiones quirúrgicas de los núcleos se pueden registrar los potenciales evocados motores
basales(35). Se han descrito también alteraciones en en los músculos, aunque los fármacos anestésicos
la estimulación dual, con alteraciones de la inhi- atenúan significativamente su amplitud.
bición intracortical, que se corrigen también con
el tratamiento dopaminérgico. Epilepsia
Distonía: los estudios demuestran que el tiempo
de conducción motor central es normal en la disto- En pacientes con epilepsia, la estimulación
nía, así como el umbral motor. Se ha descrito dis- magnética transcraneal se ha utilizado, fundamen-
minución del período de silencio, tanto en distonías talmente, para investigar la excitabilidad cortical.
de la mano como en distonías craneales. También En pacientes con crisis epilépticas, los potenciales
se ha descrito una disminución de la inhibición evocados motores están aumentados, mientras que
intracortical, que se corrige tras la administración el tiempo de conducción motor central y el umbral
de toxina botulínica. motor están disminuidos. Estas alteraciones se nor-
Enfermedad de Huntington: en estos pacien- malizan con el tratamiento antiepiléptico, y son in-
tes, el tiempo de conducción motor central, los dependientes de la duración de la epilepsia, el lugar
potenciales evocados motores y el umbral motor del foco epileptógeno y el tipo de convulsión(37). Se
son normales. Se han descrito alteraciones en el han descrito alteraciones contradictorias del umbral
período de silencio y en la excitabilidad cortical motor y del período de silencio, dependiendo del
usando la técnica de estimulación dual, aunque tipo de epilepsia y de la presencia de tratamiento
estos hallazgos son todavía muy contradictorios, anticomicial. La alteración más consistente parece
probablemente por la heterogeneidad de las pobla- ser la disminución de la inhibición intracortical
ciones exploradas y las diferencias metodológicas mediante técnicas de estimulación dual, así como
de los test utilizados. un aumento de la facilitación intracortical.

Manual EMG.indb 200 9/7/07 12:06:30


Estimulación magnética central y periférica 201

Figura 6. Utilidad de la estimulación magnética en patología nerviosa periférica. A: polineuropatía desmielinizante por leucodistrofia metacromá-
tica, con hipoexcitabilidad en los segmentos proximales de nervio cubital (brazo y punto de Erb), que simula bloqueos de conducción. La estimulación
magnética transcraneal muestra la presencia de un potencial evocado motor, y descarta la presencia de bloqueos de conducción; B: neuropatía motora
multifocal con bloqueos de conducción en los segmentos proximales de nervio mediano (punto de Erb). La estimulación magnética cervical y cortical
confirma la presencia de bloqueos parciales de conducción, al obtenerse potenciales evocados motores de igual morfología y amplitud que los potenciales
obtenidos periféricamente.

Enfermedades del nervio periférico segmentos nerviosos proximales; por ejemplo, en


neuropatías motoras multifocales con bloqueos de
En patología nerviosa periférica, fundamental- conducción (Fig. 6).
mente en neuropatías desmielinizantes con marca-
da hipoexcitabilidad nerviosa o con presencia de
bloqueos de conducción proximales, puede ser de ESTIMULACIÓN MAGNÉTICA DE UN NERVIO PERIFÉRICO
utilidad la estimulación magnética transcraneal(38).
Un nervio periférico con desmielinización crónica La aplicación de un estímulo magnético sobre
y fenómenos de remielinización puede presentar un nervio periférico es capaz de provocar un poten-
un aumento del umbral de excitabilidad, que difi- cial de acción muscular compuesto (CMAP). No
culta, en ocasiones, la estimulación supramáxima obstante, esta técnica no ofrece ventajas respecto a
periférica y se comporta como bloqueos de con- la estimulación eléctrica en los estudios rutinarios.
ducción nerviosa. No obstante, mantiene intacta Carece de la fiabilidad de la estimulación eléctrica,
su capacidad de conducción a través de la estimu- muestra mayor variabilidad de latencias entre ensa-
lación del cuerpo neuronal por activación de la vía yos, incertidumbre sobre el punto exacto de estimu-
corticoespinal, y se obtiene un potencial evocado lación, inestabilidad de las respuestas y dificultad
motor por estimulación magnética transcraneal. para alcanzar una estimulación supramáxima. Se
Por el contrario, en otros casos, la estimulación añade también la dificultad para conseguir una
magnética transcraneal nos permitirá confirmar la estimulación selectiva de un tronco nervioso. Así
existencia de bloqueos de conducción nerviosa en pues, en la actualidad, la estimulación magnética

Manual EMG.indb 201 9/7/07 12:06:30


202 N. Raguer Sanz

no ofrece ninguna ventaja en los estudios de ner- 5. Werhahn KJ, Fong JK, Meyer BU, Priori A, Rothwell JC,
Day BL, et al. The effect of magnetic coil orientation on
vios periféricos distales respecto a la estimulación
the latency of surface EMG and single motor unit respon-
eléctrica convencional, de mayor precisión en el ses in the first dorsal interosseous muscle. Electroenceph
punto de estimulación. Clin Neurophysiol 1994; 93: 138-46.
No obstante, la estimulación magnética se 6. Di Lazzaro V, Oliviero A, Pilato F, Saturno E, Dileone
atenúa muy poco por su paso a través del tejido M, Mazzone P, et al. The physiological basis of transcra-
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evoca respuestas motoras en la musculatura de ex- Neurophysiol 1994; 91: 79.
tremidades inferiores. La estimulación en este caso 11. Fuhr P, Agostino R, Hallett M. Spinal motor neuron
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se aplica sobre la raíz motora a su salida del canal lation. Electroencephalogr Clin Neurophysiol 1991; 81:
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la eléctrica es la excitación de la porción intracra- F, Weindl A. Inhibitory and excitatory interhemispheric
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Manual EMG.indb 204 9/7/07 12:06:31
Capítulo 16

MONITORIZACIÓN NEUROFISIOLÓGICA INTRAOPERATORIA


P.J. Pérez Lorensu, J.M. Garrido Babío, V.M. García Marín

INTRODUCCIÓN

El principal objetivo de la monitorización


neurofisiológica intraoperatoria (MIO)(1) es la de-
tección de cualquier daño neurológico tan pronto
como sea posible y siempre durante el período en
el cual éste es reversible. Este procedimiento ser-
viría para llevar a cabo en ese momento un cam-
bio en la actitud quirúrgica, con el fin de evitar
o minimizar ese daño(2). La MIO no previene de
todas las posibles lesiones que se pueden producir
en el acto quirúrgico que se está monitorizando, y
en ocasiones las alteraciones neurofisiológicas que
se objetivan en una MIO nos alertan de un daño Figura 1. Situación del equipo dentro del quirófano y protección de los
cables de registro y estimulación cubiertos por una sábana y fijados con
neurológico que no puede ser revertido durante esparadrapo.
la cirugía(3).
Se necesita una gran colaboración y confianza
entre el cirujano y el neurofisiólogo que realiza la suficientemente cerca para poder emitir los avisos
MIO para intercambiar avisos de riesgo durante la y ver el proceso de la operación, directamente o
intervención, puesto que en ocasiones las alertas por monitor de TV. Los cables alargadores que
neurofisiológicas pueden inducir un cambio en van a las cajas de estimulación y recepción deben
la actuación quirúrgica. A su vez, es necesaria la estar protegidos para el paso del personal. Pueden
colaboración y entendimiento estrecho entre el colocarse bajo una sábana que se fija al suelo con
neurofisiólogo y el equipo de anestesia(4), dada la esparadrapo (Fig. 1). En general, las cajas de esti-
gran interacción entre los fármacos utilizados y la mulación y registro de los estudios MIO deberían
obtención de las respuestas neurofisiológicas(5). estar alejadas entre sí y de fuentes de contami-
El primer paso que se debe realizar es la co- nación de artefactos eléctricos (bisturí eléctrico,
rrecta colocación del equipo de monitorización microscopio, etc.). La placa de tierra del bisturí
intraoperatoria dentro del quirófano. Debe estar eléctrico debe colocarse lejos de los electrodos de
lo suficientemente alejado de la mesa de inter- registro y de estimulación.
vención y de la instrumentación para no interferir La MIO consiste en dos tipos de técnicas di-
en el desarrollo normal de la operación, pero lo ferentes(6):

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206 P.J. Pérez Lorensu, J.M. Garrido Babío, V.M. García Marín

1. Monitorización, que se refiere al estudio conti- posibles alteraciones por posición incorrecta del
nuo de la integridad funcional de las vías neu- paciente(7).
ronales, para poder identificar las alteraciones Los resultados de la MIO se pueden encuadrar
neurofisiológicas precozmente y poder llevar a mediante la siguiente clasificación:
cabo una corrección de las mismas. – Verdaderos positivos: cuando la monitorización
2. Mapping (Mapeo), que se refiere a la identi- detecta un deterioro neurológico que se corres-
ficación puntual y preservación de los tejidos ponde con un daño postoperatorio o éste puede
neuronales funcionales. ser evitado mediante un cambio en la actitud
En general, las características de las alteraciones quirúrgica.
encontradas durante la MIO orientan a las siguien- – Falsos positivos: si se detectan alteraciones en la
tes posibilidades(7): monitorización, no se encontraron causas du-
– La pérdida completa y súbita de todas las mo- rante la cirugía para cambiar la actitud y el pa-
dalidades de monitorización nos deben hacer ciente no sufre alteraciones postquirúrgicas.
pensar en un problema técnico. – Falsos negativos: cuando la monitorización no
– La pérdida selectiva de alguna de las modalida- demostró alteraciones, pero el paciente sufre
des de MIO o de una vía anatómica sugiere una un déficit neurológico postoperatorio(8).
lesión nerviosa, pero antes debemos descartar un – Verdaderos negativos: durante el estudio el pa-
problema del amplificador o de los electrodos. ciente no registra cambios y tras la cirugía no
– La pérdida simétrica de las respuestas de algún se evidencia deterioro neurológico.
tipo de MIO sugiere relación con la anestesia Muchos estudios han valorado la relación cos-
o con la relajación muscular. te-efectividad de la utilización de los registros de
– Una disminución de las amplitudes de las res- MIO, considerando el coste de la rehabilitación
puestas sin un aumento de las latencias sugiere posterior en caso de daño neurológico por lesiones
un problema isquémico, si se han descartado pre- intraquirúrgicas(9). Recientemente se ha demos-
viamente las posibles interacciones anestésicas. trado que este procedimiento previene un déficit
– Un aumento de la latencia de las respuestas postoperatorio en un 5,2% de los pacientes monito-
sin disminución de la amplitud de las mismas rizados. En concreto, algún estudio encuentra que
sugiere un problema de conducción. el coste de monitorización del nervio facial durante
La secuencia temporal de los hallazgos durante las intervenciones de oído medio o mastoides es
la MIO puede ayudar a determinar su causa: de sólo 260 €(10), computando el coste del equipo
– Los cambios rápidos (menos de 5 minutos) prorrateado, agujas, sueldo del neurofisiólogo y au-
sugieren un fallo técnico o una pérdida de la mento del tiempo de quirófano. La comparación
integridad neuronal por daño mecánico. con el coste de las secuelas (250.000-1.000.000 $)
– Los cambios lentos (entre 10 y 15 minutos) su- muestra la eficacia de la monitorización del nervio
gieren lesiones isquémicas o interacción con la facial en ese tipo de cirugía(11).
anestesia.
– Los cambios muy lentos (mayores de 15 mi-
nutos) sugieren modificaciones fisiológicas, MONITORIZACIÓN NEUROFISIOLÓGICA INTRA-
alteraciones por la anestesia o influencia de la OPERATORIA MEDULAR, ESPINAL Y RAÍCES NERVIOSAS
temperatura.
Los valores de referencia dentro de los estu- El daño de la médula espinal por una compre-
dios MIO no son los valores estándar sino los sión inadvertida o interferencia en el aporte sanguí-
obtenidos tras la anestesia del paciente y, a ser neo con el consiguiente déficit motor y/o sensitivo,
posible, antes de la colocación final del paciente es la complicación no mortal más temida en las
para la intervención, para poder detectar, así, las intervenciones quirúrgicas espinales(3). Diversas es-

Manual EMG.indb 206 9/7/07 12:06:32


Monitorización neurofisiológica intraoperatoria 207

tadísticas afirman que la paraplejía iatrogénica en Potenciales evocados somatosensoriales


la cirugía espinal varía entre el 0,55 y el 1% de las
cirugías de escoliosis, el 1 al 16% en la cirugía de Los potenciales evocados somatosensoriales
reparación aórtica, el 0,14% de la cirugía por fusión (PESS), sólo exploran las vías sensitivas y, por lo
vertebral, el 0,07% de las discectomías cervicales tanto, pueden producirse lesiones en las vías mo-
y el 0,03% de las discectomías lumbares. Además toras con MIO con PESS dentro de los límites de
existe un riesgo del 10% de lesiones radiculares en la normalidad(17).
la cirugía de escoliosis o en la cirugía de instru- Se deben estudiar preoperatoriamente los nervios
mentación espinal. mediano, cubital y tibial, mediante estudios de con-
Un déficit neurológico durante una interven- ducción nerviosa para valorar la conducción en los
ción quirúrgica de la médula espinal puede ser segmentos distales a la médula espinal y descartar la
secundario a una de las siguientes causas: presencia de una neuropatía periférica que pueda
– Compresión mecánica de la médula espinal por interferir con los resultados. Si en el estudio basal no
ganchos, conexiones o hematoma epidural. se obtienen PESS, es de suponer que durante la MIO
– Lesiones medulares por la colocación del pa- no se vayan a obtener, por lo que no es recomendable
ciente antes de la intervención quirúrgica, sobre realizar la monitorización mediante esta técnica(23).
todo en las instrumentaciones anteriores y en
la posición de semisentado. Técnica de exploración
– Compresiones por el ligamento amarillo, liga- Si el nivel de la lesión se encuentra distal a C7
mento longitudinal posterior o por material de se deben estudiar los PESS del nervio tibial y si la
disco artificial. lesión es proximal a C7 se deben estudiar los PESS
– Distracción de la médula espinal por la instru- del nervio cubital o del mediano(24). En cirugía
mentación. de corrección espinal se recomienda obtener las
– Alteraciones vasculares. respuestas de los cuatro miembros(25).
Los primeros estudios de MIO para la cirugía es- La estimulación se realiza mediante electrodos
pinal datan de mediados del siglo pasado y se basa- percutáneos bipolares situados en el maléolo in-
ban en los potenciales evocados somatosensoriales terno (en el caso del nervio tibial) o en el carpo
(PESS) de nervio mixto en la cirugía correctora de (en el caso de los nervios cubital y mediano), fir-
la escoliosis. En la actualidad se ha extendido el uso memente sujetos con esparadrapo para evitar su
de esta prueba a una amplia variedad de cirugías, desplazamiento(24).
que suponen un riesgo para la integridad funcional El estímulo se realiza con pulsos cuadrados con
de la médula espinal o de las raíces nerviosas(12): una duración de 0,2 a 0,5 ms.
– Cirugía de deformidades espinales: escoliosis idio- La frecuencia de estimulación se sitúa en 5,1 Hz
páticas o secundarias, cifosis, cifoescoliosis(13,14). en miembros superiores y 0,5 a 2 Hz en miembros
– Cirugía de degeneración espinal(15): estenosis inferiores, ya que mayores frecuencias de estimu-
de canal, espondilolistesis. lación provocan respuestas de los PESS de menor
– Cirugía de inestabilidad espinal: fracturas ver- amplitud. No se deben estimular ambos lados si-
tebrales, inestabilidad atloaxoidea(16). multáneamente porque disminuye la capacidad de
– Cirugía de tumores medulares o de foramen reconocer alteraciones(26).
magno, infecciones, o malformaciones vascu- La intensidad de estimulación en los registros
lares medulares(17). realizados en el laboratorio y en los que se realizan
– Cirugía de aneurisma aórtico o toracolum- antes de la anestesia debe provocar una contracción
bar(18,19). muscular sostenida, pero tolerada (generalmente 8-12
– Cirugía de cauda equina(20), médula anclada o mA). Una vez que el paciente es anestesiado se pue-
lipomas lumbosacros(21,22). den aplicar intensidades cercanas a los 80 mA(27).

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208 P.J. Pérez Lorensu, J.M. Garrido Babío, V.M. García Marín

Figura 2. Colocación de electrodos para la realización de la MIO mediante PESS. Izquierda: PESS de miembros superiores. Electrodos de estimulación
en carpo (nervio mediano o cubital). Electrodos de registro en ambos puntos de Erb, CV, C3, C4, CZ y FPZ. Montaje recomendado Erb-Erb contralateral, CV-FPZ
y C3 o C4 (contralateral) al estímulo-Cz. Derecha: PESS de miembros inferiores. Electrodos de estimulación en maléolo interno (nervio tibial posterior).
Electrodos de registro en ambos huecos poplíteos, zona lumbar, CV, CZ y Fpz. Montaje recomendado hueco poplíteo, zona lumbar y CZ-FPZ.

Los electrodos de registro pueden ser electro- Evaluación quirúrgica


dos de superficie (electrodos de disco pegados con En los casos de inestabilidad de la columna
colodión o pasta) o electrodos de aguja subdérmi- vertebral se debe monitorizar al paciente antes e
cos (14-18 mm de longitud) para el registro de los inmediatamente después del traslado a la mesa
componentes corticales y cervicales, y electrodos de operaciones. Si el nivel de la inestabilidad se
de aguja monopolares subdérmicos para las res- encuentra en región cervical, se debe monitorizar
puestas periféricas(28). Existe una gran dificultad también durante la intubación orotraqueal para
para modificar la posición de los electrodos o prevenir lesiones cervicales durante la misma. Se
colocar los que se han caído una vez que el pa- debe obtener otro registro antes de la anestesia,
ciente se encuentra debajo de los paños estériles, que sirve para determinar las condiciones técnicas
por lo que se recomienda sujetarlos bien a los adecuadas de estímulo y registro. Posteriormente,
lugares de registro y a los paños. Los montajes de se recogen registros postanestesia, postposición y
registro (basándonos en el sistema internacional preincisión, que es el que se toma como valor basal
10-20) para la realización de los PESS son los de referencia, ya que es habitual que los registros
habituales(29-31) (Fig. 2). postanestesia presenten una disminución de am-
Los parámetros de registro deben ser: plitud respecto a los registros del laboratorio. Otros
– Impedancia de los electrodos menor de 5 kΩ. autores consideran que los resultados basales de-
– Filtros situados en 150 Hz y 1 KHz; para la ob- berían ser los de postincisión, cuando el campo se
tención de los componentes corticales pueden encuentre expuesto, porque disminuye la amplitud
ser de 10 a 250 Hz. de los PESS en ese momento(32).
– Barrido de 100 ms. Una vez iniciada la intervención, la monitoriza-
– Sensibilidad de 1-20 μV/división; se deben re- ción debe realizarse cada 10 minutos en períodos
chazar las respuestas que superen el 10% de la no críticos y continuamente en períodos críticos.
actividad evocada. El estudio debe prolongarse, al menos, 30 minutos
– Número de promediaciones entre 300-500. tras las últimas manipulaciones sobre la médula es-

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Monitorización neurofisiológica intraoperatoria 209

Figura 3. Modificación de los PESS durante cirugía correctiva de escoliosis. Aumento de la latencia y disminución de la amplitud, que ceden con la
retirada de la instrumentación. Barrido 100 ms. Amplitud 1-4 μV/división.

pinal. El último registro se obtendrá tras despertar se resuelven tras el cese de la manipulación
al paciente(33). quirúrgica, la corrección de la hipotensión ar-
Se considera que un 50% de reducción en la terial o la irrigación del campo con suero salino
amplitud y un incremento del 5-10% en la laten- caliente.
cia de los PESS respecto a los valores basales son
patológicos(34). Se proponen las siguientes pautas Potenciales evocados somatosensoriales dermatómicos
de actuación:
– Si la amplitud se reduce al 50% se advierte al Los PESS dermatómicos son respuestas evoca-
cirujano. Si permanece estable y no se degrada das corticales que se obtienen tras estimular per-
más, no es necesaria una nueva advertencia. Si cutáneamente un dermatoma concreto. Tienen la
la señal continúa degradándose se advierte de ventaja de informar sobre la función de una raíz
nuevo al cirujano para que adopte las medidas nerviosa individual. Los estudios de MIO se pue-
pertinentes (Fig. 3). den utilizar con los siguientes objetivos: determinar
– Si es reversible tras la administración de suero el nivel de daño de una raíz, determinar el grado
salino caliente se considera secundario a la hi- de descompresión quirúrgica de una raíz o moni-
potermia. torizar una raíz para “protegerla” durante la ciru-
– Si la latencia absoluta se incrementa un 10% gía(35). A diferencia de los PESS convencionales,
(generalmente más de 2 ms) se avisa al ciru- la estimulación debe ser de suficiente intensidad,
jano. pero no debe provocar contracción muscular y se
– Si las alteraciones registradas vuelven a su nivel realiza con electrodos de superficie.
basal en menos de 15 minutos (incluso con la Los principales inconvenientes de esta técnica
desaparición temporal de las respuestas) es poco son:
frecuente que exista daño neurológico posterior. – Las respuestas evocadas tienen una baja ampli-
Sin embargo, si desaparecen las respuestas y no tud, por lo que es preciso un gran número de
se recuperan existe un 50% de posibilidades de promediaciones para poder objetivarlas.
que exista daño neurológico permanente tras la – Son muy sensibles a los efectos de la aneste-
intervención. sia.
– Se recomienda administrar altas dosis de es- – Para monitorizar un gran número de raíces es
teroides si las alteraciones que puedan apare- necesario mucho tiempo.
cer en los PESS durante la intervención no – No monitoriza los tractos motores.

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Monitorización EMG evocada mecánicamente

Recoge los potenciales motores generados por


el músculo tras una irritación del nervio. Este tipo
de monitorización puede ser utilizado, tanto en
cirugía del cono medular (lipomas, meningoceles,
etc.) como en cirugía de tumores intramedulares o
en descompresiones o instrumentaciones cervicales
o lumbares para evitar las lesiones radiculares. Son
más sensibles que los PESS dermatómicos en la
valoración del daño nervioso agudo(36).
Para este tipo de estudio, es necesario tener cuida- Figura 4. Descarga neurotónica recogida en los canales 1 y 2, pero no en el
do con el uso de bloqueantes neuromusculares, pues- canal 3, tras irritación mecánica de una raíz, lo que permite la localización
to que pueden anular las respuestas musculares. del daño nervioso.
Se colocan electrodos subdérmicos monopola-
res en los vientres musculares de la musculatura de nica o sea posible estimularla eléctricamente, y esto
las miotomas que se van a estudiar, incluyendo el se malinterprete como que la raíz está indemne.
esfínter anal, cuando el paciente ya se encuentra
anestesiado, pero antes del comienzo de la ciru- Monitorización eléctrica de las raíces durante la
gía. Este tipo de estudio se debe de realizar con manipulación de los pedículos
el altavoz encendido, de manera que el cirujano
detecte la respuesta al mismo tiempo que está ope- Para realizar esta técnica de MIO no debe
rando(37). existir un bloqueo neuromuscular completo por
Las descargas neurotónicas (Fig. 4) son res- la anestesia, manteniendo, al menos, 2 respuestas
puestas musculares (descarga sostenida de unida- de 4 en el tren de 4.
des motoras) que se producen en relación con la Se realiza mediante la estimulación eléctrica
manipulación, traumatismo, retracción, o irritación directa con un electrodo especial monopolar so-
de la raíz o nervio del cual es tributario el músculo bre la pared pedicular, el tornillo del pedículo (se
que estamos explorando. Son muy sensibles, suelen recomienda estimular en la parte hexagonal del
aparecer como brotes rápidos de actividad muscu- tornillo o directamente en el tornillo en sí, no en
lar de presentación irregular y pueden durar menos la corona móvil), la aguja de Kirschner o los ins-
de 100 ms o persistir durante varios segundos. Este trumentos que se utilicen para perforar el pedículo.
tipo de monitorización se debe utilizar durante los Se utilizan frecuencias de estimulación de 2-5 Hz
períodos críticos o dinámicos de la intervención, y duración del estímulo de 0,2 ms(36).
pues implican resultados directos sobre la actua- Si la lámina o pared del pedículo se encuentra
ción del cirujano. La respuesta considerada normal intacta, existe una gran impedancia o barrera a la
es la ausencia de dichas descargas(35). corriente que estamos administrando, por lo tanto,
Los nervios motores dañados previamente (ra- la estimulación eléctrica directa sobre el material
diculopatía, polineuropatía, etc.) son menos sus- produce un potencial evocado motor (PEM) en la
ceptibles para evocar las descargas neurotónicas, musculatura dependiente de esa raíz con estímulos
por lo que es posible que no se evidencien lesiones de intensidad moderada (8-15 mA)(34). Si la pared
añadidas en estos nervios. del pedículo se encuentra rota, la intensidad nece-
La sección rápida de una raíz puede no tener saria para evocar un PEM es menor. Umbrales de
efecto inmediato en los estudios EMG; incluso pue- estimulación entre 4 y 11 mA sugieren una lesión
de que la parte distal siga mostrando irritación mecá- en la pared del pedículo(38). Umbrales de estimu-

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Monitorización neurofisiológica intraoperatoria 211

A B

C Estimulador EMG D
Vasto Lat D 1.1 13 27 25
100 ms 50 μV 4 mA

Vasto Lat I 1.2 13 27 26


100 ms 50 μV 4 mA

Tib ant D 1.3 13 27 25


100 ms 50 μV 4 mA

Tib ant I 1.4 13 27 25


100 ms 50 μV 4 mA

AH derecho 1.5 13 27 25
L4
100 ms 50 μV 4 mA
Figura 5. A: estimulador tipo bola para pedículos; B: colocación del electrodo en los tornillos pediculares; C: estimulación del tornillo pedicular L4 de-
recho, donde se aprecia que con una intensidad de 4 mA se estimula esa raíz, con criterios de recolocación del tornillo; D: TC de la zona donde se aprecia
claramente la intrusión del tornillo en el pedículo derecho.

lación inferiores a 4 mA sugieren una lesión seria potenciales evocados que pueden ser recogidos,
del pedículo y un posible contacto entre la raíz y tanto en la médula espinal (mediante electrodos
el tornillo pedicular(39) (Fig. 5). epidurales) como en los músculos distales (re-
En los casos en que existen radiculopatías o cogiendo un PEM). Esto nos permite valorar la
polineuropatías previas de larga evolución, los ni- porción motora de la médula espinal, de manera
veles de estimulación necesarios para evocar un eficaz(41).
PEM serán más altos, puede que superiores a 20 Se ha descrito que, si la intervención quirúrgi-
mA, ya que existe lesión axonal previa, y eso pue- ca se realiza con el paciente sentado, la apertura
de hacer pensar que el tornillo se encuentra bien de la duramadre o de las cisternas suele producir
colocado(40). la entrada de colecciones de aire, que se sitúan
en el espacio subdural, lo que puede provocar al-
Estimulación eléctrica transcraneal cerebral teraciones de los potenciales evocados mediante
estimulación eléctrica transcraneal, con cambios
La función motora corticoespinal se puede en la amplitud o ausencia de respuestas(42).
objetivar mediante la estimulación eléctrica trans- Se considera que no debe realizarse el estudio
craneal de la corteza motora, lo que produce unos preoperatorio del paciente con esta técnica por-

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que es dolorosa, y tan sólo deben obtenerse las


respuestas tras la anestesia. La presencia de paresia
preoperatoria no suele afectar a los resultados del
estudio MIO.
Existen una serie de normas de seguridad que
deben tenerse en cuenta(43):
– No se aconseja su uso en menores de 1 año,
salvo en pacientes críticos, por la falta de mie-
linización de los tractos corticoespinales.
– No se aconseja su uso en lesiones craneales
(fracturas óseas o craneotomías), por la posi-
bilidad de administrar demasiada corriente
directamente sobre el tejido cerebral. No se
recomienda su utilización en pacientes con
electrodos intracerebrales implantados.
– Se considera una contraindicación relativa la Figura 6. Esquema de colocación de electrodos para la estimulación eléc-
trica transcraneal; C1-C2 para la estimulación de miembros superiores y
presencia de marcapasos. Además, se han des- CZ-FPZ para la estimulación de miembros inferiores.
crito alteraciones cardiacas, como bradicardias
o contracciones ventriculares prematuras tras
la estimulación transcraneal. hematomas o laceraciones leves en la lengua o
– El procedimiento debe ser suspendido ante la en los labios por la contracción de la musculatura
aparición de crisis epilépticas o de elementos masticatoria por estimulación directa de la misma
afterdischarges del EEG. por electrodos craneales, lo que puede evitarse
– Pueden presentarse lesiones epidurales por la con tubos acolchados o protectores dentales.
inserción de los catéteres epidurales medulares
(irritaciones radiculares, infecciones o hemato- Técnica de estimulación
mas epidurales). Para estimular los miembros superiores, se colo-
– Los movimientos corporales provocados por can los electrodos en las localizaciones del sistema
la estimulación eléctrica transcraneal pueden 10-20, 2-3 cm anterior a C3-C4 o C1-C2 y se cambia
provocarle daño al paciente, sobre todo si en ese la polaridad para estimular el otro hemisferio(44). En
momento está en contacto con instrumentos la estimulación de miembros inferiores, el ánodo se
quirúrgicos. El cirujano debe acostumbrarse a debe situar en la línea media (CZ o FPZ), con el cáto-
ese tipo de movimientos. do 6 cm por delante, siendo más difícil de estimular
– Se puede producir una gran contracción mus- que en miembros superiores(45) (Fig. 6). Si se utiliza
cular de los músculos temporales si la estimu- suficiente intensidad, el montaje C1-C2 puede esti-
lación se realiza por C3-C4, lo que ha hecho mular también a los miembros inferiores(46).
que determinados neurofisiólogos prefieran la Los electrodos se pueden colocar fijados al
estimulación desde C1-C2. scalp con colodión y rellenos con pasta conduc-
– No se han descrito alteraciones cognitivas ni tora; sin embargo, se prefiere utilizar electrodos
neuropsicológicas relacionadas con este proce- subdérmicos insertados (tipo sacacorchos o agujas
dimiento. monopolares convencionales), ya que el paciente
– No se han descrito lesiones en el scalp por la se encuentra anestesiado, no nota el dolor de la
administración de la corriente por los electrodos, inserción de los electrodos y la impedancia es me-
tanto los de superficie como los de tipo sacacor- nor. No se deben utilizar este tipo de electrodos en
chos. Se ha descrito sin embargo la presencia de niños con la fontanela abierta (menores de 12-18

Manual EMG.indb 212 9/7/07 12:06:36


Monitorización neurofisiológica intraoperatoria 213

Figura 8. Respuestas epidurales (onda D y ondas I) tras estímulo único por


estimulación eléctrica transcraneal. Barrido 50 ms. Amplitud 10 μV.

separar las cajas de estimulación y registro para los


PEM mediante estimulación eléctrica transcraneal
y los PESS se reducen los artefactos(49).
Las respuestas espinales se pueden recoger me-
diante electrodos epidurales o subdurales, situados
Figura 7. Esquema de estimulación eléctrica transcraneal y cortical directa. sobre la médula espinal, por encima y por debajo
Estímulo único de 500 μs (o 50 μs) de duración para evocar la onda D en de la lesión que se va a explorar, con una separa-
los electrodos epidurales medulares y trenes de multipulsos para evocar
ción de 2 cm. Estos electrodos se pueden colocar
las respuestas motoras.
por vía percutánea (mediante aguja de Touhy) o
tras haber realizado la laminectomía. Se pueden
meses de edad), ni en pacientes con shunts ven- objetivar varios componentes en las respuestas epi-
trículo-peritoneales (para no dañar las válvulas ni durales. Al componente que presenta un menor
los sistemas de drenaje); en estos casos se sitúan los umbral a la estimulación cerebral se le denomina
electrodos en otra localización o se usan electrodos onda D, representa la actividad síncrona de las fi-
de superficie(45). bras del tracto corticoespinal más rápidas y se pre-
La intensidad de la estimulación se sitúa entre sume que es el resultado de la estimulación directa
400 y 700 V (1,4 Amperios)(47). Aunque se puede de los axones corticoespinales. Los componentes
realizar mediante estímulos simples, se prefieren que presentan un umbral de estimulación mayor y
los trenes de estímulos. La técnica descrita original- una latencia también mayor se denominan ondas
mente considera que las condiciones de la estimu- I, obtenidas presumiblemente como resultado de
lación eléctrica cortical son de 5 a 7 impulsos de la activación indirecta (transináptica) de las neu-
500 μs de duración, con un intervalo interestímulo ronas corticoespinales, mediante la estimulación
de 4 ms, para evocar una respuesta muscular. Se de las interneuronas cortico-corticales (Fig. 8). Las
utilizan estímulos únicos para evocar las respuestas ondas D son bastante resistentes a los anestésicos
medulares (aunque se pueden promediar de 2 a 4 volátiles, sobre todo con intensidades de estímulo
veces para que se observen mejor)(48) (Fig. 7). 2-3 veces el umbral, mientas que las ondas I son
muy sensibles a los mismos. La amplitud de la onda
Técnica de recogida D puede ser de 60 μV en la zona cervical y de sólo
Los filtros de los registros epidurales medulares 10 μV en la zona torácica(50).
deben estar entre 1,5-1.700 Hz, con un barrido de Existen ciertas consideraciones a tener en cuen-
30-50 ms y los filtros de las respuestas musculares ta en el uso de esta técnica con los electrodos epi-
entre 1,5-875 Hz, con un barrido de 100 ms. Al durales:

Manual EMG.indb 213 9/7/07 12:06:37


214 P.J. Pérez Lorensu, J.M. Garrido Babío, V.M. García Marín

Interpretación de los resultados


La presencia de reducción súbita completa o
casi completa de las amplitudes de las respuestas
de los PEM tras la estimulación, debe hacernos
pensar primero en un fallo de los electrodos (de
estimulación o de recogida) y, por tanto, debemos
comprobar el sistema (impedancias en las agujas de
recepción y valoración de la intensidad de estimu-
lación). Si se ha descartado un problema técnico, la
causa más frecuente es la existencia de una lesión
vascular, más que la manipulación física(52).
Si la médula espinal expuesta se enfría (por
irrigación de suero fisiológico o por enfriamiento
Figura 9. PEM musculares tras estimulación eléctrica transcraneal. del quirófano), la latencia de la onda D puede au-
Estímulo C1-C2 a 360 V, en forma de tren de 7 estímulos con un intervalo mentar temporalmente.
interestímulo de 4 ms. Las respuestas musculares se recogen con electrodos
monopolares de aguja en la musculatura de ambos músculos abductor Un descenso en la amplitud de la onda D su-
hallucis brevis y abductor pollicis brevis. perior al 50% y un aumento de la latencia superior
al 15% pueden ser interpretados como un signo de
daño del sistema motor(53).
– La colocación del electrodo en niveles inferio- Se debe avisar al neurocirujano, además, si el
res a T10 puede que no recoja una onda D de umbral de estimulación aumenta más de 100 mA
amplitud suficiente, ya que a partir de ese nivel respecto al basal.
no existen suficientes fibras del tracto cortico- Los PEM mediante la estimulación eléctrica
espinal. cerebral son variables, poco reproducibles y muy
– En localizaciones cervicales altas la colocación del susceptibles de alteración por los anestésicos o por
electrodo es imposible por la falta de espacio. los relajantes musculares. La presencia de estas res-
– La hipotermia local puede producir retrasos en puestas al final de la intervención indica continuidad
la latencia de las ondas D e I. del tracto corticoespinal, y la ausencia de las mismas
– La presencia de cicatrices o adherencias durales indica una lesión, con un 90% de especificidad. La
puede impedir una correcta introducción del disminución persistente superior al 50% de la ampli-
electrodo, sobre todo en pacientes con cirugía tud de las respuestas musculares se encuentra asocia-
previa. da a un déficit motor postoperatorio, y el grado de
– Los tumores intramedulares y la radioterapia disminución de esa amplitud se correlaciona con el
previa en la zona pueden provocar una desin- grado de déficit motor (Tabla I). Asimismo, la apari-
cronización de la onda D que la haga irreco- ción de las respuestas cuando no estaban presentes
nocible. al inicio de la intervención se ha demostrado que
Los PEM se recogen mediante electrodos de indica un buen pronóstico postoperatorio.
aguja subdérmicos en la musculatura de miembros
superiores (músculo abductor pollicis brevis), de MONITORIZACIÓN INTRAOPERATORIA
miembros inferiores (músculo abductor hallucis NEUROFISIOLÓGICA DE LOS NERVIOS CRANEALES
más que en músculo tibial anterior por la iner-
vación dominante del tracto corticoespinal), y en Generalidades
el esfínter anal externo (Fig. 9). Estas respuestas
musculares tienen una gran variabilidad interin- Los electrodos de registro deben ser electro-
dividual(51). dos de aguja, ya que los electrodos de superficie

Manual EMG.indb 214 9/7/07 12:06:37


Monitorización neurofisiológica intraoperatoria 215

TABLA I. Tabla de correlación entra las variaciones de las respuestas neurofisiológicas obtenidas tras la estimulación eléctrica transcraneal
y el trastorno neurológico
Onda D PEM Estado tras la cirugía

Sin cambios o disminución de la amplitud 30-50% Conservado Sin cambios


Sin cambios o disminución de la amplitud 30-50% Pérdida uni o bilateral Déficit transitorio
Disminución de la amplitud más del 50% Pérdida bilateral Déficit mantenido

son menos específicos para localizar la respuesta de 0,05-10 mA y una frecuencia de estimulación
muscular, tienen mayor tendencia a los artefactos, de 1-3 Hz.
su colocación es laboriosa y sólo permiten mo- Cuando no se observa respuesta no debemos
nitorizar la musculatura superficial. En cambio, aumentar mucho la intensidad de estimulación,
los electrodos de aguja se insertan rápidamen- pues el estímulo puede transmitirse por conduc-
te y evocan la respuesta incluso de pocas fibras ción pasiva y ocultaría un posible bloqueo.
musculares frente al estímulo umbral. Se deben Las condiciones del registro deben ser las si-
colocar una vez que el paciente se encuentre guientes(52):
anestesiado y situado en la mesa de operaciones, – Sensibilidad: 200-500 μV.
en la mayoría de los casos. Se sugiere que existan – Filtros: 2 Hz-2 KHz.
cables de distintos colores para cada músculo a – Barrido: 20 ms.
explorar. Se deben mantener las impedancias por Aunque tradicionalmente estos estudios se realiza-
debajo de 3 kΩ(54). ban con ausencia de relajación muscular, parece que
No se deben usar los filtros de red porque en- la musculatura craneal es menos sensible a la acción
mascaran las respuestas; es mejor descubrir y eli- de los relajantes musculares que la musculatura de
minar los factores productores del ruido. miembros, por lo que relajaciones musculares del
No se deben usar bloqueantes neuromuscula- 50% (2 respuestas de 4 en el tren de 4) permitirían
res en la anestesia (aparte de la inducción para la realizar unas monitorizaciones fiables.
intubación orotraqueal) para poder, así, recoger La técnica de MIO de barrido libre EMG con-
las respuestas. siste en el registro continuo visual y acústico de las
Para la MIO de los nervios craneales se reco- señales EMG en los músculos tributarios del nervio
mienda compaginar el estudio de EMG continua facial o trigémino durante toda la intervención. Si
en barrido libre (55) con el estudio de mapping la manipulación en una determinada zona evoca
puntual mediante estimulación eléctrica de los respuesta en la musculatura dependiente de estos
nervios(56). nervios, debe hacer pensar en su cercanía. Un au-
Los electrodos de estimulación pueden ser mento simultáneo en todos los canales de la actividad
monopolares o bipolares, según el momento de la EMG puede ser resultado de una disección local.
monitorización, con una distancia interelectrodos Las condiciones del registro deben ser:
de 2-3 mm. Los electrodos bipolares permiten una – Sensibilidad: 500 μV.
localización más precisa, pues la propagación de la – Filtros: 2 Hz-10 KHz.
corriente es menor que con los electrodos monopo- – Barrido: 1 s.
lares, donde la referencia se encuentra a distancia.
Es mejor la estimulación con voltaje continuo que Monitorización del nervio óptico
con corriente continua, porque no se artefacta tan-
to por los fluidos del LCR. El estímulo debe ser un La MIO del nervio óptico se suele realizar en
pulso cuadrado de 0,1-0,2 ms con una intensidad las intervenciones hipofisarias, tumores del seno

Manual EMG.indb 215 9/7/07 12:06:38


216 P.J. Pérez Lorensu, J.M. Garrido Babío, V.M. García Marín

a la retina depende del diámetro pupilar y los fár-


macos anestésicos pueden afectarlo.
Los electrodos de registro recomendados son
agujas subdérmicas o electrodos de superficie fija-
dos con colodión en los lugares habituales (Oz).
La respuesta suele tener una latencia de 100 ms
cuando se recoge en el scalp (P100) y de 45 ms si
se recoge en el nervio óptico.
Si se pueden obtener respuestas reproduci-
bles de base, cualquier cambio sobre las mismas
deberá ser comunicado al cirujano. De todos
modos, hay que tener en cuenta que en muchas
ocasiones el régimen anestésico impide la co-
rrecta MIO(57).

Figura 10. Gafas tipo Goggles (Cadwell®) para el estudio monitorización Monitorización de la musculatura extraocular
intraoperatoria de los potenciales evocados visuales.
La principal dificultad de la MIO de estos ner-
vios es su relativa inaccesibilidad y la de su mus-
cavernoso y aneurismas cerebrales, mediante los culatura tributaria.
potenciales evocados visuales (PEV). Aunque se han descrito electrodos corneales de
Se ha demostrado que el estímulo adecuado superficie que registran los movimientos oculares,
para evocar los PEV es el damero (pattern)(29), que habitualmente se utilizan electrodos de registro
no es viable en quirófano, donde los estímulos uti- monopolares de aguja aislados con teflón, salvo
lizados pueden ser el flash, goggles (Fig. 10) o len- en su punta, que se deben introducir en la órbita.
tes de contacto. Estos no presentan resultados tan El paciente debe estar despierto para la correcta
fiables en las respuestas (excesivos falsos positivos y colocación de los electrodos. Así puede obtenerse
falsos negativos), con escaso valor para determinar actividad EMG con el desplazamiento voluntario
el grado de lesión del nervio. De todos ellos, las del músculo que se va a monitorizar. Una vez colo-
gafas tipo goggles con diodos en las lentes son los cados los electrodos se deben fijar al párpado para
estimuladores más utilizados. Es muy importante impedir la movilización durante la intervención y
la forma de colocación de las mismas durante la la perforación de la órbita. Se recomienda que los
cirugía, ya que una excesiva presión puede provo- electrodos no sobrepasen los 4 mm de longitud
car daños en la orbita. para evitar lesiones iatrogénicas provocadas por
Los filtros utilizados están entre 1 y 70 Hz. La movimientos del globo ocular durante la estimu-
intensidad del estímulo, así como el color de emi- lación eléctrica.
sión de los diodos son factores que debemos tener Para la monitorización del III nervio craneal se
en cuenta y reflejarlos en el informe. En general, localiza con el dedo el borde inferior de la órbita y
se prefieren los diodos de color verde, porque el se inserta el electrodo en el tercio interno de la dis-
paciente se va habituando al estímulo cuando se tancia entre el canto interno y el externo, se ordena
estimula con el color rojo y se degradan las respues- al paciente que mire hacia abajo y se introduce
tas. Sólo se debe estimular de manera monocular con lentitud, ligeramente inclinado hacia abajo y
y con una frecuencia de 1 Hz. hacia dentro de la órbita, guiándose por el suelo
Se deben utilizar midriáticos antes de iniciar la de la órbita y deteniéndose en cuanto se obtenga
intervención, ya que la cantidad de luz que llega respuesta EMG.

Manual EMG.indb 216 9/7/07 12:06:38


Monitorización neurofisiológica intraoperatoria 217

craneal y sus latencias están aumentadas, o bien


cuando está afectado el nervio facial y el músculo
orbicular ocular se encuentra denervado.

Monitorización del nervio trigémino

Para obtener la respuesta del componente mo-


tor del nervio trigémino se colocan electrodos de
registro de aguja subdérmicas en el músculo tem-
poral, justo por encima de la porción media de
la oreja, ya que localizaciones más anteriores dan
lugar a que el PEM obtenido pueda ser propagado
desde el orbicular de los párpados por volumen de
Figura 11. Esquema de latencias y respuestas motoras tras estimulación conducción. La respuesta suele tener una latencia
de nervios craneales. Tiempo de análisis 20 ms. de 3,5-5 ms(56) (Fig. 11).

Monitorización del nervio facial


No se suele realizar esta técnica para el estudio
del IV nervio craneal, por la dificultad para encon- La incidencia de parálisis facial postoperatoria
trar la musculatura tributaria del mismo. tras la cirugía del neurinoma del VIII nervio craneal
La MIO del VI nervio craneal se realiza indi- se encuentra entre el 11,7 y 41%(62) y en el 0,5%
cando al paciente que mire hacia el mismo lado tras estapedectomías. Estos porcentajes se reducen
del recto externo que va a ser explorado, se inserta considerablemente con la utilización de la MIO.
el electrodo en el canto externo del párpado si-
guiendo el ecuador del ojo y, con una ligera des- Protocolo de monitorización intraoperatoria
viación interna, se introduce siguiendo la pared Los electrodos de registro deben ser electrodos
de la órbita. de aguja monopolares situados en los músculos
El electrodo de referencia se coloca en la frente orbicular de los ojos y orbicular de la boca del lado
o en el ala de la nariz contralateral. a monitorizar(58).
Con estímulos cuadrados de 0,1-1 mV de 100 μs En ocasiones es difícil diferenciar por el ciru-
de duración, se evocan respuestas musculares. Todas jano el nervio facial del trigémino en el campo
las latencias de la musculatura extraocular se encuen- quirúrgico, por lo que es conveniente registrar tam-
tran entre 2-3 ms. bién la actividad EMG en los músculos masetero
De manera más sencilla, es posible identificar la o temporal y comparar las latencias y amplitudes
respuesta motora del VI nervio craneal mediante la de las respuestas con las obtenidas en los músculos
observación cuidadosa de las latencias y amplitudes inervados por el facial (Fig. 12). La respuesta de la
de las respuestas evocadas sobre la musculatura del musculatura facial a un estímulo del nervio en el
orbicular ocular (con dos agujas monopolares en el ángulo pontocerebeloso tiene una latencia entre
canto ocular), ya que por conducción de volumen 6-8 ms(59). Por volumen de conducción se pueden
se puede apreciar la respuesta, generalmente con recoger respuestas de la musculatura dependiente
una latencia significativamente menor (2-3 ms), en del trigémino cuando se estimula el facial, pero la
contraste con los 6-8 ms que tienen las respuestas respuesta se debe identificar fácilmente porque pre-
del facial estimulando en el ángulo pontocerebe- senta una latencia significativamente menor, entre
loso y con una amplitud menor (Fig. 11). Esta 3 y 4 ms(60). A su vez, la estimulación del VI nervio
técnica no sirve cuando está lesionado el VI nervio craneal puede producir una respuesta, también por

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218 P.J. Pérez Lorensu, J.M. Garrido Babío, V.M. García Marín

A B

Figura 12. A: respuestas musculares tras estimulación del nervio facial. Se recoge respuesta en musculatura facial con latencias cercanas a los 6 ms;
B: el mismo paciente, estimulación del nervio trigémino, se recoge respuesta muscular en su musculatura tributaria a los 2,6 ms y en musculatura
facial ocular a los 3,1 ms, probablemente por volumen de conducción desde los músculos oculomotores por estimulación del VI nervio craneal y en
musculatura temporal por el trigémino.

volumen de conducción, en el orbicular de los ojos Monitorización del nervio facial en las intervenciones de
(pero no en el m. orbicular de la boca), con una cirugía de parótida
latencia cercana a los 2 ms y generalmente de me- En la cirugía de tumores de la glándula parótida
nor amplitud que las respuestas evocadas cuando la incidencia de lesiones postoperatorias del nervio
se estimula directamente el nervio facial(61). facial puede llegar al 7-42%, generalmente de una
de sus ramas (sobre todo la marginal)(63). Se realiza
Predicción de la función postoperatoria del nervio facial mediante las técnicas anteriormente explicadas de
Cuando se obtienen respuestas al final de la barrido libre EMG durante la intervención (control
intervención estimulando la zona proximal y distal de estiramientos, coagulación o sección nerviosa) y
con intensidades inferiores a 0,1 mA, se considera mediante la técnica de estimulación nerviosa, reco-
que el nervio estará preservado, pero no implica giendo las respuestas en la musculatura tributaria
que no pueda existir una parálisis facial diferida. Si de las ramas faciales (orbicular de los ojos, nasal,
no se obtiene respuesta con la estimulación proxi- orbicular de los labios y mentón)(64) (Fig. 13).
mal pero sí con estímulo distal (mastoides) segu-
ramente exista lesión del nervio facial, sin poder Monitorización nervio facial mediante estimulación eléctrica
precisar entre lesión completa o parcial. Se puede transcraneal
determinar un pronóstico mediante valoración de Durante la MIO en la cirugía de la base de
las amplitudes de las respuestas proximal y distal cráneo, las estimulaciones eléctricas del nervio
con estimulaciones eléctricas a baja intensidad. Si facial para valorar su integridad puede que no
la relación entre la estimulación proximal y distal detecten lesiones proximales del mismo. Para
es superior a 0,3 es indicativo de buen pronóstico, poder estudiar la integridad de la vía nerviosa
así como la presencia de respuesta muscular con se puede utilizar la técnica de estimulación me-
intensidades de estimulación proximal inferiores diante multipulsos, con ligeras modificaciones
a 0,3 mA. La amplitud del PEM del nervio facial respecto a la metodología clásica(59). Se realiza
puede ser también predictiva, de modo que ampli- con 3-4 multipulsos rectangulares de 0,5 ms de
tudes mayores de 800 μV se suelen relacionar con duración, con un intervalo interestímulo de 1-2
buen pronóstico y amplitudes inferiores a 100 μV ms, porque un mayor número de estímulos o un
con mal pronóstico. intervalo interestímulo mayor interferiría con la

Manual EMG.indb 218 9/7/07 12:06:39


Monitorización neurofisiológica intraoperatoria 219

Figura 13. A la izquierda, colocación de electrodos de recogida en la MIO del nervio facial en la cirugía de parótida en los músculos orbicular de los ojos,
nasal, orbicular de los labios y mentón. En el centro, estimulación del nervio facial (tronco común) y recogida en musculatura tributaria con una intensidad
de 3,5 mA (barrido 20 ms y amplitud 500 μV). A la derecha, descargas neurotónicas en ramas superiores del nervio facial tras tracción de la rama temporal
(barrido 1 s y amplitud 5 μV/división).

detección del PEM del nervio facial, que tiene


una latencia corta (Fig. 14).

Monitorización del nervio auditivo

EL VIII es el más susceptible de los nervios cra-


neales a ser dañado por manipulación directa, por
el calor de la electrocoagulación y también por los
tumores que asientan en el mismo o cercanos a él.
Esta sensibilidad especial se debe a que sus axones se
encuentran recubiertos por mielina central sin peri-
neuro en todo su trayecto intracraneal. La hipoacu-
sia o sordera es la complicación que se produce en
lesiones de este nervio y la única manera de moni-
torizar la función auditiva en pacientes anestesiados
es mediante el estudio de los potenciales evocados
auditivos de tronco cerebral (PEATC)(56).

Técnica de monitorización intraoperatoria


El estudio mediante PEATC es la técnica más Figura 14. Estudio de monitorización intraoperatoria. PEM obtenido por
antigua de MIO(65). Para el registro de los PEATC estimulación eléctrica transcraneal de nervio facial, recogiendo la respuesta
el electrodo activo se coloca en la mastoides y el de en el músculo orbicular de los ojos. Trenes de 3 estímulos de 270 V con
referencia en el vértex. Durante la monitorización intervalo interestímulo de 1 ms. Barrido 20 ms.
y por necesidades del campo operatorio no importa
que el electrodo de referencia se desplace por de-
lante o por detrás de Cz, siempre que se encuentre Los auriculares de estimulación deben ser pe-
en la línea media. En caso de no obtener una res- queños para poder introducirlos en el conducto
puesta se pueden insertar electrodos de aguja en auditivo sin estorbar en el campo operatorio, con
el conducto auditivo externo, o incluso electrodos una intensidad de estimulación de 95 dB y una
intrameatales extratimpánicos. frecuencia de estimulación de 20-50 Hz, con po-

Manual EMG.indb 219 9/7/07 12:06:40


220 P.J. Pérez Lorensu, J.M. Garrido Babío, V.M. García Marín

Figura 15. Electrodos de estimulación auditivas para los PEATC en la monitorización intraoperatoria (Oxford® a la izquierda y Cadwell® a la derecha)

laridad alternante, ganancia de 5 μV y tiempo de


barrido de 10 ms. Los filtros deben estar entre 100
y 1.500 Hz.
La latencia y la amplitud de la onda V son los
parámetros que se utilizan en la MIO(67) (Fig. 15).
La desaparición de todas las ondas excepto la
I es un signo inequívoco de grave lesión del ner-
vio; si desaparece la onda I es indicativo de lesión
coclear.
Si la onda V se mantiene tras la intervención,
generalmente se encontrará preservada la audición
(aunque en ocasiones puede perderse en 2-3 días).
Si tras la intervención existe una pérdida completa
de las ondas I y V casi siempre existe una pérdida Figura 16. Alteración de los PEATC durante la monitorización intraoperato-
total de audición(68). ria en craniotomía de fosa posterior por schwannoma de VII nervio craneal.
En la parte inferior, valores basales tras anestesia. En el punto 1 se abre la
Si se detecta alteración de la onda V se reco- duramadre y comienza retracción del cerebelo para acceder al VII nervio
mienda detener temporalmente la intervención craneal. En el punto 2 se retira retracción por alteración progresiva de los
hasta que se mejoren las respuestas, e instilar PEATC y comienzan a recuperarse las respuestas hasta los valores basales.
nimodipino local para prevenir el vasoespasmo La paciente se despertó sin déficit audiométrico apreciable. Barrido 10
ms. Ganancia 200 nV.
(Fig. 16).

Registro del potencial de acción del nervio auditivo Para la estimulación se utilizan los mismos pa-
Para el registro del potencial de acción com- rámetros que en los PEATC (Fig. 17).
puesto del nervio auditivo, el electrodo activo suele La respuesta del potencial de acción presenta
ser de plata maleable, aislado en teflón, salvo la generalmente una amplitud 5 veces superior a la de
punta, que debe ser roma, situado en el nervio los PEATC (entre 12 y 21 μV) por lo que debemos
coclear cerca de su entrada en el tronco, inter- tener cuidado con la ganancia. Suele tener una
poniendo entre ambos una hebra de algodón. El morfología bifásica, con un primer componente
electrodo de referencia es una aguja subdérmica positivo de 2-3 ms de latencia y otro negativo entre
colocada en la musculatura descubierta o en la 2,3 y 4,6 ms, coincidiendo el segundo componente
oreja contralateral(65). negativo con la onda II de los PEATC. Los cambios

Manual EMG.indb 220 9/7/07 12:06:41


Monitorización neurofisiológica intraoperatoria 221

Figura 17. Ejemplo de colocación de electrodos en la monitorización intraoperatoria de nervios craneales. Estimulador PEATC (E). Electrodos de recogida
PEATC (VIII) en mastoides con referencia en Cz. Electrodos de recogida nervio trigémino (V) en músculo temporal. Electrodos de recogida nervio facial
(VII) en músculo orbicular de los ojos y en músculo orbicular de los labios.

Figura 18. Esquema de colocación de los electrodos para la monitorización intraoperatoria sobre la musculatura tributaria de los nervios craneales X (en
cuerda vocal falsa), IX (en paladar blando), XI en trapecio y XII (en lengua).

respecto al resultado basal son indicativos de lesión músculo estilofaríngeo, porque es difícil el abordaje
del nervio(69). directo de dicho músculo(70) (Fig. 18).
La gran ventaja de esta técnica es la rapidez en la Se debe fijar mediante sutura o esparadrapo el
obtención de las respuestas. Sin embargo, pequeños electrodo para evitar posibles desplazamientos y
desplazamientos del electrodo provocan cambios im- un retractor para la lengua.
portantes en el potencial, sobre todo en la amplitud, El potencial registrado suele tener una latencia
por lo que la elección del electrodo es crucial. de 5-7 ms y es de muy baja amplitud(71).

Monitorización del nervio glosofaríngeo Monitorización del nervio vago

Se utiliza un electrodo monopolar aislado por te- Habitualmente, la MIO se realiza recogiendo la
flón, salvo en la punta. La boca se mantiene abierta respuesta motora en alguno de las siguientes posi-
con un separador y a través de la abertura se intro- ciones: en la laringe supraglótica, en concreto en la
duce el electrodo en la parte posterior del paladar falsa cuerda vocal (no directamente en la cuerda vo-
blando del lado del nervio que vamos a monitorizar. cal para evitar lesiones de la misma); en el músculo
Se registra por volumen de conducción el PEM del vocalis, mediante agujas subdérmicas monopolares;

Manual EMG.indb 221 9/7/07 12:06:43


222 P.J. Pérez Lorensu, J.M. Garrido Babío, V.M. García Marín

Figura 19. Colocación de electrodos de EMG en los territorios de los IX y XII nervios craneales en el paladar blando con ayuda de laringoscopio y en la
lengua. Monitorización intraoperatoria del X NC mediante electrodo en el tubo de intubación orotraqueal.

en la pared endotraqueal, próximo a la cuerda vocal,


mediante un electrodo de superficie conectado al
tubo endotraqueal(71) (Figs. 19 y 20).
La intensidad de estimulación será de 0,05-0,1
mA (umbrales), pues intensidades superiores a 8
mA pueden provocar broncoespasmo o alteraciones
en la frecuencia cardiaca, incluso asistolia.
La latencia de la respuesta en los tres métodos
es de 4-6 ms con el estímulo del nervio en la fosa
posterior o el agujero yugular.
En las intervenciones quirúrgicas del tiroides, Figura 20. Respuestas musculares tras la estimulación de los nervios craneales X
paratiroides o cervicales anteriores, la lesión del y XI en monitorización intraopetaroria de tumor de ángulo pontocerebeloso.
nervio laríngeo recurrente ocurre hasta en un 14%
de los casos, por lo que la monitorización puede
ayudar a prevenir esta lesión(63). nervios que salen por el agujero rasgado posterior
Se suele utilizar un estimulador bipolar, con en grandes tumores de la fosa posterior.
intensidad de estímulo de 0,5-1 mA y con una fre- La MIO de este nervio se lleva a cabo situan-
cuencia de estimulación de 3-30 Hz. do el electrodo de registro en el músculo trapecio
La colocación de electrodos EMG situados en superior, perpendicularmente a la superficie. Su
la musculatura vocal a través del ligamento crico- estimulación, con una intensidad de 0,5-2 mA y
tiroideo también aporta buenos resultados y es un una frecuencia de estimulación de 30 Hz al nivel
método más económico(72). de la fosa posterior, provoca un PEM con una la-
La respuesta muscular estimulando el nervio a tencia de 5-7 ms(73).
nivel del cuello suele tener una latencia de 2-3 ms. Tiene el inconveniente de que su estimulación
provoca grandes movimientos, sobre todo de la ca-
Monitorización del nervio espinal beza del paciente, lo que puede ser peligroso para
éste y molesto para el cirujano, cosa que se evita
Es el nervio más cómodo y fácil de monitorizar, parcialmente al estimular sólo con intensidades
por lo que se puede usar de referencia para los umbrales(71).

Manual EMG.indb 222 9/7/07 12:06:44


Monitorización neurofisiológica intraoperatoria 223

Figura 21. Colocación de electrodos para el estudio del sueño del IV ventrículo y respuestas musculares tras estimulación del tronco cerebral con intensidad
de 0,4 mA.

Monitorización del nervio hipogloso ta corticoespinal tras estimulación eléctrica transcra-


neal mediante la onda D a nivel epidural(76).
Se introducen electrodos de aguja monopolar en El estímulo se realiza con electrodo monopolar
el tercio anterior de la lengua, en el músculo genio- o bipolar, con las siguientes características(77):
gloso ipsilateral a la lesión, y se fijan con un punto – Duración pulsos cuadrados de 0,1-0,4 ms de
de sutura o con esparadrapo a la cara(73). La respuesta duración.
motora suele tener una latencia de unos 6 ms(71). – Frecuencia 1-4 Hz.
– Intensidad 0,5-2 mA78.
Mapping del suelo del IV ventrículo – Los filtros se sitúan entre 30 y 30.000 Hz.
– La amplitud debe estar en 100 μV por divi-
Esta técnica, permite la identificación de estruc- sión.
turas funcionales en pacientes con distorsión del tron- – El barrido se sitúa en 20-30 ms.
co (tumores y otras lesiones ocupantes de espacio) Como posibles efectos secundarios se encuen-
para delimitar áreas de acceso seguro (infrafacial y tra la posible aparición de arritmias cardiacas por
suprafacial). No es una técnica común de monitoriza- estimulación de los nervios craneales bajos, como
ción, es intermitente y no puede detectar lesiones del el vago, o el trigémino.
tracto corticoespinal supranuclear (entre la corteza y Se debe recoger continuamente la actividad
los núcleos de los nervios craneales)(74). EMG espontánea (barrido libre) mientras que
Para realizar este tipo de estudios el paciente no se esté realizando el estudio mediante ma-
no debe estar bajo la influencia de relajantes mus- pping.
culares.
Los electrodos de recogida son electrodos de aguja
subdérmica, situados bilateralmente en los músculos MONITORIZACIÓN INTRAOPERATORIA CORTICAL
orbicular de los ojos y de la boca, masetero, lengua y
musculatura faríngea, con la técnica descrita previa- En la actualidad se asume que la MIO cortical,
mente (Fig. 21). Puede recogerse también la respues- posibilita la realización de un mapa funcional de

Manual EMG.indb 223 9/7/07 12:06:45


224 P.J. Pérez Lorensu, J.M. Garrido Babío, V.M. García Marín

la corteza expuesta en una craniotomía, tanto para momento la medicación administrada y la posibili-
determinar las zonas funcionalmente significativas dad de modificarla, si es preciso, para obtener unos
y tratar de preservarlas, y aquellas que no lo son y buenos registros. En ocasiones se puede incluso
pueden servir de “corredor” para acceder a lesiones condicionar la posición de las vías periféricas o cen-
subyacentes más profundas; también aportan infor- trales y la del tubo de intubación orotraqueal, para
mación para practicar una resección más radical que no interfieran con los electrodos utilizados(81).
(fundamental en el caso de los tumores) sin dañar
las zonas elocuentes(79). Dependiendo de la loca-
lización anatómica de la lesión cerebral, debemos INTERACCIONES ENTRE ANESTÉSICOS Y MONITORIZACIÓN
plantear un estudio funcional motor (área cortico- INTRAOPERATORIA
rolándica, área motora suplementaria), un estudio
funcional sensitivo (corteza sensitiva primaria) o un Para el estudio de monitorización de los PESS
estudio funcional del lenguaje (temporal, frontal y de los PEATC:
posterior o parietal)(80). La descripción de estas téc- – Los PEATC son muy sensibles a los anesté-
nicas escapa a los objetivos de este manual. sicos inhalatorios pero no a los bloqueantes
neuromusculares (de hecho incluso mejora la
obtención de resultados por la abolición de la
CONSIDERACIONES GENERALES SOBRE LA ANESTESIA EN respuesta muscular de fondo). Se recomienda
LA MONITORIZACIÓN INTRAOPERATORIA por tanto no usar los anestésicos inhalatorios,
pero si se precisan, deben ser utilizados con una
Durante la cirugía, se emplean una gran varie- concentración alveolar mínima inferior a 0,5, y
dad de fármacos anestésicos, sedantes, hipnóticos, se recomienda sevoflurano(82).
narcóticos y relajantes neuromusculares. Además – No se recomienda el uso del óxido nitroso, dada
es muy importante que las constantes fisiológicas la gran variabilidad en las respuestas dependien-
(tensión arterial, oximetría, cambios en el CO2, do de la concentración.
temperatura, volemia, etc.) no se modifiquen du- – No se suelen afectar por los anestésicos intra-
rante la intervención ya que cambios de este tipo venosos. El propofol produce una depresión
pueden modificar en gran medida las respuestas transitoria de los PESS corticales con rápida
neurofisiológicas de la MIO(81). recuperación de las respuestas al terminar la
Los fármacos pueden influenciar la monitori- infusión(4).
zación mediante(81): En la MIO de los PEM mediante estimulación
– Efecto en las sinapsis de la vía nerviosa. eléctrica transcraneal:
– Efectos directos sobre el modo de monitorización, – Los potenciales son influenciados tanto por los
de manera no lineal, no dosis dependiente. anestésicos inhalatorios como por los relajantes
– Efectos sobre el flujo vascular cerebral y el me- musculares, por lo que necesitan que la anes-
tabolismo que alteran las sinapsis, y por tanto tesia sea inducida y mantenida por anestesia
provocan alteraciones cerebrales y cambios en intravenosa(4), generalmente con propofol a
las respuestas de los potenciales evocados y el dosis de 100-120 μg/kg/min.
EEG. – Es muy importante reseñar que aún con las
– Depresión hemodinámica que puede contribuir concentraciones de los fármacos endovenosos
a la hipoperfusión del tejido neural y efectos en anestésicos constantes, existe un fenómeno
la temperatura corporal. denominado anesthesic fade, que implica que
Estos efectos hacen necesario una buena co- cuanto más tiempo esté el paciente anestesiado
municación entre el anestesista y el neurofisiólogo precisará mayor intensidad para evocar los PEM
clínico que realiza la MIO, para conocer en cada (efecto diferente al dosis dependiente).

Manual EMG.indb 224 9/7/07 12:06:45


Monitorización neurofisiológica intraoperatoria 225

– La onda D epidural medular es relativamente Committee. Electroencephalogr Clin Neurophysiol 1993;


87 (5): 263-76.
inmune a los anestésicos que afectan a la cor-
8. Wiedemayer H, Sandalcioglu IE, Armbruster W, Regel J,
teza motora, dado que no se encuentra media-
Schaefer H, Stolke D. False negative findings in intraope-
da por sinapsis. Por el contrario, las ondas I se rative SEP monitoring: analysis of 658 consecutive neu-
afectan mucho por los anestésicos. rosurgical cases and review of published reports. J Neurol
– La analgesia se mantiene por opiáceos (p. ej., Neurosurg Psychiatry 2004; 75 (2): 280-6.
remifentanilo), en dosis de 0,35 μg/kg/min, que 9. Moller AR. Intra-operative neurophysiologic monitoring
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reducen la actividad muscular de fondo(82). Clin Neurosurg 1995; 42: 171-9.
La monitorización de los nervios craneales, 10. Kombos T, Suess O, Brock M. Cost analysis of intraope-
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con electrodos epidurales, no se afecta demasiado 11. Wilson L, Lin E, Lalwani A. Cost-effectiveness of intrao-
perative facial nerve monitoring in middle ear or mastoid
por los anestésicos inhalatorios, pero sí por los re- surgery. Laryngoscope 2003; 113 (10): 1736-45.
lajantes neuromusculares(4). 12. Comision de la Sociedad Española de Neurofisiologia Cli-
En la MIO con el paciente despierto y realiza- nica. A practical guide to carrying out neurophysiological
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– Se debe evitar la utilización de anestésicos in- 879-85.
halatorios. 13. MacDonald DB, Al Zayed Z, Khoudeir I, Stigsby B. Mo-
nitoring scoliosis surgery with combined multiple pulse
– Se induce y mantiene la anestesia con propofol transcranial electric motor and cortical somatosensory-
y remifentanilo. evoked potentials from the lower and upper extremities.
– Se debe realizar el bloqueo nervioso de la ca- Spine 2003; 28 (2): 194-203.
beza con anestésicos locales. 14. Owen JH. The application of intraoperative monitoring
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APLICACIONES CLÍNICAS
DE LA ELECTROMIOGRAFÍA

Manual EMG.indb 229 9/7/07 12:06:47


Manual EMG.indb 230 9/7/07 12:06:47
Capítulo 17

ENFERMEDADES DE MOTONEURONA
J.J. Poza Aldea

INTRODUCCIÓN junto con un síndrome piramidal por debajo de


la lesión, lo que puede hacer pensar equivocada-
Las neuronas implicadas en el control motor mente en una ELA, si no se busca el trastorno
reciben el nombre de motoneuronas. El circuito sensitivo termoalgésico suspendido característico
efector motor consta de dos motoneuronas, una de esta enfermedad.
primera cortical o superior, y una segunda bul-
boespinal o inferior. Desde el punto de vista elec-
tromiográfico, nos interesan estas últimas, pues su ESCLEROSIS LATERAL AMIOTRÓFICA (ELA)
alteración va a ser detectable mediante el electro-
miograma, mientras que los trastornos de las moto- La ELA es una enfermedad neurodegene-
neuronas corticales no van a provocar alteraciones rativa de origen desconocido, caracterizada por
en el electromiograma. una afectación difusa de las motoneuronas del
Las motoneuronas inferiores pueden verse afec- sistema nervioso, tanto corticales como bulbares
tadas en diversas enfermedades. La más frecuente y espinales. Se pueden distinguir 3 variantes clí-
de ellas es la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), nicas: la esclerosis lateral primaria, en la que hay
en la que se asocia una afectación de primera y afectación exclusiva de primera motoneurona, la
segunda motoneurona en una proporción variable. parálisis bulbar progresiva, en la que se afectan
Mucho más raras son las atrofias espinales fami- predominantemente las motoneuronas bulbares y
liares. Desde la implantación de las campañas de la atrofia muscular progresiva, en la que se produ-
vacunación a principios de los 50, la poliomieli- ce una afectación exclusiva de las motoneuronas
tis se ha convertido en una rareza en los países espinales. Generalmente, se trata de distintas for-
industrializados, aunque todavía es relativamente mas de presentación de la enfermedad, que con el
frecuente en países del tercer mundo. Algunos pa- tiempo van extendiéndose al resto de los territorios,
cientes que han sufrido poliomielitis, al cabo de va- ocasionando una afectación generalizada de todas
rios años desarrollan un cuadro lentamente progre- las motoneuronas.
sivo, denominado síndrome postpolio, que puede El diagnóstico es fundamentalmente clínico, y
plantear problemas de diagnóstico diferencial con se basa en la demostración de signos de afectación
una enfermedad de motoneurona. Finalmente, las de primera motoneurona (síndrome piramidal) aso-
motoneuronas constituyen un elemento más que ciados a debilidad, atrofia y fasciculaciones que
se afecta en varias enfermedades neurodegenerati- indican una lesión de la segunda motoneurona.
vas. La siringomielia también puede ocasionar una Los criterios clínicos diagnósticos fueron definidos
afectación de segunda motoneurona segmentaria, en la reunión de la World Federation of Neurology

Manual EMG.indb 231 9/7/07 12:06:47


232 J.J. Poza

TABLA I. Criterios diagnósticos de ELA TABLA II. Niveles de certeza diagnóstica en la ELA
1. Presencia de: 1. Definitiva: afectación de primera y segunda motoneurona en 3 de
a. Evidencia de afectación de motoneurona inferior por examen las siguientes regiones: bulbar, cervical, dorsal y lumbar
clínico, neurofisiológico o neuropatológico 2. Probable: afectación de primera y segunda motoneurona en 2 regio-
b. Evidencia de afectación de motoneurona superior por examen nes localizándose los signos de afectación de primera motoneurona
clínico rostralmente a los de segunda
c. Progresión de los síntomas y generalización 3. Posible: afectación de:
a. Primera y segunda motoneurona en 1 región
2. Ausencia de:
b. Sólo de primera motoneurona en 2 ó 3 regiones
a. Evidencia neurofisiológica, neuropatológica, o por técnicas de
c. Primera y segunda motoneurona en 2 regiones, pero los signos de
neuroimagen de otra enfermedad que pueda explicar la afectación
afectación de primera motoneurona son caudales a los de segunda
de motoneurona
motoneurona
4. Sospecha: afectación de segunda motoneurona en 2 ó 3 regiones

de El Escorial (Tabla I), estableciéndose 4 niveles


de certeza diagnóstica (Tabla II)(1).
El estudio electrofisiológico es fundamental en fibras musculares que han perdido contacto
para la confirmación diagnóstica, así como para con una terminal axónica. Su presencia indica
la realización de un adecuado diagnóstico diferen- denervación aguda, pues con el tiempo, la fibra
cial(2). La electromiografía con aguja nos permite muscular denervada muere y deja de producir estos
confirmar el carácter neurógeno de la debilidad potenciales. Lo que va a caracterizar a la ELA es
apreciada en la exploración clínica, y puede detec- que la distribución de esta actividad de denerva-
tar una afectación neurógena subclínica en mús- ción no se ciñe a un territorio radicular ni de un
culos aparentemente respetados. De esta forma, nervio concreto, sino que es generalizada, aunque
en pacientes con un cuadro clínico aparentemente asimétrica.
focal o segmentario, el electromiograma puede de- La cantidad de actividad espontánea puede
tectar una alteración difusa, lo que nos confirma ser orientativa de la agresividad de la enfermedad
el diagnóstico de ELA más precozmente. Además, en un momento concreto, pues a mayor actividad
los estudios de conducción nerviosa nos permiten espontánea mayor denervación aguda. Una gran
hacer el diagnóstico diferencial con otras entida- cantidad de fibrilaciones indica una pérdida rápida
des que también pueden ocasionar una debilidad de motoneuronas, y, a priori, es indicativa de mal
neurógena difusa. pronóstico. No obstante, hay que tener en cuenta
que la velocidad de progresión de la enfermedad no
Electromiograma es constante, y que períodos de gran denervación
y rápida progresión pueden seguirse de otros de
El patrón del EMG en la ELA no tiene ninguna evolución más lenta.
característica que lo diferencie del que podemos Un elemento característico del EMG en la ELA
encontrar en cualquier otro proceso neurógeno. Lo es la presencia de fasciculaciones. Las fasciculacio-
que va a caracterizar a la ELA es su distribución y nes aparecen precozmente, incluso en músculos
su curso evolutivo, que llevan a la generalización que conservan la fuerza y no presentan aún signos
de los hallazgos electromiográficos. de denervación. La fasciculación es un potencial
En reposo, se observan signos de denervación de unidad motora, que se genera ectópicamente
difusa, con presencia de fibrilaciones y ondas posi- en cualquier parte de la membrana de la motoneu-
tivas, asociadas a fasciculaciones (Fig. 1). Tanto las rona, y recluta a todas las fibras musculares que
fibrilaciones como las ondas positivas se generan están inervadas por ella. Las fasciculaciones son

Manual EMG.indb 232 9/7/07 12:06:48


Enfermedades de motoneurona 233

Figura 1. Fibrilaciones y fasciculaciones.

muy frecuentes en la ELA, pero no son patogno- son patológicas es que en el EMG se detecten si-
mónicas, y su presencia no implica necesariamente multáneamente signos de denervación (fibrilacio-
afectación del soma neuronal, pudiendo aparecer nes y/u ondas positivas).
en cualquier proceso neurógeno. Incluso, las fasci- La actividad voluntaria va a presentar también
culaciones benignas aparecen sin que haya patolo- las características de un patrón neurógeno difuso.
gía. Desde el punto de vista EMG no hay ningún En un principio, los potenciales de unidad motora
dato que permita diferenciar las fasciculaciones de mantienen sus características de morfología y ampli-
la ELA de las asociadas a otras patologías del siste- tud, pero el patrón de reclutamiento es neurógeno.
ma nervioso periférico, salvo su distribución, que, Este patrón de reclutamiento neurógeno se carac-
por definición, en la ELA serán difusas. Tampoco teriza por un aumento en la frecuencia de batido
hay rasgos patognomónicos que diferencien las de las motoneuronas. En condiciones normales,
fasciculaciones de la ELA de las fasciculaciones una motoneurona bate a una frecuencia de 5-10
benignas. A priori, las fasciculaciones asociadas a la Hz. Al ir aumentando progresivamente la fuerza de
ELA son más complejas, con aspecto polifásico, y contracción muscular, se van activando nuevas mo-
baten a baja frecuencia, mientras que las fascicula- toneuronas que baten a esta misma frecuencia. Si
ciones benignas tienen una morfología más normal hay una pérdida de unidades motoras, como ocurre
y baten a elevada frecuencia. Desde el punto de en la ELA, el aumento de fuerza muscular, que no
vista clínico, las fasciculaciones benignas suelen ser puede obtenerse activando nuevas motoneuronas,
más perceptibles por el individuo, de modo que el se realiza mediante un aumento en la frecuencia de
sujeto con fasciculaciones benignas consulta por batido de las motoneuronas que restan, lo que da
la incomodidad y preocupación que le producen lugar a un sonido característico, como de un motor
los saltos musculares, mientras que el paciente con que no consigue arrancar (Fig. 2).
ELA rara vez menciona espontáneamente la pre- Posteriormente, a medida que progresa la de-
sencia de fasciculaciones. En cualquier caso, el nervación y aparecen fenómenos de reinervación,
único dato que demuestra que las fasciculaciones la morfología de los potenciales de unidad motora

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234 J.J. Poza

Figura 2. Reclutamiento neurógeno.

Figura 3. Potenciales de reinervación colateral con satélites.

comienza a ser más abigarrada, aumentando la am- Estudios de conducción nerviosa


plitud, duración y el grado de polifasia, pudiendo
aparecer potenciales satélites (Fig. 3). La existencia En la mayoría de los pacientes con ELA, la
de capacidad de reinervación puede hacer que la electroneurografía es poco expresiva, si bien su
enfermedad progrese más lentamente, por lo que realización es inexcusable, pues permite descar-
la detección de signos electromiográficos de rei- tar procesos que pueden remedar clínicamente a
nervación nos puede hacer pensar en un cuadro una ELA, especialmente la neuropatía multifocal
menos agresivo. motora con bloqueos de conducción(3).

Manual EMG.indb 234 9/7/07 12:06:49


Enfermedades de motoneurona 235

Con frecuencia se aprecia una disminución de potenciales motores se hacen muy pequeños, el po-
la amplitud de los potenciales evocados motores, tencial proximal puede tener una amplitud inferior
proporcional a la atrofia por denervación. La ve- al 50% del potencial distal debido a fenómenos de
locidad de conducción motora puede estar algo cancelación. Por tanto, no se deben considerar para
disminuida, por la pérdida más precoz de los axones la detección de bloqueos de conducción aquellos
mielinizados más gruesos, pero nunca es inferior al nervios en los que la amplitud del potencial motor
70% del valor normal. Las latencias motoras distales esté muy reducida(5).
también pueden estar algo alargadas, debido a la
pérdida de los axones más gruesos y a la aparición Respuestas tardías
de ramas colaterales axónicas finas e inmaduras,
que tratan de reinervar las fibras musculares cuya En la ELA, la latencia de la onda F está conser-
motoneurona ha muerto. En cualquier caso, este vada o ligeramente alargada, pero no debe superar
alargamiento no debe rebasar en más de un 30% en más de un 30% el valor normal. En músculos
el valor normal(4). muy atróficos y débiles puede haber un aumento
La amplitud de los potenciales sensitivos y la de la dispersión de las ondas F, y una disminución
velocidad de conducción sensitiva son normales, de la frecuencia, de modo que puede llegar a des-
y la presencia de anomalías en estos parámetros aparecer.
debe sugerir otro diagnóstico, fundamentalmente, La mayor excitabilidad de las motoneuronas
una polineuropatía. espinales inducida por la liberación piramidal,
En todo paciente con sospecha clínica de ELA, puede facilitar la obtención del reflejo H en mús-
especialmente si predomina la afectación de se- culo sóleo, tras estimulación del nervio tibial, así
gunda motoneurona, se debe realizar un estudio como la obtención de este reflejo en músculos
electroneurográfico cuidadoso, incluyendo seg- de la mano, en los que habitualmente no se ob-
mentos proximales y distales, con el fin de descar- tiene(6).
tar la existencia de bloqueos de conducción, que
caracterizan a la neuropatía multifocal motora con ELA y fatigabilidad de la unión neuromuscular
bloqueos de conducción, entidad que semeja desde
el punto de vista clínico a la ELA, o mejor, a la Con relativa frecuencia, los pacientes con ELA
amiotrofia espinal crónica. Se define como bloqueo refieren fatigabilidad, lo que se ha atribuido a alte-
de conducción una disminución en la amplitud del raciones en la transmisión neuromuscular. Deny
potencial motor proximal de más de un 50% con y Norris encontraron que un 67% de 55 pacientes
respecto a la del potencial motor distal. con ELA presentaban respuestas decrementales
En la ELA no hay bloqueos de conducción ge- en la estimulación repetitiva a baja frecuencia. El
nuinos, pero en pacientes con enfermedad avan- decremento es mayor en los músculos más atróficos
zada hay dos elementos que pueden ser causa de y en los que presentan más fasciculaciones, y puede
confusión. En primer lugar, la atrofia muscular y revertir tras el enfriamiento local o la administra-
la inmovilidad que sufre el paciente facilita que ción de inhibidores de la acetilcolinesterasa, igual
se produzcan neuropatías compresivas en puntos que en la miastenia gravis.
anatómicamente predispuestos, como el canal car- Por otro lado, la existencia de fenómenos de rei-
piano, el canal cubital o la cabeza peroneal, lo que nervación, ocasiona que en el EMG de fibra única
origina la aparición de bloqueos de conducción en pueda encontrarse un aumento de la densidad de
estos puntos. Hay que recordar que en la neuropa- fibra, un alargamiento del jitter, y fenómenos de
tía multifocal motora con bloqueos de conducción, bloqueo.
los bloqueos aparecen fuera de estas zonas anató- Obviamente, en casos de sospecha clínica de
micamente predispuestas. Por otro lado, cuando los ELA no se suele someter al paciente a la realización

Manual EMG.indb 235 9/7/07 12:06:49


236 J.J. Poza

de estimulación repetitiva intermitente o electro- Una vez realizado el diagnóstico de ELA definitiva
miograma de fibra única, pero conviene tener en según los criterios del Escorial no es necesaria la
cuenta la posibilidad de que la ELA puede alterar repetición del estudio ENG-EMG.
estas exploraciones, para no descartarla errónea- Para descartar neuropatías multifocales motoras
mente en base a estos hallazgos. con bloqueos de conducción, es imprescindible
realizar un completo estudio de conducción moto-
Planificación del estudio ENG-EMG en caso de sospecha ra y sensitiva, que incluya segmentos proximales y
de ELA distales de los nervios, especialmente aquellos que
inervan a músculos clínicamente débiles.
En un paciente con sospecha clínica de ELA, el
estudio electrofisiológico debe ir dirigido a demos- Evaluación de la progresión de la enfermedad
trar la existencia de denervación en, al menos, tres
de los cuatro territorios (bulbar, cervical, dorsal y Además de para el diagnóstico, las técnicas elec-
lumbar), y a descartar la existencia de alteraciones trofisiológicas pueden servir para medir la progresión
en la conducción motora y/o sensitiva que puedan de la enfermedad. Para ello, se han desarrollado di-
sugerir otros diagnósticos, como polineuropatías o versas técnicas de estimación del número de unidades
neuropatías multifocales motoras con bloqueos de motoras, de las que probablemente la más popular y
conducción. sencilla de realizar sea la descrita por McComas(7).
Para lo primero, se debe realizar un EMG con Esta técnica se basa en el hecho de que el aumen-
aguja que incluya músculos dependientes de dife- to de amplitud del potencial evocado motor en un
rentes metámeras y nervios en cada miembro. Con músculo concreto al incrementar progresivamente la
el fin de ahorrar tiempo de exploración y sufrimien- intensidad del estímulo, no es continuo, sino cuán-
to al enfermo, es recomendable realizar una buena tico. Si asumimos que cada salto en el incremento
exploración clínica previa al estudio EMG, con el de amplitud corresponde al reclutamiento de una
fin de seleccionar los músculos más adecuados para nueva unidad motora, conocida la máxima amplitud
la exploración con aguja, que, sobre todo, serán del potencial y el número de saltos necesario para
aquellos que presenten fasciculaciones clínicas o alcanzarla, podremos estimar el número de unida-
debilidad. Es preferible evitar músculos que pre- des motoras. Recientemente se ha demostrado que
sentan signos de denervación con frecuencia en el número de unidades motoras calculado con esta
sujetos sanos, como los músculos intrínsecos del técnica se corresponde con las halladas en estudios
pie, los que fasciculan con frecuencia en individuos anatomopatológicos. En cualquier caso, estas técni-
sanos, como los gemelos, o aquellos que puedan ver- cas tienen escasa utilidad para el manejo habitual de
se afectados en neuropatías compresivas frecuentes, los enfermos con ELA, pues suponen una molestia
como el abductor corto del pulgar, salvo que se haya añadida para ellos y no aportan una información tras-
descartado la existencia de neuropatía compresiva cendente, dado que la evidencia de una mayor o
mediante el estudio electroneurográfico. menor pérdida de unidades motoras en un momento
Si las alteraciones electromiográficas son evi- determinado no va a llevar a un cambio en la actitud
dentes, el estudio de un músculo en cada territorio terapéutica, y tampoco va a permitir establecer un
puede ser suficiente. En caso contrario, estudia- pronóstico preciso. Así pues, su utilidad se limita a
remos mediante EMG el número de músculos ensayos clínicos en los que se trata de objetivar el
que precisemos de cada territorio para cumplir el grado de progresión de la enfermedad.
objetivo indicado. Si a pesar de todo el estudio En la práctica clínica habitual el estudio ENG-
no fuera concluyente, debe repetirse en un plazo EMG sirve para confirmar el diagnóstico de ELA, y
variable, dependiente de la progresión clínica del una vez hecho esto, no tiene sentido repetir nuevos
paciente, hasta llegar a un diagnóstico de certeza. estudios.

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Enfermedades de motoneurona 237

TABLA III. Clasificación de las atrofias espinales familiares según la World Federation of Neurology Research Committe, Research Group on
Neuromuscular Disease
Edad de inicio Herencia Locus genético

Tipo 1 o enfermedad de Werdnig-Hoffmann 0-6 meses AR 5q11,2-13,3


Tipo 2 o intermedia 1-4 años AR 5q11,2-13,3
Tipo 3 o enfermedad de Kugelberg-Welander 2-15 años AR 5q11,2-13,3
Atrofia espinal severa con artrogriposis Congénito Ligada al X Xp11,3-q11,2
Atrofias musculares espinales distales Infancia o adolescencia Algunas cromosoma 7
Atrofias musculares espinales del adulto AD o AR
Atrofia espinal escápulo-peroneal (síndrome de Stark-Kaeser) 30-50 años AR o AD
Neuronopatía bulboespinal ligada al X o enfermedad de Kennedy 30-50 años Ligada al X Xq12
Otras formas

Estimulación magnética transcraneal ATROFIAS MUSCULARES ESPINALES

En el diagnóstico de la ELA tiene también im- Bajo el nombre de atrofias musculares espinales
portancia la demostración de la afectación de la mo- se engloba un grupo heterogéneo de enfermedades,
toneurona cortical, pero su estudio desde el punto de muchas de ellas de base genética, caracterizadas
vista electrofisiológico es más complicado. El estudio por una afectación de las motoneuronas del asta
de la vía córtico-espinal se puede realizar mediante anterior medular y, en ocasiones, de los núcleos
estimulación magnética cortical, pero en los casos motores de los nervios craneales. Se han utilizado
en los que la afectación de la segunda motoneuro- diversos criterios para su clasificación, siendo una
na es importante, su interpretación resulta difícil. de las más recientes y actuales la establecida por la
En la ELA la conducción central es normal o está World Federation of Neurology Research Commit-
ligeramente enlentecida, con la única excepción de te, Research Group on Neuromuscular Disease de
los pacientes con la mutación D90A del gen de la 1988, que se recoge en la Tabla III.
CuZn-SOD1, que presentan un marcado enlente- El estudio electromiográfico es fundamental
cimiento en la conducción de la vía piramidal. en todas ellas para determinar el origen neuróge-
La alteración más característica encontrada con no de la afección y descartar otras enfermedades,
la estimulación magnética transcortical en la ELA principalmente miopatías o polineuropatías, que
es un aumento de la excitabilidad de la motoneuro- pueden asemejarse a las atrofias musculares espi-
na cortical. Esto se traduce en una disminución del nales desde el punto de vista clínico. Básicamen-
umbral de estimulación, de modo que en pacientes te, los hallazgos electrofisiológicos son similares
con ELA la intensidad del estímulo transcraneal en todas ellas, caracterizándose por un patrón
necesario para obtener una respuesta motora en neurógeno con fasciculaciones más o menos
miembros es menor que en los controles de la mis- difuso, con disminución en la amplitud de los
ma edad. Por otro lado, hay un acortamiento del potenciales evocados motores, sin alteraciones
período de silencio cortical. En individuos norma- en la velocidad de conducción motora ni en la
les, la aplicación de un estímulo magnético sobre electroneurografía sensitiva. No obstante, existen
la corteza motora durante la contracción voluntaria características típicas en algunas de ellas.
provoca una pausa de la actividad EMG de unos Las formas autosómicas recesivas ligadas al cro-
120 ms de duración. En pacientes con ELA este mosoma 5, presentan algunos rasgos diferenciales
período de silencio está acortado. entre ellas. Así, en la forma infantil de Werdnig-

Manual EMG.indb 237 9/7/07 12:06:50


238 J.J. Poza

Figura 4. Actividad muscular continua en enfermedad de Werdnig-Hoffmann.

Hoffmann la actividad espontánea predominante de alta frecuencia, pueden aparecer, tanto en las
son las fibrilaciones, siendo muy escasas las fasci- atrofias espinales como en las miopatías escápulo-
culaciones, y es frecuente también la presencia peroneales(9).
de descargas de alta frecuencia en situación de En las atrofias espinales distales, el diagnóstico
relajación, incluso durante el sueño NREM (Fig. diferencial se plantea con las formas de enfermedad
4). Sin embargo, en la forma intermedia y la forma de Charcot-Marie-Tooth tipo I y tipo II. En las 3 en-
juvenil de Kugelberg-Welander las fibrilaciones son tidades, el electromiograma muestra un patrón neu-
más escasas y predominan las fasciculaciones. Con rógeno, pero mientras que en las atrofias espinales
el tiempo aparecen fenómenos de reinervación, distales no hay alteraciones electroneurográficas,
más evidentes en las formas crónicas de inicio más salvo una disminución en la amplitud del potencial
tardío, con aumento de la amplitud y duración de evocado motor proporcional a la atrofia muscular,
los PUMs. La afectación es difusa en el Werdnig- en la enfermedad de Charcot-Marie-Tooth tipo I
Hoffmann, mientras que en el Kugelberg-Welan- se aprecia un enlentecimiento marcado de las ve-
der las alteraciones electromiográficas predominan locidades de conducción motoras y sensitivas, y en
en la musculatura proximal, comenzando por los el tipo II, hay disminución de las amplitudes de los
miembros inferiores, siendo más escasas en múscu- potenciales sensitivos y motores con velocidades de
los distales. En ambos casos, la musculatura bulbar conducción relativamente respetadas.
se afecta tardíamente y la facial suele estar conser- La amiotrofia bulboespinal progresiva ligada al
vada. En la enfermedad de Werdnig-Hoffmann, la cromosoma X o enfermedad de Kennedy se carac-
detección de potenciales motores de muy escasa teriza, desde el punto de vista electromiográfico,
amplitud asociados a un enlentecimiento en la por la presencia de un patrón neurógeno, con
conducción motora, son signos electrofisiológicos abundantes fasciculaciones. Este patrón es más
de peor pronóstico(8). o menos difuso según la fase evolutiva en la que
En algunas formas de atrofias espinales, el es- se realice el estudio, pudiendo ser relativamente
tudio electrofisiológico va a ser fundamental para focal al inicio de la enfermedad, con localización
hacer el diagnóstico diferencial con otras entida- de las alteraciones, bien en miembros o bien en
des clínicamente muy similares. Así ocurre en musculatura bulbar. El proceso es crónico y len-
la atrofia espinal escápulo-peroneal, en la que la tamente progresivo, de forma que predominan
detección de fasciculaciones, junto con actividad alteraciones en los potenciales de unidad motora,
voluntaria de características neurógenas permite que son polifásicos de gran amplitud y duración,
hacer el diagnóstico diferencial con la distrofia y déficit de reclutamiento, sobre la presencia de
muscular escápulo-peroneal. En ocasiones, los ha- fibrilaciones. La amplitud de los potenciales sen-
llazgos electrofisiológicos no son muy específicos. sitivos está disminuida en el 95% de los pacientes,
Así, las fibrilaciones, ondas positivas y descargas indicando una neuronopatía sensitiva a nivel del

Manual EMG.indb 238 9/7/07 12:06:50


Enfermedades de motoneurona 239

ganglio radicular dorsal, asociada a la neurono- a morir precozmente. El estudio electromiográfico


patía motora del asta anterior medular. La dismi- demuestra la existencia de un proceso denervativo
nución de amplitud de los potenciales motores activo, con fibrilaciones, ondas positivas y fascicu-
es menos frecuente (37%) y menos evidente. Las laciones, junto con actividad voluntaria de carác-
velocidades de conducción, tanto motoras como ter neurógeno crónico. La electroneurografía no
sensitivas, están conservadas. El reflejo H está muestra alteraciones, salvo una disminución de la
abolido o es de escasa amplitud en la mayoría de amplitud de los potenciales motores proporcional
los pacientes(10). al grado de atrofia muscular. Este cuadro, denomi-
nado síndrome postpolio, puede ser confundido
con una ELA. La existencia de antecedentes de
POLIOMIELITIS Y SÍNDROME POSTPOLIO poliomielitis, la lenta progresión del cuadro y la
ausencia de signos de afectación de primera mo-
La poliomielitis constituye el prototipo de en- toneurona constituyen la clave para diferenciar
fermedad infecciosa de la motoneurona inferior, ambos procesos(11).
pero gracias a las campañas de vacunación masiva
iniciadas en los años 50, hoy en día es una rareza
en los países occidentales. Desde el punto de vista OTRAS ENFERMEDADES NEUROLÓGICAS CON AFECTACIÓN
electrofisiológico se caracteriza por la presencia DE MOTONEURONAS
de actividad de denervación, con fibrilaciones y
ondas positivas y, posteriormente, aparecen signos En varias enfermedades neurodegenerativas,
de reinervación, con potenciales de unidad moto- como la atrofia multisistémica, las enfermedades
ra de gran amplitud y duración con aumento del por priones o la enfermedad de Machado-Joseph,
grado de polifasia y reclutamiento neurógeno. Con se produce una afectación de motoneuronas dentro
frecuencia, el estudio electromiográfico demuestra de un complejo sintomático más amplio. En estos
que la afectación es más difusa de lo que aparen- casos, el estudio electromiográfico es más sensible
taba en la exploración clínica. El cuadro es agudo que la exploración clínica para detectar signos de
y monofásico, pero con el tiempo se estabiliza, afectación de motoneurona y, de esta forma, pue-
quedando desde el punto de vista electromiográfi- de ayudar a establecer el diagnóstico. Por ejem-
co un patrón neurógeno crónico, sin actividad de plo, el estudio electromiográfico del esfínter anal
denervación y con potenciales de unidad motora externo, que se afecta precozmente en la atrofia
muy grandes y polifásicos con reclutamiento neu- multisistémica, puede ser un test diagnóstico útil
rógeno. para diferenciar este proceso de la enfermedad de
Algunos pacientes con antecedentes de polio- Parkinson(12).
mielitis, tras varios años de estabilidad, comienzan
de nuevo a presentar pérdida de fuerza lentamen-
te progresiva, tanto en los territorios afectados con BIBLIOGRAFÍA
anterioridad por la poliomielitis como en otros
aparentemente indemnes. La causa de esta re- 1. El Escorial World Federation of Neurology. Criteria for
the diagnosis of amyotrophic lateral sclerosis. J Neurol Sci
agudización es desconocida. Se ha descartado, 1994; 124 (Suppl): 96-107.
por ahora, una reactivación del virus de la polio 2. Behnia M, Kelly JJ. Role of electromyography in amyo-
o un mecanismo autoinmune. La hipótesis más trophic lateral sclerosis. Muscle Nerve 1991; 14: 1236-
aceptada postula que, debido a los fenómenos de 41.
reinervación que llevan a la formación de uni- 3. Cornblath DR, Kuncl RW, Mellitis ED, Quaskey SA,
Clawson L, Pestronk A, et al. Nerve conduction studies
dades motoras muy grandes, las motoneuronas in amyotrophic lateral sclerosis. Muscle Nerve 1992; 15:
sufren un envejecimiento acelerado que las lleva 1111-5.

Manual EMG.indb 239 9/7/07 12:06:50


240 J.J. Poza

4. De Carvalho M, Swash M. Nerve conduction studies in 9. Ishpekova B, Milanov I. Differential diagnosis of limb gir-
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Manual EMG.indb 240 9/7/07 12:06:51


Capítulo 18

RADICULOPATÍAS
T. López Alburquerque

INTRODUCCIÓN la electromiografía con aguja, por ser la más sensible


y específica, siempre debe realizarse(3).
Los estudios electrofisiológicos, junto a la explo- La normalidad de un estudio electrofisiológico
ración neurológica y las técnicas de neuroimagen, no excluye la existencia de una radiculopatía, ya
constituyen los pilares básicos del diagnóstico de las que las técnicas disponibles tienen poca sensibili-
radiculopatías. A la exploración neurológica aña- dad para detectar pequeñas lesiones desmielinizan-
den sensibilidad y objetividad, aspectos importantes tes o una afectación selectiva de la raíz dorsal.
en una patología que tiene un amplio espectro de
expresividad clínica, desde las lumbalgias inespe-
cíficas hasta las compresiones masivas de la cauda RECUERDO ANATOMOCLÍNICO
equina. Por otra parte, al aportar información sobre
el estado funcional o grado lesional de la raíz afec- Las raíces espinales constituyen el segmento del
tada, son un complemento valioso de las técnicas sistema nervioso periférico incluido dentro de la
de neuroimagen(1), que dotadas de gran sensibili- aracnoides. Hay 31 pares de raíces: 8 cervicales, 12
dad, especialmente la resonancia magnética (RM), torácicas, 5 lumbares, 5 sacras y una coccígea. Las
pueden detectar alteraciones en sujetos asintomáti- siete primeras cervicales emergen por encima de la
cos(2). La relativamente baja especificidad de la RM vértebra homónima; la octava cervical por debajo de
puede provocar dudas en las decisiones quirúrgicas la vértebra C7 y las restantes, por debajo de su vértebra
y conflictos en la evaluación de pacientes con de- homónima. Las raíces anteriores son motoras (prolon-
mandas legales o laborales. Dado que un correcto gación de las motoneuronas de las astas ventrales) y las
estudio electrofisiológico raramente resulta falso posteriores son sensitivas (prolongación proximal de
positivo, ambas técnicas deben considerarse com- las neuronas localizadas los ganglios raquídeos) (Fig.
plementarias(1). 1). Distal al ganglio raquídeo, situado en el agujero
No existe un procedimiento electrofisiológico de conjunción intervertebral, ambas raíces se unen
estandarizado para investigar una sospecha de ra- formando el nervio espinal, que inmediatamente se
diculopatía. Se trata, por el contrario, de un estu- divide en una rama dorsal y otra ventral. La primera
dio dinámico, en el que partiendo de los síntomas va a inervar los músculos paravertebrales adyacentes
y signos clínicos, del momento evolutivo de cada cuyo estrato más profundo, los multífidos, tienen una
paciente y de los resultados que se van obteniendo inervación segmentaria. Por ello, su estudio electro-
durante la prueba, se diseña la estrategia electro- miográfico tiene gran importancia localizadora. El
neurodiagnóstica más adecuada. Se pueden aplicar ramo ventral formará los plexos nerviosos. Todos los
diferentes técnicas electrofisiológicas; sin embargo, músculos que comparten la inervación de un mismo

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242 T. López Alburquerque

TABLA I. Etiología de las radiculopatías


Raíz posterior Médula
Degenerativas y osteopatías
Ganglio raquídeo
• Espondiloartrosis
Rama dorsal Nervio espinal
• Estenosis del canal raquídeo
Rama ventral • Espondilitis reumatoide
• Espondilitis anquilosante
Ganglio simpático • Enfermedad de Paget
Raíz anterior
Trauma
Figura 1. En el esquema se muestra la salida de la médula de las raí- • Hernia discal
ces anterior y posterior para la formación, distal al ganglio raquídeo, del • Hiperextensión cervical
nervio espinal, que posteriormente se dividirá en una rama dorsal para • Fracturas/luxaciones
inervar los músculos paravertebrales y otra ventral que formará los plexos • Avulsiones por tracción
nerviosos.
Tumores
• Neurinoma
segmento de la médula y/o raíz espinal constituyen un • Meningioma
miotoma. Se denomina dermatoma la región cutánea • Metástasis
que recibe la inervación de una única raíz dorsal. • Quistes
Clínicamente, una radiculopatía suele debutar Infecciones
con dolor y parestesias localizadas en un dermato- • Osteomielitis tuberculosa
ma. Con frecuencia se asocian a síntomas motores, • Osteomielitis piógena
como calambres, debilidad y atrofia muscular. La • Víricas (herpes zóster y simplex, citomegalovirus,
compresión crónica de la cauda equina por este- virus de Epstein-Barr)
nosis del canal lumbar cursa con dolor, parestesias • Enfermedad de Lyme
y debilidad en extremidades inferiores durante la • Neuritis postinfecciosa
deambulación (claudicación de cauda equina). • Meningitis
En las radiculopatías sacras (S2, S3, S4) pueden Vasculares
aparecer alteraciones de esfínteres. • Isquemia
En la mayoría de los casos, una detenida explo- • Malformación A-V dural
ración neurológica aporta suficiente información • Hematomas
para localizar el nivel lesional y evaluar la gravedad Inflamatorias
de una radiculopatía. Los hallazgos característicos • Polirradiculoneuropatía inflamatoria
son debilidad en un miotoma, hipoestesia en un desmielinizante (S. de Guillain-Barré)
dermatoma, pérdida o disminución de un reflejo • Aracnoiditis crónica
y signo de estiramiento radicular positivo. Si las
Metabólicas
radiculopatías cervicales se asocian a mielopatía,
• Diabetes
aparecen signos de afectación de las vías largas.
Malformaciones
• Espina bífida
ETIOLOGÍA • Mielomeningocele

Las causas más frecuentes de radiculopatía se


resumen en la Tabla I. Prevalecen las de origen espondiloartrosis en edades más avanzadas. Con
mecánico: compresión por degeneración discal frecuencia, las lesiones son mixtas. La degenera-
(hernia discal) en edades medias de la vida y por ción discal se localiza preferentemente entre las

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Radiculopatías 243

vértebras C5-C6 y C6-C7 en columna cervical, y TABLA II. Estudios electrofisiológicos en las radiculopatías
entre las L4-L5 y L5-S1 en columna lumbosacra, • Electromiografía con aguja
debido a la mayor movilidad de estos segmentos • Conducción nerviosa
vertebrales. Las raíces que con mayor frecuencia se - Motora
afectan son las C6, C7, L5 y S1, particularmente - Sensitiva
estas dos últimas, que siempre deben ser explora- • Respuestas tardías
das cuando se solicita un estudio electrofisiológico - Ondas F
en pacientes con síntomas inespecíficos (cervico- - Reflejo H
lumbalgias), sin clara sospecha de radiculopatía • Potenciales evocados somatosensoriales
definida. • Estimulación radicular
En la columna cervical existe una estrecha co-
rrespondencia entre el disco y la raíz lesionada.
Por el contrario, en la región lumbar, debido a la
disposición de las raíces en la cola de caballo, una es que evalúa exclusivamente el componente motor
hernia discal, dependiendo del tamaño (protrusión, (raíz anterior) y solamente cuando adquiere cierta
extrusión) y de la dirección del desplazamiento (la- gravedad (axonotmesis).
teral, posterolateral, central), puede lesionar una o Básicamente, el estudio electromiográfico con-
varias raíces, incluso producir síntomas bilaterales. siste en detectar signos denervativos en el miotoma
Las radiculopatías torácicas por hernias discales son de la raíz presuntamente lesionada. El protocolo
poco frecuentes (< 5%), y la mayoría se localizan de estudio obliga a explorar dos o tres músculos por
entre T8 y T12. miotoma, a ser posible inervados por un nervio di-
ferente, cuya elección depende de las preferencias
del explorador, aunque sistemáticamente deben
TÉCNICAS ELECTROFISIOLÓGICAS incluirse los músculos paraespinales(6), muy útiles
para diferenciar una radiculopatía de una plexopa-
Los estudios electrofisiológicos, que deben con- tía. Si se sospecha más de una raíz afectada, debe
siderarse como una prolongación de la exploración ampliarse la exploración a otros músculos, incluso
neurológica, tiene un triple objetivo: 1) confirmar de la otra extremidad, en especial si se trata de
la presencia de radiculopatía; 2) localizar la raíz le- protrusiones discales lumbares, que pueden cursar
sionada y evaluar el tipo e intensidad de la lesión; y con afectación radicular bilateral.
3) excluir otras posibilidades diagnósticas. La proba- En las Tablas III y IV, se expone un protoco-
bilidad de encontrar alteraciones electrofisiológicas lo de estudio que debe considerarse abierto, en
aumenta en los pacientes con exploración neuro- donde se seleccionan diferentes músculos de las
lógica anormal. A continuación, se expondrán las extremidades superiores e inferiores, según la raíz
técnicas neurofisiológicas habitualmente utilizadas supuestamente afectada, aunque conviene tener
(Tabla II). Todas ellas son complementarias, aun- presente que no existe una correspondencia uní-
que con diferente grado de sensibilidad(4). voca entre un músculo y una determinada raíz.
Asimismo, no se afectan todos los músculos del
Estudio electromiográfico con aguja (EMG) miotoma, ya que, como ocurre en la mayoría de
los casos, la lesión de la raíz es parcial y algunos
Es el estudio que proporciona mayor rendimien- músculos escapan a ésta. También puede suceder
to diagnóstico en la evaluación electrofisiológica que en el momento del estudio los músculos más
de una radiculopatía, pues aporta datos sobre la proximales hayan sido reinervados.
localización, gravedad y estadio evolutivo de la le- En la práctica, surgen frecuentes conflictos
sión radicular(5). Una de sus mayores limitaciones cuando se intenta identificar la raíz lesionada. Por

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244 T. López Alburquerque

TABLA III. Propuesta de estudio electrofisiológico dependiendo de TABLA IV. Propuesta de estudio electrofisiológico dependiendo de
la raíz cervical supuestamente afecta la raíz lumbosacra supuestamente afecta
C5 C6 C7 C8 T1 L4 L5 S1 S2,S3,S4

EMG EMG
• Paraespinales + + + + + • Paraespinales + + + +
• Romboides + • Sartorio +
• Supraespinoso + • Cuádriceps femoral +
• Infraespinoso + • Aductor mayor +
• Deltoides + + • Tibial anterior + +
• Bíceps braquial + + • Extensor largo dedo gordo +
• Supinador largo + + • Pedio +
• Primer radial externo + + • Peroneo lateral largo + +
• Pronador redondo + + • Tibial posterior + +
• Palmar mayor + + • Glúteo medio + +
• Tríceps braquial + + + • Gemelos + + +
• Extensor propio del índice + • Sóleo + +
• Flexor largo del pulgar + • Bíceps femoral + +
• Cubital anterior + + • Glúteo mayor + +
• Abductor corto del pulgar + +
Neurografía
• Primer interóseo dorsal + +
• CS n. safeno +
• Abductor del meñique + +
• CM n. peroneo c./ondas F +
Neurografía • CS n. peroneo superficial +
• CM Erb-deltoides + • CM n. tibial post./ondas F +
• CM Erb-bíceps + • Reflejo H n. tibial posterior +
• CM Erb-tríceps + • CS n. sural +
• CM n. mediano/ondas F + + CM : conducción motora; CS : conducción sensitiva.
• CM n. cubital/ondas F + +
• Reflejo H (mús. palmar mayor) + +
• CS n. radial(dedo I-antebrazo) +
• CS n. mediano (dedo I, II-M) + músculos pronador redondo y palmar mayor nos
• CS n. mediano(dedo III-M) + orienta hacia una radiculopatía C6. Aunque el
• CS n. cubital (dedo V-M) + estudio electromiográfico del tríceps puede estar
alterado hasta en la mitad de los pacientes con radi-
CM : conducción motora; CS : conducción sensitiva; M : muñeca.
culopatía C6, siempre lo está en las radiculopatías
C7. Por tanto, una normalidad en tríceps excluye
radiculopatía C7(7). En la radiculopatía C8 se afec-
ejemplo, es difícil diferenciar la radiculopatía C5 tan los músculos de inervación cubital, el extensor
de la C6, así como la T1 de la C8. La alteración del propio del índice y el flexor largo del pulgar.
músculo romboides apoya una radiculopatía C5, En la región lumbosacra es más difícil identi-
aunque su localización es difícil, por estar cubierto ficar el nivel lesional, debido al amplio recorrido
por el músculo trapecio. La lesión de la raíz C6 intrarraquídeo de las raíces en la cauda equina.
muestra gran variabilidad, ya que puede manifes- La radiculopatía L5 cursa con afectación de los
tarse como una radiculopatía C5 o C7. Cuando músculos tibial anterior, peroneo lateral largo, ti-
simula una radiculopatía C5, la alteración de los bial posterior, flexor común de los dedos y glúteo

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Radiculopatías 245

medio. El estudio de estos últimos es obligado


para el diagnóstico diferencial con la neuropatía
del peroneo común o del ciático poplíteo externo.
Los gemelos son los músculos más frecuentemente
afectados en la radiculopatía S1, pero sistemáti-
camente hay que explorar el bíceps femoral y el
glúteo mayor para establecer la diferenciación con
la radiculopatía L5, en la que no se afecta el bíceps
femoral(8).
La presencia de actividad espontánea anormal,
particularmente fibrilaciones y ondas positivas, en
un miotoma determinado es el hallazgo aislado
más importante para confirmar una radiculopatía.
Aunque se ha encontrado hasta en el 86% de las
radiculopatías estudiadas; sin embargo, la sensi-
bilidad para identificar el nivel exacto de la raíz Figura 2. Máximo esfuerzo en el músculo tibial anterior de un paciente
con una radiculopatía L4. Se observa un patrón intermedio por pérdida
lesionada es muy variable en los diferentes estudios, de unidades motoras.
que oscilan entre el 20 y el 78%.
La exploración de los músculos paraspinales es
importante, porque hasta en el 40% de los pacien- contrario, tienden a desaparecer con el tiempo
tes sólo se observa actividad espontánea en estos (hacia los 12-18 meses), debido a la reinervación
músculos(6) y, además, muy precozmente, a los 10 o degeneración grasa de las fibras, siguiendo una
días tras la lesión, a diferencia de la musculatura cronología proximal-distal similar al patrón tem-
distal de las extremidades en donde aparece hacia poral de aparición.
las 3-4 semanas. Sin embargo, el estudio EMG de El estudio de los potenciales de unidad motora
los músculos paraspinales, además de su dificultad (patrón de reclutamiento, morfología, amplitud y
técnica por la incompleta relajación del paciente, duración) tiene menos sensibilidad diagnóstica que
presenta otras limitaciones, como la presencia de la detección de actividad espontánea. Además, es
fibrilaciones en sujetos mayores de 40 años asinto- un estudio tedioso y molesto para el paciente. Se
máticos, en pacientes con diabetes mellitus y tras observa un aumento de la frecuencia de disparo
la cirugía de columna vertebral. de las unidades motoras y patrones intermedios al
Otros tipos de actividad espontánea son las fas- realizar un máximo esfuerzo (Fig. 2). Estos serían
ciculaciones y las descargas repetitivas complejas los únicos hallazgos del EMG en las lesiones ra-
localizadas en un miotoma determinado. En las diculares de tipo desmielinizante. Sin embargo,
radiculopatías, las fasciculaciones son infrecuentes. debido a la inervación multisegmentaria de los
Si aparecen profusamente, hay que sospechar una músculos, la afectación radicular debe ser severa
enfermedad de la motoneurona. La detección de para poder detectar una clara pérdida de unidades
fasciculaciones como único hallazgo en los múscu- motoras, particularmente cuando se utilizan los
los gemelos no sustenta el diagnóstico de radiculo- métodos cualitativos habituales.
patía. Las fasciculaciones también son frecuentes Los potenciales de unidad motora pueden ser,
en el músculo abductor del dedo gordo de sujetos hacia los 2-3 meses, potenciales reinervativos cró-
asintomáticos. nicos, que se caracterizan por un aumento de la
Las descargas repetitivas complejas indican cro- amplitud y duración, y una morfología polifásica
nicidad. Aparecen en las radiculopatías con más (Fig. 3). Sin embargo, raramente aparecen poten-
de 6 meses de evolución. Las fibrilaciones, por el ciales gigantes con amplitud superior a 8 mV. En

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246 T. López Alburquerque

presencia de reinervación naciente. Raramente se


lleva a cabo un estudio de electromiografía de fibra
aislada, que mostraría un aumento de la densidad
de fibras, como signo precoz de la remodelación de
la unidad motora tras la denervación. En la Tabla V,
se resumen las alteraciones electrofisiológicas depen-
diendo del momento evolutivo de la radiculopatía.

Estudios de conducción nerviosa

Los estudios de conducción nerviosa ayudan


escasamente al diagnóstico de la radiculopatía, pero
son importantes para el diagnóstico diferencial con
otros procesos neurógenos como las mononeuro-
Figura 3. Potenciales muy polifásicos (reinervativos) en el músculo bíceps
braquial de un paciente con una radiculopatía C6 crónica. patías, polineuropatías o plexopatías.

Estudios de conducción motora


los estadios iniciales pueden aparecer potenciales En la mayoría de los casos, la conducción mo-
muy polifásicos y de baja amplitud, que indican la tora es normal, porque la lesión radicular suele ser

TABLA V. Alteraciones electrofisiológicas en las radiculopatías dependiendo del momento evolutivo


< 1 semana > 3 semanas

Fibrilaciones Ausentes Presentes


Ondas positivas (> 1ª semana en músc. paraspinales)
(> 3 meses, reducción progresiva)
PUMs Reclutamiento reducido Reclutamiento reducido
↑ duración y amplitud, polifasias
DRC Infrecuentes Ocasionalmente
Fasciculaciones Infrecuentes Infrecuentes
VCM Normal Normal
↓ leve
PACM Normal ↓ leve amplitud (> 1ª semana)
Normal
PNS Normal Normal
Onda F ↑ latencia ↑ latencia
Ausente Ausente
Reflejo H Prolongado Prolongado
Ausente Ausente
PESs Normales Normales
↑ latencia ↑ latencia
↓ amplitud ↓ amplitud
PUMs: potenciales de unidad motora; DRC: descargas repetitivas complejas; VCM: velocidad de conducción motora; PACM: potencial de acción compuesto
motor; PNS: potencial nervioso sensitivo; PESS: potenciales evocados somestésicos.

Manual EMG.indb 246 9/7/07 12:06:53


Radiculopatías 247

parcial y la inervación del músculo es multiseg- L4, de la rama sensitiva del peroneo superficial
mentaria. Sin embargo, en los casos graves, cuando en la radiculopatía L5 y la conducción sensitiva
existe lesión axonal importante con degeneración del nervio sural en la S1 (Tabla IV). En personas
walleriana, puede observarse una reducción de la mayores asintomáticas con frecuencia no se ob-
amplitud del potencial de acción motor debido a la tiene el potencial sensitivo en el nervio peroneo
pérdida de unidades motoras(9). Si la degeneración superficial. Se recomienda comparar las ampli-
afecta a los axones gruesos de conducción rápida, tudes con el lado sano.
puede observarse un leve descenso de la velocidad Hay que tener presente la gran variabilidad que
de conducción motora. existe en la correspondencia entre raíz y dermato-
La elección del nervio depende de la sospecha ma. Asimismo, algunas radiculopatías, sobre todo
de la raíz afectada (Tablas III y IV). En los miem- la L5, pueden cursar con descenso de la amplitud
bros superiores, el estudio de conducción de los del potencial sensitivo, si el ganglio raquídeo es
nervios mediano y cubital recogiendo el potencial comprimido por estar situado proximal al agujero
en abductor corto del pulgar y del meñique, res- de conjunción(11).
pectivamente, está indicado en las radiculopatías
C8-T1. En extremidades inferiores, la conducción Respuestas tardías
motora de los nervios peroneo común y tibial pos-
terior nos puede aportar información en las radicu- El estudio de la onda F y del reflejo H permite
lopatías L5-S1 y S1-S2, respectivamente. evaluar la conducción en los segmentos proximales
del sistema nervioso periférico, particularmente en
Estudios de conducción sensitiva las raíces nerviosas, aunque, como veremos, con
Los estudios de conducción sensitiva son impor- algunas limitaciones.
tantes para la localización de la lesión, en especial
para diferenciar las radiculopatías de las plexopatías Onda F
o neuropatías. En las radiculopatías, a diferencia El estudio de la latencia de la onda F tiene
de las lesiones distales al ganglio raquídeo, aun- una utilidad relativa en el diagnóstico electrofi-
que exista hipoestesia en el dermatoma afecto, al siológico de una radiculopatía, debido a que la
estar localizada la lesión a nivel preganglionar, no raíz representa un segmento muy reducido en
existe degeneración axonal periférica, y en conse- relación con la longitud total del nervio, y una
cuencia, no se modifica la amplitud del potencial eventual alteración de la conducción radicular
nervioso sensitivo(10). Asimismo, muchas radiculo- puede quedar diluida en la conducción normal
patías cursan solamente con síntomas de dolor y del resto del nervio. Por otra parte, debido a la
parestesias, que son mediados principalmente por composición multisegmentaria de los nervios,
fibras sensitivas tipo C, sin traducción en los estu- puede mantenerse una conducción normal por
dios electrofisiológicos rutinarios por su pequeño las raíces indemnes. Finalmente, la latencia de
diámetro(3). la onda F es normal cuando hay una afectación
En las radiculopatías C6 se realiza estudio de selectiva de la raíz dorsal.
conducción nerviosa sensitiva, orto- o antidrómi- Se estudian en, al menos, 10 respuestas las la-
ca, del nervio mediano estimulado o recogiendo tencias mínima, máxima y media, la cronodisper-
el potencial en los dedos pulgar e índice. En las sión y la persistencia de la onda F. El límite supe-
radiculopatías C7 se realiza en el dedo medio. rior de la normalidad para la latencia mínima en
La conducción sensitiva del nervio cubital está los músculos de la mano y del pie es de 31 y 60 ms,
indicada en las radiculopatías C8 (Tabla III). En respectivamente(12). La latencia media es aproxima-
extremidades inferiores se estudia la conducción damente 2 ms mayor. Tan importante como los
sensitiva del safeno si se sospecha radiculopatía valores absolutos, es la comparación con el lado

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248 T. López Alburquerque

Figura 4. Reflejo H estimulando el nervio tibial posterior en hueco poplí-


teo y recogiendo la respuesta en sóleo en un paciente con radiculopatía
S1 izquierda. Se observa una asimetría de latencias (izquierda: 30.4 ms;
derecha: 26.8 ms) y un descenso de la amplitud (izquierda: 0.5 mV; derecha:
6.5 mV). El trazo inferior corresponde al lado afecto.

Figura 5. A: reflejo H estimulando el nervio mediano en la flexura del codo


y recogiendo la respuesta en el músculo palmar mayor de un paciente con
sano. El límite de la normalidad en la diferencia radiculopatía C7 izquierda. Se observa una abolición del reflejo en el lado
derecha/izquierda para las latencias medias de los izquierdo (trazo inferior);B: el mismo estudio en un sujeto normal.
músculos de las manos y los pies es de 2 y 4 ms,
respectivamente.
La cronodispersión (diferencia entre las laten- como las desmielinizantes; por ello, se altera pre-
cias mayor y menor) parece ser el parámetro más cozmente en las radiculopatías. Aunque se ha pro-
sensible en las radiculopatías(13). Aunque existen puesto su realización en varios músculos mediante
diferentes valores dependiendo del nervio, en ge- activación (leve contracción del músculo)(15), en
neral, pueden considerarse anormales los valores realidad, el estudio sólo se realiza sistemáticamente
superiores a 6,2 ms en músculos de las manos, y a 8 en el sóleo, que evalúa la raíz S1, y ocasionalmen-
ms en músculos de los pies. En lesiones radiculares te en el músculo palmar mayor, para estudiar las
L5/S1 asociadas a estenosis de canal lumbar, se ha raíces C6-C7 (Figs. 4 y 5). Se mide la latencia del
descrito un aumento de la cronodispersión tras tres inicio de la deflexión positiva o negativa de la res-
minutos en bipedestación(14). puesta. El límite superior de la normalidad en el
En cualquier caso, cuantos más parámetros se sóleo y el palmar mayor es de 35 y 20 ms, respecti-
estudien, mayor es la rentabilidad diagnóstica, que vamente, aunque las latencias deben ajustarse a la
oscila según los autores entre el 32 y el 88%, aun- longitud de la extremidad. La diferencia máxima
que en la mayoría de los casos se considera como derecha/izquierda es de 2 ms para el sóleo y 1,2
una información redundante, es decir, aporta esca- ms para el palmar mayor.
sos datos adicionales a las alteraciones ya detectadas El descenso de la amplitud, cuando es inferior
por la electromiografía de aguja(4). al 50% respecto al lado asintomático, así como
la ausencia de la respuesta también tienen valor
Reflejo H diagnóstico. El reflejo H se encuentra alterado en
El reflejo H permite evaluar, tanto la raíz sen- más del 80% de los pacientes con radiculopatías
sitiva como la motora y, tanto las lesiones axonales demostradas quirúrgicamente(8). En la claudicación

Manual EMG.indb 248 9/7/07 12:06:53


Radiculopatías 249

central, puede ser vehiculado normalmente por


las fibras sanas que persisten en la raíz lesionada
o por las raíces adyacentes indemnes del mismo
segmento.
El estudio de las radiculopatías mediante PESs
puede realizarse estimulando nervios mixtos, sen-
sitivos puros o dermatomas (véase capítulo 14). Se
evalúan latencias, amplitudes y morfología. Los
mejores resultados se han obtenido estimulando
nervios sensitivos puros (estimulación segmenta-
ria)(17). Las raíces C6, C7 y C8 se pueden estudiar
estimulando con electrodos de anillo los nervios
digitales de los dedos 2º, 3º y 5º, respectivamen-
Figura 6. Potencial evocado somatosensorial cerebral estimulando el
dermatoma L5 (dorso de la primera articulación metatarsofalángica) y te. En miembros inferiores, se estimula el nervio
recogiendo la respuesta en vértex (CPZ - FPZ), en un paciente con hipoes- safeno interno para evaluar la raíz L4, el nervio
tesia en dermatoma L5 de la pierna derecha como única manifestación de peroneo superficial para la L5 y el nervio sural
una radiculopatía L5. Se observa un retardo de la latencia P38 en el lado para la raíz S1.
derecho (trazo superior) de 7,2 ms respecto del izquierdo. No han entrado
en el estudio los 10 primeros milisegundos. Los PESs obtenidos mediante la estimulación
de un dermatoma tienen poca sensibilidad para
identificar la raíz afecta(18), aunque, ocasional-
intermitente neurógena (compresión de la cauda mente, puede ser el único test anormal(5) (Fig.
equina por estenosis del canal lumbar), puede apa- 6). La interpretación de los resultados es difícil,
recer una alteración transitoria de la excitabilidad debido a que el potencial es más desincroniza-
del reflejo H tras la deambulación(16). do y de menor amplitud que el que se obtiene
Aparte del reducido ámbito anatómico de su cuando se estimula un nervio mixto. Las fibras
aplicación, el reflejo H tiene otras limitaciones, aferentes cutáneas son de menor calibre que
como: 1) con frecuencia se encuentra abolido bi- las IA que se estimulan en nervios mixtos y, por
lateralmente en personas sanas mayores de 60 años tanto, las latencias son más prolongadas para
sanos; 2) cualquier neuropatía generalizada puede la misma distancia. El estímulo se aplica, por
alterarlo; 3) una vez alterado, persiste así indefini- ejemplo, para el estudio de la raíz L5, en la cara
damente, por lo que no resulta útil en el control medial o en el dorso de la primera articulación
evolutivo de la radiculopatía. Una alteración del metatarsofalángica, y para la raíz S1, en la cara
reflejo H en el nervio tibial posterior por sí sola no lateral del pie, sobre la quinta articulación me-
es suficiente para confirmar la presencia de una tatarsofalángica.
radiculopatía S1(3). Las sensibilidad diagnóstica es muy variable,
dependiendo del tipo de PESs y de la raíz explora-
Potenciales evocados somatosensoriales (PESs) da(5,18). En general, la sensibilidad aumenta cuando
predominan los síntomas sensitivos, la afectación es
Aunque teóricamente los PESs podrían conside- multirradicular o existe mielopatía asociada (Fig.
rarse como una técnica idónea para evaluar la vía 7). Aún no está totalmente establecida la utilidad
somestésica periférica proximal, particularmente clínica de los PESs, tanto segmentarios como der-
las raíces posteriores, en la práctica poseen escasa matómicos. No aportan claras ventajas a los es-
sensibilidad diagnóstica para identificar la raíz afec- tudios electromiográficos estándar y, por lo tanto,
ta, debido a que el estímulo, por la amplificación no se recomiendan como estudios de rutina en las
que experimenta la respuesta en el sistema nervioso radiculopatías.

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250 T. López Alburquerque

Figura 7. Potencial evocado somatosensorial cerebral estimulando el nervio


tibial posterior detrás del maleolo interno y recogiendo la respuesta en
vértex (CPZ - FPZ), en un paciente con afectación multirradicular izquierda
(hipoestesia en dermatomas L4, L5, S1 izquierdos, hipopalestesia y arre- Figura 8. Estimulación magnética cerebral recogiendo la respuesta en
flexia patelar y aquílea) por lesión iatrógena, tras intervención quirúrgica bíceps bilateralmente, en un paciente con radiculopatía C6 izquierda. En
con anestesia epidural. En el lado izquierdo (trazo inferior), apenas se bíceps izquierdo (trazo inferior), se observa un aumento de la latencia, una
insinúa, con latencia retardada, el componente P38 del PES (L2). No han reducción de la amplitud y una morfología muy distorsionada.
entrado en el estudio los 10 primeros milisegundos.

Estimulación radicular (Fig. 8). Los resultados obtenidos con esta técnica
se correlacionan con las alteraciones clínicas y
A diferencia de las respuestas tardías (onda F y electromiográficas(22).
reflejo H), la estimulación radicular evalúa direc- La estimulación radicular no está incluida en
tamente la conducción en el segmento proximal el protocolo neurofisiológico rutinario del estudio
de la vía motora periférica, particularmente, en las de una radiculopatía. En ocasiones, sobre todo en
raíces ventrales. Asimismo, frente al estudio electro- las radiculopatías crónicas, puede ser útil al poner
miográfico, que se encuentra alterado en las lesio- de manifiesto una alteración de la conducción ra-
nes de tipo axonal, la estimulación radicular puede dicular en pacientes con estudio electromiográfico
detectar lesiones de tipo desmielinizante, que se normal, debido a la reinervación completa de los
asocian a alteración de la conducción nerviosa. músculos afectos. Asimismo, puede ser una técnica
La estimulación radicular puede ser eléctrica, alternativa para los pacientes en los que no se pueda
con agujas o electrodos superficiales, o magnéti- realizar un adecuado estudio electromiográfico por
ca (véase capítulo 15). La estimulación eléctrica intolerancia al dolor del pinchazo o alteraciones
con electrodo de aguja es una técnica muy sen- de la coagulación sanguínea.
sible para detectar la raíz lesionada(19), aunque
invasiva y molesta. La estimulación magnética,
por el contrario, tiene la ventaja de ser indolora. DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
Sin embargo, no se ha precisado el punto don-
de se aplica el estímulo, aunque probablemente Ante una posible radiculopatía cervical, el diag-
ocurre a la salida del agujero de conjunción(20,21). nóstico diferencial se establece con las lesiones del
Se valoran latencias y amplitudes de la respuesta plexo braquial y las mononeuropatías compresivas,
motora en el músculo diana de la raíz lesionada. particularmente de los nervios mediano y cubital.
El estudio bilateral permite detectar asimetrías, Los hallazgos clave para diferenciar una radiculo-
actuando cada paciente como su propio control patía de una plexopatía cervical son la detección de

Manual EMG.indb 250 9/7/07 12:06:54


Radiculopatías 251

signos denervativos en músculos paraespinales y el fasciculaciones no son prominentes, simule una


descenso de la amplitud del potencial sensitivo en radiculopatía. En estos casos, es obligado ampliar
los nervios mediano o cubital. Estos estudios tienen el estudio electromiográfico a los músculos de otras
sus limitaciones, ya que en muchas radiculopatías, extremidades.
especialmente en las crónicas, no se observan sig-
nos denervativos en los músculos paraespinales, y
las plexopatías con leve daño axonal no cursan con BIBLIOGRAFÍA
descenso de la amplitud del potencial nervioso sen-
sitivo. El estudio de la conducción motora desde el 1. Nardin RA, Patel MR, Gudas TF, Rutkove SB, Raynor
EM. Electromyography and magnetic resonance imaging
punto de Erb a los distintos músculos de la cintura in the evaluation of radiculopathy. Muscle Nerve 1999;
escapular puede ser de interés en las lesiones del 22: 151-5.
plexo braquial (Tabla III). 2. Jensen MC, Brant-Zawadzki MN, Obuchowski N, Modic
Para el diagnóstico diferencial entre las mono- MT, Malkasian D, Ross JS. Magnetic resonance imaging
neuropatías compresivas y las radiculopatías, es of the lumbar spine in people without back pain. N Engl
J Med 1994; 331: 69-73.
preciso realizar estudios de conducción nerviosa
3. Levin KH. Electrodiagnostic approach to the patient
motora y sensitiva. En el síndrome del túnel del with suspected radiculopathy. Neurol Clin 2002; 20:
carpo, que puede simular una radiculopatía C6- 397-421.
C7, aparece un aumento de la latencia motora 4. Wilbourn AJ, Aminoff MJ. The electrophysiologic exa-
distal y un enlentecimiento de la conducción mination in patients with radiculopathies. Muscle Nerve
1998; 21: 1612-31.
sensitiva transcarpiana en el nervio mediano. De
5. Aminoff MJ, Goodin DS, Gareth JP, Barbaro NM, Weins-
forma similar, mediante los estudios de conduc- tein PR, Rosenblum ML. Electrophysiologic evaluation of
ción motora y sensitiva del nervio cubital, se puede lumbosacral radiculopathies: electromyography, late res-
descartar una neuropatía compresiva de este ner- ponses and somatosensory evoked potentials. Neurology
vio, en muñeca o codo, en los casos de sospecha 1985; 35: 1514-8.
de radiculopatía C8. 6. Czyrny JJ, Lawrence J. The importance of paraspinal
muscle EMG in cervical and lumbosacral radiculopathy:
El diagnóstico diferencial de las radiculopatías review of 100 cases. Electromyogr Clin Neurophysiol
lumbosacras se establece principalmente con la 1996; 36: 503-8.
neuropatía de los nervios femoral, peroneo común 7. Levin KH, Maggiano HJ, Wilbourn AJ. Cervical radicu-
y tibial posterior. Como en las radiculopatías cer- lopathies: Comparison of surgical and EMG localization
of single-root lesions. Neurology 1996; 46: 1022-5.
vicales, el diagnóstico se basa en la presencia de
8. Tsao B, Levin KH, Bodner R. Comparison of surgical
signos denervativos en músculos paraespinales y and electrodiagnostic findings in single root lumbosacral
en otros músculos del mismo miotoma inervado radiculopathies. Muscle Nerve 2003; 27: 60-4.
por diferente nervio. Por ejemplo, en la parálisis 9. Berger AR, Sharma K, Lipton RB. Comparison of motor
peroneal, la presencia de actividad denervativa en conduction abnormalities in lumbosacral radiculopathy and
el músculo tibial posterior y glúteo nos orienta ha- axonal polyneuropathy. Muscle Nerve 1999; 22: 1053-7.
cia una radiculopatía L5. En la artrosis de columna 10. Benecke R, Conrad B. The distal sensory nerve action po-
tential as a diagnostic tool for the differentiation of lesions
lumbosacra, que con frecuencia se asocia a estenosis in dorsal roots and peripheral nerves. J Neurol 1980; 223:
del canal lumbar, pueden afectarse bilateralmente 231-9.
varias raíces, y resulta difícil, particularmente en 11. Levin KH. L5 radiculopathy with reduced superficial sen-
las personas mayores, la diferenciación con una sory peroneal responses: intraspinal and extraspinal causes.
Muscle Nerve 1998; 21: 3-7.
polineuropatía o una enfermedad de la motoneu-
12. Fisher MA. Electrophysiology of radiculopathies. Clin
rona. A veces, puede ocurrir lo contrario, que una
Neurophysiol 2002; 113: 317-35.
enfermedad de la motoneurona, especialmente en
13. Weber F. The diagnostic sensitivity of different F wave
sus estadios iniciales, sobre todo si se restringe el parameters. J Neurol Neurosurg Psychiatry 1998; 65:
estudio a la extremidad clínicamente afecta y las 535-48.

Manual EMG.indb 251 9/7/07 12:06:55


252 T. López Alburquerque

14. Tang LM, Schwartz MS, Swash M. Postural effects on teral/unilevel radiculopathies. Muscle Nerve 1996; 19:
F-wave parameters in lumbosacral root compression and 442-9.
canal stenosis. Brain 1988; 111: 207-13. 19. Ertekin C, Sirin H, Koyuncuoglu HR, Mungan B, Nejat
15. White JC. The ubiquity of contraction enhanced H re- RS, Selcuki D. Diagnostic value of electrical stimulation
flexes: normative data and use in the diagnosis of radicu- of lumbosacral roots in radiculopathies. Acta Neurol Scand
lopathies. Electroencephalogr Clin Neurophysiol 1991; 1994; 90: 26-33.
81: 433-42. 20. Evans BA, Daube JR, Litchy WJ. A comparison of mag-
16. Pastor Muñoz P, Valls-Solé J, González LE, Grau M, netic and electrical stimulation or spinal nerves. Muscle
Moya F. Bloqueo transitorio de la conducción nerviosa Nerve 1990; 13: 414-20.
intrarraquídea en pacientes con claudicación intermitente 21. Schmid UD, Walker G, Schmid J. Magnetic and electric
neurógena. Med Clin 1998; 110: 105-8. stimulation of cervical and motor roots: technique, site and
17. Seyal M, Sandhu LS, Mack YP. Spinal segmental somato- mechanisms of excitation. J Neurol Neurosurg Psychiatry
sensory evoked potentials in lumbosacral radiculopathies. 1990; 53: 770-7.
Neurology 1989; 39: 801-5. 22. Bischoff C, Meyer BU, Machetanz J, Conrad B. The value
18. Dumitru D, Dreyfuss P. Dermatomal/segmental soma- of magnetic stimulation in the diagnosis of radiculopathies.
tosensory evoked potential evaluation of L5/S1 unila- Muscle Nerve 1993; 16: 154-61.

Manual EMG.indb 252 9/7/07 12:06:55


Capítulo 19

PLEXOPATÍA BRAQUIAL Y LUMBOSACRA


J. Esteban Pérez

El plexo braquial y el lumbosacro son dos Así, la evaluación electrodiagnóstica del plexo bra-
estructuras complejas del sistema nervioso pe- quial requiere normalmente la realización de un
riférico caracterizadas por la interconexión de estudio extenso. Aunque es una exploración que
varios troncos nerviosos, de la que surge, final- requiere bastante tiempo, proporciona una infor-
mente, una serie de ramas terminales que se diri- mación valiosa en la localización, fisiopatología
gen definitivamente a sus órganos diana (motores y gravedad de la lesión subyacente, y contribuye,
o sensitivos). Debido a la complejidad de estas por tanto, al diagnóstico y manejo de estos pacien-
estructuras y por su situación proximal y profun- tes.Debido a que los hallazgos electrodiagnósticos
da, su estudio electrofisiológico es especialmente varían dependiendo del tipo de lesión (axonal o
difícil. desmielinizante), el momento de evolución y la
localización, las anomalías demostradas en los
estudios de conducción motora, de conducción
PLEXO BRAQUIAL sensitiva y electromiografía de aguja van a permitir
identificar patrones característicos.
El plexo braquial es uno de los componentes
del sistema nervioso periférico más complejo. Su Anatomía del plexo braquial (Fig. 1)
localización entre dos regiones con gran movilidad
(el cuello y el hombro), así como la predisposición El plexo braquial tiene cinco componentes: 1)
de las estructuras vecinas para padecer enferme- cinco raíces, constituidas por los ramos anteriores
dades (pulmón, nódulos linfáticos y vasos sanguí- de los nervios espinales C5 a D1; 2) tres troncos
neos), lo hacen muy susceptible a ser lesionado. primarios: superior, medio e inferior; 3) seis divisio-
Por este motivo, con frecuencia son remitidos a nes: tres anteriores y tres posteriores de cada tronco;
los laboratorios de electromiografía pacientes con 4) tres cordones: lateral, medial y posterior; y 5)
supuestas anomalías del plexo braquial, y por esto ramas terminales: nervio mediano, cubital, radial,
los clínicos dedicados al diagnóstico neurofisioló- musculocutáneo y axilar.
gico de estas lesiones deben estar familiarizados 1. Ramos anteriores primarios de los nervios
con su anatomía, fisiopatología y manifestaciones espinales. De cada segmento medular salen
electrofisiológicas. Debido a su tamaño y comple- las raíces dorsales (sensitivas) y ventrales (mo-
jidad, hay muchas rutas por las que un axón motor toras) que, posteriormente, se fusionan en el
o sensitivo puede atravesarlo. Por ello, no existe foramen intervertebral para formar el nervio es-
una forma única y sencilla que sea suficiente para pinal (mixto). Este último, nada más emerger
valorar esta estructura de una forma completa. del agujero intervertebral, se divide en la rama

Manual EMG.indb 253 9/7/07 12:06:55


254 J. Esteban Pérez

Figura 1. Esquema anatómico del plexo braquial. C4-C7 y D1: cuerpos vertebrales C4-C7 y D1; RA: ramo anterior del nervio espinal; RP ramo posterior
del nervio espinal.

espinal posterior y anterior (ambas mixtas). Son – Una porción del nervio frénico (de la raíz C5)
estas últimas, las ramas anteriores del nervio que inerva el diafragma.
espinal, las que van a formar el plexo braquial. – Una porción del nervio escapular dorsal (desde
Desde su origen, de la rama anterior del nervio la raíz C5, de manera simultánea a la salida del
espinal surgen diversas ramas nerviosas según nervio frénico), que inerva los músculos rom-
este orden: boides y elevador de la escápula.
– Inmediatamente después de su salida del fora- 2. Troncos primarios. Se denominan superior,
men intervertebral, surgen las ramas nerviosas medio e inferior, según la relación anatómica
que inervan el músculo escaleno y el músculo que mantienen entre ellos. El tronco primario
largo del cuello (desde C5 a C8). superior se forma por la fusión de las ramas
– El nervio torácico largo (de las ramas C5 a C7) anteriores de los nervios espinales C5 y C6.
que inerva el músculo serrato anterior. El tronco primario medio es la continuación

Manual EMG.indb 254 9/7/07 12:06:56


Plexopatía braquial y lumbosacra 255

de la rama anterior del nervio espinal C7. El en estos músculos supone la existencia de una
tronco primario inferior se forma de la fusión lesión radicular.
de las ramas anteriores de los nervios espinales • Segundo. Los músculos romboides y serrato
C8 y D1. anterior están inervados por ramas que surgen
Desde la porción proximal del tronco superior a nivel de las ramas anteriores de los nervios
emerge el nervio supraescapular que inerva a espinales nada más abandonar el foramen
los músculos supraespinoso e infraespinoso. intervertebral. Cuando estos músculos están
3. Divisiones. Las divisiones se localizan a la al- afectos, significa que la lesión está localizada
tura y por detrás de la clavícula. En general, en un lugar proximal al tronco superior del
no surgen ramas nerviosas desde las divisiones. plexo braquial (es decir, en los nervios espi-
Todas las estructuras del plexo que se locali- nales). Aunque no hay ramas que emerjan de
zan proximales a la formación de las divisiones una manera similar a nivel del tronco inferior
reciben el nombre de porción supraclavicular (ramas anteriores de los nervios espinales C8
del plexo braquial, y las estructuras distales, de y D1), estos nervios espinales contienen fibras
porción infraclavicular. simpáticas preganglionares que se dirigen a la
4. Cordones. Los cordones están situados en la axi- cabeza. Así, la presencia de un síndrome de
la y se denominan así por la relación que guardan Horner va a tener el mismo significado que la
con respecto a la arteria axilar. El cordón lateral afectación de los músculos romboides o serrato
se forma de la fusión de las divisiones anteriores anterior, pero aplicado al tronco inferior.
del tronco superior y medio. El cordón medial es • Tercero. Como los nervios pectorales lateral y
la continuación de la división anterior del tronco medial surgen de los cordones nada más for-
inferior. El cordón posterior se constituye por la marse estos, la presencia de anomalías en estos
fusión de las tres divisiones posteriores de los tres músculos va a ayudar a diferenciar una lesión
troncos. Desde los cordones surgen varias ramas pantroncal de una lesión pancordonal.
nerviosas importantes. Desde el cordón lateral • Cuarto. Cada uno de los elementos supracla-
(con fibras C5 a C7) surge el nervio musculocu- viculares del plexo braquial (ramas anteriores
táneo, y termina en la porción lateral del nervio de los nervios espinales y troncos) contiene fi-
mediano. Del cordón posterior (que contiene bras nerviosas motoras que inervan musculatura
fibras de las raíces C5 a C8) surgen el nervio flexora y extensora, mientras que las fibras moto-
subescapular, el nervio toracodorsal (que inerva ras de los elementos infraclaviculares (cordones
el músculo dorsal ancho), el nervio axilar (o cir- y ramas terminales) inervan músculos extensores
cunflejo) y el nervio radial. Del cordón medial o flexores, pero no ambos. Por esta razón, las
(con fibras de C8 y D1) surge el nervio braquial lesiones de los troncos son más difíciles de dife-
cutáneo interno, el nervio antebraquial cutáneo renciar de las lesiones radiculares, mientras que
interno, el nervio cubital y termina en la porción las lesiones de los cordones van a ser más difí-
medial del nervio mediano. Además, nada más ciles de diferenciar de las lesiones de las ramas
formarse los cordones lateral y medial se forman terminales. Además, hay que recordar que, oca-
los nervios pectoral lateral y pectoral medial que sionalmente, esta situación puede complicarse
inervan, respectivamente, los músculos pectora- aún más por la presencia de lesiones simultáneas
les mayor y menor. del plexo braquial a distintos niveles.
De estos hechos se pueden desprender varios
puntos clínicos relevantes: Clasificación de las lesiones de plexo braquial
• Primero. Las ramas posteriores de los nervios
espinales inervan la musculatura paravertebral, Como se acaba de comentar, las lesiones del
por lo que la presencia de signos de denervación plexo braquial pueden dividirse en las que afectan

Manual EMG.indb 255 9/7/07 12:06:56


256 J. Esteban Pérez

Figura 2. Dominios sensitivos del plexo braquial. N. ABCE: nervio antebraquial cutáneo externo; N. ABCI: nervio antebraquial cutáneo in-
terno.

a su porción supraclavicular o infraclavicular, ya lesiones de los nervios terminales, de las que hay
que cada una de ellas presenta unas características que distinguirlas. Se manifiestan clínicamente con
clínicas diferenciales, y son susceptibles a procesos debilidad de músculos flexores o extensores. En
lesivos comunes. general, tienen peor pronóstico que las lesiones
Las lesiones supraclaviculares (las que afectan supraclaviculares.
a los troncos primarios) son clínicamente superpo-
nibles a lesiones radiculares, de las cuales hay que Valoración electrodiagnóstica
diferenciarlas. Por las características comentadas, se
manifiestan clínicamente con debilidad simultánea Como se ha comentado antes, no existe una
de músculos flexores y extensores. Entre las lesiones única manera para evaluar completamente el plexo
supraclaviculares, las que afectan al plexo superior braquial. Por tanto, sus elementos deben ser anali-
son las más frecuentes y, en general, muestran una zados de forma individual. Afortunadamente, cada
mejor recuperación que las que afectan al plexo parte del plexo braquial tiene su propio dominio
inferior, por los siguientes motivos: habitualmente sensitivo, motor y muscular (músculos inervados
son menos graves, suelen presentar un componente por los axones motores que atraviesan ese elemen-
de bloqueo de conducción más importante (y me- to) (Figs. 2, 3 y 4). Consecuentemente, la lesión
nor lesión axonal), y tienen una mayor posibilidad de cada uno de estos componentes produce un
de reinervación (los músculos diana que inervan patrón de afectación característico en los estudios
se encuentran más próximos a la localización de de conducción nerviosa (motora y sensitiva) y en
la lesión). la electromiografía de aguja. El reconocimiento de
Las lesiones infraclaviculares (las que afectan estos patrones es lo que va a permitir la localización
a los cordones) son clínicamente semejantes a las de las lesiones.

Manual EMG.indb 256 9/7/07 12:06:56


Plexopatía braquial y lumbosacra 257

Figura 3. Dominios motores del plexo braquial. ADM: abductor digiti minimi (separador corto del meñique); APB: abductor pollicis brevis (separador
corto del pulgar), BB: biceps brachii (bíceps braquial), DD: deltoides (deltoides); ECR: extensor carpi radialis (extensor radial del carpo); EDC: extensor
digitorum comunis (extensor común de los dedos); EIP: extensor indicis proprius (extensor propio del índice); PID: primus interosseus dorsalis (primer
interóseo dorsal).

Para llegar a un diagnóstico topográfico ade- musculares denervadas ya han degenerado; 3) es


cuado, debe realizarse un estudio neurofisiológico incapaz de detectar lesiones exclusivas del com-
completo, con estudios de conducción sensitiva y ponente sensitivo; y 4) es incapaz de diferenciar
motora y electromiografía de aguja. en qué grado una pérdida de unidades motoras
Uno de los componentes más importantes es debida a una lesión axonal o a un bloqueo de
en la evaluación electrodiagnóstica del plexo conducción. En este caso, cuando se detecta una
braquial es el estudio de conducción nerviosa pérdida de unidades motoras con la presencia de
sensitiva. Con frecuencia los hallazgos de este fibrilaciones profusas, si no se tiene en cuenta
estudio son sufi cientes para localizar la lesión, esta posibilidad, se puede sobrestimar el grado
antes incluso de realizar el estudio de conduc- de daño axonal.
ciones motoras o la electromiografía de aguja(1). Para valorar las distintas partes del plexo bra-
La electromiografía de aguja es muy sensible a la quial es importante familiarizarse con las diferen-
detección de lesión axonal motora, pero presen- tes fibras sensitivas y motoras que atraviesan cada
ta varias limitaciones(2,3): 1) en ocasiones puede componente del plexo, y con los músculos que
localizar erróneamente las lesiones en regiones dependen de cada porción.
más distales (por ejemplo, un estudio de aguja
podría sugerir una lesión en el cordón medial en Patrones electrodiagnósticos asociados a lesiones
un caso de lesión del tronco inferior si respeta las específicas
fibras destinadas al nervio radial); 2) no reconoce
lesiones leves en las que ya se ha producido una De acuerdo con la anatomía del plexo, la afec-
reinervación eficaz o en aquellas en que las fibras tación axonal de cada elemento del plexo braquial

Manual EMG.indb 257 9/7/07 12:06:57


258 J. Esteban Pérez

Figura 4. Dominios musculares del plexo braquial. ADM: abductor digiti minimi (separador corto del meñique); APB: abductor pollicis brevis (separador
corto del pulgar); BB: biceps brachii (bíceps braquial), BR: brachioradialis (supinador largo); D: deltoides (deltoides); ECR: extensor carpi radialis (extensor
radial del carpo); EIP: extensor indicis proprius (extensor propio del índice); EPB: extensor pollicis brevis (extensor corto del pulgar); FCR: flexor carpi radialis
(palmar mayor); FCU: flexor carpi ulnaris (cubital anterior); FDI: primus interosseus dorsalis (primer interóseo dorsal); FDP 3-4: flexor digitorum profundus
3-4 (flexor común profundo de los dedos 3º y 4º); FPB: flexor pollicis brevis (flexor corto del pulgar); PT: pronator teres (pronador redondo); Tm: teres minor
(redondo menor); TB: triceps brachii (tríceps braquial).

produce unas anomalías electrodiagnósticas que pendientes de los miotomas C5 y C6, y excluir
pueden predecirse: la presencia de una radiculopatía (estudiando si
• Tronco primario superior. Es la localización existe patrón neurógeno en los músculos serrato
más común de lesión del plexo braquial(4). Su anterior, romboides y paravertebrales)(5,6). En el
presentación clínica es la de una debilidad para estudio de conducción nerviosa se encontrarán
la separación del brazo, flexión del codo y ro- alteraciones en la amplitud de los potenciales
tación externa del brazo, asociada a un déficit sensitivos del nervio mediano registrado en
sensitivo que se localiza en la cara lateral del el 1er dedo y del nervio antebraquial cutáneo
brazo y antebrazo, y que puede extenderse al externo y en los potenciales motores evocados
pulgar. Las causas más frecuentes de la lesión en el músculo bíceps, estimulando el nervio
de este elemento son la neuralgia amiotrófica, musculocutáneo y en el músculo deltoides,
lesiones en relación con anestesia, parálisis aso- estimulando el nervio axilar (Figs. 2 y 3). Oca-
ciada al empleo de mochilas y traumas directos. sionalmente pueden encontrarse anormalidades
Cuando se sospecha una lesión en este tronco en los estudios de la porción sensitiva del nervio
deberá realizarse un estudio neurofisiológico di- radial(2,3).
rigido a demostrar un patrón neurógeno en los • Tronco primario medio. Se manifiesta clíni-
músculos inervados por las fibras motoras que camente con una debilidad para la extensión
atraviesan este elemento (Fig. 4, Tabla I), de- del codo y en la flexión y extensión de la mu-

Manual EMG.indb 258 9/7/07 12:06:57


Plexopatía braquial y lumbosacra 259

TABLA I. Dominios musculares de los troncos del plexo braquial


Tronco superior Tronco medio Tronco inferior

N. supraescapular Supraespinoso
Infraespinoso
M. musculocutáneo Bíceps braquial
Braquial anterior
N. axilar Deltoides
Redondo menor
N. radial Tríceps braquial Tríceps braquial Cubital posterior
Supinador largo Extensor radial del carpo Extensor común de los dedos
Extensor radial del carpo Cubital posterior Extensor corto del pulgar
Extensor común de los dedos Extensor propio del índice
Extensor propio del índice
N. mediano Pronador redondo Pronador redondo Separador corto del pulgar
Palmar mayor Palmar mayor Flexor largo del pulgar
N. cubital Cubital anterior
Flexor común profundo de los dedos 3º y 4º
Separador corto del meñique
Primer interóseo dorsal

ñeca. El área de hipoestesia se localiza en los nervio antebraquial cutáneo interno (Fig. 2).
dedos 2º y 3º. En los estudios de conducción También se afectan los estudios motores de
nerviosa (Figs. 2 y 3) se encuentran afectados los nervios cubital y mediano, y los del nervio
los potenciales sensitivos del nervio mediano radial cuando se valoran músculos distales (p.
registrados en el 2º y 3er dedo en un 80% de los ej., el músculo extensor del índice) (Fig. 3).
casos, y del nervio radial en un 40% de los casos. En la electromiografía de aguja se afectan los
En la electromiografía de aguja se afectan los músculos dependientes de los miotomas C8
músculos dependientes de la raíz C7 (Fig. 4, y D1 (Fig. 4, Tabla I). Al realizar este estudio
Tabla I). Este estudio con aguja es similar al de es importante incluir músculos dependientes
una lesión radicular C7, salvo por la afectación del nervio radial, ya que si estos se encuentran
del músculo serrato anterior y de los músculos afectados ayuda a diferenciar una lesión del
paravertebrales(6-8). tronco inferior de una lesión del cordón medial
• Tronco primario inferior. Se manifiesta clí- (en este último caso los músculos deben estar
nicamente con una debilidad de los músculos indemnes)(6-8).
intrínsecos de la mano e hipoestesia de los dos • Cordón lateral. Se manifiesta con una debili-
últimos dedos de la mano. Las causas más fre- dad de los músculos dependientes del nervio
cuentes de lesión a este nivel son la infiltración musculocutáneo y de la rama lateral del ner-
neoplásica (metástasis, neurofibroma, neurino- vio mediano (flexión del codo y pronación).
ma, meningioma y síndrome de Pancoast), se- La hipoestesia se localiza en el borde antero-
cuelas de esternotomía y síndrome neurógeno lateral del brazo y en los tres primeros dedos.
verdadero de la salida torácica. En los estudios Este elemento es atravesado por fibras sensiti-
de conducción nerviosa van a ser anormales vas del nervio antebraquial cutáneo externo y
los estudios sensitivos del nervio cubital y del del nervio mediano que van a los dos primeros

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260 J. Esteban Pérez

TABLA II. Dominios musculares de los cordones del plexo braquial


Cordón lateral Cordón posterior Cordón medial

N. musculocutáneo Bíceps braquial


Braquial anterior
N. axilar Deltoides
Redondo menor
N. radial Tríceps braquial
Supinador largo
Extensor radial del carpo
Cubital posterior
Extensor común de los dedos
Extensor propio del índice
Extensor largo del pulgar
N. mediano Pronador redondo Separador corto del pulgar
Palmar mayor Flexor largo del pulgar
N. cubital Cubital anterior
Flexor común profundo de los dedos 3º y 4º
Separador corto del meñique
Primer interóseo dorsal

dedos. Las fibras del nervio mediano que van tromiografía de aguja se afectan los músculos
al 3er dedo lo atraviesan en más de un 80% de dependientes de los nervios toracodorsal, ra-
casos (Fig. 2). En el estudio de conducción dial y axilar (Fig. 4, Tabla II)(9). El estudio de
motora sólo se afecta el potencial evocado en los músculos dorsal ancho, redondo menor y
el músculo bíceps, al estimular el nervio mus- deltoides es imprescindible para diferenciar
culocutáneo (Fig. 3). En la electromiografía de una lesión alta del nervio radial de una lesión
aguja se evalúan músculos C5, C6 y C7, que del cordón posterior(10).
están inervados por el nervio musculocutáneo • Cordón medial. Este elemento del plexo bra-
(músculos bíceps braquial o braquial anterior) quial es una continuación del tronco inferior
o por la rama lateral del nervio mediano (mús- con la excepción de las fibras dirigidas al nervio
culos pronador redondo o palmar mayor) (Fig. radial. Su manifestación clínica es la de una
4, Tabla II)(6-8). debilidad de los músculos dependientes de los
• Cordón posterior. Se manifiestan clínica- nervios cubital y mediano (flexión y separación
mente con una debilidad de los músculos de los dedos, y flexión cubital de la muñeca)
dependientes de los nervios radial y axilar con hipoestesia del borde cubital del brazo,
(separación y elevación anterior del brazo antebrazo, mano y 4º y 5º dedos. Estudios de
y extensión del codo, muñeca y dedos). La conducción anormales son los que evalúan la
hipoestesia asociada es variable, y se localiza porción sensitiva del nervio cubital y del nervio
en la cara lateral del brazo y base del pulgar. antebraquial cutáneo interno, y la porción mo-
Los estudios de conducción nerviosa sólo se tora del nervio cubital y del nervio mediano. El
afectan en el nervio radial (sensitivo y motor) estudio de conducción sensitiva del nervio me-
y en el nervio axilar (Figs. 2 y 3). En la elec- diano al 3er dedo puede afectarse en un 15% de

Manual EMG.indb 260 9/7/07 12:06:58


Plexopatía braquial y lumbosacra 261

los casos (Figs. 2 y 3). La ausencia de afectación y reservar los estudios motores para cuando los
motora de los músculos distales del nervio ra- anteriores son anormales o la electromiografía de
dial no excluye completamente una afectación aguja muestra anomalías.
del tronco inferior, pero su presencia excluye
definitivamente que se trate de una lesión en el Síndrome del desfiladero torácico
cordón medial. En la electromiografía de aguja
se afectan todos los músculos dependientes de Recibe el nombre de síndrome del desfiladero
los nervios mediano y cubital, estando respe- torácico una serie de trastornos, cuyo denominador
tados los músculos radiales dependientes de la común es el haber sido atribuidos a la afectación de
raíz C8 (extensor del índice y extensor corto del una o varias estructuras neurovasculares a su paso
pulgar) (Fig. 4, Tabla II). Sin embargo, como se por el denominado desfiladero torácico, localizado
ha comentado antes, la ausencia de anomalías entre la base del cuello y la axila (Fig. 5). La razón
en estos músculos no excluye definitivamente para tratarlos de una manera diferenciada es porque
la presencia de una lesión parcial del tronco su término es confuso. Esta confusión es conse-
inferior(8,10). cuencia de varios motivos: se trata de un término
que se utiliza para designar, tanto trastornos de
Estrategia de evaluación origen vascular como neurológico; la denomina-
ción no identifica un cuadro clínico único; y, por
Como un enfoque inicial general de la valora- último, a lo largo de la historia se han denomina-
ción electrofisiológica del plexo braquial se pueden do síndrome del desfiladero torácico anomalías de
realizar los siguientes estudios: muy diversa índole, como consecuencia de la falta
• Estudios del componente sensitivo: potenciales de unos criterios diagnósticos claros y definidos.
sensitivos y conducción sensitiva del nervio cu- El término fue utilizado por primera vez por
bital, nervio mediano a 2º o 1er dedo y nervio Peet y cols.(11) en 1956 (thoracic outlet syndrome).
radial. Sin embargo, la clasificación propuesta entonces
• Estudios del componente motor: neurografía por estos autores ha quedado obsoleta. En la actua-
motora de nervio cubital y nervio mediano. lidad las clasificaciones en uso dividen el síndrome
• Electromiografía de aguja: estudio de los múscu- en dos grandes grupos según la estructura afecta:
los paravertebrales cervicales, deltoides, bíceps síndrome del desfiladero torácico vascular (arte-
braquial, tríceps, separador corto del pulgar o rial o venoso) y síndrome del desfiladero torácico
flexor largo del pulgar, primer interóseo dorsal neurológico verdadero. Con frecuencia se añade
y extensor del índice. a esta clasificación otro subgrupo independiente:
Hay que recalcar que este estudio general eva- el síndrome del desfiladero torácico traumático.
lúa, principalmente, el tronco primario inferior Finalmente, queda como otro grupo aparte un con-
y el cordón medial del plexo braquial, y estudia junto de síndromes denominados síndromes del
en menor medida el cordón lateral y posterior. El desfiladero torácico “polémicos”, más frecuentes
tronco primario superior es el que peor se evalúa que los anteriores, pero muy inespecíficos y que
en este tipo de estudio. Si la sintomatología clínica están constituidos por cuadros caracterizados por
del paciente o los hallazgos iniciales sugieren una síntomas variables con la única característica co-
afectación de un elemento específico del plexo mún de que han sido atribuidos a una afectación
braquial, se deben añadir otros estudios comple- de estas estructuras neurovasculares (y en general,
mentarios específicos (Figs. 2 a 4, Tablas I y II). las neurológicas) en el desfiladero torácico, pero
En principio, dada la mayor sensibilidad de los para los cuales no existe evidencia clínica o neu-
estudios sensitivos para detectar lesiones axonales, rofisiológica que confirme dicha lesión. Si estos
se deben realizar éstos siempre que sea posible, síntomas más inespecíficos aparecen después de un

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262 J. Esteban Pérez

Figura 5. Esquema anatómico del desfiladero torácico.

trauma se clasifican como síndrome del desfiladero demostrables alteraciones clínicas y neurofisiológi-
torácico polémico postraumático(12-13). cas por afectación del plexo braquial. Finalmente,
En cuanto a los síndromes del desfiladero se hace un comentario sobre los síndromes del
torácico de origen vascular, pueden ser secunda- desfiladero torácico polémicos.
rios a una afectación del componente arterial o
venoso. Los síntomas con los que se manifiestan Síndrome del desfiladero torácico neurológico verdadero
son secundarios a la hipoxia o al estasis sanguí- El síndrome del desfiladero torácico neuroló-
neo. Sin embargo, estos pacientes pueden referir gico verdadero es una enfermedad rara con una
sensaciones similares a parestesias, pero debidas a prevalencia actual estimada en una persona por
isquemia o estasis venosa y no por una afectación millón de habitantes (un neurólogo general puede
neurológica. encontrar a lo largo de su práctica uno o dos casos).
En los dos siguientes apartados se describen El cuadro consiste en la aparición de síntomas de-
los hallazgos del síndrome del desfiladero torácico bidos a una lesión crónica del plexo braquial en el
neurológico verdadero y el síndrome del desfilade- tronco primario inferior, generada por la compre-
ro torácico postraumático, ya que sólo en ellos son sión de dicho tronco por una costilla cervical o,

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Plexopatía braquial y lumbosacra 263

más frecuentemente, por una banda fibrosa entre la tarizada (TAC) o resonancia magnética (RM) no
primera costilla y una costilla cervical rudimentaria suelen aportar más datos.
o una apófisis transversa anormalmente grande. Es El cuadro es secundario a una lesión del tronco
un síndrome que afecta de manera predominante primario inferior, y en especial de las fibras de-
a mujeres, en general jóvenes, y casi siempre es pendientes del ramo anterior del nervio espinal
unilateral(14). D1. Esta lesión se produce por el estiramiento y la
En 1970 Gilliat y cols.(15) definieron las caracte- angulación que sufre esa parte del plexo braquial
rísticas clínicas, radiográficas y neurofisiológicas de al acodarse sobre una banda fibrosa, que une la
este síndrome. Clínicamente se manifiesta como primera costilla con una costilla cervical persis-
una lesión del tronco primario inferior, que afecta tente (generalmente rudimentaria) o una apófisis
de una manera predominante, a su componente transversa C7 alargada. Aunque estas anomalías
motor, con nula o escasa afectación del compo- están presentes desde el nacimiento, los pacientes
nente sensitivo. Debido a esta afectación predo- refieren típicamente los primeros síntomas al final
minantemente motora, de inicio insidioso y curso de la adolescencia o más tarde.
lentamente progresivo, es muy frecuente que el El estudio electrofisiológico es muy caracte-
cuadro clínico se encuentre ya avanzado cuando el rístico(15,16). Los estudios de conducción nerviosa
paciente consulta por primera vez. El síntoma más muestran una respuesta ausente o muy disminuida
común es un dolor intermitente a lo largo del borde de amplitud del potencial sensitiva en el nervio
medial de brazo, antebrazo y mano. Sin embargo, antebraquial cutáneo interno, junto con una am-
esta molestia no suele ser intensa ni tampoco la plitud motora disminuida en el nervio mediano y
causa por la cual consulta el paciente. una respuesta sensitiva cubital en el límite o dismi-
La exploración clínica suele mostrar un déficit nuida. Sin embargo, el estudio sensitivo del nervio
sensitivo parcheado que se localiza en la cara in- mediano es normal. En la electromiografía de aguja
terna de antebrazo y que puede extenderse hasta se encuentra una pérdida de unidades motoras y
el borde medial de la mano (sin el característico potenciales de unidad motora de tipo neurógeno
déficit sensitivo “partido” del 4º dedo que acompa- crónico en los músculos dependientes de la rama
ña a las lesiones del nervio cubital). Las alteracio- anterior de nervio espinal D1 y en menor grado de
nes motoras son mucho más intensas y llamativas. C8. Todas estas alteraciones son especialmente más
Consisten principalmente en la atrofia y debilidad intensas en los músculos de la mano dependientes
de los músculos de la eminencia tenar (simulan un del nervio mediano. Debido al carácter crónico de
síndrome del túnel carpiano crónico). Pero la ma- la enfermedad, la presencia de actividad muscular
yoría de los pacientes también presentan debilidad espontánea en forma de fibrilaciones no aparece o
y atrofia del resto de los músculos intrínsecos de es muy modesta, y si aparece se limita, en general,
la mano (primer interóseo dorsal) y de los múscu- a los músculos de la eminencia tenar.
los del antebrazo inervados por fibras motoras del En el diagnóstico diferencial deben incluirse
tronco inferior. Sin embargo, los músculos más las enfermedades de motoneurona, radiculopatía
afectos son los dependientes del nervio mediano C8 o D1, lesiones del tronco inferior primario del
(eminencia tenar) y hasta en una cuarta parte de los plexo braquial de otras etiologías, así como una
casos son estos músculos son los únicos atróficos. neuropatía grave del nervio mediano.
Los reflejos musculares son normales. La anoma- El tratamiento de elección es la cirugía, que con-
lía ósea no suele ser palpable, y la exploración no siste en la sección de la banda fibrosa por vía supracla-
muestra datos de afectación vascular. En general, vicular. Una vez intervenidos, los pacientes muestran
la radiografía simple no muestra más que una cos- una mejoría de los síntomas dolorosos o sensitivos,
tilla cervical rudimentaria o una apófisis transversa pero, en general, la atrofia y la debilidad persisten
grande. Los estudios por tomografía axial compu- como consecuencia de la lesión axonal crónica.

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264 J. Esteban Pérez

Síndrome del desfiladero torácico postraumático brazo tienden a empeorar estos síntomas. En los
Con este nombre se conoce otra enfermedad casos en que se asocian alteraciones vasculares se
del plexo braquial, también rara, caracterizada por puede encontrar, además, edema y equímosis en la
la afectación vascular, nerviosa o mixta, a nivel base del cuello y región supraclavicular, congestión
del desfiladero torácico que aparece después de venosa prominente en la región pectoral y edema
lesiones traumáticas de la clavícula(16). del brazo. La exploración confirma la debilidad,
Este subgrupo del síndrome del desfiladero pérdida de sensibilidad y ausencia de reflejos co-
torácico suele ser unilateral y afecta a personas rrespondientes al cordón lesionado. Además, se sue-
adultas de ambos sexos. En general, se trata de le palpar una protrusión dolorosa en el tercio medio
una complicación tardía de una lesión clavicular de la clavícula, y en los casos con pseudoaneurisma
traumática, y en especial secundaria a fracturas de se puede escuchar un soplo supraclavicular. Los
clavícula en su tercio medio. A pesar de que el pa- pulsos distales pueden encontrarse disminuidos o
quete neurovascular se encuentra situado por detrás desaparecer al elevar el brazo.
de la clavícula, en el canal formado entre ésta y la Los estudios de imagen, y en especial las ra-
primera costilla, es poco frecuente que se dañe en diografías simples de tórax y clavícula revelan la
el momento agudo de la fractura de clavícula. Es anomalía ósea en la porción media de la clavícula
más, cuando una lesión aguda del plexo braquial (callos hipertróficos, fragmentos óseos desplaza-
aparece en un traumatismo clavicular se debe atri- dos). La RM y la TAC de la zona pueden mostrar
buir, en general, a un mecanismo diferente; el más pseudoaneurismas. Un estudio arteriográfico o
frecuente de ellos suele ser la tracción simultánea flebográfico puede evidenciar otras alteraciones
del plexo braquial. El síndrome del desfiladero to- vasculares asociadas (estenosis vasculares, despla-
rácico postraumático puede presentarse como una zamientos)(15).
afectación vascular o nerviosa aislada (en especial El examen neurofisiológico suele mostrar los
de los cordones), pero lo más habitual es que afecte signos de una lesión axonal de la porción infracla-
a ambas estructuras. Aunque puede aparecer inme- vicular del plexo braquial. Así, encontramos una
diatamente después del trauma, por lo general, se caída de la amplitud o ausencia de las respuestas
trata de una complicación tardía (desde varios días sensitivas, que varía dependiendo del cordón afec-
hasta años). La etiología final del cuadro es variable to. En la electromiografía de aguja encontramos
e incluye fragmentos óseos fracturados desplazados, una pérdida de unidades motoras y potenciales
callos óseos hipertróficos, pseudoaneurismas de la de unidad motora de características neurógenas
arteria subclavia, vendajes “en 8” demasiado tensos, crónicas, así como fibrilaciones en los músculos
manipulación de la fractura y pseudoartrosis. dependientes de la estructura afecta(16).
El síntoma más frecuente es dolor a nivel de la Por lo general, este síndrome no responde al
clavícula, que suele mostrar una irradiación hacia tratamiento conservador y suele requerir un tra-
el miembro superior. Además, los afectados presen- tamiento quirúrgico, especialmente aquellos ca-
tan parestesias, hipoestesia y debilidad del miem- sos en que se encuentran fragmentos de fractura
bro superior, con una distribución característica desplazados o pseudoaneurismas. Los resultados
dependiendo de la estructura del plexo braquial de la cirugía con respecto a la lesión nerviosa son
implicada. El cordón medial es el que se afecta variables, desde una evolución favorable con una
con más frecuencia, por lo que las alteraciones recuperación rápida, hasta casos que permanecen
sensitivas se suelen localizar en el borde medial con un déficit residual (especialmente aquellos que
del brazo, antebrazo y últimos dedos de la mano, se han presentado con una lesión axonal grave del
mientras que los síntomas motores afectan a los cordón medial).
músculos intrínsecos de la mano. Por lo general, Aunque es una complicación rara y desconocida
las maniobras de separación y extensión forzada del para muchos médicos es primordial tenerla pre-

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Plexopatía braquial y lumbosacra 265

sente, ya que un tratamiento precoz evita lesiones siguiendo una distribución de plexo inferior, o por
permanentes. la cara anterior a posterior del cuello, tórax y hom-
bro, siguiendo una distribución de plexo superior.
Síndrome del desfiladero torácico polémico A pesar de su carácter subjetivo, los defensores del
Este subgrupo del síndrome del desfiladero to- síndrome consideran que su incidencia es alta, y
rácido ha recibido diferentes nombres: síndrome que con frecuencia puede ser bilateral.
del desfiladero torácico inespecífico, síndrome La exploración neurológica, por lo general, no
del desfiladero torácico sintomático, síndrome muestra alteraciones objetivas. El dato anormal en-
del escaleno anterior, etc. La razón principal de contrado con más frecuencia es la “positividad” de
esta variedad es la ausencia de una causa clara. diversas maniobras de provocación como son la de
Así, en contra de lo que ocurre con los otros tipos Adson o el test de hiperabducción, en el cual se
de síndrome del desfiladero torácico, su verdadera observa la pérdida de pulsos distales. Sin embargo,
existencia es muy controvertida. Los mecanismos el más popular es el test de estrés con brazo elevado
hipotéticos implicados son poco claros y polémicos. descrito por Roos en 1976(17). Durante este tipo de
Los defensores de la existencia del síndrome sue- maniobra se instruye al paciente para mantener los
len invocar como principal precipitante del cuadro brazos en alto y en rotación externa durante tres
el antecedente de traumas repetidos, que condi- minutos, mientras realiza movimientos repetidos de
cionaría la presencia de pequeños sangrados que abertura y cierre de puños. Se considera positivo si
causarían una fibrosis secundaria en los músculos el miembro afecto tiende a caer de forma involun-
escalenos, o en bandas fibromusculares congénitas taria y aparecen fatiga, parestesias en las manos o
persistentes. Finalmente, estas estructuras compro- pérdida de pulsos. Sin embargo, todas estas manio-
meterían de forma secundaria a diversas porciones bras se han cuestionado, tanto en su capacidad para
del plexo braquial. Otros autores sugieren que el detectar lesiones en el plexo braquial como en su
cuadro se debe a una descompensación funcio- especificidad para hacerlo: en primer lugar, todas
nal muscular, que origina el acortamiento de los ellas miden realmente una claudicación vascular y,
vientres musculares por sobreuso. Sin embargo, la en segundo, con frecuencia este tipo de maniobras
mayoría de los neurólogos manifiestan importantes también son positivas en personas sin lesiones del
reservas sobre la existencia real de este síndrome, plexo braquial y muy habituales en aquellas con
por varias razones. En contra de lo que ocurre con síndrome del túnel carpiano.
otras plexopatías braquiales, el síndrome del desfila- Las pruebas complementarias son normales o
dero torácico polémico tiende a producir síntomas sólo muestran alteraciones inespecíficas. Algunos
incapacitantes, sin llegar a producir cambios obje- autores han descrito alteraciones en la RM, mien-
tivos en la clínica o en pruebas neurofisiológicas. tras que otros sólo las citan en los estudios electro-
Además, este diagnóstico se aplica con frecuencia diagnósticos usando, por lo general, técnicas de
a individuos en los que son operativos de forma estudio no convencionales (potenciales evocados
clara factores gananciales secundarios. Finalmen- sensoriales, estimulación con aguja de la raíz C8).
te, es un diagnóstico utilizado con frecuencia por Pero por cada autor que ha publicado la anomalía
médicos que no han recibido un entrenamiento en un test y lo ha propuesto como estudio comple-
adecuado para el reconocimiento de enfermedades mentario confirmatorio de la existencia del síndro-
que afectan al sistema nervioso periférico, como me, se encuentran artículos de dos o más autores
cirujanos generales, cirujanos vasculares o ciruja- que señalan la negatividad de los mismos(15,16).
nos torácicos. En cuanto a los tratamientos, se han propues-
El síntoma más frecuente, y en general, el úni- to varias estrategias. Una parte importante de los
co, es la presencia de dolor y/o parestesias. Estas pacientes responde a medidas conservadores. Sin
se pueden irradiar por el borde medial del brazo embargo, otro gran grupo ha sido sometido a di-

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266 J. Esteban Pérez

Figura 6. Esquema anatómico del plexo lumbosacro.

versas intervenciones quirúrgicas, para intentar PLEXO LUMBOSACRO


descomprimir las estructuras del plexo braquial
supuestamente afectas. Entre las intervenciones Anatomía del plexo lumbosacro (Fig. 6)
más frecuentemente realizadas se encuentran la
resección de la primera costilla por vía transaxilar Es mejor considerar los plexos lumbar y sacro
y las escalenectomías anterior y media. Los resul- como un único plexo lumbosacro, por su proximi-
tados son muy variables, y en el momento de su dad física, porque se encuentran interconectados,
indicación hay que recordar que estas interven- y porque se afectan frecuentemente de forma con-
ciones no son inocuas: como resultado de ellas se junta en diferentes síndromes clínicos.
han descrito diversas complicaciones; por ejemplo, El plexo lumbosacro se forma por la inter-
lesiones permanentes del plexo braquial (a menudo conexión y fusión de las ramas anteriores de
dolorosas), complicaciones infecciosas e incluso los nervios espinales L1 a S4. Los nervios más
la muerte. importantes que se forman en el plexo lumbar

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Plexopatía braquial y lumbosacra 267

(derivado de los nervios espinales L1 a L4) son dirigen desde aquí hacia la protuberancia ciá-
el femoral (o crural) y el obturador, mientras tica. Al igual que pasaba con el plexo lumbar,
que del plexo sacro (L5 a S4) se forma el nervio las ramas anteriores de los nervios espinales
ciático. se dividen en divisiones anteriores y posterio-
• Plexo lumbar. El plexo lumbar deriva de la res. De las divisiones posteriores del tronco
unión de los ramos anteriores de los nervios lumbosacro y de las raíces S1 y S2 se forma
espinales L1 a L4. Estos, desde la columna la porción lateral del nervio ciático (nervio
vertebral se dirigen hacia abajo y hacia fuera ciaticopoplíteo externo, cuya rama terminal
uniéndose entonces para formar el plexo a ni- es el nervio peroneo). De las divisiones ante-
vel del músculo iliopsoas. En esta localización riores se forma la porción medial del nervio
las ramas anteriores de los nervios espinales se ciático (o nervio ciaticopoplíteo interno, cuya
dividen en divisiones anteriores y posteriores. rama terminal es el nervio tibial). Los otros
De la fusión de las divisiones posteriores de nervios que se forman en el plexo sacro son el
los ramos anteriores de los nervios espinales glúteo superior, el glúteo inferior, el pudendo,
L2 a L4 se forma el nervio femoral, que emer- el cutáneo posterior del muslo y varias ramas
ge del músculo iliopsoas por su borde lateral; pequeñas, que inervan músculos de la región
atraviesa la fosa ilíaca y pasa bajo el ligamento pélvica y caderas.
inguinal para introducirse en el compartimen-
to anterior del muslo, y finalizar como ner- Evaluación electrodiagnóstica del plexo lumbosacro
vio safeno (sensitivo). El nervio obturador se
forma de la unión de las divisiones anteriores Como enfoque general al estudio de la sospe-
de las ramas anteriores de los mismos nervios cha de lesiones en el plexo lumbar o plexo sacro,
espinales (L2 a L4) y emerge hacia la pelvis el estudio de conducción debe incluir la obten-
por el borde medial del músculo iliopsoas. Por ción y caracterización de los potenciales evocados
último, del plexo lumbar también emergen las motores y sensitivos de los nervios peroneo y tibial,
ramas motoras que inervan el músculo psoas potenciales y velocidad sensitiva del nervio sural,
y el músculo ilíaco, el nervio femorocutáneo y reflejo H del nervio tibial. La electromiografía
(nervio sensitivo que recoge sensibilidad de la de aguja debe incluir el estudio de, al menos,
cara lateral del muslo), y los nervios iliohipo- un músculo de cada uno de los siguientes gru-
gástrico o abdominogenital mayor (con fibras pos: músculos paravertebrales lumbares y sacros,
procedentes de las raíces D12 y L1), ilioin- tensor de la fascia lata o glúteo medio (depen-
guinal o abdominogenital menor (con fibras dientes del nervio glúteo superior), cuádriceps
L1) y genitofemoral (con fibras L1 y L2). El (dependiente del nervio femoral), aproximador
plexo lumbar se comunica con el plexo sacro a mayor (dependiente del nervio obturador), tibial
través del denominado tronco lumbosacro, que anterior, peroneo lateral largo o extensor largo del
contiene fibras de la rama anterior del nervio dedo gordo (dependientes del nervio peroneo) y
espinal L4 y la rama anterior del nervio espinal músculo gemelo interno o externo (dependientes
L5 completa. Este tronco se dirige hacia abajo, del nervio tibial)(4,5).
situándose en su recorrido sobre el sacro y la Debe recordarse que en la electromiografía de
articulación sacroilíaca. aguja del músculo pedio puede hallarse con fre-
• Plexo sacro. El plexo sacro se forma de la cuencia actividad espontánea tipo fibrilaciones (en
unión del tronco lumbosacro y las ramas an- especial en personas de edad), consecuencia de
teriores de los nervios espinales sacros S1 a lesiones más distales o secundarias a polineuropa-
S4. Se localiza en la pared posterior y poste- tías leves en relación con la edad o enfermedades
rolateral de la pelvis, y sus componentes se intercurrentes (por ejemplo, diabetes mellitus).

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268 J. Esteban Pérez

TABLA III. Dominios sensitivos y motores del plexo lumbar y sacro


Tipo de estudio Plexo Lumbar Plexo Sacro

Cond. sensitiva • N. safeno • N. sural


• N. peroneo superficial
• N. tibial (reflejo H)
Cond. motora • N. tibial (a m. separador del dedo gordo)
• N. peroneo (a m. pedio o m. tibial anterior)
EMG de aguja • M. cuádriceps (vasto interno o externo) • M. tibial anterior
• M. iliopsoas • M. gemelo interno o externo
• M. aproximador mayor • M. pedio
• M. paravertebrales • M. separador del dedo gordo
• M. vasto externo
• M. glúteo mediano
• M. paravertebrales

En ocasiones puede ser muy difícil la diferen- mayor frecuencia en pacientes con diabetes,
ciación entre una lesión del nervio peroneo y de la y se denomina entonces amiotrofia diabética),
porción externa del nervio ciático (ciaticopoplíteo lesiones traumáticas, aneurismas aórticos, em-
externo). En estos casos la presencia de denerva- barazo, hematoma retroperitoneal, tumores y
ción clara en la porción corta del músculo bíceps secuelas postirradiación. El estudio neurofisio-
femoral ayuda a diferenciarlas. La presencia de lógico se dirige a demostrar la presencia de un
denervación confirma una lesión más proximal, patrón neurógeno en los músculos inervados
pero la ausencia no la descarta(4). por los nervios femoral y obturador (Tabla III).
El diagnóstico diferencial más importante que
Patrones electrodiagnósticos asociados a lesiones se plantea es una radiculopatía, por lo que es
específicas imprescindible la realización del estudio elec-
tromiográfico de aguja de los músculos paraver-
De acuerdo con la anatomía del plexo, la afec- tebrales. Así, en los estudios de conducción sólo
tación axonal de cada elemento del plexo lumbo- encontraremos anomalías en el estudio sensitivo
sacro produce anomalías electrodiagnósticas que del nervio safeno (rama sensitiva terminal del
pueden predecirse: nervio femoral), sin que existan anomalías en
• Plexo lumbar. Las lesiones en este elemento los otros estudios sensitivos o motores que se
del plexo lumbosacro se manifiestan clínica- realizan habitualmente en la práctica clínica,
mente como una debilidad de los músculos ya que éstos valoran los componentes del plexo
inervados por los nervios femoral y obturador, sacro (estudio de los nervios sural, tibial y pero-
es decir, con una debilidad para la flexión de la neo). En la electromiografía de aguja encontra-
cadera, extensión de la rodilla y aproximación remos, lógicamente, un patrón neurógeno en
del muslo. El déficit sensitivo asociado se loca- los músculos cuádriceps (vasto lateral o medial),
liza, fundamentalmente, en la cara anterior y iliopsoas y aproximador mayor(4,6).
medial del muslo y cara medial de la pierna, • Plexo sacro. Las lesiones en esta estructura se
y se asocia a la pérdida del reflejo patelar. Las manifiestan por una debilidad para la extensión
causas más frecuentes de lesiones a este nivel y separación de la cadera, flexión de la rodilla, y
son la neuralgia amiotrófica (que aparece con flexo-extensión del pie y dedos del pie. En gene-

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Plexopatía braquial y lumbosacra 269

ral, en las lesiones del plexo sacro se afectan de estudio de conducción motora del nervio peroneo
forma predominante los músculos dependientes (con detección en músculo pedio), y del nervio ti-
del tronco lateral del nervio ciático o nervio bial (con detección en músculo separador del dedo
ciaticopoplíteo externo, por lo que el defecto gordo), seguido del estudio de conducción sensitiva
clínico puede ser superponible a una lesión del del nervio sural y del reflejo H bilateral. La elec-
nervio peroneo, del que se puede diferenciar por tromiografía de aguja puede incluir los músculos
la presencia de denervación en la porción corta paravertebrales, glúteo mediano, vasto externo, ti-
del músculo bíceps femoral (músculo inervado bial anterior, gemelo interno, flexor común de los
por fibras del ciático-poplíteo externo antes de dedos, pedio y separador del dedo gordo.
formar el nervio peroneo). El déficit sensitivo En caso de que predomine un déficit para la
asociado es el de una hipoestesia en el pie. Las extensión de la rodilla, se debe añadir al estudio
causas más frecuentes de lesiones en este ele- anterior el de la conducción sensitiva del nervio
mento son los traumas en la cadera, fractura de safeno y motora del nervio femoral (bilateral, para
pelvis, cirugía de la cadera (en especial para co- poder comparar las respuestas, considerando sano el
locación de prótesis articular), inyecciones intra- miembro contralateral asintomático) y electromio-
musculares, tumoraciones locales (primarias o grafía de aguja de los músculos aproximador media-
metastásicas), tras radioterapia, hematoma retro- no, recto anterior y vasto externo (contralateral).
peritoneal, embarazo y aneurismas aórticos. En En el caso de que el paciente se presente con
los estudios neurofisiológicos se ven afectados, un pie caído, es recomendable un estudio de la
tanto los estudios de conducción sensitivos de conducción motora del nervio peroneo a múscu-
los nervios sural y del peroneo superficial como lo tibial anterior (bilateral, para poder comparar
los estudios de conducción motores del nervio las amplitudes) y sensitivo del nervio peroneo
peroneo (a músculo pedio o a músculo tibial superficial. Además, la electromiografía de aguja
anterior) y nervio tibial (a músculo separador incluirá el estudio del músculo extensor largo del
del dedo gordo). Las respuestas tardías F y H dedo gordo, peroneo lateral largo, tibial posterior,
también se encuentran prolongadas o ausentes. porción corta del bíceps femoral, semitendinoso y
La electromiografía de aguja muestra un patrón tibial anterior(3).
neurógeno en los músculos dependientes del
nervio ciático, tanto en su porción del ciati-
copoplíteo interno (músculos semitendinoso BIBLIOGRAFÍA
y semimembranoso, gemelos y separador del
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Capítulo 20

ENFERMEDADES DE LOS NERVIOS CRANEALES


J. Coll Cantí, R. Álvarez Ramo

INTRODUCCIÓN 1. Oftálmica: recoge la sensibilidad de la frente,


párpado superior, dorso de la nariz, córnea y
Los nervios craneales, como parte integrante senos frontal y etmoidal.
del sistema nervioso periférico, pueden verse afec- 2. Maxilar superior: recoge la sensibilidad del pár-
tados de la misma forma que el resto de los troncos pado inferior, sien, labio superior, mejilla, ala
nerviosos, ya sea en el contexto de lesiones focales de la nariz, dientes de la arcada superior, úvula,
(que incluyan uno o varios nervios) o bien den- amígdalas, bóveda palatina y nasofaringe.
tro de procesos sistémicos más amplios. Si bien 3. Maxilar inferior: recoge la sensibilidad de la arca-
existen 12 nervios craneales, en este capítulo nos da dental inferior, mucosa del suelo de la boca,
ocuparemos, fundamentalmente, de los nervios dos tercios anteriores de la lengua, conducto au-
trigémino, facial y espinal, ya que son los más ditivo externo, pabellón auricular y parte poste-
accesibles a las técnicas electrofisiológicas. Sobre rior de la sien. Se hace extracraneal a través del
otros nervios craneales sólo haremos una breve agujero oval, junto a la rama motora, encargada
reseña, ya que su exploración electrofisiológica se de inervar al músculo masetero, entre otros.
realiza en laboratorios muy especializados, tanto Estas tres ramas sensitivas convergen en el gan-
por la dificultad para acceder a las estructuras a es- glio de Gasser. Desde ahí parte un tronco común en
tudiar como por la necesidad de una técnica muy dirección a la protuberancia, dividiéndose en ramas
depurada, y su descripción se escapa al objetivo de ascendentes y descendentes hasta los núcleos espinal
este manual. Por último, hay que señalar que todo (dolor y temperatura), sensitivo principal (tacto super-
estudio electrodiagnóstico debe estar precedido ficial y discriminativo) y mesencefálico (información
por una completa anamnesis y exploración físi- propioceptiva). Las fibras que llegan a este último nú-
ca, que no deben limitarse al nervio afecto, sino cleo lo hacen directamente, sin hacer sinapsis en el
que deben incluir al resto de nervios craneales y ganglio de Gasser. Desde este núcleo salen eferencias
de las extremidades, con el fin de descartar una hacia el núcleo motor, constituyendo así, la base ana-
extensión más amplia del proceso. tómica del reflejo maseterino. Esta representación
tan extensa a nivel del tronco cerebral hace que el
estudio neurofisiológico de los reflejos mediados por
NERVIO TRIGÉMINO el nervio trigémino aporte gran información.

Anatomía Etiología

El nervio trigémino es un nervio mixto (motor, Los procesos patológicos que afectan al nervio
sensitivo y vegetativo), constituido por 3 ramas: trigémino pueden ser(1):

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272 J. Coll Cantí, R. Álvarez Ramo

– Lesiones periféricas: traumatismo craneofacial, Reflejos troncoencefálicos


enfermedades dentales, cirugía maxilofacial, Los llamados reflejos troncoencefálicos son res-
infecciones, tumores, trombosis del seno ca- puestas fisiológicas obtenidas mediante técnicas de
vernoso, aneurismas carotídeos, toxinas, en- electromiografía, y que son generadas e integradas
fermedades sistémicas (enfermedad mixta del en estructuras del tronco del encéfalo. Estas res-
tejido conectivo, esclerodermia), síndrome de puestas nos aportan información sobre la integri-
Guillain-Barré, diabetes, idiopáticas, etc. dad anatómica y funcional de dichas estructuras,
– Lesiones en el ganglio de Gasser: lo más común así como de las vías aferentes y eferentes que los
suele ser la infección por el virus del herpes desencadenan.
zóster, siendo la rama oftálmica la más frecuen- Aunque existe una gran variedad de reflejos que
temente afectada. pueden registrarse electrofisiológicamente(3), revisa-
– Lesiones centrales: tumores, infartos cerebrales, remos los más utilizados en la práctica clínica.
siringobulbia, esclerosis múltiple. De acuerdo con las vías aferentes y eferentes
implicadas de estos reflejos, los podemos clasificar
Sintomatología clínica en:
– Trigémino-faciales: reflejo de parpadeo (blink-
El paciente suele aquejar hipoestesia facial, reflex).
que puede ser disociada, pues la información de – Trigémino-trigeminales:
la sensibilidad térmica y dolorosa llega a un nú- • Reflejo maseterino.
cleo diferente que la táctil superficial y epicrítica. • Períodos de silencio del masetero o reflejo in-
El reflejo corneal está abolido en la medida en hibitorio maseterino.
que la primera rama del trigémino se encuentra Además del estudio de la integridad anatómica
comprometida. También puede existir debilidad de de los circuitos troncoencefálicos, estos reflejos nos
los músculos masticatorios. El reflejo maseterino, permiten estudiar la excitabilidad de las interneu-
que produce cierre mandibular, tras la percusión ronas que los desencadenan, y que puede verse
lateral del mentón, se ve alterado en caso de lesión alterada en diferentes patologías, incluso sin lesión
de la tercera rama y/o del núcleo mesencefálico estructural evidente(4): curva de excitabilidad del
(bilateral)(2). reflejo de parpadeo.

Estudio electrofisiológico Reflejo de parpadeo (blink reflex)


La primera descripción clínica de la respuesta
La valoración neurofisiológica de este nervio de parpadeo tras golpear en la región supraciliar o
puede realizarse mediante diferentes estudios: elec- glabela la realizó Overend en 1896, mientras que
tromiografía (EMG) y reflejos troncoencefálicos. fue Kugelberg quien llevó a cabo el primer registro
electrofisiológico en 1952.
Estudio electromiográfico El parpadeo es un complejo acto motor en el
A través del registro electromiográfico única- que están implicados diferentes músculos faciales
mente valoraremos la rama motora, integrante del y extraoculares(5). Puede desencadenarse de forma
nervio maxilar inferior. Se examinan preferente- espontánea o bien refleja. Un parpadeo consiste en
mente los músculos temporal y masetero, regis- un cese de la actividad tónica del músculo eleva-
trando la actividad espontánea y voluntaria. En dor del párpado, produciendo un movimiento de
la neuralgia del trigémino, la exploración electro- caída del párpado superior, al mismo tiempo que
miográfica suele ser normal en los casos esenciales. comienza la actividad del músculo orbicular de los
La presencia de mioquimias obliga a descartar la ojos; al final del parpadeo se produce la secuencia
existencia de neoplasias de tronco. inversa. Junto a estos movimientos, los globos ocu-

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Electromiografía de los nervios craneales 273

lares sufren movimientos verticales, horizontales y


de torsión que dependen de la posición inicial de
los mismos(6). El parpadeo es un fenómeno univer-
sal entre las distintas especies de mamíferos; aun-
que puede variar en frecuencia y velocidad entre
las diferentes especies, cualitativamente muestran
un patrón similar(7).
La frecuencia de parpadeo está sometida a una
gran variabilidad fisiológica; es baja en la prime-
ra infancia, incluso menor a 2/min, aumentando
hasta la adolescencia(8); actividades que requieren
fijación visual, como la lectura, producen una
disminución de la frecuencia, mientras que tareas
memorísticas puede aumentarla, e incluso se ve Figura 1. Colocación de electrodos en músculo orbicular de los ojos (activo-
modificada voluntariamente(9). La frecuencia de negro, referencia-gris) y estimulación en nervio supraorbitario (cátodo-
negro, ánodo-gris).
parpadeo también varía en diferentes condiciones
patológicas, convirtiéndose en un signo capital de
determinadas patologías. De este modo, en la enfer- ojos en ambos lados simultáneamente, colocando
medad de Parkinson o en la parálisis supranuclear el electrodo activo en el tercio medio del párpado
progresiva(10) se observa una importante reducción inferior y el de referencia lateralmente (Fig. 1)(3).
de la frecuencia, mientras que en otras enfermeda- De este modo se puede registrar, tanto el parpadeo
des se observa un aumento de la misma, como en desencadenado tras el estímulo eléctrico como el
la enfermedad de Huntington o en la esquizofre- parpadeo espontáneo normal (Fig. 2).
nia(10,11). Todo ello sugiere un importante papel del La descripción pormenorizada de la técnica de
sistema dopaminérgico en el mecanismo y control estimulación y registro de las respuestas, así como
del parpadeo. el análisis de sus diferentes componentes, altera-
El parpadeo también puede obtenerse de forma ciones y significado, son objeto de otro capítulo
refleja (amenaza) o por estimulación eléctrica de de este Manual, por lo que realizaremos solo un
ramas del nervio trigémino, generalmente el nervio breve recordatorio de las alteraciones básicas que
supraorbitario. Aunque en todos los casos el reflejo podemos encontrar. En primer lugar, se valora la
de parpadeo tiene los mismos componentes que respuesta R1; su alteración es indicativa de trastor-
el espontáneo, la duración de los mismos puede nos ipsilaterales del nervio facial y/o trigémino. Es
ser variable, de acuerdo con el mecanismo que lo ahí donde el componente R2 desempeña un papel
desencadena(11,12). fundamental en la localización de la lesión. Así, en
caso de existir trastorno aferente (nervio trigémino),
Exploración neurofisiológica del reflejo de parpadeo se obtiene un retraso o atenuación bilateral de R2 al
Se coloca al paciente en decúbito supino, con estimular el lado afecto, mientras que al estimular
los ojos abiertos o suavemente cerrados. El reflejo el lado sano, R2 es normal. En caso de lesión del
se desencadena por estimulación eléctrica percu- nervio facial (trastorno eferente), independiente-
tánea del nervio supraorbitario en la escotadura su- mente del lado estimulado, siempre se registran
praorbitaria; el cátodo se sitúa sobre la escotadura y valores R2 patológicos en el lado afecto(11).
el ánodo 2 cm por encima y levemente lateral, para El reflejo de parpadeo puede estudiarse en ca-
evitar la estimulación contralateral. La respuesta sos de dolor facial. En la neuralgia del trigémino
es recogida mediante electrodos cutáneos situados esencial, el componente R1 suele ser normal, lo
en la porción inferior del músculo orbicular de los que indica que la conducción a través de la primera

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274 J. Coll Cantí, R. Álvarez Ramo

Figura 2. Parpadeo desencadenado tras estímulo eléctrico en el nervio supraorbitario (A). Parpadeo espontáneo (B).

rama del trigémino es normal. En cambio, cuan-


do la neuralgia es secundaria (tumores, infección,
síndrome paratrigeminal, etc.) existen alteraciones
en R1 ipsilateral y R2 bilateral al estimular el lado
afecto (patrón aferente).

Reflejo maseterino
El reflejo mandibular o maseterino, fue descrito
en 1886 por Watteville. Se desencadena por per-
cusión en la mandíbula mediante un martillo de
reflejos, que dispara el barrido de registro. Las res-
puestas evocadas se registran mediante electrodos
de superficie, colocando el electrodo activo sobre el
vientre del músculo masetero (Fig. 3). La latencia Figura 3. Colocación de los electrodos en el registro del reflejo maseterino y
normal es de 7,6 ms, con un rango entre 6,4 y 9,2 período de silencio. Electrodo activo: negro; electrodo de referencia: gris.
(variable según los laboratorios). Es de gran utilidad
la comparación entre ambos lados, considerándose
patológica una diferencia superior a 0,5 ms y la ipsilaterales a lesiones mesencefálicas, su valor to-
ausencia unilateral. Se trata de un reflejo sujeto a pográfico ha sido cuestionado(12).
gran variabilidad clínica; puede estar ausente en Se trata de un reflejo monosináptico en el que
personas de edad avanzada sin significado patoló- las vías aferente y eferente pertenecen al nervio V
gico, en alteraciones de la posición mandibular, en craneal. El arco aferente está formado por fibras
desdentados y en pacientes con disfunción tempo- sensitivas propioceptivas Aα de la rama mandibu-
romandibular. Aunque se han descrito alteraciones lar del nervio trigémino; alcanzan el núcleo me-

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Electromiografía de los nervios craneales 275

Figura 4. Reflejo maseterino.

sencefálico del trigémino ipsilateral, y desde allí voluntaria; en este caso, se observa la presencia de
establecen una sinapsis con el núcleo motor del un único período de silencio, que correspondería
trigémino ipsilateral. El arco eferente lo forman las al SP1 obtenido eléctricamente (Fig. 5).
neuronas motoras del mismo (Fig. 4). Las fibras aferentes del reflejo entran en la pro-
tuberancia por la raíz sensitiva del nervio trigémi-
Reflejo inhibitorio maseterino no. En el caso del SP1 el arco reflejo se sitúa en la
Descrito en primer lugar por Hoffman y Ton- protuberancia media, mediado por una interneuro-
nies en 1948. Se basa en la existencia del llamado na inhibitoria próxima al núcleo motor trigeminal,
período de silencio electromiográfico, que es el que se proyecta al lado ipsi y contralateral. En el
cese de una contracción sostenida desencadenado caso del SP2 las fibras aferentes descienden por el
por otro estímulo producido durante la misma. tracto trigémino espinal hasta alcanzar interneu-
La colocación de los electrodos es similar a la ronas excitatorias e inhibitorias localizadas en la
descrita para la obtención del reflejo maseterino. sustancia reticular lateral, y se proyectan bilateral-
Al paciente se le solicita que apriete fuertemente mente sobre ambos núcleos motores. El arco reflejo
los dientes en períodos breves, para evitar el can- parece situarse en la unión bulboprotuberancial.
sancio, alrededor de 2-3 s. Durante la contracción Lesiones intrínsecas de los dos tercios inferiores
se aplica un estímulo eléctrico, generalmente de de protuberancia pueden producir alteraciones en
una duración de 0,2 ms y de 20-50 mA de intensi- el período de silencio, incluso sin afectación de
dad a nivel del nervio mentoniano o infraorbitario. otros reflejos con participación trigeminal, como
El reflejo consiste en la aparición de dos períodos se desprende de las diferencias anatómicas de los
consecutivos de silencio eléctrico separados por circuitos que los conforman. Normalmente, la afec-
la reaparición de la actividad motora, ipsilateral y tación de la respuesta SP2 suele localizar la lesión
contralateral al lado estimulado. Estos períodos son a nivel de la unión bulboprotuberancial, mientras
denominados SP1 y SP2, respectivamente. El re- que la afectación de ambas respuestas suele deberse
flejo también puede obtenerse por la percusión de a una lesión más rostral.
la mandíbula, de la misma forma que obtenemos La latencia del SP1 suele oscilar entre 10-15
el reflejo maseterino, pero durante la contracción ms, con una duración total de unos 20 ms. En el

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276 J. Coll Cantí, R. Álvarez Ramo

Figura 5. Período de silencio maseterino mecánico (A) y eléctrico (B).

caso de la respuesta SP2 suele aparecer entre 40 y berancia dorsal ipsilateral, próxima al suelo del IV
50 ms después del estímulo, con una duración en ventrículo. Por otra parte, la alteración de la respuesta
torno a 40 ms. En algunos pacientes puede que R2 ipsilateral se correlaciona con lesiones en la región
no se encuentre la actividad motora intermedia. dorsolateral del bulbo a nivel de la oliva inferior.
Se considera anormal una diferencia de latencia La aplicación de la RM craneal permite hoy un
entre ambos lados superior a 8 ms. estudio clínico más exacto sobre el valor topográfi-
El estudio de estas respuestas también nos ofre- co de las alteraciones de estos reflejos en lesiones
ce información sobre las estructuras anatómicas del tronco de encéfalo.
que conforman el reflejo trigémino-trigeminal. Al
igual que en el reflejo de parpadeo, una lesión del Excitabilidad interneuronal. Curva de habituación del reflejo
nervio trigémino producirá una afectación aferente, de parpadeo
generalmente con un retraso en la respuesta SP1 Además de las lesiones estructurales del arco
bilateralmente a la estimulación del lado afecto. Si reflejo, en el estudio del reflejo de parpadeo pode-
la lesión es suficientemente intensa, podemos obte- mos observar alteraciones en la respuesta debidas
ner ausencia de respuestas SP1 y retraso o ausencia a cambios en la excitabilidad de las interneuronas.
de SP2 bilateral. De la misma forma, también se Estos cambios de excitabilidad podemos estudiarlos
han descrito patrones de afectación cruzada con mediante las llamadas curvas de recuperación del
relación topográfica específica, que permiten el reflejo de parpadeo.
estudio de lesiones troncoencefálicas. El mecanismo de estudio consiste en la aplica-
La mayor parte de las correlaciones anatomo-fun- ción de estímulos pareados separados a determina-
cionales de los reflejos espinales se basan en estudios dos intervalos entre ellos. Las técnicas de coloca-
post morten. Estudios recientes(12,13) han demostrado ción de electrodos y de registro son similares a las
que la afectación de las respuestas R1 y R2 ipsilatera- utilizadas en el reflejo de parpadeo(14).
les, junto con SP1 se correlacionan con lesiones en De las respuestas del reflejo de parpadeo, la
la protuberancia ventral, mientras que la afectación R1 apenas es modificable con estímulos pareados,
exclusiva de R1 y SP1 localiza la lesión en la protu- siendo mucho más sensible la R2. Se produce una

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Electromiografía de los nervios craneales 277

latura facial. Estados de hipoexcitabilidad pueden


verse en otros procesos, como la enfermedad de
Huntington, en la que vemos que las respuestas
R2 pueden estar inhibidas.

NERVIO FACIAL

Anatomía

Es uno de los nervios craneales más complejos


debido a su extensa distribución, a la existencia de
interconexiones con otros nervios craneales y a un
largo y tortuoso trayecto intrapontino e intracra-
neal, que le hace estar más expuesto a la acción
de los agentes externos.
Está constituido por 2 raíces en su origen: la
motora y la vegetativa. La primera se origina en el
núcleo motor del nervio facial en la protuberan-
cia, describe un bucle alrededor del núcleo del VI
nervio y después emerge a través del ángulo ponto-
cerebeloso. La segunda, constituye el nervio inter-
mediario de Wrisberg, que se origina en el núcleo
salival superior y contiene fibras preganglionares
parasimpáticas dirigidas a los ganglios submaxilar
y esfenopalatino. También conduce información
sensorial y sensitiva desde los dos tercios anterio-
Figura 6. Curva de habituación del reflejo de parpadeo normal. Recupe- res de la lengua, mucosa palatina y nasal, piel del
ración de la respuesta R2 y R2c a intervalos de 300 ms. conducto auditivo externo, oído y región mastoidea,
para terminar, finalmente, en el núcleo solitario.
inhibición fisiológica de la respuesta R2 del estí- Una vez fuera del tronco cerebral, las dos ramas pe-
mulo condicionado a intervalos de hasta 100 ms netran en el conducto auditivo interno y continúan
entre ambos estímulos. A medida que aumentamos hacia el canal facial en el peñasco del temporal. En
el intervalo vemos la reaparición de estas respuestas esa localización se engrosa para formar el ganglio
(Fig. 6). Así, podemos obtener una curva o ciclo de geniculado. A continuación se dirige hacia atrás,
recuperación, expresado en porcentaje respecto al abajo y afuera para emerger a través del agujero es-
valor de la respuesta del estímulo condicionante. tilomastoideo. En este trayecto intrapetroso origina
En determinadas condiciones podemos observar importantes ramas, tales como la del músculo del
estados de hiperexcitabilidad del ciclo de recupe- estribo o la cuerda del tímpano.
ración. De esta forma, observamos la presencia de En su trayecto extracraneal se relaciona con
respuestas R2 en el estímulo condicionado a inter- la arteria carótida externa y, sobre todo, con la
valos menores de 100 ms. Una situación de hiper- glándula parótida, donde se divide en sus ramas
excitabilidad puede encontrarse en la enfermedad temporofacial y cérvicofacial. Éstas, a su vez, darán
de Parkinson y en las distonías focales, incluso en origen a las ramas terminales destinadas a inervar
aquellas en que no se encentra afectada la muscu- la musculatura facial.

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278 J. Coll Cantí, R. Álvarez Ramo

Etiología valor de conducción motora, más específicamente


de la latencia y amplitud del potencial evocado
Los procesos patológicos que afectan al nervio motor (PEM).
facial pueden dividirse en: El paciente puede estar sentado o en decúbito
– Centrales (lesión de la primera motoneurora supino. El estímulo debe realizarse en ambos lados,
y de la vía corticonuclear). Las causas más fre- con el fin de establecer un estudio comparativo
cuentes de lesión son los infartos cerebrales, tu- entre el lado sano y el afecto, de tanto o más valor
mores e infecciones. Como resultado, se produ- que la obtención de valores absolutos. Se estimula
ce una parálisis de los músculos de la hemicara con el cátodo por debajo y delante de la punta de la
inferior contralateral, desviación de la comisura mastoides y el ánodo posterior al cátodo. También
hacia el lado sano, con conservación del trofis- se puede estimular en la región preauricular, con el
mo, sin signos de denervación o trastornos de cátodo situado delante del trago. La respuesta será
la conducción en el electromiograma. recogida por electrodos de superficie, colocando el
– Periféricos (lesiones que incluyen el núcleo activo en el vientre muscular del músculo frontal
motor del nervio facial y el trayecto intra y ex- o en el orbicular de los ojos para el estudio del
tracraneal del tronco nervioso): nervio facial superior y en el músculo nasal o en
• Protuberanciales: infartos cerebrales, tumores, el orbicular de la boca para el estudio del facial
esclerosis lateral amiotrófica (ELA), esclerosis inferior, mientras que el referencial se dispondrá
múltiple, siringobulbia, formas congénitas (sín- en igual posición en el lado contralateral. La tierra
drome de Moebius). se coloca en la barbilla.
• Ángulo pontocerebeloso: tumores (como el neu- Antes de proceder al estudio del nervio lesiona-
rinoma del acústico). do examinaremos el normal, para compararlo con
• Base del cráneo: cáncer de cavum y linfomas, el patológico, cuidando de que la distancia entre
tumores del glomus carotídeo. el punto de estímulo y el de recogida sea igual en
• Porción intrapetrosa del temporal: fracturas del ambos lados. Podemos valorar la excitabilidad del
peñasco, otitis aguda, tumores intrapetrosos, nervio, esto es, la mínima cantidad de estímulo
infecciones herpéticas del ganglio geniculado, necesaria para producir una respuesta visible (con-
parálisis idiopática de Bell. tracción) en los músculos faciales. Según diversos
• Trayecto extracraneal: tumores e infecciones estudios, en condiciones normales ésta varía entre
parotídeas, síndrome de Guillain-Barré, sar- 3 y 8 mA, con una duración del estímulo de 0,5-1
coidosis, diabetes, porfirias, infecciones. ms. Una diferencia entre ambos lados de 2,5 a 3
mA se considera como clínicamente significativa.
Estudio electrofisiológico Debemos puntualizar que esta prueba es valorable
a partir de los cuatro a siete días de producida la
El estudio electrofisiológico reviste gran impor- lesión, porque antes de ese tiempo la excitabilidad
tancia diagnóstica y pronóstica. Aunque la estimula- distal está preservada, afectándose progresivamente
ción del nervio se realiza a nivel periférico (esto es, en caso de sección completa del nervio. En resumi-
después de su salida por el agujero estilomastoideo), das cuentas, una respuesta normal después de una
otras pruebas, como el reflejo de parpadeo o el pro- semana se considera signo de buen pronóstico(15).
pio estudio electromiográfico proveen información Sin embargo, no constituye un método para valorar
de su integridad a nivel más proximal. cuantitativamente el grado de daño axonal, porque
al ser un estímulo submaximal sólo se excitan una
Estudio electroneuromiográfico pequeña parte de las fibras. Esto quiere decir que,
Al no existir fibras sensitivas cutáneas hay que li- aun existiendo pérdida de axones, puede existir
mitarse al estudio de la excitabilidad del nervio y su respuesta a costa de las fibras supervivientes.

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Electromiografía de los nervios craneales 279

Al contrario que la excitabilidad, el PEM se – La existencia de actividad espontánea (fibrila-


obtiene tras la estimulación supramaximal del ciones y ondas positivas) indica denervación
nervio. La amplitud del PEM es un buen reflejo activa, lo que conlleva un cierto grado de afec-
del número de axones funcionantes, que permite tación axonal y, por consiguiente, un mayor
cuantificar el daño axonal sufrido por el nervio, tiempo de convalecencia, planteando dudas
factor fundamental a la hora de emitir un pronós- sobre una recuperación completa.
tico en las dos primeras semanas tras la lesión. Si – La presencia de signos sugestivos de reinerva-
bien la amplitud mínima en nervios normales es ción (potenciales de unidad motora [PUM] na-
de 0,5-1 mV, la comparación del lado afecto en cientes y otros de mayor amplitud y duración)
relación con el sano es un método más sensible de es signo de recuperación en curso.
evaluación que el valor absoluto en uno de ellos. – La existencia de reinervación aberrante (sincine-
Así, una amplitud inferior al 50% en relación con sias) se puede demostrar. Ésta provoca la contrac-
el nervio intacto sugiere degeneración distal y, por ción involuntaria de un músculo facial al contraer
consiguiente, un peor pronóstico. otro de forma voluntaria, por ejemplo, la contrac-
Por otra parte, la latencia de inicio del potencial ción de la comisura bucal al tiempo que se cierran
es indicativa de la conducción distal de las fibras los párpados. Este fenómeno es más frecuente tras
más rápidas. Los valores normales registrando en el la parálisis de Bell. Existen varias hipótesis para ex-
músculo orbicular de la boca oscilan en torno a 4 ± plicar el mecanismo de este proceso, siendo la más
0,5 ms. Sin embargo, esta determinación tiene sus aceptada la ruptura de los “canales” endoneurales,
limitaciones; suele estar prolongada en pacientes lo que eliminaría una “guía” para las nuevas fibras
diabéticos, enfermos renales o afectados por algún regeneradas, que “tomarían” un camino diferente,
tipo de polineuropatía. Además, no es una variable reinervando, finalmente, otro músculo diferente
útil en las lesiones proximales (parálisis de Bell) e al dependiente de la rama afecta. Otra hipótesis se
incluso en los casos de degeneración axonal impor- basa en la existencia de una conducción efáptica
tantes, pues la latencia puede permanecer normal (transmisión de impulsos entre fibras vecinas sin
o levemente prolongada, por preservación de los mediar sinapsis) entre fibras nerviosas dañadas en
axones supervivientes (en estos casos la amplitud el mismo nervio(16-18).
del PEM es un valor más útil)(15). En resumen, el estudio electrodiagnóstico en
Es importante indicar que una estimulación de- los casos de parálisis facial en las que se considera
masiado intensa puede activar el músculo masetero necesario, debe iniciarse tan pronto como la sin-
(dependiente del nervio trigémino), por el efecto del tomatología comience a establecerse. De esta ma-
volumen de conducción. De este modo, al contraerse nera, si bien la excitabilidad distal está preservada
puede conducir a un registro erróneo de la amplitud en los primeros cuatro a siete días y los signos de
del PEM. Por tanto, debe aplicarse un estímulo lo su- afectación axonal (denervación) no se hacen paten-
ficientemente intenso para obtener un PEM sin llegar tes hasta las tres semanas, podremos establecer un
a provocar la contracción del músculo masetero. estudio cronológico comparativo de la evolución
Finalmente, realizaremos el estudio electromio- del proceso. Es preciso recordar que en las primeras
gráfico de los músculos dependientes del nervio fases del proceso es imposible diferenciar axonot-
facial, siendo los más utilizados el orbicular de los mesis de un bloqueo de la conducción, cuestión
ojos, de la boca y el frontal. que la evolución del cuadro esclarecerá. Haciendo
La importancia del estudio EMG radica en uso de una serie de variables (excitabilidad distal
que: del nervio, latencia y amplitud del PEM y estudio
– La presencia de actividad voluntaria implica un electromiográfico), podremos emitir un juicio pro-
mejor pronóstico, ya que habla de cierto grado nóstico del proceso, sin duda la razón principal del
de integridad axonal. estudio neurofisiológico en esta patología.

Manual EMG.indb 279 9/7/07 12:07:04


280 J. Coll Cantí, R. Álvarez Ramo

Reflejo de parpadeo de 200-400/s, al principio rítmicas, para hacerse


finalmente continuas. El reflejo de parpadeo no
Parálisis de Bell registra sincinesias. No existe paresia facial residual
Mediante esta prueba podemos estudiar el nervio y la situación clínica persiste durante el sueño, si
en toda su extensión, incluido su segmento proximal. bien disminuida en intensidad.
Suele existir un retraso o ausencia de R1 y R2 ipsila-
terales a la lesión en las primeras semanas. Este dato, Polineuropatías
sumado al estudio de la excitabilidad distal del nervio Si bien no suele realizarse esta técnica, señala-
pasados 7-10 días de la lesión, nos puede ayudar a rea- remos que existe una prolongación de la latencia de
lizar un primer pronóstico del cuadro. Así, en caso de R1 en las neuropatías desmielinizantes (síndrome
retraso o ausencia de R1, pero con excitabilidad distal de Guillain-Barré, polineuropatía desmielinizante
conservada, la recuperación, generalmente, se pro- crónica idiopática y neuropatía hereditaria sensiti-
duce a los pocos meses y es indicativo de un proceso vo-motora tipo I o hipertrófica). Existe también una
desmielinizante focal, responsable de un bloqueo de leve prolongación de R1 en la neuropatía diabética.
la conducción. En caso contrario, el obtener una res- Sin embargo, la respuesta R1 es normal en el sín-
puesta disminuida o ausente tras estimulación directa drome de Miller Fisher y la neuropatía hereditaria
del nervio facial y sin recuperación de la respuesta sensitivo-motora tipo II(22).
refleja en la 2ª semana, es sugestivo de degeneración
axonal, ensombreciendo el pronóstico(19). Reflejo del músculo estapedio
En el oído medio hay dos músculos: el tensor
Sincinesias del tímpano, que está unido al martillo y mantiene
En condiciones normales, la respuesta refleja el tímpano tenso y el músculo estapedio, que está
del reflejo de parpadeo sólo se obtiene en el múscu- unido al estribo y estabiliza la conexión entre el
lo orbicular de los ojos y, muy raramente, en otros estribo y la ventana oval. En respuesta al ruido in-
músculos faciales. Sin embargo, en el proceso de re- tenso, el músculo estapedio se contrae, dando más
generación, tras una lesión axonal las fibras pueden rigidez a los huesecillos para que el sonido trans-
“equivocar” el camino y reinervar otros músculos. mitido sea menos fuerte. Esta respuesta, llamada
De este modo, con la estimulación ipsilateral del reflejo acústico, ayuda a proteger al delicado oído
nervio supraorbitario evocamos las respuestas R1 y medio del daño que le puede provocar el ruido. El
R2 no sólo en el músculo orbicular de los ojos, sino músculo estapedio está inervado por una rama del
también en el músculo objeto de la reinervación nervio facial, del cual se separa antes de la cuer-
aberrante (como en el músculo orbicular de la boca da del tímpano. El cambio de tensión ocasionada
o el músculo cutáneo del cuello)(20,21). en la cadena de huesecillos cambia la tensión de
la membrana timpánica, lo que se traduce en un
Espasmo hemifacial esencial cambio en la impedancia del tímpano.
Es un síndrome caracterizado por contracciones Se coloca al paciente sentado, en posición rela-
paroxísticas, tónico-clónicas, involuntarias y espon- jada y en ambiente silencioso. Se estimula median-
táneas, de uno o varios músculos inervados por te un auricular colocado en el oído contralateral
el nervio facial. También pueden desencadenarse al registro. Se utilizan estímulos sonoros de 200-
por movimientos voluntarios y bajo condiciones de 500 ms de duración (separados por un intervalo
tensión emocional. Suelen tener una duración de de silencio de la misma duración) y 70 a 100 dB
10-20 s, separados por fases silentes. El electromio- por encima del umbral auditivo y en trenes de es-
grama intercrítico es silente (no se registra actividad tímulos de 3 s o más.
espontánea). En la fase crítica se producen descar- En el oído que se va testar se coloca un sensor,
gas síncronas de PUM a una frecuencia de disparo generalmente de plástico, ajustado al conducto

Manual EMG.indb 280 9/7/07 12:07:04


Electromiografía de los nervios craneales 281

auditivo externo, que registra los cambios de im- vecinos (supraespinoso, infraespinoso o deltoides),
pedancia timpánica en un timpanómetro. con el fin de descartar una neuralgia amiotrófica o
En la miastenia gravis se han descrito decre- síndrome Parsonage-Turner. Las lesiones nucleares
mentos en la impedancia timpánica en el 84% de del nervio espinal incluyen la ELA, la siringomielia
los pacientes(23). Algunos autores utilizan dicho y los tumores intramedulares(1).
reflejo como pronóstico para la parálisis facial de
Bell. La persistencia de dicho reflejo en la primera Sintomatología clínica
semana confiere un buen pronóstico.
La lesión del nervio espinal se traduce en la
parálisis de los músculos esternocleiodomastoideo
NERVIO ESPINAL y trapecio. Por afectación del primero se produce
debilidad en la rotación del cuello hacia el lado
Anatomía opuesto al explorado, y puede demostrarse la exis-
tencia de atrofia muscular. En las parálisis bilatera-
El nervio espinal o accesorio es un nervio pu- les existe déficit en la flexión de la cabeza.
ramente motor, constituido por dos ramas: una La parálisis del músculo trapecio da lugar a es-
bulbar, originada en la porción caudal del núcleo cápula alada, que se acentúa con la abducción del
ambiguo y otra medular, que nace de las astas brazo (que está limitada por encima de los 90º) y
anteriores de los primeros cinco segmentos de la disminuye con la anteposición del mismo. Puede
médula cervical. Asciende por el canal espinal y observarse atrofia muscular con descenso del hom-
penetra en la cavidad craneal a través del agujero bro ipsilateral en reposo(2).
magno. Ambas raíces se reúnen a nivel intracra-
neal, saliendo por el agujero rasgado posterior Estudio electrofisiológico
como un tronco común. Poco después vuelven
a separarse y la rama interna se une al ganglio Se coloca el electrodo activo sobre la superficie
plexiforme del nervio X craneal, por lo que real- del trapecio en su mitad superior, en el ángulo que
mente formará parte de este nervio, mientras que forman el cuello y el hombro, y el electrodo de
la rama externa (auténtico nervio espinal) se dirige referencia sobre el tendón, cerca del acromion, a
hacia abajo, relacionándose con el paquete vascu- unos 3 cm del electrodo activo. La tierra se dispo-
lar cervical (arteria carótida y vena yugular inter- ne entre los electrodos de estimulación y registro.
nas). Termina finalmente inervando a los músculos La estimulación se realiza en el punto medio de
esternocleidomastoideo y trapecio. una línea trazada entre la mastoides y la escotadu-
ra supraesternal, siguiendo el borde posterior del
Etiología músculo esternocleidomastoideo.
Las latencias obtenidas varían (según estudios)
Son raras las lesiones aisladas del nervio en su entre 1,8 y 3 ms, aunque quizás el método más
porción intracraneal; en ese segmento se suele aso- fiable sea la comparación de los valores absolutos
ciar a afectación simultánea de los nervios IX y X. con el lado sano. Variaciones en la amplitud de más
En su porción extracraneal puede ser lesionado, del 50% son sugestivas de degeneración distal. La
tanto por agentes externos (traumatismo, cirugía, exploración electromiográfica del músculo trapecio
radiación) como internos (adenopatías y tumores (y menos frecuentemente de músculo esternoclei-
cervicales, disección arterial). También se han des- domastoideo), nos permite valorar las características
crito monoparesias sin etiología identificable, de de los PUM y la presencia de signos de denervación
buen pronóstico; en estos casos es aconsejable cer- activa y/o crónica, que reflejan el grado de daño
ciorarse de la posible afectación de otros músculos axonal del nervio(16,17).

Manual EMG.indb 281 9/7/07 12:07:05


282 J. Coll Cantí, R. Álvarez Ramo

NERVIOS OCULOMOTORES dores del paladar y laríngeos. Recoge información


sensitiva de la faringe inferior, mucosa laríngea y
Los nervios craneales III, IV y VI sólo pueden epiglotis. Ya en regiones más distales emite ramas
ser estudiados de forma indirecta mediante el exa- destinadas a formar parte de los plexos vegetativos
men electromiográfico de los músculos inervados de las vísceras torácicas y abdominales.
por ellos, dada su inaccesibilidad. Sin embargo,
existen algunos problemas particulares. Así, los po- Etiología
tenciales de unidad motora suelen ser polifásicos y
de una amplitud y duración inferiores a los múscu- Los procesos patológicos que afectan al nervio
los de las extremidades (debido al menor diámetro vago son(1):
y ratio de inervación de las fibras musculares), lo – Lesiones nucleares: síndrome de Wallenberg,
que, sumado a la actividad tónica muscular presen- ELA, siringobulbia, encefalitis, etc.
te en la posición primaria de la mirada, hace difícil – Lesiones supranucleares: infartos cerebrales.
la identificación de la actividad espontánea. – Lesiones infranucleares (desde el núcleo hasta
El segundo paso es la detección de actividad vo- su salida por el agujero rasgado posterior): tumo-
luntaria, que se puede registrar incluso en casos de pa- res del glomus yugular, disección de la arteria
rálisis severas, siendo raro el silencio eléctrico total. carótida interna, síndrome de Guillain-Barré.
Además, existe una serie de problemas técnicos Suele acompañarse de afectación añadida de
para la realización del estudio. La aguja, que debe los nervios IX y XI.
ser de un diámetro especial, se insertará a través de la – Lesiones periféricas: linfomas malignos, car-
piel del párpado, tras la aplicación de un anestésico cinomas bronquiales, esofágicos y/o tiroideos,
tópico (nunca se recurrirá a la anestesia general, pues aneurismas aórticos, idiopáticas.
se necesita la cooperación voluntaria del paciente). El
músculo más fácilmente accesible suele ser el obli- Sintomatología clínica
cuo inferior. Entre las complicaciones más frecuentes
figuran las equimosis conjuntivales, las hemorragias La lesión del nervio vago provoca(2):
subcapsulares y las queratitis de exposición. – Disfagia: por afectación del músculo constrictor
Todo ello hace que este tipo de estudios deba superior de la faringe.
ser realizado por personal muy especializado y en – Inhibición del reflejo nauseoso: el nervio vago
casos específicos. constituye el ramo eferente del reflejo. En este
caso, la lesión se localiza por encima del gan-
glio plexiforme.
NERVIO VAGO – Disfonía (voz bitonal): es secundaria a la lesión
de los nervios recurrente y laríngeo superior.
Anatomía Para realizar el diagnóstico es necesario el es-
tudio laringoscópico, con el fin de visualizar
El nervio vago o neumogástrico es un nervio la posición de las cuerdas vocales. En el caso
mixto (motor, sensitivo y vegetativo). Tiene su ori- de una lesión aislada del nervio recurrente, la
gen en las neuronas pertenecientes a tres núcleos cuerda vocal ipsilateral se localizará cerca de
diferentes: ambiguo, solitario y dorsal del vago. Sale la línea media. Si el nervio dañado es el nervio
del bulbo en forma de 8-9 raicillas que convergen laríngeo superior se observarán unas cuerdas
para formar un solo tronco nervioso. Abandona el vocales “flotantes”. La lesión unilateral puede
cráneo junto a los nervios IX y XI a través del agu- pasar clínicamente desapercibida, debido a la
jero rasgado posterior. Desde él se originan fibras compensación que ejerce la musculatura con-
motoras destinadas a los músculos faríngeos, eleva- tralateral.

Manual EMG.indb 282 9/7/07 12:07:05


Electromiografía de los nervios craneales 283

Estudio electrofisiológico – Lesiones supranucleares (corteza y haz corticonu-


clear): fundamentalmente infartos cerebrales.
Sólo se realiza en laboratorios muy especializa- – Lesiones nucleares: infartos cerebrales, tumores
dos, dada la dificultad de acceso a las estructuras intramedulares, poliomielitis, ELA, siringobul-
a estudiar y los problemas de interpretación. Es bia, etc.
preciso contar con la ayuda de un otorrinolarin- – Lesiones periféricas: tumores, cirugía y radia-
gólogo. Ya que las estructuras nerviosas son prácti- ción cervicales, disección carotídea. La causa
camente inaccesibles, hay que recurrir al estudio más frecuente de parálisis aislada del nervio
electromiográfico de los músculos laríngeos para hipogloso surge como complicación posten-
valorar posibles daños neurógenos. En el caso del darterectomía carotídea, aunque suele tener
nervio laríngeo superior se evalúa el músculo cri- carácter transitorio. Debido a la vecindad de
cotiroideo. La valoración del nervio recurrente se otros nervios craneales, es frecuente la lesión
realiza mediante estudio electromiográfico del mús- combinada de varios de ellos.
culo tiroaritenoideo, que es el más accesible. En
ambos casos es importante valorar la presencia de Sintomatología clínica
actividad espontánea, aunque lo es más el hecho de
que exista actividad voluntaria, indicativo de lesión En las parálisis centrales, suele acompañar a
incompleta y, por tanto, de un mejor pronóstico. un cuadro hemipléjico, con escasa repercusión so-
Esta evaluación electromiográfica puede realizarse bre la movilidad lingual debido al control cortical
en el momento de la lesión aguda y a los 6 meses bilateral.
de la misma, tiempo suficiente para que se haya En las parálisis nucleares y/o tronculares unilate-
instaurado cierto grado de reinervación(16,17). rales existe una leve desviación de la lengua hacia el
lado sano en reposo. Cuando se solicita al paciente
que protruya la lengua, ésta se desvía hacia el lado
NERVIO HIPOGLOSO afectado. En algunos casos en la hemilengua paré-
tica pueden observarse fasciculaciones o una super-
Anatomía ficie surcada por depresiones (lengua geográfica),
traducción de la atrofia muscular subyacente(2).
Es un nervio motor puro. Se origina en el bulbo
raquídeo a partir de una columna celular situada Estudio electrofisiológico
en el suelo del IV ventrículo que, caudalmente, se
continúa con el asta anterior de la médula. Mediante El estudio de los valores de conducción no se
10 a 12 raicillas sale a través del surco preolivar bul- realiza de rutina. Algunos autores determinan los
bar, agrupándose en dos troncos nerviosos, que se valores de conducción mediante un dispositivo que
fusionan a nivel del agujero condíleo anterior, desde contiene en una misma pieza, tanto el electrodo
donde sale del cráneo. En su trayecto extracraneal activo de registro como el referencial, y que se dis-
se relaciona con la arteria carótida y la vena yugular pone en el dorso de la lengua. El nervio es estimu-
interna. En ese punto emite una rama descenden- lado en la rama inferior de la mandíbula.
te que se anastomosa con la rama descendente del El estudio EMG de la musculatura dependien-
plexo cervical, constituyendo el asa del hipogloso. te es de mayor utilidad. La técnica más utilizada
consiste en solicitar al paciente que protruya la
Etiología lengua; el examinador deberá sujetarla con una
gasa para insertar la aguja concéntrica en el lateral
Los procesos patológicos que afectan al nervio de la misma; a continuación, se pedirá al pacien-
hipogloso son(1): te que vuelva a colocarla en su posición original,

Manual EMG.indb 283 9/7/07 12:07:05


284 J. Coll Cantí, R. Álvarez Ramo

manteniéndose lo más relajado posible. Para cer- 11. VanderWerf F, Brassinga P, Reits D, Aramideh M, Onger-
boer de Visser B. Eyelid movements: behavioral studies of
ciorarnos de su correcta colocación solicitaremos
blinking in humans under different stimulus conditions. J
al paciente que saque la lengua, obteniendo de Neurophysiol 2003; 89: 2784-96.
esta manera PUM. También se debe reparar en la 12. Cruccu G, Iannetti GD, Marx JJ, Thoemke F, Truini A,
existencia de actividad espontánea (fibrilaciones, Fitzek S, et al. Brainstem reflex circuits revisited. Brain
ondas positivas, fasciculaciones, mioquimias), que 2005; 128: 386-94.
indicarán de forma indirecta el grado de afectación 13. Valls-Solé J, Vila N, Obach V, Álvarez R, González LE, Cha-
morro A. Brain stem reflexes in patients with Wallenberg’s
neuronal y axonal(15). syndrome: correlation with clinical and magnetic resonance
imaging (MRI) findings. Muscle Nerve 1996; 19: 1093-9.
14. Kimura J. Blink reflex in facial dyskinesia. En: Jankovic J,
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cularis oculi reflex to paired stimuli. Brain 1973; 96: 87-96. phia: FA Davis Pub; 1998.
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Manual EMG.indb 284 9/7/07 12:07:06


Capítulo 21

MONONEUROPATÍAS AGUDAS
E. Gutiérrez-Rivas, G. Gutiérrez-Gutiérrez

INTRODUCCIÓN forma breve e intensa; un ejemplo característico es


la parálisis del sábado noche, en donde se produce
Se denominan neuropatías agudas a las que una compresión del nervio radial contra el canal de
se presentan en un breve período de tiempo, torsión del húmero durante unas pocas horas. Si la
bruscamente o en el transcurso de pocas horas, fuerza física actúa contra el nervio de forma lenta
pero siempre en menos de una semana. Las mo- y repetida se produce una neuropatía traumática
noneuropatías de presentación aguda afectan a crónica o neuropatía por atrapamiento, en la que
un solo tronco nervioso, y la lesión o disfunción resulta difícil establecer con precisión el momento
se localiza en un determinado punto del nervio de la lesión. El síndrome del túnel del carpo es un
periférico. ejemplo típico.
Las mononeuropatías son, en su mayoría, de Las neuropatías traumáticas agudas son muy
origen traumático; existen, sin embargo, otras cau- frecuentes en accidentes laborales, domésticos, de-
sas de lesiones nerviosas agudas, como las de origen portivos, de tráfico, casuales, etc. Por el contrario,
isquémico, en las que se produce un infarto del las neuropatías traumáticas crónicas se producen
nervio; la lesión aguda del tercer nervio craneal en habitualmente en enfermedades relacionadas con
la diabetes mellitus o las mononeuritis asociadas a el trabajo, por movimientos repetidos, posturas
distintos tipos de vasculitis, son buenos ejemplos. mantenidas, etc.
En este capítulo se estudian las neuropatías Para el estudio de una lesión aguda o crónica de
agudas traumáticas, como ejemplo de neuropatías un nervio periférico, y para su adecuada evaluación
agudas no sólo porque son las más frecuentes, sino diagnóstica y pronóstica, deben tenerse en cuenta
también por lo que nos han enseñado sobre los cuatro aspectos importantes(1):
procesos de denervación y reinervación. • El nervio afecto.
Una neuropatía traumática es la lesión o disfun- • El nivel de la lesión.
ción de un tronco nervioso secundaria a la acción • El grado de la lesión.
de una fuerza física que actúa contra el nervio. • La cronología de la lesión.
Por su forma de presentación debemos distinguir
dos tipos:
1. Neuropatías traumáticas agudas. DIAGNÓSTICO DEL NERVIO AFECTO Y DEL NIVEL DE LA
2. Neuropatías traumáticas crónicas. LESIÓN
En las neuropatías traumáticas agudas, la lesión
se produce en un momento bien definido, porque Aunque cualquier nervio puede dañarse a
la fuerza física que actúa contra el nervio lo hace de consecuencia de un traumatismo, algunos, por

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286 E. Gutiérrez-Rivas, G. Gutiérrez-Gutiérrez

TABLA I. Lugares de lesión más frecuentes en lesiones traumáticas DIAGNÓSTICO DEL GRADO DE LA LESIÓN
de los nervios de las extremidades
Nervio axilar: Articulación escápulo-humeral Para establecer el grado de lesión de una neuro-
patía traumática resultan imprescindibles los estu-
Nervio radial: Axila
dios eléctricos que, además, permiten confirmar qué
Canal de torsión
nervio está afectado y cuál es el nivel de la lesión.
Tercio distal del brazo
Las lesiones de los nervios producen en los es-
Supracondíleo
tudios eléctricos alteraciones de tres tipos(4):
Arcada de Frohse
1. Disminución de las velocidades motoras y sen-
Tercio distal del antebrazo
sitivas.
Nervio cubital: Tercio medio del brazo 2. Alteraciones en las respuestas tardías.
Canal epitrócleo-olecraniano 3. Anomalías en el electromiograma.
Tercio medio del antebrazo La velocidad de conducción motora está reduci-
Tercio distal del antebrazo da (o no se obtiene) en un nervio lesionado. En las
Hueso pisiforme (canal de Guyon) neuropatías traumáticas agudas, la alteración de la
Nervio mediano: Tercio medio del brazo velocidad de conducción motora se localiza en el
Codo nivel de la lesión, aunque más tarde puede afectar
Tercio distal del antebrazo a porciones más distales del nervio, pero nunca
Canal del carpo hay disminución de la velocidad en los trayectos
Nervio ciático: Escotadura ciática proximales al punto de lesión.
Hueco poplíteo La velocidad de conducción sensitiva disminuye
Nervio peroneo: Cabeza del peroné
en un nervio lesionado; sin embargo, no es un buen
indicador del nivel de la lesión; no obstante, es de
Nervio tibial: Maléolo interno (canal del tarso)
valor localizador en lesiones intradurales de las
raíces sensitivas, ya que en estos casos la velocidad
de conducción sensitiva es normal, coincidiendo
su localización, se lesionan más frecuentemente con un trastorno grave e intenso de la sensibilidad
(Tabla I). (generalmente anestesia). Esto se debe a que la
Los síntomas y signos secundarios a la lesión velocidad de conducción sensitiva permite evaluar
de un nervio tienen una distribución topográfica las fibras sensitivas desde el lugar del estímulo en
característica, de tal forma que el nervio lesionado la piel, hasta las neuronas sensitivas del ganglio ra-
y el nivel de la lesión pueden determinarse por una quídeo; si la lesión es proximal al ganglio, es decir,
cuidadosa exploración clínica. Una lesión nerviosa intradural, la velocidad está conservada, a pesar del
produce: intenso trastorno de la sensibilidad.
– Debilidad. Las respuestas tardías (reflejo H y onda F) per-
– Atrofia muscular. miten evaluar las raíces y las porciones proximales
– Trastornos de la sensibilidad. de los nervios. Desgraciadamente, no pueden es-
– Alteraciones vegetativas o tróficas cutáneas. tudiarse en todos los nervios ni en todos los niveles
– Anomalías en los reflejos musculares. metaméricos y, por lo tanto, tienen un uso muy
– Cambios en el estudio electrofisiológico. limitado en las neuropatías traumáticas. Son de
Salvo las alteraciones eléctricas, que se obtie- utilidad, sin embargo, en lesiones proximales de
nen del estudio neurofisiológico, los demás signos los nervios y de los plexos, cuando no es posible
y síntomas requieren únicamente de una explora- estimular proximalmente al nivel de la lesión.
ción clínica y de conocimientos anatómicos pre- La electromiografía de aguja permite caracteri-
cisos(2,3). zar si la lesión de un nervio o de una raíz ha afec-

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Mononeuropatías agudas 287

A B

7 mm
7 mm

50 μ V 50 μ V
10 ms 10 ms

Figura 1. A: fibrilaciones; B: ondas positivas.

tado a los axones o es exclusivamente mielínica. evocarse un potencial motor si se estimula el nervio
Cuando los axones están lesionados y disminuye por encima del nivel lesional.
o se interrumpe el transporte axonal, se detectan La electromiografía de aguja no es muy útil
en los músculos denervados, al cabo de unas tres para cuantificar la actividad muscular residual,
semanas de la lesión, potenciales eléctricos carac- ya que la aguja evalúa un pequeño volumen del
terísticos (Fig. 1), como fibrilaciones, ondas lentas músculo que se explora, pero sí es de gran ayuda
positivas, fasciculaciones, etc. Además, el estudio para comprobar si existe regeneración del nervio a
electromiográfico permite saber si la lesión nerviosa través de la lesión. Cuando, tras una degeneración
es completa o parcial. En una lesión completa no walleriana se produce una regeneración nerviosa
queda actividad voluntaria alguna en el músculo y los axones regenerados alcanzan el músculo de-
satélite y no se evoca el potencial motor al estimular nervado, se observan en el electromiograma unos
por encima de la lesión. En una lesión incompleta potenciales eléctricos característicos, denomina-
queda actividad voluntaria en el músculo y puede dos potenciales reinervativos (Fig. 2A), que son de

A B C

200 μ V 200 μ V 1mV


10 ms 10 ms 10 ms

Figura 2. Potenciales reinervativos: A: potenciales nacientes; B: potenciales reinervativos en evolución; C: potenciales reinervativos más crónicos.

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288 E. Gutiérrez-Rivas, G. Gutiérrez-Gutiérrez

baja amplitud, duración normal o algo alargada, El mecanismo más frecuente de producción de
y morfología extraordinariamente polifásica, con una neuroapraxia es la compresión externa, como
muchas puntas. Con el tiempo, estos potenciales ocurre en la parálisis del sábado noche.
pequeños van aumentando de amplitud, conser-
vando su morfología polifásica (Fig. 2B), y pue- Electromiografía
den llegar a convertirse en potenciales gigantes, de La actividad eléctrica de los músculos proxima-
amplitud muy aumentada y morfología polifásica les a la lesión es normal. En los músculos distales
(Fig. 2C). Estos potenciales permiten saber si una no hay actividad voluntaria, ni existen potenciales
lesión nerviosa es reciente (cuando existe actividad de reposo u otros signos de denervación. Cuando se
de reposo abundante), si está evolucionando (si recupera la actividad voluntaria, a las pocas sema-
existen potenciales reinervativos) o si se trata de nas de la lesión, el patrón eléctrico de los músculos
una secuela (con potenciales denervativos anti- afectos es normal.
guos o crónicos, con aumento de la amplitud y
la duración). Electroneurografía
Se produce un bloqueo de la conducción ner-
Grados de lesión de un nervio viosa, tanto motora como sensitiva, en el nivel de
la lesión; este bloqueo se establece en unos pocos
Aunque existen diferentes clasificaciones de los días tras producirse la lesión. Si se estimula por
grados de lesiones nerviosas, seguiremos la clasi- encima de la lesión, no se evoca ningún potencial
ficación de Seddon, que diferencia tres tipos de motor en músculos distales (Fig. 3). Tras la recupe-
lesión nerviosa: ración clínica, los hallazgos de las velocidades de
– Neuroapraxia. conducción nerviosa, tanto motora como sensitiva,
– Axonotmesis. son normales o puede haber una leve prolongación
– Neurotmesis. de las latencias.

Neuroapraxia Axonotmesis
Su nombre proviene del griego neuro (nervio) La palabra deriva del griego axon (axón) y tmesis
y apraxia (falta de función). (corte).
Se desconoce en detalle la lesión microscópica, Aunque existe una continuidad anatómica del
aunque se supone que existe una desmielinización nervio, se produce una sección de los axones.
focal, pero en el nervio se produce un bloqueo de A partir del punto de la lesión el axón dege-
la conducción nerviosa, tanto voluntaria como pro- nera distalmente (degeneración walleriana) y se
vocada eléctricamente, en el lugar de la lesión. producen fenómenos denervativos en los músculos
Clínicamente se produce un defecto funcional distales, con cambios histológicos (Fig. 4), como
motor y sensitivo (muy rara vez autonómico) dis- atrofia de fibras, reagrupamiento de tipos de fibras
talmente al nivel de la lesión, con parálisis, hipo- y, más tarde, inversión de la actividad enzimática
anestesia y pérdida de los reflejos musculares. Las oxidativa. En el lugar de la lesión se produce una
amiotrofias son excepcionales. reacción inflamatoria, seguida de los fenómenos
La recuperación suele ser completa, sin secue- de regeneración walleriana estudiados por Ramón
las, y se produce en el transcurso de tres a ocho y Cajal(7-9). Los axones tienen tendencia a crecer
semanas, de forma anárquica, no secuencial, a desde el lugar de la lesión, con una velocidad de 1
diferencia de lo que se observa en los otros grados a 3 mm al día, hasta alcanzar los músculos dener-
de lesión(1,6). vados. Esta reinervación puede ser más o menos
En los músculos afectos no se encuentran sig- completa, dependiendo de la edad del paciente
nos histológicos de denervación. y de otros muchos factores metabólicos, no todos

Manual EMG.indb 288 9/7/07 12:07:07


Mononeuropatías agudas 289

Figura 3. Esquema de alteraciones en la neuroapraxia.

completa. Con frecuencia, sin embargo, que-


da preservada una cantidad variable de axones,
en cuyo caso se habla de axonotmesis parcial o
incompleta.
Clínicamente se encuentra, distalmente a la
lesión, una parálisis muscular completa o incom-
pleta (según se trate de una axonotmesis completa
o incompleta), con amiotrofia, que comienza a las
tres o cuatro semanas de producirse la lesión, así
como un defecto sensitivo y, con frecuencia, alte-
raciones autonómicas.
En su proceso regenerativo, los axones reiner-
van antes los músculos más proximales a la lesión y
más tarde los más distales, de forma secuencial. Las
Figura 4. Músculo con grupos de fibras atróficas, con estructura normal,
secuelas, en grado variable, suelen ser la regla.
característicos de la atrofia por denervación. Hematoxilina-eosina (cortesía
de la Dra. A. Cabello). La axonotmesis completa o incompleta se sue-
le producir por mecanismos de elongación de los
troncos nerviosos. Este grado de lesión es, además,
el más frecuente en las neuropatías traumáticas
bien conocidos (situación funcional de los vasa crónicas por atrapamiento.
nervorum, coexistencia de diabetes o tóxicos pre-
vios, etc.). Al final del período de reinervación el Electromiografía
nuevo nervio tiene una gran cantidad de nodos de Para la correcta evaluación de este tipo de le-
Ranvier, con internodos cortos (Fig. 5). sión es esencial el factor tiempo(6):
Cuando todos los axones de un nervio han • Antes de las tres semanas de haberse producido
resultado dañados se habla de axonotmesis la lesión el músculo no muestra actividad de

Manual EMG.indb 289 9/7/07 12:07:08


290 E. Gutiérrez-Rivas, G. Gutiérrez-Gutiérrez

reposo. La actividad voluntaria depende del


A número de fibras nerviosas que hayan queda-
do preservadas: si se trata de una axonotmesis
completa no habrá actividad voluntaria alguna;
si la lesión es incompleta, los axones indemnes
generarán una actividad voluntaria proporcional
a su cuantía. Los potenciales de unidad motora
B
que puedan registrarse son los correspondientes
a las fibras nerviosas sanas, por lo que, si los hay,
tendrán características normales.
• A partir de las tres semanas de la lesión se en-
cuentran signos denervativos (fibrilaciones y on-
das positivas en reposo) en los músculos afectos
C
(Fig. 1). La actividad voluntaria, en esta fase,
es similar a la que había en las tres primeras
semanas tras la lesión, ya que es la que generan
los axones que no se han dañado.
• Posteriormente, a medida que el nervio va rege-
D
nerándose y llega a reinervar fibras musculares,
el trazado voluntario va enriqueciéndose, a la vez
que va disminuyendo la actividad espontánea. Los
potenciales de unidad motora que se producen en
las primeras fases de la reinervación de las fibras
musculares son pequeños, de baja amplitud, de
E duración breve o normal y notablemente polifá-
sicos, y se conocen con el nombre de potenciales
reinervativos nacientes (Fig. 2A).
• Más tarde, los potenciales reinervativos nacien-
tes van aumentando progresivamente en am-
plitud y, sobre todo, en duración, mantenien-
F do la polifasia, y suelen llamarse potenciales
reinervativos (Fig. 2B). Finalmente, cuando la
reinervación es completa, los potenciales rei-
nervativos alcanzan parámetros normales; si la
reinervación no es completa, como ocurre en
la mayoría de las ocasiones, los potenciales de
G
unidad motora son grandes, de gran amplitud
y duración y morfología polifásica (potenciales
reinervativos cronificados), es decir, una mez-
cla de potenciales denervativos y potenciales
Figura 5. Esquema de la degeneración y regeneración walleriana:
A: fibra nerviosa normal; B: desmielinización focal en la neuroapraxia; reinervativos crónicos (Fig. 2C), lo que indica
C: resultado final en la neuroapraxia; D: degeneración walleriana en la que cada axón está inervando más fibras mus-
axonotmesis; E: comienzo de la regeneración walleriana en la axonotmesis; culares que en un músculo normal, y que la
F: evolución de la regeneración walleriana en la axonotmesis; G: resultado mielina del nervio regenerado está constituida
final de la regeneración walleriana en la axonotmesis.
por internodos más cortos.

Manual EMG.indb 290 9/7/07 12:07:08


Mononeuropatías agudas 291

Figura 6. Esquema de las alteraciones en la axonotmesis incompleta.

Figura 7. Esquema de las alteraciones en la axonotmesis completa.

Es posible encontrar todos estos patrones dife- nervio deja de conducir distalmente a la lesión.
rentes al mismo tiempo en distintos músculos, por Si ésta es incompleta, los axones preservados
cuanto los músculos más proximales a la lesión son capaces de conducir el estímulo proximal
reinervan antes que los distales(10). a la lesión y evocar una respuesta motora en los
músculos distales a la lesión, respuesta que tiene
Electroneurografía una amplitud o área proporcional al número de
Si la lesión es completa se produce un blo- fibras musculares despolarizadas y, por tanto, al
queo de la conducción a través del nivel lesional número de axones indemnes (Figs. 6 y 7). El
desde los primeros días. Al cabo de unos días, el potencial evocado sensitivo desaparece o dismi-

Manual EMG.indb 291 9/7/07 12:07:09


292 E. Gutiérrez-Rivas, G. Gutiérrez-Gutiérrez

regeneración nerviosa es suficientemente abun-


dante, puede reaparecer el potencial sensitivo, si
no se evocaba, con amplitud disminuida y latencia
5 aumentada; si la axonotmesis es incompleta, el po-
1
tencial sensitivo que existía tras la lesión gana en
área y suele tener morfología polifásica.

2
Neurotmesis
Significa sección del nervio, del griego neuro
(nervio) y tmesis (corte).
5 En este tipo de lesión existe una rotura del ner-
vio, con separación de los cabos o con fibrosis entre
1
ambos cabos. Hay, pues, solución de continuidad
2
en el tronco nervioso. Se produce una degenera-
ción walleriana del nervio a partir del punto de la
lesión, como ocurre en la axonotmesis. Sin embar-
1 go, en este caso los mecanismos de regeneración
axonal no fructifican, a menos que se restaure qui-
rúrgicamente la continuidad anatómica del nervio,
1mV
mediante distintas técnicas, como sutura epineural,
5 ms
sutura fascicular, uso de pegamentos especiales o
Figura 8. Potencial motor evocado en el músculo extensor del índice tras injerto fascicular(11,12), en cuyo caso, el nervio se
estimular el nervio radial en el canal de torsión en un caso de axonotmesis comporta de la forma descrita previamente en la
completa del radial a nivel supracondíleo, tras la regeneración del nervio. axonotmesis.
Obsérvese el potencial polifásico y disperso.
El músculo denervado muestra los cambios
histológicos característicos de la denervación
(Fig. 4).
nuye en amplitud, según se trate de una lesión Clínicamente aparece debilidad y amiotrofia,
completa o incompleta. déficit sensitivo y trastornos vegetativos distales a la
Más tarde, a medida que los axones van regene- lesión. Si no se repara quirúrgicamente el nervio,
rado y alcanzando los músculos en sentido distal, no habrá mejoría alguna. Si el nervio es suturado,
pueden evocarse potenciales motores en los mús- los axones tienen la oportunidad de regenerarse,
culos reinervados, si se estimula el nervio proximal- siguiendo el patrón de la axonotmesis. De todos
mente a la lesión. De acuerdo con la teoría saltato- modos, las secuelas definitivas son la regla.
ria de la conducción nerviosa, y como los axones La neurotmesis suele causarse por la acción
regenerados tienen un gran número de nodos de de instrumentos cortantes, como cristales, arma
Ranvier (Fig. 5), la conducción en el nervio re- blanca o cizallamiento del nervio por fragmentos
generado es más lenta de lo normal. El potencial óseos en fracturas con desplazamiento.
evocado en el músculo suele ser muy polifásico,
desincronizado, con dispersión temporal (Fig. 8), Electromiografía
indicando la diferencia de velocidad de conducción En los primeros días no hay actividad muscular
entre unas fibras y otras. La latencia motora está espontánea ni voluntaria en los músculos afectos.
aumentada. El área del potencial motor evocado A partir de las tres semanas de la lesión aparecen
depende del número de axones regenerados que potenciales de reposo (fibrilaciones, ondas posi-
hayan logrado reinervar fibras musculares. Si la tivas), sin actividad voluntaria. No reaparece la

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Mononeuropatías agudas 293

Figura 9. Esquema de las alteraciones en la neurotmesis.

actividad voluntaria a menos que se efectúe una 3. Brazis PW, Masdeu JC, Biller J. Localization in clinical
sutura nerviosa. neurology. Boston: Little Brown and Co; 1985.
4. Daube JR. Nerve conductions studies. En: Aminoff MJ,
ed. Electrodiagnosis in clinical neurology, 4th ed. New
Electroneurografía York: Churchill Livingstone; 1999. p. 253-89.
En unos pocos días se produce un bloqueo com- 5. Seddon HJ. Three types of nerve injuries. Brain 1943; 66:
pleto de la conducción nerviosa motora y sensitiva 237-88.
a través de la lesión (Fig. 9). Este bloqueo persiste 6. Trueba JL, Gutiérrez-Rivas E, Portera Sánchez A. Proble-
si no se repara el nervio. Los primeros días, sin ms concerning the diagnosis, clinical course and prognosis
of localized traumatic neuropathies. Part II. Severity of
embargo, se puede mantener la excitabilidad del lesions in acute localized traumatic neuropathies. En:
nervio distalmente a la lesión, lo que desaparece Refsum S, Bolis CL, Portera Sánchez A, eds. Internatio-
en unos seis u ocho días. nal Conference on Peripheral Neuropathies. Amsterdam:
Excerpta Medica; 1982. p. 190-206.
En caso de sutura nerviosa el nervio tiene la
7. Ramón y Cajal S. Estudios sobre la degeneración y rege-
capacidad de regenerarse, con características idén- neración del sistema nervioso. I. Madrid: Moya; 1913.
ticas a las descritas en la axonotmesis. 8. Ramón y Cajal S. Estudios sobre la degeneración y rege-
neración del sistema nervioso. II. Madrid: Moya; 1914.
9. Ramón y Cajal S. Regeneración de los nervios. Discurso
BIBLIOGRAFÍA de la Real Academia de Medicina (30 de junio de 1907),
2ª edición. Madrid: Instituto de España; 1946.
1. Trueba JL, Gutiérrez-Rivas E, Portera Sánchez A. Proble- 10. Omer GE, Spinner M. Management of peripheral nerve
ms concerning the diagnosis, clinical course and prognosis problems. Philadelphia: WB Saunders; 1980.
of localized traumatic neuropathies. Part I. Acute and chro- 11. Hamilton HB, Kline DG. Surgery of the injured peri-
nic localized traumatic neuropathies. En: Refsum S, Bolis pheral nerves and brachial plexus. En: Evans RW, ed.
CL, Portera Sánchez A, eds. International Conference on Neurology of trauma. Philadelphia: WB Saunders; 1996.
Peripheral Neuropathies. Amsterdam: Excerpta Medica; p. 423-35.
1982. p. 171-89. 12. Dubuisson A, Kline DG. Indications for peripheral nerve
2. Steward JD. Focal peripheral neuropathies. New York: and brachial plexus surgery. Neurol Clin 1992; 10 (4):
Elsevier; 1987. 935-51.

Manual EMG.indb 293 9/7/07 12:07:09


Manual EMG.indb 294 9/7/07 12:07:10
Capítulo 22

MONONEUROPATÍAS CRÓNICAS
E. Montes Latorre. M.D. Jiménez Hernández

INTRODUCCIÓN focal de la velocidad de conducción, bloqueo


de la conducción (menos frecuente en los atra-
Las neuropatías por atrapamiento ocurren en pamientos crónicos que en las compresiones
estructuras anatómicas donde el nervio es más sus- agudas), y dispersión temporal. La electromio-
ceptible a la presión; la sintomatología se presenta grafía mostrará signos de denervación cuando
de forma subaguda o crónica. La mayor parte de exista daño axonal.
estas neuropatías se engloban bajo el término de Los puntos de atrapamiento más frecuentes
neuropatías por atrapamiento, ya que las manifes- son el trayecto del túnel del carpo para el nervio
taciones fisiopatológicas son muy similares(1), y mediano, el canal cubital en el codo para el ner-
constituyen la alteración más frecuente del sistema vio cubital y la cabeza del peroné para el nervio
nervioso periférico. peroneo común. En este capítulo revisamos estas
Con independencia del nervio afectado, las neuropatías por atrapamiento y otras, menos fre-
neuropatías por atrapamiento presentan unas ca- cuentes, pero de marcada relevancia en la práctica
racterísticas comunes: clínica.
1. Los síntomas iniciales suelen ser sensitivos:
dolor y parestesias. Si persiste la compresión
aparece debilidad muscular y, en los casos más NERVIO MEDIANO
avanzados, amiotrofia(2,3).
2. Desde el punto de vista histopatológico, se Origen: raíces C6 a T1. Cordones lateral (C6-
producen los siguientes fenómenos: a) desmie- C7) y medial (C8-T1) del plexo braquial.
linización paranodal en estadios iniciales; b) Inervación motora: músculos pronador redon-
desmielinización segmentaria en estadios in- do, palmar mayor y menor, (a través del nervio
termedios; y c) daño axonal, con degeneración interóseo anterior inerva a los músculos flexor largo
walleriana distal a la compresión, en estadios del pulgar, flexor común profundo de los dedos 2º
avanzados. y 3º y pronador cuadrado) y, ya distal al túnel del
3. Los estudios de conducción nerviosa y la elec- carpo, los músculos oponente del pulgar, abductor
tromiografía permiten confirmar la sospecha corto del pulgar, flexor corto del pulgar y los lum-
de mononeuropatía, delimitar el lugar de bricales 1º y 2º (Fig. 1).
atrapamiento, conocer la patología y el grado Inervación sensitiva: mitad radial de la palma
de lesión y orientar el pronóstico y grado de (rama palmar superficial) y cara palmar de los
recuperación. En los estudios de conducción dedos 1º, 2º, 3º y mitad radial del cuarto dedo
nerviosa puede observarse enlentecimiento (Fig. 2).

Manual EMG.indb 295 9/7/07 12:07:10


296 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

Figura 1. Nervio mediano: trayecto e inervación motora y sensitiva.

Trayecto: desciende por la parte interna del bra- Antes de penetrar en el retináculo flexor recibe la
zo sin proporcionar ramas motoras o sensitivas. Se rama cutánea palmar (que, por tanto, no atraviesa
sitúa entre las dos cabezas del músculo pronador el túnel del carpo) y que recoge la sensibilidad
redondo e inerva a éste, al palmar mayor, palmar de la eminencia tenar. En la muñeca el nervio
menor y flexor común superficial de los dedos. La mediano proporciona inervación a los músculos
rama más grande (el nervio interóseo anterior) emi- abductor corto del pulgar, oponente del pulgar,
te ramas a los músculos flexor común profundo flexor corto del pulgar (cabeza superficial) y los
de los dedos, flexor largo del pulgar y pronador lumbricales 1º y 2º, y recoge la sensibilidad de la
cuadrado. El tronco principal del nervio continúa cara palmar de los dedos 1º, 2º, 3º y de la mitad
hacia la mano a través del túnel del carpo (Fig. 3). radial del cuarto dedo.

Manual EMG.indb 296 9/7/07 12:07:10


Mononeuropatías crónicas 297

Figura 2. Inervación sensitiva de la mano.

Figura 3. Nervio mediano: relaciones anatómicas en el canal del carpo.

Mononeuropatía distal del nervio mediano. cipalmente a mujeres. Los pacientes refieren dolor
Síndrome del túnel del carpo irradiado desde muñeca a codo e incluso a hombro;
en ocasiones describen una molestia difusa, mal
El síndrome del túnel del carpo es la mononeu- definida, que afecta a todo el brazo, sin alcanzar
ropatía por atrapamiento más frecuente. Se ha es- el cuello. Las parestesias se localizan en el territo-
timado una prevalencia del 3,8% para el síndrome rio sensitivo del nervio mediano, aunque pueden
del túnel del carpo confirmado clínicamente y del extenderse a “toda la mano”. Típicamente tienen
2,7% para el síndrome del túnel del carpo con con- predominio nocturno y los pacientes realizan movi-
firmación clínica y electrofisiológica(4). Afecta prin- mientos de campanilleo para aliviar los síntomas(5).

Manual EMG.indb 297 9/7/07 12:07:11


298 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

TABLA I. Diagnóstico topográfico de las lesiones del nervio mediano


Clínica Ligamento de Struthers Pronador redondo Interóseo anterior Túnel del carpo

• Paresia
- Pronación Sí Posible No No
- Flexión del carpo Sí No No No
- Flexor común superficial dedos Sí Sí Sí No
- Oposición dedo I Sí Sí No Sí
- Abducción dedo I Sí Sí No Sí

• Hipoestesia
- Eminencia tenar Sí Sí No No
- Dedos I a IV Sí Sí No Sí

Éstos empeoran también con la actividad manual atrapamiento de ambos medianos. Por otra parte,
(escribir a máquina, hablar por teléfono, conducir) se ha demostrado que un estudio electrofisiológico
y la mano dominante suele ser la más afectada, normal no excluye el diagnóstico de síndrome del
si bien el trastorno es, con frecuencia, bilateral. túnel del carpo; este hecho puede suceder en un
Inicialmente la clínica es intermitente y mejora número no despreciable de pacientes (hasta en el
con el reposo, aunque con el tiempo permanece 10-25% de los casos)(8). Finalmente, con frecuencia
incluso en los períodos de inactividad. En los casos encontramos pacientes que presentan un enlen-
más avanzados pueden aparecer síntomas motores tecimiento de la conducción del nervio mediano
como la dificultad para la abducción y oposición a través del carpo y, sin embargo, no refieren sín-
del pulgar y, finalmente, atrofia de la musculatura tomas ni existen signos clínicos. Estos pacientes
de la eminencia tenar(3) (Tabla I). no presentan un síndrome del túnel carpiano en
En la exploración clínica se pueden objetivar sentido estricto y no se les debe someter a un tra-
signos permanentes: hipo o hiperestesia, paresia o tamiento específico.
atrofia. Debe tenerse en cuenta que una explora-
ción normal no excluye el diagnóstico. Es posible Estudio electrofisiológico
reproducir los síntomas mediante maniobras como Numerosos estudios demuestran que el estudio
la de Phalen (hiperflexión de la muñeca) y el signo de conducción nerviosa confirma el diagnóstico de
de Tinel (percusión del nervio en la muñeca). Se síndrome del túnel del carpo con una elevada sen-
pueden obtener falsos positivos en individuos sanos sibilidad (49-84%) y mayor especificidad (> 95%).
y en pacientes con polineuropatía. Las recomendaciones de la Academia Americana
El diagnóstico de síndrome del túnel carpia- de Neurología sobre la indicación de estudio neu-
no es fundamentalmente clínico. La presencia rofisiológico ante la sospecha clínica de síndrome
de los síntomas mencionados y una exploración del túnel del carpo, señalan que el estudio debe
física compatible son criterios obligatorios para el realizarse si existe:
diagnóstico, según las recomendaciones de la Aca- – Duda clínica sobre la localización de la lesión.
demia Americana de Neurología(6,7). Suele existir El estudio neurofisiológico permite distinguir
correlación entre los datos clínicos y los hallazgos entre un síndrome del túnel del carpo, una neu-
electrofisiológicos, pero no siempre sucede así. Con ropatía del nervio mediano a nivel proximal,
frecuencia el paciente tiene síntomas unilaterales una plexopatía braquial o una radiculopatía
y el estudio electrofisiológico muestra signos de C6-C7.

Manual EMG.indb 298 9/7/07 12:07:11


Mononeuropatías crónicas 299

– Duda clínica sobre el diagnóstico. Debe plan-


tearse cuando la historia y exploración sean con-
fusas o cuando no exista mejoría clínica tras el
tratamiento médico inicial.
– Necesidad de confirmar la existencia de com-
promiso motor.
– Atrofia muscular de la eminencia tenar.
En los casos de sospecha clínica de síndrome
del túnel carpiano, la Academia Americana de
Neurología recomienda un protocolo de estudio.
Selecciona diversas técnicas electrodiagnósticas y
las clasifica en tres grados: obligatorio, conveniente
y opcional, según la evidencia de su utilidad(6,7,9).
1. Obligatorio: conducción sensitiva antidrómica
del nervio mediano en el miembro sintomático
a través de la muñeca, con una distancia de con-
ducción de 14 cm entre el punto de estímulo
Figura 4. Síndrome del túnel del carpo. Estudio de conducción moto-
en la muñeca y el electrodo de registro en el ra sobre el músculo abductor corto del pulgar. Se observa un marcado
segundo dedo. Es patológico un valor de laten- incremento de la latencia motora distal y una caída de la amplitud del
cia mayor de 3,4 ms al inicio del potencial. En potencial motor.
caso de estudio patológico debe realizarse una
conducción sensitiva antidrómica del nervio cu-
bital en el mismo miembro, para asegurarnos mediano en el miembro sintomático, recogien-
de que ese resultado anormal no corresponde do la respuesta en la eminencia tenar (Fig. 4).
a una polineuropatía o una plexopatía. 3. Opcional: electromiografía de músculos
Si el estudio inicial del nervio mediano es nor- inervados por las raíces C6 a T1, incluyendo
mal, debe realizarse una de las siguientes téc- músculos de la eminencia tenar del miembro
nicas que tienen mayor sensibilidad: sintomático.
a. mediano entre palma y muñeca. La distancia Se analizará la presencia de enlentecimiento
de conducción es 8 cm; los lugares de estímulo de la conducción sensitiva o motora, la posible
son 3 cm proximal y 5 cm distal al segundo disminución de la amplitud de los potenciales y
pliegue de la muñeca y se recoge la respuesta la existencia de denervación en músculos distales
en el segundo dedo. Son valores patológicos dependientes del nervio mediano. Se han descrito
una latencia entre los picos de los potenciales otras técnicas en la evaluación neurofisiológica del
mayor de 2,2 ms y una latencia entre los inicios síndrome del túnel del carpo, como la comparación
mayor de 1,8 ms. de latencias sensitivas entre el dedo 2º (mediano) y
b. Comparación en la conducción sensitiva anti- el dedo 5º (cubital) o entre el mediano y el radial
drómica de los nervios mediano y cubital entre superficial sobre el dedo pulgar, y de las latencias
la muñeca y el cuarto dedo. La distancia de motoras de interóseos (cubital) y lumbricales (me-
conducción es 14 cm en ambos casos. Unos diano)(6) (Fig. 5). Según los valores obtenidos en
valores de latencia interpicos mayor de 0,35 ms el estudio electrofisiológico, resulta conveniente
y de latencia entre los inicios mayor de 0,43 ms definir la gravedad del síndrome del túnel del carpo
son anormales, correspondiendo el valor mayor en leve, moderado o intenso. La utilidad de esta
al potencial evocado en el nervio mediano. clasificación radica en que el tratamiento indicado
2. Conveniente: conducción motora del nervio es diferente según el grado de lesión(10).

Manual EMG.indb 299 9/7/07 12:07:11


300 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

nervio mediano, diferenciándolas de plexopatías


y radiculopatías por un lado y de procesos más
difusos como la polineuropatía(11,12).

Atrapamiento por el ligamento de Struthers

El ligamento de Struthers, presente sólo en


una minoría de la población, es una estructura
fibrosa entre el epicóndilo interno y la apófisis
supracondilea del húmero. El défi cit sensitivo
y motor es más amplio que el observado en el
síndrome del túnel carpiano: los pacientes con
un atrapamiento del nervio mediano a este ni-
vel presentarán, además de parestesias en los
dedos, dolor en la región anterior del antebrazo
y alteraciones sensitivas en la superfi cie de la
eminencia tenar, cuya inervación depende del
Figura 5. Síndrome del túnel del carpo. Estudio comparativo de potencia-
les motores sobre los músculos interóseo y segundo lumbrical estimulando
nervio palmar superfi cial (que no atraviesa el
los nervios cubital y mediano respectivamente a la misma distancia de un túnel del carpo). Como manifestaciones mo-
punto de registro común. Obsérvese la marcada diferencia de latencias toras, se puede observar debilidad de todos los
distales motoras (aumentada en nervio mediano). músculos inervados por el mediano, incluido el
pronador redondo.

Atrapamientos proximales del nervio mediano Síndrome del pronador redondo

El nervio mediano puede sufrir compresión La presentación clínica incluye dolor en el an-
externa o traumatismo directo en cualquier punto tebrazo proximal, trastorno sensitivo en los dedos y
a lo largo de su trayecto (fractura, uso de muletas, sobre la eminencia tenar, y debilidad en todos los
etc.) y atrapamiento principalmente en cuatro músculos inervados por el nervio mediano, aun-
estructuras: 1) el ligamento de Struthers (infre- que la afectación del músculo pronador redondo
cuente); 2) entre las cabezas del pronador redondo es variable (según el nivel de lesión). Se considera
(más frecuente); 3) en el antebrazo proximal; y 4) el más frecuente de los cuadros de atrapamiento
a nivel del flexor común superficial. Las manifesta- proximal del nervio mediano(13).
ciones clínicas son variables: desde dolor y pares-
tesias en los casos más leves (en los dedos pero Síndrome del nervio interóseo anterior
también en la eminencia tenar, inervada por el
nervio palmar superficial), hasta la paresia de mús- Se presenta con dolor en el antebrazo y debi-
culos inervados por el nervio mediano proximal lidad de los músculos pronador cuadrado, flexor
(como el pronador redondo) o el nervio interóseo común superficial de los dedos 1º y 2º, flexor co-
anterior (músculos flexor largo del pulgar, flexor mún profundo de los dedos y flexor largo propio del
común profundo de los dedos 2º y 3º y pronador pulgar. No se afectan los músculos de la eminencia
cuadrado) (Tabla I). El estudio neurofisiológico tenar, a diferencia de lo que ocurre en el síndrome
permite excluir el atrapamiento distal, valorar el del túnel del carpo. Un signo típico es la imposi-
grado de lesión (mediante la electromiografía) y bilidad del paciente para hacer una “O” con los
confirmar y localizar las neuropatías proximales de dedos primero y segundo, debido a la paresia en la

Manual EMG.indb 300 9/7/07 12:07:12


Mononeuropatías crónicas 301

flexión de las falanges distales de estos dedos, que Inervación sensitiva: 5º dedo, borde cubital
depende del músculo flexor profundo de los dedos. del 4º dedo y región cubital de la mano (palma y
Es un nervio únicamente motor, por lo que no dorso) (Figs. 2 y 6).
existen síntomas o signos sensitivos. Si éstos están Niveles de lesión: los puntos de atrapamien-
presentes debe considerarse que la lesión ha de ser to más frecuentes del nervio cubital son el canal
más proximal. cubital, a nivel del codo, y el canal de Guyon, a
La electromiografía con aguja suele aportar nivel de la muñeca.
más información que los estudios de conduc-
ción nerviosa en el estudio de los atrapamientos Síndrome del canal cubital
proximales de nervio mediano. La presencia de
signos de denervación aguda o crónica permite Es la segunda neuropatía por atrapamiento más
establecer el nivel de lesión y descartar procesos frecuente, después del síndrome del túnel carpia-
alternativos. no, y se localiza en el punto de compresión más
común del nervio cubital (Fig. 7). En esta región
el nervio atraviesa un túnel formado por el epicón-
NERVIO CUBITAL dilo medial, el olécranon y la aponeurosis húmero-
cubital; la mecánica de la articulación del codo
Origen: raíces C8 (C7) y T1. En el plexo bra- modifica de forma dramática este espacio, de forma
quial: tronco inferior y cordón medial, del que es que durante la flexión del codo se reduce notable-
rama terminal junto con una importante contri- mente su volumen. Por ello, las actividades en las
bución a la formación del nervio mediano y los que se realicen movimientos repetidos de flexión
nervios sensitivos cutáneo braquial medial y ante- y extensión del codo y los antecedentes, incluso
braquial medial. lejanos, de fractura o traumatismo intenso en el
Trayecto: desciende por la parte interna del codo favorecen la aparición de esta neuropatía.
brazo sin proporcionar ramas y entra en el canal La presentación clínica más común es la exis-
cubital, ubicado entre el epicóndilo medial y el tencia de entumecimiento y parestesias intermiten-
olécranon. En el antebrazo proximal discurre entre tes en el borde cubital de la mano y los dedos 4º y
las cabezas del músculo cubital anterior (aponeu- 5º, junto con dolor en el codo o irradiado desde el
rosis húmero-cubital) y da ramas para este músculo codo a la muñeca. La flexión del codo suele exa-
y para la división medial (dedos 4º y 5º) del flexor cerbar los síntomas. Con la progresión del cuadro
profundo de los dedos. Antes de llegar a la muñeca compresivo comienza a aparecer debilidad motora,
recibe la rama cutáneo dorsal y, a nivel de la apó- con dificultad para adducir el pulgar, extender las
fisis del cúbito, la rama sensitiva cutánea palmar. articulaciones interfalángicas 4ª y 5ª (función de los
Pasa a través del canal de Guyon para proporcionar músculos lumbricales) y flexionar las metacarpofa-
la inervación sensitiva al dedo 5º y la mitad medial lángicas 4ª y 5ª (movimiento dependiente del mús-
del 4º y la inervación motora del grupo muscular culo flexor profundo de los dedos). La debilidad
hipotenar, los interóseos palmares y dorsales, los de estos músculos y la acción de los antagonistas
lumbricales 3º y 4º y a dos músculos de la emi- (dependientes de mediano y radial) determinan el
nencia tenar: el adductor del pulgar y la cabeza aspecto típico de “mano en garra“ que, junto con
profunda del flexor corto del pulgar. la atrofia de la eminencia hipotenar y de los mús-
Inervación motora: músculos flexor cubital culos interóseos, indican una fase avanzada de la
del carpo, parte medial del flexor profundo de los enfermedad(14). El paciente notará dificultad para
dedos, de la eminencias hipotenar, interóseos, lum- realizar tareas manipulativas y para agarrar objetos
bricales 3º y 4º, flexor corto del pulgar y adductor con fuerza, con preservación de la abducción del
del pulgar (Fig. 6). pulgar. Precisamente, la debilidad del músculo

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302 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

Figura 6. Nervio cubital: trayecto e inervación motora y sensitiva.

flexor profundo de los dedos y la hipoestesia en el Estudio electrofisiológico


borde cubital dorsal son datos clínicos que locali- El método más eficaz para la localización
zan la neuropatía a nivel del codo. de la neuropatía del nervio cubital en el codo
El diagnóstico diferencial (Tablas II y III) in- es el estudio de la conducción nerviosa motora.
cluye la neuropatía cubital en la muñeca, la plexo- Los puntos de estímulo son tres: la muñeca, un
patía braquial (tronco inferior o cordón medial), punto distal al epicóndilo medial (codo infe-
la radiculopatía C8-T1 o una enfermedad de la rior) y uno proximal al epicóndilo medial (codo
motoneurona y, como ocurre con la neuropatía superior). Los electrodos de recepción para la
del nervio mediano, debe descartarse siempre un conducción motora se sitúan sobre la eminencia
proceso difuso (polineuropatía). hipotenar (músculo abductor del meñique). La

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Mononeuropatías crónicas 303

Figura 7. Nervio cubital en el codo: relaciones anatómicas.

TABLA II. Diagnóstico topográfico de las lesiones del nervio cubital


Clínica Canal cubital Canal de Guyon

• Debilidad
- Flexión cubital del carpo Sí No
- Flexión de la falange distal de dedos IV y V Sí No
- Interóseos Sí Sí
- Lumbricales IV y V Sí Sí

• Hipoestesia
- Palma de la mano (borde cubital), dedo V y mitad medial del IV Sí Sí
- Dorso de la mano (borde cubital) y dorso dedos V y mitad medial IV Sí No

TABLA III. Diagnóstico diferencial electrofisiológico de la neuropatía del cubital


Localización ENG cubital sensitivo ENG cubital motor EMG

Canal de Guyon Normal ↓ amplitud Denervación en músculos intrínsecos de la


↑ latencia distal mano
Canal cubital ↓ amplitud ↓ velocidad de conducción o bloqueo Denervación en músculos intrínsecos de la
a través del codo mano
Radiculopatía C8-T1 Normal ↓ amplitud si existe pérdida axonal Denervación en músculos paraespinales e
significativa inervados por C8 a T1
Plexopatía del tronco inferior ↓ amplitud ↓ amplitud si existe pérdida axonal Denervación en músculos inervados por el
significativa tronco inferior

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304 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

conducción sensitiva suele realizarse sobre el dedo. Debido a la disposición fascicular dentro
quinto dedo. del nervio, los axones que inervan al primer
La Academia Americana de Neurología ha interóseo dorsal pueden resultar más afectados
elaborado una serie de recomendaciones para el por la compresión.
estudio del atrapamiento del nervio cubital en el – Estudio de conducción del nervio cubital dorsal
codo que exponemos a continuación(15,16). sensitivo. La alteración o ausencia de respuesta
localiza la lesión en el codo y no a nivel de
Principios generales muñeca.
Si las pruebas de conducción nerviosa sensitiva – Comparar los segmentos codo superior-codo
o motora son anormales, se deben estudiar otros inferior y axila-codo superior, ya que, debido a
nervios para excluir un proceso difuso. Esta reco- la degeneración walleriana distal, el potencial
mendación se considera obligatoria. de respuesta motora en el segmento codo in-
Se debe monitorizar la temperatura. ferior-muñeca puede ser de una amplitud tan
El codo debe colocarse siempre en la misma po- baja que sea difícil de localizar el inicio de la
sición para el estudio de conducción. La más lógica respuesta. Esta es una recomendación opcio-
es la flexión moderada a 70-90°, para que exista la nal.
mejor correlación posible entre la superficie de la – Según el resultado de la electroneurografía, se
piel y la longitud real del nervio. Esta es también realizará electromiografía. Ésta debe incluir
una recomendación obligatoria. En esta posición, los músculos abductor del 5º dedo y el primer
la distancia de conducción a través del codo debe interóseo dorsal, ya que éste es el músculo que
ser de unos 10 cm. La estimulación distal al epicón- con más frecuencia muestra anomalías en esta
dilo medial no debe estar a más de 3 cm de éste, neuropatía. Si los músculos inervados por el
pues más allá el nervio se hace profundo bajo el nervio cubital presentan alteraciones, el estu-
músculo flexor cubital del carpo. dio debe ampliarse a músculos inervados por el
cordón medial o el tronco inferior, para excluir
Interpretación de los hallazgos una plexopatía braquial, y a músculos inervados
Son patológicos los siguientes valores: 1) una por las raíces C8-T1 para descartar una radicu-
velocidad de conducción motora absoluta entre lopatía.
codo superior-codo inferior menor de 50 m/s; 2) Cuando se encuentra una disminución signifi-
una velocidad de conducción motora en el seg- cativa de la amplitud del potencial de la respuesta
mento codo superior-codo inferior menor de 10 motora tras la estimulación del nervio cubital en
m/s respecto al segmento codo inferior-muñeca; un punto proximal al codo, en comparación con
3) una disminución de amplitud mayor del 20% la respuesta obtenida tras la estimulación distal al
del potencial motor obtenido en el segmento codo codo, se debe intentar localizar la lesión de forma
superior-codo inferior en relación al obtenido en más precisa. Para conseguirlo se estimula el nervio
el segmento codo inferior-muñeca; y 4) un cambio cada 2 cm en el segmento codo inferior-codo supe-
en la configuración del potencial entre los dos seg- rior hasta determinar el punto donde la amplitud
mentos. Idealmente, se establece el diagnóstico de y la configuración de la respuesta motora cambian
neuropatía del cubital en codo cuando se cumplen de forma brusca.
al menos dos de los cuatro criterios enunciados.
Neuropatía del cubital en la muñeca
Si el estudio de conducción tal como se ha establecido no es
concluyente, los siguientes procedimientos pueden ser útiles El nervio cubital entra en el canal de Guyon
– Recoger el estímulo sobre el músculo primer a nivel del pliegue distal de la muñeca. En este
interóseo dorsal en lugar del abductor del 5º punto el atrapamiento es mucho menos frecuente

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Mononeuropatías crónicas 305

que en el codo. Se relaciona con traumatismos, aguja de músculos más proximales dependientes
fracturas, gangliones y con actividades repetitivas del mismo, como el flexor cubital del carpo o el
o de presión sobre el nervio (p. ej. ciclistas). Habi- flexor común profundo de los dedos, que se afectan
tualmente se lesiona la rama motora profunda, por en el síndrome del canal cubital y no en el atrapa-
lo que la sintomatología será de debilidad en los miento en la muñeca.
músculos lumbricales 3º y 4º, interóseos dorsales y
adductor del pulgar. Cuando la afectación es distal,
se asocia debilidad de los músculos hipotenares NERVIO RADIAL
en las lesiones más proximales en el canal. Por lo
general, no existe afectación sensitiva. Sólo si la Es la rama más grande del plexo braquial y,
lesión se localiza en el tramo más proximal del aunque se afecta menos frecuentemente por me-
conducto puede existir un trastorno sensitivo en canismos compresivos que los nervios mediano y
los dedos 5º y mitad externa del 4º. Las superficies cubital, son relativamente comunes las lesiones por
palmar proximal y cubital dorsal están respetadas traumatismos.
en las lesiones del canal de Guyon. Origen: raíces C5 a C8 (de manera infrecuente
también T1). Las fibras atraviesan los tres troncos
Estudio electrofisiológico del plexo braquial y continúan por las divisiones
En el estudio motor, el electrodo activo se co- posteriores, que se unen para formar el cordón
loca sobre el músculo primer interóseo dorsal o so- posterior. En la parte inferior de la axila el cordón
bre el abductor del 5º dedo, situando el electrodo posterior se divide en sus dos ramas terminales: el
de referencia sobre la inserción tendinosa. En caso nervio axilar y el nervio radial.
de atrapamiento se suele observar un incremento Inervación motora: músculos tríceps (cabezas
de la latencia motora distal y una disminución de larga y medial desde la axila; cabeza lateral desde
la amplitud en comparación con el lado sano o el brazo), braquial anterior (parcialmente), supina-
valores de control. Se debe realizar también un dor largo y primer radial externo. En el codo, ya
estudio de conducción sensitivo antidrómico a denominado nervio interóseo posterior, inerva los
quinto dedo, que suele ser normal a menos que músculos segundo radial externo, extensor común
el atrapamiento sea muy proximal en el canal de de los dedos, extensor propio del meñique, cubi-
Guyon. En estos casos podremos encontrar una tal posterior, abductor largo del pulgar, extensores
disminución de la amplitud o un incremento largo y corto del pulgar y, finalmente, el extensor
de la latencia distal del potencial sensitivo. Para propio del índice (Fig. 8).
distinguir estas lesiones de otras a un nivel más Inervación sensitiva: región posterolateral del
proximal en el brazo, se puede realizar un estudio brazo y antebrazo y, como nervio radial superficial,
de las ramas motoras proximales a la muñeca o el dorso de los dedos 1º a 4º y la mitad radial del
bien de la rama dorsal cutánea del nervio cubital, dorso de la mano (Fig. 2).
que no se ven afectadas en el atrapamiento en la Niveles de lesión: el punto más habitual de
muñeca. lesión del nervio radial es el canal de torsión hu-
Según los resultados de la electroneurogra- meral (Tabla IV). Los mecanismos compresivos
fía, se realizaría electromiografía de los músculos que actúan a este nivel son, la mayoría de las veces,
primer interóseo dorsal y abductor del meñique. agudos(17). Otro punto de compresión frecuente se
Si muestran alteraciones ampliaremos el estudio sitúa bajo el músculo supinador, con afectación
a músculos inervados por los nervios mediano y del nervio interóseo posterior. Generalmente esta
radial para descartar una afección más difusa. Si afección es crónica. El nervio también se puede
existe duda sobre la localización de la lesión del lesionar en la axila o en la parte más proximal del
nervio cubital suele ser también útil el estudio con brazo (traumatismos, uso de muletas) y, finalmen-

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306 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

Figura 8. Nervio radial: inervación motora y trayecto.

te, pueden producirse lesiones aisladas del nervio torsión del húmero (surco espiral). Como situación
radial superficial (queiralgia parestésica)(18). típica, aparece en individuos en estado de estupor
inducido por drogas o alcohol, que pasan horas con
Parálisis del sábado noche el brazo apoyado sobre una silla o mesa.
Se manifiesta por debilidad de todos los mús-
Es la lesión más frecuente del nervio radial. El culos extensores del antebrazo, (“mano péndula”)
punto de compresión en este caso es el canal de con preservación de la extensión del codo (músculo

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Mononeuropatías crónicas 307

TABLA IV. Diagnóstico topográfico de las lesiones del nervio


radial
Canal de N. interóseo
Clínica Axila torsión posterior

• Paresia
- Tríceps Sí No No
- Extensores de muñeca Sí Sí No
- Extensores de los dedos Sí Sí Sí
• Hipoestesia
- Dorso de mano Sí Sí No
• Hiporreflexia
- Reflejo tricipital Sí No No

tríceps) y del reflejo tricipital y, al menos parcial-


mente, de la flexión del codo (por integridad del
Figura 9. Parálisis del sábado noche. Bloqueo parcial de la conducción
músculo bíceps braquial aunque estén afectos el del nervio radial proximal a la fosa antecubital.
supinador largo y el braquial). Puede haber hi-
poestesia en la parte dorsolateral de la mano con
sensación intacta en la parte posterior de brazo y Es sencillo obtener potenciales sensitivos anti-
antebrazo. Debe tenerse en cuenta que la debilidad drómicos con registro del nervio radial superficial
del nervio radial y su incapacidad para estabilizar sobre la tabaquera anatómica. En la parálisis del
la muñeca determinan una pérdida de la fuerza de sábado noche existe una alteración de la conduc-
prensión de la mano, lo que puede sugerir incorrec- ción sensitiva, con disminución de la amplitud del
tamente una lesión del mediano y/o del cubital. potencial, excepto en los estudios muy precoces
El síndrome clínico a menudo es incompleto y la tras la lesión o en lesiones puramente desmieli-
recuperación es total, casi invariablemente. nizantes.
La electromiografía es útil para localizar lesio-
Estudio electrofisiológico nes del nervio radial, demostrando alteraciones
El estudio de conducción motora del nervio en condiciones de reposo (actividad espontánea:
radial se realiza situando el electrodo activo sobre el fibrilaciones u ondas positivas) o durante la acti-
músculo extensor propio del índice y el referencial vidad voluntaria (disminución del reclutamiento,
sobre la apófisis estiloides del cúbito. Se estimula aumento de la amplitud y duración, presencia de
el nervio: 1) en la parte posterolateral del antebra- reinervación). La afectación del músculo tríceps
zo; 2) en la fosa antecubital; 3) sobre el canal de señala una lesión proximal; si está respetado
torsión; y 4), si es preciso, en el punto de Erb, para orienta a una lesión en el surco espiral o distal
descartar bloqueos proximales de la conducción. al mismo.
La comparación de las amplitudes de respuesta El estudio electrofisiológico permite determinar
entre uno y otro lado permiten cuantificar el grado el pronóstico. En una exploración realizada a los
de pérdida axonal. También se puede localizar el 14 días de la lesión, se pueden considerar signos de
punto de compresión verificando un bloqueo de mal pronóstico los siguientes: potenciales sensitivos
la conducción (Fig. 9). La determinación de las de amplitud reducida o ausentes, potenciales moto-
velocidades no es muy útil debido a las dificultades res de amplitud reducida y signos de denervación
de medición correcta de las distancias. en el electromiograma de músculos afectos.

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308 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

Síndrome del nervio interóseo posterior

En el atrapamiento del nervio interóseo poste-


rior suele existir el antecedente de una actividad
repetitiva que implique supinación y pronación.
Clínicamente aparece dolor en el antebrazo proxi-
mal (fibras sensitivas de la cápsula articular) y de-
bilidad en la extensión de los dedos a nivel de las
articulaciones metacarpofalángicas. Se mantiene
cierta capacidad de extensión de la muñeca, con
desviación radial y están intactas la extensión y
flexión del codo. No se objetiva trastorno sensiti-
vo cutáneo y los reflejos tricipital y braquiorradial
están conservados.

Estudio electrofisiológico
Puede observarse un bloqueo de la conducción
motora entre antebrazo y codo (lesiones desmie-
linizantes) o una disminución de la amplitud del
potencial motor (degeneración axonal), lo que ocu-
rre en la mayoría de las lesiones. Los potenciales
sensitivos son normales por estar ileso el nervio
radial superficial. En la electromiografía se puede
encontrar denervación en los músculos extensor
propio del índice, extensor común de los dedos y
extensor cubital del carpo.

NERVIO FEMOROCUTÁNEO

El femorocutáneo es un nervio puramente


sensitivo que tiene su origen en las raíces L2 y L3. Figura 10. Nervio femorocutáneo.
Abandona la pelvis a nivel de la espina ilíaca ante-
rosuperior, pasa entre los fascículos del ligamento
inguinal por su extremo externo y desciende por el no deben existir síntomas motores ni alteración
muslo. Recoge la sensibilidad de la región antero- de reflejos. Debe diferenciarse, por tanto, de una
externa del muslo (Fig. 10). La neuropatía crónica radiculopatía de L2 o L3 (que asociaría debilidad
del nervio femorocutáneo, denominada meralgia en la musculatura proximal) y de una radiculopatía
parestésica, es una entidad frecuente. Los pacien- L4 (que asociaría además y disminución del refle-
tes refieren dolor y acorchamiento en la zona de jo rotuliano). Del mismo modo, una neuropatía
inervación del nervio (en “bolsillo de pantalón”). del nervio femoral provoca alteración del reflejo
El tacto o el roce de la ropa suelen producir una rotuliano, debilidad en la flexión de la cadera y
sensación desagradable (disestesia). Las molestias extensión de la rodilla y el trastorno sensorial se
pueden exacerbarse con la deambulación o la distribuye por la cara anterointerna del muslo y la
aducción del muslo. Al ser un nervio sensitivo puro, superficie interna de la pierna.

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Mononeuropatías crónicas 309

Estudio electrofisiológico inferiores de la superficie externa de la pierna y


Se puede realizar estudio de conducción nervio- dorso del pie (Fig. 11).
sa sensitiva de forma antidrómica (estimulación so- Niveles de lesión: el punto más común de com-
bre el ligamento inguinal y recepción sobre la cara presión del nervio peroneo común está a nivel de
anterior del muslo a unos 12 cm de la espina ilíaca la cabeza del peroné y, con frecuencia, la rama
anterosuperior) u ortodrómica (estimulación sobre profunda es la más intensamente afectada (por
el muslo; recepción sobre el extremo lateral del la disposición medial de estas fibras en el tronco
ligamento inguinal junto a la espina ilíaca antero- nervioso, en contacto directo con el hueso). El
superior). Este estudio es técnicamente difícil y con atrapamiento del nervio peroneo común a nivel
frecuencia no se obtienen potenciales en personas del muslo y la compresión aislada de la rama pro-
sanas o en el lado asintomático de personas afectas. funda en el tercio medio de la pierna son mucho
También se han utilizado potenciales evocados so- menos frecuentes.
matosensoriales para evaluar este nervio(19,20). En la
electromiografía debe observarse actividad normal Atrapamiento del nervio peroneo común en la cabeza del
en los músculos del muslo y paraespinales para así peroné
excluir otros procesos.
Es la mononeuropatía compresiva más frecuen-
te en los miembros inferiores(21). La lesión puede
NERVIO PERONEO COMÚN producirse de forma aguda (postoperatoria, traumá-
tica) o de manera más solapada (gran pérdida de
Origen: raíces L4 a S2. El nervio ciático co- peso, hospitalización prolongada, diabetes, etc.).
mún está formado por dos nervios independien- El signo clínico característico es la presencia de
tes: el peroneo común y el nervio tibial posterior. “pie caído”, con dificultad o imposibilidad para
Descienden juntos en una vaina común, pero no realizar la dorsiflexión del pie (función del músculo
intercambian fibras en su trayecto. En el muslo, tibial anterior), mientras que la eversión del pie (de-
el único músculo inervado por el nervio peroneo pendiente de los músculos peroneos laterales lar-
común es la porción corta del músculo bíceps go y corto, inervados por la rama superficial), está
femoral, mientras que el resto de los músculos menos afectada. La inversión del pie y la flexión
de la parte posterior (porción larga del bíceps fe- plantar y de los dedos no están comprometidas.
moral, semimembranoso y semitendinoso) están Es frecuente encontrar trastornos sensitivos en los
inervados por el nervio tibial posterior. Los dos dos tercios inferiores de la cara externa de la pier-
nervios se separan completamente a nivel del na y sobre el dorso del pie. Los reflejos rotuliano
hueco poplíteo. El nervio peroneo común emite y aquíleo son normales. Si sólo se afecta la rama
una rama sensitiva (nervio cutáneo peroneo) que profunda se conserva la fuerza en la eversión del
recoge la sensibilidad del tercio superior exter- pie y el trastorno sensitivo se limita al primer es-
no de la pierna. A continuación rodea el cuello pacio interdigital.
del peroné donde se divide en sus dos ramas ter-
minales: el nervio peroneo profundo y el nervio Estudio electrofisiológico
peroneo superficial. El nervio peroneo profundo Permite confirmar que se trata de una mono-
inerva los músculos tibial anterior, extensor del neuropatía del nervio peroneo y no de otra causa
dedo gordo del pie, extensor largo y corto de los de “pie caído” como la radiculopatía L5 o la mono-
dedos y la piel del primer espacio interdigital. neuropatía del nervio ciático común (Tabla V). La
El nervio peroneo superficial suministra ramas estrategia del estudio electrofisiológico en pacientes
motoras para los músculos peroneos lateral lar- que presentan sospecha de mononeuropatía pero-
go y corto y ramas sensitivas para los dos tercios neal es la siguiente (Tabla VI):

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310 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

Figura 11. Nervio peroneo común: trayecto e inervación motora.

– Estudio de conducción motora de ambos ner- potencial motor obtenido tras estímulo proximal
vios peroneos, estimulando sobre la cara ante- comparado con el potencial motor obtenido dis-
rior del tobillo, bajo la cabeza del peroné y en talmente(22). Es importante desde el punto de
el hueco poplíteo lateral, y recogiendo en el vista pronóstico recoger también la respuesta en
músculo extensor corto de los dedos (pedio). el músculo tibial anterior, que es el principal res-
Los siguientes hallazgos son sugestivos de atra- ponsable de la dorsiflexión del pie. Lógicamen-
pamiento del nervio en la cabeza del peroné: 1) te, si las fibras que lo inervan presentan signos
bloqueo de conducción; 2) disminución de la de daño axonal y existe denervación en dicho
velocidad de conducción mayor de 10 m/s en músculo, el pronóstico es mucho peor que si tan
el segmento hueco poplíteo-cabeza del peroné sólo se observa un bloqueo de conducción.
respecto al segmento cabeza del peroné-tobillo; – Estudio de conducción nerviosa sensitiva
o 3) caída de la amplitud mayor del 20% en el bilateral del nervio peroneo superficial, esti-

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Mononeuropatías crónicas 311

mulando sobre la cara lateral de la pantorrilla TABLA V. Diagnóstico diferencial de las lesiones del nervio ciático
y recogiendo en la garganta del pie entre el común, peroneo común y tibial posterior
tendón del músculo tibial anterior y el maléo- N. ciático N. N. tibial
lo lateral. Clínica común peroneo posterior
– Se recomienda realizar también estudio de con-
ducción motora del nervio tibial posterior del • Paresia
lado sintomático para descartar una afectación - Flexión de rodilla Sí No No
más difusa (radiculopatía, polineuropatía). - Eversión del pie Sí Sí No
– Se recomienda realizar electromiografía de al - Dorsiflexión del pie Sí Sí No
menos dos músculos inervados por el nervio - Inversión del pie Sí No Sí
peroneo profundo (como el pedio y el tibial - Flexión plantar del pie Sí No Sí
anterior) y uno por el nervio peroneo superficial • Hipoestesia
(como el músculo peroneo lateral largo). - Cara externa de la pierna Sí Sí No
– Además, la electromiografía de músculos no - Dorso del pie Sí Sí No
inervados por el nervio peroneo común pero - Planta del pie Sí No Sí
sí por fibras de la raíz L5 (como el músculo - Cara interna del tobillo Sí No Sí
tibial posterior que recibe su inervación a tra- - Cara externa del tobillo Sí Sí No
vés del nervio tibial posterior) es importante • Signos
para diferenciar una mononeuropatía de una - Arreflexia aquílea Sí No Sí
radiculopatía L5 o de una plexopatía lumbo- - Pie péndulo Sí Sí No
sacra.
– Para diferenciar una lesión del nervio peroneo
común de la lesión parcial del ciático común
afectando al tronco lateral se debe realizar elec- NERVIO TIBIAL POSTERIOR
tromiografía de la cabeza corta del músculo bí-
ceps femoral, que mostrará denervación en caso Origen: raíces L5 a S2. El nervio tibial posterior
de lesión proximal, siendo normal el estudio si se separa del nervio peroneo común a nivel del
la lesión afecta al nervio peroneo común por hueco poplíteo. En esta región emite una rama
debajo del hueco poplíteo(12,23). sensitiva que junto con la proveniente del nervio

TABLA VI. Diagnóstico diferencial de las causas más frecuentes de pie caído
Estudio neurofisiológico N. peroneo en cabeza Nervio ciático común Plexopatía lumbar Radiculopatía L5

ENG motor nervio peroneo ↓ amplitud o bloqueo a través ↓ amplitud ↓ amplitud Generalmente
sobre ECD y/o TA de la cabeza del peroné normal
ENG sensitivo nervio peroneo ↓ o ausente (salvo lesión ↓ o ausente ↓ o ausente Normal
superficial puramente desmielinizante)
ENG sensitivo nervio sural Normal Normal o ↓ Normal o ↓ Normal
EMG músculos inervados por el Anormal Anormal Anormal Anormal
nervio peroneo
EMG músculos inervados por el Normal Anormal (salvo lesión Anormal Generalmente
nervio tibial posterior exclusiva de rama externa) anormal
ENG: electroneurograma; EMG: electromiograma; ECD: músculo extensor común corto de los dedos; TA: músculo tibial anterior.

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312 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

N. ciaticopoplíteo externo
N. ciaticopoplíteo interno

N. peroneo

M. gemelo externo

M. gemelo interno
M. plantar delgado

N. tibial
M. flexor largo común M. sóleo
de los dedos

M. tibial posterior

M. flexor largo dedo gordo

N. plantar interno
M. flexor corto N. plantar externo
de los dedos
M. separador 5º dedo
M. separador dedo gordo
M. flexor corto 5º dedo
M. flexor corto dedo gordo M. aproximador 5º dedo

Figura 12. Nervio tibial: trayecto e inervación motora.

peroneo forman el nervio sural (safeno externo) maléolo interno se hace superficial (punto donde
que recoge la sensibilidad de la superficie externa es fácil de estimular) y se divide en sus ramas ter-
del tobillo y borde lateral del pie hasta la base del minales: los nervios calcáneos, plantar interno y
5º dedo. El nervio tibial posterior se introduce en plantar externo (Fig. 12). El nervio plantar interno
la pantorrilla entre los músculos gemelos y atraviesa pasa a través del túnel formado por el músculo ab-
el arco tendinoso del músculo sóleo. A nivel del ductor del primer dedo. Proporciona ramos moto-

Manual EMG.indb 312 9/7/07 12:07:15


Mononeuropatías crónicas 313

res a este músculo, al flexor corto del primer dedo, Debe realizarse el examen de músculos fuera de
flexor corto plantar y primer lumbrical e inervación su distribución para excluir una lesión del nervio
sensitiva de los dos tercios mediales de la planta ciático común, una plexopatía lumbosacra o una
del pie. El nervio plantar externo emite ramas mo- radiculopatía.
toras al resto de músculos intrínsecos y recoge la
sensibilidad del tercio externo de la planta del pie. Síndrome del túnel del tarso
Los nervios interdigitales son continuación de los
plantares interno y externo; cada nervio interdigital Es el atrapamiento más frecuente del nervio
se divide en dos ramas que recogen la sensibilidad tibial posterior. Este túnel, un canal osteofibroso,
de la mitad de un dedo y la mitad opuesta del se sitúa por debajo y detrás del maléolo interno
dedo contiguo. (Fig. 13). Como en el síndrome del túnel del
Inervación motora: músculos gemelos, sóleo, carpo, la causa más común es idiopática. Los
tibial posterior, flexores comunes de los dedos del síntomas principales son parestesias y disestesias
pie y del dedo gordo, abductor del dedo gordo. en el territorio de las ramas terminales del nervio
Inervación sensitiva: cara medial del pie y to- tibial posterior. Por lo general, las ramas calcá-
billo. neas se originan proximalmente al túnel tarsia-
Niveles de lesión: el nervio tibial posterior o no, por lo que el talón suele estar respetado. La
alguna de sus ramas principales pueden sufrir com- clínica mejora con el reposo y empeora con la
presión crónica en varios puntos. Los más impor- bipedestación y la deambulación. No es habitual
tantes son: 1) en el hueco poplíteo (localización que se refieran síntomas motores o que se obje-
muy infrecuente); 2) en el trayecto del túnel del tive paresia en la exploración. Puede observarse
tarso (el lugar más frecuente); 3) el atrapamiento un signo de Tinel positivo sobre el túnel tarsal.
de la rama plantar interna en el túnel del músculo Dos entidades pueden plantear confusión con el
abductor del primer dedo; y 4) la neuropatía del síndrome del túnel del tarso: la radiculopatía L5-
nervio interdigital (neuroma de Morton). S1, donde los síntomas sensitivos se extienden al
dorso del pie y existe debilidad en los músculos
Atrapamiento del nervio tibial posterior en el hueco de la pantorrilla, y la polineuropatía sensitiva, que
poplíteo suele ser bilateral y presentar una distribución
en “calcetín”.
Esta es una localización infrecuente de lesión,
ya que el nervio se localiza profundamente en el Estudio electrofisiológico
hueco poplíteo y en la pantorrilla, donde queda El estudio de conducción sensitiva de los
protegido. Casi todas las lesiones se deben a trau- nervios plantares medial y lateral, es el que ha
matismos o a masas que comprimen el nervio. mostrado mayor sensibilidad, mientras que la
Aparece debilidad en los músculos flexores del valoración de la latencia motora es menos útil.
pie, haciendo imposible el salto y la postura de El estudio sensitivo se puede realizar de forma
puntillas. El reflejo aquíleo está abolido. El dato ortodrómica, estimulando sobre los dedos pri-
clínico diferencial de esta lesión es la paresia de la mero y quinto y registrando la respuesta detrás
flexión plantar y de la inversión del pie, ausentes del maléolo interno, o de forma antidrómica,
en el síndrome del túnel del tarso. La debilidad aunque esta última puede ser difícil de valorar
del músculo tibial posterior (inversor plantar) la por el artefacto motor. Si la sintomatología es
diferencia también de una radiculopatía S1. El unilateral, la comparación entre los valores de
diagnóstico se confirma con el estudio de con- uno y otro pie permite confirmar la sospecha
ducción del nervio tibial posterior y el estudio clínica. La electromiografía puede demostrar
electromiográfico de músculos inervados por él. actividad de denervación en los músculos in-

Manual EMG.indb 313 9/7/07 12:07:16


314 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

Tendón m. tibial posterior


Vena tibial posterior
Arteria tibial posterior
N. tibial

Tendón m. flexor Retináculo de los


largo del 1er dedo músculos flexores

N. plantar lateral N. plantar medial M. separador del 1er dedo

Figura 13. Nervio tibial a su paso por el túnel del tarso.

trínsecos del pie, aunque también es frecuente Neuroma de Morton


encontrar actividad espontánea en músculos de
controles sanos y, por tanto, debe ser valorada La descripción clásica corresponde al atrapa-
con cautela. Principalmente sirve para descartar miento del nervio interdigital III-IV aunque ac-
otros procesos como una radiculopatía, un atra- tualmente se emplea el término para designar cual-
pamiento proximal del nervio tibial posterior o quier neuropatía interdigital. Se manifiesta como
una polineuropatía. un dolor por la superficie plantar, bien delimitado
entre las cabezas de dos metatarsianos, irradiado
Síndrome del túnel del músculo abductor del primer dedo a los dedos y, ocasionalmente, con sensación de
entumecimiento. La compresión del espacio mem-
El túnel del músculo abductor del primer dedo branoso reproduce el dolor y constituye una prue-
está situado en la bóveda plantar y a través de él ba clínica útil para el diagnóstico. Se han descrito
pasa el nervio plantar interno. El atrapamiento técnicas de conducción sensitiva para el estudio de
a este nivel provocaría, como síntoma principal, esta neuropatía(24).
parestesias en los dos tercios mediales de la planta
del pie.
INERVACIONES ANÓMALAS DE LAS EXTREMIDADES
Estudio electrofisiológico
El estudio de conducción sensitiva muestra No es infrecuente la presencia de variaciones
anomalías en el nervio plantar interno mientras anatómicas en la inervación de las extremidades
que es normal en el nervio plantar externo. Estos y, en un mismo paciente, pueden coincidir la
datos lo distinguen del síndrome del túnel del existencia de una inervación anómala y una neu-
tarso, en el que existe alteración en ambas ramas ropatía por atrapamiento. Es preciso considerar
sensitivas. esta posibilidad para evitar posibles errores en

Manual EMG.indb 314 9/7/07 12:07:16


Mononeuropatías crónicas 315

G2
G1

Nervio mediano

Nervio cubital

Entrecruzamiento

Figura 14. Anastomosis de Martin-Gruber (comunicación del nervio mediano al nervio cubital).

la interpretación de los hallazgos electrofisioló- – Amplitud del potencial motor (sobre abduc-
gicos(12). tor corto del pulgar) menor en la estimu-
lación distal (muñeca) que en la proximal
Comunicación del nervio mediano al nervio cubital (fosa antecubital), ya que la estimulación en
la muñeca no activa los músculos inervados
Esta comunicación, conocida como anastomosis por los axones anómalos del nervio mediano.
de Martín-Gruber, aparece en el 15-30% de la po- Normalmente la respuesta al estímulo distal
blación y con cierta frecuencia es bilateral. Implica es un 120% mayor que la del proximal. Si
casi exclusivamente a fibras motoras del nervio me- mantenemos los electrodos de registro sobre
diano (o una de sus ramas como el nervio interóseo la eminencia tenar y estimulamos el nervio
anterior), que se cruzan por el antebrazo y pasan a cubital obtendremos una respuesta de mayor
inervar músculos normalmente dependientes del amplitud desde la muñeca que desde el codo
nervio cubital, como el músculo adductor del pul- inferior (distal al epicóndilo medial). Si la
gar, el abductor del meñique y el primer interóseo anastomosis de Martin-Gruber no está pre-
dorsal (Fig. 14). Su importancia clínica radica en sente, al estimular el nervio cubital observare-
que, en el caso de una lesión del cubital en el codo, mos un potencial motor en la eminencia tenar
pueden respetarse algunos músculos normalmente con una deflexión positiva inicial y no habrá
inervados por el cubital. Por el contrario, en el su- diferencias de amplitud entre el estímulo de
puesto menos frecuente de una lesión proximal del muñeca y el de codo inferior.
mediano puede apreciarse debilidad y amiotrofia en – Si existe un síndrome del túnel carpiano, la
músculos normalmente inervados por el cubital. latencia distal motora del nervio mediano esta-
rá alargada. Las fibras del nervio mediano que
Estudio electrofisiológico discurren por la anastomosis no se ven afectadas
Al interesar a los nervios mediano y cubital, esta por el enlentecimiento del carpo y llegan a la
anastomosis puede ser reconocida en los estudios eminencia tenar mucho antes que las retrasadas
de ambos nervios. en el túnel. Por ello, al restarle la latencia pro-
En el estudio de conducción motora del nervio longada del estímulo distal a la obtenida por es-
mediano de individuos sanos, esta anastomosis es timulación proximal, resultará un valor absurdo
sugerida por los siguientes hallazgos: (extremadamente elevado) para la velocidad de

Manual EMG.indb 315 9/7/07 12:07:16


316 E. Montes Latorre, M.D. Jiménez Hernández

conducción. Además aparecerá una deflexión BIBLIOGRAFÍA


positiva al inicio, únicamente con el estímulo
proximal del nervio mediano. 1. Swash M. Nerve entrapment and compression syndromes
and other mononeuropathies. En: Swash M, Schwartz
– En el estudio de conducción motora de nervio M, eds. Neuromuscular diseases. A practical approach to
cubital (recepción sobre músculo abductor del diagnosis and management. Cambridge: University Press;
dedo meñique) se apreciará una caída de la 1997. p. 133-60.
amplitud del potencial obtenido tras estimu- 2. Patten J. Diagnosis of Cervical Root and Peripheral Nerve
lación en codo inferior respecto al obtenido Lesions Affecting the Arm. En: Patten J, ed. Neurological
Differential Diagnosis. 2ª ed. London: Springer; 1996. p.
en muñeca. Este hallazgo puede llevar a la 282-318.
conclusión errónea de que existe un bloqueo 3. Anto C. Clinical diagnosis of peripheral nerve compression
de la conducción. Se debe realizar también in the upper extremity. Orthop Clin North Am 1996; 27:
un estudio de conducción motora de nervio 227-36.
mediano con estímulo en la muñeca y en la 4 Atroshi I, Gummesson C, Johnsson R, Ornstein E, Rans-
tam J, Rosén I. Prevalence of carpal tunnel syndrome in
fosa antecubital y recepción sobre el músculo a general population. JAMA 1999; 282: 153-8.
abductor del meñique, que demostrará tam- 5. Katz JN, Simmons BP. Carpal tunnel syndrome. N Engl
bién un potencial de mayor amplitud con el J Med 2003; 346 (23): 1808-12.
estímulo proximal. 6. American Academy of Neurology, American Association
of Electrodiagnostic Medicine, American Academy of
Nervio peroneal profundo accesorio Physical Medicine and Rehabilitation. Practice para-
meter for electrodiagnostic studies in carpal tunnel
syndrome (Summary statement). Neurology 1993; 43:
El músculo extensor corto de los dedos (pedio), 2404-5.
que extiende los dedos 2º-5º del pie, está normal- 7. Jablecki CK, Andary MT, Floeter MK, Miller RG, Quartly
mente inervado por el nervio peroneo profundo. CA, Vennix MJ, et al. Practice parameter: Electrodiagnos-
tic studies in carpal tunnel syndrome. Neurology 2002; 58:
Sin embargo, hasta en un 28% de la población, el 1589-92.
músculo extensor común corto de los dedos, de
8. Preston DC. Neuropatías distales del mediano. En:
uno o ambos lados, está inervado por un nervio pe- Logigian L, ed. Neuropatías por atrapamiento y otras
roneal profundo accesorio, que es rama del nervio focales. Neurol Clin (versión española) 1999; 17 (3):
peroneo superficial. 405-21.
9. Stevens JC. AAEM minimonograph #26: The Electrodiag-
nosis of carpal tunnel syndrome. American Association
Estudio electrofisiológico of Electrodiagnostic Medicine. Muscle Nerve 1997; 20:
En el estudio de conducción motora de un 1477-563.
individuo normal, sospecharemos esta anoma- 10. Terrono A. Management of work-related upper-extremity
lía cuando, tras estímulo proximal en el nervio nerve entrapment. Orthop Clin North Am 1996; 27: 283-
93.
peroneal común (en cabeza del peroné o hueco
11. Gross PT, Tolomeo A. Neuropatías proximales del
poplíteo), el potencial recogido en el músculo
mediano. Neurol Clin (versión española)1999; 17 (3):
extensor corto de los dedos sea considerablemen- 423-42.
te de mayor amplitud que el que recogemos tras 12. Preston DC, Shapiro BE. Electromyography and neuro-
el estímulo distal del nervio peroneo profundo. muscular disorders. Clinical-electrophysiologic correlatio-
Esto se debe a que algunas fibras del nervio pero- ns. 2ª ed. Philadephia: Elsevier; 2005.
neo común destinadas a la inervación del citado 13. Gross PT, Jones HR. Proximal median neuropathies:
Electromyographic and clinical correlation. Muscle Nerve
músculo, pasan a formar parte del nervio peroneo 1992; 15: 390-5.
accesorio. Para demostrar esta variante se estimula 14. Bozentka D. Cubital tunnel syndrome pathophysiology.
por detrás del maléolo externo, obteniéndose un Clin Orthop 1998; 351: 90-4.
potencial motor que no se recoge en condiciones 15. American Association of Electrodiagnostic Medicine, Ame-
habituales. rican Academy of Neurology and American Academy of

Manual EMG.indb 316 9/7/07 12:07:17


Mononeuropatías crónicas 317

Physical Medicine and Rehabilitation. Practice parameter. 20. Katirji B. Aproximación electrodiagnóstica al paciente con
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Neurology 1999; 52: 688-90. 2002; 20 (2): 477-500.
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D. Use of the AAEM Guidelines in electrodiagnosis of 1998; 80: 47-53.
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Manual EMG.indb 318 9/7/07 12:07:17
Capítulo 23

POLINEUROPATÍAS
M. Romero Acebal, M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin

INTRODUCCIÓN • Tipificación. Si la afectación es motora, sensi-


tiva, autonómica o mixta.
Las polineuropatías (PNP) se pueden definir • Forma de comienzo. Si se trata de un problema
como un síndrome que cursa con una combina- agudo (de días o menos de cuatro semanas de
ción variable de alteraciones de tipo sensitivo, mo- instauración), subagudo (entre cuatro y ocho
tor o autonómico, debido a una afectación bilateral semanas de instauración) o crónico (de más de
y simétrica de los nervios periféricos. ocho semanas de instauración).
Cuando se sospecha una polineuropatía, debe • Curso. Si el proceso es estable, regresivo, pro-
responderse sucesivamente a las siguientes pre- gresivo o recidivante-recurrente.
guntas: ¿se trata realmente de una polineuropa- • Localización. Si los síntomas son proximales o
tía?, ¿qué tipo de polineuropatía es?, ¿cuál es su distales o afectan a nervios craneales.
etiología? y ¿qué tratamiento tiene?
Las dos primeras preguntas se responden con la TABLA I. Características clínicas del síndrome polineuropático
valoración clínica y electrofisiológica del paciente, Síntomas motores
y de ello trata este capítulo. Posteriormente, pue- • Debilidad muscular
den plantearse las otras dos cuestiones, cuya consi- • Amiotrofia
deración excede de los propósitos de este manual. • Hiporreflexia
Puede recurrirse para ello a la consulta de tratados • Hipotonía muscular
específicos sobre el tema(1-3). • Otros: fasciculaciones, calambres, temblor, etc.
Síntomas sensitivos
• Hipo-anestesia
VALORACIÓN CLÍNICA DE LAS POLINEUROPATÍAS • Parestesias, disestesias, dolor
• Ataxia de tipo sensitivo
Clínicamente, un síndrome polineuropático Síntomas autonómicos
viene definido por una serie de síntomas motores, • Anhidrosis, hipotensión ortostática, disreactividad pupilar, hipose-
sensitivos y autonómicos (Tabla I). Teniendo en creción salivar o lacrimal, disfunción genitourinaria, alteraciones
cuenta la particularidad de cada caso, se pueden gastrointestinales: diarrea, íleo paralítico, dilatación gástrica, etc.
caracterizar una serie de rasgos o peculiaridades Deformidades y trastornos tróficos
distintivas; con su correcta evaluación y el conjunto • Deformidades en manos o en pies, cifoescoliosis, artropatías neuro-
de la historia clínica se dispondrá de una infor- páticas, trastornos tróficos en la piel o uñas, ulceraciones tórpidas,
mación clínica que permita orientar los siguientes mal perforante plantar, mutilaciones, etc.
aspectos:

Manual EMG.indb 319 9/7/07 12:07:17


320 M. Romero Acebal, M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin

• Simetría. Si el problema está localizado o es TABLA II. Diagnóstico diferencial de una polineuropatía
generalizado, si es simétrico o asimétrico. • Trastornos psicógenos
• Dolor. Si el cuadro clínico se acompaña de • Trastornos del sistema nervioso central
dolor o si hay un trastorno sensitivo, general- • Enfermedades de motoneurona espinal
mente propioceptivo, que cursa sin molestias • Enfermedades de la transmisión neuromuscular
dolorosas. • Miopatías
• Herencia. Si hay o no antecedentes familiares • Mononeuropatías/mononeuropatías múltiples
o datos sugestivos de que se trate de una enfer-
medad hereditaria (consanguinidad conocida
o probable). ropático plantea un diagnóstico diferencial con
• Factores desencadenantes o acompañantes. Si otros procesos (Tabla II). Tanto en los trastornos
hay algún posible proceso o motivo relaciona- psicógenos como en las alteraciones del sistema
do con la aparición del cuadro clínico, como nervioso central el estudio electrofisiológico de
enfermedades infecciosas o intercurrentes, ex- nervios periféricos es normal; atención especial
posición a tóxicos, medicamentos, etc., o si el pueden requerir los síndromes cordonales pos-
trastorno se acompaña o se asocia a alteraciones teriores, en los que la sintomatología puede ser
en otros órganos o sistemas, como fiebre, sín- similar a una alteración neuropática, e incluso en
drome constitucional, alteraciones gastrointes- ocasiones, combinarse ambas alteraciones (sín-
tinales, cardiocirculatorias, pulmonares, en la dromes radiculocordonales posteriores). En estos
piel o mucosas, en el cabello, etc. casos, el estudio electrofisiológico permite valorar
No obstante, pese a una experta y rigurosa va- si existe una alteración neurógena periférica, pu-
loración clínica, algunos de los aspectos previos diendo ser el examen ampliado con la realización
pueden ser dudosos o imprecisos, y es la electrofi- de potenciales evocados somatosensoriales, para el
siología el instrumento adecuado para confirmarlos estudio de la conducción nerviosa central en los
y precisarlos(4). cordones posteriores. En otros capítulos se expre-
san las alteraciones electrofisiológicas encontradas
en las enfermedades de motoneuronas espinales,
VALORACIÓN ELECTROFISIOLÓGICA DE LAS de la transmisión neuromuscular y en las miopa-
POLINEUROPATÍAS tías. Una mononeuropatía es una enfermedad o
trastorno que afecta a un nervio periférico motor,
La valoración electrofisiológica de una polineu- sensitivo o mixto, siendo la alteración clínica y
ropatía tiene una triple finalidad: neurofisiológica fácilmente diferenciable de una
1. Establecer el diagnóstico de certeza de polineu- polineuropatía. No obstante, hay enfermedades
ropatía. que cursan con la alteración sucesiva de varios
2. Caracterizar el tipo de PNP (tipificación-clasi- nervios periféricos, dando lugar en estadios avan-
ficación). zados a lesiones nerviosas múltiples que pueden
3. Cuantificar el grado de afectación y servir como confundirse con una polineuropatía. En estos
parámetro de referencia evolutivo y en cuanto casos, la asimetría de la afectación y la evolución
a posible respuesta al tratamiento (estado-evo- clínica del proceso sirven de orientación al diag-
lutividad). nóstico.

Valoración diagnóstica Caracterización electrofisiológica de las polineuropatías

Pese a una correcta valoración clínica, en El estudio neurofisiológico permite precisar los
muchas ocasiones un posible síndrome polineu- siguientes aspectos:

Manual EMG.indb 320 9/7/07 12:07:18


Polineuropatías 321

Figura 1. Esquema simplificado de la conducción nerviosa. ME: médula espinal; NSS: núcleos suprasegmentarios; GR: ganglio raquídeo; VSS: vías
sensitivas intramedulares; NM: neuronas motoras.

• Tipificación. Corroborar con la clínica si la produciéndose una degeneración axonal distal con
afectación es motora, sensitiva, autonómica o progresión proximal en las terminaciones nervio-
mixta. sas periféricas (degeneración axonal retrógrada o
• Localización. Corroborar si la localización de dying back), pero que también puede ser extensiva
la afectación nerviosa es proximal o distal, y a prolongaciones axonales centrales eferentes de
valorar posibles lugares de bloqueo o retraso las vías médulocorticales. En situaciones de re-
en la conducción. cuperación, tras este proceso lesivo agudo (como
• Simetría. Conformar con la clínica si el proble- después de la supresión de exposición a un agente
ma está focalizado o es generalizado, simétrico tóxico, drogas o tras la corrección de un déficit
o asimétrico. carencial) puede existir una regeneración axonal
• Caracterización fisiopatológica. Averiguar si distal periférica, en mayor o menor proporción,
la lesión nerviosa es axonal, desmielinizante o pero no suele ocurrir así en el sistema nervioso
mixta. central, donde el proceso regenerativo se suele
Las tres primeras apreciaciones definen y re- bloquear por una proliferación astrocitaria, por
afirman hallazgos ya valorados por la clínica; sin lo que suelen persistir las alteraciones sensitivas
embargo, la caracterización fisiopatológica de una cordonales posteriores tras las PNP axonales agu-
PNP en axonal o desmielinizante únicamente será das aceptablemente recuperadas(1). Electrofisioló-
expresada mediante el examen electrofisiológico. gicamente, el daño axonal agudo o subagudo se
Desde el punto de vista fisiopatológico pueden traducirá en el electromiograma de los músculos
ocurrir las siguientes alteraciones, que se esque- afectos (generalmente distales), por la aparición, a
matizan en las Figuras 1 a 6: polineuropatía por partir de un periodo aproximado de dos semanas,
lesión axonal aguda o subaguda, polineuropatía por de un patrón neuropático agudo caracterizado
lesión axonal crónica, polineuropatía por lesión por actividad denervativa en el reposo muscular
desmielinizante aguda y polineuropatía por lesión (fibrilaciones, ondas positivas, etc.) y apreciación
desmielinizante crónica. durante el esfuerzo de contracción muscular de
En las polineuropatías axonales agudas y una pérdida de unidades motoras, con potencia-
subagudas (Fig. 2), como pueden ser las causadas les de unidad motora de características normales
por agentes tóxicos o drogas, ocurre una alteración o incluso reducidos de amplitud. En el examen
en el metabolismo neuronal y de transporte axonal, electroneurográfico, y debido a la pérdida de fibras

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322 M. Romero Acebal, M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin

Figura 2. Patogenia de las alteraciones neurofisiológicas en las polineuropatías axonales agudas.

Figura 3. Patogenia de las alteraciones neurofisiológicas en las polineuropatías axonales crónicas.

axonales de conducción rápida, puede haber una axonal, estarán disminuidos de amplitud, con mor-
ligera disminución en las velocidades de conduc- fología normal. En situaciones de recuperación
ción nerviosa, pero esta disminución es moderada tras polineuropatías agudas o subagudas, debido
y nunca inferior al 70-80% del límite inferior de la al proceso de regeneración axonal y por la reiner-
normalidad para la conducción en un nervio. Los vación colateral de fibras musculares vecinas por
potenciales evocados, y en relación a la pérdida parte de axones recuperados o indemnes, aparecen

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Polineuropatías 323

Figura 4. Patogenia de las alteraciones neurofisiológicas en las polineuropatías desmielinizantes agudas.

Figura 5. Patogenia de las alteraciones neurofisiológicas en las polineuropatías desmielinizantes crónicas adquiridas.

en el estudio electromiográfico potenciales de uni- tar la amplitud, hasta alcanzar los valores normales
dad motora de morfología irregular, con polifasia o quedar algo disminuidos, con morfología normal
y aumento en su duración y amplitud (potenciales o irregular(5,6).
de reinervación); en el examen neurográfico, los En las polineuropatías axonales crónicas (Fig.
potenciales de respuesta nerviosa pueden aumen- 3), como las de origen metabólico (p. ej., en la

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324 M. Romero Acebal, M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin

Figura 6. Patogenia de las alteraciones neurofisiológicas en las polineuropatías desmielinizantes crónicas hereditarias.

diabetes mellitus o en la insuficiencia renal), ca- un 125% del límite superior de la normalidad),
rencial o tóxico, ocurre una alteración neuroaxo- pero con PES de amplitud muy escasa, o a veces
nal persistente que ocasiona una degeneración imposibles de obtener, sobre todo en miembros
axonal distal retrógrada progresiva que suele ser inferiores; estas alteraciones también se aprecia-
más importante y significativa en fibras sensiti- rán en nervios motores, donde generalmente,
vas que en motoras, y predominantemente distal. la afectación va a ser menos notoria que en los
Electrofisiológicamente, por el daño axonal motor sensitivos. En razón a las alteraciones patológicas
crónico, se pueden observar hallazgos similares expresadas, en las polineuropatías axonales cróni-
a los descritos en alteraciones axonales agudas y cas las ondas F tendrán unos valores de latencia
subagudas, pero con la particularidad de que el mínima normales o moderadamente prolongados,
daño axonal suele ser predominantemente sensiti- hasta el 120% del límite superior de la normali-
vo, con lo que el estudio electromiográfico pudie- dad, y lo mismo puede aplicarse a los reflejos H,
ra ser normal o cercano a la normalidad, siendo que pueden estar frecuentemente ausentes desde
mas fácil encontrar las alteraciones en músculos miembros inferiores. En algunas polineuropatías
distales de miembros inferiores. Al ser un proceso axonales crónicas de predominio sensitivo o auto-
degenerativo crónico, existe una escasa o nula ca- nómico (como por ejemplo, en algunos casos de
pacidad reinervativa, por lo que los potenciales de neuropatías diabéticas, amiloidóticas y criptoge-
unidad motora en los músculos afectos serán de néticas), la alteración ocurre en fibras axonales de
morfología normal y frecuentemente reducidos de pequeño calibre, por lo que puede no detectarse
amplitud. En la electroneurografía, los hallazgos alteraciones en el estudio electroneurográfico(5,6).
más relevantes van a ser las alteraciones sensitivas, La mayoría de las polineuropatías axonales cró-
con velocidades de conducción nerviosa modera- nicas suelen combinar también un componente
damente reducidas (no inferiores al 70-80% del lí- mixto desmielinizante que pudieran ocasionar una
mite inferior de la normalidad), y latencias distales mayor lentificación en los valores de velocidad de
normales o moderadamente prolongadas (hasta conducción nerviosa.

Manual EMG.indb 324 9/7/07 12:07:19


Polineuropatías 325

En las polineuropatías desmielinizantes agudas hallazgos neurofisiológicos cumplen los criterios de


(Fig. 4) ocurre una lesión inflamatoria multiseg- una polineuropatía desmielinizante con una mor-
mentaria en los nervios periféricos y en las raíces fología de localización difusa o multifocal. Una
nerviosas, de origen disinmune. El cuadro más neuropatía poco frecuente, pero peculiar por su
común es el síndrome de Guillain-Barré, pero presentación, es la neuropatía motora multifocal
también pueden aparecer polineuropatías de ori- con bloqueos en la conducción, que puede cursar
gen parainfeccioso, en infecciones por VIH, pa- con una clínica de debilidad distal y amiotrofia,
raneoplásico, en vasculitis y por algunos agentes que simula una enfermedad de motoneurona es-
tóxicos. Pese a que característicamente el daño está pinal; es característico de este cuadro la existencia
referido a la mielina, también puede existir una de bloqueos en la conducción nerviosa motora,
lesión axonal concomitante, debido a la intensidad con normalidad en la conducción sensitiva; estos
de la afectación inflamatoria o variantes clínicas bloqueos pueden apreciarse en territorios nerviosos
con daño axonal(7). Esto se traducirá electromio- distales, pero frecuentemente ocurren proximal-
gráficamente en la presencia de actividad dener- mente, por lo que es necesario la valoración de
vativa en el reposo muscular en hasta el 70% de segmentos proximales nerviosos y de segmentos
los pacientes, lo que indica gravedad del proceso. radiculares para su diagnóstico. Las polineuropa-
Los criterios electroneurográficos definitorios de tías desmielinizantes crónicas hereditarias (Fig.
una polineuropatía desmielinizante ya han sido 6) tienen una diferenciación neurofisiológica ca-
expuestos en el capítulo 5, y pueden resumirse racterística, y es que, debido a la homogeneidad
en que deben concurrir, al menos, cuatro de los global de la desmielinización de sus fibras nervio-
siguientes hallazgos: existir en dos o más nervios sas, presentan una lentificación de la velocidad de
examinados una importante disminución de la conducción nerviosa, similar y homogénea, tanto
velocidad de conducción nerviosa, con valores distal como proximal, con potenciales evocados
inferiores al 80-70% de la normalidad, presencia de morfología normal, sin signos de dispersión ni
de bloqueos en la conducción nerviosa (parciales bloqueos(11).
o totales), dispersión temporal de los potenciales De una manera general y simplificada, tal como
de respuesta nerviosa, latencias distales aumenta- se muestra en la Tabla III, velocidades de conduc-
das, con valores superiores a 125-150%, ondas F ción nerviosa normales o ligeramente lentas, junto
ausentes o con latencias prolongadas, con cifras a latencias distales normales y potenciales de acción
superiores al 120-150%(8-10). En las polineuropa- muscular compuestos de baja amplitud, con activi-
tías desmielinizantes agudas (como en el síndrome dad denervativa (fibrilaciones y ondas positivas) en
de Guillain-Barré), estas alteraciones pueden no la electromiografía de aguja durante el reposo mus-
aparecer en los primeros días del proceso, ser de cular, son indicativos de una polineuropatía axonal,
variable localización o tener un predominio o rele- mientras que velocidades de conducción nerviosa
vancia únicamente proximal radicular, por lo que muy lentas, con latencias distales prolongadas y po-
la elección del momento para el estudio (o repeti- tenciales de respuesta nerviosos donde existan sig-
ción diferida del mismo si el primero fue negativo nos de bloqueo y/o dispersión temporal y ausencia
y muy precoz) y la valoración de múltiples nervios o escasa actividad denervativa en los músculos, son
(incluso el nervio facial si está clínicamente afec- indicativos de una polineuropatía desmielinizante.
to) y de segmentos radiculares mediante exámenes De lo anteriormente expuesto, y adaptando las
reflexográficos son de obligada realización. recomendaciones de la Asociación Americana de
En las polineuropatías desmielinizantes cró- Medicina Electrodiagnóstica(12), el protocolo de
nicas hay que distinguir dos tipos: las de origen estudio electrofisiológico sistematizado para la
adquirido y las hereditarias. En la polineuropatía valoración de un paciente con sospecha de poli-
desmielinizante crónica inflamatoria (Fig. 5), los neuropatía debe incluir:

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326 M. Romero Acebal, M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin

TABLA III. Alteraciones electrofisiológicas en las polineuropatías axonales y desmielinizantes


PNP axonal PNP desmielinizante

Electromiografía
• Reposo muscular Denervación Normal
• Máxima contracción Disminuida Disminuida o normal
• Potenciales de unidad motora
- Amplitud Normal* Normal#
- Duración Normal** Normal##
- Polifasia Normal* Normal##
Electroneurografía
• Latencias distales Normales Prolongadas
• Velocidades de conducción Normales Disminuidas
• Bloqueos de conducción Ausentes Presentes
• Respuestas
- Amplitud Reducida Algo reducida
- Forma Normal Dispersión temporal
Reflexograma
• Onda F: latencia Normal o ausente Prolongada o ausente
• Reflejo H: latencia Normal o ausente Prolongada o ausente
- Puede haber un (*) aumento o (**) prolongación en PNP axonales postagudas con reinervación.
- Puede haber una (#) disminución o (##) prolongación en PNP desmielinizantes con lesión axonal y reinervación.

• Electroneurografía, con valoración de velocidad de cial básico, debe, en ocasiones, modificarse el plan
conducción nerviosa proximal y distal, en nervios de estudio, de acuerdo con los hallazgos que van
motores y sensitivos de las cuatro extremidades apareciendo; así, se harán, a veces comparaciones
(como pueden ser nervios medianos y cubitales con el lado opuesto para valorar asimetrías (como por
en sus componentes motor y sensitivo, nervios ejemplo, en sospecha de polineuropatías asimétricas
peroneos y tibiales motores y nervios surales). o neuropatías compresivas); valoraciones de conduc-
• Electromiografía de aguja de músculos distales ción en determinados nervios o segmentos nerviosos
de dichos nervios. no habituales para excluir compresiones o bloqueos
• Reflexograma (onda F) en miembros superio- (como por ejemplo, de segmentos proximales de
res (nervios medianos o cubitales) e inferiores nervios motores para diagnosticar una neuropatía
(nervios tibiales). motora multifocal o estudios de los nervios radial o
Este protocolo de estudio es extenso, por lo que cubital en el codo en sospecha de neuropatías con
se decidirá, siempre con la valoración clínica previa, labilidad a la presión o compresivas, etc.); o estudios
la simplificación del mismo si el cuadro clínico está electromiográficos más extensos (si se sospecha una
suficientemente claro, teniendo en cuenta que la enfermedad de motoneurona o valoración de mus-
conjunción de una correcta valoración clínica y la culatura paraespinal, si se plantea el diagnóstico di-
adecuación del estudio que debe realizarse son las ferencial entre radiculopatía y plexopatía). También
claves para un correcto diagnóstico. Debe recordarse debe tenerse en cuenta que mediante los estudios
que el examen neurofisiológico es un proceso diná- neurofisiológicos convencionales no es posible hacer
mico y, aunque se realice con un planteamiento ini- una valoración de las fibras nerviosas de pequeño

Manual EMG.indb 326 9/7/07 12:07:19


Polineuropatías 327

calibre con conducción lenta (autonómicas, dolor, TABLA IV. Rasgos clínicos y electrofisiológicos definitorios de una
temperatura); en polineuropatías cuya manifestación polineuropatía
principal es la afectación de dicho tipo de fibras, • Tipificación: Motora, sensitiva, autonómica, mixta
habrá que recurrir a otras técnicas neurofisiológicas • Forma de comienzo: Aguda, subaguda, crónica
como el test de respuestas reflejas autónomas(13), test • Curso: Estable, regresiva, progresiva,
cuantitativos de dolor o potenciales evocados de res- remitente-recurrente
puesta a dolor(14-16). • Localización: Proximal, distal, nervios craneales
• Simetría: Simétrica, asimétrica
Cuantificación de la polineuropatía y evolución • Dolor: Hereditaria, no hereditaria
• Desencadenantes: Con o sin factores desencadenantes
En la mayoría de las ocasiones, la gravedad de • Acompañantes: Con o sin factores acompañantes
una polineuropatía y su evolución se determinan • Fisiopatología: Axonal, desmielinizante, mixta
adecuadamente desde el punto de vista clínico. En
ocasiones, sin embargo, es preciso utilizar los estu-
dios eléctricos para precisar determinados aspectos
evolutivos. Es el caso de pacientes participantes en los parámetros caracterizadores que figuran en la
ensayos clínicos o en situaciones de interés médico- Tabla IV. Siguiendo dichos parámetros, se pueden
legal. En estos casos es preciso limitar al máximo establecer una serie de patrones de presentación
las exploraciones, dadas las molestias que los estu- que pueden ser de utilidad en cuanto a la etiología
dios neurofisiológicos producen en los pacientes. de la polineuropatía, como se muestra en la Tabla
VI. Esta consideración etiológica es orientativa y
serán necesarios otros estudios complementarios(17)
ORIENTACIÓN DIAGNÓSTICA (Tabla V) para llegar al diagnóstico definitivo. Vale
CLÍNICO-ELECTROFISIOLÓGICA DE LAS POLINEUROPATÍAS la pena recordar que este objetivo no siempre es
posible: en algunos centros de referencia sólo consi-
La valoración clínica y electrofisiológica de una guen alcanzar un diagnóstico etiológico en el 75%
polineuropatía permite definirla de acuerdo con de los casos(18).

TABLA V. Estudios complementarios en la valoración de una polineuropatía


• Protocolo básico
- Hemograma, VSG
- Bioquímica general (incluidos glucemia, urea, sodio, potasio, calcio, pruebas funcionales hepáticas, CK y aldolasa)
- Sistemático de orina y sedimento
- Proteinograma e inmunoelectroforesis y proteinuria de Bence-Jones
- Vitamina B12 y ácido fólico
- Rx de tórax
• Estudios opcionales
- Analíticos: ácido metilmalónico y homocisteína, hemoglobina hidroxilada, serología de lúes, de borrelia, de VIH, serología reumática, crioglobu-
linas, hormonas tiroideas, parathormona, anticuerpos antinucleares, anticuerpos onconeuronales (anti Hu, otros), anticuerpos antigangliósido,
anticuerpos anti-MAG, tóxicos o metales en sangre y orina, determinación de porfirinas en sangre y orina, estudios de genética molecular (en
ciertas PNP hereditarias)
- Estudio del líquido cefalorraquídeo
- Estudios de imagen: TAC tóraco-abdominal, pélvica, RMN, ecografía de abdomen, gammagrafía ósea
- Estudio neuropatológico: biopsia de nervio periférico, de piel (en algunas PNP selectivas de fibras finas)

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328 M. Romero Acebal, M.I. Chamorro Muñoz, F. Pérez Errazquin

TABLA VI. Polineuropatías: clasificación por síndromes clínico-neurofisiológicos y etiología


Axonales Desmielinizantes

1. PNP sensitivomotora, proximal y distal, simétrica


• Agudas
- Síndrome de Guillain-Barré (variante axonal) Síndrome de Guillain-Barré
- PNP del enfermo crítico Difteria
- Otras:
Mononucleosis infecciosa
PNP en diabetes mellitus precipitada por insulina
Hepatitis viral
Tóxicos (talio, triortocresilfosfato, etc.)
Porfiria aguda intermitente
PNP paraneoplásica
PAN y otras vasculitis (raro)
• Crónicas PNP crónica desmielinizante idiopática

2. PNP sensitivo-motora, distal, simétrica


• Agudas-subagudas
- Tóxicas: alcohol, drogas de abuso
- Metales pesados (Pb,As,Hg,Ta,Au,Pt)
- Disolventes industriales
- Fármacos*
- Carencial: déficit de vitamina B12 y otros estados carenciales
• Crónicas
- Tóxicas: Alcohol
- Metabólicas: Diabetes mellitus
Uremia (insuficiencia renal crónica)
Hipotiroidismo
Acromegalia
- Carencial: Déficit de vitamina B12 y otros estados carenciales
- Paraproteinémicas: Mieloma Macroglobulinemia, MGUS
- Hereditarias** Hereditarias**

3. PNP sensitivo-motora, distal, asimétrica (mononeuropatías múltiples) (Cap. 24)

4. PNP motora sin alteración sensitiva, distal, simétrica o asimétrica


• Crónicas
- ELA y otras enfermedades de motoneurona espinal Neuropatía motora multifocal con bloqueos en la conducción

5. PNP sensitivo-motora, proximal y distal, asimétrica: (plurirradiculopatías/plexopatías)


• Agudas-subagudas
- Polirradiculopatía o plexopatía por diabetes mellitus Plexopatías por labilidad a la presión
- Inflamatorias: plexopatías inflamatorias idiopáticas Plexopatías inflamatorias idiopáticas
- Infiltrativas: carcinomatosis o linfomatosis meníngea
- Infecciosas: Herpes zóster
- Compresivas: hernias discales, tumores, hematomas, etc.

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Polineuropatías 329

TABLA VI. (continuación) Polineuropatías: clasificación por síndromes clínico-neurofisiológicos y etiología


Axonales Desmielinizantes

6. PNP sensitiva sin alteración motora, distal, simétrica


• Agudas
- Tóxicos
- Fármacos
- Metabólica: PNP en diabetes mellitus inducida por insulina
• Crónicas
- Tóxicos
- Fármacos
- Metabólicas: diabetes mellitus, uremia, hipotiroidismo, acromegalia
- PNP sensitiva criptogenética
- Hereditarias: neuropatías sensitivas hereditarias, amiloidosis

7. PNP sensitiva pura, asimétrica: (ganglionopatías)


• Agudas-subagudas
- Tóxicos (cisplatino, intoxicación por piridoxina...)
- Infección VIH
• Crónicas
- Paraneoplásica
- Síndrome de Sjögren
- Neuropatía sensitiva idiopática

8. PNP autonómicas
• Agudas-subagudas
- Síndrome de Guillain-Barré
- Porfiria
- Tóxicos: vincristina
• Crónicas
- Diabetes mellitus
- Amiloidosis (familliar o adquirida)
- Infección VIH
- Pandisautonomía idiopática
*Existe una gran variedad de fármacos que pueden causar PNP, para su consideración se recomiendan las citas bibliográficas 1, 2 y 3.
**Para consulta de variantes de PNP hereditarias se recomiendan las citas bibliográficas 1, 2 y 3.

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Manual EMG.indb 329 9/7/07 12:07:20


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Manual EMG.indb 330 9/7/07 12:07:20


Capítulo 24

MONONEUROPATÍA MÚLTIPLE
J. Pardo Fernández, M. Noya García, J. Castillo Sánchez

INTRODUCCIÓN
A B
La mononeuropatía múltiple, también deno-
minada multineuritis o mononeuritis múltiple, se
define como la afectación de dos o más nervios pe-
riféricos en más de una extremidad, incluyendo la
posible afectación de nervios craneales(1). Junto con
las mononeuropatías y polineuropatías, constituye
uno de los patrones clásicos de afectación clínico-
electromiográfica del sistema nervioso periférico.
Aunque generalmente la afectación concomi-
tante o sucesiva de varios nervios periféricos es fá-
cilmente identificable desde el punto de vista clíni-
co (p. ej., afectación del nervio peroneo izquierdo
y nervio cubital derecho), a medida que pasa el
tiempo, las lesiones individuales de varios nervios
puede dar lugar a un patrón confluente similar a
una polineuropatía distal simétrica, situación de-
nominada mononeuropatía múltiple solapada (Fig.
Figura 1. Patrón de mononeuropatía múltiple (A) y de mononeuropatía
1). En estos casos, el estudio electrofisiológico per- múltiple solapada (B).
mite realizar el diagnóstico diferencial al objetivar
asimetrías en la afectación nerviosa entre un lado y
otro. La identificación de este patrón lesional tiene importante tener en cuenta que este patrón clíni-
marcadas implicaciones al estudiar a un paciente co-electromiográfico no sólo ocurre en lesiones
con afectación del sistema nervioso periférico, ya isquémicas del nervio (vasculitis, diabetes, enfer-
que limita el diagnóstico diferencial (Tabla I). medades del tejido conectivo). También puede
ser la manifestación de procesos que cursan con
desmielinización y atrapamientos nerviosos múl-
ETIOLOGÍA tiples, como la neuropatía tomacular (neuropatía
hereditaria con susceptibilidad a las parálisis por
Aunque clásicamente la mononeuropatía presión), polineuropatías desmielinizantes infla-
múltiple se ha relacionado con las vasculitis, es matorias agudas o crónicas, neuropatía motora

Manual EMG.indb 331 9/7/07 12:07:21


332 J. Pardo Fernández, M. Noya García, J. Castillo Sánchez

TABLA I. Etiología de la mononeuropatía múltiple Hodgkin, diabetes, colitis ulcerosa, carcinomas y


Lesiones isquémicas enfermedades del tejido conectivo). La manifes-
• Vasculitis, diabetes, amiloidosis, enfermedades del tejido conectivo, tación clínica y electromiográfica más frecuente
vasculopatía aterosclerótica es la multineuritis, aunque también se ha descrito
en pacientes con neuropatía sensitiva distal y po-
Lesiones desmielinizantes (atrapamientos nerviosos múltiples) lineuropatía distal simétrica sensitivo-motora de
• Polineuropatía desmielinizante inflamatoria aguda y crónica, tipo axonal o desmielinizante(2). La variedad de
neuropatía tomacular, polineuropatía simétrica distal con cuadros y patrones electromiográficos asociados
atrapamientos en lugares frecuentes de compresión nerviosa, sugieren que la perineuritis es una enfermedad
artritis reumatoide, neuropatía motora multifocal, neuropatías inespecífica.
paraproteinémicas

Infecciones
• Lepra, VIH, enfermedad de Lyme, herpes zóster ENFOQUE DIAGNÓSTICO
Lesiones infiltrantes
La aproximación diagnóstica ante un pacien-
• Carcinomas, linfomas, leucemias, neurofibromatosis
te con mononeuropatía múltiple se inicia con la
Lesiones granulomatosas realización de una historia clínica dirigida por sis-
• Sarcoidosis temas y una exploración física detallada (general
y neurológica). En los antecedentes personales
Perineuritis sensitiva
debemos indagar sobre posibles enfermedades
Tóxicos relevantes, como diabetes, artritis reumatoide o
• L-triptófano, dapsona, plomo lupus eritematoso sistémico. Se interrogará de for-
ma intencionada sobre la existencia de síntomas
generales y sistémicos (pérdida de peso, astenia,
multifocal, artritis reumatoide, o pacientes con anorexia, fiebre, artritis). Los factores geográficos
polineuropatías distales simétricas que tienen, son relevantes en caso de que el paciente viva en
de forma sobreañadida, atrapamientos nerviosos áreas endémicas de lepra. La historia familiar de
periféricos en lugares habituales de compresión síntomas de compresión nerviosa periférica obliga
nerviosa (nervio mediano en el túnel carpiano, a descartar una neuropatía hereditaria con sus-
nervio cubital en el canal epitrócleo-olecrania- ceptibilidad a las parálisis por presión (neuropatía
no, nervio peroneo en cabeza peroneal, etc.). Por tomacular). Aparte de una detallada exploración
esta razón algunos autores prefieren el término de neuromuscular, se debe realizar una exploración
mononeuropatía múltiple a los de multineuritis o física general en busca de lesiones cutáneas, hi-
mononeuritis múltiple, que parecen implicar la pertensión arterial, artritis, etc.
existencia de un proceso inflamatorio de base. El estudio electromiográfico es imprescindible
Otras posibles etiologías incluyen infecciones en estos pacientes. Dado el patrón asimétrico y
(lepra, VIH, Borrelia, herpes zóster), enfermedades multifocal de la mononeuropatía múltiple es pri-
granulomatosas (sarcoidosis), infiltración nerviosa mordial realizar un estudio exhaustivo, que incluya
de origen tumoral (carcinoma, linfomas, leuce- el mayor número de nervios posibles, valorando
mias) y perineuritis (Tabla I). Esta última entidad, siempre asimetrías de afectación al comparar un
la perineuritis consiste en un engrosamiento del lado con el otro (diferencias de amplitud del poten-
perineuro asociado a una degeneración de las cé- cial evocado motor o sensitivo de más de un 50%).
lulas perineurales y a una reacción inflamatoria a De esta forma podremos realizar el diagnóstico de
dicho nivel. Se ha descrito en relación con varias mononeuropatía múltiple, incluso en pacientes
enfermedades (crioglobulinemia, linfomas no con un patrón clínico de aparente polineuropatía

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Mononeuropatía múltiple 333

distal simétrica en los que podrán observarse da- TABLA II. Abordaje diagnóstico de la mononeuropatía múltiple
tos de asimetría al comparar un lado con el otro Historia clínica dirigida por sistemas
(mononeuropatía múltiple solapada). También • Existencia de enfermedades relevantes (diabetes, artritis reumatoide,
podremos detectar lesiones en nervios no afecta- lupus eritematoso diseminado)
dos clínicamente, como ocurre en la neuropatía • Síntomas generales y sistémicos
tomacular. La afectación neurográfica permitirá • Factores geográficos
además orientar la biopsia nerviosa cuando exista • Historia familiar
la sospecha de vasculitis(3).
Exploración física detallada
Uno de los principales objetivos del estudio
• Lesiones cutáneas, HTA, artritis, etc.
electromiográfico ante un paciente con mononeu-
ropatía múltiple es esclarecer el tipo de afectación Electromiografía
nerviosa subyacente (lesión axonal o desmielini- Pruebas complementarias
zante), de máxima relevancia de cara al diagnós- • Pruebas de laboratorio
tico diferencial. En caso de afectación axonal, (Hemograma, VSG, coagulación, bioquímica, orina, test de tolerancia
el estudio neurográfico muestra una afectación oral a la glucosa, inmunoelectroforesis, FR, complemento, crioglobu-
asimétrica, con disminución de la amplitud de la linas, ECA, ANA, ANCA, serología hepatitis A, B y C, VIH, lúes, Borrelia)
respuesta evocada motora o sensitiva o abolición • Rx tórax, TC torácica
de la misma, velocidad de conducción nerviosa • Estudio de LCR
normal o ligeramente disminuida y preservación • Biopsia de piel, nervio y/o músculo
de las latencias distales motoras. La afectación es • Angiografía abdominal
típicamente asimétrica, tanto entre el lado dere-
cho e izquierdo como entre las extremidades su-
periores e inferiores. En la EMG de aguja existe
en el reposo actividad muscular espontánea (fi- NEUROPATÍA VASCULÍTICA
brilaciones, ondas positivas) y al esfuerzo traza-
dos con un patrón de reclutamiento reducido en Las vasculitis son entidades que cursan con in-
el territorio de los nervios afectados. En caso de flamación y necrosis de la pared de los vasos sanguí-
lesiones desmielinizantes, existe aumento de las neos en relación con mecanismos autoinmunes(4).
latencias distales motoras, alteración de las ondas Existen múltiples clasificaciones de las mismas, lo
F, marcada disminución de la velocidad de con- que refleja la dificultad para agrupar a cuadros
ducción nerviosa motora o sensitiva, bloqueos de tan heterogéneos, que pueden afectar a diferentes
la conducción o dispersión temporal. En caso de órganos y sistemas, y a vasos de diferente calibre.
neuropatía motora multifocal, el estudio EMG En las Tablas III y IV se detallan dos de las clasi-
será la prueba diagnóstica definitiva si aparecen ficaciones clásicamente utilizadas desde el punto
bloqueos de la conducción nerviosa motora con de vista clínico: la de la Asociación Americana de
preservación de la respuesta evocada sensitiva en Reumatología(5) y la de la conferencia de consenso
el punto del bloqueo motor. sobre la nomenclatura de las vasculitis sistémicas,
Los estudios complementarios (Tabla II) se basada en el tamaño y hallazgos histopatológicos de
encaminan a filiar la sospecha clínica de base, y los vasos afectados(6). En la actualidad(7), las vasculi-
deben ser individualizados según los hallazgos clí- tis se suelen clasificar en sistémicas y no sistémicas
nico-electromiográficos. (afectación exclusiva de nervio periférico y mús-
A continuación se comentan algunos aspectos culo). A su vez, las vasculitis sistémicas se dividen
de la neuropatía vasculítica, enfermedad que siem- en primarias (de causa desconocida) y secundarias
pre debe tenerse en cuenta ante un paciente con (debidas a virus, drogas o enfermedades del tejido
mononeuropatía múltiple. conectivo).

Manual EMG.indb 333 9/7/07 12:07:21


334 J. Pardo Fernández, M. Noya García, J. Castillo Sánchez

TABLA III. Clasificación de las vasculitis (Asociación Americana de TABLA IV. Clasificación de las vasculitis (Conferencia de consenso,
Reumatología, 1990)(5) 1994)(6)
Grupo I: Vasculitis necrosante sistémica Vasculitis de grandes vasos (aorta, carótida)
PAN, enfermedad de Churg-Strauss, granulomatosis de Arteritis temporal, arteritis de Takayasu
Wegener Vasculitis de vasos de mediano calibre (arterias de pequeño o de
Grupo II: Vasculitis por hipersensibilidad mediano calibre)
Púrpura de Henoch-Schönlein, enfermedad del suero, PAN clásica, enfermedad de Kawasaki
infecciones, drogas, neoplasias, enfermedades del tejido Vasculitis de vasos pequeños (capilares, vénulas, arteriolas)
conectivo Granulomatosis de Wegener, enfermedad de Churg-Strauss, poliangeítis
Grupo III: Arteritis de células gigantes microscópica, púrpura de Henoch-Schönlein, crioglobulinemia esencial,
Arteritis temporal, arteritis de Takayasu angeítis leucocitoclástica cutánea
Grupo IV: Vasculitis localizadas
Vasculitis aislada del sistema nervioso periférico, angeítis
aislada del sistema nervioso central si se asocian síntomas generales, afectación de la
piel o de otros órganos, o una enfermedad autoin-
mune de base.
La neuropatía vasculítica puede ser la primera
manifestación de la vasculitis, e incluso la única. Diagnóstico
Se debe a la inflamación y oclusión de los vasa
nervorum que produce una isquemia nerviosa. Es Electromiografía
más frecuente en las vasculitis sistémicas (primarias Desde el punto de vista electromiográfico, la
y secundarias). En cuanto a la vasculitis aislada del neuropatía vasculítica cursa con una afectación
sistema nervioso periférico, es en la actualidad la axonal asimétrica, tanto de fibras motoras como
tercera causa de neuropatía vasculítica. sensitivas(9). Ante la sospecha de una neuropatía
vasculítica, es esencial analizar el mayor número
Sintomatología clínica posible de nervios, en extremidades superiores e in-
feriores, comparando siempre los parámetros neu-
La edad media de estos pacientes se sitúa en- rográficos (sobre todo la amplitud de la respuesta
tre los 55 y 60 años. Las manifestaciones clínicas evocada motora o sensitiva) en ambos lados. Se
dependen de la extensión y progresión temporal objetiva una disminución, e incluso abolición, de la
de los cambios isquémicos inducidos por la vascu- amplitud de la respuesta evocada motora o sensiti-
litis. Por ello, nos podemos encontrar con diver- va; la velocidad de conducción nerviosa es normal
sos patrones de afectación: mononeuritis (16%), o ligeramente disminuida y las latencias distales
multineuritis (45%), multineuritis solapada (25%) motoras están preservadas. Además, la neurografía
y polineuropatía sensitivo-motora distal simétrica permite mostrar alteraciones en nervios no afec-
(35%). Los nervios afectados con mayor frecuencia tados clínicamente y orientar la biopsia nerviosa
son el nervio peroneo en extremidades inferiores según el nervio sensitivo afectado en extremidades
y el nervio cubital en extremidades superiores(8). inferiores (sural o peroneo superficial) o superiores
También se ha descrito la presentación en forma (generalmente radial). Con el electrodo de aguja
de plexopatía braquial o lumbar. coaxial se evidencia actividad muscular espontánea
Debemos pensar en una neuropatía vasculítica (fibrilaciones, ondas positivas) en los músculos de-
ante un paciente que presenta dolor y disestesias de pendientes de los nervios motores afectos.
distribución neuropática, de curso agudo o subagu- De forma excepcional se ha descrito la apari-
do, con un patrón asimétrico progresivo, sobre todo ción de bloqueos de la conducción nerviosa motora

Manual EMG.indb 334 9/7/07 12:07:22


Mononeuropatía múltiple 335

(un hallazgo típico de desmielinización segmen- instaurar lo más precozmente posible, y consiste
taria adquirida). Sólo ocurren en la primera se- en la administración de prednisona, asociada o no
mana de evolución en relación con el proceso de a ciclofosfamida u otros inmunosupresores (aza-
denervación aguda y desaparecen a medida que se tioprina, ciclosporina, metotrexato, micofenolato
completa la degeneración walleriana, dando paso mofetilo). Recientemente se ha descrito el posible
a los típicos datos de degeneración axonal(10). La beneficio del tratamiento con inmunoglobulinas
existencia de bloqueos de conducción persisten- humanas intravenosas en pacientes con neuropatía
tes en pacientes con neuropatía vasculítica sigue vasculítica(7).
siendo muy discutida, aunque ha sido relacionada
con fenómenos de isquemia por oclusión de vasos Principales tipos de vasculitis
pequeños(11).
Poliarteritis nodosa (PAN)
Pruebas de laboratorio Representa una de las formas más frecuentes
No existe ninguna prueba de laboratorio que de vasculitis. Es una enfermedad multisistémica
permita realizar el diagnóstico de las diversas en- de las arterias de pequeño y mediano calibre, con
fermedades englobadas dentro de las vasculitis, afectación de nervios periféricos, piel, músculo
salvo la determinación de los anticuerpos anti- esquelético, riñón, tracto gastrointestinal, hígado
citoplasma de neutrófilos (ANCA), que marca un y testículos. La angiografía abdominal muestra
patrón c-ANCA (patrón citoplasmático), con una microaneurismas en arterias renales, hepáticas y
sensibilidad del 95% y una especificidad de un viscerales en dos tercios de los pacientes. Hay ele-
98% en la granulomatosis de Wegener. El patrón vación de la velocidad de sedimentación globular
p-ANCA (patrón perinuclear) es bastante sensible y síntomas generales (astenia, anorexia, pérdida de
para el síndrome de Churg-Strauss (75%) y la po- peso, fiebre) en la mayoría de los casos. La afecta-
liangeítis microscópica (80 a 90%), pero carece de ción del sistema nervioso periférico ocurre hasta un
especificidad. La relación etiopatogénica con estos 70% de los pacientes, siendo incluso más frecuente
anticuerpos es todavía controvertida(4). en el grupo donde la PAN se asocia a hepatitis B.

Histopatología Poliangeítis microscópica


El diagnóstico definitivo de neuropatía vasculí- Afecta a arteriolas, capilares y vénulas. La
tica requiere la demostración de lesiones vasculares clínica es similar a la PAN, aunque hay una aso-
en el epineuro (necrosis segmentaria fibrinoide de ciación casi constante con una glomerulonefritis
la pared e infiltración inflamatoria transmural). Si rápidamente progresiva y la afectación pulmonar
existen lesiones cutáneas es suficiente una biopsia ocurre en la mitad de los casos. La existencia de
de piel, pero, generalmente, tenemos que recurrir púrpura palpable es más frecuente que en la PAN.
a la biopsia de un nervio periférico sensitivo (sural, Los ANCA son positivos en un 80 a 90% de los pa-
peroneo superficial o radial), aumentando el rendi- cientes, la mayoría del tipo p-ANCA. La afectación
miento diagnóstico si realizamos al mismo tiempo del sistema nervioso periférico ocurre en más del
una biopsia de músculo. Por ello, algunos autores 50% de los casos.
recomiendan la biopsia simultánea del nervio pe-
roneo superficial y músculo peroneo corto. Enfermedad de Churg-Strauss
Se caracteriza por una vasculitis de vasos de pe-
Tratamiento queño y mediano calibre que afecta a la circulación
pulmonar y sistémica, asociada a asma y eosinofilia.
El tratamiento inmunosupresor ha cambiado En la fase prodrómica hay asma; la segunda fase se
radicalmente el pronóstico de las vasculitis. Se debe caracteriza por eosinofilia, neumonía eosinofílica

Manual EMG.indb 335 9/7/07 12:07:22


336 J. Pardo Fernández, M. Noya García, J. Castillo Sánchez

crónica y gastroenteritis; la vasculitis sistémica re- 1 a 10% de los casos, y suele aparecer en pacientes
presenta la tercera y última fase. Algunos pacientes con larga evolución de la enfermedad (superior
pueden tener artralgias migratorias y test de látex a 10 años).
positivo, que motiva un posible diagnóstico erróneo Otras formas de neuropatía periférica en estos
de artritis reumatoide. Los ANCA (patrón p-ANCA) pacientes son una polineuropatía de predominio
están presentes en un 75% de los pacientes. Histo- sensitivo, generalmente limitada a extremidades in-
lógicamente hay infiltración eosinofílica, vasculitis feriores y asociada a formas lentas progresivas, y una
necrotizante y granulomas extravasculares, aunque polineuropatía sensitivo-motora de curso agresivo,
en la biopsia nerviosa raramente se observan granu- asociada a enfermedad activa, de peor pronóstico
lomas o infiltración eosinofílica. La neuropatía pe- y que afecta a las cuatro extremidades.
riférica es frecuente (60 a 80% de los casos).
Síndrome de Sjögren
Granulomatosis de Wegener Consiste en una poliexocrinopatía crónica
Se caracteriza por una inflamación granuloma- autoinmune, con afectación predominante de
tosa del tracto respiratorio superior e inferior y una glándulas lagrimales y sudoríparas, dando lugar a
vasculitis generalizada con afectación de vasos de queratoconjuntivitis seca y xerostomía. Se clasifica
pequeño y mediano calibre. La glomerulonefritis en primario o secundario según se asocie o no a
necrotizante es un hallazgo frecuente. Un patrón otras enfermedades del tejido conectivo.
citoplasmático de ANCA (c-ANCA), con especifi- La neuropatía periférica ocurre en un 20% de
cidad para la proteinasa 3 se encuentra en más del los pacientes en forma de neuronopatía sensitiva
95% de los pacientes. La biopsia pulmonar muestra atáxica con afectación predominante de fibras grue-
signos de vasculitis o granulomas en un 90% de sas, polineuropatía distal simétrica de predominio
los casos, frente a sólo un 20% de las biopsias de sensitivo o mononeuropatía múltiple. Un 5% de-
cabeza y cuello. La aparición de granulomas en la sarrolla neuropatía sensitiva trigeminal (unilateral
biopsia nerviosa es excepcional. o bilateral). La mayoría de las neuropatías son de
La neuropatía periférica ocurre en un 15 a 40% origen vasculítico, aunque las formas sensitivas
de los casos y la craneal (generalmente en forma puras se han relacionado con infiltración de los
de multineuritis, con afectación de los nervios cra- ganglios dorsales.
neales II, VI y VII), en un 10%. Esta última suele
estar relacionada con la extensión de los granulo- Lupus eritematoso sistémico (LES)
mas nasales o paranasales, y no con fenómenos de La vasculitis sistémica ocurre sólo en un 15%
vasculitis. de los casos, y afecta a piel, tracto gastrointestinal,
sistema nervioso, miocardio, pulmón, riñón y oca-
Vasculitis asociadas a enfermedades del tejido conectivo sionalmente páncreas, hígado y aparato genital.
Ocurren con mayor frecuencia en la artritis La neuropatía periférica ocurre en un 10% de
reumatoide, menos frecuentemente en el lupus los casos, generalmente en forma de una polineu-
eritematoso sistémico y síndrome de Sjögren y ra- ropatía distal simétrica de predominio sensitivo y
ramente en la esclerodermia. Las manifestaciones de curso subagudo-crónico. En un tercio de los
clínicas son similares a la PAN, aunque en estos ca- casos se presenta en forma de mononeuropatía
sos la variedad de vasos sanguíneos afectados es más múltiple o polineuropatía asimétrica. En pocas
amplia (desde capilares a arterias de gran calibre). ocasiones encontramos datos de vasculitis necroti-
zante en la biopsia de nervio periférico, siendo más
Artritis reumatoide (AR) frecuente una degeneración axonal inespecífica e
La neuropatía vasculítica, generalmente en inflamación perivascular. También se ha descrito
forma de mononeuropatía múltiple, ocurre en un en estos pacientes la existencia de una polineuro-

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Mononeuropatía múltiple 337

patía desmielinizante inflamatoria, de tipo agudo se afectan en mayor medida que las del endoneu-
o crónico. ro. También pueden existir datos de vasculitis en
la biopsia de músculo esquelético. Es importante
Esclerosis sistémica (esclerodermia) realizar un seguimiento estricto de estos pacientes,
Es una enfermedad inflamatoria multisistémica ya que se ha visto que entre un 6 y un 37% de casos,
crónica debida a depósitos anormales de colágeno inicialmente diagnosticados de vasculitis aislada del
en la piel, vasos sanguíneos y vísceras (riñón, pul- sistema nervioso periférico, acaban desarrollando
món, tracto gastrointestinal, corazón). La neuro- un cuadro de vasculitis sistémica(7).
patía vasculítica es muy rara (1,5%).

Crioglobulinemia mixta asociada a hepatitis C BIBLIOGRAFÍA


La crioglobulinemia mixta se asocia frecuente-
mente a la infección por el virus de la hepatitis C 1. Kissel JT, Mendell JR. Vasculitic neuropathy. Neurol Clin
1992; 10: 761-81.
(73 a 90%). La neuropatía periférica ocurre en un
2. Sorenson EJ, Sima AAF, Blaivas M, Sawchuk K, Wald JJ.
30 a 70% de los casos, y cursa como una polineu- Clinical features of perineuritis. Muscle Nerve 1997; 20:
ropatía sensitivomotora asimétrica (multineuritis 1153-7.
solapada) o como una mononeuropatía múltiple. 3. Oh SJ. Clinical electromyography: nerve conduction stu-
dies. 2ª ed. Baltimore: Williams & Wilkins; 1996.
Vasculitis aislada del sistema nervioso periférico 4. Collins MP, Kissel JT, Mendell JR. Vasculitic neuropa-
thies. En: Antel J, Birnbaum G, Hartung HP, eds. Clinical
Esta forma de vasculitis no sistémica, limitada
neuroimmunology. EE.UU.: Blackwell Science; 1998. p.
al sistema nervioso periférico, se caracteriza por la 316-39.
evidencia clínica y electromiográfica de neuropa- 5. Hunder GG, Arend WP, Bloch DA, Calabrese LH, Fauci
tía periférica, con datos de vasculitis en la biopsia AS, Fries JF, et al. The American College of Rheumatology
de nervio periférico, siendo imprescindible que 1990 criteria for the classification of vasculitis. Arthritis
Rheum 1990; 33: 1065-8.
no exista evidencia clínica, ni de laboratorio de
6. Jennette JC, Falk RJ, Andrassy K, Bacon PA, Churg J, Gross
afectación de otros órganos (salvo el músculo es- WL, et al. Nomenclature of systemic vasculitides. Proposal
quelético), ni enfermedad del tejido conectivo, of an international consensus conference. Arthritis Rheum
agentes exógenos, malignidad u otras anomalías 1994; 37: 187-92.
que puedan asociarse a vasculitis. No suele cursar 7. Schaublin GA, Michet CJ, Dyck PJB, Burns TM. An
update on the classification and treatment of vasculitic
con elevaciones significativas de la velocidad de neuropathy. Lancet Neurol 2005; 4: 853-65.
sedimentación globular y los síntomas sistémicos 8. Amato AA, Dumitru D. Acquired neuropathies. En: Du-
no son tan prominentes como en las vasculitis mitru D, Amato AA, Zwarts MJ, eds. Electrodiagnostic
sistémicas, aunque pueden estar presentes. En la medicine. 2ª ed. Philadelphia: Hanley & Belfus; 2002. p.
actualidad representa casi el 25% de las neuropatías 937-1041.
vasculíticas. Tiene un curso clínico más benigno 9. Preston DC, Shapiro BE. Electromyography and neuro-
muscular disorders: Clinical-electrophysiologic correlatio-
y un pronóstico más favorable que la neuropatía ns. Boston: Butterworth-Heineman; 1998.
vasculítica asociada a vasculitis sistémicas(12). Por 10. McCluskey L, Feinberg D, Cantor C, Bird S. Pseudo-
ello, algunos autores la consideran como una for- conduction block in vasculitic neuropathy. Muscle Nerve
ma benigna y localizada de la PAN. Los síntomas 1999; 22: 1361-6.
neurológicos y hallazgos histológicos en la biopsia 11. Mohamed A, Davies L, Pollard JD. Conduction block in
vasculitic neuropathy. Muscle Nerve 1998; 21: 1084-8.
de nervio periférico son similares a los encontrados
12. Kararizou E, Davaki P, Karandreas N, Davou R, Vassi-
en la PAN clásica, aunque en la vasculitis aislada lopoulos D. Nonsystemic vasculitic neuropathy: a clini-
del sistema nervioso periférico predomina la afec- copathological study of 22 cases. J Rheumatol 2005; 32:
tación de las pequeñas arteriolas epineurales, que 853-8.

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Manual EMG.indb 338 9/7/07 12:07:23
Capítulo 25

ENFERMEDADES DE LA UNIÓN NEUROMUSCULAR


E. Montes Latorre, C. Márquez Infante, M.D. Jiménez Hernández

INTRODUCCIÓN con una amplitud de 60-80 mV. Dado que el


umbral necesario para despolarizar la membrana
Las enfermedades de la unión neuromuscular muscular es sólo de 10 a 25 mV, el potencial
constituyen una serie heterogénea de trastornos producido es tres o cuatro veces mayor. Esta di-
que tienen como mecanismo común el bloqueo ferencia se denomina factor o margen de seguri-
de la transmisión en la placa motora. Las causas dad. Cualquier proceso que disminuya el factor
son muy diversas: defectos genéticamente deter- de seguridad puede determinar un bloqueo en
minados, trastornos de la inmunidad, infecciones, la transmisión neuromuscular.
intoxicaciones y fármacos. A pesar de su complejidad, la fisiopatología
La unión neuromuscular es una estructura de los trastornos de la unión neuromuscular es
muy especializada, en la que ocurre la traduc- una de las mejor comprendidas dentro de las
ción de un fenómeno eléctrico en una respues- enfermedades neurológicas. Los estudios neu-
ta química, que a su vez, genera otra respuesta rofisiológicos han contribuido singularmente
eléctrica. Está constituida por el terminal presi- a desentrañar los mecanismos subyacentes y
náptico, la hendidura sináptica y la membrana actualmente desempeñan un papel fundamen-
postsináptica. En el terminal presináptico tienen tal en el diagnóstico y la clasifi cación de estos
lugar la síntesis, el almacenamiento y, finalmen- trastornos.
te, la liberación de las vesículas de acetilcolina El bloqueo de la transmisión puede ocurrir a
como respuesta a la despolarización. Con ésta nivel presináptico, en relación con la acetilcolines-
se produce la apertura de canales de calcio, lo terasa de la hendidura sináptica o a nivel postsináp-
que determina la fusión de las vesículas de ace- tico. Este fenómeno se manifiesta clínicamente
tilcolina con la membrana y la liberación de su como debilidad del músculo y como alteraciones
contenido en la hendidura sináptica. Entre un en las pruebas neurofisiológicas. La debilidad pre-
25 y un 50% de la acetilcolina liberada es hidro- domina en determinados grupos musculares y, de
lizada por la acetilcolinesterasa de la hendidura, forma característica, fluctúa en respuesta al reposo
y el resto se une a los receptores de acetilcolina y al esfuerzo.
distribuidos por los pliegues de la membrana Los trastornos de la unión neuromuscular
postsináptica. La unión de dos moléculas de pueden ser autoinmunes, tóxicos o metabólicos,
acetilcolina con el receptor nicotínico induce así como producidos por defectos congénitos. La
un cambio de conformación que determina la miastenia gravis es el modelo paradigmático y más
entrada de sodio y la generación de un potencial común dentro de estas alteraciones.

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340 E. Montes Latorre, C. Márquez Infante, M.D. Jiménez Hernández

ENFERMEDADES AUTOINMUNES DE LA UNIÓN inicio precoz entre pacientes caucasianos se asocia


NEUROMUSCULAR con los antígenos HLA-B8 y DRw3, mientras que
la forma de inicio tardío se relaciona con diversos
Miastenia gravis autoinmune marcadores HLA. Por otra parte, ocurren diferentes
asociaciones HLA según el grupo étnico(1).
La miastenia gravis es una enfermedad mediada Entre el 75 y el 90% de los pacientes con mias-
por inmunoglobulinas G dirigidas específicamente tenia gravis presentan anticuerpos circulantes con
contra los receptores nicotínicos para la acetilcoli- una elevada afinidad frente a la subunidad α del
na. Constituye el más claro ejemplo de patología receptor de acetilcolina, producidos por linfocitos
autoinmune entre las enfermedades del sistema T sensibilizados. Los anticuerpos antirreceptor de
nervioso. Esta fisiopatología se ha comprobado acetilcolina son del tipo IgG policlonal, hetero-
mediante una serie de estudios experimentales: géneos en cuanto al subtipo de IgG, al tipo de
1) en el suero de la mayoría de los pacientes con cadena ligera (aunque frecuentemente son de tipo
miastenia gravis se encuentran anticuerpos anti- κ) y al idiotipo.
rreceptores de acetilcolina; 2) la inoculación de Los pacientes seronegativos para los anticuerpos
estos anticuerpos en animales reproduce en ellos antirreceptor de acetilcolina presentan una sinto-
la enfermedad; 3) en los músculos de pacientes matología similar a los demás, aunque son más
con miastenia se ha comprobado una pérdida frecuentes las manifestaciones oculares puras, o
cuantitativa de receptores de acetilcolina; 4) la los síntomas bulbares. La pérdida de receptores
disminución de los anticuerpos antirreceptores de de acetilcolina es mínima, pero también mejoran
acetilcolina puede determinar la mejoría clínica de con plasmaféresis y su suero puede reproducir la
los pacientes; y 5) la inmunización de animales con enfermedad en ratones inoculados.
receptores de acetilcolina determina la producción En 2001 se describieron unos anticuerpos plas-
de anticuerpos contra éstos, lo que genera una en- máticos dirigidos contra el receptor de la tirosinqui-
fermedad autoinmune similar a la conocida. nasa músculo específica (MuSK), proteínas de la
Es una enfermedad relativamente infrecuente, membrana postsináptica distintas a los receptores
con una prevalencia de 100-150 casos por millón de acetilcolina. El MuSK es un componente de la
de habitantes(1). En los últimos años el número de unión neuromuscular que participa en el agrupa-
casos se ha incrementado por una mayor sensibi- miento de los receptores de acetilcolina durante el
lidad del diagnóstico y el aumento de la esperanza desarrollo fetal(3). Algunos pacientes con anticuerpos
de vida, tanto en la población general como en los anti-MuSK presentan rasgos atípicos para la miastenia
pacientes con miastenia. En un estudio reciente gravis, como predominio de debilidad facial, bulbar,
realizado en nuestro país, se describe una inciden- en cuello y hombros con preservación de la fuerza
cia de 21 casos nuevos por millón de habitantes, en la musculatura extraocular. Otros presentan una
con un incremento en función de la edad: la in- marcada afección oculobulbar y en un tercer grupo
cidencia en mayores de 65 años se cifraba en 63 la sintomatología es muy similar a la miastenia gravis
casos por millón(2). con anticuerpos antirreceptor de acetilcolina(4).
Puede aparecer a cualquier edad. Se describe Además, el 70% de los pacientes con miastenia
una característica gráfica bimodal para la edad de gravis presentan hiperplasia tímica y un 10-15%
inicio según el sexo. En las mujeres los picos en del total tienen un timoma, un tumor epitelial de
la edad de inicio se sitúan entre los 10 y 30 años, la glándula tímica. En estos últimos, el pico de
mientras que en los varones se sitúan entre los 50 incidencia es tardío y no se ha encontrado una
y 70 años. Sin embargo, en realidad ambas curvas asociación con los HLA. Se desconoce el papel real
son bimodales con un grupo de inicio precoz y del timo en la patogenia de esta enfermedad, pero
otro de inicio tardío. La miastenia autoinmune de la hipótesis más probable es que la respuesta inmu-

Manual EMG.indb 340 9/7/07 12:07:23


Enfermedades de la unión neuromuscular 341

ne se inicie y se mantenga en el timo. Por algún fundamentada en el patrón de afectación de los


factor desconocido (determinados virus, tóxicos o grupos musculares, la velocidad de la instauración
haplotipos), los linfocitos del timo no reconocen y el grado de intensidad. Uno de los problemas
como propios a los receptores de acetilcolina de las que presenta esta clasificación es que se basa en
células tímicas, se sensibilizan frente a ellos y, por criterios subjetivos para valorar la gravedad. Por otra
extensión, frente al receptor nicotínico muscular(5). parte, se acepta que el compromiso de la función
En aproximadamente el 80% de los pacientes con orofaríngea suele ser más grave que la debilidad
miastenia gravis y timoma y el 24% de pacientes generalizada. Recientemente se ha propuesto otra
con timoma sin miastenia gravis se encuentran clasificación semicuantitativa, que intenta perfilar
anticuerpos anti-músculo estriado(3). criterios más objetivos para determinar la gravedad
de la enfermedad(9). De cualquier forma, parece
Aspectos clínicos claro que el grado de afectación, la extensión y la
El síntoma guía de la miastenia gravis es la fati- progresión son factores primordiales en relación no
gabilidad del músculo estriado. Esta fatigabilidad sólo con la elección del tratamiento, sino también
consiste en que la debilidad empeora con la activi- con el pronóstico(1,8). A nivel práctico, se acepta una
dad muscular repetida o mantenida y mejora con el forma simple de distribución de los pacientes en
reposo(6). En muchos pacientes la debilidad puede un grupo con forma ocular y otro con miastenia
fluctuar de músculo a músculo. La musculatura lisa generalizada, aunque en muchos aspectos acadé-
no está afectada y la sensibilidad y los reflejos mus- micos, e incluso clínicos, la separación no sea del
culares son normales. Según los músculos afecta- todo correcta.
dos, se diferencian dos grandes formas clínicas(7). La Los síntomas miasténicos se suelen iniciar de
primera de ellas es la miastenia ocular, en la cual la forma gradual, por lo que es difícil identificar el co-
fatigabilidad se manifiesta en los músculos oculares mienzo de la enfermedad, aunque con frecuencia
extrínsecos, dando lugar a ptosis palpebral, diplopía el paciente acude a la consulta por un empeora-
y, a veces, fotofobia. La debilidad miasténica puede miento brusco relacionado con diversos factores,
simular una parálisis de los nervios craneales III, IV como una infección, una intervención quirúrgica,
o VI o una oftalmoplejia internuclear. Los reflejos una medicación, o bien coincidiendo con un em-
pupilares están indemnes. barazo. La forma de comienzo más frecuente es la
La miastenia gravis generalizada es la otra forma ocular (50 a 60% de los pacientes), le sigue el inicio
principal de expresión clínica; la fatigabilidad apa- bulbar (12 a 30%), la afectación de los músculos
rece, además, en los músculos de las extremidades, de las extremidades (9 a 20%) y los cervicales (3%);
pudiendo afectar a los territorios bulbar, cervical y, finalmente, la insuficiencia respiratoria aparece
en ocasiones, a los músculos respiratorios. La debi- como síntoma inicial en un porcentaje reducido
lidad de los músculos bulbares se manifiesta como (1-2%). La sensación de cansancio generalizado
inexpresividad facial, debilidad al masticar, cam- no es una queja frecuente entre los pacientes mias-
bios en la tonalidad de la voz en la conversación ténicos.
y dificultad para la deglución con regurgitación La evolución de la enfermedad viene condi-
nasal. La aparición de disnea, que empeora con el cionada, en parte, por la gravedad y la extensión
decúbito, es un dato alarmante, dado que puede en el momento del inicio de la clínica. Aproxima-
desembocar en una insuficiencia respiratoria que damente el 40-50% de los pacientes con síntomas
ponga en grave riesgo la vida del paciente. Este oculares progresará a una forma generalizada en
síntoma obliga a una vigilancia estricta, dado que el los dos primeros años. En la historia natural de la
paciente puede precisa ventilación mecánica(8). miastenia gravis se suele observar un período inicial
Tradicionalmente se ha empleado la clasifica- de actividad marcado por la extensión de la debili-
ción propuesta por Osserman hace ya casi 50 años, dad muscular (entre tres y siete años), que se sigue

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342 E. Montes Latorre, C. Márquez Infante, M.D. Jiménez Hernández

de otro período de estabilización (que se puede TABLA I. Diagnóstico diferencial de los síndromes miasténicos
prolongar unos diez años). Por último, se sucede • Miastenia gravis autoinmune
otra fase de autolimitación con una lenta tendencia • Otras enfermedades de la unión neuromuscular
a la mejoría. A lo largo de la evolución pueden - Síndrome de Eaton-Lambert
aparecer distintas situaciones clínicas: remisiones - Síndromes miasténicos congénitos
clínicas de duración variable (meses, raramente - Botulismo
años), períodos de estabilización y exacerbaciones - Intoxicaciones (organofosforados, etc.)
con deterioro rápido de la función muscular (crisis • Enfermedades que no afectan a la unión neuromuscular
miasténicas) que, ocasionalmente, ponen en pe- - Oftalmoplejia central de cualquier etiología (inflamatoria, desmieli-
ligro la vida del paciente. En la mayoría de las nizante, vascular o tumoral)
últimas se asocian factores desencadenantes, como - Oftalmopatía hipertiroidea
infecciones, fármacos, alteraciones metabólicas o - Citopatía mitocondrial
enfermedades concomitantes. - Síndrome de Guillain-Barré, síndrome de Miller-Fisher
- Enfermedades de la neurona motora: esclerosis lateral amiotrófica,
Diagnóstico parálisis bulbar progresiva, etc.
El diagnóstico de miastenia gravis se basa en - Parálisis idiopática del nervio frénico
la historia clínica y la exploración neurológica. El - Síndrome de fatiga crónica
diagnóstico diferencial es amplio (Tabla I), aunque - Miopatías; distrofias musculares, miopatías inflamatorias, miopatías
con frecuencia los rasgos clínicos lo delimitan de metabólicas, etc.
forma satisfactoria.
Existen distintas pruebas complementarias que
permiten confirmar el diagnóstico: Otro anticolinesterásico utilizado en el diagnós-
• Utilización de fármacos. Las primeras prue- tico es la neostigmina por vía intramuscular, que
bas diagnósticas han utilizado sustancias que tiene una acción similar, y puede estar más indi-
mejoran o empeoran la debilidad en el diag- cada en determinados tipos de pacientes, como,
nóstico de la miastenia gravis. Inicialmente se por ejemplo, niños con sospecha de síndrome
empleaba curare o quinina en pequeñas dosis miasténico congénito. Frente al edrofonio tiene
para agravar la sintomatología. Actualmente la ventaja de que la respuesta se puede observar
se recurre a la administración de inhibidores durante más tiempo (varias horas). También
de la acetilcolinesterasa. Este test es el prime- se puede utilizar el bromuro de piridostigmi-
ro que suele realizarse en la práctica clínica. na (Mestinon®) por vía oral en pacientes no
La sustancia más utilizada es el cloruro de tratados con una evaluación al cabo de unas
edrofonio administrado por vía intravenosa dos horas(1,3). La única condición para realizar
(test de Tensilon®), que produce una rápida cualquiera de estos tests es la presencia de un
mejoría de la debilidad muscular (entre 30 signo objetivo que permita valorar la respuesta
y 45 segundos). Se inyecta una dosis inicial de forma inequívoca. Una impresión subjetiva
de 2 mg, y si no se comprueba una mejoría de mejoría por parte del paciente no implica
después de un minuto, se puede seguir ad- una respuesta positiva(10). La sensibilidad global
ministrando lentamente hasta una dosis total de estas pruebas varía del 60 al 95% para la
de 10 mg. Esta prueba no debe realizarse en miastenia ocular y del 71 al 95% para la mias-
pacientes con antecedentes de broncoespas- tenia generalizada(11).
mo o bradicardia. Se recomienda monitorizar • Estudios inmunológicos. La más clásica y
el electrocardiograma y tener preparada una extendida es la determinación de anticuerpos
ampolla de atropina ante la posible aparición antirreceptor de acetilcolina en suero. Exis-
de complicaciones (bradicardia vagal). ten diferentes tests para medir los anticuerpos

Manual EMG.indb 342 9/7/07 12:07:24


Enfermedades de la unión neuromuscular 343

antirreceptor de acetilcolina (anticuerpos blo-


queantes, moduladores o inmunofijadores).
Se considera que entre el 45 y el 65% de los
pacientes con forma ocular tienen anticuerpos
positivos, porcentaje que llega al 90% entre los
que padecen una forma generalizada. Puede
haber falsos positivos en personas con patología
autoinmune del hígado, del tiroides, síndrome
de Eaton-Lambert, en pacientes con timoma
sin miastenia y en familiares de primer grado
de pacientes con miastenia gravis autoinmune,
Figura 1. Estimulación repetitiva a baja frecuencia en nervio cubital.
entre otros(3). A: estudio normal; B: estimulación repetitiva con decremento significativo
Como se ha comentado con anterioridad, se basal. Obsérvese el patrón en forma de “U” de la estimulación repetitiva
han descrito otros tipos de anticuerpos en esta en un paciente con miastenia gravis.
enfermedad, como los anticuerpos frente a
músculo estriado en miasténicos con timoma
y los anticuerpos frente al receptor de la tiro- Si este segundo estudio también es normal, se
sin-cinasa músculo específico (MuSK). Estos debe estudiar el nervio facial, especialmente
últimos pueden ser útiles en pacientes con clí- cuando existe afectación a dicho nivel.
nica sugestiva y anticuerpos antirreceptor de Los hallazgos de la estimulación repetitiva en
acetilcolina negativos. Además, pueden existir la miastenia gravis son los siguientes:
otros autoanticuerpos menos específicos, como – La amplitud del potencial evocado motor es
los antinucleares, antitiroideos, etc. normal en el estudio de conducción nerviosa.
Estudios electrofisiológicos. El estudio neu- En un porcentaje muy pequeño de pacientes
rofisiológico de la miastenia gravis incluye los puede haber una mínima disminución de la
tests habituales de conducción nerviosa, la es- amplitud del potencial evocado motor respecto
timulación repetitiva y la electromiografía de a valores normales(13).
fibra aislada (EMFA)(12). Si los estudios de con- – La estimulación a baja frecuencia (2-3 Hz)
ducción nerviosa son anormales, debe replan- puede dar lugar a un decremento mayor del
tearse el diagnóstico de miastenia gravis. Las 10% en el cuarto o quinto potencial, que con
consideraciones técnicas de todas estas pruebas frecuencia mejora levemente en los potenciales
se especifican en los capítulos correspondientes evocados motores posteriores. Esta secuencia
de este Manual. puede adquirir la morfología de una envolvente
En la estimulación repetitiva los nervios con en “U” de los potenciales motores (Fig. 1).
mayor rendimiento diagnóstico son aquellos – Inmediatamente después de un esfuerzo máxi-
que estimulan un músculo con debilidad clí- mo, como la contracción mantenida durante
nica, alcanzando una sensibilidad de hasta el 10 segundos, se puede observar una mínima
77%. De cualquier forma, en los pacientes con facilitación postactivación.
miastenia gravis, la estimulación repetitiva se – Si repetimos la estimulación repetitiva tras dos o
suele iniciar en un nervio distal que resulta fácil tres minutos de reposo después de efectuar una
de estimular e inmovilizar, aunque el rendi- contracción mantenida durante 60 segundos,
miento diagnóstico de esta prueba no alcance puede aparecer una caída en la amplitud de la
el 60%. Si la estimulación distal es normal, respuesta, o esta hacerse más evidente (agota-
se recomienda estimular un nervio proximal miento postactivación). Por tanto, este estudio
(preferentemente el nervio accesorio espinal). puede mostrar un decremento significativo,

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344 E. Montes Latorre, C. Márquez Infante, M.D. Jiménez Hernández

incluso cuando la estimulación repetitiva en


reposo haya sido normal.
– Por último, para incrementar la sensibilidad de
la estimulación repetitiva distal se puede llevar
a cabo el estudio antes y después de ejercicio
repetido o isquemia. En esta última se realiza la
estimulación repetitiva, tras mantener durante
tres minutos un esfigmomanómetro insuflado
por encima de la presión sistólica en el miem-
bro estudiado, al mismo tiempo que se realiza
una contracción mantenida. Con este tipo de
maniobra se consigue igualar la sensibilidad
de las estimulaciones repetitivas distal y proxi-
mal.
Desde un punto de vista técnico, y como se ha
mencionado en otros capítulos, no debemos
olvidar la importancia de la temperatura en la
estimulación repetitiva. En caso necesario se
Figura 2. Electromiografía de fibra aislada (amplitud 500 μV y barrido 5
debe incrementar la temperatura de la piel en ms). A: estudio normal; B: estudio con aumento del jitter y bloqueos de la
el miembro estudiado con una bolsa de agua transmisión neuromuscular en un paciente con miastenia grave.
caliente o con cualquier otro método. De esta
forma, el empleo de músculos proximales, las
pruebas de activación y, en caso necesario, el au- anticolinesterásicos no interfiere en el rendimiento
mento de la temperatura, permiten incrementar de la prueba.
el rendimiento de la estimulación repetitiva(14). Los hallazgos del estudio de fibra aislada que
La electromiografía de fibra aislada en los pa- aparecen en los pacientes con miastenia gravis son
cientes con miastenia gravis muestra un incremen- los siguientes:
to del tiempo empleado para alcanzar la despolari- – El jitter suele estar aumentado por encima
zación de la fibra muscular, esto es un incremento de 50 μs. En ocasiones, los valores son más
del jitter. elevados (80-100 μs), precediendo entonces a
En condiciones normales, cuando se despola- la aparición de un bloqueo en la transmisión
riza un axón motor, el potencial de acción excita neuromuscular. Por lo general, en una misma
todas las fibras musculares de la unidad motora unidad motora se mezclan potenciales de pla-
prácticamente al mismo tiempo. Se denomina jitter ca con jitter normal junto con otros con jitter
a la variabilidad en el tiempo de disparo de fibras alargado. Incluso, en alguna ocasión, aparece
musculares adyacentes pertenecientes a la misma un bloqueo del impulso nervioso (Fig. 2).
unidad motora. El jitter refleja la variabilidad del – La densidad de fibras (medida del número de
tiempo de transmisión neuromuscular en las pla- fibras musculares de una unidad motora) pue-
cas terminales examinadas. Es más sensible que de ser normal para el músculo estudiado. En
la estimulación repetitiva, porque mide la inesta- ocasiones, está ligeramente aumentada, pero
bilidad que precede al bloqueo neuromuscular, los incrementos más significativos de este pará-
que es lo que registra aquella. Es, en definitiva, metro se observan en otros procesos, como en
una medida del factor de seguridad en la placa la reinervación.
terminal motora(15). Por otra parte, y a diferencia En los casos de miastenia gravis generalizada, el
de la estimulación repetitiva, el tratamiento con músculo estudiado puede ser el extensor común de

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Enfermedades de la unión neuromuscular 345

los dedos. Cuando la forma clínica es puramente gastrointestinales, linfomas, timomas y leucemias.
ocular, los músculos más indicados son el frontal El trastorno de la función neuromuscular puede
y el orbicular de los ojos. preceder en años al descubrimiento del tumor.
En líneas generales, puede afirmarse que la Las células del carcinoma de células pequeñas ex-
electromiografía de fibra aislada es anormal en presan canales de calcio dependientes de voltaje,
prácticamente todos los pacientes con miastenia que inician y mantienen la respuesta inmune. El
gravis (92%), siempre que se estudie un músculo resto de pacientes, con frecuencia mujeres jóvenes,
con debilidad clínica. La principal ventaja de la presentan un trastorno autoinmune primario sin
electromiografía de fibra aislada sobre la estimula- evidencia de carcinoma.
ción repetitiva es que la primera puede ser anormal,
mostrando un incremento del jitter, incluso en pa- Aspectos clínicos
cientes sin debilidad manifiesta. Sin embargo, para En ocasiones las manifestaciones clínicas pue-
encontrar alteraciones en la estimulación repetitiva, den ser similares a las de los pacientes con miastenia
deben existir bloqueos (correlato electrofisiológico gravis. La debilidad muscular es el síntoma principal
de la debilidad), que determinen un decremento de los pacientes con síndrome de Eaton-Lambert,
de la respuesta. afectando de forma predominante a músculos proxi-
males de miembros inferiores (p. ej., dificultad para
Síndrome de Eaton-Lambert subir escaleras). Sin embargo, en muchos casos la
debilidad pasa casi desapercibida y el paciente con-
El síndrome de Eaton-Lambert es una enferme- sulta por cansancio generalizado o síntomas sensiti-
dad de causa autoinmune que afecta a la unidad vos mal definidos. A diferencia de lo que sucede en
neuromuscular a nivel presináptico. Se caracteriza la miastenia gravis, los músculos extraoculares están
por la presencia de anticuerpos circulantes con- afectados en menos del 25% de los pacientes. En
tra los canales de calcio dependientes de voltaje caso de existir, la ptosis palpebral y la diplopía son
situados en la membrana del terminal presináp- fluctuantes, al igual que los síntomas dependientes
tico. Se han encontrado dos tipos de anticuerpos de la afectación de los músculos orofaríngeos. De
IgG frente al canal de calcio del terminal axónico: forma característica, los reflejos musculares están
el más frecuente aparece en el 85% de los casos reducidos o ausentes y puede haber parestesias tran-
y está dirigido frente a la subunidad α-1 A (P/Q- sitorias, lo que no sucede en la miastenia gravis. Por
Ca2’1’), y el otro, que está presente en el 35% de los otra parte, los síntomas bulbares suelen ser leves lo
pacientes, se une a la subunidad α-IB (N-Ca24-). que ayuda a distinguir esta enfermedad del botu-
Estos anticuerpos interfieren en la liberación (de- lismo y de la miastenia.
pendiente de calcio) de quanta de acetilcolina en En estos pacientes existen, con frecuencia, datos
la hendidura sináptica, produciendo un bloqueo clínicos adicionales, como pérdida de peso y otros sín-
de la transmisión neuromuscular. tomas constitucionales. El síndrome de Eaton-Lam-
El síndrome de Eaton-Lambert es una enfer- bert suele asociarse, además, a síntomas autonómicos,
medad muy infrecuente. Se ha calculado una como boca seca (xerostomía) con sensación de gus-
prevalencia de uno-dos casos por cada millón de to metálico, xeroftalmos, estreñimiento, disfunción
habitantes. Aparece en adultos, con predominio eréctil, hipotensión ortostática, etc. En estos casos se
en varones (4:1). En más de la mitad de los pa- ha observado que el síndrome de Eaton-Lambert se
cientes el síndrome de Eaton-Lambert se asocia asocia con mayor probabilidad a una neoplasia ocul-
a una neoplasia, habitualmente un carcinoma de ta. Finalmente, pueden observarse otros hallazgos en
células pequeñas de pulmón, aunque también se relación con diferentes síndromes paraneoplásicos
han descrito casos en relación con adenocarcino- asociados (ataxia, neuropatía sensitiva, secreción in-
mas de pulmón, de próstata o de ovario, tumores adecuada de hormona antidiurética, etc.).

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346 E. Montes Latorre, C. Márquez Infante, M.D. Jiménez Hernández

El signo clínico más característico es la facilita-


ción muscular. Después de un breve período (10
segundos) de ejercicio intenso, se recuperan tran-
sitoriamente la fuerza muscular y los reflejos. Por
otra parte, fármacos, como algunos aminoglucósidos,
antagonistas del calcio, antiarrítmicos y bloqueantes
neuromusculares pueden empeorar los síntomas(6).

Diagnóstico
• Utilización de fármacos. El diagnóstico del
síndrome de Eaton-Lambert se confirma por
tests serológicos y neurofisiológicos. Los inhibi-
dores de la acetilcolinesterasa apenas mejoran
la transmisión, por lo que el test de Tensilon®
suele ser negativo.
• Estudios inmunológicos. La determinación de
anticuerpos frente a los canales de calcio de-
pendientes de voltaje es positiva en el 100% de
los pacientes con síndrome de Eaton-Lambert
y carcinoma de células pequeñas de pulmón. Figura 3. Estimulación repetitiva a alta frecuencia en nervio cubital.
A: estudio normal; B: incremento significativo en un paciente con síndrome
En el síndrome de Eaton-Lambert idiopático se de Eaton-Lambert.
encuentran estos anticuerpos circulantes en el
91% de los casos. Sin embargo, se debe conside-
rar la posibilidad de falsos positivos en pacientes disminuye el número de potenciales de acción
con hipergammaglobulinemia, hepatopatía o de fibra muscular. Las latencias y velocidades de
infección crónica. Por último, es preciso añadir conducción son normales. Debe sospecharse la
que estos anticuerpos pueden ser positivos en posibilidad de un síndrome de Eaton-Lambert
el 3% de la población normal. en aquellos pacientes cuyos estudios de con-
• Estudios neurofisiológicos. En el síndrome ducción muestren amplitudes reducidas de los
de Eaton-Lambert el estudio electrofisiológico potenciales evocados motores con potenciales
puede confirmar el diagnóstico, al demostrar sensitivos normales (salvo que se asocie una
una marcada facilitación postejercicio(12,13,16). neuronopatía sensitiva).
Uno de los datos más característicos es el in- – La estimulación repetitiva a baja frecuencia
cremento de la amplitud del potencial evocado (3 Hz) en situación basal puede producir un
motor durante la estimulación repetitiva a alta leve decremento en la amplitud del potencial
frecuencia (superior a 10 Hz) (Fig. 3). Los ha- evocado motor, de forma similar a lo que su-
llazgos neurofisiológicos que se deben esperar cede en la miastenia gravis.
son los siguientes: – La estimulación simple (un único estímulo
– El potencial evocado motor obtenido en el estu- supramáximo) tras un esfuerzo mantenido (10
dio de conducción nerviosa con el músculo en segundos) o la estimulación tetánica, dan lugar
reposo es de pequeña amplitud (incluso menor a un incremento superior al 100% de la ampli-
del 10% del valor normal). Esto se debe a que tud del potencial evocado motor basal. Esto se
muchos de los potenciales de placa motora no debe a la acumulación de calcio en el terminal
alcanzan el umbral, debido a la liberación in- presináptico, con el subsiguiente incremento
suficiente de quanta de acetilcolina y, por ello, en la liberación de quanta de acetilcolina.

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Enfermedades de la unión neuromuscular 347

– La estimulación repetitiva a frecuencias entre tan precozmente con debilidad muscular. Estos
20 y 50 Hz duplica, al menos, la amplitud de trastornos no están mediados por respuestas inmu-
la respuesta inicial (Fig. 3). Con frecuencia el nes y, por lo tanto, no existen autoanticuerpos ni
incremento es superior al 200% y, en ocasiones, responden a corticoterapia, inmunosupresores o
llega al 2.000%(17). plasmaféresis. Se deben distinguir de la miastenia
Sin embargo, se ha comprobado que la apli- gravis neonatal transitoria (ver más adelante).
cación de un único estímulo supramáximo, tras Las manifestaciones clínicas en todos los sín-
10 segundos de contracción mantenida mejora el dromes miasténicos congénitos son similares, e
rendimiento diagnóstico en el síndrome de Eaton- incluyen hipotonía generalizada en el lactante y
Lambert por encima de la estimulación repetitiva a debilidad muscular en niños mayores. La sinto-
altas frecuencias, siendo técnicamente más sencillo matología suele aparecer en los primeros meses
y menos doloroso para el paciente(18). o años de vida, aunque se han descrito casos de
Se debe señalar que un estudio normal de es- inicio en la adolescencia o incluso en la edad
timulación repetitiva en un músculo no descarta adulta. Frecuentemente debutan con dificultad
que pueda encontrarse anormal en otro, por lo que para alimentarse y, en las situaciones más graves,
se recomienda realizar el estudio en varios mús- con insuficiencia respiratoria. La afección de los
culos, intentando siempre explorar músculos con músculos oculares extrínsecos (ptosis palpebral y
fatigabilidad clínica. estrabismo) es frecuente, aunque otras manifesta-
En los pacientes con síndrome de Eaton-Lam- ciones, como dificultad respiratoria y trastornos de
bert la electromiografía de fibra aislada puede la succión pueden eclipsar las demás expresiones
mostrar diversas alteraciones con aumento del clínicas. Típicamente los síntomas son fluctuantes
jitter y de los bloqueos de la transmisión. De este y empeoran con el esfuerzo muscular y en relación
modo la electromiografía de fibra aislada puede con los procesos febriles intercurrentes de la infan-
no distinguir entre este síndrome y la miastenia cia. En algunos casos pueden existir alteraciones en
gravis. Como rasgo diferencial con la miastenia, se la respuesta pupilar y signos miopáticos, que son a
apunta que puede existir un incremento del jitter veces predominantes. Podemos destacar hipotrofia,
tras el reposo y una mejoría, tanto del jitter como artrogriposis, retracciones tendinosas, malformacio-
de la incidencia de bloqueos, cuando aumenta la nes faciales, hiporreflexia y escoliosis. A medida
frecuencia de estimulación. Por otra parte, en el que el niño se hace mayor la clínica se asemeja más
síndrome de Eaton-Lambert la densidad de fibras a la de los síndromes miasténicos del adulto.
de la unidad motora puede estar, como en otros La respuesta al tratamiento es muy variable,
procesos, ligeramente aumentada. como lo son los diferentes síndromes miasténicos.
Cabe señalar que la estimulación repetitiva y Algunos pacientes mejoran con anticolinesterásicos,
el estímulo, tras la contracción máxima, pueden mientras que en otros casos, como en el síndrome de
considerarse los métodos electrofisiológicos de canales lentos o en el déficit de acetilcolinesterasa,
elección para confirmar el diagnóstico de síndro- estos fármacos empeoran la sintomatología(19,20).
me de Eaton-Lambert. La mayoría de los síndromes miasténicos congé-
nitos siguen una herencia autosómica recesiva. Por
ello, aunque la existencia de antecedentes familiares
SÍNDROMES MIASTÉNICOS CONGÉNITOS y la ausencia de anticuerpos antirreceptor de acetil-
colina son concordantes con el diagnóstico de sín-
Los síndromes miasténicos congénitos consti- drome miasténico congénito, debe tenerse en cuenta
tuyen un grupo heterogéneo de trastornos de la que una historia familiar negativa no excluye la he-
transmisión neuromuscular, que están presentes rencia autosómica recesiva, un trastorno dominante
desde el nacimiento y, por lo general, se manifies- con baja penetrancia o una nueva mutación(21).

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348 E. Montes Latorre, C. Márquez Infante, M.D. Jiménez Hernández

La clasificación más extendida de los síndromes ptosis palpebral). Los agentes anticolinesterásicos
miasténicos congénitos se basa en la fisiopatología. pueden ser útiles en el tratamiento. La microelec-
Así, se distinguen los trastornos presinápticos, sináp- trofisiología in vitro demuestra amplitud normal de
ticos o postsinápticos. Estos últimos son hasta tres los potenciales miniatura de placa motora en reposo
veces más frecuentes que los déficits sinápticos, y (a diferencia de lo que ocurre en la miastenia gravis
hasta diez veces más que los presinápticos(22). autoinmune) y reducción anormal en la amplitud
El diagnóstico específico se fundamenta sobre de los mismos después de la estimulación a 10 Hz
diferentes técnicas: 1) los hallazgos morfológicos e durante 5 minutos, debido a la disminución del
inmunohistoquímicos; 2) la electrofisiología in vitro contenido de acetilcolina en las vesículas. La mi-
de las placas motoras en los especímenes de biop- croscopía electrónica muestra un número normal
sias musculares; y 3) la microelectrofisiología del de vesículas, aunque estas son de pequeño tamaño.
músculo intercostal que se emplea para especificar Las alteraciones son características de un defecto en
la localización pre o postsináptica del trastorno y la resíntesis o el empaquetamiento de la acetilcoli-
para encontrar anomalías cinéticas del receptor de na, y constituyen la causa más común de defectos
acetilcolina. Por último, los estudios genéticos son de presinápticos. El defecto genético está situado en
utilidad, ya que se han identificado hasta ahora casi el cromosoma 10q11.2 y determina la reducción o
una decena de genes, cuyas mutaciones determinan abolición de la actividad de la enzima(19).
síndromes miasténicos congénitos.
Así como la forma de presentación y la res- Síndrome miasténico congénito similar al de Eaton-Lambert
puesta al tratamiento dependen de los trastornos Se basa, fundamentalmente, en dos descripcio-
genéticos y fisiopatológicos implicados, el estudio nes. En 1987 se describió el caso de una niña que
electrofisiológico también muestra una notable va- nació con una marcada hipotonía y arreflexia. La
riabilidad. Algunos casos presentan decrementos estimulación repetitiva mostraba potenciales evo-
en la estimulación a baja frecuencia, en otros existe cados de baja amplitud, que se potenciaban con las
facilitación con frecuencias altas, y en otros un solo frecuencias altas. La debilidad muscular mejoraba
estímulo supramáximo puede producir varios po- con guanidina(23). En un segundo caso otra niña
tenciales evocados motores. En la electromiografía con hipotonía e insuficiencia respiratoria desde el
existe un rasgo común, la presencia de un patrón nacimiento mostró hallazgos similares en el estudio
miopático, con potenciales de unidad motora de electrofisiológico. Se obtuvo una respuesta parcial
marcada inestabilidad y con fluctuaciones en la con 3,4-diaminopiridina(22).
amplitud. La electromiografía de fibra aislada suele
mostrar alteraciones en el jitter, pero la compleji- Síndrome miasténico congénito con disminución del número de
dad técnica de su estudio en niños la relega a un vesículas de acetilcolina
plano secundario en el diagnóstico. Se ha descrito un caso de inicio en el período
neonatal. El estudio morfológico de las sinapsis
Síndromes miasténicos congénitos presinápticos reveló una reducción de hasta el 80% en el número
de vesículas. En la estimulación repetitiva a 2 Hz
Síndromes causados por mutaciones en la colina se constató una disminución de la amplitud de los
acetiltransferasa potenciales(24).
Se ponen de manifiesto en el nacimiento o pe-
ríodo neonatal con síntomas bulbares e insuficien- Síndrome miasténico congénito con disminución de la libera-
cia respiratoria con apnea, o incluso muerte súbita. ción de quanta de acetilcolina
Con frecuencia los síntomas se desencadenan por Los tres pacientes descritos presentaban un
la fiebre o el sobreesfuerzo. Fuera de estas crisis síndrome miasténico asociado a alteraciones del
los signos de miastenia son leves (como una sutil sistema nervioso central (ataxia y nistagmus)(25).

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Enfermedades de la unión neuromuscular 349

A diferencia de lo que ocurre en el síndrome de en relación con anomalías cinéticas de los cana-
Eaton-Lambert, no se encontraron alteraciones en les postsinápticos; el segundo, aquellos en los que
la amplitud de los potenciales evocados motores existe una disminución en el número de receptores
iniciales ni facilitación con la estimulación a altas de acetilcolina.
frecuencias. La microelectrofisiología demostró
una disminución del número de quanta liberados Síndromes causados por anomalías cinéticas
por la estimulación a 1 Hz. No se conoce aún el
mecanismo implicado en este síndrome. Síndrome de canales lentos
Es la anomalía cinética más frecuente. Se carac-
Síndrome miasténico congénito por defecto en la sinapsis: teriza por un tiempo de apertura prolongado del ca-
carencia de acetilcolinesterasa sináptica nal iónico del receptor de acetilcolina. La herencia
es autosómica dominante (aunque se ha descrito
Fue el primer mecanismo identificado de un un caso de transmisión recesiva)(19). Como en el
síndrome miasténico congénito. Frecuentemen- déficit de acetilcolinesterasa, no hay respuesta a la
te los síntomas se inician en el período neonatal, piridostigmina y se producen potenciales evocados
con debilidad generalizada, hipotonía, dificultades motores repetidos después de un estímulo único.
respiratorias y de la deglución, con riesgo elevado Los músculos más afectados son los cervicales y los
de mortalidad. En algunos casos el inicio es más extensores de los dedos. Como tratamiento se han
tardío y no tan grave. Un rasgo característico es la empleado la quinidina, sustancia que normaliza el
lentitud de la respuesta pupilar fotomotora(20,22). El tiempo de apertura del canal y, más recientemente,
déficit de acetilcolinesterasa en la sinapsis provoca la fluoxetina a altas dosis(27).
desensibilización de los receptores de acetilcolina
y bloqueo por despolarización prolongada. Por esta Síndromes de canales rápidos
razón no hay respuesta al tratamiento con antico- Generalmente, tienen herencia autosómica re-
linesterásicos que, incluso, pueden aumentar las cesiva. La expresión clínica es variable, desde los
secreciones bronquiales y empeorar la situación casos con síntomas leves a otros con artrogriposis
del paciente(22). La estimulación repetitiva a 2 Hz por la hipomotilidad fetal. Se han identificado va-
determina una caída de la amplitud de los poten- rias mutaciones responsables. La estimulación repe-
ciales evocados motores. Un estímulo aislado sobre titiva a baja frecuencia produce un decremento en
el músculo en reposo puede producir más de un la amplitud de las respuestas. El tratamiento más
potencial evocado motor; esta respuesta es caracte- eficaz es la combinación de 3,4-diaminopiridina e
rística de este síndrome, y también del producido inhibidores de la acetilcolinesterasa(19).
por canales lentos (ver más adelante).
La herencia es autosómica recesiva. El defecto Síndromes miasténicos congénitos con déficit predominante
de la acetilcolinesterasa se asocia con mutaciones de los receptores de acetilcolina (con escasas o sin anomalías
en el gen COLQ, que codifica la estructura pro- cinéticas)
teica de la cola de esta enzima. Recientemente se Representan, aproximadamente, la mitad de
han descrito en nuestro país dos casos de déficit los casos de síndromes miasténicos congénitos(19).
de acetilcolinesterasa con una respuesta favorable La mayoría se asocian con mutaciones del recep-
a la efedrina(26). tor de acetilcolina. No existen hallazgos clínicos
característicos, y el grado de afectación varía desde
Síndromes miasténicos congénitos postsinápticos formas graves que precisan soporte respiratorio a
formas muy leves. Se han descrito mejorías clíni-
Dentro de estos síndromes se describen dos cas con la combinación de anticolinesterásicos y
grandes grupos: el primero, engloba los trastornos 3,4-diaminopiridina.

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Síndromes miasténicos congénitos con alteraciones en el gen de MIASTENIA GRAVIS NEONATAL


la rapsina (RAPSN)
Fueron descritos por primera vez en 2002. La Es una situación especial que aparece en el 10 a
rapsina es una proteína citoplasmática postsináptica 15% de los recién nacidos de madres con miastenia
que participa en el anclaje del receptor de acetil- gravis autoinmune; la probabilidad de padecer la
colina en la unión neuromuscular. Las mutaciones enfermedad es mayor si ha habido otros hijos afec-
del gen ocasionan una deficiencia de rapsina e, tos. Su patogenia aún no está del todo establecida.
indirectamente, de los receptores de acetilcolina. La transferencia de anticuerpos antirreceptor de
La herencia es también autosómica recesiva. Se acetilcolina maternos a través de la placenta no
distinguen dos formas de diferente gravedad según explica totalmente el síndrome clínico, ya que se ha
la edad de presentación: una neonatal con insufi- demostrado que hijos de mujeres con anticuerpos
ciencia respiratoria grave y otra más leve y de inicio circulantes no desarrollan la enfermedad(29). Tam-
más tardío. El tratamiento con anticolinesterásicos poco se ha encontrado una correlación estrecha
y 3,4-diaminopiridina suele ser eficaz(19). entre la gravedad de la miastenia gravis materna,
o el título de anticuerpos antirreceptor de acetilco-
Síndrome miasténico congénito causado por mutaciones en el lina, y la gravedad de la miastenia gravis neonatal.
canal de sodio SCN4A Por último, se sabe que los anticuerpos antirrecep-
Se ha publicado el caso de un paciente de 20 tor de acetilcolina del recién nacido pueden tener
años que presentaba desde el nacimiento crisis de diferente idiotipo que los de la madre. La hipótesis
insuficiencia respiratoria y parálisis bulbar. Se llegó actual defiende que es posible que los anticuerpos
al diagnóstico por el estudio electrofisiológico de de la madre alteren el receptor de acetilcolina en
un músculo intercostal, en el que no se podían algún momento del desarrollo fetal, lo cual desen-
obtener potenciales de acción, tras la estimulación cadenaría, posteriormente, una respuesta inmune
del nervio(19). secundaria.
Las manifestaciones clínicas aparecen en el na-
Otras alteraciones implicadas en los síndromes cimiento o pocas horas después. Puede observarse
miasténicos congénitos ptosis palpebral bilateral, debilidad de los músculos
faciales, dificultad en la alimentación, llanto débil e
Síndrome miasténico congénito causado por mutaciones en el insuficiencia respiratoria. A veces es preciso recurrir
gen MuSK a la ventilación asistida y a la nutrición por sonda
Se ha descrito recientemente el primer paciente nasogástrica. En general, los síntomas responden
con un trastorno postsináptico debido a mutaciones a inhibidores de la acetilcolinesterasa (neostigmi-
en el gen que codifica el receptor de la tirosincinasa na, piridostigmina) y se resuelven en 1-3 semanas.
músculo específica(28). La biopsia muscular demostró La enfermedad no recurre con posterioridad. El
alteraciones estructurales pre y postsinápticas y una diagnóstico se realiza de acuerdo con la historia
marcada disminución de la subunidad ε del receptor materna, la clínica y la determinación de anticuer-
de acetilcolina y de la expresión de MuSK. pos en el recién nacido y la madre. Los hallazgos
neurofisiológicos son similares a los observados en
Síndrome miasténico congénito con déficit de plectina la miastenia gravis autoinmune del adulto.
Se ha descrito un paciente con déficit de esta
proteína estructural del citoesqueleto, que presen-
taba un síndrome miasténico asociado con una SÍNDROMES MIASTÉNICOS DE ETIOLOGÍA INFECCIOSA
miopatía progresiva y una epidermólisis bullosa.
No se conoce bien la fisiopatología de este síndro- El botulismo es una enfermedad potencialmen-
me miasténico congénito(19). te letal producida por bacterias del género Clostri-

Manual EMG.indb 350 9/7/07 12:07:27


Enfermedades de la unión neuromuscular 351

dium, principalmente C. botulinum, C. baratii y C. mente este se relacione sólo con un 20% de los
butyricum. Estas bacterias secretan la neurotoxina casos. La inmadurez del sistema gastrointestinal
botulínica, el veneno biológico más potente que inmaduro facilita la germinación de las esporas
se conoce. Actúa en el terminal presináptico so- y la producción de la neurotoxina.
bre el complejo de proteínas SNARE, encargadas 4. El denominado botulismo intestinal del adulto
de la fusión de las vesículas de acetilcolina con ocurre en pacientes con patología gastrointestinal
la membrana, impidiendo, así, la exocitosis. Esto (enfermedad de Crohn), anormalidades estruc-
determina un bloqueo de la contracción muscular turales (gastrectomía) o uso de antibióticos.
y una parálisis fláccida. 5. Botulismo iatrogénico por la inyección de toxina
La toxina botulínica se sintetiza como una pro- botulínica con fines terapéuticos y cosméticos,
toxina compuesta por dos cadenas de polipépti- o bien accidental en personal de laboratorios.
dos con un peso molecular total de 150 kDa, una 6. Finalmente, se considera la posibilidad terrible
cadena pesada (100 kDa), y otra ligera (50 kDa). del uso de la toxina botulínica como arma bio-
Esta protoxina se hidroliza a toxina por la acción lógica con fines terroristas(30-32).
de endoproteasas bacterianas de la flora intesti- El tiempo de incubación es variable según la
nal, es absorbida en el duodeno, y pasa al torrente forma de contaminación (de dos horas a siete días
sanguíneo a través de la vía linfática. Debido a su en la forma alimentaria y de cuatro a dieciocho
elevado peso molecular no es capaz de atravesar la días en la relacionada con heridas). El cuadro clí-
barrera hematoencefálica; por ello, los síntomas del nico es característico: parálisis simétrica de nervios
botulismo se limitan al sistema nervioso periférico craneales (diplopía, ptosis palpebral, disartria, dis-
y al autónomo. fagia y disfonía), que progresa hacia una parálisis
Las neurotoxinas difieren en sus secuencias de fláccida descendente y simétrica de la musculatura
aminoácidos, por lo que desencadenan diferentes voluntaria, que puede comprometer gravemente
respuestas de anticuerpos. En base a estos anticuer- la ventilación pulmonar (parálisis de diafragma y
pos se han identificado siete serotipos de toxinas musculatura respiratoria accesoria). No existen al-
(A-G); el tipo C engloba dos subgrupos C-α y C-β. teraciones sensitivas ni en la función cognitiva. En
La mayoría de los brotes en los humanos se han los casos de absorción por vía digestiva las manifes-
relacionado con los tipos A, B, E y F(30,31). taciones neurológicas son normalmente precedidas
por dolor abdominal, náuseas y vómitos. También
Aspectos clínicos son frecuentes los síntomas y signos autonómicos,
como anhidrosis, visión borrosa (por alteraciones
Actualmente se describen hasta seis formas de en la acomodación pupilar), sequedad de boca,
contaminación por la toxina botulínica, aunque las hipotensión postural, retención urinaria y estreñi-
tres primeras son las denominadas clásicas: miento. Este último síntoma es una observación
1. La ingestión de la toxina producida fuera del frecuente de los padres de lactantes con botulismo
organismo e incluida en un alimento deficien- infantil.
temente conservado. La extensión de la parálisis y la rapidez de
2. La colonización de heridas por C. botulinum progresión son variables. Los síntomas se pueden
en los tejidos a través de una herida o por la limitar a algunos nervios craneales o llegar a la pa-
inyección de heroína contaminada en adictos rálisis completa de toda la musculatura voluntaria,
a drogas. probablemente en función de la dosis de toxina y
3. El botulismo infantil, provocado por la ingestión la reserva funcional de cada músculo. La unión de
de esporas de C. botulinum. Suele ocurrir en la toxina es irreversible y no competitiva.
menores de un año y, aunque tradicionalmente Después de unas semanas de estabilización, se
se ha implicado el consumo de miel, probable- inicia una recuperación progresiva (con frecuencia

Manual EMG.indb 351 9/7/07 12:07:27


352 E. Montes Latorre, C. Márquez Infante, M.D. Jiménez Hernández

completa) que puede tardar meses, y a menudo – La estimulación repetitiva a alta frecuencia pue-
requiere rehabilitación. de producir incrementos de más del 100-200%
sobre la respuesta inicial, aunque este hallazgo
Diagnóstico no siempre está presente. En botulismos graves
puede existir tal grado de bloqueo de la unión
El diagnóstico se establece por la clínica. Son neuromuscular que no se aprecie facilitación
datos significativos la ausencia de trastornos de la tras el ejercicio o la estimulación a alta frecuen-
función mental, de fiebre y de alteraciones sensi- cia. Por ello, la ausencia de facilitación no ex-
tivas. Otros datos frecuentes son la normalidad del cluye la enfermedad.
hemograma, de los análisis de LCR y el balance – La electromiografía puede demostrar signos de
hidroelectrolítico. El diagnóstico se puede confirmar denervación (ondas positivas y potenciales de
por el cultivo de especies del género Clostridium en fibrilación), sobre todo en músculos con debili-
los exudados, heces o alimentos implicados, depen- dad. Los potenciales de unidad motora pueden
diendo de la vía de entrada. La prueba más sensible ser normales o pequeños y polifásicos, similares
para el diagnóstico es la inoculación intraperitoneal a los miopáticos. Dependiendo de la gravedad,
de suero del paciente en dos grupos de ratones: uno los trazados de esfuerzo pueden ser normales,
pretratado con antitoxina botulínica y otro control, precoces o reducidos.
no tratado. Si el test es positivo, los ratones no pre- – La electromiografía de fibra aislada muestra au-
tratados mueren y los tratados sobreviven. Dado que mento del jitter y del porcentaje de bloqueos.
el resultado definitivo puede tardar hasta cuatro días, Es importante recordar que en un caso de bo-
nunca se debe demorar el tratamiento del paciente tulismo el primer estudio neurofisiológico puede
ante la sospecha clínica de esta enfermedad. ser normal, dado que las alteraciones se desarrollan
con el paso del tiempo. Por lo tanto, en estas cir-
Estudio eléctrico cunstancias está justificada la repetición del estudio
pasados unos 7-10 días. Por otro lado, como en to-
Dado que la alteración de la placa neuromus- dos los trastornos de la unión neuromuscular, pue-
cular se sitúa a nivel presináptico, los hallazgos de que sólo existan alteraciones neurofisiológicas
del estudio neurofisiológico son similares a los del en determinados músculos, por lo que el estudio
síndrome de Eaton-Lambert. debe planificarse en función de las manifestaciones
– Los estudios de conducción sensitiva son norma- clínicas(33).
les. Las amplitudes de los potenciales evocados
motores están disminuidas, manteniendo laten-
cias y velocidades de conducción normales. SÍNDROMES MIASTÉNICOS PRODUCIDOS POR FÁRMACOS
– La estimulación repetitiva a baja frecuencia Y TÓXICOS
puede ser normal o presentar un ligero decre-
mento de la amplitud de los potenciales evoca- Existe una extensa relación de fármacos y tóxi-
dos motores. cos que pueden determinar alteraciones a nivel de
– Si la estimulación repetitiva a baja frecuencia la unión neuromuscular. En algunos casos pueden
se realiza tras un esfuerzo mantenido o después empeorar la sintomatología en pacientes con un
de una estimulación tetánica, puede existir fa- trastorno ya conocido (miastenia gravis, síndrome
cilitación. La respuesta es similar a la obtenida de Eaton-Lambert) o bien desencadenar la enfer-
en el síndrome de Eaton-Lambert, aunque fre- medad. Por otra parte, hay que tener en cuenta
cuentemente menos espectacular, no sobrepa- que la acción de determinadas sustancias puede
sando un incremento del 100% con respecto a provocar síntomas similares a la miastenia gravis
la amplitud de la respuesta inicial. en personas sanas.

Manual EMG.indb 352 9/7/07 12:07:28


Enfermedades de la unión neuromuscular 353

Los bloqueantes neuromusculares, como la sustancias inhiben la acetilcolinesterasa por fosfori-


succinilcolina, el pancuronio y la D-tubocurarina, lación, resultando en una crisis colinérgica aguda,
provocan un efecto intenso y prolongado sobre la con sintomatología, tanto a nivel del sistema nervio-
transmisión neuromuscular en pacientes con miaste- so central como del periférico. Como en el déficit
nia o síndrome miasteniforme. Algunos antibióticos, congénito de acetilcolinesterasa, se pueden obser-
principalmente los aminoglucósidos, antiarrítmicos var descargas repetitivas tras estímulo supramáximo
(quinina, quinidina y procainamida), betabloquean- único. Además, algunos organofosforados pueden
tes (propranolol), la difenilhidantoína, la D-penicila- producir una polineuropatía diferida, unas dos o tres
mina, algunos colirios oftalmológicos (timolol), los semanas después de la exposición aguda(35).
contrastes iodados y las sales de magnesio pueden Para concluir, podemos afirmar que los resultados
agravar la debilidad en la miastenia. De este modo, del estudio neurofisiológico en este amplio grupo de
deben evitarse muchas de estas sustancias en los enfermedades de la unión neuromuscular depende-
pacientes con miastenia gravis o, según los casos, rán del mecanismo de acción del agente causal, bien
emplearse con mucha precaución. a nivel presináptico, de la hendidura sináptica o de la
Una gran variedad de bacterias, plantas y anima- membrana post-sináptica. Por lo tanto, los hallazgos
les producen toxinas que bloquean la transmisión electrofisiológicos se aproximan a los distintos patro-
neuromuscular. Normalmente el cuadro clínico se nes comentados con anterioridad.
presenta de forma aguda. El veneno de cobra provoca
un bloqueo no-depolarizante prolongado de los recep-
tores de acetilcolina. El veneno de las serpientes del BIBLIOGRAFÍA
género Bungarus contiene componentes que actúan
1. Keesey JC. Clinical evaluation and management of myas-
a varios niveles de la unión neuromuscular. De forma thenia gravis. Muscle Nerve 2004; 29: 484-505.
específica, se sabe que la β-bungarotoxina impide la 2. Aragonés JM, Bolívar I, Bonfill X, Mummany A, Alonso F,
liberación de Ach y la α-bungarotoxina se une de Illa I. Myasthenia gravis, a higher than expected incidence
forma irreversible a los receptores de acetilcolina. in the elderly. Neurology 2003; 60: 1024-6.
Otros venenos animales contienen múltiples 3. Meriggioli MN, Sanders DB. Advances in the diagnosis of
toxinas que pueden afectar a diferentes órganos. Así neuromuscular junction disorders. Am J Phys Med Rehabil
2005; 84: 627-38.
ocurre con la mordedura de serpientes de cascabel,
4. Stickler DE, Massey JM, Sanders DB. MuSK-antibody
serpientes de mar, escorpiones y viudas negras. positive myasthenia gravis: Clinical and electrodiagnostic
Las garrapatas Ixodes producen parálisis muscu- patterns. Clin Neurophysiol 2005; 16: 2065-8.
lar. La Ixodes holocyclus contiene holociclotoxina, 5. Lindstrom J, Shelton D, Fujii Y. Myasthenia gravis. Adv
que actúa a nivel presináptico inhibiendo la libe- Immunol 1988; 42: 233-84.
ración de acetilcolina. Produce una tetraparesia 6. Márquez C, Bautista J. El cansancio: miopatías con into-
lerancia al ejercicio, miastenia y síndromes miasténicos.
fláccida aguda similar al síndrome de Guillain- Continua Neurologica 2000; 3 (1): 1-15.
Barré. Los hallazgos neurofisiológicos demuestran 7. Jiménez MD. Aspectos clínicos y terapéuticos de 100 casos
una disminución de la amplitud de los potenciales de miastenia gravis. Tesis doctoral, Universidad Autónoma
evocados motores. La estimulación repetitiva pue- de Madrid, 1985.
de mostrar facilitación como en otros trastornos 8. Pradas Orozco J. Manifestaciones clínicas y métodos de
diagnóstico en la miastenia gravis. En: Díez-Tejedor E,
presinápticos(34). ed. Miastenia gravis y síndromes miasténicos. Barcelona:
Entre los venenos de plantas destaca el curare, J.R. Prous, S.A.; 1995.
utilizado en el pasado incluso en el diagnóstico de 9. Jaretzki A, Barohn RJ, Ernstoff RM, Kaminski HJ, Kee-
estas enfermedades. Finalmente, los organofosfora- sey JC, Penn AS et. al. Myasthenia gravis, recommenda-
dos, presentes en herbicidas, insecticidas, aditivos tions for clinical research standards. Task Force of the
Medical Scientific Advisory Board of the Myasthenia
del petróleo y plásticos, entre otros, son una causa gravis Foundation of America. Neurology 2000; 55 (1):
frecuente de intoxicación en nuestro medio. Estas 16-23.

Manual EMG.indb 353 9/7/07 12:07:28


354 E. Montes Latorre, C. Márquez Infante, M.D. Jiménez Hernández

10. Kothari MJ. Myasthenia gravis. Am J Osteopath Assoc 23. Bady B, Chauplannaz G, Carrier H. Congenital Lam-
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12. AAEM Quality Assurance Commitee. American Associa- Congenital myasthenic syndrome associated with paucity
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Manual EMG.indb 354 9/7/07 12:07:28


Capítulo 26

MIOPATÍAS
J. Bautista Lorite

INTRODUCCIÓN 7. El examen EMG, en el ámbito clínico de las


miopatías, debe ser ponderado y ajustarse a sus
Las miopatías constituyen un grupo de enfer- propios objetivos diagnósticos.
medades con afectación del músculo esquelético En cualquier caso, el diagnóstico de una enfer-
con pérdida de fibras musculares funcionantes medad muscular no se puede basar exclusivamen-
en los músculos afectados. La distribución de las te en los datos EMG y debe estar sustentado por
paresias suele afectar a los músculos proximales, y las manifestaciones clínicas y las aportaciones de
más raramente a la musculatura distal o bulbar. la biopsia, así como en los estudios genéticos en
El estudio electromiográfico EMG(1-6) es funda- aquellos trastornos en los que sean necesarios. Pro-
mental, ya que, en general, permite conocer la na- bablemente en un futuro próximo, el diagnóstico
turaleza miopática de la lesión muscular y conduce molecular permitirá prescindir de otros exámenes
al diagnóstico de miopatía. Sin embargo, habría que en determinadas entidades(7).
tener en cuenta ciertas consideraciones: En líneas generales, la evaluación EMG de las
1. Se encuentra un patrón muy alterado en las miopatías debe seguir las directrices que recomien-
miopatías con marcado componente degene- da la Asociación Americana de Medicina Electro-
rativo, como en las distrofias musculares o mio- diagnóstica(8):
patías inflamatorias. – Examen de, al menos, dos miembros incluyen-
2. El examen puede ser normal en las miopatías do un músculo distal y otro proximal.
que cursan con afectación de fibras tipo 2, en – Estudio de conducción nerviosa motora y sen-
miopatías congénitas o algunas miopatías me- sitiva en un miembro afecto.
tabólicas. – Estimulación repetitiva en, al menos, un
3. En ocasiones las anomalías son intermitentes, músculo parético si el diagnóstico diferencial
como ocurre en las parálisis periódicas. incluye un trastorno de la transmisión neuro-
4. Pueden coexistir en el mismo músculo exami- muscular.
nado o en el mismo paciente datos mixtos, tanto El patrón miopático define neurofisiológica-
de naturaleza miopática como neurógena. mente las enfermedades musculares y tiene las
5. Con frecuencia el examen EMG no permite siguientes características (Tabla I).
diferenciar las enfermedades musculares entre
sí, al no existir diferencias significativas entre, Duración media de los PUM disminuida
por ejemplo, las distrofias musculares y las po-
limiositis. La pérdida de los componentes lentos inicial y
6. No se debe explorar un músculo que se va a final de la unidad motora produce una disminución
biopsiar. de la duración media de dichas unidades; supone

Manual EMG.indb 355 9/7/07 12:07:29


356 J. Bautista Lorite

TABLA I. Características del patrón miopático


• Duración media de los PUM disminuida
• Amplitud media de los PUM disminuida
• Aumento de la polifasia
• Patrón de interferencia en esfuerzos submáximos
• Actividad espontánea:
- Fibrilaciones y ondas positivas
- Descargas miotónicas
- Descargas complejas repetitivas
Figura 1. Potenciales de unidad motora normal y miopático.

Los potenciales polifásicos tienen baja espe-


cificidad diagnóstica como signo aislado y están
presentes en el 85% de las distrofias musculares.
200 μV
10 ms Reclutamiento y patrón de interferencia

El patrón de reclutamiento con el esfuerzo, está


Figura 2. Potenciales polifásicos grandes y pequeños. condicionado por la duración de los PUM y la inci-
dencia de polifásicos, ya que son los dos parámetros
que determinan la sumación espacial.
uno de los parámetros más sensibles para el diag- En las enfermedades musculares se obtiene un
nóstico de las enfermedades musculares (Fig. 1). patrón de interferencia completo al inicio de la
contracción y un reclutamiento precoz, que con-
Amplitud media de los PUM disminuida trasta con la paresia del músculo examinado. Al
ser las unidades motoras más pequeñas, se han de
Las unidades motoras sobreviven hasta fases activar en mayor número para obtener un esfuer-
avanzadas de la enfermedad, pero su tamaño es zo determinado (Fig. 3). A veces puede ser útil
menor por la progresiva pérdida de fibras muscu- el análisis automático del patrón de interferencia
lares funcionantes; esta reducción en el número de (Fig. 4).
fibras de la unidad motora hace que los potenciales Sin embargo, el patrón de interferencia obte-
motores sean de baja amplitud (Fig. 1). nido con el máximo esfuerzo tiene, a veces, un
valor diagnóstico relativo, porque se trata de una
Aumento de la polifasia evaluación subjetiva y precisa la colaboración del
paciente.
Cuando hay pérdida o bloqueo de fibras muscu-
lares, aumenta la dispersión temporal de las fibras Actividad espontánea
que sobreviven, producen descargas asíncronas y
dan lugar a un aumento de potenciales polifásicos. Como se señala en otros capítulos de este ma-
Los polifásicos cortos (duración media - 2 desvia- nual, la necrosis segmentaria de las fibras induce
ciones estándar) están relacionados con pérdida de denervación en un segmento de la fibra.
fibras, mientras que los polifásicos largos (duración • Fibrilaciones y ondas positivas. Aparecen cuan-
media + 2 desviaciones estándar) lo están con pro- do una fibra muscular se encuentra denervada.
cesos de regeneración (Fig. 2). No es sinónimo de enfermedad neurógena y

Manual EMG.indb 356 9/7/07 12:07:29


Miopatías 357

400 μV

100 ms

Figura 3. Patrón de interferencia a la contracción voluntaria máxima. Arriba, patrón miógeno; centro, patrón normal; abajo patrón neurógeno.

Figura 4. Análisis automático del patrón de interferencia en un paciente con diagnóstico de distrofia muscular de cinturas.

aparece habitualmente en miopatías con com- las fibrilaciones, y muestran una breve deflexión
ponente necrobiótico (distrofias musculares, positiva inicial, seguida de una fase negativa
miopatías inflamatorias, etc.). Presentan la de larga duración (> 10 ms) con una amplitud
morfología de un potencial de acción de fibra entre 20 y 200 μV, que en ocasiones puede al-
muscular con una onda positiva inicial, con canzar varios mV (Fig. 5).
duración de 1-5 ms y amplitud de 20-200 μV. • Descargas miotónicas. Consisten en actividad
Las ondas positivas tienen significado similar a espontánea de la fibra muscular, con morfología

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358 J. Bautista Lorite

40 μV
10 ms
Figura 5. Fibrilaciones y ondas positivas. Figura 6. Descarga miotónica formada por ondas positivas.

200 μV
10 ms
Figura 7. Descargas complejas repetitivas.

de ondas positivas o fibrilaciones. Muestran ritmo base genética, que se diferencian por el tipo de
creciente/decreciente con una frecuencia entre herencia, la edad de comienzo, la distribución de
20 y 200 Hz y amplitud variable (20-300 μV) la afectación muscular, la velocidad de progresión
(Fig. 6). y el pronóstico.
Aparecen en las enfermedades miotónicas, po-
limiositis, hipotiroidismo, parálisis periódica Distrofinopatías
hipercaliémica, enfermedad de Pompe y en Son enfermedades musculares hereditarias que
algunos procesos de denervación. se transmiten de forma recesiva ligada al cromoso-
• Descargas complejas repetitivas. Actividad ma X, debidas a deleciones o mutaciones en el gen
espontánea de fibras musculares denervadas. localizado en el brazo corto (Xp21). El producto
Pueden adoptar cualquier forma, pero constan- del gen es una proteína de 427 kD llamada distro-
te con inicio y final abruptos y la frecuencia fina, situada en el sarcolema, que está ausente o en
oscila entre 20 y 150 Hz (Fig. 7). muy pequeñas cantidades en la enfermedad de Du-
chenne, y disminuida y de peso molecular más bajo
en la de Becker. Las enfermedades causadas por el
ENFERMEDADES MUSCULARES déficit de distrofina aparecen en la Tabla II.
La distrofia muscular de Duchenne(10) es la más
A continuación exponemos los datos fundamen- grave, comienza a los 2 ó 3 años, generalmente, a
tales de los distintos grupos de miopatías(9). los 12 años los pacientes no pueden caminar, y la
muerte les llega en la tercera década. En la distrofia
Distrofias musculares muscular de Becker(11) la edad de comienzo es más
tardía (6-18 años) y la progresión más lenta. Am-
Las distrofias musculares son un grupo de en- bas se manifiestan por distinto grado de debilidad
fermedades hereditarias, caracterizadas por una y atrofia de los músculos de las cinturas escapu-
degeneración progresiva de las fibras musculares, lar y pelviana, con hipertrofia de las pantorrillas
que se manifiesta mediante debilidad y atrofia de (Fig. 8). La creatina cinasa (CK) está elevada más
los músculos. Existen diversos tipos, con distinta de 10 veces el límite superior de la normalidad.

Manual EMG.indb 358 9/7/07 12:07:30


Miopatías 359

TABLA II. Clasificacion de las distrofinopatías gen miopático y la extensión de la enfermedad. La


• Distrofia muscular de Duchenne afectación es mayor en los músculos proximales.
• Distrofia muscular de Becker La actividad de inserción está aumentada y apare-
• Síndrome de mialgias y calambres ce actividad espontánea, con fibrilaciones, ondas
• Miopatía del cuádriceps positivas y descargas repetitivas complejas, que se
• HiperCKemias atribuye a la necrosis segmentaria y regeneración
• Miocardiopatía dilatada ligada al X de las fibras musculares. Los potenciales de unidad
• Portadoras sintomáticas de distrofinopatía motora (PUM) muestran un patrón miopático, con
la amplitud y la duración disminuidas, y un porcen-
taje elevado de potenciales polifásicos. El patrón
La biopsia muscular muestra un aumento en la de reclutamiento de los PUM en la contracción
variabilidad del diámetro de las fibras, con fibras voluntaria es interferencial de forma precoz, aun
atróficas redondeadas, hialinas, signos de necro- en músculos paréticos, con un número de picos
sis y regeneración, fibrosis e infiltración grasa. La mayor de lo normal y, generalmente, con amplitud
tinción inmunohistoquímica y el Western-blot de- reducida. No obstante, en muchos casos se regis-
muestran la ausencia de distrofina en la distrofia tran PUM de duración alargada y componentes
de Duchenne y un claro déficit en la distrofia de tardíos del potencial, probablemente debidos a la
Becker. En ambas el estudio del ADN es diagnós- conducción más lenta del impulso nervioso en los
tico en el 70% de los casos al detectar deleciones brotes axonales jóvenes colaterales que inervan las
en el gen de la distrofina. fibras regeneradas y en esas mismas fibras. En los
Los estudios electrofisiológicos en la distrofia estadios avanzados de la enfermedad, cuando una
muscular de Duchenne tienen gran importancia gran proporción de fibras musculares ha sido sus-
en el diagnóstico, pues ayudan a establecer el ori- tituida por grasa y tejido fibroso, la actividad de

Figura 8. Paciente con distro-


finopatía tipo Becker. Hiper-
trofia de pantorrillas. Atrofia de
cuádriceps.

Manual EMG.indb 359 9/7/07 12:07:30


360 J. Bautista Lorite

inserción está disminuida. Asimismo, desaparecen


unidades motoras enteras y, entonces, se empo-
brece el trazado de reclutamiento de PUM en la
contracción voluntaria.
El examen automático cuantitativo del patrón in-
terferencial, mediante el análisis de la relación entre
el número de giros y la amplitud media de los mismos
a diferentes grados de fuerza muscular, muestra un
aumento del cociente giros/amplitud, en contraste
con lo obtenido en los trastornos neurógenos.
Los estudios de fibra aislada muestran aumento
de densidad de las fibras e incremento del jitter
en los músculos más gravemente afectados, pro-
bablemente por alteraciones en la propagación
del impulso nervioso en las fibras degeneradas y
en regeneración, en las placas motoras o en los
axones.
En la distrofia muscular de Becker las fibri-
Figura 9. Paciente con LGMD2D con déficit de α-sarcoglicano. Paresia y
laciones, ondas positivas y descargas repetitivas atrofia de cintura escapular.
complejas pueden ser abundantes en los músculos
paraespinales. El análisis de los PUM y el recluta-
miento muestran, generalmente, patrones miopá- De acuerdo con estos conocimientos y las nuevas
ticos, aunque hasta en un 10% se describen PUM aportaciones bioquímicas o moleculares, se han
de amplitud y duración alargadas y reclutamiento identificado diversas entidades clínicas en una cla-
disminuido. sificación(12) en constante ampliación (Tabla III).
Los estudios electroneurográficos y la estimu- La edad de comienzo, progresión y gravedad son
lación repetitiva son normales. muy variables de unas entidades a otras.
La electromiografía en la detección de portado- Los hallazgos electromiográficos en las LGMD
ras de estas enfermedades ha mostrado resultados son los típicos de las enfermedades musculares
contradictorios y, por tanto, no es útil en la práctica primarias y similares a los de otras miopatías. Las
clínica. unidades motoras son de corta duración, baja am-
plitud con aumento de potenciales polifásicos.
Distrofias musculares de cinturas (LGMD) En los músculos clínicamente paréticos se ob-
Con este nombre se denomina a un grupo he- tiene un patrón interferencial con reclutamien-
terogéneo de enfermedades que tienen en común to precoz. Por otra parte, se encuentra actividad
una afectación predominante de los músculos de espontánea anormal, en forma de fibrilaciones y
las cinturas (Fig. 9) y un patrón de herencia au- ondas positivas en las variedades de LGMD más
tosómico dominante o recesivo. En los últimos progresivas y graves, como las formas recesivas de
10 años se ha producido un enorme avance en inicio precoz. Los estudios de conducción nervio-
la localización de los genes y en el conocimiento sa, tanto motora como sensitiva son típicamente
de las mutaciones y de las proteínas, cuyo défi- normales.
cit causa estas enfermedades. La mayor parte son
proteínas estructurales situadas, como la distrofina Distrofia muscular facio-escápulo-humeral
y los sarcoglicanos, en el sarcolema; sin embar- Es la segunda distrofia muscular en frecuencia
go, la calpaína 3 es una proteína citoplasmática. en el adulto(13), después de la distrofia miotónica.

Manual EMG.indb 360 9/7/07 12:07:32


Miopatías 361

TABLA III. Distrofias musculares de cinturas


Localización Proteína

Dominantes
• LGMD1A 5q31 Miotilina
• LGMD1B 1q21-2 Laminas A y C
• LGMD1C 3p25 Caveolina-3
• LGMD1D 6q22 ?
• LGMD1E 7q ?
• LGMD1F ?
• LGMD1G ?
Figura 10. Paciente con distrofia muscular facio-escápulo-humeral.
Recesivas
• LGMD2A 15q15 Calpaína 3
• LGMD2B 2p13 Dysferlina
• LGMD2C 13q12 γ-sarcoglycano La electromiografía puede ser normal, sobre
• LGMD2D 17q21 α-sarcoglycano todo en los estadios iniciales. Posteriormente es
• LGMD2E 4q12 β-sarcoglycano habitual registrar signos miopáticos con PUM po-
• LGMD2F 5q33 δ-sarcoglycano lifásicos y de duración y amplitud reducidas. No es
• LGMD2G 17q11-12 Teletonina raro encontrar fibrilaciones y descargas repetitivas
• LGMD2H 9q31-33 Tripartita y, como en casos anteriores, los estudios de con-
• LGMD2I 19q13 Fukutina ducción nerviosa son normales.
• LGMD2J 2q31 Titina
• LGMD2K 9q34 POMT1 Distrofia muscular de Emery-Dreifuss
Se caracteriza por la presencia de contracturas
articulares precoces de codos (Fig. 11), tendones de
Aquiles y extensores del cuello, paresia y amiotrofia
Su herencia es autosómica dominante. Se cono- que comienza por un patrón húmeroperoneal y
ce la mutación, que consiste en deleciones en el afectación cardiaca con trastornos del ritmo y mio-
telómero del cromosoma 4 (4qter), aunque no se cardiopatía dilatada(14). Comienza en la infancia,
ha identificado ningún gen en esa región. Un 10% la afectación muscular suele ser poco invalidante
de las familias no muestran ligamiento con el cro- y el pronóstico viene marcado, generalmente, por
mosoma 4. Se manifiesta con debilidad facial y la cardiopatía. La mayor parte de las familias mues-
paresia de la musculatura escapular y de los brazos, tran un patrón recesivo ligado al cromosoma X. El
generalmente asimétrica (Fig. 10). Por lo general, gen se ha identificado en el locus Xq28, donde se
la cintura pélvica y las piernas se afectan en menor han descrito unas 70 mutaciones que dan lugar
medida y más tardíamente. Puede cursar de forma a un déficit de emerina, una proteína de 34 kD
asintomática. La CK suele estar elevada, pero ra- que se sitúa en la membrana nuclear de todas las
ramente por encima de 5 veces el límite superior células del organismo, por lo que el estudio inmu-
de la normalidad y puede también ser normal. La nohistoquímico de la emerina en un frotis de mu-
biopsia muscular muestra cambios miopáticos, a cosa oral puede ser suficiente para el diagnóstico.
veces con fibras anguladas y otros rasgos neuro- Existen formas autosómicas dominantes, en las que
páticos; la presencia de infiltrados linfocitarios no el gen responsable, localizado en el cromosoma 1
es infrecuente y, en los casos esporádicos, plantea (1q11-q23), codifica las laminas A/C, que, como la
el diagnóstico diferencial con las miopatías infla- emerina, son también proteínas de la membrana
matorias. nuclear.

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362 J. Bautista Lorite

Figura 12. Paciente con miopatía distal de Miyoshi. Intensa afectación de


gemelos con ligera retracción aquilea.

no de vacuolas en la biopsia muscular, describién-


dose nuevas formas en relación a hallazgos bioquí-
micos o moleculares no conocidos con anterioridad
(Tabla IV). Recientemente se ha encontrado que
la distrofia distal de Miyoshi (Fig. 12) comparte
Figura 11. Paciente con distrofia muscular tipo Emery-Dreifuss. Retracción
en flexión de codos; portador de un marcapasos. su origen con la distrofia muscular de cinturas re-
cesiva tipo B (LGMD2B), de forma que diversas
mutaciones en el gen de la disferlina pueden dar
Desde el punto de vista EMG, se caracteriza por lugar a estos dos fenotipos diferentes, incluso en
la presencia de potenciales polifásicos y pequeños y la misma familia.
pueden también aparecer escasas fibrilaciones. El estudio electromiográfico es especialmen-
te relevante en estas enfermedades, con paresia
Miopatías distales y amiotrofia distales, para establecer su carácter
Estas raras miopatías se caracterizan por la afec- miopático, diferenciándolas, así, de las polineuro-
tación predominante de los músculos distales de patías. La diferenciación se basa en el análisis de los
las extremidades(15). Forman un grupo heterogéneo PUM (cortos y con alta proporción de potenciales
con herencia autosómica dominante o recesiva, y polifásicos) y en su reclutamiento, con un trazado
se diferencian por la edad de comienzo, los grupos interferencial completo. Sin embargo, en algunas
musculares afectos, la cifra de CK y la presencia o de estas enfermedades no es raro encontrar un au-

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Miopatías 363

TABLA IV. Miopatías distales


Tipo Herencia Locus/proteína Comienzo CK Biopsia muscular

Welander AD 2p13 > 40 años 0/+ Miopático


Extensores del carpo ± vacuolas
Miyoshi, LGMD2B AR 2p12-p16 20-50 años +++ Miopático
Disferlina Grupo posterior pierna No vacuolas
Markesbery AD 2q31 40-50 años 0/+ Miopático
(finlandés) Grupo anterior de la pierna Vacuolas
Nonaka, AR 9p1-q1 20-40 años ++ Miopático
IBMHR Grupo anterior de la pierna Vacuolas
Gowers-Laing AD 14q11 4-25 años ++ Miopático
Grupo anterior de la pierna No vacuolas
Distrofia distal con rimmed vacuoles AD 19p13.3 10-50 años Miopático
Distal en piernas Vacuolas
IBMH AD 25-40 años Miopático
Distal en piernas, cuádriceps Vacuolas
Oculofaríngea distal AD 40 años Miopático
Músculos extraoculares Vacuolas
LGMD2G AR 17q11-12 12 años ++/+++ Miopático
Piernas proximal y distal anterior Vacuolas
Con afectación laríngea y faríngea AD 5q31 35-57 años 0/++ Miopático
Piernas, manos o laringe Vacuolas
Rippling muscular disease AD 3p25 20-45 años ++ Miopático
Caveolina Manos y pies
AD: autosómica dominante; AR: autosómica recesiva; LGMD2B: distrofia muscular de cinturas autosómica recesiva tipo B; LGMD2G: distrofia muscular de
cinturas autosómica recesiva tipo G; IBMH: miopatía con cuerpos de inclusión hereditaria; IBMHR: miopatía con cuerpos de inclusión hereditaria autosómica
recesiva; 0, +, ++, +++: CK normal, elevada hasta 5 veces, de 5 a 10 veces o más de 10 veces lo normal, respectivamente.

mento de la actividad de inserción y de la actividad es el síndrome de espina rígida. La merosina es una


espontánea, en mayor o menor grado. proteína de la matriz extracelular, que es deficitaria
en estas enfermedades, debido a mutaciones en su
Distrofias musculares congénitas gen localizado en el cromosoma 6q23.
Se designan con este nombre un grupo de enfer- La electromiografía puede diferenciar, en los
medades heredadas de forma autosómica recesiva, niños hipotónicos, entre una miopatía congénita
que aparecen desde el nacimiento o en los primeros y una atrofia muscular espinal, mediante la obten-
meses de vida, y se manifiestan por hipotonía, retrac- ción de un trazado miopático, en ocasiones con es-
ciones y paresia de predominio proximal. Algunas casas fibrilaciones. Adicionalmente, es de destacar
cursan con afectación cerebral predominante (tipo que el potencial de acción sensitivo es anormal en
Fukuyama, síndrome músculo-ojo-cerebro, síndro- los casos de miopatía con déficit de merosina.
me de Walker-Walbourg), y en otras predomina la
miopatía. En estas últimas se diferencian actualmen- Distrofia muscular oculofaríngea
te dos grupos: las formas con merosina negativa y Se hereda de forma autosómica dominante y
las formas con merosina positiva, una de las cuales se presenta en la edad adulta con ptosis palpebral,

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364 J. Bautista Lorite

Figura 13. Paciente con distrofia muscular oculofaríngea. Ptosis palpebral


de inicio tardío.

paresia de los músculos extraoculares y disfagia(16);


puede existir, además, paresia de cinturas (Fig. 13).
El gen se ha localizado en el locus 14q11.2-q13 y
codifica la proteína transportadora de poliadenilatos
tipo 2 (PABP 2). Las mutaciones son expansiones
de repeticiones del triplete GCG. La CK puede ser
normal o estar levemente aumentada. El estudio
EMG puede mostrar un trazado miopático o ser
normal.

Distrofias musculares paraespinales


En estas raras enfermedades (Fig. 14 A y B)
en las que aparece una afectación aislada de la
musculatura paravertebral cervical (“síndrome dro-
pped-head”) o dorsal (“síndrome bent spine”), el
electromiograma de los músculos afectados puede
mostrar PUM de amplitud y duración disminuidas,
con aumento de polifásicos, lo que indica la natu-
raleza miopática del proceso. B

Miopatías congénitas

Se agrupan aquí un grupo de enfermedades


de inicio en la infancia y progresión lenta o nula,
a veces con mejoría en los déficits, heredadas de
Figura 14. A: paciente con miopatía axial con posición encorvada al ca-
forma autosómica dominante o recesiva, en las que
minar; B: afectación de musculatura paravertebral (TC de paciente con
la biopsia muscular muestra cambios estructurales distrofia muscular paraespinal).
que diferencian unas entidades de otras.
La miopatía central core(17) se caracteriza por
fibras musculares con zonas redondeadas, bien de-
limitadas, generalmente centrales, pero también ryanodina (canal del calcio muscular) localizado en
excéntricas, desprovistas de actividad con el PAS el locus 19q13.1, está relacionada con la hiperter-
y las técnicas para enzimas glicolíticos y oxidativos mia maligna; la segunda, cursa con miocardiopatía
(Fig. 15). Se distinguen dos formas de miopatía hipertrófica y la mutación afecta al gen la miosina
central core: la primera, con afectación muscular, miocárdica, situado en el locus 14q11.2-q13. Ambas
se debe a mutaciones en el gen del receptor de se heredan de forma dominante.

Manual EMG.indb 364 9/7/07 12:07:35


Miopatías 365

Figura 15. Miopatía congénita con central core en la biopsia muscular Figura 16. Miopatía nemalínica con bastones en microscopía electró-
(NADH). nica.

siva ligada al cromosoma X, por mutaciones en


el gen de la miotubularina que se localiza en el
locus Xq27.3-q28, aunque también hay formas au-
tosómicas dominantes y recesivas. En cuanto a la
evolución, los casos de inicio neonatal pueden ser
graves. Pueden presentar afectación facial y de los
músculos extraoculares y miocardiopatía.
Otras miopatías congénitas son la miopatía
con multiminicores, la miopatía con agregados tu-
bulares, la desproporción congénita de los tipos
Figura 17. Miopatía centronuclear (tinción NADH). de fibras, la miopatía con cuerpos reductores, la
miopatía con cuerpos citoplasmáticos, la miopatía
con depósito de desmina, etc. Todas ellas están
En la miopatía nemalínica(18) la biopsia mus- bautizadas en relación a los cambios estructurales
cular muestra estructuras en forma de bastones en la biopsia muscular.
electrodensas, similares a la banda Z, y bioquími- La electromiografía muestra, generalmente,
camente contienen α-actinina y tropomiosina (Fig. PUM de duración y amplitud disminuidas, con
16). Se diferencian formas autosómicas dominantes un patrón interfencial de reclutamiento, lo que
por mutación en el gen de la α-tropomiosina 3, pro- indica el carácter miopático y distingue a estas en-
teína que une la tropomiosina a la actina, situado tidades de alteraciones neurógenas. Sin embargo,
en el locus 1q21-q23; formas autosómicas recesivas en la miopatía central core y en la miopatía ne-
por mutación en el gen de la nebulina, situado en malínica pueden encontrarse PUM de amplitud
el locus 2q21-q22, y otras por mutación en el gen de y duración aumentadas. Además, en los casos más
la α-actina, situado en el locus 1q42.1, que pueden graves de inicio neonatal puede aparecer actividad
ser dominantes, recesivas o esporádicas. espontánea.
La miopatía centronuclear o miotubular(19) se
caracteriza por la presencia de cadenas de núcleos Miopatías inflamatorias
centrales en fibras tipo I hipotróficas, asociadas a
acúmulos oxidativos y PAS+ en las zonas peri o Dermatomiositis y polimiositis(20)
internucleares (Fig. 17) y núcleos centrales en Son miopatías de etiología desconocida, en
las fibras musculares. Se hereda de forma rece- las que se produce una destrucción de las fibras

Manual EMG.indb 365 9/7/07 12:07:36


366 J. Bautista Lorite

musculares mediada por inflamación. En la der- fibras musculares de sus placas motoras debida a
matomiositis existe un ataque inmune, predomi- necrosis focal. La actividad espontánea es espe-
nantemente humoral, con activación del comple- cialmente abundante en estadios iniciales y en
mento dirigido contra los vasos intramusculares. los casos subagudos. Tras el tratamiento y en las
En la biopsia muscular se encuentran infiltrados remisiones de la enfermedad, la actividad espon-
mononucleares perivasculares y perifasciculares. tánea disminuye considerablemente. No obstante,
Existe también atrofia de pequeños grupos de fibras en cualquier momento evolutivo es más frecuente
y atrofia perifascicular, que es el rasgo histopatoló- en los músculos paravertebrales, por lo que puede
gico específico de la enfermedad. En los infiltrados ser importante su exploración.
predominan los linfocitos B y los CD4+ (células T Los PUM son de tipo miopático, con duración
helper). La dermatomiositis puede aparecer aislada corta y amplitud reducida, aumento de la propor-
o asociada a enfermedades del tejido conectivo o ción de potenciales polifásicos y un patrón inter-
a neoplasias. Clínicamente se caracteriza por la ferencial completo, con aumento del número de
existencia de paresia con distribución de cinturas, picos. El análisis automático de giros/amplitud
que respeta la musculatura facial, además de un es muy útil y rápido para mostrar este patrón, y
exantema cutáneo que acompaña o precede a los su eficacia es, a veces, similar a la del análisis de
signos musculares. La CK está aumentada hasta 50 los PUM. En estadios más avanzados de la enfer-
veces las cifras normales. En el caso de la polimio- medad, cuando se ha producido degeneración y
sitis el mecanismo implicado parece ser el ataque regeneración abundante de las fibras musculares,
de inmunidad celular contra la fibra muscular. pueden aparecer potenciales polifásicos con la du-
Desde el punto de vista histológico, destacan los ración alargada y, al desaparecer unidades motoras
infiltrados mononucleares endomisiales, en los que completas, el patrón interferencial puede reducir-
predominan las células CD8+ (células T supresoras se. Los estudios de fibra aislada pueden mostrar
o citotóxicas). Clínicamente, la paresia afecta a las un aumento del jitter y de la densidad de fibras,
cinturas respetando, por lo general, la musculatura pero no es un examen de uso cotidiano en esta
facial y la CK muestra también valores muy altos. enfermedad.
La electromiografía es esencial en el diagnós- En los casos tratados con corticosteroides en
tico de las miopatías inflamatorias. En primer lu- los que se produce un empeoramiento, se plantea
gar, permite establecer el carácter miopático de la el dilema de si este es debido a una reactivación
enfermedad, diferenciándola de otras alteraciones de la miopatía inflamatoria o a una miopatía es-
de la unidad motora. El hallazgo de abundantes teroidea. La presencia de efectos secundarios de
fibrilaciones y ondas positivas, descargas de alta los corticoides (hipertensión arterial, diabetes,
frecuencia y PUM de duración corta y amplitud obesidad característica, etc.), una CK normal y
reducida, con aumento de la proporción de poten- un electromiograma normal o miopático, sin acti-
ciales polifásicos y un patrón interferencial com- vidad espontánea, sugiere el diagnóstico de miopa-
pleto, no es específico, pero sí muy característico tía esteroidea. A favor de una recidiva del proceso
de este tipo de miopatías. Además, permite orientar inflamatorio estaría la afectación de la musculatura
sobre la evolución de la enfermedad y la respues- axial (flexores del cuello), la elevación de la CK y
ta al tratamiento. De este modo, la presencia de un electromiograma con actividad espontánea.
una actividad de inserción alargada y de actividad
espontánea en forma de fibrilaciones, ondas po- Miositis con cuerpos de inclusión
sitivas y descargas de alta frecuencia, es caracte- Esta enfermedad afecta a personas de más de 50
rística de la polimiositis y la dermatomiositis en años y es más frecuente en varones. La debilidad
actividad. Como ya se ha dicho, probablemente y atrofia muscular son lentas y progresivas, apare-
este patrón esté causado por la desconexión de las cen inicialmente en la musculatura proximal de

Manual EMG.indb 366 9/7/07 12:07:37


Miopatías 367

las extremidades inferiores, después se generalizan; fármaco. Desde el punto de vista EMG puede en-
los músculos cuádriceps, iliopsoas, tríceps, bíceps contrarse un patrón miopático, en ocasiones con
y flexores de los dedos participan de forma más escasa actividad espontánea. También se ha descri-
grave que en las otras miopatías inflamatorias. La to una miopatía con cuerpos nemalínicos asociada
distribución de la debilidad puede ser asimétrica. a infección por el VIH(21).
La CK es normal o está levemente elevada. No
suele responder al tratamiento con corticoides o Otras miositis infecciosas
inmunosupresores. Histopatológicamente, además Las miositis víricas suelen cursar con mialgias
de los infiltrados inflamatorios, es característica la sin paresia, ni elevación de la CK, y el electromio-
existencia de vacuolas, ribeteadas o no, depósitos grama es normal. Son excepciones la causada por
de material amiloide y, a nivel ultraestructural, fila- los virus influenza A y B en niños y la miositis por
mentos helicoidales apareados, similares a los que Echovirus que aparece en pacientes con hipogam-
se encuentran en los cerebros de pacientes con maglobulinemia, en las cuales puede encontrarse
enfermedad de Alzheimer. paresia, elevación de la CK y un trazado electro-
El patrón electromiográfico es similar al de miográfico miopático.
las otras miopatías inflamatorias, con actividad Tanto en la triquinosis como en la toxoplas-
de inserción aumentada, fibrilaciones, ondas po- mosis muscular puede encontrarse un trazado con
sitivas, descargas de alta frecuencia y PUM de actividad espontánea y PUM miopáticos, similar al
duración y amplitud disminuidas, polifásicos y con descrito en la polimiositis idiopática.
patrón interferencial completo. Sin embargo, la
presencia en algunos pacientes de PUM alargados Miopatías metabólicas
y de gran amplitud y reclutamiento simple ha
suscitado la cuestión de un posible componente Glucogenosis
neurógeno en la patogenia de la enfermedad. La
opinión generalizada es que este patrón sólo se Déficit de maltasa ácida: glucogenosis tipo II, enfermedad de
observa en pocos pacientes y en estadios avanza- Pompe(22)
dos, y está causado por la degeneración y regene- Esta enfermedad se hereda de forma autosómica
ración de las fibras musculares, como ocurre en recesiva y su gen está localizado en el cromosoma
las otras miopatías inflamatorias. Sin embargo, es 17q23-25. Existen 3 formas clínicas: la forma infan-
una cuestión abierta, que se deberá resolver con til precoz comienza en el primer año de vida, cursa
futuros estudios. con hipotonía y debilidad muscular, cardiomegalia,
hepatomegalia, macroglosia y fallecimiento antes
Miopatías en la infección por VIH de los 2 años por insuficiencia cardiaca; la forma
Se suelen presentar dos tipos de miopatía. La infantil tardía comienza después del año y medio de
primera de ellas, es indistinguible de la polimiositis edad y tiene una expresión clínica que recuerda la
idiopática, y puede ser la primera manifestación distrofia muscular de Duchenne; la forma del adul-
de la enfermedad. La electromiografía muestra los to comienza después de los 20 años con debilidad
mismos hallazgos que en la polimiositis. La otra de la cintura pelviana, no tiene afectación cardiaca,
miopatía, está relacionada con el tratamiento con y puede aparecer insuficiencia respiratoria precoz-
zidovudina y cursa con paresia de distribución mente por afectación diafragmática. En el estudio
proximal y mialgias. Histológicamente se encuen- histológico se encuentra una miopatía vacuolar con
tran fibras ragged-red e inclusiones paracristalinas depósitos de glucógeno en las fibras musculares.
mitocondriales, ya que la zivoduvina inhibe la El electromiograma muestra, en las tres formas,
γ-ADN polimerasa, una enzima específica de las PUM pequeños, cortos y polifásicos, a los que se
mitocondrias. El proceso es reversible al retirar el añade abundante actividad espontánea (fibrilacio-

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368 J. Bautista Lorite

nes, ondas positivas y salvas de alta frecuencia pseu- el desarrollo, hipotonía, intolerancia al ejercicio,
domiotónicas). También pueden aparecer descargas episodios de hipoglucemia y hepatomegalia; en la
miotónicas, sin miotonía clínica, en ocasiones sólo forma del adulto predomina la fatigabilidad sobre
en los músculos paraespinales. El trazado es más la debilidad y afecta, sobre todo, a la musculatu-
llamativo en las formas graves infantiles que en la ra distal de las extremidades superiores. La CK
del adulto. Las velocidades de conducción motora está elevada. En el test de ejercicio en isquemia
y sensitiva son normales y no existe trastorno en la no se eleva la concentración de ácido láctico. En
transmisión neuromuscular. la biopsia se encuentran depósitos de glucógeno
subsarcolemales e intramiofibrilares. El diagnóstico
Déficit de miofosforilasa: glucogenosis tipo V, enfermedad de se confirma con la determinación de la enzima
McArdle(23) desramificante en músculo.
Se hereda de forma recesiva. El gen está situado El electromiograma en los casos graves puede
en el locus 11q13. Clínicamente se manifiesta por mostrar fibrilaciones, ondas positivas, descargas de
contracturas musculares dolorosas desencadenadas alta frecuencia e, incluso, descargas miotónicas y
por el ejercicio. Tardíamente en la evolución pue- fasciculaciones. Los PUM son cortos, pequeños y
den aparecer debilidad y amiotrofia. La CK está con mayor proporción de polifásicos, aunque en
elevada. En el test de ejercicio en isquemia no se algunos enfermos se encuentran PUM de duración
eleva el ácido láctico en sangre. En la biopsia de y amplitud aumentadas. En los estudios de conduc-
músculo se observan vacuolas subsarcolemales, y se ción nerviosa puede existir una neuropatía leve.
demuestra la ausencia de miofosforilasa mediante
tinción específica. Miopatías mitocondriales
El estudio EMG puede ser normal o con leves Las miopatías mitocondriales son un grupo
rasgos miopáticos. Las contracturas musculares son complejo de enfermedades causadas por altera-
típicamente silentes en el estudio eléctrico. Las ciones heredadas o adquiridas del metabolismo
velocidades de conducción son normales. La esti- mitocondrial. Pueden tener el defecto genético
mulación repetitiva a alta frecuencia, si se realiza, en el ADN mitocondrial (ADNmt) (herencia ma-
puede provocar una respuesta decremental. terna) o en el ADN nuclear. Se conoce un número
muy elevado de mutaciones y otras anomalías en el
Déficit de fosfofructocinasa: glucogenosis tipo VII, enfermedad ADNmt, que dan lugar a distintos defectos de las
de Tarui(24) enzimas mitocondriales, con muy diversa expresi-
Esta enfermedad autosómica recesiva es muy vidad fenotípica. Los músculos oculares extrínse-
infrecuente en Europa. El gen se ha localizado en cos se afectan de un modo especial en este grupo
el cromosoma 1q32. Se manifiesta, como la en- de miopatías (Fig. 18), pero también se pueden
fermedad de McArdle, con calambres musculares presentar con debilidad proximal, intolerancia al
provocados por el ejercicio, pero no suele evolu- ejercicio, mioglobinuria, miocardiopatía y diversas
cionar a la aparición de debilidad y amiotrofia. La alteraciones del sistema nervioso central. Existen
CK está elevada y la curva de ácido láctico en el diferentes clasificaciones, según se atienda a las
test de ejercicio en isquemia es plana. El electro- mutaciones, a los defectos bioquímicos o a los cua-
miograma es normal. dros clínicos característicos. El diagnóstico de las
enfermedades mitocondriales es complejo, dada la
Déficit de enzima desramificante: glucogenosis tipo III, marcada variabilidad clínica, y se han establecido
enfermedad de Cori-Forbes(25) criterios diagnósticos concretos(26).
Se hereda de forma autosómica recesiva, el gen Puede sospecharse un defecto de la cadena
está localizado en el cromosoma 1p21. Existen dos respiratoria mitocondrial ante cualquier paciente
formas clínicas: la infantil, cursa con retraso en que presente una asociación inexplicable de dos o

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Miopatías 369

Figura 18. Miopatía ocular de origen mitocondrial. Oftalmoplejía intensa.

más síntomas, con un curso clínico rápidamente TABLA V. Síndromes clínicos más frecuentes asociados a alteraciones
progresivo, y que afecte tejidos y órganos aparen- del metabolismo energético
temente no relacionados. Es importante tener en
cuenta que cualquiera que sea la edad de inicio y 1. Síndrome de Alpers
2. Síndrome de Leigh
el síntoma inicial de la enfermedad, la principal
3. Síndrome de Pearson
característica es el incremento progresivo de tejidos
4. Síndrome de Barth
afectados durante el curso de la enfermedad, de
forma que el sistema nervioso central se halla, casi 5. Síndromes de depleción del ADNmt
siempre, involucrado en los estadios avanzados de a. Forma hepatoencefalopática
la enfermedad. b. Forma miopática
En la Tabla V se expone una clasificación clíni- 6. Síndrome de Kearns-Sayre
ca. Histológicamente se caracterizan por la presen- 7. Forma miopática aislada
cia de fibras ragged-red o aumento de la actividad a. Debilidad muscular
oxidativa subsarcolemal. b. Mialgias
El electromiograma muestra, en la mayoría de c. Intolerancia al ejercicio
los enfermos, trazados miopáticos leves o modera- d. Miopatía progresiva
dos, aunque no es raro encontrar un patrón con e. Mioglobinuria
PUM de duración alargada o un estudio normal. 8. Oftalmoplejía externa progresiva (PEO)
En el electroneurograma pueden existir signos de 9. Encefalopatía mitocondrial, acidosis láctica y episodios stroke-like
neuropatía periférica en el 25-50% de los enfermos, (MELAS)
generalmente, en forma de una disminución de la 10. Epilepsia mioclónica y fibras rojo rasgadas (MERRF)
amplitud o ausencia de potenciales sensitivos a la 11. Neuropatía, ataxia y retinitis pigmentaria (NARP)
que, en ocasiones, se añade enlentecimiento de la 12. Neuropatía óptica hereditaria de Leber (LHON)
velocidad de conducción motora. Estas alteraciones 13. Síndrome de MNGIE (encefalopatía mioneurogastrointestinal)
son más evidentes en miembros inferiores y suelen 14. Síndrome DIDMOAD y, si es de inicio precoz, síndrome De Wolfram
ser leves o moderadas.

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370 J. Bautista Lorite

Miopatías endocrinas centrales, principalmente en las fibras tipo 2 y agre-


gados mitocondriales subsarcolemales.
Hipertiroidismo En el electromiograma se puede encontrar au-
La afectación muscular es frecuente en el hi- mento de la actividad de inserción con descargas
pertiroidismo, pero habitualmente pasa desaper- repetitivas complejas y un patrón miopático en la
cibida. La paresia proximal de las extremidades contracción voluntaria. No se registra miotonía. El
es un hallazgo común en el hipertiroidismo, si mioedema es eléctricamente silente, y es debido,
se explora, y predomina en la cintura escapular probablemente, a persistencia de iones de Ca++ en
sobre la pelviana. Los reflejos musculotendinosos el retículo sarcoplásmico que da lugar a la prolon-
son normales o hiperactivos. En los cuadros agu- gación local de la contracción activa.
dos de tirotoxicosis puede aparecer rabdomiólisis
y afectación de musculatura extraocular y bulbar. Miopatía esteroidea y síndrome de Cushing
La CK es normal, excepto si hay rabdomiólisis. La debilidad muscular es muy frecuente en el
Las biopsias musculares pueden ser poco expre- síndrome de Cushing, y común entre los pacientes
sivas, incluso en pacientes con debilidad grave, tratados con altas dosis de corticoides durante pe-
mostrando atrofia de fibras musculares y leve au- ríodos prolongados de tiempo. Aunque la aparición
mento del tejido conectivo. También se asocian de miopatía se relaciona con la dosis y el tiempo
a hipertiroidismo la afectación de los músculos de administración, parece influir también la sus-
extraoculares de la oftalmopatía de Graves y la ceptibilidad individual, de forma que hay pacientes
parálisis periódica hipopotasémica. que desarrollan debilidad incluso en 10 días de
El electromiograma es miopático en casi todos tratamiento. La debilidad afecta, principalmente,
los casos de miopatía hipertiroidea y, por lo general, a las piernas. En la biopsia muscular destaca la
existe buena correlación entre la gravedad de la atrofia de las fibras tipo 2. Puede haber necrosis y
clínica y los hallazgos eléctricos, de forma que las vacuolización de fibras y depósito aumentado de
anormalidades desaparecen con el tratamiento. Por lípidos y glucógeno.
el contrario, existen pacientes hipertiroideos sin El electromiograma es normal, incluso en los
debilidad muscular y electromiograma patológico. casos más graves.
En algunos enfermos se registran fasciculaciones en
reposo. La estimulación repetitiva, en caso de reali- Hiperparatiroidismo
zarse, puede mostrar una respuesta decremental a La afectación muscular es rara en el hiperpa-
bajas frecuencias, con facilitación a altas frecuen- ratiroidismo y en otras enfermedades que cursan
cias, como en el síndrome de Lambert-Eaton. con hipercalcemia (metástasis óseas, mieloma múl-
tiple, insuficiencia renal crónica). Clínicamente
Hipotiroidismo se manifiesta por debilidad de predominio en la
La afectación muscular es muy frecuente en cintura pelviana.
el hipotiroidismo. Se manifiesta por fatiga y debi- En los casos sintomáticos, el electromiograma
lidad, rigidez muscular, calambres, mialgias, au- muestra PUM de amplitud y duración disminuidas,
mento de volumen muscular y mioedema (con- con una mayor incidencia de potenciales polifási-
tractura muscular localizada que sucede después cos, sin actividad espontánea.
de un estímulo mecánico, como la percusión con
el martillo de reflejos). La CK está elevada, en Hipoparatiroidismo
lo que probablemente influye la disminución del La manifestación neuromuscular de la hipo-
aclaramiento plasmático. Histológicamente se en- calcemia del hipoparatiroidismo es la tetania, con
cuentra aumento de la variabilidad del diámetro espasmo carpopedal y contracción de la muscula-
de las fibras, predominio de fibras tipo 1, núcleos tura facial tras la percusión del nervio facial. Los

Manual EMG.indb 370 9/7/07 12:07:38


Miopatías 371

TABLA VI. Fármacos causantes de miopatías pero también un patrón neurógeno. Asimismo, el
• Corticosteroides electromiograma también puede mostrar datos de
• Fármacos que producen hipopotasemia (furosemida, corticosteroides, afectación mixta.
tiazidas, litio, anfotericina B)
• Cloroquina Miopatías por fármacos
• Hipolipemiantes (clofibrato, lovastatina, gemfibrocil) Diversos fármacos pueden ser tóxicos para el
• Ácido epsilonaminocaproico músculo (Tabla VI). Las miopatías secundarias a
• Emetina corticoides y por hipopotasemia se tratan en otro
• β-bloqueantes apartado de este capítulo. Se menciona tan sólo la
• Colchicina miopatía secundaria a hipolipemiantes, que puede
• D-penicilamina cursar con debilidad y, más frecuentemente, con
• Cimetidina rabdomiólisis; en el electromiograma se puede ob-
• Zidovudina tener un trazado miopático con actividad espontá-
nea y descargas miotónicas.

casos de miopatía asociada a hipoparatiroidismo


son muy raros, aunque la CK puede estar elevada BIBLIOGRAFÍA
en casos asintomáticos.
1. Aminoff MJ. Electromyography in clinical practice. Clini-
En el estudio EMG destacan las manifestacio- cal and electrodiagnostic aspects of neuromuscular disease.
nes de la tetania, consistentes en descargas espon- 3rd ed. New York: Churchill Livingstone; 1998.
táneas repetitivas de unidades motoras agrupadas 2. Kimura J. Electrodiagnosis in diseases of nerve and muscle.
en dobletes o en tripletes a una frecuencia de unos 3rd ed. New York: Oxford University Press; 2001.
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suspected myopathy. Neurol Clin 2002; 20: 587-603.
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with weakness. Phys Med Rehabil Clin N Am 2003; 14:
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Miopatía alcohólica 5. Gilchrist JM, Sachs GM. Electrodiagnostic studies in the
La miopatía alcohólica aguda ocurre tras un epi- management and prognosis of neuromuscular disorders.
sodio de ingesta excesiva de alcohol, se manifiesta Muscle Nerve 2004; 29: 165-90.
con mialgias, mioglobinuria y elevación de la CK, y 6. Barboi AC, Barkaus PE. Electrodiagnostic testing in neu-
romuscular disorders. Neurol Clin 2004; 22: 619-41.
se resuelve en 2-8 semanas. En la biopsia muscular
7. Karpati G. Structural and molecular basis of skeletal mus-
se encuentra una miopatía necrosante. Otro cua- cle disease. Williston: Blackwell Publishing; 2006.
dro es la miopatía en la hipopotasemia alcohólica 8. Guidelines in electrodianosis medicine. American Associa-
aguda, en la que predomina la debilidad muscular, tion of Electrodiagnostic Medicine. Muscle Nerve 1992;
y en la biopsia se encuentran datos de miopatía 15: 229-53.
vacuolar. En ambas, el trazado electromiográfico 9. Younger DS. The myopathies. Med Clin North Am 2003;
87: 899-907.
es miopático, con actividad espontánea.
10. Duchenne GB. Recherches sur la paralysie musculaire
La miopatía alcohólica crónica está peor de- pseudo-hypertrophique ou paralysie myosclerosique. Arch
finida, puede afectar a la mitad de los pacientes Gen Med 1868; 11: 5,178,305,421,552.
de etilismo crónico y se manifiesta con diversos 11. Becker PE, Kiener F. Eine neue X-chromosomale
grados de debilidad proximal de predominio en muskeldystrophie. Arch Psychiatr Z Neurol 1955; 193:
las extremidades inferiores. Puede asociarse con 427.
miocardiopatía y se solapa con la polineuropatía 12. Bushby KMD, Beckmann JS. Report of the 30th and 31st
ENMC international workshop-the limb girdle muscular
alcohólica, que está mejor definida. En la biop- dystrophies and proposal for a new nomenclature. Neuro-
sia pueden encontrarse signos miopáticos leves, musc Disord 1995; 5: 337-43.

Manual EMG.indb 371 9/7/07 12:07:38


372 J. Bautista Lorite

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Manual EMG.indb 372 9/7/07 12:07:39


Capítulo 27

ENFERMEDADES MIOTÓNICAS
A. Guerrero Sola

INTRODUCCIÓN recesiva), complejo adinamia-paramiotonía (pará-


lisis periódica hipercaliémica primaria y normoca-
Las enfermedades miotónicas forman un grupo liémica, paramiotonía congénita de Eulenburg).
heterogéneo de trastornos en los que la miotonía,
que en la mayoría de ocasiones se aprecia en la
clínica, es el hallazgo más característico. ELECTROFISIOLOGÍA
La miotonía es un retraso de la fase de relaja-
ción muscular, después de una contracción volun- Desde el punto de vista electromiográfico, la
taria o refleja. La reacción miotónica se aprecia miotonía clínica se corresponde con las descargas
como una persistencia de la contracción muscular miotónicas, que son potenciales de acción de fibras
una vez finalizado el estímulo que la inició, ya sea musculares que se mantienen de forma prolongada
de forma voluntaria, mecánica o eléctrica. Puede y que se registran en condiciones de reposo mus-
explorarse pidiendo al paciente que apriete con cular o tras un estímulo externo. Los potenciales
fuerza los dedos del examinador entre su mano crecen y disminuyen en amplitud y frecuencia,
e indicándole que deje de hacerlo pasados unos mientras dura la descarga (Fig. 1). La amplitud
segundos, haciéndose entonces evidente que no se puede variar en un rango entre 10 μV y 1 mV,
produce una relajación rápida, sino que se hace de variando inversamente a la frecuencia de descarga,
un modo lento muy característico. Esta reacción que fluctúa entre 50 y 150 Hz, dando lugar esta
puede desencadenarse también por percusión di- variación de la frecuencia a un sonido especial a
recta del músculo, por ejemplo en la eminencia través del altavoz del electromiógrafo, similar al
tenar se golpea enérgicamente con el martillo, lo que produce un motor al acelerar y desacelerar, o
que provoca una contracción rápida con oposición clásicamente al ruido que produce un bombardero
del pulgar que se mantiene durante unos segundos al caer en picado, aunque hoy en día pocos neuró-
antes de que aparezca una relajación gradual. La logos tienen experiencia para poder confirmar esta
miotonía cede con la repetición de la misma acti- última similitud(2).
vidad (fenómeno de calentamiento) para volver a Las descargas miotónicas pueden presentarse
reaparecer tras el reposo(1). con dos tipos de patrones, dependiendo, probable-
La miotonía clínica puede apreciarse en diversas mente, de la relación espacial entre el electrodo
enfermedades (Tabla I), como la distrofia miotóni- de registro y la fibra muscular. El primero de los
ca, miotonía congénita (enfermedad de Thomsen o patrones está constituido por trenes de ondas positi-
miotonía congénita autosómica dominante y mio- vas seguidos cada uno de ellos por un componente
tonía de Becker o miotonía congénita autosómica lento negativo de mayor duración, iniciándose estas

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374 A. Guerrero Sola

TABLA I. Características de las diversas enfermedades que cursan con miotonía


Genética Clínica Electrofisiología
Distrofia miotónica AD (19p13.2) Hipotrofia. Debilidad muscular facial PUM anormales.
DM-1 y extremidades distal, proximal. Descargas miotónicas
Miotonía distal
PROMM AD (3q21) Hipotrofia. Debilidad proximal, PUM anormales.
DM-2 no facial. Miotonía proximal Descargas miotónicas
Miotonía congénita AD (7q35) CLCN1 Hipertrofia muscular. PUM normales.
dominante (Thomsen) Fuerza normal. Miotonía difusa Descargas miotónicas
Canalopatía Cl
Miotonía congénita AR (7q35) CLCN1 Hipertrofia muscular. PUM normales.
recesiva (Becker) Fuerza normal o leve debilidad con Descargas miotónicas
Canalopatía Cl hipotrofia en fases tardías
Miotonía difusa intensa
Paramiotonía congénita AD (17) SCN4A Debilidad tras ejercicio PUM normales
Canalopatía Na Miotonía que aumenta con Descargas miotónicas
ejercicio y frío
Ataques de parálisis
Parálisis periódica AD (17) SCN4A Ataques de parálisis no PUM normales. Aumento actividad
primaria hipercaliémica generalizados de corta duración de inserción. Descargas miotónicas
Canalopatía Na Miotonía clínica o EMG y repetitivas complejas (pueden
estar ausentes)
Parálisis periódica AD (17) SCN4A Ataques de parálisis prolongados PUM normales
primaria hipocaliémica AD (1q) CACNLIA3 Ausencia de miotonía Ausencia de miotonía
Canalopatía Na
Canalopatía Ca
Miotonía fluctuans AD (17) SCN4A Hipertrofia muscular PUM normales
Canalopatía Na No debilidad Descargas miotónicas
Miotonía difusa fluctuante
especialmente tras ejercicio, no por
frío. Paramiotonía palpebral a veces
Miotonía permanens AD (17) SCN4A Clínica más intensa
Miotonía sensible a acetazolamida AD (17) SCN4A No debilidad PUM normales
Miotonía, a veces dolorosa en cara y Descargas miotónicas
extremidades
Paramiotonía palpebral
AD: autosómico dominante; AR: autosómico recesivo; PUM: potenciales de unidad motora.

descargas por la inserción del electrodo de aguja, El otro patrón de descargas miotónicas está cons-
y más difícilmente después de una contracción tituido por trenes de fibrilaciones, que son ondas
voluntaria. El origen de estos trenes parece estar bifásicas o trifásicas con un componente positivo
en las áreas lesionadas de las fibras musculares. inicial, de amplitudes entre los 20 y 300 μV, que

Manual EMG.indb 374 9/7/07 12:07:39


Enfermedades miotónicas 375

MIOTONÍAS DISTRÓFICAS

Distrofia miotónica
-
200 μV La distrofia miotónica (DM), enfermedad de
10 ms
+ Steinert o DM-1, descrita como entidad por Stei-
nert en 1909 y por Batten y Gibbs en el mismo
Figura 1. Descarga miotónica.
año, se transmite de forma autosómica dominante,
con penetrancia variable, con fenotipos clínicos
aparecen después de una contracción voluntaria distintos, según la edad de comienzo. Es el tras-
y corresponden a lo que en la clínica se percibe torno miotónico más frecuente, con una preva-
como un retraso de la relajación muscular. Hay que lencia media de 10-15 casos/100.000 habitantes.
tener presente que las descargas miotónicas pueden El defecto genético consiste en la existencia de
registrarse en pacientes con o sin miotonía clíni- la expansión de un triplete CTG en el extremo
ca. Aunque de forma infrecuente también pueden 3´ no transcrito de un gen situado en la región
verse descargas similares en procesos denervativos p13.2 del cromosoma 19, que regula la síntesis de
crónicos, polimiositis, déficit de maltasa ácida y una proteincinasa. En individuos normales el nú-
con algunas drogas (20,25- diazocolesterol, tripa- mero de tripletes oscila entre 3-37; los afectados
ranol, ácido 2,4-diclorofenoxiacético, clofibrato o con formas clínicas más leves, parciales o tardías
propranolol)(3). tienen entre 60-120 repeticiones, y los que padecen
Estos hallazgos electromiográficos deben dife- la forma clásica, entre 120-800 copias, pudiendo
renciarse de otros patrones de descargas repetitivas, llegar hasta 2.500 repeticiones en pacientes con
como las descargas repetitivas complejas, descargas formas graves o neonatales. Una característica de
de mioquimias, neuromiotonía y calambres. esta enfermedad por inestabilidad del ADN es la
anticipación genética, que es la tendencia a presen-
tarse la enfermedad más precozmente y de forma
FISIOPATOLOGÍA más grave en sucesivas generaciones, lo que está
relacionado con un aumento del tamaño de la ex-
La base fisiopatológica de las descargas mio- pansión. Se ha detectado también un crecimiento
tónicas está relacionada, al menos en la miotonía del triplete a lo largo de la vida del paciente. Es
congénita, con una disminución de la conductan- frecuente observar una mayor anticipación genética
cia del ión cloro. En situaciones normales la con- en las transmisiones por vía materna, con mayor
ductancia al cloro tiende a estabilizar el potencial riesgo de presentar formas neonatales por esa vía
de membrana después de una despolarización, de transmisión(5).
neutralizando el cambio de potencial que produce
la acumulación de potasio, procedente del sarco- Manifestaciones clínicas
plasma, en el sistema tubular T, tras un potencial La distrofia miotónica clásica es una enferme-
de acción, y que en el músculo miotónico puede dad multisistémica caracterizada por la presencia
llegar a ser de 1 mV, dando lugar a una nueva de manifestaciones neuromusculares (debilidad y
despolarización, que se automantiene hasta que la miotonía) y una amplia variedad de síntomas sis-
disminución del pH intracelular acaba con este fe- témicos. La debilidad muscular afecta a la mus-
nómeno. En la distrofia miotónica este mecanismo culatura craneal, dando lugar a debilidad facial,
no está tan claro, al igual que ocurre en las parálisis mandibular y ptosis, contribuyendo la atrofia de
periódicas donde también intervienen alteraciones maseteros y de músculos temporales a la facies tí-
de los canales de sodio(4). pica que presentan la mayoría de estos pacientes.

Manual EMG.indb 375 9/7/07 12:07:39


376 A. Guerrero Sola

TABLA II. Afectación sistémica en la distrofia miotónica movimientos, o bien diagnosticarse al nacer o en
Músculo liso Esófago, estómago, vías biliares, colon, útero, el período neonatal; se caracteriza por hipotonía,
esfínter anal con debilidad facial bilateral, distrés respiratorio
Corazón Defectos de conducción, arritmias, cardiomiopatía neonatal, dificultades en la alimentación, boca
Pulmón Hipoventilación, neumonía por aspiración peculiar “en acento circunflejo” y retraso del de-
Sistema endocrino Diabetes, atrofia tubular testicular, hipofunción sarrollo psicomotor que puede llegar a ser intenso .
pituitaria La miotonía, tanto clínica como eléctrica, en estos
Ojo Ptosis, cataratas, degeneración retiniana, hipo- casos suele estar ausente, y si existe orienta más a
tensión intraocular favor de otros procesos miotónicos, como la mio-
Hueso Hiperostosis craneal, paladar ojival, escoliosis tonía congénita(6).
Nervio periférico Mínima afectación sensitiva
Cerebral Leve déficit cognitivo en adultos y grave en formas Electrofisiología
congénitas, hipersomnia (hipoventilación) Los hallazgos típicos en el estudio electromio-
Piel y faneras Alopecia precoz gráfico son la presencia de descargas miotónicas
y anormalidad de los potenciales de unidad mo-
tora(6,7).
Las descargas miotónicas pueden ser fácilmente
La afectación relativamente precoz del músculo detectables en las formas adultas, aunque a veces
esternocleidomastoideo, con mínima afectación de requieren una búsqueda específica, ya que en casos
musculatura de la cintura escapular la diferencia de leves pueden aparecer sólo cuando se enfría el mús-
la distrofia facioescápulohumeral. Los músculos de culo. Así, al explorar pacientes que han realizado
las extremidades se afectan distalmente, al contrario cualquier ejercicio o esfuerzo antes del estudio,
que la mayor parte de las distrofias en adultos, que pueden no encontrarse descargas miotónicas, lo
presentan un patrón de afectación más proximal. que obliga a repetirlo tras un período de reposo.
Tampoco suele observarse pseudohipertrofia mus- Las descargas miotónicas son más frecuentes,
cular. La miotonía suele ser referida como rigidez casi hasta el 90%, en la musculatura distal de ex-
por el paciente, y a veces casi ni la mencionan como tremidades superiores y en el músculo orbicular de
molestia y se aprecia con más claridad en las manos. los labios, que en otros músculos más proximales,
La repetición rápida de contracciones reduce o eli- como el deltoides, donde no llegan al 40%. En con-
mina la miotonía (fenómeno de calentamiento) y traste a lo que ocurre con la miotonía clínica, son
la exposición al frío puede agravar la miotonía. Las más prominentes en músculos atróficos y débiles,
manifestaciones sistémicas se recogen en la Tabla aunque pueden verse en cualquier músculo, inclu-
II; a veces pueden ser el primer motivo de consulta so en los que no tienen miotonía clínica. Aproxima-
o ser detectadas por otros especialistas sin que és- damente un 50% de las salvas duran alrededor de
tos lleguen a establecer el diagnóstico de distrofia los 2 segundos, aunque pueden llegar hasta los 30
miotónica por desconocimiento. Puede existir una segundos; sin embargo, en otras miotonías, como
amplia variedad en las formas de presentación e en la miotonía congénita la mayoría duran alre-
intensidad de las manifestaciones, incluso en los dedor de 1 segundo, y las más largas llegan a los
miembros de una misma familia(6). Las formas tar- 10 segundos. En ocasiones salvas muy lentas con
días o parciales pueden cursar con cataratas y poca morfología de fibrilación pueden plantear la duda,
o nula afectación neuromuscular. si no se reconocen como tales, sobre la posible
La distrofia miotónica congénita o forma neo- coexistencia de una afectación neurógena.
natal se presenta de forma invariable en nacidos de Cuando se realice un estudio en familias hay
madres afectas. Puede sospecharse intraútero en el que tener presente que los individuos asintomáti-
contexto de un feto que presenta disminución de cos o levemente afectados pueden no presentar

Manual EMG.indb 376 9/7/07 12:07:40


Enfermedades miotónicas 377

descargas miotónicas, y que, por tanto, ello no o, más recientemente, distrofia miotónica tipo 2
significa que no puedan expresar o transmitir la (DM-2). La enfermedad se transmite de forma
enfermedad. Además de los músculos mencionados autosómica dominante. El trastorno se inicia ha-
anteriormente, la búsqueda de posibles descargas bitualmente entre los 20 y 40 años, aunque puede
miotónicas debe centrarse en el masetero, flexores comenzar más tarde, con miotonía intermitente de
de los dedos y tibial anterior, explorando ambos los músculos de las manos, que más tarde puede
lados, ya que son los músculos que antes suelen llegar a los muslos, rigidez ocasional en el cuello,
afectarse y muchas veces lo hacen de forma asi- debilidad proximal y cataratas, sin atrofias, sin parti-
métrica(8). cipación de los músculos distales o faciales (no hay
El hallazgo de potenciales de unidad motora ptosis palpebral) ni datos de enfermedad sistémica,
anormales, polifásicos de menor amplitud y dura- y sin datos de afectación cerebral, ni hipersomnia.
ción, así como la reducción del patrón de recluta- La intensidad de los síntomas varía notablemente
miento son más evidentes a medida que la enfer- de unas familias a otras e, incluso, entre distintos
medad avanza, lo que indica un proceso distrófico. miembros de la misma familia. No existen formas
Un fenómeno que a veces se observa en la distrofia congénitas ni fenómenos de anticipación. El gen
miotónica, y también en otros procesos miotónicos implicado se localiza en la región 3q21 y presenta
es la variabilidad de la amplitud del potencial de una mutación dinámica consistente en la inser-
unidad motora, que mientras se mantiene la acti- ción de un tetranucleótido de tamaño variable.
vidad muscular disminuye de forma gradual hasta La biopsia muscular solamente presenta cambios
desaparecer, recuperando sus características inicia- miopáticos leves, inespecíficos(11). Los estudios de
les si se mantiene la actividad muscular o incluso velocidades de conducción motoras y sensitivas son
en reposo después de unos segundos. normales. El electromiograma de aguja muestra
La estimulación repetitiva por encima de 10 Hz descargas miotónicas, sin rasgos miopáticos.
produce una reducción irregular de la amplitud
del potencial motor, que suele ser mayor en el re- Distrofia miotónica tipo 3 (DM-3)
poso después del ejercicio o tras una estimulación
prolongada. Le Ber y cols.(12) publicaron una extensa fami-
En los estudios de fibra aislada la densidad de lia con debilidad muscular, miotonía y demencia
fibras suele estar aumentada y el jitter también fronto-temporal, ligada al cromosoma 15, entidad
puede estarlo. para la que propusieron el nombre de DM-3. Otros
En los estudios de velocidad de conducción autores han puesto en duda que se trate de una
puede encontrarse un enlentecimiento de la velo- entidad nosológica.
cidad de conducción motora, así como aumento de
las latencias motoras distales y de la onda F, sobre
todo a medida que progresa la enfermedad(1,2). MIOTONÍAS NO DISTRÓFICAS Y CANALOPATÍAS

Miopatía miotónica proximal Forman un grupo de miopatías que presentan


miotonía clínica o eléctrica y en las que el mús-
En 1994 Ricker y cols.(9) describieron tres fa- culo no presenta características distróficas. Están
milias con una nueva enfermedad que cursaba causadas por mutaciones en el gen que codifica
con miotonía: la miopatía miotónica proximal para proteínas para el canal del cloro (miotonía
(PROMM, de proximal myotonic myopathy); 14 congénita) o del sodio (paramiotonía congénita,
nuevas familias se publicaron poco después(10) y parálisis periódica normo e hipercaliémica, mio-
otras, más recientemente. Esta enfermedad se tonía fluctuans y miotonía congénita con respuesta
denomina también distrofia miotónica proximal a acetazolamida).

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378 A. Guerrero Sola

Miotonía congénita das, con el menor desarrollo de la musculatura de


la cintura escapular. En general, se considera que
Existen dos formas de miotonía congénita, la mio- las formas recesivas son más incapacitantes que las
tonía dominante o enfermedad de Thomsen descrita formas dominantes(13).
en 1876, que él mismo padecía, y que se presenta
con un patrón de herencia autosómico dominante y Electrofisiología
la miotonía generalizada o miotonía de Becker, que El estudio electromiográfico es importante para
se transmite de forma autosómica recesiva. Los dos establecer el diagnóstico de estas entidades, aun-
trastornos están causados por una mutación alélica del que no ayuda a su diferenciación, porque son muy
gen que codifica el canal de cloro de las membranas similares. Las descargas miotónicas son el principal
de las fibras musculares (CLCN1) localizado en el hallazgo, y tienen las características de las descritas
cromosoma 7q35, y pueden definirse, por tanto, como en la enfermedad de Steinert, aunque las salvas
una canalopatía muscular del ión cloro(4). suelen tener menor duración y mayor variación en
La miotonía dominante congénita (Thomsen) frecuencia y amplitud. Suelen encontrarse en todos
tiene una prevalencia de 1:23.000. Se reconoce los grupos musculares. El estudio electromiográfico
en los primeros años de vida, algunos pacientes cuantitativo muestra unos potenciales de unidad
presentan un buen desarrollo muscular, con fuer- motora normales, lo que constituye uno de los cri-
za normal, con miotonía, que suele ser universal, terios más fiables para diferenciar estos procesos de
como dato clínico más relevante. El frío no suele la distrofia miotónica, aunque hay que tener presen-
acentuar esta miotonía. Realizar un movimiento te que la amplitud del potencial de unidad motora
brusco después de un período de reposo puede puede disminuir al descargar repetidamente. Los
desencadenar una reacción miotónica muy intensa, estudios de velocidad de conducción nerviosa son
que puede durar varios segundos, durante los que normales. Con la estimulación repetitiva se obser-
el paciente no puede mover los grupos musculares va una disminución de la amplitud del potencial
afectados y que suele seguirse de debilidad tran- evocado motor, que a diferencia de lo que ocurre
sitoria. La miotonía cede con la repetición de la en la miastenia, continúa disminuyendo hasta que
misma actividad (fenómeno de calentamiento), termina el tren de estímulos(2).
para reaparecer tras el reposo. Puede existir una
amplia variabilidad intrafamiliar en la expresión Paramiotonía congénita
clínica de la enfermedad, que suele mantenerse
estable durante toda la vida. Entidad descrita por Eulenburg en 1886, pre-
En la miotonía generalizada (Becker), el diag- senta un patrón de herencia autosómico dominan-
nóstico suele ser más tardío, habitualmente en la te, con afectación similar de ambos sexos. Su de-
segunda década. La miotonía es más intensa que fecto genético está localizado en el cromosoma 17,
en la forma dominante, y puede aumentar en in- en el gen SCN4A que codifica para la subunidad
tensidad gradualmente hasta los 30 años. Cuando alfa del canal de sodio, al igual que ocurre con la
realizan una contracción intensa con las manos y parálisis periódica hipercaliémica, como veremos
antebrazos, los enfermos presentan una pérdida de posteriormente(14).
fuerza gradual y casi completa de esos músculos, La miotonía en esta entidad, al contrario de lo
que recuperan al realizar contracciones musculares que ocurre con las miotonías descritas hasta ahora,
repetidas. Esta reacción puede ser generalizada al se intensifica con el ejercicio, de ahí el término de
levantarse por la mañana después de dormir. Tam- miotonía paradójica. La exposición al frío agrava
bién suelen presentar un marcado desarrollo mus- la miotonía, llegando a una rigidez de la lengua,
cular, más acentuado en extremidades inferiores, musculatura facial y músculos de extremidades su-
que contrasta, sobre todo, en edades más avanza- periores, que suelen ser los más afectados. Puede

Manual EMG.indb 378 9/7/07 12:07:40


Enfermedades miotónicas 379

aparecer debilidad muscular después de un ejerci- TABLA III. Clasificación de las parálisis periódicas
cio prolongado o después de la exposición al frío, 1. Parálisis periódicas primarias (hereditarias autosómicas dominantes,
que dura varias horas. También pueden presentar aunque hay casos esporádicos)
estos pacientes ataques de parálisis muscular, como 2. Parálisis periódicas secundarias (no hereditarias)
los que ocurren en la parálisis periódica hiperca- • Hipocaliémicas
liémica, que suele afectar más a las extremidades - Hipertiroidismo (tireotoxicosis)
superiores, no produce síntomas respiratorios y pue- - Acidosis tubular renal
den durar todo un día. Estos síntomas suelen estar - Adenoma velloso
presentes desde el nacimiento y persisten durante - Síndrome de Bartter
toda la vida del paciente, aunque los ataques de - Hiperaldosteronismo
parálisis empiezan en la adolescencia(1,2). - Uso excesivo de diuréticos
- Uso excesivo de regaliz
Electrofisiología - Uso excesivo de corticoides
El dato más característico en el estudio electro- - Alcoholismo
miográfico es la presencia de descargas miotónicas - Toxicidad por anfotericina B
prácticamente en cualquier músculo, incluso a - Toxicidad por bario
temperatura ambiente. Las velocidades de con- - Toxicidad por tolueno
ducción son normales entre ataques, pero en el • Hipercaliémicas
episodio de parálisis no pueden evocarse respuestas - Enfermedad de Addison
motoras. Durante la estimulación repetitiva hay - Hipoaldosteronismo
una reducción de la amplitud de la respuesta mo- - Aporte excesivo de potasio
tora. La exposición al frío, aunque produce rigidez, - Uso de diuréticos ahorradores de potasio
desde el punto de vista electrofisiológico se traduce - Insuficiencia renal crónica
en potenciales de fibrilación antes de que cese toda - Rabdomiólisis
actividad muscular, con abolición de las descargas
miotónicas y de la actividad motora voluntaria(15).
Por tanto, la rigidez inducida por el frío no es una de estos trastornos es la inexcitabilidad reversible
verdadera miotonía. La base de este fenómeno es de la membrana muscular(14).
una alteración de la conductancia del sodio, sin En las formas de parálisis periódicas hipocalié-
que se afecte la del cloro(2,7). micas no se aprecia miotonía clínica, y la evidencia
de miotonía en el estudio electromiográfico casi
Parálisis periódicas (canalopatías) permite excluir su diagnóstico. La prevalencia de
este proceso es de 1:100.000 habitantes. La enfer-
Las parálisis periódicas son un grupo de en- medad comienza en la adolescencia, con ataques
fermedades de diferente etiología, que se caracte- que suelen ocurrir por la mañana y se desencade-
rizan por episodios de parálisis que recurren con nan por la ingestión de hidratos de carbono y una
intervalos de tiempo irregulares. Se clasifican como ingesta alta de sal la noche previa, o por reposo
hiper, hipo o normocaliémicas, en función de la tras una actividad física extenuante. La parálisis
concentración del ion potasio durante el ataque de puede estar precedida de dolor en las piernas y la
parálisis. Pueden también clasificarse como paráli- duración oscila de minutos a días, aunque suele
sis periódicas primarias, que son hereditarias, con ser de varias horas. La fuerza se recupera aunque
un patrón autosómico dominante, aunque se han a veces puede quedar debilidad permanente. Se
descrito formas esporádicas y parálisis periódicas se- relaciona con mutaciones en el gen del receptor
cundarias. Las causas de parálisis periódicas secun- de dihidropiridina (CACNLIA3) en el cromosoma
darias se exponen en la Tabla III. La base común 1q. El gen codifica la subunidad α1 del canal de

Manual EMG.indb 379 9/7/07 12:07:41


380 A. Guerrero Sola

calcio de tipo L, que se encuentra en el músculo trastornos ocasionados por mutaciones en el gen
esquelético. También puede producirse por muta- del canal de sodio, como ocurre en la parálisis pe-
ciones en la codificación de la subunidad alfa del riódica hipercaliémica y en la paramiotonía con-
canal del sodio (SCNA4)(17). génita, en las que predominan la rigidez inducida
La parálisis periódica hipercaliémica primaria, por el frío y el ejercicio, sin episodios de debilidad,
denominada también parálisis sensible a potasio, y están relacionadas con mutaciones puntuales es-
ya que no todos los ataques se asocian necesaria- pecíficas(10,17).
mente con hipercaliemia, fue descrita en 1951 por
Tyler. Gamstorp la denominó adinamia episódica Electrofisiología
hereditaria. Sin embargo; todos los pacientes son Los hallazgos más característicos entre ata-
sensibles al potasio, ya que presentan debilidad ques son un incremento de la actividad de in-
cuando se les administra potasio. Se reconocen serción y la presencia de descargas miotónicas y
tres variantes clínicas: 1) sin miotonía ni clínica de descargas repetitivas complejas, que pueden
ni eléctrica; 2) con miotonía clínica, que suele observarse en cualquier músculo. Al inicio de
ser muy leve, o exclusivamente eléctrica; y 3) con un ataque aparecen fibrilaciones abundantes
paramiotonía, que presenta las mismas caracterís- desapareciendo paulatinamente la miotonía, la
ticas que las descritas en la paramiotonía congéni- actividad muscular voluntaria y las respuestas
ta. El defecto genético, independientemente de motoras evocadas. Si hay una miotonía clínica
la variante, se relaciona, como ya mencionamos relevante la estimulación repetitiva puede pro-
anteriormente en la paramiotonía congénita, con ducir un decremento gradual de la respuesta, al
el gen SCN4A que codifica la subunidad alfa del igual que ocurre en la distrofi a miotónica y la
canal de sodio en el cromosoma 17q; por tanto, miotonía congénita(16).
estas dos entidades están causadas por mutaciones
alélicas del mismo gen. Se puede hablar, al igual
que hacíamos anteriormente con el cloro en las BIBLIOGRAFÍA
miotonías congénitas, de una canalopatía muscu-
1. Swash M, Schwartz MS. Neuromuscular disorders. New
lar del ión sodio. Estos datos clínicos y genéticos York: Springer-Verlag; 1987.
apoyan la existencia de un complejo adinamia- 2. Kimura J. Electrodiagnosis in diseases of nerve and muscle:
paramiotonía. Los episodios de parálisis suelen principles and practice. 2ª ed. Philadelphia: FA Davis Co.;
empezar en la primera década, y se van haciendo 1989.
cada vez más frecuentes, pudiendo llegar a ser 3. Daube JR. Needle examination in clinical electromyogra-
phy. American Academy of Neurology. Annual Courses,
diarios. Típicamente suelen presentarse después 1990.
del desayuno con una duración que oscila en- 4. Rüdel R, Lehmann-Horn F, Ricker K. Altered excitability
tre 15 minutos y una hora. Pueden presentarse of the muscle cell membrane. En: Engel AG, Franzini-
más episodios en relación con períodos de des- Amstrong C, eds. Myology. New York: Mc Graw Hill;
1994. p. 1295-6.
canso, administración de potasio o exposición al
5. Pizzuti A, Friedman DL, Caskey T. The myotonic dystro-
frío. La prolongación del ejercicio o ingesta de phy gene. Arch Neurol 1993; 50: 1173-9.
carbohidratos retrasa la aparición de un ataque 6. Harper PS, Rüdell R. Myotonic dystrophy. En: Engel AG,
que, generalmente, será más intenso(4,14). En estos Franzini-Amstrong C, eds. Myology. New York: Mc Graw
casos, a diferencia de la parálisis periódica hipo- Hill; 1994. p. 1192-215.
caliémica, no suele haber una parálisis fláccida 7. Clinchot D, Levy Ch. Generalized weakness. En: Jonhson
generalizada. EW, Paese WS, eds. Practical electromyography. Baltimo-
re: Williams and Wilkins; 1997. p. 340-2.
Las miotonías agravadas por potasio, como la
8. Streib EW, Sun SF. Distribution of electrical myotonia
miotonía fluctuans, la miotonía permanente y la in myotonic muscular dystrophy. Ann Neurol 1993; 14:
miotonía sensible a acetazolamida, son también 80-2.

Manual EMG.indb 380 9/7/07 12:07:41


Enfermedades miotónicas 381

9. Ricker K, Koch MC, Lehmann-Horn F y cols. Proximal 13. Streib EW. Differential diagnosis of myotonic syndromes.
myotonic myopathy: a new dominant disorder with myo- Muscle Nerve 1987; 10: 603-14.
tonia, muscle weaknes, and cataracts. Neurology 1994; 14. Lehmann-Horn F, Engel AG, Ricker K, Rüdell R. The
44: 1448-52. periodic paralysis and paramyotonia congenital. En: Engel
10. Ricker K, Koch MC, Lehmann-Horn F, et al. Proximal AG, Franzini-Amstrong C, eds. Myology. New York: Mc
myotonic myopathy. Clinical features of a multisystem Graw Hill; 1994. p. 1303-29.
disorder similar to myotonic dystrophy. Arch Neurol 1995;
15. Nielsen VK, Friis ML, Johnsen T. Electromyography dis-
52: 25-31.
tinction between paramyotonia congenita and myotonia
11. Brewster B, Groenen P, Wieringa B. Myotonic dystrohy: congenita: effect of cold. Neurology 1982; 32: 827-32.
clinical and molecular aspects. En: Emery AEH, ed. Neu-
romuscular disorders: clinical and molecular genetics. 16. Aminoff MJ, Layzer RB, Satya-Murti S, et al. The de-
Chichester: Wiley & Sons Ltd.; 1998. p. 323-64. clining electrical response on muscle to repetitive nerve
stimulation in myotonia. Neurology 1977; 27: 812-6.
12. Le Ber I, Martínez M, Campion D, et al. A non-DM-1,
non-DM-2 multisystem myotonic disorder with frontotem- 17. Amato AA, Dumitru D. Hereditary myopathies. En: Du-
poral dementia: phenotype and suggestive mapping of the mitru D, Amato AA, Zwarts MJ, eds. Electrodiagnosis Me-
DM-3 locus to chromosome 15q21.24. Brain 2004; 127: dicine. 2ª ed. Philadelphia: Hanley & Belfus, Inc.; 2002.
1979-92. p. 1296-313.

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Manual EMG.indb 382 9/7/07 12:07:41
Capítulo 28

SÍNDROMES DE HIPERACTIVIDAD MUSCULAR


J. Montero Homs

En este capítulo se incluyen los distintos síndro- TABLA I. Entidades que se manifiestan con aumento de la activi-
mes de hiperactividad muscular. Su origen y com- dad muscular de la unidad motora de origen central y periférico
portamiento son singulares en cada caso. Se hará
1. Enfermedades del SNC
una exposición de los fenómenos más frecuentes de
- Distonía
hiperactividad muscular y su distribución.
- Hipertonía
- Tétanos
- Síndrome del “hombre rígido”
HIPERACTIVIDAD DE LA NEURONA MOTORA
- Tétanos
- Tóxicos (neurolépticos, CO, etc.)
El movimiento es consecuencia de la “excitación”
- Envenenamiento por estricnina
de las neuronas motoras inferiores por influencia de
las vías descendentes o segmentarias. Algunas altera- 2. Hiperexcitabilidad axonal motora (de nervio periférico)
ciones de estos sistemas aumentan la excitabilidad - Neuromiotonía
neuronal y causan diferentes alteraciones motoras, - Mioquimia
como los estados de rigidez de tipo piramidal o ex- - Fasciculaciones
trapiramidal o las distonías de diversos tipos (Tabla - Calambres
I). Se pueden distinguir procesos con disfunción a - Tetania
nivel central y otros con una alteración primaria de 3. Hiperactividad motora de origen en la placa motora
la unidad motora, ya sea por hiperexcitabilidad axo- - Intoxicación por organofosforados
nal, de la placa motora o de la fibra muscular. El 4. Hiperexcitabilidad motora de origen en la fibra muscular
estudio neurofisiológico sigue siendo esencial en el - Miotonía
diagnóstico de muchos de estos procesos. 5. Otros
De forma básica, se pueden distinguir esque- -Síndrome de la “espina rígida”
máticamente ciertas diferencias entre las formas -Enfermedades reumatológicas, incluyendo espondilitis anquilosante
de hiperactividad muscular de origen central, en -Enfermedades psiquiátricas
el axón o en el músculo (Tabla II).

ENFERMEDADES CON HIPERACTIVIDAD MUSCULAR DE general, la EMG no es una herramienta básica en


ORIGEN CENTRAL estos trastornos. Sin embargo, existen dos situacio-
nes clínicas en las que la hiperexcitabilidad neu-
Las enfermedades del sistema nervioso central ronal es extraordinariamente intensa y constituye
se abordan en otro capítulo de este manual. En su manifestación fundamental.

Manual EMG.indb 383 9/7/07 12:07:42


384 J. Montero Homs

TABLA II. Diferencias entre las distintas formas de hiperactividad muscular


Origen central Origen en el axón Origen en el músculo
Semiología Contracción persistente Contracción irregular Relajación dificultada
Sueño Desaparece o disminuye la actividad Persiste la actividad Persiste la actividad
Anestesia general Desaparece o disminuye la actividad Persiste la actividad Persiste la actividad
Bloqueo nervioso Desaparece o disminuye la actividad Desaparece o disminuye la actividad Persiste la actividad
Bloqueo de la placa Desaparece o disminuye la actividad Desaparece o disminuye la actividad Persiste la actividad
Tratamiento Mejoría con antiepilépticos bloqueantes Mejoría con benzodiacepinas o Mejoría con quinina y bloqueantes
de canales del sodio antiepilépticos gabaérgicos de canales del sodio
Electromiografía Actividad persistente de unidades Fasciculaciones, mioquimias, Miotonía
motoras neuromiotonía, calambres,
potenciales postdescargas
Etiología Desconocida, autoinmune Desconocida, autoinmune Canalopatías

Síndrome del hombre rígido (stiff-man syndrome) se atenúa o desaparece con el sueño, la anestesia
general y la administración de diacepam, lo que
Se trata de un cuadro clínico de contracción localiza su origen por encima del axón. Existe un
muscular generalizada. La exagerada actividad de período silente normal tras el reflejo de estiramiento.
las motoneuronas es causa de marcada rigidez que Por otra parte, el período de silencio tras el estímulo
predomina en músculos del tronco y extremidades eléctrico de un nervio, está conservado.
inferiores, con intenso dolor y postración del pa- Como opciones terapéuticas se han usado dia-
ciente. Es excepcional la participación de la mus- cepam, baclofeno, tizanidina, corticoides o plas-
culatura facial y bulbar. Pueden existir, además, maféresis, con respuestas dispares.
espasmos dolorosos en la musculatura axial. Está
ligado a una alteración inmunológica, habiéndose Tétanos
demostrado la existencia de autoanticuerpos contra
el ácido glutámico descarboxilasa (anti GAD), es En el tétanos se produce una verdadera excita-
muy probable su relación con neoplasias y constitu- ción “periférica” del sistema nervioso, determinada
yendo un síndrome paraneoplásico. También se ha por la neurotoxina del Clostridium tetani, que ori-
observado asociado a otros procesos autoinmunes, gina un fallo de los sistemas de inhibición postsi-
como vitíligo, diabetes o tiroiditis. náptica gabaérgica de las neuronas motoras afectas,
Se cree que el posible mecanismo fisiopatológi- lo cual es causa de contracciones musculares de
co estaría en relación a la destrucción o disfunción intensidad dramática, predominantes en territorio
de las interneuronas inhibitorias de las respuestas craneal (trismus) y posturas en opistótonos.
corticoespinales mediadas por ácido gamma amino Gracias a la profilaxis por vacunación es una
butírico (GABA). enfermedad rara en países desarrollados. A pesar
La contracción muscular en estos casos no es del tratamiento (ventilación mecánica, benzodia-
cualitativamente distinta a la que puede observarse cepinas, inmunoglobulina específica, antibiotera-
en las distonías, si bien es mucho más generalizada pia intensiva), la mortalidad se acerca al 20%. Los
y, con frecuencia, con salvas críticas de exacerbación estudios electrofisiológicos pueden demostrar la
(jerk). Existe, por tanto, un mecanismo de excitación existencia de descargas continuas de potenciales
de la motoneurona a través de las influencias espina- de unidad motora de morfología normal, precipi-
les(1). El estudio electrofisiológico muestra descargas tadas por el movimiento o la estimulación táctil,
continuas de potenciales de unidad motora, similares que generan espasmos muy dolorosos. Se observa,
a una contracción muscular voluntaria. La actividad además, disminución o ausencia del período de

Manual EMG.indb 384 9/7/07 12:07:42


Síndromes de hiperactividad muscular 385

silencio posterior a un estímulo eléctrico sobre contracción muscular provoca dificultad en la rela-
las vías aferentes segmentarias, así como la posi- jación, hipersudoración e hipertrofia muscular.
ble existencia de un trastorno presináptico en la La EMG es la clave diagnóstica en estos síndro-
transmisión neuromuscular (jitter aumentado). mes, poniendo de manifiesto la existencia de varios
tipos de hallazgos anormales, expresión todos ellos
de la hiperexcitabilidad del axón.
ACTIVIDAD MUSCULAR CONTINUA POR
HIPEREXCITABILIDAD DEL NERVIO PERIFÉRICO Fasciculación

La excitación de la neurona motora inferior que Es una excitación involuntaria, simple y no


se origina en puntos distintos al inicio axonal (axon repetida de la unidad motora. Se produce por
hillock), allí donde comienzan los canales voltaje de- excitación ectópica en un punto del axón. Esta
pendientes, recibe la denominación de “ectópica”. Se actividad es mucho más frecuente en algunas en-
trata siempre de un fenómeno anormal, aunque no fermedades (esclerosis lateral amiotrófica, radicu-
infrecuente(2,3). En la vertiente sensitiva, este fenóme- lopatía compresiva, etc.) que en otras, y es un fenó-
no corresponde, por ejemplo, a las parestesias o al sig- meno normal en momentos de incremento de la
no de Tinel. Estados de aumento de la excitabilidad excitabilidad por factores externos como el frío, la
en el axón motor, ya sea proximal o distal, pueden ansiedad o determinados fármacos. Clínicamente
suceder en la práctica totalidad de las enfermedades se caracteriza por un brusco movimiento parcelar
de la neurona motora periférica, pero especialmente sobre el músculo, bajo la piel, que no comporta
en las que comportan lesiones focales de la mielina. desplazamiento articular. El origen topográfico de
Se producen, de este modo, excitaciones ectópicas las fasciculaciones ha sido un tema discutido de
que causan contracción espontánea. antiguo y, si bien se ha demostrado su ocasional
De este modo, los mecanismos básicos que origen proximal, la mayor parte de ellas correspon-
producen la excitación anormal del axón son los den a excitaciones ectópicas en las arborizaciones
siguientes: a) excitación ectópica, espontánea o terminales del axón motor. El potencial ectópico
inducida por estímulos mecánicos o químicos; b) generado en un punto de la arborización distal
reflexión de impulsos o reexcitación de un segmen- (Fig. 1) se transmite a todos los ramos axonales de
to del propio axón en período no refractario por formas ortodrómica y antidrómica, reflejándose en
estímulos procedentes de un segmento lesionado los puntos de división hacia el otro ramo axonal.
y desmielinizado, que conduce más lento; c) trans- De esta forma, se produce la excitación de todas
misión efáptica o excitación de un axón vecino al las fibras musculares de una unidad motora, pero
paso de un estímulo que conduce lento, por des- en un orden temporal distinto al que sucede tras
mielinización; d) postdescargas y autoexcitación o la excitación fisiológica del axón. Por esta razón,
producción de trenes de descargas (extradescargas) el potencial de fasciculación y el potencial de uni-
al paso de un estímulo. dad motora guardan características de duración,
En todos estos procesos existe una actividad fases, amplitud y estabilidad similares(2) para cada
muscular permanente, con distintas formas de ex- músculo en los diferentes trastornos. La fascicula-
presión clínica y con una distribución focal o gene- ción es, por tanto, similar al potencial de unidad
ralizada. Esta actividad muscular puede manifes- motora del músculo en que se origina, mantiene
tarse como movimientos vermiculares localizados morfología constante, es aleatorio e involuntario
bajo la piel (mioquimias), contracturas dolorosas y aparece de forma aislada durante el reposo mus-
de grupos musculares (calambres) u ondulaciones cular. Resaltemos, por último, que se trata de un
musculares continuas con rigidez, con movimien- fenómeno frecuente y que aparece en un amplio
tos de pequeñas articulaciones (neuromiotonía). La espectro de alteraciones, por lo que, a pesar de su

Manual EMG.indb 385 9/7/07 12:07:42


386 J. Montero Homs

y de contracción en flexión involuntaria persis-


tente (descarga ectópica en el axón motor), que
predominan en territorio distal de extremidades
A superiores. La causa más frecuente es la hiperventi-
lación psicógena, que puede acompañarse de otras
manifestaciones neuróticas. En otras ocasiones, la
tetania es la manifestación más vistosa de trastornos
iónicos que suceden en enfermedades que compor-
tan alteraciones del calcio y otros iones, como es el
caso del hipoparatiroidismo o la uremia. Un factor
esencial en la aparición de estos fenómenos parece
hallarse en la especial sensibilidad en su tiempo de
B apertura de algún tipo de canales del sodio voltaje
dependientes situados en las zonas nodales de la
membrana axonal al incremento del pH(4).
Clínicamente se manifiesta con datos centrales
y periféricos, tales como parestesias periorales y
A B distales, seguidas de contracción muscular tónica
y espasmos carpopedales, pudiendo llegar a opistó-
tonos, estridor laríngeo o crisis convulsivas.
Figura 1. Esquema del proceso de excitación de las fibras musculares de La expresión electrofisiológica es en forma de
una unidad motora en caso de que el potencial se genere desde el cuerpo
neuronal (A) o desde un punto (B) de la ramificación distal de forma ec-
descargas repetitivas de 2, 3 o más potenciales si-
tópica (fasciculación). Todo el árbol axonal se excita ortodrómicamente o milares (extradescargas de un potencial inicial) con
antidrómicamente con reflexión en los puntos de división. La morfología del intervalo entre ellos de unos 20 ms. Los estudios
potencial de unidad motora es distinta, pero su duración, fases, estabilidad electrofisiológicos permiten la posibilidad de de-
y área son similares, puesto que corresponde a la excitación de las mismas
mostrar estos fenómenos mediante técnicas provo-
fibras musculares detectadas por la aguja coaxial desde el mismo punto,
aunque en un orden de activación diferente. cadoras, como la isquemia o la hiperventilación,
en caso de dudas en el diagnóstico.

indudable valor semiológico, no se debe confun- Neuromiotonía


dir la presencia de fasciculaciones con el ominoso
diagnóstico de esclerosis lateral amiotrófica, sobre En algunas neuropatías predominan los sínto-
todo si no se acompaña de debilidad muscular, mas positivos de origen en la actividad ectópica del
atrofia e hiperreflexia. axón motor con carácter generalizado o focal. Los
síntomas deficitarios de estas neuropatías pueden
Tetania no ser evidentes desde el punto de vista clínico y
electrofisiológico. En la actualidad existe un con-
Reciben este nombre los estados de gran au- senso cada vez mayor en la denominación de “neu-
mento de la excitabilidad axonal generalizada, romiotonía” para todos estos trastornos (Tabla III),
como sucede durante la hipocalcemia, relacionada que han recibido múltiples denominaciones desde
o no con alcalosis respiratoria por hiperventilación el primero descrito por Isaacs en 1961 en un caso de
u otras alteraciones iónicas. Las personas que rea- presentación congénita y predominio de síntomas
lizan hiperventilación pueden presentar molestias positivos. Los pacientes afectos de neuromiotonía
intensas en la vertiente sensitiva de tipo parestésico generalizada(5) sufren un cuadro de “actividad con-
(descarga ectópica en la fibra nerviosa sensitiva) tinua de fibras musculares”, de modo que la con-

Manual EMG.indb 386 9/7/07 12:07:43


Síndromes de hiperactividad muscular 387

TABLA III. Síndromes por hiperexcitabilidad axonal motora


A. Neuromiotonía y mioquimias generalizadas congénitas
hereditarias o no
1. Con predominio de los síntomas motores positivos (síndrome de
Isaacs)
2. Con predominio del déficit neuropático (fenotipo de
Charcot-Marie-Tooth)
3. Generalizadas con predominio clínico focal
B. Neuromiotonía y mioquimias generalizadas adquiridas
1. Asociadas a neoplasia: timoma, cáncer de pulmón, linfoma
2. Asociadas a enfermedades autoinmunes:
Miastenia, Guillain-Barré, plasmocitoma y paraproteinemia IgM
3. Tetania ligada a trastornos iónicos. Hipocalcemia
4. Mioquimias generalizadas en:
Tirotoxicosis, mordedura de serpiente, sales de oro, penicilamina
C. Neuromiotonía y mioquimias adquiridas focales:
100 μV
1. En extremidades: Postradioterapia: braquial, lumbosacra, etc.
20 ms
Síndrome del túnel carpiano
Traumatismo de nervio Figura 2. Descarga neuromiotónica. Neuromiotonía adquirida postradio-
Neuropatía cubital. Dimpling hipotenar terapia.
Radiculopatía (hipertrofia gemelar en S1)
Neuropatía motora multifocal
Otras neuropatías. Vasculitis postradioterapia, etc.) que, incluso, puede semejar
2. Facial (craneal): Esclerosis múltiple una clásica distonía focal. Las formas generalizadas
Gliomas y tumores de tronco cerebral adquiridas, además de las secundarias a trastornos
Siringobulbia iónicos, tóxicos y endocrinológicos, pueden estar
Intoxicación por tricloroetileno relacionadas con la existencia de timoma y otras
Guillain-Barré neoplasias o con enfermedades autoinmunes. Re-
Parálisis de Bell cientemente ha sido postulada en estos pacientes la
Postradioterapia: facial, trigeminal, cervical existencia de anticuerpos contra el canal del potasio
de la membrana presináptica(6). Ello permite añadir
la neuromiotonía a la lista de enfermedades neuro-
tracción difusa y permanente causa una rigidez que musculares mediadas por anticuerpos específicos de
limita los movimientos (síndrome del “armadillo”), canal o de enzimas en la vertiente motora. Dicha
a la vez que se manifiesta en pequeños y constantes lista ahora incluye dos trastornos paralizantes: la
movimientos de las pequeñas articulaciones que miastenia gravis y el síndrome de Eaton-Lambert,
persisten durante el sueño. Se han descrito otros y dos de hiperactividad: el síndrome del stiff-man
casos, también congénitos, en los que predominan y la neuromiotonía.
los síntomas deficitarios por la neuropatía y en ellos Los estudios electrofisiológicos en la neuro-
la neuromiotonía es un hallazgo electrofisiológico miotonía son característicos: aparecen las descar-
en pacientes con fenotipo de enfermedad de Char- gas de multipletes, idénticas a las de la tetania,
cot-Marie-Tooth. Sin embargo, es más frecuente la que corresponden a la actividad ectópica del axón
aparición de la neuromiotonía de forma adquirida, motor, a la vez que pueden observarse descargas
sobre todo de presentación focal como manifesta- prolongadas de potenciales repetitivos o descargas
ción de una lesión nerviosa periférica (traumática, neuromiotónicas (Fig. 2). Se observan descargas

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388 J. Montero Homs

200 μV
100 ms

Figura 3. Síndrome de Guillain-Barré. Postdescargas en músculo tibial Figura 4. Una descarga mioquímica registrada mediante línea de disparo
anterior tras estimulación eléctrica del nervio peroneo común. Obsérvese a partir de su primer potencial, aplicándose también retraso de señal.
su carácter repetitivo y la duración variable. Registro con electrodo de aguja Pueden observarse variaciones del número de potenciales repetitivos en
coaxial. Calibración 5 ms/200 μV. las diferentes descargas seleccionadas.

de potenciales de unidad motora batiendo a altas dedor de los párpados o sobre las mejillas, induce
frecuencias (150-300 Hz), espontáneas o provoca- a considerar, sólo si el contexto clínico lo apoya,
das, a intervalos irregulares y duración variable, la posibilidad de lesiones en el tronco cerebral,
de inicio y fin abrupto, y tendencia a disminuir como acontece en la esclerosis múltiple. La acti-
de amplitud. La estimulación eléctrica nerviosa vidad espontánea de un grupo de motoneuronas,
permite observar, tras el potencial motor evocado es la causa de este fenómeno. Desde el punto de
sobre el músculo, la presencia de postdescargas que vista electrofisiológico, la “descarga mioquímica”
corresponden a la excitación “extra” del axón en es sinónimo de neuromiotonía focal y, de hecho, ha
el punto hiperexcitable, generador de descargas sido uno de los términos más frecuentemente usa-
ectópicas, debido al paso del impulso generado dos en la denominación de estas enfermedades(7).
por la excitación eléctrica del nervio (Fig. 3). El La descarga mioquímica consiste en un fenómeno
tratamiento con carbamazepina y, con menor efi- de extradescarga de tipo repetitivo, entre 2 y hasta
cacia, fenitoína, permite en la mayor parte de casos 10 potenciales de unidad motora, muy similares
la remisión, a veces espectacular, de la actividad entre sí, con una frecuencia interna de batido de
ectópica del axón motor y de la contracción mus- 20-70 Hz, y que se repiten en un patrón más o
cular involuntaria. menos regular cada 0,5 a 3 s, constituyendo un
complejo cuya morfología es también similar, aun-
Mioquimia que suele tener pequeñas variaciones en el número
de potenciales que lo componen (Figs. 4 y 5). Está
Con todo lo anterior, este término debe ser si- formada, por tanto, por un potencial de unidad
tuado en su concepción puramente clínica. Con- motora o parte de él, generado ectópicamente en
siste en la contracción involuntaria y “reptante” de algún punto hiperexcitable probablemente en la
un territorio sobre un músculo, no muy diferente a arborización distal, capaz de autoexcitarse repetida-
la fasciculación, aunque algo más prolongada en el mente, bloqueándose, en ocasiones, la conducción
tiempo. Cuando sucede en el territorio facial, alre- a algunos ramos terminales por fallo en la reflexión.

Manual EMG.indb 388 9/7/07 12:07:43


Síndromes de hiperactividad muscular 389

en las vías centrales. Asimismo, la actividad que


sucede a largo plazo a lesiones del nervio facial
corresponde a potenciales de unidad motora que no
pueden ser controlados, a sincinesias aumentadas o
a reflejos axónicos(9). Una correlación clínico/elec-
trofisiológica es siempre necesaria, por tanto, en la
correcta clasificación de estos trastornos(10).

Espasmo hemifacial

De entre los movimientos espontáneos anorma-


les en la cara, el espasmo hemifacial tiene carac-
terísticas clínicas y electrofisiológicas genuinas(11),
que corresponden a la actividad ectópica de los
Figura 5. Descarga mioquímica. En este caso han sido seleccionados los tra- axones a nivel intracraneal junto a hiperexcitabili-
zos con cuatro potenciales muy similares que descargan repetitivamente sin dad de la neurona motora en el tronco cerebral. La
bloqueos en el momento de su captura. En la parte superior han sido super- contracción anormal corresponde a espasmos por
puestos observándose la inestabilidad (jitter) que se hace progresivamente actividad repetitiva de origen en el nervio periféri-
mayor en los sucesivos potenciales. Este comportamiento es exclusivo de las
descargas mioquímicas y no lo presentan las descargas de alta frecuencia,
co, donde existe un corto segmento hiperexcitable
la miotonía ni las descargas de unidades motoras voluntarias. en relación a desmielinización focal, a veces secun-
daria a compresión repetida por vasos malformados
en el ángulo pontocerebeloso(12). Hay que hacer
La repetición del fenómeno de excitación ectópica diagnóstico diferencial con el blefarospasmo, los
y de autoexcitación repetitiva, reproduce la misma tics y las sincinesias faciales postparalíticas.
descarga mioquímica, cuyo número de potenciales La descompresión quirúrgica resuelve el espas-
suele ser el mismo o sufrir algunas variaciones. No mo hemifacial en algunos casos, aunque se prefiere
es raro observar descargas mioquímicas en lesiones en la actualidad el tratamiento con fármacos antie-
traumáticas de los nervios, en trastornos desmieli- pilépticos o con toxina botulínica por su eficacia
nizantes, como la neuropatía motora multifocal y menor riesgo.
o en las fases iniciales del síndrome de Guillain-
Barré. Es frecuente la aparición de descargas mio- Calambre muscular común
químicas tardíamente en territorios dependientes
de troncos nerviosos lesionados por radioterapia(8), Clínicamente se define como la contracción
como sucede en el plexo braquial tras radioterapia brusca, dolorosa y limitada en el tiempo de un
por neoplasia de mama. Sin embargo, no siempre músculo o parte importante de él. Es un fenómeno
el hecho clínico de la mioquimia se corresponde muy frecuente, su aparición nocturna alcanza al
desde el punto de vista electrofisiológico con la 16% de sujetos normales y forma parte, junto a las
presencia de descargas “ectópicas” de multipletes fasciculaciones, de los fenómenos “positivos” de
(descargas mioquímicas) o de fasciculaciones. Las la vertiente periférica motora, que no deben ser
mioquimias clínicas que aparecen en el territorio considerados obligatoriamente como indicativos de
facial en pacientes con esclerosis múltiple o tumo- enfermedad neuromuscular subyacente. Habitual-
res troncoencefálicos, corresponden a brotes invo- mente afecta a los músculos de la pantorrilla y otros
luntarios de actividad de unidades motoras fuera flexores de miembros inferiores. Suele iniciarse tras
del control piramidal por un espacio de tiempo mantener una postura durante un período prolon-
limitado, probablemente secundarios a descargas gado y, sobre todo, al incidir sobre un músculo en

Manual EMG.indb 389 9/7/07 12:07:44


390 J. Montero Homs

rítmica de dicho nervio periférico distalmente al


punto de bloqueo anestésico. En la génesis del ca-
lambre subyace un incremento en la excitabilidad
de las fibras nerviosas de las arborizaciones termina-
les en el músculo. Factores, como los desequilibrios
iónicos que se producen durante la hemodiálisis,
el embarazo u otros procesos metabólicos, en los
períodos de agotamiento y deshidratación en la
práctica deportiva, así como otros procesos de base
neuropática, como radiculopatía, enfermedad de
motoneurona o neuropatía periférica, facilitan la
hiperexcitabilidad nerviosa distal y, por tanto, la
existencia de calambres(13,14).
Merecen especial atención los calambres que
suceden durante la hemodiálisis en pacientes con
Figura 6. Calambre común. Actividad electromiográfica durante la fase insuficiencia renal. Se hallan relacionados con la
de estado de un calambre. Calibración 20 ms/200 μV.
pérdida volumétrica excesivamente rápida y pue-
den ser limitados o evitados mediante la infusión
acortamiento y contracción tónica una actividad líquida con alta concentración de sodio. En estos
intensa de contracción fásica. La fricción sobre el casos, la frecuente existencia de polineuropatía
músculo y su estiramiento inducen al repentino urémica, los factores posturales y de contracción
fin del calambre. tónica, se añaden a las alteraciones iónicas en su
Sus mecanismos fisiopatológicos son aún muy provocación.
poco conocidos. Muchos factores contribuyen a Los pacientes afectos de esclerosis lateral amio-
facilitar o son causa principal del calambre. Pue- trófica también se quejan frecuentemente de ca-
den delimitarse diferentes tipos clínicos, como los lambres. Tienen una neuronopatía, desarrollan
de aparición nocturna espontánea, los de inciden- esfuerzos intensos para su grado de debilidad y con
cia diurna sin claros factores predisponentes, los frecuencia están mal hidratados. También sufren
que se producen durante esfuerzos, o los ligados dolor continuo en pantorrillas, como rigidez, que,
a enfermedades o trastornos de base. En todos con frecuencia, refieren como “calambre” y que
los casos existe una evidencia cada vez mayor no corresponde clínica ni electrofisiológicamente
de su origen en el nervio periférico, a pesar de a esa actividad muscular.
ciertas antiguas teorías que apoyaban su carácter En situaciones de aumento anormal de la
central. excitabilidad, ya sea por trastornos iónicos o por
Los estudios electrofisiológicos demuestran que fenómenos de desmielinización, la disminución
en el calambre común se produce en el músculo del período refractario en el nervio, así como las
una actividad eléctrica repetitiva a frecuencias al- frecuencias rápidas de excitación, son causa de que
tas, 40 a 60 por segundo, alcanzando hasta 200-300, aparezcan excitaciones “extras” de los axones, y
de potenciales morfológicamente superponibles a de que se puedan transmitir impulsos de un axón
los de un potencial de unidad motora, de inicio y a otro por contigüidad (transmisión efáptica). Se
final brusco, con cierta variación de amplitud a lo producen, de este modo, “circuitos” de reexcitación
largo de la descarga (Fig. 6). Puede ir precedida y entre axones de las ramificaciones terminales. La
seguida de fasciculaciones. Esta actividad puede ser contracción muscular involuntaria (calambre) en
inhibida por bloqueo nervioso distal y puede ser aquel territorio es entonces masiva y tiene carácter
provocada por estimulación eléctrica o magnética repetitivo. Los nociceptores se activan por los fac-

Manual EMG.indb 390 9/7/07 12:07:44


Síndromes de hiperactividad muscular 391

tores mecánicos de la contracción, así como por la TABLA IV. Trastornos primarios del músculo que causan contracción
isquemia inducida. Por otra parte, el estiramiento muscular involuntaria
del músculo, al separar físicamente dichas termina- • Hipertermia maligna
ciones axonales, interrumpe las transmisiones efáp-
• Trastornos miotónicos:
ticas y pone fin al calambre de modo repentino.
- Distrofia miotónica (enfermedad de Steinert)
El tratamiento del calambre debe estar funda-
- Miopatía miotónica proximal
mentado en su correcto diagnóstico y en el conoci-
- Miotonía congénita: autosómica dominante: Thomsen
miento de las causas que lo favorecen. En algunos
autosómica recesiva: Becker
casos los estiramientos musculares pueden ser pre-
- Paramiotonía congénita
ventivos. Desde el punto de vista farmacológico,
- Glucogenosis: déficit de miofosforilasa (enfermedad de McArdle)
algunos estudios controlados parecen demostrar la
déficit de fosfofructokinasa
utilidad del sulfato de quinina en el alivio de los
- Hipotiroidismo
calambres nocturnos a dosis de unos 300 mg al
acostarse, lo que corresponde aproximadamente a
un botellín de agua tónica. Se ha invocado por otra
parte, el uso de carbamazepina, fenitoína y gabapen- Miotonía
tina en el tratamiento de los calambres diurnos.
Consiste en dificultad en la relajación muscular,
de características clínicas y electrofisiológicas incon-
CONTRACCIÓN MUSCULAR PERSISTENTE ORIGINADA fundibles. Sale a relucir en otros capítulos de este
EN EL MÚSCULO manual, ya que se observa en un número limitado de
enfermedades: distrofia miotónica o enfermedad de
Contractura Steinert, miotonía congénita autosómica dominan-
te (enfermedad de Thomsen) o recesiva (Becker),
Se produce cuando el calcio intracelular, funda- paramiotonía congénita, miopatía centronuclear,
mentalmente almacenado en el retículo sarcoplás- condrodistrofia miotónica y, más raramente, enfer-
mico, es liberado sin excitación eléctrica previa, o medad de Pompe (Tabla IV). Consiste en la per-
bien cuando el calcio liberado por excitación eléc- sistencia de contracción en territorios previamente
trica no puede ser reacumulado por dicho retículo activados, con la aparición de una típica postura ar-
sarcoplásmico. En las enfermedades que comportan ticular por la lenta y difícil relajación. Corresponde
alteraciones en la glicólisis del músculo (p. ej., la a una marcada reducción a la conductancia al cloro
enfermedad de McArdle) el déficit energético es en la membrana sarcolémica, siendo las alteracio-
causa de la fijación de las moléculas de actina y nes en los canales iónicos que se producen en estas
miosina en contracción y acortamiento muscular. enfermedades cada vez mejor conocidas. Familias
Clínicamente, esta contractura se produce en los afectas de enfermedad de Steinert son relativamen-
músculos más activos durante la realización de un te comunes en la población general. El conjunto
esfuerzo, no en relativo reposo como es el caso del de sus manifestaciones clínicas (calvicie, cataratas,
calambre común. La intensa y dolorosa contracción debilidad y atrofia muscular distal, caracteropatía,
muscular comporta la palpación de una zona rígida cardiopatía, diabetes, etc.), hacen que la miotonía en
en el músculo, si bien el estudio EMG sobre dicho las manos y la lengua sea el hecho semiológico que
territorio demuestra silencio eléctrico y, por tanto, la confirma un diagnóstico sospechado tras la inspec-
ausencia de fenómenos de excitación de membrana. ción inicial del paciente. En la miotonía congénita
Los calambres graves producen miólisis e incremen- (enfermedad de Thomsen) por su parte, la intensa
to de CK. El mismo fenómeno, por agotamiento del miotonía y una posible hipertrofia muscular pueden
ATP del músculo, se produce en el rigor mortis. ser la única manifestación. En estos casos puede

Manual EMG.indb 391 9/7/07 12:07:45


392 J. Montero Homs

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Figura 7. Descargas miotónicas en una paciente afecta de distrofia
9. Valls-Sole J, Montero J. Movement disorders in patients
miotónica de Steinert. En la parte superior se observa una descarga con
with peripheral facial palsy. Mov Disord 2003; 18 (12):
un barrido rápido del osciloscopio (calibración 100 ms/50 μV) y se hace
1424-35.
evidente la progresiva disminución de frecuencia en el disparo y la dismi-
nución de amplitud de las ondas positivas que constituyen la descarga. En 10. Montero J. Manifestaciones motoras positivas de origen
la parte inferior se observa una descarga completa registrada también con en el nervio periférico. Tesis Doctoral 1999, Universidad
de Barcelona.
aguja coaxial (calibración 500 ms/200 μV).
11. Auger RG. Hemifacial spasm: clinical and electrophysio-
logical observations. Neurology 1979; 29: 1261-72.
12. Nielsen VK. Electrophysiology of the facial nerve in hemi-
intentarse el tratamiento de la miotonía mediante facial spasm: ectopic/ephaptic excitation. Muscle Nerve
mexiletina, quinina o fenitoína. Las características 1985; 8: 545-55.
electrofisiológicas de la miotonía, detalladas ya en 13. Bertolasi L, De Grandis D, Bongiovanni LG, Zanette GP,
Gasperini M. The influence of muscular lengthening on
otros capítulos, son inconfundibles por el tipo de des- cramps. Ann Neurol 1993; 33: 176-80.
carga repetitiva decreciente en amplitud y frecuen- 14. Miller TM, Layzer RB. Muscle cramps. Muscle Nerve
cia que se produce tras la contracción (Fig. 7). 2005; 32: 431-42.

Manual EMG.indb 392 9/7/07 12:07:45


Capítulo 29

TRASTORNOS DEL MOVIMIENTO


E. Gutiérrez-Rivas, G. Goizueta San Martín

INTRODUCCIÓN participan en los movimientos anormales, como es


el caso de las sincinesias.
La electromiografía tiene escasa utilidad en el Por otra parte, la electromiografía ofrece una no-
diagnóstico de los trastornos del movimiento, ya table ayuda en el tratamiento de los movimientos
que las características clínicas de estas alteraciones anormales con toxina botulínica. Esta toxina, cuya
suelen ser suficientemente típicas para alcanzar finalidad es producir una parálisis completa o in-
un diagnóstico acertado sin recurrir a otras explo- completa de los músculos responsables del trastorno,
raciones. Sin embargo, en determinadas ocasiones mediante denervación química, debe inyectarse con
puede proporcionar datos de interés clínico para el precisión estricta en los músculos diana. Las técnicas
diagnóstico diferencial de los trastornos del movi- de electromiografía permiten no sólo identificar si un
miento. En ensayos clínicos, por ejemplo, las téc- músculo determinado participa en un movimiento
nicas electromiográficas pueden ser especialmente anormal, sino también localizar dicho músculo para
útiles para el control de la eficacia de nuevos fár- la administración de la toxina. Se usan para ello unas
macos o para la detección de determinados efectos agujas-electrodos especiales que constan de un elec-
adversos. En algunas ocasiones pueden también trodo de registro –que sirve para detectar la actividad
servir también para descubrir pacientes simuladores eléctrica del músculo– y de un fino conducto para, sin
e histéricos. Como norma general, deben utilizarse modificar la posición de la aguja, inyectar la toxina.
electrodos de superficie, mejor que los de aguja, A continuación se presentan las características
ya que proporcionan información más global de electromiográficas de los trastornos del movimiento
la actividad muscular, mientras que se reservan los más frecuentes.
electrodos de aguja para el estudio de músculos
profundos o de pequeño tamaño(1).
La mayor dificultad de este tipo de estudios TEMBLOR
radica en la selección de los músculos a explorar.
Deben escogerse varios, que sean accesibles y que Es la oscilación rítmica de una parte del cuerpo
participen de forma evidente y relevante en el tras- producida por la contracción simultánea o alter-
torno que quiere estudiarse. nante de músculos antagonistas. El patrón electro-
Se usan aparatos de electromiografía con pro- miográfico consiste en descargas repetidas, intermi-
gramas de varios canales, puesto que, por lo gene- tentes y rítmicas. En los registros de temblor debe
ral, se compara la actividad de un músculo simultá- recordarse que la frecuencia detectada mediante
neamente con la de su antagonista, como ocurre en los registros eléctricos puede ser más alta que la
los estudios de temblor, o con otros músculos que que se observa clínicamente.

Manual EMG.indb 393 9/7/07 12:07:45


394 E. Gutiérrez-Rivas, G. Goizueta San Martín

1 s 50 μV

1 s 50 μV

Figura 1. Temblor esencial. Canal 1: m. pronador redondo: barrido 1 s; amplitud 50 μV. Canal 2: m. supinador largo: barrido 1 s; amplitud 50 μV. Temblor
alternante de 5-6 Hz.

Clásicamente el temblor se divide de acuerdo de los agonistas, con fases en que descargan de for-
con la situación en que aparece o predomina(2). ma alternante. En casos leves no llegan a apreciarse
Así, se usan los conceptos de: descargas intermitentes, sino actividad muscular con-
• Temblor de actitud o postural. tinua en todos los grupos musculares implicados(3).
• Temblor de reposo.
• Temblor voluntario, de intención, de acción o Temblor esencial
cinético.
• Temblor ortostático. Este tipo de temblor constituye una de las cau-
En la práctica, sin embargo, es frecuente hallar sas más frecuentes de consulta neurológica. En más
temblores mixtos, porque aparecen o aumentan en de la mitad de los casos hay otros familiares afectos,
distintas situaciones. ya que se hereda de forma autosómica dominante,
ligados a dos locus diferentes, 3q13 y 2p22-p25. El
Temblor fisiológico exagerado temblor predomina en actitud y puede aumentar
con la actividad voluntaria; comienza a cualquier
Es un temblor de actitud e intención (de ac- edad, desde la adolescencia y tiene, por lo general,
ción) que se aprecia en situaciones de ansiedad, un curso progresivo.
cansancio físico o psíquico, hiperfunción tiroidea El registro de este temblor se caracteriza por des-
o consumo excesivo de excitantes (café, té, etc.) cargas intermitentes de 6 a 8 Hz de frecuencia (en
o determinados fármacos (anfetaminas, antide- raras ocasiones entre 4 y 12 Hz), con descargas ge-
presivos tricíclicos, etc.). Es más evidente en los neralmente síncronas de los músculos antagonistas, y
músculos distales de las extremidades superiores. ocasionales fases de descargas alternativas(4) (Fig. 1).
Para el registro de este temblor se escogen los mús-
culos más apropiados, generalmente, pronadores y Temblor simulado y temblor histérico
supinadores de la mano.
En el temblor fisiológico exagerado las descargas En ambos tipos el temblor carece de base or-
tienen una frecuencia de 7-12 Hz, aunque algunos gánica y aparece en relación con determinados
casos pueden oscilar entre 5 y 12 Hz, y suelen variar incidentes, que pueden producir algún beneficio
de una a otra parte del cuerpo. Las descargas de los económico, laboral o social al paciente, por lo que
músculos antagonistas suelen ser simultáneas a las es más frecuente tras accidentes laborales o de trá-

Manual EMG.indb 394 9/7/07 12:07:45


Trastornos del movimiento 395

5 s 500 μV

5 ms 200 μV

5 s 200 μV

500 ms 200 μV

Figura 2. Temblor simulado. Canal 1: m. bíceps braquial: barrido 5 s; amplitud 500 μV. Canal 2: m. bíceps braquial: barrido 500 ms; amplitud 200 μV.
Canal 3: m. tríceps braquial: barrido 5 s; amplitud 200 μV. Canal 4: m. tríceps braquial: barrido 500 ms; amplitud 200 μV.

fico. Puede ser también una manifestación de una


neurosis de conversión. En cualquier caso, es un
temblor poco frecuente.
Este temblor puede ser de reposo, de actitud,
de intención o, más frecuentemente, mixto, pero
siempre violento, aparatoso, llamativo y, natural-
mente, invalidante. La amplitud y la frecuencia del
temblor varían de unos pacientes a otros y de un 1 s 100 μV
momento a otro, en el mismo paciente.
El registro de músculos antagonistas entre sí
muestra descargas alternantes, muy irregulares en
frecuencia y amplitud(3) (Fig.2).

Temblor parkinsoniano

Es un temblor de reposo, de amplitud muy


variable, que va desde un temblor apenas percep-
1 s 100 μV
tible hasta uno muy intenso. Es un temblor que
desaparece o disminuye con la atención y con los
movimientos voluntarios.
El registro muestra brotes intermitentes y alter-
nantes en músculos agonistas y antagonistas, que Figura 3. Temblor parkinsoniano, alternante, a 5 Hz. Canal 1: m. pro-
nador redondo: barrido 1 s; amplitud 100 μV. Canal 2: m. supinador largo:
baten a una frecuencia de 4 a 6 Hz y, en raros casos,
barrido 1 s; amplitud 100 μV.
de 3 a 7 Hz(5) (Fig.3).

Manual EMG.indb 395 9/7/07 12:07:46


396 E. Gutiérrez-Rivas, G. Goizueta San Martín

Temblor cerebeloso

Suele ser de intención (cinético), y rara vez


precisa de registro eléctrico para su caracteriza-
ción, ya que habitualmente se acompaña de otros
signos de afectación cerebelosa que facilitan su
diagnóstico. Figura 4. Temblor ortostático a 14 Hz. Amplitud: 1 mV; barrido: 100 ms.
Registro en el m. gemelo con el paciente en pie.
El estudio eléctrico de este temblor detecta
descargas alternantes en músculos agonistas y an-
tagonistas, con frecuencia variable: de 2,5 Hz en
músculos proximales y de 5 a 10 Hz en distales(6). Temblor neuropático
Existe también un temblor cerebeloso de actitud,
de gran amplitud, aparatoso, denominado temblor Se encuentra en lesiones muy evolucionadas
rúbrico (ver más adelante), así como otro temblor del sistema nervioso periférico, ya sean hereditarias
de origen cerebeloso, fino, de actitud, rápido, de (como algunas formas de Charcot-Marie-Tooth) o
más de 10 Hz, en el que el registro muestra gran adquiridas (como la polirradiculoneuropatía des-
variabilidad en la amplitud de las descargas alter- mielinizante inflamatoria crónica).
nantes(6). Es un temblor de actitud que bate a una fre-
cuencia de 6 a 8 Hz. Los músculos antagonistas
Temblor rúbrico descargan simultánea o alternativamente con los
agonistas(8).
Es un temblor de actitud, secundario a lesiones
del pedúnculo cerebeloso superior o del núcleo Temblor ortostático
rojo. Se denomina también discinesia volicional
de actitud. La amplitud del temblor aumenta típi- Es una variante del temblor de actitud, que tiene
camente, mientras se mantiene la postura y es más ciertas peculiaridades. Predomina en mujeres, puede
evidente en la musculatura proximal de miembros ser familiar y comienza hacia la quinta década de la
superiores. vida. Se desencadena al mantener la bipedestación
En el registro eléctrico se aprecian brotes y aumenta progresivamente de amplitud, pudiendo
intermitentes de baja frecuencia (de 2 a 4 Hz), llegar a causar la caída al suelo del enfermo, a menos
alternando la actividad de músculos agonistas y que éste se apoye, se siente o camine unos pasos,
antagonistas. La duración de los brotes de actividad con lo que desaparece el temblor(9). Algunos casos
muscular son notablemente prolongados, de 125 a tienen otros temblores asociados(10).
250 ms cada uno(3). El registro de músculos proximales de miembros
inferiores permite apreciar unas descargas de 12 a 18
Dismetría cerebelosa Hz (Fig. 4), que van aumentando progresivamente
de amplitud, de forma paralela a lo que se observa
No se trata exactamente de un temblor. Si se clínicamente. Las descargas suelen ser simultáneas
registra la actividad muscular durante la maniobra en músculos agonistas y antagonistas, aunque se
dedo-nariz en un paciente con dismetría, el trazado han registrado casos de descargas alternantes(9).
muestra que la descarga del músculo agonista se
produce muy lentamente y dura más de lo normal, Temblor de la escritura
mientras que el músculo antagonista se retrasa en
el comienzo de su actividad, que es también más Es un temblor que aparece al escribir y que
duradera(7). se manifiesta con movimientos de pronosupina-

Manual EMG.indb 396 9/7/07 12:07:46


Trastornos del movimiento 397

ción, aunque pueden también participar músculos Existen dos tipos de mioclonías: epilépticas
flexores y extensores de los dedos de la mano. Si y no epilépticas. Las primeras se acompañan de
se mantiene la acción de escribir, puede aparecer actividad simultánea en el EEG; el electromio-
un espasmo en flexión de dedos y muñeca, de grama muestra brotes de frecuencia muy varia-
tipo distónico (véase más adelante)(11). No debe ble, de 10 a 50 ms de duración, con actividad
confundirse el temblor de la escritura con el es- síncrona en los músculos antagonistas. Las mio-
pasmo del escribiente, que es una distonía focal clonías no epilépticas o no corticales no tienen
desencadenada por una actividad ocupacional o correlato EEG; en el registro EMG, las descargas
laboral. son irregulares, de 50 a 300 ms de duración, y
El registro electromiográfico se obtiene, pre- pueden ser síncronas o asíncronas en los mús-
ferentemente, en los músculos supinador largo culos antagonistas(3).
y pronador redondo, y muestra brotes rítmicos
de 5 a 7 Hz, con descargas simultáneas (rara vez
alternantes) de estos músculos. BALISMO

El balismo se caracteriza por movimientos anor-


TICS males, involuntarios, extremadamente bruscos,
brutales, arrítmicos, con cierto patrón repetitivo,
Los tics son movimientos rápidos, bruscos, bre- y que afectan a músculos proximales de las extre-
ves, repetitivos, semi-involuntarios, estereotipados, midades, por lo que producen un desplazamiento
simples o complejos, que afectan primordialmente rápido y exagerado de todo el miembro(4).
a los músculos de la cara, el cuello y la cintura esca- No existen datos en la literatura del registro
pular. Pueden ser imitados o provocados, así como eléctrico de movimientos bálicos, probablemente
controlados durante cierto tiempo por el paciente. porque el diagnóstico clínico suele ser suficiente-
Responden a la necesidad de liberar tensión física o mente sencillo.
psíquica, por lo que se incrementan en frecuencia
e intensidad en situaciones de estrés emocional o
cansancio físico. DISTONÍA-ATETOSIS
En la enfermedad de Gilles de la Tourette los
tics son notablemente prominentes y se asocian a La distonía es una postura o movimiento anor-
trastorno obsesivo-compulsivo, coprolalia y espas- mal secundario a la contracción prolongada de
mos laríngeos, con sonidos guturales. músculos agonistas y antagonistas, tanto en re-
El registro de los tics muestra, en los músculos poso como durante el movimiento voluntario
que se contraen, descargas de 50 a 200 ms de (atetosis). Desde el punto de vista muscular, la
duración, de frecuencia extremadamente irre- característica fundamental de la distonía-ateto-
gular(12,13). sis es la inadecuada relajación de los músculos
antagonistas.
Puede demostrarse mediante el electromiogra-
MIOCLONÍAS ma, que permite apreciar en músculos antagonistas
entre sí descargas síncronas, de gran duración y
Son movimientos bruscos, breves, rítmicos o no, amplitud, espontáneas o provocadas por movi-
de un grupo muscular, que producen un desplaza- mientos voluntarios. En algunos pacientes con
miento visible de una extremidad o una parte de distonía puede también observarse un temblor de
ella. Pueden provocarse o facilitarse por la actividad actitud de 6 a 10 Hz, con descargas alternantes
voluntaria o por estímulos sensoriales. de los músculos agonistas y antagonistas. Pueden

Manual EMG.indb 397 9/7/07 12:07:47


398 E. Gutiérrez-Rivas, G. Goizueta San Martín

CALAMBRES MUSCULARES

Este apartado se desarrolla con mayor extensión


y profundidad en el capítulo 28 de este Manual.
Los calambres musculares son contracciones in-
voluntarias, dolorosas, de un músculo o un grupo
muscular, que duran segundos o minutos. Aparecen
Figura 5. Distonía laríngea. Registro con aguja del músculo tiroaritenoi-
en sujetos sanos, más frecuentemente por la noche,
deo (cuerda vocal). Amplitud: 400 μV; barrido: 200 ms. Máximo esfuerzo
(el paciente vocaliza la letra “i” de forma mantenida). Obsérvese cómo se tras ejercicio intenso, en situaciones de estrés o por
empobrece el trazado de forma intermitente. la ingesta excesiva de excitantes (café, anfetaminas,
etc.). Son también muy frecuentes durante el em-
barazo. Por el contrario, los calambres se observan
también muchas enfermedades neuromusculares,
verse, además, de forma ocasional, movimientos tanto denervativas como miopáticas, y en algunas
distónicos rápidos, de 100 a 500 ms de duración, de ellas de forma característica.
en los músculos que participan de la distonía(14). Los calambres se acompañan de actividad eléc-
Los músculos que participan en un movimiento trica muscular, con descargas de alta frecuencia, de
distónico muestran, cuando ejercen un esfuerzo hasta 300/s (habitualmente 40 a 60/s), constituidas
máximo, un fracaso intermitente para mantener por potenciales de unidad motora de característi-
su actividad eléctrica (Fig. 5). cas normales; las descargas comienzan y terminan
Un ejemplo frecuente de distonía es el tortíco- bruscamente, y pueden tener alguna variación en
lis por incapacidad de relajación adecuada de los su amplitud a lo largo de la descarga(11,15).
músculos cervicales, fundamentalmente el esterno- A diferencia de los calambres musculares, la con-
cleidomastoideo. Si se registra simultáneamente la tractura muscular, que cursa con dolor y endureci-
actividad en ambos esternocleidomastoideos, puede miento palpable del músculo afectado, no produce
comprobarse cómo es imposible obtener silencio actividad eléctrica alguna en el registro electromiográ-
eléctrico en el músculo afecto, ya sea en reposo, fico(11,15,16). Un ejemplo característico es la contractura
en contracción voluntaria o cuando debería estar que se encuentra en la enfermedad de McArdle.
relajado (girando el cuello contra resistencia hacia
el lado doloroso), mientras que en el músculo sano
sólo existe actividad eléctrica al girar el cuello hacia ESPASMO HEMIFACIAL CLÓNICO
el lado opuesto(5).
Es un trastorno funcional del nervio facial carac-
terizado por episodios repetitivos de contracciones
COREA involuntarias, clónicas, de los músculos faciales de
un solo lado de la cara. La frecuencia, intensidad y
Los movimientos coreicos son anormales, in- duración de los episodios suelen ser crecientes a lo
voluntarios, bruscos, amplios, irregulares, sin un largo de tiempo y, a veces, tras las descargas clóni-
patrón fijo, que, por tanto, cambian de un momen- cas hay una fase de contracción tónica que puede
to a otro. Aunque pueden aparecer en cualquier durar varios segundos (hasta más de 20 s)(17).
músculo, se aprecian mejor en la cara, el cuello y Para el estudio electromiográfico de este trastor-
los miembros superiores(4). no se utilizan habitualmente electrodos de aguja,
Son muy escasas las referencias en la literatura por el pequeño tamaño de los músculos de la cara.
acerca de las características eléctricas de estos mo- Deben registrarse, al menos, dos músculos: uno de
vimientos anormales. la porción superior de la cara (el m. frontal o el m.

Manual EMG.indb 398 9/7/07 12:07:47


Trastornos del movimiento 399

A B

Figura 6. Espasmo hemifacial clónico. A: Canal 1: m. frontal: barrido 1 s; amplitud 200 μV. Canal 2: m. orbicular de los labios: barrido 1 s; amplitud 200
μV. Obsérvese la sincronía en las descargas de ambos músculos; B: Canal 1: m. frontal: barrido 1 s; amplitud 200 μV. Canal 2: m. orbicular de los labios:
barrido 1 s; amplitud 200 μV. Fase tónica en el espasmo hemifacial clónico.

orbicular de los párpados) y otro de la parte infe- luego una contracción tónica exagerada. Así, por
rior (m. orbicular de la boca). Las contracciones ejemplo, el ojo que no podía cerrarse por debili-
de ambos grupos musculares, superior e inferior, dad del orbicular de los párpados está ahora más
son simultáneas (Fig. 6). A veces, varias descar- cerrado que el del ojo sano, por hipertonía de
gas clónicas se siguen de una descarga tónica de dicho músculo; o el surco nasogeniano, borrado
varios segundos de duración. Pueden facilitarse durante las primeras fases de la parálisis, está lue-
o provocarse las descargas, que al comienzo del go más marcado que el contralateral, sano. Esta
cuadro son poco frecuentes, estimulando eléctri- contractura suele asociarse a las sincinesias de los
camente el nervio facial a su salida por el agujero músculos faciales del lado enfermo, así como al
estilomastoideo. Cuando el síndrome está muy síndrome de “lágrimas de cocodrilo” y a la debili-
evolucionado suele acompañarse de sincinesias, dad de la musculatura facial de ese lado, y, como
como las que se encuentran en el síndrome facial todas estas complicaciones, tiene el significado
postparalítico. de una inervación insufi ciente y aberrante del
nervio facial lesionado, con efapsis en el trayecto
del nervio facial.
HIPERTONÍA FACIAL POSTPARALÍTICA En el espasmo tónico o hipertonía facial postpa-
ralítica se puede registrar en el electromiograma un
Es una complicación habitual de la parálisis grado variable de actividad muscular continua y,
facial periférica que no se recupera por completo, ocasionalmente, silencio eléctrico en reposo. Los
ya sea idiopática, postherpética o de otras causas, movimientos voluntarios de cualquier músculo del
y forma parte del síndrome facial postparalítico. lado afecto desencadenan contracciones involun-
Aparece 5 ó 6 meses después de la parálisis facial. tarias de otros músculos faciales del mismo lado
Los músculos que habían estado paréticos tienen (sincinesias).

Manual EMG.indb 399 9/7/07 12:07:47


400 E. Gutiérrez-Rivas, G. Goizueta San Martín

SINCINESIA FACIAL POSTPARALÍTICA racteriza por contracciones involuntarias tónicas,


repetidas, arrítmicas, de los músculos que cierran
Al igual que ocurre en la hipertonía facial pos- los ojos, en ambos lados de la cara, de forma sín-
tparalítica, las sincinesias faciales postparalíticas se crona.
encuentran en pacientes con parálisis facial peri- El registro eléctrico debe hacerse con electro-
férica, que han tenido una mala evolución y no se dos de aguja, en ambos orbiculares de los párpados,
han recuperado por completo; las sincinesias for- a la vez, si se sospecha blefarospasmo aislado; si se
man parte del síndrome facial postparalítico, junto trata de una blefarospasmo asociado a distonía oro-
con la debilidad, la contractura y las “lágrimas de mandibular deben registrarse, además, músculos de
cocodrilo”. Clínicamente se puede apreciar que la la parte inferior de la cara (p. ej., el orbicular de la
movilización voluntaria de los músculos faciales boca) de ambos lados, en un aparato de electromio-
superiores desencadena contracciones involunta- grafía de 4 canales. Las características eléctricas de
rias de los músculos del territorio facial inferior y las descargas son arrítmicas, variables en duración
viceversa, lo que se denomina, respectivamente, y amplitud, pero siempre son simultáneas en los
sincinesia descendente o ascendente. Cuando se territorios superiores e inferiores de ambos nervios
pide al paciente que parpadee se aprecia una con- faciales.
tracción involuntaria, simultánea, de los músculos
de la parte inferior de la cara (m. orbicular de la
boca, m. cutáneo del cuello, etc.), y si se solicita al BIBLIOGRAFÍA
paciente que mueva los labios se advierte un movi-
miento de cierre involuntario de los párpados. 1. Aminoff MJ. Electrodiagnosis in clinical neurology. 4ª ed.
New York: Churchill Livingstone; 1999.
El registro simultáneo de músculos faciales su-
2. Koller WC. Diagnosis and treatment of tremors. Neurol
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y de músculos faciales inferiores (m. orbicular de 3. Hallet M. Electrophysiological evaluation of movement
los labios) del lado afecto, se lleva a cabo con elec- disorders. En: Aminoff MJ, ed. Electrodiagnosis in clini-
trodos de aguja. Cuando el paciente intenta elevar cal neurology. 4ª ed. New York: Churchill Livingstone;
las cejas o cerrar los ojos (por ejemplo, para par- 1999:365-380.
padear) se registra, además de la actividad volun- 4. Zarranz JJ. Neurología. 3ª ed. Madrid: Elsevier; 2003.
taria del músculo correspondiente, una actividad 5. Kimura J. Electrodiagnosis in diseases of nerve and muscle.
Principles and practice. 2ª ed. Philadelphia: FA Davis Co.;
involuntaria, sincinética, en el músculo orbicular 1983.
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luntariamente (para decir “papá”, por ejemplo), En: Jankovic J, Tolosa E, eds. Parkinson’s disease and mo-
se registra simultáneamente actividad eléctrica vement disorders. 3ª ed. Baltimore: Williams & Wilkins;
1998. p. 623-86.
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otros (a veces, mayor que la voluntaria), pero es ture of chronic relapsing and dysgammaglobulinaemic
siempre síncrona con la actividad voluntaria que polyneuropathies. Incidence and management. Arch
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Manual EMG.indb 400 9/7/07 12:07:48


Trastornos del movimiento 401

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Manual EMG.indb 401 9/7/07 12:07:48


Manual EMG.indb 402 9/7/07 12:07:48
Capítulo 30

DOLOR NEUROPÁTICO
J. Valls Solé, P. Schestatsky, M. Veciana de las Heras

INTRODUCCIÓN de gran diámetro (fibras Aβ) y no la de las fibras


pequeñas implicadas en la conducción de impulsos
Las sensaciones dolorosas provocadas por la acti- dolorosos(5,6). No obstante, el electrodiagnóstico neu-
vación de los receptores de las terminaciones libres rológico convencional puede aportar datos relevantes
de la piel en el ser humano se vehiculan por fibras para el diagnóstico de la lesión causal. Por ello, el es-
amielínicas (fibras C) o pobremente mielinizadas tudio de la fisiopatología de los síndromes que cursan
(fibras Aδ). La proyección central sigue principal- con dolor neuropático requiere habitualmente, en
mente el haz anterolateral medular, aunque una primer lugar, el uso de técnicas de electrodiagnós-
parte de la información nociceptiva podría transcu- tico convencional, y en segundo lugar, de técnicas
rrir por el cordón dorsal(1). En las vías del dolor del específicas, que se detallan a continuación.
haz anterolateral cabe distinguir el tracto espinotalá-
mico, que alcanza los núcleos ventral posterolateral
y ventral posteromedial del tálamo, el tracto espi- EXPLORACIONES ELECTROMIOGRÁFICAS CONVENCIONALES.
norreticular que se proyecta a la sustancia reticular DESARROLLO CLÍNICO Y DE INVESTIGACIÓN
bulbopontina y desde allí a núcleos intralaminares
talámicos y a amplias áreas de la corteza cerebral, y En pacientes con dolor neuropático es aconseja-
el tracto espinorreticulomesencefálico que alcanza ble efectuar un estudio electrofisiológico completo
la sustancia gris periacueductal y el sistema límbi- por varias razones. Por un lado, el estudio electrofisio-
co a través del hipotálamo. El papel de la corteza lógico puede poner de manifiesto lesiones neuroló-
cerebral en la percepción de impulsos nociceptivos gicas periféricas potencialmente relacionadas con el
es poco claro. A pesar de las recientes aportaciones trastorno que provoca el dolor. Por otra parte, el dolor
de las técnicas de neuroimagen(2,3), no se ha podido puede ser la consecuencia de un desequilibrio en la
detectar una zona específica de la corteza cerebral combinación de impulsos aferentes que alcanzan el
en la que se represente el dolor. Visto desde una sistema nervioso central. Por lo tanto, el estudio elec-
perspectiva fisiológica, el dolor debe considerarse trodiagnóstico puede aportar datos para comprender
como una percepción o interpretación subjetiva de mejor la fisiopatología del dolor neuropático.
los impulsos exteroceptivos(4).
No es posible efectuar un estudio completo de Estudios de conducción nerviosa periférica y central en
la fisiología del dolor a través de métodos electrofi- fibras motoras y sensitivas
siológicos convencionales, tales como estudios de
conducción nerviosa y electromiografía, ya que éstos Los estudios convencionales de neurografía mo-
evalúan mayoritariamente la función de las fibras tora y sensitiva contribuyen poco a la evaluación

Manual EMG.indb 403 9/7/07 12:07:48


404 J. Valls Solé, P. Schestatsky, M. Veciana de las Heras

de las vías del dolor. A pesar de que los estímulos entrada(10), de que la estimulación eléctrica repeti-
eléctricos usados en el electrodiagnóstico neu- tiva, transcutánea (TENS) o percutánea (PENS),
rológico convencional pueden ser de intensidad causa un efecto de alivio de la sensación dolorosa,
suficiente para activar las fibras del dolor, el resul- tal como se ha puesto de manifiesto clínicamente
tado de dicha activación no puede ser evaluado. en varios trabajos(11,12). La comprobación electro-
Los estímulos eléctricos activan principalmente fisiológica de una conducción aferente normal es
fibras de gran calibre, cuyo potencial de acción una condición indispensable para que el TENS o
enmascara el que se podría generar por la activa- PENS sean efectivos. Por otro lado, la estimula-
ción de las fibras de pequeño calibre. Lo mismo ción magnética repetitiva muscular se ha revelado
ocurre con los potenciales evocados somestésicos también como una herramienta terapéutica en pa-
(PESS), en cuya composición pueden tener cabida cientes con dolor músculo-esquelético con efectos
algunos potenciales de acción generados en el área similares a los de la estimulación eléctrica repeti-
sensitivomotora de la corteza cerebral por aferentes tiva(13). En estos casos, la estimulación magnética
nociceptivos(7). Aunque los potenciales evocados so- podría activar repetitivamente de modo indoloro
mestésicos convencionales no se utilizan para el es- los aferentes musculares, bloqueando, en parte, la
tudio de la conducción en fibras del dolor, algunos conducción en las fibras del dolor. La estimulación
autores han propuesto utilizar estímulos de intensi- magnética repetitiva cortical ha sido también utili-
dad umbral para obtener los PESS convencionales, zada con éxito recientemente en el tratamiento de
y sustraer la señal bioeléctrica de los potenciales síndromes que cursan con dolor neuropático(14,15),
evocados obtenidos en la misma localización por y es posible que estas observaciones lleven al desa-
estímulos eléctricos de intensidad supraumbral para rrollo de estimuladores para el dolor implantados
el dolor(8). Sin embargo, esta técnica no permite en el parénquima cerebral.
reconocer con certeza cuál es la contribución de
los aferentes nociceptivos a los potenciales evoca- Electromiografía
dos, ya que, debido a fenómenos de cancelación
intersensorial, no es lo mismo activar solamente La electromiografía de aguja es un coadyuvan-
las fibras del dolor que activarlas simultáneamente te al diagnóstico del dolor neuropático. Aunque
junto con fibras de mayor calibre. no permita obtener información directa sobre los
En un intento de activar aisladamente las fibras circuitos del dolor, contribuye al diagnóstico topo-
del dolor, algunos autores han propuesto técnicas gráfico de entidades neurológicas que cursan con
de investigación originales. Inui y cols.(9) propusie- dolor. Los síndromes neurológicos que cursan con
ron el uso de microelectrodos punzantes de unos hiperactividad motora pueden acompañarse de
0,2 mm de longitud, adheridos a una plataforma dolor. Este es el caso del síndrome de la persona
que se aplica sobre la piel. El electrodo penetra en rígida, en el que se observa una actividad continua
la epidermis, en contacto con los receptores del de potenciales de unidad motora, probablemente
dolor, sin causar sangrado ni daño aparente. La debida a un trastorno de la inhibición gabaérgica
intensidad del estímulo eléctrico que se aplica a de las motoneuronas del asta anterior. La electro-
través del electrodo es muy baja, del orden de 0,2 a miografía de aguja mostrará actividad continua
0,3 mA, y la resolución temporal de los registros no de unidades motoras. En el caso de los fenóme-
tiene la variabilidad intrínseca a otros métodos. La nos neuromiotónicos, existen espasmos dolorosos
velocidad de conducción media de los potenciales provocados por una activación involuntaria de un
de acción recogidos con esta técnica es de 15,1 m/s, conjunto de fibras musculares a través de fenóme-
perfectamente compatible con fibras Aδ. nos efápticos, formando circuitos reverberantes en
Un aspecto colateral al estudio del dolor es la las terminaciones axonales motoras(16). La figura 1
observación, basada en el concepto de la puerta de muestra el registro de actividad repetitiva, en gru-

Manual EMG.indb 404 9/7/07 12:07:49


Dolor neuropático 405

nos de facilitación y de inhibición de la activación


de unidades motoras a través de sus efectos sobre
las motoneuronas activadas.
Las respuestas reflejas nociceptivas pueden
obtenerse en músculos en reposo, mediante la
0,5 mV
1s aplicación de estímulos únicos de alta intensidad
o de trenes de estímulos. Los aferentes nocicepti-
Figura 1. Registro de actividad electromiográfica en el músculo flexor corto
del dedo gordo en dos períodos de 10 segundos de duración, en un paciente vos pueden generar respuestas reflejas a través de
con el síndrome de “piernas dolorosas y dedos en movimiento”. circuitos espinales o supraespinales. Sin embargo,
la presencia de la respuesta nociceptiva puede de-
pender, en parte también, de las expectativas del
pos, en un paciente con el síndrome de “piernas sujeto, existiendo la posibilidad de la contribución
dolorosas y dedos en movimiento”(17). de los circuitos de la reacción de sobresalto(21).
La electromiografía de superficie permite cuan- La respuesta RIII es una respuesta refleja de los
tificar el grado de actividad de las motoneuronas en músculos flexores de las extremidades inferiores
una contracción tónica. Para ello, se debe proce- (bíceps femoral y tibial anterior), que ocurre a una
der a la rectificación y promediación de suficientes latencia entre 90 y 130 ms siguiendo a estímulos
períodos de actividad electromiográfica. Jensen y nociceptivos aplicados sobre el nervio sural en el
cols.(18) han usado esta metodología para la cuan- tobillo. La aparición de esta respuesta coincide
tificación de la actividad muscular pericraneal en con el umbral del dolor(22) y, por ello, se atribuye
pacientes con algias faciales y cefaleas. a la estimulación de fibras Aδ. La respuesta RIII
es la segunda respuesta (o respuesta tardía) que
Respuestas reflejas aparece en los músculos mencionados al aumen-
tar progresivamente la intensidad del estímulo
Los impulsos sensitivos que alcanzan el sistema eléctrico. La respuesta precedente (RII), de una
nervioso central son capaces de inducir respuestas latencia de 50-60 ms, es probablemente debida a
motoras reflejas, tanto a nivel espinal como a nivel la activación de fibras A-α o A-β, y no se acompa-
supraespinal. La respuesta dependerá, en parte, de ña de dolor. Al estar relacionada con la sensación
la naturaleza e intensidad del estímulo y en parte dolorosa, la respuesta RIII se ha utilizado en la
de la excitabilidad de la vía motora. Los estímulos evaluación de la eficacia de tratamientos antiál-
de baja intensidad pueden provocar reflejos mo- gicos, a pesar de que su reproducibilidad no es
nosinápticos de corta latencia (onda H), derivados siempre satisfactoria (Fig. 2).
de la activación de fibras de gran tamaño, mientras En las extremidades superiores se ha obtenido
que estímulos de mayor intensidad pueden pro- también un reflejo nociceptivo a estímulos eléctri-
vocar respuestas reflejas polisinápticas o de larga cos en nervios digitales(23). El patrón de activación
latencia(19). Estas respuestas reflejas reciben nom- electromiográfica es el de retirada de la extremidad.
bres diversos, dependiendo del tipo de aferentes su- La respuesta refleja obtenida aparece a una latencia
puestamente inductores de la respuesta: reflejos de de menos de 100 ms, similar a la de la respuesta
estiramiento, cutáneo-musculares, exteroceptivos, excitatoria del reflejo cutáneo-muscular, e incom-
nociceptivos, etc. En los reflejos de estiramiento(19) patible con una reacción voluntaria. La observa-
y cutáneo-musculares(20), el sujeto debe mantener ción de respuestas reflejas cutáneo-musculares de
un cierto grado de actividad voluntaria mientras la extremidad superior no sólo traduce efectos de
se aplican estímulos generadores del reflejo, de tal estímulos nociceptivos, ya que la exageración de es-
modo que el estímulo actúa como modulador de la tos reflejos se ha observado en pacientes con atrofia
actividad electromiográfica, provocando fenóme- multisistémica o enfermedad de Parkinson(24).

Manual EMG.indb 405 9/7/07 12:07:49


406 J. Valls Solé, P. Schestatsky, M. Veciana de las Heras

palma – palma Na+ + Na+


Cl- Cl-
Na + Na+ Na + Na+
1 2
Cl- Cl-
Na+ Na+

dorso + dorso –

1
2

0,5 s
0,5 s

Figura 2. Respuestas reflejas RIII captadas en el músculo bíceps femo- Figura 3. Representación esquemática de los eventos que tienen lugar
ral tras la estimulación eléctrica de alta intensidad (S) en un sujeto en la glándula sudorípara a la llegada del impulso eléctrico (modificado
sano. Obsérvese la variabilidad de la latencia inicial de la respuesta en a partir de Mitani y cols.(33)).
sucesivos registros.

Finalmente, un estímulo doloroso puede pro- Registro de la actividad electrodérmica galvánica. Respuesta
vocar una reacción involuntaria de la musculatura sudomotora simpática cutánea
facial. Esto ha sido investigado utilizando estímulos Cualquier estímulo que provoque una reacción
eléctricos en los nervios digitales o en el nervio emocional puede generar cambios en la resistencia
mediano en la muñeca(25,26). La correlación de galvánica de la piel. La documentación y cuantifi-
estas respuestas con la percepción del dolor está cación de la reacción sudomotora puede hacerse
por investigar. No obstante, la diferenciación entre usando diversos métodos. El método electrofi-
reflejo palmomentoniano(25) y reflejo de parpadeo siológico más simple consiste en usar electrodos
somatosensorial(27) ofrece interesantes perspectivas de superficie adheridos a la palma y dorso de la
de estudio neurofisiológico para el conocimiento mano(29,30). Con el cátodo en la palma de la mano,
de la fisiología del tronco cerebral. la primera desviación de la línea de base relaciona-
da con la despolarización del ductus de la glándu-
Funciones del sistema nervioso autónomo la sudorípara es una oscilación de signo negativo.
Esto es debido a que el eje eléctrico formado en
Entre las fibras de pequeño diámetro se in- el ductus es positivo en la profundidad y negativo
cluyen, además de las que vehiculan el dolor y en el exterior a causa de la reabsorción de Na+
la temperatura, las fibras amielínicas simpáticas que ocurre a lo largo del ductus(31,32). Si se llega a
y parasimpáticas. La conducción en dichas fibras producir extravasación de sudor, el potencial de
puede ser evaluada mediante pruebas de función acción se invertirá, pasando a una positividad, ya
autónoma(28), que podrían contribuir a la caracte- que, por acúmulo de iones Na+, el exterior se hará
rización de la lesión neurológica potencialmente positivo con respecto al interior (Fig. 3).
causante de dolor neuropático. La actividad elec- La actividad electrodérmica galvánica (AEG)
trodérmica galvánica relacionada con la sudoración refleja las variaciones en el estado emocional del
y la variación refleja de la frecuencia cardíaca son sujeto en el que se registra y puede ser útil para
índices de función autónoma asequibles al estudio mostrar situaciones de estrés, miedo o hipervigi-
electrofisiológico. lancia(33). El registro simultáneo de la actividad

Manual EMG.indb 406 9/7/07 12:07:49


Dolor neuropático 407

en ambas manos ofrece la información adicional no reflejan necesariamente una disfunción au-
de conocer si la inervación de las glándulas sudo- tónoma.
ríparas coincide temporalmente en ambos lados.
Estímulos de diferentes modalidades sensoriales Variación refleja de la frecuencia cardiaca
dan lugar a cambios sincronizados en la AEG, que El estudio de la variabilidad del intervalo entre
se conocen con el nombre de respuesta sudomo- dos complejos QRS (intervalo R-R) es una expre-
tora simpática cutánea (RSSC). La RSSC es una sión indirecta del estado funcional de fibras del
respuesta consensual, es decir, que la estimulación sistema parasimpático. Uno de los complejos QRS
unilateral da lugar a respuestas bilaterales. Por ello, se utiliza para disparar el barrido del osciloscopio
el estudio de la RSSC puede informar fácilmente siempre en una misma posición, de tal manera
de si una disfunción en el circuito sudomotor se que los complejos QRS siguientes se representa-
halla en el segmento aferente o eferente del reflejo. rán en posiciones relacionadas con el complejo
En las lesiones de la vía aferente, la respuesta estará fijo. De esta forma, la variación en las posiciones
abolida a la estimulación del nervio afecto, pero no de los complejos QRS en sucesivos registros en
a la estimulación del nervio sano. En las lesiones cascada mostrará la variabilidad del intervalo R-R.
de la vía eferente, la respuesta estará ausente en Diversas maniobras permiten efectuar un estudio
el lado de la lesión y presente en el lado contrala- funcional de la variación del intervalo R-R, como
teral, sea cual sea el lado en el que se aplique el la respiración profunda, la maniobra de Valsalva
estímulo. o el paso de decúbito a bipedestación. En enfer-
La latencia de la RSSC es de alrededor de 1,5 s, mos cuya condición física no permite una buena
sin que haya muchas variaciones con estímulos de colaboración, es posible examinar la variabilidad
diferente modalidad sensorial(34). Esto es debido a que del intervalo R-R durante la respiración tranquila
la mayor parte del tiempo de latencia de la respuesta en decúbito(36).
se justifica por la conducción amielínica en las fibras
eferentes simpáticas, que conducen a razón de alre-
dedor de 1 m/s. Sin embargo, es interesante apuntar EXPLORACIONES ESPECÍFICAS DE LAS FIBRAS Y VÍAS DE
que cuando se induce por medio de estímulos láser, LA SENSIBILIDAD TERMOALGÉSICA
la latencia de la RSSC se alarga significativamente
hasta una media de 1,8 s, indicando que la conduc- Microneurografía
ción aferente en las fibras activadas por el rayo láser
es más lenta que la conducción en las fibras activa- La microneurografia es una herramienta útil
das por las otras modalidades sensoriales utilizadas para la investigación del dolor neuropático en ma-
clásicamente. Del mismo modo, se han explorado nos de expertos(28). Consiste en la inserción percu-
también las respuestas inducidas por estímulos de tánea de microelectrodos con diámetro de 1-15 μm
fibras C, sea por medio de un rayo láser disperso en un nervio periférico para registrar la actividad
que alcanza una temperatura de menos de 40º en directamente desde los axones. El electrodo se co-
la superficie cutánea(35) o por medio de estímulos necta a un amplificador con audiomonitores y un
térmicos controlados con el termotest, tal como se osciloscopio que permiten monitorización de la
verá más adelante. actividad neural. El registro de la actividad simpá-
La RSSC puede utilizarse en exploraciones tica cutánea y muscular, los mecanorreceptores
clínicas de la conducción en fibras amielínicas del Aβ de bajo umbral, y la actividad aferente de los
sistema nervioso autónomo(29). Sin embargo, debe nociceptores Aδ y C pueden aportar informaciones
tenerse en cuenta que la respuesta es mediada fisiopatológicas relevantes para el conocimiento del
por fibras simpáticas solamente en su segmento dolor neuropático. Sin embargo, los principales
eferente. Por lo tanto, las alteraciones de la RSSC inconvenientes de este método son la larga du-

Manual EMG.indb 407 9/7/07 12:07:50


408 J. Valls Solé, P. Schestatsky, M. Veciana de las Heras

ración de la prueba y la colaboración necesaria


por parte del paciente para la adquisición de datos
informativos.

Termotest

Este es un sistema destinado a la medición de la


sensibilidad a la temperatura y al dolor generados
por estimulación térmica. El sistema consta de un
equipo de control de la temperatura, de un termodo
a través del cual se aplica calor sobre la piel y de
un mando dotado de un pulsador a través del cual
el paciente señala el momento en el que ha per- Figura 4. Registro de la percepción y de la actividad electrodérmica
cibido la sensación, según la instrucción que haya galvánica ligadas con la aplicación de un estímulo termoalgésico de
pendiente lenta. El gráfico superior indica el cambio térmico. El segun-
recibido(37). El termodo está basado en el sistema do trazo es el registro de la actividad electrotérmica galvánica y el tercer
de Peltier, mediante el cual se puede calentar una trazo es el registro de la escala visual analógica electrónica. Obsérvese
superficie delgada de cerámica de alta conductivi- el aplanamiento de la curva de percepción sensorial, aproximadamente
dad (de unos 0,6 mm de espesor), mientras el resto entre 37 y 41 ºC, compatible con la activación de dos grupos distintos
de receptores (calor y dolor) activados consecutivamente a partir de la
de la pieza está refrigerada por agua. El termodo temperatura umbral para cada una de las sensaciones.
es de forma rectangular y puede tener dimensiones
variables, entre unos 6 y unos 15 cm2. El incremen-
to o disminución de temperatura en el termodo a de una pendiente lenta de subida de la temperatura
partir de la temperatura de la piel puede hacerse a proporciona la posibilidad de obtener información
una velocidad entre 0 y 4 ºC/s, y, habitualmente, sobre el umbral de la sensación térmica y de la sen-
existe un límite alto y bajo en la temperatura a al- sación dolorosa en una misma estimulación (Fig.
canzar (p. ej., 50 y 5 ºC). El pulsador se usa para 4). Todo ello se debe a la existencia, habitualmente,
que el paciente exprese su sensación. Al presionarlo, de una marcada separación entre la temperatura
se invierte la dirección del cambio térmico, de tal a la que decrece el reclutamiento de nuevos re-
manera que si la temperatura se incrementa, la acti- ceptores de calor, entre 37 y 39 ºC, y el umbral de
vación del pulsador hará que descienda, y viceversa. activación de los receptores de dolor por calor, a
Habitualmente se mide el umbral de percepción partir de 43 ºC(38). De este modo, se observa una
del calor, el del frío, o el del dolor por calor. El zona de incremento de la temperatura en la que el
umbral de percepción del dolor por frío es poco sujeto no describe ningún cambio en su sensación.
reproducible. El interés clínico de esta observación está todavía
Un sistema algo más sofisticado consiste en el por descubrir.
uso de una escala de valoración analógica (EVA) Cuando se ha producido una activación masiva
de la sensación. En este caso, el paciente tiene la de receptores de la sensibilidad térmica y algésica,
oportunidad de expresar diferencias en su sensación es posible que exista un período refractario en el
con respecto al tiempo que dura el estímulo. Este que los receptores no responden a un nuevo es-
tipo de registro es más adecuado para estímulos con tímulo de similar intensidad. Hemos examinado
largo tiempo de resolución (Fig. 4). El termotest esta posibilidad en una serie de sujetos volunta-
dispone de un sistema de control electrónico de los rios, en los que se han aplicado dos estímulos de
cambios térmicos, de tal modo que puede diseñarse igual característica separados por un intervalo de
el patrón de estimulación que se considere más tiempo variable entre 5 y 60 segundos. El sujeto
apropiado para el examen de la sensibilidad. El uso debía señalar su percepción del estímulo mediante

Manual EMG.indb 408 9/7/07 12:07:50


Dolor neuropático 409

Figura 6. Potenciales evocados al estímulo láser, aplicado en el dorso


de la mano de un sujeto voluntario sano. Superposición de dos trazos,
para mostrar la consistencia de los resultados. Cada trazo es la promediación
de 8 registros.

Figura 5. Doble estimulación termoalgésica con un período de re-


poso entre estímulos de 10 s. La distribución de los trazos es la misma a sentir dolor y el momento en el que el dolor es
que en la figura 4. Obsérvese el cambio de morfología del registro de la
insoportable.
percepción y la disminución de la actividad electrodérmica galvánica en
el segundo estímulo.
Láser

un sistema EVA y, al mismo tiempo, se registraba La producción de estímulos dolorosos median-


su AEG en la mano contralateral. El perfil de la te la emisión de un rayo láser sobre la piel fue
EVA mostró un retraso significativo en la percep- introducida en el campo de la neurofisiología en
ción de la temperatura en el segundo estímulo, en 1975(39), aunque las contribuciones más importan-
intervalos entre 5 y 40 segundos. Sin embargo, la tes de este método no llegaron hasta 20 años más
percepción del dolor fue sólo ligeramente modifi- tarde. Existen varios sistemas de producción de rayo
cada, indicando una relativa mayor resistencia de laser, siendo los que se utilizan más comúnmente
los receptores del dolor que los de la temperatura los de CO2 y los de argón. Nosotros utilizamos un
a la estimulación repetitiva. El registro de la AEG prototipo laser CO2 (AGM, Barcelona), que emite
mostró actividad sincronizada relacionada con la un rayo no disperso, de un diámetro de 2 mm2 a
percepción, reforzando, de esta manera, el resul- una distancia de 20 cm, con una potencia de hasta
tado de la EVA (Fig. 5). 15 W y por una duración variable entre 0 y 100 ms.
Cuando se emite a una potencia de 15 W y con una
Algómetro duración de 10 ms, la intensidad del estímulo es
de alrededor de 13 milijulios/mm2. Esto evoca una
Este es un aparato diseñado para medir la sensi- sensación de dolor agudo y de breve duración en el
bilidad al dolor provocado por la presión. Consiste punto en el que incide el rayo láser. La aplicación
en un dispositivo dotado de una barra de presión de un número reducido de estímulos en el dorso
terminada en un disco de unos 9 mm de diámetro de la mano permite ya recoger en Cz un potencial
forrado en teflón. Existen modelos que se sopor- evocado de muy lenta resolución, a una latencia
tan con la mano del explorador, para el examen de entre 200 y 250 ms (Fig. 6).
de zonas planas, como la región temporal(18), o Esta técnica permite examinar la conducción
dispositivos montados en forma de pistola, en los periférica y central de fibras nociceptivas, proba-
cuales la barra de presión aprisiona la última falan- blemente vehiculadas en el nervio periférico por
ge del dedo del paciente. El paciente sostiene un fibras Aδ y C, y en el sistema nervioso central por
mando provisto de un botón que, al ser pulsado, el tracto espinotalámico ventrolateral. El estudio
hace desaparecer la presión ejercida por la barra. de los potenciales evocados por rayo láser (PEL)
Al igual que en el termotest, el paciente puede ser constituye sin duda el avance tecnológico más im-
instruido a marcar el momento en el que empieza portante realizado en los últimos años en el estudio

Manual EMG.indb 409 9/7/07 12:07:51


410 J. Valls Solé, P. Schestatsky, M. Veciana de las Heras

de las vías del dolor. Los PEL son anormales en 4. Basbaum AI, Jessell TM. La percepción del dolor. In:
Kandel ER, Schwartz JH, Jessel TM, editors. Principios
pacientes con síndromes sensitivos hemicorpora-
de Neurociencia. 4nd ed. New York: McGraw-Hill; 2001.
les que afectan el haz espinotalámico, como en el p.472-491
síndrome de Wallenberg(40). 5. Verdugo RJ, Ochoa JL. Use and misuse of conventional
La estimulación con rayo láser no solo permite electrodiagnosis, quantitative sensory testing, thermogra-
la obtención de los PEL. En su trayecto hacia el phy, and nerve blocks in the evaluation of painful neuro-
pathic syndromes. Muscle Nerve 1993;16:1056-1062.
sistema nervioso central, los impulsos generados
6. Yarnitsky D. Quantitative sensory testing. Muscle Nerve
en las fibras del dolor dejan un rastro de excita- 1997;20:198-204
bilidad en determinadas estructuras de la médula 7. Katz S, Martin HF, Blackburn JG. The effects of interac-
espinal, del tronco cerebral y de otros centros sub- tion between large and small diameter fiber systems on
corticales, donde puede haber un cierto procesa- the somatosensory evoked potential. Electroenceph Clin
Neurophysiol 1978; 45:45-52.
miento del impulso aferente. La demostración de
8. Dowman R, Schell S. The pain related negative difference
tal posibilidad puede hacerse en algunos casos en potential: a direct measure of central pain pathway activity
que se pueden disociar respuestas que se generan or of interactions between the innocuous somatosensory
a nivel subcortical de aquellas que se generan a and pain pathways? Neurophysiologie Clinique 1999; 29:
nivel cortical. Este es el caso en el síndrome de 423-42.
9. Inui K, Tran TD, Hoshiyama M, Kakigi R. Preferential
Wallenberg(41). Es conocido que la estimulación
stimulation of A_ fibers by intra-epidermal needle elec-
por rayo láser provoca cambios a nivel del tronco trode in humans. Pain 2002; 96: 247-52.
cerebral, ya que, por un lado, provoca un reflejo 10. Melzack R, Wall PD. Pain mechanisms. A new theory.
de parpadeo(42) y, por otro lado, modifica el reflejo Science 1965; 150: 971-9.
de parpadeo producido por un estímulo trigeminal, 11. Ghoname EA, Craig WF, White PF, Ahmed HE, Hamza
MA, Henderson BN, et al. Percutaneous electrical nerve
denominado efecto de prepulso(43). Estudiando este
stimulation for low back pain: a randomized crossover
efecto en pacientes con síndrome de Wallenberg(41), study. JAMA 1999; 281: 818-23.
se ha podido observar que, aunque los PEL estén 12. Hoshiyama M, Kakigi R. After-effect of transcutaneous
ausentes, la estimulación con rayo láser del lado electrical nerve stimulation (TENS) on pain-related evo-
afecto provoca inhibición por prepulso del reflejo ked potentials and magnetic fields in normal subjects. Clin
Neurophysiol 2000; 111: 717-24.
del parpadeo, indicando que el efecto subcortical
13. Pujol J, Pascual-Leone A, Dolz C, Delgado E, Dolz JL,
permanece intacto en estos pacientes. Es posible Aldoma J. The effect of repetitive magnetic stimulation
que la localización exacta de la lesión en el tron- on localized musculoskeletal pain. Neuroreport 1998; 9:
co cerebral pueda explicar la disociación entre la 1745-8.
disfunción de tractos espinotalámicos y tractos que 14. Lefaucheur JP. Transcranial magnetic stimulation in the
management of pain. Suppl Clin Neurophysiol 2004; 57:
conectan con la formación reticular y otras estruc- 737-48.
turas subcorticales responsables del prepulso. 15. Khedr EM, Kotb H, Kamel NF, Ahmed MA, Sadek R,
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Dolor neuropático 411

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Manual EMG.indb 411 9/7/07 12:07:51


Manual EMG.indb 412 9/7/07 12:07:52
INTERPRETACIÓN DE LOS
ESTUDIOS ELECTROFISIOLÓGICOS

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Manual EMG.indb 414 9/7/07 12:07:52
Capítulo 31

POSIBLES ERRORES EN LA REALIZACIÓN E INTERPRETACIÓN


DE LOS ESTUDIOS ELECTROFISIOLÓGICOS
E. Gutiérrez-Rivas, A. Alonso-Ortiz, G. Gutiérrez-Gutiérrez

INTRODUCCIÓN adecuadamente para obtener datos fiables. Si el


enfermo no se relaja por completo, es obvio que
A pesar de que las técnicas de diagnóstico eléc- resultará difícil, si no imposible, realizar un estu-
trico de las enfermedades neuromusculares son dio correcto de la actividad muscular en reposo.
sencillas y se llevan a cabo en la mayoría de los Debe tenerse en cuenta que los pacientes pueden
hospitales, es frecuente que se produzcan errores tener dificultades para relajarse a causa de ansie-
en el estudio de los pacientes. Debe mantenerse dad, preocupación, miedo o dolor producidos por
activo el espíritu crítico de forma permanente, y su enfermedad o por la propia exploración. Los
cualquier resultado inesperado debe alertar sobre estudios en niños son un buen ejemplo de ello. Es
la posibilidad de un error. En este capítulo se ex- importante, en estos casos, tranquilizar al paciente
ponen algunos de los errores más frecuentes y, en y explicarle previamente en qué consiste la prueba
su caso, la forma de corregirlos. Clasificaremos los a la que se le va a someter.
errores en: Si se va a estudiar la velocidad de conducción
– Problemas relacionados con la colaboración del motora de un nervio, el primer estímulo puede
paciente. sorprender al paciente y reaccionar éste con un
– Problemas derivados de la instrumentación. movimiento brusco; se debe, previamente, advertir
– Problemas secundarios a la estimulación. al paciente de que notará una descarga eléctrica y
– Problemas debidos a errores en el registro. es conveniente que no se mueva.
– Problemas atribuibles a la medición. La posición del paciente, sentado o tumbado
– Problemas originados por variaciones anató- en la camilla, también es de interés, ya que deter-
micas. minadas posturas facilitan la relajación de ciertos
– Problemas producidos por alteraciones fisioló- músculos. Así, por ejemplo, resulta más sencillo
gicas. relajar el músculo cuádriceps con el paciente
– Problemas causados por una errónea interpre- sentado en la camilla y las piernas colgando, que
tación de los datos. manteniéndole tumbado.
A veces es el paciente quien no desea colaborar,
como ocurre con los simuladores o con algunos
PROBLEMAS RELACIONADOS CON LA COLABORACIÓN neuróticos. En estos casos, es frecuente que el pa-
DEL PACIENTE ciente no sólo no haga lo que se le pide, sino que
realice otras acciones (p. ej., moverse exagerada-
En especial, en un estudio electromiográfico mente) que entorpecen el estudio o modifican la
con aguja es preciso que el paciente colabore posición de los electrodos. La paciencia del explo-

Manual EMG.indb 415 9/7/07 12:07:52


416 E. Gutiérrez-Rivas, A. Alonso-Ortiz, G. Gutiérrez-Gutiérrez

rador resulta esencial en el estudio de este tipo de Hay artefactos debidos a que la sala de elec-
pacientes. tromiografía no está correctamente aislada. Es
En ocasiones, lo que ocurre es que el pacien- recomendable ubicar el equipo de EMG en una
te no realiza el esfuerzo que se le demanda, por habitación faradizada, pero esto no siempre es
cualquiera de los motivos anteriormente expuestos. posible. Hay que añadir que los nuevos equipos
Los patrones electromiográficos al máximo esfuer- han logrado disminuir parcialmente la existencia
zo estarán empobrecidos o, incluso, puede estar de estos artefactos. Con frecuencia se registran
ausente cualquier tipo de actividad voluntaria, sin artefactos de otros muchos aparatos eléctricos y
que exista lesión alguna que lo justifique. En estos electrónicos que funcionan en las cercanías, muy
casos, la discordancia entre la presencia de activi- abundantes en los hospitales (el caso de los estudios
dad muscular clínica y la ausencia de actividad realizados en unidades de cuidados intensivos es
eléctrica, así como la respuesta motora normal característico), o de microondas o ultrasonidos en
al estimular el nervio (potencial evocado motor), los electromiógrafos que se instalan cerca de los
proporcionan datos fehacientes de la falta de cola- servicios de fisioterapia.
boración del paciente. Los teléfonos móviles pueden producir un ar-
tefacto, especialmente intenso durante la fase de
marcado del número.
PROBLEMAS DERIVADOS DE LA INSTRUMENTACIÓN A menudo los cables de conexión de los elec-
trodos de registro no están suficientemente aislados
Pueden ser producidos por muy diversa razones, y pueden recoger campos eléctricos originados en
a causa del deterioro del equipo de electromiografía las proximidades.
u otros instrumentos utilizados. Como estas alte- En algunos modelos de electromiógrafos, el sis-
raciones pueden presentarse de forma paulatina, tema de retraso (delay) usado para el aislamiento de
pueden pasar desapercibidas hasta que el problema potenciales de unidad motora debe desconectarse
ya está muy avanzado. para estudiar velocidades de conducción. De lo
Problemas notables son los causados por una contrario, el estímulo aplicado no coincide con
mala calibración del equipo(1). Una defectuosa el momento cero del registro, y las latencias que
calibración de la amplitud produce errores en la se midan estarán anormalmente prolongadas. En
medición de la amplitud de los potenciales, tanto estos casos puede observarse el artefacto del estí-
en electromiografía como en los estudios de con- mulo, que se encuentra desplazado a la derecha,
ducción nerviosa. De igual forma, una deficiente en vez de coincidir con el comienzo del registro.
calibración del tiempo de barrido nos inducirá a Los aparatos modernos no permiten cometer este
medir erróneamente la latencia y la duración de error.
los potenciales. Es recomendable que el equipo de El empleo incorrecto de los filtros en algunos
EMG sea revisado periódicamente por un técnico electromiógrafos puede también modificar la am-
especializado. Esto es especialmente importante plitud, la latencia y la morfología de los potenciales
para los sistemas de promediación que se utilizan evocados, en especial, los sensitivos. Por lo gene-
en la obtención de potenciales sensitivos o poten- ral, los equipos modernos vienen provistos de un
ciales evocados somato-sensoriales. sistema automático que programa los filtros para
Otra posible fuente de error está constituida impedir este tipo de error.
por la presencia de artefactos. Existen artefactos de El artefacto de la corriente alterna, de 50 Hz, se
muy distinta índole, desde las malas conexiones de introduce frecuentemente en los equipos. Esto es
los enchufes de cada electrodo (de estimulación, especialmente intenso si la sala está iluminada por
de registro o de la masa), hasta una inadecuada lámparas fluorescentes. Estas lámparas, además,
toma de tierra. cuando parpadean, generan un ruido eléctrico no-

Manual EMG.indb 416 9/7/07 12:07:52


Posibles errores en la realización e interpretación de los estudios electrofisiológicos 417

tablemente intenso, que puede modificar el aspecto En los estudios de velocidad de conducción sen-
de los potenciales que se registran en ese momento, sitiva antidrómica, cuando se estimula un nervio
añadiéndole picos y dándole una falsa apariencia mixto, además de excitar las fibras sensitivas objeto
de polifasia. de la exploración, se estimulan fibras motoras que,
Los electrodos sucios, deteriorados, insuficien- si el estímulo es suficientemente intenso, provocan
temente húmedos, o sin crema conductora, falsean una contracción muscular y un movimiento, que se
también los resultados. recogen simultáneamente con el potencial sensiti-
En los pacientes portadores de marcapasos se vo antidrómico y que dificultan su identificación.
recoge el artefacto de disparo, que se reconoce fá- En estas circunstancias, es preciso procurar que
cilmente por su frecuencia constante (alrededor los estímulos sean suficientemente intensos para
de 60 latidos/minuto). evocar un potencial sensitivo, y no tanto como para
generar un potencial motor. Para identificar bien
el potencial sensitivo y distinguirlo del potencial
PROBLEMAS SECUNDARIOS A LA ESTIMULACIÓN motor es conveniente recordar que aquél suele
preceder al potencial motor.
Ya se ha mencionado anteriormente que los La incorrecta colocación de los electrodos de
electrodos de estimulación sucios, deteriorados estimulación cambiando el cátodo por el ánodo,
o mal humedecidos pueden provocar estímu- produce una latencia 0,5 ms más larga; a veces,
los de menor intensidad de lo que se cree. Un puede incluso llegarse a bloquear la propagación
estímulo que no sea supramáximo no estimula del impulso en el nervio(1,2). Debe vigilarse la co-
todas las fibras nerviosas y probablemente no es- rrecta posición de cátodo y ánodo en los aparatos
timula las fibras de conducción más rápida. En que permiten cambiar la polaridad del estimula-
estas condiciones, el potencial evocado tendrá dor. En caso de duda, se debe estimular en las dos
menor amplitud y mayor latencia que la real. posiciones posibles, y la que produzca la latencia
Es preciso, por tanto, acostumbrarse a utilizar menor será la posición adecuada.
siempre estímulos supramáximos, del 10 al 25% Un nervio no se excita convenientemente si los
más intensos que los que provocan la respuesta electrodos de estímulo no están suficientemente
de mayor amplitud. cerca(3). Esto es especialmente relevante en estudios
La propia estimulación eléctrica provoca un de conducción sensitiva antidrómica de determina-
artefacto que, cuando se trabaja con grandes am- dos nervios, cuya localización es algo dificultosa,
plificaciones, como es el caso de las velocidades como el femorocutáneo, el sural o el safeno. Es
sensitivas, puede dificultar el reconocimiento del conveniente, si no se obtiene un potencial adecua-
comienzo del potencial. Esto es especialmente do, cambiar la posición del electrodo de estimu-
intenso si la masa no está colocada entre los elec- lación hasta obtener un potencial satisfactorio. A
trodos de estimulación y de registro. También se menudo, el paciente puede indicar si nota bien la
provoca un artefacto de gran tamaño si el electro- descarga eléctrica y si ésta se irradia por el trayecto
do de estimulación está muy próximo a la masa. del nervio.
Así, es importante recordar que la masa debe co- La existencia de humedad o gel conductor entre
locarse entre los electrodos de estimulación y los los dos polos del estimulador provoca que, parte del
de registro y suficientemente separada del punto estímulo no llegue al nervio y, sin saberlo, se estén
de estimulación. Puede también minimizarse este realizando estímulos submáximos. Para evitarlo, se
artefacto limpiando bien la piel entre el electrodo deberá limpiar y secar correctamente la superficie
de estimulación y la masa, para evitar un exceso entre los dos polos del estimulador.
de gel conductor o de agua salada, que facilitaría También pueden ser estímulos submáximos
la conducción por la superficie de la piel. los que se emplean en pacientes obesos, con ede-

Manual EMG.indb 417 9/7/07 12:07:53


418 E. Gutiérrez-Rivas, A. Alonso-Ortiz, G. Gutiérrez-Gutiérrez

mas, con sudor o que usan cremas en la piel. En El uso de electrodos de aguja en el estudio de
algunos casos basta con limpiar enérgicamente la velocidad de conducción motora proporciona
la piel con alcohol o acetona, pero en otros es una información más exacta de lo que ocurre en las
preciso recurrir a la estimulación con electrodos proximidades de la punta de la aguja, y el potencial
de aguja(1,2). evocado suele tener un comienzo más abrupto, lo
Otra posibilidad de error es la utilización de que facilita la medición de la latencia; pero esta
estímulos excesivamente intensos, que puedan técnica no siempre traduce lo que ocurre en todo
excitar otros troncos nerviosos próximos, que iner- el músculo; pequeñas variaciones de la posición de
van músculos vecinos al que se está evaluando y la aguja pueden provocar cambios en los valores
modificar la respuesta registrada. Esto ocurre fre- de la latencia de hasta 0,35 ms(1), ya que se puede
cuentemente al estimular los nervios mediano o estar midiendo no sólo la conducción del impulso
cubital, tanto en la muñeca como en el codo. A a través del nervio, sino también la velocidad de
veces resulta inevitable, como cuando se estimula propagación del impulso a través del músculo. Los
en axila o hueco supraclavicular, puntos donde electrodos cutáneos, por el contrario, informan más
se excitan siempre múltiples nervios a la vez(1,2,4). globalmente de la respuesta muscular, puesto que
Si se estimulan otros nervios, además del que se recogen la función de un mayor número de fibras
pretende estudiar, se puede producir la denomina- musculares y, por tanto, nerviosas.
da conducción en volumen, a través de músculos En la velocidad de conducción sensitiva el
alejados, lo que repercute en una medición falsa electrodo de referencia puede estar mal colocado
de la latencia(1,2). Para distinguir el artefacto de la y recoger alguna respuesta motora de músculos
conducción en volumen debe recordarse que este vecinos, obteniéndose, así, un potencial sensitivo
artefacto es superponible a sí mismo, sea cual sea anormal(2). Debe procurarse que el electrodo de
el punto de estímulo, mientras que las respuestas referencia esté situado a la distancia adecuada y, a
motoras reales son más dispersas cuanto más proxi- ser posible, en un punto eléctricamente inerte.
malmente se estimule, a causa de la diferencia de En estudios de velocidad de conducción sensi-
velocidad entre las fibras más rápidas y las más tiva antidrómica la distancia entre los dos electro-
lentas. Además, la conducción en volumen pro- dos de registro debe ser adecuadamente controlada
duce una deflexión inicial positiva en el potencial (40 mm); si los electrodos están más separados,
evocado, lo que ayuda a identificarla. aumenta la amplitud de potencial evocado; si se
acercan, disminuye. Sin embargo, la amplitud del
potencial sensitivo disminuye si la distancia entre
PROBLEMAS DEBIDOS A ERRORES EN EL REGISTRO los dos electrodos es muy grande.
La amplificación del potencial evocado motor
Debe prestarse atención a la posición de los también puede inducir a error en la medición de
electrodos de registro. Para una velocidad de con- las latencias(1,2). Cuanto mayor sea la amplifica-
ducción motora el lugar idóneo del electrodo ción, más brusco será el comienzo del potencial y
activo es el punto motor(1,2), es decir, la zona del la latencia será menor y más fácil de medir. Se ha
músculo que es abordada por el nervio. La coloca- calculado que los valores de una latencia motora
ción del electrodo alejada de este punto produce concreta pueden variar hasta 0,4 ms modificando
una respuesta que tendrá una positividad inicial, la amplificación de la respuesta. En general, no
que se corrige modificando el emplazamiento del debe modificarse la amplificación para medir las
electrodo. Puede también observarse un comienzo latencias proximal y distal.
positivo en el potencial evocado motor a causa de Si se utilizan grandes amplificaciones en una
la conducción en volumen, como se ha señalado velocidad de conducción sensitiva antidrómica, al
previamente. estimular un nervio mixto se puede obtener una

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Posibles errores en la realización e interpretación de los estudios electrofisiológicos 419

respuesta motora que se suma al potencial sensi- Así, si se estudia el nervio cubital, no es correcto
tivo, y, por tanto, se tratará de un potencial con realizar las mediciones con el codo muy flexio-
parámetros falseados(2). nado.
Si la piel del paciente está sudorosa se puede En general, se recomienda utilizar una cinta
registrar un potencial anormalmente amplificado, métrica “de costurera” y hacer verificaciones pe-
por el contenido iónico del sudor. Por el contrario, riódicas de su buen estado, ya que, por el material
el potencial puede ser anormalmente pequeño si la con el que están fabricadas, estas cintas métricas
piel está sucia a causa del aumento de la impedan- pierden elasticidad y se estiran, falseando las me-
cia(1,2). Es necesario ser cuidadoso con la limpieza diciones.
y grado de humedad de la piel. Al medir la latencia en un potencial evocado
A pesar de extremar los cuidados, se ha estima- motor debe hacerse en su comienzo, y no en el
do que, con las técnicas más correctas se puede pico, ya que la natural dispersión del potencial
producir una variación inevitable de 0,5 ms en la evocado, cuando se estimula en puntos más proxi-
medición de una latencia concreta. En este sen- males, podría ocasionar un pequeño error en el
tido, el estudio de Gassel(5) es aleccionador: cal- cálculo de la velocidad de conducción motora.
culando velocidades de conducción motoras en En pacientes obesos o con edemas, el punto
individuos sanos, en días diferentes, utilizando las de la piel donde se aplica el estímulo puede estar
mismas técnicas y el mismo explorador, se obtienen alejado del punto del nervio que recibe el estímulo
variaciones de 3,5 m/s de media y, en algunos casos, y, por tanto, la medida de la distancia en la piel
de hasta 10 m/s. resulta engañosa.
Como norma general, un error de medición de
distancias no debe nunca superar los 0,5 cm.
PROBLEMAS ATRIBUIBLES A LA MEDICIÓN

Aunque suele prestarse gran atención a este as- PROBLEMAS ORIGINADOS POR VARIACIONES
pecto, se pueden cometer errores en la medición ANATÓMICAS
de las distancias en los estudios de velocidades de
conducción. Habitualmente se miden las distancias Quienes se dedican a los estudios electromio-
por la superficie de la piel, y se asume que el nervio gráficos utilizan frecuentemente esquemas anató-
sigue un trayecto rectilíneo paralelo a la piel, lo micos de nervios y músculos para el diagnóstico
que no siempre es cierto. Hay nervios que tienen de todo tipo de lesiones. Es preciso, sin embargo,
un curso ondulante y, por tanto, el error resulta recordar que estos esquemas anatómicos no se
inevitable. Algunos expertos aconsejan utilizar un corresponden con la realidad en muchos casos,
compás obstétrico, pero parece que no hay una sino que existen variantes anatómicas que, en el
gran diferencia entre esta medida y la realizada con caso de los nervios periféricos, pueden inducir a
una cinta métrica, a menos que el registro se realice conclusiones absurdas, si no se conocen. Las más
con aguja y ésta esté situada muy profundamente(1). frecuentes se exponen a continuación.
Si se usan agujas, éstas no están localizadas en la
superficie de la piel, donde medimos, sino en el Miembro inferior
espesor del músculo o del nervio, lo que proporcio-
na otra fuente de error. Sin embargo, estudios en Nervio peroneo accesorio
cadáveres han demostrado que existe una aceptable En el miembro inferior hay que tener en cuenta
correlación con las distancias in vivo(1). una variante anatómica que es el nervio peroneo
Es importante medir las distancias con la extre- accesorio, que puede existir hasta en el 20-25% de
midad extendida, para evitar sesgos por la flexión. los sujetos normales. Este nervio (Fig. 1) es una

Manual EMG.indb 419 9/7/07 12:07:53


420 E. Gutiérrez-Rivas, A. Alonso-Ortiz, G. Gutiérrez-Gutiérrez

peroneo accesorio no está lesionado. En caso de


duda, puede recurrirse a la estimulación tras el
maléolo externo y, si se evoca un potencial motor
en el músculo pedio, se confirma la existencia de
esta variante.

Miembro superior

En los miembros superiores existen otras va-


Nervio peroneo
superficial riantes anatómicas dignas de tenerse en considera-
Nervio peroneo ción. Las más frecuentes son las que se describen
profundo
a continuación.

Anastomosis de Martin-Gruber
Se trata de una variante en la cual, a nivel del
tercio medio del antebrazo emerge una rama del
Nervio peroneo nervio mediano (o del nervio interóseo anterior)
accesorio
que se incorpora al nervio cubital para inervar
músculos intrínsecos de la mano, habitualmente
inervados por el cubital (separador corto de meñi-
que, aductor del pulgar, primer interóseo dorsal y
M. pedio porción profunda del flexor corto del pulgar) (Fig.
2), aunque hay diversas variantes. Esta anomalía
Figura 1. Nervio peroneo accesorio.
existe en el 15-30% de la población, suele ser bi-
lateral y a menudo familiar. La anastomosis sólo
lleva fibras motoras. En estos casos, la estimulación
rama del nervio peroneo superficial que puede iner- eléctrica del nervio cubital en el codo evoca en
var total o parcialmente el músculo pedio(6-8). Este músculos cubitales un potencial motor de mucha
músculo suele estar inervado por la rama terminal menor amplitud que cuando se estimula el nervio
del nervio peroneo profundo. Si la inervación del cubital en la muñeca. Además, la estimulación del
músculo pedio por el nervio peroneo accesorio es nervio mediano en el codo evocará una respuesta
completa, al estimular el nervio peroneo profun- motora en músculos cubitales de la mano que no
do en la garganta del pie no se obtiene potencial se obtiene al estimular el nervio mediano en la
motor alguno en el músculo pedio, mientras que muñeca. Esta variante debe tenerse en cuenta en
el potencial motor es normal al estimular en la casos de lesiones proximales del nervio cubital,
cabeza del peroné. Si la inervación del músculo en las que existe una actividad sorprendentemente
pedio a través del nervio peroneo accesorio es sólo buena en músculos cubitales de la mano. En pa-
parcial, al estimular el nervio peroneo profundo en cientes con lesión proximal del nervio mediano se
la garganta del pie se obtiene un potencial motor encontrará denervación y debilidad en músculos
de menor amplitud que cuando se estimula en la cubitales de la mano. Para confirmar esta anomalía
cabeza del peroné. es preciso, a veces, recurrir al registro simultáneo
Esta variante anatómica explica que, en ocasio- de músculos medianos y cubitales de la mano, es-
nes, lesiones completas del nervio peroneo profun- timular los nervios mediano y cubital en muñeca
do se acompañen de actividad eléctrica (y clínica) y codo y analizar luego las respuestas obtenidas en
voluntaria en el músculo pedio, ya que el nervio cada músculo.

Manual EMG.indb 420 9/7/07 12:07:53


Posibles errores en la realización e interpretación de los estudios electrofisiológicos 421

G2
G1

Nervio mediano

Nervio cubital

Entrecruzamiento

Figura 2. Anastomosis de Martin-Gruber.

Anastomosis cubital-mediano Mano mediana


Es menos frecuente que la anterior. Del nervio Es mucho más rara que la mano cubital. En
cubital salen fibras nerviosas que se incorporan al esta variante, todos los músculos intrínsecos de la
tronco del nervio mediano, generalmente a nivel mano están inervados por el nervio mediano(10).
del tercio medio del antebrazo. Las consecuencias
clínicas y eléctricas de esta variante anatómica son Otras variantes anatómicas
inversas a las que se han descrito en la anastomosis Se acepta que la inervación de los músculos
de Martin-Gruber(2,8-10). de la mano presenta variaciones con respecto a
los esquemas anatómicos clásicos en un 20-30%
Mano cubital de la población normal. Así, en un antiguo estudio
Es la mano que está totalmente inervada por de disección de 30 cadáveres se encontró que el
fibras nerviosas procedentes del nervio cubital. El músculo flexor corto del pulgar estaba totalmente
nervio mediano no desempeña entonces ningún inervado por el nervio mediano en cinco casos,
papel en la inervación motora de los músculos in- por el nervio cubital en otros cinco, en 19 casos lo
trínsecos de la mano. Una lesión del nervio media- estaba por ambos nervios y en un caso se trataba
no no ocasiona ningún trastorno motor en la mano, de una mano cubital(11).
mientras que una lesión del cubital produce un tras-
torno motor extremadamente grave. Se comprueba
la existencia de esta variante anatómica mediante PROBLEMAS PRODUCIDOS POR ALTERACIONES
el registro simultáneo de músculos inervados habi- FISIOLÓGICAS
tualmente por el nervio mediano (p. ej., separador
corto del pulgar) y por el nervio cubital (separador Los factores fisiológicos que más modifican
corto de meñique). Se estimulan sucesivamente los determinados parámetros de los potenciales que
nervios mediano y cubital en la muñeca y en el constituyen el estudio electromiográfico son la
codo y se analizan los potenciales evocados en los edad, la temperatura y la estatura.
dos músculos. No se obtienen respuestas en ningún Es bien conocido que a lo largo de los años, las
músculo al estimular el mediano, mientras que se- velocidades de conducción motora y sensitiva van
rán normales los potenciales en ambos músculos disminuyendo paulatinamente. Sin embargo, no es
cuando se estimula el nervio cubital. tan frecuente saber que los recién nacidos tienen

Manual EMG.indb 421 9/7/07 12:07:54


422 E. Gutiérrez-Rivas, A. Alonso-Ortiz, G. Gutiérrez-Gutiérrez

una mielina periférica inmadura, y que valores de las fi bras nerviosas van adelgazándose a medi-
velocidad de conducción del 50% de las cifras de da que se alejan del cuerpo neuronal y, cuanto
un adulto deben considerarse normales. Estas bajas más fi nas sean, más lentamente conducen los
velocidades van adquiriendo progresivamente unos impulsos nerviosos fisiológicos o inducidos por la
valores mayores a lo largo de los primeros años estimulación eléctrica. Por este motivo, personas
de la vida. Así, a la edad de un año, los valores longilíneas, con las extremidades largas, tienen
normales se aproximan al 75% de las cifras de los valores de conducción nerviosa inferiores a los
adultos y llegan a alcanzar valores de adultos hacia de talla baja. Esta variabilidad debe tenerse en
los 4-5 años de edad. A partir de los 50-60 años, las cuenta en pacientes con tallas extremas y que
velocidades de conducción disminuyen entre 0,5 presentan mínimas alteraciones en los parámetros
y 4 m/s por década. de velocidades de conducción.
Algo parecido ocurre con los valores de du-
ración y amplitud de los potenciales de unidad
motora. A partir de los 20 años, estas cifras van PROBLEMAS CAUSADOS POR UNA ERRÓNEA
aumentando progresivamente. Existen ya tablas de INTERPRETACIÓN DE LOS DATOS
valores normales para cada músculo, ajustadas por
edades o por décadas. Es posible cometer errores de interpretación
La temperatura es otro de los factores que influ- de los hallazgos eléctricos en determinados pa-
ye en las velocidades de conducción. En estudios cientes. Así, por ejemplo, encontrar actividad de
realizados en invierno, cuando el paciente tiene reposo, como fibrilaciones suele sugerir de forma
los pies y las manos frías, o en verano, cuando el inmediata un proceso denervativo reciente; pero
aire acondicionado excesivamente intenso llega no siempre es así: aunque las fibrilaciones son
a enfriar las extremidades, se pueden encontrar prominentes en las lesiones axonales, nunca debe
sujetos normales con valores anormales de las ve- olvidarse que no son sinónimo de denervación,
locidades de conducción. Se estima que por cada sino que pueden también encontrarse en algu-
grado centígrado que disminuye la temperatura de nas miopatías. El caso más frecuente es el de
la extremidad, por debajo de 33 ºC, la velocidad las miopatías inflamatorias, en las que el patrón
motora o sensitiva disminuye entre 1,5 y 2,5 m/s característico de pérdida de unidades motoras
y las latencias aumentan 0,2 ms(12). Los potencia- se acompaña, en un elevado número de casos,
les sensitivos aumentan también su duración con de fibrilaciones y descargas repetitivas comple-
temperaturas bajas. Los potenciales de unidad mo- jas; otros ejemplos característicos pueden ser
tora se hacen más largos y más polifásicos a bajas la enfermedad de Duchenne, con ocasionales
temperaturas. fi brilaciones en casos avanzados, o la distrofi a
Por ello, debe medirse la temperatura antes y facio-escápulo-humeral, en la que, además de
después de llevar a cabo estudios de conducción fibrilaciones, puede, en algunos casos, hallarse
nerviosa o electromiografía y calentar las extremi- un patrón neurógeno.
dades (una lámpara cercana puede ser suficiente) Un error nada raro es confundir los potenciales
hasta alcanzar valores entre 33 y 34 ºC. de placa motora con fibrilaciones. Su morfología
La altura del paciente puede tener impor- bifásica, su baja amplitud, su patrón rítmico y el
tancia en determinados casos. Es bien conocido sonido que producen son a veces similares; sin em-
que las velocidades de conducción son mayo- bargo, las fibrilaciones tienen una deflexión inicial
res en trayectos proximales que en los distales; positiva, al revés que los potenciales de placa y, ade-
igualmente, que las velocidades de conducción más, la aguja situada en la proximidad de la unión
son más altas en los miembros superiores que neuromuscular (cuando se detectan potenciales
en los inferiores. Estos hechos se basan en que de placa), suele resultar dolorosa. La atención del

Manual EMG.indb 422 9/7/07 12:07:54


Posibles errores en la realización e interpretación de los estudios electrofisiológicos 423

explorador permite diferenciar fácilmente estos po- un estudio dinámico que debe llevarse a cabo de
tenciales, lo que exige vigilancia y esmero. acuerdo con los datos clínicos del paciente. A me-
Puede darse el caso de cometer errores por un nudo, durante el estudio eléctrico de un paciente
estudio incompleto. Por ejemplo, si se estudia el concreto, pueden obtenerse hallazgos que obligan
nervio mediano y se comprueba una lesión distal, a modificar sobre la marcha las hipótesis previas y,
podría concluirse que se trata de un síndrome del por tanto, cambiar la pauta de actuación prevista.
túnel del carpo. Sin embargo, si no se ha estudia- Por este motivo, la exploración eléctrica es mucho
do ningún otro nervio, puede pasarse por alto la más útil para el diagnóstico de una enfermedad
posibilidad de una polineuropatía distal. Así, un neuromuscular cuando es realizado por quien co-
estudio de una sospecha de síndrome del túnel noce bien las técnicas electrodiagnósticas y, ade-
del carpo exige, además de comprobar la lesión más, está familiarizado con los datos clínicos del
del nervio mediano, descartar una polineuropatía paciente.
difusa, estudiando, al menos, otro nervio (el cubi- El diagnóstico de una enfermedad neuromus-
tal, por lo general). cular requiere, por tanto, recopilar datos de la
Aunque la amplitud de un potencial evocado, historia clínica, de la exploración neurológica, de
tanto motor como sensitivo, es el parámetro más pruebas complementarias y de los hallazgos del
importante para el diagnóstico de una neuropatía estudio neurofisiológico. Todos estos datos deben
axonal, no siempre un potencial de baja amplitud o sostener el juicio diagnóstico final, como se expone
ausente significa una lesión de los axones; si existe en el capítulo siguiente de este Manual. Todos los
un bloqueo parcial o total de la conducción en un hallazgos, ya sean positivos o negativos, deberían
nervio, por desmielinización, se obtendrán poten- encajar correctamente, como lo hacen las piezas
ciales evocados de baja amplitud o pueden, incluso, de un rompecabezas. Si queda alguna pieza suel-
estar ausentes. Si el estudio de otros nervios revela ta o algún hueco sin rellenar, se debe intentar su
una neuropatía desmielinizante (p. ej., con un po- esclarecimiento; si no se consigue, se debe hacer
tencial evocado disperso), no deberá interpretarse constar en el informe.
la pérdida de amplitud como degeneración axonal, A veces, resulta difícil establecer correlaciones
sino como bloqueo de conducción. También pue- entre los datos clínicos y los hallazgos eléctricos;
de obtenerse un potencial motor evocado de baja en estos casos, debe cuestionarse el significado
amplitud en casos con una atrofia importante del de los estudios eléctricos. Cualquier discrepancia
músculo, sin pérdida de axones. debe alertar a un buen especialista e instarle a
El aumento de la latencia de la onda F no siem- aclarar los hechos. En estas circunstancias debe
pre indica una lesión proximal. No hay que olvidar siempre pensarse en la posibilidad de un error téc-
que la latencia de la respuesta F es el resultado de nico. Para disipar las dudas, lo más aconsejable
la conducción desde el punto de estímulo hasta la es revaluar los datos clínicos y electrofisiológicos
médula y desde allí hasta el músculo. Si la latencia y, si es preciso, volver a explorar al paciente. A
motora distal está notablemente prolongada, tam- veces, se debe recomenzar el estudio desde el prin-
bién lo estará la latencia de la onda F, sin necesidad cipio. Por último, es importante recordar que las
de una lesión proximal. alteraciones eléctricas de escasa cuantía, que no
Los estudios electromiográficos y electroneuro- se correlacionen con los datos clínicos no deben
gráficos son una prolongación instrumental de la sobrevalorarse(12).
exploración neurológica, especialmente relevante
en las enfermedades neuromusculares y no deben
considerarse como una prueba complementaria BIBLIOGRAFÍA
adicional. Estas técnicas sirven para confirmar o 1. Goodgold J, Eberstein A. Electrodiagnosis of neuromus-
desechar una hipótesis diagnóstica. Se trata de cular diseases. Baltimore: Williams & Wilkins; 1972.

Manual EMG.indb 423 9/7/07 12:07:54


424 E. Gutiérrez-Rivas, A. Alonso-Ortiz, G. Gutiérrez-Gutiérrez

2. Kimura J. Facts, fallacies and fancies of nerve stimulation 8. Stewart JD. Focal peripheral neuropathies. New York:
techniques. En: Kimura J, ed. Electrodiagnosis in diseases Elsevier; 1987.
of muscle and nerve. Principles and practice. Philadelphia: 9. Kaplan EB, Spinner M. Normal and annomalous innerva-
FA Davis Co; 1983. p. 143-68. tion patterns in the upper extremity. En: Omer GE, Spin-
3. Liveson JA, Ma DM. Laboratory reference for clinical ner M, eds. Management of peripheral nerve problems.
neurophysiology. Philadelphia: FA Davis Co; 1992. Philadelphia: WB Saunders; 1980. p. 75-99.
4. Daube JR. Nerve conduction studies. En: Aminoff MJ, ed. 10. Kimura J. Median nerve. En: Brown WF, Bolton CF, eds.
Electrodiagnosis in clinical neurology. 4ª ed. New York: Clinical electromyography. 2ª ed. Boston: Butterworth-
Churchill Livingstone; 1999. p. 253-89. Heinemann; 1993. p. 227-48.
5. Gassel MM. Sources of error in motor nerve conduction 11. Brooks HSJ. Variations in nerve supply of the flexor
studies. Neurology 1964; 14: 825-35. brevis pollicis. Anat Physiol 1886; 20: 227-48 (Citado
6. Prutkin L. Normal and annomalous innervation patterns por Goodgold J, Eberstein A. Electrodiagnosis of neu-
in the lower extremity. En: Omer GE, Spinner M, eds. romuscular diseases. Baltimore: Williams & Wilkins;
Management of peripheral nerve problems. Philadelphia: 1972).
WB Saunders; 1980. p. 100-15. 12. Preston DC, Shapiro BE. Electromyography and neu-
7. Sunderland S. Nervios periféricos y sus lesiones. Barcelo- romuscular disorders. Boston: Butterworth-Heinemann;
na: Salvat; 1985. 1998.

Manual EMG.indb 424 9/7/07 12:07:55


Capítulo 32

ELABORACIÓN DEL INFORME ELECTROMIOGRÁFICO


J. Pardo Fernández, A.I. Martín Vigo, M. Torres Colomer

INTRODUCCIÓN etc.) se realizarán según existan indicaciones es-


pecíficas. A su vez, el estudio electromiográfico
El informe electromiográfico representa el con electrodo de aguja debe seguir diferentes
procedimiento de comunicación entre el elec- pasos, como se detalla en otros capítulos. Bas-
tromiografista y el médico que solicita la explo- te recordar aquí que comprenderá la valoración
ración. Supone un registro permanente de la va- del músculo en reposo (actividad de inserción,
loración clínico-electromiográfica y tiene obvias actividad muscular espontánea), tras activación
implicaciones médico-legales. Además, sirve de voluntaria leve (análisis de la morfología de los
comparación para futuras exploraciones y tiene un potenciales de unidad motora), moderada y máxi-
papel esencial en el manejo clínico-terapéutico ma (determinación del patrón de reclutamiento
del paciente. y de la activación voluntaria). Según el caso, se
No existe un formato único de informe elec- puede optar por otras técnicas, como el análisis
tromiográfico, y éste puede realizarse de diversas automatizado del patrón interferencial (análisis
formas. Lo importante es que sea un fiel registro turns-amplitud), o el estudio electromiográfico
de los datos obtenidos en la exploración electro- de fibra aislada. Lógicamente, el informe debe
diagnóstica, y que permita realizar una correla- reflejar todos los apartados de la exploración rea-
ción entre los mismos y la clínica del paciente lizada y seguir una estructuración de las diversas
con el fin de llegar a un diagnóstico(1). partes de la misma.
En la elaboración del informe hay que tener Antes de iniciar el estudio electromiográfico,
presente que la exploración electromiográfica es es imprescindible explicar con detalle el procedi-
un complemento de la exploración neurológica miento al paciente y respetar su derecho a concluir
y, por lo tanto, constituye una auténtica consulta la exploración en cualquier momento, siendo re-
médica. La historia clínica (anamnesis y explora- comendable la obtención de un consentimiento
ción neurológica) guía y determina los diferentes informado del mismo. La intolerancia del paciente
pasos de la exploración electromiográfica. a la prueba o la existencia de posibles contrain-
El estudio de las velocidades de conducción dicaciones para su realización, también se deben
nerviosa (motora y sensitiva), realizado con elec- especificar en el informe(2).
trodos de superficie, suele preceder al de electro- Describiremos a continuación los diferentes
miografía con electrodos de aguja en los casos en componentes que deberían figurar en un informe
los que es necesario. Otros estudios de conduc- electromiográfico: datos de filiación, motivo de
ción (respuestas tardías, estimulación repetitiva, consulta, anamnesis, exploración física, neurogra-

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426 J. Pardo Fernández, A.I. Martín Vigo, M. Torres Colomer

fía, electromiografía, hallazgos electrodiagnósticos, fiere el paciente y se preguntan los antecedentes


comentario o impresión diagnóstica y recomen- personales y familiares relevantes o relacionados
daciones. con el motivo de consulta. Es esencial conocer la
fecha de inicio, duración y forma de progresión de
los síntomas, su relación con traumatismo u otros
COMPONENTES DEL INFORME ELECTROMIOGRÁFICO desencadenantes, etc.
La mayoría de las veces, la anamnesis podrá
Datos de filiación expresarse en pocas líneas, en forma de una ma-
tización dirigida del motivo de consulta (p. ej.,
Se pueden incluir los siguientes: nombre y paciente que acude por lumbociática derecha de
apellidos del paciente, sexo, fecha de nacimiento, características mecánicas en territorio S1 de un
edad, domicilio y teléfono, número de identifica- mes de evolución. Ausencia de traumatismo o
ción o historia clínica, fecha del estudio, médico esfuerzos físicos intensos previos. No pérdida de
y servicio que remite al paciente, médico que fuerza ni alteración de la deambulación; pareste-
realiza la exploración, procedencia (consultas ex- sias en mano derecha desde hace dos meses, de
ternas o ingresado) y existencia o no de estudios predominio nocturno, que se alivian al sacudir
electromiográficos previos. La talla del paciente la mano. No cervicalgia ni pérdida de fuerza,
es un dato imprescindible cuando se analizan etc.).
respuestas motoras tardías (ondas F), y por ello
debe anotarse de forma sistemática. Estos datos Exploración neurológica
se adaptarán a las necesidades de cada electro-
miografista y deben figurar en el encabezamiento Se realiza una exploración neurológica orien-
del informe. tada a la patología neuromuscular que presente el
paciente, y, generalmente, también son suficientes
Motivo de consulta unas breves líneas para describir los hallazgos más
destacados (p. ej., signo de Lassègue a 45º en extre-
Se transcribe el motivo de la petición del es- midad inferior derecha. Ausencia de déficit motor
tudio electromiográfico realizado por el médico o sensitivo. Reflejo aquíleo derecho abolido; signo
que solicita la exploración. Este puede coincidir o de Tinel en muñeca derecha, hipoestesia algésica
no con el enfoque clínico propio obtenido tras la en cara palmar de 1º y 2º dedos, sin déficit motor
realización de la historia clínica al paciente, pero ni atrofia muscular, etc.).
sirve para orientar el estudio y, en su caso, mati- Tras la anamnesis y exploración neurológica,
zar en el informe la confirmación o exclusión del el electromiografista debe estar en condiciones
diagnóstico inicial. En ningún caso se debe dirigir de planifi car un estudio electromiográfi co que
exclusivamente la exploración electromiográfica permita confirmar o descartar una determinada
por el diagnóstico de sospecha sin realizar una patología neuromuscular, prestando especial
adecuada anamnesis y exploración neurológica atención a su ubicación anatómica (afectación
del paciente. de la neurona motora, anomalía radicular, plexo-
patía, mononeuropatía, mononeuropatía múl-
Anamnesis tiple, polineuropatía, enfermedad de la unión
neuromuscular, miopatía). No hay que olvidar
Es el primer paso de la exploración electromio- que el estudio electromiográfico es un proceso
gráfica y, junto a la exploración neurológica, uno dinámico, que se va modificando en función de
de los más importantes. Generalmente, se realiza la interpretación inmediata de los datos obte-
una anamnesis dirigida a la sintomatología que re- nidos(1).

Manual EMG.indb 426 9/7/07 12:07:55


Elaboración del informe electromiográfico 427

Neurografía dios de conducción nerviosa (p. ej., aumento del


panículo adiposo en el lugar de estimulación, ede-
Como ya se ha comentado, suele preceder a la ma en el sitio de colocación de los electrodos de
exploración con el electrodo de aguja. Se seleccionan registro, etc.).
estudios de velocidad de conducción motora y sensi- En algunos informes se incluyen los valores
tiva. En aquellos casos en que está indicado, pueden normales. En nuestra experiencia, pueden ser
realizarse estudio del reflejo de parpadeo, respuestas motivo de confusión para la persona no familiari-
motoras tardías (ondas F, reflejo H) y pruebas de esti- zada con la electromiografía, además de suponer
mulación repetitiva a bajas o altas frecuencias. un aumento de datos a exponer en las tablas, lo
Existen varias formas de reflejar los datos ob- cual dificulta su lectura; por otra parte, la aparición
tenidos. Algunos lo hacen de forma narrativa, de un determinado valor que cae fuera del rango
mientras que otros utilizan la tabulación(2). En la de la normalidad no implica necesariamente que
actualidad la mayoría de electromiógrafos incor- este sea patológico y que tenga relevancia dentro
poran un programa específico para la generación del estudio global del paciente(1).
de informes, que permite la incorporación directa La temperatura cutánea a la que se realiza la
de los parámetros neurográficos analizados en los exploración es un dato frecuentemente omitido
diversos nervios examinados, de forma tabulada o en los informes electromiográficos. Sin embargo,
con registro gráfico de los potenciales, lo que sim- es un parámetro sumamente relevante de cara a la
plifica enormemente la realización del informe al correcta interpretación de la latencia, amplitud y
no tener que rellenar tablas prefijadas o realizar velocidad de conducción, por lo que debería cons-
la narración de todos los valores obtenidos en la tar de forma sistemática(1-3).
neurografía. Sea cual sea el método empleado para
la descripción, lo importante es que se reseñen los Electromiografía de aguja
datos neurográficos esenciales.
Se debe registrar el nervio y lado explorado, lu- Se deben mencionar los diversos músculos
gares de estimulación y detección (en la actualidad analizados con el electrodo de aguja coaxial. Al-
se emplean de rutina los electrodos de superficie); gunos autores incluyen también el nivel radicular,
latencia distal motora, amplitud proximal y distal la inervación plexular y el nervio periférico del
de la respuesta (preferiblemente la amplitud de que depende el músculo en estudio, aunque es-
la respuesta negativa), anotando, si existen, cam- tos datos son opcionales. Los hallazgos obtenidos
bios en la morfología de la respuesta (dispersión en cada músculo pueden exponerse en forma de
temporal o bloqueos de conducción) y velocidad una tabla(2), con varias columnas que permitan
de conducción nerviosa. Las conducciones sensi- reseñar los hallazgos obtenidos en los diversos
tivas deben incluir la velocidad de conducción, la músculos del estudio electromiográfico (actividad
latencia (al pico o al comienzo de la fase negativa) de inserción, actividad espontánea, contracción
y la amplitud (señalar si es pico a pico o de la fase voluntaria), aunque algunos prefieren la forma na-
negativa). También se puede señalar si es antidró- rrativa. Como ocurre con la exposición de los da-
mica u ortodrómica, aunque este dato se puede tos neurográficos, la mayoría de electromiógrafos
obviar si se ha especificado el lugar de estimulación actuales incorporan un programa de generación
y detección. de informes que permite realizar una exposición
Es aconsejable describir las posibles limitacio- tabulada de los parámetros electromiográficos de
nes del estudio neurográfico, ya sean debidas a la forma automatizada, lo que supone un importante
falta de tolerancia del paciente ante el estímulo ahorro de tiempo de cara a la redacción del in-
eléctrico, o a otros factores técnicos relevantes de forme, a la vez que se aumenta la sistemática y
cara a la realización e interpretación de los estu- claridad del mismo.

Manual EMG.indb 427 9/7/07 12:07:55


428 J. Pardo Fernández, A.I. Martín Vigo, M. Torres Colomer

Actividad de inserción Comentario o impresión diagnóstica


Se indica si es normal, aumentada, disminuida
o ausente. En este apartado se refleja el diagnóstico (o
posibilidades diagnósticas) derivado de los hallaz-
Actividad espontánea gos clínicos y electrodiagnósticos. Algunos auto-
Se puede graduar en una escala de 0 a 4, o por res diferencian entre impresión electrodiagnóstica
cruces (0, +, ++, +++, ++++) según la abundan- (aquella derivada únicamente de los datos elec-
cia de la misma. Deben figurar el tipo o tipos de trodiagnósticos) e impresión clínica (la derivada
actividad muscular espontánea presentes en cada exclusivamente de los hallazgos obtenidos en la
músculo (fibrilaciones, ondas positivas, etc.). anamnesis y exploración neurológica). Nosotros
solemos unificar este apartado y, en caso necesario,
Actividad voluntaria la diferenciación electrodiagnóstica frente a la clí-
Se anotan las características del patrón de reclu- nica se realiza de forma narrativa (ver informe 1).
tamiento (normal, reducido o precoz). El patrón Además, se debe especificar el nivel y la grave-
de reclutamiento reducido se puede dividir en li- dad de afectación y, en su caso, establecer posibles
geramente reducido (↓), moderadamente reducido indicaciones pronósticas(1,2).
(↓↓) o intensamente reducido (↓↓↓). Puede, ade-
más, reseñarse en la tabla la amplitud de esta acti- Recomendaciones
vidad. Es importante matizar si la activación mus-
cular es normal o deficitaria. Para no añadir más Son útiles en algunos casos para sugerir la repe-
parámetros a la tabla de electromiografía, solemos tición de la exploración en un plazo determinado,
detallarlo en el pie de la tabla sólo en caso de que o para realizar comentarios acerca del manejo del
ésta sea deficitaria. Esta matización es relevante ya paciente, aunque en este caso es preferible la co-
que la existencia de un patrón de reclutamiento municación verbal con el médico referente.
intensamente reducido en presencia de una activa-
ción muscular deficitaria del paciente no implicará
un patrón neurogénico necesariamente, sino que se MODELOS DE INFORMES ELECTROMIOGRÁFICOS
debe a una posible afectación del sistema nervioso
central o a una mala colaboración del paciente (por Como se ha comentado inicialmente, no existe
dolor o simulación). un formato único y universal de informe electro-
Además del patrón de reclutamiento, se pueden miográfico. Se exponen a continuación, a modo
expresar los resultados del análisis de la morfología orientativo, dos modelos de informes que ilustran
de los potenciales de unidad motora en cuanto a los diferentes componentes del mismo, expuestos
duración, amplitud y polifasia. En este caso sólo espe- en forma narrativa (informe 1) o tabulada (infor-
cificamos si cada uno de estos parámetros es normal, me 2).
aumentado o disminuido, aunque también se pue-
den anotar los valores medios obtenidos en el análisis INFORME 1
cuantificado de los diversos potenciales analizados. Paciente: Edad: 45 años
Talla: 1,68 m ID: 949-P
Hallazgos electrodiagnósticos Remitido por: Dr. Servicio:
Exploración realizada por: Dr. Fecha: 01-11-06
Tras la exposición de los datos neurográficos y Motivo de consulta
electromiográficos, es imprescindible realizar una
interpretación electrodiagnóstica de los mismos Dolor en extremidad superior derecha. Descar-
(ver informes 1 y 2). tar radiculopatía cervical.

Manual EMG.indb 428 9/7/07 12:07:56


Elaboración del informe electromiográfico 429

Anamnesis – Músculo bíceps braquial derecho:


Actividad de inserción normal. Silencio mus-
Paciente sin antecedentes de interés que nota cular en reposo.
en los últimos dos meses dolor en hombro derecho, Activación voluntaria: patrón de reclutamiento
agravado con el ejercicio físico, en ocasiones de normal. Configuración de PUM normal.
aparición nocturna y con irradiación a antebrazo – Músculo tríceps braquial derecho:
derecho. Parestesias ocasionales en mano derecha, Actividad de inserción normal. Silencio mus-
sin territorio definido. cular en reposo.
Activación voluntaria: patrón de reclutamiento
Exploración neurológica normal. Configuración de PUM normal.
– Músculo abductor corto del pulgar derecho:
Destacan dolor e impotencia funcional para Actividad de inserción normal. Silencio mus-
abducción de hombro derecho por encima de los cular en reposo.
90º. Reflejos musculares y sensibilidades táctil y Activación voluntaria: patrón de reclutamiento
algésica normales. No debilidad en el resto de gru- normal. Configuración de PUM normal.
pos musculares analizados en extremidad superior – Músculo abductor del 5º dedo derecho:
derecha. Actividad de inserción normal. Silencio mus-
cular en reposo.
Neurografía sensitiva Activación voluntaria: patrón de reclutamiento
normal. Configuración de PUM normal.
(Latencia al inicio, amplitud de fase negativa,
Tª: 30 ºC) Hallazgos electrodiagnósticos
– Nervio mediano derecho (estimulación en muñe-
ca, detección en 3er dedo): LD 2,4 ms; amplitud Normalidad de los parámetros neurográficos
20 μV; VCN 53,1 m/s. motores y sensitivos analizados en nervio mediano
– Nervio cubital derecho (estimulación en muñe- derecho. Normalidad de los parámetros sensitivos
ca, detección en 5º dedo): LD 2 ms; amplitud analizados en nervio cubital derecho.
18 μV; VCN 55,3 m/s. En la EMG con electrodo de aguja coaxial se
evidencian potenciales de unidad motora de ca-
Neurografía motora racterísticas morfológicas normales, con un patrón
de reclutamiento normal y ausencia de actividad
(Detección con electrodos de superficie, am- muscular espontánea, en los diversos músculos ana-
plitud de fase negativa, Tª: 30º) lizados en extremidad superior derecha correspon-
– Nervio mediano derecho (estimulación en muñeca dientes a raíces C5 a T1.
y codo; detección en músculo abductor corto del
pulgar): LD 2,6 ms; amplitud 10 y 9,5 mv (distal Comentario
y proximal respectivamente); VCN 57,4 m/s.
No se objetivan signos electrodiagnósticos de
Electromiografía denervación en los músculos analizados compati-
bles con una radiculopatía cervical motora. Tampo-
– Músculo deltoides derecho: co se evidencian datos de lesión de nervio mediano
Actividad de inserción normal. Silencio mus- en el canal carpiano.
cular en reposo. Desde el punto de vista clínico, el cuadro es
Activación voluntaria: patrón de reclutamien- sugestivo de una periartritis escapulohumeral de-
to normal. Configuración de PUM normal. recha.

Manual EMG.indb 429 9/7/07 12:07:56


430 J. Pardo Fernández, A.I. Martín Vigo, M. Torres Colomer

TABLA I. Neurografía sensitiva


LD (ms) Amplitud (μV) VCN (m/s)

Nervio Estimulación Detección Dcho. Izdo. Dcho. Izdo. Dcho. Izdo.


Sural Cara posterior de la pierna Maléolo externo 3 18 46,6

TABLA II. Neurografía motora


LD Amplitud VCN Lat. onda F
(ms) (mV) (m/s) (ms)

Nervio Estimulación Detección Dcho. Izdo. Dcho. Izdo. Dcho. Izdo. Dcho. Izdo.
Peroneo común Tobillo Músculo pedio 4,8 6 45,8
Cabeza peroné Músculo pedio 5,4
Tibial Maléolo interno M. flexor corto 1er dedo 5,3 3,5 45,2
Hueco poplíteo M. flexor corto 1er dedo 3
Tibial (reflejo H) Hueco poplíteo M. sóleo 30 NR 2,5 NR
NR: no respuesta.

INFORME 2 poestesia algésica y táctil en dermatoma S1; debi-


Paciente: Edad: 29 años lidad para flexión plantar de pie izquierdo (fuerza
Talla: 1,69 m ID: 950-P 4-/5) y dificultad para la marcha sobre puntillas en
Remitido por: Dr. Servicio: extremidad inferior izquierda.
Exploración realizada por: Dr. Fecha: 01-10-06
Neurografía sensitiva
Motivo de consulta
(Latencia al inicio de la respuesta, amplitud de
Lumbociática izquierda. fase negativa, Tª: 30 ºC) (Tabla I).

Anamnesis Neurografía motora

Paciente sin antecedentes de interés ni trauma- (Detección con electrodos de superficie, ampli-
tismos previos que refiere lumbalgia de 2 meses de tud de fase negativa, Tª: 30 ºC) (Tabla II).
evolución, con irradiación a extremidad inferior
izquierda (hasta cara externa del pie) desde hace Electromiografía (Tabla III)
mes y medio. El dolor se exacerba con maniobras
de Valsalva y con la deambulación y se alivia con Hallazgos electrodiagnósticos
el reposo.
En la neurografía destaca disminución de la
Exploración neurológica amplitud de la respuesta motora en nervio tibial,
con preservación de la velocidad de conducción
Destaca signo de Lassègue a 30º en extremidad nerviosa, y abolición del reflejo H en extremidad
inferior izquierda, arreflexia aquílea izquierda, hi- inferior izquierda.

Manual EMG.indb 430 9/7/07 12:07:56


Elaboración del informe electromiográfico 431

TABLA III. Electromiografía de aguja


Actividad Actividad Actividad voluntaria

de espontánea Patrón de reclutamiento Configuración PUM

Músculo inserción Fib OP Fas Otra Normal Reducido Precoz Duración Amplitud Polifasia

Vasto externo izdo. Normal No No No No X Normal Normal Normal


Tibial anterior izdo. Normal No No No No X Normal Normal Normal
Pedio izdo. ↑ ++ ++ No No ↓↓ ↑ Normal ↑
Gemelo interno izdo. ↑ +++ +++ No No ↓↓↓ ↑ Normal ↑
Paravertebrales
lumbosacros izdos. ↑ ++ ++ No No
↓: ligeramente reducido; ↓↓: moderadamente reducido; ↓↓↓: intensamente reducido; Fib: fibrilaciones; OP: ondas positivas; Fas: fasciculaciones.

En la EMG se observan datos de denervación TABLA IV. Tipos de errores hallados en 112 informes electromio-
activa en musculatura paravertebral lumbosacra gráficos(4)
izquierda y músculos pedio y gemelo interno iz-
Tipo de error Nº de informes
quierdos, con trazados deficitarios de características
neurogénicas en la activación voluntaria. Anatómicos 74
Técnicos 41
Comentario Estudio incompleto 36
Terminología 31
Radiculopatía S1 izquierda de intensidad grave, Interpretación 97
con datos de denervación activa.
y sensitivas incompatibles; descripción de la-
tencias sensitivas sin mención de la distancia o
POSIBLES ERRORES EN EL INFORME ELECTROMIOGRÁFICO velocidad de conducción.
– Estudios incompletos: ausencia de estudios de
En un análisis de 112 informes electromiográfi- conducción nerviosa cuando eran de relevan-
cos emitidos por 112 electromiografistas, Johnson(4) cia para el diagnóstico; realización de estudios
encontró varios tipos de errores en la elaboración para el síndrome de túnel carpiano sin analizar
del informe (Tabla IV), que fueron divididos en: otros nervios en la misma región (p. ej., estudio
– Errores anatómicos: incorrecta especificación sensitivo del nervio cubital ipsilateral).
del músculo analizado (la localización era re- – Terminología: utilización en el informe de tér-
ferida como “área hipotenar, eminencia tenar, minos electromiográficos incorrectos, como
cuádriceps, etc.”). Otro error frecuentemente “potenciales de denervación” o “potenciales
observado era la mala definición del nivel radi- miopáticos”.
cular espinal (músculo extensor común de los – Interpretación: ausencia de diagnóstico o posi-
dedos como nivel C6, músculo tibial posterior bilidades diagnósticas y errores de sobreinterpre-
y músculo extensor largo de los dedos como tación de los hallazgos, con el fin de ajustarlos a
nivel L4, etc.). la hipótesis diagnóstica clínica del médico que
– Errores técnicos: producidos como consecuen- solicita el estudio.
cia de la incorrecta colocación de los electrodos, En nuestra experiencia, un error frecuentemen-
que motiva la descripción de latencias motoras te observado es la ausencia de la exploración neu-

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432 J. Pardo Fernández, A.I. Martín Vigo, M. Torres Colomer

rológica e incluso de la anamnesis en el informe ciada electromiográficamente o nerviosa periférica


EMG. También suele ser común en el comentario en algún territorio no analizado).
diagnóstico la utilización del comentario “EMG
normal”. Esta práctica nos parece inadecuada y con BIBLIOGRAFÍA
claras repercusiones diagnósticas para el paciente,
ya que el clínico no familiarizado con la EMG (que 1. Dumitru D, Zwarts MJ. The electrodiagnostic medicine
consultation: approach and report generation. En: Dumitru
habitualmente solo presta atención al apartado final D, Amato AA, Zwarts MJ, eds. Electrodiagnostic medicine.
del comentario), puede concluir erróneamente que 2ª ed. Philadelphia: Hanley & Belfus; 2002. p. 515-40.
se han descartado en el estudio electrodiagnóstico 2. Jablecki CK, Busis NA, Brandstater MA, Krivickas LS,
toda posibilidad de enfermedad neuromuscular en Miller RG, Robinton JE. Reporting the results of needle
ese paciente. Cuando el estudio electrodiagnóstico EMG and nerve conduction studies: an educational report.
Muscle Nerve 2005; 32: 682-5.
es normal, preferimos expresarlo como normalidad
3. Johnson EW. Reporting and interpretation. En: Johnson
de los parámetros electromiográficos o electroneu- EW, ed. Practical electromyography, 2ª ed. Baltimore:
rográficos en los diferentes músculos o nervios ana- Williams & Wilkins; 1987. p. 417-64.
lizados (lo cual no descarta que el paciente pueda 4. Johnson EW, Fallon TJ, Wolfe CV. Errors in EMG repor-
tener algún tipo de afectación muscular no apre- ting. Arch Phys Med Rehabil 1976; 57: 30-2.

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APÉNDICE

Manual EMG.indb 433 9/7/07 12:07:57


Manual EMG.indb 434 9/7/07 12:07:57
Apéndice

ESQUEMAS ANATÓMICOS DE LOS SISTEMAS NEUROMUSCULARES


Y TERRITORIOS DE INERVACIÓN CUTÁNEA DE NERVIOS Y RAÍCES

Figura 1. Plexo braquial.

Manual EMG.indb 435 9/7/07 12:07:57


436 Apéndice

Figura 2. Nervio musculocutáneo.

Manual EMG.indb 436 9/7/07 12:07:58


Apéndice 437

Figura 3. Nervios axilar y radial.

Manual EMG.indb 437 9/7/07 12:07:58


438 Apéndice

Figura 4. Nervio mediano.

Manual EMG.indb 438 9/7/07 12:07:58


Apéndice 439

Figura 5. Nervio cubital.

Manual EMG.indb 439 9/7/07 12:07:58


440 Apéndice

Figura 6. Plexo lumbosacro.

Manual EMG.indb 440 9/7/07 12:07:58


Apéndice 441

Figura 7. Nervio femoral o crural.

Manual EMG.indb 441 9/7/07 12:07:58


442 Apéndice

Figura 8. Nervio obturador.

Manual EMG.indb 442 9/7/07 12:07:59


Apéndice 443

Figura 9. Nervio ciático.

Manual EMG.indb 443 9/7/07 12:07:59


444 Apéndice

Figura 10. Nervio tibial.

Manual EMG.indb 444 9/7/07 12:07:59


Apéndice 445

Figura 11. Nervio peroneo y nervio safeno.

Manual EMG.indb 445 9/7/07 12:07:59


446 Apéndice

Figura 12. Nervio sural.

Manual EMG.indb 446 9/7/07 12:07:59


Apéndice 447

Figura 13. Nervio femorocutáneo.

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448 Apéndice

Figura 14. Nervios cutáneos del tronco y de las extremidades (cara anterior).

Manual EMG.indb 448 9/7/07 12:08:00


Apéndice 449

Figura 15. Nervios cutáneos del tronco y de las extremidades (cara posterior).

Manual EMG.indb 449 9/7/07 12:08:00


450 Apéndice

Figura 16. Nervios cutáneos de la cara y de la cabeza.

Manual EMG.indb 450 9/7/07 12:08:00


Apéndice 451

Figura 17. Nervios cutáneos de la mano.

Figura 18. Nervios cutáneos del pie.

Manual EMG.indb 451 9/7/07 12:08:00


452 Apéndice

Figura 19. Inervación radicular del tronco y de las extremidades (cara anterior).

Manual EMG.indb 452 9/7/07 12:08:00


Apéndice 453

Figura 20. Inervación radicular del tronco y de las extremidades (cara posterior).

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454 Apéndice

Figura 21. Inervación radicular de la cara y la cabeza.

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Apéndice 455

Figura 22. Inervación radicular de la mano.

Figura 23. Inervación radicular del pie.

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ÍNDICE ALFABÉTICO

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Manual EMG.indb 458 9/7/07 12:08:01
ÍNDICE ALFABÉTICO

A de multipotenciales de unidades motoras o multi-


Acetilcolina, 16 MUP, 43, 126
Acomodación, 25 Anastomosis, 420
Actina, 16 cubital-mediano, 421
Actividad electrodérmica galvánica, AEG, 406-409 de Martin-Gruber, 315, 420
Actividad muscular espontánea, 107 Anestesia en la monitorización intraoperatoria, 224
anormal, 109 Anión(es), 19
de inserción, 107 Cl–, 20
normal, 108 proteicos, 20
Actividad voluntaria, 124 Ánodo o polo positivo, 24
Adaptadores, 40 Antidrómico, 23
ADN mitocondrial, 368 Aplicaciones clínicas de la electromiografía de fibra
ADN nuclear, 368 aislada, 140
Aguja concéntrica, 31 Artefacto(s), 33, 416, 417
Aguja monopolar, 31 de estímulo, 33
Aislamiento, 37 técnicos, 41
Ajustes de filtro, 32 Ataxia de Friedreich, 187
Alcalosis respiratoria, 386 Atetosis, 397
Algómetro, 409 Atrapamiento
Alisado (smooth), 42 del nervio peroneo común en la cabeza del peroné,
Almacenaje de señales, 41 309
Almacenamiento de registros, 45 del nervio tibial posterior en el hueco poplíteo,
Alteraciones fisiológicas, 421 313
edad, 421 por el ligamento de Struthers, 300
estatura, 421 proximales del nervio mediano, 300
temperatura, 421 Atrofia(s)
Amiotrofia bulboespinal progresiva, 238 espinal escápulo-peroneal, 238
Amiotrofia espinal crónica, 235 espinales familiares, 231
Amplificador(s), 29, 30 musculares espinales, 237
diferencial, 30 clasificación, 237
de la señal, 42 estudio electrofisiológico, 238
Análisis forma infantil de Werdnig-Hoffmann, 237
automatizado de unidades motoras, 43 forma intermedia, 238
de bases de datos, 45 forma juvenil de Kugelberg-Welander, 238
de espectro de energía, 43 muscular progresiva, 231
de la señal, 43 perifascicular, 366

Manual EMG.indb 459 9/7/07 12:08:02


460 Índice alfabético

Averías, 34 nerviosa, 22
Axolema, 14 mixta, 58
Axón, 14 motora, 52, 61
Axonotmesis, 288 sensitiva, 55, 61
completa, 289, 291, 292 periférica, 186
parcial o incompleta, 289, 291 Conductancia, 21, 23
Conexión neutra, 38
B Contracción muscular, 16
Balismo, 397 Contractura muscular, 391, 398
Blefarospasmo, 389, 400 Convertidor, 33
Bloqueo de la conducción, 63, 201, 291 Copias de seguridad, 41
nerviosa 288, 293 Cordones posteriores, 186
Bomba Corea, 398
de potasio, 20 de Huntington, 187
de sodio 20 Corriente alterna, 416
Botulismo, 123 Cronaxia, 25
Cuerpos nemalínicos, 367
C Curva
Cables, 30 de habituación del reflejo de parpadeo, 276
de intensidad-tiempo, 25
Calambre(s) muscular(es), 368, 385, 389, 398
Calcio, 16
Canales
D
Decremento, 83
cerrados en reposo, 18
Déficit
K+, 18
de enzima desramificante, 368
Na+, 18
de fosfofructocinasa, 368
sensibles al voltaje, 18
de maltasa ácida, 367
sensibles a transmisores químicos, 18
de miofosforilasa, 368
iónicos, 18 Degeneración(es)
pasivos abiertos, 18 combinada subaguda, 187
Canalopatías, 377, 379 espinocerebelosas, 187
Cancelación de fase, 58 walleriana, 288, 292
Capacitancia, 23, 36 Densidad de fibras, 137
Cationes, 19 Dermatomiositis, 365, 366
Cátodo o polo negativo, 24 Descarga(s)
Célula(s) complejas repetitivas, 358
CD8+, 366 de alta frecuencia, 129, 130, 366, 367
de Schwann, 14 mioquímicas, 114, 388, 389
polarizada, 18 miotónicas, 115, 130, 357, 373, 392
Certificación, 35 repetitivas complejas, 115
Circuito eléctrico, 38 Descomposición automatizada de EMG, 43
Clasificación Desmielinización focal, 288
de las fibras musculares, 17 Despolarización, 20
de las fibras nerviosas, 15 Diámetro
Coma, 179, 188 axonal, 24
hipóxico, 187 de la fibra, 24
Componente R2, 273 Disferlina, 362
Condrodistrofia miotónica, 391 Disparador, 42
Conducción Dispersión temporal, 63
central motora, 192 Dispersión temporal fisiológica, 58
de la fibra muscular in situ, 140 Display, 33
en volumen, 27, 418 Distonía, 200, 397
motora central, 194 laríngea, 398

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Índice alfabético 461

oromandibular, 400 de Parkinson, 200


Distrofia de Pompe, 367, 391
facio-escápulo-humeral, 422 de Steinert o DM-1, 375, 391
miotónica, 375, 391 de Tarui, 368
muscular, 146, 358 de tejido conectivo 366
congénitas, 363 de Werdnig-Hoffmann, 130
de Becker, 358 hiperactividad muscular de origen central, 383
de cinturas, 360, 361 miotónicas, 373
de Duchenne, 358 neoplasias, 366
de Emery-Dreifuss, 361 que cursan con miotonía, 374
facio-escápulo-humeral, 360, 361 Epilepsia, 200
oculofaríngea, 363, 364 Epineuro, 14
paraespinales, 364 Errores en el informe, 431
Distrofinopatías, 358, 359 anatómicos, 431
clasificacion, 359 de sobreinterpretación, 431
Doble estimulación, 199 estudios incompletos, 431
Dolor neuropático, 179, 403, 404 técnicos, 431
terminología, 431
E Esclerosis, 129
Ecuación lateral
de Goldman, 19 amiotrófica, 231, 385, 390
de Nerst, 19 bloqueos de conducción, 235
Electrodo(s), 29 criterios clínicos diagnósticos, 231
activo, 29 estudio electrofisiológico, 232
ánodo, 32 fatigabilidad de la unión neuromuscular, 235
cátodo, 32 primaria, 231
colocación, 38 múltiple, 187, 199, 388, 389
de inserción o aguja, 29 Esfuerzo máximo (patrón interferencial), 127
de superficie, 29 Espasmo(s), 384
de tierra, 29 carpopedal, 370
referencial, 29 del escribiente, 397
Electromiografía, 3 hemifacial, 389
antecedentes históricos, 3 hemifacial clónico, 398, 399
concepto, 3 hemifacial esencial, 280
de aguja, 286 laríngeos, 397
de fibra aislada, 133 tónico, 399
indicaciones, 9 Estabilidad, 123
Electromiografista Estenosis del canal lumbar, 187
formación, 11 Esterilización, 40
Electromiograma, 232 Estimulación, 39, 417
Enfermedad(es), 340, 366, 373, 383, 422 dual, 196
autoinmunes de la unión neuromuscular 340 eléctrica transcraneal, 191, 211
de Charcot-Marie-Tooth, 130, 238 magnética, 404
tipo I, 238 transcraneal 191, 197, 237
tipo II, 238 radicular, 250
de Cori-Forbes 368 repetitiva, 79, 82
de Duchenne, 422 supramáximo, 82
de Gilles de la Tourette, 397 Estimulador(es), 30, 32
de Huntington, 200 eléctrico, 32
de Kennedy, 238 Estímulo(s), 24
de la unión neuromuscular, 142 cuadrado, 24
de McArdle, 368, 391, 398 eléctrico, 24
de motoneurona, 199, 390 duración, 25

Manual EMG.indb 461 9/7/07 12:08:03


462 Índice alfabético

intensidad, 25 tipo III, 368


electromiográfico, 4 tipo V, 368
de conducción nerviosa, 234 tipo VII, 368
de conducción nerviosa motora
valores normales, 101 H
de conducción nerviosa sensitiva Hardware, 34
valores normales, 101 Hemodiálisis, 390
submáximos, 82 Hiperactividad motora, 404
exponencial, 24 Hipercalcemia, 370
Excitabilidad, 24 Hiperparatiroidismo, 370
Expert quantitative IP analysis, EQUIP, 129 Hiperpolarizacion, 21
Exploración neurofisiológica, 74 Hipertermia maligna, 391
Hipertiroidismo, 370
F Hipertonía facial postparalítica, 399
Facilitación, 83 Hipertrofia muscular, 391
intracortical, 196 Hiperventilación psicógena, 386
Factor Hipocalcemia, 386
de conversión, 24 Hipoparatiroidismo, 370
de seguridad, 23 Hipotiroidismo, 370, 391
Fasciculación(es), 112, 232, 237, 368, 385, 389, 390
benignas, 233 I
Fases de refractariedad, 26 Ictus, 199
absoluta, 26 Impedancia, 29
relativa, 26 Impulso condicionante, 25
Fatiga central, 197, 199 Inervación anómala, 314
Fibra, 14 Inestabilidad, 123
amielínica, 14 Informe electromiográfico, 425
mielínica, 14 Inhibición intracortical, 196
muscular, 14, 15 Inhibidores de la acetilcolinesterasa, 85
despolarización, 16 Instrumentación, 29, 416
tipo I, 18 Interferencia, 29, 30
tipo IIa, 18 Internacional Electrotechnical Comission, 39
tipo IIb, 18 Interpretación de los datos, 422
nerviosa, 14 estudio incompleto, 423
Fibrilación(es), 111, 129, 130, 356, 366-368 Ion, 19
Filtro(s), 31, 121-123, 416 Isquemia, 86, 386
de altas frecuencias, 31
de bajas frecuencias, 31 J
de banda, 31 Jitter, 135
ganancia, 31
Frecuencia L
cardiaca, 407 Laboratorio de EMG
de comienzo, 124 accesorios, 35
de estimulación, 82 adquisición de la señal, 41
de reclutamiento, 124 seguridad, 29, 34
Lámparas fluorescentes, 416
G Láser, 409
Gel electrolítico, 33 Latencia, 194
Generación del informe, 45 Lemnisco medio, 186
Giros, 122 Lesión(es), 286
Giros/amplitud, 128, 131 axonales, 61
Glucogenosis, 130, 367, 391 del plexo braquial, 186
tipo II, 367 desmielinizantes, 62

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Índice alfabético 463

fibrilaciones, 290 con cuerpos citoplasmáticos, 365


multirradicular, 187 con depósito de desmina, 365
nervio congénitas, 364
axilar, 286 distal de Miyoshi, 362
ciático, 286 distales, 362, 363
cubital, 286 endocrinas, 370
mediano, 286 en la infección por VIH, 367
peroneo, 286 esteroidea, 370
radial, 286 evaluación EMG, 355
tibial, 286 fármacos causantes, 371
ondas positivas, 290 inflamatorias, 365, 366, 422
velocidad de conducción motora, 286 miotónica, 391
velocidad de conducción sensitiva, 286 proximal, 377
Leucodistrofias, 187 mitocondriales, 368
Ligamento de Struthers, 300 multiminicores, 365
Longitud internodal, 24 necrosante, 371
nemalínica, 365
M tóxicas, 371
Maniobras de Phalen, 298 Mioquimia, 385, 388, 389
Mano Miosina, 16
cubital, 421 Miositis con cuerpos de inclusión, 366
mediana, 421 Miotonía, 373, 391, 392
Mapping, 206 clínica, 373
cerebral, 196 congénita, 377, 378, 391
del suelo del IV ventrículo, 223 Monitorización, 187, 206
Marcapasos, 35, 417 de la musculatura extraocular, 216
McComas, 236 III nervio craneal, 216
Mean Inter Spike Interval, MISI, 131 IV nervio craneal, 217
Medicación anticoagulante, 40 del nervio
Medición, 419 auditivo, 219
Medida de la excitabilidad, 25 espinal, 222
Medidas de la señal, 44 facial, 217
Meralgia parestésica, 186, 308 facial en las intervenciones de cirugía de parótida, 218
Mialgias, 371 glosofaríngeo, 221
Miastenia gravis, 80, 83, 123, 142, 340 hipogloso, 223
neonatal, 350 óptico, 215
Microneurografía, 407 trigémino, 217
Microprocesadores, 33 vago, 221
Mielopatía(s), 187 eléctrica de las raíces, 210
cervical, 200 EMG evocada mecánicamente, 210
Mioclonías, 397 intraoperatoria, 200
Mioclono de origen cortical, 187 cortical, 223
Miofibrillas, 16 intraoperatoria neurofisiológica de los nervios craneales,
Miofilamentos, 16 214
Mioglobinuria, 371 nervio facial mediante estimulación eléctrica trans-
Miopatía(s), 355, 367, 422 craneal, 218
alcohólica, 371 neurofisiológica intraoperatoria, 205
aguda, 371 espinal, 206
crónica, 371 medular, 206
axial, 364 raíces nerviosas, 206
central core, 364, 365 Mononeuropatía(s), 331
centronuclear o miotubular, 365, 391 agudas, 285
con agregados tubulares, 365 crónicas 295

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464 Índice alfabético

estudio neurofisiológico, 286 lingual, 151


múltiple, 331 masetero, 149, 272, 274
múltiple solapada, 331 nasal, 278
Motoneurona, 231 oblicuo inferior 282
bulboespinal o inferior, 231 oponente del pulgar, 161
primera cortical, 231 orbicular
multi Motor Unit Potential Analysis, multi-MUPA, 125 de la boca, 150, 278
Músculo, 149, 272 de los ojos, 150, 273, 278
abductor paraespinales, 170
corto, 160 pectoral mayor, 153
del dedo gordo, 169 peroneo largo, 167
del meñique, 161 primer interóseo dorsal, 162
aductor pronador
del pulgar, 161 cuadrado, 159
largo, 164 redondo, 157
mayor, 163 recto
bíceps del abdomen, 171
braquial, 154 femoral, 164
femoral, 166 romboides mayor, 152
braquiorradial, 155 semimembranoso, 165
cricotiroideo, 172, 283 semitendinoso, 166
deltoides, 154 serrato anterior, 154
diafragma, 174 supinador, 156
elevadores del paladar, 282 supraespinoso, 152
esfínter temporal, 272
rectal, 175 tensor del tímpano, 280
uretral, 175 tibial
estapedio, 280 anterior, 166
esternocleidomastoideo, 150, 281 posterior, 168
extensor tiroaritenoideo, 172, 283
corto de los dedos, 169 trapecio, 151, 281
cubital del carpo, 156 tríceps braquial, 155
del índice, 157 vasto lateral, 165
de los dedos, 156 vasto medial, 165
largo del dedo gordo, 167
radial largo del carpo, 156 N
faríngeos, 282 Nervio, 14, 254, 271, 419
flexor accesorio espinal, 90
corto del dedo gordo, 169 estudio de la conducción nerviosa motora, 90
cubital del carpo, 160 antebraquial cutáneo externo, 256
largo del pulgar, 159 antebraquial cutáneo interno, 254, 260, 263
profundo de los dedos, 158 axilar, 90
radial del carpo, 158 estudio de la conducción nerviosa motora, 91
frontal, 278 braquial cutáneo interno, 254
gemelo, 168 craneal, 271
glúteo cubital, 301
mayor, 162 estudio de la conducción nerviosa motora, 94
medio, 163 estudio de la conducción sensitiva 95
menor, 163 cutáneo antebraquial lateral, 97
iliopsoas, 164 estudio de la conducción sensitiva, 97
infraespinoso, 153 cutáneo antebraquial medial, 97
intercostales, 173 estudio de la conducción sensitiva, 98
laríngeos, 282 escapular dorsal, 254

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Índice alfabético 465

espinal, 281 descargas, 387


estudio electrofisiológico, 281, 283 focal, 388
facial, 73, 277 Neurona(s), 15
estudio electrofisiológico, 278 motora, 13
femorocutáneo, 308 sensitiva, 13
frénico, 100, 254 somáticas, 15
estudio de la conducción nerviosa motora, 100 vegetativas, 15
hipogloso, 283 postganglionar, 13
laríngeo superior, 282 preganglionar, 13
mediano, 91, 92, 295 Neuropatía(s), 285, 295, 333
estudio de la conducción sensitiva, 92 agudas traumáticas, 285
mentoniano o infraorbitario, 275 del cubital en la muñeca, 304
musculocutáneo, 91 desmielinizantes, 201
estudio de conducción nerviosa motora, 91 motora multifocal, 201, 389
oculomotores, 282 con bloqueos de conducción, 234
pectoral lateral, 254 periférica, 369, 390
pectoral medial, 254 por atrapamiento, 295
peroneal profundo accesorio, 316 vasculítica, 333
peroneo, 98, 309 Neurotmesis, 292, 293
accesorio, 419, 420 sección del nervio, 292
estudio de la conducción nerviosa motora 99 Number of small segments, NSS, 129
superficial 99
estudio de la conducción sensitiva, 99 O
plantar interno sensitivo, 100 Ohmios, 30
estudio de la conducción sensitiva, 100 Onda
radial, 96, 305 D, 193, 213
estudio de la conducción nerviosa motora, 96 I, 193, 213
estudio de la conducción nerviosa sensitiva, 97 positivas, 112, 129, 130, 356, 366-368
recurrente, 282 Ordenadores, 29
subescapular, 254 Ortodrómico, 23
supraescapular, 254, 259 Osciloscopio, 33
supraorbitario, 74, 273
sural, 99 P
estudio de la conducción sensitiva, 100 Paciente(s), 393, 415
tibial, 98 colaboración, 415
estudio de la conducción nerviosa motora, 98 neuróticos, 415
posterior, 311 simuladores, 393, 415
torácico largo, 254 Parálisis
toracodorsal, 254, 260 bulbar progresiva, 231
trigémino, 73, 271 de Bell, 280
estudio electrofisiológico, 272 del sábado noche, 288, 306
ramas, 271 facial, 399, 400
maxilar inferior, 271 periódica, 378, 379
maxilar superior, 271 Paramiotonía congénita, 377, 378, 391
oftálmica, 271 Patrón
vago, 282 de reclutamiento neurógeno, 233
estudio electrofisiológico, 283 interferencial, 127
Neuroapraxia, 288, 289 miopático, 356
Neurografía, 427 neurógeno, 237
limitaciones del estudio, 427 PEL, 410
temperatura, 427 Peligro
Neuroma de Morton, 313, 314 biológico, 40
Neuromiotonía, 385, 386, 387 informáticos, 40

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466 Índice alfabético

PENS, 404 α, 27
Perineuro, 14 C, 27
Período, 275, 384 cerebral, 183, 184
de silencio, 199, 384 cervical, 183
refractario, 25 compuesto, 27
silente, 195, 384 duración, 139
SP1, 275 músculo, 27
SP2, 275 nervio, 27
Piridostigmina, 85 de acción, 20, 26
Placa motriz, 16 tres períodos, 26
Planificación del estudio ENG-EMG, 236 hiperexcitabilidad, 26
Plantilla (template), 43 hipoexcitabilidad, 26
Plexo braquial, 253 refractariedad, 26
anatomía, 253 de campo, 184
clasificación, 255 de campo cercano, 184
cordón de equilibrio, 20
lateral, 259 de Erb, 183
medial, 260 δ, 27
posterior, 260 de la fibra muscular, 16
dominios de membrana, 18
motores, 257 de placa motora, 80, 81, 422
musculares, 258 de reposo, 20
sensitivos, 256 de unidad motora (PUM) disminuida, 120, 233,
estrategia de evaluación, 261 355
patrones electrodiagnósticos, 257 amplitud media, 356
tronco primario duración media, 122, 355
inferior, 259 patrón de interferencia, 356
medio, 258 reclutamiento, 356
superior, 258 evocados auditivos de tronco cerebral, 219
valoración electrodiagnóstica, 256 evocados motores, 194
Plexo lumbar. Véase plexo lumbosacro evocados por rayo láser, PEL, 409
Plexo lumbosacro, 266 evocados somatosensoriales, 179, 207
anatomía, 266 dermatómicos, 209
estrategia de evaluación, 269 evocados visuales, 216
evaluación electrodiagnóstica, 267 miniatura, 80
patrones electrodiagnósticos, 268 lumbar, 184
Plexopatía reinervativos, 287
braquial. Véase plexo braquial reinervativos nacientes, 290
lumbar. Véase plexo lumbosacro satélites, 234
lumbosacra. Véase plexo lumbosacro Procesos neurógenos, 129
sacra. Véase plexo lumbosacro Programa antivirus, 41, 46
Plexo sacro. Véase plexo lumbosacro Progresión de la enfermedad, 236
Polifasia, 356 Promediación, 42
Polimiositis, 365-367 Propagación del potencial, 22, 23
Polineuropatías, 186, 280, 319 Protección de datos, 46
axonales agudas, 321 PUMs gigantes, 130
axonales crónicas, 323 amplitud máxima, 121
desmielinizante Punto motor, 418
crónica, 325
agudas, 325 R
crónicas hereditarias, 325 Radiculopatía(s), 129, 187, 241, 385, 390
Poliomielitis, 231, 239 estudio electromiográfico con aguja, 243
Potencial(s), 27, 119 estudios de conducción nerviosa, 246

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Índice alfabético 467

Radioterapia, 389 de denervación, 232


Raíces anatómicas intrarraquídeas, 14 Sincinesia(s), 280, 399
Receptor de acetilcolina, 80 facial postparalítica, 400
Reclutamiento, 124 faciales postparalíticas, 389
Reflejo Síndrome, 297, 345, 384, 404
acústico, 280 de Cushing, 370
del músculo estapedio, 280 de Eaton-Lambert, 80, 83, 345
de parpadeo (blink-reflex), 73, 272, 280 de Guillain-Barré, 186, 389
H, 70 de Horner, 255
inhibitorio maseterino, 272, 275 de la persona rígida, 404
maseterino, 272, 274 del “armadillo”, 387
troncoencefálicos, 272 del canal cubital, 301
Refractariedad, 25 del desfiladero torácico, 186, 261
Regeneración walleriana, 290 neurológico, 262
Registro(s), 26, 418 polémico, 265
bipolar, 26 postraumático, 264
de los potenciales de fibra muscular aislada, 133 del hombre rígido, 384
de potenciales, 26 del nervio interóseo anterior, 300
extracelular, 26 del nervio interóseo posterior, 308
intracelulares, 26 del pronador redondo, 300
monopolar, 26 del túnel del carpo, 297
Reglas cardinales, 8 del túnel del músculo abductor del primer dedo,
Relación coste-efectividad, 206 314
Reobase, 25 del túnel del tarso, 313
Repolarización, 20 de Meige, 400
facial postparalítico, 399, 400
Resistencia, 23
lágrimas de cocodrilo, 399, 400
Respuesta(s), 73, 405
miasténicos congénitos, 347
contralateral (R2c), 73
por defecto en la sinapsis, 349
F, 194
postsinápticos, 349
R1, 73, 273
presinápticos, 348
R2, 73
miasténicos de etiología infecciosa, 350
R3, 73
miasténicos producidos por fármacos y tóxicos, 352
R2 ipsilateral (R2i), 73
postpolio, 231, 239
RII, 405 Siringomielia, 130, 187, 231
RIII, 405 Sistema
reflejas nociceptivas, 405 de retraso (delay), 416
sudomotora simpática cutánea, RSSC, 406, 407 tubular T, 16
tardías, 67, 286 Software, 33, 34
onda A, 69
onda F, 67, 286 T
reflejo H, 286 Técnica(s)
Retraso (delay), 42 de estimulación repetitiva, 82
Ruido, 29 de estimación, 236
neurofisiológicas, 6
S Teléfonos móviles, 416
Sarcolema, 16 Telemedicina, 45
Sarcómero, 16 Temblor, 393
Sarcoplasma, 16 cerebeloso, 396
Señal, 29 de actitud o postural, 394
analógica a digital, 33 de la escritura, 396
Signo(s) de reposo, 394
de Tinel, 298, 313 esencial, 394

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468 Índice alfabético

fisiológico exagerado, 394 del movimiento, 200


histérico, 394 miotónicos, 391
neuropático, 396 obsesivo-compulsivo, 397
ortostático, 394, 396 postsinápticos, 82, 83, 86
parkinsoniano, 395 presinápticos, 82, 83, 86
rúbrico, 396 Trigger, 42
simulado, 394, 395 Triple estimulación, 196
voluntario, de intención, de acción o cinético, Tropomiosina, 16
394 Tumores troncoencefálicos, 389
TENS, 404 Turns/amplitud, 127
Terminales, 33
ganancia o sensibilidad, 34 U
velocidad de barrido, 34 Umbral de despolarización, 22
Termodo, 408 Umbral motor, 193
Termotest, 408 activo, 193
Territorio de la UM, 119 en reposo, 193
Test regional de curare, 87 Unidad
Tetania, 370, 386 motora (PUM), 13, 17, 119
Tétanos, 384 muscular, 119
Tics, 397 sensitivo-motriz, 14
Tiempo de conducción motor central, TCMC, Unión neuromuscular, 79, 80
194 Upper centile amplitude, UCA, 129
Tiempo útil, 25
Toma de corriente, 36 V
Toma de tierra, 36 Valores de referencia, 44, 206
Tortícolis, 398 Variaciones anatómicas, 419
Toxina botulínica, 389, 393 Vía corticoespinal, 191
Transductores, 41 Vías del dolor, 403
Transformadores, 38 VIH, 367
Transmisión neuromuscular, 14 Voltaje, 29
Trastorno, 397
de la transmisión neuromuscular de origen presináptico, Z
143 Zidovudina, 367

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