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Departamento de Psicopedagogía
Parcial
La psicopedagogía y su importancia en la prevención de la violencia
Turno: mañana
Comisión: “A”
Año: 2021
Prevención en salud, educación y trabajo.
Índice
Ramírez Palacio et al. (2006) mencionan una serie de principios que diversos
autores identificaron como propios de la intervención psicopedagógica. Uno de ellos
es el el principio de prevención, el cual implica actuar de manera anticipada para
que no se presenten futuras dificultades que impactarían de forma negativa en las
personas o en el contexto. En relación a esto, puede mencionarse como una de las
Prevención en salud, educación y trabajo.
2. La violencia
En este escrito se pretende revisar el rol del psicopedagogo como agente
preventivo de la violencia en sus diferentes presentaciones. Debido a que la
violencia es una problemática social que afecta a las personas,
(independientemente del sexo, raza, edad, el nivel educacional, entre otros
factores), es importante mover recursos desde cada sector de la sociedad para
evitar sus consecuencias.
La violencia es considerada por la Organización Panamericana de la Salud
(OPS) como el “uso intencional de la fuerza física o el poder real o como amenaza
contra uno mismo, una persona, grupo o comunidad que tiene como resultado la
Prevención en salud, educación y trabajo.
Víctima reactiva La víctima responde a los ataques del agresor de forma inmediata y
contundente. De esta forma, minimiza su vulnerabilidad y desvía la
atención de los agresores a otras víctimas más débiles.
Víctima agresiva Aquella que proyecta las agresiones recibidas sobre otros individuos,
expresando su fuerza sobre ellos.
Víctimas seguras Los alumnos de excelentes calificaciones, exitosos y reconocidos por los
adultos de la institución, suelen ser el objetivo de muchos bullies.
3.2. Cyberbullying
Se define al cyberbullying como aquella situación en la que una persona menor de
edad sufre amenazas, hostigamiento, humillación u otro tipo de molestias de forma
reiterada y deliberada por parte de otras personas menores a través de medios
electrónicos. El acoso se puede dar por diferentes vías. Las más utilizadas son:
problemas, saliendo más impune que en los casos de bullying. Otra característica
que denota la gravedad de este fenómeno es el alcance que pueden llegar a tener
los ataques. Estas agresiones pueden viralizarse e incluso incitar a los espectadores
a llevar a cabo las mismas conductas. Esto genera en la víctima altos niveles de
angustia, porque siente que no puede huir del maltrato, ya que este no cesa al
terminar la jornada escolar y puede llegar a personas más allá de ese ámbito
Como se menciona anteriormente, el anonimato y la virtualidad son dos de las
características principales que distinguen al ciberbullying del bullying y que, en
ocasiones, convierten al primero en un fenómeno de mayor alcance (Berger, 2011).
Si bien la agresión es virtual, el daño para la víctima es real. El acoso afecta físico y
emocionalmente, produciendo una disminución en la autoestima y provocando
victimización psicológica, estrés emocional y rechazo social. Al igual que en el
acoso escolar, las agresiones deben ser una conducta sistemática, que se
mantiene en el tiempo y cuyos protagonistas son menores de edad.
servicios asistenciales y los protejan tanto de posibles represalias como del proceso
de revictimización. Dependen de los docentes, psicólogos, psicopedagogos,
médicos, policías y operadores del sistema de protección integral y judiciales, que
deben estar capacitados para ofrecer un abordaje apropiado al trauma que
atraviesan.
Los NNyA que han sido o son abusados sexualmente pueden estar
aparentemente asintomáticos. Muchos muestran síntomas que no son específicos ni
exclusivos del abuso sino que se asemejan a otros tipos de trauma, como por
ejemplo el maltrato físico y emocional, haber sido testigos de violencia o haber
vivido catástrofes. Las manifestaciones adquieren diferentes expresiones
súbitas o solapadas, a saber:
Conclusión
Los psicopedagogos deben estar atentos a todas las manifestaciones de violencia,
ya que dentro de su rol como orientadores educacionales no solo tienen una
posición privilegiada para realizar prevención, sino también para identificar
tempranamente esas situaciones que atentan contra el desarrollo e integridad de los
niños y adolescentes y evitar así, daños mayores o irreversibles. Por otro lado,
deben contar con la capacitación necesaria para saber actuar en los casos donde el
problema ya se encuentra instalado. Resulta indispensable el trabajo en equipo,
donde todos los miembros de la comunidad educativa se comprometan y busquen
desde su quehacer profesional prevenir la violencia.
Prevención en salud, educación y trabajo.
Referencias Bibliográficas
Garaigordobil Landazabal, M., Mollo-Torrico, J. P., & Larrain Mariño, E., (2018).
Prevalencia de bullying y cyberbullying en Latinoamérica:: una revisión. Revista
Iberoamericana de Psicología issn-l:2027-1786, 11 (3), 1-18. Obtenido de:
https://revistas.iberoamericana.edu.co/index.php/ripsicologia/article/view/1435-4972
https://www.unicef.org/argentina/media/9576/file/Las%20V%C3%ADctimas%20contr
a%20las%20Violencias%202019-2020.pdf
Abuso sexual contra niños, niñas y adolescentes Una guía para tomar acciones y
proteger sus derechos. https://www.unicef.org/argentina/media/1811/file
Berger, Christian: (2011) “Bullying: ficha”. Ministerio de Educación de Chile.
Prevención en salud, educación y trabajo.
FINAL
Link presentación:
https://docs.google.com/presentation/d/1eOFJB2Wfb4ardiGK8M_KFMLJptJEG16E
WN4wygtWC_c/edit?usp=sharing
Violencia y discapacidad
ESTADÍSTICAS
Los niños con discapacidad sufren actos de violencia con una frecuencia casi
cuatro veces mayor que los que no tienen discapacidad, según una revisión
encargada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y publicada hoy en
la revista médica The Lancet.
Los resultados de la revisión indican:
Tanto los enfoques teóricos como las investigaciones que se han centrado en
estudiar al menor discapacitado como víctima de maltrato, tienden a encontrar
que los niños con discapacidad tienen mayor vulnerabilidad frente a diversas
formas de abuso
Sin embargo, son muchas las realidades que se recogen dentro de esta definición: el
abandono o negligencia, el maltrato emocional, el maltrato físico, el abuso sexual, el
maltrato prenatal, la mendicidad, la corrupción, la explotación laboral, el síndrome de
Münchhausen por poderes o el maltrato institucional (Palacios y cols., 1998).
FACTORES DE RIESGO
trabajo, etc.), factores todos ellos —como explicaremos más adelante— que
apoyan el hecho de que, posiblemente sufran un índice mayor de violencia que el
resto de colectivos de mujeres. Es decir, que creemos que las mujeres con
discapacidad no sólo son víctimas de violencia familiar o doméstica, sino que
también padecen maltrato institucional, laboral, etc., pero que el tema ha
recibido escasa atención en los estudios generales sobre violencia.
Se entiende también como una limitación considerar que la discapacidad sea el resultado
directo de una deficiencia y no el resultado de hechos de la sociedad que pueden ser
cambiados. Aunque pueda resultar una definición útil para el personal médico cuando
diagnostica y trata las deficiencias suele resultar inadecuado cuando se aplica, por ejemplo,
para la planificación social, pudiendo conducir a generar servicios que «ayuden» a las
personas discapacitadas a superar su condición, y sean «compensados» de sus
deficiencias, segregándola en servicios y unidades especiales.
Además, la consideración derivada del modelo puede resultar negativa para la forma en la
que las personas con discapacidad se perciben a sí mismas, internalizando mensajes
negativos sobre su propia condición y las dificultades que representa dicha condición para
la participación social, relacionándolas con limitaciones propias.
DISCRIMINACIÓN
dos hechos importantes:
● uno es que cuando hablamos de discriminación por discapacidad no sólo nos hemos
referido a comportamientos ligados a ciertas situaciones, sino que también hacemos
mención a actitudes de rechazo, desprecio e indiferencia que se manifiestan en
distintas circunstancias, («Rechazo verbal, ridiculizarte, ignorarte, despreciarte,
insultarte» que señalan las propias personas con discapacidad en el informe del
CERMI) e incluimos también la sobreprotección o «solidaridad mal entendida» que
una buena parte de personas con discapacidad declaran como manifestaciones de
su situación de discriminación.
● existencia de una serie de barreras de tipo físico (arquitectónicas, de transporte, de
comunicación) y social (actitudinales, de género) que funcionan como obstáculos
que impiden o limitan la libertad de movimientos de las personas y dificultan su
desarrollo como ciudadanos. Es evidente que la discriminación condiciona
negativamente las posibilidades de desarrollo personal y de participación social y
dificulta la integración dejando fuera o en los márgenes a las personas que la
padecen.
Según los informes de Amnistía Internacional, la pobreza y la marginación social son
variables que se añaden al género y agravan la posibilidad de sufrir tortura y malos tratos.
En este sentido, las mujeres con discapacidad tendrían una mayor vulnerabilidad para
padecer actos de violencia dado que se trata de un colectivo en riesgo de exclusión social.
En un análisis realizado en el Proyecto Metis de la iniciativa europea Daphne (1998) son
señalados algunos factores que evidencian esta vulnerabilidad. Se trata de mujeres:
• Menos capaces de defenderse físicamente.
• Algunas de ellas presentan problemas de comunicación por lo que aumenta su dificultad
para expresar los malos tratos.
• Con dificultades para acceder a servicios convencionales de orientación, que debido a la
existencia de barreras arquitectónicas les resultan inaccesibles.
• Con una mayor dependencia de la asistencia y cuidados de otros, por lo que aumenta su
miedo a perder los vínculos y la provisión de cuidados si denuncia
Nosek y Howland (1997) señalan posibles causas que contribuyen a la mayor vulnerabilidad
de las mujeres con discapacidad:
• Dependencia de los demás para el cuidado durante más tiempo.
• Negación de sus derechos humanos como resultado de ser percibidas sin poder. • El
maltratador percibe que tiene un menor riesgo de ser descubierto.
• La dificultad de las víctimas de ser creídas.
• Menor información acerca de lo que es apropiado/inapropiado en aspectos relacionados
con la sexualidad.
• Mayor aislamiento social y mayor riesgo de ser manipulados.
• Mayor indefensión física y vulnerabilidad en lugares públicos.
En lo que respecta al vínculo paterno filial, lo que contribuye a una correcta adaptación y
crecimiento es abrazar los sentimiento ambivalentes que se producen en esta relación
desde un principio: inseguridad, culpa, miedo, rechazo, que a su vez se relacionan con
sentimientos positivos, creando interacciones complejas.
NEGACIÓN:
Es una reacción que se sigue de manera inmediata luego de la pérdida, con frecuencia
viene acompañada de un estado de shock, embotamiento emocional e incluso cognitivo.
En ocasiones se manifiesta como negación de la pérdida, pero no siempre sucede así,
puede ser más difuso o abstracto ( negar la importancia de la pérdida o de su carácter
definitivo.
En el caso de las familias de un hijo con discapacidad se puede pensar que hay un error en
el dx.
IRA:
Cuando se supera la negación, la persona experimenta sentimiento de frustración y de
impotencia con respecto a la propia capacidad de modificar las consecuencias de la
pérdida.
La frustración trae el enojo y la ira.
En esta etapa, la persona busca atribuir la culpa de la pérdida a algún factor, como puede
ser otra persona o incluso a sí mismo.
En el caso de la discapacidad----- pensar que uno o la pareja tiene genes defectuosos.
Prevención en salud, educación y trabajo.
Se debe superar esta frustración, ya que se relaciona con intentos psicológicos inútiles de
que el estado emocional y el contexto se mantenga igual que antes de la pérdida.
NEGOCIACIÓN:
La persona guarda la esperanza de que nada cambie y de que puede influir de alguna
manera en la situación.
Dentro del ejemplo, aquí entrarían los intentos por buscar una cura a la discapacidad,
aunque se sepa que no existe tal cosa aún.
DEPRESIÓN:
ACEPTACIÓN:
Esta fase genera un estado de calma debido a que la persona acepta que las pérdidas son
parte natural de la vida humana.
Se relaciona con la inevitabilidad de la pérdida y por ende el proceso de duelo.
Ahora, si bien la crisis que experimentan las familias frente al diagnóstico de discapacidad
es un factor de riesgo para trastornos y dificultades en el seno familiar, muchas personas se
desarrollan esa situación de forma sana. Esto se debe a que son personas resilientes.
La resiliencia se puede definir como la capacidad humana para hacer frente a las
adversidades de la vida, superarlas o incluso ser transformado por ellas. Es parte del
proceso evolutivo y debe promoverse desde la niñez.
La resiliencia depende de ciertas cualidades del proceso interactivo del sujeto con otros
humanos responsables de la construcción del sistema psíquico humano. no se nace
resiliente, sino que se promueve. Esto es muy importante ya que resulta un factor protector
y preventivo para la adaptación en general y en especial para superar las crisis que la vida
nos arroja.
Una familia resiliente es aquella que al estar inserta en una situación de adversidad, tiene la
capacidad de utilizar aquellos factores para sobreponerse a la adversidad, crecer y
desarrollarse adecuadamente, llegando a madurar y crecer pese a los pronósticos
desfavorables.
Las familias tienen ciertas características que les permiten ser resilientes:
- Humor familiar, para transformar ciertas situaciones en algo que puede hacer reir.
- Capacidad de proyectarse a futuro y anticipar tiempos mejores, sin ilusionarse
falsamente.
- Desculpar, para que nadie en la familia sienta el peso de la situación como propio.
- Capacidad de comunicarse abiertamente y de expresar emociones
Prevención en salud, educación y trabajo.
- Posibilidad de experimentar en conjunto sensaciones de complicidad y pertenencia.
- Ser flexibles y creativos para afrontar distintas situaciones
- Ejercer funciones de cuidado y preservación de forma estable y firme
- Capacidad de superar impotencias u obstáculos, no rendirse facil
Para lograr una resiliencia relacional, Froma Walsh plantea la importancia de:
- Reconocer los problemas y limitaciones que hay que enfrentar
- Hablar abiertamente de los problemas
- Registrar los recurso personales y colectivos existentes
- Organizar y reorganizar las estrategias y metodologías tantas veces como sea
necesario, evaluando logros y pérdidas.
PSICOPEDAGOGÍA FORENSE
http://www.pensamientopenal.com.ar/system/files/2016/04/doctrina43165.pdf
Forense: para la Real Academia Española (2001), viene del latin Forensis, que
significa “perteneciente o relativo al foro”, y de Forum, que hace referencia a las
plazas o lugares públicos, donde se impartía justicia en la antigüedad. Se entiende
que en la actualidad, este concepto refiere a todo aquel que interviene en el foro o
sala de justicia, es decir, a todos los profesionales que participan en un proceso
judicial.
El Área de Psicopedagogía Forense del Poder Judicial fue creada con el objetivo de
generar un espacio de evaluación, diagnóstico e intervención en procesos judiciales.
MODALIDAD DE TRABAJO:
Existen dos instancias de intervención:
1) pericial (evaluaciones psicopedagógicas, aplicaciones de tests, donde se trabaja
con la persona) y la otra
2) de campo: Se va a las escuelas, no a hacer evaluación, pero sí conocer la
situación. Según sea el caso, de familia, donde el juez solicita que se aborde la
institución para conocer el rendimiento del menor, situación en la que llega a la
escuela (en casos de regímenes de visita, de divorcios conflictivos, entre otras)”