El mundo se ha caracterizado por regirse bajo un sistema
patriarcal el cual fue elaborado por hombres y mujeres en
un proceso que duro casi 2.500 años en completarse. La primera forma de patriarcado apareció en el estado arcaico y se ha seguido desarrollando hasta el día de hoy como lo conocemos, este sistema rige en todos los ámbitos de la vida social según los dominios culturales. Las mujeres suelen verse a sí mismas como representantes de otras mujeres. Por ejemplo, un estudio acerca de los legisladores de Estados Unidos descubrió que las mujeres se sentían especialmente responsables a la hora de representar a otras mujeres y se consideraban a sí mismas más capacitadas para representar sus intereses. En Irlanda del Norte, por ejemplo, casi una tercera parte de las votantes pensaban que una mujer representaría mucho mejor sus intereses. El NDI sostiene que la participación equitativa de las mujeres en la política y el gobierno es esencial para construir y sostener la democracia, lo cual es razonable, puesto que la participación de las mujeres en pro de la democracia ya que ellas manejan muchas veces perspectivas y puntos de vista diferentes a los hombres. La participación política de las mujeres conduce a beneficios tangibles para la democracia, incluyendo, entre otros, mayor receptividad hacia las necesidades de la ciudadanía, más cooperación entre partidos y etnias y una paz más sostenible. Conforme más mujeres alcanzan el liderazgo dentro de los partidos políticos y resultan elegidas a cargos legislativos en cantidades significativas, estas instituciones tienden a priorizar ciertos temas, como la salud, la educación y los problemas económicos que impactan la vida diaria de los ciudadanos. NDI reconoce que las mujeres deben participar en pie de igualdad en el proceso del desarrollo democrático; como activistas, funcionarias elegidas, y electoras, sus aportaciones son cruciales para la construcción de una sociedad estable. Ante lo planteado, considero que un presidente podría incluir en su PND políticas de estado para educar a la sociedad sobre los derechos e inclusión igualitaria de la mujer en cargos públicos, ejercer liderazgo en un entorno igualitario de género.