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Coordinadora
LASÍAS
DE
N
LAS
CONTEXTOS
EDUCATIVOS
Diputación 279
08007 Barcelona
davinci@davincicontinental.com
ISBN: 978-84-92651-52-8
Depósito Legal: C 447-203
Impresión: Ulzama
1. INTRODUCCIÓN: .
4. Propuesta práctica............................................................................................................................................... 82
5. Síntesis.......................................................................................................................................................................... 88
6. Referencias bibliográficas............................................................................................................................ 89
Este libro que tiene en sus manos es resultado de un largo y profundo trabajo
colaborativo que fundamenta la posibilidad de realizar acciones formativas con
tecnologías de la información y comunicación (TIC) en entornos no formales.
Surge desde la necesidad vivida, con los estudiantes de Pedagogía y Educación
Social, de tener unos textos básicos y claros de utilidad para abordar los concep-
tos y propuestas más importantes de las TIC en contextos educativos no formales,
ya que para los formales existe una literatura indudablemente más abundante.
Frente a un conjunto considerable de bibliografía en estos últimos, ciertamente
encontramos sólo algunas publicaciones en nuestro contexto, como la coordinada
por Sevillano (2008) junto a la presente obra, en los primeros.
Este libro es una aportación, amplia y rigurosa pero al mismo tiempo accesi-
ble, no dirigida -expresamente- al campo de la educación formal al entender que
hay necesidad de contar con material y recursos destinados a este otro campo.
“Las tecnologías de la información y la comunicación en el ámbito socioeduca-
tivo” está dirigido preferentemente a estudiantes, pero no sólo. El profesional de
la educación está acostumbrado a comprobar que aquellos con quienes trabaja
son adaptables y responden a una tecnología rápidamente cambiante, por lo que
demanda un conocimiento base en el campo de las tecnologías, que en muchas
ocasiones será germen de su trabajo posterior en el contexto.
Indudablemente, la acción pedagógico-social con tecnologías viene marcada
por el conocimiento de los programas, los agentes o los contextos, pero en esta
obra entendemos que el descriptor clave son las tecnologías de la información y
comunicación. Y en ellas nos centramos, con una doble finalidad, por una parte
aportar la base con la que analizar proyectos educativos con TIC y, por otra, servir
de guía para comenzar a diseñar en equipo proyectos de aplicación.
Por eso he querido contar con especialistas en TIC que de un modo u otro
vienen trabajando desde el ámbito académico en educación no formal y TIC, tra-
tando de responder a las demandas que la sociedad nos hace, a través de nuestra
profesión común. Participan en este libro un conjunto de especialistas expertas en
TIC, profesoras de materias relacionadas con las TIC en Pedagogía y Educación
Social, de distintas universidades (Barcelona, Córdoba, Granada, Jaén, Las Pal-
mas, León, Murcia, Santiago de Compostela UNED). Y esto no es casual. Aun-
que estamos lejos de los momentos en los que se pensaba que en la tecnología la
variable género era determinante, no cabe duda de que aún queda mucho trabajo
por hacer. También se ha recorrido camino, pero no bastante, en el camino de la
igualdad académica y profesional en Educación Superior. Quiero expresar en es-
tas líneas mi más sincero agradecimiento junto a un reconocimiento especial por
las dificultades y barreras que tenemos que superar a diario las autoras, expertas
en TIC y educación, junto a la necesidad de superación de cara a construir un
nuevo espacio socio-educativo más equilibrado.
La secuencia de los capítulos contiene las concreciones básicas de un libro
sobre TIC en Educación en dos partes: los capítulos 1 a 4 reflejan la situación de
la educación en la sociedad del conocimiento, las políticas oficiales en materia
de educación y TIC, así como los principales aspectos organizativos y didácticos
a tener en cuenta en la aplicación de las TIC a la educación. A partir del capítulo
4 (Análisis, evaluación y selección de TIC) abordamos los aspectos prácticos y
concretos de los medios de comunicación social y la alfabetización audiovisual,
audiovisuales y videojuegos, materiales multimedia, e-learning, software social
y redes. La mayor parte de los capítulos desarrollan una parte de teoría y otra
parte de experiencias, proyectos, aplicaciones prácticas en acción familiar, terce-
ra edad, desarrollo comunitario... etc. Pero indudablemente a lo largo de todo el
texto se advierte la especial relevancia de los contextos de aplicación de las TIC.
Siendo éste un libro sobre TIC, conviene precisar unas líneas sobre el ámbito
al que se aplican. Trilla (2003) advierte que los términos de educación informal y
no formal comenzaron a ser populares en la “Conference on World Crisis in Edu-
cation”, de donde surgió la importante obra, La crisis mundial de la educación de
P.H. Coombs, publicada en 1968, que centró su atención en la necesidad de crear
medios alternativos de educación junto a la educación formal. Por tanto, tenemos
en cuenta la existencia de una educación formal, informal y no formal (tomada
de Coombs y sus colaboradores), clasificación de utilidad para delimitar a qué
nos referimos cuando hablamos de las TIC en “contextos educativos variados”.
Es bien conocida la descripción de Coombs de la educación no formal como
“toda actividad organizada, sistemática, educativa, realizada fuera del sistema
oficial, para facilitar determinadas clases de aprendizaje con campos particulares
de población, tanto adultos como niños” (Coombs y Ahmed, 1975: 27)., cit. por
Vázquez, 1998). La educación no formal se refiere a todas aquellas instituciones,
Referencias
A menudo nos preguntan, nos preguntamos, cómo deberían ser los planes de
estudio de las distintas carreras (hoy grados) que preparan para poder responder
a las necesidades educativas cambiantes y crecientes de la sociedad actual. ¿Qué
les sería imprescindible aprender a los estudiantes de Pedagogía y Educación
Social en la Universidad? ¿Qué conocimientos, saberes, habilidades, destrezas
competencia les son totalmente ineludibles para poderse enfrentar con un mínimo
de profesionalidad a su primer trabajo? La respuesta no parece única ni simple,
pero cada vez se hace más patente la imposibilidad de poder intervenir con sen-
tido y responsabilidad en los procesos educativos, formativos y sociales de las
diferentes personas si no logramos comprender la complejidad del mundo en que
vivimos.
Hace unos años, a una de nosotras, una recién nombrada decana de educación
de una prestigiosa universidad extranjera, le preguntó cómo organizaríamos un
currículo para los estudiantes de Pedagogía, si tuviésemos plena libertad para
diseñarlo. La respuesta, nada improvisada ya que es un tema que llevamos de-
batiendo durante años y que nos sigue frustrando cada vez que se promueve un
nuevo plan de estudios (como ahora los grados europeos), fue la siguiente.
En primer lugar dejaríamos de hablar de asignaturas. Comenzaríamos a tra-
bajar con los docentes la idea de que lo importante no es que nuestros estudiantes
aprendan lo mismo que nosotros sabemos y centren su atención en contestar a las
preguntas que les hacemos dentro del marco de nuestra disciplina (o de la visión
que tengamos de ella). Lo importante es cómo nuestra disciplina puede contribuir
al desarrollo de un conocimiento transdisciplinar que posibilite entender y dar
una mejor respuesta a los fenómenos y problemas del ámbito de la educación.
Esta idea conecta con las propuestas de un conjunto de autores. Por una parte,
para Morin (2001), existe una falta de adecuación cada vez más grande, profunda
y grave entre nuestros saberes discordes, troceados, encasillados en disciplinas
y unas realidades y problemas cada vez más multidisciplinares, transversales,
multidimensionales, transnacionales, globales y planetarios. Porque cada vez se
hacen más visibles los conjuntos complejos, las interacciones y retroalimentacio-
nes entre las partes y el todo, las entidades multidimensionales y los problemas
esenciales. Porque como sugieren Aurelio Pecci y Daisaku Ikeda: “El enfoque re-
duccionista que consiste en remitirse a una sola serie de factores para organizar la
totalidad de los problemas plantados por la crisis multiforme que atravesamos ac-
tualmente, es menos una solución que el problema mismo” (En Morin, 2000:15).
De este modo,
“cuanto más multidimensionales se vuelven los problemas, más se da la
incapacidad de considerar su muntidimensionalidad, cuanto más progresa
la crisis, más progresa la incapacidad de pensar en la crisis; cuanto más
planetarios se hacen los problemas, más impensados se vuelven. Una
inteligencia incapaz de considerar el contexto y el complejo planetarios
nos hace ciegos, inconscientes e irresponsables” (Morin, 2000:15).
Modo 1 Modo 2
Tipo de conocimiento
• disciplinar • transdisciplinar
• caracterizado por la homogeneidad • caracterizado por la heterogeneidad
• jerárquico y tendente a preservar su • heterárquico y tendente a transcender
forma su forma
Control de calidad
• Calidad: juicio de los colegas sobre las • Calidad: se determina por un conjunto
contribuciones de los individuos. de criterios más amplios que refleja
la variada composición social de su
sistema de revisión.
• Control: selección minuciosa de los • Control: se añaden criterios
considerados competentes para actuar adicionales en el contexto de
como colegas lo que se determina en aplicación, incorporando una gama
parte por las contribuciones previas a la diversa de intereses intelectuales,
disciplina. sociales, económicos y políticos.
Coherencia
• Las normas sociales y cognitivas se • Emergen normas apropiadas para el
adaptan mutuamente y producen conocimiento transdisciplinar.
conocimiento disciplinar.
• Se pone el énfasis en la creatividad • La creatividad se manifiesta como
individual como la fuerza motriz del un fenómeno grupal, en el que la
desarrollo. contribución individual es parte del
proceso.
• El conocimiento ha sido acumulado • El conocimiento ha sido acumulado
mediante la profesionalización y la mediante la repetida configuración
especialización institucionalizada en las de recursos humanos en formas
universidades. organizativas flexibles y pasajeras.
Y convenir con este autor que desafió de los desafíos es que la reforma de
cualquier enseñanza sea capaz de conducir a la reforma del pensamiento y la re-
forma del pensamiento pueda conducir a la reforma de la enseñanza.
Tras estos tres puntos clave, una carrera o grado de Pedagogía, Educación
Social o Magisterio, de cuatro años se podría organizar mediante cuatro líneas de
investigación base en las que convergerían todos los conocimientos necesarios.
Todas ellas, además de posibilitar la adquisición de conocimiento situado y con
sentido sobre los distintos temas, tendrían que garantizar la adquisición y el desa-
rrollo de competencias (conocimiento, habilidades, actitudes) investigadoras que
permitiesen a todos los implicados (no solo a los estudiantes) seguir aprendiendo
a lo largo de la vida.
Primer año. Línea 1: El mundo en que vivimos. Características de la sociedad
en la que vamos a desarrollar nuestro trabajo. Hoy la denominamos de la Infor-
mación, del Conocimiento, Digital, pero también Postindustrial y Neoliberal. El
proceso de investigación permitiría, tanto a estudiantes como a docentes, no solo
explorar las configuraciones y, por tanto, los retos de sociedad actual y los ante-
cedentes históricos de los cambios acaecidos, sino también identificar las claves
de los mismos y prepararlos para seguir analizando, interpretando e interviniendo
en un mundo que siempre será cambiante.
Los individuos e instituciones que tienen poder para crear opinión y represen-
tar la realidad han venido proponiendo diferentes denominaciones para las dife-
rentes etapas por las que ha atravesado la humanidad. En torno a los años ochenta
se comenzó a hablar de la era o sociedad postindustrial, concepto que daba cuenta
de cambios fundamentales en los modos de producción. Por la misma época co-
menzó un cuestionamiento de los valores y planteamientos de la Modernidad,
y aparecieron un buen número de publicaciones y propuestas caracterizando
nuestra sociedad como postmoderna (Lyotard, 1984). En los últimos años, a la
perplejidad política, social, económica y cultural de la condición postmoderna,
hay que añadir los efectos producidos por la proliferación de los desarrollos de
las aplicaciones de las tecnologías de la información y la comunicación. La in-
gente producción de herramientas para generar, almacenar, transmitir y acceder
a la información y la constatación de que la materia prima más preciada en este
momento parece ser la propia información, la generación de conocimiento y la
capacidad para seguir aprendiendo a lo largo de toda la vida, han llevado a de-
nominar a nuestro tiempo como Sociedad de la Información o Conocimiento.
Aunque cabe tener en cuenta que la mera información no es conocimiento, que
éste necesita un conocedor que se la apropie y le dé sentido.
Una característica de esta sociedad es el aumento exponencial del volumen de
información que diariamente se produce, manipula, gestiona, almacena y trans-
mite en el mundo. En un solo día, se elabora y distribuye un volumen de datos
mayor del que una persona puede asimilar y dar sentido a lo largo de toda su vida.
La celeridad del desarrollo y la diversificación de los soportes de la información
ponen al alcance de los ciudadanos un impresionante volumen de información
y conocimiento elaborado. Pero también ponen al descubierto y profundizan las
Como hemos visto, son muchos los motivos y razones que justifican la in-
tegración de las tecnologías de la información y la comunicación en los planes
docentes de los nuevos grados de Pedagogía y Educación Social. Aquí vamos a
desarrollar cinco de ellos que consideramos esenciales.
La Universidad debe dar respuesta a diferentes mundos el de la investigación,
la docencia, la innovación, la gestión (Sancho, 2001; Sancho, Creus, Padilla Pe-
try, 2010) y para todos estos mundos este tipo tecnologías pueden y deben favo-
recer nuestra labor.
Las TIC se han ido humanizando y democratizando haciéndose cada vez más
cercanas a un mayor número de personas. Esa mayor accesibilidad hace posible
que estén o puedan estar presentes en los diferentes ámbitos de lo social y de
lo educativo. La Universidad no puede dar espalda a esta realidad, y ha de dar
respuestas educativas formativas, investigativas al respecto. Siempre desde una
visión crítica que desarrolle el criterio de los estudiantes (futuros profesionales) a
la hora de seleccionarlas y utilizarlas
Las TIC se han ido transformando, están en continuo proceso de cambio, y
por tanto, conocerlas y utilizarlas significa estar involucrado en un proceso de
aprendizaje permanente. Eso exige que los profesionales, incluidos los formado-
res, estén actualizados.
Los nuevos grados, desde el planteamiento del Espacio Europeo de Educación
Superior, dan mayor protagonismo a los estudiantes y las TIC cubren una doble
funcionalidad: la de aumentar e empoderamiento como estudiantes, pero también
de alta transferibilidad para su profesión educativa y social.
La apuesta por una educación abierta y un aprendizaje invisible (Cobo y Mo-
ravec, 2011) evidencia una serie de demandas desde las entidades sociales que
emplearan a los futuros profesionales y que exigen una alta adaptación al cambio
y a la mejora continua. La Universidad y la formación no acaba en el título de
grado sino que universidad y sociedad ahora más que nunca están en un proceso
sinérgico claro.
Del recorrido por este capítulo se desprende que con el uso de las TIC inten-
tamos propiciar:
–– La mejor decisión
–– La motivación
–– El realismo y transferencia
–– La reflexión y la indagación
–– La innovación y la sinergia
–– El empoderamiento
–– La red de redes
–– La integración de las tecnologías
La mejor decisión
Para poder escoger las tecnologías que respondan mejor a las necesidades
educativas y formativas, tenemos en cuenta tres elementos claves:
La motivación
Las tecnologías bien utilizadas logran o pueden lograr un alto grado de im-
plicación de los estudiantes y de motivación. Son muchos los ejemplos que po-
demos aportar desde nuestra experiencia docente: tecnoautobiografías, los blogs,
las wikis, las webquests, etc. Son muchas y amplias las experiencias que tenemos
como grupo Indaga’t (algunas de ellas hechas públicas en nuestra web). Un ejem-
plo claro son las bandas sonoras como metáfora de lo aprendido en el curso, y la
respuesta de los estudiantes:
“Casi nunca aprendes solo, pero también es muy difícil hacerlo en compañía.
Por eso considero esta coreografía de Nederlands Dans como una metáfora
del trabajo en equipo y de lo que ha pasado entre nosotras. Escuchar en
torno a ti en todos los sentidos, saber cómo se mueve quien tienes detrás
aunque no tengas ojos en la nuca y no olvidar nunca que tienes equilibrio
porque un compañero te hace de contrapeso. ¡Espero que os guste! M. G.
M., Historia y Currículo de Educación Artística. (2009: http://www.youtube.
com/watch?v=Fos48yxAUk4).” (Hernández y otros, 2011:49).
El realismo y la transferencia
La reflexión y la indagación
Nuestra apuesta es por no solo explorar las tecnologías que pueden responder
mejor a las necesidades y desafíos de cada ámbito de su trabajo y conocer sus po-
sibles funcionalidades, sino de promover y utilizar con el alumnado estrategias de
reflexión. La indagación está siempre presente en nuestro equipo docente, como
miembros de un grupo de innovación docente.
“Si hemos escogido este camino en Indaga’t es porque consideramos que
aprender no es proceso puramente cognitivo y didáctico. Que no se configura
como una actividad de transmisión/deglución. Se trata de llevar a los
estudiantes a inscribirse en un cierto tipo de relación con el mundo, consigo
mismo y con los otros, que proporcione placer y desafío, ya que siempre
implica una renuncia, provisional o profunda, de otras formas de relación con
el mundo, consigo mismo y con los otros”. (Hernández y otros, 2011:53).
La innovación y la sinergia
En los últimos años hemos ido constatando que las mismas entidades sociales
y educativas dan cuenta de los cambios producidos no sólo en el ámbito de las tec-
nologías sino a causa de la relación con ellas, de los sentidos de su utilización y de
su presencia en los lugares de trabajo. En particular se observa el gran cambio y la
innovación que subyace en la irrupción de las redes sociales y de la web 2.0. Sobre
todo para visibilizar procesos, buenas prácticas, etc. Estos hechos han favorecido o
están favoreciendo las sinergias entre entidades, entre usuarios de diferentes recur-
sos, y entre universidad y entidades educativas y sociales.
El empoderamiento
Las propias entidades parecen cada vez más conscientes de que que las NNTT
o las TIC se están convirtiendo en unas herramientas muy prácticas, sencillas y
efectivas de difusión y de activismo social y con mucha capacidad de impacto y,
La red de redes
La integración
4. Para (in)concluir
A largo del capítulo hemos intentado fundamentar esta propuesta, a la vez que
explicitar visiones posibles y acciones para avanzar hacia este deseable grado
de integración curricular. El camino no se presenta fácil, ni parece que estemos
en condiciones de comenzarlo inmediatamente al recorrer. Sin embargo, como
decía Bernard Shaw, “El hombre razonable se adapta al mundo; el irrazonable
intenta adaptar el mundo a sí mismo. Así pues, el progreso depende del hombre
irrazonable.”
Nosotras diríamos el hombre y/o la mujer o los individuos… Pero la idea es la
misma. Nuestra propuesta no es adaptarnos al mundo que nos hemos encontrado,
sino contribuir a mejorarlo.
5. Referencias
1. Introducción
Este capítulo ofrece una mirada sobre la política y las políticas educativas que
tienen que ver con las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC),
política y políticas que encuentran sus razones de ser más allá de los muros del
estado y de las 17 comunidades autónomas.
¿Qué caracteriza a las políticas educativas sobre las TIC? ¿Acaso son las po-
líticas educativas sobre las TIC diferentes a las políticas educativas en otros ám-
bitos? ¿Cuáles han sido -y son- las tendencias en este campo?
La primera cuestión a abordar es qué entendemos por política educativa. Nos
decantamos por la comprensión de la política educativa como ese conjuntos de
decisiones que el estado toma para distribuir recursos (aplicar medios en función
de determinados fines). La política pública habla del poder de instituciones como
el estado, las administraciones públicas, la iglesia, los sindicatos, la familia, los
centros educativos, los profesores, los estudiantes… En un constante camino de
ida y vuelta, las decisiones políticas atraviesan los muros de los distintos docu-
mentos normativos (leyes, decretos, normas, disposiciones, etc.) que las articulan
en las sociedades democráticas para convertirse en el pan nuestro de cada ins-
titución y de cada sujeto. Son doctrina y crean doctrina, regulan la vida de las
organizaciones educativas, socializan en valores y expresan valores.
Todos hacemos política, todos estamos implicados en ella en función de nues-
tras decisiones, claramente ideológicas, ciertamente más influyentes algunas que
otras, pues no se trata de diluir la diferente responsabilidad de instituciones y
sujetos.
¿Y qué decir de la política educativa en tiempos caracterizados por crisis eco-
nómicas (financieras) sostenidas como la que estamos viviendo? Una crisis eco-
¿Qué caracteriza a las políticas educativas públicas sobre las TIC? ¿Son éstas
diferentes a las políticas sobre otros temas? En opinión de Bastos (2009: 42-44),
éstas “son un ejemplo claro de políticas distributivas”, pues “buscan distribuir
parte de los recursos existentes a fines generales deseados por los actores públi-
cos con vistas a obtener resultados que se consideran de interés general”. Vistas
de esta manera, “no dejan de ser políticas públicas del mismo tipo que las demás
de su género”. Y también, estas políticas:
“no dejan de constituir el resultado de pugnas entre actores muy diferentes
entre sí, con intereses diversos y con situaciones de poder e influencia
dispares. Diferentes gobiernos implicados (local, autonómico, estatal
y europeo) y actores paraestatales (padres, sindicatos de profesores,
expertos…) pugnan por definir el problema de acuerdo con sus propias
visiones e intereses, por formular una respuesta conveniente a tal
problemática y por dotar de más o menos recursos, sean estos simbólicos o
materiales, para su correcta aplicación. Esto da lugar a políticas diferentes
según las distintas administraciones, pero de las cuales podemos extraer
una suerte de características comunes a nuestro entorno”.
cación en Galicia) (Cajaraville, 1990; Búa et al, 1996). Todos ellos, y otros no
mencionados, formando parte de nuestra historia más reciente.
Las lecciones aprendidas de estas experiencias nos remiten, entre otros aspec-
tos, a la desconsideración de centros y profesores por esta forma de proceder de la
política educativa, que revela tanto la desconfianza en sus saberes profesionales
y sus capacidades de aprendizaje como una perspectiva eminentemente técnica
en la concepción de su profesionalidad, dependiente en exclusiva de los dictados
de la política de la Administración educativa y ello, en ocasiones, a pesar de la
retórica de su concepción como profesionales reflexivos.
Los productos procedentes del desarrollo tecnológico van incorporándose al
mundo educativo a la velocidad que impone el mercado y los docentes tienen que
tratar de adaptarlos al mundo escolar. El proceso es invasivo y se produce más
allá de la voluntad de los agentes educativos (y a menudo sin una reflexión previa
del por qué y para qué, si pensamos que la escuela va más bien a remolque de las
demandas sociales) (Gewerc, 2002; Montero 2007, 2009; Sancho, 2006).
En el apartado siguiente analizaremos de forma más detallada las propuestas
que están vigentes para comprender los enfoques y criterios explícitos e implí-
citos y analizar las lógicas que van desde las políticas a las prácticas tanto en el
ámbito formal como no formal.
Como hemos visto, en España, tanto desde el gobierno central, como desde
cada una de las 17 comunidades autónomas, en los últimos 25 años, se han for-
mulado y aplicado planes y programas de incorporación e integración de las TIC
en los centros educativos. Cada nueva etapa inauguró un proyecto consolidando
propuestas que tendían a utilizar los recursos (en este caso tecnológicos) como
las llaves maestras para posibilitar cambios en la enseñanza en el contexto del
sistema educativo formal.
En concreto, y a través de todos estos años, y como producto de este conjunto
de planes y programas de las diferentes administraciones, según datos del año
2009, el 99,7% de las escuelas tiene acceso a Internet y el 67,1% con conexión de
banda ancha (alrededor de 512 kbps). Entre 2008 y 2009, el número de alumnos
por computador para la enseñanza y el aprendizaje era de 5.3 (años anteriores la
proporción era de 6.1) (MEC, 2009). Por otro lado, cerca del 70% de las escuelas
tienen una persona en la coordinación de las TIC, con funciones técnicas, docen-
tes y, si es necesario, proveyendo de apoyo a los alumnos.
Las políticas de integración de las TIC en las diferentes Comunidades Autó-
nomas varían en énfasis, enfoque y profundidad, sin embargo, las promesas de
cambio de los modelos de enseñanza con las que se realizaban las inversiones en
hardware, en la mayoría de los casos, fueron incumplidas, como lo manifiestan la
mayor parte de las investigaciones que han pretendido conocer y comprender qué
sucede en las escuelas cuando irrumpen las tecnologías.
Por ejemplo, una investigación realizada en Andalucía en el curso 2006-2007,
muestra que las TIC tienen presencia ocasional o muy limitada en las actividades
educativas, por lo que el impacto en las practicas de enseñanza es aún mucho
más bajo de lo esperado (Aguaded y Tirado, 2008). En Galicia, una investigación
desarrollada durante 2003-2004, concluye que en las escuelas se privilegia el uso
de las TIC en cuestiones de gestión y administrativas en detrimento de las de la
enseñanza. (Montero, 2007, 2009). El estudio desarrollado en Cataluña durante
2007-2010, muestra que el discurso que desarrollan las políticas educativas en los
últimos 20 años es ajeno a la realidad del día a día de las prácticas de las escuelas;
a las concepciones de enseñanza y a las condiciones de trabajo del profesorado.
Argumentan que las innovaciones en las escuelas investigadas no emergieron
desde las políticas, sino que muchas veces, a pesar de ellas y gracias al esfuerzo
del profesorado (Alonso Cano, et al., 2010).
Con todos estos antecedentes, surge el proyecto Escuela 2.0, de nivel estatal y
con la participación de la mayor parte de las comunidades autónomas (15 de las
17 más las ciudades de Ceuta y Melilla). Su objetivo central es el de “adaptar al
siglo XXI los procesos de enseñanza y aprendizaje, dotando a nuestro alumnado
de herramientas claves para su desarrollo personal y profesional, fomentando
además el capital humano y la cohesión social, y eliminando las barreras de la
brecha digital” (De Pablos, 2010:17). La propuesta se concreta en el Instituto de
Tecnologías Educativas (ITE), la unidad del Ministerio de Educación responsable
de la integración de las TIC en las etapas educativas no universitarias.
El proyecto, presentado por el Presidente del Gobierno en el debate del estado
de la Nación de mayo de 2009, tiene como objetivo fundamental la moderni-
zación de nuestro sistema educativo mediante la integración de las TIC. Esta
presentación muestra a las claras la envergadura del programa y el impacto po-
lítico que una propuesta como ésta pretende tener en el conjunto de la sociedad
española.
Se plantea un desarrollo de cuatro años, entre 2009 y 2013 y afectará a todos
los alumnos de centros sostenidos con fondos públicos de 5º y 6º de Primaria
(10-12 años) y de 1º y 2º de Educación Secundaria Obligatoria (12 a 14 años). En
total supondrá la distribución de más de 1.500.000 ordenadores portátiles para los
alumnos, más de 80.000 ordenadores para los profesores y las aulas, y la dotación
y equipamiento de unas 80.000 aulas digitales. El presupuesto global durante
estos cuatro cursos ascenderá a más de 800 millones de euros cofinanciados al
50% entre el Ministerio de Educación y las CC.AA. que decidan participar en el
programa (Pérez Sanz, 2010).
grama Escuela 2.0 en España9. La encuesta fue contestada por 4.500 docentes en
los meses de mayo y junio de 2011.
Entre sus conclusiones destacamos:
–– No existe una visión homogénea del profesorado ante las TIC y la Escue-
la 2.0. Existen diferencias entre las comunidades autónomas en función
de las políticas desarrolladas por cada una.
–– No está lograda la plena disponibilidad de las tecnologías, por lo que la
demanda se acentúa.
–– Las tecnologías se utilizan para actividades consideradas tradicionales:
buscar información en Internet, realizar ejercicios online, escribir en el
procesador de texto, usar la pizarra digital para realizar explicaciones.
–– Falta información sobre objetivos y características del programa.
–– El profesorado demanda más formación para llevar adelante las activida-
des que se esperan de ellos.
Más allá del análisis de la dudosa representatividad que puede reflejar este
estudio y la necesidad de matizar algunas de sus conclusiones10 lo que está claro
es que el salto entre las políticas explícitas y las prácticas la mayoría de las veces
resulta demasiado grande para poder encontrar algunas relaciones y similitudes.
Las políticas de integración de las TIC en los centros educativos han sido, du-
rante la última década, la niña mimada de casi todas las campañas electorales de
nuestro país y de la mayor parte de los países de nuestro entorno (véase Selwyn,
2011). Ha sido una década en la que, la innovación o su necesidad, ha estado en
boca de muchas de las acciones procedentes de organismos oficiales. El imperati-
vo de la innovación, sobre todo utilizando a las tecnologías como caballo de Tro-
ya, como un indicador más de la economía del conocimiento, se ha transformado
en un valor por sí mismo, más allá de los cambios reales que propicie o de los
procesos de mejora que sustente. Ha habido una demanda de continuo cambio,
como si el movimiento por sí mismo trajera la mejora, entendiendo ésta como una
paulatina adaptación a las condiciones que va imponiendo la economía de mer-
cado (véase Ball, 2007). Las presiones para el cambio de la escuela se sostenían
a partir de las necesidades de cambios estructurales de la economía del mercado
del conocimiento. En suma la economía de la globalización ha sido un importante
punto de referencia para las políticas nacionales (Ball, 2008, 2010).
¿Qué sucede con el cambio de década y a raíz de la crisis económica que atra-
viesa toda Europa?
9
Galicia, Murcia, Cantabria y Ceuta y Melilla no participan de este proyecto de investigación financiado por el
MICINN. El cuestionario de referencia tampoco incluye datos de Cataluña que, aunque participa en el proyecto,
ha demorado su procesamiento por problemas técnicos.
10
Pueden verse los resultados completos expuestos en http://www.slideshare.net/manarea/encuesta-prof-escue-
la202011?player=js
Releer y sumar hoy en día las cifras invertidas en los diferentes proyectos
que han generado insuficientes cambios en los sistemas educativos, merecería un
capítulo específico para su abordaje. Sobre todo cuando en el momento actual la
palabra que más sale a la luz es la del recorte, que siempre comienza por el per-
sonal docente, quien carga cada día con más responsabilidades.
Un rápido recorrido por los programas de los partidos políticos que se pre-
sentarán en las elecciones que tendrán lugar en España a finales de noviembre de
2011, permite percibir, que aquello que fue estrella cuatro años atrás, o que for-
maba parte de la agenda política tanto de la izquierda como de la derecha, brilla
por su ausencia. Son otros los reclamos y otras las necesidades. ¿Qué significa
esto? ¿El nuevo gobierno borrará los programas y acciones en las que se invirtió
dinero y esfuerzo en la última década?
Dados los antecedentes, no parece descabellado remitirnos a lo que sucede a
nuestro alrededor como un indicador de lo que podría suceder en nuestro país.
En Inglaterra por ejemplo, el nuevo gobierno conservador retiró todo el financia-
miento del estado para la utilización de la tecnología en las escuelas, además de
cerrar la BECTA11, la agencia británica que se ocupa de investigar, analizar y pro-
poner cuestiones relativas a la integración de las TIC en la educación. El impacto
de estos cambios desestabilizó a la comunidad profesional que se ocupaba de la
tecnología educativa como campo de estudio, cerrando en cadena instituciones
de consultoría y asesoramiento como Futurlab y dejando a las universidades sin
financiación para las investigaciones que se venían desarrollando. Además, el
fabricante de software RM (Research Machines) anunció una caída del 13 por
ciento en los precios tras el anuncio de la retirada de financiación, citando una
posible pérdida de valor de 200 millones de libras de los contratos. Del mismo
modo, la empresa de pizarras digitales interactivas “Promethean” vio una caída
del 20 por ciento en el precio de las acciones (Selwyn, 2011).
¿Podríamos leer la ausencia de la problemática de la tecnología en las escuelas
como un indicador de que se avecina algo similar a lo sucedido en Inglaterra?
¿Qué consecuencias tendrá para nuestras escuelas? ¿Cómo se entiende esta cues-
tión si al mismo tiempo se aboga por impulsar el conocimiento, la investigación y
la innovación como condición para transformarse en una economía competitiva?
Claro que en comparación con la contratación de profesores/as y enfermeras/
os y médicos, o el mantenimiento de las cuotas a la seguridad social, sería difícil
justificar el gasto de tecnología en la educación como una prioridad, y quizás re-
cuerde más al derroche producido en tiempos de holgura que a la inversión seria
y sistemática que apuesta por un servicio educativo público de calidad.
11
British Educational Communications and Technology Agency.
Nos estamos refiriendo a dos proyectos financiados respectivamente por el MEC en su convocatoria del Plan
12
Nacional de I+D+i 2005-08 (Referencia SEJ2005-08656) y la Xunta de Galicia (2006-09, referencia PGIDI-
T06PXIB214192PR). Comprendidos ambos bajo el acrónimo de PIETIC (Proyectos de Innovación con TIC).
5. A modo de conclusiones
Las TIC han sido utilizadas como instrumento político del discurso de la
innovación pero no se han arbitrado medidas suficientes para que ésta se pro-
duzca (formación sistemática y continua; organización de los tiempos escolares
más acorde con el uso de las TIC; contenidos relevantes para la formación en
la sociedad del conocimiento, continuidad del profesorado en el mismo centro,
etc.). Quizás por ello, se adaptan a la cultura vigente del centro educativo y a los
contenidos y los métodos de enseñanza que son habituales en ellos. Pero quizás
también, el discurso político de fondo oculte el escaso interés por aprovechar
realmente el potencial disruptivo de las TIC bajo el supuesto de incorporarlas sin
que transformen “demasiado”, los procesos de enseñar y aprender, eso sí, contri-
buyendo a “modernizarlos”. Limitar su potencialidad innovadora puede tener que
ver también con la presión de determinados colectivos, beneficiarios tradiciona-
les de la actividad educativa.
No cabe la menor duda, tras este recorrido, del valor simbólico que, hasta el
momento, han alcanzado en el discurso político. Quizás, como hemos puesto de
manifiesto, este valor simbólico esté dejando de surtir efectos en tiempos de crisis
económicas. ¿Será que los mercados desviarán su mirada hacia otros ámbitos en
tiempos de recortes presupuestarios también, ay, en la educación pública?
Decíamos al inicio de este capítulo, siguiendo a Bastos (2009), que las polí-
ticas educativas relativas a las TIC tienden a limitar su potencialidad innovadora
en la adquisición y gestión de conocimientos a favor de aquellos aspectos que
no cuestionen el status quo, una característica probablemente debida a la presión
de determinados colectivos, como editores y libreros. Por otro lado, el discurso
político sobre las TIC está cargado de simbolismo asociado a resonancias posi-
tivas, a ideas de progreso, por lo que estaría muy mal visto no apoyar algo que
parece contar con una aceptación universal. Si seguimos esta línea de pensamien-
to cabe hipotetizar que parece haber un diseño de políticas más encaminado a la
adaptación de las nuevas tecnologías a un entorno conocido y controlable, que
no modifique el status quo, que mantenga la esencia de la escuela tal como la co-
nocemos, que al aprovechamiento total de las potencialidades, en muchos casos
revolucionarias, que la potencialidad disruptiva de las TIC puede traer consigo.
Las respuestas que se dan desde los centros educativos (y que muchas veces
son catalogadas, peyorativamente de resistentes o conservadoras) no dejarían en-
tonces de ser coherentes con lo que las políticas (estatales y autonómicas) estarían
planteando como prioritario. Aun así, y como en estos contextos los procesos no
son lineales (ni vertical ni horizontalmente), siempre encontramos movimientos
refractarios al decir de Goodson (2010), que con su trabajo, reflexión y actividad,
logran que cambie la dirección de las propuestas. Muchos centros y muchos pro-
fesores y profesoras han decidido tener sus propias políticas con respecto a las
tecnologías, la enseñanza y el curriculum y se comprometen con la innovación y
el cambio sostenible, propugnando una educación con sentido para todos y todas.
6. Referencias
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DE PABLOS, J. (Coord.) (2010). Políticas educativas y la integración de las TIC
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1. Introducción
Las TIC son esenciales para mejorar el trabajo de centros, programas y servi-
cios, así como la calidad, el control y para facilitar la comunicación entre otros
beneficios y su estructura es un elemento esencial en esa mejora. En este capítulo
se presentan modelos y alternativas para su organización con objetivo de mejorar
su apoyo y rendimiento en centros programas y servicios. Las organizaciones
más innovadoras tienen un nivel de relación con las TIC más alto que las tradi-
cionales. También los centros educativos más avanzados hacen mayor uso de las
tecnologías que los centros tradicionales. Los programas y servicios más exitosos
son rápidos, flexibles y amigables, en ellos la tecnología tiene un papel destacado
y su organización es determinante en el éxito. La velocidad a la que se suceden
los cambios en este mundo hará que la mejor organización de los recursos tecno-
lógicos sea la que aún no se ha inventado y pueda inventar quien lea esto ya que,
según Shakespeare, estamos hechos de la materia de los sueños.
Las modernas teorías del caos ofrecen un método para descubrir orden y con-
cierto donde antes sólo se veía el azar, la irregularidad, lo impredecible, en una
palabra, lo caótico. Las tecnologías de la educación entraron en los centros con
un cierto caos, desorden y con poca sistematicidad. Por eso es interesante aportar
alguna línea organizativa en su inserción curricular y educativa. Ya señalábamos
anteriormente (Cantón, 2004) que la organización educativa actual se mueve en
dos líneas opuestas. La primera representada por el racionalismo clásico entiende
que todo el método consiste en el orden y la disposición de los objetos sobre los
cuales hay que centrar la penetración de la inteligencia para descubrir alguna ver-
dad. Nos mantendremos cuidadosamente fieles a él si reducimos gradualmente
las proposiciones complicadas y oscuras a proposiciones más simples, y luego,
si partiendo de la intuición de las que son las más simples de todas, procuramos
elevarnos por los mismos escalones o grados al conocimiento de todas las demás,
según Descartes, en sus Reglas para la dirección de la mente. La segunda postura
sostiene que la organización es una ciencia moderna que nos presenta recursos
para hacer frente a la complejidad, al caos actual donde la única certeza es la
incertidumbre como dice Nonaka (1995). ¿Los centros educativos son caóticos?
Pero la naturaleza tiene una presentación más compleja que las tecnologías de
la información y la comunicación en su aplicación a servicios y programas. La
organización es una ciencia con bases racionales y tecnológicas, que sólo en los
últimos años ha incorporado estructuras organizativas de tipo intuitivo y emo-
tivo. Realmente sus métodos estaban inspirados en la más estricta racionalidad
deductiva buscando únicamente la eficiencia que sólo con esas premisas parecía
previsible. Hoy los recursos tecnológicos son las herramientas para la gestión del
conocimiento, dentro y fuera de los contextos educativos. Se han revelado como
imprescindibles para su identificación, detección, reelaboración y puesta a dis-
posición de los miembros de la organización, sea formal, educativa o no formal,
las herramientas tecnológicas pueden proporcionar valor añadido al centro, al
servicio o al programa. Su organización sirve para facilitar, compartir, impulsar y
comunicar el conocimiento dentro y fuera de los miembros de una organización.
Un factor determinante en la propuesta organizativa de los recursos tecnológi-
cos es el contexto. No se pueden organizar igual ni adquieren el mismo nivel de
complejidad los recursos de un centro logístico de algo nivel militar, que los de
un centro educativo rural, o los de un programa de reinserción de delincuentes,
por poner ejemplos situados en los extremos de la propuesta. En nuestro caso nos
referiremos a centros educativos, a servicios y a programas, como usuarios de
una gama media de recursos tecnológicos para presentar propuestas que tienen
que ver con los condicionantes prioritarios de cada caso.
Maestros, educadores sociales, pedagogos y psicopedagogos son profesio-
nales técnicos, que, entre sus competencias profesionales, tienen como función
común la organización de los nuevos recursos que, dada la complejidad de la
sociedad, y del imparable avance del conocimiento, se presentan como una tarea
compleja que permite varias alternativas en su operatividad práctica. La negativa
a la innovación y a los cambios en centros, programas y servicios, produce orga-
nizaciones suicidas. Ahora bien, qué es más importante organizar: ¿las máquinas,
o el conocimiento y la forma de acceder a él? Quizás haya que combinar la ges-
tión de las computadoras y de las personas.
En el siguiente gráfico se representan las líneas básicas de la organización y
categorización de los recursos que seguidamente se analizan.
cia, además de ser una cualidad individual, también lo es organizativa; por ello las
organizaciones aprenden y se desarrollan. ¿Cómo aprender para organizar mejor
los recursos tecnológicos? El papel de las tecnologías es doble: como integradoras
del “saber organizacional” y como promotoras de un “rediseño de las organizacio-
nes”. Además existe un problema añadido como señala Bill Gates: nos queda un
largo camino que recorrer antes de que podamos ver cuánta tecnología puede apo-
yar realmente el aprendizaje y sobre ello hay discusiones y conclusiones diversas.
Los centros educativos, los programas y los servicios, son básicamente organi-
zaciones racionales que se caracterizan por: precisión, constancia, disciplina, rigidez
y seguridad. Estas premisas se basaban en el contexto político, económico, cultural
y social al que los centros servían de apoyo. La tecnología era inexistente o bien de
tipo primario con la clásica división de los recursos en impresos y audiovisuales.
Las propuestas de Vidorreta (1982) sobre cómo organizar los recursos en los cen-
tros fueron las más seguidas. También se distinguió la organización de los recursos
en función del espacio en centros específicos para tal función (centros de recursos
sectoriales) y centros de recursos colegiales (Cantón, 1988). Así las organizaciones
burocráticas se basarían en el establecimiento centralizado de objetivos según un pro-
ceso que se iniciaría en la dirección para descender en la escala jerárquica, orientados
a la eficacia. La aproximación tradicional (modelo secuencial) consiste en dividir el
proceso innovador en un conjunto de pasos secuenciales (estrategia de innovación,
exploración, análisis, desarrollo, tests, comercialización) que se apoya en el diseño de
una estructura burocrática: diferenciación de tareas funcionales, papeles claramente
definidos, toma de decisiones y elaboración de objetivos centralizados, y enfoque
hacia la eficiencia. El elemento crucial del modelo es el énfasis en la planificación
para racionalizar el proceso y eliminar retrasos y equivocaciones. Las formas organi-
zativas tradicionales han sido agrupadas bajo la denominación de modelos de forma
simple-unitaria y modelos de forma compleja-múltiple (Bueno Campos, 1996).
La organización racional de los recursos requiere personal más o menos espe-
cializado para la utilización de los mismos. Suele señalarse un especialista para
cada uno de los tipos de aula si el centro es grande; si es pequeño solamente un
especialista en multimedia atenderá toda la gama de recursos sea en una o en
varias aulas. Esta aproximación derivaría en la adopción de las nuevas formas or-
ganizativas clásicas: recursos de aula, de centro y de sector. Si el centro, servicio
o programa opta por un modelo orgánico racional de organización de los recursos
informáticos tendrá una de estas posibilidades que nos refiere Marqués:
Los centros de recursos sectoriales han perdido empuje y sentido con el avan-
ce de la tecnología. En la actualidad los recursos hipermedia distribuidos se en-
cuentran en Internet y en centros de gestión del conocimiento, con lo que estos
centros tienen menos sentido. La gestión del conocimiento en red y online nos
aproxima a otras modalidades organizativas más actuales. Sin embargo tienen la
ventaja de ser muy específicos para programas o servicios concretos, por lo que
su utilización aún tiene mucha aceptación, sobre todo en el medio rural.
Aunque todos los centros podrían disponer de una biblioteca virtual, digitalizan-
do sus propios libros, ello requeriría mucha inversión y no se obtendrían beneficios
hasta que hubiese transcurrido un largo periodo de tiempo. Por eso se recurre a las
bibliotecas virtuales comunes. Destacamos en esta línea un ambicioso proyecto
que trasciende las fronteras, pasando a ser una gigantesca y única unidad surcando
el ciberespacio, con cientos de ramificaciones multiplicaciones de diferentes o de
iguales textos. Esta biblioteca “universal”, es el proyecto de Hart, que tenía copia-
dos 10.000 títulos el año 2001, justamente al cumplirse los treinta años de inicia-
ción del camino. Esos títulos están a disposición de quien desee leerlos en Internet,
con sólo acceder al repositorio de libros y copiarlos a su propio disco rígido. A una
gran cantidad de ellos ya se puede acceder desde la dirección: http://promo.net/pg/.
Por el momento está muy centrada en la Literatura, pero progresivamente irá incor-
porando todo tipo de libros. También en Berkeley, una organización de expertos en
bibliotecas ha creado un sitio web, KidsClik, que facilita el acceso a recursos para
el estudio y el aprendizaje, clasificados por categorías.
La enciclopedia Wikipedia define intranet como “una red local que utiliza
herramientas de Internet. Se puede considerar como una internet privada que fun-
ciona dentro de una organización. Normalmente, dicha red local tiene como base
el protocolo TCP/IP de Internet y utiliza un sistema firewall (cortafuegos) que
no permite acceder a la misma desde el exterior” Cuando se accede a ella desde
el exterior, se convierte en una extranet. En el diseño o rediseño de las intranets
educativas, los profesores han ido entendiendo la importancia de una intranet de
centro (todas las universidades la poseen y algunos otros centros también), sino
que tienen a publicar en esa Internet propia algunas noticias, normas internas y
manuales. Destacamos las ventajas de la intranet como herramienta organizativa:
–– Usa una única interfaz para todos los contenidos (internos y externos)
–– Posee una mejor distribución y aprovechamiento de contenidos propios
y ajenos.
–– Permite un acceso directo y rápido del usuario final a las fuentes de in-
formación externas
–– Facilita la independencia y autoformación
–– Consigue sinergias entre Equipos docentes y departamentos así como
intercambios de experiencias entre iguales (con una fluidez del conoci-
miento horizontal y la colegialidad).
–– Facilita las reuniones técnicas para la reflexión sobre las mejores prácti-
cas, para trabajar en calidad y mantener actualizada la visión y misión del
centro con una fluidez del conocimiento horizontal y vertical.
–– La intranet se convierte en un centro de documentación que funciona
como unidad viva de información y comunicación.
–– Permite la identificación, definición y divulgación del conocimiento
esencial para el buen desarrollo de los proyectos y programas de innova-
ción específicos.
debe caracterizarse por su capacidad para integrar las herramientas y recursos ne-
cesarios para gestionar, administrar, organizar, coordinar, diseñar e impartir pro-
gramas de formación a través de la tecnología Internet/Intranet. La elección de la
plataforma adecuada o sistema orientado a la gestión y distribución de recursos
formativos será esencial, con el fin de dotar al responsable de definir los procesos
de aprendizaje de cualquier organización de las herramientas adecuadas para fa-
cilitar el cumplimiento de sus objetivos. En este ámbito es muy importante la per-
sonalización de la plataforma, es decir, la posibilidad de que cada centro adapte
una plataforma a sus propias exigencias y necesidades, dotándola de la flexibili-
dad; también se exige que el tiempo de implantación no sea demasiado largo, que
se ajuste a los estándares internacionales, integrar herramientas de administración
y gestión, de comunicación, de seguimiento y evaluación. La plataforma WebCT
fue desarrollada en el Departamento de Ciencias de la Computación de la Univer-
sidad de la Columbia Británica (Canadá). WebCT-ES, dependiente de rediris es
ampliamente usada para teleformación en las Universidades españolas (UNED,
UPN, Granada), etc. Pero existen otras plataformas como las de los Dominicos
para formación. Normalmente tienen una página de entrada con un menú que
sirve para acceder a los diferentes servicios educativos.
Organización por blogs. Un blog, weblog o bitácora, es una página web don-
de se recopilan cronológicamente mensajes de uno o varios autores, sobre una
temática en particular siempre conservando el autor la libertad de dejar publicado
lo que crea pertinente. También puede ser de un sólo autor, que contiene artícu-
lección de páginas web de hipertexto, cada una de las cuales puede ser visitada y
editada por cualquier persona. Realmente son sitios web escritos en colaboración
por un grupo de usuarios, que tratan sobre un mismo tema. Cualquiera puede par-
ticipar de inmediato y sus aportaciones son comentadas, ampliadas o corregidas
por el resto. Actualmente, el wiki más grande que existe es la versión en inglés de
wikipedia la enciclopedia libre colgada de Internet. Una característica que define
la tecnología de las wiki es la facilidad con que las personas Una versión web de
un wiki también se llama WikiWikiWeb. Se trata de un simple juego de palabras,
ya que las iniciales son «WWW» como en la World Wide Web.
Para concluir, señalamos que las nuevas formas organizativas de los recursos
se han configurado como respuesta a las exigencias del entorno desarrollando
modelos virtuales. Los modelos son de autor y pueden tener múltiples etiquetas.
En el primer grupo podemos señalar las derivadas de formas culturales tradicio-
nales: Child y McGrath (2001) señalan que los conceptos “posburocracia” (post-
bureaucratic), “posmodernismo” (postmodern), o “empresa flexible” (Volberda,
1998) expresan nuevas estructuras organizativas de tipo general.
El siguiente grupo recoge innovaciones organizativas de los recursos deri-
vados de la organización emergente: “federalismo” (Handy, 1992), “organiza-
ción en red” (Castells, 1996), “corporación virtual” (Davidow y Malone, 1992),
“empresa creadora de conocimientos” (Nonaka y Takeuchi, 1995) o “estructura
celular” (Miles et al., 1997) se centran en aspectos más específicos del nuevo
paradigma. Child y Mcgrath (2001) sintetizan las principales diferencias entre las
nuevas formas de organización alternativas y la estructura burocrática tradicional
referidas a: a) el establecimiento y difusión de los objetivos; b) los mecanismos
de integración, y c) los mecanismos de diferenciación.
Creemos con Castells (2000:296) que
“Cuanto más amplia y profunda es la difusión de la tecnología de
la información avanzada en fábricas y oficinas, mayor es también la
necesidad de trabajadores autónomos y preparados capaces y listos para
programar y decidir secuencias enteras del trabajo. (…) las tecnologías
de la información requieren una mayor libertad para que los trabajadores
mejor informados realicen plenamente todo su potencial de productividad.
El trabajador en red es el agente necesario de la empresa en red que las
nuevas tecnologías han hecho posible”.
Destaca en América Latina el interés por las TIC y el desarrollo del Programa
AL-INVEST que impulsado por la Unión Europea en 2011, intenta ampliar y es-
8. Bibliografía
1. Introducción
Cuando debemos decidir acerca de qué medio es el más óptimo para ser inte-
grado en una secuencia educativa, nos vemos en la necesidad primera de analizar
y por tanto evaluar varios medios y recursos para seleccionar aquel que consi-
deramos el más adecuado o idóneo. Sin embargo, esta decisión no es fácil de
tomar, ya que debemos sopesar diversos aspectos tal y como vemos a lo largo del
capítulo.
2. Análisis de TIC
4. Propuesta práctica
Análisis de la imagen
ÁMBITO PELÍCULA
La Mujer en el cine Te doy mis ojos
Sólo mía
Cicatrices http://www.youtube.com/watch?v=Iy3_zC_MXDA
La evolución de la mujer en los cuentos de Disney
http://www.youtube.com/watch?v=036SSE55oEc
La evolución femenina atrvás de los años http://www.
youtube.com/watch?v=ZWRP4KwksWY
Million Dólar Baby
Verónica Guerin 2003.
La canción de Carla, Carla’s song, 1996
Solas 1999
La Inmigración a El viaje de Said http://www.youtube.com/watch?v=mF_
través del Cine ZSCxlAIU
Extranjeras
Un Franco 14 pesetas
14 Kilometros
Manu Chao Clandestino
Espaldas Mojadas http://www.youtube.com/watch?v=f-
rzq2PDcrc
La Música y la
Inmigración Coti y Yadam, Una vida vale más
http://www.youtube.com/
watch?v=g2F7QKbVGco&feature=player_embedded
Flores de otro Mundo 1999
ESTRUCTURA
¿Qué te sugiere el uso del color?
Imágenes fotográficas o gráficos Estereotipos de género, fomenta la
jerarquización en las profesiones. Se
tiene en cuenta la multiculturalidad.
Describe problemas como la pobreza,
el hambre, la contaminación.
Logotipos
Conexiones a e-mail u otras páginas
Idioma
Lenguaje Académico, científico, popular,
periodístico…
Vocabulario Sexista, xenófobo…
Webs a analizar:
5. SÍNtesis
6. Referencias bibliográficas
Para empezar diré que en todos los tiempos y culturas las personas han buscado
comunicarse. Primero con los más cercanos, luego con los lejanos. A veces sobre
cuestiones de actualidad y en ocasiones en relación con asuntos trascendentes. Vida,
costumbres, normas, leyes, comercio, gobierno, política son cuestiones que se vienen
comunicando por diferentes medios, diríamos desde muy antiguo. En los libros clási-
cos se habla de las informaciones escritas en soportes duros y permanentes como en
ladrillos de barro cocido, en tablas de madera enceradas, en piedras, en huesos, en las
paredes de los edificios, en papiros, pieles, pergaminos, etc. La aparición del papel es
como quien dice de anteayer y la multiplicación del sonido o imagen más recientes
aún. La humanidad sin embargo se comunicó con anterioridad a estos inventos. Di-
ríamos que hubo una necesidad de comunicación y se encontraron medios y sistemas.
Es en los últimos tiempos cuando los medios de comunicación han crecido y se han
multiplicado tanto que se habla de su poder, de su inmenso poder, de su necesidad, de
su importancia, de su imprescindible presencia como reguladores de la vida pública,
ciudadana, social. Se habla pues de medios de comunicación de masas, de medios de
comunicación social, del cuarto poder, de los potentes medios de comunicación. Por
ejemplo, asistimos a los escándalos y abusos que la empresa de un magnate de la co-
municación como Murdoch realizaba en el Reino Unido y otros países contaminando
sus productos con prácticas ilegales. Por el contrario otros medios de comunicación
hicieron el buen servicio a la sociedad de dar a conocer las prácticas que algunos
gobiernos tienen en relación con la recogida de información para usos diversos. Me
refiero al caso Wikileaks que con cierta asiduidad informa de nuevas entregas. De este
modo, Wikileaks filtra miles de cables diplomáticos con los nombres de las fuentes
(La Opinión 31/08/2011). Más o menos todos tenemos una idea de que determinados
medios en algunas cuestiones son menos creíbles que otros porque son partidarios de
no sabemos bien qué intereses.
El panorama se complica si pensamos que el producto elaborado que se nos
presenta a la vista, o al oído es sólo una capa fina de lo que subyace en todo el pro-
ceso que para los consumidores es desconocido, pero del que esperamos se ajuste
a principios profesionales, legales y morales que avalen el producto final. Pero no
siempre es así... En la actualidad hay medios de comunicación que no están en la
cadena tradicional de tales, pero que están influyendo en la presentación al público
de los medios o mejor canales tradicionales. Las agencias de noticias son unos de
ellos. Ya no se limitan a ofrecer informaciones, elaboran reportajes para medios
impresos y audiovisuales completos. Las hay muy especializadas cuyos productos
de comunicación periodísticos encuentran cabida y acogida en su integridad en los
medios tradicionales, sin reelaboración alguna. También en los medios de comuni-
cación tradicionales hay ahorro de personal cualificado y por tanto el recurso al uso
de productos de terceros, ajenos al propio medio. Tenemos en el campo audiovisual
las productoras, que por encargo o por libre elaboran igualmente documentos ter-
minados, listos para ser emitidos. Nos encontramos igualmente con los potentes y
presentes en todos los ámbitos institucionales y empresariales gabinetes de comu-
nicación, oficinas de imagen, servicios de prensa. Los directivos de comunicación
de estos entes forman parte de los equipos directivos de los mismos con altas remu-
neraciones y poderes. Lo importante será transmitir a los medios también productos
terminados y siempre favorables al emisor y la fuente. Frente y en relación con este
mundo surge el profesional de la comunicación vinculado a una empresa periodís-
tica, cuya misión y trabajo, ni siempre es todo lo libre e imparcial que él quisiera
porque se debe también o principalmente a una empresa que tiene sus normas,
principios, estrategias y competencia. Hoy el periodista, el profesional de la co-
municación sale bien preparado de las facultades con los principios claros, pero se
encuentra con una realidad no esperada o deseada que a veces le puede influir, por
eso ha de estar muy vigilante especialmente con aquellos que le suministran infor-
mación para no dejarse ni manipular, ni influir. También con relación a su empresa
para serles por una parte fiel y leal y por otra a los consumidores de información
para asegurarles buen producto, porque en todo el proceso de comunicación faltan
controles y servicios de vigilancia como en el caso de los productos de farmacia
o de alimentación por recurrir a los ejemplos anteriores. Y en consecuencia lo que
llamamos responsabilidad social del informador es mucho más exigente y grande.
El lenguaje periodístico, a su vez, se compone de la interrelación de elementos
gráficos y visuales. Titulación, paginación, fotografías, gráficos e infografías se
combinan en el diario con los textos para ofrecer una unidad de comunicación
autosuficiente e identificadora de una línea editorial y de una estética específica.
El público de los medios de comunicación es una colectividad, cuyos miem-
bros no se conocen entre sí, a quienes sin embargo une un foco común de interés.
Cada vez estos medios tradicionales y antiguos, modernizados y actualizados por
el uso continuo de nuevas tecnologías permiten y potencian:
–– Recepción de gran cantidad de textos e imágenes de actualidad universal.
–– Procesamiento de la información que supone el cálculo y tratamiento au-
tomático de datos según reglas preestablecidas.
–– Control de flujos de información que consiste en concatenar o conectar
diversos dispositivos de procesamiento de información.
–– Manipulación de conocimientos.
–– Aumento espectacular de los medios, recursos y cauces tradicionales de
formación.
–– Extensión del libre flujo de informaciones.
–– Coexistencia de diversos lenguajes para contenidos y usuarios diversos.
Medios Impresos
Medios audiovisuales
Empresas editoras
El papel de la publicidad
cia. Función de diversión; los medios divierten en la medida que distraen; aquí se
incluye sobre todo el uso de los medios en el tiempo libre y en el ocio. Función
de psicoterapia-social; los medios son utilizados en ocasiones para producir en la
población unos efectos psicoterapéuticos determinados. Desde la antropología se
afirma que los medios de comunicación son agentes actualizadores de la sociabi-
lidad del hombre y que la hacen realmente posible. Moles (1975) atribuye a los
medios un importante papel en la mediación cultural.
ción de unas prácticas publicitarias en las que apliquen los nuevos conocimientos
adquiridos para comprobar su nivel de comprensión
Objetivos. Potenciar el sentido crítico partiendo de las imágenes más comunes
que están constantemente en nuestro entorno. Adquirir vocabulario sobre el tema
de los análisis visuales (Lenguaje de la imagen). Facilitar la creación y la capa-
cidad imaginativa mediante la práctica personal. Fomentar la crítica publicitaria,
tanto a nivel interno, como externo. Que el estudiante observe detenidamente,
interprete un mensaje y no se quede con lo aparente. Que analice objetiva y sub-
jetivamente.
Recursos. Humanos: El profesor. Materiales: Publicidad recopilada de revis-
tas, diapositivas para proyectar en las explicaciones.
Metodología. Primero recopilar información, ver ejemplos visuales. Analizar
esta información. Analizar de forma general esta publicidad Aplicar los recursos
analizados en una producción propia sobre la temática propuesta y realizar cada
estudiante su propio número publicitario.
Temáticas abordadas. Los medios de comunicación. El diseño gráfico. La pu-
blicidad
Los niveles sociales. La creatividad personal
Evolución de la experiencia. La experiencia ha sido acogida muy bien y la
respuesta ha sido muy positiva. Al trabajar con material cercano y de fácil identi-
ficación los estudiantes se sienten más cómodos a la hora de participar. También
es curiosa la impresión que se recoge de los comentarios refiriéndose al estudio
de una simple imagen publicitaria ya que dice mucho más de lo que parece.
Actividades que recomiendan al alumnado. Analizar publicidad en la que apa-
rezcan personas en un nivel social. Comparar diferentes números publicitarios.
Centrarse en la publicidad de un producto concreto. Hacer comentarios de imá-
genes publicitarias. Crear una imagen publicitaria
Dificultades encontradas. En los estudiantes, trabajar el lenguaje de la imagen
y hacer ver a los estudiantes que delante de una imagen, si argumentan sus ideas
siempre pueden aportar cosas ya que si ellos piensan, la pueden explicar.
Logros. Ver cómo los estudiantes pueden plasmar en su ejercicio aquellas
ideas que han ido adquiriendo como importantes en el lenguaje de la imagen y en
el lenguaje publicitario
Valoración de la experiencia. Efectos positivos. En los estudiantes: el prin-
cipal fue abrir la mente a estos estudiantes y darles herramientas para poder de-
fender una idea que intentan plasmar con una imagen publicitaria, herramientas
que a su vez les servirán para poder ser críticos con las mismas imágenes publi-
citarias. Ser conscientes del bombardeo de información que sufrimos constante-
mente. En los padres y entorno: estar más atentos al entorno y percibir cosas que
antes no tenían en cuenta.
Temáticas a elegir (cada grupo elije una). Ecología, Medio Ambiente, La paz,
Tercer Mundo, Multiculturalidad, Inteculturalidad, Sexualidad, SIDA, Ocio, Sa-
lud, Sanidad, Viajes, Amistad, Historia, Geografía, Arte, Otras.
Determinan nivel de los destinatarios, disciplina en la que tiene cabida y for-
mulan un objetivo.
Presentar resultados.
7. Fuentes de información
1. ALFABETIZACIÓN AUDIOVISUAL
(http://www.medialit.org/media-literacy-definition-and-more)
Los elementos del alfabeto visual y sus sintaxis, siguiendo las aportaciones
realizadas por Balada y Juanola en 1987 y recogidas por Chacón (2003, 67), son:
Albabetización audiovisual
1
Dejamos al margen de este capítulo los videojuegos propiamente educativos, también llamados edutainment o
edujuegos (DÍEZ, 2004a). Esta exclusión es evidente, puesto que las finalidades de estos últimos es claramente
el aprendizaje de contenidos educativos.
Partiendo de esta definición, Lacasa (2011, 21) identifica los siguientes rasgos
o características esenciales de los videojuegos:
–– El videojuego no es considerado como una actividad seria, es un medio
para evadirnos de la vida ordinaria.
–– Al estar más centrado en los aspectos emocionales, y no tanto en los cog-
nitivos, provoca un efecto absorbente en los jugadores.
–– El jugador no se mueve por intereses económicos, aunque como bien sa-
bemos los videojuegos forman parte de un mercado economicista.
–– El jugador debe atenerse a unas reglas de juego para continuar jugando.
–– Cada videojuego y jugador establece sus límites espacio-temporales.
–– El videojuego tiene la capacidad tanto de aislar al jugador (visión del
jugador recluido en su casa) como la de crear grupos sociales (creación
de comunidades virtuales que comparten la afición por un mismo juego).
Estos rasgos se pueden completar con otros que sean ido recogiendo del aná-
lisis de diferentes definiciones:
–– Para McLuhan (1996) los videojuegos provocan tanto la acción como la
reacción de los jugadores.
–– González (2010) recoge otras características como: identificación positi-
va con el protagonista, existencia de desafíos o retos a superar y capaces
de provocar retroalimentación constante.
–– Gramigna y González (2009, 158) afirman que los videojuegos “plantean
respuestas simples a sueños y deseos de heroísmo, acción y aventura, y
también a los ancestrales fantasmas de la muerte, dolor, la injusticia y
la pobreza”.
–– Gee (2008) identifica que si bien hay juegos con retos preestablecidos de
antemano, existen otros que permiten a los videojugadores establecer de
forma libre los objetivos y metas a conseguir con el juego.
–– Stevens, Satwicz, y McCarthy (2008) hacen especial hincapié en el poder
de trasferencia de aprendizajes que tiene los videojuegos.
Identificados los rasgos más sobresalientes de los juegos, es el momento de
establecer brevemente una clasificación de los mismos atendiendo a diferentes
Juegos de aventura King Quest, Indiana Jones, Monkey Island, Final Fantasy,
y rol Tomb Raider, Pokémon, Ultima Online, ...
2
Para completar el estudio sobre los tipos de videojuegos se recomienda la obra de Díez (2004a).
Acción Proceso
Sabemos que la industria de los videojuegos es, en los últimos tiempos, una de
las mayores fuentes de entretenimiento de los más jóvenes. Hecho que preocupa
sobremanera a los padres, pues conciben que el uso/abuso de los videojuegos
dentro del espacio lúdico de sus hijos puede llegar a provocar competencias aso-
ciadas, en especial, los valores antisociales (mitos) que “parecen” transmitir y que
tanto preocupan. La sociedad, en general, y los padres, en particular, establecen
dos ámbitos de riesgo, a saber, violencia y sexismo.
a) El mito de la violencia
Son muchas las investigaciones realizadas a este respecto, basta con examinar
el barrido histórico y contextual que establece Díez (2004a). Este autor junto
con otros investigadores analizan los primeros estudios sobre clasificación de los
videojuegos en función del rol sexual realizados por Ferry Toles (1985); Proven-
zo (1991); Ward Gailey (1993); Estallo (1995);Dietz (1998); Etxeberría Balerdi
(1999); Bonder (2001); Urbina Ramírez y otros(2002); FAD (2002) o Muñoz Lu-
que (2003) entre otros. Todos ellos concluyen en una visión estereotipa y distor-
sionada por su simplificación tanto de las figuras masculinas como femeninas en
prejuicio de estas últimas. Mientras a los varones se les asignan roles dominantes
y activos (valor, fuerza, inteligencia, competitividad,….), las mujeres, además de
contar con una presencia menor, se representan pasivas y sumisas, reproducien-
do arquetipos viriles o simplemente como consumistas y superficiales. Es decir,
modelos masoquista, sádico y “barbie” respectivamente (Op. cit, 352). El motivo,
bien claro, el mercado de los videojuegos se ha declinado en exceso al público
masculino y por tanto, los videojuegos reproducen la imagen que los hombres
tienen de las mujeres o lo que es lo mismo los valores de las cultura “macho” (Op.
cit, 358).Esto puede provocar una nueva forma de socialización androcéntrica y
misógina, de exclusión y violencia de género; ellos aprenden dominación y ellas
dependencia.
No queremos concluir el capítulo sin mostrar a los lectores una pequeña se-
lección de proyectos, experiencias y propuestas de trabajo con videojuegos que
se han desarrollado (o se desarrollan en la actualidad) en ámbitos no formales.
Nuestro objetivo es ilustrar un uso educativo de los videojuegos fuera del simple
entretenimiento y ocio.
Ámbito familiar
Objetivos
• Hacer ver a los padres que los medios no son una competencia en materia
educativa/formativa.
• Sensibilizar a los padres de la necesidad de participar en la selección del juego.
• Hacer ver a los progenitores la necesidad de jugar en familia.
• Construir un espacio de reflexión basado en el diálogo y en entendimiento.
• Determinar los factores educativos que contribuyen al desarrollo de la
creatividad durante el empleo de los videojuegos, así como de las habilidades
oculomanuales, pensamiento reflexivo y del razonamiento, la capacidad verbal,
la capacidad de superación, la motivación por y para el aprendizaje de diferentes
materias.
• Desarrollar pautas para reducir el desarrollo de conductas impulsivas y de
autodestrucción.
• Generar un espacio para el análisis de las relaciones entre los miembros
empleando el videojuego como vehículo transmisor.
Evaluación
Este apartado consistirá en evaluar si el programa ha resultado efectivo, para ello se
elige un videojuego y se realizan las actividades antes señaladas de forma individual
en los hogares. Una vez pasado un tiempo, a pactar con los padres, se realiza
una sesión conjunta de padres e hijos donde se trabajarían las actividades antes
mencionadas para ya empleando el debate.
Para comenzar la sesión, se empleará la estrategia de la tela de araña, permitiendo a
todos los participantes conocerse por su nombre y por un rasgo de su personalidad
relativo al juego que se esté trabajando. De este modo, se rompe la tensión
que pudiera producirse entre ellos. Acto seguido, empezaría la propia sesión de
evaluación con una lluvia de ideas sobre el juego trabajado, de modo que los más
jóvenes se impliquen en la evaluación, ya que pueden sentirse cohibidos ante la
presencia de sus progenitores y el tener que expresar qué les parece el juego y por
qué juegan.
En función de los datos recogidos durante el desarrollo de las actividades se
realizará una presentación de fotos representativas de los valores, estereotipos
y conductas señalados por ellos anteriormente, para analizarlas entre todos,
posibilitando que le niño que posea una concepción sexista de la mujer pueda
comenzar a cambiar, por ejemplo.
La sesión de evaluación finalizaría tratando de determinar cuáles de las actividades
han servido y cuáles no, realizando propuestas para nuevas sesiones.
Ámbito hospitalario
7. Bibliografía
Materiales multimedia
y programas online
Ofrecen datos organizados en un entorno estático con unos criterios para fa-
cilitar su exploración y consulta selectiva. Pueden tener una estructura jerárqui-
ca (donde unos datos se subordinan a otros), relacional (en la que se organizan
mediante fichas o registros de una misma estructura o rango) y documental (que
utiliza descriptores para almacenar grandes cantidades de información documen-
tal). Se dividen en:
a) Programas tipo libro o cuento, donde aparece una información en un en-
torno estático como un libro.
b) Bases de datos convencionales, que almacenan la información en ficheros,
mapas o gráficos, donde navegar libremente para recoger información.
c) Bases de datos expertas, que son bases de datos muy especializadas sobre
un tema concreto.
2.3. Simuladores
Son varios los autores (Marquès, 2000; Area y otros, 2004) que coinciden en
afirmar que la evaluación de los materiales multimedia debe proporcionar infor-
mación acerca de los siguientes aspectos:
–– Aspectos funcionales: funcionalidad global, facilidad de uso, versatili-
dad del material, nivel de autonomía del usuario., documentación, asis-
tencia técnica y servicio de teleformación y ayudas online.
–– Aspectos técnicos y estéticos: entorno audiovisual, presentación atrac-
tiva, calidad de los textos y elementos multimedia, potencia audiovisual,
bases de datos, sistema de navegación, interacción, diálogos, diseño y
tecnología y calidad técnica de la documentación.
–– Aspectos pedagógicos: capacidad de motivación, adecuación a los des-
tinatarios, contenidos, adaptación a las características y posibilidades de
los usuarios, potencialidad de los recursos didácticos, corrección de las
actividades, las posibilidades de tutorización y evaluación y el enfoque
pedagógico.
Aunque son múltiples los multimedia de tipo social que podemos encontrar,
bien en CD-Rom bien a través de Internet, puede que no siempre respondan a las
necesidades planteadas en una situación educativa concreta. Por eso, los educa-
dores han de tener competencias que le permitan la creación de materiales mul-
timedia ajustados a sus necesidades. Por lo tanto, el educador necesita tener una
formación a nivel de usuario y conocimiento de ordenadores que le permita el
almacenamiento de datos, herramientas básicas y conocimiento y uso de material
multimedia. Además, se plantea la necesidad de la creación de contenidos bajo
herramientas sencillas. Por último, debería poder utilizar y adaptar materiales
tecnológicos ya existentes pero con criterios pedagógicos.
De esta forma, los niveles de producción estarán en función de las competen-
cias y de las opciones que se tomen. Un primer nivel hace referencia a materia-
les comerciales, trabajando a partir de la adaptación de los mismos, a través de
pequeñas guías de explotación que faciliten su contextualización en el aula. Un
nivel más avanzado implica la producción por parte del educador o equipo de tra-
bajo de material propio pero con ayuda de materiales comerciales. Lo que se hace
fundamentalmente es contextualizar el material al grupo de trabajo en cuanto a
objetivos, temporalización, estructura de contenidos, evaluación, actividades; se
trataría de una reestructuración de material existente. Un nivel avanzado de pro-
ducción supone por parte de los educadores la producción de material totalmente
nuevo, estando ya ante un proyecto multimedia.
Cuando se va a diseñar un material multimedia hay que tener en cuenta una
serie de elementos diferenciados, comunes a todo material multimedia didáctico,
y los elementos estructurales que responden al diseño específico del material.
Marquès (2002) señala los siguientes elementos de tipo general: presentación
del proyecto; objetivos y destinatarios; contenidos; actividades interactivas y es-
trategias de E/A; entorno audiovisual, metafórico y elementos; sistema de nave-
gación; integración curricular; documentos del material; y otros.
Por su parte, Cabero y Gisbert (2002) plantean una propuesta similar a la
anterior en la que se reduce el número de elementos: objetivos, contenidos, acti-
vidades, referencias y recursos de ampliación.
Respecto a los elementos estructurales básicos cabe señalar: planteamiento
pedagógico; bases de datos; actividades instructivas; entorno tecnológico (inter-
faz); y elementos personales (Marqués, 2001).
La mayoría de los autores que trabajan sobre la elaboración de multimedias
(Cabero, 1996; Duarte, 1996; Prendes, 1996, 2001; Bartolomé, 1994; Salinas,
1995…) están de acuerdo en que un aspecto fundamental en el diseño de ma-
teriales es el diseño didáctico y el diseño del contenido. Ortiz (2011) comparte
con Orihuela y Santos (1999) que la clave del material está en la capacidad del
educador en base a los objetivos perseguidos, la estructura de los contenidos, las
actividades de formación, los recursos complementarios, la evaluación, la co-
municación con el usuario y los sistemas de ayuda, aunque a veces se pierda el
aspecto técnico.
En líneas generales, se pueden diferenciar dos fases en el diseño de materiales
multimedia: la fase de diseño y la fase de producción. Para Area (2003), las fases
en la producción de un medio son Diseño, Producción. Postproducción, Evalua-
ción y Final.
En la fase de diseño habría que elaborar el guión del programa, teniendo en
cuenta las potencialidades del material a producir, la interactividad que presenta,
la estructura secuencial y el control del usuario sobre el mismo. Así, en esta fase
se desarrollan los siguientes pasos: análisis de la situación, plan y temporaliza-
ción del proceso de desarrollo y diseño del producto.
En la fase de producción del material multimedia se deben concretar las ac-
ciones desarrolladas en la fase anterior para la obtención del producto final. Para
Cabero (2000) y Salinas (1992) (cit. por Ortiz, 2011), habría que llevar a cabo la
guionización del producto, la realización, el ensayo y revisión de los materiales,
el desarrollo de la documentación complementaria y la aplicación y evaluación.
Por su parte, Area y Hernández (2010), basándose en su experiencia en el
diseño de materiales multimedia, señalan que para abordar este proceso de forma
exitosa es necesario implementar cinco fases:
–– Planificación del multimedia: hay que partir de la reflexión sobre la idea
principal del proyecto. Para ello es necesario responder a las siguientes
cuestiones: ¿cuál es el eje temático del proyecto?; ¿por qué y para qué
servirá?; ¿es novedoso y/o útil?; ¿es necesario desde una perspectiva edu-
cativa?; ¿qué recursos similares existen?; y ¿quiénes son sus potenciales
usuarios? Una vez resueltos estos temas habría que redactar el proyecto
para poder presentarlo y darlo a conocer. Dicho proyecto debe incluir la
justificación y necesidad del multimedia, los objetivos, los destinatarios,
las características y estructura del material, el plan de trabajo y tempora-
lización y el presupuesto. A continuación vendría la etapa de negociación
y consenso con la empresa, institución o colectivo con el que se va a tra-
bajar, la elaboración del presupuesto, la selección del equipo de trabajo y
la búsqueda de financiación, si es necesaria.
–– Ejecución o desarrollo del multimedia: esta segunda fase hace referencia
a todo el tiempo y actividades que implica la ejecución del proyecto en
sí. Es la fase de desarrollo técnico y supone la materialización del mate-
rial multimedia. Por tanto, es fundamental una planificación correcta para
facilitar la ejecución.
Son múltiples los portales educativos que podemos encontrar en Internet. Al-
gunos de los más conocidos y utilizados en el ámbito socioeducativo son los que
exponemos a continuación:
Eduso.net, el portal de la Educación Social: es un servicio de los colectivos
de Educadores Sociales que pretende ser un lugar de encuentro, diálogo, apoyo,
dinamización y reflexión de las personas y entidades vinculadas a la Educación
Social. Ofrece amplia información y recursos sobre los distintos ámbitos de in-
tervención de la educación social: animación sociocultural y tiempo libre, tercera
edad, minorías étnicas, medio ambiente… (www.eduso.net).
Edukaor: portal creado por la asociación “El Retal”, que ofrece información
y recursos para la Educación e Integración Social. Pretende potenciar la difusión
de la información, el trabajo en red y la cooperación entre los diversos agentes
sociales que trabajan en el ámbito social, a la que vez que intenta fomentar la
figura del educador Social. En el apartado Recursos, podemos encontrar diferen-
tes materiales e información sobre discapacidad, adicciones, comunidad gitana,
inmigración, educación para la salud, personas mayores, etc. (www.edukaor.es).
Recursos sociales para educadores, trabajadores sociales, animadores so-
cioculturales: aglutina gran cantidad de información y enlaces sobre diversos
ámbitos de la educación social: educación de calle, drogodependencias, inmigra-
ción, sexualidad, animación e integración… (http://recursossociales.jimdo.com).
Obra Social de la Caixa: Portal de la Obra Social de La Caixa con gran can-
tidad de información, recursos y enlaces sobre diferentes colectivos sociales. Se
puede encontrar información sobre programas sociales, culturales, de medio am-
biente, educativos y socioasistenciales…, además de una gran selección de recur-
Aunque son muchos los ejemplos de materiales multimedia que podemos en-
contrar navegando por Internet, presentamos y describimos a continuación una
pequeña selección que consideramos de utilidad para trabajar en algunos de los
ámbitos de la educación no formal:
SEXPREAN: Multimedia para desarrollar procesos de educación afectivo-se-
xual, bien en el ámbito escolar, bien en el marco de la educación no formal. Este
multimedia incluye 23 actividades interactivas organizadas en cuatro bloques te-
máticos, documentos que ofrecen información sobre distintos temas de interés
relacionados con la sexualidad humana, un glosario de términos asociados a la
sexualidad con sus definiciones, una selección de enlaces a webs y recursos de
Internet sobre la sexualidad humana, una guía didáctica (dirigida a los educado-
res) que ofrece los fundamentos teóricos y las orientaciones metodológicas para
su uso en las aulas y una guía de utilización con información para la correcta na-
vegación y uso de los recursos de este multimedia (http://webpages.ull.es/users/
manarea/sexpresan/multimedia/Sexpresan.swf).
LINGUASNET: Curso de lengua interactivo multimedia diseñado para mejo-
rar las capacidades auditivas y orales. Es un curso gratuito y está disponible en
inglés, español, portugués y rumano. Consta de catorce lecciones que incluyen
animaciones, ejercicios interactivos, juegos y ejercicios de escuchar y repetir.
Muy útil para trabajar con población inmigrante o personas mayores (www.lin-
guasnet.com).
ACTIVA TU MENTE: Programa de estimulación cognitiva para personas
mayores cuyo objetivo es estimular las capacidades cognitivas como parte de
un envejecimiento activo. Se centra en seis áreas cognitivas: lenguaje, memoria,
funciones ejecutivas, procesamiento visual, atención y concentración y procesa-
miento auditivo. Hay que seguir un itinerario adaptado al rendimiento de cada
usuario. Para ello es necesario registrarse (www.activalamente.com).
HABLEMOS DE DROGAS: Programa impulsado por la Obra Social de La
Caixa y dirigido a prevenir, informar y sensibilizar sobre los efectos de las dro-
gas en la salud y la sociedad. Está dirigido a los principales agentes encargados
de este objetivo, tales como jóvenes, familias, educadores, profesionales de los
centros de salud y ciudadanía en general. Su principal objetivo es prevenir el con-
sumo de drogas, principalmente entre los jóvenes. Además de abundante material
informativo, interactivo y multimedia, se incluye un tour virtual por la exposición
“Hablemos de drogas”, donde se muestra información sobre qué son las drogras
http://www.peretarres.org/wps/wcm/connect/peretarres_es/peretarres/home/
difusio_coneixement/revistes/revista_educacio_social/ultim_numero
http://usuarios.multimania.es/marccioni/index.html
http://jcpintoes.en.eresmas.com/index.html
http://www.xtec.es/~imarias
http://www.aula21.net
http://www.educared.org/global/educared
http://babelnet.sbg.ac.at/carlitos/index.htm
http://www.portaldidactico.net
http://www.aulaintercultural.org
http://www.educadulto.es
http://www.eapn.es
http://www.fad.es
http://www.tercera-edad.org
http://dixit.gencat.cat/castellano/index.html
http://animacionsociocultural.wordpress.com
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versitaria innovadora para el diseño y desarrollo de material multimedia”, en:
Bordón, 53, 2, 185-200.
1. Introducción
Para poder comprender el surgimiento del e-learning tenemos que buscar sus
orígenes en la evolución experimentada a lo largo de la historia por la educación
a distancia. Desde sus primeros inicios en la primera mitad del siglo XVIII esta
modalidad de enseñanza ha pasado por numerosas etapas y altibajos teniendo uno
de sus momentos de auge con la industrialización del siglo XIX y la demanda
de mano de obra cualificada después de la Segunda Guerra Mundial. Este buen
momento coincidió con su introducción en las instituciones universitarias y la
necesidad de dar cobertura educativa a zonas de difícil acceso. Sin embargo, con
el tiempo, este tipo de enseñanzas fue generando connotaciones negativas que
solo pudieron ser salvadas por el trabajo serio desde algunas universidades y los
resultados positivos de algunas experiencias formativas. En la siguiente fase de
su evolución comienza a verse ligada con tecnologías vinculadas a la telefonía,
la radio y la televisión que logran darle un nuevo impulso dando mayor interacti-
vidad a los procesos de enseñanza-aprendizaje. La llegada de Internet y el correo
electrónico le dan un nuevo significado y poder a la educación a distancia gene-
rando la posibilidad de enseñar y aprender a través de la Red y marcando también
la evolución hacia el e-learning (Barrientos y Villaseñor, 2006).
El e-learning nace como fruto de la influencia de la sociedad de la información
y la comunicación en los sistemas de enseñanza y aprendizaje, como respuesta
a algunos de los retos que se planteaban en educación. Como base de esta mo-
dalidad de formación tenemos la idea de poner al servicio de la educación los
avances científicos y tecnológicos desarrollados en los últimos tiempos. Entre
ellos, la herramienta básica es Internet y todas las posibilidades que puede aportar
al mundo educativo. Otra de las necesidades que han llevado al desarrollo y la
extensión de los sistemas de e-learning es la idea de la formación a lo largo de
la vida, para la que las estructuras y metodologías tradicionales parecen dema-
siado rígidas y poco adaptadas a un ritmo de aprendizaje que debe ser flexible y
centrado en el estudiante. Buen ejemplo de este auge son las distintas iniciativas
llevadas a cabo por medio de la Comisión Europea y accesibles en http://eacea.
ec.europa.eu/llp/
Además del término e-learning a este tipo de formación se la conoce con otros
nombres como teleformación, teleeducación, aprendizaje en red, formación a
través de Internet, formación online, cursos online o enseñanza virtual. El tér-
mino e-learning se puede traducir literalmente como aprendizaje electrónico, el
aprendizaje producido a través de un medio tecnológico-digital (Rubio, 2003).
Comencemos formalizando el concepto de e-learning a través de una serie de
definiciones dadas por distintos autores:
VENTAJAS DESVENTAJAS
Pone a disposición de los estudiantes un Requiere más inversión de tiempo por
amplio volumen de información. parte del profesor.
Facilita la actualización de la Precisa unas mínimas competencias
información y de los contenidos. tecnológicas por parte del profesor y de
los estudiantes.
Flexibiliza la información,
independientemente del espacio y Requiere que los estudiantes tengan
el tiempo en el cual se encuentren el habilidades para el aprendizaje
profesor y el estudiante. autónomo.
Permite la deslocalización del Puede disminuir la calidad de la
conocimiento. formación si no se da una ratio
adecuada profesor-alumno.
Facilita la autonomía del estudiante.
Requiere más trabajo que la
Propicia una formación “just in time” y
convencional.
“just for me”.
Supone la baja calidad de muchos cursos
Ofrece diferentes herramientas de
y contenidos actuales.
comunicación sincrónica y asincrónica
para los estudiantes y para los Se encuentra con la resistencia al cambio
profesores. del sistema tradicional.
Vemos que al mismo tiempo que nos aporta una gran cantidad de ventajas
para ser aplicadas al medio educativo, el e-learning cuenta también con algunos
inconvenientes que en muchas ocasiones no han permitido un desarrollo más am-
plio como era esperado. Los inconvenientes relacionados con las competencias
tecnológicas del docente y el tiempo extra de dedicación a este tipo de actividades
son las que más frenan al profesorado a la hora de embarcarse en una empresa de
este tipo (Mahdizadeh y otros, 2008). En cuanto al estudiante la impersonalidad
y la falta de referencias físicas así como la falta de recursos tecnológicos son las
razones que a veces le hacen decantarse por una formación tradicional y no por
una de este tipo (Sun y otros, 2008).
Como dicen Garrison y Anderson (2005) el e-learning se distingue, en un sen-
tido paradigmático de todo lo que le antecedió representando una nueva “ecología
de aprendizaje”. No se trata de un complemento más, sino de una tecnología que
está transformando las instituciones y empresas educativas y el modo en que con-
ceptualizamos y experimentamos la educación. Desde esta perspectiva, el mundo
educativo se plantea el reto de llegar a lo más profundo de la naturaleza del e-lear-
ning para intentar entender las propiedades que lo conforman y emplearlas para
la creación de verdaderas comunidades despojadas de las barreras del tiempo y
el espacio en las que se integre la presencia social, cognitiva y docente. Para ello,
no basta con utilizar las antiguas metodologías con nuevos medios sino que es
necesario llegar más allá para poder aprovechar toda la potencialidad que se nos
ofrece y realizar un verdadero cambio.
una herramienta para posibilitar el intercambio de mensajes entre todas las partes
activas en el proceso de formación. En la narrativa existente sobre el tema es
la expresión Comunicación Mediada por Ordenador (CMC del ingés “Compu-
ter-Mediated Communication”) la más aceptada para la explicación de todos los
elementos que conlleva la comunicación en el e-learning apoyada en las tecno-
logías.
Desde una perspectiva educativa, la comunicación mediada por ordenador ha
de entenderse fundamentalmente como “el conjunto de aplicaciones telemáticas
(correo electrónico, foro, chat, videoconferencia, etc.) para la comunicación di-
recta y bidireccional entre personas y/o comunidades de aprendizaje, cuya uti-
lización posibilita la creación de un nuevo escenario que apoya los procesos
comunicativos y didácticos” (Pereira, 2006).
En cuanto a las posibilidades que pueden presentar para la formación la comu-
nicación mediada por ordenador, Ryan y otros (2000) nos señalan las siguientes:
–– Frecuentes contactos entre los estudiantes y los tutores dentro y fuera de
clase para animar la motivación y la participación de los estudiantes.
–– Cooperación y colaboración para enfatizar el aprendizaje.
–– Silencio reflexión y aplicación de las facilidades de aprendizaje de los
estudiantes.
–– Retroalimentación continua a los estudiantes.
–– Puede ser utilizada para diversas experiencias de aprendizaje.
Podemos realizar distintas clasificaciones de la comunicación mediada por
ordenador atendiendo a diversos criterios pero quizá uno de los que más marca
la diferencia es el relacionado con el tiempo en el cual se realizan las comunica-
ciones. Siguiendo este criterio tenemos los sistemas de comunicación asíncrona
en los cuales la comunicación se establece en tiempos distintos para cada uno de
los usuarios. En esta categoría tenemos herramientas como el correo electrónico
o el foro. Por otra parte, hablamos de comunicación síncrona cuando los usuarios
tienen que estar conectados en el mismo momento produciéndose una comuni-
cación en tiempo real, como por ejemplo ocurre con el chat (con imagen o solo
texto), el audio o la videoconferencia (Yamada, 2009).
pequeñas aplicaciones web y también en otros recursos más complejos como pá-
ginas web con imágenes, aplicaciones complejas o cursos completos.
Los objetos de aprendizaje surgen por la necesidad de crear estándares comu-
nes en cuanto a contenidos formativos que puedan ser transferidos entre distintas
plataformas y que garanticen los objetivos de accesibilidad, interoperabilidad,
durabilidad y reutilización de los materiales curriculares basados en las redes
(Zapata, 2005).
En cuanto a los estándares utilizados actualmente en e-learning la propuesta
más extendida es el modelo SCORM realizado por la iniciativa ADL intentando
refundir lo mejor del resto de estándares emergentes.
apoyadas en las TIC. Las dos primeras son entornos gratuitos y de libre distri-
bución mientras que el último corresponde a un sistema propietario que puede
adquirirse y utilizarse tras la compra de la correspondiente licencia:
5.1.2 Blackboard
boración y movilidad virtual que supone para los estudiantes. En este entorno
colaboran las 10 universidades andaluzas para ofertar asignaturas desde cada uno
de los campus para que puedan ser cursadas por los estudiantes de los 9 campus
restantes. De este modo, se abre un portal virtual desde cada universidad a las del
resto de Andalucía.
6. BIBLIOGRAFÍA
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tar el aprendizaje colaborativo”, en: Edutec. Revista Electrónica de Tecnolo-
gía Educativa, 17.
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Español como Lengua extranjera, 8.
1. Introducción
En 2000 Walsh (269), indicaba que, quizás, la revolución tecnológica que hoy
vivimos sea uno de los elementos “más importantes de los últimos mil años” y
que junto con las situaciones de desigualdad (económica, cultural, social, educa-
tiva,…) van a demandar una educación acorde con la realidad social, afín, en de-
finitiva, con todos aquellos aspectos que la sociedad de la información presupone.
El desarrollo de la sociedad de la información ha traído de la mano, el rápido
crecimiento de algunos elementos comunicativos como es la red Internet. En el
último siglo internet en general y las herramientas 2.0 en particular han ido cam-
biando la cara de la sociedad en general y de la educación (Van de Vord, 2010)
y de las interacciones sociales en particular. Al amparo de esta las herramientas
que los internautas han ido desarrollando han puesto de manifiesto el deseo in-
herente que los individuos tenemos por estar en continua relación con los demás,
situación tal que ha contribuido al nacimiento o generación de herramientas, las
cuales para ser utilizadas no es necesario tener conocimientos informáticos, es
decir no hay que saber lenguaje de programación –html por ejemplo-, de ahí
su gran auge y triunfo. Como afirma Castells (2003), hablar de sociedad de la
información implica hacerlo de un nuevo paradigma tecnológico, en el cual la
vertiente internet cobra dimensiones impensables hace escasamente un par de
décadas desarrollando necesidades e intereses que han de ser mediados por los
poderes públicos, pues la idea del laisezz-faire del ser humano en materia tecno-
lógica puede conllevar situaciones de riesgo y de exclusión en las diversas áreas
–económica, política, social, ideológica, familiar, etc.-.
El desarrollo de Internet como elemento conductor de información y de for-
mación tiene su epicentro en torno al año 2000, momento en que la Comisión
Por otra parte Martínez y Contreras (s.f) y lo entienden como una “gama de
herramientas de software o programas que nos permiten conectarnos con otras
personas a través de Internet y socializar o trabajar de manera colaborativa en
proyectos comunes”.
Junto al software social se han ido desarrollado una serie de aplicaciones onli-
ne, que van a permitir a los usuarios de la red disponer de una serie de programas
los cuales, como ya comentamos anteriormente, no necesitan ser instalados en los
discos duros de sus ordenadores, pues los datos y los programas están instalados
en servidores externos a los cuales se accede mediante un servidor o cliente web
y un navegador en red.
De la mano del trabajo colaborativo encontramos las Wikis, las cuales se han
convertido en una herramienta de trabajo colaborativo en red de naturaleza como
señalan Cabero, López y Llorente (2009) social, circunstancia que hace que se
convierta en un espacio de participación y colaboración sincrónica sin preceden-
Ante estos aspectos podemos apreciar así su valor como herramienta para la
inclusión de los sujetos.
Palomo, Ruíz y Sánchez (2008: 47) señalan las siguientes ventajas e inconve-
nientes que esta herramienta presenta:
VENTAJAS INCONVENIENTES
“Escribir y modificar la página de forma “Sufrir actos de vandalismo por parte
rápida. de usuarios que borran contenidos con
los que no están de acuerdo, introducen
Interfaz fácil de navegar e intuitiva de
errores de forma consciente, agregan
manejar.
contenido inapropiado u ofensivo.
Permite, por su carácter abierto de sus
Hacer publicidad gratuita o proselitismo.
contenidos, un uso colectivo.
Introducir material con su
No necesita conocimiento de ningún tipo,
correspondiente copyright y de los que no
ya que presenta un editor en línea para
son autores”.
su uso.
El ‘código fuente’ es abierto y con licencia
libre para su modificación o adaptación a
sus intereses”.
Pero debemos ser conscientes de que las wikis y los blogs son dos herramien-
tas que pueden ser complementarias entre sí, pero que presentan una serie de
diferencias que Marín (2010:15) recoge en la tabla siguiente:
EDUBLOGS WIKIS
Posee estructura temporal. Posee estructura ligada a un tema.
Las entradas o cambian, siendo Las páginas cambian a lo largo del
enriquecidas por los comentarios que se tiempo.
van añadiendo. El texto es construido en forma de
Los textos son lineales. paquete enlazado de información.
Existe un autor que autoriza a los Todos los participantes son autores.
visitantes a participar.
Por último queremos hacer referencia en este apartado a las Redes Sociales.
Este software social se caracteriza por servir de herramienta que permite estar
en continuo contacto con tu grupo de iguales. Wikipedia (2011) la define como
“sociales compuestas de grupos de personas, las cuales están conectadas por uno
o varios tipos de relaciones, tales como amistad, parentesco, intereses comunes o
que comparten conocimientos”.
Las herramientas que proporcionan en general las redes sociales en Internet
son:
–– “Actualización automática de la libreta de direcciones
–– Perfiles visibles
–– Capacidad de crear nuevos enlaces mediante servicios de presentación y
otras maneras de conexión social en línea
–– Estos servicios de la red pueden contar con la posibilidad de publicar
videos, canales de chat, mensajería asincrónica, etc.” (Zamora, 2006).
Existen un gran número de redes sociales, pero sin lugar a dudas Tuenti y Fa-
bebook han desbancado a redes como MySpace. La principal característica de la
primera es que para formar parte de dicha red a nivel general has de ser invitado,
mientras que en la segunda basta con hacerse una cuenta y comenzar a invitar a
conocidos.
Una aplicación online que está comenzando a tener una gran repercusión es
SITES Google, obviamente dentro del entorno de Google. Sampedro y Crespín
(2011: 221) la definen como “sitio web que contiene un conjunto de páginas o
secciones, las cuales se enlazan a la red a través del entorno Google, por tanto
esta herramienta se encuentra asociada a una cuenta de correo electrónico de este
buscador”. La finalidad de esta herramienta, como no podía ser de otro modo
es la divulgación de ideas, contenidos, pensamientos, etc. En consecuencia los
rasgos que la van a caracterizar son, entre otras por su plasticidad, su dinamismo,
sencillez, ser muy intuitivo, funcionalidad y su flexibilidad.
Por último queremos traer otra herramienta online que dentro del campo de la
pedagogía social es muy útil, son los Pictogramas. El ser humano comienza a re-
lacionarse con sus congéneres a través de imágenes que tienen una significación
común o diversa según el contexto en el que se enmarquen. Un ejemplo de trabajo
con herramientas que generan pictogramas es la llevada por el Gobierno de la Co-
munidad autónoma de Aragón denominada ARASAAC, -Portal Aragonés de la
Comunicación Aumentativa y Alternativa-. Este portal ofrece “recursos gráficos
y materiales para facilitar la comunicación de aquellas personas con algún tipo de
dificultad en esta área” (http://www.catedu.es/arasaac/).
3.1. Blog
El blog Planta 29 http://planta29.com/ nace dentro del seno del grupo Banco
Bilbao-Vizaya (BBVA) en el área de Innovación Cooperativa. Su denominación
viene, como indican en su página tomando las 28 plantas que la sede del banco
tiene en Madrid, ya que quieren entender y transmitir a la sociedad que esa planta
29 representa “lo que está más allá, simboliza la innovación, el futuro que des-
de el tejado tocamos con los dedos creando el relato que lo hace realidad en un
reto constante por ir un paso por delante, por ver esa imagen que nadie ha visto
todavía” (http://planta29.com/about/). Este blog es concebido como un lugar de
encuentro para todos los cuidadanos, llamado a la reflexión, principalmente, de
lo que sucede alrededor de las herramientas TIC en general y de la red Internet
en particular.
Dentro del ámbito de la tercera edad nos encontramos varias iniciativas, qui-
siéramos destacar el blog BLOGOMAYOR (http://www.blogomayor.com/) y
Zona Senior (http://zonasenior.blogspot.com/). En el primero de ellos encontra-
mos diversas secciones todas ellas con el objetivo de acercar las TIC al mundo de
las personas mayores. Presenta varias secciones: Más de 50, salud, discapacidad,
envejecimiento, ocio y más. Todas ellas presentan una gran recopilación de blogs
relativas a temáticas relacionadas con la tercera edad, por ejemplo en su sección
Más de 50 años nos encontramos un repositorio de blogs realizados por personas
que tiene más de 50 años. Entre las temáticas que tratan encontramos: calidad
de vida en adultos y personas mayores; la vejez, la muerte, el envejecimiento
y los A.M.; Residencias tercera edad, etc. El segundo, Zona Senior, trata de ser
un lugar de reflexión sobre lo que sucede en la actualidad y vida diaria del país,
buscando la opinión de los internautas.
3.2. Podcast
gina las presentaciones resumidas de los contenidos que presentan siendo todos
ellos desarrollados a través de ficheros de audio.
Otro sitio web dedicado a los podcast es La Rosa de los vientos, programa
de Radio de la emisora Onda Cero, el cual se emite en la madrugada de los sá-
bados a los domingos, conducido por el periodista Bruno Cardeñosa, como en
la web de la emisora se refleja este programa trata de acercar a los oyentes “a la
Historia, la Ciencia o la Naturaleza” (http://www.ivoox.com/podcast-rosa-vien-
tos_sq_f11254_1.html).
Imagen nº 1: Edinterculturatic
Fuente. https://sites.google.com/site/editerculturatic/home
Este recurso ha sido creado con la intención de hacer llegar una nueva visión
de la interculturalidad en diferentes ámbitos de la vida social de los sujetos, cen-
trándose en la horquilla de edad correspondiente a la etapa de educación primaria,
pero como vemos es útil para cualquier edad. El recurso se organiza en varios
apartados:
–– El apartado “WIKI” recogerá la definición de distintas palabras, plantea-
das desde la Educación Intercultural, para almacenar un repositorio de
términos. En él podrán participar tanto el alumnado como el profesorado.
–– La sección “ALUMNADO” dirigida a los alumnos y alumnas de Educa-
ción Primaria y Educación Secundaria, mostrando distintas actividades
para cada etapa, las cuales podrán subir el alumnado al sitio web.
–– En el apartado “PROFESORADO” se discrimina entre las dos etapas, en él
se recogen diferentes propuestas didácticas para trabajar con el alumnado.
De todas las redes sociales que existen nos hemos decantado por Facebook
dado que es una herramienta fácil de utilizar, viva y muy dinámica. Un ejemplo
muy significativo es el de la ONG Setem Andalucía.
4. Bibliografía
Hemos observado en el último lustro cómo cada vez las redes telemáticas son
espacios sociales, espacios donde las personas se interrelacionan, donde la virtua-
lidad se ha convertido para muchos en nuestro más importante espacio de comu-
nicación. Podemos decir que con las TIC “comunicación ha roto sus fronteras”,
siendo principalmente los menores de 30 años quienes más facilidades tienen en
el momento de incorporar cualquier nueva tecnología así como nuevas modalida-
des de comunicación (Prendes, 2005, 131). En esta misma línea de pensamiento,
Martínez y Solano (2003, 15) opinan que dichas redes telemáticas han influido
en la forma de “acceder a la información y de materializar ésta en conocimiento,
así como en la delimitación de pautas de comportamiento social, no sólo en el
espacio de las redes (espacios virtuales) sino también en el contexto presencial de
la comunicación”. Al igual que los autores anteriores, Rizo (2006, 6) considera
que con el auge de las TIC “vivimos una suerte de revolución sociocultural que
permite la creación y consolidación de nuevas modalidades de comunicación y,
por tanto, de interacción”, siendo ésta una de las dimensiones más importantes
de la comunicación.
Desde otro punto de vista se considera la interacción como uno de los ele-
mentos esenciales del proceso educativo (concepción constructivista), pudiendo
definir este elemento como una acción recíproca entre dos más agentes siendo
interesante destacar que el resultado es siempre la modificación de los estados de
los participantes (Rizo, 2006). Meneses (2006) analiza la influencia de las TIC en
la comunicación y la interacción. Para Moral (2009, 232-233) existe un continuo
crecimiento de los servicios con finalidad personal o social debido a la implan-
Esta conclusión no se tuvo en cuenta en los primeros estudios sobre las inte-
racciones que permitía la red, ya que, durante los años 90, los estudios vaticina-
ban que Internet produciría el aislamiento social del individuo. Como ejemplo de
ello, un estudio publicado en 1998 en la revista American Psychologist concluía
que el uso de Internet disminuía las relaciones sociales. Por su parte Castells, al
contrario de Mcluhan cuando predecía la aldea global, señalaba que a consecuen-
cia del uso de Internet acabaríamos siendo “chalecitos individuales, producidos a
escala global y distribuidos localmente” (1996: 373).
Pero el transcurrir de los años no les ha dado la razón, sino más bien lo con-
trario. De hecho, investigadores como Kraut que en el año 1998 habían liderado
los estudios que suponían el aislamiento del individuo, años más tarde (en 2001)
declara que los resultados obtenidos en el 98 habían desaparecido prácticamen-
te, y que esto era debido a que Internet se había transformado en esos tres años
(Herrero, Meneses, Valiente y Rodríguez, 2004). La evolución de las aplicaciones
para comunicarnos en red no vienen sino a ofrecer más espacios para la comu-
nicación e interacción. Nadie puede cuestionar la influencia de la Web 2.0 en
los nuevos modelos de interacción social, puesto que ésta permite y potencia
espacios virtuales para la participación y la interacción social gratuita basada en
aplicaciones telemáticas intuitivas y fáciles de manejar, siendo “una revolución
social que busca una arquitectura de la participación a través de aplicaciones y
servicios abiertos” (Castaño, 2007).
La interacción social ha dejado de ser patrimonio exclusivo del contexto pre-
sencial para ser cada vez más frecuente en la comunicación que se produce en
red. Se da además la situación de que los estudiantes que se encuentran en nuestro
sistema escolar pertenecen a la llamada net-generation, una generación que inicia
su existencia con recursos o medios para comunicarse de manera electrónica a
través de una red (Edel, 2006). Según el informe “Infancia y Adolescencia en
la Sociedad de la Información” del Observatorio de las Telecomunicaciones de
Red.es (2005) el 63% de los hogares con niños de hasta 15 años está conectado
a Internet, además el 66% de los niños y el 84% de los jóvenes son internautas
y ambos grupos usan Internet con más frecuencia que los adultos. Es decir, nos
encontramos ante unos estudiantes que son usuarios formales de los ordenadores,
que trabajan con las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación) en
la escuela, en el hogar, y las utilizan como fuente de entretenimiento y medio de
comunicación.
Según Castañeda, González y Serrano (2011) los jóvenes consideran la Web
como parte de su entorno, puesto que residen en la red (White, 2008) siendo,
probablemente, las redes sociales el espacio favorito; de hecho, el 69% de los
menores españoles de entre 10 y 18 años tiene un perfil en, al menos una red
social, y un 35% lo tiene en más de una (Bringué y Sadaba, 2011). Existe un uso
diferenciado de distintas redes sociales según las diversas franjas de edad. Puede
deducirse que el liderazgo de Facebook se sustenta en una penetración homogé-
nea entre las diferentes edades. Es la red social online más utilizada, acaparando
un mayor porcentaje de público de todas las edades. Messenger muestra un perfil
similar a Facebook excepto en la franja de mayores de 36 años, donde pierde pe-
netración. Tuenti por su parte se asocia principalmente con el público más joven
(The Cocktail Analysis, 2011).
En los últimos años la red ha experimentado una serie de cambios a un ritmo
vertiginoso, cambios con los cuales ha quedado patente el protagonismo que está
asumiendo el usuario, tanto en número como en participación, por lo que se po-
tencian las relaciones entre las personas convirtiéndose “por fin Internet en una
red de personas REAL, donde podemos situar el nacimiento de las Redes socia-
les” (Castañeda, Gonzáles y Serrano, 2011).
Castañeda y Gutiérrez (2010, 18), tras analizar el concepto de redes sociales y
su evolución, construyen una definición que las diferencia de otras herramientas
2.0 que tienen una red social subyacente, considerando las redes sociales como
“aquellas herramientas telemáticas de comunicación que tienen como base la
Web, se organizan alrededor de perfiles personales o profesionales de los usua-
rios y tienen como objetivo conectar secuencialmente a los propietarios de dichos
perfiles a través de categorías, grupos, etiquetados personales, etc., ligados a su
propia persona o perfil profesional”.
Llegados a este punto, sabemos qué son las redes sociales, los cambios que
este tipo de tecnologías han provocado en los modelos de comunicación e inte-
racción, pero… ¿por qué?... ¿cuáles pueden ser las causas de que estas herra-
mientas tengan tantos adeptos por todo el planeta? Según un informe presentado
a principios del año 2011 por la agencia The cocktail analysis, la sociabilidad y la
gratuidad son los principales motivos de pertinencia a estas redes, permitiendo y
facilitando la comunicación:
–– Gratuidad: se compara con otras herramientas de comunicación clásicas
(teléfono móvil…). Incluso su uso a través de Internet móvil se percibe
más rentable en términos económicos, gracias a las tarifas planas de datos
o los servicios de redes en movilidad, como Tuenti móvil.
–– Del one to one, al one to many: la audiencia concentrada permite optimi-
zar el esfuerzo del usuario en sus comunicaciones, principalmente en su
centralidad para el seguimiento de la agenda social.
–– Disponibilidad: la omnipresencia del pc en los entornos más comunes y
la extensión del uso de redes a través de dispositivos móviles (véanse el
éxito de ventas de las tabletas o las pantallas cada vez más grandes de los
teléfonos móviles).
Según esta agencia, “las mismas interacciones son una motivación en sí mis-
ma” siendo fácil la interacción y por otra parte exigiendo escaso esfuerzo al usua-
rio, estando todo esto acompañado de una forma entretenida, haciéndose así la
interacción “más intensa y extensa” (The Cocktail Analysis, 2011, 39).
Todas estas cuestiones están dando lugar a la creación de nuevos escenarios de
aprendizaje, puesto que las TIC “pueden suponer una transformación radical del
quehacer docente y discente o una oportunidad para mejorar la forma de trabajo
en contextos más experimentados (García-Valcárcel y Tejedor, 2011, 46). Para
ello será necesario redefinir los procesos educativos, rediseñar métodos y medios
de enseñanza que se deseen utilizar.
De otro lado, debemos prestar atención a la formación de ciudadanos capa-
ces de desenvolverse en la sociedad actual, en la que los estudiantes deben de
desarrollar una serie de competencias básicas que favorezcan su inclusión en la
sociedad y sobre todo que sean capaces de mantener una actitud crítica ante los
abundantes medios audiovisuales y de comunicación de masas que a su vez se
4. Adolescentes en red
4.1. Participantes
4.2. Instrumentos
Leticia 1 Ismael 7
Marta 2 José 8
María José 3 Daniel 9
Mª Rocío 4 Javier 10
Elena 5 Juanito 11
Adrián 6 Jorge 12
Vida cotidiana
Deberes 1 2 3 4 5
Ocio 6 7 8 9 1
Personal 1 6 2 3 7
Móvil
Deberes 1 2 3 4 5
Ocio 6 7 10 11 12
Personal 1 6 10 2 4
Tras la identificación de los rasgos comunes en cada uno de los tres modelos
se diferenciaron en tres matrices de datos los sujetos en función del modelo al que
pertenecían. Esto nos ha posibilitado hacer una lectura de los mapas de interac-
ción de los sujetos que se ubican en cada modelo, con la información facilitada
por éstos en la primera parte del cuestionario y cuyos resultados se han expuesto
anteriormente.
El análisis descriptivo de los datos ha permitido profundizar en las caracterís-
ticas de cada modelo los cuales pasamos a describir a continuación.
En los modelos 2.2, 2.3 y 2.4 se ubican la mayoría de los sujetos de nuestra in-
vestigación. La característica común en todos ellos es que no existe ningún alum-
nado que desarrolle una serie de contactos en red que no tenga nada de relación
con la presencialidad. A continuación detallamos los resultados y características
que presentan los sujetos identificados en estos submodelos.
En el modelo 2.2 se ubican un 62,4% de los estudiantes. En este modelo el me-
dio tecnológico sirve como mecanismo de socialización y apoyo de estas amista-
des ya que estos individuos forman parte de su vida virtual del mismo modo que
la presencial.
Este alumnado suele utilizar la red para ampliar y mejorar el contacto con sus
compañeros, suele tener un grupo de contactos que forman parte de su entorno
presencial y que se ven reforzados en la comunicación con ellos en la red.
Por otro lado, el sujeto mantiene contactos presenciales con los que se rela-
ciona únicamente en persona; contactos presenciales con los que se comunica
también a través de Internet e identifica contactos con los que sólo interacciona
a través de la red.
Las relaciones se complementan y superponen en distintas funciones y reali-
zan varias actividades (estudio, ocio, personal) con la misma persona y en distin-
tos entornos.
Al aumentar el número de contactos, el alumnado muestra un uso amplio de
diversas herramientas tecnológicas (principalmente facebook y tuenti), que es en
donde amplía su abanico de contactos del entorno tecnológico.
Recordamos que en el modelo 2.3 los estudiantes presentan un amplio abanico
de contactos en el entorno tecnológico. Son muy pocos los participantes cuya in-
teracción puede ser clasificada en este modelo (10,45%), aunque es significativo
reconocer que son sujetos con un grado de sociabilidad alto tanto en contextos
presenciales como virtuales, siendo las actividades de ocio y de interrelación per-
sonal (sobre todo para conocer personas) las más utilizadas gracias al uso de la
red.
En este modelo, podemos identificar claramente el entorno presencial y el
entorno tecnológico, debido a que el sujeto tiene contactos que conoce presen-
cialmente con los que refuerza su relación en la red. Sin embargo, existe una serie
de contactos con los que únicamente se relaciona presencialmente y también un
gran número de contactos que únicamente conoce de la red.
El perfil del alumnado de este modelo, desarrolla dos planos de interacción
independientes que en muy pocas ocasiones se entrelazan, puesto que desarrolla
comunicación “presencial” pero ésta no tiene reflejo en la red
En el resto de modelos, la herramienta messenger es identificada como la más
utilizada, mientras que en este modelo es Tuenti la herramienta más utilizada, lo
cual es razonable si tenemos en cuenta las características en la comunicación de
cada una. Messenger nos permite hablar con contactos que agregamos porque
conocemos, sin embargo Tuenti nos ofrece continuamente sugerencias de nuevos
contactos.
En el modelo 3, el 27,11% de los sujetos de la muestra, los entornos presencial
y el tecnológico, están totalmente integrados, poniendo de manifiesto que un nú-
mero considerable de sujetos de la muestra se relacionan con las mismas personas
en contextos presenciales y virtuales, por lo que Internet se concibe como una
Como hemos podido conocer, en el marco general de los modelos que hemos
propuesto los sujetos de esta investigación se ubican en 3 de los 7 modelos ex-
puestos. La característica común en todos ellos es que en mayor o menor medida
se produce interacción entre el entorno presencial y el tecnológico, es decir, todos
los estudiantes indican que poseen contactos con los que interaccionan tanto cara
a cara como a través de las tecnologías. Además hay un porcentaje significativo
de estudiantes que tienen un gran número de contactos con los que se comuni-
can a través de la red, concretamente mediante herramientas de redes sociales
Esta propuesta implica utilizar las posibilidades de las redes sociales para
mantener actualizada la información y establecer vínculos de comunicación que
vayan más allá de lo presencial. Por ejemplo, utilización de mensajes SMS para
avisar de información de interés a la comunidad educativa. Esta propuesta parte
por tanto de la creación de una red social en la que el centro ejerza labores admi-
nistrativas. De utilizar el potencial de las redes sociales para publicar información
y que ésta sea accesible a cualquier participante de la comunidad escolar. La fina-
lidad es potenciar que la administración educativa utilice las redes sociales como
mecanismo de comunicación y colaboración educativa
Crear redes sociales entre docentes intercentros. Se trata del uso que se podría
hacer de las redes sociales entre docentes de una misma especialidad, mismo
Departamento, profesores de una misma asignatura en un nivel determinado, etc.
Cualquier colaboración que se podría producir a través de las redes sociales que
supogan una mejora del trabajo que se realiza con el estudiante.
–– Para la gestión del centro: supone desarrollar una red social en cada cen-
tro en la cual se pueda compartir información y aprovecharla para formar
a todos en el buen uso de la información digital.
–– Para el proceso de enseñanza-aprendizaje: diseñar actividades educativas
para que los profesores trabajen con sus estudiantes en las redes sociales
y de este modo los jóvenes perciban que las redes sociales no son úni-
camente herramientas para el ocio, sino que también se puede aprender
a través de ellas. También se pueden gestionar grupos de tutoría a través
de redes sociales. Esta actividad la realizaría el tutor del curso. Se podría
utilizar el grupo para enviar mensajes colectivos a la clase, dejar avisos
en el foro o discutir sobre temas de tutoría propuestos en clase, entre otras
cosas.
–– Para la comunicación con las familias: sería interesante potenciar el uso
de herramientas TIC y de redes sociales entre las AMPAS. Hacer una red
social para padres puede ser un medio muy eficaz de entrar en contacto
con ellos. Además de que, muy probablemente, aumente la implicación
de los padres para con la educación de sus hijos.
El otro gran bloque de propuestas se refiere a las que tratan de incentivar el
desarrollo de la identidad digital en la red. La identidad digital o ciudadanía di-
gital es un término utilizado frecuentemente en los últimos años para referirnos
a como a través de nuestra presencia en el ciberespacio los internaturas desa-
rrollamos en la red una identidad propia, digital, foco de interés de los últimos
trabajos de investigación de tecnología educativa (Sharples, 2000; Baier, Zirpins
y Lamersdorf, 2003; Lara, 2009). La identidad digital hace referencia a cómo nos
presentamos en Internet, en dónde se presta gran atención a aspectos referidos a
la privacidad de nuestros datos y hasta qué punto el anonimato puede ser útil en
determinados procesos en red. Siguiendo con las nuevas tendencias que hablan
de “residentes digitales” y entendiendo estos residentes como aquellas personas
que desarrollan una parte de su personalidad en la red (White, 2010), en la actua-
lidad hablamos de la identidad digital como el conjunto de rasgos que caracteri-
zan cómo nos mostramos en la red. Las implicaciones de desarrollar una correcta
identidad digital van más allá del saber comportarnos en la red. Trabajar la iden-
tidad digital supone también saber utilizar los mecanismos digitales de la manera
más adecuada y comprende elementos tan importantes como los de la seguridad
en la red. Por tanto, el segundo bloque de propuestas se refiere a la necesidad de
desarrollar actividades educativas orientadas a que los menores sepan desarrollar
unos patrones adecuados de comportamiento en la red.
6. Bibliografía