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Prof.

Jaime Guedez
Materia: Gramática Española
NOMBRE: Carlos David Piña Labrador
c.i: 30173012

Trabajo Escrito

Gramática Española

Categorías Gramaticales del español


En el mundo de habla castellana, la gramática tradicional distingue nueve partes de la oración:

Sustantivo (o nombre)

Adjetivo

Artículo

Pronombre

Verbo

Adverbio

Interjección

Preposición

Conjunción

Las cinco primeras (sustantivo, adjetivo, artículo, pronombre y verbo) son las llamadas partes
variables de la oración, pues pueden presentar varias formas; y las otras cuatro (adverbio,
preposición, conjunción e interjección) son las partes invariables, porque solo presentan una forma.
Por ejemplo, en castellano, el sustantivo o el adjetivo pueden variar en género y número sin dejar
de ser la misma palabra, y el verbo, que es la categoría más variable, puede presentarse en
cualquiera de las formas de su conjugación, variando en
número, persona, tiempo, modo, voz y aspecto. Esta variación de formas mediante la adición
de morfemas se denomina flexión, y es propia de las lenguas flexivas.
Por otra parte, palabras invariables como los adverbios así o después, o como
las preposiciones en, a o de, como la conjunción pero o como la interjección ¡ea! solo presentan
una forma que carece de variantes relevantes (tanto da, por ejemplo, decir quizá como quizás; y las
variantes y/e, o/u son meramente eufónicas).

evolución de la lengua español

La historia del idioma español comienza con el latín vulgar del Imperio Romano. Específicamente
tiene su origen en el latín vulgar presente en la zona central del norte de Hispania. Tras la caída del
Imperio Romano en el siglo V la influencia del latín culto en la gente común fue disminuyendo
paulatinamente. El latín hablado de entonces fue el fermento de las variedades romances hispánicas,
entre ellas el castellano antiguo, origen a su vez (al menos en la proporción mayor), de las
variedades que constituyen la lengua española. En el siglo VIII, la invasión musulmana de la
Península Ibérica hace que se formen dos zonas bien diferenciadas. En Al-Ándalus, se hablarán los
dialectos romances englobados con el término mozárabe, además de las lenguas de la minoría
alóctona (árabe y bereber). Mientras, en la zona en que se forman los reinos cristianos, desde pocos
años después del inicio de la dominación musulmana, comenzará una evolución divergente, en la
que surgen varias modalidades romances: la catalana, la aragonesa, la asturiano-leonesa y la
gallega, además de la castellana.

El dialecto castellano primigenio se originó en el condado medieval de Castilla (sur de Cantabria y


norte de Burgos), con influencias vascas y germano visigóticas. Los textos más antiguos que se
conocen en español son las Glosas emilianenses, que se conservan en el Monasterio de Yuso, en
San Millán de la Cogolla (La Rioja), localidad considerada centro medieval de cultura.

Se extendió al sur de la península gracias a la Reconquista y a los demás reinos españoles


mediante las sucesivas unificaciones dinásticas (unión con León y Galicia con Fernando III de
Castilla, introducción de dinastía castellana en la Corona de Aragón con Fernando I de Aragón que
llevaría a la unión final con los Reyes Católicos). En el siglo XV, durante el proceso de unificación
española de sus reinos, Antonio de Nebrija publica en Salamanca su Grammatica. Es el primer
tratado de gramática de la lengua española, y también primero de una lengua vulgar europea. La
colonización y conquista de América llevada a cabo simultáneamente expandió el idioma por la
mayor parte del continente americano.

El original idioma español derivó luego en numerosas variantes dialectales que, si bien respetan el
tronco principal, tienen diferencias de pronunciación y vocabulario, como sucede con cualquier otra
lengua. A esto hay que agregar la influencia de los idiomas de las poblaciones nativas de América,
como el aimara, náhuatl, guaraní, chibcha, mapudungun, taíno, maya, y quechua, que hicieron
también contribuciones al léxico del idioma, no solo en sus zonas de influencia, sino en algunos
casos en el léxico global.

Oraciones coordinadas y subordinadas

¿Qué es una oración coordinada?


Una oración coordinada es una oración compuesta que se forma gracias a unir dos o más
frases que pueden ser totalmente independientes, pero que van unidas por un nexo. Las frases
pueden comprenderse si se leen por sí solas y no necesitan a la otra para poder comprender su
significado. Sin embargo, se unen para formar un enunciado más extenso y para dar a entender que
las dos ideas van unidas entre sí.

Ejemplos de oraciones coordinadas


En español existen tres tipos de oraciones coordinadas en función del nexo de unión entre ellas.
Oraciones coordinadas copulativas
Cuyos nexos son: "y", "e" (delante de "i" o "hi" pero no ante el diptongo "hie"), "ni" y "que"
(raramente), los cuales aportan un significado de suma entre ambas proposiciones.
Ejemplo:

 Yo me fui a trabajar y mi compañero de piso se quedó en casa.


 A mi hermano le gusta el fútbol e ir a andar en bicicleta.

Oraciones coordinadas disyuntivas


Con los nexos "o", "u" (ante "o" y "ho") y "o bien" indican exclusión o elección entre una
proposición u otra; esto es, si una proposición es verdadera quiere decir que la otra proposición no
lo es porque queda anulada.
Ejemplo:

 ¿Vienes o te vas?

Oraciones coordinadas adversativas


Con los nexos "pero", "sino" y "más" estas oraciones poseen un matiz de contrariedad de una
proposición frente a la otra.
Ejemplo:

 Juego mejor que tú al ajedrez, pero siempre pierdo.


 No he comprado una bicicleta sino una moto.

¿Qué es una oración subordinada?


Una oración subordinada es un enunciado que forma parte de las oraciones compuestas y que se une
con la oración principal en forma de subordinación: es decir, se establece una relación de
importancia dentro del enunciado. Para poder unir las dos oraciones se emplea un nexo, elemento
encargado de establecer la relación de importancia y de conectarlas.
Ejemplos de oraciones subordinadas
La subordinación en español se opone directamente a la coordinación. Como hemos dicho en la
introducción, la principal característica de las oraciones subordinadas en español es su dependencia
de una oración principal; es decir, la subordinada no tiene independencia sintáctica, de ahí su
relación de subordinación. En español se distinguen tres tipos de oraciones subordinadas.

Oraciones subordinadas sustantivas


Las oraciones subordinadas que desempeñan la(s) función(es) de un sintagma nominal; esto es,
sujeto, complemento directo, complemento indirecto o complemento del nombre, entre otros). Para
saber que se trata de subordinadas sustantivas, se sustituyen por un pronombre ("eso", "esto", "lo",
etc.).
Ejemplo:

 El profesor dio un punto extra a los que llegaron puntuales a clase.


 No vale la pena discutir por tonterías.

Oraciones subordinadas adjetivas


Como su buen nombre indica, cumple las funciones de un adjetivo, expresando una cualidad
referida a la proposición principal. Pueden introducirse por el cual, la cual, quien, cuyo, cuya
sustituyendo a "que".
Ejemplo:

 Los actores que habían sido premiados dieron las gracias al público.

Oraciones subordinadas adverbiales


De forma paralela a los complementos circunstanciales, podemos dividir las oraciones subordinadas
adverbiales de la siguiente manera.
Ejemplo:
• De lugar (Voy a donde me digas)
• De tiempo (Antes de hacer algo, pregunta primero),
• De modo (Se comporta como lo hace su padre)
• Causal (Te felicito porque has trabajado muy bien)
• Consecutiva (Tengo tanto que hacer que esta noche no puedo salir)
• Condicional (Aunque no te lo diga, te quiero mucho)
• Final (Mi familia fue a la función para ver la actuación de mi prima)

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