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A L.·. G.·. D.·. G.·. A.·. D.·. U.·.

Or de Buenos Aires, 29 de agosto de 2018 (e.·. v.·.)


V.·. M.·.
QQ.·.HH.·. todos:

"EVIDENCIAS Y DOCUMENTOS SOBRE SAN MARTÍN Y SU


VÍNCULO CON LA MASONERÍA"

He tenido el honor de ser invitado a esta Respetable Logia Renovación N° 333, y compartir con
uds. este trabajo sobre nuestro Gran Iniciado. Quiero comenzar mencionando que 28 años que mi
logia madre organiza la Tenida Blanca en homenaje al General José de San Martín los 17 de
agosto. Esta circunstancia me posibilitó, primero como profano y luego como miembro del Taller,
el de ser fiel asistente a las más bellas exposiciones de los grandes historiadores de nuestra época.
Es así como nuestra Resp\ Logia convocó a hombres y mujeres de la talla de Enrique de Gandía,
Juan José Cresto, Ema Cibotti, Matias Zapiola (descendiente directo del prócer), Patricia Pasquali,
Rosendo Fraga, García Hamilton, y muchas figuras más que mi memoria no me permiten recordar.

Pero quiero resaltar dos personalidades con las cuales traté, intercambié opiniones que marcaron
e influyeron muchísimo en mis pensamientos y conocimientos.

El primero fue ENRIQUE DE GANDÍA, quien me abrió la percepción y mis ideas a niveles
desconocidos. Este eximio historiador, que recibió el premio del mejor historiador de habla
hispana por los Reyes de España en el año 1994, que escribió su última obra “LA INDEPENDENCIA
DE AMERICA Y LAS SOCIEDADES SECRETAS” (Ed. Sudamericana – Santa Fe, 1994), me hizo conocer
un San Martin trascendente, una figura que iba mucho más allá de lo nacional, una figura
AMERICANA con una visión del mundo y del futuro político de las Américas y de los países
Europeos que linda en lo profético.

La segunda personalidad que iba a conocer algunos años después fue la talentosa y apasionada
historiadora, DRA. PATRICIA PASQUALI. Con ella, quien me acompañó, tuve el acceso a mucha
información, libros, documentos, tuve la distinción de tener en mis manos todas las cartas
originales escritas de puño y letra del General San Martín a Tomás Guido (años 1814 a 1847) que
se encuentran guardadas en el Archivo General de la Nación. Allí me comentó que estaba
escribiendo su nuevo libro “SAN MARTÍN CONFIDENCIAL”. En esa fecha ya había escrito su historia
de “SAN MARTÍN, la fuerza de la misión y la soledad de la gloria”. Hoy lamentamos su
desaparición, pero ha quedado en la Masonería Argentina su huella eterna en defensa de la
verdad histórica.

Finalmente quiero referirme a una obra monumental. Qué ironía del destino que uno de los
estudios más asombrosos de la vida del Gran Iniciado fuese escrito por un español, Gr\ 33°, DON
AUGUSTO BARCIA TRELLES, y perteneciente al GOFA (Historia de San Martín, Ed. López &
Etechegoyen SRL., 1946, 8 Tomos). Esta obra es fundamental, no sólo para la historia del prócer,
sino y especialmente conocer la historia de la masonería española y americana.

Estos historiadores que mencioné con especial devoción tienen una característica primordial, y es
la de relacionar la historia del prócer tuvo con la masonería Por ejemplo, Barcia Trelles, pudo
predecir en 1942 que la documentación que avalaba su teoría existía, pero que ésta había sido
incautada por las tropas alemanas durante la segunda guerra. El 14 de junio de 1998 el diario “La
Nación” publica la inesperada noticia que la KGB había dado a luz a esa documentación que 50
años antes había vaticinado el historiador. Se habían encontrado las actas labradas pertenecientes
a las logias que actuaban en Bélgica. Participaron historiadores, diplomáticos, economistas y hasta
filósofos en el encuentro organizado por el Centro de Investigaciones de Liege y la embajada
argentina ante el reino de Bélgica. El material fue microfilmado por el Instituto de Estudios de las
Religiones y del Laicismo de la Universidad Libre de Bruselas. Este acontecimiento irrefutable
demostró, sin lugar a dudas, la actividad masónica del General San MARTÍN, no obstante muchas
más pruebas ya existían tiempo antes. Debemos resaltar, entre ellas, las memorias de los
protagonistas del proceso de emancipación: del General Espejo, del General Enrique Martínez, del

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General Tomas de Iriarte, García del Rio, Vicente López, y muchas obras más sin contar con el
aporte invaluable del RESP\ H\ ALCIBÍADES LAPPAS (“SAN MARTÍN Y SU IDEARIO LIBERAL”, ED.
SIMBOLO, 1982) que encontró en los archivos de la Gran Logia el Cuadro Lógico de la Resp\ Log\
“Asilo del Litoral” donde aparece el H \ Joaquín Mario Ramírez, como V \ M\, Gr\ 18°, de edad
59 años, de nacionalidad argentina, de profesión militar, Logia en la que fue iniciado: Ejército de
los Andes, iniciado en 1819, y V\ M\ el GENERAL SAN MARTÍN (pág. 75 ob.cit.) .

Aquellos que niegan que nuestro héroe estaba vinculado a la masonería lo fundan en los mismos
textos documentos y correspondencia que lo avalan, basado en las opiniones de Bartolomé Mitre
y de Sarmiento que expresan que, no obstante utilizar los toques, palabras y símbolos, las logias
no eran de carácter masónico; que San Martín era católico, que se había casado por iglesia, que
había proclamado que la Virgen del Carmen recibiría el título de “Patrona del Ejército de los
Andes”, porque en su testamento expresa su creencia en Dios como GRAN HACEDOR DEL
UNIVERSO y, finalmente, porque ninguna Gran Logia de Europa tiene registrado el levantamiento
de columnas de la Logia Lautaro y/o cualquier otra Logia Americana de esa época, entre otras
causas.

Con este resumido trabajo pretendo señalarles las pruebas documentales que demuestran la
afiliación masónica del Gral. San Martín. Mencionaré las más importantes porque el tiempo y la
extensión de esta conferencia no me permiten extenderme, ya que la bibliografía es muy extensa.
Veamos:

1. Carta enviada por San Martín al Mariscal Ramón Castilla (Boulogne Sur Mer 11 de setiembre de
1848): “Como usted, yo serví en el ejército español, en la Península, desde la edad de trece a
treinta y cuatro años, hasta el grado de teniente coronel de caballería. Una reunión de
americanos, en Cádiz, sabedores de los primeros movimientos acaecidos en Caracas, Buenos
Aires, etcétera, resolvimos regresar cada uno al país de nuestro nacimiento, a fin de prestarle
nuestros servicios en la lucha, pues calculábamos se había de empeñar”.
2. En una carta desde París de Balcarce al General Mitre (30 de setiembre de 1860) le dice:
Siguiendo fielmente las ideas de mi venerado señor padre político, que no quiso en vida se
hablase de sus vinculaciones con la masonería y demás sociedades secretas, considero que debo
abstenerme hacer uso de los documentos que poseo al respecto”. Bartolomé Mitre en su libro
intentó reconstruir el proceso de las logias en España. Para ello remitió una carta al general José
Matías Zapiola requiriéndole que le contestara unas preguntas: a) ¿Cómo se llamaba la Logia a la
que Ud. pertenecía en España? Logia Lautaro se titulaba la reunión de americanos a la que fui
incorporado en Cádiz. b) ¿Sabe cuándo y por quién se fundó? Ignoro quién fue el fundador de la
sociedad. C) ¿La Logia estaba en relación con la de Londres? En Londres asistí a la reunión de la
sociedad establecida en casa de los diputados de Venezuela. Allí fui ascendido al quinto grado,
como lo fue el Gral. San Martín. Ésta estaba relacionada con la de Cádiz y otras. D) ¿Qué otros
americanos pertenecían a la logia y donde? En Londres conocí al diputado por Caracas, Méndez, y
al secretario Bello, al padre Mier, al marques del Apartado, al Dr. Villa Orrubia, a don Manuel
Moreno y otros más.
3. El punto anterior está refrendado por el General José Rivadeneira refiriéndose a su reencuentro
con San Martín en 1821 en el cuartel general de Huarua dijo: “me estrechó en sus brazos, recordó
nuestra amistad antigua, nuestros trabajos en la sociedad de Cádiz para que se hiciese la América
independiente (B. Vicuña Mackenna. La Revolución de la Independencia del Perú. Chile. 1938).

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4. Carta de Alvear fechada en Londres 28 de octubre de 1811 y dirigidas al patriota venezolano
Rafael Mérida que presidía la Logia de Caracas. Estas cartas fueron adquiridas por el historiador
español contraalmirante Julio Guillén (Boletín de la Academia Chilena de Historia, año XXVII, N°
63, Santiago, 1960): Mi estimado hermano: al fin he salido del poder de los tiranos, y me hallo
aquí acompañado por los hermanos que en el oficio indico. ... Pienso salir el mes entrante con los
hermanos arriba expresados para Buenos Aires… Aquí he establecido una logia para servir de
comunicación con Cádiz, Filadelfia y ésa, como también para que encuentren abrigo los hermanos
que escapan de Cádiz… Dará V. mil expresiones de mi parte y de la de Zapiola a los hermanos
Caicedo y Toledo”.
5. Otra Carta de Alvear con la misma fecha que la anterior: L N°7. Unión, Firmeza y Valor. Salud al
Venerable Presidente de la L N° 4. En cumplimiento de nuestra obligación, paso a dar cuenta de
lo ocurrido en la L N° 3, después de vuestra salida… Habiendo llegado a esta ciudad con los
hermanos Zapiola, San Martín, Mier, Villa-Urrutia y Chilavert, hemos fundado por orden de la L
N° 3 una con la N° 7 …”
6. Ahora tenemos otra incógnita a resolver ¿Quién financiaba esto? Los historiadores se dividen
entre intereses franceses o ingleses. La verdad se dio a la luz otra vez con las cartas de Alvear
avalada por una escritura que Enrique de Gandía tuvo en sus manos. La escritura es de fecha 4 de
setiembre de 1811, y expresa “ante el escribano Bartolomé Cortez Gómez, 60.000 reales de vellón
en Cadiz, dos mil libras esterlinas en Londres, 6 mil duros en Buenos Aires, en adelanto de
herencia”. El mismo Alvear dice “Yo era el centro de las relaciones íntimas de todos los
americanos,… prodigué ingentes sumas de dinero para auxiliar la evasión de todos los que querían
venir a defender la causa de la libertad… A fuerza de dinero conseguí la fuga del teniente coronel
Frances Rossels, que se hallaba prisionero en el Castillo de Santa Catalina, con solo el designio de
que se entregase al general francés que sitiaba a Cádiz (el mariscal Victor) y mis cartas”. De ello
surge claramente que Alvear, San Martín y todo el grupo mencionado estuvieron en comunicación
con el Mariscal Víctor y con su ayuda liberan al teniente coronel Rossels.
7. Carta de Bernardo O´Higgins a Rivadavia, setiembre de 1926: “.. en los años 1806, 1807, 1808 y
1809 fui miembro activo de una escogida sociedad organizada en Cádiz en 1802, no solamente
con el objeto de liberar a Chile del yugo español, sino que también con el de cooperar con Buenos
Aires en la misma obra”.
8. Carta del General Enrique Martínez al Ministro Andrés Lamas, publicada en 1912: “San Martín
que era el Venerable y no estaba en Buenos Aires, trasmitió sus poderes y volvió a reorganizarse
la Sociedad. Ésta hizo que se reuniese el Congreso de Tucumán y Declarase la Independencia y
nombró a Pueyrredón de Director, más éste no pertenecía a la Sociedad y en Buenos Aires no
querían recibirlo. Entonces partió San Martín de Mendoza a Córdoba y en este punto consiguió
que Pueyrredón se incorporase a la Sociedad y fue reconocido. Es entonces que se ejecutaron
inmensos trabajos para asegurar la independencia y entre otros se hizo la expedición de chile…”
9. En las memorias del Gral. Jerónimo Espejo cuenta la anécdota del ayudante ingeniero Álvarez
Condarco, concluyendo… “la masonería obró este milagro y a ella se debe también que San

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Martín, después de Maipú, recomendara que se guardaran las mayores consideraciones a los jefes
y oficiales que cayeran prisioneros en medio de la derrota de las fuerzas españolas”

10. El 3 de marzo de 1822 el general San Martín regresa al Callao, luego de su fracasado viaje a
Guayaquil para entrevistarse con el general Simón Bolívar. El 7 de marzo el general Domingo
Tristán es vencido en la hacienda de Macacona causando una gran pérdida al ejercito patriota.
Ahora, más que nunca, se imponía la formación del ejército en el norte del territorio argentino
para amenazar la retaguardia realista (plan que venía pergeñando San Martín desde 1820). El día
20 de mayo de 1822, por tal motivo, se embarca en misión especial el comandante Antonio
Gutiérrez de la Fuente (masón). Este comandante, peruano, fue el que muchos años antes,
revistando en el bando realista, recibió al coronel Álvarez Condarco (masón), enviado a Chile por
San Martín para memorizar los pasos de Los Patos y de Uspallata, planos esenciales para el cruce.
Luego pasaría a luchar destacadamente como patriota. San Martín, ahora, lo designará para una
importante misión. Llevará consigo instrucciones secretas con 25 puntos esenciales para el plan
escritos de puño y letra del General San Martín. Éste estaba convencido que para terminar la
guerra con los españoles en el Alto Perú debía contar con las fuerzas de las Provincias Unidas,
conjuntamente con las del General Rudecindo Alvarado, quien le escribiría en su momento “este
ejército es suyo general”. Evidentemente todo este plan había sido preparado hacía tiempo, y por
ello no estaba en los ánimos del Protector, gobernar el Perú, cuya renuncia había dejado antes del
Encuentro, como se verá más adelante. Cuarenta y cinco días después de la partida del
comandante De la Fuente, el día 5 de julio de 1822, la “Gaceta del Gobierno de Lima
Independencia” publica, una noticia fundamental para el futuro del continente americano. Ese día,
a las 11 de la mañana el Ministro de Relaciones Exteriores del Perú, Cnel. Bernardo de
Monteagudo (masón), pasó a la residencia del Ministro Extraordinario de Colombia, Gral. Don
Joaquín Mosquera (masón), y lo acompañó al Palacio de Gobierno. En el Salón del Consejo se
hallaban reunidos los Consejeros de Estado, las primeras autoridades y se pronunciaron sendos
discursos de unión, de alianza pública, franca, solemne, fraternal de sus pueblos y jefes. Así el
Ministro Mosquera entregó a Monteagudo los despachos oficiales concluyendo el acto. Luego de
un descanso, a las 15 hs., se sirvió “un convite de sesenta cubiertos en obsequio del representante
de Colombia”, tocaron las bandas, y se brindó para que “las grandes secciones de mexico,
colombia, el perú, chile y las provincias unidas del rio de la plata formen entre sí una unión tan
estrecha como necesaria”. El 6 de julio se firmaba el “TRATADO DE UNION, LIGA Y
CONFEDERACIÓN PERPETUA ENTRE COLOMBIA Y EL PERÚ EN EL NOMBRE DE DIOS, SOBERANO
GOBERNADOR DEL UNIVERSO” y que constaba de dieciocho artículos y un adicional que contenía
nueve artículos más. Enrique de Gandía relaciona todos estos sucesos con el influjo que ejercía la
LOGIA O-O y que consta en la correspondencia de Bolivar y San Martín. El encuentro de Guayaquil
fue el 26 de julio de 1822, ¿por qué nadie relacionó aquel acontecimiento con esta entrevista?
¿Por qué ningún historiador menciona a la Logia O-O, tema que fuera bien tratado en la obra de
Zuñiga, y de Enrique de Gandía, entre otros?

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11. Estando en Bruselas, en la nómina del mes de diciembre de 1824 figura en la Logia La Parfaite
Amitié. Los miembros de ella deben haber sido fuertemente impresionados por el patriota
americano ya que en enero del año siguiente encomendaron a uno de los suyos, el artista Juan
Enrique Simón (grabador oficial del reino), que confeccionara una medalla en honor al
Libertador. Esta medalla reviste un carácter complementario que es su valor iconográfico, ya que
el libertador posó para el artista, de tal suerte que es el único retrato de perfil auténtico que llegó
hasta nuestros días.
12. Carta de San Martín al General Guillermo Miller (19 de abril de 1827): No creo conveniente que
hable usted lo más mínimo de la Logia de Buenos Aires. Estos son asuntos enteramente privados y
que aunque han tenido y tienen gran influencia en los acontecimientos de la revolución de aquélla
parte de América, no podrán manifestarse sin faltar por mi parte a los más sagrados
compromisos.
13. Carta desde París de Balcarce al General Mitre (30 de setiembre de 1860): “Siguiendo fielmente
las ideas de mi venerado señor padre político, que no quiso en vida se hablase de sus
vinculaciones con la masonería y demás sociedades secretas, considero que debo abstenerme
hacer uso de los documentos que poseo al respecto”
14. Ya referida en nuestra introducción, en la Sede de nuestra Masonería, en la nómina de fundadores
de la Logia Asilo del Litoral, fundada en la Ciudad de Paraná, Entre Ríos, constituida el 17 de
agosto de 1860 uno de los fundadores de la misma y Venerable Maestro, coronel Joaquín María
Ramiro, para acreditar su carácter de masón lo hace informando que fue iniciado en 1819 en la
Logia “Ejercito de los Andes, y que la presidía como Venerable Maestro, el Gral. San Martín”

Creo haber cumplido con mi cometido, y espero hayan disfrutado en este viaje al pasado glorioso de nuestro
Gran Iniciado y quiero terminar con las palabras que escribió San Martín al Venerable de la Logia Lautaro de
Mendoza, su amigo y hermano Toribio de Luzuriaga el 17 de diciembre de 1820.

“Yo sólo deseo la independencia de América del gobierno español, y que cada pueblo, si es posible, se dé la
forma de gobierno que crea mas conveniente”

Enrique Ernesto Vitale


MM
Resp Log Gral. San Martín N° 384

Bibliografía:
Bartolomé Mitre, “Historia de San Martín y de la Emancipación Sudamericana”, Tomo I, Ed. Tor, 1950)
Enrique de Gandía, “La independencia de América y las sociedades secretas”, Edic. Sudamericana, Santa Fe, 1994
El diario y Documentos de la misión sanmartiniana de Gutiérrez de la Fuente -1822 - , Academia Nacional de Historia por Julio González y
Ricardo R. Gaillet-Bois.
Gerónimo Espejo, “Recuerdos Históricos: San Martín y Bolívar, Entrevista de Guayaquil: 1822” Est. Gráfico Argentino, 1939
Enrique de Gandía, “Historia del Libertador Don José de San Martín, T° VI, pag. 310/11”;
Enrique de Gandía, “San Martín, su pensamiento político”, pág. 137, Ed. Pleamar, 1964.
Carta de Urdininea “Revista de Bs.As., t. XIX, pág.83.
http://www.bdigital.unal.edu.co/4773/1044/Relaciones_Diplomaticas_de_Colombia_y_La_Nueva_Granada.html Esta relación oficial fue hallada

5
en el archivo diplomático de Colombia en 1909, por Ismael López y publicada por vez primera por el historiador José Manuel Goenaga, en 1911,
en su obra "La Entrevista de Guayaquil (Bolívar y San Martín), en las páginas 28-35.
Documentos para la historia..., Op. cit., Tomo XVIII, p. 347
Rodolfo Terragno, “Maitland & San Martín”, Universidad de Quilmes, 1999.
Rodolfo Terragno, “Diario intimo de San Martín”, Ed. Sudamericana, 2008.
Patricia Pasquali, “San Martín: La fuerza de la Misión y la soledad de la gloria”, Ed. Planeta, 1999.
Patricia Pasquali “San Martín Confidencial”, Ed. Planeta, 2000.
Augusto Barcia Trelles, “Historia de San Martín”, Ed. López, 1942.
Pacifico Otero, “Historia del Libertador Gral. José San Martín, Circulo Militar, 1978
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Alcibíades Lappas, “La Masonería a través de sus hombres”, Impresora Belgrano, 1966
Emilio Corbiere, “La Masonería, política y sociedades secretas”, Ed. Sudamericana, 1998
Por Jacques Joset, prof. Raxhon “Correspondencia et autres écrits du Libertador José de San Martin” Editions de l'ULG, 2004 - 
Fabian Onsari, “San Martín, la Logia Lautaro y la Francmasonería”, Avellaneda, 1951.
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Coronel Manuel A. Pueyrredón “Memorias Inéditas del Coronel Manuel A. Pueyrredón”, Talleres Gráficos Guillermo Kraft Ltda., 14/3/1947
Horacio Juan Cuccorese “San Martín, Catolicismo y Masonería”, Ed. Amalevi, 2000
John Miller, “Memorias del General Miller”, Ediciones EMECE 1998
Coronel Manuel de Olazábal “Episodios de la guerra de la independencia”, Instituto Nacional Sanmartiniano, 1978
Gustavo Pons Muzzo, “El gobierno protectoral del Libertador Generalisimo Don José de San Martín”, Instituto Sanmartiniano del Perú, 2015.

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