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ALUMNO: Ángel Gabriel Gerónimo García

GRUPO: Licenciatura en Teología Online

MATERIA: Ética y valores

DOCENTE: Gamaliel Gordillo

Tema: Reporte de lectura crítica

21 de enero de 2022, Villahermosa, Tabasco.


INTRODUCCIÓN

Autor: Diego Calvo Merino; Titulo del libro: Aportaciones de la ética situacional a
un replanteamiento de la ética cristiana; Ciudad: Barcelona, España; Editorial:
Aula7activa-aeguae; Año: 2015.

El siguiente reporte de lectura tiene como fin describir el pensamiento del autor y
dialogar con sus ideas respecto a la ética situacional, el autor parte desde el
significado de la ética y de la moral, continúa explicando sobre las éticas de las
diversas escuelas filosóficas en la historia, hace un breve repaso de como las
interpretaciones de la ética trajo ciertas consecuencias con el absolutismo y
también con el relativismo.
Todo lo anterior, para luego inclinarse hasta cierto punto a la ética situacional,
pero no se queda con la definición pronta de ella, sino que va un poco más allá al
hablarnos del peligro, pero también de las bondades propias de ella, para culminar
y hacernos la invitación a mirar a Jesucristo como el punto de anclaje de nuestra
ética y al hombre nuevo como libre para muchas posibilidades.
REPORTE DE LECTURA: ÉTICA CRISTIANA Y ÉTICA SITUACIONAL

1. La ética cristiana frente a la ética situacional


1.1. Consideraciones iniciales: Ética y moral

Para el autor, la ética se preocupa por el bien (felicidad) tanto del individuo ético
como de los demás hombres de la sociedad.
La ética, no impone una elección moral, ni genera normas, la ética solo avisa
cuándo un comportamiento se aleja de las normas que garantizan el bienestar
humano.
Por lo que propone que la ética cristiana debería acoger al mundo real en su
especificidad y en dar reflexivamente razón de él, con el objeto de que los
hombres crezcan en responsabilidad acerca de sí mismos y que avancen a la
libertad.
Se afirma que la ética cristiana debe actuar como crítica a toda ética, puesto que
sus principios ofrecen una verdadera solución para las enfermedades morales de
nuestra época.
Por lo anterior, al autor le parece que cierta ética de “situación” si tiene
correspondencias bíblicas.
Sin embargo, de manera pronta, a mí me parece desde la reflexión de Sócrates
que al autor se le escapa que algo más que se debe de buscar como fin en la
ética, no consiste solo en la felicidad, sino también en la justicia, pues una vida
injusta y feliz no puede ser posible.
Pero, ahora bien, me surge una pregunta, ¿cómo es posible determinar lo que es
la felicidad y lo que es justo?, ¿somos los seres humanos capaces de determinar
sin errar estas dos bases?

1.2. Ética situacional


La nueva moralidad que emerge de Jesús libera la conducta cristiana de los
credos rígidos y de los códigos inflexibles humanos. Se observa la ley por
imperativo del amor, y no al revés.
Por lo que, la ética cristiana es una ética situacional, el carácter único de cada
situación y la singularidad de sus potencialidades demandan decisiones
particulares, que ninguna norma o ley puede anticipar.

Los situacionistas cristianos afirman que el amor es la única obligación del


creyente, y que el hombre es el objetivo principal de la soteriología.
Sin embargo, algunos rechazan la ética situacional por el hecho que relativiza los
códigos de moralidad, volviéndose muy atractivo para el hombre postmoderno.

1.3. Joseph Fletcher y T.A. Robinson


Se entiende que la base general de la ética situacional es la ley del amor, todo
está bien si no se lastima a otra persona, sin embargo, no todo es tan simple.
La ética situacional es el camino intermedio entre la ética legalista y antinómica.
El situacionismo respeta los principios tradicionales de su herencia, pero siempre
está listo para descartarlos si, en la situación dada, el amor aparece mejor servido
con esa actitud, esto es, cuando cualquier acción produce el mayor beneficio para
la mayor cantidad de personas, en otras palabras, el fin justifica los medios.

En lo ideal es que el amor podría ser una guía adecuada para el curso de acción
correcto si fuéramos capaces de amar como ama Dios y de tener pleno
conocimiento de la situación y de todas las consecuencias de nuestras acciones,
pero la realidad es que el ser humano es incapaz de mirar todo el panorama
completo de las consecuencias de nuestras acciones y de amar realmente como
Dios ama.

Por lo que advierto cuatro cosas, La ética situacional, no pone una atención al
problema del pecado, no define que es “situación”, confunde cualquier ética
basada en normas con legalismo, y cuarto limita la definición de amor con la de 1
Corintios 13 dejando de lado otras como la de Romanos 13:8-10 que Fletcher no
tiene en cuenta.
2. Categorías fundamentales contrastadas

El autor pretende pasar de un planteamiento ético absolutista o relativo para


encontrar fundamentos basados en una autonomía moral teónoma y heterónoma.

2.1. Sistemas éticos clásicos


Sócrates, Platón y Aristóteles fueron los primeros en formular teorías éticas.
Las escuelas clásicas de la ética filosófica buscan principalmente que el individuo
tome la decisión correcta en una situación determinada, sobre la base de
principios establecidos considerados normativos, a través de la formación del
carácter, conducta, actitudes y hábitos del individuo ético.
La teleología busca sopesar cuidadosamente las consecuencias tempranas y
tardías de una acción, buscando el bien para la mayoría o lo menos peor.
Lo anterior según las escuelas filosóficas se alcanza con tres cosas, el mero
conocimiento del bien, que es el fin supremo que idealmente debe orientar e
inspirar toda nuestra existencia, no puede limitarse a una ganancia material
cuantificable o alguna satisfacción emocional.
El segundo término es la virtud, y esta supone adquirir las destrezas requeridas
por el razonamiento moral y exhibir los hábitos de conducta conmensurables con
el bien.
Para responder realmente a una ética de la virtud no basta con hacer lo correcto,
el interés por la virtud buscará ir más lejos, involucra sentimientos de empatía,
mostrando misericordia hacia otros.
El tercer factor que interviene en la ética de las virtudes es la comunidad. La
comunidad establece que es el bien para ellos.

Los sistemas éticos han evolucionado:


Los estoicos decían que una vida buena era por la supresión de los sentimientos y
la virtud principal era la firmeza, los epicúreos afirmaban que, el ideal era el placer.
Los griegos raramente trataron el problema de la obligación moral, (el por qué
perseguir el bien), los judíos elaboran su ética a partir de la observación de la ley,
y los cristianos elaboraron diversos sistemas éticos basados en la Biblia y en las
diversas tradiciones eclesiásticas.
Cada sistema ético al parecer no es completa o buena del todo y existen tensiones
frente a las hipotéticas situacionistas, por lo que nuestro interés es saber si las
normas bíblicas son lo suficientemente claras como criterios únicos de conducta, o
bien, como sostiene la ética situacional, solamente la razón y la caridad servirán
en función del amor, como esclavas al servicio de este.
La historia nos indica que, se ha intentado regular la conducta a través de la ley, a
la vez que se rinde homenaje al amor, pero no se ha logrado en la práctica. Por lo
que el relativismo moral hasta cierto punto cobra importancia por lo práctico.

2.2. Absolutismo y relativismo éticos


Absolutismo: enseña que algo conserva su fuerza obligatoria bajo todas las
circunstancias, que las enseñanzas Bíblicas siempre son claras, pero esto en
muchos casos vuelve al individuo cerrado a lo espiritual para la toma de
decisiones, me atrevo a pensar que tal como sucedió con los líderes religiosos
judíos al no aceptar a Cristo, o llegar al punto de no buscar discernimiento y
sabiduría que viene del Espíritu Santo.
Contrariamente se sitúa el relativismo moral: esta afirma que la situación
concreta real hay que considerarla como un lugar de encuentro y de respuesta, sin
embargo, esto lo vuelve inconveniente porque no proporciona un punto de anclaje,
un mapa en medio del mar de ideas que amenaza a esta sociedad
postmodernista.

Por lo que, en el absolutismo ético hay la tendencia de oprimir y en el


relativismo, el no saber colocar límites, por lo que se concluye que, todas las
éticas fallan, el camino es complejo, porque el ser humano no es Dios, no sabe
todas las consecuencias de sus actos presentes ni futuros, ni saber si aquello es
bueno o malo con determinación, por lo que, el criterio y camino que podemos
tomar es el de la interiorización de esa ley, en el discernimiento, como lo dice
Jeremías 31:33 y hebreos 8:7-13.
CONCLUSIÓN

El camino para el individuo ético es complejo, ni el absolutismo, ni el subjetivismo


lo es, esto lo podemos corroborar al leer la historia del pueblo judío e incluso del
mismo cristianismo, que se hicieron actos en nombre de Dios, e incluso Pablo el
apóstol perseguía a la iglesia en nombre de Dios y por el amor a su pueblo judío.

Ciertamente estamos llenos de subjetividades por todo lo que nos rodea, pero esto
no nos debe desalentar, ya que debemos de descansar en que Dios nos dio
libertad de elección, y que Dios a pesar de nuestras fallas nos perdona porque el
conoce nuestro interior y nos mira a través de la justicia de Cristo 1 Juan 2:1, cabe
recalcar que, para nada intento romantizar este hecho, ni pretendo que otros
piensen que es una forma de permiso para pecar.
Al contrario, debemos buscar ser éticos no solo en la reflexión, sino también en la
acción, bajo las enseñanzas y la contemplación de la vida de Cristo, amando a
Dios por sobre todas las cosas, y en la responsabilidad hacia nuestro prójimo
como a nosotros mismos, esto último se cumple con la regla de oro en su forma
positiva (no hagas a otro lo que no quieras que te hagan, o haz a otro lo que
quieres que te hagan).

Algo que se me escapaba decir, es que no estoy de acuerdo con la ética


situacionista explicada desde el punto de vista de Ronald Nash que dice “Nada
es intrínsecamente bueno excepto el amor; nada es intrínsecamente malo excepto
el no amar… Dependiendo de la situación, el amor puede que encuentre
necesario mentir, robar, presumiblemente hasta fornicar, blasfemar y adorar falsos
dioses. El único absoluto es el amor”.
Porque es una explicación muy superficial, ya que, en muchos de esos puntos,
hay más de una base bíblica en el Nuevo Testamento que reafirman el no hacer
tal cosa solo por la base del amor, y reafirmo esto, porque las mismas escrituras
en Juan 14:21 nos dice que el que ama a Dios guarda sus mandamientos, pero si
estoy de acuerdo en parte con la ética situacional en el hecho que nos invita a
reflexionar seriamente en las diversas posibilidades, siempre y cuando tengamos
el punto de anclaje en la vida y enseñanzas de Jesús.

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