El universo es una extensión de tu cuerpo

CONFINADOS
ANTONIO AMADO
 El universo es una extensión de tu cuerpo

COTIDIANO

¿En qué piensan los niños cuando mamá y papá tienen sexo en el cuarto de al lado?

Y ¿si mamá gime?

¿Será que pelean?

Pero si al otro día amanecen felices.

Pero no hay lugar a dudas, pelean, porque cuando discuten también me apagan el televisor
y me ordenan dormir.

En conclusión el sexo ha de ser una discusión o al menos así deben terminar todas las
discusiones de las parejas.... Que tontos los adultos, deberían amarse.

***

Así como cuando el gato urbano va de cacería, y la paloma advierte sus intenciones... En el
momento crucial, mientras él lanza su garra abierta, ella extiende sus alas y lo deja con
pasmó de narices, la boca abierta, la misma de los hombres al ver pasar una suculenta mujer
en la avenida y está toma el bus.

Sólo ansias y deseos encadenados... Haciéndolos fisiológicamente más violentos.

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LA PAREJA

“Artista estas enfermo, retrata tu monstruo” GOETHE.

***
No amamos o queremos un ser en particular sino un estado de la naturaleza que reposa en
él o ella en ese instante. Los seres humanos son los mortales, el amor no.
***
Cuando se acaban los caminos es cuando comienza el viaje.

Nos podemos ver reflejados en miles de versos antiguos, donde el amor no es ese pequeño
infante alado lleno de ternura, sino el súcubo que nos devora. Ver en la perspectiva
renacentista la profundidad de tu cabellera… ser la convergencia de las patologías humanas
con respecto a sus emociones e ideas, sufrirlo todo… y aun sentir en ocasiones que nada
hemos realizado; recordar en cada sombra lo que hemos vivido… suspirar al resucitar por
una extraña asociación con otro elemento lo que nos pasa, porque lo que pasa muere... habitar
el mundo pensando en el otro, creándolo y destruyéndolo a nuestro antojo, jugando ante la
impotencia que nos genera lo que no compartimos, nos asesinamos a diario cuando el peso
de las formas del uno recae como un alud en el otro… sentir la ausencia frente a frente
mientras como una aparición seguimos en nuestro microcosmos interior y se nos extravía la
vista… añorando la soledad perdida y sin embargo tan temerosos de perder al otro, sin darnos
cuenta que estamos perdidos, extraviados en el deseo.

Veo a mis carnes, mi piel rasgadas y al descubierto cada temor, cada ira contenida y
reconozco mi fealdad, esa misma que me ha mantenido alejado de todo y que al entrar en
contacto contigo grita enfurecida… cada sentir intensificado al máximo y el cuerpo como en
una agonía permanece agotado; exigiendo la mutación, de lo contrario se descompondrá cual
un leproso dejando en cada abrazo o beso la piel, los órganos, la vida. Existir con la funesta
sensación de volver a tiempos pasados es la muerte… sólo debemos crear y la materia para
ello es nuestro ser, es necesario abandonarnos… todo nos ata, a prejuicios, a supuestos
conocimientos, a falsas necesidades y deseos construidos desde lo externo, desde lo ajeno a
nosotros mismos; es menester dejarse en cualquier esquina, a ver si en algún momento nos
encontramos.
 El universo es una extensión de tu cuerpo

Hay que crear un nuevo lenguaje, pues ya no creo en las palabras… esperar no es una opción,
puesto que el desespero carcome mis nervios, no me pidas calma, mis ideas arden, todo se
hace ceniza, ni el vino calma mi sed; desnúdate, rásgate la piel, enséñame tu violencia, escupe
en la cara a los dioses, asciende o cae al caos y vuelve a crear todo, danza sobre mis huesos
como haciéndome el amor.

MUTACIÓN

Tu presencia ha sembrado en mi interior una semilla que germina lentamente… nutriéndose

de los despojos de antiguos amores, que son como versos enmohecidos en el baúl de los
recuerdos, adsorbiendo la esencia de mis sueños, esa argamasa caótica y amorfa, barro
ancestral con el cual modelo las ideas.

En ocasiones creo sentirla en mi abdomen generando temblores mientras las raíces

construyen su curso… y un vacío y a la ves una llenura gobiernan mis entrañas, aquello que
llamamos extrañar, esa sensación de tenerte tan cerca sin que tu estés. Pero la semilla es
móvil y se aloja rotativamente conquistando mi ser, transformándolo, ¿qué otra situación
puede ser el sentir sino el cambio?, jamás seremos los mismo después de encontrarnos frente
a frente con el cuerpo del deseo.

Lentamente va brotando en espiral el tallo y sus ramas se extienden al interior de mis venas
llenándolas de la savia renovadora de la creación y se extienden cada vez más, hasta romper
la piel y hacerse palabra. Otras aguardan pacientemente tu arribo, deseosas de que te
columpies en ellas a través de los abrazos.

Pronto dará a luz la primera flor, ¿qué alma desorientada la tomara angustiosamente como
rosa de los vientos? … -me quiere, no me quiere-. Pasaran las Lunas y ya será árbol que
prestara sombra a mis dudas y mis sueños en medio del desierto de lo posible. Pasaran soles
y de su tronco extraeré la madera de mi féretro.

¡Quizás nunca logre probar de sus frutos!...

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GENESIS

“¡Qué bienaventurado es el espíritu que reposa en el seno del amado!

Ese tal, está desnudo de Dios, de todas las cosas y de sí mismo.”
Angelus Silesius.
A: M.O.
Lentamente me voy despojando de mis prendas, disfraces, máscaras moralistas que ocultan
con prejuicios y posturas la esencia del ser. Creemos estar frágiles ante la desnudez, cuando
las lágrimas bañan el rostro le llamamos debilidad, cuanto engaño en esta perspectiva… las
lágrimas al igual que los fluidos genitales del orgasmo son el ser que se expande en medio
del éxtasis de la sensibilidad, es una erupción de energía que empaña las ventanas del cuarto
y de la mente.

Deformamos nuestros cuerpos tras la simbiosis del abrazo, mi boca se hace vulva para recibir
tu húmeda lengua que penetra mi mente con el verso, son tus dedos ojos que observan la
espesura del valle de mis vellos, son los míos bocas que beben tu piel en las caricias…

Es mi falo, tallo de la rosa de tus pliegues vaginales, pétalos abiertos al rocío del placer, es
mi esperma deslizándose en la bóveda cósmica de tus piernas, la blanquecina nube estelar
que da nombre a la Vía Láctea, es tu carmesí ciclo lunar el polvo de estrellas que deja el
origen de una súper nova.

Es por esto que desvestir es un oficio simple, pero desnudar es un arte mayor… me sumerjo
en tu profundidades y mis labios superiores besan tus labios inferiores, eliminando Toda
lógica física; lentamente nos vamos desvaneciendo entre gemidos, haciéndonos agua, agua
marina, agua salada.

Tu forma se funde con todo y desmiembras mi ser, el yo, el tú, se pierden en el caos amorfo
de lo que antes eran dos cuerpos que se amaban… como podría amar o aborrecer de ti alguna
parte, te deseo toda, desde tu idea más secreta hasta el botón rosa de tu pezón erecto, del
sentimiento más íntimo y discreto al punto donde tu pupila se dirige.

Si nos duele el cuerpo tras encontrarnos es porque estamos mutando, es porque la naturaleza
humana nos es insuficiente y nos hacemos fuego en los abrazos, agua en nuestros besos, tierra
en los pasos que damos tomados de la mano y aire en la palabra cuando cerca no estamos.
 El universo es una extensión de tu cuerpo

DES-COMPONER

(Tanta entrega "pasiva" que rozaba la sumisión, carente de agresividad,

más con una violenta complicidad, una sumisión contraria al sometimiento
y por lo tanto placentera a los dos,
un estado sólo realizable con la absoluta libertad
de ser lo que cada quien es, sin ningún prejuicio inhibidor. A Rocío)

A: MAR

Deseo reconfigurar mi génesis… engendrar un big bang que desborde mis medidas y
principios…

Hacer del mundo un espacio cálido y acogedor que nutra nuestro inmenso mar, que el
continente de tu pecho y el mío se unan para darle piso a sus aguas, y en el roce de nuestras
placas tectónicas de la piel sea un sismo de gozo…

Que tengamos la posibilidad de ser en el otro y en nosotros mismos… hasta mutar y ampliar
nuestras proporciones, que desbordemos nuestras ideas y sentires hasta transfigurarlo en
materia y hechos…

Que la brújula que nos oriente no tenga norte y podamos dirigirnos a cualquier parte, sin
olvidar de dónde venimos…

Que el tiempo se mida en cuando estas o no estas, que las horas se marquen cuando seamos,
que el instante sea lo único que cuenta…

Que ningún ismo o doctrina defina nuestro errar por la existencia, que podamos negarnos y
afirmarnos sin prejuicios y juicios…

Que el corazón marque el ritmo de nuestros pasos y no la razón condicionada por el fenómeno
social… una independencia melódica que nos lleve a danzar y no a correr por nuestros sueños
y necesidades…
 El universo es una extensión de tu cuerpo

Que los gritos y palabras, se hagan susurros ininteligibles, que pierdan la verbalidad
humana… se tornen en géminos o aullidos animales desprovistos de partituras o formulas,
solo el sentir…

Que la virtualidad contemporánea sea un telescopio que deje ver el horizonte, pero que
vayamos a él… y no simplemente lo observemos, que lo devoremos hasta la gula…

Que nuestra imaginación procree y descontextualice todos los mitos y cuentos

fundacionales… y creemos nuestra propia cosmogonía…

Que los seres en que renazcamos sean desnudos y sinceros sin temor a equivocarse, y su
lenguaje corporal no tenga diccionario…

En fin abrir la puerta al universo para que habite en nuestra cueva… y Mar juegue con la
LUNA y las estrellas y nosotros en la sombra reinventemos el amor.
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LA TEMPESTAD

A: M.O.

Se sienta en el cráneo la locura y allí instala su reino de sinrazón y desenfreno. Sus huestes
de angustias sitian la mente y el afán corrupto y avaro del descompuesto mundo golpea a la
puerta, cobrando los segundos a cuenta gotas.

Un desprecio por los metales circulares me infecta, aborrezco toda posesión… lo abandono
todo y vuelvo a mi ancestro nómada desvalido. Extranjero en la tierra habito las regiones de
los sueños, nada detiene este trasegar cansado. Los pies descalzos se hunden en el fango de
la moral y nado en el mar muerto de los principios.

Llego a la isla solitaria del silencio y me toma de la mano derecha la vida y de la izquierda
la muerte, cada cual sigue por su lado, desmembrando mi cuerpo… mi sangre cae sobre las
cosas como un pensamiento que las busca comprender. Contemplo los imperios que otorgan
por doquier títulos y medallas, grilletes de la ignorancia, eslabones de la esclavitud… grito
desesperando y es un aullar de lobo sin Luna, todo oscuridad.

Continuo mi viaje incorpóreo, en los bosques la niebla como un velo lo cubre todo
protegiéndolo, me hago rocío y reposo en las hojas como una lágrima que se desliza sobre la
epidermis de la tierra. Retomo la forma y sigo mi camino, la luz de la Luna se filtra entre las
ramas de los árboles. Ahí está ella con sus ligeros pasos danzando sobre el prado, toda magia,
y la locura se hace carne en mí, todo instinto, deseo y sed.

Atrás quedan los gritos, todo inaudible, el tacto impera y me aferro a su espalda, que es una
puerta al cosmos y lo humano se pierde en lo insondable de la bóveda celeste. Me sumerjo
en el hoyo negro de sus ojos hasta caer de nuevo a la tierra… se manifiesta lo antiguo, veo
en los mendigos a los lejanos cavernícolas y retomo mi andar.

Recorro mis huellas y en cada una de ellas veo tu sombra, voy hacia atrás, hacia atrás
buscándote. El mundo cae en ruinas, la hiedra lo cubre todo, en una implosión los continentes
se unen, creando una sola isla en medio de un vasto océano… y ahí estas tu tejiendo montañas
y valles, unificando la creación, y por esto que veo en ti todo.
 El universo es una extensión de tu cuerpo

Camino buscando alimento a mis preguntas y eres tu quien lo siembra, toda fertilidad, esencia
femenina del universo. Mientras la locura se burla de mis torpes pasos, la locura, la gran
comediante, la dramaturga del amor. Interpreto el papel, un guion que se va escribiendo
desordenadamente a cada acto… con el deseo que cuando caiga el telón te encuentre tras
escena.

EL AMANTE

A: Vela
“El que quiere arañar la luna, se arañará el corazón.”
Federico García Lorca.

No sabían que era imposible y lo hicieron, abandonándose…

Y sus miradas gritaban deformando sus cuerpos,

Ocultarse era desnudarse,

Las caricias eran besos que penetraban los poros

Abrazando los nervios tensos por el frio

Y el miedo a lo incierto.

Las palabras fueron escritas con lápiz

Porque debían de ser borradas por los prejuicios,

Y no había voces que las cantaran;

El pecado se hizo deseo.

 El universo es una extensión de tu cuerpo

El vientre fecundo les llamo a la vida…

Despertaron al mundo de las formas posibles

Con temor a los verdugos invisibles de su pasión,

Despertaron, más nunca todo fue igual,

Porque descubrieron que nada era imposible…

Que sus cuerpos no podían contener su sentir

Y se fundían con el universo;

Esperando el maullar del viento que los invitase a la noche

Para volver a soñar mientras

Se está realmente existiendo,

Mientras se está realmente despierto…

Porque todo era un desvelo al lado de Vela.