Para radio cultura para el programa música y libros hoy me voy referir

al discípulo de Sarmiento a quien quiso dejar en la continuidad de su

obra como heredero .
Mas precisamente al olvidado Dominguito hijastro de Sarmiento en
quien había depositado sus mejores esperanzas y sus anhelos mas
entrañables formándolo tanto en las letras como en el amor a la patria.
El joven y apuesto Domingo Fidel Castro era hijo de Doña Benita
Martinez Pastoriza perteneciente a una modesta pero distinguida
familia de San Juan y del minero y hombre de negocios Domingo Castro
Calvo.

Quiso el destino que los encontrase en Santiago de Chile una por

estudio otro por negocios de tal unión nació en esta ciudad Dominguito
el 17 de abril de 1845.Siendo argentino por derecho de la madre.
Al morir Castro su padre ,Benita se casa con Sarmiento;esta relación
poco feliz según cuenta Lugones floreciendo en cambio el amor y afecto
entrañable hacia el niño Dominguito quien lo hizo hijo suyo.
El nombre de Domingo que llevaba su padre Don Domingo Castro Calvo
y que vino a coincidir con el del padrastro cuyo apellido adopto,hizo que
su firma fuera F.D.Sarmiento las mismas iniciales que su padrastro.
Sarmiento encuentra en el niño dotes excepcionales y naturales y diose
a la tarea de educarlo y en afianzar su gran personalidad.
Sus primeros años de infancia los paso en la quinta de Yungay en las
proximidades de Santiago de Chile.
Había nacido con los dotes del corazón y la inteligencia que fueron
seguidos de cerca por su maestro desde sus primeros pasos.
Tal es así que ya a la temprana edad de tres años le enseña a leer y a
escribir fue en el año de 1854 que Sarmiento llega a Mendoza con su
familia atravesando la cordillera y es por primera vez que Dominguito
pisa tierra Argentina.
Apenas unos pocos días permanece en el país acusado de conspirar
contra la causa de la Confederación Argentina ,resuelve volver a Chile.
Dominguito debe esperar hasta 1858 para llegar entonces a Buenos
Aires allí debido a la preparacion que le había dado su maestro es que
realiza sus estudios en forma meteorica primero cursa sus estudios en
el seminario conciliar,luego en el colegio inglés y por ultimo pasa a la
universidad.
Se dice que su sabiduría era tal que ayudaba a sus profesores a corregir
los exámenes de sus compañeros incluso en su paso por la universidad
se atrevió a corregir algunos conceptos de sus profesores.Esto no fue
muy bien visto por parte de la comunidad universitaria .
Asi Dominguito fue creciendo y a la edad de 20 años ya era el ídolo de
todos los muchachos de su edad tanto por su saber,su patriotismo y
simpatía.Disponía de una palabra encendida sus charlas cautivaban y
mantenía la atención de quienes lo escuchaban.
Al hacerse cargo Sarmiento de la gobernación de San Juan en 1862
Dominguito se incorpora a las fuerzas de la provincia en calidad de
ayudante en el cuerpo de escolta llamado guías y asiste a la campaña
contra el Chacho.
Por esos años todo era armas y cañones.
Luego reanuda sus estudios universitarios interrumpidos alentado por
los viejos que frecuentaba pues solia tener largas tertulias con
Avellaneda ,Rawson,Mitre quien también llego a considerarlo como un
hijo.
Mientras Sarmiento tiene una larga estadía en EEUU queda al cuidado
del presidente Avellaneda es en este momento donde se acrecienta su
personalidad en todos los ordenes ya es toda una promesa para el país
tal como lo había visto su maestro.
Escribe una columna en el correo del domingo editado por Jose María
Cantilo.
Se incorpora al Instituto Historico disertando sobre la muerte del Cesar.
Pronuncia una conferencia inaugural de los estudios constitucionales
en un club.
Escribe el juicio critico junto a Lucio Mansilla en la traducción de Paris
en America del escritor francés Laboulaye.
Quiso el destino que se interpusiera en su camino la guerra del
Paraguay interrumpiendo abruptamente una carrera brillante que
señalaba progresos promisorios y nuevos títulos a la consideración
pública.
Mitre lo nombró ayudante de la guardia Nacional llegando a Capitan en
poco tiempo del cuerpo de veteranos del 12 de infantería.
Actuó con decisión y arrojo en numerosos encuentros conquistando tres
honrosas condecoraciones .En aquel momento el sentimiento del deber
inculcado por su maestro tutor anestecio al poeta.
Durante su actuación en el Paraguay escribió sus impresiones del
campamento y de la batalla.Escribiendo en cartas también una crónica
y crítica de la guerra que fueron publicadas en la tribuna de
Montevideo.
En una de esas cartas escribe al Dr. Avellaneda la razón de su
existencia.
Dice mi suerte esta echada .Me ha educado mi padre con su ejemplo y
sus lecciones para la vida pública.No tengo otra carrera ,pero para ser
hombre de estado en nuestro país,es preciso haber manejado la espada
y yo soy nervioso como Enrique II y necesito endurecerme al frente del
enemigo.
En el asalto de Curupaití el 22 de septiembre de 1866 un soldado
anónimo le hiere en el talon de Aquiles y murió desangrado igual que el
héroe griego tenia tan solo 21 años.
En carta a su madre en la víspera de la batalla le escribe Las madres
argentinas transmitan a las generaciones el legado de la abnegación y el
sacrificio.Pero dejemos aquí estas líneas que en exceso de cariño me
hace suponer ser letras postumas que te dirijo.Septiembre 22 de 1866
son las diez.Las balas de grueso calibre estallan sobre el batallón salud
mi madre.
Sarmiento recibe la noticia en Washington lo embarga una tristeza
infinita la cual apacigua escribiendo su ultima obra Dominguito.