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Revista Estudios, Universidad de Costa Rica. W 22, pág.

105-119, ISSN: 1659-1925/2009

LA LIGA ANTllMPERIALISTA DE COSTA RICA: UNA ESCUELA DE


CUADROS PARA EL PARTIDO COMUNISTA DE COSTA RICA

Dr. Daniel Kers/feld *


dakers/feld@hotrnail.com

Recibido el 8 de setiembre de 2009 - Aceptado el 8 de octubre de 2009

RESUMEN

La Liga Antiimperialista de Costa Rica fue una organización revolucionaria vinculada a la Internacional
Comunista, con actuación entre 1926 y mediados de la década de los '30. Sus principales acciones
estuvieron dirigidas en contra de la penetración económica estadounidense en el país y de la oligarquía
local vinculada a la exportación de café y platanos. Pese a su inicial cercanía con el APRA, y los conflictos
derivados de esta situación, la Liga Antiimperialista de Costa Rica se convirtió en una escuela de formación
para futuros líderes del Partido Comunista como los estudiantes universitarios Manuel Mora Valverde,
Ricardo Coto Conde y Jaime Cerdas Mora.
Palabras clave: Comunismo, antiimperialismo, nacionalismo, universidad, revolución.

ABSTRACT

The Anti-Imperialist League of Costa Rica was a revolutionary organization linked to the Communist
International, with political proceedings between 1926 and mid of the 30s. Their main activities were
directed against U.S. economic penetration in the country and the local oligarchy linked to the export of
coffee and bananas. Despite their initial proximity with APRA, and the conflicts arising from this situation,
the Anti-Imperialist League of Costa Rica became a training school for future leaders of the Communist
Party as college students Manuel Mora Valverde, Ricardo Coto Conde y Jaime Cerdas Mora.
Key words: Cornmunism, Anti-Imperialism, Nationalism, University, Revolution.

EN TORNO A LOS ORÍGENES DE LA de crear una organización capaz de denunciar la


TRADICIÓN COMUNISTA Y presencia colonial o directamente el injerencis-
ANTlIMPERIALISTA COSTARRICENSE mo de las potencias europeas y de los Estados
Unidos, marcando al mismo tiempo un creciente
La Liga Antiimperialista de las Américas sentido de filiación y de respaldo hacia la todavía
(LADLA) fue uno de los primeros intentos exi- joven Unión Soviética. Bajo una estrategia fren-
tosas por parte de la Comintern en su intensión tista, rubricada en el mundo de la Internacional

* Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, UNAM.


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Comunista sobre todo a partir de su VO Congreso entrada la década de los '30, de nuevo, como
en 1924, es que pronto la Liga Antiimperialista, una fórmula estratégica de acercamiento para la
como entidad periférica u organización de apoyo definitiva constitución de los frentes antifascis-
a los partidos comunistas, se dio a la tarea de tas pero con aquellos mismos sectores a los que
nuclear, principalmente, a aquellos representan- hasta muy poco tiempo antes se había rechazado
tes de las burguesías progresistas que veían con cualquier tipo de contacto.
preocupación el expansionismo colonial sobre De este modo, la historia de la LADLA,
la región y que al mismo tiempo brindaban su desde su fundación en 1925 hasta su desapari-
apoyo al proceso revolucionario ruso. Así, y en ción, prácticamente diez años más tarde, no fue
una organización que, por lo menos hasta fines otra cosa que la del movimiento comunista en
de la década de 1920 evitó aparecer públicamen- su período fundacional, en el que los primeros
te como demasiado roja, se agrupaban en torno comunistas intentaron, con mayor o menor for-
a ella artistas e intelectuales y, junto a ellos, tuna, la síntesis entre tradiciones e ideologías
estudiantes universitarios, trabajadores urbanos locales y regionales, con una corriente teórica, la
y dirigentes campesinos y agraristas los que, más marxista leninista, que en realidad, era compren-
allá de las diferencias, mantenían en cambio un dida más a través de la propia práctica que por
fuerte sentido de identidad y de pertenencia en medio de su sustento teórico, llevándose a cabo
común: en este sentido, su órgano continental, de este modo un doble proceso de reapropiación
El Libertador, editado en México, servía en gran e, inevitablemente, también de transfiguración.
medida a esta finalidad. En este sentido, y en esta combinación de fac-
Desde la fundación a principios de 1925 tores tanto internos como externos, la sección
de su primer filial en la Ciudad de México, costarricense de la LADLA, fundada a inicios de
fueron varios los países en los que se instaló 1927, no dejaría de reconocerse como expresión
esta entidad, en algunos casos, favoreciendo la del movimiento comunista local, revelando con
consolidación de un incipiente partido comu- ello todo un conjunto de antecedentes ideológi-
nista, mientras que en otros, incidiendo directa- cos y doctrinarios tendiente por igual a la cons-
mente en su futuro establecimiento. Además de titución de una identidad políticamente definida
México, e incluso con relación a la importante tanto como de una estrategia práctica específica.
sección estadounidense, la Liga actuó en países y este papel no fue menor en el caso particular
como Argentina, Cuba, Brasil, Uruguay, Chile, de esta sección, ya que como se verá a lo largo
Colombia y Puerto Rico, demostrando en gran de este trabajo, nos interesará plantear como ella
parte de los casos y sobre todo en sus primeros ofició, a partir de esta articulación de saberes y
años de vida, una notable capacidad de iniciativa prácticas, en una verdadera escuela de formación
que, sin embargo, se vería menguada tanto por la política para la primera generación de comunis-
complicada situación política regional, como así tas costarricenses
también por las inevitables diferencias surgidas La filial local de la LADLA, en este sen-
en todo este proceso ya sea entre las Ligas y tido, surgiría como resultado de la progresiva
los partidos dentro de un mismo contexto local, confluencia de dos vertientes distintas aunque
directamente entre las propias Ligas o bien entre con inocultables puentes y articulaciones: por un
la LADLA y la Comintern. Luego de un declive lado, a partir del crecimiento progresivo aunque
generalizado ocurrido hacia fines de los años todavía disperso de un amplio conjunto de orga-
'20, en los que la perspectiva cercana de una nizaciones vinculadas al mundo sindical y en un
revolución provocaría la radicalización de los sentido más amplio, al de la izquierda política
partidos comunistas y, de manera consecuente, y partidaria, en tanto que por otro costado, a
la des activación de aquellas organizaciones que través de la conformación de diversos núcleos y
justamente tenían como última misión la de reca- círculos de intelectuales y sectores profesionales
bar apoyos entre grupos burgueses y de las clases en permanente denuncia ante los abusos econó-
medias, la Liga Antiimperialista reaparecía bien micos y políticos sufridos por el país a causa del
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expansionismo neocolonial. Por ello, y desde una y comunismo, junto con distintas publicaciones
perspectiva de progresiva conformación de un socialistas y anarquistas de España, Argentina y
ideario marxista de raigambre nacional así como otros países. Este proceso de creciente activación
también desde una estructuración institucional intelectual se vería por último reforzado en el
cada vez más representativa de los intereses de mes de abril de ese mismo año con la creación
los trabajadores, campesinos y sectores naciona- de la Federación Obrera Costarricense, en rela-
listas ilustrados, es que podemos datar la historia ciones con el Partido Socialista y con el Partido
moderna de la izquierda y del movimiento obrero Reformista, y vinculada con su par gremial de El
costarricense a partir de un doble antecedente Salvador (si bien hubo que esperar casi un lustro
de suma importancia: la fundación en 1912 del para que esta central obrera tuviese un papel
Centro Germinal, un círculo de estudios propi- mucho más activo en la vida política costarricen-
ciado por el intelectual y político Ornar Dengo a se). Sería entonces sobre esta base que en 1928 se
partir de la prédica latinoamericanista desarro- fundaría la Unión General de Trabajadores, cen-
llada en toda la región por el argentino Manuel tral obrera que propiciaría más tarde la vincula-
Ugarte', y la creación al siguiente año de la pri- ción con la Liga Feminista, la formación en 1926
mera Confederación General de Trabajadores'', de la Universidad Popular y, tres años más tarde,
Sería sin embargo a partir de las reper- de la Asociación Revolucionaria de Cultura
cusiones de la Revolución Rusa que las ideas Obrera, en el mismo momento en que también
marxistas comenzaron a difundirse en el país se establecía la Alianza de Obreros, Campesinos
con cada vez mayor amplitud acompañando, e Intelectuales, encabezada por Joaquín García
sobre todo después de 1919, al ascenso del movi- Monge y que pese a su vinculación con el APRA,
miento obrero en el contexto de la crisis por la guardaba también con la Liga Antiimperialista
finalización de la Primera Guerra Mundial. Su una muy cercana relación (Abarca, 2005, Calvo
traducción en una sucesión de efímeras asocia- y Zúñiga Díaz, 6: 1980).
ciones daba cuenta de una inicial vocación por Prácticamente al mismo tiempo en que
la organización aunque también de una cultura se conformaban estar primeras experiencias
política todavía inestable y con evidentes fallas políticas y organizativas en el campo sindical
en su propia consolidación. y en el espectro de la izquierda, y a la par en
Puede considerarse como uno de los pri- que se profundizaba la presencia neocolonial
meros efectos de este nuevo clima de ideas la en el país por medio de empresas y monopo-
creación del Partido Socialista, en 1920, por el lios extranjeros, también se creaban los prime-
dirigente Aniceto Montero. Por otra parte, la ros agrupamientos de tendencia nacionalista y,
huelga general desarrollada en 1921 también se mayormente, de carácter antiimperialista, de los
constituiría en un verdadero hito determinante en que la Liga heredaría parte de su pensamiento
este proceso de lucha social, generadora a su vez a la vez que de su comprensión de la realidad
de una huella histórica notable con la conquista social y política del país y de la región. Teniendo
del alza salarial. En 1923 el campo progresista y en cuenta como un primer precedente al ya
las amplias aunque todavía indefinidas fuerzas citado Centro Germinal, en 1925 un grupo de
de izquierda se ensancharon con el surgimiento profesionales y docentes de tendencia liberal
del Partido Reformista bajo elliderazgo del gene- y anticolonial se terminó de constituir para la
ral y ex sacerdote católico Jorge Volio, encargado creación de la Liga Cívica Juan Rafael Mora:
de promover la agitación social mediante una presidida por Ricardo Moreno Cañas, formaban
combinación de consignas socialistas y cris- parte de ella, entre otros, el propio Dengo, José
tianas y cuyo declive comenzaría a producirse Victory, Alejandro Alvarado Quirós, Ricardo
hacia 1926. Paralelamente, sería también hacia Fournier, Alfredo y Luis Felipe González Torre.
1923 cuando un grupo de artesanos que había En una tónica similar a la que luego sostendría la
militando en el Reformismo comenzó a recibir Liga Antiimperialista, su predecesora se ubicó
distinto tipo de material escrito sobre marxismo en contra de la penetración del capital extranjero
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y de la formación de monopolios foráneos en exiliados en el país (como eran los casos del espa-
recursos estratégicos como la tierra, la electri- ñol José Lavín y del guatemalteco José Portilla)
cidad y el sector automotor, principalmente, en y articulados a una incipiente vanguardia local
los tranvías como servicio público. Su principal (integrada a su vez por algunos activistas de cre-
lucha fue en realidad en contra de la United ciente renombre como Gonzalo Montero Berry y
Fruit Company, especializada en el cultivo y Carlos Marín Obando). Asimismo, Vivó contri-
comercialización del banano, y que actuaba en el buyó a impulsar al movimiento revolucionario en
país desde el siglo pasado con amplia libertad de Costa Rica gracias a su colaboración en la orga-
movimientos y una marcada impunidad ante las nización del Partido Popular, precedente directo
leyes del país", del Partido Comunista "oficial" que, hacia fines
Mientras tanto, la ideología marxista vivi- de los años '20, lograría un escaño en el Consejo
ría un proceso de creciente desenvolvimiento Municipal de San José. Finalmente, su estancia
durante los últimos años de la década del '20, en el país hasta su partida rumbo a Panamá en
sobre todo cuando hacia octubre de 1927 arri- enero de 1928 también sería decisiva para la
bara a Costa Rica el comunista cubano Jorge progresiva articulación de varias entidades sindi-
A. Vivó, perseguido por el gobierno de Gerardo cales y gremiales al universo de la Internacional
Machado y luego de una corta residencia en Sindical Roja.
Nicaragua. Pese a su juventud (tenía para ese La presencia de Jorge A. Vivó en Costa
entonces apenas 23 años), Vivó contaba con una Rica resultó, al parecer, de gran importancia
amplia experiencia militante en organizacio- ya que además de aportar su propia experiencia
nes estudiantiles, partidarias y sindicales de La política en los siempre difíciles tiempos funda-
Habana: asimismo, cabe destacar que también se cionales del movimiento comunista latinoameri-
había desempeñado como secretario de la Liga cano, se encargó también de afianzar la estruc-
Antiimperialista cubana durante 1926 y como tura de la izquierda costarricense por medio de
corresponsal para El Libertador, el boletín de su inserción en aquellas redes política y de la
la LADLA cuya difusión en el país también era izquierda ya establecidas, como eran los CaSOS
posible gracias a los intercambios comerciales de México y Estados Unidos, o en franco proceso
que mantenía con otra prestigiosa publicación, de constitución, fundamentalmente, en el caso
Repertorio Americano, dirigida desde San José cubano. En este sentido, la actividad de este cua-
por Joaquín García Monge". dro cominternista fue altamente provechosa para
Una vez radicado en Costa Rica, Vivó Costa Rica, en el que la ausencia de una aguda
procedió a naturalizarse para evitar cualquier conflictividad social, sumada a la posibilidad de
posibilidad de deportación. Mientras se ganaba que las organizaciones de izquierda, sindicales y
la vida primero como corresponsal del diario políticas pudieran actuar con cierto margen de
La Prensa y luego como empleado en una ofi- libertad (a diferencia de lo que palpablemente
cina del gobierno, se dedicó también a enseñar ocurría en los vecinos países centroamerica-
economía política marxista en la Universidad nos), y a la situación de relativo aislamiento
Popular de San José y a conformar grupos de geográfico en el que se encontraba el país, había
militantes comunistas en Cartago, Limón, San contribuido a cierto estado de orfandad por parte
José y Heredia. En tanto que su presencia en el de la Comintern. De acuerdo con lo anterior,
país incentivaría también el desarrollo de varias también es entendible que, como en su momento
iniciativas, siendo la más trascendente aquella lo planteó Rodolfo Cerdas Cruz (1986: 352-5),
ocurrida en el mes de diciembre de 1927 cuando haya sido el Partido Comunista Cubano (incluso
tuvo lugar la publicación de un manifiesto del más que el mexicano), el que de algún modo
autodenominado Partido Comunista limonense, asumió cierto carácter "tutor" sobre las orga-
dirigido al pueblo de Costa Rica, como expresión nizaciones revolucionarias que se irían creando
en realidad de la voluntad política de algunos en Costa Rica a partir de este entonces. Y no
cuadros latinoamericanos momentáneamente resulta casual entonces que el primer ensayo de
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un Partido Comunista en el país haya sido aque- 8 de diciembre de 1926 una importante concen-
lla agrupación efímera fundada por Vivó a fines tración, el "Gran Mitin contra el Imperialismo",
de 1927, casi cuatro años antes de la creación organizado principalmente en solidaridad con
del "oficial" Partido Comunista de Costa Rica, la lucha del pueblo nicaragüense, y en el que
y casi ocho antes de su pleno reconocimiento participó una amplia y variada gama de orga-
como sección local por parte de la Comintern. nizaciones sociales, sindicales y políticas, junto
Por último, y aunque no tenemos constancia de con un conjunto de dirigentes mexicanos, vene-
la participación de Vivó en la LADLA de Costa zolanos y peruanos. Por lo demás, ésta terminó
Rica, su experiencia en esta misma organización convirtiéndose en la primera actividad de la
en Cuba, así como su trabajo en otras entidades Liga Antiimperialista en apoyo a Centroamérica
periféricas y, en general, en la estrategia del PCC frente el intervencionismo estadounidense, y en
así lo hacen suponer. un punto de apoyo fundamental para el estable-
cimiento de varias filiales en distintos estados
de México, así como también para la creación
ACIERTOS Y ERRORES EN LOS al siguiente año, del Comité Manos Fuera de
PRIMEROS TIEMPOS DE LA Nicaragua (MAFUENIC) de respaldo al ejército
LIGA LOCAL insurgente de Sandino". Por otra parte, también
ejerció una importante influencia en todo este
Aparentemente, y según lo informó El proceso constitutivo el Congreso Mundial contra
Libertador', los primeros intentos por crear una el Imperialismo y la Opresión Colonial, celebra-
sección de la Liga Antiimperialista en Costa do en Bruselas entre el 10 y el 15 de febrero de
Rica tuvieron lugar a mediados de 1926, cuando 1927 por un comité de apoyo a la Comintern, y
desde México se quiso aprovechar la presencia en en el que se dieron cita un total de ciento sesenta
el país de dos cuadros cominternistas de origen y cuatro delegados, mayormente provenientes de
centroamericano, el abogado salvadoreño Moisés países coloniales y semicoloniales, en un encuen-
Castro y Morales, y el maestro guatemalteco tro que, indirectamente, serviría para reforzar la
Manuel Chavarría Flores. Sin embargo, y ya sin la presencia comunista en América Latina, Asia
presencia de estos dos militantes, sería recién en y África, regiones crecientemente conmovidas
enero de 1927 cuando se estableciera en San José por movimientos de liberación nacional y por un
la filial local de la LADLA: como no podía ser de ascenso de la corriente trabajadora y socialista.
otra manera, su original intensión expresa era la Si bien en dicho congreso no hubo represen-
de apoyar el combate de Augusto Sandino en con- tación de Costa Rica, sí la hubo por parte de
tra de la presencia estadounidense en Nicaragua Cuba, Puerto Rico, Nicaragua, El Salvador y
(Botey Sobrado, 2005: 87; Fischel Volio, 1992: Panamá, a cargo de los cubanos Julio A. Mella
225). En este sentido, su instauración era resultado y Leonardo Fernández Sánchez, el venezolano
de la nueva perspectiva de la lucha antiimperialis- Gustavo Machado, el peruano Víctor Raúl Haya
ta motorizada de manera cada vez más evidente de la Torre y el mexicano José Vasconcelos.
desde Centroamérica, por lo que el contexto regio- Las repercusiones combinadas del "Gran
nal para la fundación de una filial costarricense de Mitin contra el Imperialismo" y del Congreso
la Liga era, por ende, altamente propicio. Antiimperialista mundial resultaron altamente
Con el crecimiento de la protesta sandinis- exitosas para Centro américa y El Caribe: no
ta, la mirada de la sección mexicana de la LADLA resultó casual entonces la fundación de seccio-
y, fundamentalmente de su dirección, encarna- nes en países del área como Puerto Rico, Santo
da en el Comité Continental de Organización, Domingo (República Dominicana), Panamá y
comenzó a fijarse, con cada vez mayor atención, Costa Rica en los primeros meses de 1927. Por
en la realidad social, económica y política cen- otra parte, las resoluciones anticoloniales alcan-
troamericana. En apoyo a este nuevo intento de zadas en el encuentro de Bruselas sirvieron asi-
construcción, la sección mexicana celebraría el mismo como guía ideológica para un marxismo
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todavía en ciernes y para el más amplio movi- en formación, como Gonzalo Montero Berry,
miento antiimperialista que comenzaba a cuajar Candelario Granados, Fernando Hernández A.,
organizacionalmente en dicha región. Enrique Rodríguez G., José Alcázar Durán, Juan
Una vez instituida esta filial de la LADLA R. Pérez, Lido Bonilla P., Carlos Marín Obando,
en 1927, ella fue conducida por Manuel Mora Paulino Tapia F., Juan R. Loría, Eliseo Castillo Z.,
Valverde, dirigente del Partido Reformista, a Francisco Peraza E., Otoniel Fonseca G., Carlos
quien acompañaban otros referentes estudiantiles Alfaro Durán, David Castrillo, Gilberto Bonilla
como Jaime Cerdas, Luis Carballo y Ricardo P., Mercedes Duarte Alvarado, H. V. Herrera,
Coto Conde. No es difícil suponer, por lo tanto, Víctor S. Salazar, Julio R. Mendioraz, Pedro
que esta sección estuvo en sus inicios integrada Lamicq y Alberto Quesada Q.
mayormente por clases medias e intelectuales, Pronto, sin embargo, la Liga Antiim-
teniendo como principal línea de acción la soli- perialista de Costa Rica iría a compartir con
daridad con el combate desarrollado por Sandino otras agrupaciones el escenario de la política
en Nicaragua y, consecuentemente, el rechazo a izquierdista anticolonial que hasta ese momento •
la intervención estadounidense en toda la región la había tenido por una protagonista práctica-
(Botey Sobrado, 2005: 87). Fue en este contexto, mente excluyente. Puntualmente, y con Víctor R.
a fines de marzo de 1927, que la Liga organizó Haya de la Torre presente en el país entre agosto
un multitudinario acto estudiantil contra la polí- y diciembre de 1928, fue fundada la Alianza
tica norteamericana en Centroamérica y contra Popular Revolucionaria Americana (APRA), la
la dictadura de Juan V. Gómez en Venezuela, que en realidad recién se oficializaría como
tomado éste como un verdadero símbolo de la sección local al siguiente año" Es innegable la
dominación imperialista en la región, que contó seducción generada por Haya en gran parte de
con la participación, como oradores, de Servando la intelectualidad costarricense: en este sentido,
Reina, Jaime C. Quesada, Jesús Vega, el maestro y habiendo sido la mayor parte de sus miembros
Marcelino Canales y Enrique Guillén. originarios de la anterior Liga Cívica, la filial
El ascendente clamor en rechazo a la pre- aprista estuvo presidida por el periodista y ensa-
sencia norteamericana en Centroamérica sirvió yista Joaquín García Monge en tanto contó con
también para expandir el reclamo anticolonial, una activa participación de la escritora Carmen
nacionalista y latinoamericanista por Costa Rica, Lyra y de otras figuras como Luisa González
impactando éste ya no sólo entre las capas ilus- (ambas, antes de su llegada al comunismo en
tradas y estudiantiles de la población sino, direc- 1931), y de Gonzalo González. Como la orga-
tamente, entre los sectores obreros y trabajadores nización mayor de la que formaba parte, esta
del país. En este sentido, y bajo el auspicio de la sección local del APRA se caracterizó también
sección local, no tardaría en formarse un "Núcleo por la lucha contra el imperialismo, focalizando
Obrero" de la Liga Antiimperialista, dispuesto su accionar en contra de las compañías extranje-
a contrarrestar aquellas críticas que únicamente ras de origen estadounidense que operaban sobre
la veían como una entidad pequeñoburguesa. suelo costarricense'', Posteriormente, cumpliría
El "Núcleo Obrero" fue finalmente comanda- también un papel destacado el militante de ori-
do por Fernando C. García como Secretario gen peruano Esteban Pavletich como ocasional
General, Carlos Monge Sáenz como Secretario de redactor y como contacto internacional de la
Correspondencia, Alberto Cortés como Secretario revista Repertorio Americano, del ya menciona-
de Propaganda, Luis F. Ibarra como Tesorero, do García Monge.
José A. Zeledón como Secretario de Prensa, y Pese a que luego del Congreso de Bruselas
Manuel Marín Obando, Enrique Guillén, Isaac y, más aún, de la firma bajo reserva de los dos
Vargas Coto y Servando Reina como vocales. delegados apristas (el propio Haya de la Torre
Por otra parte, participaron también de esta y su compatriota Eudocio Ravines) contra la
agrupación otros militantes, en mayor o menor resolución latinoamericana impulsada por sus
medida vinculados al movimiento comunista pares comunistas, las relaciones entre la Liga
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y el APRA prácticamente llegaron a quebrarse, tarde, darían vida al Partido Comunista local.
en Costa Rica todavía pudieron subsistir ciertas Sin duda, la visita del presidente electo Herbert
prácticas de colaboración entre ambas organiza- Hoover a Costa Rica a fines de noviembre de
ciones antiimperialistas (en contra, incluso, de 1928, mientras se encontraba en una gira de pro-
las directivas emanadas de la propia Comintern, paganda por diversos países latinoamericanos,
exigiendo la ruptura total de relaciones entre las avivó las manifestaciones y las protestas en con-
dos entidades). De ahí que en 1928 la LADLA tra de la presencia estadounidense en la región,
constituyera en el país una filial local del Comité contribuyendo con ello a la difusión del ideario
Manos Fuera de Nicaragua (MAFUENIC) con latinoamericanista y anticolonialista, y propician-
la popular escritora Carmen Lyra, todavía en do al mismo tiempo el progresivo aglutinamiento
las filas apristas, al frente". Por otra parte, Haya de militantes y círculos de índole marxista o pro-
de la Torre encontraría aún suficiente espacio soviético. De hecho, para 1929, parte de la juven-
como para continuar desenvolviendo su activi- tud más radicalizada y nacionalista intentó pos-
dad política en ámbitos ya constituidos como tular para las elecciones legislativas al intelectual
la Universidad Popular o en otros directamente Joaquín García Monge, director de Repertorio
fundados por él como el Centro de Estudios e Americano, como cabeza de lista de la Alianza de
Investigaciones Económicas (Pakkasvirta, 2000). Obreros y Campesinos en tanto que en el interior
r Es probable entonces que la recepción altamente
favorable brindada al joven dirigente peruano por
del país, en ciudades como Alajuela, se fortalecía
un movimiento estudiantil de un carácter cada
las capas ilustradas de este país, haya refrenado a más firmemente antiimperialista. Pronto, a este
los comunistas en sus críticas y, por el contrario, nuevo partido se le sumaron desde grupos libe-
los obligara a compartir espacios de lucha y de rales a otros de marcada tendencia izquierdista
militancia con él. y anticolonial, como lo eran algunos estudiantes
La agitación pro sandinista en la región, de la Escuela de Derecho. Pero si bien la Alianza
y particularmente en Centroamérica, se fue de Obreros y Campesinos no logró el mínimo de
intensificando con el tiempo. Las protestas, votos necesario como para asegurar la entrada
las manifestaciones, los mítines políticos y los de García Monge al Parlamento, por otro lado,
r encuentros culturales en apoyo a la guerrilla su formación fue un hito de importancia para la
insurgente en Nicaragua se constituyeron en un posterior creación del Partido Comunista, tanto
punto de encuentro entre agrupaciones que se en cuanto a práctica militante como a formación
veían obligadas a interactuar en el mismo esce- intelectual y doctrinaria para la incipiente juven-
nario izquierdista y latinoamericanista y, aunque tud rebelde y tica. Y en este sentido, y más allá
por momentos tensa, la camaradería imperante de su constante prédica obrerista, su estructura
entre comunistas, apristas, liberales, socialistas, multiclasista, que agrupaba por igual a trabajado-
nacionalistas, etc. se constituyó en un fenómeno res urbanos, a campesinos y a intelectuales, resul-
que, con sus propios matices, fue prácticamente taría un modelo de construcción política en cierto
inédito en la historia de los países de la región modo inspirador durante los primeros pasos de la
y, particularmente, en Costa Rica. De este modo, Liga Antiimperialista.
fue importante en este país, sobre todo, la parti- Mientras tanto, el proceso de difusión del
cipación de intelectuales en apoyo a Nicaragua, marxismo y de organización de nuevas entidades
principalmente, de Joaquín García Monge, quien continuaba su camino, favoreciendo el afian-
incluso llegó a asumir la defensa internacional de zamiento y la consolidación de agrupamientos
la causa sandinista'? y círculos entre obreros y sindicales, como así
En todo caso, fue hacia fines de 1928 y también entre estudiantes, profesionales y docen-
sobre todo, en 1929, cuando en el clima social del tes universitarios. De particular importancia fue
país comenzó a percibirse de manera cada vez la actuación de aquel grupo de alumnos de la
más elocuente el crecimiento de aquellas fuerzas Escuela de Derecho que un par de años antes había
de izquierda que, apenas un par de años más creado la sección local de la LADLA y que ahora,
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en febrero de 1929, se integraba a la Asociación desocupados, grupos particularmente afectados


de Resistencia Cultural Obrera (ARCO), consti- por la crisis económica, y que les generaría
tuida por un círculo de obreros de tendencia más persecuciones policiales y encontronazos con el
antiimperialista que marxista y que a través de gobierno.
ella pretendían redituar a la Universidad Popular Por otro lado, y a causa de la difusión errá-
(Molina Jiménez, 2002). Por tanto, no resultó tica y en parte tardía que la teoría marxista y la
extraño que ambas organizaciones compartieran práctica leninista estaban desarrollando en Costa
parte del mismo núcleo dirigente, conformado Rica (traducidas en una multiplicidad de organi-
por Manuel Mora Valverde, Ricardo Coto Conde, zaciones políticas, sindicales y estudiantiles pero
Luis Carballo y Jaime Cerdas, entre otros. Por con la notoria ausencia de un partido comunista),
otra parte, también el grupo ARCO iniciaría su las críticas de la Comintern, puntualmente las de
acercamiento con el Partido Popular (anterior- los dirigentes de algunas estructuras de la región,
mente fundado por Vivó en Limón y pronto cons- no se hicieron esperar, en tanto que tampoco la
tituido en el principal centro marxista del país) Liga Antiimperialista iba a poder sustraerse a
además de establecer puentes con otros círculos ellas. Precisamente, fue éste el caso del cubano
y partidos de la región 11. Sandalio Junco quien, a fines de 1929 había sido
Los cambios suscitados en el escenario elegido como el último secretario de la dirección
comunista internacional entre fines de la década continental de la LADLA, justo en un momento
de 1920 e inicios de la de 1930, en los que las en el que sin embargo esta organización tendía
iniciales fórmulas frentistas terminaron siendo a desestructurarse y fragmentarse en sus unida-
abruptamente reemplazadas por los esquemas des nacionales como producto de las políticas
mucho más radicales y sectarios del Tercer represivas y disolventes llevadas adelante por
Período, no tardaron en hacerse sentir también en los gobiernos autoritarios de la región. Con las
la región y, particularmente, en Centroamérica. claras excepciones de Cuba y Haití, para Junco,
De acuerdo con esto, en ARCO resultó clara- la Liga costarricense debía ser "forzosamente
mente perceptible un espíritu izquierdizante y reformulada", lo mismo que las filiales existentes
extremistal-. A través del flamante vocero de la en el resto de los países centroamericanos, en
Asociación, el boletín Revoluci6n, este grupo no Santo Domingo, Colombia, Venezuela y México,
dudaba en definirse como "bolchevique" e inte- debido a una clara preponderancia de los sectores
resado, además, en difundir al marxismo leni- pequeño burgueses y liberales en su dirección.
nismo (sin que por lo demás esta orientación les El mandato tendiente a la proletarización de
resultara del todo clara) en la sociedad costarri- sus cuadros dirigentes no era otra cosa que un
cense, puntualmente, entre obreros, artesanos y reacomodamiento de la estrategia de esta orga-
estudiantes. Sin embargo, y prefigurando lo que nización ahora directamente bajo el esquema del
en cierto modo sería constitutivo del posterior así llamado Tercer Período y de los lineamientos
comunismo costarricense, no podían ocultar una de Clase contra Clase, aconsejándose por lo tanto
tendencia marcada entre el deseo revolucionario la reestructuración de esta entidad sobre una base
y el apego a la legalidad: en este sentido, y si bien de claros preceptos obreristas.
se preocupaban por difundir diversos artículos Pero no solamente Sandalio Junco,
en los que se relataban los logros de la Unión y la propia dirección continental de la Liga
Soviética, al mismo tiempo se señalaba la necesi- Antiimperialista de las Américas reflexiona-
dad contradictoria de "un partido socialdemócra- ron en torno a las fallas organizativas de la
ta, que instaurara una democracia verdadera en sección costarricense. También lo hizo el Buró
el país" (Cerdas Cruz, 1986: 319). Sus contactos Sudamericano de la Comintern en 1930, reco-
gremiales fueron cada vez más fluidos, sobre mendando, no tan sólo para esta filial, sino tam-
todo con la Unión General de Trabajadores, al bién para aquellas otras situadas en Guatemala,
mismo tiempo que perseverantes en su propósito El Salvador y Honduras, la participación directa
de organización entre inquilinos y trabajadores de la Juventud Comunista con secciones juveniles
KERSFFELD: La liga antiiperialista de Costa Rica ... 113

de los sindicatos para la creación de sub secciones como Claudio Alvarado Oreamuno, Celio Remo
de la Juventud de la Liga Antiimperialista. Para Porras, Luis Carballo Corrales, Jaime Cerdas
ello, estos grupos debían apoyarse principalmen- Mora, Manuel Zamora, Ricardo Coto Conde,
te sobre los sectores campesino, intelectual y Fernando Mora y el estudiante venezolano exi-
de la clase media, asegurándose de ese modo la liado Rómulo Betancourt, quien había llegado a
dirección de aquellas federaciones juveniles que Costa Rica en 1929. El principal blanco de los
pudieran crear bajo este impulso movilizador'P. ataques de esta sección de la Liga estuvo centrado
Resultaba claro de este modo, en tiempos de en la figura de Raúl Gurdián Rojas, Secretario
masacres, deportaciones, exilios y traiciones de de Gobernación y Policía en 1931, quien se había
algunos liderazgos ya tradicionales y fundacio- ocupado de cerrar una radioemisora de la ciudad
nales, la influencia creciente de los sectores juve- de Heredia que estaba combatiendo a las compa-
niles tanto dentro de la estructura de los partidos ñías eléctricas (de las que el mismo funcionario
comunistas de la región como así también hacia había sido su abogado), estableciendo además
el interior de la propia Comintern'". Por lo tanto, una política de censura contra aquellos libros
los cambios que finalmente se recomendaron de tendencias radicales que entraban al país. La
para la filial costarricense no resultaron ajenos denuncia terminaría por conmover a la sociedad
a este espíritu de renovación ideológica, en tanto costarricense de la época al no circunscribirse
que sus efectos pronto se hicieron sentir cuando únicamente a los militantes comunistas, sino tam-
la Liga Antiimperialista se metió de lleno en bién a los intelectuales críticos al gobierno, como
la discusión de los contratos de exportación de era el caso de García Monge. Así, los efectos de
bananas, principal recurso económico del país, la llamada Ley Gurdián terminaron por afectar
impulsando luego, junto con otros grupos, la no tan sólo al universo militante de las todavía
fundación de un Partido Comunista local. incipientes filas marxistas del país, sino más aún,
a todos aquellos intelectuales progresistas y, por
ende, opositores al represivo régimen de Cleto
UNA "NUEVA" LIGAANTIIMPERIALISTA González Víquez (De la Cruz, 1983: 241-2)15.
ENTRE EL LEGALISMO y LA Fue en este difícil contexto, bajo vigilancia
REVOLUCIÓN y detenciones policiales y en un grave cuadro
social de agudización de la pobreza y del des-
Ante el avance de los círculos de ultra- empleo, que un grupo de militantes mayormente
derecha, principalmente, del Comité Fascio de enrolados en ARCO contribuyeron el 6 de junio
Costa Rica, constituido a su vez en el centro de 1931 a fundar el Partido Comunista de Costa
del Comité Fascio de Centroamérica, en abril Rica (PCCR), bajo influencia directa del Buró del
de 1931 se fundó el Comité Seccional de la Caribe, creado un año antes y con sede en Nueva
Liga Antiimperialista de la Escuela de Derecho. York16. Con Manuel Mora Valverde al frente
Luego de la constitución del primer grupo, a como Secretario General, el flamante partido
principios de 1927, y del posterior "Núcleo tuvo en su comisión directiva original a otros tres
Obrero", constituía éste el tercer intento en la fundadores y responsables del funcionamiento
recreación de esta organización cominternista. de la Liga Antiimperialista: los estudiantes Luis
Con un importante trabajo de agitación desa- Carballo Morales, Ricardo Coto Conde y Jaime
rrollado sobre todo durante los meses de abril Cerdas Mora, con lo cual si por un lado se quería
y mayo de dicho año, esta filial se nutriría favorecer la coordinación entre ambas organiza-
de varios de los integrantes de la Asociación ciones, en realidad no se hacía más que revelar la
Revolucionaria de Cultura Obrera, como así tam- escasez de militantes capaces de asumir eficaz-
bién de varias figuras fundacionales del posterior mente puestos dirigenciales, con la complicación
Partido Comunista. En este sentido, el grupo añadida de la falta de funcionamiento de las dos
sería nuevamente conducido por Manuel Mora entidades si, por alguna razón y de improviso,
Valverde, al que se le sumarían otros estudiantes este grupo no podía continuar desempeñando sus
114 REVISTA ESTUDIOS W 22/2009/ ISSN: 1659-1925/ 105-119

funciones directivas. Por otra parte, y más allá de consecuentemente, por su rechazo a colaborar
esta fuerte presencia estudiantil en los principa- con los gobiernos burgueses.
les lugares del partido, sus vocalías terminarían Por otra parte, una de las primeras inicia-
siendo mayormente ocupadas por aquellos mili- tivas encaradas por el PCCR fue la refundación
tantes provenientes del campo obrero y artesanal, de la Universidad Popular, una de cuyas mate-
revelándose en este sentido, y a contrapelo de rias, "Historia de la Penetración Imperialista en
las directivas de la Comintern, la primacía que América Latina", contó también con el apoyo de
seguían teniendo los cuadros provenientes de las la Liga Antiimperialista. Asimismo, a principios
clases medias por sobre aquellos otros de extrac- de octubre de 1931, el Partido colaboró con la
ción proletaria'". Con un credo revolucionario fundación de la Biblioteca Lenin, radicada en
y antiimperialista manifestado desde la misma la Universidad Popular, donando medio millar
introducción del Programa Mínimo'", pronto el de libros y revistas recolectados en su mayor
Partido Comunista tendría una gravitación cada parte por medio de la Liga. Sin embargo, y pese
vez mayor al encabezar varias manifestaciones a la utilización ocasional de la Liga por parte
en contra de la situación social en el país: por del Partido, sobre todo, en aquellas iniciativas
supuesto, esto no ocurrió sin que el gobierno en las que la denuncia anticolonial ocupaba un
comenzara a reprimir al flamante partido y a lugar de primacía, lo cierto es que la entidad
sus principales representantes obreros, incluso antiimperialista se encontraba debilitada a causa
expulsando del país a algunos de sus dirigentes de de la adopción de la estrategia de "clase contra
origen extranjero. En tanto que hacia el siguiente clase" recomendada por la Comintern, la que la
mes de julio de 1931 dejaría de salir el periódico hacía ver, sobre todo, como una organización con
Revolución, de ARCO, para ahora ser reemplaza- intereses primeramente pequeñoburgueses y a la
do por Trabajo, editado como boletín del Partido que, por tanto, convenía des activar en su activi-
Comunista de Costa Rica. dad política concreta. Sería recién desde fines
Junto con una labor estrictamente orga- de 1932 y sobre todo, a partir de 1933, cuando
nizativa, el Partido Comunista de Costa Rica la estrategia radical y sectaria comenzaba a
orientó sus primeros pasos en un sentido de dar las primeras muestras de agotamiento y en
reforzamiento de su base sindical original, prin- momentos en que el fascismo iba a convertirse
cipalmente entre los ebanistas, al tiempo que se en la peor amenaza para la supervivencia de la
orientaba también hacia aquellos sectores de la Unión Soviética y del comunismo en general, que
pequeña burguesía proletarizados a partir de la la Liga Antiimperialista volvería a tener cierta
profunda crisis económica. Por otro lado, la pro- actividad, propiciada ahora por una renovada
hibición existente para denominar a la naciente política frentista insuflada directamente desde
organización como "Partido Comunista de Costa Moscú y mediada en este caso por el Buró del
Rica" frente a la próxima contienda electoral de Caribe. Aunque ya no pudo volver a plantear
1931, obligó a su re nombramiento como "Bloque iniciativas políticas concretas, la Liga volvió a
de Obreros y Campesinos", fórmula impuesta ocupar un lugar en la escena pública a partir de la
por estos años por la Comintern como estrategia publicación de manifiestos y convocatorias.
excluyente de toda organización partidaria afilia- Un buen ejemplo de ello lo encontramos
da a los preceptos de Moscú. Esta primera parti- en el posicionamiento público frente a Augusto
cipación fue exitosa en las elecciones locales de Sandino. En este sentido, la Liga Antiimperialista
San José, posibilitando la entrada a la legislatura local, como instrumento de apoyo del Comintern,
de esa ciudad a dos representantes del nuevo par- no dudó en plegarse al mandato originado desde
tido, Adolfo Braña y Guillermo Fernández. Las Moscú y por el cual el comunismo latino-
contradicciones, sin embargo, volvían a revelarse americano justificaba la ruptura de relaciones :
cuando en el seno legislativo, estos dirigentes se con la guerrilla comandada por Sandino desde
pronunciaban por la violencia revolucionaria, por Nicaragua. El otrora aliado, convertido ahora en
la necesidad de un gobierno puramente obrero y, un enemigo bajo la estrategia del Tercer Período,
KERSFFELD: La liga antiiperialista de Costa Rica ... 115

resultó acusado por los comun istas de traición a expulsión del país, sumada a la detención policial
los intereses del proletariado internacional, ya y al posterior destierro de algunos dirigentes
que según esta percepción, su lucha en realidad comunistas a la vuelta de una misión sindical en
se había reducido a la expulsión de los marines Limón, impidió el fortalecimiento de estos vín-
norteamericanos de Nicaragua, sin que se hicie- culos entre las organizaciones antiimperialistas
ran efectivas aquellas reformas sociales y revolu- costarricense y estadounidense.
( cionarias exigidas en su momento por las entida-
des de filiación marxista. Sumándose entonces
Ciertamente, se trató de un duro golpe para
el PCCR, el que a partir de entonces debió desa-
al rechazo generado por la figura de Sandino, la rrollar sus actividades bajo una estrecha mirada
I sección costarricense de la Liga Antiimperialista
emitió un documento en enero de 1933, poco
policial. Pero si bien estos obstáculos no impidie-
ron que para las siguientes elecciones de 1934 el
antes de que se firmara el acuerdo de paz en partido obtuviera dos escaños parlamentarios, en
Nicaragua, en el que se afirmaba que "los cente- cambio parecieron hundir todavía más la labor ya
nares de sus compañeros serían hoy millares de en declive de la filial de la LADLA. No resulta
millares si a su consigna justa, pero limitada de extraño, entonces, que la principal iniciativa
'Fuera los yanquis', hubiera agregado otras: 'La anticolonial de esta época, la huelga bananera de
tierra para el que la trabaja', 'El gobierno para los 1934 en contra de la United Fruit Company, la
J obreros y campesinos', 'No más argollas de los haya encarado directamente el Partido Comunista
y no la Liga Antiimperialista, al parecer más
explotadores en alianza con el imperialismo de
afuera" (citado en Cerdás, s/a: 123). concentrada en la difusión de propaganda y en
Tiempo después, en mayo de 1933, la la solidaridad con el movimiento popular nicara-
realización en San José del 11° Congreso de la güense y salvadoreño'", Con todo, sería ésta una
Confederación Centroamericana de Estudiantes de las últimas apariciones de la Liga, ya que el
(CIADE) se presentó como un espacio idóneo siguiente congreso internacional de la Comintern,
para que los jóvenes dirigentes del PCCR pudie- el séptimo, celebrado en 1935, a la vez que reco-
ran dar a conocer varios de sus planteas en torno nocería el status oficial del Partido Comunista
a cuestiones como el imperialismo, la toma del de Costa Rica como miembro pleno de la orga-
Estado, la defensa de la Unión Soviética frente nización, certificaría la disolución de entidades
a la amenaza fascista, etc. Sin embargo, y pese a como la LADLA o, eventualmente, su reconfi-
que desde la propia Comintern se comenzaba a guración como frentes antifascistas, más a tono
dejar atrás las posiciones sectarias para dar lugar con los nuevos tiempos que habían comenzado a
a futuros frentes y alianzas, también se convirtió correr y teniendo en cuenta las nuevas hipótesis
a éste en un espacio de denuncia frente a aquellas de conflicto que podían afectar la supervivencia
posturas señaladas como oportunistas, pro bur- de la Unión Soviética. Fue ese, entonces, el fin
guesas o indulgentes frente a la hegemonía esta- de esta sección local, una organización que más
dounidense en la región. Seguramente con la idea allá de la potencialidad que tuvo en otros países
de reforzar su influencia en el área centroameri- de la región, no alcanzó en este caso un nivel de
cana y aprovechando que el Partido Comunista actividad y participación similar, menos aún, ya
Mexicano se encontraba en pleno proceso de durante la primera mitad de los años '30, con el
reconstrucción, la sección norteamericana de Partido Comunista en plena actividad.
la LADLA envió a una de sus dirigentes, Dora
Zucker, especialista además en el trabajo de
organización de los trabajadores negros. Luego ALGUNAS CONSIDERACIONES
de celebrado el congreso, el cuadro norteameri- FINALES
cano fue aprovechado para revitalizar a la Liga
local por medio de su participación en mítines En el caso costarricense, la Liga Antiim-
antiimperialistas y antifascistas desarrollados en perialista pareció haber cumplido un destacado
distintos puntos de Costa Rica. Sin embargo, su papel más allá de la propia actividad con la
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que fue originalmente ideada, es decir, como expresiones del nacionalismo, el reformismo,
una entidad de denuncia y movilización fren- el aprismo, etc. Finalmente, también resulta
te a los atropellos del expansionismo foráneo. probable que la situación de cierta tolerancia
Particularmente, ella fue exitosa como una de las encontrada por el PCCR y la relativa liberalidad
primeras organizaciones cominternistas del país, de los gobiernos sucedido s durante la década del
que incluso antecedió a la formación del Partido '30, sumado esto a la temprana vocación legalista
Comunista local en más de cuatro años. Por ello, de los comunistas costarricenses (más allá de un
no es de extrañar que la Liga se constituyera tam- radicalismo inicial que hoy luce, más que nada,
bién como una especie de escuela de formación como un dato excepcional), haya hecho innece-
de los futuros cuadros del particular marxismo saria su actuación a través de entidades satélites
tico, tan diferente por su propia idiosincrasia y de apoyo, como lo era la Liga, que podían
política a aquellos otros surgidos en conflictivos fácilmente encubrir su naturaleza roja, tal como
países vecinos como Nicaragua y El Salvador. ocurría en otros lugares de América Latina.
En este sentido, la Liga tuvo un papel definido Por todos estos motivos mencionados, y
en cuanto a la transmisión de conocimientos, tal como usualmente se considera al movimiento
valores y rituales propios de una cultura comin- comunista local, podemos ver que también en
ternista que apenas comenzaba a hacer pie en este caso la Liga Antiimperialista de Costa Rica
Costa Rica en la segunda mitad de los años '20. puede ser interpretada como un factor de excep-
Por lo mismo, parecería que en realidad el papel ción en medio del contexto regional en el que
de esta organización se redujo más bien a esa actuó. De este modo, y en vez de ser soporte de
funcionalidad, cayendo en una especie de letargo partidos marxistas ya establecidos, o bien un sec-
una vez que estos cuadros en formación final- tor de apoyo para la pronta constitución de estos,
mente pudieron "profesionalizarse" en 1931 con
tenemos en esta nación un ejemplo prácticamente
la creación del Partido Comunista local. En todo
inédito de una organización que, directamente, se
caso, la recreación de la Liga bajo tres formas
convirtió en un ámbito de aprendizaje teórico a la
distintas, ya sea con un perfil más universitario,
que vez práctico para una buena parte de la pri-
más obrero o más partidario, nos da también la
mera generación de comunistas costarricenses.
pauta de la debilidad en su estructura organizati-
va a punto tal de dificultar sus labores a lo largo
del tiempo.
NOTAS
Por otra parte, y como contraparte, es
llamativo que en cuanto a su labor en el campo
Como el propio Ornar Dengo lo expresaría,
de la lucha anticolonial, la Liga haya cumplido "el Centro Germinal fue fundado de acuerdo
más bien una actividad de tipo marginal o bien con un importante movimiento internacional
de tipo limitada. Esto puede responder a varias de propaganda por la cultura del proletariado
causas, entre las que se encuentran algunas ya que responde, a su vez, a la inconmovible con-
mencionadas a lo largo de este trabajo: una vicción filosófica que consagra la cultura en su
situación de relativo aislamiento geográfico; un más amplia forma, como base indispensable de
bajo nivel de conflictividad social y política, lo toda labor emancipadora, ya sea individual o ;
que probablemente generó que a Costa Rica se le colectiva" (Gamboa, 1990: 16).
restara importancia frente a la mirada de algunos
centros comunistas de la región en la intención de 2 Si bien esta fundación reconoce algunos ante-
cedentes de organización política de los sec-
contribuir a la expansión de esta ideología en el
tores populares costarricenses desde fines del
área centroamericana; y, con relación a esto últi-
siglo XIX, cuando fueron constituidos sin-
mo, las dificultades encontradas por la Comintern :
dicatos y entidades gremiales de panaderos
para terminar de instalarse en este país, frente a y tipógrafos, de mayor influencia anarquista
la existencia de otras opciones políticas tanto o durante las siguientes décadas (Cerdas Cruz,
más atractivas como podían serio las distintas 1986: 314-315).
KERSFFELD: La liga antiiperialista de Costa Rica ... 117

3 La United Fruit Company se convirtió en un MAFUNIC fue fundado inicialmente en la


verdadero símbolo de la penetración neocolo- Ciudad de México, con el peruano Jacobo
nial en Centroamérica y, particularmente, en Hurwitz, ex dirigente aprista devenido comu-
Costa Rica. En este sentido, la exportación del nista, al frente. Bajo la impronta de la LADLA
banano, junto con la del café, para el mercado y, a través suyo, de la Comintern, pronto el
británico, terminó de situar a este país como MAFUENIC generó otras bases de apoyo den-
dependiente de una econornia central y en el que tro de la república mexicana y, fuera de ella, en
todos los productos de primera necesidad debían los Estados Unidos y Guatemala, además de la
ser importados (Cerdas Cruz, 1986: 313). que aquí se menciona en Costa Rica.

4 El entramado de redes políticas e intelectua- 7 Haya de la Torre se encontraba para ese enton-
les tejidas desde México por una publicación ces en medio de una gira política centroame-
como El Libertador fue realmente importante ricana cuyo propósito era llegar a Nicaragua,
para su época. Basta ver para ello el listado para acercarse a la lucha de Sandino y "com-
de revistas partidarias, académicas y cultura- batir al imperialismo en sus propios dominios".
les que, junto con la mencionada Repertorio Este periplo lo llevó de Yucatán primero a
Americano, fueron puestas en contacto entre Guatemala, de dónde salió deportado, y luego a
sí o afianzadas en vinculaciones previamente El Salvador, país en el que debió pedir asilo en
establecidas gracias a la publicación del bole- la embajada mexicana. Al negarse a desembar-
tín de la Liga Antiimperialista continental: El car en Nicaragua, entonces siguió viaje a Costa
Boletín del Torcedor (La Habana), Justicia Rica (Pakkasvirta: 2000).
(Montevideo), La Internacional (Buenos
Aires), Crítica (Buenos Aires), Man Set Yat 8 Para esta época, existían filiales apristas
Po (órgano del Kuo Min Tang de Cuba), La (sobredimensionadas en la historia de la pro-
Chispa (Buenos Aires), Imprekor (Viena), La pia agrupación) en Buenos Aires y Ciudad
Protesta (Buenos Aires), Claridad (Bogotá), de México, así como también en países como
Renovación (Buenos Aires), Repertorio Bolivia, Chile, Perú, El Salvador, Guatemala,
Americano (San José de Costa Rica), Revista Puerto Rico, República Dominicana y Cuba.
de Oriente (Buenos Aires) y The Workers Asimismo, se habían constituido filiales en las
Monthly (Chicago). ciudades europeas de París y Londres.

5 En sus números 9-10 correspondientes a los 9 Como bien se ocupó de denunciar el propio
meses de septiembre y octubre de 1926. Augusto Sandino en una misiva al Congreso
Antiimperialista reunido en la ciudad de
6 Participaron de este mitin la Confederación Frankfurt en 1929, el apoyo a su guerrilla
de Sociedades Ferrocarrileras, la Liga no resultaba menor si tenemos en cuenta
Nacional Campesina, la Unión de Carpinteros que, en el marco de la Unión Panamericana,
y Similares, la Sociedad de Alumnos de la el gobierno de Costa Rica, junto con los
Preparatoria, la Liga de Comunidades Agrarias de Estados Unidos, El Salvador, Guatemala,
del Estado, etc., la sección mexicana del Kuo Honduras y Nicaragua operaban como garantes
Min Tang y de la Acción Iberoamericana, entre del orden y del respecto a la Constitución en
muchas otras entidades, al mismo tiempo que Centroamérica (pese, por cierto, a la constante
fungieron como oradores José Allen, fundador y disruptiva influencia de la potencia del norte
del Partido Comunista Mexicano; el profesor en esta región) (Kersffeld, 2008).
José Romano Muñoz, por aquel tiempo, jefe
de la sección Preparatoria de la Universidad 10 Se sumaron además a los distintos frentes de
Nacional de México y autor del Proyecto de esta lucha otros hombres de la cultura y de las
Ley sobre la Reforma Universitaria; y, Julio letras costarricenses como Abelardo Bonilla,
A. Mella, fundador de la sección cubana de Rarniro Aguilar Villenave, Ricardo Rojas
la Liga Antiimperialista de las Américas, y Vicenzi, Carlos Salazar Gagini, Noé Solano
secretario general de su Comité Continental Vargas, J. Francisco Villalobos, Justo A. Facio,
de Organización. Por otra parte, el comité Moisés Vicenzi y José Ángel Zeledón.
118 REVISTA ESTUDIOS W 22/2009/ ISSN: 1659-1925/ 105-119

11 Ambos agrupamientos, ARCO y el Partido en estos asuntos, el país está invadido de


Popular, recibieron en 1929 una invitación por literatura comunista, venenosa, perjudicial en
parte de la Internacional Sindical Roja para todo sentido a la salud espiritual del pueblo y
asistir a Montevideo, al congreso formativo de cuya importancia precisa a todo trance impe-
la Confederación Sindical Latinoamericana. dir". Finalmente, el 6 de mayo de 1931, el
Ante la falta de recursos, se delegó en el grupo Presidente y su Ministro de Gobernación acor-
salvadoreño la representación para dicho cón- daron el Decreto N° 394 por el cual quedó "ter-
clave. Por otra parte, cabe también mencionar minantemente prohibido circular por medio del
que ARCO no sería el único agrupamiento que correo toda clase de publicaciones comunistas
se conformaría por esta época, en una línea de o que tengan tendencias disociadoras; o que
acción izquierdista y anticolonial, y en profun- vayan contra la seguridad del Estado y del
da vinculación con la Liga Antiimperialista. orden público" (citado en De La Cruz, 1983:
En este sentido, también participaron, desde 242).
un lugar más modesto, colectivos como la
Asociación Acción Proletaria, con un perfil 16 Si bien fue a partir de un manifiesto de 1934
obrerista mucho más marcado y en vinculación que este partido se denominó como Sección
a su vez con la Asociación de Estudiantes de de la Internacional Comunista, ésta dilató su
Cuestiones Eléctricas, entidad fundada por tratamiento e incorporación hasta 1935. Hasta
Carmen Lyra (en un proceso de mayor acer- entonces sólo pudo desempeñarse, apenas,
camiento a la ideología comunista) y con la como una "organización simpatizante" (Cerdas
intención de denunciar las condiciones abusi- Cruz: 1986: 340). De todos modos, y según la
vas impuestas en el país por el trust eléctrico. opinión de Manuel Caballero, se trató del "más
grande partido de América Central y uno de
12 Este extremismo, no exento de ingenuidad, los más exitosos del continente entero" (1988:
resultó palpable en el intento de secuestro en 91).
1930 del presidente Cleto González Víquez, en
una acción que en principio iba a ser coordi- 17 Su Comité Ejecutivo Provisional se confor-
nada con un grupo de militares y civiles de la mó con los siguientes nombres: Secretario
oposición (Melgar Bao, 2007: 394). General, Manuel Mora Valverde; Secretario
de Actas, Luis Carballo Morales; Secretario
13 Relación de documentos sobre México en de Correspondencia, Ricardo Coto Conde;
el Centro Ruso (Biblioteca Manuel Orozco Secretario de Finanzas, Jaime Cerdas Mora;
y Berra-Instituto Nacional de Antropología, Vocales, Efraín Jiménez Guerrero, Carlos
México) Rollo W 13/533-4-163 Y 164. Martín Obando, Gonzalo Montero Berry,
Alfredo Valerín, José Barquero y Anselmo
14 Por lo tanto, era ésta una definitiva prueba Soto (De la Cruz, 1983: 247-8).
de la capacidad de influencia ejercida por
la Internacional de la Juventud Comunista, 18 Los párrafos introductorios del Programa
influencia que incluso ya se había expresado Mínimo planteaban que "Costa Rica es un país
cuando, en 1929, al celebrarse el segundo con- de economía dependiente o semicolonial, por
greso antiimperialista mundial (esta vez en la cuanto su industria, economía y agricultura
ciudad alemana de Frankfurt), se llevó a cabo están mediatizados por el imperialismo de los
paralelamente un encuentro de las juventudes grandes países capitalistas (Estados Unidos,
revolucionarias y anticolonialistas con la inten- Inglaterra, etc.). Debido a este hecho funda-
ción declarada de auspiciar la conformación de mental, la implantación del programa comunis-
estos círculos de lucha dentro de la estructura ta integral (abolición de la propiedad privada,
operativa de las Ligas esparcidas por todo el socialización de los medios de producción,
mundo. etc.) no se pondrá a la orden del día en el país
sin haberse ya realizado la revolución social
15 El ministro Gurdián justificaría su controver- en las metrópolis de que dependemos econó-
tida propuesta al afirmar que "A causa de la micamente o sin la concurrencia de factores
tolerancia de los gobiernos que han tenido especialísimos, que permitieran organizar la
KERSFFELD: La liga antiiperialista de Costa Rica ... 119

economía y la vida social del país, sobre bases DE LA CRUZ, Vladirnir (2004) Las luchas sociales en
totalmente comunitarias sin provocar inter- Costa Rica 1870-1930 (San José, Costa Rica:
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249).
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19 Rodolfo Cerdas Cruz, en La hoz y el machete, la ideología en Costa Rica (San José, Costa
menciona incluso la indiferencia de la sección Rica: Universidad de Costa Rica).
estadounidense de la Liga con respecto a
la filial costarricense, cuando el venezolano GAMBOA, Emma (1990) Omar Dengo (San José,
Ricardo Martínez, uno de los cuadros dirigen- Costa Rica: Editorial Universidad Estatal a
tes del Buró del Caribe, directamente dejó sin Distancia/EUNED).
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