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MANUAL DE ENSEÑANZA
“MINERIA SUPERFICIAL”
Puno - Perú
2021-II
Minería Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden
CONTENIDO
Introducción .................................................................................................................................4
Toquepala ..............................................................................................................................10
Antapaccay .............................................................................................................................11
Antamina ................................................................................................................................13
Procedimientos ......................................................................................................................16
Compositación....................................................................................................................37
El modelo porfirítico...................................................................................................................43
Geología y Geoquímica.......................................................................................................44
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Evaluación preliminar.................................................................................................................46
Planos .....................................................................................................................................46
Plan de minado...................................................................................................................52
Planta .................................................................................................................................52
Acarreo ...............................................................................................................................53
Transporte ..............................................................................................................................54
Misceláneos ...........................................................................................................................55
Bibliografía .................................................................................................................................57
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INTRODUCCIÓN
La minería superficial se remonta a tiempos antiguos, pero fue insignificante antes del siglo XX.
Después de la II Guerra Mundial es impulsada por rápidos desarrollos tecnológicos, tales como
la introducción del Anfo (Amonium Nitrate + Fuel Oil) como explosivo, la perforación rotativa,
el acarreo mediante camiones, un incremento en la capacidad de los camiones y de los
equipos de excavación, la introducción de equipos auxiliares que ahorraban mano de obra, las
innovaciones en el beneficio de los minerales. Todo lo anterior dio como resultado una mejora
de la productividad de las minas superficiales.
Un conocido principio dice que la riqueza de las naciones proviene de la tierra. Un corolario de
lo anterior en el mundo de la minería es “sin no puede ser cultivado debe ser minado”. Las
técnicas de la minería superficial son uno de los principales medios para extraer los minerales
de la tierra. La producción mundial anual de metales y no metales asciende a un total de 16.6
billones de toneladas cortas. De este total, el 70% corresponde a la producción de minas
superficiales. La piedra chancada, arena y grava, los materiales fundamentales requeridos para
la construcción, son producidos mediante técnicas de explotación superficial. Su producción
anual asciende a 23.5 billones de toneladas cortas. A esto debemos añadir los materiales
empleados para la preparación del cemento, otros 2.3 billones de Tc. Finalmente, la cantidad
de desmonte que debe ser removido en el proceso de extracción de los materiales valiosos se
estima en 30 billones de toneladas cortas. Sumando todo lo anterior tenemos un total de 67.3
billones de Tc anuales que son extraídas mediante técnicas de minería superficial.
Hoy en día la población mundial se ubica en alrededor de 6.5 billones de personas. En términos
simples esto significa que, mediante métodos superficiales, anualmente se extrae un promedio
de 10 toneladas cortas de material por cada habitante de la tierra. Sin embargo, debemos
tener en mente que hoy en día el 95% de la población de la tierra se encuentra en los países en
desarrollo. Basándonos en sus expectativas para mejorar los estándares de vida, el estimado
actual de material que deberá ser extraído en el año 2038 será de 138 billones de toneladas 1.
La habilidad del planeta tierra para satisfacer esta demanda no es un tema de recursos, ya que
estos se encuentran ahí, sino más bien un tema de precios y costos. Inspeccionando nuestra
base de recursos, podemos concluir que, por lo general, las condiciones de explotación serán
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Lectura obligatoria visitar: https://www.statista.com/topics/1143/mining/
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más difíciles que en el presente. Así mismo se espera que los requisitos ambientales y de
seguridad sean cada vez mayores. Esto significa que todo el proceso de minado, desde la
prospección a la exploración, desarrollo, extracción y finalmente cierre de mina deberá ser
mucho más avanzado. Hoy en día, en muchos lugares del mundo, el cierre de mina debe
planificarse de la manera más satisfactoria antes de que una mina superficial pueda ser
aperturada. Esto se traduce en la necesidad de utilizar y aplicar una ingeniería de primer nivel,
así como las tecnologías que nos permitan cumplir con todos estos requisitos, especialmente
aquellos que se presentarán en el futuro.
Sin embargo, fuentes de posibles accidentes son: la presencia de numerosos equipos, una red
de transporte con equipo pesado, las operaciones de voladura, caída de rocas.
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Superficialmente se pueden explotar tanto minas superficiales como también canteras; dos
principales diferencias entre la mina la cantera son las condiciones geológicas y las
características del material disparado. En las canteras, la mayoría de los productos vendidos a
los usuarios tiene solamente que ser chancado y seleccionado con una parrilla a fin de separar
los diferentes tamaños de partícula. De otra parte, el objetivo de una mina metálica superficial
es el de proporcionar un mineral lo más puro posible a la planta, la que puede comprender una
chancadora, molinos, clasificadores, celdas de flotación, y/o sistemas bioquímicos, etc. Sin
embargo, cuando el depósito es demasiado pequeño, irregular o ubicado a mayores
profundidades, este no puede ser explotado económicamente mediante métodos
superficiales.
Tal como en las canteras, los minerales son extraídos empleando una serie de bancos. En caso
de que el mineral no aflore, el material de la sobrecarga debe ser removido (desbrozado) a fin
de dejar expuesto el yacimiento. En tanto el pit inicial es profundizado, este es ampliado.
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La geometría del pit es controlada por un número de variables que incluyen la forma del
cuerpo mineralizado, la distribución de leyes, la estabilidad de los taludes, la necesidad de
contar con vías de acceso, consideraciones operativas, etc. En la geometría de la Figura 1, se
necesita desbrozar una cantidad significativa de desmonte a fin de acceder al siguiente banco
de mineral en el fondo del tajo. Sin poner en peligro la estabilidad del talud, es de principal
importancia el mantener el ángulo del talud lo más parado posible, manteniendo así al mínimo
la cantidad de material excavado. En algún banco se tiene que la calidad (ley) del material
excavado no es lo suficientemente alta como para pagar los costos del desbroce necesario.
En este punto en el tiempo la mina tiene que cerrar o, si las condiciones son favorables, se
puede continuar la explotación mediante el empleo de métodos subterráneos. En la siguiente
figura se muestra la mina de cobre y oro de Aitik en Suecia. Esta es la mina europea más
grande ya que produce 18 millones de toneladas de mineral por año. Actualmente se
encuentra a una profundidad de 480 metros y se espera llegar hasta los 800 metros antes del
cierre.
La mina Bingham Canyon en Utah, Estados Unidos, está en producción desde el año 1906 y es
una de las más grandes estructuras hechas por el hombre, mide 1,200 metros de profundidad,
4,400 metros de diámetro en la parte superior. Esta ha producido más cobre que cualquier
otra mina en la historia y estará en operación por muchos años más. En referencia a la
remoción de desmonte, las necesidades de fragmentación son simples. Ya que no se requiere
que el material pase por una chancadora, el tamaño máximo de partícula está controlado por
las limitaciones impuestas por el equipo empleado en el carguío y acarreo del material hacia
los botaderos. De otra forma, una buena fragmentación del mineral disparado ofrece grandes
ahorros en los costos totales del tratamiento del mineral.
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El día 10 de abril del 2013 a horas 10:30 ocurrió un deslizamiento en esta mina. Este fue el más
grande deslizamiento de tierra en los Estados Unidos ya que alrededor de 65 a 70 millones de
metros cúbicos de tierra y roca se deslizaron en uno de los lados del tajo. Las operaciones
mineras fueron interrumpidas el día anterior, anticipándose al deslizamiento. Un segundo
deslizamiento ocurrido el día 11 de setiembre del 2013 originó la evacuación de 100
trabajadores.
Este deslizamiento no solamente cubrió la mayor parte del mineral, sino que también enterró
equipo pesado y destruyó la principal vía de acceso, este deslizamiento fue tan grande que
originó 16 terremotos.
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Por siglos, los minerales y los metales fueron la principal riqueza natural del Perú y por siglos la
plata y el oro fueron el único medio de intercambio comercial.
Definitivamente el Perú fue el país pionero en minería subterránea para poder extraer la plata
y el oro desde la época pre-incaica. Herencia de nuestros ancestros han convertido hoy al Perú
en uno de los países con el mayor número de minas subterráneas.
Este crecimiento minero se ha alcanzado gracias al potencial geológico del país y a un clima de
inversión propicio. Actualmente, invierten en el Perú empresas mundiales, líderes en
producción minera como Noranda, BHP-Billiton, Tec-Cominco, Barrick Gold, Newmont, Phelps
Dodge, Grupo México, Mitsui, Shougang. Las mismas que han desarrollado minas de clase
mundial como Yanacocha, Antamina y Pierina, entre otras más.
Más del 50% de minas en el Perú explotan bajo superficie y minas más antiguas, como
Atacocha, con más de 74 año de operaciones, sigue extrayendo de las entrañas de la tierra
riquezas polimetálicas al igual que Minera Casapalca que opera la mina subterránea más
profunda del Perú. Las nuevas tecnologías y la modernización, introdujeron la minería a tajo a
cielo abierto como Southern Perú, Antamina o Minera Yanacocha y los grandes tajos ya
explotados lo están convirtiendo en reservorios de agua, como es el caso de Yanacocha.
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TOQUEPALA
Mina a cielo abierto de pórfido de cobre. El depósito es parte de un distrito mineral que
contiene dos depósitos conocidos, Cuajone y Quellaveco. La mina Toquepala está en un
territorio con actividades intrusivas y eruptivas de rocas riolíticas y andesíticas. El mineral
económico es encontrado como sulfuros diseminados a través del depósito como vetillas,
rellenando espacios vacíos o como pequeños agregados. Los minerales incluyen chalcopirita,
calcosina, y molibdenita. Se tiene también una zona de enriquecimiento secundario, con
espesores entre 0 y 150 m. Las operaciones consisten de una mina a tajo abierto y un
concentrado de cobre con instalaciones de SX/EW con una capacidad de tratamiento de
60,000 toneladas por día.
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Debido a las características y dimensiones del tajo de Toquepala, se instalaron dos radares en
el borde superior del talud. El alcance largo, la precisión y la resolución alta de los radares
hacen que estos sean los únicos que pueden satisfacer las necesidades de monitoreo del talud
en dicha mina.
Estos radares tienen un alcance de hasta 4000 metros y una resolución longitudinal de hasta
0.75 metros con una precisión del orden de 0.1 mm a 2km. El radar IBIS-M completa un
barrido total de la pared del tajo en poco más de 5 minutos.
Tras la instalación, los radares IBIS-M fueron puestos a prueba en la complejidad de la mina
Toquepala, obteniendo excelentes resultados. De hecho, al ser una zona rocosa y profunda,
(ubicada en las faldas de la Cordillera de los Andes), el lugar es el sitio ideal para aprovechar al
máximo la capacidad de este radar. Tal es así, que permite medir rápidamente los
movimientos de pendiente con precisión submilimétrica en grandes áreas que proporcionan
alertas tempranas y fiables de un posible colapso inminente de la pared del tajo.
ANTAPACCAY
Es una mina de cobre del grupo Glencore, la que posee el 100% de las acciones de la empresa.
Ubicada en la provincia de espinar en el departamento del Cusco.
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La mina produce un promedio de 160,000 t/año de concentrado de cobre, así como oro y plata
como sub productos. Esta incluye una operación de dos tajos (Antapaccay y Coroccohuayco) y
una concentradora con una capacidad de procesamiento de 70,000 t/día de sulfuros de cobre.
En el acumulado enero-marzo del 2017 Antapaccay contribuyó con el 8.23% de la producción
nacional, ocupando el quinto lugar con un volumen de 46,422 TMF de cobre.
CERRO VERDE
La mina Cerro Verde es un depósito de cobre porfiritico que contiene óxidos y mineralización
de sulfuros secundarios, así como mineralización primaria de sulfuros. Los óxidos de cobre
predominantes son brocantita, crisocola, malaquita. La calcocita y covelita son los sulfuros
secundarios de cobre más importantes. La calcopirita y molibdenita son los principales sulfuros
primarios de cobre.
La operación de Cerro Verde incluye una concentradora de 360,000 t/día y una planta de
lixiviación y electrodeposición. La producción para la lixiviación proviene de una chancadora de
39,000 t/día y un sistema de lixiviación en rumas de mina. La operación de SX/EW
(lixiviación/electrodeposición) tiene una capacidad aproximada de 200 millones de libras de
cobre por año.
La firma estadounidense Freeport-McMoRan Inc. tiene una participación del 53.56% en Cerro
Verde, mientras que SMM Cerro Verde Netherlands N.V. (filial de Sumitomo Metal Mining
Company Ltd.) posee el 21% de la operación. El porcentaje restante está en manos de
Compañía de Minas Buenaventura S.A.A. (19.58%) y otros accionistas.
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ANTAMINA
Compañía Minera Antamina S.A. es una empresa peruana, regida por la legislación peruana
con capitales extranjeros (BHPBilliton y Xstrata poseen cada una el 33,75%, Teck Cominco el
22,5% y Mitsubishi el 10,0%).
Está ubicada en el departamento de Ancash a 270 Km. al noreste de Lima, a más de 4,300
msnm. Inició operaciones productivas en el 2001.
La mina: cuenta con una vida útil de 23 años y reservas probadas que ascienden a 494 millones
de TM de mineral con leyes de 1,3% de cobre, 1,0% de zinc, 12 gramos por tonelada de plata y
0,03% de molibdeno. La etapa operativa del yacimiento se inició en el 2002. El costo de
producción esperado asciende a US$0,4 por libra.
Antamina es una gran operación a tajo abierto, la que emplea equipos y métodos estándares.
La perforación se realiza mediante grandes perforadoras rotativas y en la voladura se emplean
explosivos a granel. El equipo principal de movimiento de tierras consiste en palas mecánicas
accionadas eléctricamente y camiones de acarreo, los cuales trabajan en bancos de 15 metros.
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DESARROLLO DE MINA
Ejemplos de casos:
La mina fue descubierta y trabajada, en primer lugar, como una mina de oro, pero se empezó a
encontrar cobre en la profundidad y el yacimiento se convirtió en un importante productor de
cobre. Se estima que la mina produjo 5´000,000 de libras de cobre antes de que las
operaciones se paralizaran.
Como parte de un programa estratégico de desarrollo mineral, por el lapso de cinco meses se
llevó a cabo un proyecto de desarrollo de la propiedad. Se perforaron ocho taladros
diamantinos con un total de 2,500 pies a fin de delinear el yacimiento. Así mismo se analizaron
205 muestras de testigos.
PERFORACION DE DESARROLLO
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Ejemplos de Casos:
PROCEDIMIENTOS
Cuando se conocen las características importantes del depósito mineral, se puede seleccionar
el equipo de perforación requerido a fin de obtener el tipo de muestra necesario para
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proporcionar, dentro de un margen de costo aceptable, los datos para el cálculo de la ley y
tonelaje de yacimiento potencial. De manera general, los costos de desarrollo son mínimos
cuando el depósito en estudio consiste en estratos o capas regulares, el total de lo cual
constituye el material valioso (carbón, caliza, etc.) y estos son el máximo cuando el mineral
valioso representa un pequeño porcentaje del área en estudio.
Se requiere evaluar el tamaño de taladro y espaciamiento entre los mismos. Debido a que el
cálculo de reservas minerales parte de los datos de la perforación de muestreo, las muestras
deben ser representativas del área asignada a ellas. Los datos geológicos del patrón de
distribución de los minerales valiosos (cobre, etc.) o de la uniformidad relativa de los
materiales masivos (hierro, carbón, etc.), proporcionan una guía para la malla de perforación
en las áreas en donde se dispone de datos geológicos. Los programas de computadora que
emplean estadísticas de configuraciones geométricas de cuerpos mineralizados y de su valor
pueden indicar el espaciamiento óptimo de los taladros en las áreas estudiadas, obteniéndose
la mayor relación entre el valor esperado del descubrimiento y el costo total. Se dispone de
técnicas estadísticas, en donde por medio de las cuales se puede obtener un valor de medida
en las mismas unidades que el intervalo de muestra, a fin de indicar a que espaciamiento los
valores de las muestras son independientes, es decir, en donde varias muestras sucesivas no
mantienen una relación estadística entre ellas; por ejemplo, a lo largo de una galería o de un
taladro. Esta mediad es una función del área o volumen de influencia de la muestra en por lo
menos una dimensión, a lo largo de la galería o el taladro.
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haya diferentes posibilidades), en donde se pueda esperar continuidad entre geológica entre
diferentes taladros y donde las muestras de perforación sean representativas.
Se emplean generalmente dos métodos para el manejo estadístico de las muestras. Uno de los
métodos analiza los valores de los ensayes independientemente de su ubicación o punto de
origen. El segundo método emplea las coordenadas X, Y y en algunas ocasiones la coordenada
Z para cada ensaye. La estadística no puede mejorar los datos de los ensayes, pero puede
servir para asegurar que los datos de los ensayes son usados de la manera más eficiente y
precisa. Las técnicas estadísticas pueden proporcionar mucha mayor información sobre la cual
la gerencia puede tomar decisiones.
METODOS DE ANALISIS
El elevado costo de las labores subterráneas como un método básico para el muestreo de
yacimientos minerales a fin de determinar la ley y el tonelaje impide que este sea considerado,
sin embargo, se pueden emplear galerías o piques en zonas complejas en donde la ley este
influenciada por características geológicas de difícil interpretación en base a información de
taladros o escasa información de geología superficial; así mismo, tales labores son a menudo
requeridas a fin de obtener muestras para análisis metalúrgico.
En los primeros años de la minería superficial, la perforación con lavado y muestreo fue el
método usual de muestreo para hallar la ley. La mayoría de las minas antiguas a tajo abierto
fueron perforadas mediante este método, las subsecuentes operaciones mineras confirmaron
los estimados de reservas minerales.
Este método fue preferido debido a que proporciona grandes tamaños de muestra, las brocas
pueden penetrar en terreno fracturado, fisurado y alterado sin mayor dificultad; los costos por
pie perforado son considerablemente menores que los de otros métodos de perforación; las
operaciones de perforación por lo general son más sencillas y los resultados confiables. Se le
dio poca importancia a la desventaja de no proporcionar buen material para estudios
geológicos y pruebas metalúrgicas.
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En nuestros días, el método tiene grandes desventajas comparado con los nuevos métodos de
perforación debido a:
PERFORACION DIAMANTINA
En la perforación diamantina se emplea una broca que rota en el extremo del taladro de
perforación. La abertura al extremo de la broca permite que una columna solida de roca se
mueva hacia arriba en el tubo de perforación.
Desde los primeros años de la perforación diamantina se han logrado grandes avances en el
incremento de la recuperación del testigo, disminución de los costos de la broca y barras, en la
solución de problemas de perforación dificultosa, en el incremento de la velocidad y la
profundidad y en la estandarización de los equipos. Los costos por metro de perforación varían
ampliamente, desde los US$ 100.00 por metro hasta US$ 300.00 por metro, dependiendo del
diámetro de broca y condiciones de perforación. En líneas generales el costo de mano de obra
ejerce una gran influencia en los costos totales.
En el pasado, la errática recuperación del testigo en terreno difícil daba como resultado
muestras de dudosa confiabilidad, por lo que se prefería otros métodos de perforación. Sin
embargo, los últimos avances en las técnicas y equipos han mejorado sustancialmente la
recuperación de testigos, de tal manera que la perforación diamantina produce una mejor
muestra para análisis y evaluación visual que cualquier otro método de perforación.
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taladro durante toda la vida de la broca, el testigo es removido a fin de retirar el tubo interno
dentro de las barras de perforación. Las ventajas del equipo wireline son:
1. Se pierde menos tiempo en retirar el testigo, con lo cual se consigue un mayor tiempo
de perforación.
2. Menor daño a las paredes del taladro debido a una menor frecuencia de extracción de
las barras de perforación.
3. Mayor vida de la broca y el núcleo.
4. Mejor recuperación del testigo.
5. Menores costos totales de perforación.
Los lodos de perforación son fluidos en tanto se los agite, pero se convierten en gel cuando se
detienen. Además de la resistencia del gel, las propiedades utilizadas en la perforación con
lodos son viscosidad, peso, características lubricantes, propiedades para estabilizar las
paredes. Se consigue cambiar estas características añadiendo agua, añadiendo químicos y
acondicionamiento. La práctica actual consiste en añadir agua a diferentes cantidades de
bentonita, detergente, soda caustica, carbonato de sodio, almidón industrial, compuestos de
tanino, lignito y otros químicos requeridos localmente. Cuando las pérdidas de filtración son
elevadas, se añade al lodo hasta un 19% de petróleo diésel. Cuando ocurren elevadas pérdidas
de lodo, se introduce al sistema un material sellante emulsificador.
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El efecto de los aceites y el jabón parece estar controlado por el tipo de roca y el grado de
emulsificación del aceite.
Es una técnica que permite una completa recuperación de las muestras, sean estas de tierra o
roca, sin ninguna contaminación proveniente de las paredes del taladro. Se lleva a cabo
mediante el empleo de una broca de tres hojas o una broca ticónica o también con martillo en
el fondo; las muestras son evacuadas a través de la cara de la broca hacia el conducto interno
de una barra de perforación de pared dual, de tal manera que nunca entran en contacto con
las paredes del taladro. Esta técnica es efectiva en cuanto a costos y rapidez de ejecución. Es
taladro tiene usualmente un diámetro de 150 mm y profundidades entre 50 y 200 metros.
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Las brocas de perforación son también completamente diferentes a las brocas empleadas en
perforación diamantina. Uno de los tipos es llamado “broca de martillo”, debido a que esta
rápidamente golpea y pulveriza la roca. Este tipo de broca trabaja bien en condiciones de
perforación en seco (p.ej. por encima del nivel freático) y en formaciones rocosas densas y
duras. Por debajo del nivel freático, el agua en la formación amortigua el golpe, haciendo que
la perforación sea mucho menos efectiva al fragmentar la roca.
Otro tipo de broca es denominado “broca tricónica”, la cual tiene tres elementos de corte
cónicos que rotan en conjunto de manera similar al diferencial en la transmisión de un carro.
Las brocas tricónicas son más lentas en formaciones duras, pero son muy efectivas en
formaciones suaves y en presencia de agua. Las brocas triconicas perforan más lentamente en
formaciones duras, pero son muy efectivas en formaciones suaves y en condiciones húmedas
de perforación.
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Área cuadrángulo ÷ área testigo
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A partir de lo anterior, es obvio que cualquier dato real que pueda indicar con mayor precisión
las áreas de influencia de los ensayes en los taladros en comparación con el patrón geométrico
estándar, debe mejorar la precisión del cálculo de reservas. Por lo tanto, en muchos casos,
debe emplearse información geológica a fin de modificar los límites de los bloques.
MÉTODOS CONVENCIONALES
La siguiente figura muestra los patrones geométricos generalmente empleados al asignar áreas
de influencia a las muestras de los taladros. En los gráficos (a) y (b) se muestra un sistema de
bloques rectangulares alrededor de cada taladro, en donde el área de influencia de cada
taladro se extiende hasta la mitad de la distancia al taladro adyacente.
4
El Código Australasiano para la Comunicación de Resultados de Exploración, Recursos Minerales y Reservas de
Mineral ("el Código JORC") es un código de práctica profesional que establece unas normas mínimas para la
Comunicación Pública de los Resultados de Exploración, Recursos Minerales y Reservas de Mineral.
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En los gráficos (c) y (d) se muestran polígonos construidos alrededor de cada taladro, en donde
el área de influencia se extiende hasta la mitad de la distancia al taladro adyacente.
En los métodos rectangular y poligonal para el cálculo de reservas, se asume que la ley del
ensaye en un taladro se extiende hasta la mitad de la distancia a otro taladro contiguo.
Obviamente este es un modelo incorrecto de la verdadera situación que existe en la
mineralización del punto medio entre los dos taladros. Aún si la mineralización consistiese en
segmentos de lentes y vainas, no se asegura que la perforación de exploración penetre
exactamente en el centro de cada lente o vaina y por lo tanto el espaciamiento entre taladros
no será igual a la longitud de los lentes o vainas. Si esto fuese cierto, entonces los límites de los
lentes o vainas caerían a la mitad de la distancia entre los taladros, por lo menos en una
dimensión, y el modelo poligonal se podría aplicar para asignar la ley del mineral en esta
situación especial.
La figura (e) ilustra el método triangular para la estimación de la ley de mineral entre los
taladros. Este método es también un modelo aproximado, debido a que se asume una
variación lineal de la ley del mineral en proporción directa a la distancia entre los taladros.
Debe existir una relación o correlación entre los ensayes sucesivos a fin de asignar un cambio
lineal en la ley con la distancia; este hecho impide cualquier concepto de independencia entre
ensayes sucesivos en el método triangular.
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En el método de secciones transversales (figura f), es necesario dibujar secciones a través del
yacimiento, y luego, subdividir estas secciones en áreas o bloques a los cuales se pueda asignar
estimados de leyes y tonelajes. Este método de cálculo de reservas minerales también tiene el
problema inherente de asignar un área de influencia a un ensaye. Por ejemplo, si se perforan
dos taladros verticales a una distancia de 300 pies y se empleasen intervalos de ensaye de 5
pies, el método de secciones transversales puede ser usado para subdividir el área de 300 pies
entre los taladros en bloques de 5 × 300. Si se hiciese esto, la ley de mineral de cada pequeño
bloque podría basarse en el promedio de los dos ensayos en los extremos del bloque. Si
existiese una relación lineal entre las leyes de estos ensayes a lo largo de los 300 pies de
separación, esta asignación de ley al bloque podría ser una estimación correcta. Con la posible
excepción de algunos yacimientos sedimentarios, la existencia de una correlación lineal a lo
largo de 300 pies es altamente improbable. De hecho, muchos valores de los ensayes
muestran independencia a intervalos menores de 50 pies y algunos a intervalos menores de 2
pies.
Cuando los valores de los ensayos son independientes a intervalos menores que el
espaciamiento entre taladros, el mejor estimado para la ley del mineral en el área entre ambos
taladros a distancias por encima del área de influencia de los valores de estos ensayes, es el
promedio de los valores de los ensayes del área que los rodea. Esto requiere de alguna forma
de interpolación, usualmente una función de la distancia, para combinar y promediar los
valores de los ensayes adyacentes.
El método de los polígonos se basa en asignar a cada punto del espacio la ley del dato más
próximo. Para estimar una zona S se ponderan las leyes de los datos por el área (o volumen) de
influencia Si.
_
1 N
ZS = Si Z i
S i =1
Ejemplo:
Calcular la ley promedio para los polígonos mostrados en la figura anterior, en donde las áreas
de estos son:
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La ley anterior fue ponderada con las áreas de cada polígono, si comparamos esta ley con la ley
promedio aritmética veremos que la ley ponderada es menor.
Comentarios:
MÉTODOS ESTADÍSTICOS
El siguiente texto fue redactado en base a los trabajos de: (Cummins & Given, 1973) y (Glacken & Snowden, 2014)
Una vez que se ha definido una serie o varias series de dominios coherentes, hay que describir
las características numéricas de la mineralización en cada una de estas zonas. Esto no sólo
asistirá en la interpolación de leyes, sino que también pondrá de manifiesto cualquier
tratamiento especial de los datos (como el recorte de la ley) que deba aplicarse.
El análisis estadístico puede ayudar a decidir la naturaleza de los límites. El análisis debe incluir
estudios sobre cómo las leyes cambian en los límites de los dominios Una vez definida una
serie o varias series de dominios coherentes definidos, hay que describir las características
numéricas de la mineralización en cada una de estas zonas. Esto no solamente apoyará en la
selección del método de interpolación de leyes, sino que también pondrá de manifiesto
cualquier tratamiento especial de los datos (como el recorte de la ley) que deba aplicarse.
Cuando haya varios minerales o variables de interés, el análisis estadístico revelará los
patrones o correlaciones que deben tenerse en cuenta. El análisis estadístico debe realizarse
dentro de los dominios definidos por el modelo geológico o por otros enfoques (Glacken &
Snowden, 2014).
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En años pasados, los métodos estadísticos han sido extensivamente empleados a fin de
estimar la ley del mineral. Se dispone de técnicas para permitir el cálculo del intervalo de
confianza para un estimado de ley de mineral cuando se emplean métodos estadísticos. Así
mismo, las técnicas estadísticas permiten establecer una precisión específica para el estimado
de la ley antes de iniciar la perforación, y posteriormente perforar la cantidad de taladros
necesaria para obtener esta precisión. Esto ayuda a minimizar los costos de perforación y
relacionar los costos con aquellos requeridos para cada tipo de depósito y características de la
mineralización (Cummins & Given, 1973).
Un requisito previo para el análisis de datos es que todas las muestras representen un
volumen igual. Esto se denomina apoyo de la muestra. La forma aceptada de garantizar la
igualdad de apoyo de todas las muestras dentro de un dominio es componer las muestras
(normalmente datos relacionados con la perforación o el intervalo) en longitudes iguales.
Existen varios algoritmos para la compositación, pero el profesional debe comprobar siempre
que los resultados son los esperados.
Tal como en cualquier otro método para la estimación de ley de mineral, los métodos
estadísticos deben considerar los cambios en los dominios del mineral a través del depósito. El
logueo geológico de los taladros es particularmente útil para los modelos de regresión
estadística debido a que los tipos de roca, cambios en los patrones de alteración, cambios en la
silicificación, pueden ser incorporados en los modelos de regresión. Como resultado, el
modelo es más sensible a estos controles geológicos.
Usualmente los datos de los ensayes son tamizados a fin de separarlos en diferentes
poblaciones en base a el dominio o tipo de mineral (óxidos, secundarios, primario), ley, zona
(desmonte, lixiviable, mineral), tipos de roca (diorita, cuarzo, monzonita, esquisto), zonas de
alteración (silicificación, cloritización, argilización), y demás. Esto se hace así a fin de simplificar
el análisis, para proporcionar información adicional acerca de la ley y la relación con otras
características geológicas del depósito y para eliminar la distribución multimodal de la
frecuencia de los ensayes.
Para depósitos de baja ley (metales preciosos o cobre), puede graficarse en papel logarítmico
la distribución acumulada de frecuencia de los ensayes a fin de evaluar la presencia de más de
una población (óxidos, secundario, primario). En caso de disponer de un reducido número de
29
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ensayes, se pueden emplear técnicas de simulación a fin de generar de 5,000 a 10,000 ensayes
adicionales con la misma media y desviación estándar para efectos de mayor estudio. Para
probar la independencia entre ensayes sucesivos se pueden emplear las pruebas de
diferencias sucesivas de media cuadrada dentro del taladro y el área de influencia de los
ensayes. Se pueden ejecutar otras pruebas estadísticas de acuerdo a la necesidad.
Si distribución de frecuencias de los ensayes tuviese sesgo, puede ser necesario efectuar
algunas transformaciones con la finalidad de convertir los datos a una distribución normal para
simplificar los análisis. Las transformaciones son, en el mejor de los casos, un método
alternativo para manejar los datos ya que la transformación no resuelve todos los problemas
en los datos originales.
Se pueden establecer los límites o intervalos de confianza para los datos de los ensayes. Estos
límites serán simétricos para distribuciones normales, pero tendrán una confidencia desigual
para distribuciones sesgadas y al convertir los datos transformados a sus valores originales.
La relación de variación del volumen de la muestra S 12 λ1 = S22 λ2 puede ser usada para calcular
los nuevos volúmenes de muestra cuando sea recomendable cambiar estos (por ejemplo, al
cambiar un taladro AX por un taladro NX o para cambiar los intervalos de muestra de 2 pies a 5
pies) a fin de reducir la desviación estándar y por lo tanto incrementar la precisión del
muestreo (reducir el valor del error estándar de la media). Si en caso el muestreo no haya
arrojado la precisión adecuada para el estimado de la ley del mineral, entonces puede iniciarse
con la fase II de la exploración y continuar con el muestreo hasta obtener la precisión deseada.
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empleado para la muestra, este es la cantidad del material de muestra que ha sido pulverizado
a fin de conseguir la muestra final para su ensaye. Por lo tanto, al ejecutar una cortada de 1.5 ×
2.1 metros para propósitos de muestreo, el volumen de muestra no es 1.5 × 2.1 × longitud, el
volumen de muestra será el volumen de material pulverizado para antes de efectuar los
ensayes.
En caso de que estas cortadas se ejecutasen para delimitar los bloques de explotación y
planificar la mina, se pueden emplear pruebas de diferencias sucesivas de medias cuadradas y
correlaciones con la finalidad de proyectar los valores de la ley de mineral en las secciones.
Ejemplo.- 1.1
➢ X : valores individuales de ensayes, con X1, X2, … X10 ensayes por taladro.
➢ ∑X1, ∑X2, ∑X3, ∑X4: Suma de los valores individuales de ensayes por taladro
=
X
n
➢ X 2
: Sumatoria de los valores de los ensayes individuales al cuadrado
➢
( X ) : Valor cuadrado de la suma de los ensayes por taladro
2
31
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( X ) ( X )
1
2
2
2 y así sucesivamente
X 2
− X ( X )
➢ S : Desviación estándar S = n −1
S
Sx =
n
Ya sea para un taladro o para todos los ensayes
½ CI95 = Sx (t0.05)
T0.05, valor estadístico t para la prueba con un límite de 95% de confidencia. A 95% este
valor es de 2.228 para 10 valores y 2.021 para el caso de 450 valores.
➢ CI95 X = ± Sx(t0.05)
1: Calculo de la sumatoria:
2: Sumatoria de cuadrados:
4: Desviación Estándar:
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X 2
− X ( X )
S=
n −1
4,040.85 − (10.03)(401.10)
S= = 0.695
40 − 1
S
Sx = = 0.11
n
7: Intervalo de confidencia:
CI 95
CI95 = X = 10.03 ± 0.22
2
S x (t 0.05 ) S x(t0.05 )
½ CI95 = = n=
n 1 / 2CI 95
0.695 2.021
n¡ = = 14
0.10
N’ = 14 × 14 = 196
N’ = 196 – 40 = 156
S
Sx =
n
33
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S12l1 = S22l2
MÉTODOS GEOESTADÍSTICOS
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Se hace la validación de los variogramas obtenidos con los métodos de Kriging Puntual y
Varianza del Kriging. El variograma nos define el concepto de área de influencia el cual es
utilizado después para hacer la interpolación por el método de Kriging.
Para la estimación de la ley de cada block unitario (TCu, Mo, IS, CuSAC, CuSCN), se emplea el
método de interpolación Kriging Ordinario que viene en el MINESIGHT®.
Para la interpolación del CuSAC, CuSCN, Índice de Solubilidad se emplea además del Kriging
Ordinario, el método del Inverso de la Distancia.
Los altos erráticos de leyes fueron tratados estadísticamente y fueron considerados para la
interpolación Normal de cada block, previo reemplazo por la media más dos veces la
desviación estándar.
35
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El tonelaje de concentrado fue calculado mediante la conocida fórmula para dos productos de
Taggart y la recuperación de cobre fue calculada a partir de los tonelajes y los ensayes. Un
tema de especial importancia al momento de trabajar con este tipo de datos es el establecer
un sistema de verificación y balances para sostener los datos calculados. Esto puede
conseguirse compositando las muestras de las diferentes guardias en muestras diarias, y las
muestras diarias en muestras por campaña. El concentrado producido durante la campaña
debe también ser recolectado por separado, pesado y analizado por contenido de humedad y
contenido metálico. Debe existir una buena convención acerca de todos los resultados a fin de
establecer una buena confianza en la aplicación de los datos a las reservas minerales.
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Los datos de la tabla anterior reconocen tres diferentes tipos de mineral. El tonelaje de estos
tipos de mineral mostrados en las reservas de mineral debe ser sustituido por el tonelaje de
alimentación para las pruebas de planta piloto a fin de obtener los datos necesarios para la
evaluación de reservas.
COMPOSITACIÓN
Hustrulid & Kuchta (2006), explican que una vez que se ha extraído el testigo de la perforación
diamantina este es logeado por los geólogos y se envían muestras representativas para su
análisis. Después de recibirlos, los ensayes son añadidos a toda la información ya colectada.
Los resultados de estos ensayes individuales pueden representar distancias de testigo de unos
cuantos centímetros a varios metros. La compositación es una técnica mediante la cual estos
datos de ensayes son combinados a fin de calcular promedios pesados o leyes compósito
representativas de intervalos más largos que los propios. El registro de perforación mostrado
en la Figura 12 muestra una serie de longitudes de mineral (l i) y sus leyes correspondientes (gi).
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Ley promedio ( g ) =
ligi
li
En este caso se asume que los límites entre el mineral y el desmonte son precisos. La primera
interrogante que debe ser resuelta es: “¿Cuál es la ley promedio para esta intersección
mineralizada?”. Se encuentra el promedio pesado tabulando primero las longitudes
individuales li y sus leyes correspondientes gi, se obtienen los productos ligi y la sumatoria ∑ligi.
Luego esta sumatoria es dividida por la suma de las longitudes ∑ l i a fin de obtener la ley
deseada. A continuación, se muestra lo expuesto.
Este valor debe ser posteriormente añadido a las tablas. En este caso (g) es el compósito de la
zona mineralizada. A pesar de que la compositación es usualmente un promedio ponderando
en base a la longitud, en caso que la densidad sea extremadamente variable, el factor de
ponderación es la longitud por la densidad (o gravedad específica).
Este procedimiento es repetido para cada uno de los taladros. Tome nota que cada
intersección con la mineralización será, en general, de diferente longitud. También será
diferente la cota del fondo y la parte superior. Para depósitos grandes y uniformes, en donde
la transición de mineral a desmonte es gradual (el cut-off es más económico que físico) el
intervalo de compositación es la altura de banco y se seleccionan elevaciones fijas. Esta
compositación de banco es el método más usualmente empleado para el modelamiento de
recursos en minería superficial en nuestros días. En la Figura 24 se representa un banco
mediante las líneas discontinuas.
En este caso en particular, la porción superior del banco cae en desmonte. La ley compósito
del banco será
l0 g0 l 0 × g0
l1 g1 l 1 × g1
l2 g2 l 2 × g2
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l3 g3 l 3 × g3
l4 g4 l 4 × g4
∑ li g ∑ ligi
∑ li = H
g=
ligi
H
Ejemplo 5.-
Se han seleccionado bancos con una altura de 40 pies, así mismo se empleará una cota de
referencia de 5,200 pies. Esto significa que las elevaciones de las crestas de banco serán de
5,200 pies, 5,160 pies, 5,120 pies, etc. Los 32 pies superiores del taladro C-22 descansaran en
el banco 1, los siguientes 40 pies en el banco 2, terminando el taladro en el banco 3.
39
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55 0.560
60 0.320
65 0.700
70 0.210
75 0.180
80 0.080
85 0.200
90 0.070
16 .67
g= = 0.417
40
La elevación media del banco 2 es 5140.0 pies. Los compósitos de las porciones restantes del
taladro tanto en la parte superior como en la inferior pueden ser hallados de la misma manera.
Los resultados se muestran a continuación.
En caso de que se requiera de una ley mayor al 0.3% para considerar al material como mineral,
entonces la zona mineralizada de este taladro se extiende desde la superficie hasta una
profundidad de 65 pies. El compósito de la zona mineralizada sería:
40
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5 0.48 2.40
5 0.40 2.00
5 0.38 1.90
5 0.33 1.65
5 0.59 2.95
5 0.48 2.40
5 0.60 3.00
5 0.56 2.80
5 0.32 1.60
5 0.70 3.50
65 0.48 31.20
31 .20
g= = 0.48
65 En este caso, cuando las longitudes son todas iguales, la ley promedio
es el promedio simple de las leyes.
6.24
g= = 0.48
13
Se puede emplear la misma técnica de compositación al tratar con leyes que representen a
diferentes áreas o volúmenes.
FACTOR DE TONELAJE
A pesar de que en minería de que se trabaja con volúmenes de material, se recibe un pago en
base a el peso del material valioso contenido. Esto contrasta con proyectos de construcción
civil en donde se paga el volumen de material removido o colocado. Aún en este caso, se debe
efectuar la conversión de volumen a peso debido a las limitaciones del equipo de carguío y
acarreo. La conversión de volumen V a peso W y viceversa se consigue en el sistema ingles con
la ayuda de un factor de tonelaje TF (volumen/peso).
V = TF × W
En el sistema inglés de medidas, la unidad básica para describir el peso de los materiales es el
peso de un pie cubico de agua. La densidad WD del agua es:
41
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2000 lb / tc
TF = = 12.82 pies3/tc
156 lb / pie3
Ya que la densidad específica del material minado es 2.5, la densidad es 2.5 t/m 3. El factor de
tonelaje es:
1
TF = = 0.4 m3/t
2 .5
A pesar de que el factor de tonelaje, tal como se definió aquí en unidades de volumen por
peso, es probablemente el más utilizado, también se utiliza la inversa del factor:
TF* = W/V
Dependiendo de las necesidades, se emplean algunas veces las tres técnicas enumeradas. En la
técnica 1 hay dos formas de realizar esta prueba. En la primera el material es pesado en el aire
(W), luego se determina el volumen de agua desplazado (V) al ser introducido en agua (el nivel
de agua desplazado se visualiza en un cilindro graduado). Luego se puede calcular la densidad:
W
d=
V
La segunda forma implica pesar la muestra en el aire (W) y luego pesada al ser suspendida en
agua (S). la gravedad especifica es:
W
SG =
W −S
42
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La segunda técnica es más cara y toma más tiempo, pero proporciona los mejores y más
adecuados resultados dependiendo del lugar en particular. Tales pruebas deberán llevarse a
cabo para diferentes ubicaciones en la mina.
A fin de ilustrar la técnica 3 consideremos un mineral de oro con 94% de cuarzo y 6% de pirita.
De tablas tenemos que la gravedad específica de estos materiales es:
• Cuarzo: 2.65
• Pirita: 5.1
2000
TF = = 11.45 pies3/tc
2.80 62 .4
EL MODELO PORFIRÍTICO
Por muchos años se conoce que los depósitos de pórfidos de cobre se han formado en relación
con zonas de subducción. Se conoce que las franjas metalogénicas definidas por los depósitos
de pórfidos se han formado en las últimas etapas de los ciclos orogénicos. Se conoce que los
depósitos de pórfidos se han formado en arcos insulares oceánicos, arcos continentales
(Andes), en arcos de terrenos formados por acreción y también en fajas magmáticas post
orogénicas (p.ej. China).
43
Minería Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden
Así mismo se pueden mencionar las siguientes investigaciones, las cuales ayudan a mejorar el
modelo profirítico:
GEOLOGÍA Y GEOQUÍMICA
Las técnicas de exploración geoquímica de los depósitos porfiríticos son bien conocidas y
establecidas por varias décadas. El reconocimiento de los patrones de zoneamiento metálico
alrededor de los depósitos porfiríticos ha guiado la exploración geoquímica de dichos
depósitos, independientemente de las técnicas empleadas (detritus rocosos, sedimentos de
cuenca, muestras de tierras, perforación rotativa u otros métodos de muestreo), no se
conocen de nuevos métodos de exploración geoquímica que hayan jugado un rol significativo
en el descubrimiento de depósitos porfiríticos (p.ej. iones metálicos móviles).
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Sin embargo, la gran escala de alteración, los patrones de zoneamiento de las fracturas y
metales alrededor de los sistemas porfiríticos ha originado que la mayoría de los depósitos
porfiríticos conocidos, particularmente los depósitos expuestos, fueran descubiertos mediante
una combinación de métodos geológicos/geoquímicos más que por geofísica. Por lo tanto, la
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Minería Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden
geofísica en el pasado ha tenido menor relevancia en la exploración de los pórfidos que, por
ejemplo, en la investigación de depósitos Vulcano-genéticos de sulfuros masivos, siendo estos
últimos los que comúnmente proporcionan objetivos discretos con elevado contraste entre sus
propiedades físicas especialmente adecuadas para su detección geofísica.
EVALUACIÓN PRELIMINAR
PLANOS
Los planos son esenciales a fin de recolectar, delinear y correlacionar una gran proporción de
los datos requeridos para un estudio de factibilidad de una mina superficial. Un plano es
indispensable para el ingeniero de minas ya que es un método gráfico de presentar la
información minera no solamente para su aplicación práctica en la estimación de un
planeamiento, sino también para demostrar las relaciones físicas a las personas encargadas de
la toma de decisiones. Por lo tanto, se deberá disponer de planos de secciones y planos por
nivel
El mapeo geológico comúnmente se lleva a cabo a una escala más grande tal como 1:500. Para
propósitos de planeamiento, las características geológicas se dibujan en planos de menor
escala.
46
Minería Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden
La información topográfica de estos planos puede ser relacionada con los datos concernientes
al estudio del proyecto. Sobre estos planos se puede superponer información como geología,
rutas de transporte, límites de la propiedad.
Estos planos deben prepararse para mostrar las vías de transporte tales como las autopistas,
las vías férreas, rutas acuáticas y sus respectivas distancias a los mercados, fuentes de
aprovisionamiento, puntos de procesamiento o de transferencia. Se debe delinear la extensión
del yacimiento y cuerpos mineralizados y relacionarla con los límites de la propiedad. Se
deberán mostrar las áreas adyacentes con potencial minero o áreas de prospección y
relacionarlas con los límites de la propiedad a fin de tenerlos en consideración para futuras
ampliaciones, desarrollos o exploraciones, a la luz de posibles situaciones favorables a futuro.
Este plano general del área deberá mostrar también las rutas disponibles para los accesos, la
ubicación de las líneas de transmisión eléctrica, indicando su capacidad y distancias requeridas
para su interconexión, la ubicación de fuentes de agua presentes y a futuro; así como la
posibilidad de construcción de un reservorio a fin de garantizar una constante provisión de
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agua. También debería mostrar las áreas disponibles para las colas, relaves y botaderos en
relación con el área de explotación y de procesamiento. Se deben mostrar también las rutas de
drenaje, las cuales deben indicar el grado de tratamiento de los efluentes a fin de prevenir y
controlar la contaminación.
Como regla general, la escala del plano general de área, establecida para mostrar muchas
características pertinentes sobre una amplia área es demasiado pequeña a fin de representar
con el detalle adecuado la información necesaria para el plano general de mina. En tal caso, es
necesario preparar un plano general de mina a escala “media”. Dentro del área de cobertura
limitada, se pueden incluir las características del plano general de área, pero la mayor escala
permite adicionar detalles generales.
En caso de que la planta propuesta se encuentre cercana a la mina, esta debería representarse
dentro del plano con todos los detalles posibles, incluyendo estructuras, conexiones de
energía, sistemas de conducción de agua, rutas de acceso, zona para la disposición de
desechos, áreas para las rumas, puntos de carguío de trenes, camiones, etc., fajas
48
Minería Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden
transportadoras, tuberías para el transporte de materiales entre la mina, la planta y los puntos
de carguío.
Este plano general de mina deberá mostrar con mayor detalle el delineado del yacimiento y,
para servir de referencia a planos más detallados, secciones transversales y tablas de datos,
debería mostrar algunos taladros de exploración y puntos de muestreo de yacimiento
indicando detalles como el talud, el buzamiento, el plunge, rumbo, espesor, continuidad,
calidad, etc.
Se debe preparar un plano a gran escala a fin de cubrir el área de explotación. En caso de que
el planeamiento este influenciado por el espesor del depósito o por las irregularidades o por la
selectividad o su variabilidad con respecto a la profundidad, se deberán preparar secciones
transversales a fin de ser utilizadas en conjunto con el plano detallado. En caso de encontrarse
próxima, se deberá mostrar también la planta de procesamiento, de otra manera también
podría ser necesario contar con un plano detallado de la planta. El plano detallado de mina
debería contar con toda la información concerniente al problema de minado presentada de
forma efectiva en una manera gráfica.
Se deberá mostrar en este plano la extensión y en las secciones transversales utilizadas las
leyes o zonas de clasificación del depósito mineral junto con la interpretación de la
información geológica, su clasificación metalúrgica. Toda esta información es el resultado de la
perforación de desarrollo, el muestreo y el ensaye descritos en las secciones precedentes.
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En algunos casos, las curvas de nivel son los factores que controlan en el planeamiento de una
mina superficial, pero usualmente ellas deben ser consideradas en relación con otras variables.
Por ejemplo, en caso que la profundidad y la cantidad de sobre capa sea más importante o que
esta controle el potencial económico, entonces deberán construirse isolíneas para la
profundidad de la sobre capa, llamadas isópacas; estas, en conjunto con las áreas
determinadas facilitan el cálculo de los volúmenes de sobre capa o los metrajes. La Figura 18
muestra las isópacas del burden y los probables límites de trabajo de un proyecto minero.
Los datos de los metrajes de la sobre capa comparados con los volúmenes o tonelajes
calculados mediante el empleo de isópacas para el espesor del mineral posibilitan el cálculo de
las relaciones de desbroce; estas relaciones son empleadas a su vez para determinar el tamaño
del equipo de desbroce necesario para producir el tonelaje deseado. Esta relación, tal como es
usada en minería superficial es calculada determinando ya sean los metros cúbicos o el
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Minería Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden
tonelaje de sobre capa que se requiere desbrozar a fin de descubrir una tonelada de mineral.
De la misma manera, las isópacas de espesor de mineral proporcionan la información
necesaria para una óptima selección del tipo y tamaño del equipo de carguío. Conectando los
puntos de igual espesor de mineral se pueden determinar los volúmenes de mineral y facilitan
el planeamiento de los cortes o tajadas ya que estos estarán influenciados por el espesor del
mineral. En caso de que la calidad del mineral sea lo más importante, entonces los planos
deben mostrar isogramas de los elementos de la calidad, luego esta información puede ser
combinada a fin de determinar no solamente el tipo y tamaño del equipo minero requerido,
sino también el tipo y tamaño del equipo de procesamiento y beneficio. En caso de que el tipo
y la cantidad de la roca de sobrecapa sea lo más importante, entonces las isópacas pueden
mostrar el espesor y profundidad de la roca o también se puede mostrar esto en secciones
transversales, y a partir de esta información se puede determinar el tipo y tamaño del equipo
de perforación requerido. En evidente que en la mayoría de los casos se requerirá de una
combinación de las técnicas anteriormente mencionadas, lo que significa que el ingeniero
deberá calcular las áreas reales a ser minadas anualmente a fin de cumplir con el tonelaje
requerido por la mina. Posteriormente, esta información será básica para determinar el
tamaño del equipo, los costos de capital, los costos operativos y los costos totales del
proyecto.
SECCIONES TRANSVERSALES
Las secciones transversales son comúnmente utilizadas a fin de visualizar la tercera dimensión
del terreno, son una herramienta valiosa y a menudo esencial en la estimación de minado en
yacimientos estratificados o cuerpos mineralizados irregulares. Generalmente, en la etapa de
perforación de exploración o en el programa de desarrollo y ya que el rumbo o buzamiento del
yacimiento o la actitud de un depósito irregular solamente pueden ser esbozados, la
perforación subsecuente se ejecuta en un patrón que permita la construcción de secciones
transversales, pasando a través de líneas de taladros normales a el rumbo o a través de
secciones en planta más pequeñas de una masa mineralizada. Las secciones transversales
pueden construirse para mostrar la estructura geológica, la composición de la sobre capa, la
clasificación mineralógica de los estratos o zonas, los análisis químicos, datos de pruebas de
concentración, clasificación de mineral o desmonte derivados de tales datos.
La anterior figura muestra un ejemplo de una sección transversal construida por un ingeniero
de minas. La sección muestra una formación de hierro (taconita) con sus respectivas
concentraciones de mineral. Un espaciamiento regular de las secciones transversales facilita el
cálculo de volúmenes y la conversión a toneladas, estas labores se pueden ejecutar
manualmente mediante el uso de planímetros y cálculo de triángulos para determinar los
límites de influencia (usualmente a media distancia entre las secciones).
PLAN DE MINADO
El plan de minado puede ser mostrado en el plano detallado de mina y/o en los cortes o
secciones transversales. Generalmente debe mostrarse el avance del minado con la simbología
apropiada o por fases de volumen o tonelaje, junto con las rutas requeridas para el transporte,
conexiones de energía, conexiones de agua, y otras necesidades, las que fueron mencionadas
en el plano general de mina. Así mismo se deben mostrar con el detalle adecuado el plan de
drenaje, las áreas de echadero y relavera, como también la ubicación de las subestaciones y
líneas de distribución primaria y secundaria.
PLANTA
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ACARREO
Las instalaciones de acarreo con de vital importancia en cualquier operación minera, las cuales
pueden incluir: rutas para los camiones, vías férreas, fajas transportadoras, cable carriles,
tuberías de transporte, o combinaciones de todos estos. Cada uno de ellos debe ser ubicado
teniendo presente que es necesario minimizar las distancias de acarreo en base a limitaciones
de pendiente y alineamiento de acuerdo al tipo de equipo a ser utilizado. Las instalaciones de
acarreo deben ser planificadas para servir al mayor tonelaje con la menor cantidad de
movimiento. Se deberá diseñar el tipo, tamaño y capacidad de las instalaciones y unidades de
acarreo para cubrir las necesidades determinadas en los cálculos del plan de minado final. En
caso de ser necesario el empleo de fajas transportadoras, se deberá diseñar las rutas de
construcción y servicio de dichas instalaciones.
El objetivo de esta fase del estudio es combinar la mayoría de los elementos económicos en un
óptimo plan general de minado. Después de seleccionar el plan de minado y determinar los
límites económicos, se deberá elaborar una lista de equipo a fin de satisfacer los
requerimientos de capacidad y volumen y disponer unidades de repuesto.
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laboratorios, plantas piloto o plantas prototipo en caso de que el problema de beneficio sea
inusualmente diferente, P.ej. una extracción diferencial para una combinación atípica de dos o
más minerales. El método de tratamiento seleccionado es trasladado luego a un diagrama de
flujo balanceado, tomando en cuenta la capacidad práctica de la planta en relación con la
productividad de la mina. Con esta información a mano, se puede seleccionar el número
tamaño y tipo de equipo posibilitando el diseño inicial de la planta de beneficio, fuentes de
agua y zonas de deshechos a partir del cual el evaluador podrá estimar el costo total de capital
y los costos operativos para el procesamiento requerido.
TRANSPORTE
Ya se han tratado los diferentes tipos de transporte disponibles para el movimiento del
producto final hasta el punto de consumo. Como elemento importante en la evaluación de un
proyecto minero se debe tomar una decisión respecto al tipo o tipos de transporte a ser
empleados. Se deberán comparar los diferentes medios de transporte disponibles en la mina o
en la planta de procesamiento con los medios de transporte disponibles por el consumidor; en
caso de que se tengan varias opciones, se deberá calcular el costo de entrega de cada método
o combinación de ellos, incluyendo los costos de estiba y desestiba y las tasas de transporte.
Por ejemplo, podría ser preferible el transporte por camiones aun así el costo de acarreo fuese
mayor que el obtenido mediante un acarreo mediante trenes en caso se obtuviese un menor
costo de descarga de los camiones tal que compensase los costos de transporte. Otros factores
pueden influenciar la selección, por ejemplo; la entrega de un producto mediante una tubería
puede no ser satisfactoria debido a la adición de humedad, mientras que en otros casos esta
podría ser preferida debido a un menor costo de capital.
INVESTIGACIÓN DE MERCADO
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MISCELÁNEOS
Para una completa evaluación, aparte de los costos de inversión y operación de la explotación
y el beneficio hay un número de elementos y factores de costos que afectan a estos, algunos
de los cuales no pueden controlarse, pero si deben ser determinados o estimados y tomados
en cuenta, estos son:
EVALUACIÓN PRELIMINAR
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Los procedimientos y técnicas descritos a continuación tratan acerca del desarrollo del reporte
de factibilidad para consideración de gerencia. Todos los factores de costos que hayan sido
anticipados son presentados en forma de tabla en un reporte o proforma financiera de
ingresos, incluyendo las cargas de depreciación y costo o porcentaje de agotamiento del
recurso minero, de acuerdo a la elección efectuada. Se deben incluir dentro de los costos las
tasas de interés en caso de que el proyecto no sea completamente financiado con fuentes
propias. Lo anterior puede llevarse a cabo de varias formas a elección de la empresa. Dicho
estimado de ingresos a fin de determinar la utilidad proyectada en forma de retorno de
capital, años para recuperar la inversión en función al flujo de caja neto, utilidades como un
porcentaje de las ventas anticipadas, utilidad potencial en relación a la experiencia de la
empresa o expectativas futuras. En la siguiente tabla se muestra un estimado de ingresos para
un proyecto minero.
Obviamente el estimado de ingresos deberá reflejar los hallazgos del estudio de mercado, en
tanto sean aplicables, y deberán reflejar las mejores opiniones disponibles en finanzas e
impuestos. En grandes empresas el desarrollo de los costos, ingresos e información acerca de
los impuestos puede dividirse entre varios departamentos especializados, siendo de
responsabilidad del gerente financiero la revisión de los mismos.
Hay pocos proyectos mineros que no tienen riesgos o estos son muy pequeños. Se han
desarrollado muchas fórmulas a fin de incorporar en el estudio a los riesgos, particularmente
en referencia a las tasas de interés del capital invertido. Pero la alta gerencia es la que
finalmente toma la decisión de proceder o no con el proyecto minero y debe tener la
experiencia y la capacidad de evaluar los peligros asociados con su campo de actividad, de
acuerdo al tipo de mineral a explotarse. La decisión de proceder con el proyecto o, en esta
etapa, de asegurar los fondos para un estudio más refinado de los estimados y planes
conducentes a la consecución del capital, se basa fundamentalmente en aceptar la credibilidad
en la información y en la evaluación preliminar.
56
Minería Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
Tabla de contenido
Tabla de contenido.....................................................................................................................58
Introducción ...............................................................................................................................60
Bancos ....................................................................................................................................79
58
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Mina .................................................................................................................................126
Concentradora .................................................................................................................127
Refinería ...........................................................................................................................127
Bibliografía ...............................................................................................................................144
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Introducción
El diseño de una mina a tajo abierto es una de las actividades más importantes dentro del
planeamiento estratégico de mina es el diseño operacional del tajo, cuyo objetivo es el de
maximizar el retorno de la inversión o el VAN de la operación. Este diseño operacional no solo
proporciona las reservas económicas a explotar, sino la forma de la mina al final de su vida en
cada banco de explotación, la pendiente de los taludes en diferentes niveles, el tonelaje de
material estéril a extraer, la ubicación del tonelaje y ley que suministrará la mayor
rentabilidad.
Para el diseño óptimo del tajo abierto es necesario que el algoritmo a aplicar seleccione los
bloques con ley que puedan pagar la extracción del material estéril que la recubre, respetando
las condiciones de estabilidad de los taludes indicados.
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
Un software de alta versatilidad presenta como resultado en un solo proceso de cálculo varios
diseños de mina, cada uno diferencia del parámetro (Pit(i)), que está en función de los costos
de mina, planta, precios de metal y recuperación.
Considerando las variables que intervienen en el cálculo del cut-off, se entiende que es posible
diseñar pits anidados que están en función de las variables que determinan el cut-off. Por lo
tanto, cada Pit es función del precio (P) del metal, recuperación (R), tonelaje (T), ley del metal
(L) y costos (C).
En la siguiente figura se muestra como incrementando el valor del precio del metal se puede
lograr que se vuelvan económicas las profundidades de un pit. Lógicamente está en relación
con la presencia de una buena ley y a la relación estéril/mineral.
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
Si se observa un depósito con recursos, se puede realizar un gran número de diseños que
generarán un tonelaje de minado y una rentabilidad, según la Figura 2.4 podremos encontrar
un tonelaje (t) que proporcionara una rentabilidad (r), para cualquiera de los puntos que se
encuentran por debajo de la curva.
Si se evalúa la rentabilidad de un proyecto que tiene como máximo 120 millones de toneladas,
la rentabilidad puede partir desde valores muy bajos (para mínimos tonelajes) como indica la
curva, para luego incrementarse gradualmente hasta un máximo, luego del cual la rentabilidad
va decreciendo.
Es interesante imaginar que los puntos por debajo de la curva también son relaciones que
pueden presentarse entre valores de tonelaje y la rentabilidad, estos puntos debajo de la curva
definitivamente no constituyen valores óptimos para cada tonelaje total a producir en el
proyecto. Probablemente estos valores debajo de la curva podrían ser utilizados en los casos
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
La cantidad de puntos existentes por debajo de la curva es muy grande. Los diseños óptimos
de tajos abiertos que se pueden encontrar con un software especializado se ubican en el borde
superior de la curva (puntos a, b, c, d, e, f, g, etc.), de los cuales el óptimo se encuentra entre
los puntos (e) y (g).
El hecho de conocer la mayor cantidad de opciones de optimalidad para distintos valores del
parámetro Pit(i) nos permite definir un espectro de opciones de pits óptimos que contribuyen
a definir mejor el horizonte de trabajo principalmente en periodos de inestabilidad de los
precios y costos. En todo proyecto que involucra inversión y riesgo es necesario contar con un
análisis de sensibilidad de los retornos de inversión acorde a las fluctuaciones de precios y
costos.
Según Bhattacharya (Bhattacharya, 2004), el propósito final del diseño del tajo es:
El proceso de diseño será iterativo - el diseño puede necesitar de varios intentos para llegar a
un diseño final satisfactorio. Este puede necesitar ser hecho de abajo hacia arriba, de arriba
hacia abajo, o una combinación de ambos.
Se requiere la habilidad para decidir entre los muchos factores que compiten entre sí y crear
buenos diseños. La práctica y experiencia permiten obtener un mejor diseño más rápidamente
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
El documentar los principios y criterios de diseño ayudará al equipo y a los futuros diseñadores
del tajo. Además, se deben tomar notas durante los pasos de diseño (que ayudarán a la
documentación final y capturarán los pasos que funcionaron y los que no funcionaron).
Al tener bancos múltiples para el minado, se asegura la suficiente longitud de cara para evitar
interrupciones en la producción. Después de que el avance del desbroce muestre el depósito,
existe una coordinación entre el minado y el desbroce, de tal manera que los ingresos por
mineral reembolsarán los costos de remoción del material estéril, mientras se alcanzan al
mismo tiempo los objetivos de largo plazo con respecto a los límites del tajo.
Antes de iniciar con el diseño de un tajo, se deberán conocer los parámetros generales de
diseño del mismo por tipo de material y/o dominio geotécnico. Específicamente se requiere
determinar lo siguiente:
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¿Cuál es la relación marginal de desbroce por tonelada de mineral y la profundidad máxima del
tajo?
Paso 1: Se calculan los ingresos por tonelada de mineral. La ley “in situ” de mineral es de 0.3%
de U3O8, la cual en el transcurso de la operación minera se diluye con 20% de desmonte, p.ej.,
para extraer la misma cantidad de U3O8 se debe extraer 1.2 t en vez de 1 t. De la ley 2in situ”
solamente se recupera 85% durante el beneficio, tal es así que el retorno por tonelada de
mineral a un precio de 20 $/lb de U3O8 (factor de conversión de % → 22.046) e:
0.3 0.85
22 .046 20 = 93.7 $/t
1.2
Paso 2: De este ingreso neto se tienen que deducir los costos y sobrecostos. Por lo tanto, el
saldo será de:
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Por lo tanto, el cálculo de la relación marginal de desbroce, se basa en costos operativos del
tajo de 55.7 $/t; p.ej. todo el dinero adicional puede ser usado para la explotación. Con costos
de minado de 1.5 $/t quiere decir que podemos mover 37 t de material, es decir tenemos una
relación de desbroce de 36:1.
Paso 3: Ahora se puede determinar la máxima profundidad del tajo en la Figura 5. Para un
incremento ΔhE = 1 m, el área correspondiente de desmonte en la sección de la figura es:
h× 2× 2 = 2h
8× 2 ×1
A 36 2h
= = ó h = 203.7 m
E 1 8 2
8× 2 × 200 = 2,267.7 m2
h 2 h 2
= h = 2002 = 40,000 m2
2
40 ,000
= 18: 1
2,267 .7
Debido a la baja densidad del uranio, la densidad del desmonte y mineral es prácticamente
idéntica.
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totales son $6.80/t, el costo de extracción del desmonte es de $7.50/ton. La recuperación total
es de 92%.
Esto significa que 0.3 es la máxima relación de desbroce posible, lo que quiere decir que las
utilidades generadas por una unidad con 0.6% de cobre igualan a los costos de 0.3 unidades de
desmonte sin arrojar utilidades (Utilidades = Costos).
Ejemplo 3. Asuma un costo de explotación subterránea de $2.00 por tonelada de mineral para
un yacimiento particular; asuma también un costo de explotación superficial de $0.30 por
tonelada de mineral y de $ 0.35 por tonelada de desmonte para el mismo yacimiento. La
relación de desbroce indicada para una operación a tajo abierto que determina el costo
diferencial límite entre los dos métodos de minado se calcula a continuación:
$2.00 − $0.30
= 4.86
$0.35
Únicamente la porción del yacimiento cuya relación de desbroce que no supere 4.86: 1 debería
ser explotada mediante tajo abierto. Sin embargo, esta relación no debe ser un promedio que
se obtenga de la inclusión de relaciones menores en un sector del tajo y relaciones mayores en
otro; en todos los casos debe ser la máxima relación posible. Esta es la relación en el límite
final del tajo, p.ej. el último corte desde la cresta hasta el pie de la cara final del tajo.
En la mayoría de los diseños de tajo, la relación límite de desbroce es mucho menor que la
máxima relación posible. De la misma manera, la relación límite nunca se presenta en las
relaciones de desbroce operativo anuales. En los años iniciales de la operación se pueden
obtener mayores relaciones de desbroce y menores relaciones de desbroce en los últimos
años de la operación. Esto es el resultado de operar a ángulos de talud mucho más echados
que los taludes en el límite final. Los menores taludes permiten bancos más anchos y mejoran
la economía de las operaciones.
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Los elementos clave en el diseño del tajo abierto a fin de acomodarse a los límites finales de
este son relación de desbroce, ángulo de talud del tajo y ley de corte. La relación económica de
desbroce es la relación final de desbroce en los límites finales del tajo. El ángulo de talud del
tajo es el talud total desde el pie del banco más profundo hasta que los límites del tajo
intercepten la superficie. La ley de corte es el punto límite entre el costo de minado
(excluyendo el costo de desbroce), beneficio y comercialización y el precio de mercado del
metal recuperable en el mineral. La optimización de la interrelación entre estos elementos es
el objetivo del diseño de una operación superficial.
Relación de desbroce
Para diseñar un tajo se necesita determinar la relación límite de desbroce. Esta relación es
hallada solamente en la superficie del tajo final y no debe confundírsela con la relación total de
desbroce, la cual es siempre menor; de otra manera la operación no arrojaría ganancias. La
relación límite de desbroce se determina mediante la siguiente fórmula:
En donde el costo de producción es el total de todos los costos hasta la obtención del metal
refinado, sin incluir los costos de desbroce. Se deben desarrollar diferentes relaciones a fin de
contemplar variaciones en la ley del mineral y el precio de mercado del producto final, tal
como se muestra en la Tabla 1.
Nótese que el tonelaje promedio para producir una tonelada de mineral es de 15 en minas
superficiales de carbón, pero solamente de 2.6 en total para mina superficial. Pero este es
solamente de 0.1 en minas subterráneas de carbón y de 0.07 en total en mina subterránea.
Debido al desmonte asociado con la minería superficial, el costo de explotación de una
tonelada de material debe ser mucho menor que el mismo en mina subterránea (Hartman &
Mutmansky, 2002).
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La Figura 6 muestra la aplicación de la fórmula para varias leyes de mineral de cobre y varios
precios de mercado para el mismo.
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Valor recuperable / ton min − Costo de produccion / ton min eral + Utilidad min ima / ton min eral
Costo de desbroce / ton de desmonte
Se debe tener cuidado al momento de emplear todos estos costos. Es obvio que e deben
emplear todos los costos directos. Los costos de depreciación también deben incluirse, sin
embargo debe asumirse que esta ha sido completamente recuperada al momento en el que el
tajo alcanza su límite final; de excluir la depreciación estaríamos expandiendo el límite del tajo
por encima de su cut-off económico. De otra manera, los costos financieros y de
preproducción no deberían ser incluidos, esto debido a que tales costos son recuperados antes
del término de la vida de la mina.
Secuencia de desbroce
Cada uno de estos esquemas tiene sus propias ventajas y desventajas. El método de la relación
de desbroce decreciente eleva la meta de producción de desmonte al inicio de la vida de la
mina, lo cual puede afectar adversamente el flujo de caja en los primeros años. La relación de
desbroce creciente genera un gran flujo de caja en el periodo inicial y cubre el riesgo, es por
esto que es preferida en la mayoría de los casos. Algunas veces no es práctico operar un gran
número de bancos y frentes, pero al mantenerlos abiertos (activos) se facilita el cabeceo del
mineral. El método de relación de desbroce constante es un compromiso entre las condiciones
extremas relacionadas con los dos anteriores métodos. En la práctica, se prefiere un método
que genere un elevado flujo de caja, con un incremento gradual de recursos (personal y
equipo) al inicio de la mina, y una disminución gradual de estos hacia el final de la vida de la
mina.
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
Ángulos de talud
Los taludes en minas a cielo abierto deben considerarse como estructuras geotécnicas. Por lo
tanto, su diseño e implementación deben llevarse a cabo teniendo en cuenta todos los
aspectos técnicos, económicos, medioambientales y de seguridad.
Durante los estudios iniciales de factibilidad de una mina superficial, se requiere estimar
ángulos seguros para el talud a fin de calcular la relación de mineral a desmonte y así mismo
minimizar el volumen de material a ser excavado y por lo tanto el costo final del proyecto. En
esta etapa, la información estructural disponible para efectuar tales cálculos proviene
únicamente de los testigos de perforación diamantina obtenidos para propósitos de evaluar el
mineral.
1. Caracterización del macizo rocoso a partir del muestreo y análisis de datos geológicos,
geomecánicos e hidrogeológicos.
2. Determinación de los potenciales mecanismos de deformación y falla, así como su
modelamiento numérico.
3. Diseño del talud y determinación de los métodos de reforzamiento y monitoreo.
Después de definir las relaciones de desbroce se debe determinar el talud final del tajo. El
ángulo del talud es un factor crítico, pero desafortunadamente, durante las etapas iniciales del
diseño de tajo, es difícil de determinar. A fin de minimizar la relación final de desbroce, el talud
debe ser tan parado como sea posible y aun así permanecer estable. Factores clave son las
estructuras geológicas tales como junturas y planos de deslizamiento, fallas, resistencia de la
roca, etc. A partir de la información geológica disponible se debe analizar estos factores de la
manera más precisa posible.
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Si la información geotécnica está garantizada, el diseño del talud puede optimizarse en base a
un análisis económico que considere los beneficios y riesgos para mayores incrementos del
ángulo del talud.
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Durante la etapa de desbroce y los primeros años de producción, los taludes operativos deben,
sin embargo, ser lo más parados posibles y aun así proporcionar un banco lo suficientemente
amplio para una óptima eficiencia operativa. En esta etapa, la minimización del desbroce tiene
un efecto significativo en la economía total de la operación (Hustrulid & Kuchta, 2006).
Cummins & Given (1973) explican que el talud de trabajo, usualmente a menor ángulo que el
talud final, debe ser mantenido al mayor valor seguro posible a fin de incrementar la eficiencia
y reducir los costos operativos. Esto es especialmente importante en donde se emplearán
equipos de grandes dimensiones.
La Figura 9 muestra la geometría de un tajo abierto. Los ángulos de talud del tajo se pueden
calcular geométricamente tal como se describe a continuación.
N B BH
Angulo total del tajo (π) = tan-1
(N B − 1)BW + N B BH + RW
tan(B A )
En donde:
Θ = Angulo de talud del tajo
NB = Número de bancos
BH = Altura de banco en metros
BW = Ancho de banco en metros
BA = Angulo de banco en grados
RW = Ancho de la rampa en metros (si esta es interceptada)
Ejemplo 4.-
Calcular el ángulo de talud del tajo dados los siguientes datos:
Los límites del tajo están en función del macizo rocoso alrededor del yacimiento, mientras que
el ángulo del tajo en operación (Fig. 9.a) está en función del número de bancos en operación
en un determinado momento y también de la altura de banco. Esto está también determinado
por la rampa, en caso de que esta atraviese el banco (Figs. 9.c y 9.d) y también por las
condiciones del yacimiento en términos de resistencia, presencia de discontinuidades y agua.
Cualquier yacimiento seco y resistente, sin discontinuidades posibilitará mayores alturas de
banco; por lo tanto, un mayor ángulo del tajo en operación. Esto influencia la productividad
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del tajo en operación debido al hecho de que mientras más alto sea el banco, mayores serán
las dimensiones del equipo en operación, lo cual resulta en una mayor productividad y
menores costos totales. En la Figura 9.a, se muestra el talud del tajo al inicio de la operación;
cuando este alcanza el final de la vida de la mina, se denomina ángulo total del tajo 1. El valor
de estos estará influenciado por el ancho de la berma de seguridad y la altura de banco.
Hudson (1992) menciona que existen 12 parámetros determinantes, los cuales se listan a
continuación, y sus intersecciones forman una matriz de 12 × 12. Esto significa que pueden
existir 112 permutaciones y combinaciones p.ej. escenarios que pueden influenciar el valor del
ángulo total del tajo.
En la práctica puede no ser factible estudiar en detalle cada uno de estos doce parámetros, por
lo que Rzhevsky (Rzhevsky, V,V.: Opencast Mining - Technology and Integrated Mechanization,
Mir Publishers, Moscow, 1987) propone la Tabla 2 a fin de seleccionar el talud del tajo en
diferentes situaciones, la cual puede ser de utilidad e importancia. En esta tabla no se ha
considerado la presencia de agua, de haberla, y por lo tanto el talud del tajo debe reducirse
aún más bajo condiciones de presencia de agua.
Las razones por las cuales puede fallar el talud del tajo son:
1
N.T. Límites finales del tajo.
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El ángulo del banco (el ángulo promedio que la cara forma con la horizontal) puede variar
considerablemente con las características de la roca, orientación de la cara y las prácticas de
voladura. El talud del banco está determinado por las características físicas de la roca que lo
forma y las condiciones de operación. Hustrulid & Kuchta (Hustrulid & Kuchta, 2006)
mencionan que este generalmente se encuentra entre los 60° y 90°. Un valor inicial típico
puede ser de 65°. Este debe ser empleado con cuidado ya que el ángulo de la cara del banco
puede tener un efecto determinante en el talud total del tajo.
Este es otro parámetro ampliamente discutido, su determinación debe ser exacta, pues está
directamente relacionada con la relación de desbroce y con los costos de minado. Tener un
grado de error en el diseño del talud significa la remoción de miles de millones de toneladas, lo
cual tiene directas consecuencias en la economía de la operación minera. Por lo tanto, el
diseño del límite final del tajo está determinado no solamente por la ley y distribución del
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mineral y los costos de producción, sino también por la competencia del macizo rocoso y su
estabilidad.
El talud del banco debe ser mantenido vertical, sin embargo, en la práctica esto es difícil de
mantener. Tatiya (2005) indica que este depende del tipo de estrato. Usualmente en la
práctica este ángulo se mantiene entre 60° - 80° para los bancos de trabajo o activos y entre
45° - 60° para los bancos que no están en trabajo.
Este factor también se decide en función a la estabilidad geotécnica de las rocas en la mina, el
alto del banco, el talud del banco. El talud total del tajo (Pit) es siempre menor al talud del
banco. El talud es la máxima preocupación en mecánica de suelos y de roca, la práctica común
en roca consolidada es la siguiente (Pfleider, 1972).
La relación entre la estructura y la estabilidad del talud se muestra en la Figura 10. Esta es
tomada de una situación real en una formación rocosa muy competente (la mayoría de los
tajos en depósitos de cobre porfirítico requieren de taludes mucho menores). El talud final fue
diseñado a 53°, con los taludes de los bancos individuales a 1/4:1 (76°). Se diseñaron bermas de
seguridad de 40 pies, con un espaciamiento vertical de 80 pies. Un estudio detallado de la
estructura, después de que progresara la explotación (con ángulos de talud mucho más bajos)
mostros planos de discontinuidades prominentes a 73 °. Se evidenció que 76° asumidos para el
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talud del banco fallarían a un talud de 73°. En un determinado periodo de tiempo el área
sombreada a-b-c caería como detrito en la berma de seguridad, posiblemente cubriéndola
completamente. Por lo tanto, el talud final fue diseñado a 50° para conseguir un talud de
banco estable a 73° y mantener una berma libre de detrito.
Como herramienta de diseño para el talud final podemos mencionar la mecánica de rocas y de
suelos. Lo más importante de esta herramienta es que ayuda a predecir las fallas de talud
antes de que estas se hagan visualmente aparentes en el diseño de taludes seguros.
Ángulo inter-rampa
Un adecuado diseño y evaluación del catch bench, ángulo de talud inter rampa, y ángulo de
talud del tajo, de manera individual o en combinación es necesario para una excavación
exitosa y la optimización económica del talud.
Los ángulos inter rampa pueden ser determinados con precisión a partir de una cuidadosa
construcción del modelo de geología estructural, anotando la ubicación y orientación de los
mayores planos de debilidad para las condiciones de excavación.
Sin embargo, Mathis (Mathis, 2009) sostiene que el diseño del ángulo del talud interrampa es
mucho más complejo ya que se debe incorporar las fallas intermedias, el tipo de fabrica de las
rocas y en algunos casos las características de la resistencia de la roca.
Una vez que se definan los parámetros de altura de banco (h B), ángulo de la cara del banco
(αB), ancho del banco (b), el ángulo inter rampa se define por:
hB
αB = tan-1
b + hB
tan( B )
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Bancos
Extractado de: (Hustrulid & Kuchta, 2006)
El componente básico para la extracción en tajo abierto es el banco, cada banco tiene su
superficie superior e inferior separadas por una distancia H igual a la altura de banco. La
superficie inclinada expuesta es llamada la cara del banco. Esta es descrita por al pie, la cresta
y el ángulo del banco α (el ángulo promedio que la cara hace con la horizontal).
Normalmente la cara del banco es explotada lo más parada posible. Sin embargo, debido a una
variedad de razones hay una cierta cantidad de sobre rotura. Esta se define como la distancia a
la cual la cresta real del banco difiere del valor de diseño. La superficie inferior expuesta del
banco es denominada el piso del banco. El ancho del banco es la distancia entre la cresta y el
pie, medida a lo largo de la superficie superior.
Hay una variedad de bancos. Un banco de trabajo es aquel que está en proceso de
explotación. El ancho que está siendo extraído del banco de trabajo es denominado el corte. El
ancho del banco de trabajo WB se define como la distancia desde la cresta del banco del piso
hasta la nueva posición del pie después de que el corte haya sido extraído (Ver Figura 12).
Después de que se haya extraído el corte queda un banco de seguridad o banco de retención
(catch bench) de ancho SB. El propósito de estos bancos es de:
Algunas veces se dejan bancos dobles a lo largo de la pared final del tajo (Fig. 14). Estos son
bancos del doble de altura, lo que permite, a un ángulo de talud determinado, tener un solo
banco de retención de doble ancho (y por lo tanto tener mayor capacidad de retención). A lo
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largo del contorno final del tajo se debe tener cuidado con la voladura a fin de mantener las
características de la resistencia del macizo rocoso.
Figura 13. Función de los bancos de Figura 14. Bancos dobles en los límites
retención. finales del tajo
Basándose en estudios de caída de rocas realizados por diversos autores, se han formulado
recomendaciones para el diseño de los bancos de retención las cuales se muestran en la Tabla
4 e ilustradas en la Figura 13.
Altura de banco Zona de impacto Altura de berma Ancho de berma Ancho mínimo
(m) (m) (m) (m) de banco (m)
15 3.5 1.5 4 7.5
30 4.5 2 5.5 10
45 5 3 8 13
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Así mismo se deja una berma de seguridad (Fig. 16) en el límite externo del banco a fin de
prevenir que los camiones y otros equipos caigan en el banco inferior. Esta tiene la misma
función que la guarda vía en los puentes y pistas elevadas. Normalmente la pila tiene una
altura mayor o igual que el radio del neumático. Se asume que el talud de la berma será de 35°
(el ángulo de reposo).
En algunas minas grandes se construyen también bermas medianeras en el centro de las rutas
de acarreo.
En la extracción de un corte, las perforadoras trabajan en la superficie superior del banco. Los
cargadores y los camiones trabajan en el nivel del piso del banco. Varios son los factores que
influencian la selección de las dimensiones del banco. La altura del banco es una de las
decisiones más importantes ya que una vez que esta se define, se puede seleccionar el resto
de las dimensiones.
Altura de banco
Hustrulid & Kuchta (Hustrulid & Kuchta, 2006) mencionan que son varios los factores que
influencian la selección de las dimensiones de los bancos. La altura de banco es el parámetro
básico ya que una vez que esta se ha determinado, el resto de las dimensiones depende del
mismo. Una altura bastante común en grandes tajos es de 50 pies (15 metros). Para tajos más
pequeños la altura puede ser de 40 pies (12 metros). Para pequeños depósitos de oro un valor
típico podría ser de 25 pies (7.5 metros). Una guía general es que la altura de banco debe
ajustarse a los equipos de carguío. Cuando se usan palas, la altura de banco debe encontrarse
dentro de la altura máxima de carguío. Para la pala de 9 yd 3 mostrada en la Figura 15, se ve
que la máxima altura de corte es de 43’6” (13 metros), por lo tanto, esta pala puede ser usada
en bancos de 40 pies (12 metros). Como regla práctica se asume que la altura de banco no
debe ser mayor a la altura de la polea de la pluma; operar en bancos más altos ocasiona
colgaduras en la cresta, lo cual representa un peligro para el carguío y las demás operaciones.
La profundidad del cuerpo mineralizado y su inclinación, así como el espesor de la sobre capa
también son determinantes para establecer la altura de banco. La altura de banco depende de:
81
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• Una menor selectividad (la mezcla de minerales de baja y alta ley y minerales de
diferente tipo).
• Una mayor dilución (mezcla de mineral y desmonte).
• Menos lugares de trabajo, por lo tanto, menos flexibilidad.
• Taludes más echados, las maquinas más grandes requieren de un amplio espacio
operativo para trabajar eficientemente.
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Según Pfleider (1972), existe una anchura mínima de banco, medida horizontalmente en
dirección perpendicular a la pared del tajo, para cada altura de banco y conjunto de
condiciones de operación del tajo, cuyo valor se establece en función de los requisitos de
trabajo del equipo de carga y transporte. La anchura también debe ser tal que garantice la
estabilidad de la excavación, tanto antes como después de la voladura, ya que cada voladura
reduce efectivamente el restrictor que sostiene las paredes del tajo a mayor altura. La
voladura debe comenzar siempre en los niveles superiores, procediendo a la profundidad en
progresión desde la parte superior del pozo hasta su fondo, y luego volviendo directamente al
banco superior para repetir el ciclo de arriba a abajo. Debido a los límites establecidos por los
requisitos de la sala de operaciones del equipo y la estabilidad del banco, existe una anchura
máxima del banco que no debe ser superada por ninguna voladura. que no debe ser superada
por ninguna ráfaga.
De lo anterior se desprende que el ancho mínimo del banco de trabajo es la suma de los
espacios necesarios para el movimiento de la maquinaria que trabaja simultáneamente. Es por
ello que este se determina en base a las necesidades de espacio para la operación de los
equipos. El ancho de banco debe ser suficiente para contener gran parte de la roca desplazada
por la voladura y proporcionar suficiente espacio de maniobrabilidad para la excavadora y las
unidades de acarreo. Siempre es necesario considerar una distancia de seguridad de 5 metros
hasta el borde del banco.
Por otra parte, “el ancho de banco deberá ser lo suficientemente amplio como para contener
la mayoría de las proyecciones de roca del disparo y proporcionar especio de maniobra para el
equipo de excavación y las unidades de acarreo” (Hartman & Mutmansky, 2002).
Tratando de relacionar el ancho de banco con la altura de este se puede mencionar que “el
ancho mínimo posible para un banco de 15 de altura es de 8 metros en una configuración de
banco simple, de acuerdo a la ley de minería de British Columbia. Se han incorporado bancos
de 40° en la sobrecapa a fin de acomodar un ángulo inter rampa de 30° para bancos de 8
metros de ancho. Se recomienda un talud de 65° para los taludes en la roca madre. Se puede
aplicar una configuración de doble banco (30 metros de altura) en la roca competente por
debajo del estrato de yeso, a excepción de las zonas oeste y noreste en donde se ha
encontrado roca débil y/o con condiciones estructurales adversas (Knight-Piesold, 2012)”. El
85
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enunciado anterior corresponde a una asesoría de la empresa Knight Piesold para el diseño de
la mina aurífera a cielo abierto New Prosperity de Taseko en Canadá.
El ancho del banco en operación se determina por el espacio requerido para operar el
cargador o pala, las dimensiones de los camiones, de la máquina perforadora y la distancia
mínima de espaciamiento del material después del disparo. En general hay una relación directa
entre el tamaño del equipo y el ancho de banco, altura de bancos. El minado se facilita con
bancos altos.
Ejemplo 5.-
Calcular el ancho de un banco en operación con las siguientes dimensiones de equipo:
Largo del cargador frontal 9866B de 3 yd3 25 pies
Ancho de un volquete Volvo 15 pies
Largo de una perforadora Trackdrill 15 pies
Distancia de espaciamiento del material (Z) 12 pies
Ancho del banco en operación 67 pies ≈ 20 metros
Por lo tanto, Ancho de banco = 3 × Ancho de camión (o ancho del equipo más grande en
operación) + 3 metros.
2
Ancho mínimo de la berma de seguridad de acuerdo al reglamento Ruso.
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El ancho mínimo de las bermas de trabajo está determinado por las necesidades de espacio del
equipo que opera en el banco para hacerlo en condiciones de seguridad y de productividad
óptimas. En la determinación de este parámetro se han tenido en cuenta los siguientes
factores: Distancia de la cresta del banco al eje vertical de la tornamesa, distancia entre el eje
vertical de la tornamesa y el borde de la pista de acarreo, ancho de la pista de acarreo.
El proporcionar suficiente espacio de trabajo para los equipos de carguío es una parte crítica
del planeamiento de una operación a cielo abierto. Se debe tener especial cuidado con una
falta de un adecuado espacio de trabajo, específicamente con los bancos angostos.
Los bancos angostos son una continua causa de problemas para los operadores. Estas zonas
son lentas y dificultosas, originando protestas cuando una cuadrilla es asignada a excavar en
ellas.
Los bancos angostos son el resultado de un pobre planeamiento y tienen los siguientes
impactos en el proceso productivo:
3
Ancho mínimo de la berma de seguridad de acuerdo a Hustrulid y Kuchta.
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https://www.ceaa-acee.gc.ca/050/documents_staticpost/63928/80858/2-2-4_A.pdf
Rutas de acarreo
Las rutas de acarreo son uno de los aspectos más importantes en el diseño de un tajo abierto.
Su diseño debe incluirse en las etapas iniciales del planeamiento ya que estas pueden afectar
significativamente los ángulos de talud y los ángulos elegidos tienen un efecto significativo en
las reservas. La mayoría de las técnicas computarizadas disponibles actualmente para generar
el tajo no tienen facilidad para acomodar la inclusión de los caminos. En los diseños
preliminares se puede emplear el ángulo total del talud sin los caminos. Su posterior inclusión
puede significar una gran cantidad de desbroce adicional o la esterilización de algunas reservas
planificadas. De otra manera, se puede emplear un ángulo de talud más echado, el cual incluye
a los caminos. Esto puede ser demasiado conservador e incluir más estéril del necesario
(Hustrulid & Kuchta, 2006).
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El ancho y la pendiente de las rutas de acarreo dependen de los parámetros operativos de los
camiones y demás equipo de acarreo empleado en la mina. Estas son siempre mayores que el
ancho del banco. Es importante tener presente que las rutas de acarreo afectan
significativamente la relación de desbroce, la cual aumenta cuando:
Así mismo se observa que la relación de desbroce varía inversamente con el ángulo de talud
del tajo. Lo cual ilustra la importancia que tiene el diseño geométrico de las rutas de acarreo
en el retorno de capital.
Hasta hace no muchos años, el acarreo mediante rieles fue el principal factor en las
operaciones a tajo abierto. Debido a las dificultades que ocasionaban las curvas cerradas y las
gradientes elevadas, los planificadores de minas empleaban bastante tiempo en diseñar las
vías. Los equipos de acarreo a neumáticos proporcionan una gran flexibilidad y la habilidad
para superar muchas dificultades resultantes de un inadecuado o pobre planeamiento en las
minas superficiales actuales. Sin embargo, en tanto el tajo se hace más profundo y la presión
para la disminución de costos aumenta, este método a menudo descartado, será nuevamente
tomado en cuenta.
Hay varias interrogantes importantes, las cuales deben responderse al momento de ubicar los
caminos:
1. La primera decisión a tomarse es acerca del lugar por donde el camino saldrá del tajo.
Esto depende de la ubicación de la chancadora y los botaderos.
2. ¿Habrá más de una forma de acceso? Esto posibilita cierta flexibilidad en las
operaciones, pero el costo del desbroce adicional puede ser elevado.
3. ¿Deberían los camiones ser externos o internos al tajo? ¿Deben estos ser temporales o
permanentes?
4. ¿Debería el camino formar una espiral alrededor del tajo? ¿Deberían diseñarse contra
curvas en uno de los lados? ¿O tal vez disponer de una combinación de ambos?
5. ¿Cuántos carriles debe tener el camino? La regla práctica general para un camino con
dos carriles es: ancho del camino ≥ 4 × ancho del camión. El añadir un carril adicional
para facilitar el cruce de los camiones puede acelerar el tráfico, pero a un costo
adicional de desbroce.
6. ¿Cuál debe ser la gradiente del camino? Varios tajos operan a 10% tanto favorable
como desfavorable al acarreo. Se prefiere sin embargo una gradiente de 8% ya que
proporciona una mayor libertad en la construcción del camino y el ajuste de los
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Esta sección no responderá a las anteriores preguntas. El enfoque serán los procedimientos a
través de los cuales se añadirán los segmentos del camino al diseño del tajo. Los
procedimientos pueden ser realizados manualmente o con la asistencia de un programa de
cómputo. Una vez que los caminos han sido añadidos, se pueden emplear varios simuladores
de performance al diseño a fin de evaluar múltiples opciones.
Gradiente de rampa
La pendiente de las rampas está determinada por los requerimientos del equipo y usualmente
se encuentra entre 8 – 15% (5° - 8.5°). Por razones de seguridad y drenaje, las gradientes largas
y pronunciadas deberían incluir una sección de 50 metros de 2% (pendientes de 1° cada 500 –
600 metros de la gradiente pronunciada). Se debe tener cuidado de proporcionar un adecuado
diseño de las curvas horizontales y verticales y una línea de visión a una distancia adecuada, en
los puntos de cruce con otros caminos o vías férreas. Es muy importante disponer de un
adecuado drenaje a lo largo de la vía de acarreo a fin de evitar la saturación del terreno,
deslizamientos y otros problemas. Esto aumenta la vida del camino, se requiere de menos
mantenimiento y mantiene una vía segura. Las vías secas aumentan la vida de los neumáticos y
disminuyen las tensiones en los vehículos.
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Donde:
En la práctica la longitud real de la rampa es mayor que la longitud teórica de la misma, ya que
se debe reducir la pendiente en las curvas, lo cual hace que las rampas sean más largas que las
calculadas teóricamente.
Fuente: http://www.world-of-stocks.com/hp_content/pdf/Mcintosh%20Engineering_RulesofThumb.pdf
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Paso 1. El diseño de este tipo de camino se inicia en el fondo del tajo. Debido a razones que
serán discutidas posteriormente, el punto donde la rampa se une con la primera cresta debe
ser elegido con cuidado. En este caso, la rampa continuará hacia los niveles inferiores de
extracción a lo largo de las paredes norte y este, tal es así que se ha seleccionado el punto A en
la Figura 23.
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Paso 2. Ahora pueden determinarse los puntos en donde la rampa se encuentra con las
crestas. Ya que la altura de banco H es de 30 pies y la gradiente del camino es de 10%, la
distancia horizontal D circulada por un camión hasta el siguiente nivel superior es de:
100 H 100 30
D= = = 300 pies
G(%) 10
El punto B en la cresta del siguiente banco superior se ubica midiendo los 300 pies de distancia
con un escalímetro o mediante el arco de un compás. Los puntos C y D se ubican de la misma
manera.
Paso 3. Los segmentos de la línea de cresta que indican la ubicación del camino se añaden
formando ángulo recto con las líneas de cresta en vez de formar ángulo recto con la línea del
camino. Por lo tanto, estos tienen una longitud (Wa) que es mayor al ancho real del camino
(Wt). Tal como se puede observar en la Figura 24., el angulo (θ) que el camino forma con las
líneas de cresta es:
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Por lo tanto, el ancho aparente del camino Wa (el cual es mostrado), se relaciona con el ancho
real del camino mediante:
Wt
Wa = = 1.02 Wt = 1.02 × 90 = 92 pies
cos
Para la mayoría de los propósitos prácticos, se obtiene un resultado con poco error
empleando:
Wa ≈ Wt = W
Las líneas de longitud W dibujadas perpendiculares a las líneas de cresta desde los puntos A, B,
C y D han sido añadidas en la Figura 25a. Además, se han añadido pequeños segmentos
paralelos las crestas e iniciando al final de estas líneas. La línea a – a’ es una de estas líneas.
Paso 4. La línea a – a’ se extiende hacia el extremo este del tajo esta corre primero para lela a
la línea de la cresta previa, pero en tanto se aproxima el fin del tajo, esta línea es curvada a fin
de obtener una transición suave con la línea original de la cresta. Esta línea se muestra en la
Figura 25b. El encargado del diseño tiene una flexibilidad acerca de cómo obtener esta
transición. Una vez que se toma esta decisión, las líneas restantes se dibujan paralelas a la
primera. Los resultados se muestran en la figura 25c.
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Paso 5. Se remueven ahora las líneas extrañas pertenecientes al diseño original. Las líneas de
cresta resultantes, con la rampa incluida se muestran en la Figura 26.
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Paso 6. La rampa se extiende desde la cresta del banco más bajo hasta el fondo del tajo. Esto
se muestra en la Figura 27. Las líneas del pie han sido añadidas a fin de ayudar en el proceso.
En la Figura 27 los taludes han sido sombreados a fin de apoyar la visualización. Los límites de
los caminos (EDR) mostrados son también líneas de cresta.
En la sección anterior se describió la adición de una rampa en espiral dentro de los límites
originales del tajo. Esta adición implica que algo del material originalmente programado para
explotación será dejado en el tajo. Para el caso descrito en esta sección, en donde la rampa se
añade fuera del diseño inicial del tajo, se deberá remover material adicional. Se empleará el
mismo tajo con cuatro bancos descrito anteriormente.
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Paso 1. El proceso de diseño se inicia en la cresta del banco más elevado. Se debe decidir cuál
ha de ser el punto de ingreso de la rampa, así como la dirección de ingreso. Tal como se
muestra en la Figura 28, el punto de acceso será A en la dirección mostrada. La ubicación de la
planta y los botaderos son los factores más importantes en la selección del punto de ingreso
de la rampa. Desde este punto se traza un arco de longitud L igual a la proyección en plano de
la longitud de la rampa entre los planos. Este arco determina la posición del punto B. desde el
punto B se traza un arco de longitud L, determinando el punto C, etc.
Paso 3. Iniciando en la cresta más profunda, se dibuja una curva suave que conecte la antigua
cresta con la nueva. Esto se muestra en la Figura 30.
Paso 4. Los siguientes segmentos de línea de las nuevas crestas son dibujados paralelos a la
primera cresta, procediéndose hacia arriba desde el banco más profundo.
Paso 6. Se añaden las líneas del pie al este del banco más profundo y la rampa al fondo del
tajo. En la Figura 32 se han sombreado los taludes a fin de visualizar la rampa.
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Asegurar el suficiente espacio en las contra curvas para disponer de un área plana en
las curvas, de tal manera los camiones no tienen que operar en elevadas gradientes
dentro de las curvas.
Considerar la dirección del tráfico.
Considerar los problemas de visibilidad que pudieran tener los operadores.
Considerar el efecto de las condiciones atmosféricas en el diseño de la vía (hielo, lluvia,
etc.).
En esta sección se describirán los pasos requeridos para añadir una contra curva al tajo
mostrado en la Figura 21. La contra curva será ubicada entre el segundo y el tercer banco en la
pared norte del banco.
Paso 1. El diseño iniciara a partir del fondo del tajo. En este caso la rampa se mueve hacia la
pared del tajo tal como fue diseñada. La Figura 33 muestra el tajo modificado con las líneas de
cresta de los bancos 4 (más profundo) y 3. Este es el mismo procedimiento que el empleado en
la rampa en espiral. La altura de banco se ha seleccionado en 30 pies y la gradiente del camino
es de 10%. Por lo tanto, la distancia R es de 300 pies.
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L1 + L3 = R – L2
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En este caso particular L1 0 0.5R = 150 pies. Ya que L2 = 60 pies, entonces L3 = 90 pies. El centro
C está ubicado a L2/2 = 30 pies de las 3 líneas de construcción. Al final de L 3 se dibuja una línea
vertical que corresponde al ancho del camino W.
Paso 3. En la Figura 35, se dibuja la curva con radio R 2 = L2/2 a partir del punto C. Esta será el
radio interno de la curva. Esta debe compararse con el radio de giro de los camiones a
emplearse. También se dibuja un segundo radio R3 = 2W a partir del punto C. la intersección de
esta curva con la línea horizontal dibujada a partir de C se convierte en un punto en la cresta
del banco 2. Se debe hacer notar que el diseño real podría emplear diferentes valores de R 3 a
los recomendados aquí, los cuales son valores típicos. Se añaden las porciones apropiadas de
la línea de cresta del banco 2 a las distancias apropiadas.
Paso 4. Ahora se añade una curva suave desde la curva a – b, a través de la cresta CP, hasta la
línea c – d. El encargado del diseño puede emplear su criterio acerca de la forma de esta línea
de transición. La Figura 36 muestra los resultados. Las líneas alrededor del punto C
simplemente representan el límite del camino (EOR en inglés).
Paso 5. Luego se añade la línea de cresta para el banco 1, la cual es paralela a aquella dibujada
para el banco 2 (Figura 37).
Paso 6. Se dibuja la línea de la cresta final (Figura 38). Tal como puede observarse la contra
curva ocupa una amplia área en una longitud relativamente corta. Es por ello que, lógicamente
puede ser ubicada en una porción plana del talud total del tajo.
Paso 7. Se dibujan los pies y se añade la sección inferior de la rampa (entre la cresta 4 y el
fondo del tajo) (Figura 39).
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En la Figura 42 se muestra el mismo tajo con el camino. Las regiones sombreadas muestran la
diferencia entre las secciones A, B, C, D y E con y sin el camino.
Debido a que el camino está orientado a un ángulo Ɵ con respecto al eje del tajo, la longitud
proyectada a lo largo del eje es:
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El área del camino para cada sección se muestra en la Figura 43. Las zonas sombreadas tienen
la misma área.
A = WA × Altura de banco
Estas pueden alinearse tal como se muestra en la Figura 43a. Estas a su vez pueden ser
trazadas tal como se muestra en la Figura 43b.
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El volumen en la rampa es aquel de un sólido triangular de ancho WA, longitud L2 y una altura
que varía linealmente desde 0 en hasta la profundidad del tajo (Ver Figura 44).
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WT
WA =
cos
Para un factor de tonelaje de 12.5 pies3/tc hay un total de 518,400 tc afectadas por el camino.
Nota.- Para mayor información sobre la construcción de caminos referirse a (Hustrulid &
Kuchta, 2006)
Ley de corte
Lang (2015) define la ley de corte como el límite, que es el foco principal de atención, siendo
este el que distingue el material dentro de un cuerpo mineralizado que debe ser extraído y
reagrupado del resto.
Así mismo, Johnson (1968) define el concepto de ley de corte como un criterio económico, el
cual es empleado en minería a fin de discriminar entre desmonte y mineral; propone además,
el empleo de una ley de corte dinámica en vez de una estática, radicando la principal
diferencia en que la ley de corte dinámica es una función del estado del sistema minera al
momento en que se toma la decisión, así como de los efectos futuros de esta decisión.
Además, podemos mencionar que la ley de corte es la cantidad mínima de producto valioso o
metal que debe contener una tonelada métrica de material antes de que esta sea enviada a la
planta. Esta definición se emplea para distinguir al material que no debe ser explotado o que
debe ser enviado al desmonte de aquel material que debe ser procesado. La ley de corte
también se emplea cuando se cuenta con varios métodos de proceso y se debe decidir a cuál
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
de ellos enviar el material, tal como lixiviación en pilas o concentración. La ley de corte
también se emplea cuando se debe decidir entre enviar el material a rumas o procesarlo
inmediatamente.
Se busca determinar la ley de corte que maximice el valor presente de los flujos de caja de la
operación de un modelo general: Mina, Planta y Refinería. Obteniéndose tres leyes de corte
económicas al considerar que cada una de estas etapas limita por si sola la capacidad de
operación y tres leyes de corte de equilibrio al equilibrar las capacidades de cada par de
etapas. Una de estas seis leyes corresponde a la ley de corte óptima.
Las leyes de corte son calculadas comparando los costos y beneficios. En yacimientos con
geología y metalurgia simple es suficiente una sola, tal como el contenido mínimo de metal, a
fin de definir la ley de corte. Por lo tanto, en la mayoría de los casos los costos y
recuperaciones, y por lo tanto la ley de corte, varían con las características geológicas del
material a ser explotado. La ley de corte es usualmente el factor más importante, pero puede
no ser el único. En caso de que el material se envíe al botadero, su potencial de generación
ácida puede tener un impacto directo en los costos relacionados con los controles
ambientales. El contenido de sulfuros puede ser un factor crítico para el material enviado a
flotación o a tostación. El contenido de arcilla puede tener un efecto negativo en la
recuperación y producción de una planta de lixiviación.
La ley de corte define la rentabilidad de un proyecto minero, así como también la vida de la
mina. Una elevada ley de corte puede ser empleada para incrementar la rentabilidad a corto
plazo y el Valor Actual Neto (VAN) de un proyecto, posiblemente mejorando el beneficio para
los accionistas y otros interesados, incluyendo los gobiernos y las comunidades locales. Sin
embargo, incrementar demasiado la ley de corte disminuirá la vida de la mina, una menor vida
de la mina puede reducir las oportunidades de aprovechar los ciclos altos en la cotización de
los minerales. Una menor vida de la mina puede también dar como resultado un mayor
impacto socio económico, reduciendo la oferta de empleo y menores beneficios para los
empleados y comunidades locales.
Se podría considerar una mayor ley de corte a fin de reducir el riesgo político, asegurando un
mayor retorno financiero en un menor período de tiempo. La ley de corte puede
incrementarse cuando aumentan los precios del metal en caso de que esto sea necesario a fin
de fortalecer la posición financiera de la empresa y reducir el riesgo de fallas cuando los
precios de los metales bajan. De la misma manera, las leyes de corte pueden disminuir durante
periodos de cotizaciones elevadas a fin de aumentar la vida de la mina y mantener la
disponibilidad de las mayores leyes para cuidar la rentabilidad de la empresa cuando los
precios caen. Las leyes de corte también pueden estar sujetas a restricciones impuestas por los
bancos y otras instituciones financieras.
Para material que debe ser removido ya sea como desmonte o como mineral, la ley de corte es
el costo de corte entre enviarlo a la planta de procesamiento o al echadero de desmonte (Ver
siguiente Tabla).
Esta tabla puede expandirse a fin de mostrar la ley de corte para varios precios de mercado.
Para efectos del diseño de las operaciones del tajo, se realiza este análisis a fin de estimar las
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
reservas totales sin tener en cuenta la relación de desbroce. En este ejemplo, con una ley de
corte de 0.47 %Cu no se puede pagar el costo de desbroce. Si este material fuese enviado a la
cancha de desmonte a un costo de desbroce de $0.30, el mineral por encima de esta ley de
corte debería pagar los costos de $0.30 como un costo adicional de desbroce. Es evidente la
importancia de la relación entre la ley de corte y la relación de desbroce.
Asad (2016) explica que, una política de leyes de corte describe, por tanto, un programa o
secuencia de leyes de corte a lo largo de la vida de una operación, junto con la
correspondiente cantidad de material (mineral y residuos) que se extrae, la cantidad y la ley
media (cabeza) del mineral que se procesa y la cantidad de metal que se refina (Hirai et al.,
1987; Marques y Costa, 2013). En consecuencia, al vincularse con el objetivo general de un
negocio minero, esta política constituye la base de los flujos de caja y el valor actual neto
(VAN) resultante durante la vida de la operación. Además, el vínculo entre la política de ley de
corte y los planes estratégicos (tamaño o extensión de la extracción, escala de la operación y
secuencia de extracción), así como los planes operativos de una operación minera, es bien
reconocido en la industria minera (Lane, 1988; Hustrulid et al., 2013; Rendu, 2014; Hall, 2014).
Esto no solo explica el impacto global de la política de ley de corte en un sistema minero ideal
(mina, planta de procesamiento y refinería), sino que también establece la relevancia, así
como la importancia de los procedimientos o modelos que definen o desarrollan esta política.
Consideremos un tajo abierto que está llegando al final de su vida. El material está expuesto en
el fondo del tajo y no necesita ser minado; de manera alternativa, este material podría ser
explotado y procesado. ¿Cuál es el cut-off que debería emplearse a fin de decidir entre estas
dos opciones?
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Formulación matemática
Ya que el material expuesto en el fondo del tajo no necesita ser minado, la utilidad de dejarlo
en el fondo del tajo es cero: U desmonte (x) = 0. Este debería ser minado únicamente si pudiera
obtenerse una utilidad al ser explotado y procesado: Uore (x) > 0. Para tal material, el cut-off
mínimo es aquel que satisface la siguiente ecuación:
Uore (xC) = 0
En donde:
XC = Ley de corte
MO = Costo de minado por tonelada métrica de mineral.
PO = Costo de procesamiento por tonelada métrica de mineral.
OO = Sobrecostos por tonelada métrica de mineral
r = Recuperación, o proporción de los productos valiosos recuperados del material minado.
V = Valor de una unidad del producto.
R = Costos de refinación, definidos como costos relacionados con la unidad de producto
vendido.
Ejemplo 5.-
Considere una operación de lixiviación de oro en donde los costos de minado M O y los costos
de procesamiento PO, incluyendo los sobrecostos OO, sean de $1.20 y $2.00 respectivamente.
La recuperación del oro es de 60%, el precio del oro es de $270.00/oz, debiéndose efectuar
una reducción de $5.00/oz por transporte, refinación y otros cargos. La utilidad de enviar el
material al pad de lixiviación es de:
= 159x – 3.20
Uwaste (xC) = 0
La ley mínima a la cual el material ubicado en el fondo del tajo pueda ser minado con una
utilidad es:
La utilidad de enviar material al pad de lixiviación U ore(x) se muestran en la Figura 11 como una
función de la ley x.
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
B = I −C
Sabemos que la extracción de M1 nos ha reportado beneficios mayores que cero, la pregunta
es. ¿La extracción de M2 nos reportará un beneficio mayor que cero? Si así fuese significaría
que M2 por si solo permite la extracción de su estéril asociado E 2, así como M1 logró pagar los
costos asociados a la extracción de E1. El asunto ahora es evaluar si vale la pena extraer la
tajada adicional o la que llamamos la última expansión marginal.
B1 = I1 – C1 > 0
Con lo que aseguramos que efectivamente el tajo se explotara inicialmente con estos límites.
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
B2 = I2 – C2 > 0
Se asegura que la última expansión marginal se explotara ampliándose los límites iniciales del
tajo.
B2 = I2 – C2 < 0
Este modelo permitirá obtener las líneas finales del tajo en una zona tal que el estéril es
pagado única y exclusivamente por el mineral sin que se produzcan perdidas ni ganancias, en
función de las variables y costos estimados para la futura explotación.
Bajo el concepto de beneficio nulo (o que el ingreso que se perciba al explotar un cierto
tonelaje de mineral sea igual al costo asociado a ello), el balance para una tonelada de mineral
(UT) que se encuentre expuesta, es decir sin estéril asociado es el siguiente:
CEI × R × (P – CR) = CM + CP
Esta expresión da origen a la siguiente fórmula para la determinación de la ley de corte crítica:
Se debe tener en cuenta que tanto el costo de mina como el costo de planta varían durante la
vida de la explotación, ya que la distancia de transporte tanto para el mineral como para el
desmonte son variables y el tratamiento de mineral en la planta varía dependiendo de las
características del mineral que es alimentado, las cuales pueden variar dependiendo de la
profundidad en la cual nos encontremos explotando, por lo que en ambos casos se debe
ocupar la mejor estimación posible en función del criterio y experiencia del encargado de
realizar el diseño del tajo.
La expresión inicial para la Ley de Corte Crítica puede expresarse de la siguiente manera al
incluir las unidades y en el costo mina considerar el costo de capital:
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Se considera como costos de CATEGORIA II, los relacionados con el procesamiento del mineral
(CP) y se expresa en unidades de US$/Ton de mineral tratado. Además se incluyen los costos
administrativos (en las mismas unidades). Cabe notar que la depreciación de las instalaciones
de la planta está incluida dentro del costo de proceso.
Se considera como COSTOS DE CATEGORIA III, los relacionados con la venta del producto (FyR),
en el cual se incluye el transporte, seguros, créditos, refinería, etc., y se expresan en unidades
de US$/lb Cu. De este modo podemos resumir la expresión de Ley de Corte Crítica como:
Ejemplo 1.-
CATEGORIA I:
1) Costo directo mina:
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CATEGORIA III:
1) Costo transporte puerto, créditos, seguros, tratamiento, refinación, etc.
Para el caso anterior podemos observar que para un mismo modelo de costos y condiciones
metalúrgicas se obtienen los siguientes resultados para distintos precios del metal:
TABLA EJEMPLO
Para cada uno de estos precios se considerará como Mineral todo aquel material que tenga
una ley igual o superior al de la ley de corte crítica correspondiente, por lo cual se tiene que a
117
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Esta variación se traduce en una variación de los recursos explotables por el proyecto, por lo
que resulta muy importante la estimación del modelo económico para el diseño de una
explotación superficial, debido a la notable sensibilidad del recurso ante la variación del precio
del producto.
Se debe considerar que aún no se cuenta con información referente al tipo de yacimiento y a
la distribución de las leyes en él, por lo que es necesario realizar un inventario de reservas, el
cual nos permitirá definir el grado de sensibilidad del diseño en función de los indicadores
económicos del modelo.
Este inventario de reservas da origen a las curvas de Tonelaje vs. Ley (de corte y media); la
variación de recursos explotables se puede determinar del análisis de dichas curvas, las que se
describen a continuación.
Teniendo los datos de las reservas del yacimiento se puede obtener una curva de Tonelaje vs la
Ley de Corte y la Ley Media. Esto se logra a través del inventario de reservas del yacimiento,
las que se encuentran por debajo de una ley de corte determinada y calculando la ley media de
todos los recursos cuya ley es superior o igual a la ley de corte determinada, obteniéndose dos
curvas en un mismo gráfico.
Por ejemplo, en la figura podemos observar que para una ley de corte de 0.3% de Cu existen
aproximadamente 5,500´000,000 de toneladas de mineral con una ley media de 0.4% de Cu.
El mismo tratamiento se tendrá que realizar una vez definido el pit final y las fases de
explotación, por lo que teniendo los límites de cada fase se obtendrán las curvas
correspondientes a las reservas minerales involucradas.
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curva de tonelaje vs ley obtenida, se puede observar la variación de los recursos explotables
(minables) como se ilustra en los siguientes ejemplos:
Ejemplo 2.-
Precio Ley de Corte Ley Media Mineral Cu Fino Ingresos Vida Util
US$/Lb Cu % % Toneladas Lb Cu US$ Años
1.25 0.39 0.60 550’000,000 6,547’662,000 8,184’577,500 19
1.10 0.47 0.67 400’000,000 5,317’495,200 5,849’244,720 14
0.80 0.80 1.00 160’000,000 3,174’624,000 2,539’699,200 6
Ejemplo 3.-
Precio Ley de Corte Ley Media Mineral Cu Fino Ingresos Vida Util
US$/Lb Cu % % Toneladas Lb Cu US$ Años
1.25 0.39 0.68 550’000,000 7,420’683,600 9,275’854,500 19
1.10 0.47 0.72 520’000,000 7,428’620,160 8,171’482,176 18
0.80 0.80 0.94 320’000,000 5,968’293,120 4,774’634,496 11
Como se puede observar la forma de la curva Tonelaje vs Ley determina la sensibilidad del
yacimiento respecto a la variación de la ley de corte, ya que su pendiente determina la
cantidad de recursos que quedan fuera de la explotación al producirse una variación de la ley
de corte.
El ejemplo anterior ilustra los cambios que pueden surgir en el diseño y explotación de un tajo
frente a las variaciones del modelo económico. En este ejemplo no se incluye la tasa de
119
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descuento, la cual haría que los valores finales de los ingresos sean menores en función del
tiempo que tome la explotación del yacimiento.
Ejemplo 4.-
Una empresa minera explota su yacimiento según muestra la siguiente curva de Movimiento
Mina vs Leyes de Corte y Media, para el periodo correspondiente (reservas inventariadas para
el periodo de producción definido). Además, se ilustra el comportamiento de la relación E/M
operacional para dicho período:
La siguiente tabla muestra el esquema del movimiento mina ante la variación de las
capacidades de recepción de mineral por parte de la planta (3 era columna). En ella se asume
que la mina no varía su producción, por lo que se tendrá que buscar la mejor asignación de
materiales para satisfacer la alimentación a planta.
Se puede observar que, a mayor ley de envío a planta, la relación E/M operacional aumenta,
debido a que, en el momento de decidir el destino de los camiones, la mayor parte se
destinará a acopios (con mineral de leyes superiores a la ley de corte crítica e inferiores a la ley
de corte de envío a planta) y solo se destinará a procesos el mineral con leyes sobre la ley de
corte optima o de envío a planta. El material que se envía a botaderos corresponde a mineral
con ley inferior a la ley de corte crítica.
En el caso de que la planta requiera una mayor producción sin aumentar la producción de la
mina y además los recursos disponibles (cuya ley sea superior a la ley de corte crítica dentro
del inventario de reservas del período) no son los suficientes, se tendrá que evaluar una nueva
ley de corte sobre el material estéril disponible en la mina. Esta nueva ley de corte deberá
considerar que el material pueda pagar los costos asociados a su manejo posterior y
procesamiento, ya que se fue extraído de la mina como estéril quiere decir que existe mineral
que pago la extracción de este material (al diseñar la mina). Debido a ello se evaluará si dicho
material contiene la cantidad suficiente de metal fino, que permita satisfacer la capacidad de
la planta y además obtener un beneficio extra con su proceso.
120
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Ejemplo 5.- Determinación de leyes de corte marginal para mineral con ley bajo la ley de
corte crítica.
CASO # 1. El material será enviado directamente a planta destinando equipos cargados hacia
ella, es decir con una reasignación de tareas:
En este caso se debe considerar la variación de costos que podría sufrir el destinar este
material a la planta. Si se observa la estructura de costos, este material fue perforado,
disparado, cargado y será transportado a la planta en vez de a los botaderos, por lo que habría
que determinar si esa variación en el destino genera o no una variación del costo de
transporte. En caso dicha variación fuese igual a cero, la ley de corte sobre el estéril será:
CASO # 2. El material será enviado a acopio para su posterior procesamiento (en tiempo no
definido), por lo que debe pagar su costo de re-manipulación del material (Carguío y
Transporte correspondientes).
En este caso se deben considerar todos los costos asociados a la manipulación extra del
material. Lo más probable es que se le asocien costos relacionados con el carguío extra, que
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puede ser diferente al costo de carguío en la mina (por ejemplo, una pala en la mina y un
cargador en el acopio). Obviamente también se debe incluir el costo de transporte que puede
ser distinto (debido a la diferencia entre los perfiles de transporte) y en el caso de que se
requiera de equipos auxiliares para el mantenimiento de los accesos o de los acopios mismos,
se tendrá que incluir el costo asociado a ello en la evaluación. También puede suceder que la
malla de perforación en el estéril sea diferente a la del mineral, generando una granulometría
mayor en este material que se desea evaluar, por lo que también debería incorporarse el costo
asociado a la reducción secundaria (si fuese necesaria).
En este caso resulta fundamental tener acopios bien definidos (rangos de leyes) ya que no se
podría aplicar esta evaluación en caso no se sepa dónde se encuentran los recursos.
Para el ejemplo se incluirán solamente los costos de carguío y transporte, asumiéndose que
son los mismos que en el caso base, quedando lo siguiente:
Por ejemplo, en el siguiente gráfico se tiene que las labores están trabajando a un ritmo de
Tcop toneladas al día de mineral, con una ley de envío a planta de Lcop. Es decir, todo el
mineral que está siendo extraído de la mina con una ley menor de Lcop y mayor que Lcc está
siendo enviado a un acopio especial para dicho mineral, ya que no es estéril y solo se envía a
planta lo que tenga una ley superior o igual a Lcop.
Suponiendo que se amplía la capacidad de planta y se requiere enviar más mineral a proceso.
El gráfico podría quedar de las siguientes formas:
122
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En este caso la mina enviará mineral con la nueva Ley L (que será la ley de envío a planta), ya
que esta aumentó su capacidad. Si observamos en la fórmula de la ley de corte óptima
propuesta por Lane, cuando la planta limita la operación vemos que, al aumentar la capacidad
de la planta, necesariamente bajará la ley de corte óptima, lo que se cumple en este caso. La
mina enviará mineral a planta que antes se dirigía a acopios de mineral y todo el mineral con
leyes entre Lcc y L se enviará a estos acopios.
En este caso la mina no necesariamente enviará mineral con la nueva ley L ya que esta ley está
bajo la ley de corte crítica y a pesar de que la planta aumentó su capacidad, no se puede enviar
estéril al proceso. Si se observa bien existe una ley Lcv, la cual representa la ley de un material
que si bien salió de la mina como estéril permite pagar sus costos variables (proceso), por lo
cual si es enviado a planta generará un beneficio extra a la explotación. Por esto solo será
enviado a planta el mineral que tenga una ley sobre la ley de corte crítica más el estéril que
tenga una ley suficiente como para pagar su proceso. Si la planta aún queda con una capacidad
ociosa se tendría que pensar en comprar mineral para ocupar su capacidad o seleccionar
mineral de otros sectores (botaderos) o simplemente dejarla con esta capacidad ociosa, pero
no se puede enviar a planta mineral estéril que no pague su proceso.
Sean tres unidades básicas. Mina, Planta y Refinería, cada una de ellas con una capacidad
máxima dada y costos unitarios constantes en el tiempo, teniéndose además los costos fijos
totales, precios de venta del producto refinado y una recuperación total del proceso.
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Definiciones:
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Sea “V” el valor presente máximo posible de los beneficios futuros de la operación.
Sea “W” el valor presente máximo posible de los beneficios futuros después de la explotación
del periodo T.
La ley de corte aplicable a Qm debe ser tal que el valor presente del beneficio de la explotación
de Qm + W sea el máximo.
En el periodo T ya se han recibido los flujos anteriores, por lo que no se considera para el
cálculo, entonces se tiene que:
Como se trata de un futuro inmediato tenemos que T es muy pequeño, por lo que podemos
considerar la expresión:
Quedando:
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En la expresión (7) puede reemplazarse T como una razón de la cantidad Q tratada por la
unidad correspondiente y la capacidad máxima.
Mina
Dado un Qm, la ley de corte afecta solo a Qr y Qc por lo tanto, la ley de corte debe ser
escogida para maximizar el término {(s-r) × Qr – c × Qc}. Esto implica que la unidad de material
para la cual (s – r) × Qr, que excede el costo de concentración “c” deberá clasificarse como
mineral.
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gm : Ley que da el máximo aporte al valor presente en el caso que la mina defina el ritmo de
explotación.
Concentradora
Análogamente al caso anterior se tiene que la ley de corte económica dada por la planta
concentradora es:
gc : Ley que da el máximo aporte al valor presente en el caso que la concentradora defina el
ritmo de explotación.
Refinería
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Análogamente al caso anterior se tiene que la ley de corte económica dada por la refinería es:
gr : Ley que da el máximo aporte al valor presente en el caso que la refinería defina el ritmo de
explotación.
Estas tres leyes de corte económicas dependen directamente de los precios, costos y
capacidades, pero solo indirectamente a través del valor presente V, de la distribución de leyes
del yacimiento, por lo tanto, son estables en el sentido que varían poco durante la vida del
yacimiento, por ejemplo, gm no varía nunca.
Se definen:
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Se escoge como Gmc la ley de corte que da el máximo de la curva factible para las dos
unidades consideradas.
En forma análoga se realiza el análisis para los casos MINA – REFINERIA (Gmr) y REFINERIA –
CONCENTRADORA (Grc).
La ley de corte óptima es una de las tres calculadas anteriormente Gmc, Gmr o Grc. Se escoge
como ley de corte optima la ley correspondiente al máximo valor de la curva factible de las tres
unidades. Este máximo
corresponde al valor medio de Gmc,
Gmr o Grc.
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Ejemplo 6. Dada la siguiente curva de tonelaje vs ley, definir las leyes de corte optimas
correspondientes a cada área (Mina, Planta y Refinación) y determinar la ley de corte óptima
para todo el sistema.
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Ritmo (ton x 1000) = 36.678 Lc6 – 137.093 Lc5 + 206.997 Lc4 – 161.768 Lc3 + 69.538 Lc2 – 16.061
Lc + 1.759
R2 = 0.9988
Ritmo (ton x 1000) = - 94.384 Lm6 + 447.298 Lm5 – 907.454 Lm3 – 520.733 Lm2 + 155.464 Lm –
18.353
R2 = 0.9987
Lm(%Cu) = -119.07 Lc6 + 431.54 Lc5 – 634.33 Lc4 +482.53 Lc3 – 199.63 Lc2 + 43.198 Lc – 3.2091
R2 = 0.9993
(*) La refinería solo puede recibir 2,200 toneladas de concentrado, por lo que no sería posible
refinar lo que sobre (se puede acopiar, pero el costo del proceso ** en el corto plazo sigue
presente por el hecho de haber procesado el mineral).
Desde este punto de vista no sería conveniente procesar una cantidad por sobre las 99.309
toneladas diarias. Bajo esta condición se tiene que la mina mueve 99.309 toneladas de
mineral, con una ley de corte optima de 0.567% Cu y 200.691 toneladas de estéril (E/M =
2.02), la Planta procesa dicho mineral entregando 2,200 toneladas de concentrado (lo que
sobre se acopia) y la refinería recibirá dicho concentrado entregando 1´552,038 libras de cobre
(al 100% de recuperación).
131
Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
En el segundo caso se debe construir el gráfico y realizar los cálculos correspondientes para la
producción de concentrado:
Se deberá situarse en un punto del gráfico, para definir el primer dato, es decir saber cuánto se
produce dada una ley e corte.
• La ley media o ley de cabeza es 0.81%, para una ley de corte de 0.55% Cu.
• La cantidad de concentrado que se producirá es de 2,152 toneladas al día.
• La refinería queda con una capacidad ociosa de 48 toneladas por día.
Como la planta no puede producir más, esta sería la configuración para la producción,
obteniéndose los siguientes resultados:
Se pueden apreciar diferencias entre los resultados obtenidos por uno y otro método,
especialmente en lo que se refiere a la relación entre los ingresos y las cantidades de
concentrado. Sin embargo el valor de la ley de corte óptima obtenida en ambos casos es
relativamente parecido, lo cual indica que no se está lejos del resultado deseado.
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
Ahora bien, la diferencia entre ambos métodos se debe a que la curva Ritmo de Explotación vs.
Leyes tiene ciertas irregularidades, especialmente en la zona de estudio (100,000 toneladas al
dia), las cuales son absorbidas por la aproximación matemática, ya que no se trata de un sector
muy pequeño, pero gráficamente se puede observar que existe dicha singularidad,
especialmente si se recurre a un gráfico más detallado.
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
Como resultado del análisis se obtiene la siguiente curva de Beneficio vs. Ley de Corte (incluye
la evaluación de todos los costos de extracción, tratamiento y refinación de cada caso).
ZONA 1: El beneficio es menor al máximo, debido a que se procesa mayor cantidad de mineral
con bajas leyes, es decir se gastan más recursos por libra de producto y se privilegia la
recuperación del fino.
ZONA 2: El beneficio es menor al máximo, ya que hay menos recursos para procesar, por lo
que se procesa menor cantidad de mineral privilegiando la explotación de recursos con mayor
ley, perdiendo las libras de producto contenidas en minerales de menor ley.
Analizando la situación y según la curva obtenida, se puede ver que la ley de corte óptima para
la explotación sería de 0.64% de Cu.
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a) Restricción de movimiento mina: Inicialmente se sabe que la mina no puede mover más de
250,000 toneladas al día, por lo que se debe distribuir el destino de los materiales en función
de esa capacidad. En ese sentido podemos observar que inicialmente no hay restricción de
movimiento mina, pero podría darse el caso de que la mina exigiese una restricción de
movimiento de estéril para proveer mineral los próximos periodos (abrir mineral para el
próximo año). Por ejemplo, definiremos que la relación E/M no sea inferior a un valor de 3.8,
esto genera inmediatamente un cambio en la ley de corte optima del período de Lop = 0.64% a
un valor de Lm = 0.73% de Cu.
Se puede observar que la ley de corte óptima para el periodo resulta de la combinación de las
leyes anteriormente mencionadas, ya que es un proceso conjunto de dichas actividades. La ley
de corte optima global será de 0.88%
Si la refinería tuviese una capacidad ilimitada, la ley de corte óptima correspondería a la ley de
corte óptima de la planta. Si las capacidades de la planta y la refinería fuesen ilimitadas, la ley
de corte óptima correspondería a la ley de corte de la mina. Finalmente, si todas las unidades
productivas no tuviesen límites productivos, la ley de corte óptima corresponde a la del caso
ideal (0.64% Cu).
Algoritmos de diseño
Los límites finales del tajo definen lo que es económicamente explotable en un determinado
yacimiento. Estos identifican que bloques deben ser explotados y cuáles deberían dejarse “in
situ”. En el esfuerzo de identificar los bloques a ser explotados, se crea primeramente un
modelo económico de bloques a partir del modelo geológico de leyes. Para lo cual se asumen
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
los costos de producción y procesamiento, así como los precios del producto bajos las actuales
condiciones económicas (p.ej. costos y precios actuales). Luego, empleando los valores
económicos de los bloques, cada bloque positivo es nuevamente verificado a fin de determinar
si su valor puede pagar la remoción de los bloques de desmonte por encima de él. El análisis se
basa en el cálculo del nivel límite que verifica si las utilidades sin descontar obtenidas de un
determinado bloque pueden pagar los costos sin descontar de la extracción de los bloques de
desmonte. Este análisis se lleva a cabo empleando programas de computadora que utilizan el
método del cono flotante o el algoritmo de Lerchs y Grossmann (L.G.). El algoritmo L.G.
garantiza la optimalidad con respecto a la definición de los límites del tajo que maximicen las
utilidades sin descontar, mientras que el método del cono flotante es heurístico y puede
arrojar resultados no óptimos (Dagdelen, 2001).
Es así como surgen varios métodos para definir cuáles serán los límites económicos de un tajo,
que sin dudad cada uno de ellos aporta un concepto útil y que en muchos casos se combinan
para generar otro método.
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
En el ejemplo anterior se puede observar que el extraer el bloque de valor positivo (+ 800) y
sus 15 bloques de estéril asociados (- 10 cada uno), genera un beneficio final de + 650,
correspondiente al beneficio de extraer dicho bloque con su sobrecarga asociada.
El cono móvil optimizante tiene esa denominación ya que es una versión mejorada de la
tradicional rutina del cono flotante. El creador fue el ingeniero Marc Lemieux, quien detectó
una serie de deficiencias y mermas económicas producidas por el método convencional de
conos flotantes y en 1979 publicó el artículo “Moving Cone Optimizing Algorithm”, en
Computer Methods for the 80’s in the Mineral Industry de A. Weiss. El nuevo algoritmo fue
probado en Climax Molybdenum Co. y como resultado se obtuvo diseños muy superiores en el
aspecto económico, que aquellos obtenidos con el algoritmo convencional.
Las principales mejoras de la rutina del cono móvil optimizante con respecto al método
tradicional fueron:
Esta radica en la secuencia con que son analizados los bloques del modelo. En la figura se
puede apreciar el beneficio que reporta la extracción de cada bloque. Los bloques con
beneficio positivo ya se les ha descontado lo que cuesta extraer dicho bloque o costo mina (-
10).
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
De este análisis se concluye que los tres bloques con valor económico mayor que cero son
extraídos con un beneficio económico de +40, sin embargo un correcto análisis debiera
obtener un pit de +60 dejando en su lugar el bloque (3) con su respectiva sobrecarga, como
podemos ver en la siguiente figura:
De lo anterior se desprende que la incorrecta secuencia con que se analizan los conos, produce
pérdidas económicas cuya magnitud depende de la complejidad de la mineralización, de la
variabilidad de las leyes, etc.
En la práctica, la técnica del cono negativo presenta deficiencias similares a las obtenidas
mediante lo que se podría llamar el cono positivo, sin embargo, un análisis simultáneo de
138
Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
ambas técnicas (cono positivo y cono negativo) produce resultados satisfactorios. Esta
simultaneidad es la que se realiza en la etapa 1 del algoritmo de Limeux.
Este es el principal aporte del método del cono móvil optimizante, consiste en analizar conos
que tengan sobrecarga compartida, como, por ejemplo:
Los bloques (1) y (2) tienen un beneficio de +70 (incluido el costo mina). Al analizar conos
Método de Lerchs-Grossman
El método bidimensional de Lerchs-Grossman permitirá diseña, en una sección vertical, la
geometría del pit que arroja la máxima utilidad neta. El método resulta atractivo por cuanto
elimina el proceso de prueba y error de diseñar manualmente el tajo en cada una de las
secciones. La metodología es conveniente, además para el procesamiento computacional.
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
El ejemplo de la siguiente figura representa una sección vertical por medio de un modelo de
bloques del depósito. Cada cubo representa el valor neto de un bloque, si este fuese explotado
y procesado de forma independiente. El la Figura 1, los bloques con valor neto positivo se han
pintado de amarillo. Además, se ha establecido el tamaño del bloque de forma tal que el
método en el perfil se mueva hacia arriba o hacia abajo solamente cada bloque individual
(máximo), a medida que se mueva hacia los costados.
FIGURA 1.
Paso N° 1
Se suman los valores de cada columna de bloque y se ingresan estos números en los bloques
correspondientes de la Figura 2. Este es el valor de cada bloque en dicha figura y representa el
valor acumulativo del material desde cada uno de los bloques hasta la superficie.
Paso N° 2
Se inicia con el bloque superior de la columna izquierda y se repasa cada columna. Se coloca
una flecha en el bloque apuntando hacia el valor más alto en:
Se calcula el valor inferior del bloque, sumando el valor superior con el valor inferior del
bloque hacia el cual apunta la flecha. El valor inferior del bloque representa el valor neto del
material del bloque. Los bloques de la columna y los bloques en el perfil del pit a la izquierda
del bloque. Los bloques marcados con una X no se pueden explotar a menos que se sumen
más columnas al modelo.
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
Paso N°3
Se busca el valor máximo total de la fila superior. Este es el retorno neto total del pit óptimo.
Para el ejemplo, el pit óptimo tendría un valor de US$ 13.00. se vuelven a trazar las flechas a
fin de obtener la geometría del tajo. La Figura N° 3 muestra la geometría del pit en la sección.
Cabe señalar que aunque el bloque de la fila 6, en la columna 6, tiene el valor neto más alto del
depósito, este no se encuentra en el tajo, ya que explotarlo reduciría el valor total del tajo
(beneficio).
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Diseño y Métodos de Explotación Superficial – Dr. Ing. Jorge Durant Broden - FIM
En 1965 Lerchs y Grossman propusieron dos métodos diferentes para la optimización de tajos
abiertos en un mismo documento. Uno de estos métodos trabaja en una sección simple a la
vez. Este solo maneja taludes que están un bloque arriba o abajo y un bloque transversal, de
modo que es necesario seleccionar las proporciones de los bloques de manera tal de crear los
taludes requeridos (modificar dimensionalmente el modelo de bloques). Este método es fácil
de programar y es confiable en lo que hace, pero dado que las secciones son optimizadas en
forma independiente, no hay ninguna garantía de que sea posible unir secciones sucesivas en
una forma factible. En consecuencia, por lo general se hace necesario una cantidad
considerable de ajustes manuales para producir un diseño detallado. El resultado final es
errático e improbable de ser verdaderamente óptimo.
Existen dos variables recientes de este método, una de ellas (Jhonson & Sharo, 1971) utiliza el
método bidimensional tanto a lo largo de las secciones como a través de estas en un intento
por unirlas. El otro método (Koeningsberg, 1982) emplea una idea similar, pero trabaja en
ambas direcciones al mismo tiempo. Ambos métodos están restringidos a los taludes que son
definidos por las proporciones de los bloques y ninguno respeta incluso estos taludes a 45° con
respecto a la sección. Este último punto queda mejor ilustrado ejecutando los modelos en un
modelo que contenga solamente un bloque de mineral (muy valioso). El pit resultante tiene
forma de diamante en vez de circular, con taludes correctos en las direcciones E-W y N-S, pero
bastante empinado en el medio.
El segundo de los métodos representados por Grossman y Lerchs (1965) se basó en un método
de la teoría de gráficos (grafos) y Johnson (1968) publicó un método de flujos de redes para
optimizar un tajo. Ambos garantizan encontrar el óptimo en tres dimensiones, sin importar
cual sean las proporciones de los bloques, con ambos se obtienen los mismos resultados.
Los dos son de difícil programación en un ambiente de producción, donde existen grandes
cantidades de bloques. No obstante, esto se ha logrado y en la actualidad existen programas
disponibles que pueden ser ejecutados en cualquier computador; la mayoría de estos
programas utiliza el método de Lerchs-Grossman.
Debido a que estos programas garantizan encontrar el subconjunto de bloques con el máximo
valor absoluto acatando las limitaciones de los taludes, las alteraciones a la geometría del tajo
causadas por pequeños cambios en los taludes o valores de los bloques son indicadas
confiablemente como efectos de tales cambios. Esto ha permitido la apertura del campo del
análisis de sensibilidad real, donde los efectos de los cambios del talud, precio y costos pueden
ser medidos en forma precisa. Con los demás métodos, solo son posibles trabajos de
sensibilidad más toscos.
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Section 5
Exploration For
Mineral Deposits
Anthony L Payne .
Senior Editor
5.1.2-EXPLORATION METHODS
Exploration has evolved in the past several decades into a highly sophisticated
:tnd expensive endeavor in which iarge corporate entities, or subsidaries, normally
are directed and staffed by highly trained exploration specialists. In some instances
consultants, with expertise in a given field, are utilized to the benefit of such
corporate groups.
The "grasshopper" approach to exploration-searching only for outcropping min-
erals and/or investigating only mineral prospects offered by the discoverers of
such o u t c r o p s h a s given us most of the past and present mines in the US.,
but this method is rapidly approaching the point of diminishing returns in areas
that have been thoroughly prospected for currently marketable commodities. With
the possible exception of the search for industrial minerals, exploration is being
increasingly aimed toward potential areas within which the anticipated mineral
deposits are masked by post-ore cover in the form of alluvium, volcanic or sedi-
mentary rock or seawater. Except for some of the more remote portions of Alaska,
indirect exploration in these covered areas, as based upon geological concepts,
augmented by geophysics, geochemistry and three-dimensional sampling, is the
"modus operandi" of most exploration in the United States today. The obvious
need to develop a method for discovering blind deposits which have no visually
observable surface expression has resulted in the formulation and use of the modern
"regional" approach to exploration during the last two decades.
The regional approach cannot be undertaken without a thorough understanding
of the constitution and natural setting of known ore deposits a t the microscopic,
local and regional scales. This must be accompanied by detailed studies striving
to detect at a distance (above or laterally) the geological, chemical and physical
properties of the deposits and their immediate host rocks which markedly differ
from those of the surrounding barren rocks. Such contrast, if detectable, is known
as an "anomaly." The ability to detect such anomalous features is, of course,
a scientific aid to exploration. The UB. Geological Survey has contributed much
to these studies and to this knowledge.
Another prerequisite of the regional approach is the availability of reliable
geologic maps a t regional scales between 1:25,000 and 1:1,000,000. The U.S. Geologi-
cal Survey has contributed much in this regard too, although the major part
of the Western United States is yet to be mapped a t scales larger than 1:62,500.
The regional approach is not as severely needed in much of the remainder
of the world, since the prospecting of potential outcropping areas is still of great
importance in such areas as Canada and Australia, and i n many of the under-
developed countries. These countries have increasingly become the sites of sizable
exploration endeavors, and substantial mineral investment, by major mining firms
based in Western Europe or North America.
Exploration teams can vary in size from the effort of a single individual with
a jeep (and usually a Geiger counter or a metal "sniffer" of some type) up
to that of a very large group of specialists working with a budget of tens of
millions of dollars per year. Moderate sized mineral oriented companies may have
from one to five exploration geologists, but the major corporations in this field
are more apt to have a large exploration group, including, in addition to the
exploration geologists, geophysicists, geochemists, mining engineers, metallurgists,
mineralogists, landmen, statisticians, economists and computer and drilling special-
ists. Regardless of the size and the scale of the exploration endeavor, however,
or whether it is directed toward an area of potential outcrop or one of post-mineral
cover, any exploration program can be divided into two main phases; reconnaissance
and target investigation, each of which can be further subdivided into two stages
as shown in Fig. 5-1.
T O be successful, the exploration program should be marked by an increase
in the favorability of the area being explored as each decision is made to advance
to each successive stage. Usually also, the progression from left to right (Fig.
5-11 also usually is accompanied by a reduction in the size of areas considered
favorable.
A complete exploration sequence begins with the appraisal of large regions
to select those areas favorable to the occurrence of mineralization of interest
(first stage). This appraisal is followed by reconnaissance of the favorable regions
in search of target areas, each with characteristics favorable to the occurrence
of a mineral deposit (second stage). Such target areas are investigated in detail,
first on the surface (third stage), and then, if warranted, by three-dimensional
physical sampling (fourth stage). This last stage often is called "physical explora-
tion," but the techniques commonly used a t this stage, such as drilling, sometimes
are also used in the previous reconnaissance stages, especially in areas where targets,
if any, may be buried under post-mineral barren rock formations.
The examination of mineral prospects--the most common exploration approach
in the past-usually involves only the last two stages and sometimes only the
last one. The search for a new deposit within a known and geologically mapped
mining district involves only the last two stages, whereas the search for a new
deposit in a virgin geologic environment involves at least the last three and often
the full sequence. An exploration group or company may set a policy that limits
its efforts to the target investigation stages, leaving to modern prospectors the
tasks comprising reconnaissance.
I n the search for mineral deposits many techniques and "tools" are used, among
which are geology, geophysics, geochemistry, photogeology and, a t this time coming
into its own, a variety of remotesensing methods. Of these techniques, geology
is of prime importance since the success of any exploration endeavor w ~ l ldepend
primarily on the selection of the area to be explored. The prime considerati~ns
REJECT:
lNmvVORABLE
-
1----
Normal Exploration Sequence
Recycling After Temporary Rejection
REJECT.
MINERAL
Key Explomtion Decislons DEPOSIT
5-]-The four main stages of "full-sequence" regional exploration (after Bailly, Surface
Fig.
Mining, PfEeider, E. P. ed., A I M E , 1968).
Stage I-Regional 0-Geologic compilation* 0-Geologic compilation* 0-Geologic compilation* 0-Geologic compilation*
Appraisal 0-Photogeologic study (rock 0-Paleogeologic paleogeo- 0-Photogeologic study (rock
units and structure) graphic reconstitutions units, contacts and
0-Structural analysis* structures)
F-Field inspection of area
selected from air and/or
ground*
Stage 2-Detailed F-Reconnaissance geologic F-Reconnaissance drilling F-Airborne electromagnetic F-Aeromagnetic survey*
Reconnaisance mapping of outcrops* for stratigraphic and survey* (with or without F-Photogeology (formation,
F-Stream-sediment geo- facies data* aeromagnetic) structure)
chemical surveys 0-Photogeologic study FStream-sediment geo- F-Reconnaissance (forma-
F-Aeromagnetic survey F-Stream-sediment geo- chemical survey tional mapping) *
F-Gravity survey in gravel- chemical survey F-Field inspection of ano-
covered areas F-Mercury sniffer surveys malous areas
F-Reconnaissance induced-
polarization survey of
covered areas
S t m m w d i m n t mmpltng X X
I JI
Wmrrpmpling
Rock sampling
Spcicslirad romplong
E~rnmagnst~c
R a d i i h i c wrvep
Rrmois wnrlng wrvsyr
FEOPHISICS-OROUND
Gravity
Mqnrtlc
Rdmmetric
Salsmic
Rlllillliv!ty
Salt- b m n t ~ o l
l n d dMrizot!~
D m - h o l e eIrCtri~OI
THREE-DIMENSIONAL
SAMPLiNG 8 EVALUATIOL
Tnneking
Patory drilling
Core drilling
TunnaIIYlaft *ark
Mtnaroi drsrsbng tests Not (I detect~onmethod
EcOnomlc O V O I Y O ~ ~ O ~ Not o d.iectton method
Fig. 5-2-Main exploration methods and techniques (scientific aids) (after Bailly, Public
Land Law Conf., Univ. of Idaho, 1966).
5.1.3-EXPLORATION LOGISTICS
111 most of the conter~ninous Unitrd States, rxploration logistics arc not to0
ac7vere duc to the abundance of primary and secondag ro;~ds,the read. av:~ilability
of ronstruction equipment, and the development of 4-wheel-drive and otlier even
mo1.e specialized field-transportation ~ q u i p m e n t Occasionally,
. however, exploration
may h r conducted ill extremrly rugged areas lacking acvess or regions designated
:is "\T7ilderness Arcas" (or other restrirted arras) hy the Federal G o v c r ~ ~ i n e n t ,
w11er~ the construction of accrus roads during an exploration stage usually is pre-
cluded hy regulations. Under such circunlstances, helicopters usually arc utilized
not only during reconnaissance and mapping, but also for mobilizing drilling equip-
ment and transporting men and supplies during subsequent periods of three-dimen-
sional testing.
In other parts of the world, such as Alaska, much of Canada and Australia,
and in many of the underdeveloped countries, airborne transportation (helicopter,
light fixed-wing or large short-field cargo aircraft) is utilized to a very great extent,
saving time at the expense of considerably increased exploration cost.
In the far northern latitudes, particularly in areas of previous glaciation which
abound in rivers, lakes and muskeg, reconnaissance and mapping are conducted
during the summer field season, with float-equipped fixed-wing support, but most
three-dimensional sampling (drilling, exploration shaft-sinking and drifting) is done
during the winter season when heavy equipment and supplies in large quantities
can be moved in either by truck over winter roads, or by tractor-drawn sled
trains, after freeze-up.
Transportation problems of equal severity also are encountered in tropical
climates where seasonal rainfall is extreme, tropical rain forests exist, and lateritic
weathering results in extremely deep mud. I n such areas, helicopters, light fixed-wing
aircraft and intermediate to heavy cargo aircraft have, in recent years, greatly
supplemented the previous classic modes of transportation by river barges and
animal pack trains.
In all cases where the movement of men and equipment must be accomplished
under adverse conditions, a great deal of time and effort must be expended in
detailed planning well in advance of the field season to resolve the logistical
problems to the end that an effective and efficient exploration program will result.
Extensive subsea research and pilot programs for the exploitation of ocean
bottom mineral resources, as well as some actual economic production from subsea
deposits, pose their own particular exploration and logistic problems. A wide variety
of small (one- to three-men) undersea craft have been developed for prospecting
and sample-collecting purposes. Much research and development funding is being
expended on surface-boat bulk-mining systems, and in surface to subsea surface
drilling and sampling techniques (Sec. 20). Compared to most landborne exploration,
an unusually large logistical backup system normally is required, the cost is higher
and the risk greater.
5.1.4--EXPLORATION MANAGEMENT
Stage 1-
Regional Stage 2-Detailed Stage 4-Detailed
.4ppraisal, Reconn., One Stage 3-Detailed 3-D Physical
One Region Target Area Surface, One Sampling, Target
Selected Selected Target Selected An Ore Body
EXPLORATION FOR A
BLIND STRATIFORM
LEAD-ZINC DEPOSIT:
Area under consideration, sq mi.. . . . . . . . . 1,000-100,000 10-50 5-10 1/2-10
Cumulative expenditures, t . . . . . . . . . . . . . . 5,000-500,000 50,000-1,000,000 250,000-1,500,000 300,000-3,000,000
Cumulative elapsed time, mo.. . . . . . . . . . . . 1-12 13-20 20-30 30-60
EXPLORATION FOR A
MASSIVE SULFIDE DEPOSIT:
Area under consideration, sq mi. . . . . . . . . . 1,000-100,000 10-50 1-10 1/10-2
Cumulative expenditures, 6 . . . . . . . . . . . . . . 5,000-500,000 20,000-600,000 100,000-1.000,OOO 300,000-3,000,000
Cumulative elapsed t h e , mo. . . . . . . . . . . . . 1-6 7-1 5 16-24 24-60
5.1.5--EXPLORATION COSTS
Due to the great variety of exploration programs, absolute cost figures applicable
to every endeavor cannot be given. Each program has its own problems of access,
type (and depth) of target being sought, and scale of expenditure. However, an-
nounced results, and past experience of the authors, have resulted in some "rule-of-
thumb" figures offering guidance in some specific major exploration endenvors,
as shown in Table 5-2. From this table, it can be seen that to successfully reduce
a general area of interest from 100,000 sq mi to an ore body of 1 sq mi or
less may require from 2 to 5 yr of time and cost $300,000 to $4,000,000. The
minimums in cost and time are achieved only under ideal conditions. Moreover,
the three cases considered in Table 5-2 are all predicated on successful endeavors.
and to the cost of these successes must be added, as part of the total exploration
cost of any searcher, the cost of the many failures which nearly always precede,
accompany and follow the rare Fuccesses in a continuing exploration program.
Exploration failure cost is perhaps 5 to 10 times higher than that of successful
exploration.
5.2.1-SELECTION OF AREAS
5.2.2--GEOLOGIC MAPPING
Alteration above ore bodies in limestone often fades out rapidly, as seems
t o be the situation in many parts of the Bisbee district (Schwartr," p. 320).
The work of ProctorSS north of Tintic suggests that lateral effects of alteration
may be far-reaching, and that fracture control may dominate in fringe areas.
Leached Outcrops-The interpretation of gossans and leached cappings is one
of the earliest recognized guides to ore, and led to the discovery of many of
the important mining districts of the world long before the development of scientific
geologic thinking. Sulfide ore minerals are relatively unstable in the surface weather-
ing environment, and the familiar term "limonite" is applied to the several hydrous
iron oxides, often the predominate mineral remaining in the outcrop of the ore
deposit. Under favorable conditions, the color, texture and structure of the limonite
can furnish valuable clues t o the nature of the unweathered mineralization. I t
is often said that any showing of limonite, even in the more remote regions
of the world, has certainly been explored by now, and some have even suggested
that there is little to be gained in becoming proficient in the evaluation of leached
outcrops. I t is c rob able that most really impressive surface gossans have been
explored to some extent, b u t there are many local situations that require recognition
of the many subtleties in weathered mineral outcrops. In exploring through cover,
where oxidation and enrichment may have preceded concealment, one is faced
not only with drilling blind, but also with correctly interpreting the possible buried
weathered zone first penetrated by the drill.
Leached-outcrop techniques have been used successfully in the postrWW IT
period of exploration for Cordilleran porphyry copper deposits. Conditions are
near ideal, for the sulfide minerals usually constitute a relatively small percentage
of the total bulk of the rock, and when leached from typical disseminated ore
the rock matrix remains strong enough to support itself and preserve the delicate
textures and structures of the limonites for inspection in outcrop. In contrast,
many sulfide vein, bedded and pipe deposits contain such a high percentage of
sulfides that thorough weathering may remove the bulk of the ore deposit and
the unsupported walls collapse against a spongy, chaotic mass of limonite, kaolinized
wall rock and corroded fragments of gangue, etc., which may not crop out boldly.
The works of Lockea' and Blanchard3' ar? the most detailed published accounts
of the method, and excellent short summaries are given by McKinstryZZand
Whitten." Few exploration geologists today have the opportunity to become well-
grounded in leached cap rocks, for the most important outcrops have long since
been stripped away and waste has been piled upon important peripheral croppings.
With each passing year the problem increases, for many of the recent American
discoveries are blind beneath cover. I n studying leached cappings, as perhaps in
no other facet of exploration geology, the visualization of color and textures cannot
easily be conveyed by drawings, photographs or descriptions. TJntil the geologist
has demonstrated his ability to interpret leached croppings, he should not attempt
to do too much, and should rely more upon wall-rock alteration and other guides
in his preliminary evaluation.
The basis for leached-outcrop interpretation is that limonites that have formed
more or less at the site of the original sulfide ore mineral often can be distinguished
from other iron oxides, and that minute differences in the limonite products serve
to distinguish the various hypogene minerals, such as chalcopyrite, molybdenite,
galena, etc. I t often is possible to determine whether or not secondary chalcocite
enrichment has taken place by observing the texture and color of limonite. I n
some cases it has been possible to gain a crude idea of the grade of mineralization.
There are no standardized procedures for portraying leached-outcrop observations
on a map, but some of the following considerations should be kept in mind during
the course of the work, especially where leached-outcrop interpretation is used
in conjunction with geophysics and geochemistry. I t should be determined if the
leached capping has been cut into deeply by the modern erosion pattern and,
if possible, determine if the sulfide zone is presently being subject to oxidation.
An estimate should be made of the total sulfide content and of metal sulfide/pyrite
ratios. The character of the hypogene minerals, and evidence of supergene enrich-
ment, should be carefully noted. Wall-rock alteration and weathering effects upon
the wall rock commonly are neglected, although a thorough understanding of them
may permit an inference of more favorable conditions a t depth or laterally beneath
cover.
Hypogene Zoning-District scale zoning is widely recognized as a guide to
the development of partially explored mining districts (Park and MacDiarmidJ7).
If structural and stratigraphic complexities do not distort simple patterns, a given
mining district may show a definite sequence of mineral deposits from the central
source of the ore fluids outward. The reconstructed vein system conceived by
Emmons* is a most convenient method of visualizing zonal arrangements. At
Butte, Mont., a central zone of copper-sulfide ores grades outward and upward
through mixed copper-zinc to copper-free zinc ore in the peripheral areas, which
contains large amounts of quartz and carbonate and silicate of manganese (Sales
and Meyer,= p. 469).
Utilizing district-scale zoning in mineral exploration may be a simple sorting
of the various prospects and mines of a district to see if unexplored metallization
might lie at depth or laterally beneath cover. The zonal study of a district may
emphasize visual identification of minerals themselves. The rock-chip geochemical
approach is becoming popular, particularly where subprofessional personnel can
be used. Because more quantitative data are obtained there is great appeal to
the method. I t should be kept in mind, however, that hypogene metal patterns
can be considerably distorted because of the varying stabilities of the metal ions
under near-surface weathering conditions. For example, zinc can be cleanly leached
from the surface, while some of the other metals form relatively stable sulfates,
carbonates, oxides or silicates. Many of these stable secondary minerals are not
easily identified visually when present in trace amounts and mixed with hydrous
iron oxides, etc. I t also should be remembered that the host-rock units, and the
various facies of wall-rock alteration developed within them, may exert an influence
on the minerals originally deposited and the supergene mobility of the metal
upon weathering. For example, copper is leached rather readily under the acid
porous conditions characteristic of a thoroughly sericitized porphyry, while stable
carbonates of copper might remain near surface in a relatively unaltered calcareous
matrix.
Physiographic Expression-There have been no thorough studies of the topo-
graphic expression of ores on any scale-single ore shoot, major vein or mining
district. I t is obvious, however, that all important deposits do not crop out boldly
at the surface and a number of mining districts are in pockets and low basins
within mountainous terrain. A number of the more important mineral belts are
seen to be elongate topographic lows. I t appears that structural breaks, intrusive
activity, alteration, weathering effects upon ore, etc., may combine to differentially
erode the belts, or mineralized portions of the belts. Any unusual topographic
depression, even where filled with post-ore sediments, volcanics or alluvium, or
partially covered by desert pediment veneer or glacial deposits, should be carefully
analyzed as a possible surface expression of ore.
5.2.%4EOPHYSICAL SURVEYS
and, if the physical-property contrast and the geometry are adequate, an observable
"anomaly" is caused in the applied field and the volume can be detected. The
term "anomaly" is defined as a statistically significant departure from normal
values. The foregoing discussion is appropriate to all methods but is not technically
rigorous for the seismic and radioactive methods.
The geophysical methods to be discussed in this section, the basic physical
property or properties utilized and the type of applied field are shown in Table 5-3.
The final result of geophysical measurements usually is a map or profile portray-
ing the variation of the measured field in space. Geophysical measurements are
taken a t points, or "stations," whose location must be known with sufficient accuracy
(1) to indicate how the measured quantity changes with location, (2) to determine
certain corrections and (3) to enable anomalous areas to be relocated a t any
time for further exploration work. Stations may be arranged in a regular grid
or an irregular network, and station spacing is determined by the problem at
hand-the expected size of thc sought-after feature or condition. In some cases,
particularly with airborne surveys, data are continuously recorded along profiles.
The spacing between profiles likewise is determined by the nature of the problem
a t hand.
The Gravity Method-Modern (1970) gravity meters are capable of rapidly mea-
suring the relative acceleration of gravity to an accuracy approaching k0.01 milli-
gals, where the milligal is cm per sec per sec and normal earth gravity is on
the order of 980 cm per sec per sec. After appropriate corrections have been applied
to the observed data, a map or profile is prepared which is the basis for interpret-
ing the probable density distributions in the earth responsible for the gravity
changes, Precision gravity surveys must be made from a platform fixed with
respect to the earth.
Density o j Earth Materials-Information regarding the densities of earth mate-
rials in a survey area is required in determining the corrections that must be
applied and in the interpretation of final results. However, gravity surveys usually
precede the availability of factual density information so that assumptions may
be necessary. Much published information is available, such as in Clark: which
indicates ranges that have been measured for various rock types to guide initial
assumptions. The densities of rock types may vary with one or more of the
following: compaction, porosity, saturation, texture, composition, weathering, age,
fracturing and depth of burial. Hand-sample densities from outcrops or drill holes
usually are the most practical source of density information, and effective surface
densities often can be derived from observed gravity measurements. I n any event,
the assignment of formation densities will be problematical and the uncertainties
should be recognized and kept in mind throughout subsequent data processing.
Processing Gravity Data-Field gravity measurements require a number of gen-
erally well-ordered corrections to remove nongeological variations. First, i t is neces-
sary to remove real and apparent gravity variations with time, meter drift and
tidal effects. Variations in gravity due to station location and elevation are then
accounted for.
The most important consideration in exploration surveys is to reduce the observed
gravity in such a way that a high degree of relative, rather than absolute, accuracy
is preserved. Exploration surveys are concerned with changes in geological conditions
so that changes in gravity, rather than gravity itself, are of primary interest.
If, as is the case of regional surveys, absolute gravity values and elevations refer-
enced to sea level are used, the reduction of observed gravity follows the formula
where g~ indicates that the reduced gravity is in the form of the complete Bouguer
anomaly; go is the observed gravity a t a station with elevation H above sea level;
gt, the theoretical gravity for the station a t sea level; k, the elevation factor; and
T, the topographic correction. If relative gravity and/or relative elevations are used,
Eq. 1 becomes
The symbols are the same except that g ~ is , the relative Bouguer anomaly, h
may now be a relative elevation, and L is the latitude correction referenced to
some parallel in the map area.
Zero D+ift and Tidal Conectwm-Changes in gravity readings with time are
removed by first observing a base station with a known or assumed gravity value.
Unknown stations then are observed for a period of time, and, finally, either
the original base or another station with a well-established gravity value is observed.
The time interval between base-station readings is sufficiently short so that overall
drift may be assumed to be linear with time. The station designation, time of
observation and meter dial readings are recorded. Each gravity meter has a scale
constant, C, furnished by the manufacturer that expresses the value in milligals
of each dial division on the meter. There are variations in calculation procedure?
but, in effect, drift rate, D, in dial divisions per minute, is computed from
- Vbl)
(Rbl - Rbl) - (Vbl
D = (3)
Tbl - Tbl
where R is the meter reading in dial division; V is the accepted gravity value;
T is the time in minutes, and the subscripts b l and b2 refer to Base Station 1 and
Base Station 2. If Base Stations 1 and 2 are the same, then Vbl = V ~ and I Eq.
3 is simplified. If they are different stations, then V ~ must
Z be carefully established
by replicate measurements (three or more) of the type next to be described. T h e
gravity value a t some unknown Station n, read during the interval between Tb* and
Tar is given by
V, = Vbl + C[(R, - Rbd - D(T, - Tb~)l (4)
where V,, R, and T. are observed gravity, meter readings and time of reading at
Station n, respectively.
Theoretical Gravity and the NorthSouth Correction-The earth's normal
gravity a t sea level, gt, is approximated by the "International Formula" of 1930:
g, = 978.0490(1 + .0052884 sinx@- .0000059 sin 22@)cm per sec per sec (5)
where rp is latitude. Eq. 5 may be differentiated to obtain the north-south change
in relative gravity a t any latitude:
where Ii is a vector quantity in the direction of the earth's magentic field, H,. The
total magnetization of a rock is the vector sum of the induced and remnant (per-
manent) magnetization.
INDUCED POLARIZATION
RESISTIVITY SPECTROMETRY
TELLURlC ELECTROMAGNETIC RADAR, ACTIVE OR PHOTOGRAPHY GAMMA
PASSIVE IMAGERY
GEOTHERMAL X-RAY FLUORESCENCE
8 DFFRACTON
Fig. 5-&The electromagnetic spectrum, skin depth and the regions in which certain tech-
niques operate. Hz denotes Hertz-the current term for cycles per second.
be measured across opposite faces of a I-m cube of the material. Most rock-forming
minerals are electrical insulators, and the conductivity of most earth materials
is due to dissolved ions in interstitial water. Conductivity therefore is more de-
pendent upon porosity, degree of saturation and salinity than upon rock type,
and the mode of electrical conduction in earth materials normally is ionic. Metallic-
luster minerals, including graphite, magnetite, pyrite and most base-metal sulfides,
are very good conductors of electricity and may be detected by techniques that
respond to the apparent conductivity (or resistivity) of the earth, and to the
induced-polarization technique, which is sensitive to the mode of electrical
conduction.
Natural Electrical-Field Methods-Natural electrical fields occur in the earth
due to normal telluric current flow, worldwide thunderstorm activity, and solar-
related magnetic storms. These energy sources are utilized in the telluric, magnetotel-
luric and AFMAG methods. Except for AFMAG, which may be construed as
a remote-source electromagnetic method (see below), none of these techniques
have yet gained wide acceptance in mining exploration. Local electrochemical effects
frequently develop near highly conductive bodies in the earth and, when this
occurs, a negative (voltage) center develops over the conductive zone and can
be detected by a spontaneous-polarization survey. The mechanism through which
this batterylike action takes place is best described by Sato and Mooney.J1 Field
procedures consist of measuring the voltage a t various stations with respect to
a reference station. Any high-impedance millivoltmeter is suitable, together with
two metal-salt nonpolarizing electrodes for contacting the earth. Usually these
will be Cu-CuSO. electrodes in a porous porcelain cup. Voltages read are either
contoured or plotted as profiles. A dipole interpretation method, similar to that
of magnetics, is applicable and is described by Heiland." Negative centers with
amplitudes on the order of 100 mv or more almost always are related to sulfides,
graphite or banded magnetite.
Resistivity and Induced-Polarization Methods-These methods employ fre-
quencies that approach direct current, and resistive coupling between current and
voltage circuits is dominant. Four electrical contacts with the earth are required
and a variety of electrode arrays can be used. Three common in-line arrays are
shown on Fig. 5 4 , where a current, I, is caused to flow in the ground between
- WENNER ARRAY
Pa = 2 a a V
Y
-
DIPOLE DIPOLE ARRAY
Pa = ran(n+l)(n+P)Y
I iY,:L
;,,
- THREE ARRAY
Po = 47ra V
'I
Fig. 5-4--Three typical electrode arrays for resistivity and induced polarization surveys.
C1 and Cz and the resulting voltage, V, is measured across P, and Pz. Knowing
V, I, and the electrode geometry and spacing, the "apparent resistivity" of the
ground is computed by appropriate formula, such as shown in Fig. 5 4 . These
formulas assume homogeneous ground, hence the term "apparent," and variations
in apparent resistivity with location or with electrode separation a (and na) are
interpreted in terms of true resistivity variations in the earth. Metal stakes com-
monly are used for current electrodes and nonpolarizable metal-salt electrodes
are employed in the voltage-measuring circuit. When using the "Three Array,"
Cz is located far enough from the measurement area so that its influence is constant
and negligible. Expanding the "a" distance results in deeper current penetration
so that pa plotted vs. a is known as a depth probe. I n the case of the dipoledipole
array, "a" usually is fixed and the distance na extended. Alternately, the electrode
spacing may be held constant and the entire array advanced along a profile.
I n this case, p, is plotted against distance, s. Lateral resistivity changes thereby
are detected. Field procedures may be so organized that both expanding and profile
data are obtained, and special plotting techniques may be used, such as those
described by H a l l ~ f . ~ ~
The permissible upper limit for the frequency that may be used for resistivity
measurements is a complex function of the ground resistivity, the electrode array
employed and the electrode spacing. Inductive coupling must be maintained insig-
nificant with respect to resistive coupling, and inductive coupling will increase
with frequency, electrode spacing and ground conductivity (l/p). MillettnB has
evaluated this effect for the dipoledipole array on a homogeneous earth.
Observed apparent-resistivity curves are interpreted by matching calculated or
model-tank theoretical curves. Analytical methods are available for some resistivity
distributions but when more than two media are involved the mathematical treat-
ment becomes sufficiently complex and uncertain that some form of curve matching
usually is employed. Various approaches to the interpretation of resistivity data
are discussed by Van Nostrand and Cook.* The response of resistivity methods
to a change of resistivity in the earth is controlled by the quantity
+
(P- pl)/(pa pl). Hence these methods are sensitive to small resistivity changes,
but a resistivity change of 10:l gives almost the same response as a change of
100:1.
When both ionic and electronic conduction of current are involved there is
an additional energy barrier a t the interface that must be overcome and gives
rise to the induced-polarization phenomenon. The net effect is that the ground
responds like a lossy capacitance circuit and exhibits a "time dependence" or
its equivalent, a "frequency dependence" of electrical properties. This is discussed
more fully by Waite1 and Marshall and Madden.' Induced polarization effects may
be detected by variations in resistivity measurements known as timedomain or
frequency-domain systems. In the timedomain system, a square-wa-re current is
applied to the ground for a period of about 3 sec. then cut off for a like period,
and again applied in a reverse direction. Voltage readings, V,, are taken during
the current+n interval and are used to normalize polarization effects as well as
compute the apparent resistivity. When polarization is present the voltage will
not drop to zero the instant the current is cut off but will decay with time
in a manner similar to a resistance-capacitance circuit. The form of this decay
curve may be represented by v(t) and the integral of the decay curve, V., given
by
is measured between times h and t2 after current is cut off. The "chargeability,"
M, is expressed as V./V, and is a measure of ground polarization in units of
millivolt-eeconds per volt, or milliseconds. I n this case, tl is long enough so that
inductive effects have died out. In the frequencydomain two V/I measurements
are made a t different frequencies and both must be sufficiently low that inductive
coupling is negligible. For this reason, the lower frequency is usually in the range
0.1 to 0.5 Hz, and the upper frequency in the range of 1.0 to 5.0 Hz. Apparent
resistivity is calculated from the low frequency measurement and the percent fre-
quency effect, PFE, is computed from
PFE = - --
vL - vH X 100%.
VH
Here I is constant for both measurements, and VL and VH refer to the measured
voltage at the lower and higher frequency, respectively. HalloP has shown that
the chargeability, M, and the P F E are entirely equivalent. The interpretation
of induced-polarization and resistivity data is similar, with the objective being
to deduce the true geometry, resistivity and chargeability of anomalous volume
detected. Siegelmhas developed a valuable technique for deriving true chargeabilities
from field measurements of apparent chargeabilities. This has been expanded by
HalloP to apply to frequency effect data.
Electmagnetic Methodr-Electromagnetic methods utilize inductive coupling sup-
pressed by resistivity methods. While there are hybrid systems, pure electromagnetic
methods energize the ground inductively by means of an alternating current flowing
in a "transmitter" coil. The resulting signal, containing ground-response characteris-
tics, is detected inductively by a receiver coil. Frequencies from a few hundred
to a few thousand Hertz are used, and no direct electrical contact with the ground
is required, as the system operates like a loosely coupled transformer. Electromag-
netic methods are rapid, and are widely used where shallow massive sulfides are
expected because, unlike resistivity methods, inductive methods fully utilize the
high conductivity associated with such sulfides. Because no direct electrical connec-
tion to the ground is required, airborne systems are quite feasible and, indeed,
have been highly successful (Pemberton69.
Two coil, or inductive-inductive, electromagnetic systems may operate with a
variety of coil configurations. In common use are coplanar horizontal coil systems,
coaxial vertical coil systems, coplanar vertical-coil systems, and systems in a "null"
configuration which, over normal ground, induce zero signal in the receiver coil.
The "shootback" method of Crone" uses each of the two coils to transmit and
receive in sequence, and has advantages in rough terrain. Typically, a coil separation
is selected appropriate to the problem a t hand and the instrumentation available,
and profiles are run wherein the intensity and ~ h a s eof the received signal is
recorded. If highly conductive material is present within the influence of the system,
"eddy" currents will be induced in the conductor and the received signal will
be changed from its normal values. In other systems, the "tilt" of the field resulting
from a vertical transmitter coil is measured in the plane of the transmitter coil.
Over normal ground, the field will be horizontal and the tilt zero. When conductive
material is present, a tilt will be introduced by the secondary field of the conductor.
Interpretive methods, such as described by Grant and West" or Ward6' may yield
estimates of (a) the relative conductivity of the zone, (b) the conductivity-thickness
product, (c) the approximate depth to the conductor axis, and (dl the extent,
width (within limits) and dip of the conductor. The physical properties and geom-
etry deduced yield no implications as to the economic significance of the conductor.
Barren pyrite, pyrrhotite and graphite may be excellent conductors as are eco-
nomic massive sulfides.
The AFMAG system requires only a sophisticated receiver coil and relies upon
natural audio-frequency energy superimposed on the earth's magnetic field by world-
wide thunderstorm activity. Azimuths and tilts of these fields arc measured from
point-to-point and departures from the normal horizontal (zero-tilt) field will be
observed near conductive bodies. These natural fields vary throughout the year
and the method is useful (and rapid) only when fields are strong. Depth penetration
is great but large regional tilts may be present due to small conductivity changes
associated with gross geological features.
Seismic Method-Seismic methods depend upon velocities of accoustical energy
in earth materials. Accordingly, they involve the generation of a short pulse of
seismic energy and the permanent recording of the arrival of the seismic pulse
a t distant locations, with time intervals after the pulse instant determined to
millisecond accuracy. Some type of explosive or the impact of a mass furnishes
the energy, which is detected by sensitive seismometers operating into electronic
amplifiers and a suitable recorder. Wave (or optical) theory of travel time, reflection,
absorption, diffraction and refraction, are applicable to seismic interpretation and
quite different principles arc involved than with the "potential" methods, wlvllich
include gravity, magnetic and electrical techniques.
Seismic methods have gained wide acceptance in petroleum exploration but
:i~plications to mining have been intermittent, largely due to the vastly more
complex geological conditions a t most mining properties, as well as costs. As a
result, there are few instances in which seismic methods have been employed
in the search for sulfides. The possibility exists that under certain circumstances
seismic methods could be used to detect sulfides, but most use by mining companies
has been in engineering and hydrological applications. Seismics have been used
to aid in the interpretation of other data by providing depth-to-bedrock information.
Elliothadescribes some applications of the seismic method to mining exploration.
Radiometric Methods-Uranium, thorium and potassium-40 occur naturally in earth
materials and, because these clements are radioactive, their presence, or any
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slauueqa B l a u a jo laqmnu aq$ s8 aa!l!suas alom sapor$aaIa aq$ purr ~a%is1 aprrm
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up+qo ol ' q n s a ~ s s v w n o a p l o l aql n8q$ ma[ Ll?uvoym8!s aq I~!M lauuvqa
Diana qaea u! ,,qunoa,, jo iaqnmu aqL 'UO!l8!pEJ jo aainos aq$ UI op-urn!ssrr$od
pue 8w-mn!nvq? *~1~-qlnms!qjo uo!$~odo~daql laagai o$ pa$sn!prr aq Lem laql
qno-peal Bu!p!ao~d alquFeas am s~qaarolloadsuo!lell!lu!as jo laqmnu s ' ~ l n s as~EV
.iaqmnu pue L$!sua$u! o$ %u!p~oaa8saqs8g aql llos u8a ~ a z d l w e?qS!aq-aspd s ql!k
Iuamrulsu! UE JO$E~~F)U!LW$unoa ~ s l o $e JO p8alsuI .LWJsmmv%Iuaplau! aq$ jo L%aua
aql q Ll!sua?u! u! 1euo!l~odoid aq I~!M [s$sL~auO!p~~!$u!as s u! ,,saqstlg,, aqL
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lall!ma smme8 ~ u e $ ~ o d m $son
r aq$ s! 80~-mn![pq? PUB sap!lanu jo sa!las E qSnolql
sLeaap o q s z g z - m n p o q ~.aaM 0z.z pue 9 ~ ' 1~ 1 ' 1'ttyo '19.0 a.18 qa!qM jo lu8)~od
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'eqdlv .sLa~lnsa!qamopsl Lq papalap aq nsa 'joaiaq$ mO!$8quaauoa snolamous
horizontal, and an image is created of the reflected energy not unlike that from
low sun-angle aerial photography, with some loss of resolution due to the longer
wavelengths. Synoptic imagery from very high altitudes or from satellites produces
an instantaneous "view" of a very large area and has important applications in
structural geology. Properly used, remote sensing techniques will greatly enlarge
the information that can be deduced from conventional aerial photographs.
Coots af Geoph~icalWork-The cost of performing geophysical surveys will vary
over a wide range depending upon access, terrain and the amount of detailed
information required. Approximate relative direct costs per square mile in units
of 1970 dollars are shown in the following tabulation for initial reconnaissance
coverage of a typical area.
Radiometric.. . . . . . . . . . . . . . . . . . $1&$20
Magnetics (ground).. . . . . . . . . . . . 3&50
Gravity . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5&100
Electrornagnetics.. . . . . . . . . . . . . . 30&500
Induced-polarization . . . . . . . . . . . . 400-700
Seismic surveys in mining applications are carefully planned to suit the problem
a t hand and are not generally used in a reconnaissance fashion. Seismic-refraction
surveys might be performed for approximately the same cost as induced-polarization
surveys, although costs could be higher than this by a factor of 10 or more,
depending upon the depth of investigation and energy source used. Seismic-reflection
surveys require relatively elaborate equipment and procedures. Consequently, costs
ranging upward from $50,000 per crew-month are not unusual.
Aeromagnetic surveys and aerial radiometric surveys are flown separately or
combined a t costs of the order of $10 to $15 per line-mile. Airborne electromagnetic
surveys almost always are combined with, a t least, aeromagnetic surveys a t costs
of $20 to $30 per line-mile, using fixed-wing aircraft. Helicopter costs would be
higher. Somewhat lower rates would apply to surveys exceeding 3,000 line-mi.
5.2.4--GEOCHEMICAL SURVEYS
Geochemical surveys normally call for the systematic collection and chemical
analysis of any of a wide variety of naturally occurring materials. The chemical
analyses most commonly made in exploration are for traces of the ore metals.
The materials sampled usually are rocks, soils, stream sediments, surface or ground
waters, vegetation and air.
The sulfide ores of copper, lead, zinc, nickel and molybdenum are the most
amenable to geochemical methods of exploration. To a lesser extent, geochemical
surveys have been applied in the search for uranium, tungsten, tin, mercury, gold
and silver. They are, in general, not useful in looking for industrial minerals,
gemstones, bauxite, iron ores, or ores of manganese, chromium or titanium.
Geochemical methods have been most rewarding where the older and more
conventional methods have been relatively ineffective. This applies particularly
in the primary reconnaissance of very large tracts of remote terrain never thoroughly
prospected previously; also areas where outcrops are scarce because of forest cover,
deep weathering or glacial overburden. In recent years, many major discoveries,
not only of new deposits but of new mineralized districts in the Tropics and
in the Far North, have been credited to geochemical reconnaissance methods.
Other exploration situations where geochemical surveys have been particularly
useful are: (1) in reconnaissance for ore types only recently of economic value
(example, Climax-type molybdenum deposits) ; (2) in reconnaissance for low-grade
deposits where the ore minerals or their weathering products are relatively incon-
spicuous and hence had not been previously recognized (low-grade copper deposits
in British Columbia); (3) in detailed surveying of known mineralized districts
to discover additional high-grade deposits hidden beneath a cover of glacial or
residual soil, vegetation or forest litter; (4) as a method of ground checking
airborne or ground geophysical anomalies; and (5), along with geological and
geophysical surveys, in appraising known but poorly exposed deposits.
Geochemical methods in general are not to be depended upon for pinpointing
drill targets in exploration drilling. Areas generally favorable for mineralization
may be indicated by geochemical surveys, but drill holes should be spotted on
the basis of geological and geophysical observations.
Geochemical survey data normally can be presented most clearly in the form
of maps showing sample sites, together with relevant geological and cultural features.
The results of chemical analyses may be lotted against the sample site directly
as numbers, or generalized as special symbols, contours or color patterns.
Geochemical maps cannot be interpreted in terms of ~ o t e n t i a lmineralization
without some guidance from past experience. If case histories of surveys in similar
environments are not available, this experience must come from experimental
orientation surveys in the vicinity of known deposits of the kind being sought.
From a study of case histories or orientation data, it should be possible to identify
certain features of the geochemical map that appear to be associated with known
ore, and that hence should be indicative of undiscovered ore. These features,
or iianomalies," may be defined by a certain minimum or threshold level of metal
concentration, a certain diagnostic association of elements, or a characteristic geo-
metrical pattern or grouping of high values that is suggestive of ore.
Soils-The interpretation of the data of soil surveys will be different depending
on whether the material sampled is (1) residual soil, developed by the weathering
of bedrock without substantial lateral movement, (2) glacial moraine and outwash
that has been transported laterally by the continental ice sheet, or (3) soil air
with constituents that may have percolated upward from depth in vapor form.
These will be considered separately below.
Residual S o i L I n temperate climates, residual soil commonly occurs as a rela-
tively thin blanket of loose material overlying the bedrock. In areas of tropical
weathering, such as central Africa, however, it may be as much as 50 to 100
f t thick, and so completely decomposed that the identity of the parent rock cannot
be ascertained by simple inspection. Even so, residual soil almost always carries
some chemical memory of the composition of its parent. Thus it is extremely
rare to find a residual soil derived from mineralized rock that is not in some
way anomalous.
Understandably, therefore, the widest application of residual soil sampling is
in tropical terrains where fresh outcrops are scarce and almost all surface materials
look alike. This includes many areas, such as the southern Appalachian, now char-
acterized by temperate climate but where the present soil cover was developed
in an earlier cycle of tropical weathering. To a lesser extent, soil surveying is
useful in temperate forested areas where the soil cover is thinner, but where bedrock
is covered by humus and forest litter. I t generally is not as useful in mountainous
areas where outcrops are abundant and conventional prospecting methods are both
cheaper and more effective.
Residual soil surveys have been used effectively in primary "blue sky" recon-
naissance of very large areas characterized by a poorly developed system of surface
drainage channels, particularly in the flat savannah country of central and western
Africa. Where drainage patterns are well developed, it normally is more economical
to use sediment surveys. Soil surveys also are used extensively in all topographic
and climatic situations in following up or confirming anomalies uncovered by
geochemical sediment or geophysical surveys. Detailed soil surveys may be useful
in conjunction with other methods in exploring the immediate vicinity of known
deposits.
Soil surveying commonly involves the collecting of samples--usually not more
than 100 g-at depths rarely greater than a few inches. Samples normally are
collected a t fixed intervals, either along straight traverse lines or along topographic
or cultural features, such as ridge tops or roads. The spacing of samples should
be only close enough to permit two samples to fall within the anomalous feature
being sought. Thus, if the target is a narrow vein where the anomalies are 50
f t wide and 500 ft long, the spacing should be 25 f t along lines 250 f t apart.
Identification of soil horizons and care in taking soil samples-both very im-
portant f a c t o r s a r e discussed more fully by Hawkes and Webb (see Bibliography).
I n routine soil survey work, an experienced sampler can collect 50 to 200 samples
per day. To the cost of the sampler's wages must be added the cost of transport,
sample preparation and analysis, plus overhead, supervision and administration.
The total cost, therefore, will depend not only on the cost of local labor and
facilities but on the degree and quality of professional supervision required. A
routine survey in Africa involving tens of thousands of samples over hundreds
of square miles, all collected on geometric grids, will not require an expensive
field staff or highly professional supervision. Under these circumstances, the cost
of field operations has reportedly been as low as 50/ per sample, exclusive of
analytical costs. In high-wage areas of North America, the cost of soil surveying
usually ranges between $2 and $10 per sample which, at commonly used spacing,
would be equivalent to $1,000 to $5,000 per sq. mi. Costs may be somewhat higher
in remote areas of Alaska and western Canada where helicopter transport is
necessary.
Glacial Soils-In glaciated areas, the soils at the surface are developed on
detritus transported laterally, often for many miles, by the continental ice sheet.
The composition of such soils reflects the rocks and mineral deposits of the area
where the ice obtained its load rather than the immediately underlying bedrock.
Glacial moraine, therefore, may carry important messages in the form of ore boulders
or preglacial soils and rock flour scraped off mineralized outcrops by the advancing
ice. The search for ore boulders and the chemical analysis of the fine fraction
of moraine have been used effectively in Scandinavia for many years as a guide
to buried ore "up-glacier" from the sample site. To date (19711, this method
has not been applied on a large scale in prospecting the glaciated areas of North
America, although there is no reason to suppose that it would not be equally
effective.
Soil Air-Certain types of ores are known to give off vapors that are free
to percolate to the surface. The analysis of soil air for radon, the gaseous radio-decay
product of uranium, has been used effectively as a guide to uranium ore. Most
sulfide minerals, in addition to the common metals, contain traces of mercury.
which may be released as a vapor during oxidation. As of 1971, the mercury-vapor
method is the subject of very intensive research under a wide variety of conditions.
Consequently, it still was in the development stage, and had not been credited
with any discoveries, although showing extreme promise.
Streams--The most widely used and effective geochemical method of exploration
involves the sampling and analysis of fine-grained sediments from surface stream
channels. For some problems, analysis of surface or ground water also has been
shown to be effective. Both methods involve products of weathering of ore minerals
carried from their sources in a buried ore body by natural waters, underground
or surface.
Stream Sedimen,t.~-The chemical composition of stream sediments reflects in
part the composition of the soil eroded and washed into the stream channel,
and in part the material chemically precipitated on the surface of the sedimentary
particles by the stream water. In the first case, the metal-rich soil derived from
ore deposit weathering will carry its metalliferous imprint into the drainage sedi-
ments. Here the metal content normally is strongly fixed and requires a vigorous
chemical attack to release it for analysis. In the second case, ground water that
has percolated through an ore deposit may carry dissolved metal and later precipi-
tate it on the surface of the granular material of the sediment. This chemically
precipitated fraction is relatively soluble, and can be distinguished from metal
held in the detrital phase by its ready solubility in relatively weak chemical
extractants, such as are used in the tests for "cold-extractable" metal. In either
case, a well-chosen and properly prepared sample of stream sediments may indicate
the relative likelihood of the occurrence of undiscovered mineralization in a water-
shed area of as much as 10 t o 15 sq. mi.
Stream sediment surveys are especially suited for rapid and economical recon-
naissance of large areas. The ~rincipalrequirements for success are an adequately
developed network of surface drainage channels, and an area where there st111
is a chance of undiscovered ore near the surface. With only minor exceptions,
this includes about all parts of the world.
Stream sediment surveying commonly involves the collection of a sample of
fine-grained sand or silt either from the active channel of the stream or from
the floodplain near the active channel. Before analysis, samples commonly are
dried, sieved through a noncontaminating 80-mesh screen, and the coarse fraction
discarded. Thorough coverage of an area may require the sampling of all streams
a t intervals as close as % mi. However, in many areas, experience has shown
that single samples from streams with drainage areas of 5 sq mi or less are sufficient
to locate most of the anomalous a r e a s a t a small fraction of the cost of more
detailed work.
The cost will depend on the density of sampling and accessibility. A median
figure for intensive sediment surveying a t %-mi intervals, where considerable walk-
ing or helicopter transport is required, might be $20 per sq mi a t current American
wages. Where samples of stream sediments are taken only from streams draining
between 1 and 10 sq mi, and these only from road traverses, the cost could
be brought down to $2 per sq mi or less.
Water-Water sampling as an exploration method is rarely competitive with
sediment surveys. Water samples are considerably more expensive to collect and
process. Also, most metals are only very slightly soluble in water under normal
conditions. An outstanding exception is uranium, which can form a very soluble
and stable complex ion with carbonate. For this reason, the uranium content of
water is a much more dependable exploration guide than uranium in stream sedi-
ments. Another exception is where sediments, for one reason or another, are lacking,
so that the metal content of water is the only available clue to buried ore, as
with zinc in Wisconsin spring water and copper in Arctic lakes. Costs of collection,
processing and analysis of waters for the examples mentioned are in the order
of $10 to 8 0 per sample.
Vegetation-The use of vegetation as a guide to buried ore dates back to the
earliest days, when prospectors noticed that certain ecological features, such as
barren areas or peculiar types of plants or trees, were associated with mineralization.
More recently, chemical analysis of vegetation for trace elements has received
wide attention as a possible exploration tool.
Possibly the two most famous examples of indicator plants are the calamine
violet, Viola calumineria (lutea), that led to the discovery of many of the lead-zinc
deposits of western and central Europe, and the "copper flower," Ocimum homblei,
that was found to grow exclusively on copper-rich soil in the Zambian Copperbelt.
Observers have recorded many other less spectacular or less well-known correlations,
including various disease symptoms and unusual shades of the leaves of plants
and trees growing over mineralized ground. Influenced by the space program, workers
now are investigating off-color effects that can be detected instrumentally from
aircraft or satellites. Although these methods were showing considerable promise,
they had not, as of 1971, enjoyed general acceptance by the exploration profession.
Some species of vegetation rooted in a metal-rich environment have a demon-
strated tendency to absorb some of the metal through the root system and concen-
trate it in the leaves and twigs, where it is accessible for sampling. Some plants
have very deep root systems, enough to tap metal-rich ground water beneath
hundreds of feet of barren cap rock. In the Colorado Plateau, for example, deep-
rooted plants growing over completely blind uranium deposits show higher than
normal uranium contents in stems and foliage. Unfortunately, this approach to
prospecting entails certain unavoidable complications. Not all species of plants
show either a tendency to concentrate metals or a consistent response to metal-rich
soils. Furthermore, different parts of the same plant commonly will show a different
response. Thus, for every plant association, it is necessary to determine the optimum
species with which to work, and then restrict sampling to those species. Collecting,
preparing and ashing samples of vegetation prior to analysis are considerably more
troublesome and expensive than for inorganic samples. Field experiments almost
invariably show that where vegetation is anomalous, the underlying soil also is
anomalous, possibly because of the accumulation of metal-rich organic litter. For
these reasons, soil sampling generally is preferred to vegetation sampling, except
in certain rocky or sandy desert environments, such as the Colorado Plateau,
where normal soils are absent.
TraceElement Analysis--The normal content of the principal ore metals in soils
and vegetation is in the range from 10 to 100 ppm. Until about 1965, colorimetry
and, to a lesser extent, emission spectrography were the only economical methods
with the requisite sensitivity for this range. Later, however, atomic absorption
spectrometry, which combines high recision with adequate sensit~vityand economy,
has been progressively replacing the older less precise methods.
Colorimetry-Colorimetric methods of trace-element analysis depend on a con-
spicuous and quantitative change in the color of a specific indicator solution after
reaction with a given minor element. The procedures involve chemical attack
on a measured amount of the sample to release the trace element into aqueous
solution, usually followed by shaking the extract with an immiscible organic solvent
containing the color reagent. The depth, or hue, of the characteristic color in
the organic layer then is a measure of the amount of the trace element in the
original sample. An advantage of this procedure is that it requires only standard
laboratory supplies and equipment, which usually can be purchased for under
$1,000, and that portable test kits for use in exploration base camps or directly
in the field can be devised. Furthermore, for certain special determinations, such
as cold-extractable copper in stream sediments, colorimetric methods are far more
suitable than instrumental methods. The principal disadvantages are poor repro-
ducibility, rarely better than 30% even under optimum conditions, and the fact
that the procedures are particularly susceptible to human error.
Atomic Absorption-Atomic absorption analysis is based on the atomization
of a solution containing the unknown constituents in a gas flame, and instrumental
measurement of the absorption spectrum of light passing through the flame. The
wavelength of the absorption lines identifies the element, and the degree of absorp-
tion is quantitatively related to the concentration of that element in the flame,
and hence in the solution. The great advantages of atomic absorption analysis
are very high precision, results can be duplicated within a few percent, and the
fact that it is relatively unaffected by human error. The principal disadvantage
is the high initial cost of the equipment, some models selling for more than
810,000.Another disadvantage, for installations in remote parts of the world, is
the problem of breakdowns and delays while the instrument is shipped out for
servicing. For surveys in remote areas, therefore, it often is more efficient to
ship samples by air to a well-equipped lab in some industrial center. Costs quoted
by commercial laboratories are about the same as for colorimetric determinations.
Other Methods-For certain special problems, other methods of analysis may
be preferable to either colorimetry or atomic absorption. For the radioactive element,
radiometric methods may be more suitable. Where semiquantitative analysis of
a check list of five or more elements is needed for every sample, emission spec-
t r o g r a p h ~is useful. For determining extremely low concentrations where cost of
analysis is not a consideration, isotope dilution methods are applicable. For major
elements in solution, auch as sulfate or sodium, various electrometric methods
are indicated.
Fig. 5-6-Diagrammatic sketch of the vein system, No. 5 level, Bunker Hill mine, Kellogg,
Idaho.
Some 4 mi east of Bunker Hill; in an ares long regarded as the Dry Belt,
the Sunshine mine was developed to a depth of more than 1,500 ft before a
major ore body was discovered. At 3,700 f t (Fig. 5-7, after Colson") a complex
system of veins was developed in close association with faulting and secondary
folding on the steep north limb of a major anticline. Productive structures were
opened to the 5,200 level. 2,500 f t below sea level.
Upon what methods must the industry rely in its search for vein deposits
to replace those being depleted? The answer is basic, but not simple. All the
techniques of exploration technology must he employed to improve the knowledge
of the structural and environmental conditions that control and localize vein-type
ore deposits. Fundamental to giving serious consideration to the mineral deposits
Fig. 5-7-Diagrammatic sketch of the vein system, 3700 level, Sunshine mine, Kellogg,
Idaho.
of any area is a basic knowledge of the structural framework in which they are
expected to occur. The background has been well established in many districts
through detailed geologic mapping over a long period of years, and this information
now becomes the guide in the search for new ore shoots or the extensions of
old ones.
Frequently it becomes necewary to extend exploration into relatively undeveloped
areas, and the direction of such work must be based largely on two-dimensional
observations. Surface geology, combined with interpretive results from geophysics
and geochemistry, becomes the initial consideration, but the experience gained
from more extensive development under similar conditions in other districts often
can be a valuable comparative guide.
There are areas of the earth where i t is permissible to postulate the existence
of strata-bound mineral deposits a t depth in horizontal beds. These "blind" deposits
lack surface indications of their presence and are beyond the range of presently
available remote sensing methods, whether geochemical or geophysical. Such postula-
tion is premised on regional evidence that stratigraphic sections, sedimentary en-
vironments and "fossil" features favorable for localization of ore deposits are present,
that ore deposits have been found elsewhere in similar settings and, in some
cases, that mineralization, not of ore grade, has been encountered in holes drilled
in the area for oil or gas or water. This situation is to be distinguished from
the one in which strata-bound deposits have subsequently been folded and exposed
at surface by erosion, and thus are amenable to exploration by conventional methods.
Horizontal strata-bound deposits occur on platforms in a section of clastic
or carbonate sediments which may contain volcanic units, and commonly are local-
ized with respect to features related to unconformities. The features are talus,
sedimentary pinch outs, offshore mud banks or reefs related to unconformities
below, to stream channels on the unconformity, to solution-collapse breccias below
an unconformity, or facies changes marking commingling of sediments from different
sources and unrelated to an unconformity. Such deposits generally lack an associated
alteration halo which would enlarge the target for search. Alteration, a t best,
commonly is minimal to absent in the footwall, except in a volcanic conduit,
and moderate to minimal in the hanging wall. Fig. 5-8 illustrates some of the
sites known to be responsible for localization of ore in carbonate rocks.
Given an area in which the above specifications appear to be satisfied, how
does one go about the search? The objective is to determine a t minimum expense
whether the postulated features are present and, if so, are they mineralized. This
requires defining the size of the district sought, and the ~ossiblesize and shape
of deposits and the orientation pattern of localization if such are linear.
The welldocumented TriState Dist. provides an excellent opportunity for the
application of statistical methods to the determination of the spacing, pattern
and minimum number of holes required to achieve a specified probability of pene-
trating mineralization of ore grade and thickness in one hole. Slichter" discusses
the relation of completion of search to cost thereof. Such search is costly and
should not be undertaken unless one has sufficient confidence in the concepts
to persist in drilling many holes, a t least 100. In this statistical probability approach
to prospecting, the chance of finding favorable features is fair; of finding mineraliza-
tion therein, small; and of finding mineralization of ore grade and thickness, very
small. One should not depend on being lucky, early. Also i t must be acknowledged
that, due to a run of bad luck, ore bodies can be missed. However, if several
Fig. 5-&Idealized vertical section of the features responsible for the localization of Mis-
sissippi-Valley-type mineral deposits.
Disseminated ore bodies range in size from 5 to 2,000 million tons, and have
tenor spreads of 0.2 to 2.0% Cu and/or 0.01 and 050% MoS2. They occur in
many kinds of altered rocks. A porphyry with quartz or feldspar phenocrysts
in an aphanitic groundmass is almost always present. Pyrite is ubiquitous. Other
hypogene sulfides are chalcopyrite, bornite, mol~bdeniteand, rarely, enargite. Super-
gene chalcocite is common. These minerals and the genetically related porphyries
have ages ranging between 10 and 200 million yr, but a majority are near 65
million yr in age. The terranes of igneous and hydrothermal activity of this age-
range-and which contain ore bodie-are known within broad belts along the
Western Cordillera of North and South America from Chile to Alaska; from the
Philippines through New Guinea, Queensland and the Solomons; and through
areas of the Mediterranean and Eastern Europe. Within these belts are many
deposits which contain only disseminated pyrite. These pyritic deposits outnumber
those containing known commercial amounts of copper-molybdenum by dozens
to one.
I n gross aspect, all these sulfide deposits have a distinctive, variegated, rust-brown
surface expression (termed gossan or capping), because in all environments the
sulfides are partially or thoroughly oxidized and leached by rainwater, leaving
(a) residual iron oxides, (b) supergene clay minerals, (c) occasional tarnished
sulfides and (d), in a few places, chrysocolla, malachite and/or ferro-molybdite
in small amounts. The thickness of the oxidized and leached zone ranges from
a few inches to hundreds of feet, depending on the geologic history of the particular
locality. There is evidence that leaching and enrichment of many of the larger
chalcocite ore bodies occurred tens of millions of years ago. Their origin, therefore,
has no relationship to modern climate. I t should be noted also that the presence
of "copper-stain" in outcrops is not necessarily a direct guide to ore.
The techniques of search vary with environment (climatic as well as geologic).
Regions of sparse vegetation and fairly numerous outcrops permit recognition of
deposits by fast air or ground reconnaissance. I n areas with abundant vegetation
and soil, or with sediments and volcanics of post-ore age, and with rare outcrops,
the search for these deposits requires: (a) silt and soil geochemical sampling,
together with careful geological observations of float and talus fragments, (b)
photogeologic studies, and/or (c) reconnaissance geophysical techniques. Other rather
--
specialized techniaues are applicable. - not universallv accepted. These
although
comprise analyses of regional geological information regarding lineaments, plate
tectonics, paleotectonics and metallogenic provinces, together with computerization
of statistical data.
Once the presence of a disseminated sulfide deposit is recognized, the next
exploration step is a geological reconnaissance on the ground to determine generally
the rock types, the character of alteration-mineralization and limonites, and the
limits of altered rocks. If this produces favorable results, one or more of the
following techniques may be applicable, depending on local circumstances: (a)
trenching or shallow drilling to expose bedrock, (b) detailed geologic mapping,
(c) soil geochemical sampling on close-spaced grids, (d) geophysical surveying
(IP, EM, Mag, SP), and (e) preliminary drilling. The only procedures which,
used alone, may provide conclusive information about the value of a prospect
are geological reconnaissance and preliminary drilling.
There are two techniques which have been suc~essfully applied in analyzing
the potential of a deposit before it has been drilled, and in expanding known
ore bodies or finding new ore bodies in old districts. These are: (1) mineral
zoning and (2) leached outcrop interpretation, discussed below :
1. In some deposits, hypogene chalcopyrite and molybdenite are more abundant
in alteration facies consisting of potassic minerals (K-feldspar and biotite) than
in facies in which the original rock minerals have been recrystallized in varying
degrees to quartz-sericite-clay assemblages. The subject includes many variations
among districts. A simple model consists of a core of potassic alteration surrounded
vertically and laterally by quartz-sericite. Vertical dimensions of this simplified
model are uncertain because the total vertical length is not known for any one
deposit. Indications are that minimums of a t least a few of the largest deposits
were, prior to erosion, at least 10,000 ft and probably much greater. I t is important
to attempt to estimate the vertical position which a newly discovered deposit
may occupy in a model. The tops of several major ore bodies have been discovered
in recent years a t depths of 2,000 to 3,500 ft. These discoveries have been due
to recognition of vertical and horizontal zonal characteristics.
2. The interpretation of leached outcrops, or lLcapping,"is based on the subtleties
of the chemistry of oxidation and leaching of iron, copper and molybdenum sulfide
minerals, and on the geologic history of those processes. Oxidation proceeds slowly,
and in many regions it has been outstripped by erosion because these disseminated
deposits all originated in broad belts of contemporaneous or subsequent mountain-
building. If original iron/copper sulfide ratios were less than about 5:1, indigenous
limonites having a black to seal-brown color, with a bright-red streak (in contrast
to transported limonites with similar color but an orange streak), indicate that
chalcocite originally was present. Diffused orange, brick-red and yellowish limonites
indicate that pyrite with little, if any, copper sulfide was present. Parallel thin
ribs in cavities, together with brownish limonites, suggest the original presence
of chalcopyrite. Pale-yellow ferro-molybdite, of course, indicates that molybdenite
was present. These features are quantitatively diagnostic only if the original metal
contents were more than about 05% Cu or 0.2% MoSZ.
The evaluation of exploration possibilities of newly discovered disseminated
sulfide prospects involves a number of variables and uncertainties, but many aspects
of the problem are subject to understanding and prediction if geological observations
of physiographic and tectonic history, rock types, structures, alteration and limonites
are made first.
Placer exploration involves four basic steps: (1) reconnaissance of the lands,
(2) sampling, (3) sample processing, and (4) evaluation of results. These steps
may be taken separately or combined. Each is important in itself and each may
be critical in relation to the end result. Work related to exploration drilling or
to otherwise testing a placer deposit commonly is referred to under the general
term "prospecting."
Reconnaissanc-A preliminary inspection of the lands should precede any detailed
placer examination or sampling work. If the property is small, this may take
less than an hour but if it is large, or if it contains significant mineral exposures,
several days of presampling reconnaissance may be in order. Aerial photographs
can be most useful in dealing with topography, drainage and many other features
not easily seen on the ground. There is an unfortunate tendency to minimize
the importance of the reconnaissance step. The history of a district can help
in selecting and interpreting placer samples in the reconnaissance phase. Any sign
of old workings should be carefully investigated. Production records are invaluable,
and nearby mines should be visited and examined whenever possible. Reconnaissance
procedures must be tailored to suit each situation, and the time and effort required
depend on the exnmining engineer's experience and perception.
The reconnaissance evaluator should have a thorough knowlec'ge of placer mining
and the various operating methods. In particular, he should know the principal
limitations and major pitfalls.
Sampling-Contrary to popular belief, representative placer samples are difficult
to obtain. In most cases, sample results require careful interpretation. Some impor-
tant considerations are :
Large Particle Size-The typical placer deposit is a mixture of fine sand, pebbles
and boulders varying from a few tens to perhaps hundreds of pounds each, making
it very difficult to take a small representative sample.
High Unit Valw o i Gold-Any error in mineral content of a placer sample
will be highly magnified in the end result. I n a commercial placer the relative
amount of gold (by volume) may be on the order of one part gold to a hundred
million parts of gravel. Ground having a gold-gravel ratio 1:100,000,000 by volume
is worth approximately 158 per cu yd @ $35 per oz. A single small particle of
gold in a pan of gravel can be equivalent to 2 to 5~ per cu yd. This is illustrated
by Table 5-4.
Minerals Other Than Gold-Placers chiefly valuable for minerals such as
monazite, rutile, cassiterite, ilmenite, etc., generally are easier t o sample and evaluate
than gold placers. These minerals commonly have a relatively low unit value
and make up a larger part of the mass, so that extraneous particles have less
7% din. . . . . . . . . . . . . . . . . .
5% dia . . . . . . . . . . . . . . . . . .
3 din.. ..................
3 x 6. . . . . . . . . . . . . . . . . . .
6 x 6. . . . . . . . . . . . . . . . . . .
6 X 12. . . . . . . . . . . . . . . . . .
12 X 12. . . . . . . . . . . . . . . . .
16-in. pan*. . . . . . . . . . . . . .
effect on calculated values. Often such deposits are of well-sorted small-sized detrital
materials, such as beach sand, making it easier to obtain representative samples.
Erratic Distribution of Values-Valuable minerals are not distributed uniformly
through the typical placer deposit. Heavy minerals and gold in particular commonly
are confined to narrow discontinuous pay streaks with little or no value between
them. Coarse gold is exceptionally erratic and reliable evaluation of results will
require more than taking a few small samples and an exercise in arithmetic.
In theory, these problems can be overcome by taking bulk samples (measured
in tons rather than pounds) but this seldom is resorted to in actual practice.
Some argue that taking a large number of small samples will statistically cancel
the eccentricities of a givetl deposit, but practical considerations seldom permit
this approach.
lnduatry Practice-In modern practice by established placer organizations, an
employee is placed in charge of evaluation who has wide experience with that
type of deposit. Limited credence may be given to any one sample and, after
a thorough study of all prospecting data (perhaps with taking of additional check
samples), experience-based adjustments, or "correction factors," are applied to the
initial sample data where needed. Successful placer companies rely as much on
experience and the insight of management and prospecting personnel as they do
on initial sample results.
Choosing a Sampling Method-The unique characteristics of each deposit make
it di5cult to apply universally a single, or a "best," method of sampling. A thorough
presampling reconnaissance usually will indicate whether pits, shafts, drilling, etc.,
are to be used. Commonly, the things which are to be determined by sampling
are the very things which should govern the type of sample to be taken in the
first place. I t is good practice, therefore, to progress from a simple beginning,
through a series of carefully evaluated steps, to the final decision, each phase
of the work designed to give a "go" or "no-go" answer for subsequent work.
Those interested in the details of placer sampling and methods are referred
to well^.'^ Some of the general methods to be considered are:
Sampling existing exposures.
Hand-dug excavations.
Machine-dug shafts.
Backhoe pits or trenches.
Bulldozer trenches.
Churn drill holes.
- Methods-In
Drilling - olacer
the United States,, large - deoosih usually are explored
by a gasoline-powered "placer" drill with a 6-in. drive pipe (casing) and 7%-in.-dia.
drive shoe. A special vacuum-type sand pump removes the sample as drilling
progresses.
A lightweight hand-powered churn drill used extensively in South America is
known as the "Ward" drill. In Asia and in parts of Africa, a unit consisting
essentially of flush-jointed casing equipped with a serrated cutting shoe has been
widely used, particularly for sampling tin placers. This is the "Banka," or "Empire,"
drill. The casing is rotated by a man- or animal-powered sweep attached to the
upper section. Men standing on an attached platform chop up the drill core and
remove it from the casing with hand- ower red tools. Placer-drilling methods and
evaluation have been described by Daily," Doheny," McCallum," Smith? Wells,'?
and Wolff." Gri5thT8has described the Banka drill in detail.
Widespread placers with broad mineral distribution usually are explored by
drill holes on a grid pattern. Narrow placer channels are drilled at relatively close
intervals along lines laid out a t right angles to the general irend of the stream
or deposit. Hole spacing along lines may be 100 ft or less and distance between
lines on the order of 500 ft or more. Relatively narrow pay channels can be
delineated in this manner. Typical drill patterns and calculating procedures are
illustrated in Figs. 5-9 and 5-10.
Shafts sometimes are put down over selected drill holes to establish a correction,
or "shaft," factor which, combined with experience-based judgment, is used to
adjust calculated values. Visual inspection of the gravel in place permits a better
evaluation of physical characteristics of the deposit.
Drilling Costs-Drilling costs and records usually are considered confidential
information by established placer companies. They vary widely, depending upon
the time spent in moving and setting up, actual drilling, stuck or lost tools,
breakdowns, pipe pulling, etc. Under a variety of drilling conditions in the United
States, Canada and South America, it has been found that power drills average
approximately 15 f t per 8-hr day over the life of a project. Costs of placer drilling
reflect cost of labor, particularly the scarcity of experienced placer drillers and
panners, who command premium wages. The minimum direct cost for operating
a placer drill in the United States, o n a one-shift basis, can easily exceed $200
per day.
McCallum" reports on hand-powered Ward drill costs under a variety of South
American conditions, which vary from $1.58 to W.03 per ft in a region where
laborers earn $1 per day. In Bolivia, 80-ft holes in river gravels required 10 to
12 days for each hole, using a 5-in. Ward drill. A 6-in. power drill operating
on the same river bar took 5 days to complete a similar hole.
Number of Samples Required-There are no simple rules governing the number
of samples to be taken. Each project should be planned on the basis of the
reconnaissance findings. I s the deposit large and regular, with the valuable mineral
EXPLOIUTION
Step 1-GRAPHIC DISPLAY OF PROSPECT DATA
AVERAGE VALUE = -
$684,065
x 100
40'
= 3 4 . 0 ~per cubic yard
1' From Step 2.
C4 22 37.2 818
3 El.5
D.5 -40
30
20.5
28.4 - 30.7 27.06 20,500 209,100 56,582
92 2490
B4 40 33.4 1336
A-3
A-5 -40
30
41.8
25.2 -1672
756 36.6 34.24 30,100 367,220 125,736
110 3764
EL3 30 40.5 1215
8-4
A-3 -40
40
33.4
41.8
1336
1612 36.6 34.43 16,800 204,960 78,766
110 4223
C-3 33 45.4 1498
6 39.32 19,650 224.010 88.080
103 4049
C-3 33 45.4 1498
C4 22 37.2 818
7
- 40
95
33.4 1336
3652
31.7 38.42 22,850 242,210 93,057
82
38.3
28.4 -1149
852
2819
27.3 3431 21,050 191,555 65,722
Fig. 5-)-Use of the "triangle" method of calculating prospect values where the deposits are
drilled on a grid pattern.
broadly distributed, or is i t a boulder-strewn stream-type deposit containing coarse
erratically distributed values? The smaller and more uniform the size of the gravel,
and the more evenly distributed the mineralization, the fewer are the samples
needed for evaluation (Wells").
There is a great difference between sampling during initial evaluation of a
prospect, where a few judiciously selected samples might show it to be worthless,
and the comprehensive program necessary to establish mining limits and plan
a successful mining operation.
5-48 EXPLORATION
FOR MINERALDEPOSITS
Step 1-GRAPHIC DISPLAY OF PROSPECT DATA Step 2-DEIGRMINE SEGMENT ARBAS
m
;&
L S E C BOUNDING
~ ~ ~ ~DEPTH AVER. WIDTH AREA AREA
HOLE n. D E m H FT. SV.fT. SQ.YDS.
S1
50 W 4,5M 500
55 ,1 5,500 611
S2
C3 4
.
5 1M 1.5M 500
S3 u
C S4 35 120 +ZOO 466
C5
I" 7'"
Fig. 5-10-Use of the "mean-area" method of calculating prospect values in narrow stream-
type deposits.
There is no final proof of the accuracy of placer sampling. Smith7' has described
and analyzed typical discrepancies between drilling and dredging results.
Attempts to evaluate placer deposits with hard-rock-type exploration drills in-
variably have met with failure.
Sample Processing-No gold dredge or other large-scale placer operation recovers
100% of the bank-run values. Sampling equipment and evaluation procedures should
provide reliable data for the estimation of commercially recoverable values. I n
the case of gold placers, the time-tested pan, rocker or sluice box often is preferred
b y experienced operators, with recovery of gold by panning and by amalgamatfon
(Wells")). Basic ~roceduresfor evaluating and adjusting sample data from drllllng
are discussed by DailyT3and well^.'^
Erroneous P r ~ ~ e d ~ ~ M of the
a n serious
y errors made in placer evaluation result
from using hard-rock exploration procedures. Two recurring mistakes are use of
uncased or smalldiameter drill holes, and fire assay of samples.
Uncased or SmalGDiameter Holes-In a commercial gold placer, the relative
amount of gold (by volume) is commonly on the order of one part to a hundred
million parts of gravel. Therefore, calculated drill hole values are influenced greatly
by stray gold particles and by incorrect sample volumes. The effect of one gold
particle too many or too few is shown in Table 5-4.
It is obvious that sloughing of an uncased hole in a gold-bearing zone will
significantly raise calculated values. Experience shows that small diameter holes do
not furnish reliable results, and that the ground is often overvalued.
55c (3")
2
4 Gold @ $35.00/oz.
Coal and petroliferous solids, with practically no exceptions, are associated with
sedimentary rocks, either as strata members-coal, for example-or as an intru-
sion-gilsonite, for example-in vertical and other fissures. The petroliferous solids
occur rather infrequently and usually in relatively small deposits. The followmg
discussion therefore will concentrate on coal, though the approaches apply in lmge
part to the other materials.
Coal deposits formed during definite geological periods. Known distribution
by geological age and content is summarized in Table 5-5. Consequently, well-
developed sediments of these geological periods are favorable starting points In
any search for coal deposits. Identification means include typical fossil remains.
Coal measures are relatively widely distributed and include deposits sometimes
separated by large barren zones. In prospecting in new regions, therefore, the
first step is to determine whether coal measures occur. The possible approaches,
aside from actual field work, range from study of all available geological literature
to interviewing older natives in the area. In areas of known coal occyeqce,
the purpose of prospecting is location of specific coal deposits and determlnntlon
of their mining and utilization possibilities. In this connection, commercial coal
beds generally are considered to be those over 1.5 f t thick under not more than
1,500 ft of cover.
Spacing. Ft*
Measured Indicated
Type of Deposit Reserves Reaerves
* Grid dimensions for horizontal deposits; distances between exploratory profile8 for
folded and complex deposits.
Folded and Faulted Deposits-The closest grid spacing is used in exploring
extensively folded and faulted deposits. Initial distance between profiles can be
1,500 ft, reducing to 750 to 400 in detailed exploration. Measured reserves cannot
always be determined. Mining projects therefore are based on indicated reserves
only.
The most detailed exploration becomes possible during actual mining, when
geological details, elements of structure and coal quality not previously determined
are more accurately defined, and the deeper levels of the deposit are explored
by means of development openings and crosscuts, drilling from deep levels (often
done), and sometimes drilling from the surface during the opening and development
phase.
* The most important gamma-ray emitter in the series and the basis for
using gamma-ray detectors in uranium search.
5.3-EXPLORATION DRILLING
5.3.2-DRILLING METHODS
5.3.3-DRILL-HOLE SPACING
There has been considerable interest in the theoretical design of drill grid
spacings and configurations for exploration of various types of ore deposits
(Savinskii,' HewlettB'). By analysis of a sufficiently large number of developed
ore bodies, i t is possible to establish drill-hole patterns that can gain most efficiently
the data needed for estimating the grade and size of a given type of ore occurrence.
I t should be emphasized, however, that most modern exploration work is blind
to some extentvertically or laterally beneath cover. The explorationist usually
has rather definite ideas of how and where his geological trends project, with
some support from geochemical and geophysical data. I n the first planning of
exploration drilling, it therefore is well for the geologist to keep in mind that
the ore deposit he seeks either is or is not present, and no amount of scientific
reasoning, engineering work or machine ~rocessing of data can alter this simple
fact. A drill method should be selected to insure obtaining samples that will
provide a rough "Yes" or "No" answer a t the lowest cost in the shortest time
possible. If the answer comes out "Yes" or "Perhaps," a more sophisticated drilling
method and hole pattern will be required.
Most high-risk exploration ventures are set up in a series of steps, the decision
to proceed from one step to the next being made only after a thorough evaluation
of d l results obtained to insure that risks have indeed been diminished. I t is
excellent practice to spell out clearly the results desired b e f o ~ edoing the exploration
work. In other words, an exploration organization might agree that their first-stage
Flg. 5-lr-Drill-hole layout for flat-lying tabular ore deposits near the surface.
5.3.LAMPLlNG BY DRILLING
The information pertaining to drill holes and concerning the samples collected
from them usually is kept in two separate logs: one essentially engineering and
assay data, the other a geologic log. I t is simple to ink carefully or type a form
t l o r e d to the job at hand, and have the required number of copies multilithed
on high quality paper and punched for looseleaf notebook.
On the engineering form, all of the records concerning the location of the
hole, when and under what conditions it was drilled, sample recovery data, assays,
etc., are recorded-emntially a tabulation of all of the quantitative measurementa
made. The geologic log is a foot-by-foot, or run-by-run, description of the geologic
observations made of the drill-hole samples, whether they be core, cuttings or
sludge. There is a tendency for geologists to note carefully each small speck of
mineral in drill samples, and to devote less attention to important changes in
rock type, alteration facies or weathering effects that may have great significance
in localizing the ore zone. Complete check lists or reminder sheets are prepared
by most project geologists to be sure that all pertinent observations have been
made and recorded. On large jobs, where secretarial help can be utilized, portable
dictating machines used in conjunction with check lists are a great aid in preparing
complete geologic logs. I n some cases, large-scale colored photography of drill
core has helped in storing and correlating valuable information.
Graphic logs often are used to portray various combinations of engineering
and geologic drill-hole data. For example, copper assays may help to determine
quickly relationships of the leached capping, secondary chalcocite, and protore
chalcopyrite of a porphyry copper deposit early in the exploration work. Sludge
boards often are prepared whereon various combinations of rock chips, rock slices,
sludge, panned sludge, etc., are glued to constant scale so that hole results may
be directly compared and relationships to assay data and formation contacts made
clear.
A variable-power binocular microscope with built-in light source is invaluable
in all phases of drill-sample logging.
5.3.6kWWN-THE-HOLE SURVEYSDIRECTIONAL
Various optical and photographic methods of borehole logging have been devel-
oped, and television has become a useful tool in mineral exploration.
Krcbs" has described an optical periscope that can be placed in a borehole
2% in. in dia. Direct observations are made by the operator at the surface, and
35-mm cameras can be mounted for permanent records. The instrument is seriously
limited by a depth-in-hole of just over 100 ft.
Borehole photography has been used for a direct record of the hole walls,
but fluid in the hole or mud cake left from drilling is a serious interference
(Baltosser and Lawrence? p. 149).
Short'" describes a television borehole camera developed by the Lawrence Radia-
tion Laboratory that has been used in nuclear blasthole drilling a t the Nevada
Test Site. The short distance between camera lens and drill-hole wall results in
good definition of textural characteristics, such as crystal size and shape and porosity,
and of mineralized zones, bedding, joints, cleavage and open fractures. A Polaroid
still camera, movie camera or video tape is used t o record pictures. A built-in
clinometer is used to make dip and strike measurements. The TV camera can
be put into the hole with directional apparatus so that both surveys can be run
simultaneously.
An acoustic borehole television viewer has been described by Zemanek and
c ~ w o r k e r s . ' ~ The
~ ~ ' ~ viewer takes an oriented acoustic picture of the bore wall
in the form of a continuous log. The picture shows fracturing in detail. The
high-frequency sound from an acoustic transducer is not affected adversely by
normal homogeneous borehole fluids.
Several major well-surveying contractors now offer borehole television and photo-
graphic services.
5.3.-WWN-THE-HOLE SURVEYWEOPHYSICAL
I TRANSMITTER RECEIVER 1
L INDUCED PDLARlTY O F
1 NEGATIVE UESFONSE
AT HOLE I F BODY ON
THIS SIDE
ORE ZONE
P W T OF
C, IN
MINERALIZED
ZONE
f'2
- MEASURED
POTENTIAL
, /'
\-- --- /
1 RECClVlnG COIL
ACOUSTICAL F l L T L R
\
I '-CONTROL CONSOLE
and a transmitter coil on the surface (rotatable about a horizontal axis). The
transmitter coil is rotated for a null, i.e., zero, signal in the receiver coil. The
equipment is simple and relatively low in cost but has the disadvantage that
where even a minor conductor intersects the drill hole, the measurement tends
to be blanked out or rendered uninterpretable beyond the intersection.
In 1960, Sherrit-Gordon Mines Ltd. employed a system developed by Newmont
Exploration Ltd. where both coils were ~ r o ~ e l l eddo w n h ~ l e ' ~(Fig. 5-15). That
system was employed to enhance the effectiveness of a large underground exploration
program at Lynn Lake, Manitoba. The coils were coaxial with the hole and separated
by 100 ft. Operating frequency was 1,230 Hz. The sensitivity of 100 ppm (in-phase
and quadrature) allowed an exceptional search range. Azimuth determination was
not provided by the measurement (Fig. 5-16).
EXPLORATION
DRILLING 5-69
The "downhole Turam" technique locates a large loop (1,000 ft f)on the
surface such that the correct source-field orientation is provided. For example,
for flat-lying conductors adjacent t o a vertical hole, the transmitter loop would
be concentric about the hole. The differential, i.e., gradient, of the amplitude
and phase between stations then is recorded with a coil coaxial to the hole and
10
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5:
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Fig. 5-16--Actual case a t Lake Lynn, Manitoba-body away from borehole (afterEUiottlO').
TRANSMITTED
FIELD DIRECTION
-D-
RECEI YER
THDDRETICAL WMlT
O F DETECTION
referenced to a coil at the collar. The operating frequency is 2,000 Hz. (Fig.
5-17). A time domain variation of the "downhole Turam" has been described by
Nabighian and Davidson? wherein the theoretical depth of penetration is two
diameters of the conducting feature (Fig. 5-17). The advantage of exceptional
penetration with "downhole Turam" derives, of course, from the approximately
uniform fieid applied. The principle disadvantage is in laying out the transmitter
loop, particularly in the time domain application where a heavy cable is required.
General Consideratiom-A common tendency has been to discount the importance
of the hardware and equip with mismatched unreliable devices. Accordingly, costs
have tended to be appreciably higher than estimated, and the reputation of the
method and personnel placed in question. Considerable attention should be given
such ordinary items as the footage counter, drum braking device, slip ring assembly,
sheave wheel and its mounting, reel drive mechanism, frame and case, downhole
cable, and mode of connection of the cable to array or device (there is great
vulnerability to water pressure). Because mineral exploration drill holes typically
are in heavily altered and fractured locations, caving during logging may block
access or result in loss of t4e geophysical sensor. When it is known that geophysical
logging will be undertaken, attention should be given to hole ~ r e ~ a r a t i oby
n using
mud, cement or plastic casing. The advent of simple drills, such as the Atlas
Copco overburden drill, has created the need for simple reliable geophysical equip-
ment, to be used in small-diameter shallow holes drilled on the anomaly obtained
from the surface.
Costs-Drill hole logging costs are difficult to establish inasmuch as they are
affected by a variety of factors: hole depth, site access, condition of site, drill
on or off site, hole condition, i.e., open?, hole diameter, hole fluid, background
physical properties, ambient noise, cultural effects, hole orientation with respect
to vertical, facilities a t hole, temperature and weather, method, contractor, type
of accessory equipment, number of holes to be logged.
With careful planning, a reliable contractor and adequate equipment the following
cost ranges should apply:
$ Per Ft
Electromagnetic logging, discrete readings. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0 . 2 W .75
IP-resistivity-SP, discrete readings. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0.25-1.00
Magnetic susceptibility, physical property log on the core or cuttings. . . . . . . 0.02-0.05
Radioactive logging on the core or cuttings. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0.02-0.05
Radioactive logging downhole. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0.10-0.25
Another approach to cost estimation is to allow $250 per day for operator
and equipment, adding the cost of laborers and mobilization.
Most of the apparatus and supplies required for this work can be obtained
from manufacturers of thin and polished section equipment or the large laboratory-
supply houses.
Samples designated for mineralogic work present little ~roblem,but the bulk
of exploration samples are destined for assaying and, in some cmes, test work
or engineering studies. Far too often a need for mineralogic work is recognized
after many of the useful characteristics, especially textures and grain sizes, have
been destroyed by grinding or pulverizing. It is good insurance to set mide suitable
splits for mineralogic work during sample preparation.
Mineralogic studies are one instance where "high-grading" can be useful. Highly
mineralized portions of a rock often are the most rewarding for qualitative mineral
identification, since they tend to be the areas where unusual or trace minerals
occur, and frequently contain the best information on ~aragenetic and textural
relationships. Select a few small fragments of high-grade material for thin or polished
section preparation, being careful not to remove so much material that the repre-
sentative nature of the balance of the sample to be used for assay or test work
might be a£fected.
Finely ground test products should be blended and split with the same care
used for assay work. The total weight of mineral particles observed in microscopic
work often is less than the weight of an aliquot that would be taken for assay.
Give consideration to the procedure for drying the selected sample. As a general
rule, epithermal and supergene sulfide ores, saline ores, and some industrial minerals,
should not be dried a t a temperature in excess of 50 to 60°C if they are to
be used for mineralogic studies.
For grain immersion optical mineralogy, the -100+200- or -200+270-mesh
sizes are ideal. Considerable skill is required in making good thin sections, and
it usually is best to have these made by a laboratory specializing in such work.
For rapid polished section preparation, mount a sawed slab or ground fragments
with a thermosetting plastic or a fast-curing epoxy resin. Grind wet on a lap
or glass plate with 400-grit silicon carbide, followed by 600-grit to get a smooth,
flat exposed surface. Next, polish on silk-covered bronze lap impregnated with
3p diamond paste lubricated with water~soluble oil for 1 min at approximately
300 rpm, then 1 min a t 600 rpm. Switch to l p diamond paste on silk-covered
lap, 1 rnin at 300 rpm, then 1 min a t 600 rpm. Exert about 50-lb pressure on
section. Wash thoroughly between each abrasive change-with ultrasonic cleaner
if available.
Mineral separations using heavy liquids, the Frantz isodynamic magnetic separa-
tor, micropanner and superpanner are all adversely affected by slimes. If slime loss
can be tolerated, a good general preparation for such work is to dry stage-grind
to minus %-mesh, then wet screen a t 400-mesh to deslime.
It pays to hand-pick pure mineral grains under a binocular microscope for
identification by X-ray diffraction. The time spent results in much easier interpreta-
tion of the diffraction pattern. Grind samples until the resulting powder is dull
and does not show any glint of reflection or sheen from crystal or cleavage faces;
this indicates that particle size is fine enough to minimize scattering effects. Dioctyl
phthalate is one of the best organic liquids to use if diffractometer samples are
to be prepared as a mull.
5.4.2-FOR ANALYSIS
Care must be exercised in the selection and preparation of material for analysis
so that it represents an accurate sample of the material under study. The principal
elements for consideration are the weight of the sample and the method of selection.
The weight of the sample is dependent on several factors: size of the largest
particle, size of mineral liberation and density of the various minerals are most
important. These factors recently have been reduced to a sampling formula and
a slide rule by Gyl" in which
Diameter of Largest
Pieces Very Low Grade Medium Rich or Spotty
or Very Uniform Ores, Ores,
In. Mesh Ore, Lb Lb Lb
The first phase of the test program must be to define the nature, grade, variability
and extent of the potential ore resource to be mined and processed. Although
some information about these aspects of the ore deposit presumably is available
from the concurrent geologic and mining investigations, considerable preliminary
laboratory work is essential to obtain specific data about the ore for planning
a cogent test program. The initial study of available samples will comprise chemical
and spectrographic analyses, mineralogic and petrographic examinations, screen
analyses and heavy-liquid and elutriation tests.
At this early stage, the degree of uniformity of the deposit must be established
to determine the variety of ores to be treated and whether, as a practical mining
matter, their delivery can be controlled to meet metallurgical considerations. The
transition from the oxide to the sulfide zone as the mine deepens presents a
major metallurgical problem in some deposits. The difference in metallurgical char-
acteristics of ores from more than one type of geologic origin is a problem in
some instances. The nature of the raw material to be treated, as developed by
the preliminary testing, will be a guide to feasible processing, as indicated in
Table 5-8, which presents major metallurgically exploitable ore mineral
characteristics.
One rule of wide applicability is elimination of barren material in the largest
size possible because crushing and grinding normally are the most costly element
in ore treatment, frequently accounting for about 40% of total milling expense.
Frequently, the exploration engineers can identify opportun~ty for hand sorting,
heavy-medium separation or simple screening to remove a substantial percentage
of waste rock with little or no c o m m i n u t i o ~expense. In some instances, slime-size
fines may be rejected as barren. The problem is the freeing of the constituent
ore minerals from each other without excessive reduction in particle size.
Metallurgical research testing normally starts with batch runs. A 200-lb sample
of ore crushed to about 1 in. usually is sufficient, although it should be cut down
from several tons and be as representative as possible of the ore to be treated,
both as to character and grade. Except when testing at a coarse size is indicated,
individual test samples should be cut from material crushed to % in. or smaller.
If the test material must cross an international border in shipment to the laborstory,
it should be forwarded through a customs broker and marked "Samples Without
Value." Sulfide ores that are normally wet should be protected from excessive
heat, drying and oxidation between mining and preparation for research because
tests should be applied to freshly crushed and ground ore to give reliable results.
(In this connection, if testing indicates the metallurgical necessity for freshly broken
ore, this fact should be reported to the engineers designing the mining method
to obviate the choice of a stoping method, such as shrinkage, that delays the
delivery of broken ore t o the metallurgical plant.)
After batch testing, semicontinuous runs may be conducted, with recycling of
the process water, intermediate grade products, solutions and gases, to give some
assurance that deleterious substances will not build up in the circuits to affect
full-scale operation adversely. Preliminary testing likely will reveal several metal-
lurgically feasible processes applicable to the ore, but net returns from the products
of different processes or combinations of processes must be compared and evaluated
(Sec. 5.5.4).
Physical properties:
Color, luster, reflectivity. ....... Hand or mechanical sorting of sized coarse ore
fractions
Natural or induced radioactivity Mechanical sorting of sized coarse ore fractions
Friability, and texture hardness. Dry or wet screening, elutriation with air or water,
with or without differential crushing and attrition
grinding
Magnetic.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Dry or wet, low- or high-intensity magnetic separa-
tion of sized and unsized ore fractions
Specific gravity.. . . . . . . . . . . . . . . Wet and, less commonly, dry jigs, tables, spirals,
sink-float units
Physiochemical reactivity. ........ Selective surface filming of liberated minerals in a
finely ground pulp using collector, modifier and
frother-type reagents to promote froth flotation in
aerated cells
Chemical reactivity:
Hydrometallurgical.. . . . . . . . . . . Solution in inorganic and/or organic solvents fol-
lowed by solid-liquid separation, and selective re-
covery of elements or compounds by alternative
and/or combinations of selective precipitation, cry-
stallization, ion-exchange, solvent extraction, and
electrowinning and refining techniques; includes
amalgamation and cyanidation
Pyrometallurgical.. . . . . . . . . . . . . Moderate- to high-temperature calcining, roasting,
fuming, sintering, smelting and fire-refining tech-
niques to induce selective separation and recovery
of metals and metallic compounds by differences
in volatility, fluxability, reductibility, oxidizability
and fusibility of ore and gangue minerals.
Competent services and suitable test facilities are available on a fee basis
from many metallurgical consulting firms, equipment and supply manufacturers,
and nonprofit private research foundations. I n addition, some facilities owned and
operated by state and other government organizations are privately available under
some conditions. The larger testing laboratories are equipped with a variety of
portable metallurgical units in small sizes that can be assembled in a variety
of configurations to simulate all kinds of commercial-size ore-processing operations.
Such assemblages form a type of pilot plant and are discussed in the following
section.
5.5.2-PILOT-PLANT STUDIES
5.5.LFLOWSHEET DEVELOPMENT
When ore testing has fixed the metallurgical process to be used, flowsheet develop-
ment, site selection and plant design can proceed. I n selecting a site for the
proposed plant, consideration must be given t o proximity to the mine for long-term
ore supply, future encroachment of mining o~erntions (including mine-induced
subsidence), disposal areas for tailings, and water supply (including its pH).
Topography may require special consideration as it affects gravity flow in the
plant and flow of tailings outside the plant, and therefore cost of construction.
Virtually all items of plant equipment will be found as standard manufactured
units, thereby reducing the flowsheet development to the selection of machines
in the sizes and arrangement that will assure a smooth continuous flow of ore
in process with an integration that minimizes overloaded and underutilized units.
I n this connection, some overcapacity units may be necessary-for example, when
a crusher big enough to accept the larger run-of-mine ore fragments may have
a capacity several times the capacity of the mine or the other plant units. This
mismatching may be resolved by including a surge bin for crushed ore and scheduling
the primary crusher for part-time operation.
For many pieces of equipment the flowsheet may seem to involve only scaling
up a similar item used in the research sample testing. Here i t should be recognized
that scaling up is not a simple matter of arithmetic. For example, if the three
dimensions of a flotation cell are doubled, there results only one larger cell, but
the average particle must travel twice as far to reach the froth. The surface
on which the froth will accumulate is four times as great, and the pulp capacity
of the cell increases eightfold. I t also should be noted that some units have an
optimum size so that increased capacity must be gained by multiplying their
numbers.
Even the most carefully developed flowsheets almost always result in plants
thnt require substantial modification as deficiencies are revealed in operation. Careful
design may anticipate problems and provide opportunities for corrections. Changes
and adjustments usually cover the life of the plant t o increase efficiency and
to meet ever-changing ore supply, introduction of new machines and reagents,
and changing product requirements.
5.5.4--EVALUATION OF RESULTS
Although the evaluation of results begins with the initial research testing by
selective screening of lines of attack, there are many factors that are weighed
continuously as the investigations proceed through the flowsheet stage. In addition
to the processes to be utilized in the proposed plant, consideration must be given
to scale of operation, plant environment, markets for products, financial resources
of the promoting group, and availability of labor, transportation, power, and other
ancillary factors. This survey of the situation should begin with the research testing
because it may narrow the options worthy of extended metallurgical testing.
The environment of the operation hes two major aspects: If the plant is to
work an ore body in an established district, there will be a wealth of experience
in the hands of neighbors that can guide selection of metallurgical methods and
plant design to achieve a harmonious operation. Second, if nonmining neighbors
have confficting interests or are hostile to mineral exploitation, the selection of
plant location and process may be in part dictated by their presence. Blocking
of some processes can be based on prior appropriation of cheap water. Zoning
affecting waste disposal at reasonable cost can be an insuperable impediment.
Noxious effluents-aqueous or gaseous-are environmental problems.
The market for plant products is an important consideration. Remote location
with high transportation costs favors high unit value of marketable products;
products requiring smelting or refining or other subsequent treatment may find
alternate and competitive outlets and transportation systems crucial. Where the
salable product is bulky, as with sand and gravel or cement, the marketing area
will be limited by transportation cost.
Financial limitations of the project entrepreneurs must be given consideration
and sometimes may dictate a plant below optimum size or one using a cheaply
installed, but less efficient, process than technology and engineering would indicate.
Under some circumstances, the shipping of crude ore, perhaps selected high-grade,
is adopted to provide ready cash and time for further financing. There always
is the need to balance the amortization of a high investment in a low-operating-cost
installation against lower depreciation charge but higher operating expense.
The evaluation of test results and of a flowsheet embodying them should seek
to achieve high recovery of the valuable parts of the ore in high-grade salable
products without excessive processing costs. The options are many.
5 . W O M P U T E R APPLICATIONS I N EXPLORATION
Digital computers range from "desk top" models with a capital cost on the
order of $10,000, which may include some peripheral equipment, to integrated
installations with capital cost on the order of $300,000. The storage capability,
speed and analytical scope of even the smaller versions can manage abstractions,
decisions and logical operations, in addition to arithmetic. Time-sharing systems
with access to large installations with high-capacity high-speed machines permit
smaller companies to afford computer use.
The exploration u&s of computers extend from the simple time-saving element
of information storage and retrieval, through several levels of data reduction and
statistical analysis, into the field of operations research in optimizing search patterns
and formulating decision models for the allocation of money, time and manpower.
The essential components of a digital computer are :
1. Input devices.
2. Arithmetic unit.
3. Storage or memory unit.
4. Control mechanism.
5. Output devices.
Associated equipment, such as on-line plotters, provide graphic information
for display and analysis.
Digital computers are used in exploration for the collection and selective retrieval
of data to formulate objectives, design exploration programs on the basis of inform*
tion from correlative geologic situations, allocate resources and schedule activities,
reduce and analyze geophysical data, and quantify potential ore reserves. In each
instance, the computer program generally is suited to rapid updating as new informa-
tion is obtained, so that the overall exploration effort can be readjusted.
Electronic analog computers are extremely rapid in operation, even by digital
computer standards. Although they are more specialized than digital machines
and have been used more widely in extractive metallurgy than in exploration,
their capabilities in attacking geophysical problems are being increasingly utilized.
I n many applications, they bridge the gap between mathematical symbolism and
physical reality. The essential components of an electronic analog computer are:
1. Simulator circuits.
2. Patch interface networks.
3. Plotter or cathode ray tube.
Analog modeling is useful in geophysics for constructing type curves over unusual
or complex geometries in the interpretation of resistivity, induced polarization.
electromagnetic, magnetic and seismic data.
5.6.SDATA COLLECTION
Data collection for storage and retrieval is important and requires planning
so that later revisions and re-punching of data will not be required.
Assembly of data for direct use may in some cases be done directly with
portable card punches for sample location, geophysical data, core logging, field
geologic data, and analytical lab data. More commonly, coded forms are used
for key punching. An example is given in Fig. 5-18, which is the form used by
the Quebec (Canada) Dept. of Earth science^.^'
Geophysical data usually are gathered in either analog or digital form. Analog
to digital, or digital to analog, converting devices are available to reformulate the
analog information digitally, so that it can be readily handled by the computer.
There is an increasing tendency to gather the original data in digital form through
the use of appropriate sensing devices. This procedure permits a full step in data
handling to be eliminated in processing.
After initial collection, data usually are checked for errors before further
processing steps are taken. A number of procedures are available for doing this,
such as computing the difference between a data point and the interpretation
point of adjacent values. If the difference is larger than a certain amount, the
data point can be recalculated, rejected or flagged for manual inspection. A gen-
eralized flow diagram for the logic of a program is given in Fig. 5-19. Flow diagrams
are necessary in charting any detailed sequence.
There are a very large number of different computational treatments feasible
in numerical operations. One major computer application is in the interpretation
of geophysical, geochemical and geological data by constructing trend surfaces.
The exploration values to be approximated by these surfaces can be gravity or
magnetic anomalies, rock types or trace-element analyses. The method consists
of taking a discrete set of data points and fitting an equation to best represent
them in a continuous surface. Once such a trend surface is obtained, contour
maps can be constructed. The most widely used trend surfaces are polynomial.
For x-y data, the general form is
MOBILISalE 10 W6
MOBILIYTE 30 W's
MOBILISATE >6OI
IS DATA
IN PROPER
ERROR CHECK
i COMPUTATIONS
IREDUC TION, CORRECTION,
OR C O M P I L A T I O N )
PLOTTED
2 variables y
/' A
&-::::
3 variables
Z=A+Bx+Cy
Fig. 5-20-Polynomial
Z ' A + B X + C Y + D ~ ' +E~~+ F ~ '
+GX'+HX'~+~X~'+J~'
where p is some measured quantity a t the point, x, y, z. The result is what
Harbaugh and Merriamlls refer to as a hypersurface. The resulk of fitting such
surfaces to data must be represented by contour maps. Fig. 5-22 provides a sample
of such output. The advantages of having plots such as Fig. 5-22 are the speed a t
which a computer can generate them, the low cost and unlimited map length.
In theory, one can fit any order polynomial to a set of data. In practice
this seldom is done for the following reasons:
1. A curve to exactly fit every data point is not wanted. For example, it may
be desirable for a straight line to be a trend because it is known that this is
the way the data are supposed to be.
2. Serious errors can be introduced in the computation due to round-off errors
in the computer. For example, in fitting a sixth-order polynomial terms such as
Surface
RlPc~c"lollon
Res#dual Mop-Coltours
0'1 af A ~ M I
D o l o And Trend
Surfocr
xl2 are encountered. Suppose a typical value of x was 100. This means that the
computer attempts to store a number of the order of 1W.If a computer can
use only 15 significant digits, it will discard part of the number and give erroneous
results.
To overcome these disadvantages of polynomial trend surfaces, Fourier Analysis
as applied to discrete data can be used. This often is referred to as harmonic
analysis.
Production costs may be grouped as direct and indirect charges. Direct charges
include the cost of mining each ton of material (including waste and leach material,
if any), and may include the cost of one or more of the following: crushing,
grinding and beneficiation of the ore; transportation of ore and concentrates;
ore or concentrate treatment to recover crude metals; and freight, refining and
selling costs attributable t o such metals. Indirect costs include general overhead
not applicable to a particular process, interest and taxes (other than income taxes).
Costs of production of byproduct metals may be calculated, or the net sales value
of such metals may be credited against the major metal costs described above
in arriving a t net operating costs. Charges for depreciation and amortization of
the capital costs of mine preparation, plant and equipment, and ancillary services
provided, are added to the net operating costs to arrive a t the total cost, which
may be expressed per unit ton of ore, or per pound or other unit of salable
metal.
Calculating the cutoff grade for a mine takes into account the estimates of
grade of ore mined and recovery of salable metal, production costa and desired
return on investment (ROI). An open-pit operation must also consider the waste
ratio, R, because the tons mined per ton of ore produced will be 1 R. +
The following example illustrates the calculation for an assumed new open-pit
copper mine which contemplates the sale of the metal in concentrates:
Capital investment, million $. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 75.0
Of which equity.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15.0
Return on investment, %. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15.0
Maiontonsore . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 150.0
Million tons mined annually. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 10.0
Grade of ore mined, % copper.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0.60
Concentrator recovery, %. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 90.0
Waste ratio, tons per ton ore. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2.6
Costs : Per Ton Ore
Mining, at $0.25 per ton material.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . $0.90
Concentrating . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0.65
Overhead and services, including interest.. . . . . . . . . . . . . . . - 0.82
Operating costs. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2.37
Depreciation and amortization.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . - .50
Netcosts . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2.87
ROI beforeincometaxes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
Minimum value for ore.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . $3.10
If the selling price received per pound of copper in concentrates is 42#, then the
cutoff grade is 3'10 = 8.2 lb. or 0.4%.
0.42 X 0.90
In calculating the cutoff grade for an expansion of a pit operation, the deprecia-
tion and ROI factors could differ markedly from the illustration above. I t also
is apparent that a change in price has a material effect on the cutoff grade.
A decision to invest capital in developing a new mining operation reflects
both the economic ~rojectionsreferred to above, and an evaluation of intangible
factors (political and geographical) affecting the operation, to the extent that
these cannot be reflected in the cost estimates. I n general, adverse intangible
factors tend to increase the grade of ore required to make the gamble attractive,
and favorable intangible factors may make the sales value-cost spread more attrac-
tive. Table 5-9 lists preliminary ~ublisheddata for several mines which are now
producing or being brought to ~roduction, as well as for some ore bodies for
which production plans have not yet been perfected.
The initial cutoff grade forecast for the Palabora open pit mine was 0.4%
copper for the first 5 yr, declining thereafter to 0.37'~. A higher price for copper,
combined with expansion of mine and plant capacity, improved concentrator re-
covery, on-site refining and casting of wirebar and rod, and development of by-
product income from the operation, which have offset to some extent the effect
of rising costs, has reduced the cutoff grade to a 1971 figure of 0.2% copper.
The viability of lower tonnage tabular or vein-type mineralized bodies depends
on a high profit per ton of ore mined. Craigmont Mines Ltd., British Columbia.
in 1970 produced some 3,200 tpd grading 1.46% Cu from underground sublevel
caving and blended it with 1,800 tpd of surface stockpile reclaim grading 0.60%
Cu. Direct costs of concentrate production converted to $4.92 per ton of ore milled,
and total costs related to operations, before depreciation and depletion, were $5.40
per ton milled. Costs of underground mines producing 500 to 1,000 tpd are appre-
ciably higher, and may range from $25 per ton or more down to about $7.
5.7.2-ANCILLARY SERVICES
In this category are such services as consulting engineering; contractual transport
of personnel, inbound supplies and outbound product; power transmission; catering;
townsite or housing development and administration; public relations; legal counsel;
and product marketing.
TABLE b9--Preliminary Data on Seven Mines and Ore Bodies Now Producing. Being Developed or Belng Considered for Development
hlabora.. . . . . . . TrPnsvurl, OF 1966 Cu 0.88 315.0 Mine, 38,XM 0.89 Drilling footage l36.000; in 3.5 80,000.6 yr. 108.8 Equity.40.8
8. Afr. (to 1,000 ft) Ctr., 33,000 ore, 63,000; ft. unda- 68,000, 6-26 yr. Ioans&
(expanded to ground: 8,074 ft drifting, (blieter Cu) deb.,65.8
w"w 23,400 ft drilling. U.3
millii, 1967-1962.
Granduc.. .. . . . . B. C., Can. U 1970 Cu 1.73 43.3 Mine. 7,500 - Gml. inveatigatii, drdling, 5.0 42,000 115.0 N.A.
uubaurf.ce explotstion, (Cuin concta.)
metellurgid testing,
1853-1965.
Brenda.. . . . . . . . B. C.,Can. OF 1870 Cu 0.183 177.0 Ctr., 24,000 1.10 Geol.inveatig.tion,drilling, 2.0 15,280 62.5 Eguity.37.5
Mo 0.049 (to 800 ft) subnuface exploration, (Cu in eoncts.) Loans,
pilot plant, 1965-1968 3,375 25.0
(Mo in concta.)
Mt. Tom Rice.. W.Auutralia OP 1986 Fe 64.0 500.0 16,000 N.A. Dimvery 1980-1981. 2.0 Bold os ore 330.0 Equity
(expaded to Drilling 198!2-1884. 6,400 tpd ore ss (to Bept., Loans &
5wW pellets 1988) Deb.
- N.A. 8.0 16,000 250.0 Equity &
(Mo in wncta.) Loans
h n e x . . . . . . .. . . B. C.. Can. OP 1972 Cu 0.427 283.0 Ctr., 38,000 0.862 Drilling, W,OOII ft; ahaft, 2.0 50,000 123.60; rev. Equity, 7.4
Mo 0.0084 500 ft; drifting 2,600 ft; (Cu in oweta.) to 138.0 Loans &
pilot mill, 100 tpd. 1 w Deb.,
(Mo in wncta.) 130.6
&berg.. . . . . . . W. lrisn, OF 1873 Cu 2.5 33.0 M i e , 8,MO 6 yr. 0 Exploration drilliig, 40 4.0 65.000 120.0; rev. Equity.22.5
Indon. Ag 0.265 Ctr., 7,000 +6 yr., holes, 24,000 ft; adit 300 (Cu in coneta.) to 135.0. 9r. Debt.
Au 0.025 Tnm- N.A. ft-bulk sample; 2376 ft W.0 Sub.
m y , 8,MO main adit 22.5X18.5 ft Debt,22.6
- - - - - ---
OF, open-pit; U,underground mine; Ctr.. concentrator;N.A.. not available; Deb.. debentures.
Analysis of the requirements for these services and the manner in which they
will be employed is important in preliminary evaluation of mining property as
they comprise a significant portion of operating cost.
5 . 7 . H l T l N G SURVEYS
A logical plan for surface-plant layout, including location of mine shafts for
underground operations, can best be obtained by means of on-site studies. Fre-
quently, the initial concept, however, can be developed by use of aerial photographs.
Field surveys will include evaluation of many physical aspects of a projected
operation, such as topography, climate, accessibility, hydrology, waste and tailings
disposal, and pollution factors. Soil tests may be required t o determine building-
foundation conditions. Siltation studies and source surveys of sealant materials
will influence choice of damsites for water and tailings. If surface mining is con-
templated, the interrelationship of pit access, ore and waste haul routes, stockpile
areas and primary crushing plant must be analyzed. Mine-camp or townsite locations
are important and require careful planning. Land-use problems, including possibilities
for reclamation and restoration, are of increasing ooncern.
Mine-run material, blasted and mucked from individual rounds of underground advance
in designated test areas, is trammed to primary storage consisting of 12 or 14 concrete
bunkers of approximately 50-ton capacity each. Oversize, say, plus 8-in., is broken man-
ually. Each round is stored separately and assigned a lot number. On removal of any lot
by front-end loader for transfer to the sampling plant the bunker is meticulously cleaned to
I MINE RUN MATERIAL
PLANT
prevent loas or buildup of fine particles of the economic minerals. Total storage accomodates
at least 2 days mine-run material.
The portable crushing plant, of the type used t o prepare road-construction aggregate,
incorporates a 10 X 36-in. primary jaw crusher and a 40 X 22-in. secondary roll crusher
in closed circuit with a double- or triple-deck vibrating screen producing 25 tph of or M-
?&in. mill feed. Conveyors and transfer points are covered to reduce dust loss. Crushed
product is elevated by belt conveyor to the top of a sampling tower, where a Denver
Model SC8 Type C dry sample cutter, taking 120 cuts per hr, splits out 416 Ib per hr of
sample. Reject goes to an open bunker of wood construction. The sample is fed through
a k u - f t surge hopper and Syntron vibratory feeder to a Denver size 12 gyratory crusher
and reduced to 10-mesh. A 5 % split then is taken by a Denver 40-in. Simplex Vesin
sampler to yield a lot sample of 20.5 lb per hr, or approximately 0.04% of the mine-run
material, which is collected in a suitable container and sent to the assay laboratory for
further preparation and analysis. The coarse and fine reject is removed by front-end
loader and transferred either to a general open stockpile or t o special lot storage on wood
decks with low wood partitions. The crushed bulk sample then is transferred to the pilot-
mill feed bin in conformance with any particular metallurgical campaign.
Percent
Engineering. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Underground development, bulk sampling. . . . . . . . . . .
Camp and related field costs.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Pilot mill (4-tph) installation.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Drilling . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Pilot-mill operation. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
General and overhead. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Assaying . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Other . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Bulk sampling of coal or other nonmetallic deposits (i.e., barite. bentonite,
clays, fluorspar, perlite, etc.) also can require expenditures of similar magnitude
as there frequently is a necessity to produce specification material in carload
lots to establish marketability.
Operations in the Arctic or Subarctic differ from those farther south to varying
degrees depending on the location and type of work. The chief factors in these
differences are (1) remoteness and lack of transportation, and (2) cold climate,
with the features that go with it. Some types of operations, e.g., placer prospecting
or underground "drift" mining, actually are expedited by the permafrost that often
occurs in cold climates, because permanently frozen soil stands and otherwise reacts
somewhat like solid rock.
The Arctic and Subarctic cover such a large area that generalizations are difficult
to make. The only generalization that has meaning is that operations get more
expensive and difficult the farther north one gets and also the farther from surface
transportation routes and the farther away from the source of supplies.
I t must be assumed that management extends the same efforts toward planning,
cost-cutting, and efficient practices as it does farther south. The job, however,
is made more difficult by the necessity of planning farther ahead. If, for example,
a bulldozer must be moved into a site it should be done before the spring breakup.
There are several problems related to personnel. Labor costs are always higher
in remote areas, and northern Canada and Alaska are no exceptions. The problem
is compounded in Alaska where high wages in the defense-related construction
industry tend to push all wages higher. Perhaps the most serious problem related
to personnel, however, lies in the special skills required to operate in the north.
I n addition to the normal skills of the trades, people must have the special knowl-
edge, experience, ability and desire to work in the environment. This requirement
extends to all phases of the work: geology, engineering, transportation and support-
ing skilled trades. I t is especially necessary to have men on hand who can handle
any of the jobs necessary to make an isolated operation self-sufficient, including
tractor-train operation, repairs and maintenance.
absolutely dependent upon drainage. The cut is started a t creek level and carried
upstream at a 1 or 2% gradient, deepening as it is extended upstream.
Ground sluicing in permafrost differs from that in unfrozen ground only in
that the water must thaw the soil as well as remove it. Therefore, water near
freezing temperature has little effectiveness.
Shaft-inking shafts in unfrozen alluvium is difficult below the water table,
because the shaft must be shored up with cribbing or casing, and the water must
be pumped out. One reason that Alaska's placers were discovered in such a short
period of time is because much of the ground was permanently frozen, and it
was only necessary to thaw the material to be removed. This material was then
dug with pick and shovel, and hoisted in a bucket attached to a Spanish windlass.
Thawing With Wood Fires-Thawing for the first shafts sunk through permafrost
was done with open wood fires. This method is most effective in gravel, where
the fire gives up its heat to the rocks which in turn thaw the fines as they
cool. Frozen "muck," i.e., silt, often with incorporated vegetation, thaws much
slower than gravel because the muck contains more ice. For this reason, many
prospectors prefer to pick the frozen muck rather than thaw it. The size of the
fire used depends on the amount of gravel that can be hoisted in one shift.
The fire is protected from falling debris by sheet iron. One major hazard associated
with wood fires is that the fire generates carbon monoxide. This has been the
cause of many deaths. Wood fires can be used only in cold weather when circulation
is good. They must not be used in the spring after freezing temperatures cease.
Sometimes a canvas is rigged at an angle over the shaft to deflect the wind
downward, or the shaft can be divided by hanging canvas to create a down-up circu-
lation of air.
Thawing With Steam-Most thawing is done with steam, generated in a small
boiler and conveyed down the shaft in a s i n . pipe. The boiler should be protected
by some form of shelter, even in summer, since its efficiency is impaired by exposure
to cold. Small boilers usually are manufactured in a machine shop or built by
the prospector from pipe and fittings. Water is fed by an injector or a hand
pump. The latter is favored as being more economical of steam, more trouble-free,
and operational at lower steam pressures.
Steam is introduced into the ground by a steam point. The steam moves from
the boiler to the pipe through a steam hose, and from the lower end of the
pipe to the point through a similar hose. I n gravel, the point is alternately hammered
and twisted, and acts as a drill.
A shaft in permafrost may be kept from caving over the summer or for longer
periods. A pole platform is built 6 to 8 ft below the surface and well below
the permafrost table. Burlap and moss are laid over the platform, and a few
inches of snow is laid on top. Water then is sprinkled on the snow and the
slush is tamped against the walls and allowed to freeze to them. The process
is repeated until a plug of porous ice fills the upper end of the shaft. The ice
is finally covered with a foot of moss and a ditch is dug around the upper side
of the shaft.
The rate, and hence the cost, of sinking shafts in frozen ground is quite variable.
A typical advance might be of the order of 2 ft per day, but the figure varies
greatly depending on the size of the shaft and the time allowed to thaw the
ground, and how soon after thawing mucking takes place. By sinking more than
one shaft at a time and by carefully controlling the diameter, the rate of advance
can be greatly increased.
Freezing Down a Shaft--Occasionally, ground is frozen artificially to stabilize
it for drilling or other purposes. I n the north, natural cold is utilized routinely
for "freezing down" placer shafts in unfrozen alluvium. The most common method
is to thaw the seasonal frost, then sink the hole through the unfrozen material
to the water table, then allow a day or two for the sides and bottom to freeze.
The shaft then is advanced farther by alternately freezing, thawing and mucking
the hole. Because the ground freezes more slowly as the depth of the hole increases,
this method is necessarily restricted to fairly shallow depths. Holes of 20 ft or
more have been frozen down, but it is better to restrict the method to shallow
depths. As depth is increased, so is the head of water at the bottom of the shaft.
I t therefore is necessary to be careful not to thaw the frozen plug.
When better equipped with money and material, the process of freezing down
a hole can be speeded up considerably by using a large tractor radiator to cool
circulating coolant. A pipe inside a casing is lowered into the hole. The upper
end of the pipe is connected to the top of the radiator and the casing to the
lower (cold) end through a pump. Coolant is circulated down the casing and
up the inner pipe. I t is then cooled as it goes through the radiator. A fan
draws cold air through the radiator to further help cool the liquid before sending
it back down the shaft.
I t roba ably is safe to say that for almost any kind of drilling, permafrost
is a help rather than a hindrance, and this is especially true in placer drilling.
Traditionally, placer properties have been drilled with churn drills which, in
spite of their slowness, are well fitted to drive and pull casing. The process of
sampling placer ground using drills is described in Sec. 52.51). The task in permafrost
is much easier; the hole is simply drilled open, with one joint of casing driven
into the permafrost a t the top to seal water from the hole. The tools are rotated
continually to insure a round hole and, if ice builds up so as to crowd the tools,
it may be necessary to pour hot water into the hole. Some form of efficient
water boiler should be on hand.
In drilling permafrost, much depends on the temperature of the ground. Alluvium
having a temperature near the freezing point thaws easily and a sloughing hole
may result.
Drill holes in frozen ground may be evaluated in two ways. If the cross-sectional
area of the hole is uniform, especially through the pay horizon, the gold recovered
may be assumed to come from that area. For example, a 4-in. bit may be assumed
to drill a 4%-in. hole, with an area of 15.9 sq in. or 0.11 sq ft. If, say, $0.05
in gold was recovered the value per B.R.F. would be $0.45.
Usually, however, the volume of the hole actually is measured in increments
by pouring uniform measured volumes into the hole through a funnel and hose.
The rise in water level is measured with a float attached to a tape, and from
these measurements it is possible to construct a profile of the hole. The tenor
of the material from the hole may be calculated by computing the volume of
a particular 1- or 2-ft drive, or by converting the hole to one of constant area
by adjusting the value recovered from each interval of drive.
If there is to be any kind of revival of interest in placer mining because
of a rising gold price, a more satisfactory drill must be adapted to placer evaluation.
The churn drill, whatever its other qualifications, is too slow. Some combination
of rotary and casing or percussion-casing drill must be found that can handle
both frozen and unfrozen ground if found in the same hole. A combination of
lack of reserves and low gold price has caused a lack of research and development
in the field, but modern technology is perfectly capable of producing a fast, in-
expensive drill should the need arise.
There are several factors that add to the difficulty of conducting recomoissance
in Arctic and Subarctic environments, some more serious than others. The cumu-
lative effect of the factors is to increase the cost. Few of the problems encountered
are beyond the capability of modern technology. The effect of the increased costs,
of course, is that there will have to be an increase in the grade and size of
a discovered deposit for it to be economic. This reduces the odds of making
an economic discovery in a business that already is notoriously risky. A deposit
of a given grade and size may be economical in, say, Colorado, but uneconomical
to develop if found in the Arctic.
One factor that affects reconnaissance more than, for example, drilling or mining
is the short season. Once established in a camp, most activities can be conducted
except in the very coldest weather, but snow cover effectively stops reconnaissance
exploration. Even this, however, only shortens the season in the Arctic by a short
time compared to northern U.S. or southern Canada.
The chief problem facing reconnaissance, or any other activity, is the lack
of roads and distance from the base of supplies. I t is true that in the period
1898-1914, men working without roads literally scoured Alaska, finding all of its
placer districts and most of the lodes that have been worked to date. However,
they were searching for placers, which are localized in convenient targets (creeks)
or lodes which outcropped. Today, given the hidden targets for which modem
prospectors are searching, surface methods of travel would be wholly inadequate.
Any serious reconnaissance program requires helicopter support, which accounts
for about one-third of the budget of a five-man crew. With this necessity for
expensive mechanical equipment goes the requirement that reliable communications
be available. This makes the use of two-way radio imperative.
The use of the helicopter must be closely controlled because it is the single
most expensive item in the budget. Too much use may be wasteful, but against
this it is necemry to weigh the fact that walking on foot across swamps or
drift-covered areas is a very unproductive use of men's time. A balance in use
must be struck.
The helicopter is the mechanism that transports the men from camp t o the
sites, and from outcrop to outcrop, or assists in geochemical traverses. The base
from which the helicopter operates must be established using the least expensive
transportation method-road, rail, boat, overland tractor train or fixed-wing aircraft.
Surface transportation of course is the cheapest, but riverboat schedules may not
allow sufficient flexibility, and a road may not permit the base to be established
clcm enough to the working area.
In chartering helicopters, there may be several options open. For short-term
charters in interior Alaska, a Jet Ranger will cost in the neighborhood of $225
per hr plus fuel (22 US. gph). The Bell G 3 or G-4 will cost about $140 per
hr plus fuel. By contracting for the exclusive use of a helicopter for a fixed period
of time these figures can be reduced perhaps 15%. A few rules-of-thumb can
be given for the use of helicopters as found in Alaska. The maximum range
with two men to go out and return is about 100 mi. The maximum economic
range is 30 to 50 mi. A Jet Ranger carrying 2 bbl of fuel has an economic maximum
range of 15 to 20 mi and a maximum range of 25. Helicopters can be used to
establish and service auxilliary camps as far as 70 mi from the base. However,
these camps must be for the purpose of conducting ground operations on foot, not
helicopter-supported reconnaissance. The cost figures given are based on current
(1970/71) levels.
If it is necessary to establish a base for reconnaissance more than 40 to 50
mi from a road, it is necessary to do so with a fixed wing aircraft which, of
course, requires an airstrip. In many parts of Alaska there are old airstrips left
over from placer mining or trapping operations, and i t often is possible to base
at one of these. If a bulldozer is making a trip into an area for some other
purpose it is possible to have a strip built, but it is impractical to take a tractor
overland just to establish a base for reconnaissance.
Lacking an airstrip, the base will have to be established by float plane on
a lake or large river, or by boat.
In certain parts of the North, geologic reconnaissance is hampered by lack
of outcrops due to the weathering processes and mass wasting associated with
the rigorous climate. Cryoplanation and solifluction tend to obscure outcrops except
on the tops of ridges or on tors jutting out of an otherwise inundated area.
In glaciated regions, drift may cover large areas, effectively eliminating them
from geological examination. However, glaciation also is apt to provide good out-
crops, especially around the shores of glacial lakes. In drift-covered areas, special
attention should be paid to canyons and rapids of streams that have cut through
the drift into bedrock.
Glaciers themselves may obscure outcrops, although this may be more of a
problem in more southerly areas of heavy snowfall than in the north. For example,
in southeastern Alaska, two or three ore deposits are known to extend under
glacier ice.
Permafrost, which may be several thousand years old, also may be a hindrance
in aeochemical ~ r o s ~ e c t i n in
a . that it blocks upward migration of ions from below.
OnYthe other hand, if the' cover over bedrock-is not too thick, the rapid mixing
due to solifluction and frost heaving speeds up the upward migration of metallic
ions and also increases the lateral mobility considerably. "Frost boils" are areas
where the vegetation is broken with mud exposed in the center. I t has been
demonstrated that this mud actually consists of C-horizon material, and geochemical
samples should be taken from such boils when possible.
A factor that introduces considerable complications in geochemical prospecting
is the presence of seasonal frost and its gradual degradation during the summer.
Early in the season the soil auger may not penetrate to the C-horizon, and excessive
vegetation may be included in the sample. If such a sample is screened for analysis,
and weighed, the amount of ion-bearing material may be less than that from
a deeper less organic horizon. As the season progresses, the auger can penetrate
deeper and deeper, introducing a seasonal error into the survey.
5.9.4--HARDROCK DRILLING
As with placer drilling, the effects of the Arctic environment vary. The shortness
of the season does not have the same crippling effect on a drilling operation
being conducted a t a fixed well-established camp as it does on reconnaissance.
Snow cover does not shut down the operation. On the other hand, cold weather
can make the obtaining of a water supply for diamond drilling extremely difficult
and expensive, if not impossible. However, in freighting drilling equipment, heavier
loads and surface transportation are involved, and freezing weather makes tractor
travel much simpler.
A season's diamond-drilling program involves considerable weight6,OOO to 8,000
Ib of drill, pump and tools; 20 drums of gasoline, two-way radio, water tanks
and camp for a t least two men. Since a tractor is needed to move the drill.
it usually is feasible to freight the equipment and supplies by tractor train to
the drilling site. This should be done in late winter while the ground is frozen
hard and there is still snow.
Winter tractor freighting is a highly skilled art and fortunately there is a long
history of application, from the placer mines in the 30's to the oil drilling on
the North Slope of Alaska. The minimum-sized tractor for winter freighting is
a Caterpillar D-6 or equivalent. I t is always safer to travel ;vith more than one
tractor, but if the amount of freight does not justify two, or if only one is
needed a t the job site, one usually is used. In deep snow7 it may be necessary
to leave the load and break trail but sometimes the train may proceed without
this. If more than one trip is to be made, the first trip can be made almost
empty to establish a trail. A complete set of tools and a welder are necessary.
Generally for freighting of this type. "go-devils" rather than bobsleds arc used.
Thc go-devil has either a solid log runner with metal shoes or some type of
fabricated steel runners. The runners extend the entire length of the go-devil.
Such a sled has more stability than a bobsled, an important consideration when
traversing all kinds of terrain on a cross-country trip. One go-devil usually is
fitted with a small cabin for cooking and sleeping. This is the "caboose," "doghouse"
or "wanigan."
Trying to freight after the snow has melted is inefficient due to friction. As
the season progresses and the ground begins to thaw, tractor travel becomes danger-
ous and expensive due to the likelihood of the tractor becoming bogged down.
R
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'9967 6.'8p8U83 U! ~0!'+8lOldX3183!8010a3 0 7 sUO!?nq!.I?U03,, 'ZP-99laded ,,'s?!@Odea
Isiau!m pus urs!usalo~,, l.3 .p 'iaqlnog pus "m 'v 'u!apoog '.v '8 'M '188818~.g
'L8-&8 'dd '2961 'JdV 'e8 'loll ' V J n o f bu?U?Jf
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ing, 3d ed., John Wiley, New York, 1964.
El Arte de Formular
Preguntas Esenciales
por
Dra. Linda Elder
y
Dr. Richard Paul
Basado en
Conceptos de Pensamiento Crítico y Principios Socráticos
Estimado lector:
Este bolsilibro presenta el arte de hacer preguntas esenciales. Es mejor utilizarlo con
el Bolsilibro sobre Pensamiento Crítico y el Bolsilibro sobre Cómo Estudiar y
Aprender.
Para tener éxito en la vida, uno necesita hacer preguntas esenciales: preguntas
esenciales cuando lee, escribe y habla; cuando está de compras, trabajando o
ejerciendo su rol de padre; cuando hace amigos, escoge su pareja, e interacciona con
los medios informativos y la Internet.
Atentamente,
Tabla de Contenido
La calidad
de nuestro
pensamiento
está en
la calidad
de nuestras
preguntas
Introducción
El poder de las preguntas esenciales
Las preguntas definen las tareas, expresan problemas y delimitan asuntos. Impulsan el
pensar hacia adelante. Las contestaciones, por otra parte, a menudo indican una
pausa en el pensar. Es solamente cuando una contestación genera otras preguntas
que el pensamiento continúa la indagación. Una mente sin preguntas es una mente
que no está viva intelectualmente. El no (hacer preguntas) preguntas equivale a no
comprender (lograr comprensión). Las preguntas superficiales equivalen a
comprensión superficial, las preguntas que no son claras equivalen a comprensión que
no es clara. Si su mente no genera preguntas activamente, usted no está involucrado
en un aprendizaje sustancial.
Cada campo se mantiene vivo solamente hasta el punto que se generan preguntas
nuevas y éstas se toman en serio como la fuerza que impulsa el pensamiento. Cuando
un campo de estudio ya no busca respuestas significativas a preguntas esenciales,
muere como campo. Para pensar en algo y volver a pensarlo, uno debe hacer las
preguntas necesarias para pensar lógicamente sobre eso, con claridad y precisión.
Ya que no podemos ser diestros en el pensar a menos que seamos diestros en hacer
preguntas, nos esforzamos por llegara tener una mente donde las preguntas esenciales
sean por instinto. Es la clave para el pensamiento productivo, el aprendizaje profundo
y vivir con efectividad.
mientras nosotros
Analizamos Evaluamos
el pensar el pensar
1
al intentar CUANDO
8 contestar una PENSAMOS,
pregunta o tenemos un
resolver un propósito
problema 2
basados en
conceptos
y teorías dentro de un
punto de vista
7 ESTRUCTURAS
UNIVERSALES
DE
PENSAMIENTO
3
para hacer basado en
inferencias y suposiciones
emitir juicios
Que llevan a
6 Usamos implicaciones y
datos, hechos consecuencias.
y 4
experiencias
§ No estoy seguro sobre exactamente qué pregunta usted hace. ¿Puede explicarla?
§ ¿Es esta pregunta la mejor pregunta en este momento, o existe otra pregunta más
importante que necesitamos enfocar?
§ La pregunta en mi mente es ésta... ¿Está de acuerdo o ve otra pregunta en el
asunto?
§ ¿Debemos hacer la pregunta (problema, asunto) de esta manera... o de ésta..?
§ Desde un punto de vista conservador, la pregunta es ...; desde un punto de vista
liberal, la pregunta es... ¿Cuál es la mejor manera de exponerlo, a su entender?
Al enfrentar una pregunta, es útil descifrar de qué tipo es. ¿Tiene la pregunta una sola
contestación definitiva? ¿Es una pregunta que sugiere opciones subjetivas? O, ¿nos
requiere la pregunta que consideremos contestaciones que compiten entre sí?
1 2 3
Un Sin Sistemas
Sistema Sistema en Conflicto
Existe una cantidad de maneras esenciales para clasificar preguntas con el propósito
de análisis. Una manera es enfocar el tipo de razonamiento que requiere la pregunta.
Con preguntas de un sistema, hay un procedimiento o método establecido para
encontrar la contestación. Con preguntas sin sistema, la pregunta se contesta
apropiadamente de acuerdo con la preferencia subjetiva de cada uno; no hay una
contestación “correcta”. Con preguntas de sistemas en conflicto, hay múltiples
puntos de vista desde donde, y dentro de los cuáles, uno puede razonablemente tratar
de contestar la pregunta. Hay contestaciones mejores y peores, pero no las hay
“correctas”, comprobables, ya que éstas tratan de asuntos sobre los cuales hasta los
expertos están en desacuerdo (de ahí el “conflicto” de sistema a sistema).
§ ¿Cómo podemos mejor lidiar con los problemas económicos más básicos y
significantes de la nación hoy día?
Algunas personas, los absolutistas dogmáticos, tratan de reducir todas las preguntas a
asuntos de hechos. Piensan que cada pregunta tiene una y solamente una
contestación correcta. Otros, los relativistas subjetivos, tratan de reducir todas las
preguntas a asuntos de opinión subjetiva. Piensan que ninguna pregunta tiene una
contestación correcta o incorrecta sino que todas las preguntas son asuntos de opinión:
“Yo tengo mi opinión y usted tiene la suya. La mía está bien para mí y la suya está
bien para usted.” Ni los absolutistas ni los relativistas dejan lugar para lo que es crucial
al éxito de la vida humana: asuntos de juicio razonado.
las preguntas que requieren evidencia sólida y buen razonamiento, no logran ver la
diferencia entre ofrecer razones legítimas y evidencia que sustenta un punto de vista y
sencillamente aseverar un punto de vista.
Para determinar cuál de estos tres tipos de preguntas estamos manejando (en un caso
dado), podemos hacer las siguientes preguntas: ¿Existen hechos relevantes que
debemos considerar? Si fuera así, entonces o bien los hechos por sí solos contestan la
pregunta (y estamos manejando una pregunta de procedimientos), o bien los hechos se
pueden interpretar en diferentes maneras (y la pregunta es debatible). Si no hay
hechos para considerar, entonces es asunto de preferencia personal. Recuerde, si un
asunto no es de preferencia personal, entonces deben existir hechos que influyen en la
pregunta. Si los hechos contestan la pregunta, entonces es una pregunta de
procedimientos de “un sistema.”
Cuestionar conceptos
Los conceptos son ideas que usamos al pensar. Nos permiten agrupar cosas de
nuestras experiencias en diferentes categorías, clasificaciones o divisiones. Son la
base de las etiquetas que le asignamos a las cosas en nuestra mente. Representan
nuestro mapa mental del mundo que nos indica cómo operan las cosas y qué podemos
esperar de ellas. Por medio de nuestros conceptos definimos situaciones, eventos,
relaciones y objetos de nuestra experiencia. Los asuntos de mucha importancia
dependen de cómo conceptualizamos las cosas. Por ejemplo, si conceptualizamos “los
animales” sin derechos, quizás no consideremos que sea un asunto de ética cuando se
les hace sufrir dolor. Podríamos considerarlos ser nada más que “nuestra propiedad,”
para destruir o mantenerlo como nos guste. Sin embargo, tenemos el concepto de
“trato humano” para los animales. ¿De qué conceptos o ideas depende esto? ¿Qué
presupone? ¿Qué implica? Éstas son preguntas conceptuales.
Las preguntas conceptuales son preguntas que se contestan por medio de análisis y/o
clarificación de uno o más conceptos dentro de la pregunta. Las preguntas
conceptuales se pueden dividir en al menos dos categorías: simples y complejas.
Simples
Simple Complejas
Preguntas que
Preguntas se contestan por
que se medio de
argumentaciones
contestan
(a la luz del
solamente por análisis
medio de conflictivo de
definiciones conceptos
claves)
Las preguntas conceptuales simples se contestan por medio de los criterios implícitos
en una definición normal de una palabra o frase. Para contestar las preguntas,
meramente necesitamos entender los significados de las palabras ya establecidos y
cómo se pueden aplicar apropiadamente a los casos y las circunstancias. Un lugar
para dirigirse a una pregunta conceptual simple es un buen diccionario. Considere
estos ejemplos:
1. ¿Cuáles son las diferencias básicas entre los significados de las palabras
‘socialización,’ ‘adiestramiento,’ ‘indoctrinación’ y ‘educación?’
2. ¿Se le puede llamar democracia a un país donde el poder político no está en las
manos del pueblo?
3. ¿Puede amar a una persona y no importarle su bienestar y sus intereses?
4. Si un gobierno emprende guerra contra un pueblo civil, ¿es culpable de
terrorismo?
5. Si un artículo de periódico sobre un asunto contencioso sistemáticamente
implica que un lado del asunto tiene la razón, ¿debe éste considerarse
imparcial?
6. ¿Es la tortura compatible con el respeto a los derechos humanos básicos?
Note que cada una de estas preguntas se contesta tan pronto uno queda claro sobre
los significados relevantes de las palabras claves: socialización, adiestramiento,
indoctrinación, educación, democracia, amor, terrorismo, e imparcial. A menos que uno
tenga una buena razón para cuestionar los significados establecidos, hay poco lugar
para argumentar. Para comprobar lo que decimos, busque cada una de las palabras
Así pues, si una democracia es una forma de gobierno donde el pueblo manda,
entonces la pregunta, “¿Se le puede llamar democracia a un país si el poder político no
está en las manos del pueblo?” Se convierte en “Se puede decir que un país tiene un
gobierno donde el pueblo manda si el poder político no está en las manos del pueblo?”
De esta manera, la pregunta se contesta por sí misma.
Ahora vamos a ver las preguntas conceptuales complejas. En este caso, las
definiciones normales no contestan la pregunta, sino que abren la discusión. Puntos de
vista divergentes pueden influir en las definiciones inclinándolas hacia este o aquel
lado. Argumentos bien razonados pueden ser creados desde distintos puntos de
partida. Por consecuencia, hay contestaciones mejores o peores a las preguntas
conceptuales complejas, pero, al presente, no hay una contestación “correcta” o
definitiva (ver sección anterior sobre preguntas de juicio).
Considere estos ejemplos:
Para analizar los conceptos complejos puede que necesitemos uno o más de las
siguientes estrategias introducidas por John Wilson (1963) en Pensando Con
Conceptos1:
4) Enfoque en casos fronterizos (casos con rasgos del caso modelo y de casos
generalmente considerados diferentes al caso modelo). En un caso fronterizo, nos
inclinamos hacia ambos, aplicar y retener los conceptos. Otra vez, usando nuestro
1
Wilson, J. (1963). Pensando Con Conceptos. Cambridge: Cambridge University Press. Este libro
provee una excelente discusión del análisis conceptual y el uso del análisis conceptual para contestar
preguntas. Hemos usado las distinciones de Wilson como una guía para esta sección, pero hemos
modificado ligeramente sus ideas, para el propósito de este bolsilibro.
ejemplo de los padres, digamos que uno de los dos niños está severamente
incapacitado y por tal razón, los padres gastan la mayor parte de sus ingresos en
ese niño, por lo que se les hace imposible costear la educación universitaria de su
otro hijo. Esto podría ser un caso fronterizo de “trato igual”, ya que los padres
anteponen las necesidades del niño incapacitado por encima de las necesidades
del otro niño, pero tienen una buena razón. O consideremos un ejemplo diferente.
Si un niño toca una estufa y se quema, el padre podría decir, “¡Mira, ahí tienes tu
castigo!” Sin embargo, el padre no quiere decir que el niño literalmente recibió su
castigo, sino que al quemarse es más o menos un castigo. Tiene al menos algunas
características de un castigo. Sin embargo, este caso nunca se usaría como un
ejemplo clásico para la definición de un castigo.
Las preguntas conceptuales profundas traspasan los límites de este bolsilibro. Pero
podemos tomar las distinciones de Wilson, y al usarlas, analizar brevemente algunas
preguntas.
Considere la pregunta: ¿Es posible lograr la paz en el Oriente Medio? Al contestar esta
pregunta, necesitamos saber cuán ampliamente o cuán estrechamente usamos el
término “Oriente Medio.” Esto debería ser una estipulación clara (“Cuando digo Oriente
Medio quiero decir...”).
Una vez se haga esto, podemos pasar al análisis más difícil del concepto “paz” dentro
de la pregunta. ¿Qué grado o formas de “paz” uno propone? ¿Qué formas de paz uno
puede imaginar? ¿Cuáles son algunos casos modelos de paz? ¿Cuáles son algunos
casos contrarios, relacionados y fronterizos? Cuando decimos paz, ¿queremos decir
todos los pueblos viviendo en amistad, respeto mutuo y seguridad mutua (caso
modelo)? ¿Qué otros conceptos están íntimamente conectados con la paz (casos
relacionados)? Suponga que un país, siendo superior militarmente, en efecto conquista
completamente a sus “enemigos” y les impone condiciones “pacíficas” (ausencia de
resistencia abierta o violación de la ley impuesta). ¿Sería un estado de esta naturaleza
un estado de paz? ¿Es la paz consistente con el odio mutuo (caso fronterizo)? O,
suponga que se llega a un acuerdo en donde aquellos que firman por una de las partes
aceptan condiciones que la mayoría de sus miembros rechazan. O, suponga que un
poder militar muy inferior obliga a una de las partes a aceptar condiciones injustas (por
ejemplo, ceder mucha de sus tierras y su desarrollo potencial) meramente para lograr
algún nivel de libertad y auto gobierno (caso fronterizo). ¿Alguno de estos casos puede
considerarse como lograr la “paz?” Para descifrar lo que significa la “paz”, necesitamos
considerar, además a una cantidad sustancial además, el contexto y la historia de
donde se origina esta pregunta. Necesitamos considerar, además, las presente
estructura de poder en el Oriente Medio y las agendas de todas las naciones
participantes. ¿Qué desenlaces son posibles y cuáles de ellos, si alguno, ameritan el
término “paz?”
significado está confundido por las maquinaciones del poder, por un lado, y la
irracionalidad humana, por otro lado. Para los poderoso, la paz probablemente se
limita a condiciones donde su dominio es aceptado tranquilamente. La paz entonces
significa el logro de lo que quieren, para bien o para mal. Aparentan existir dos lógicas
en conflicto aquí: la lógica de paz (en términos ideales) y la lógica de paz (en un
mundo de poderes militares y económicos sumamente desiguales).
Las preguntas empíricas son preguntas que se contestan mayormente por medio de la
determinación de hechos. Para contestar una pregunta empírica, necesitamos
averiguar los hechos relevantes: por experiencia personal, investigación u otra
manera. Traemos preguntas empíricas cuando necesitamos el conocimiento sobre el
mundo y cómo funcionan las cosas en él.
Las preguntas empíricas caen en dos categorías: aquellas para las que la contestación
ya ha sido determinada y aquellas que no están resueltas todavía. Cuando lidiamos
con el primer tipo de pregunta, identificamos un recurso o manera confiable para
contestar la pregunta. Estas pueden llamarse preguntas empíricas resueltas. El
segundo tipo de preguntas es cualquiera de esas preguntas empíricas que todavía no
ha sido contestada legítimamente. Ambas dependen de hechos y nuestro acceso a
éstos.
de nueve pies. Si fuera así, la pregunta queda resuelta. Si no, debemos confiar en la
información disponible y el conocimiento para razonar la pregunta. Hay una cantidad
considerable de información disponible sobre la fisiología de los caballos y la física del
salto. Puede que sea o no posible que un experto en ambas llegue a un juicio bien
sustentado sobre la probabilidad de que algún caballo eventualmente salte la verja de
nueve pies. Por supuesto, la pregunta no se puede contestar definitivamente hasta que
algún caballo en efecto salte esa altura.
Muchas preguntas no son exclusivamente empíricas, sino que tienen una dimensión
empírica importante. En ese caso necesitamos determinar cuál parte de la pregunta es
de hecho, precisamente cuáles hechos son relevantes y cómo encontrar esos hechos.
Por supuesto, resueltas o no resueltas, las preguntas empíricas también pueden ser
simples o complejas.
Cuando lidiamos con preguntas complejas, una herramienta útil para disciplinar nuestro
pensamiento es identificar las preguntas inherentes en la pregunta que nos concierne
directamente. O sea, ya que algunas preguntas con frecuencia presuponen que otras
preguntas han sido contestadas, es a menudo útil cuestionar la pregunta descifrando lo
que la pregunta “previa” presume, o si no, qué otras preguntas nos sería de beneficio
contestar primero, antes de tratar de contestar la pregunta inmediata. Esto es
especialmente importante cuando se trata de preguntas complejas. Con frecuencia
podemos resolver una pregunta compleja por medio de preguntas más simples.
Cuando se trata de una pregunta compleja que toca más de un campo de pensamiento,
enfoque en las preguntas previas formulando preguntas de acuerdo al campo. Por
ejemplo, ¿Incluye la pregunta una dimensión económica? ¿Incluye alguna dimensión
biológica, sociológica, cultural, política, ética, psicológica, religiosa, histórica, o alguna
otra? Para cada dimensión de pensamiento inherente en la pregunta, formule una
pregunta que le obligue a considerar complejidades que de otra manera no vería.
Cuando enfoque en los campos dentro de las preguntas, considere preguntas tales
como:
Disciplinas Ciencias
Matemáticas y Cuantitativas Físicas y de Vida
Química
Física
Biología
Matemáticas
Botánica
Lógica
Geología
Ingeniería
Ecología
Música
Antropología
Escultura Sociología
Historia
Pintura
Economía
Filosofía
Política
Literatura
Psicología
Teología
Ética
Artes y Disciplinas
Humanidades Sociales
Ámbitos de Preguntas
(por disciplina)
Pregunta compleja: ¿Qué se puede hacer sobre la cantidad de personas que abusan
de las drogas ilegales?
Económico
§ ¿Qué fuerzas económicas sostienen el abuso de drogas?
§ ¿Qué se puede hacer para minimizar la influencia del dinero involucrada en la
cultura de las drogas?
Político
§ ¿Cuales posibles soluciones al abuso de drogas son inaceptables políticamente?
§ ¿Existen soluciones potenciales que sean realistas políticamente?
§ ¿Hasta qué punto agrava el problema la estructura política?
Social / Psicológico
§ ¿Qué estructuras y prácticas sociales sostienen el abuso de drogas?
§ ¿Cómo contribuye al abuso de drogas el ser miembro de una pandilla?
§ ¿Cómo ser miembro de cualquier grupo contribuye al problema o, por el
contrario, aísla el grupo del abuso de drogas?
Psicológico
§ ¿Cómo contribuyen al abuso de drogas factores tales como el estrés, las
diferencias de personalidades individuales y traumas en la niñez?
§ ¿Qué papel, si alguno, juega la irracionalidad humana en el abuso de drogas?
Biológico
§ ¿Qué papel juega la genética en el abuso de drogas?
§ ¿Qué cambios biológicos en el cuerpo, como resultado del abuso de drogas,
contribuyen al problema?
Educativo
§ ¿Qué pueden hacer las instituciones educativas para reducir la incidencia del
abuso de drogas?
§ ¿Qué papel juega ahora para sostener o disminuir el problema?
Religioso
§ ¿Qué pueden hacer las instituciones religiosas para reducir la incidencia del
abuso de drogas?
§ ¿Qué papel juegan al presente relacionado con el problema?
Cultural
§ ¿Qué creencias culturales sostienen el problema del abuso de drogas?
§ ¿Qué podemos aprender de las culturas que al presente tienen una incidencia
baja de abuso de drogas?
Los mismos puntos son ciertos para la solución de problemas. Nuestras vidas diarias
están llenas de situaciones con problemas para resolver. Mientras mejor resolvemos
los problemas, nuestras vidas estarán más realizadas y racionales.
6. Adopte una estrategia para abordar el problema y cumpla con esa estrategia. Esto
puede incluir acción directa o una estrategia cuidadosamente pensada de esperar y
ver qué sucede. Haga estas preguntas:
§ ¿Cómo puedo abordar este problema de la manera más lógica posible?
§ ¿Debo lidiar con el problema de inmediato o debo abordarlo lentamente y
con cuidado?
§ ¿Cuáles son las ventajas de cada estrategia?
7. Cuando usted actúe, revise las implicaciones de sus acciones según van
emergiendo. Esté preparado para cambiar su estrategia, su análisis o relación con
el problema, o las tres cosas, según aparece más información sobre el problema.
Haga estas preguntas:
§ ¿Qué implicaciones seguirían si decido actuar de esta manera en vez de
la otra?
§ ¿Realmente resolví el problema o todavía existe?
§ ¿Necesito cambiar mi manera de lidiar con el problema o mi estrategia?
Las preguntas evaluativas son aquellas que piden que determinemos el valor, la valía o
la calidad de algo o de alguien. El avalúo es inherente a virtualmente todas las
experiencias humanas y se puede hacer bien o mal. Nuestra habilidad para evaluar
efectivamente lo que sucede y cómo actuar en una situación está determinada
directamente por la calidad de las preguntas que hacemos en la situación.
Preguntas evaluativas (que piden un juicio razonado entre dos puntos de vista
en conflicto):
§ ¿Qué tipo de carro debo comprar?
§ ¿Qué tipo de nevera será mejor para nuestras necesidades?
§ ¿Cómo debemos diseñar esta casa para poder llenar las necesidades de la
familia?
§ ¿Debo buscar una nueva carrera?
2002 The Foundation For Critical Thinking www.criticalthinking.org
The Art of Asking Essential Questions 29
2. Enfocar la pregunta clave que contesta la obra escrita: ¿La pregunta está bien
redactada (o claramente implícita)? ¿Es clara e imparcial? La formulación de la
pregunta, ¿le hace justicia a la complejidad del asunto a tratarse? ¿Son la
pregunta y el propósito directamente relevantes el uno al otro?
5. Enfocar las suposiciones del autor: ¿ Muestra el autor sensitividad hacia lo que
da por sentado o presume? ¿Usa el autor suposiciones sin tocar los problemas
inherentes en esas suposiciones?
Una de las preguntas más comunes al tratar con preguntas complejas surge cuando la
pregunta principal no está clara. Cuando la pregunta no está clara o es imprecisa, el
pensamiento no tiene una guía clara. Divaga sin tener un sentido claro de relevancia.
Los pensamientos están dispersos. Pero cuando tomamos el tiempo de clarificar una
pregunta, estamos más capacitados para contestarla. Tenemos claro para nosotros
mismos cuál es la tarea intelectual y qué requiere esa tarea de nosotros.
Una de las estrategias más efectivas es añadir detalles a la pregunta, para romperla en
pedazos y ser más preciso. Desenredamos las preguntas que son mejor contestadas
por separado. Podemos notar las relaciones y donde se sobreponen las sub-preguntas
discernibles.
Idea Esencial: Una pregunta está clara cuando sabemos precisamente lo que
necesitamos saber para contestarla. Una oración interrogativa imprecisa no es
una pregunta clara. No trate de contestar una pregunta hasta que sepa
exactamente lo que se pregunta.
Cuestionar al leer
Los lectores diestros pueden dominar una destreza usando solamente libros, sin el
beneficio de conferencias y discusiones en clase. Es posible educarse mediante la
lectura por sí sola. Los lectores diestros cuestionan activamente lo que leen.
Cuestionan para poder comprender. Cuestionan para evaluar lo que leen. Cuestionan
para traer ideas importantes a su pensamiento.
Los lectores diestros ven la lectura como un diálogo activo que rutinamente incluye
preguntas. A continuación algunas de las preguntas que los lectores críticos hacen
mientras leen?:
§ ¿Por qué leo esto? ¿Cuál es mi propósito? ¿Qué voy a ganar con esto?
§ ¿Cuál es el propósito del autor? ¿Qué puedo aprender del punto de vista del autor
al leer cuidadosamente el título así como el prefacio, la introducción y la tabla de
contenido?
§ De párrafo a párrafo, ¿puedo resumir en mis palabras lo que el autor dice? ¿Qué
preguntas tengo?
§ ¿Existe parte de esta oración o párrafo que no entiendo? ¿De qué parte no estoy
seguro? ¿Qué parte tengo clara?
§ Si no entiendo algo, ¿el autor es impreciso o existe un problema con mi lectura?
§ ¿Qué preguntas tengo? ¿Cuán importante es para mí contestar estas preguntas
antes de seguir leyendo?
§ ¿Entiendo el significado de términos claves o necesito buscarlos en un diccionario?
§ ¿El autor usa palabras claves de manera normal o extraordinaria?
§ Los hechos presentados, ¿son creíbles o los debo cuestionar?
§ ¿Cuáles son las ideas más significantes en este texto?
§ ¿Cómo es relevante para mí lo que leo? ¿Cómo lo puedo conectar con lo que es
importante o será importante en mi vida?
§ ¿Cuál es la naturaleza de la pregunta en el texto? ¿Entiendo claramente las
complejidades en ella?
§ ¿Necesito investigar más el asunto en otro texto antes de continuar con este texto?
Cuestionar al escribir
El escribir bien es producir trabajos escritos que son a la vez claros y bien razonados.
Para lograr esto, el escritor diestro rutinariamente hace preguntas de análisis y auto
evaluación.
Claridad: ¿Tengo claro lo que digo o mi pensamiento está confuso? Para cada
párrafo, ¿expuse mi idea central y luego la elaboré? ¿Añadí ejemplos para aclarar mis
puntos? ¿Ilustré las ideas importantes? ¿Escribí oraciones que se pueden interpretar
de distintas maneras o el significado intencional está claro?
Precisión: ¿Añadí los detalles adecuados para que el lector comprenda precisamente
lo que quiero decir? ¿Necesito más detalles?
Lógica: ¿Todas las ideas de mi escrito encajan unas con otras lógicamente? ¿Utilicé
palabras de transición para que las conexiones entre ideas fueran evidentes para el
lector?
Relevancia: En la obra, ¿mantengo el enfoque claro y consistente? ¿Me desvío del
punto principal? En cada párrafo, ¿todo en el párrafo es relevante a la idea central del
párrafo?
Significado: ¿Cuál es la pregunta más significativa para enfocar? ¿Cuáles son los
conceptos más significativos? ¿Los hechos?
Profundidad: ¿Comprendo claramente lo que hace que el asunto sea complejo?
¿Detallé suficientemente las compejidades?
Imparcialidad: ¿Fui imparcial con todos los puntos de vista relevantes al asunto o
presenté “débilmente” los puntos de vista contrarios para poder descartarlos?
Exactitud: ¿Estoy seguro de que toda la información que presenté como hechos lo
es? ¿Son confiables mis fuentes de información?
Una vez haya completado una obra escrita, entonces puede usar el modelo en la
sección Evaluar el razonamiento (las partes) para juzgar su propio razonamiento, tal
como evaluaría el razonamiento de cualquier autor.
Los siguientes tipos de actos dañinos nos permiten definir los derechos universales:
§ ESCLAVITUD: Esclavizar las personas, individualmente o en grupos.
§ GENOCIDIO: Sistemáticamente matar con la intención de eliminar toda una nación
o grupo étnico.
§ TERRORISMO: Emprender la guerra contra civiles.
§ TORTURA: Infligir dolor severo como un acto de venganza o para obtener
información de la persona.
§ SEXISMO: No tratar las personas como iguales (haciéndoles daño) por virtud de su
género.
§ RACISMO: No tratar las personas iguales (haciéndoles daño) por virtud de su raza
o etnicidad.
§ ASESINATO: Matar personas con premeditación por venganza, placer, o para
sacar provecho.
§ ASALTO: Atacar a una persona inocente con intención de causarle serios daños
físicos.
§ VIOLACIÓN: Obligar a una persona a tener relaciones sexuales en contra de su
voluntad.
§ FRAUDE: Engaño intencional para que una persona ceda una propiedad o un
derecho.
§ ENGAÑO: Representar algo como cierto al saber que es falso para obtener un fin
de interés personal a expensas de hacer daño a otro.
§ INTIMIDACIÓN: Obligar a una persona a actuar en contra de sus intereses, o no
actuar en sus intereses, usando amenazas o violencia.
§ Encarcelar las personas sin informarles de los cargos en su contra o brindarles una
oportunidad razonable para defenderse.
§ Encarcelar las personas, o castigarlos de otra manera, solamente por sus creencias
políticas o religiosas.
Preguntas éticas sencillas que contienen principios éticos claros. Algunos ejemplos:
§ ¿Es cruel someter una criatura inocente a sufrimiento innecesario?
§ ¿Es injusto negarle a alguien un derecho humano básico?
§ ¿Es éticamente incorrecto engañar o defraudar a alguien?
§ ¿Es éticamente incorrecto torturar las personas para extraerles una confesión?
§ ¿Es éticamente incorrecto usar otra persona para servir los intereses de usted?
Preguntas éticas complejas son aquellas que se pueden argumentar en más de una
manera (usando principios éticos). Algunos ejemplos:
§ ¿Bajo qué condiciones, si alguna, se debe permitir la experimentación con los
animales?
§ ¿Es éticamente incorrecto matar animales para alimento?
§ ¿Hasta qué punto se le debe permitir a los científicos experimentar con nuevos
viruses (cuando el virus que crean pueda hacer daño de por sí)?
§ ¿Bajo cuáles condiciones se deben mantener las personas vivas por medios
artificiales?
§ ¿Tienen los científicos una responsabilidad ética especial con la sociedad?
§ ¿Estamos justificados éticamente en participar en prácticas poco éticas para
nuestra propia defensa cuando nuestros enemigos las usan contra nosotros?
§ ¿Hasta qué punto estamos éticamente obligados a contribuir con la salubridad del
ambiente?
§ ¿Bajo cuáles condiciones, si alguna, es éticamente justificable la pena capital?
Los ejemplos a continuación destacan confusiones en la ética con la religión, las leyes,
o costumbres sociales:
La democracia puede ser una forma de gobierno efectiva sólo en el grado que el
público (que en teoría gobierna) está bien informado sobre los eventos nacionales e
internacionales y pueden pensar independientemente y críticamente sobre esos
eventos. Si la gran mayoría de los ciudadanos no reconoce los prejuicios en las
noticias de su nación, si no puede detectar cuándo la ideología, la inclinación y el giro
están presentes, si no puede reconocer cuando son expuestos a la propaganda,
entonces no puede razonablemente determinar qué mensajes de los medios necesitan
ser suplementados, contrabalanceados o descartados completamente. Por un lado, las
fuentes de noticias mundiales están cada vez más sofisticadas en la lógica de los
medios (el arte de “persuadir” y manipular las masas de gente). Esto les permite crear
un aura de objetividad y “veracidad” en los artículos de noticias que construyen.
Por otro lado, solamente una pequeña minoría de ciudadanos tiene las destrezas para
reconocer los prejuicios y la propaganda en las noticias diseminadas en su país.
Solamente unos pocos pueden detectar representaciones unilaterales de eventos y
buscar fuentes de información y opiniones alternas para compararlos con los de sus
medios noticiosos principales. Al presente, la mayoría abrumadora de las personas del
mundo, sin adiestramiento en pensamiento crítico, está a la merced de los medios
noticiosos de su propio país. Su punto de vista del mundo, qué países identifican como
amigos y cúales como enemigos, está determinada en gran parte para ellos por los
medios (y las creencias y costumbres tradicionales de su sociedad).
Lo que hacen los lectores críticos es reconocer esa unilateralidad y buscar puntos de
vista descartados o ignorados. También toman nota de qué noticias reciben énfasis
(e.g., en la primera página) y cuáles están enterradas en el trasfondo (e.g., en la página
24). A continuación algunas de las preguntas claves para formular cuando
analiza o interpreta noticias:
§ ¿Cuál es el público propuesto?
§ ¿Qué punto de vista está favorecido?
§ ¿Qué punto(s) de vista está(n) siendo descartado(s) o se le restó importancia?
§ ¿Cómo puedo tener acceso al punto de vista que fue rechazado (de las personas
que puedan defenderlo más inteligentemente)?
§ ¿Qué noticias están en la primera página y por qué? ¿Qué información está
“enterrada” en el artículo y por qué?
Aprender bien cualquier materia conlleva sondear su lógica con preguntas. Sin
embargo, la mayoría de los estudiantes permanecen sentados pasivamente en clase,
deseando que el profesor no los llame, haciendo pocas preguntas. Cuando hacen
preguntas, tienden a ser superficiales tales como: ¿Esto va a estar en el examen?
¿Tenemos que saber esto? ¿En verdad tenemos que escribir 10 páginas para esta
monografía? Pero cuando los estudiantes toman en serio su aprendizaje, hacen
preguntas más significativas como cuestión de rutina. Esta sección enfoca las
preguntas que le permiten a uno aprender más profundamente en cualquier materia,
disciplina o clase.
Entender la lógica más fundamental de una disciplina es entender las ocho estructuras
de pensamiento que le subyacen. Para llegar a esta lógica, haga las siguientes
preguntas en cualquier curso que tome o en la materia que estudie:
§ ¿Cuáles son los propósitos, las metas y los objetivos del curso o la disciplina?
§ ¿Qué preguntas o problemas le son centrales?
§ ¿Qué conceptos serán fundamentales?
§ ¿Qué punto(s) de vista o marco(s) de referencia necesito para aprender a
razonar dentro de ellos?
§ ¿Qué suposiciones definen el curso o la disciplina?
§ ¿Qué tipos de inferencias o conclusiones necesitaré para aprender a razonar?
§ ¿Cuál es la compensación (implicación) por razonar bien dentro de esta
disciplina?
Los estudiantes deben ir a clase armados con preguntas generadas por la lectura de
sus notas de clase y el libro de texto. También pueden leer la enciclopedia para buscar
ayuda con la lógica básica de una materia. Algunas preguntas posibles para comenzar
son:
§ ¿Qué tratan de lograr las personas en este campo?
§ ¿Qué tipo de preguntas hacen? ¿Qué tipos de problemas tratan de resolver?
§ ¿Que tipo de información o datos recolectan?
§ ¿Cómo hacen para recolectar la información de manera distintiva para este
campo?
§ ¿Cuáles son las ideas, los conceptos o teorías más básicas de este campo?
§ ¿Cómo estudiar en este campo afecta el punto de vista del mundo que uno
tiene?
§ ¿Cómo se utilizan los productos de este campo en la vida cotidiana?
Estas preguntas pueden ser contextualizadas para cualquier día de clase, capítulo del
texto o dimensión de estudio. Por ejemplo, en un día cualquiera usted puede hacer
una o más de las siguientes preguntas:
¿Qué puntos de
vista se
fomentan dentro ¿Cuál es la meta
de la disciplina? principal al estudiar
¿Existen la materia? ¿Qué
múltiples puntos tratan de lograr los
de vista? expertos del campo?
ELEMENTOS
DEL
Conceptos RAZONAMIENTO Información
¿Cuáles son las ideas ¿Qué tipo de información se
principales, los usa para contestar las
principios y las teorías preguntas dentro de la
que guían el disciplina?
pensamiento dentro de
la disciplina?
¿Qué tipos de
¿Que se da por inferencias o juicios
sentado dentro hacen los expertos
de la en la disciplina?
disciplina?
§ ¿Hay libros de texto de otros campos sobre esta misma materia, quizás desde un
punto de vista diferente? ¿Hasta qué punto hay conflictos en esta materia a la luz
de los diferentes puntos de vista?
§ ¿Hasta qué punto representa este texto el campo como una ciencia? Si es así,
¿están es desacuerdo algunos expertos del campo con esta representación? ¿En
qué sentido no es una ciencia?
§ ¿Hasta qué punto las preguntas hechas en este texto conducen a contestaciones
definitivas? Por el contrario, ¿hasta qué punto son las preguntas de este texto
asuntos de juicio (discutibles)? Y, ¿el texto le ayuda a distinguir entre estos dos
tipos de preguntas muy diferentes?
Los buenos pensadores pueden formular e indagar en preguntas profundas para llegar
a la esencia de la disciplina o materia. En vez de depender estrictamente en el texto o
el instructor, ellos buscan e indagan en la materia mediante preguntas importantes que
ellos mismos identifican y desarrollan. Uno puede usar enciclopedias para comenzar a
formular preguntas esenciales en las disciplinas. En esta sección, le brindamos
ejemplos de los tipos de preguntas que uno puede aspirar a contestar dentro de
cualquier materia. Hemos incluído sólo unas pocas de la cantidad de materias que
existen.
§ ¿Cómo llegan a dominar las vidas de las personas las creencias culturales, las
costumbres, tradiciones y tabúes?
§ ¿Cómo funcionan dentro de un grupo en particular las creencias culturales, las
costumbres tradiciones y tabúes?
§ ¿Hasta qué punto los puntos de vista culturales influyen en las personas? ¿Hasta
qué punto las personas tienden a pensar por su cuenta a la luz de los puntos de
vista establecidos?
§ ¿En qué se diferencian las características de las personas que se conforman de las
de aquellos que son disidentes?
§ ¿Cuáles son algunas de las implicaciones y posibilidades del comportamiento no
conformista?
§ De los grupos en que somos miembros, ¿qué comportamiento se exige, qué
comportamiento está prohibido y qué extensión de libre selección está permitido?
§ ¿Hasta qué punto violan los derechos humanos las costumbres sociales?
§ ¿Hasta qué punto fomentan el comportamiento poco ético las normas sociales?
§ ¿Hasta qué punto las culturas tienden a confundir las costumbres sociales con la
ética? ¿Qué fenómenos dentro de las culturas fomentan esta confusión?
§ ¿Por qué la mayoría de las personas parecen preferir los productos de los medios
populares en vez de las creaciones de la comunidad “artística”?
§ ¿Cómo explicamos el hecho de que la mayoría de las personas no pueden ofrecer
una explicación inteligente respecto a su juicio en cuanto a lo que consideran “bello”
en la pintura, escultura, arquitectura, baile, música, drama o literatura?
§ ¿Por qué es que la mayoría de las personas no pueden distinguir entre una
pregunta o issue artístico y cualquier otro tipo de pregunta o asunto?
Podemos hacer preguntas orientadas hacia afuera, tales como aquellas de las tres
secciones anteriores.También podemos hacer preguntas orientadas hacia adentro. Las
preguntas orientadas hacia afuera son aquellas que preguntamos sobre todo lo que no
sea nuestra vida interior. Las preguntas importantes orientadas hacia afuera nos
ayudan a entender mejor el mundo.
Las preguntas orientadas hacia adentro son aquellas que nos hacemos para
entendernos mejor a nosotros mismos. Las preguntas que nos hacemos son de vital
importancia a nuestro desarrollo. Si nunca nos hacemos preguntas, presumimos
incorrectamente que somos infalibles. Pero ser falibles es una característica
importante que define a los humanos. En esta sección, enfocamos los tipos de
preguntas que nos podemos formular para desarrollarnos como pensadores, como
personas que han aprendido a tomar control de sus mentes.
Idea # 1: ¿Entiendo los requisitos de cada clase que tomo, como se enseñarán y
qué se espera de mí? ¿He buscado y recibido orientación sobre cómo
puedo prepararme mejor para la clase?
Idea # 7: ¿Leo mis textos para descifrar el PENSAR de los autores? ¿Traduzco el
pensar del autor a mi propio pensar (al poner los puntos básicos en mis
palabras)? ¿Hago el papel del autor (para otra persona) explicando los
puntos principales de varias secciones del texto?
Idea # 10: ¿Me examino a mí mismo antes de venir a clase tratando de resumir,
oralmente o por escrito, los puntos principales de la clase anterior? Si no
puedo resumir los puntos principales, no los he aprendido.
Idea # 12: ¿Uso la escritura como una manera de aprender al resumir en mis
palabras los puntos importantes del texto u otras lecturas? ¿Puedo
formular preguntas de prueba y escribir sus contestaciones?
Idea # 14: ¿Con frecuencia avalúo mi lectura? ¿Leo el texto activamente? ¿Hago
preguntas mientras leo? ¿Reconozco los puntos que entiendo y no
entiendo?
Una de las grandes barreras para detectar el pensamiento egocéntrico surge del modo
cómo la mente humana por su naturaleza se engaña a sí misma. Mediante el auto-
engaño, los humanos viven con un sentido confiado pero poco realista de que hemos
fundamentalmente descifrado cómo son las cosas en realidad y que esto lo hemos
hecho objetivamente. Naturalmente creemos en nuestras percepciones intuitivas – sin
importar su presición. En otras palabras, aunque el pensamiento humano es con
frecuencia imperfecto, no obstante se ve a sí mismo como cierto, correcto, en posesión
de “la verdad.” Para controlar estas tendencias egocéntricas, necesitamos enfocarlas
activamente mediante las preguntas. En otras palabras, necesitamos cuestionarnos
como rutina nuestra motivación y estudiar nuestro “egoísmo” y mentalidad estrecha.
PENSAMIENTO EGOCÉNTRICO
Ahora hagamos un contraste de los dos motivos básicos para el pensamiento racional:
PENSAMIENTO RACIONAL
2
Para una discusión más profunda del egocentrismo en la vida humana, favor referirse a Un Bolsiblibro
sobre La Mente Humana.
§ ¿Por lo general considero los puntos de vista de aquellos que no están de acuerdo
conmigo? ¿Tiendo a presumir que aquellos que no están de acuerdo conmigo
están equivocados?
§ ¿Tiendo a colocar mis necesidades y deseos por encima de las necesidades y
deseos de los demás?
§ Cuando puedo obtener un logro personal, ¿disminuye mi imparcialidad hacia los
demás?
§ ¿Obtendré un logro personal en esta situación si ignoro o distorciono alguna
información o punto de vista?
§ Por lo general, ¿estoy dispuesto a considerar que puedo estar equivocado?
§ ¿Tiendo a ignorar información que requiere que repiense mi posición?
§ ¿Tiendo a presumir que sé más de lo que en realidad sé?
§ ¿Afirmo que una información es cierta cuando no sé de seguro que lo sea?
También podemos cuestionar los motivos de los demás, mediante preguntas tales
como:
§ ¿Esta otra persona considera mis derechos y necesidades, o los derechos y las
necesidades de los demás?
§ ¿Me está usando para servir sus intereses egoístas?
§ ¿Distorciona lo que digo? Si fuera así, ¿por qué? ¿Logrará algo al hacerlo?
§ ¿Trata de maipularme?
§ ¿En verdad trata de entender lo que digo? ¿Puede con precisión afirmar lo que
trato de decir?
§ ¿Está dispuesto a admitir si se equivoca?
§ ¿Está abierto al razonamiento? ¿O tiene la mente cerrada?
§ ¿Rehusa considerar información relevante para así poder sustentar su punto de
vista?
§ ¿Presume que sabe más de lo que sabe?
§ ¿Afirma que algo es cierto cuando puede que no lo sea?
Egocentrismo y poder
Uno de los motivos naturales de la mente humana es el deseo del poder. Todos
necesitamos algo de poder. Si no tenemos poder, no podemos satisfacer nuestras
necesidades. Sin poder, estamos a la merced de otros. Por ende, la adquisición de
poder es esencial a la vida humana. Pero podemos buscar el poder por medios
racionales o irracionales y podemos usar el poder para servir fines racionales o
irracionales. El poder usado irracionalmente es típicamente justificado
egocéntricamente.
Vivir una vida humana conlleva membresía en una variedad de grupos humanos. Esto
típicamente incluye grupos tales como nación, cultura, profesión, religión, familia y
grupos de pares. Nos encontramos participando en grupos desde antes de estar
conscientes de nosotros mismos como seres vivientes. Es más, cada grupo al cual
pertenecemos tiene una definición social de sí mismo y algunas (casi siempre
silenciosas) “reglas” que guían el comportamiento de todos los miembros. Cada grupo
al cual pertenecemos nos impone algún nivel de conformidad como condición de
aceptarnos. Esto incluye un conjunto de creencias, comportamiento y tabúes.
Para la mayoría de las personas, la conformidad a ciegas para las restricciones del
grupo es automática e irreflexiva. Casi todos conforman sin reconocer su conformidad.
Internalizan las normas y creencias del grupo, toman la identidad del grupo y se
comportan según se “espera” – sin el más mínimo sentido de que lo que hacen se
pueda cuestionar razonablemente. La mayoría de las personas funcionan en grupos
sociales sin reflexionar presumiendo que está correcto el sistema de creencias,
actitudes y comportamiento a los cuales se están conformando.
§ ¿Qué sé realmente (sobre mí mismo, sobre la situación, sobre otra persona, sobre
mi nación, sobre lo que sucede en el mundo)?
§ ¿Hasta qué punto influyen mis prejuicios o sezgos en mi pensamiento?
§ ¿Cómo las creencias que he aceptado sin crítica me impiden ver las cosas como
son?
§ ¿Hasta qué punto represento con precisión los puntos de vista con los que no
estoy de acuerdo?
§ ¿Puedo resumir los puntos de vista de mi opositores a satisfacción de ellos?
¿Puedo ver la agudeza en los puntos de vista de los demás y los prejuicios en los
míos?
§ ¿Simpatizo con los sentimientos de los demás a la luz de lo que piensan, aunque
sean diferentes a los míos?
§ ¿Me comporto de acuerdo a lo que digo y creo o tiendo a decir una cosa y hacer
otra?
§ ¿Hasta qué punto espero lo mismo de mí que espero de los demás?
§ ¿Hasta qué punto existen contradicciones o inconsistencias en mi vida?
§ ¿Hasta qué punto me esfuerzo por reconocer y eliminar el engaño propio de mi
vida?
La confianza en la razón se basa en creer que los intereses más importantes de uno y
los de la humanidad en general serán mejor servidos brindándole mano libre a la razón.
Significa usar criterios de razonamiento como los criterios fundamentales para juzgar si
aceptar o rechazar una creencia o posición. Las preguntas que fomentan la confianza
en la razón incluyen:
Pensamiento
Pensamiento indagante, analítico,
socrático sintético, creativo, que
forma conexiones
construcción de un
sistema lógico de
comprensiones
basado en
características del
pensamiento y las
preguntas que el
que llevan a la
conocimiento de agudeza
aquellas características
genera
Conclusión
Formular preguntas sistemáticamente y socráticamente
§ Reconozca que cualquier pensamiento puede existir de lleno sólo en una red de
pensamientos conectados. Así pues, trate todas las aseveraciones como puntos
conectores a otros pensamientos. Siga esas conexiones. (Puede preguntar, por
ejemplo, “Si lo que dice es cierto, ¿no sería cierto X ó Y también?”)
Dra. Linda Elder es una sicóloga educacional que ha enseñado sicología y pensamiento
crítico a nivel universitario. Es la Presidenta de la Fundación para el Pensamiento Crítico
y la Directora Ejecutiva del Centro para el Pensamiento Crítico. La doctora Elder ha
hecho investigaciones sobre la relación entre el pensamiento y las emociones, lo
cognoscitivo y lo afectivo y ha desarrollado una teoría original sobre las etapas del
desarrollo del pensamiento crítico. Es la autora y coautora de una serie de artículos sobre
el pensamiento crítico que incluye un columna sobre el pensamiento crítico para el
Journal of Development Education. Es la coautora de un libro de texto publicado por
Prentice Hall titulado Critical Thinking: Tools for Taking Charge of Your Learning and
Your Life. Es una presentadora dinámica con extensa experiencia en ofrecer seminarios
sobre la relación entre la mente humana y el pensamiento crítico.
Dr. Richard Paul es un líder principal en el movimiento internacional del pensamiento crítico.
Es Director de Investigaciones del Centro para el Pensamiento Crítico y Presidente del Consejo
Nacional para Excelencia en el Pensamiento Crítico, autor de sobre 100 artículos y siete libros
sobre el pensamiento crítico. El doctor Paul ha ofrecido cientos de talleres al nivel de K-12 y
preparó una serie de ocho programas de vídeo sobre el pensamiento crítico para PBS. Fue
profesor de filosofía (enseñando clases de pensamiento crítico) en la Universidad de Sonoma
durante más de veinte años. Sus puntos de vista sobre el pensamiento crítico han sido discutidos
en The New York Times, Education Week, The Chronicle of Higher Education, American
Teacher, Educational Leadership, Newsweek, U.S. News and World Repor, y Selecciones de
Reader’s Digest.
¿Cómo citar? Fascículo completo Más información del artículo Página de la revista
www.redalyc.org
Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto
Metodología para el análisis
y la revisión crítica de artículos
de investigación
Jorge Enrique Garcés Cano* & Edison Jair Duque Oliva**
dan a entender un texto y a verlo con ojos objetivos pero críticos. Se puede
inferir, entonces, que la revisión crítica no sólo es un proceso largo, sino que
Y A LA DOCENCIA
cir, los formatos de evaluación de las revistas intentan, como su nombre lo indi- E-mail:
jegarcacimarron@yahoo.com.
ca, evaluar el artículo a través de algunos criterios, pero obviamente requieren
una lectura crítica. Por esta razón, alrededor del mundo se ha optado por enfo- ** Administrador de Empresas, MCS,
carse más hacia dar lineamientos generales a los estudiantes sobre los elementos MBA, DEA, PHD(c). Profesor de tiempo
completo de la Universidad Nacional de
que deben tener en cuenta para la lectura crítica de un artículo, con la esperan- Colombia. Asesor y consultor en temas
za de que algún día sus conocimientos y experticia les permitan evaluarlo y no de gestión, marketing y servicio al cliente.
Investigador CID, codirector del grupo
sólo leerlo de manera crítica. GRIEGO, clasificado por Colciencias.
E-mail:
Para el caso de esta revista, y con el ánimo de recordar elementos importantes, ejduqueo@unal.edu.co
además de los criterios de evaluación se les recomienda a los evaluadores tener
Garcés Cano, J.E. & Duque
R e c i b i d o : Enero de 2007 A p r o b a d o : Febrero de 2007 Oliva, E.J. (2007). Metodología
para el análisis y revisión crítica de
C o r r e s p o n d e n c i a : Edison Jair Duque Oliva, Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá, Cra 30 No. 45-03, Escuela de artículos de investigación. Innovar
Administración de Empresas y Contaduría Pública, edificio 311, oficina 311A. 17(29), 184-194.
RE V I S TA
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en cuenta los objetivos del artículo y reflexionar sobre ámbito de aplicación. Esto facilitará el cuarto elemen-
algunos elementos del mismo. Así, la lectura crítica de to, que es el análisis de resultados. En esta parte de la
un artículo de investigación debe determinar qué per- reflexión se estudia la coherencia de la metodología
sigue el artículo en términos de presentación y análisis con los resultados. Así, se observa la muestra (si es el
de ideas o de argumentos y cuáles son sus principales caso)1, los principales resultados, la solidez de la infor-
fortalezas y debilidades. Adicionalmente, también es mación recopilada y la coherencia con la realidad.
necesario reflexionar sobre algunos elementos, entre
Finalmente, se encuentran dos etapas: la de discusión
los que se encuentran: el interés que despierta, la con-
e implicaciones y la de conclusiones. En la primera,
tribución al área de estudio, el grado de validez y so-
viene la parte crítica de la reflexión, en la que se rela-
porte de los argumentos y ejemplos, su originalidad,
ciona lo encontrado en el artículo con otras lecturas
su claridad en la exposición de las ideas y en los ejem-
previas, ya sea en metodología, en conceptos o en di-
plos planteados, su aplicabilidad al contexto de análi-
ferencias en los planteamientos del artículo con otros,
sis (región, país, institución), la consideración de otros
que hubieran sido más útiles por el contexto o por tipo
puntos de vista sobre el tema y su explicación de por
de investigación. En la segunda etapa se concluyen los
qué toma la posición que aplica en el artículo y, final-
hallazgos y las principales críticas o mejoras que se pue-
mente, a manera de contraste, relacionar lo que está
den hacer a la investigación, además de comentarios
leyendo con las lecturas realizadas previamente sobre
que surjan de la lectura y que puedan generar inquie-
el tema.
tudes académicas.
Con base en estos elementos, en la experiencia de los
De este modo el proceso de lectura crítica se resume
autores en el paso por programas de posgrado y en el
en:
desarrollo de sus investigaciones se ha planteado un es-
quema de elementos para tener en cuenta en el análisis • Identificación de las características del artículo
de un artículo.
• Literatura contemplada
En primer lugar, es necesaria una identificación de las
• Metodología de la investigación
características básicas del artículo, es decir, cuál es el
problema no estudiado que el artículo intenta abordar, • Análisis de resultados
cuál es su importancia, por qué se debe estudiar este
• Discusión e implicaciones
tema (relevancia, impacto). De igual forma, establecer
los objetivos que persiguen los autores, el enfoque de • Conclusiones y comentarios finales
estudio y las contribuciones que se esperan hacer con
Este esquema es general y puede variar dependiendo
la investigación planteada. En general, estos elementos
del artículo, ampliando el número de elementos en
deberían aparecer en la introducción del artículo, aun-
cada una de las etapas. Adicionalmente, pueden existir
que no siempre lo hacen.
artículos en los que sea necesario hacer más énfasis
En segundo lugar, un artículo debe tener una reflexión en alguna de ellas. Esta dinámica metodológica es
sobre la literatura académica contemplada. Esto impli- empleada en el desarrollo de estudios de maestría de
ca estudiar cuál es el marco conceptual, cuáles son investigación (MSc) o doctorales (PhD).
las aproximaciones al problema de estudio y su ámbi-
Como aplicación de esta metodología, a continuación
to de aplicación, cómo se operacionaliza el problema
se presenta una reseña del artículo "Measuring
(constructos, variables, características y relación entre
marketing productivity: Current knowledge and future
variables), cuál es el origen y cómo se desarrollan los
directions", de Roland T. Rust, Tim Ambler, Gregory S.
planteamientos (son consecuencia de los planteamien-
Carpenter, V. Kumar y Rajendra K. Srivastava (Journal
tos teóricos o prácticos presentados, o simplemente
of Marketing, Vol. 68, No. 4, pp. 76-89, 2004)2. Recu-
“salen del sombrero”), hipótesis (cuando haya lugar) y
erde las etapas arriba mencionadas y observe cómo
el enfoque metodológico del planteamiento. La idea
fueron aplicadas en la reseña presentada a continu-
es tener claro el qué, el cómo, el dónde, el por qué y el
ación. Esta reseña es un tanto extensa, dado su obje-
para qué.
tivo descriptivo. Sin embargo, el lector puede observar
En tercer lugar se hace ya una reflexión sobre la meto- otras reseñas críticas más reducidas y con el proceso
dología empleada, esto es, se analiza si la metodología no tan formal, en el número 27 de Innovar.
para abordar el problema es adecuada al mismo y a su
1
En las ciencias aplicadas (como las administrativas), no necesariamente se usan técnicas cuantitativas, y este hecho no implica la
invalidez de la investigación.
2
Este artículo se puede obtener a través de bibliotecas digitales como EBSCO, Science Directc o Abi Inform.
REV. INNOVAR. Vol. 17, No. 29, ENERO A JUNIO DE 2007
a largo plazo. ting en las ventas, las utilidades y el valor a los accionistas.
Y A LA DOCENCIA
marketing; describe lo que ya se conoce sobre el tema, entre las actividades individuales de marketing y otro tipo
en especial sobre modelos e indicadores cuantitativos de acciones, según Bonoma y Clark (1988); y el tercero,
y financieros, con sus impactos a corto plazo, y los arti- al hecho de que el uso de métodos puramente financieros
cula alrededor de un modelo teórico conceptual. El artículo han probado ser inadecuados para justificar las inversiones
pretende, además, mostrar novedosos enfoques y, fi- en marketing, cosa que hace necesario el uso de medi-
nalmente, hacer pensar sobre áreas que requieren ma- das no financieras (Clark, 1999; MSI, 2000). De esta
yor investigación en temas cualitativos e indicadores manera, y siguiendo el planteamiento teórico de F. Webs-
no financieros a largo plazo. ter (1992), dicen los autores que el énfasis no debería
seguirse colocando en el tema de los productos, de la
fijación de precios o de las relaciones con los consumi-
1.4 Enfoque dores, ya que los gastos de marketing, en comunicacio-
Es un trabajo descriptivo que propone y utiliza un nes, promociones y otras de sus actividades tienen una
modelo gráfico para identificar la cadena de productivi- notable influencia en su desempeño y, a través de éste,
3
Profesionales ejecutando planes de marketing, e incluso teóricos, consultores, académicos y estudiantes.
RE V I S TA
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en los indicadores de desempeño del negocio a largo su modelo propuesto sobre la cadena de productivi-
plazo, algo que no puede ser medido a través de los dad del marketing (figura 1, página 77).
tradicionales indicadores financieros. Así, los autores
plantean que el foco de su artículo está puesto en mos-
trar cómo algunas medidas no financieras de marketing 2.3 Ámbito del trabajo
presentan gran influencia en las ventas, las utilidades y el
a. “Constructos” determinantes, basados en marcos
valor de los accionistas, tanto a corto como a largo plazo.
conceptuales. El foco del artículo es mostrar cómo
Se puede decir que aunque no es el objeto del artículo
algunas medidas no financieras de marketing pre-
validar el modelo teórico-gráfico llamado “Cadena de
sentan gran influencia en las ventas, las utilidades
productividad del marketing”, que presentan en la figura
y el valor de los accionistas, tanto a corto como a lar-
1 de la página 77, toda la estructura del artículo gira
go plazo. Partiendo de la figura 1 (página 77), que
alrededor de éste. Así, los autores asumen que dicho
ilustra un modelo conceptual descriptivo –y de pre-
modelo es de facto un marco teórico y conceptual sufi-
dicción– (de tipo gráfico), para tratar de entender
ciente para adentrarse en la revisión de los métodos e
cómo evaluar la productividad de la cadena de va-
indicadores de productividad, que se insertan en él sin
lor de marketing, los autores comienzan identifican-
ningún problema.
do las llamadas “estrategias de la firma”; allí indican
como tales las “estrategias” de promoción, de pro-
2.2 Aproximaciones al problema ducto, de canales y otras de marketing y de la empre-
sa 5. Para los autores, estas estrategias determinan
El artículo no selecciona ningún enfoque teórico o cuer-
algunas “acciones tácticas” de marketing (en mi con-
po teórico guía en particular. Es bastante “pragmático”,
cepto, aparece aquí una de las tautologías existentes
algo que es de amplia aceptación en los escritos de
en el artículo) 6, tales como campañas de publicidad,
marketing, tanto que puede incorporar desde el apor-
esfuerzos por mejorar el servicio, iniciativas de mar-
te de Lord Keynes (1936), al introducir en el análisis
ca, programas de lealtad, etc. Las “acciones tácti-
de las firmas otros importantes indicadores como la
cas”, dicen los autores, son aquellas que tienen gran
TIR (entendida como el valor presente neto de las in-
influencia sobre la satisfacción del consumidor, la
versiones descontadas a una tasa de retorno menor
actitud hacia la marca, la lealtad y otros aspectos
que el interés del mercado) 4, hasta un cúmulo de au-
centrales del consumidor. En ese primer nivel, “los
tores (de economía, administración y marketing) que
gastos” de marketing (en algunas partes los identi-
aún hoy creen en las “perfecciones del mercado” y en
fican como “inversiones”) pueden agregar valor, y
su capacidad autorreguladora para asignar los recur-
éste puede ser medido a través de algunos indica-
sos productivos de la sociedad. Éste es un tipo muy
dores, como la calidad de la marca, la satisfacción
particular de “pragmatismo”, que en forma generali-
del consumidor y la equidad del consumidor. Estas
zada atenta contra la solidez teórica de muchos de los
actividades pueden generar una influencia de cor-
escritos de marketing.
to plazo en la mente del consumidor, que redunda
El artículo hace una completa revisión de los aportes en ventas y participaciones de mercado (únicamen-
al tema en los últimos 15 años, sin centrarse o utilizar te a corto plazo), pero que se reflejarán o tendrán
de manera unívoca alguno de ellos. Muestra las dife- una influencia en las utilidades de la firma, como
rencias en los indicadores, esquemas y modelos para posibles cuentas de “pérdidas” (pueden alterar mo-
los que fueron creados, relacionándolos alrededor de mentánea y favorablemente los flujos de caja, pero
4
En verdad es bastante difícil encontrar gente de mercadeo que conozca e incorpore los aportes de Keynes a los problemas objeto de
estudio del marketing. Pero lo paradójico es que se le reconozca por lo que yo llamaría uno de sus aportes menores a la teoría de la
firma dominante, la teoría neoclásica; cuando el verdadero valor de su obra a este respecto es haber desarrollado una robusta y sólida
teoría general (no particular, como la neoclásica) centrada en el “constructo” denominado “teoría de la demanda efectiva”. Su aporte
consiste en haber arrasado con el cúmulo de supuestos teóricos de los neoclásicos, introduciendo los conceptos de “incertidumbre
en los mercados”, “irreversibilidad de las decisiones”, “clima de inversión en ambientes reales” con “expectativas inciertas sobre el
futuro”, y en particular, claro, sobre los métodos de determinación y cálculo de la TIR y el elemento teórico que hay detrás de tal in-
dicador: “la eficacia o eficiencia marginal del capital”. Es lamentable ver cómo los mercadotecnistas no sólo desconocen la relevancia
de la obra de Keynes en los temas de economía, empresa, teoría de la firma y, por supuesto, marketing, sino que en aquellos casos
excepcionales en que se le cita se hace sólo en referencia a un tema bastante “pequeño”.
5
Vale la pena preguntarse si son éstas realmente estrategias en todo el sentido del término.
6
Tautología viene del griego ταυτολογ α y consiste en la repetición de un mismo pensamiento, expresado de distintas maneras. En
forma despectiva, se le identifica con la repetición inútil y viciosa de palabras que significan exactamente lo mismo. Matemáticamen-
te hablando, se hace referencia a una expresión tautológica cuando se muestra una verdad total, que no permite apoyar explicación
alguna: A=A, donde A es cualquier número, un operador, una función o cualquiera otra expresión o notación matemática.
REV. INNOVAR. Vol. 17, No. 29, ENERO A JUNIO DE 2007
no se trasladan directamente a los réditos de la fir- este sencillo modelo es la siguiente: en principio,
ma). Podemos decir así que aunque existen muchos las estrategias de la firma determinan las “accio-
otros “constructos” a lo largo del artículo, sobre nes tácticas” de mercadeo, y éstas influyen sobre
todo de planteamientos retomados de otros auto- el impacto en el consumidor. Las estrategias y el
res. Los principales “constructos” propios o grupos impacto en el consumidor determinarán los gas-
de variables ensambladas e interrelacionadas para tos de marketing. El impacto en el consumidor se
dar alguna explicación aparecen allí en el llamado refleja en el impacto sobre mercado, y éste con-
modelo de cadena de productividad del marketing. juntamente con los gastos de marketing, determi-
Estos “constructos” serían fundamentalmente dos: 1) narán la posición del mercado. El impacto sobre
acciones del ámbito de marketing, y 2) acciones del mercado determinará el impacto financiero, y éste
ámbito de la firma. vuelve a ser un elemento determinante de las “ac-
ciones tácticas” de mercadeo. Pero, igual, el impac-
b. Variables. Con respecto a las acciones del ámbito de
to financiero conjuntamente con la posición del
marketing, el modelo identifica como variables las
mercado determinan la posición financiera de la
“acciones tácticas” (entre ellas la publicidad y las
firma, esta última como elemento determinante
mejoras al servicio), el impacto en el consumidor (en
nuevamente de las estrategias de la firma. Allí el
sus actitudes y en su satisfacción), el impacto en el
proceso se vuelve cíclico, tanto por las acciones de
mercado (impacto en las ventas y en la participación
marketing, como por las demás acciones de la fir-
de mercado), el impacto financiero (con indicadores
ma. Finalmente, el impacto financiero determina
como el ROI y el EVA, entre otros) y el impacto
el impacto en el valor de la firma, y éste y la posi-
en el valor de la firma (valor agregado al mercado).
APORTES A LA INVESTIGACIÓN
explícito ningún tipo de hipótesis que identifique del ambiente externo, macro-ambiente o del entorno7
las posibles relaciones entre las variables propues- y 2) los factores de competencia.
tas, aunque implícitamente haya varias hipótesis y
relaciones entre éstas.
2.4 Pregunta sobre si el artículo sintetiza ideas
c. Naturaleza y características de las variables. Por la pre-
con base en la revisión literaria, relacionándolas y
sentación gráfica, uno puede inferir que casi en su
188
7
Algunas veces se usa otra de las tautologías ya clásicas en marketing: “entorno del ambiente externo”.
RE V I S TA
INNOVAR JOURNAL
Algunos ejemplos claros de ello son: 2.5 En cuanto a si el artículo identifica lagunas y
problemas no tratados, como base para el desarrollo
• Al referirse a una de las actividades de marke-
de hipótesis y modelos
ting, cuyo aporte al desempeño empresarial no ha
sido medido y vinculado adecuadamente (la in- Se puede mostrar cómo el artículo plantea explícita-
vestigación de mercados), los autores hacen una mente lo siguiente: “la investigación actual sobre este
aproximación y la definen en sus dos aspectos: la tema de los modelos e indicadores de productividad
identificación de recursos necesarios para obtener del marketing y su aplicación al mundo de los negocios
las utilidades a corto plazo y para posibilitar el cre- es insuficiente”. Al respecto, podemos hacernos la si-
cimiento potencial de la firma a largo plazo. guiente reflexión: ¿y cuándo lo es? ¿En qué campo del
conocimiento científico se llega alguna vez a una “plé-
• La equidad de marca, descrita por Aaker (1991)
tora” en materia de investigación? ¿No es ésta una ex-
como constituida por cuatro componentes: el co-
presión que de iure se contrapone al devenir mismo de
nocimiento de la marca, la calidad percibida, las
la actividad científica, como muchas de las expresiones
asociaciones de marca y la lealtad de marca, y otra
y argumentos que utilizan algunos mercadotecnistas
visión ofrecida por Keller (1998), que la considera
en sus escritos? Para lo que aquí nos interesa, se puede
como el efecto diferencial entre el conocimiento
afirmar que el artículo sí identifica lagunas, problemas o
que el consumidor tiene sobre la marca y su res-
deficiencias, pero no exactamente para soportar sus hipótesis
puesta efectiva en los mercados.
y el modelo propuesto, sino que lo hace para definir futu-
• La equidad del consumidor, inicialmente identifi- ras líneas de investigación.
cada por Blattberg y Deighton (1996) como la su-
matoria del valor del consumidor en el tiempo para
una empresa. Ello exige contar con un método que 2.6 Enfoques metodológicos
permita identificar y medir el valor de un consumi-
A este respecto se puede afirmar que el trabajo no plan-
dor a lo largo de todo su ciclo de vida y relación.
tea alternativas para acotar el foco metodológico, sino que
Así, es una condición el que existan, se conozcan y
se limita a presentar el llamado “estado de arte” de
se cuente con datos longitudinales sobre el consu-
la cuestión, y trata de ubicar dentro de un modelo
midor (Dwyer, 1997; Libai, Narayandas y Humby,
no validado de cadena de productividad los aspectos
2002; Reinartz y Kumar, 2000).
revisados: modelos, herramientas, instrumentos e in-
• El modelo de “retorno sobre la calidad”, probado dicadores de productividad de las actividades de mar-
con una metodología de proyección del ROI de las keting, ubicadas dentro de su modelo conceptual.
firmas en calidad del servicio (Rust, Zahoric y Ke-
ningham, 1944 y 1995), demuestra sus efectos ne-
tos a largo plazo: un incremento en los ingresos y 2.7 Cuestiones de investigación exploratoria
una reducción en los costos.
La principal cuestión por validar posteriormente a través
• Lane y Jacobsen (1995) muestran cómo los anuncios de investigaciones exploratorias es el llamado modelo de
que soportan extensiones de marca se acompañan “cadena de productividad de marketing”. Los indicado-
de un anormal retorno sobre los stocks, establecien- res usados y su representatividad están sustentados en
do una línea de relación entre las actividades de los trabajos previos que les dieron origen. El proble-
marketing y el precio de las acciones. ma está en lograr definir y validar si este modelo es
una interpretación clara de una parte de la realidad, es
• Kim, Mahajan y Srivastava (1995) señalan una fuer-
decir, si puede constituir una representación validada
te relación entre el valor presente neto de los flujos
de la realidad empresarial, para determinar el valor de
de caja atribuibles a un incremento en el número
las firmas y la manera como influyen y agregan valor
de suscriptores y un incremento en el precio de las
en éste las actividades de marketing. Se trata, pues, de
acciones en la industria de telefonía celular.
lograr que además de una “buena” hipótesis de inves-
• Y, finalmente, Ailawadi, Borin y Farris (1995) de- tigación podamos averiguar si estamos frente a un mo-
muestran el impacto de las acciones de marketing delo teórico, validado y confrontado con la realidad
sobre el EVA y el MVA. del mundo de los negocios. Es evidente que en su esta-
do actual el modelo no constituye una teoría y mucho
menos se puede pensar en algún grado de asomo al
mundo de las leyes.
REV. INNOVAR. Vol. 17, No. 29, ENERO A JUNIO DE 2007
2.8 Principales hipótesis 2.9 Se puede afirmar que el modelo no fue construido
con base en hipótesis
Aunque no se presenten de manera explícita tales hi-
pótesis, en el artículo se pueden ver varios ejemplos: Como modelo teórico, de tipo descriptivo, verbal y grá-
fico, sin validación empírica, las hipótesis no están allí
• “La publicidad y los gastos en promoción, relacio-
formuladas de manera explícita. No se identifican clara-
nados con el desarrollo de marcas fuertes, generan
mente y por su naturaleza subyacente se puede indicar
mayor productividad”.
que muchas de ellas son de sentido común, algunas
• “Una promoción de precios puede ser eficiente al filosóficas y es posible que otras sean de investigación.
generar réditos a corto plazo. Sin embargo, puede Pero no se puede concluir nada al respecto por el mis-
ser al mismo tiempo destructora de rentabilidad y mo tratamiento que se le da al tema. Igualmente, por
equidad de marca a largo plazo, es decir, puede no la forma como está concebido el modelo descrito, se
ser efectiva”. puede indicar que la mayoría de las hipótesis implí-
citas son multivariadas, algunas de tipo descriptivo
• “El marketing estratégico tiene como función cen-
(la mayoría), otras relacionales y de relación funcional
tral la consecución y retención de clientes, asegu-
(causal). Por todo ello, es muy difícil identificar si el
rando el crecimiento y la renovación y el desarrollo
modelo planteado en el trabajo se construye a partir
de ventajas competitivas sólidas, sostenibles y de
de hipótesis o si antes de su posible formulación exis-
largo plazo”.
te algún intento por articular las variables utilizadas.
• “La equidad de marca, siendo el corazón del marke- Sólo se sabe que están allí implícitas y se muestra su
ting de los últimos 20 años, ha estado centrada en la relación funcional.
APORTES A LA INVESTIGACIÓN
al consumidor) y sus efectos son a la larga intangi- por estudios anteriores (datos de fuentes secundarias)
bles, pero sus beneficios en la empresa son simila- en cuanto a la efectividad de los indicadores de pro-
res a los generados por recursos tangibles, como la ductividad en los aspectos de la cadena de marketing
infraestructura manufacturera. Así, las inversiones y los ensamblan alrededor de su modelo conceptual.
en marketing estratégico reducen el riesgo”. Por ello, podemos indicar que las técnicas de análisis
de datos son, además del recuento histórico y la revisión
• “Las acciones específicas de marketing tienen un
bibliográfica, la identificación de pertinencia de instru-
efecto claro en las percepciones de marca, incluyen-
mentos o herramientas a la medición de un aspecto
do la publicidad institucional y corporativa a gran
en particular dentro del modelo definido para identi-
alcance”.
ficar la cadena de productividad del marketing. El in-
• “Los gastos de marketing se reflejan en el tiempo, en tento del artículo se centra en dar un orden a cada
las ventas y en la participación de mercado”. uno de estos elementos, que, consideran, lograron su
validación empírica en trabajos anteriores y que han
• “La evidencia empírica ha mostrado que la equidad
mostrado en el tiempo ser indicadores pertinentes.
de marca reduce el riesgo financiero, al reducir los
Sólo faltaba colocarlos dentro de un modelo concep-
costos de capital y al aumentar simultáneamente la
tual, que podríamos afirmar asumen como válido e
capitalización de acciones”.
RE V I S TA
INNOVAR JOURNAL
intérprete de las interrelaciones reales que subyacen tículo se basa totalmente en los avances y aportes rea-
en una cadena de productividad de marketing. lizados por investigaciones previas, para validar los
instrumentos e indicadores de medición a la produc-
Finalmente, es evidente que no se utilizó ningún tipo de
tividad de las actividades de marketing, es decir, no pre-
software especial para el desarrollo de este trabajo, pero
senta directamente ni utiliza nuevas escalas de fiabilidad o
en sus revisiones a la literatura se muestran algunos
validez de instrumento alguno.
de los aportes y desarrollos que se han logrado para
construir modelos que permitan medir indicadores
de productividad de las actividades de marketing con 4.2 Principales resultados
la ayuda de diversos tipos de programas. La revisión
El principal logro de este trabajo radica en la descrip-
es bastante completa:
ción del modelo teórico de cadena de productividad
• Modelos como PERCEPTOR (Urban, 1975), que uti- de marketing, con el que se pretende poner a girar en
lizan escenarios de decisiones típicas de marketing algún orden lógico los diversos métodos, herramien-
para que se rastreen decisiones de los planes de tas e indicadores que se han desarrollado, utilizado y,
productos y sus efectos en las participaciones de en cierta forma, validado, para tal fin en los últimos
mercado. 15 años. Se pretende identificar el verdadero estado de
avance en esta materia, para justificar las acciones de
• Modelos de inversión en publicidad, para maximizar
marketing en las organizaciones y así revalidar su papel
las ventas o utilidades bajo limitaciones presupues-
como orientador de las principales decisiones estraté-
tales (Gensch, 1973; Little y Lodish, 1969; Rust,
gicas corporativas. Es difícil concluir si se logró cumplir
1986).
el objetivo de evidenciar el impacto real de la influencia de
• Modelos que miden la influencia de las promociones la productividad de la cadena de marketing en un mayor
de venta sobre los resultados del negocio (Little, desempeño total de las firmas y, en particular, en los in-
1975). dicadores financieros de largo plazo (por ejemplo, el
valor para el accionista).
• Modelos econométricos de series de tiempo (Bass, 1969;
Eastlack y Rao, 1986), para medir el impacto de los En el artículo hay otra hipótesis igual, o incluso mucho más
gastos históricos en publicidad. relevante y fuerte, que requiere un trabajo posterior de inves-
tigación empírica para su verificación o rechazo. Cuando
• Modelos que miden el efecto de las cadenas de valor en el
los autores cierran su revisión conceptual, en la par-
servicio y la satisfacción del cliente, de aparición en los
te correspondiente a otros factores de influencia en la
últimos diez años (conjuntamente, Fornell, 1992,
cadena de productividad de marketing, indican cómo
y específicamente, Anderson, Fornell y Lehmann,
“las firmas son más vulnerables a la competencia y pre-
1994; Heskett et al., 1994; Kamakura et al., 2002;
sentan menores niveles de desempeño cuando no rea-
Rust, Zahorik y Keiningham, 1994 y 1995).
lizan los esfuerzos adecuados en el desarrollo de una
• Modelo STRATPORT (Larréché y Srinivasan, 1981 y equidad de marca y del consumidor, por su impacto
1982), más general y usado para medir las capacida- en las ventas y en la participación de mercado para ha-
des estratégicas de la firma y la cadena de acciones de cer tal aseveración”. En primer lugar, se sustentan en
marketing con respecto a la competencia. que cuando el producto está asociado a una elevada
equidad de marca, los consumidores lo evalúan de una
• Y los más recientes, modelos interesados en medir la
manera más favorable (Larouche, Kim y Zhou 1996);
influencia de las acciones de marketing en el ciclo de
en segundo lugar, en que los consumidores son menos
vida del consumidor y la equidad del consumidor
sensibles al precio y responden más a las comunicacio-
(Rust, Lemon y Zeithaml, 2004; Venkatesan, Ra-
nes de marketing (Simon, 1979), y, en tercer lugar, en
jkumar y Kumar, 2004).
que una equidad de marca puede crear asimetrías en
la competencia a favor de aquellas marcas que han de-
sarrollado mayor equidad de marca.
4. Análisis de resultados
Los autores concluyen entonces que “de manera combi-
4.1 Indicación preliminar nada, estas tres fuerzas constituyen verdaderas ventajas
Al no existir un trabajo de investigación aplicada y competitivas”. De acuerdo con ello, estaríamos frente
validación empírica, no hay una identificación, selección a una gran hipótesis teórica sobre ventaja competitiva,
y determinación de muestra alguna por procedimientos que requiere mucho más que una simple revisión bi-
y técnicas estadísticas u otras alternativas. Así, el ar- bliográfica para poder ser demostrada o rechazada.
REV. INNOVAR. Vol. 17, No. 29, ENERO A JUNIO DE 2007
presentación gráfica, un modelo de tipo matemático. las utilidades y el valor a los accionistas. Hemos separado
las acciones de marketing, incluyendo estrategias y tácticas,
No es una investigación que desarrolle hipótesis (teó-
con respecto a otras condiciones de la empresa, para ver
ricas o básicas) a negar o a validar (la llamada “fase
el reflejo de sus gastos en la equidad de marca, en la equi-
heurística” del proceso, o investigación exploratoria).
dad del consumidor, en la posición en el mercado, en la
El trabajo tampoco desarrolla pruebas de hipótesis con
posición financiera y en el valor de la empresa. Sólo dos
algún método claro y definido para su contraste esta-
192
INNOVAR JOURNAL
para medir el efecto de las acciones de marketing en los que constituye el marketing en una empresa, sea ésta
principales indicadores de productividad de los nego- del tipo, actividad, campo, objeto social, etc., que
cios a corto y largo plazo, con el fin de revalidar el pa- sea? ¿No habrá allí un problema implícito de fondo
pel del marketing en el desempeño empresarial. sobre la conceptuación que se hace sobre el marke-
ting, independientemente de que se siga afirmando
Uno de los aportes más importantes del documento
que “marketing no es publicidad”?
está en su capacidad para identificar líneas futuras de
investigación. Para los autores, el estudio paso a paso • De la misma forma, los autores utilizan el concep-
sobre los impactos financieros de las tácticas de marke- to de gasto y el de inversión como si fueran sinóni-
ting en el valor de las firmas parece una especie de “caja mos. En algunos casos, las actividades de marketing
negra” por ser descubierta. Por ejemplo, se preguntan aparecen identificadas como gastos; en otros, como
sobre cuál es la influencia real de las “estrategias” de inversión, pero no hay una explicación clara, como
marketing (promoción, producto, etc.) en la equidad de en la mayor parte de la literatura de marketing8, so-
marca o en la equidad del consumidor, cuál es la rela- bre los límites entre lo uno y lo otro, cuando éste es
ción de sus gastos con el valor de la firma y el mercado en esencia el problema central para poder definir
de capitales, cómo la equidad del consumidor afecta indicadores de productividad en marketing. Marke-
a largo plazo la posición en el mercado, la posición fi- ting puede ser lo uno o lo otro, y es precisamente
nanciera y la capitalización en el mercado. En suma, la incapacidad de construir modelos con indicado-
el tema parece ser poder encontrar una reconciliación res claros de productividad que permitan anticipar
entre los impactos en el flujo de caja a corto plazo y los los resultados esperados lo que separa la identifica-
futuros flujos a largo plazo generados por las acciones ción de los temas de marketing en uno u otro cam-
de marketing. po: gasto o inversión. Claro, bajo ciertos escenarios,
probabilidades y niveles medidos de incertidumbre,
Al final, los autores plantean lo siguiente: “la discu-
como en cualquier actividad humana.
sión llevó a orientarnos sobre la existencia de nuevas
líneas de investigación en siete áreas: 1) estrategias y • Finalmente, es sorprendente ver cómo estos traba-
tácticas, 2) equidad de marca, 3) equidad del consumi- jos, tan rigurosamente evaluados por la llamada
dor, 4) impacto en el mercado, 5) impacto financiero, “comunidad científica” del marketing, carecen de
6) ambiente y 7) competencia”. claridad conceptual sobre los límites y las diferen-
cias entre los temas estratégicos (la estrategia) y los
En este punto, es necesario hacer algunos comentarios
tácticos (la táctica); en concreto, cómo es que los
finales:
autores arbitrariamente deciden en su modelo que
• Al comienzo del artículo, para argumentar cómo la promoción, el producto y los canales sean consi-
el marketing se ha visto mucho más amenazado que derados como parte de la “estrategia”, en tanto que
otras actividades de la empresa, los autores mues- la publicidad y las mejoras al servicio son incluidas
tran algunas estadísticas de empresas norteamerica- como “táctica”. Igualmente, cómo pueden reprodu-
nas que indican cómo para el año 2001 se produce cirse todo el tiempo tautologías conceptuales, tales
una disminución del nivel medio de los presupues- cómo “acción táctica”, “servicio financiero”, “venta-
tos de gastos en publicidad del orden del 70%, en ja competitiva sostenible, duradera y de largo pla-
proporciones mucho mayores a otras disminuciones zo”, “servicios intangibles”, etc. No se sabe si esto
presentadas en recursos humanos (51%), tecnología deja más dudas sobre la calidad de sus trabajos o
de información (47%) y funciones generales de con- sobre la verdadera capacidad de juicio de los “cien-
sultoría (44%). Pero, ¿por qué se sigue utilizando tíficos” revisores, o ambas.
el indicador de “gastos” (¿“inversiones”?) en publici-
dad, como no sesgado y representativo 100% de lo
8
Es bien representativo del manejo que sobre este tema se le ha dado en marketing, el que uno de sus autores más leídos, Philip Ko-
tler, en su primer y más difundida obra [P. Kotler (1980): Mercadotecnia. México: Prentice Hall Hispanoamérica, traducida de la prime-
ra edición en ingles, Principles of Marketing, 1962], hablaba de las 4 P del mercadeo como “inversión”, pero sin explicar o demostrar
claramente por qué lo eran. Y en una obra reciente [P. Kotler y otros (2002): El marketing se mueve. Una nueva aproximación a los
beneficios, el crecimiento y la renovación. Barcelona: Paidós Empresa], donde por primera vez muestra un modelo conceptual de tipo
gráfico sobre lo que constituye el proceso “holístico” de marketing en relación con el conjunto de actividades de la empresa, éstas (las
ya más de cuatro P del mercadeo) dejan de ser “inversión” y se vuelven “gasto”; claro, igualmente sin explicar o demostrar por qué
dieron ese salto mortal en estos últimos 40 años.
REV. INNOVAR. Vol. 17, No. 29, ENERO A JUNIO DE 2007
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194
por
Dr. Richard Paul
y
Dra. Linda Elder
Las destrezas incluidas pueden aplicarse a cualquier tema. Por ejemplo, aquel que piensa
críticamente tiene un propósito claro y una pregunta definida. Cuestiona la información,
las conclusiones y los puntos de vista. Se empeña en ser claro, exacto, preciso y
relevante. Busca profundizar con lógica e imparcialidad. Aplica estas destrezas cuando
lee, escribe, habla y escucha al estudiar historia, ciencia, matemática, filosofía y las artes
así como en su vida personal y profesional.
Cuando esta mini guía se usa como complemento a un libro de texto en varios cursos, los
estudiantes empiezan a darse cuenta de la utilidad del pensamiento crítico en el proceso
de aprendizaje. Y, según los profesores ofrecen ejemplos de la aplicación de los temas a
la vida diaria, los estudiantes se dan cuenta de que la educación es una herramienta para
mejorar su calidad de vida.
Si usted es un estudiante, lleve consigo esta mini guía a todas sus clases. Consúltela con
frecuencia cuando esté analizando y sintetizando lo que aprende. Provoque que los
principios que aquí encuentre se hagan parte de su naturaleza.
Indice
Una definición:
El pensamiento crítico es ese modo de pensar – sobre cualquier tema, contenido o
problema – en el cual el pensante mejora la calidad de su pensamiento al apoderarse de
las estructuras inherentes del acto de pensar y al someterlas a estándares intelectuales.
El resultado:
Un pensador crítico y ejercitado:
• Formula problemas y preguntas vitales, con claridad y precisión.
• Acumula y evalúa información relevante y usa ideas abstractas
para interpretar esa información efectivamente.
• Llega a conclusiones y soluciones, probándolas con criterios y
estándares relevantes.
• Piensa con una mente abierta dentro de los sistemas alternos de
pensamiento; reconoce y evalúa, según es necesario, los supuestos,
implicaciones y consecuencias prácticas y
• Al idear soluciones a problemas complejos, se comunica
efectivamente.
Propósito del
Puntos de vista
marco de referencia, pensamiento
perspectiva, meta, objetivo
orientación
Pregunta en
Implicaciones y cuestión
consecuencias problema, asunto
Elementos
del
pensamiento
Supuestos
Información
presuposiciones, lo datos, hechos,
que se acepta
observaciones,
como dado
experiencias
Conceptos
teorías, definiciones, Interpretación
axiomas, leyes, e inferencia
principios, modelos conclusiones,
soluciones
Como humanos, vivimos con un confiado, aunque irreal, sentido de que sabemos cómo son las cosas
y que somos objetivos. Creemos, por naturaleza, en nuestras percepciones intuitivas aunque sean
erróneas. En lugar de usar estándares intelectuales al pensar, usamos unos estándares psicológicos
egocéntricos para determinar lo que creemos y lo que rechazamos. A continuación algunos ejemplos de
los estándares psicológicos más utilizados:
“ES CIERTO PORQUE CREO EN ELLO.” Egocentrismo innato: Parto de la premisa que lo que creo es
cierto aún cuando nunca he cuestionado las bases de mis creencias.
“ES CIERTO PORQUE CREEMOS EN ELLO.” Sociocentrismo innato: Parto de la premisa que las
creencias dominantes dentro del grupo al cual pertenezco son ciertas aunque nunca haya cuestionado las
bases de esas creencias.
“ES CIERTO PORQUE QUIERO CREERLO.” Cumplimiento de deseos innatos: Creo en, por ejemplo,
historias de conducta que ponen (a mí o al grupo al que pertenezco) en una perspectiva positiva en lugar
de negativa aunque no haya considerado con seriedad la evidencia de las historias negativas. Creo en lo
que “se siente bien”, lo que apoye mis otras creencias, lo que no me exija que cambie mi modo de
pensar de forma significativa y lo que no requiera que admita que me equivoqué.
“ES CIERTO PORQUE ASI SIEMPRE LO HE CREIDO.” Auto-validación innata: Tengo un fuerte
deseo de mantener las creencias que he tenido por mucho tiempo, aunque nunca haya considerado hasta
qué punto estén justificadas de acuerdo a la evidencia.
“ES CIERTO PORQUE ME CONVIENE CREERLO.” Egoísmo innato: Me aferro a las creencias que
justifiquen el que tenga más poder, dinero o ventajas aunque esas creencias no estén basadas en razones
ni en la evidencia.
Ya que los humanos tendemos a evaluar el pensamiento siguiendo los criterios arriba mencionados,
no es de sorprender que, como especie, no hayamos desarrollado un interés en establecer y enseñar
estándares intelectuales legítimos. No es de sorprender que nuestro pensamiento sea defectuoso. Somos,
en realidad un “animal que se engaña a sí mismo.”
Los estándares intelectuales universales son estándares que deben usarse cuando uno
quiera verificar la calidad del razonamiento sobre un problema, asunto o situación. Pensar
críticamente implica dominar estos estándares. Para ayudar a los estudiantes a
aprenderlos, los profesores deben formular preguntas que exploren su capacidad de
pensar críticamente; preguntas que provoquen que los estudiantes se responsabilicen por
su pensamiento; preguntas que, al formularse con regularidad en el aula, se vuelvan parte
de las preguntas que los estudiantes necesitan formular.
La meta final es, entonces, que estas preguntas se fusionen en el proceso de pensar de
los estudiantes hasta que se conviertan en parte de su voz interior que los guiará, a su vez,
a un proceso de razonamiento cada vez mejor. A continuación, comentamos algunos de
estos estándares universales:
Claridad:
¿Puede explicar o ampliar sobre ese asunto? ¿Puede expresar su punto de otra forma?
¿Me puede dar un ejemplo?
La claridad es un estándar esencial. Si un planteamiento es confuso, no se puede saber
si es exacto o relevante. De hecho, no se puede opinar sobre el mismo ya que no sabemos
qué dice. Por ejemplo, la pregunta ¿Qué puede hacerse sobre el sistema educativo en
América?, no es clara. Para poder contestar la pregunta, tendríamos que clarificar lo que
la persona que la hace considera que es “el problema”. Una pregunta más clara sería:
“¿Qué pueden hacer los educadores para asegurarse que los estudiantes aprendan las
destrezas y las habilidades que los ayuden a ser exitosos en sus trabajos y en su proceso
diario de toma de decisiones?”.
Exactitud:
¿Es eso cierto? ¿Cómo se puede verificar? ¿Cómo se puede corroborar que es cierto?
Un enunciado puede ser claro pero inexacto como, por ejemplo: “La mayoría de los
perros pesan sobre 300 libras.”
Precisión:
¿Puede ofrecer más detalles? ¿Puede ser más específico? Un planteamiento puede ser
claro y exacto pero impreciso como, por ejemplo, “José está sobrepeso.” (No se sabe de
cuánto estamos hablando, si una libra o 500.)
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Una mini-guía para el pensamiento crítico, conceptos y herramientas
11
Relevancia:
¿Qué relación tiene con la pregunta? ¿Cómo afecta el asunto? Un planteamiento puede
ser claro, exacto y preciso pero irrelevante al asunto o a la pregunta. Por ejemplo, a
menudo los estudiantes piensan que se debe considerar al calcular la calificación de un
curso, la cantidad de esfuerzo que el estudiante puso en el mismo. Sin embargo, muchas
veces ese “esfuerzo” nada tiene que ver con la calidad del aprendizaje del estudiante, en
cuyo caso, el esfuerzo no es relevante como parte de la calificación.
Profundidad:
¿En qué medida la respuesta contesta la pregunta en toda su complejidad? ¿En qué
medida considera todos los problemas del asunto? ¿Atiende la respuesta los aspectos más
importantes y significativos?
Un enunciado puede ser claro, exacto, preciso y relevante pero superficial (es decir,
poco profundo). Por ejemplo, la frase “Diga no a las drogas”, que a menudo se usa para
tratar de desalentar a los niños y adolescentes de usar drogas, es clara, precisa, exacta y
relevante. No obstante, carece de profundidad porque trata un problema extremadamente
complejo como lo es el uso de sustancias controladas entre los adolescentes, de forma
superficial. No atiende las complejidades que implica.
Amplitud
¿Habrá que considerar otra perspectiva? ¿Habrá otra forma de examinar la situación?
Desde un punto de vista conservador, ¿qué habría que considerar?, ¿qué habría que
considerar desde un punto de vista _______?
Una línea de razonamiento puede ser clara, exacta, precisa, relevante y profunda pero
carecer de amplitud. Por ejemplo, un argumento desde un punto de vista conservador o
liberal que profundice en un asunto pero se limite a solo un lado.
Lógica
¿Tendrá esto lógica? ¿Se despende de lo que se dijo? ¿Por qué? Antes dijo aquello y
ahora esto, ambas no pueden ser ciertas…
Cuando pensamos ordenamos una serie de ideas. Cuando las ideas combinadas se
apoyan entre sí y tienen sentido, el pensamiento es lógico. Cuando las ideas combinadas
no se apoyan entre sí, se contradicen o sencillamente “no tienen sentido”, es que no hay
lógica.
Integridad
Intelectual
Autonomía Humildad
Intelectual Intelectual
Características
Empatía
o virtudes Imparcialidad
Intelectual intelectuales
Entereza Perseverancia
Intelectual Intelectual
Confianza en la razón
1 2 3
Un sistema Ningún Sistemas
sistema múltiples
LOS ESTÁNDARES
Claridad Precisión
Exactitud Importancia Deben
Relevancia Completitud aplicarse a
Lógica Imparcialidad
Amplitud Profundidad
LOS ELEMENTOS
Propósitos Inferencias
Según Preguntas Conceptos
aprendemos Puntos de vista Implicaciones
a
desarrollar Información Supuestos
CARACTERÍSTICAS INTELECTUALES
Humildad intelectual Perseverancia intelectual
Autonomía Confianza en la razón
intelectual
Integridad intelectual Empatía intelectual
Entereza intelectual Imparcialidad
Pensador maestro
(Los buenos hábitos de
pensamiento se vuelven parte de
nuestra naturaleza)
Pensador avanzado
(Avanzamos según seguimos practicando)
Pensador practicante
(Reconocemos la necesidad de práctica regular)
Pensador principiante
(Tratamos de mejorar pero sin práctica
regular)
Pensador retado
(Nos enfrentamos con problemas en nuestro pensamiento)
Pensador irreflexivo
(No estamos conscientes de problemas en nuestro pensamiento)
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24
La biblioteca de Guías para el Pensamiento
Hay 15 Guías para el Pensamiento escritas en inglés. Eventualmente, toda la serie estará
disponible en español. Las guías disponibles en español son:
Para más información sobre nuestras otras guías (así como otras publicaciones) en inglés,
visite nuestra página www.criticalthinking.org.
Para ordenar:
Fundación para el Pensamiento Crítico
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707.878.9111 (fax)
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Los autores:
La doctora Linda Elder es una psicóloga educativa que ha impartido cursos de psicología
y de pensamiento crítico a nivel universitario. Es la presidenta de la Fundación para el
Pensamiento Crítico. Además ha realizado investigaciones sobre la relación entre el
pensamiento y la emoción, lo cognitivo y lo afectivo y ha desarrollado una teoría original
sobre las etapas del desarrollo del pensamiento crítico. Es autora y co-autora de artículos
en pensamiento crítico incluyendo una columna sobre el tema en el Journal of
Developmental Education. Es co-autora de dos libros titulados Critical Thinking: Tools
for Taking Charge of Your Learning and Your Life y Critical Thinking: Tools for Taking
Charge of Your Professional and Personal Life. Es una conferenciante dinámica.
Autores:
Franco Herrera Olivares
Joaquín Andrés Laínez
Fecha: 14/05/2015
Resumen Ejecutivo
El presente informe abarca la realización y análisis de una curva tonelaje ley a partir del estudio de
las leyes y tonelajes de la pared sur del rajo DOMEYKO (depósito de Oro) y la pared norte SOUPER
(depósito de Cobre) realizado por la Consultora de Monitorización y Análisis de Yacimientos
COPPERFIELD Co (COMAYCO).
A la base de datos de las leyes de corte del sector Sur Oro y el sector Norte Cobre se le aplica un
análisis para obtener la estadística descriptiva de las variables estudiadas, donde para el caso del
oro se obtiene una ley de corte mínima de 0.07 %, un promedio de 0.39 % y una máxima de 2.93 %
y en el cobre se obtiene una ley mínima de 0.005%, un promedio de 0.635 % una máxima de 4.492
%.
Luego se hacen los cálculos respectivos para poder obtener un gráfico que representa la curva
tonelaje ley. Para el caso del oro se desprende que para una ley de corte del 0.3 % de Choquelimpie
se obtiene un tonelaje sobre ley de corte de 3.491.200 toneladas y una ley media de 1.05 %, lo que
provocaría un ingreso de 112.020.484 US$. La curva tonelaje ley del sector Norte Cobre para una
ley de corte de 0.2 con la cual se trabaja en Candelaria se obtiene un tonelaje sobre ley de corte de
5.218.876 toneladas y una ley media de 0.82 %, lo que produciría ingresos de 230.792.448 US$.
Basándose en la curva tonelaje ley se desprende que si la mina Choquelimpie disminuye la ley de
corte hasta 0.2 gr/ton sus ingresos caen a la cifra de 89.637.467 US$ y si aumenta su ley de corte
hasta 0.8 gr/ton sus ingresos descienden a la cifra de 67.676.558 US$. Del mismo modo se tiene
que, si la Mina candelaria reduce su ley de corte hasta un 0.1 % sus ingresos aumentan a
238.665.471 US$ y al incrementar su ley de corte hasta un 0.7 % los ingresos vuelven a sufrir un alza
hasta alcanzar la cifra de 232.640.224 US$.
Dado lo anterior se recomienda a la mina Choquelimpie mantener la ley de corte de 0.3 gr/ton pero
en cambio a la mina Candelaria se le sugiere aumentar urgentemente la ley de corte hasta un 0.7 %.
Aumentando la cantidad de ingresos, disminuyendo la cantidad de material por procesar y a su vez
disminuyendo costos principalmente de conminución.
2
Índice
1 Introducción ................................................................................................................................ 4
2 OBJETIVOS ................................................................................................................................... 5
2.1 Objetivo Principal ................................................................................................................ 5
2.2 Objetivos Secundarios ......................................................................................................... 5
3 Marco Teórico ............................................................................................................................. 6
3.1 Estadística Descriptiva......................................................................................................... 6
3.2 Histograma .......................................................................................................................... 6
3.3 Ley de Corte ........................................................................................................................ 6
3.4 Ley Media ............................................................................................................................ 6
3.5 Curva Tonelaje Ley .............................................................................................................. 6
4 Procedimientos ........................................................................................................................... 7
4.1 Estadística Descriptiva......................................................................................................... 7
4.2 Tabulación de Datos ............................................................................................................ 7
4.3 Histograma .......................................................................................................................... 7
4.4 Filtro de Datos ..................................................................................................................... 7
4.5 Refinamiento de Datos........................................................................................................ 7
4.6 Datos Curva Tonelaje Ley .................................................................................................... 8
4.7 Gráfico Curva Tonelaje Ley .................................................................................................. 8
4.8 Ganancias ............................................................................................................................ 8
5 Resultados ................................................................................................................................... 9
5.1 Sur Oro (SW-891ijk) ............................................................................................................. 9
5.2 Norte Cobre (SE-987ijk) ..................................................................................................... 11
6 Análisis de Resultados ............................................................................................................... 13
6.1 Análisis de Resultados: Sector Sur Oro (SW-981 IJK) ........................................................ 13
6.2 Análisis de Resultados: Sector Norte Cobre (NE-172 IJK) ................................................. 14
7 Conclusiones y Recomendaciones ............................................................................................ 16
8 Bibliografía ................................................................................................................................ 18
9 Anexos ....................................................................................................................................... 19
9.1 Sur Oro (SW-891ijk) ........................................................................................................... 19
9.2 Norte Cobre (SE-987ijk) ..................................................................................................... 19
3
1 Introducción
En la actualidad minera hay conceptos fundamentales que definen un yacimiento, uno de estos
conceptos es la ley, esta indica la cantidad de peso en porcentaje de él o los elementos químicos
presentes en el yacimiento y se puede encontrar la ley media y la ley de corte. Cabe mencionar que
la ley media es un concepto físico que no varía en el tiempo y la ley de corte es un concepto
económico que si varia en el tiempo.
La necesidad de realizar el estudio se justifica debido a que las leyes son fundamentales en la toma
de decisiones de un negocio minero, especialmente la ley de corte, con ella se determina la ley con
la cual se produce el beneficio económico y así saber los tonelajes de material que están sobre esta
ley.
En el informe también se detalla la estadística descriptiva e histograma de los datos del sector sur y
norte, el procedimiento utilizado y un pequeño marco teórico necesario para comprender las
definiciones que son básicas en la realización del estudio.
Para finalizar es necesario mencionar que el trabajo se divide principalmente en; 1. Marco teórico,
2. Procedimientos utilizados, donde se describen los análisis estadísticos preliminares necesarios de
las variables de interés, 3. Resultados, 4. Análisis de los resultados, 5. Conclusiones.
4
2 OBJETIVOS
2.1 Objetivo Principal
Realizar la curva tonelaje ley para las leyes de cobre en el sector norte y las leyes de oro en el sector
sur.
5
3 Marco Teórico
Para realizar y entender el presente informe es necesario tener una noción de la estadística
descriptiva y algunos conceptos que definen un yacimiento, como las leyes.
3.2 Histograma
Es una herramienta estadística que permite visualizar gráficamente una variable en forma de barra
vertical, donde la altura de cada barra es proporcional a la frecuencia de los datos representados,
cada barra representa una marca de clase. De un histograma se puede inferir rápidamente la
distribución de la población o la muestra de las variables estudiadas, lo que le indica al observador
la tendencia que tiene dicha población o muestra.
El análisis de este gráfico, ofrece una noción de las toneladas que existe a una determinada ley de
corte o la ley media que se presenta para cuando se trabaja con una ley de corte definida.
6
4 Procedimientos
Los siguientes procedimientos son a base de los datos de leyes de cobre del sector norte y las leyes
de oro del sector sur. Estos datos están ordenados en forma de matriz en el software Excel. Por lo
tanto se agrupan tolas las leyes de corte de la matriz en una sola columna.
Crear una columna con el nombre “Xi”, esta corresponde al promedio entre “LI” y “LS”.
4.3 Histograma
Ingresar a la pestaña “Datos”, hacer clic en “Análisis de Datos” y elegir la opción “Histograma”. En
la ventana que aparece, marcar en las opciones “Rango de entrada”, “Rango de clases”, la columna
de leyes de corte y la columna “LS” respectivamente. Luego seleccionar las opciones de “Porcentaje
de acumulado” y “Crear gráfico”, hacer clic en aceptar.
En la tabla que aparecerá eliminar la última fila. En la columna “Clase” ingresar los datos de la
columna “Xi”.
Crear una columna con el nombre “Ton”, su valor es la multiplicación de la celda “Ton bloque” con
la columna de frecuencia absoluta “ni”, la celda “Ton bloque” debe ser fijada con la tecla F4.
Finalmente crear la columna “Ton acum” (Tonelaje acumulado) a la derecha de la columna “Ton”,
en esta se van sumando los valores de “Ton” hasta la última fila, la cual representa el tonelaje total.
7
4.6 Datos Curva Tonelaje Ley
Crear tres celdas, con el nombre de: “Ley de corte”, “Ton” y “Ton acum”. En la celda “Ley de corte”
se insertan los valores de la columna “Xi”, en las columnas “Ton” y “Ton acum” se insertan los
mismos valores ya calculados antes de estas columnas.
A la derecha de la celda “Ton acum” crear na celda con el nombre “Fino”, el valor de esta columna
es la multiplicación entre “ley de corte” y “Ton” de la misma fila dividido por cien. A la derecha de
la celda “Fino” crear una celda con el nombre de “Fino acumulado”, en esta se suman los valores
de las filas de la columna “Fino”.
Crear una celda sobre las tablas con el nombre “Fino total” la cual corresponde al valor de la última
fila de la columna “Fino acumulado”. Crear una celda a la derecha de “Fino acumulado” con el
nombre “Fino sobre ley de corte”, el valor de esta columna corresponde a “Fino total” fijada con
F4 menos el “Fino acumulado”, de la fila correspondiente.
Hacer la celda “Ton total”, su valor es igual a la última fila de la columna “Ton acum”. Luego crear
una celda a la derecha de “Fino sobre ley de corte” con el nombre “Tonelaje sobre ley de corte”, el
valor de esta columna es el valor te “Ton total” fijada con F4 menos “Ton acum” de la fila
correspondiente.
Finalmente crear una celda con el nombre “Ley media”, el valor de esta columna es el valor de “Fino
sobre ley de corte” dividido por el valor de la misma fila de “Tonelaje sobre ley de corte”.
Sobre el cuadro blanco presionar el botón secundario, hacer clic en la opción “Seleccionar Datos…”,
luego presionar donde dice “Agregar”, en “Valores X de la serie”, seleccionar la columna “Ley de
corte” y en el campo “Valores Y de la serie”, seleccionar la columna “Ton sobre ley de corte”. Volver
a presionar “Agregar” y en “Valores X de la serie” seleccionar la columna “Ley de corte” y en el
campo “Valores Y de la serie” seleccionar la columna “Ley media”. Luego presionar aceptar.
Se desprenderá un gráfico con una curva, en este presionar el botón secundario, elegir la opción
“Dar formato a serie de datos…”, seleccionar “Eje secundario”.
4.8 Ganancias
Crear una celda con el nombre “Ganancias” su valor corresponde a la multiplicación del tonelaje, el
precio (US/Ton) y la recuperación del material.
8
5 Resultados
Los resultados del análisis se presentan a continuación y se dividen en dos secciones, una para cada
pared.
Estadística
Media 0,39
Error típico 0,01
Mediana 0,11
Moda 0,10
Desviación estándar 0,51
Varianza de la muestra 0,26
Curtosis 1,58
Coeficiente de asimetría 1,61
Rango 2,86
Mínimo 0,07
Máximo 2,93
Suma 1778
Cuenta 4588
Tabla 5.1: estadística SUR ORO (SW-891 ijk). Fuente: propia.
Histograma
Frecuencia Frecuencia acumulada
2000 100,00%
1500 80,00%
FRECUENCIA
60,00%
1000
40,00%
500 20,00%
0 0,00%
0,05 0,15 0,25 0,35 0,45 0,55 0,65 0,75 0,85 0,95 1,05 1,15 1,25 1,35 1,45
CLASE
Gráfico 5.1: Histograma de frecuencia sector Sur Oro (SW-891 ijk). Fuente: Propia.
9
Considerando bloques cuadrados de 10x10x10 (largo, ancho y alto respectivamente) y una densidad
𝑇𝑜𝑛
media de 2,37 [ 𝑚3 ] se obtiene un tonelaje por bloque de 2370 toneladas por bloque y un tonelaje
total de 10873560 toneladas.
A continuación se presenta una tabla resumen de los datos para construir la curva tonelaje ley.
Ley de corte [%] Tonelaje sobre ley de corte [ton] Ley media Mineral [%]
0,05 6,28 0,49
0,15 2,42 1,02
0,25 2,42 1,02
: : :
: : :
1,35 0,17 1,45
Tabla 5.2: Resumen de resultados. Tonelaje sobre ley de corte y Ley media mineral. Fuente: Propia.
A partir de la ley de corte, las toneladas sobre sobre esta ley y la ley media correspondiente, es
posible elaborar una curva tonelaje ley. La curva tonelaje ley ilustra el comportamiento de las
toneladas de sobre la ley de corte y la ley media en función de la ley de corte.
LEY MEDIA
3000000 0,80
2000000 0,60
1000000 0,40
0 0,20
y = 8E+07x6 - 4E+08x5 + 8E+08x4 - 8E+08x3 + 4E+08x2 - 9E+07x + 1E+07
-1000000 0,00
0 0,2 0,4 0,6 0,8 1 1,2 1,4 1,6
LEY DE CORTE
Gráfico 5.2: Curva tonelaje ley sector Sur Oro (SW-891 ijk). Fuente: Propia.
10
5.2 Norte Cobre (SE-987ijk)
A partir de la información entregada se confecciona un histograma de frecuencia, y además se
obtuvo la siguiente tabla estadística para las leyes en analizadas:
Estadística
Media 0,635
Error típico 0,012
Mediana 0,318
Moda 0,111
Desviación estándar 0,812
Varianza de la muestra 0,659
Curtosis 5,749
Coeficiente de asimetría 2,388
Rango 4,487
Mínimo 0,005
Máximo 4,492
Suma 2916,879
Cuenta 4588
Tabla 5.3: Estadística Cobre Norte (NE 172 ijk). Fuente: Propia.
Histograma
Frecuencia Frecuencia acumulada
1500,00 1,20
1,00
FRECUENCIA
1000,00 0,80
0,60
500,00 0,40
0,20
0,00 0,00
0,05
0,15
0,25
0,35
0,45
0,55
0,65
0,75
0,85
0,95
1,05
1,15
1,25
1,35
1,45
1,55
1,65
1,75
1,85
1,95
2,05
2,15
2,25
2,35
2,45
2,55
CLASE
Gráfico5.3: Histograma de frecuencias, Sector Norte Cobre (NE-172 ijk). Fuente: Propia.
Considerando bloques cuadrados de 10x10x10 (largo, ancho y alto respectivamente) y una densidad
𝑇𝑜𝑛
media de 2,37 [ 𝑚3 ] se obtiene un tonelaje por bloque de 2370 toneladas por bloque y un tonelaje
total de 10364010 toneladas.
Con la información disponible es posible obtener los valores para la ley media y toneladas de fino.
A continuación se presenta una tabla resumen para dar a conocer algunos resultados.
11
Tonelaje sobre ley
Ley de corte [%] Ley media Mineral [ton]
de corte [ton]
0,05 10364010 0,54
0,15 10364010 0,71
0,25 10364010 0,84
: : :
: : :
2,45 10364010 2,55
Tabla 5.4: Resumen de resultados, Tonelaje sobre ley de corte y Ley media Minera. Fuente: Propia.
10000000,00 2,50
R² = 0,9967
8000000,00
2,00
LEY MEDIA
6000000,00
1,50
4000000,00
y = -2E+06ln(x) + 2E+06
1,00
2000000,00 R² = 0,973
0,00 0,50
-2000000,00 0,00
0,00 0,50 1,00 1,50 2,00 2,50 3,00
LEY DE CORTE
Gráfico5.4: Curva tonelaje ley Sector norte Cobre (NE-172 ijk). Fuente: Propia.
12
6 Análisis de Resultados
El análisis de los resultados es análogo para cada uno de los sectores por analizar requeridos por la
consultora COMAYKO, sin embargo será dividido en dos secciones para facilitar la comprensión de
la información.
A partir de los datos estadísticos se observa una ley media de oro en el yacimiento de 0,39 gr/ton
con un valor máximo de 2,93 gr/ton y un mínimo de 0,07 gr/ton. Es posible notar que la mayoría de
los datos se concentran entre leyes que van desde los 0 gr/ton y los 0,2 gr/ton, agrupando el 72,86%
de los datos, es decir 3343 bloques del total de 4588 bloques
Los resultados obtenidos de toneladas sobre ley de corte y ley media para cada ley de corte
respectivamente se utilizan para la confección de un gráfico tonelaje ley (Gráfico 5.2)
La curva de tonelaje sobre ley de corte tiene un comportamiento el cual se ajusta a una función
polinómica de grado 6, esta tiene un fuerte decrecimiento al aumentar la ley de corte en los
primeros datos y luego decrece de manera gradual, información que junto con las condiciones de
mercado y la ley media, son de suma importancia para la posterior planificación y proyección de la
mina a futuro. La curva de ajuste polinómico de grado 6 permite modelar los datos con el motivo de
conocer un valor aproximado de tonelaje sobre ley de corte para cualquier ley de corte requerida
por el consultor en caso de un cambio en la ley de corte con la que opera la mina.
13
polinómico de grado 6 permite conocer valores aproximados de ley media en caso de un cambio de
la ley de corte con el pasar del tiempo.
Ahora, haciendo uso de los ajustes polinómicos para el tonelaje sobre ley de corte y la ley media, es
posible estimar estos parámetros para el posterior análisis de ingresos de la mina. La ley de corte
utilizada la mina de Choquelimpie, ubicada en la comuna de Putre, en la XV región de Arica y
Parinacota, tiene un valor de 0,3 gr/Ton, a partir de este valor, las toneladas sobre esta ley de corte
tendrían un valor aproximado de 3.491.200 toneladas con una ley media estimada de 1,05 gr/Ton.
En base a un estudio estadístico de la información proporcionada permite conocer la ley media del
depósito la cual tiene un valor de 0,64%, un valor máximo de 4,49% y un mínimo de 0,005%. Es
posible notar que la mayoría de los datos se concentran entre leyes que van desde el 0% hasta un
0,85%, agrupando el 80% de los datos totales, es decir 3671 bloques del total de 4588 bloques en
estudio.
Como es posible observar en el histograma, la mayor frecuencia de bloques se da entre las leyes
que van entre 0,05% y 0,8%, es decir, se espera que en la mayoría del sector estudiado los bloques
presenten una ley que va entre un 0,05% y un 0,8%.
Los resultados obtenidos de toneladas sobre ley de corte y ley media para cada ley de corte
respectivamente se utilizan para la confección de un gráfico tonelaje ley (Gráfico 5.4).
La curva de tonelaje sobre ley de corte tiene un comportamiento el cual se ajusta a una función
logarítmica, las toneladas bajo la ley de corte disminuyen con mucha similitud a la ecuación de ajuste
presente en el gráfico al aumentar la ley de corte, información que junto con las condiciones de
mercado y la ley media, son de suma importancia para la posterior planificación y proyección de la
mina a futuro. La curva de ajuste logarítmico permite modelar los datos con el motivo de conocer
un valor aproximado de tonelaje sobre ley de corte para cualquier ley de corte requerida por el
consultor en caso de un cambio en la ley de corte con la que opera la mina.
14
De la misma forma con la curva de ley media se observa un comportamiento que se ajusta
aproximadamente a una ecuación cuadrática, por el contrario que la curva de tonelaje sobre ley de
corte, la curva de ley crece gradualmente con gran similitud a la ecuación de ajuste presente en el
gráfico, el conocimiento de este valor es relevante, ya que a partir del valor de la ley media es posible
estimar los ingresos, junto con el tonelaje y las condiciones de mercado presentan una gran
importancia para la planificación de la mina y su proyección a futuro. La curva de ajuste cuadrático
permite conocer valores aproximados de ley media en caso de un cambio de la ley de corte con el
pasar del tiempo.
Ahora, haciendo uso de los ajustes mencionados anteriormente para el tonelaje sobre la ley de corte
y la ley media, es posible estimar estos parámetros para el posterior análisis de ingresos de la mina.
La ley de corte utilizada la mina Candelaria, ubicada a 20 km al sur de Copiapó, en la III región de
Atacama, tiene un valor de 0,2 % en la zona de rajo, a partir de este valor, las toneladas sobre esta
ley de corte tendrían un valor aproximado de 5.128,875,82 toneladas con una ley media estimada
de 0,82$.
15
7 Conclusiones y Recomendaciones
A partir del estudio estadístico y la información proporcionada por la consultora COMAYKO es
posible establecer:
A partir del histograma de frecuencia en ambos sectores del yacimiento se puede observar que
la mayor concentración de datos se encuentra en los comienzos de la curva, entre leyes que van
desde los 0 hasta los 0,2 gramos de oro por tonelada para el sector Sur oro y entre el 0% hasta
un 0,85% para el sector Norte cobre, con leyes medias de 0,39 gr/ton y 0,64% respectivamente.
Las curvas presentes en los gráficos de tonelaje ley presentan un comportamiento similar, tanto
para el sector Sur oro como para el sector Norte cobre, donde para cada curva se puede
observar lo siguiente:
a) Una curva de tonelaje sobre ley de corte que decrece según un modelo matemático
diferente en ambos casos, pero que sin embargo, un aumento en la ley de corte provoca
una disminución en su valor. Para el caso del sector Sur oro la curva se ajusta a un polinomio
de grado 6 el cual permite estimar valores a partir de una ley de corte definida. En el sector
Norte cobre la curva se ajusta a una función logarítmica la cual aproxima valores de tonelaje
sobre ley de corte a partir de una ley de corte requerida.
b) Una curva de ley media en función de la ley de corte, que crece según un modelo
matemático diferente en ambos casos, pero que sin embargo mantiene su comportamiento
creciente con el aumento de la ley de corte. Para el caso del sector Sur oro la curva se ajusta
a un polinomio de grado 6 que permite estimar valores a partir de una ley de corte definida.
En el sector Norte cobre la curva se ajusta a una función cuadrática que aproxima los valores
de ley media según los requerimientos de la mina.
En cuanto a los valores obtenidos para la ley media mineral a partir del tratamiento matemático
de los datos, se observa que los valores de ésta van sobre la ley de corte requerida para
cualquier ley de corte dada. Lo anterior indica un correcto análisis de los datos, ya que para el
cálculo de ésta considera las leyes de los bloques que se encuentran sobre la ley de corte, es
decir, los bloques los cuales serán el objetivo a explotar de la mina. Además, representa la ley
con la cual la mina realizará sus estimaciones de ingresos y planificación de mina a partir de una
producción mensual estimada.
Respecto a las ganancias obtenidas para cada minera en análisis, suponiendo un
comportamiento similar al del depósito estudiado para la consultora COMAYKO se puede
concluir:
a) Considerando las condiciones de trabajo de la minera Choquelimpie, ubicada en la comuna
de Putre en la XV región de Arica y Parinacota, asumiendo una densidad media de la roca
𝑡𝑜𝑛
de 2,37 [ ]y un precio de oro de 1197,85 US$/oz lo que equivale a 42,25 US$/gr y una ley
𝑚3
de corte de 0,3 gr/ton (ley de corte operativa de la mina), es posible obtener el ingreso de
la mina en función del Tonelaje sobre la Ley de corte y la Ley media Mineral. Estos valores
se pueden conocer evaluando las curvas de ajuste para el Tonelaje sobre la Ley de corte y
Ley media Mineral con una ley de 0,3 gr/ton, obteniendo resultados de 3.491.200 Toneladas
16
sobre la Ley de corte y Ley media Mineral de 1,05 gr/ton. Finalmente, asumiendo una
recuperación de un 72% los ingresos de la mina son aproximadamente de 112.020.484 US$.
b) Realizando un análisis similar para la minera Candelaria (sector rajo) ubicada a 20 km al sur
𝑡𝑜𝑛
de Copiapó, III Región de Atacama, asumiendo una densidad media de la roca de 2,37[ 𝑚3 ]
y un precio del cobre de 2,7268 US$/lb lo que equivale a 6.011,56 US$/Ton y una ley de
corte de un 0,2% (ley de corte operativa de la mina), es posible obtener el ingreso de la mina
en función del Tonelaje sobre la Ley de corte y la Ley media Mineral. Los valores requeridos
se pueden conocer evaluando las curvas de ajuste matemático para el Tonelaje sobre Ley
de corte y Ley media Mineral con una ley de 0,2%, obteniendo resultados de 5.218.875,82
Toneladas sobre la Ley de corte y Ley media Mineral de 0,82%. Finalmente, considerando
una recuperación de un 89% los ingresos de la mina alcanzan valores aproximados de
230.792.448 US$.
Además, como la consultora requiere el estudio de la variación de la ley de corte para ambas
minas, según el comportamiento de las curvas en el gráfico Tonelaje Ley. Resultando lo
siguiente:
a) Para la mina Choquelimpie se estudia la disminución de la ley de corte hasta 0,2 gr/ton y el
aumento hasta 0,8 gr/ton. En el primer caso se observa un Tonelaje sobre Ley de corte de
2.803.200 Ton con una Ley media Mineral de 1,05 gr/ton, llevando los ingresos hasta valores
cercanos a los 89.637.467 US$. Por otro lado, con una ley de corte de 0,8 gr/ton el Tonelaje
sobre Ley de corte alcanza valores cercanos a 1.907.232 Ton y Ley media Mineral de 1,17
gr/ton, obteniendo ingresos de alrededor de 67.676.558 US$.
b) Para la minera Candelaria se estudia la disminución de la ley de corte hasta un 0,1% y un
aumento hasta 0,7%. Considerando una disminución de la ley de corte, el Tonelaje sobre
Ley de Corte es de 6.605.170 Ton con una Ley media Mineral de 0,67%, obteniendo ingresos
aproximados de 238.665.471 US$. En caso de aumentar la ley de corte hasta un 0,7% el
tonelaje sobre esta ley es de 2.713.349 Ton y una Ley media Mineral de 1,6% en cobre,
llegando a ingresos cercanos a los 232.640.224 US$.
Finalmente, se realizan las siguientes sugerencias a las mineras en estudio:
a) A la minera de Choquelimpie se le sugiere mantener la ley de corte operativa de la mina, ya
que un aumento o disminución de esta implica una disminución en los ingresos de la mina.
b) A la minera Candelaria se le sugiere el urgente cambio en la ley de corte empleada para su
operación, ya que, tanto disminuyendo ésta hasta un valor de 0,1%, como aumentándola a
0,7% los ingresos por la venta de concentrado aumentan a 238.665.471 US$ y 232.640.224
US$ respectivamente. Se observa claramente en los resultados que una disminución de la
ley de corte generará mayores ingresos, pero sin embargo, la cantidad de toneladas que
deben ser procesadas es mayor que si se aumenta la ley de corte (6.605.170 y 2.713.349
respectivamente), por ende, los gastos asociados a manejar esta cantidad de material son
mucho mayores considerando que más de la mitad de los gastos de la minera corresponden
al proceso de Chancado y Molienda. Finalmente, se sugiere a la minera aumentar su ley de
corte a un 0,7%, disminuyendo los costos y tiempos de Carguío y Transporte y a su vez los
costos del proceso de Conminación.
17
8 Bibliografía
CODELCO. (2012). Diccionario Minero, de RECREA. Sitio web:
https://www.codelcoeduca.cl/glosario/glosario_l.asp.
Histograma. (s.f.), de Creative Commons Attribution 3.0 License. Sitio web:
http://www.ceibal.edu.uy/contenidos/areas_conocimiento/mat/estadistica/histograma.html.
Lanas Fuentes, B. (1990). Estimación de reservas en el yacimiento de oro y plata Choquelimpie.
Santiago de Chile: Tesis (Ingeniero Civil en Minas) -- Universidad de Santiago de Chile.
Rodríguez Astorga, C. (1986). Evaluación de los métodos de muestreo y preparación de muestras
en el yacimiento epitermal Choquelimpie, I Región. Santiago de Chile: Tesis (Ingeniero de
Ejecución en Minas) -- Universidad de Santiago de Chile.
18
9 Anexos
A continuación se adjuntan tablas de los valores de para el sector Sur Oro (SW-891ijk) y el sector
Norte Cobre (SE-987ijk) que indican la ley de corte, tonelaje, tonelaje acumulado, fino del material,
fino acumulado, fino sobre la ley de corte e ingresos según la ley de corte definida.
19