SÍNTESIS

SOFISTICACIÓN E INNOVACIÓN: CRECIMIENTO VERDE

El crecimiento verde es una estrategia de desarrollo que busca promover nuevas fuentes de
crecimiento como la adopción de mejores tecnologías e innovación que perfeccionen el aparato
productivo. En este capítulo se exploran tres principales secciones: (1) uso eficiente de los
recursos, (2) conservación y restauración del capital natural y (3) gestión del cambio climático.
En el que cada uno presenta las problemáticas principales y sus respectivas recomendaciones.

En el uso eficiente de los recursos abarca tres principales cuestiones: (a) la productividad en el
uso del agua; el tratamiento de aguas residuales, las cuales son tratadas el 42,6% sin embargo, la
remoción promedio de carga orgánica en el 2018 fue de 34 %, sin conseguir evitar
significativamente el vertimiento de carga orgánica a los cuerpos hídricos, impactando
negativamente la calidad del recurso hídrico y reduciendo la posibilidad de reutilización. (b) la
productividad de la tierra, la cual es usada en un 43,8% del territorio nacional para actividades
agropecuarias y bosques, aun así su productividad es baja, pues hay poca disponibilidad de bienes
públicos, tiene bajas tasas de uso de maquinaria agrícola y de tecnología, dentro de un sector
vulnerable a variaciones climáticas. (c) la eficiencia en el uso de materiales, es baja pues se
genera un alto nivel de residuos y poco aprovechamiento de estos.

La sección de conservación y restauración del capital natural, que permite el desarrollo de una
economía más diversificada con nuevas fuentes de valor agregado, contiene tres temas: (a) ahorro
neto ajustado; este refleja el cambio en la disponibilidad de diferentes tipos de capital -físico,
humano y natural-. En 2018, el ahorro neto ajustado fue de –3,28 %, es decir que el ahorro e
inversión en capital humano no alcanzan a compensar la depreciación del capital físico y natural.
(b) deforestación; las principales barreras que se enfrentan son el catastro desactualizado, y la
informalidad a lo largo de la cadena de transformación. (c) calidad del aire; se pierden 6,5 años de
vida por los efectos nocivos del PM2,5.

Por último, sobre la gestión del cambio climático que implica la mitigación de GEI para evitar
escenarios de aumento de temperatura más graves e invertir en adaptación ante los efectos del
cambio climático. En cuanto a intensidad de emisiones de GEI, no se ha dado un desacoplamiento
entre el crecimiento económico y la emisión de GEI. En materia de adaptación, Colombia es un
país con alta exposición al riesgo climático por cambios en temperatura y régimen de
precipitaciones, entre 2011-2019 se han invertido COP 17,4 billones en financiamiento climático
en Colombia, principalmente por el sector público.

Las recomendaciones se enfocan en las políticas de crecimiento verde, como avanzar en la

implementación del documento CONPES 3934, también en fortalecer las capacidades para la
producción agropecuaria sostenible y la preparación ante desastres naturales, además establecer
mecanismos para la transición de las empresas a un desarrollo bajo en carbono y mayor
sostenibilidad junto a establecer una estrategia de recuperación económica pos-COVID-19
alineada con el crecimiento verde.