LEONARDO CONOCE UNA NUEVA FORMA DE APRENDER

El día apenas había mostrado sus primeras luces y Leonardo ya estaba listo para
comenzar su día de clases, el colegio es un espacio de encuentro, donde se forjan
los valores, se desarrolla la interacción social, además del conocimiento que se
adquiere sobre el mundo y su manera de funcionar, los seres humanos tenemos
una percepción de cómo aprendemos o aprendimos en el colegio, pero LECTIO,
es un colegio diferente que enseña a partir de las experiencias de sus estudiantes,
de las vivencias que traen de sus hogares y las que construyen en el aula.
Leonardo llegó a su clase de matemáticas, pero esta clase era llamada de otra
manera, ACERCAMIENTO LÓGICO DEL ENTORNO, un poco confuso, pero
en la práctica era más sencilla de entender.
A partir de los elementos que conforman el salón de clases, era posible entender
concepto como los fraccionarios, por ejemplo Leonardo pertenencia a una
dieciseisava parte del salón, pero era un octavo de la zona que estaba cerca a la
ventana y un medio de los niños del salón, fue todo un viaje fascinante y aunque
debía adaptarse iba a ser más fácil si contaba con su profesor y compañeros,
quienes estuvieron muy atentos a explicarle cómo debía interpretar los conceptos
y que el escribir en el cuaderno de la materia debía ser más para recordar algunos
nombres, pero que el conocimiento debe ser más experimental, esto lo convierte
en significativo.
Mucha información para un solo día, había muchas inquietudes, algunas le
generaban miedo, otras tantas ansiedades por vivirlas de inmediato, tenía al
finalizar la tarde toda una explosión de emociones, también se sentía agotado y
quería regresar a casa para tener un espacio para poner su cabeza en orden y su
corazón un poco más tranquilo porque desde que entró al colegio no había dejado
de latir de manera más rápida de lo normal.
Recordó que al llegar a casa debía llamar a su novia, en ese momento se sintió
algo culpable por no haberla tenido en el pensamiento sino hasta ese instante, se
preguntó si acaso le había podido pasar los mismo a ella durante el día, era hora
de llegar a casa y tratar de volver a la normalidad, si a eso se le podía llamar
normal.

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LOS PROBLEMAS MÁS FRECUENTES EN EL AULA
El rendimiento académico de los niños puede ser el reflejo de alguna situación
que necesite atención de parte de los padres y/o maestros.
Es muy fácil etiquetar como 'desordenada', 'haragana', 'mentirosa', 'peleonera' y
demás a una persona, pero este comportamiento puede ser una de las señales que
el niño está comunicando para pedir ayuda, ya que no conoce otra forma de
hacerlo.
Cuando esto sucede, es conveniente describir la situación y aplicar el calificativo
negativo a la actitud o comportamiento, haciendo una clara separación entre la
persona y el comportamiento. De esta manera, el niño sentirá que tiene la
oportunidad de cambiar lo negativo por algo positivo.
Por ejemplo, 'Tus juguetes están desordenados' o 'Lo que dijiste es una mentira',
así también reconocer y animar los pequeños logros que va teniendo, por
ejemplo, 'Puedo ver que tus libros están guardados en orden', 'Hoy trabajaste con
responsabilidad las tareas del colegio'. Esto le permitirá al niño darse cuenta de
por qué está siendo reconocido y qué comportamientos son valorados para
repetirlos posteriormente.
A continuación encontrará algunas problemáticas que podría identificar en su
hijo:
1. Actitud negativa hacia el colegio
2. Dificultad en algunas destrezas o materias
3. Se lleva mal con compañeros o maestros
4. No hace tareas o las hace y no las entrega
5. Desorden en sus pertenencias, pierde sus pertenencias
6. Dice mentiras, culpa a otros o niega su responsabilidad
7. Desobediencia
8. Falta de respeto a la autoridad y límites
Cada una de estas dificultades podría tener una causa diferente, por lo que es
necesario observar y conocer la particularidad de su hijo y su entorno, en base a
ello desarrollar una estrategia para poder superarlas.
Algunas ideas generales de cómo poder evitar o mejorar estas dificultades pueden
parecer muy sencillas, pero su cumplimiento constante y firme tendrá resultados
asombrosos.
1. Establecer un horario y asegurarse de cumplirlo
2. Preparar un lugar adecuado para el estudio o tareas
3. Mantener comunicación abierta casa - colegio
 4. Conocer cualidades de su hijo, observarlo, en qué y cómo puede mejorar
específicamente
5. Investigar y conocer las causas de su comportamiento
6. Explotar el potencial que tiene en las habilidades que son su fortaleza
7. Pedir apoyo u orientación al colegio en caso de creerlo conveniente
8. Investigar, prepararse, documentarse de fuentes confiables acerca de las
características de la edad de su hijo y las situaciones particulares que está
atravesando
9. Asignar responsabilidades en casa
Para su hijo es muy importante tener su atención y su cariño, el rendimiento
académico es un aspecto que se puede medir de manera más objetiva que los
demás, pero no por ello el aspecto emocional, familiar, social, espiritual o físico
dejan de ser importantes. 
Su hijo responderá a la estima que se tenga de él y espera satisfacer con sus
expectativas, asegúrese de que sienta su amor y aceptación independientemente
de los resultados que obtenga en el colegio. Él vale por ser la persona que es y
usted lo ama por ser su hijo, tómese un tiempo para escucharlo, para demostrarle
lo importante que es él para usted