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Prolegómenos

ISSN: 0121-182X
ISSN: 1909-7727
Universidad Militar Nueva Granada

Cruz Rodríguez, Michael


SUPREMACÍA JUDICIAL: EL CONTROL CONSTITUCIONAL
DEL DERECHO VIVIENTE EN COLOMBIA*
Prolegómenos, vol. XXI, núm. 42, 2018, Julio-Diciembre, pp. 111-133
Universidad Militar Nueva Granada

DOI: 10.18359/prole.3322

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=87662091004

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Michael Cruz Rodríguez NAL DEL DERECHO…

Revista Prolegómenos - Derechos y Valores - pp. 111-133, 2018, II

SUPREMACÍA JUDICIAL: EL CONTROL CONSTITUCIONAL


DEL DERECHO VIVIENTE EN COLOMBIA*

Michael Cruz Rodríguez**

Fecha de recepción: 19 de febrero de 2018


Fecha de evaluación: 5 de abril de 2018
Fecha de aprobación: 6 de abril de 2018

Artículo de investigación

doI: https://doi.org/10.18359/prole.3322

Forma de citación: Cruz Rodriguez, M. (2018). Supremacía judicial: el control constitucional del
Derecho viviente en Colombia. Revista Prolegómenos Derechos y Valores, 21(42), 111-133,
doI: https://doi.org/10.18359/prole.332

RESUMEN

Se sostiene que la Corte Constitucional ha usado la distinción disposición/ norma ejer-


ciendo control sobre la jurisprudencia de las altas cortes estratégicamente, para reivin-
dicar su superioridad funcional como guardiana de la Constitución y obtener soporte
judicial para sus decisiones, evitando confrontaciones directas o “choques de trenes”
con dichas cortes. Como consecuencia de esto, se presentan algunas ambigüedades
sobre la concepción y aplicación del derecho viviente. Para desarrollar esta hipótesis el
artículo se divide en tres partes. La primera presenta el uso de la distinción disposición/
norma y sus repercusiones políticas, luego reconstruye la doctrina, significado y alcan-
ce del derecho viviente, como escenario constitucional en el que dicha distinción tiene
aplicación. La segunda parte evalúa el uso estratégico de la claridad y la ambigüedad de
la doctrina, interpretando el sentido de la validez constitucional del derecho viviente,
la forma en que se realiza su control respecto a la comunidad jurídica y la extensión
de dicho concepto a la jurisprudencia interamericana. La última parte sintetiza las
conclusiones.

Palabras clave:
Control constitucional; Corte Constitucional; derecho viviente; disposición jurídica;
norma jurídica supremacía judicial.

*
Este artículo de investigación fue elaborado con el auspicio de la Convocatoria Nacional de Proyectos para el fortaleci-
miento de la Investigación, Creación e Innovación de la Universidad Nacional de Colombia 2016-2018. Código Hermes:
35623.
**
Abogado de la Universidad Nacional de Colombia. Candidato a doctor en Derecho por la misma universidad. Integrante
del Grupo de Investigación copal de la misma institución. Correo electrónico: mcruzro@unal.edu.co

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SUPREMACÍA JUDICIAL: EL CONTROL CONSTITUCIONAL DEL DERECHO… Prolegómenos - Derechos y Valores

COURT SUPREMACY: CONSTITUTIONAL


REVIEW OF LIVING LAW IN COLOMBIA

ABSTRACT

The article argues that the Constitutional Court has used the provision/regulation dis-
tinction by strategically exerting control over the jurisprudence of high courts in order
to recognize its functional superiority as guardian of the Constitution and obtain ju-
dicial support for its decisions, avoiding direct confrontations or “choque de trenes”
with such courts. As a result, some ambiguities about the conception and application
of living law are presented. To formulate this hypothesis, the article is divided into
three parts. The first one presents the use of the provision/regulation distinction and its
political repercussions and then systematically reconstructs the doctrine, meaning and
scope of living law, as a constitutional scenario in which such distinction is applicable.
The second part evaluates the strategic use of clarity and ambiguity in the doctrine,
interpreting the sense of constitutional validity of living law, how it is controlled with
respect to the legal community and its extension to the inter-American jurisprudence.
The last part summarizes the conclusions.

Keywords:
Constitutional Court; constitutional review; court supremacy; living law; legal provi-
sion; legal regulation.

SUPREMACIA JUDICIAL: O CONTROLE CONSTITUCIONAL


DO DIREITO VIVO NA COLÔMBIA

RESUMO

Argumenta-se que o Tribunal Constitucional utilizou a distinção de disposição/regra


exercendo controle sobre a jurisprudência dos tribunais superiores estrategicamente
para reivindicar sua superioridade funcional como guardião da Constituição e obter
apoio judicial para suas decisões, evitando confrontos diretos ou “choques de trem”
com esses tribunais. Como consequência disso, existem algumas ambiguidades sobre a
concepção e aplicação da lei viva. Para desenvolver esta hipótese, o artigo está dividido
em três partes. A primeira apresenta o uso da distinção disposição/regra e suas reper-
cussões políticas, depois reconstrói a doutrina, o sentido e o alcance da lei viva, como
cenário constitucional em que essa distinção tem aplicação. A segunda parte avalia o
uso estratégico da clareza e ambiguidade da doutrina, interpretando o significado da
validade constitucional da lei viva, o modo como seu controle é realizado respeito da
comunidade jurídica e a extensão desse conceito à jurisprudência interamericana. A
última parte sintetiza as conclusões.

Palavras-chave:
Supremacia judicial; Tribunal Constitucional; lei viva; controle constitucional; dispo-
sição jurídica; norma jurídica.

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Introducción concepción del derecho viviente y la forma en


La Corte Constitucional Colombiana ha ejerci- que se realiza su control. Para desarrollar esta
do control constitucional, a través de la doctri- hipótesis el artículo se divide en tres partes. En
na del derecho viviente, sobre la jurisprudencia la primera parte se plantea el alcance político
de las altas cortes e incluso sobre la doctrina de la distinción entre disposición y norma, y se
especializada que fija el sentido real de las nor- muestra sistemáticamente la doctrina del dere-
mas. Según esta doctrina, las interpretaciones cho viviente como escenario en el que dicha
dominantes en las altas cortes o en la comuni- distinción se aplica. En la segunda parte se rea-
dad jurídica de doctrinantes pueden ser excep- liza una evaluación de este uso y se resaltan las
cionalmente objeto de control constitucional, perplejidades interpretativas que ha tenido. En
en la medida en que su contenido normativo la última parte se sintetizan las conclusiones.
debe estar en concordancia con la Constitu-
ción. Este control se efectúa merced a la supe-
rioridad funcional de la Corte como guardiana A. El carácter normativo
de la Constitución y tiene como consecuencia del derecho viviente
la posibilidad de demandar por inconstitucio-
nalidad las interpretaciones de las altas cortes. La distinción entre disposición y norma ha sido
usada en diversos escenarios del control cons-
La teoría del derecho viviente otorga un peso titucional para justificar la facultad de adoptar
significativo a la jurisprudencia y a la doctrina decisiones positivas que no se restrinjan a la
especializada como fuentes de derecho, pero declaratoria de exequibilidad o inexequibilidad,
sometidas a control judicial. La Corte ha revi- sino que tengan en cuenta los efectos jurídicos
sado dichas interpretaciones reivindicando su y sociales de dichas declaraciones. El uso ex-
competencia para sacarlas del ordenamiento pandido de la distinción abarca el ámbito de
jurídico cuando no respetan la Constitución, las interpretaciones judiciales de orden legal
sobre la base de que su función no se limita a la en la medida en que estas constituyen normas
revisión de las disposiciones sino de las normas jurídicas de aplicación real. A continuación, se
que se extraen de aquellas por vía de la inter- reconstruye el origen de la distinción y la ma-
pretación. Por eso, la Corte ha establecido una nera en que se ha adaptado para estructurar la
serie de estándares que permiten identificar el doctrina del derecho viviente.
derecho viviente y presentar cargos de cons-
titucionalidad en su contra. Con todo, el uso
de dicha doctrina plantea inquietudes sobre la I. Un problema iusfilosófico
competencia de la Corte y ambigüedades in- de alcance político
terpretativas en el uso de la distinción entre
disposición y norma. El origen de la distinción entre disposición y
norma suele atribuirse a las primeras decisio-
El presente trabajo plantea que la Corte Cons- nes del Tribunal Supremo alemán a la hora de
titucional en ejercicio de su función de control resolver el problema de identificar el objeto de
constitucional ha usado estratégicamente la control constitucional (Chiassoni, 2011, p. 8).
distinción entre disposición y norma con el fin La respuesta de este, así como de la mayoría
de extender su control sobre la jurisprudencia de tribunales en el mundo que deben afron-
de las altas cortes, pero tratando de evitar una tar la cuestión, es que el objeto de control son
confrontación directa o un nuevo “choque de las normas jurídicas y no las disposiciones.
trenes” con estas y reivindicando su superio- Aunque la solución parece obvia, determinar
ridad funcional como guardiana de la Cons- cuál es la norma que se infiere de una o varias
titución. Este uso estratégico ha traído como disposiciones y declarar su conformidad o no
consecuencia algunas ambigüedades sobre la conformidad con la Constitución, revela el al-

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cance político de dicha distinción en términos especialmente, en el ámbito judicial (Shapiro,


del comportamiento estratégico de los jueces1. 1964; Friedman, 2006; Roux, 2013). En esa
medida han ejercido funciones que aparente-
Pese a que la distinción entre disposición mente exceden su competencia, tales como
y norma sea teóricamente sencilla, no está legislar, determinar la competencia jurídica de
exenta de operaciones ideológicas en la prác- los actores políticos o condicionar la interpre-
tica judicial. Según Guastini (2011), una dis- tación y aplicación de los textos jurídicos. Este
posición es un enunciado escrito proveniente uso acomodaticio responde a “operaciones
de alguna fuente jurídica y una norma es un ideológicas” ineludibles y criticadas incluso en
enunciado que otorga sentido a una o varias el ámbito de la teoría del derecho (Kennedy,
disposiciones: mientras que la disposición es 1997; 1999). Por ejemplo, cuando se otor-
el texto “por interpretar” la norma es el texto ga correspondencia biunívoca a disposición y
“interpretado”; se trata de una relación de sig- norma, o se admite la existencia de normas
nificante a significado en la que uno no puede en ausencia de disposiciones, pues una u otra
existir sin el otro (Guastini, 2011). De ahí que, concepción tienen efectos políticos distintos en
cuando las cortes deciden declarar la incons- la adopción de decisiones específicas (Guastini,
titucionalidad de una norma, puedan eliminar 2011). Lo anterior parece una consecuencia
del ordenamiento varias disposiciones que la inevitable del ejercicio del control constitucio-
contienen, un fragmento de alguna disposición nal como una actividad jurídico-política: de-
e, incluso, el entendimiento que se deriva de terminar cuáles son las normas revisadas y
las disposiciones. Así, puede conservarse la someterlas a los parámetros constitucionales,
disposición jurídica, el texto, siempre que de él sin perder de vista los efectos que tendrán las
se derive una interpretación, una norma, que decisiones judiciales.
se ajuste a la Constitución. En Colombia, la
Corte Constitucional denomina a esta opera- Esta actividad encuentra justificación en la
ción principio de conservación del derecho óptica del realismo y del positivismo jurídico.
(C-273/1999; C-995/2001). Desde el primero, si las disposiciones nor-
mativas son indeterminadas, precisamente la
En la práctica judicial, esta teoría ha servido interpretación —como proceso— es la que
para que las cortes operen como actores po- permite fijar el significado real y efectivo de
líticos calificados y usen estratégicamente la las normas —como resultado—, sin que exis-
distinción según el soporte público con el que ta razón alguna para que este sentido real de
cuentan. Esta calificación es indicativa de que las normas, como conjunto de hechos, escape
no actúan solamente motivados por restriccio- a la Constitución y pueda por ello ser objeto
nes o incentivos políticos; también tienen algo de una interpretación decisoria sobre su con-
que perder, o ganar, en el ámbito jurídico y, formidad con esta (Guastini, 2015). Desde el
segundo, se trata de una versión ampliada de
1
la actividad creadora de normas, denominada
La teoría de la elección racional ha tenido gran in-
fluencia en el análisis del comportamiento estratégico
por Hart (1994) intersticial, lo cual refuerza
de los jueces para evidenciar el peso de las preferen- la tesis de la discrecionalidad judicial en que
cias personales e ideológicas en la decisión judicial (Se- se basa el positivismo jurídico y el carácter re-
gal y Spaeth, 1993; 2002; Epstein y Knight, 1998; lativamente incierto de la regla de reconoci-
2000). Esta concepción dominante ha venido siendo
discutida por el nuevo institucionalismo histórico, que
miento: un hecho dentro del cual se incluye
otorga un peso significativo a las prácticas institucio- el control constitucional del sentido real de las
nales (Clayton y Gillman, 1999). Excede el propósito normas de origen judicial. Así, la norma in-
de este trabajo realizar un análisis de elección racional terpretada por los jueces puede ser objeto de
de cada decisión judicial; antes bien, la hipótesis se
ubica como una interpretación de las prácticas de la
control abstracto, en virtud del mismo margen
Corte en perspectiva de su posición institucional. de discrecionalidad con que puede distinguirse

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entre disposición y norma jurídica, pero apli- nes se han validado interpretaciones judiciales
cando un juicio de validez constitucional (Guas- (50,8%) y en veinte no ha habido pronuncia-
tini, 1995). miento específico sobre estas (33,8%), pese a
que la doctrina del derecho viviente como tal
Con todo, el control constitucional sobre las haya hecho parte de la ratio decidendi en 13
interpretaciones de otros jueces, en cuanto de estos casos. La ausencia de choque ha per-
productores de normas jurídicas a partir de mitido desarrollar estratégicamente a la Corte
disposiciones, no es solo una implicación lógi- una definición del derecho viviente que sirve
ca de la distinción entre disposición y norma; para identificarlo, una serie de estándares que
también obedece a movidas argumentativas le habilitan para ejercer control constitucional
de las cortes para mantener o elevar su po- y algunos requisitos para presentar cargos de
sición institucional dentro del poder judicial: inconstitucionalidad que aparentemente limi-
esto es, el incremento de su poder como con- tan el alcance de su intervención, con lo cual
secuencia de que jueces y cortes implementen ha reivindicado su supremacía judicial como
directamente sus decisiones, aunque esto varíe guardiana de la Constitución.
respecto a los actores políticos (Hall, 2011).
Lo anterior puede significar la confrontación Para la Corte Constitucional, el derecho vivien-
con otros actores judiciales sobre la base del te significa una interpretación dominante de
respaldo de actores políticos, o el apoyo estra- carácter judicial o asentada en la doctrina espe-
tégico de actores judiciales para obtener acep- cializada que determina el sentido o significado
tación y soporte respecto al poder de revisión real de una norma y su aplicación. Este signi-
de las cortes constitucionales (Landau, 2015). ficado, sentido o contenido normativo consti-
En el caso colombiano, el uso de la distinción tuye el objeto del juicio de constitucionalidad
entre disposición y norma en el marco de la y debe derivar del texto de las disposiciones
doctrina del derecho viviente parece obede- legales. Aunque el primer pronunciamiento
cer a este último incentivo: consolidar la au- que juzgó una interpretación judicial se dio en
toridad de la Corte sin generar un “choque el 2000 (C-1436/2000), al año siguiente la
de trenes”, similar al ocurrido en torno a la Corte estableció tres elementos definitorios del
procedencia de la acción de tutela contra pro- derecho viviente: la consistencia, la solidez y la
videncias de las altas cortes (Cruz Rodríguez, relevancia de la interpretación (tabla 1).
2018, pp. 85-120).
Tabla 1. Concepto de derecho viviente

II. El derecho viviente: Elementos definitorios del Derecho Viviente


significado y alcance
Consistencia (i) La interpretación debe ser firme y
coherente así no sea idéntica y uni-
El desarrollo de la doctrina del derecho viviente forme, no puede ser contradictoria o
en la jurisprudencia de la Corte Constitucional ser una controversia jurisprudencial.
evidencia un avance relativamente pacífico de Solidez (ii) La interpretación debe estar con-
su poder de revisión sobre las interpretacio- solidada, reproducida en varias de-
cisiones. Excepcionalmente, puede
nes de otras altas cortes. De las 59 decisiones admitirse que se derive de solo una
—entre los años 2000 y 2017— en las que decisión.
se ha mencionado la doctrina del derecho vi- Relevancia (iii) La interpretación debe tener
viente, solamente en nueve casos (15,2%) se peso significativo para determinar el
han efectuado declaraciones de invalidación alcance y los efectos de la norma o
el sentido de la disposición.
de interpretaciones de las altas cortes y en un
caso respecto a la interpretación del Ministerio Fuente: Elaboración del autor con base en Corte Constitucio-
nal Colombiana. Sentencia C-557 de 2001, M.P.: Manuel José
de Educación (C-1093/2003). En 30 decisio- Cepeda Espinosa.

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Adicionalmente, la doctrina especializada tam- demostrar que el derecho viviente realmente


bién constituye derecho viviente, pues, al igual vulnera la Constitución, a fin hacer condu-
que la jurisprudencia, permite fijarles sentido cente el pronunciamiento judicial sobre la es-
a las normas siempre que sea una orientación pecificidad constitucional y no desbordar el
dominante, bien establecida. Para esto, debe poder de la Corte sobre ámbitos de carácter
valorarse la expansión de dicho consenso aca- legal que corresponden a otras jurisdicciones.
démico en términos cuantitativos y la autori- Para ello, la Corte ha construido una serie
dad académica de los doctrinantes en términos de requisitos que buscan hacer más exigente
cualitativos. Lo anterior no significa que las la carga argumentativa de los demandantes,
interpretaciones jurisprudenciales o doctrina- pese a la naturaleza pública e informal de la
les dominantes sean per se constitucionales. acción de inconstitucionalidad. Dentro de es-
En efecto, la competencia de la Corte Cons- tos se destacan algunas especificidades sobre
titucional es ejercer el control constitucional los requisitos generales de un cargo de cons-
sobre el sentido atribuido a las disposiciones titucionalidad: claridad, certeza, especificidad,
constitucionales tanto por jueces como por la pertinencia y suficiencia (tabla 2).
comunidad jurídica de doctrinantes.
Estas exigencias argumentativas han sido reite-
Para ejercer dicho control constitucional, la radas (C-842/2010) y usadas respecto a otras
Corte ha creado una serie de estándares que doctrinas, como en el caso de la sustitución de
demarcan su labor. En primer término, el juicio la Constitución (C-599/2010; C-249/2012),
de constitucionalidad se realiza sobre el con- para fundamentar el alcance de las sentencias
tenido normativo decantado por las interpre- interpretativas de la Corte sobre la base de la
taciones autorizadas y no sobre su significado distinción entre disposición y norma (Sánchez
hipotético, pues este contenido tiene fuerza Sánchez, 2005). En el caso de la doctrina
material de ley (C-207/2003; C-557/2001; del derecho viviente, los requisitos permitie-
C-258/2013). En segundo término, el control ron a la Corte declararse inhibida por inepti-
constitucional es un juicio abstracto sobre el tud sustantiva de la demanda en eventos en
contenido de la norma y no significa intromi- los que, según el análisis efectuado por los
sión o desplazamiento de la competencia de los magistrados, se presentan simples hipótesis
jueces para aplicar la ley en cada caso concreto hermenéuticas (C-803/2006; C-158/2007;
(C-426/2002; C-987/2005; C-259/2015). C-159/2007), se cuestionan interpretaciones
Por último, a la Corte le corresponde asegurar derivadas de normas sin fuerza material de ley
la subordinación de los funcionarios judiciales (Auto 103/2005; C-304/2013), se presentan
a la Constitución: ya sea en forma indirecta demandas de constitucionalidad para intentar
por medio de sentencias interpretativas, o ya resolver casos particulares (Auto 196/2005;
sea en forma directa, cuando ciertas interpre- C-422/2006) o, incluso, problemas de la
taciones planteen problemas constitucionales y praxis judicial que deben resolverse en el
de manera excepcional deban controlarse (C- ámbito de cada jurisdicción (C-048/2004;
569/2004; C-539/2011; C-645/2012). Así, C-187/2008). Es decir, casos en los que no
el derecho viviente no restringe la autonomía se acredita la norma derivada de la disposición
del juez constitucional para ejercer control so- de manera efectiva para proceder al juicio de
bre este, declarando la inexequibilidad de in- constitucionalidad.
terpretaciones jurisprudenciales o doctrinales
(C-901/2003; C-1093/2003; C-390/2014). La mayoría de decisiones se orientaron a recono-
cer la existencia del derecho viviente producido
Adicionalmente, este control tiene carácter por la Corte Suprema de Justicia (Aclaración de
excepcional y por eso les corresponde a los Voto C-1294/2001; C-875/2003; T-666/2003;
demandantes ante la Corte la obligación de T-951/2005; T-389/2006; T-950/2006;

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Tabla 2. Elementos del cargo constitucional contra el derecho viviente


Idoneidad de cargos constitucionales contra el derecho viviente

Requisito Descripción

Claridad (i) Debe señalarse la disposición demandada (el texto).

(ii) Debe identificarse el contenido normativo o norma derivada de dicha disposición, la


interpretación consistente, consolidada y relevante que constituye derecho viviente (la norma) que
involucra un problema constitucional.

Certeza (i) La interpretación acusada debe fijar realmente el contenido de la(s) disposición(es): debe ser una
interpretación plausible de esta(s).

(ii) La interpretación acusada debe tener sustento real (es usada por los operadores jurídicos y
vivida por los ciudadanos) y no puede ser una mera “hipótesis hermenéutica” del demandante.

(iii) La interpretación debe derivarse de normas con fuerza material de ley y no de normas de
inferior jerarquía o la praxis judicial.

Especificidad (i) Debe establecerse la oposición concreta entre el contenido normativo demandado y la
constitución sin usar argumentos vagos, indeterminados, indirectos, abstractos o globales.

Pertinencia (i) Debe indicarse la relevancia constitucional del cargo con base en la interpretación de una norma
constitucional: son inadmisibles los reproches de índole legal, personal o de simple conveniencia.

Suficiencia (i) Debe presentarse argumentos persuasivos que demuestren la existencia de la interpretación
acusada como derecho viviente: el cargo debe despertar una mínima duda sobre su presunción de
constitucionalidad.

Fuente: Elaboración propia con base en Corte Constitucional Colombiana. Sentencia C- 802/2008 M.P.: Clara Inés Vargas Hernández.

C-1086 /2008; C-1122/2008; C-637/2009; nal de la Corte como censora de la jurisprudencia


C-842/2010; C-442/2011; C-491/2012; ha sido producto de las decisiones de inhibición y
C-193/2016; C-344 /2017), por el Conse- de exequibilidad simple o condicionada, las cuales
jo de Estado (C-557/2001; C-955/2001; no plantean confrontación directa con las otras
C-426/2002; C-1436/2000; Salvamen- altas cortes.
to de Voto C-1114/2003; C-043/2004;
C-569/2004; C-459/2004; C-038/2006;
T-248/ 2008) o la Fiscalía General de la Nación III. Invalidaciones restringidas
y algunos tribunales de inferior jerarquía como
parte de la comunidad jurídica (C-893/2012). In- Las controversias han sido escasas y no han
cluso, como forma de reiterar la obligatoriedad del generado choques continuos entre las cortes
precedente constitucional y su autoridad preva- con la misma envergadura de aquellos ocurri-
lente, la Corte Constitucional ha señalado que su dos ante la tutela contra providencias. Entre los
propia jurisprudencia constituye derecho viviente años 2000 y 2017, se cuentan solamente nue-
(T-265/2013; C-418/2014; SU-214/2016). ve decisiones en las que se declara la invalidez
Así, pese a que las escasas declaraciones de inva- del derecho viviente por vía de acción pública
lidez del derecho viviente han generado un mayor de inconstitucionalidad y dos decisiones de tu-
grado de controversia, el significado y el alcance tela en la que se desestima la interpretación
de esta doctrina para elevar la posición institucio- del Consejo de Estado (15,2%). Mientras que,

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Tabla 3. Declaraciones de invalidez constitucional del derecho viviente.


Decisión Autoridad Disposición Norma Ministerio Sentido de la decisión Resolución
Controlada (Interpretación que Público
constituye Derecho
viviente)

C-426/2002 Consejo de Art. 4 D. La acción de simple Oposición La acción de simple nulidad Exequibilidad
Estado 1/1984 Código nulidad procede con- también procede contra los condicionada
MP: Rodrigo Contencioso tra actos de contenido actos de contenido particular
Escobar Gil Administrativo particular cuando lo y concreto, cuando la pre-
indique la ley o cuan- tensión es exclusivamente
do éstos representen el control de la legalidad en
un interés para la abstracto del acto.
comunidad (doctrina
de 1996).

C-207/2003 Consejo de Art. 17 El recurso extraordi- Respaldo El recurso extraordinario de Exequibilidad


Escobar Estado L.144/1994 nario de revisión para revisión también procede condicionada
las sentencias sobre para todas las sentencias
pérdida de investi- ejecutoriadas antes de la
dura puede incoarse vigencia de la L. 446/1998,
dentro de los cinco incluidas las proferidas con
años siguientes a su anterioridad a la vigencia de
ejecutoria en procesos la L. 144/1994, y el térmi-
posteriores al 19 de no de caducidad de cinco
junio de 1994 (cuando años se cuenta a partir del
entra en vigencia la 8 de julio de 1998, fecha de
ley). publicación de esta última
ley.

C-1093/2003 Ministerio de Art. 27 L. Los exámenes de Respaldo Los exámenes de Estado Exequibilidad
M.P.: Alfredo Educación 39/1992 Estado deben hacerse no se pueden realizar a condicionada
Beltrán Sierra Nacional incluso a estudiantes estudiantes egresados de
de programas acadé- programas académicos no
micos sin registro o no aprobados ni registrados por
reconocidos. El efecto el Estado, solo de aquellos
es que con el examen que no están vigentes.
se puede convalidar
dichos programas.

C-569/2004 Consejo de Arts. 3, 46.48. La acción de grupo Respaldo Es inconstitucional exigir Inexequibilidad
Rodrigo Estado L. 472/1998 es procedente cuando la preexistencia del grupo parcial de la
Uprimny este es preexistente frente al daño, aunque disposición
Yepes (e) y reúne condiciones esta sea una interpretación
uniformes respecto al plausible, por eso la parte
daño. de la disposición demandada
de la que deriva este
entendimiento.

T-836/04 Consejo de Aplicación de la La acción de nulidad Sin inter- La acción de nulidad proce- Revoca decisión
M.P.: Marco Estado C-426/2002 no procede contra vención de contra actos particulares del Consejo de
Gerardo MP: Rodrigo actos particulares y si su pretensión es el control Estado y ampa-
Monroy Cabra Escobar Gil no procede la tutela de legalidad abstracto. Esta ra derechos del
contra providencias subregla es de obligatorio demandante
judiciales. cumplimiento e incurren
envía de hecho los jueces
que no la acaten, caso en
el que procede la acción de
tutela.

(Continúa)

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Tabla 3. Declaraciones de invalidez constitucional del derecho viviente. (Continuación)


Decisión Autoridad Disposición Norma Ministerio Sentido de la decisión Resolución
Controlada (Interpretación que Público
constituye Derecho
viviente)

C-645/2012 Corte Su- Art. 53 L. Dos interpretaciones No evoca La rebaja de pena (1/4) Exequibilidad
M.P.: Nilson prema de 1453/2011 de la csJ: a) La rebaja la teoría debe extenderse a todas las Condicionada
Pinilla Pinilla Justicia Mod. Art. 301 de pena (1/4 parte) pero oportunidades procesales en
L. 906/2004 cuando hay flagrancia respalda la las que es posible al sorpren-
Código Penal aplica solo en la im- exequibili- dido en flagrancia allanarse
putación. b) La misma dad condi- a cargos y suscribir acuerdos
rebaja aplica en todas cionada. con la Fiscalía General de la
las etapas procesales. Nación.

C-258/2013 Corte Su- Art. 17 L. Varias interpretaciones No evoca Interpretaciones ajustadas Inequibilidad
M.P.: Jorge prema de 4/1992 sobre pensiones de la teoría, a la Constitución: a) No parcial y
Ignacio Pretelt Justicia congresistas: a) Exten- pero se extiende el régimen de exequibilidad
Chaljub sión de los beneficios respalda la transición a los no afiliados condicionadas.
del régimen de transi- interpreta- porque viola el principio de
ción a los afiliados no ción de la igualdad; b) el IBL se calcula
afiliados al régimen csJ. solo con los factores con los
especial; b) Calcular que efectivamente se cotizó,
el Ingreso Base de con todos los ingresos viola
Liquidación según los el principio de solidaridad; c)
ingresos del último Las prestaciones se liquidan
año de servicios; c) con el promedio general
Liquidar todas las (10 años); d) El ajuste anual
prestaciones con base sigue la regla general (la
en dicho IBL; d) Ajuste variación del Ibc); e) 25
anual según el aumen- smlmv es el tope establecido
to del salario mínimo; en el AL 1/2005 y debe ser
e) No hay topes para aplicado por los jueces.
las mesadas.

T-265/2013 Consejo de Arts. 54, 55 El llamado a calificar Sin inter- El llamado a calificar servi- Confirma
M.P.: Jorge Estado N.º 2, 57 D. servicios en la Policía vención cios en la Policía Nacional parcialmente y
Iván Palacio 1791/2000 Nacional es una facul- es una facultad discrecional ampara parcial-
tad discrecional abso- relativa y requiere motiva- mente.
luta y que no requiere ción.
motivación.

C-390/2014 Corte Su- Art. 317 L. El vencimiento del No evoca La formulación de acusación Exequibilidad
M.P.: Alberto prema de 906/2004 Có- término de 120 la teoría, es un acto complejo que ini- condicionada
Rojas Ríos Justicia digo de Procedi- días como causal de pero apoya cia desde la presentación del
miento Penal. libertad se cuentan a la exequi- escrito de acusación, por eso
partir de la audiencia bilidad con- desde dicha presentación
de formulación de dicionada debe contarse el término de
acusación. contra la 120 días como causal de
interpreta- libertad.
ción de la
csJ.

Fuente: Elaboración del autor.

Bogotá, D.C., Colombia - Volumen XXI - No. 42 - Julio - Diciembre de 2018 - ISSN 0121-182X 119
SUPREMACÍA JUDICIAL: EL CONTROL CONSTITUCIONAL DEL DERECHO… Prolegómenos - Derechos y Valores

en doctrinas como la acción de tutela contra particular efectuada con base en esta por parte
providencias judiciales la Corte Constitucional del Consejo de Estado en 1996 (T-836/2004,
se pronunció en forma continua y reiterada en Aclaración de Voto). Esta aclaración fue ratifi-
contra de la interpretación de las otras altas cada posteriormente usando la distinción entre
cortes hasta que sus marcos argumentativos disposición y norma, no solo para especificar
fueron aceptados (Cruz Rodríguez, 2018), la qué contenido normativo era inconstitucional
intervención constitucional para declarar la in- sino para justificar la ausencia de cosa juzgada
validez sobre el derecho viviente ha tenido un material (C-259/2015). Para algunos doctri-
carácter restringido. No obstante, la potencia nantes esta controversia constituyó un verda-
de la doctrina para justificar la intervención ha dero choque de trenes, en la medida en que
sido efectiva en estos casos. no hubo claridad sobre el alcance de la decla-
ración de invalidez hasta que se produjo dicha
Por ejemplo, la controversia más destacada ratificación (Aranda, 2006; Bornacellu, 2012;
fue la primera declaración de exequibilidad Sánchez Baptista, 2015).
condicionada sobre la procedencia de acción
de nulidad sobre actos particulares, la cual ope- Otro ejemplo, claramente estratégica pero menos
ró respecto a una de las interpretaciones del controversial, fue la interpretación de la preexis-
Consejo de Estado con base en la teoría de los tencia del grupo como requisito de procedencia
motivos y finalidades (C-426/2002). La Corte para incoar la acción de grupo, según la inter-
Constitucional consideró que la interpretación pretación del Consejo de Estado (C-569/2004).
del Consejo de Estado, que restringía la pro- En esta decisión, la Corte consideró que la dis-
cedencia de la acción de nulidad contra actos posición era ambigua y se prestaba para varias
de contenido particular, a casos en los que lo interpretaciones plausibles, dentro de la que se
indicara la ley o cuando estos representen un encontraba la realizada por el Consejo de Estado.
interés para la comunidad, era una violación Es decir, pese a que la interpretación efectuada
de la Constitución. En su lugar, estableció que por el Consejo de Estado era inconstitucional,
la interpretación constitucional de la disposi- constituía una opción hermenéutica posible. Sin
ción acusada habilitaba el uso de la acción de embargo, antes que achacar el problema a la in-
nulidad cuando la pretensión es exclusivamen- terpretación judicial y pronunciarse directamente
te el control de la legalidad en abstracto sobre sobre el derecho viviente, pues se trataba de una
el acto. Por su parte, el Ministerio Público se interpretación dominante, la Corte Constitu-
opuso a la doctrina del derecho viviente, por cional decidió retirar del ordenamiento algunas
considerar que el sentido normativo fijado por expresiones de la disposición constitucional que
el Consejo de Estado respecto a la aplicación supuestamente producían la ambigüedad. De
de una norma legal no podía ser objeto de con- esa manera, dejó sin sustento la interpretación
trol por parte de la Corte Constitucional (C- del Consejo de Estado sin atacarla directamente,
426/2002. Concepto del Procurador General en la medida en que atribuyó a dicho fragmento
de la Nación. F. J. V.). de la disposición la causa del sentido normativo
inconstitucional.
El Consejo de Estado se negó, inicialmente,
a aceptar la interpretación de la Corte Cons- Declaraciones de invalidez como estas se die-
titucional y su negativa fue atacada por el ron en cinco oportunidades contra las inter-
demandante mediante acción de tutela por pretaciones del Consejo de Estado, tres contra
desconocer el precedente constitucional (T- las interpretaciones de la Corte Suprema de
836/2004). La aclaración de voto de dicha Justicia y solo una frente a una autoridad no
decisión permitió dilucidar que no se decla- judicial: el Ministerio de Educación Nacional.
raba inexequible en su integridad la teoría de En estas decisiones la Corte Constitucional ad-
los motivos y finalidades sino la interpretación mitió las demandas contra las interpretaciones,

120 Bogotá, D.C., Colombia - Volumen XXI - No. 42 - Julio - Diciembre de 2018 - ISSN 0121-182X
MICHAEL CRUZ RODRÍGUEZ Prolegómenos - Derechos y Valores

aceptándolas como derecho viviente, pues todo, la aplicación de la doctrina del derecho
otorgaban sentido normativo a las disposicio- viviente también ha producido una serie de
nes legales. Posteriormente, fijó dicho sentido ambigüedades sobre el uso de la distinción
normativo o norma strictu sensu para pro- entre disposición y norma y sobre la com-
ceder a aplicar el juicio de constitucionalidad petencia de la propia Corte Constitucional.
sobre ella, identificando las interpretaciones
divergentes y fijando aquella que se ajustaba
a la Constitución. De esta manera, reivindicó B. Claridad y ambigüedad
su supremacía judicial para efectuar el control estratégicas
constitucional sobre el derecho viviente.
La vaguedad en las decisiones judiciales ha sido
En la tabla 3 se sistematizan las declaraciones catalogada como un factor que permite a las
de invalidez constitucional del derecho viviente cortes maniobrar en situaciones de incertidum-
realizadas por la Corte Constitucional y el re- bre política y liberarse de presiones externas
chazo de interpretaciones judiciales en ejerci- (Staton y Vanberg, 2008). Precisamente, una
cio del control concreto por vía de tutela. decisión vaga tiene menores probabilidades de
implementación que una decisión clara, pues
En suma, la distinción entre disposición y nor- esta última eleva las probabilidades de una res-
ma es un asunto iusfilosófico de alcance po- puesta positiva por parte de otros actores; es-
lítico, en términos de su uso estratégico en pecialmente, de los actores judiciales frente a
ámbitos como el control constitucional del decisiones ciertas (Corley y Wedeking, 2014).
derecho viviente. En ese sentido, la jurispru- De ahí que el uso de la distinción entre dispo-
dencia de la Corte Constitucional ha usado la sición y norma, a la hora de evaluar el derecho
doctrina del derecho viviente —fundada en di- viviente, pueda interpretarse como estratégica
cha distinción— para extender su poder sobre según su claridad y según la respuesta que pre-
otros jueces y sobre la comunidad jurídica, rei- tenda de parte de los actores políticos y judi-
vindicando su supremacía judicial como guar- ciales.
diana de la Constitución. De esa manera, ha
establecido el significado del derecho viviente Para el caso del control constitucional del dere-
como una interpretación sólida, consistente y cho viviente por parte de la Corte, interpretar
relevante para determinar el sentido normativo el uso de la distinción implica comprender el
de las disposiciones, y ha fijado una serie de sentido estratégico de sus declaraciones de va-
requisitos de idoneidad para los cargos por in- lidez constitucional sobre la jurisprudencia de
constitucionalidad que pretendan atacarlo. las otras cortes. Esto es, la manera en que la
supremacía judicial de la Corte ha evoluciona-
La doctrina del derecho viviente, sin embar- do gracias al apoyo o validación de las doc-
go, solo se ha usado para invalidar las in- trinas legales de las otras cortes antes que a
terpretaciones de otras cortes en un 15,2% la confrontación con estas y la declaración de
(nueve casos de un total de 59 decisiones invalidez de su jurisprudencia. Se trata de deci-
sobre el particular) durante un periodo de siones claras y ciertas que se aplican en forma
17 años. Lo anterior permite inferir que la vertical, justamente reconociendo el poder de
doctrina se ha consolidado sobre la base de revisión de la Corte Constitucional. Al tiempo,
legitimar las interpretaciones legales antes el uso de la distinción ha planteado algunas
que sobre su invalidación por vía del control ambigüedades estratégicas frente al alcance
constitucional. De esta manera, la Corte ha del control constitucional respecto a la comu-
evitado la confrontación con los jueces, pero nidad jurídica y a la aplicación del concepto de
ganando estratégicamente soporte dentro de derecho viviente sobre la jurisprudencia intera-
ellos como ejecutores de sus decisiones. Con mericana.

Bogotá, D.C., Colombia - Volumen XXI - No. 42 - Julio - Diciembre de 2018 - ISSN 0121-182X 121
SUPREMACÍA JUDICIAL: EL CONTROL CONSTITUCIONAL DEL DERECHO… Prolegómenos - Derechos y Valores

I. Una interpretación del sentido ratio decidendi y solo en una de ellas fue men-
estratégico de la validez constitucional cionada en forma colateral como obiter dicta.

La jurisprudencia sobre el control constitucio- Lo que evidencia la reiteración de la doctrina


nal del derecho viviente evidencia que la Corte del derecho viviente mediante las decisiones de
usó la distinción entre disposición y norma de inhibición y las de exequibilidad simple o con-
manera frecuente para validar las interpreta- dicionada (67,7%)3, es que el sentido de la va-
ciones de otras cortes y ganar, por esta vía, la lidación constitucional de las interpretaciones
aceptación de su poder de revisión. Los ele- judiciales consolidó el poder de revisión de la
mentos definitorios del derecho viviente, y los Corte Constitucional sin mayores confronta-
requisitos de idoneidad de los cargos de cons- ciones con las otras cortes. La Corte ha cons-
titucionalidad en su contra, fueron usados para truido estratégicamente sus propias bases de
afirmar que la interpretación judicial no era soporte judicial, respaldando, en la mayoría de
consistente, sólida y relevante para determinar los casos, la jurisprudencia legal o abstenién-
el significado normativo, por lo cual el examen dose de juzgarla. Esta construcción contó con
de constitucionalidad no era competencia de el apoyo o la aquiescencia de la Procuraduría,
la Corte (Inhibición-C); o que el demandante institución que solo se opuso a su poder de re-
no distinguía con eficacia entre disposición y visión en dos casos (3,3%).
norma por no llenar los requisitos de claridad,
certeza, especificidad, pertinencia y suficiencia En la tabla 4 se sistematizan todas las deci-
(Inhibición-D). En total, fueron 19 decisiones siones judiciales en las que la Corte ha hecho
de inhibición (32,2%) en las que se reiteró mención de la doctrina del derecho viviente,
el poder de revisión excepcional de la Corte las cuales sirven de evidencia empírica a la hi-
Constitucional y se definieron los contornos de pótesis planteada. Para ello, se destaca, en pri-
la doctrina del derecho viviente. mer lugar, el tipo de uso: en la tercera columna
se describe si el uso de la doctrina se realizó
El respaldo sin confrontaciones directas tam- como parte de la ratio decidendi (RD), si cons-
bién se dio mediante la declaratoria de validez tituyó obiter dicta (OD) o si fue usada como
del derecho viviente en veintiún decisiones de parte de algún salvamento (SV) o aclaración de
constitucionalidad (35,5%). Once decisiones voto (AV); en la misma columna se identifica
(18,6%) declararon la exequibilidad simple (e) si el uso validó el derecho viviente de las otras
de las disposiciones reconociendo, a su vez, la cortes (V) o si lo invalidó como una interpreta-
validez constitucional de las interpretaciones ción errónea (Inv.).
judiciales efectuadas sobre estas. Diez deci-
siones (16,9%) condicionaron la exequibilidad En segundo lugar, se indica la posición de la
sin entrar a reñir con la interpretación judicial Procuraduría General de la Nación (Ministerio
dominante (EC)2. En todas estas decisiones, la Público), como un actor que ha tenido gran in-
doctrina del derecho viviente hizo parte de la fluencia de las decisiones de la Corte y cuya
intervención es obligatoria en los procesos de
constitucionalidad; y que también ha tenido un
2
Este porcentaje podría aumentar: 20,3% para exequi- peso importante en las decisiones de la Corte
bilidad simple y 18,6% para exequibilidad condicio- (Rodríguez Raga, 2011), sea por su apoyo (A)
nada, si se incluye dentro del cálculo la exequibilidad
condicionada en la C-258/2013 Pretelt y la exequibi-
al uso de la doctrina como forma de control
lidad simple de la C-193/2016 Vargas Silva, las cua- constitucional, sea por su oposición (O) a la
les fueron incluidas dentro del grupo de decisiones de
inexequibilidad por contener este tipo de declaracio-
nes, a pesar de que sus argumentos validan el derecho
3
viviente de las otras cortes. De este modo, el respaldo Si se incluyen las dos decisiones mencionadas en la
se elevaría al 38,9% de las decisiones. nota anterior, este porcentaje subiría a 71,1%.

122 Bogotá, D.C., Colombia - Volumen XXI - No. 42 - Julio - Diciembre de 2018 - ISSN 0121-182X
MICHAEL CRUZ RODRÍGUEZ Prolegómenos - Derechos y Valores

intervención judicial de la Corte, o sea por no y, tampoco, que el uso de la teoría no haya
debatir la competencia de la Corte sino, direc- contado con debates entre ellos en torno a su
tamente, la constitucionalidad de la disposición significado en el ámbito jurídico. De hecho, al-
acusada (N). Finalmente, se indica el resultado gunos salvamentos y aclaraciones de voto lla-
que se observó en la parte resolutiva de la deci- maron la atención sobre el uso conveniente de
sión, según haya sido inexequibilidad de la dis- la distinción entre disposición y norma, deba-
posición (I), exequibilidad de la disposición (e) tieron el alcance del control constitucional so-
o exequibilidad condicionada (EC); y, en último bre el derecho viviente y la aplicación de dicho
término, inhibición respecto al cargo por falta concepto a la jurisprudencia interamericana.
de competencia (Inhibición-C) —cuando reco- De ese modo, se evidenciaron las perplejida-
noce la competencia de los jueces ordinarios o des interpretativas en el uso de la distinción en-
las cortes sobre el particular—, o por ineptitud tre disposición y norma y la consistencia de la
de la demanda —cuando los cargos presenta- aplicación de la doctrina del derecho viviente,
dos no cumplen con los requisitos de idoneidad incluso en las decisiones de inhibición.
(Inhibición-D)—.
Por ejemplo, ante la demanda contra la inter-
Con todo, no puede afirmarse que el sentido pretación del Consejo de Estado sobre la inter-
estratégico coincida en todos los casos con pretación del monto de la pensión de vejez en
las intenciones personales de los magistrados el régimen de transición respecto a los emplea-

Tabla 4. Uso de la doctrina del derecho viviente para ejercer control de constitucionalidad.

Decisión Autoridad controlada Tipo de uso Ministerio Resolución


Público

C-1436/2000 Consejo de Estado RD-V A EC


Beltrán

C-557/2001 Consejo de Estado RD-V N e


Cepeda

C-955/01 Consejo de Estado RD-V O Inhibición-C


Monroy

C-1294/01 n/a AV-V N Inhibición-C


Monroy

C-426/02 Consejo de Estado RD-Inv. O EC


Escobar

C-207/03 Consejo de Estado RD-Inv. A EC


Escobar

T-666/03 Corte Suprema de Justicia RD-V Sin Confirma


Monroy intervención

C-875/03 Corte Suprema de Justicia RD-V N EC


Monroy

C-901/03 Doctrina Especializada RD-V N Inhibición-D


Escobar

(Continúa)

Bogotá, D.C., Colombia - Volumen XXI - No. 42 - Julio - Diciembre de 2018 - ISSN 0121-182X 123
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Tabla 4. Uso de la doctrina del derecho viviente para ejercer control de constitucionalidad. (Continuación)

Decisión Autoridad controlada Tipo de uso Ministerio Resolución


Público

C-1114/03 Consejo de Estado SV- V N Inhibición-D


Córdoba

C-043/04 Consejo de Estado RD-V N e


Monroy

C-1093/03 Ministerio de Educación Nacional RD-Inv. A EC


Beltrán

C-048/04 Corte Suprema de Justicia RD-V N Inhibición-C


Beltrán

C-459/04 Consejo de Estado RD-V N e


Araújo

C-569/04 Consejo de Estado RD-Inv. A I


Uprimny (e)

T-836/04 Consejo de Estado RD-Inv. Sin Ampara


Monroy intervención

A103/05 Corte Suprema de Justicia RD Sin Rechaza súplica


Sierra intervención

T951/05 Consejo de Estado RD-V Sin Revoca y rechaza


Sierra intervención

A196/05 Tribunal Sala Penal RD Sin Rechaza súplica


Monroy intervención

C-987/05 Superintendencia Bancaria OD N Inhibición-D


Sierra

C-038/06 Consejo de Estado RD-V N e


Sierra

A148/06 Corte Suprema de Justicia RD Sin Rechaza súplica


Tafur intervención

T-389/06 Corte Suprema de Justicia RD-V Sin Revoca parcial y


Sierra intervención ampara

T-579/06 Corte Suprema de Justicia OD-V N Revoca y ampara


Cepeda

C-803/06 Consejo de Estado RD A Inhibición-D


Córdoba

T-950/06 Corte Suprema de Justicia RD-V Sin Confirma


Monroy intervención

C-158/07 n/a RD N Inhibición-D


Sierra

C-187/08 Jurisdicción penal RD N Inhibición-D


Sierra

(Continúa)

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Tabla 4. Uso de la doctrina del derecho viviente para ejercer control de constitucionalidad. (Continuación)

Decisión Autoridad controlada Tipo de uso Ministerio Resolución


Público

T-248/08 Consejo de Estado RD-V Sin Revoca y ampara


Escobar intervención

C-802/08 Corte Suprema de Justicia RD A Inhibición-D


Vargas
Hernández

C-1086/08 Corte Suprema de Justicia RD-V N e


Córdoba

C-1122/08 Corte Suprema de Justicia RD-V N Inhibición-C


Escobar

C-309/09 Corte Suprema de Justicia RD A Inhibición-D


Mendoza

C-637/09 Corte Suprema de Justicia RD-V N e


González

C-842/10 Corte Suprema de Justicia RD-V A Inhibición-D


González

A072/11 Corte Suprema de Justicia RD Sin Rechaza nulidad


González intervención

C-442/11 Corte Suprema de Justicia RD-V A e


Sierra

C-539/11 Altas Cortes RD-V N EC


Vargas Silva

C-249/12 Legislativo OD N I
Henao

C-491/12 Corte Suprema de Justicia RD-V N EC


Vargas Silva

C-645/12 Corte Suprema de Justicia RD-Inv. N EC


Pinilla

C-893/12 Comunidad Jurídica RD-V N e


Guerrero

C-258/13 Corte Suprema de Justicia RD-Inv. N I+EC


Pretelt

T-265/13 Consejo de Estado RD-Inv. Sin Confirma


Palacio intervención parcialmente
y ampara
parcialmente

C-304/13 Consejo de Estado-Dirección de RD A Inhibición-C


Mendoza Impuestos y Aduanas Nacionales

C-390/14 Corte Suprema de Justicia RD-Inv. N EC


Rojas

(Continúa)

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Tabla 4. Uso de la doctrina del derecho viviente para ejercer control de constitucionalidad. (Continuación)

Decisión Autoridad controlada Tipo de uso Ministerio Resolución


Público

C-418/14 Superintendencia Financiera, Consejo RD-V A Inhibición-D


Calle de Estado, Corte Suprema de Justicia y
Procuraduría General de la Nación

C-635/14 Corte Suprema de Justicia RD-V A e


Mendoza

C-259/15 Consejo de Estado RD-V A e


Ortiz

C-284/15 Fuentes del derecho OD N e


González

C-354/15 Consejo de Estado RD A Inhibición-D


Mendoza

C-621/15 Consejo de Estado RD N Inhibición-D


Pretelt

C-623/15 Consejo de Estado SV N I


Rojas

C-183/16 Ministerio de Tecnologías de la OD N Inhibición-D


Calle Información y las Telecomunicaciones y
Procuraduría General de la Nación

C-193/16 Corte Suprema de Justicia RD-V A e+I


Vargas Silva

SU-214/16 Legislativo-Rama Judicial OD N Revoca y ampara


Rojas

C-221/16 Legislativo OD N I
Rojas

C-136/17 Autoridad Nacional de Televisión RD A Inhibición-D


Linares

C-344/17 Corte Suprema de Justicia RD-V N EC


Linares

Fuente: Elaboración del autor.

dos públicos, la Corte constitucional se decla- conjueces. A su vez, contó con una ponencia
ró inhibida por considerar que la demanda no inicial que no logró alcanzar la mayoría y una
cumplía con los requisitos (C-354/2015). Se segunda ponencia que sí lo hizo.
trató de la discusión sobre un asunto que había
sido previamente tratado con quórum insufi- Una conjueza aclaró el voto pese a compartir
ciente y que condujo a declarar la nulidad de el resultado de la decisión (C-354/2015, acla-
esa primera decisión (C-825/2013); debien- ración de voto). A su juicio, el demandante
do ser nuevamente debatida por siete magis- no debía estar obligado a demostrar la exis-
trados, dentro de los que se contaban cuatro tencia del derecho viviente y tener la carga

126 Bogotá, D.C., Colombia - Volumen XXI - No. 42 - Julio - Diciembre de 2018 - ISSN 0121-182X
MICHAEL CRUZ RODRÍGUEZ Prolegómenos - Derechos y Valores

de la prueba, toda vez que la reiteración de la Corte ha recurrido a la alocución derecho vi-
interpretación demandada ya había sido acre- viente —diritto vivente— no solo como sinó-
ditada por el magistrado ponente inicial. En nimo de una interpretación consistente, sólida
tal sentido, el argumento de la Corte, según el y relevante para determinar el significado de
cual el demandante solo había citado una sen- real de las disposiciones jurídicas, sino también
tencia, se tornaba superfluo e imponía cargas como posibilidad de pronunciarse nuevamente
al demandante que contradicen el sentido pú- sobre los mismos preceptos normativos, cuan-
blico de la acción. do “ocurran cambios intempestivos de orden
extrajurídico (económicos, sociales, políticos,
El salvamento de voto fue más crítico en rela- culturales, etc.)” (C-221/2016). Este últi-
ción con el uso acomodaticio de la distinción mo sentido remite, más bien, al concepto de
entre disposición y norma jurídica. Sostuvieron Constitución Viviente, según el cual la Cons-
los disidentes que, en vez de distinguir las inter- titución debe materialmente adaptarse a los
pretaciones plausibles y juzgar la constituciona- cambios sociales y, por eso, la determinación
lidad de aquella dominante, “La Sala Plena, en de cosa juzgada debe ser relativamente flexible
cambio, plantea una distinción artificiosa entre (C-570/2012; SU-047/1999; C-774/2001;
el escrutinio judicial de los textos legales, y el C-836/2001; C-539/2011)4.
control de las interpretaciones de los referidos
textos” (C-354/2015, salvamento de voto). Adicionalmente, el concepto de derecho vi-
De manera que la mayoría decidió abstenerse viente tiene diversos significados en el ámbito
de ejercer control, con el argumento de que de la teoría y la sociología jurídica, que no se
existían varias interpretaciones y que el deman- circunscriben a la distinción analítica entre dis-
dante no probó que una de ellas fuera derecho posición y norma. Tal y como lo trató de expo-
viviente; aunque, en otras decisiones con car- ner uno de los magistrados en un salvamento
gos mal dirigidos, como se verá en el siguiente de voto reiterado (Salvamentos de voto a las
apartado, la Corte sí se había dedicado a identi- sentencias C-901/03 y C-043/04), el derecho
ficar por su cuenta la interpretación dominante. viviente se remonta a la obra sociológico-jurídi-
ca de Eugene Erlich, quien intentó dar al dere-
Dos elementos adicionales fueron objeto de cho un tratamiento de hecho social que puede
controversia en salvamentos y aclaraciones de ser explicado causalmente. Según el disidente,
voto, dada la ambigüedad que para algunos dicha pretensión se desvaneció ante la crítica
significó la definición y el alcance de la doctrina de Kelsen, en la medida en que no se puede
del derecho viviente: el control constitucional inferir el deber ser —el derecho— del ser —los
sobre la comunidad jurídica y la obligatoriedad hechos sociales—; de modo que no es meto-
de un derecho convencional viviente interame- dológicamente adecuado equiparar derecho y
ricano para la propia Corte Constitucional. realidad social, pues el control constitucional
no puede depender de cómo se realizan las co-
sas en la práctica.
II. ¿Control sobre la
comunidad jurídica? Con base en este excurso, el disidente pareció
mostrarse de acuerdo en que se realizara con-
Un aspecto crítico del uso de la doctrina del trol sobre el derecho viviente entendido como
derecho viviente ha sido su alcance sobre la la manera en que es aplicado constantemente.
comunidad jurídica, pues, pese al sentido
atribuido por la jurisprudencia de la Corte
4
Constitucional —explicado en apartados an- En Norteamérica este concepto ha sido objeto de
gran debate, como un lugar común en torno a cómo
teriores—, la Corte también ha hecho otros se debe interpretar la Constitución (Dodson, 2008;
usos de los mismos significantes. En efecto, la Strauss, 2011; Fleming, 2014).

Bogotá, D.C., Colombia - Volumen XXI - No. 42 - Julio - Diciembre de 2018 - ISSN 0121-182X 127
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Pero, difirió con la Corte en relación con la definir el sentido de la Constitución. Incluso, en
extensión de este control a la interpretación y aras de evitar la confrontación, privilegió la in-
aplicación más allá del ámbito judicial. En sus terpretación de las cortes nacionales respecto a
palabras: “No es cierto, como se afirma, que el la de la Corte Interamericana de Derechos Hu-
concepto de derecho viviente cobije cualquier manos (Corte Idh), manteniendo relativamente
interpretación de cualquier operador jurídico, esas interpretaciones bajo su control.
pues solo se refiere a la interpretación consoli-
dada que hacen los jueces; quedando excluida
la interpretación que hacen otros aplicadores III. ¿Derecho convencional viviente?
del derecho y con mayor razón se excluye la in-
terpretación que hacen los doctrinantes, pues En una decisión judicial que declaró la exe-
éstos no son aplicadores de normas jurídicas quibilidad simple (C-442/2011), se pudo ob-
sino comentaristas de las mismas” (Salvamen- servar la supremacía judicial reclamada por
tos de voto a las sentencias C-901/2003 y la Corte Constitucional mediante la doctrina
C-043/2004). del derecho viviente, incluso por encima de
la jurisprudencia interamericana. Este contra-
Igualmente, vale la pena indicar que, en otra dictorio reclamo, en términos de los derechos
decisión judicial, el juicio sobre el derecho humanos, quedó registrado en los salvamen-
viviente de la comunidad jurídica derivó apa- tos de voto de una magistrada y un magistrado
rentemente en el control constitucional sobre (C-442/2011, salvamentos de voto del magis-
“entendimientos admisibles del precepto” o trado Juan Carlos Henao Pérez y de la magis-
hipótesis hermenéuticas, a pesar de que los trada María Victoria Calle Correa). La cuestión
cargos del demandante se dirigieran contra debatida, según los disidentes, fue la validación
una interpretación descartada por la Corte de la jurisprudencia de la Corte Suprema de
Constitucional (C-893/2012). En efecto, en Justicia en contra de la interpretación de la
esta decisión la Corte avocó el análisis del Corte Idh, la cual implicaba lo contrario y era
“malentendido” planteado por el demandan- obligatoria como derecho convencional vivien-
te y efectuó el control constitucional sobre los te para la propia Corte Constitucional.
entendimientos admisibles de la disposición.
Primero recurrió a la interpretación textual, En efecto, se demandaron las disposiciones
finalista o teleológica, contextual y sistemática que establecen los delitos de calumnia e inju-
de la disposición, para evaluar si era de recibo ria, por considerarse restricciones ilegítimas a
la interpretación del demandante. Posterior- la libertad de expresión y violar el principio de
mente, se basó en la comunidad jurídica, inte- legalidad estricta. En sustento de los cargos se
grada, en ese caso, por la interpretación de la citó jurisprudencia de la Corte Idh, particular-
Fiscalía General de la Nación, una decisión de mente el caso Eduardo Kimel Vs. Argentina,
un juzgado penal municipal y la jurisprudencia en el que disposiciones similares fueron consi-
de la Corte Suprema de Justicia, para indicar deradas insuficientes para cumplir el requisito
que esa interpretación era dominante y consti- de estricta formulación y así fue aceptado por
tuía derecho viviente. el Estado argentino. Según el demandante, los
términos en que están formulados los delitos
Lo anterior evidencia que la Corte estratégica- no acotan claramente las conductas punibles,
mente identificó el derecho viviente motu pro- permitiendo que con ello se persigan opinio-
prio en algunos casos; mientras que, en otros, nes disidentes.
se abstuvo de hacerlo con el fin de no entrar en
confrontaciones en el ejercicio de su poder de Para la Corte Constitucional, por el contra-
revisión. De esa manera, mantuvo la supremacía rio, su interpretación, y aquella realizada por
judicial y se apropió de la última palabra para la Corte Suprema de Justicia, había “desarro-

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llado” los elementos de aquellos tipos penales dos por la jurisprudencia nacional. Este senti-
incluso con anterioridad a la Constitución de do normativo constituye derecho convencional
1991. Aun cuando reconoció, al inicio de su viviente, en la medida en que es una interpre-
argumentación, que la jurisprudencia de la tación consistente, sólida y relevante por parte
Corte Idh es un criterio relevante como pará- de la Corte Idh, de la Comisión Idh y de la doc-
metro de control de constitucionalidad, afirmó trina internacional más autorizada. Así, se ha
que, el caso argentino consolidado en casos como el Ricardo Canese
contra Paraguay y Kimel contra Argentina y
aunque constituye un precedente significa- en las interpretaciones de la Relatoría Especial
tivo en torno al alcance de la libertad de para la Libertad de Expresión de la Comisión
expresión y del principio de legalidad en la Idh. La disidente propuso la exequibilidad dife-
tipificación de los delitos de injuria y calum- rida hasta que el legislativo precisara el alcance
nia, esta decisión no puede ser trasplan- de los delitos de conformidad con este derecho
tada automáticamente al caso colombiano convencional viviente.
en ejercicio de un control de convenciona-
lidad que no tenga en cuenta las particula- El otro magistrado disidente se adhirió a los
ridades del ordenamiento jurídico interno. anteriores argumentos, pero añadió a sus crí-
(C-442/2011) ticas el hecho de que la Corte cambió injustifi-
cadamente de precedente mediante una pobre
Así, validó la interpretación de la Corte Supre- estructura argumentativa. Para el disidente, la
ma de Justicia como derecho viviente, en vez Corte acudió a una argumentación falaz e in-
de despenalizar esas conductas como lo indi- consistente sobre el derecho viviente para justi-
can los esfuerzos del sistema interamericano ficar su decisión. En sus fuertes términos:
de derechos humanos.
Y es una interpretación estrecha y falaz
Las fuertes críticas de la magistrada disidente en la relación de causalidad que emplea,
se refirieron a los elementos definitorios del porque con muy pocas razones llega a una
derecho viviente que, supuestamente, la Corte conclusión tan decisiva para la democracia,
Constitucional identificó en la jurisprudencia el respeto y protección de la pluralidad y la
de la Corte Suprema de Justicia; así como a igualdad de oportunidades, pero también
la obligatoriedad del derecho convencional vi- la libertad del conocimiento (arts. 1º, 3º,
viente que no fue tenido en cuenta. En primer 40-2º infine, 70 a 73 y 75 C.P.), según la
lugar, la disidente criticó la escasa argumenta- cual no se vulnera la libertad de expresión
ción de la Corte para demostrar los requisitos con los artículos 220 y 221 del Código
de consistencia, solidez y relevancia. Especial- Penal. Esto es, que la sanción de carácter
mente, porque la argumentación se basó en penal del sólo decir, del uso de la palabra
decisiones que, en su mayoría, proceden del o simple expresión de una persona, por
siglo XIX y XX, es decir, anteriores a la Consti- el contenido de ese decir, está acorde la
tución de 1991: lo que resulta contradictorio, Constitución, no por cumplir con las exi-
pues la interpretación de dichas disposiciones gencias de la regulación penal, sino por un
ha tenido importantes variaciones y no se ha conejo en el sombrero: “los desarrollos
mantenido como dominante durante cien años. de la jurisprudencia en torno a sus ele-
mentos normativos” (C-442/2011, salva-
En segundo lugar, la magistrada afirmó que mento de voto del magistrado Juan Carlos
existe un derecho convencional viviente, según Henao Pérez).
el cual las restricciones a la libertad de expre-
sión por vía de los tipos penales vulneran la En suma, la claridad y la ambigüedad en el uso
carta interamericana, así hayan sido precisa- de la distinción entre disposición y norma en

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que se basa la doctrina del derecho viviente Los elementos definitorios del derecho viviente
han tenido un uso estratégico por parte de la son la consistencia, la solidez y la relevancia de
Corte Constitucional. Así puede ser interpre- las interpretaciones para determinar el sentido
tado el sentido de la validez constitucional so- o contenido normativo de las disposiciones le-
bre la jurisprudencia de las otras altas cortes, gales. En relación con estos elementos, para
en aras de consolidar su poder de revisión y que un cargo sea idóneo y pueda ser objeto
obtener el soporte judicial para sus decisiones. de pronunciamiento constitucional, requiere
Con todo, la discusión entre los magistrados cumplir con una mayor y más especial carga
ha demostrado que, en el interior de la Corte, argumentativa en términos de claridad, certe-
existen aspectos debatibles sobre la coheren- za, especificidad, pertinencia y suficiencia de
cia de la doctrina, tales como su extensión a la las razones de inconstitucionalidad.
comunidad jurídica o la obligatoriedad del de-
recho convencional viviente, discusiones que Con base en estas exigencias conceptuales y
solo tienen protagonismo en los salvamentos argumentativas, la Corte ha usado la distinción
o aclaraciones de voto. entre disposición y norma para respaldar la ju-
risprudencia ordinaria o abstenerse de juzgarla
por ineptitud de la demanda. La Corte se in-
Conclusiones hibió respaldando la competencia de las otras
cortes, o arguyendo la no idoneidad de los car-
Este artículo se propuso contribuir a la com- gos en un 32,2% de los casos, mientras que en
prensión de la expansión del poder judicial de un 35,5% mediante decisiones de constitucio-
la Corte Constitucional, interpretando el sen- nalidad simple (18,6%) o de constitucionalidad
tido estratégico de su control constitucional condicionada (16,9%) validó las interpretacio-
sobre las altas cortes a través de su doctrina nes judiciales que, en su criterio, constituían
del derecho viviente. Para ello, demostró que derecho viviente. Así, la claridad de la doctrina
el uso de la distinción entre disposición y nor- en las decisiones que respaldan a las otras cor-
ma que subyace a esta doctrina ha permitido tes puede interpretarse como un intento por
a la Corte actuar estratégicamente para vali- construir soporte judicial para implementar las
dar la jurisprudencia de las altas cortes y, al decisiones de la Corte Constitucional.
tiempo, reivindicar su poder para revisarla.
La reconstrucción sistemática de esta doctrina Por su parte, la ambigüedad ha permitido sor-
evidencia que la validez constitucional que la tear o evadir el conflicto con estas. El propio
Corte Constitucional otorgó a la jurisprudencia significado del derecho viviente ha sido usado
de las altas cortes fue mayor (67,7%)5 y evadió en varios sentidos por parte de la Corte, algu-
las confrontaciones directas con las entidades nos de los cuales hacen relación a la adapta-
revisadas, de manera que las declaraciones de ción de la Constitución a la realidad cambiante.
invalidez que pudieran dar lugar a “choques de La extensión del concepto de derecho viviente
trenes” fueron reducidas (15,2%). sobre la comunidad jurídica de doctrinantes, y
no solamente sobre las interpretaciones judicia-
El derecho viviente ha sido definido por la les, ha tenido como consecuencia que la Corte
Corte Constitucional, y en razón a dicho sig- se pronuncie sobre hipótesis hermenéuticas y
nificado se establecieron en la jurisprudencia no sobre las interpretaciones que definen el
algunos requisitos de idoneidad para los cargos sentido real de las disposiciones legales. Final-
de constitucionalidad que pretendan atacarlo. mente, la aplicación del concepto respecto a la
jurisprudencia interamericana ha revelado que
5
la Corte Constitucional respalda a las cortes
Como se mencionó, si se incluyen las dos decisiones
mencionadas en la nota 24 este porcentaje subiría a
nacionales sobre la jurisprudencia de la Corte
71,1%. Idh, pese a que las interpretaciones de orga-

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propio análisis del derecho viviente en el ám- de diciembre.
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