Capítulo 3: La Democracia y la Inclusión en el Sistema de Partidos en Colombia.
El tradicionalismo interno de los partidos políticos, limitan actualmente la inclusión política de grupos minoritarios a la vida de los asuntos políticos de un país. Aquí, es necesario señalar que no solo basta con que se den las oportunidades para que una determinada persona pueda postularse para ser elegido, sino que también se debe tener presente que detrás de una simple postulación a la listas internas de cada partido, hay intereses de por medio relacionados con principios organizativos, niveles de desarrollo e inclusive institucionalización en la toma de decisiones. Uno de los grandes desafíos electorales, ha sido evolucionar positivamente hacia la inclusión y la equidad, especialmente en los partidos a nivel local, dado que existe una profunda desigualdad regional en el sistema de partidos, tal es el caso de los movimientos indígena y afrodescendientes (ya mencionados en una anterior oportunidad). En este orden de ideas, las reformas de 2003 y 2009, desplegaron recursos institucionales para fortalecer los partidos nacionales y disminuir la desinstitucionalización en las minorías. La Constitución del 91, representó un verdadero hito en materia política, pues mitigó en gran medida la discriminación y la invisibilización que se traía de sectores étnicos y sociales y de regiones. Por ello, una de las maneras de garantizar e igualar derechos políticos fue la creación de la circunscripciones especiales (importantes a mencionar las afrodescendientes y las indígenas). No obstante, la representación política ha sido precaria en cuanto a las condiciones que se ofrecen para legislar en la praxis.