Está en la página 1de 3

Opiniones divididas frente a la nueva convocatoria de

manifestaciones en Colombia

Opiniones divididas frente a la nueva convocatoria de manifestaciones en


Colombia
El comité Nacional del Paró anunció nuevas jornadas de manifestaciones
durante los meses de septiembre, octubre y noviembre. Existe una expectativa
de lo masivas que puedan llegar a ser.

Podría decirse que el 2021 ha sido un año de grandes acontecimientos en


Colombia. El confinamiento a causa de la pandemia por la Covid-19 y las
extensas jornadas de manifestación social son solo parte de un conglomerado
de sucesos que han convulsionado al país y al mundo, y que no pueden
considerarse superadas, pues la enfermedad seguirá en las calles al igual que
las manifestaciones.

Así lo confirma el Comité Nacional del Paro, organismo que convocó a nuevas
movilizaciones para los próximos meses del año. Así lo hicieron saber en un
comunicado en el cual llaman a una próxima jornada de manifestaciones
para el próximo 28 de septiembre, a la cual le seguiría otra el 20 de octubre,
y una tercera el 25 de noviembre. Esta última tendría el objetivo de recordar
la manifestación conocida como el 21N que se desarrollaron en noviembre
del año 2019.

Francisco Maltés, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores, CUT, y


vocero del Comité, dijo que estas nuevas jornadas se convocaban ya que “las
causas que motivaron el estallido social continúan vigentes, no ha
querido solucionarlas el Gobierno Nacional". También aseguró que con las
manifestaciones que se realizarán en septiembre, octubre, noviembre y
diciembre apoyarán, entre otros temas, los debates de los 10 proyectos de ley
que fueron presentados al Congreso y exigirán el derecho a la vida.

Respecto a la jornada del 25 de noviembre dijo que “En esta fecha tenemos
cuatro razones para salir a marchar, se celebra el segundo aniversario del
estallido social, el quinto aniversario del acuerdo de paz, el día de la no
violencia contra la mujer y esa semana se brinda el informe final la Comisión de
la verdad”, detalló.

Sin embargo, que exista una convocatoria oficial a las manifestaciones no


significa que estas vuelvan a tener el mismo auge o relevancia que las
expresiones populares del primer semestre del 2021, tal y como lo manifiesta
Julio Cesar Caicedo, estudiante universitario, artista, activista y protestante en
Medellín. Frente a las protestas, Caicedo señala que “cualquier protesta en
Colombia en este momento es legítima porque después del Paro Nacional
quedó demostrado que el gobierno no tiene ninguna voluntad de negociar,
mediar o solucionar los problemas que tiene la gente y que los sacaron a las
calles durante dos o tres meses”
El pasado 27 de agosto la Fiscalía colombiana reveló a la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que tiene constancia de 57
fallecidos durante las protestas que tuvieron lugar en Colombia, de las cuales
29 se dieron en el marco de las movilizaciones, cuatro meses después de que
comenzaran. "Hasta el momento se han confirmado 57 fallecidos, 29 en el
marco de la protesta (13 esclarecidas), 5 en verificación y 23 fuera de la
protesta", aseguró la Fiscalía en su cuenta de Twitter, al informar sobre la
reunión que el fiscal general, Francisco Barbosa, mantuvo con la presidenta de
la CIDH, Antonia Urrejola, en Washington.

Para Caicedo, quien afirma que en los datos de los fallecidos se evidencia que
no hubo ningún tipo de negociación efectiva y que el gobierno se limitó a
acusar, evadir, reprimir y criminalizar la protesta social, “se han dejado todas
las inconformidades en el aire”. Sin embargo, pese a lo que considera una
manifestación legítima, también señala que “las dinámicas que hay ahora, o
que se pueden presentar a final de año, no son las mismas que se presentaron
en el primer semestre, puesto que la pandemia ha dado tregua; las personas
han retomado a su vida cotidiana; hay apertura de la economía que ha
permitido solventar algunos temas económicos y no se siente el desespero,
miedo y hastío que llevó al estallido en un momento”.

Por su parte, Valentina Arango, Periodista del Periódico De La Urbe, feminista


y antigua marchante señala que se ha alejado de todas las protestas desde
mayo pues siente que ya no la representan. “Para mí las movilizaciones que no
son del movimiento feminista se convirtieron en un espacio preocupante,
militarista y de riesgo, sobre todo, para las mujeres. Y las últimas que he visto
han sido desde la misma organización de primera línea o de las organizaciones
sindicales que en nada representan en paridad o juventud o las causas por las
que yo salgo a marchar” sentenció.

Para Valentina sus convicciones se orientan en la línea de cuidar la vida, “de


entender que mis luchas no valen mi vida y yo para qué voy a marchar si sé
que al final van a lanzar explosivos y eso me pone en riesgo, que es todavía un
espacio más inseguro y que además no tiene objetivos claros más allá de la
propia espontaneidad de la rabia, lo cual no me representa” concluyó.

En esa misma línea, Caicedo señaló que “se ve desdibujado lo que fue el
original paro nacional: un movimiento plural , espontaneo y hasta desordenado
del que solo quedan algunas escaramuzas de organizaciones que todavía
conservan esa indignación, y que se ven enfrentadas a una realidad social
que no la respalda tanto como en un principio a causa del desgaste natural de
la protesta; el panorama electoral; porque la gente tiene sus propios asuntos a
resolver y porque se demostró que este gobierno no tiene una voluntad de
negociar, entonces es difícil generar un cambio teniendo en cuenta que al
gobierno le falta poco tiempo” finalizó Caicedo.

Más allá de las dinámicas que deparan el panorama preelectoral y las


decisiones que tome el gobierno del presidente Iván Duque, parece que no
existe un consenso frente a si las próximas manifestaciones serán el
mecanismo para generar los cambios que clama la voluntad popular, o serán
las próximas elecciones el próximo campo de batalla en materia política. La
expectativa recae sobre las manifestaciones del próximo 28 de septiembre.

También podría gustarte