Economía – INFORME

Podemos denominar al mercado como una institución o un área donde se relacionan

compradores y vendedores, de la interacción de esas dos partes surgen acuerdos en relación a
precios y cantidades. Se pueden clasificar a los mercados de acuerdo a diferentes aspectos, según
las características de los oferentes o los demandantes, el tipo del bien o servicio, si existen o no
barreras para su ingreso y la información que existe del mercado y de sus participantes.

De acuerdo a las características mencionadas anteriormente se puede hablar de dos tipos

de mercados, los mercados perfectamente competitivos y los mercados de competencia
imperfecta.

Los primeros se definen por varias características, algunas de ellas son tener una
existencia de un número elevado de ofertantes y demandantes, por la libertad para la entrada y
salida que tienen las empresas, la homogeneidad de los productos y la transparencia, estos son
mercados de competencia perfecta.

Se consideran mercados perfectamente competitivos los relacionados con la agricultura,

ya sea trigo, soja, maíz. El ….es un ejemplo

Las empresas que pertenecen a este tipo de mercados solo pueden beneficiarse a través
de los costos, es por esto que suelen invertir más en tecnología buscando ser lo más eficientes
posible para minimizar los costos y maximizar la producción.

Por otra parte, los mercados de competencia imperfecta son aquellos en lo que el
vendedor tiene poder sobre el mercado, ya sea influyendo o controlando el precio. La
característica que más se destaca de estos mercados es la rivalidad entre ofertantes, ya que
buscan tener más participación, esto a su vez, da lugar a la innovación, el marketing y la
publicidad. Dadas estas particularidades se puede decir que la gran mayoría de los mercados
opera bajo este tipo de mercados.

Dentro de estos mercados podemos encontrar los monopolios que son casos extremos de
competencia perfecta, ya que existe u único ofertante del bien o servicio y muchos consumidores,
cuenta con grandes barreras para la entrada y salida al mercado, y en cuanto a la información
suele ser incompleta.

Un mercado monopolio puede surgir al tener el control exclusivo de un factor productivo o

tener el dominio de las fuentes de la materia prima, a través de la obtención de una patente
(temporal), teniendo el control estatal de la oferta de ciertos servicios (estatal) y por el tamaño del
mercado y/o estructura de costos (natural).

El mercado oligopolio se podría decir que está más cerca de ser un monopolio, ya que son
aquellos que cuentan con pocos vendedores que ofrecen productos similares o idénticos. Suelen
presentar un constante dilema entre la cooperación y el interés personal entre quienes lo
integran.

En cambio los mercados monopolísticos, son aquellos en los que se encuentran muchos
vendedores que ofrecen bienes similares pero que no son idénticos, acercándose a tener una
competencia perfecta. Cada producto es diferenciado, no existen barreras para el ingreso o salida
del mercado, por ejemplo los restaurantes.
 Existen también otras dos formas de organización del mercado denominadas monopsonio
y oligopsonio.

En el monopsonio existe un único comprador y por ende es el único que controla la

demanda y en el oligopsonio existen pocos compradores que conjuntamente tienen el poder de
controlar la demanda.